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T e r c e r a é p o c a J u n i o - S e p t i e m b r e 2007 N ú m e r o 41
Nahui
La pasión de
Soto Soria, museógrafo

Persia acústica
Directorio
Consejo Nacional para la Cultura y las Artes Comité editorial

Presidente Sergio Vela Alejandra Gómez Colorado
Denise Hellion
Instituto Nacional de Antropología e Historia María del Consuelo Maquívar
Director general Alfonso de Maria y Campos Castelló Emilio Montemayor Anaya
Secretario técnico Rafael Pérez Miranda Carlos Vázquez Olvera
Secretario administrativo Luis Ignacio Sainz Chávez Carla Zurián de la Fuente
Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones Diseño original

Coordinador nacional José Enrique Ortiz Lanz Fenómena
Directora técnica Gabriela Eugenia López Emilio Eslava
Directora de museos Patricia Real Fierros Montserrat Rivera
Director de exposiciones Juan Manuel Santín
Impresión
Gaceta de Museos Impresión y Diseño
Director fundador Felipe Lacouture Fornelli †
Editores Mario Carrasco Teja, Érika Miller Distribución
y Gerardo Villadelángel Viñas Norma Chávez
Redacción Sabrina Farías Pelayo, Guadalupe Hernández
Edmundo Saavedra y Axel Solórzano
Fotografía Gliserio Castañeda
Corresponsal en Europa Ma. Teresa Cervantes issn 1870-5650
Portada Antonio Garduño, Nahui Olin como la Venus Calípiga,

vintage, plata sobre gelatina, sin firma, 26.3 x 14.5 cm
Fotografía Humberto Tachiquin Benito (diapositiva)
cortesía del national museum of mexican art y tomás zurián
Instituto Nacional Consejo Nacional

de Antropología para la
e Historia Cultura y las Artes
GACETA DE MUSEOS es una publicación cuatrimestral del Instituto Nacional de Antropología e Historia
editada en la Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones
Número 41 Junio-Septiembre de 2007
Sumario Editorial
02 El edén y otros idilios
Mario Carrasco Teja
Desde los museos y las exposiciones
04 La musicalización de 'Persia: fragmentos del paraíso'

Manuel Mejía Armijo
10 El Museo Arocena en Torreón
Adriana Gallegos Carrión
Colecciones y acervos
14 Las urnas zapotecas de Monte Albán

Socorro C. de la Vega Doria
Comunicar y educar
18 Recursos didácticos en Uruguay

Raquel Pontet
Museos y exposiciones en proceso
20 Amor divino: Nahui Olin y el Dr. Atl

Tomás Zurián
26 El nuevo Rautenstrauch-Joest en Colonia
María Teresa Cervantes Escandón
De los públicos
30 Museos de historia natural y medio ambiente

Yudith Lamothe Crespo
C o n s u lta s y consejos
32 La museografía según Alfonso Soto Soria

Carlos Vázquez Olvera
Ideas d e i d a y v u e lta
38 La vitrina del mes: Reciclado museográfico

40 La cédula del mes: Escultura en "cera perdida"
42 El material educativo del mes: ' Guía infantil' del Arocena
44 Noticias y reseñas
Editorial
El edén y otros idilios

O nce años celebramos con este ejemplar: metáfora de equilibrio, número "de primera" –según ese diablo de Hans Mag-
nus Enzensberger– o modesto augurio "inútil", pero matemáticamente, simétricamente bello, de las ediciones por venir.
Después de medio año en el Museo Nacional de Antropología, a finales de junio concluirá la exposición Persia: frag-
mentos del paraíso. Tesoros del Museo Nacional de Irán. La paciente labor de curaduría e investigación, realizada por
Alejandra Gómez Colorado y Zahra Jafarmohammadi durante poco más de dos años, fructificó en una muestra en la
que cedularios, materiales didácticos, mobiliario, audiovisuales, maquetas y otros elementos museográficos armoniza-
ron con las colecciones para transportar al público, por la eternidad de un instante, a ese jardín paradisiaco y milenario
poblado por leones, toros alados, reyes, músicos, dioses, héroes, princesas, monstruos y demonios. Con ese motivo
presentamos cuatro miradas que exploran desde la génesis del recorrido sonoro –a cargo de Kaveh Parmas y Manuel
Mejía Armijo, integrantes del grupo La Giralda– hasta el reciclado y la factura de las cédulas electrónicas.
También a finales de junio, pero en el National Museum of Mexican Art de Chicago, Illinois, abrirá sus puertas Nahui
Olin: una mujer fuera del tiempo (Nahui Olin: A Woman Beyond Time), motivo de nuestra portada, con obra y retratos de
la pintora y modelo Carmen Mondragón, esa deidad mexicana que en la primera mitad del siglo xx sacudió con el lienzo
y la mirada los cimientos artísticos y morales de una sociedad que, entre disparos y sombras de caudillos, apenas vis-
lumbraba el advenimiento de eso llamado "modernidad". Tomás Zurián, el curador de la exhibición, relata aquí uno de los
episodios cumbre en la vida de Nahui: su amor por el igualmente pintor Gerardo Murillo, mejor conocido como Dr. Atl.
Carlos Vázquez Olvera, miembro de nuestro comité editorial y pilar en México de la historia oral como método de in-
vestigación, comparte el a-b-c de la planeación museográfica según Alfonso Soto Soria, tomado de su libro sobre este
museógrafo mexicano (inah, México, 2005). La edición incluye asimismo un llamado de atención desde La Habana,
Cuba, sobre el papel de los museos de historia natural frente a la crisis ecológica, así como un examen a las urnas
zapotecas del Museo Nacional de las Culturas y un repaso a la incidencia de los centros escolares en las visitas a
museos en Uruguay, entre otros temas.
Como prefacio a este número, nada más apropiado que la reproducción in extenso de los párrafos finales de El Sha o la
desmesura del poder ( Anagrama, Barcelona, 2004, págs. 176-177), escrito por el periodista polaco Ryszard Kapu ci ski
en las postrimerías de la Revolución iraní de 1979. Más allá de la homonimia con Ferdousí –el antiguo poeta persa–,
las palabras del señor Ferdusi (así en la traducción), comerciante de alfombras de Teherán y poeta nato, no sólo traslu-
cen la fortaleza de un pueblo que, como el nuestro, ha salido avante de las intransigencias bélicas, sino un sexto sentido
La GACETA DE MUSEOS ya está en internet. Para consultarla gratuitamente ingrese a la página del Sistema de Infor-
mación Cultural (http://sic.conaculta.gob.mx) y en la liga de "Producción editorial" seleccione "Publicaciones del inah".
02 GACETA DE MUSEOS
–con su buena carga de melancolía– por la belleza, esa "inutilidad tan maravillosa, tan irrepetible" que colma nuestro
paraíso terrenal, a pesar de aquellos que practican "la mentira, la traición, el robo, la denuncia" y otras tropelías:
Cuando quiero levantar mi ánimo y pasar un rato agradable voy a la calle Ferdusi, donde el señor Ferdusi tiene un negocio de
alfombras persas. El señor Ferdusi, que ya desde niño ha convivido con el arte y la belleza, contempla la realidad que lo ro-
dea como quien mira una película de pocos vuelos en un cine barato y sucio.
—Todo es cuestión de buen gusto –me dice–; lo más importante, señor, es que hay que tener buen gusto. El mundo se-
ría otro si hubiera más gente con algo de buen gusto. Todas las cosas horrorosas –así las llama– como la mentira, la traición,
el robo, la denuncia, etc., tienen un denominador común: la gente que las hace no tiene ni pizca de buen gusto.
El señor Ferdusi cree que el pueblo lo superará todo y que la belleza es indestructible.
—Recuerde usted –me dice mientras desenrolla una más de sus alfombras (que sabe que no voy a comprar pero que
disfrutaré viéndola)– que lo que permitió a los persas seguir siendo persas durante dos mil quinientos años, lo que ha per-
mitido que sigamos siendo nosotros mismos, a pesar de tantas guerras, invasiones y ocupaciones, no ha sido nuestra fuerza
material sino espiritual, nuestra poesía y no la técnica, nuestra religión y no las fábricas. ¿Qué le hemos dado al mundo no-
sotros? Le hemos dado la poesía, la miniatura y la alfombra. Ya ve usted, desde un punto de vista productivo, todas ellas son
cosas inútiles. Pero justamente por medio de ellas nos expresamos a nosotros mismos. Nosotros hemos dado al mundo esa
inutilidad tan maravillosa, tan irrepetible. Lo que le hemos dado no sirve para facilitarle la vida a nadie sino para adornársela,
si es que, claro está, tiene sentido semejante distingo. Porque una alfombra, por ejemplo, es algo vital para nosotros. Desen-
rolla usted su alfombra en un desierto quemado, espantoso, se echa sobre ella y le parece estar tumbado en el más verde
de los prados. Sí, nuestras alfombras recuerdan prados floridos. Usted ve las flores, ve un jardín, un pequeño estanque y una
fuente. Unos pavos reales se pasean por entre los arbustos. Y debe saber que una buena alfombra es una cosa muy durade-
ra, una buena alfombra conservará su color durante siglos. De modo que, viviendo en un desierto desnudo y monótono, vive
usted como en un jardín que es eterno, que no pierde el color ni la frescura. Y además, uno se puede imaginar que este jardín
despide aromas, uno puede oír el murmullo de su arroyo y el canto de los pájaros. Y entonces usted se siente bien, se siente
elegido, se encuentra usted cerca del cielo, es usted un poeta ✣
Mario Carrasco Teja
GACETA DE MUSEOS
La GACETA DE MUSEOS le envía un abrazo fraternal al maestro Agustín Alvarado Reyes, compañero de la
Coordinación Nacional de Museos y Exposiciones, en recuerdo de nuestro amigo Miguel Francisco Alvarado Tenorio.
GACETA DE MUSEOS 03
Un instante
en la eternidad
El recorrido sonoro de 'Persia: fragmentos del paraíso'
Manuel Mejía Armijo*
S i te invito a imaginarte sentado en un tronco, contemplando el ciencia ficción ubicadas en el futuro en las que cada elemento de
hermoso paisaje de un bosque que te circunda, es probable que utilería está cuidadosamente diseñado para expresar cambios no-
visualices una imagen de inmediato. ¿Cómo es la parte sonora de torios en la tecnología y el diseño, y en las que se ha hecho un
esa imagen? Tal vez descubras que no se ha formado automática- trabajo para generar una estética visual que a cada momento nos
mente, sino que debes componerla con elementos concretos, uno recuerda que estamos en otro tiempo. Sin pretender hacer una
por uno: el viento a través de los árboles, un pequeño arroyo que predicción realista del futuro, estas películas aportan elementos vi-
no ves pero escuchas –sobre todo cuando el viento entre los ár- suales que van más allá de nuestra época y que por momentos nos
boles cesa un momento–, el aleteo de aves pequeñas que van de transportan a un futuro virtual. Pero la música incidental de mu-
una rama a otra, el canto de esas aves –cuidarás de no imaginar chas de estas cintas está compuesta, como en tantas otras, para
el de un zanate o una guacamaya, sino el de un gorrión, un peti- una orquesta sinfónica o de cuerdas en un estilo "moderno" que
rrojo y otros pajarillos propios de los bosques: ¿recuerdas cómo ahora mismo se encuentra caducando como tal. ¿Quién imagina-
es su canto? ría que un estilo y un ensamble instrumental que en el presente ya
Tal vez te pase como a mí: cuando hablo por teléfono con un es un poco rancio y anticuado llegará intacto a un año 2070 con
desconocido, para complementar su voz construyo una represen- un increíble desarrollo tecnológico?
tación visual que casi siempre difiere de la realidad; sin embargo, Más sensible es el caso de las películas épicas inspiradas en la
cuando estoy frente a alguien por primera vez no suelo crear una antigüedad: romanos, celtas, egipcios, precristianos, hititas… en-
expectativa tan concreta de su voz, de manera que cuando llega el trando en la batalla sostenidos por una majestuosa música orquestal
momento de oírlo hablar acepto rápidamente su imagen. que emula a Hector Berlioz o a Richard Wagner. Aquí la música no es
Para formar la parte sonora de una imagen nuestro cerebro se un vehículo para acercarnos a épocas pasadas o futuras, sino más
esfuerza más, porque ésta no surge en forma inmediata y nos obli- bien un ancla con el presente que nos dice constantemente: "No te
ga a generarla de manera específica y singular. Agreguemos que en la creas, el pasado es una fantasía que sólo tiene valor si la mira-
muy pocos casos las imágenes sonoras son estáticas: manejar la mos a través del cristal del ahora". Muchas recreaciones del pasado
dimensión temporal requiere de un desarrollo mucho mayor de tienen la finalidad de apoyar alguna ideología del presente, resaltar
la imaginación. valores actuales o exaltar sentimientos románticos. Las oportunida-
des para abrirnos al pasado lejano y permitir que nos enseñe algo
La acústica de otros tiempos nuevo son pocas.
Gracias a esta pereza auditiva muchas veces hemos sido feliz- Las imágenes sonoras de una recreación histórica siempre po-
mente engañados por el cine y la televisión, aceptando como drán ser más precisas, mejor documentadas, mejor realizadas. Lo
verdaderas imágenes cuyo maridaje entre lo visual y lo sonoro importante no es su perfección, sino su intención: les toca jugar
sería imposible en la realidad. Por ejemplo, he visto películas de el papel de puerta o de muralla; te invitan a entrar o te mantienen
Trompa retráctil Fotografía Gliserio Castañeda GACETA DE MUSEOS 05

alejado. La atmósfera sonora, más que la visual, es la que sitúa al espectador. Por ejem-
plo, si en la pantalla del cine vemos el flujo de una avenida conflictiva, con mucho tráfico, y
escuchamos la atmósfera correspondiente, con motores tronando por todos lados, claxo-
nazos y silbidos, sentimos que realmente estamos allí, en medio del tránsito. Y si de pronto
la atmósfera sonora se diluye y en su lugar aparece una pieza apacible de Erik Satie, en-
tonces ya no estamos allí, como si las imágenes visuales de la avenida surgieran de la
imaginación. Así, de pronto, para descansar de la tensión, ansiando aislarse por comple-
to de la atmósfera sonora que lo rodea, el conductor real de uno de los carros inmersos
en ese tráfico cierra las ventanas y busca la música más pausada y apacible para sentir
que no está donde está.
Leer a los antiguos

Cuando a Kaveh Parmas y a mí se nos comisionó la sonorización de las salas para la ex-
posición Persia: fragmentos del paraíso. Tesoros del Museo Nacional de Irán, en el Museo
Nacional de Antropología, privilegiamos la cualidad del sonido como vehículo para despla-
zarse en el tiempo y acercarse a los maravillosos objetos que conforman la muestra. La
discreción y la sutileza fueron valores que mantuvimos para que el espectador abriera los
sentidos y evitara los bloqueos defensivos que un habitante de la ciudad de México uti-
liza de manera cotidiana para enfrentar las atmósferas sonoras altamente agresivas e
invasivas de la urbe. Una alfombra en la que puedes viajar… o simplemente pisar y se-
guir adelante.
Decidimos evitar por completo datos técnicos o históricos, ya que esa información estaría
disponible y clara en otros elementos de la exposición –cedularios, cronologías, audiovisua-
les– y le quitaría a la atmósfera sonora una cualidad que también consideramos fundamental:
la singularidad. Si pensamos llevar al oído por una ruta paralela a la del ojo sorprendido del
espectador, tendríamos que cuidarnos de nunca caer en atmósferas vulgares o relacionadas
con elementos actuales.
Claro que podemos usar la imaginación para recrear la atmósfera de un pasado remoto y
discernir qué sonidos no existían en aquel tiempo y cuáles sí, pero de cualquier modo necesi- La Giralda (de arriba abajo): Kaveh Parmas, Francisco
tábamos una guía para no dar tumbos creativos. Como Dante Alighieri en La divina comedia, Bringas y Manuel Mejía Armijo Fotografías Carlos Blanco
06 GACETA DE MUSEOS
elegimos cual guías a los antiguos poetas, cierta frase contradictoria o ininteligible se manifestaba un concepto nuevo o una manera
en nuestro caso a los persas. De esta forma muy distinta de expresar algo conocido: en la mayoría de los pasajes que sonaban absurdos
las ecuaciones serían formuladas: Ferdou- casi siempre se escondía la clave de una forma diferente de pensamiento, y experimentá-
sí nos habla de Kiumars, el primer rey del bamos placer al descubrirla y buscar la manera de expresarla en el castellano que se habla
mundo, que gobernó desde las montañas hoy en México. Yo salía del café con mis notas bajo el brazo y la cabeza llena de palabras
cubierto con la piel de los leones, y aun- vivas como peces en un estanque. Por último, me sentaba frente a las notas y una panta-
que sus palabras parecen remontarse más lla en blanco para darle forma al nuevo texto, a la traducción final.
allá del tiempo y entrar en los terrenos de No pretendo afirmar que es el mejor método ni son las mejores traducciones, pero sí quie-
la mitología, una piedra milenaria nos ofre- ro presumir el privilegio de sumergirse en ese universo de palabras y someterse al proceso
ce su materia como testimonio de aquella catártico y renovador de vivir letra por letra tragedias y epopeyas, de ingerir con todo el ser
era narrada por el poeta épico. Entonces, de los símbolos arcaicos –para entender el mensaje de Omar Jayyam es necesario visitar el taller
la variable en la ecuación empiezan a sur- del alfarero, tomarse un jarro de vino y azotar algún traste de barro en la tierra, por lo menos,
gir sonidos de piedras, de viento, de barro: si quieres que sus imágenes te hablen al corazón–. No fue en vano lo que escribió August
protomúsica. Wilhelm von Schlegel en el siglo xix: "Leed con ahínco a los antiguos, a los auténticos
Durante los trabajos de traducción del antiguos: poco significa lo que los modernos dicen de ellos".
farsí antiguo al castellano, auxiliados por Otras ecuaciones se nos fueron presentando: la plegaria de Kurinahiti, esa
algunas buenas traducciones a otros idio- voz vehemente que quiso y logró permanecer en el tiempo median-
mas, comprobamos que la auténtica voz te su copa de plata; palabra y objeto que permanecen resonando
de los antiguos arrojaba una luz que nin- desde hace cuatro mil quinientos años. Ferdousí nos narra
guna otra voz nos proporcionaría en este las gestas de los héroes, alaba su fuerza y su nobleza; to-
trabajo. El método de traducción comenza- ros alados, copas de oro, espadas, cascos, llegan hasta
ba con una lectura de los textos originales nuestros días como si el poeta los hubiera salvado
por parte de Kaveh y una selección de los con su arte de la corrosión, el óxido y las bom-
extractos; después, reunidos en un café, bas, como si palabra y materia se unieran para
Kaveh me platicaba, con sus palabras en vencer los rigores del tiempo. Dice Ferdousí que
castellano, los fragmentos seleccionados, el rey Yamshid, durante sus primeros tres si-
consultando sus propias notas y algu- glos de reinado, inventó la música y la poesía, y
na traducción al alemán o al inglés; yo lo así parecen haber surgido de pronto los instru-
interrogaba constantemente, porque me mentos musicales, como flores del desarrollo del Reconstrucción de un laúd copto
entusiasmaba cuando detectaba que en ingenio y la expresión de la humanidad. Fotografía Gliserio Castañeda
GACETA DE MUSEOS 07
De la literatura a la partitura
El pasado no está mudo. Aunque al
preguntarnos cómo fue, de manera
concreta, la música en los tiempos de
Yamshid no podamos responder, la so-
lución permanece en zonas recónditas
de la memoria humana; puertas, ven-
tanas, pasadizos o artefactos mágicos
pueden ser los instrumentos musica-
les milenarios. Al igual que enfrentarse
a otro idioma verbal, manejar los instrumentos precristianos nos motiva a articular de otra ma-
nera las expresiones musicales para situarnos en un punto distinto entre el pensamiento, el
espíritu, el cuerpo y el entorno. Percibo que el discurso que fluye de mi instrumento se parece a
la carrera de un río, a los caprichos del viento, a la caminata de una bestia de carga. Para tener
uno de estos instrumentos en los brazos deben existir personajes que mediante la contem-
plación y los cálculos físicos han aprendido a escuchar a los antiguos en su lenguaje no ver-
bal; los lauderos históricos materializan en madera los instrumentos que han contemplado
en piedras talladas, en cerámicas decoradas, en pinturas rupestres, en vestigios enterrados
–y aquí un reconocimiento a los maestros Daniel Guzmán y Salvador Soto, que realizaron me-
dia docena de reproducciones históricas utilizadas para el recorrido sonoro.
La voz omnipresente, poderosísima y humilde del rey Darío se suma a la placa de plata que
sembró en los cimientos de Persépolis y que ahora se nos muestra intacta, dos mil quinien-
tos años después: de dos verdades tan contundentes surge música de trompas y tambores,
instrumentos que atraviesan el aire y recorren grandes distancias, sonidos que atemorizan al
enemigo y confortan e inflaman los corazones de los ciudadanos. Si al escuchar los preceptos
zoroástricos dejamos que la lira rústica nos hable de la paz, la libertad y el respeto a la natura-
leza, el significado volverá a las palabras como cuando las nombraron por primera vez.
Un placer tan caro como entrar en resonancia con los antiguos ha sido transmitir vi-
Reconstrucción de una lira rústica
braciones y batimientos a nuestros contemporáneos. Si ya me parecía divertido el relato
Fotografía Gliserio Castañeda erótico de Las siete bellezas de Nizami, el placer se multiplica cuando en el "Pabellón
08 GACETA DE MUSEOS
blanco", ubicado en el apartado de
literatura de "La evocación del paraí-
so" –sala de la exposición dedicada
al islam–, las jóvenes parejas de visi-
tantes ríen y se sonrojan al escuchar
cómo el poeta describe el deseo del
hombre por la mujer: "Quería atrave-
sar la perla con el rubí" o "Estaba a
Músicos asirios con percusión y lira rústica (al centro), Nínive, 626 aC punto de meter el pincel en el tintero,
la aguja en el costurero". El poeta del
siglo xii convoca al público del xxi a escuchar sus versos narrativos, y este público respon-
de con entusiasmo –el poeta maneja el simbolismo erótico con tal maestría, que su relato
es apto para niños, jóvenes y adultos.
La nobleza y sabiduría del poeta Saadi conmueven mucho más cuando se comparten con
otros humanos. Estás a punto de salir de la sala cuando escuchas: "Todo hombre es como un
hueso, siempre ligado a otro./ Juntos, los miembros forman un solo cuerpo y tienen un mismo
origen./ Si la vida causa dolor a un miembro,/ ninguno de los otros permanecerá indiferente./
Si a ti no te provoca nada el dolor de los demás,/ no podremos llamarte ser humano". Entre
el público, una abuela le dice a su pareja: "Hasta se me puso la piel de gallina". La verdad
de las palabras se confirma cuando te das cuenta de que fluyen por los oídos de varios de
los que te rodean –como un bálsamo recorriendo el torrente sanguíneo de un cuerpo–, y
con silenciosa satisfacción confirmo que hay una verdad en la imagen sonora, aunque no
sepamos qué notas musicales hubiera elegido Saadi en el siglo xiv.
Nuestro reconocimiento y admiración a los músicos colaboradores del recorrido sonoro:
Francisco Bringas en las percusiones, voces, piedras, efectos arcaicos y narración; David Tobin
en el kemanché; Yukari Hirasawa en el gu xheng; Patrick Verstratten en las trompas y cornos
naturales; Alejandro Tello en la chirimía; Vladimir Bendixen en la fídula y Víctor Hugo Romero
en la ingeniería y el diseño de sonido. Ha sido un placer reunirnos en la eternidad ✣
Reconstrucción de un instrumento, Luristán, 1200-1500 aC
*Músico, integrante del grupo La Giralda Fotografía Gliserio Castañeda
GACETA DE MUSEOS 09
Museo Arocena
Una nueva propuesta museística en

el norte de México
Adriana Gallegos Carrión*
E l antiguo edificio del casino de La Laguna, frente a la plaza de ar- La visión es brindar a los visitantes la mejor y más moderna ofer-
mas de Torreón, Coahuila, fue restaurado y rehabilitado como sede ta museística del norte de la República; un foro orgulloso de mostrar
del Museo Arocena, que abrió sus puertas el 26 de agosto de 2006 una magnífica selección de obras artísticas de valor universal, junto
tras un esfuerzo de más de tres años. Este inmueble de gran va- con la historia regional. La misión es conservar, investigar, difundir y
lor histórico fue construido en 1910 bajo la dirección del arquitecto exhibir, primordialmente, el acervo de la fundación. El acceso princi-
francés Louis Channel, en un área que abarca cinco mil metros cua- pal es a través de un moderno y original frontispicio de vidrio y cinc
drados en cuatro niveles. La ubicación del recinto es una aportación que da paso a una plaza techada de usos múltiples, para presenta-
al rescate urbano del centro de Torreón, ciudad que cumplirá un si- ciones en vivo, exhibiciones y eventos. Asimismo cuenta con salas
glo en septiembre de 2007. destinadas a exposiciones permanentes y temporales, una biblioteca
Con la inauguración culminó la primera etapa del proyecto de especializada en arte e historia, restaurante, una librería Educal y un
la Fundación E. Arocena, destinado a reafirmar la presencia de la auditorio equipado para un aforo de ciento veinte espectadores.
región lagunera en el panorama artístico del país. Como institu- El énfasis en los aspectos pedagógicos e interactivos lo colocan a
ción cultural, el museo aspira a impulsar la actividad turística y el la vanguardia de las instituciones de su tipo. La tarea del Departamento
desarrollo económico de la comarca, así como a propiciar el bien- de Servicios Educativos es inducir formas de interpretación del arte por
estar social de la comunidad. La riqueza y variedad de la colección medio del aprendizaje significativo, además de estimular la creatividad
lo consolidan como uno de los más importantes del país: durante con la organización de talleres, cursos, conferencias y visitas guiadas.
más de cien años, la familia Arocena ha reunido invaluables obje- El objetivo del Departamento de Exhibiciones y Curaduría es
tos artísticos otorgados en custodia a la fundación, que aseguran garantizar la custodia de las colecciones, su estudio e interpreta-
su permanencia y a través de los cuales es posible apreciar el ción, mediante una labor académica que busca ofrecer muestras
arte de México y Europa, sus puntos de divergencia, de encuen- significativas con discursos museológicos integrales, a partir de la
tro e influencias. ecléctica colección Arocena.
10 GACETA DE MUSEOS
Arte virreinal y europeo
El recorrido permanente del museo abarca trescientas veintiocho
obras en dos exhibiciones principales: El arte del México virreinal y
El arte europeo.
En la pinacoteca novohispana se exponen obras como el re-
trato de la monja capuchina Sor María Margarita Marcelina (1762)
de Miguel Cabrera (1695-1768). También de su autoría es la Serie
sobre la vida de la Virgen y la Virgen de la Inmaculada Concepción.
Entre los temas marianos cabe mencionar el anónimo Virgen Do-
lorosa, una delicada pintura sobre lámina con marco repujado de
plata, datada en el siglo xviii. El uso de imágenes simbólicas en el
arte religioso virreinal es evidente en la pintura Alegoría de la Sum-
ma Theologica de santo Tomás de Aquino, un anónimo novohispano
también del xviii.
Aunado a la extensa pinacoteca destacan las esculturas hispano-
orientales en plata y marfil, como La piedad, del siglo xvii, donde la
Virgen está trabajada en madera estofada, mientras que el cuerpo
desmayado de Cristo es una talla en marfil policromado. Asimismo se
exhibe una selección de mobiliario con decoración en marquetería y ta-
racea, escultura policromada, varios ejemplos de mayólica y cerámica
de la Compañía de Indias.
Posiblemente la sección más sorprendente del arte virreinal sea
la dedicada a la platería, como el Atril con sacra, de Eduardo Calde-
rón –artista activo entre 1769 y 1804–, que tiene la característica
de haber sido marcada por los punzones del platero, del ensayador
mayor de la ciudad de México y por el quinto real.
Las obras europeas son principalmente españolas y datan de
los siglos xiv al xix. El discurso museológico se dispuso cronoló-
gicamente a partir de los estilos gótico, renacentista, manierista,
barroco y neoclásico. Hay pinturas sobre tabla castellanas, valen-
cianas e hispanoflamencas de los siglos xiv al xvi, que revelan al
observador el proceso de asimilación de formas y estilos flamen-
cos en el arte ibérico. Del "siglo de oro" español se exhiben la
Virgen de la Inmaculada Concepción, del sevillano Bartolomé Este-
ban Murillo (1617-1682), y San Francisco de Asís frente al crucifijo
de la capilla de San Damián, atribuido a Francisco de Zurbarán
Aspectos museográficos de las salas de exhibición Fotografías Carlos Vázquez Olvera (1598-1664).
GACETA DE MUSEOS 11
México y la comarca lagunera la fauna de la comarca. En "Así somos los laguneros" se abordan los
La historia nacional y regional tiene su lugar en dos exhibiciones en primeros pobladores, la inmigración y la pluralidad de la sociedad la-
la planta superior, complementadas con videos e interactivos: Méxi- gunera actual. Los temas económicos se explican en "Los caminos
co en el tiempo y Crónica de La Laguna. de la prosperidad", donde se relata la importancia del algodón, la
En la primera, con más de sesenta obras originales, se hace uva, el ganado, los lácteos, la minería y el comercio en el desarro-
un recorrido por algunos de los sucesos más importantes de nues- llo de la región. En "Nuestra herencia" están los temas relacionados
tra nación en cuatro etapas: México antiguo, virreinal, independiente con la música popular, las fiestas y las actividades deportivas.
y moderno.
La segunda es un panorama en cuatro secciones monográficas Desarrollo y permanencia
sobre la historia regional: naturaleza, cultura, economía y sociedad. El origen y la continuidad de las instituciones museísticas han
En la primera, "Nuestra casa natural", se trata la geografía, la flora y dependido de su relación estratégica con el coleccionismo y el
12 GACETA DE MUSEOS
mecenazgo. El Museo Arocena cuenta con un patronato que se
ha dado a la tarea de implementar una campaña financiera con
los objetivos de realizar tanto esta magna obra como de desa-
rrollar los proyectos a futuro para el crecimiento del recinto y
su oferta cultural. En este patronato colaboran, en forma des-
interesada, miembros de la comunidad cultural, empresarial y
gubernamental.
Gracias a esta red será posible lograr, en una segunda etapa,
el rescate de dos inmuebles históricos colindantes con el casino: el
edificio Russek, que data de 1907, y el Arocena, de 1920, que se-
rán rehabilitados para ofrecer más áreas de exhibición, así como
otros servicios.
El museo encara desafíos que a su vez han demostrado ser
importantes ventajas: la primera, su enclave en un continente privile- servicio social, de voluntariado y de la Asociación de Amigos del
giado –el casino de La Laguna–, y la segunda, custodiar la colección Museo. La colaboración entre los sectores de la sociedad, públi-
Arocena, documentarla, interpretarla y exhibirla mediante discursos cos y privados, preparó el camino para hacer de este recinto una
museológicos significativos. Ambos desafíos han llevado a reflexionar brillante realidad.
sobre la formación de públicos y la descentralización de la activi- En resumen, el Museo Arocena invita a la gente a reconocerse
dad cultural, que en el caso de la comarca lagunera es tanto un reto como actores indispensables en la generación de cultura en el nor-
como una oportunidad de desarrollo. te de la República, en particular en la comarca lagunera, una región
De esta manera se transmiten al visitante nuevas visiones geográfica que ha desarrollado con fuerza su oferta museística en
curatoriales, contenidos originales, programas educativos comple- los últimos años ✣
mentarios y recursos museográficos imaginativos. La participación
de la comunidad está garantizada por medio de los programas de *Coordinadora de curaduría y exhibiciones, museo arocena
GACETA DE MUSEOS 13
Las
urnas zapotecas del Museo Nacional de las Culturas
Socorro C. de la Vega Doria*
R ecorrer las salas y bodegas del Museo Nacional de las Culturas ojos estelares. Otra parte de la indumentaria es una especie de
(mnc), en la ciudad de México, es ir de sorpresa en sorpresa por capa con tejido a rayas verticales, que llega hasta los antebrazos,
las colecciones que comprende su acervo, de gran valor arqueoló- sobre la que cae un gran pectoral formado por una placa elíptica
gico, histórico, artístico y didáctico, y de lugares tan remotos como en cuyo interior hay un círculo, probablemente un mosaico de jade
China, Japón, Australia y África. Entre esas maravillas destaca la o concha. Fuera de la placa se observan, opuestas por los vértices,
colección de arqueología de América y, entre otras piezas seduc- secciones rectangulares que descansan sobre elementos almena-
toras, las "urnas" de Monte Albán, Oaxaca, que sin proponérselo dos. Las pulseras tienen una sección en forma de serpiente y otra
se plantan frente a nosotros1 con sus rostros de barro, adustos almenada. Atrás de la cabeza, hombros y antebrazos se observan
y poderosos, para hablarnos de la cosmovisión de esa antigua elementos almenados, como si estuviera apoyado en una cabece-
ciudad. Muchas de estas mal llamadas "urnas" –nunca se han ra. La caja que sirve de base a la urna muestra la parte inferior del
encontrado en su interior restos humanos o animales– provienen rostro de un felino enseñando los colmillos. A los lados del hocico
de contextos funerarios y se cree que eran depositadas vacías o hay dos elementos que podrían simbolizar los ojos y, bajo éstos,
sólo con agua. Al parecer, lo más importante en ellas eran las re- orejeras o discos circulares como las utilizadas por Cocijo o los feli-
presentaciones. A continuación se describen algunas de las más nos-serpiente. Bajo la cara del felino, a la altura del cuello, emerge
características: lo que Caso y Bernal interpretaron como una lengua bífida, de la
que pende el adorno o ceja en forma de M. También del cuello,
Cocijo como representación de la lluvia y el rayo a cada lado de la lengua, sobresalen dos pequeños brazos. Las
Los fenómenos simbolizados por los artesanos zapotecas proba- cuatro esquinas de la caja presentan salientes redondeadas, de-
blemente tienen relación con su principal actividad económica, la lineadas por tiras de barro aplicadas al pastillaje y adornadas con
agricultura, pero también relatan sus nexos con el entorno. Así, círculos, tal vez chalchihuites –piedras verdes– o el numeral uno,
el Cocijo modelado en la tapa de una urna funeraria2 que se ende los que penden horquetas.
cuentra en las bodegas del mnc personifica la lluvia. El broche del
tocado en forma del glifo "C", que al parecer representa la boca de Uno Tigre o Uno Jaguar
un jaguar, se encuentra sobre una banda decorada con serpientes Estrechamente relacionados con la representación anterior en-
o bandas ondulantes. La cara, cubierta por una máscara, muestra contramos a los jaguares que habitan las regiones lluviosas. En el
en las cejas los cerros que originan las lluvias o caracoles seccio- mnc hay en vitrina un vaso cilíndrico con un grabado en bajorrelie-
nados; la parte que cubre la boca se asemeja en mucho a la de ve del perfil de un felino. En la parte inferior derecha de la imagen
la representación del maíz Pitao Cozobi, que simboliza la cerca- se encuentra la representación de una cuenta cuadrangular con
nía entre lluvia y cosecha. Porta también un penacho de plumas, una media luna en el interior, identificada como el numeral uno. La
flanqueado por mazorcas de maíz que lo conectan con esa misma asociación de la cara del jaguar con este numeral es la misma que
representación. Las orejeras circulares tienen listones de los que Caso y Bernal encuentran para designar al dios Uno Tigre, por lo
cuelga un adorno en forma de M, a la manera de las cejas en los que no hay duda de que se trata del mismo personaje.
14 GACETA DE MUSEOS
Pitao Cozobi o el del glifo "L" El "3.L"
Entre el grupo de imágenes asociadas con el maíz se encuentra Pi- Otra urna asociada con Cocijo, identificada como "3.L", está en la
tao Cozobi o "el del glifo L". El mnc posee un ejemplar de los cinco vitrina 9 de la sala de América. Ésta tiene una representación antropo-
procedentes de la tumba 31 de Monte Albán. Esta urna presenta morfa, sedente, con las piernas cruzadas y atributos de Cocijo y Pitao
un personaje sentado con las piernas cruzadas sobre un pedestal Cozobi. El tocado es cilíndrico y consta de tres bandas, una más ancha,
cuadrangular, que tiene al frente el glifo zapoteca de cerro o asen- formada por los que parecen crótalos de serpiente –hacia el centro
tamiento. Sus ojos forman la base del glifo "L", que se encuentra en de la banda–, donde está colocada una tableta con el glifo "C" carac-
el párpado superior –una voluta que se dobla en ángulo recto hacia terístico de Cocijo, y dos muy delgadas y remetidas, sobre la última
fuera–. Porta una máscara nasal, constituida por una placa que re- de las cuales se observan cinco pequeñas conchas o cascabeles. El
úne tres elementos que se curvan hacia la cara y dos vírgulas cuyas tocado se halla super-
puntas se curvan a su vez hacia las comisuras de los labios. puesto a un gorro
Los dientes están perforados, por lo que es probable cónico del que
que tuvieran incrustaciones. El tocado es similar al de
Cocijo, formado por un penacho de plumas, flan-
queado por mazorcas y una banda frontal con un
broche con el glifo "C", y a cada lado de éste,
un lazo ondulante o serpiente. A los costados
de la cabeza, detrás de las orejas, cuelgan
dos mechones largos y lacios que son carac-
terísticos de Pitao Cozobi. Atrás del personaje
se observa un marco con elementos ondulan-
tes, intercalados con secciones trilobuladas a
manera de caracoles cortados. Las orejeras
son circulares y de ellas cuelga la M con los
"ojos estelares". También lleva pulseras en for-
ma de serpiente y secciones almenadas. Viste
una capa corta con tejido a rayas verticales,
así como un maxtlatl decorado por fran-
jas horizontales y tres conjuntos de círculos
y horquillas. Sobre la capa porta un pectoral,
suspendido de una soga torcida, formado por
una placa cuadrangular con tres círculos en
el interior. A los lados de la placa, que des-
cansa sobre cuatro almenas o secciones
de caracol, hay dos elementos rectangula-
res. Del pectoral cuelga un objeto almenado
o caracol cortado sobre el que se obser-
van dos líneas en trapecio, paralelas, que
recuerdan el símbolo del cerro o el doble
escapulario de la arquitectura de Monte Albán. Pitao Cozobi o el del glifo "L", tumba 31 de Monte Albán Fotografías Carlos Blanco
GACETA DE MUSEOS 15
cuelgan dos mechones largos y lacios detrás de las orejas, como vírgulas que cubren parte de la mejilla y cuyas puntas se encorvan
en las urnas "acompañantes" o en Pitao Cozobi. En la parte trasera hacia las comisuras de los labios. De la boca, al igual que en Cocijo,
de la cabeza hay un par de almenas. La máscara, el elemento más sale la lengua bífida de la serpiente –la misma que fue restaurada–.
constante en Cocijo, cubre prácticamente las facciones: los ojos es- Tiene los ojos perforados, como si hubiera tenido incrustaciones. Porta
tán entre las cejas de forma almenada, unas líneas abultadas en la orejeras circulares sencillas sin colgantes, pulseras serpentinas y
parte inferior y otras más que terminan en una voluta que se curva un pectoral rectangular que pende de una cinta o banda lisa y cae
sobre la mejilla. La máscara bucal, como en el caso de Pitao Cozo- sobre el maxtlatl. Este objeto, similar al de Pitao Cozobi, tiene una
bi, se encuentra sobre la nariz y los lados de la boca, formada por placa cuadrangular en cuyo exterior se aprecian bandas rectangula-
una placa con tres barras verticales que se curvan hacia la cara y dos res, opuestas por los vértices, sobre objetos en forma de almena. El
pectoral remata en la parte inferior con cinco cascabeles o caracoles
colgantes. No viste sino el maxtlatl, que termina en una banda con
tres adornos serpentinos y conserva restos de pintura roja.
El "Quiepelagayo 5.Flor"
Otra hermosa pieza de la colección del mnc, que Caso
y Bernal ubican dentro del complejo del maíz, es el
"Quiepelagayo 5.Flor" o "el del tocado de murciélago",
considerado uno de los más importantes del panteón za-
poteca. La figura que nos ocupa tiene el cuerpo de un
cuadrúpedo felino erguido sobre las patas traseras, adosada
a un vaso o urna cilíndrica de barro. Porta un maxtlatl –indicati-
vo del sexo masculino– cuadrangular sin adornos, un collar
de cuentas esféricas y un yelmo que constituye la cabe-
za del murciélago, dentro de cuyas fauces se aprecia
una cara humana con orejeras circulares. La cabeza del
murciélago, representada en forma naturalista, permite
identificarlo como un Desmontidae desmodus, el vampiro
de las tierras calientes del sur de México. Los dos caninos e
incisivos superiores están limados. Las orejeras del per-
sonaje humano, con dos especies de hojas saliendo
de las comisuras del hocico, representan el tragus de
la oreja del murciélago, en opinión de Caso y Bernal.
Las orejas están muy bien representadas, aunque el
rasgo más característico es la nariz chata. El yel-
mo lleva alrededor una banda decorada que pudo
haber sostenido el penacho característico de este
dios. Sobre la cabeza del murciélago, al centro, hay
una representación del glifo "D" o "flor" sobre una ca-
zoleta, que es la barra del numeral cinco, por la cual este
Cocijo como "representación de la lluvia", con símbolos de las fauces de un jaguar dios es conocido como "5.Flor".
16 GACETA DE MUSEOS
El "acompañante" Notas
1 No todas están en exhibición, pero se les podría hacer justicia con exposiciones
El mnc también posee un ejemplar del tipo "acompañante" –re-
temporales para mostrar al público su belleza y trascendencia.
presentaciones humanas femeninas o masculinas de sacerdotes–,
2 Esta pieza fue descrita por Alfonso Caso e Ignacio Bernal en 1952, que conside-
caracterizado por la escasez de detalles y adornos. Se trata de un
raron que la tapa y la caja son las más representativas de esa deidad. La relación
vaso cilíndrico con una figura sedente montada sobre la mitad de
que haré del acervo asociado con Monte Albán será con base en sus respectivas
la superficie, con las piernas flexionadas y cruzadas y las manos obras, Urnas de Oaxaca (1952) y La cerámica de Monte Albán (1967).
sobre las rodillas. Porta un tocado de tres bandas del que cuelgan
dos mechones largos y lacios de cabello, a los lados de la cabeza. *Arqueóloga, enah
Sobre la frente se aprecia un flequillo bien recortado. Los dientes
están limados. También lleva orejeras circulares y un collar
de cuentas esféricas, con una cilíndrica al centro. Ata-
do a la cintura lleva un ceñidor con un nudo o moño al
frente, que sostiene un maxtlatl o faldón que le cubre
las piernas y sólo deja visibles los dedos de los pies.
La otra mitad del vaso presenta estrías verticales que
se prolongan sobre el pecho y el abdomen, y que po-
dría representar pintura corporal.
Otros ejemplares
Asociados con el culto al murciélago se encuentran un
silbato de barro café con la cabeza de este animal y
tres vasos-garra. El silbato tiene grandes orejas, con
el apéndice nasal entre ellas, en la parte superior
de la cabeza, a manera de boquilla. La nariz es
chata y la boca muestra los colmillos y los inci-
sivos, aunque no tiene la lengua de fuera como
en otros ejemplares. Los tres vasos-garra ostentan
evidencias de los cinco dedos y las garras largas,
agudas y levantadas que, según Caso y Bernal,
los diferencian de los vasos "garra de tigre" o "ga-
rra de jaguar".
Otro grupo importante de urnas es el forma-
do por las de un personaje con máscara bucal
de serpiente, que según los mismos autores es
uno de los más antiguos en las culturas de
los valles de Oaxaca –probablemente apareció
desde la primera época y permaneció hasta el
final de la cuarta–. En el mnc se conservan dos
ejemplares que, por sus características, corres-
ponden a la primera época de Monte Albán ✣ Urna "acompañante", cuyos dientes están limados
GACETA DE MUSEOS 17
Comunicar y educar
Recursos
L os museos uruguayos realizan una bue-
na labor educativa no formal para el público
en general y los chicos de centros de en-
señanza primaria y secundaria, pero ¿qué
didácticos
pasa con los estudiantes de nivel terciario
cuando quedan a expensas de sus propias
iniciativas? Muchos ya no van a los museos,
en los que, además, no hay programas para
Una asociación entre museos y jóvenes de educación universitaria. Estamos
de acuerdo con Asencio y Pol1 en que "la ló-
centros de enseñanza gica de los contenidos expositivos no suele
Raquel Pontet* responder a la lógica escolar y viceversa",
quienes agregan que el museo como ins-
titución con fines propios e independientes
de la escuela no tiene por qué plantearse
la lógica escolar en su discurso expositi-
vo, ni siquiera las adecuaciones a la lógica
educativa.
Con base en esto, me referiré al trabajo
realizado con estudiantes del profesorado de
comunicación visual en el Instituto de Profe-
sores Artigas. Para la asignatura de teoría
del arte es fundamental la visita a exposicio-
nes, que son recomendadas por el maestro.
Sin embargo, ante la escasa asistencia de
los estudiantes, hubo que desarrollar otra
estrategia: la creación de guías didácticas
que se entregan impresas o por correo elec-
trónico y son calificadas.
De la función museológica de comu-
nicación, en las guías se toma el valor de
exhibición de los objetos y las colecciones,
pero la interpretación es construida a partir
de las propias publicaciones, ya que, para
los fines que se propone el docente, el mu-
seo no siempre es efectivo: los recintos
tradicionales plantean un mensaje discipli-
nar no siempre compartido, con una clara
ausencia de mediadores comunicativos.
Los propósitos de las guías didácticas
El hombre del gran pez Pintura Luis Solari son:2 desarrollar el hábito de visita a museos
18 GACETA DE MUSEOS
y salas de exhibición de arte; fomentar el co- exhibida en el Centro de Exposiciones del Mi- En la tercera parte se realiza una acti-
nocimiento de los artistas nacionales y sus nisterio de Educación y Cultura. En la primera vidad posterior a la visita que indaga en las
obras; aprender a ver una exposición como parte de la misma se proporcionó la informa- técnicas del grabado, pero también en las im-
un hecho integral: la obra y los elementos ción al estudiante, mientras que la sección de presiones y las sensaciones recibidas, a fin
museográficos auxiliares; desarrollar destre- actividades se dividió en tres partes: de apelar a lo emocional.
zas en el hábito de analizar el hecho visual; La primera es una visión de conjunto de
estimular y activar el recuerdo de conoci- la exposición: cantidad de obras, formato, Conclusión
mientos previos considerados importantes técnicas y procedimientos. La segunda es A falta de programas educativos para jóvenes
para aprender otros nuevos;3 posibilitar que una lectura del texto y el acercamiento a las universitarios, las guías didácticas facilitan su
el estudiante recurra a fuentes ajenas al pro- obras, con las siguientes indicaciones: acercamiento a los museos, funcionan como
pio material; poner en práctica y relacionar evaluación formativa o procesual, pues per-
la exposición con lo visto en el aula; facili- 5. Deténgase en Otra Leda y otro cisne (1979, miten conocer cómo se van logrando los
tar el reconocimiento de lo que falta conocer; grabado, 55 x 36 cm, a/p s/e hand colored). objetivos, y contribuyen a una evaluación de
buscar en lo observado referentes de lo coti- 5.1. Describa la temática. término o sumatoria.
diano o de la historia del arte. 5.2. Mencione los autores cuyas "Leda y cis- El resultado y la calidad de los pro-
El cumplimiento de estos objetivos pro- ne" son muy conocidas en la historia del arte. ductos desprendidos de las actividades
porciona resultados concretos que se ob- 5.3. Describa el origen mitológico de la informan y retroalimentan a los usuarios;
tienen en periodos cortos y orientan el escena. además, les aportan sensaciones de lo-
proceso de educación-aprendizaje, así como 5.4. Describa esta obra de Solari, esta ico- gro y la satisfacción de haber aprendido.
la evaluación inmediata.4 Estas actividades nografía en particular y la o las lecturas que Al cabo de un año algunos estudiantes han
aumentan la motivación, ya que tienen una usted hace de ella. declarado que ahora sí entran por voluntad
continuidad externa, con los conocimientos 5.5. Realice el análisis formal de esa obra. propia en los museos, iglesias y salas de
previos, e interna, para facilitar que el estu- Considere forma, equilibrio, luz, movimiento, exposiciones, porque se les despertó una
diante construya su conocimiento como un ritmo, estructura, paleta. curiosidad que antes no tenían ✣
todo. Así, el docente puede observar y me-
Notas
dir el resultado final.5 En otro caso se proporciona el mensaje y se 1 Mikel Asencio y Elena Pol, Nuevos escenarios en
Los elementos que conforman las guías le pide al estudiante que lo reconozca en las educación, Aique, Buenos Aires, 2002.
son: portada; portada interna; presentación obras. Así, por ejemplo, en el texto se le in- 2 Jesús Reza Trosino, Los objetivos educativos, texto
con un texto de motivación introductoria; dica que en las obras de Solari aparece la adaptado de cómo diseñar cursos de capacitación y
estructura general de la guía: unidad temáti- crítica a ciertos aspectos negativos del hom- desarrollo de personal, Panorama, México, 1997.
3 iued, "Elaboración de guías didácticas. Metodo-
ca, objetivo, vocabulario, actividades –antes, bre –que él muestra con máscaras– y se le
logía", documento de apoyo y técnicas didácticas,
durante y después de la visita–, nivel para pregunta cuáles son esos aspectos denun-
Universidad Nacional de Educación a Distancia y
el que se diseña, habilidades, disciplinas re- ciados por el artista en las obras El hombre Facultad de Educación-Universidad de Costa Rica,
lacionadas, palabras clave y materiales de del gran pez y Paloma de Troya, entre otras. San José, s. f.
trabajo –se incluyen las imágenes o diagra- En otros trabajos hemos provocado el 4 Fernando Murillo, Síntesis del planeamiento educa-
mas necesarios–; índice y bibliografía. acercamiento del alumno a la exposición total tivo, Universidad de Costa Rica, San José, 2002.
5 Liliana García Ruvalcaba, "Actividades para el
como hecho museográfico, y le hemos seña-
aprendizaje", en Unidades didácticas, Iteso (http://
Un caso particular lado que observe y describa la distribución
acadi.iteso.mx/acadi/articulos/unidad_didactica.htm).
Para dar un ejemplo práctico, cito fragmentos espacial, la iluminación, la altura del colga-
de una guía sobre Luis Solari, pintor y grado, la distancia entre las obras y los espacios * Docente y museóloga, representante del
bador uruguayo (1918-1993) cuya obra fue de circulación. ilam Uruguay
GACETA DE MUSEOS 19
Amarse como los
Tomás Zurián*
dioses
Yo comprendo una sola cosa: la vida se llama Nahui Olin.
Dr. Atl
U no de los amores más intensos, tormentosos y escandalosos que abismo verde como el mar, profundo como el mar: los ojos de una
se suscitaron en el ambiente artístico de la ciudad de México fue el mujer. Yo caí en ese abismo, instantáneamente, como el hombre que
que escenificaron Carmen Mondragón y el Dr. Atl, hombre múltiple resbala de una alta roca y se precipita en el océano. Atracción extra-
como ella: pintor, escritor, vulcanólogo, innovador de técnicas pictó- ña, irresistible.
ricas y géneros artísticos como el paisaje aéreo. Fulguró entre la multitud como una antorcha y mi espíritu se quemó
De acuerdo con lo asentado por el Dr. Atl en su libro Gentes pro- en su llama como un insecto.1
fanas en el convento, su encuentro con Carmen ocurrió un 22 de
julio de 1921, durante una reunión en la casa perteneciente a una Para su descanso, a los pocos días de aquel encuentro –que lo tenía
familia de la alta burguesía mexicana. El impacto anímico y erótico en la mayor de las desesperaciones–, la vio caminando por la Alameda
fue avasallador. Cuando más entusiasmado platicaba con algunos central en compañía de su marido, "un pobre señor" [el pintor Manuel
concurrentes las jugosas anécdotas de su siempre agitada vida, una Rodríguez Lozano]. Ante la sonrisa insinuante de Carmen, el Dr. Atl se
aparición lo hizo volver la mirada: una mujer maravillosa bajaba las acercó a la pareja para saludarlos y, en medio de insulsas incoheren-
monumentales escaleras de la mansión. El Dr. Atl no era el único cias, lo mejor que se le ocurrió fue invitarlos a su casa, una vetusta
que se extasiaba ante aquella visión de belleza extrema; casi todas construcción en el número 90 de la calle de Capuchinas, para comentar
las miradas de los hombres –excepto la del marido– se habían con- sus cosas de arte. El débil ardid lanzado rindió los frutos esperados.
centrado en ese ser de rostro perfecto, de enormes ojos verdes y
cuerpo ondulante y felino que regalaba generosamente, con sensua- Julio 30
lidad, cada uno de sus movimientos, como si los hubiera ensayado Ella vino sola. Recorrió las estancias ornadas de cosas de arte admiran-
desde hacía miles de años. El Dr. Atl así lo narró: do todo con una alegría infantil, pero se advertía, a cada paso, que ella
estaba en posesión de una verdadera cultura artística. Me ha parecido
Vuelvo a casa de la fiesta que la señora de Almonte dio en su residen- extremadamente joven para estar casada y se lo dije. Ella sonrió hacien-
cia de San Ángel, con la cabeza ardiendo y el alma trepidante. Entre do relampaguear sus grandes ojos. De lo demás… nunca podré saber
el vaivén de la multitud que llenaba los salones se abrió ante mí un de qué le hablé y cómo salió de mi morada.
Artistas mexicanas en ´la Ciudad de los Vientos´
Del 22 de junio al 2 de septiembre, el National Museum of Mexican Art en Chicago, Illinois, organiza dos exposiciones con obra de veintisiete artistas
de nuestro país. Con motivo del centenario natal de Frida Kahlo (6 de julio), Mujeres artistas en el México de la modernidad: las contemporáneas de
Frida (Women Artists of Modern Mexico: Frida’s Contemporaries) reúne pintura, fotografía, grabado y escultura de veintiséis "creadoras, musas y
mujeres con una conciencia social" –según la síntesis de la muestra– como Lola Álvarez Bravo, Rosario Cabrera, Kati Horna, María Izquierdo y la
propia Frida Kahlo. La curaduría corrió a cargo de Dolores Mercado, con la asistencia de Tomás Zurián. En forma paralela, Nahui Olin: una mujer
fuera del tiempo (Nahui Olin: A Woman Beyond Time) incluye retratos y obra –caricatura, dibujo, xilografía y pintura– de Carmen Mondragón
(1893-1978), con la curaduría de Zurián y la asistencia de Mercado. Por cortesía del autor, así como de Carlos Tortolero, director del museo, y
Dolores Mercado publicamos este fragmento de "Nació como Carmen Mondragón y murió como Nahui Olin", texto del catálogo de la exposición.
GACETA DE MUSEOS
Antonio Garduño, Nahui Olin, vintage, gelatina sobre bromuro, firmado "Garduño-Mex", 26 x 16.5 cm Imágenes Cortesía del National Museum of Mexican Art y Tomás Zurián
Carmen decidió por primera vez su destino en ese momento; intuyó encontrar en aquel hom-
bre un sedimento en el que fructificarían sus talentos múltiples y su erótica contenida en forma
dramática. Así, le escribió la carta que cambiaría radicalmente su vida. El Dr. Atl, que impacien-
te había esperado una misiva, leyó:
Para mí –para ti– ya no habrá ayer ni mañana –para nosotros dos sólo hay un solo día, la eter-
nidad del amor y un solo cambio: más amor–, amor que se transforma en más amor donde no
hay ayer ni mañana, sólo un espacio infinito –un día donde la noche no existirá sino para amar-
nos– una noche que será más luminosa que el día mismo cuando nuestras carnes se junten –es
nuestro destino.
Al parecer, el Dr. Atl debió de haber contestado esas líneas, por lo que recibió una segunda de
Carmen, que en el primer párrafo afirmaba: "–Tu carta es un torrente que arrastra en su tumul-
to mi voluntad–. Tú eres un hombre y eres violento. Yo soy una virgen perversa".
A partir de ese momento, una vorágine sacudiría sus almas y sus cuerpos. Fue uno de los
momentos más fructíferos en la vida de ambos, donde la pasión epidérmica más voluptuosa
se alternó con los prístinos productos del espíritu. Porque en esta nueva y luminosa aventura
tenían que amarse como dos divinidades.
A principios del siglo xx Gerardo Murillo se presentaba en Europa como Atl, que en ná-
huatl quiere decir "agua". Sin embargo, fue bautizado en París, con un gran derroche de
champaña, por el poeta argentino Leopoldo Lugones y un grupo internacional de intelectua-
les, añadiéndole el título de Doctor, que al parecer había obtenido en derecho, como alumno
del abogado y político italiano Enrico Ferri, en Roma. A partir de ese jubiloso momento se-
ría el Dr. Atl para siempre.
Ahora tocaba al Dr. Atl bautizar ritualmente a Carmen Mondragón, con la fría y transparen-
te agua del aljibe del ex convento de la Merced −que les servía de residencia−, como Nahui
Olin. Atl es el agua como principio generador de la vida, pero Nahui Olin es el movimiento re-
novador de los eternos ciclos del universo. Consumada esta conversión, pudieron amarse de
manera intemporal como dos seres míticos.
No es fácil precisar qué misteriosa metamorfosis se operó en el alma de Carmen Mon-
dragón cuando surgió Nahui Olin, pero fue el principio de una gran transformación, de una
profunda transmutación que se produjo de la noche a la mañana; todas sus inquietudes
fructificaron en un estallido incontenible, irrumpieron luminosas al sonido del Nahui Olin.
Las semillas de sus capacidades creativas germinaron súbitamente, de golpe, como un in-
menso big bang. En un principio debió de haber sentido una extraña sacudida; sintió el
peso inmenso del Nahui Olin como símbolo poderoso de renovación. Incluso se suscitaron
en ella problemas de identidad, que se reflejaron en algunas pinturas, donde firmaba como
Nahui Olin, [Dr. Atl] "…–cabrito– te he puesto los cuernos Carmen Mondragón y añadía Nahui Olin, o bien firmaba como Nahui Olin y añadía Carmen
con veinte enamorados de verdad –viejo loco– te crees
inteligente porque explotas el talento de los demás", tinta
Mondragón. Pero en el momento de mayor crisis firmó: "Nahui Olin, M. del Carmen Mon-
china y grafito sobre papel, 52.5 x 28 cm dragón, Nahui Olin".
22 GACETA DE MUSEOS
Al final se impuso bajo el peso del deslumbrante mundo indígena el Nahui Olin y, a par-
tir de ese momento, el movimiento dinámico que impulsaría a esta mujer divinizada; nadie –ni
ella misma– podría detenerlo.
En el terreno de la erótica la relación fue fecunda de placeres, ya que el Dr. Atl supo extraer
con habilidad –desde las profundidades del deseo hasta la superficie del ser animado– las
fuentes vivas de la pasión, que durante su árida relación con Rodríguez Lozano se habían se-
cado, como ella lo expresó en una de sus cartas: "–Para decirte cuánto te deseo, para decirte
que en mi pecho incrédulo ha germinado por fin la flor de la fe en la vida– la flor que con su
perfume ha borrado mi eterna melancolía".
Las cartas de Nahui Olin fluían apasionadas, incontenibles, candentes como magma vol-
cánico, y de algunas podemos destacar los siguientes párrafos: "Engendraremos el infinito en
una noche de amor, la primera, la eterna".
Sin ti no existen las cosas ni los seres, contigo resplandezco y ante ti mis ojos verdes se apagan.
Pero tengo miedo de que la nube roja te queme y te convierta en cenizas y también tengo miedo de
que, a pesar de que te pertenezco absolutamente, el destino nos separe. Pero si el destino nos separa,
toda tu potencia y la mía se juntarán en algún lugar del universo, y en ese centro seremos el infinito.
Te amo, te amo, desesperadamente, lujuriosamente, misteriosamente, como la vida, como
la muerte.
¡Oh amor, amor divino!, te ofrezco mi cabeza para que sirva de escabel a tus pies o de es-
calón a tu gloria.
Eres Dios –ámame como Dios–, ámame como todos los dioses juntos, no, ámame como tú
sabes amar.
Perfora con tu falo mi carne –perfora mis entrañas–, desbarata todo mi ser –bebe toda mi san-
gre y con la última gota que me quede yo escribiré esta palabra: te amo, y cuando esa sangre se
haya secado, gritaré: te amo.
Amor mío, tú debes morir, porque cada palabra tuya, cada mirada, cada movimiento abre en mí una
nueva herida de amor –y mi cuerpo no tiene ya un lugar para otra herida más.
Estoy llena de sangre como un mártir. Mi juventud se deshace entre la furia de tu pasión y mi
pasión se exalta y gira alrededor de tu falo como una mariposa alrededor de una luz; y en las noches
calladas, envuelta en tu lujuria, mi razón se ofusca y mi boca grita te amo, te amo, te amo.
–Pero a veces siento como si yo fuera el átomo de una nebulosa y tú el universo que la contiene– y
mi imaginación se dilata hasta más allá de los límites del deseo –y de repente se contrae en mi sexo
Nahui Olin, Desnudo femenino de espalda,
que a su vez se agranda como un abismo sideral. tinta china sobre papel, 25.5 x 19.5 cm
GACETA DE MUSEOS 23
* un lado de él, como lo hizo de alguna manera Tina Modotti en su sober-

bia fotografía de Weston, realizada también en México en esa época.
Tus sentimientos de esteta los arrastró la belleza de mi cuerpo –el esplen- Si bien la militancia ideológica no fue un factor importante en sus
dor de mis ojos– la cadencia de mi ritmo al andar –el oro de mi cabellera, convicciones, y su pintura nunca manifestó un carácter político, sí con-
la furia de mi sexo– y ninguna otra belleza podrá alejarte de mí. sideró justificado apoyar las luchas de reivindicación de los artistas
plásticos frente a una sociedad indiferente, y la conquista de espacios
Ésta fue la tónica emocional que ani- públicos para ejercer sus capaci-
mó las más de doscientas cartas, y dades creativas. Bertrand D. Wolfe,
todo fue in crescendo, renovando las en su libro La fabulosa vida de Die-
metáforas, imponiendo la intangibi- go Rivera, asegura que Nahui Olin
lidad del espíritu, intensificando la y la pintora Carmen Foncerrada
pasión. Este espléndido epistolario fueron las únicas mujeres que figu-
no se repetiría con esa profundidad raron en el Sindicato Revolucionario
y ese estallido de imágenes cre- de Obreros, Técnicos y Plásticos,
pusculares y eternas en las cartas fundado por David Alfaro Siqueiros y
posteriores, dirigidas a sus varios Diego Rivera en 1922.
amantes, con las cuales Nahui Olin De pronto esta actividad crea-
siguió gritando amor desde el cora- tiva y emocional se vio afectada;
zón mismo del universo. las cartas comenzaron a reflejar
Durante el tiempo que duró esta otra realidad opuesta por comple-
relación –una verdadera época de oro to al esplendor inicial. Los celos
irrepetible–, el Dr. Atl y Nahui Olin multi- de Nahui Olin estallaban a cada
plicaron sus proyectos, convivieron con instante y crearon situaciones in-
la comunidad artística, escribieron in- sostenibles; aquel inmenso amor,
tensamente, pintaron intensamente y interminable e imperecedero, co-
se amaron intensamente. Nahui Olin menzó a resquebrajarse como un
publicó tres libros: Óptica cerebral. castillo de naipes. Las discusiones
Poemas dinámicos, en 1922; Caline- y los feroces insultos cargados de
ment, je sui dedans, en 1923, y A dix Antonio Garduño, Nahui Olin, vintage, plata sobre gelatina virada, s. f., con un odio ancestral se hicieron más
dedicatorias, firmado "Garduño", 34 x 23.5 cm
ans, en 1924 –estos dos últimos es- frecuentes; sus amistades comen-
critos en francés–. Las obras fueron zaron a no frecuentarlos por temor
recibidas con entusiasmo y reseñadas por importantes literatos, entre a verse involucrados en el escándalo. Después de una de esas áspe-
ellos el poeta José Gorostiza, tanto por su contenido como por su ori- ras confrontaciones, el Dr. Atl dejó asentado:
ginal diseño, en especial Calinement…, cuyos poemas se estructuran
como monumentos urbanos. Una de esas noches, después de una breve discusión, yo me dormí pro-
Su labor literaria no limitó su producción pictórica. En esta época fundamente, pero en medio de mi sueño empecé a sentirme inquieto
pintó al fotógrafo Edward Weston, en el que podemos considerar como –como si fuese víctima de una pesadilla– y abrí los ojos. Carmen estaba
uno de sus mejores retratos por la espontaneidad de su concepción sobre mí, desnuda, con la cabellera revuelta sobre mi cuerpo, empu-
plástica, por el sentido cromático con que plasmó el rubicundo rostro ñando un revólver cuyo cañón se apoyaba en mi pecho. Tuve miedo de
del renovador de imágenes fotográficas, representado con su cámara a moverme, el revólver estaba amartillado y el más leve movimiento mío
24 GACETA DE MUSEOS
hubiera provocado una conmoción nerviosa en ella y el gatillo hubie- Quise darte mis lágrimas y mi sangre para que las bebieras como
ra funcionado. Todo lo pensé en un milésimo de segundo. Me la quedé una medicina maravillosa.
mirando, como quien mira un muerto. Poco a poco ella fue retirando el
revólver, y cuando mi cuerpo estuvo fuera de su alcance, rápidamente le Después de tan feroces confrontaciones se alejaron en silencio, para
cogí la mano y le doblé el brazo fuera de la cama. Cinco tiros que perfo- siempre, cada uno por su propio camino. En el futuro sus vidas vol-
raron el piso pusieron fin a la escena. Cogí el arma descargada, la puse verían a cruzarse con frecuencia, pero de aquel intenso pasado sólo
debajo de la almohada y me volví a dormir sin decir una palabra. quedó una gentil amistad. Para Nahui Olin los amores cósmicos y ca-
tastróficos no terminaron ahí; éste sólo fue el nutritivo principio.
Así continuaron por un tiempo las cosas, entre separaciones iracundas y Entre 1925 y 1940 nuevos hombres cruzaron por la vida de esta
retornos tibios y reservados. Después de los violentos encuentros Nahui apasionada mujer, y así se sucedieron los amores más diversos. Adol-
Olin también registró el desamor, la indiferencia y los dolorosos distan- fo, el virtuoso triunfador de los concursos de baile; el temperamental
ciamientos: "Pero a mí nada me distrae, estoy reconcentrada en mí Matías Santoyo, muralista menor pero espléndido caricaturista; Ma-
misma; en casa lo único que se me ocurre hacer es desnudarme de- nuel, el silencioso hombre de los secretos herméticos; Lizardo, el bello
lante de un espejo y admirar mi belleza que es tuya. Besos, besos". diseñador de jardines de las delicias; Armando, ese desconocido que
la sacó del marasmo en que se encontraba por la muerte del capitán
Pero te alejas de mí sin piedad –y yo también sin piedad me olvido de ti. Eugenio Agacino; Orlando, el petulante abogado que perfumaba sus
Preferiría degollarte y guardar tu cabeza en un frasco lleno de alcohol para cabellos después del baño y antes del amor. El final de estas experien-
estarte viendo siempre y te abriría los ojos para que tú me vieras a mí, y cias amorosas fue siempre el mismo: todo se malograba en momentos
poco a poco llenaría el frasco con mis lágrimas matemáticamente determinados; la egoísta felicidad no le permitía
y dentro de mis lágrimas vivirías siempre sino pequeños estados de euforia seguidos de desenlaces que la hun-
cerca de mí teniendo tus ojos abiertos dían por momentos en una existencial melancolía ✣
y tu boca lívida
y tu cráneo vacío Nota
y en el fondo de tus ojos habría un relámpago oscuro 1 Todas las citas textuales fueron tomadas de Dr. Atl, Gentes profanas en el convento,
que sería tu llamada. Botas, México, 1950, págs. 98-156.
Señor, tengo el cuerpo cubierto de llagas, pero sólo destruyen mi mate-

ria sin consumir mi espíritu.
En una de sus últimas cartas se advierte una sombría despedida:
Señor, te he colmado de regalos –mis ojos arranqué para que los pusie-
ras como piedras preciosas en el caleidoscopio de tu vida–, mi alma en
nardos te llevé una mañana que no pude extraer de ninguna cosa exis-
tente un perfume digno de ti –mis cabellos largos, rubios como el oro Nahui Olin, Manuel Rodríguez Lozano, tinta china
corté para coser con sus hilos las heridas de tu vida–, las lágrimas que y grafito sobre papel, firmado Carmen, 33 x 20.5 cm
exprimió el dolor de mi martirio te ofrecí y las gotas de sangre que ma-

naban de las heridas que me hiciste puse a tus pies. * Conservador de obras de arte y pintor
GACETA DE MUSEOS 25
El nuevo museo
Rautenstrauch-Joest María Teresa Cervantes Escandón*
E n el número 39 de la GACETA DE MU-

SEOS presenté un artículo sobre el Museo
Rautenstrauch-Joest (mrj) de Colonia, Ale-
mania, a propósito del centenario de su
fundación. Con el tiempo el antiguo edificio
resultó insuficiente para resguardar y pre-
sentar de manera apropiada su creciente
colección, que rebasa las sesenta y cinco mil
piezas etnograficas, una biblioteca con cerca
de cuarenta mil volúmenes y un archivo con
cien mil fotografías históricas.
Desde 1989, el consejo de la ciudad
de Colonia advirtió de la necesidad de un
inmueble para albergar y almacenar los
objetos con las condiciones adecuadas de Diseño arquitectónico de la fachada principal del nuevo mrj en Colonia, maqueta digital Imágenes mrj
seguridad –desde 1993 el río Rin se ha

desbordado dos veces y, por la cercanía La ubicación del conjunto arquitectónico, que incluye un estacionamiento subterráneo de
con el museo, las inundaciones pusieron dos plantas, ofrecerá ventajas inestimables. Distribuido en una superficie de seis mil metros
en peligro y de hecho dañaron una parte cuadrados, concentrará al mrj, la ampliación del Museo Schnuetgen, los museos de Niños y de
del acervo–. En 1995 el consejo exami- Servicios Pedagógicos, la Sala de Arte y un auditorio compartido. El bloque de edificios tendrá
nó los planos para un nuevo edificio y la forma de rectángulos alargados y varios niveles con una distribución funcional de las salas de
encargó a la ciudad el proyecto; un año exhibición para las colecciones del mrj y el Museo de Niños. La entrada al vestíbulo, que servirá
después se puso en marcha un desarro- de acceso a las salas de eventos y a otras secciones, ofrecerá un área de usos múltiples con tien-
llo arquitectónico para reinstalar a varias da y cafetería. Allí se colocará una gran pieza de exhibición del mrj: un granero de arroz de siete
instituciones en el centro de Colonia, en metros de altura de Sa’dan Toraja, del pueblo Sallebayo, isla Sulawesi (Celebes), Indonesia.
la parte sur del Neumarkt –"mercado El auditorio tendrá trescientos asientos con un escenario móvil para conferencias, conciertos,
nuevo"–, muy cerca de la zona peato- danza, proyecciones de cine y espectáculos multimedia, operado con la Universidad Popular
nal comercial. En el año 2000 el proyecto de Colonia y coordinado por un gerente de eventos.
estaba casi finalizado, pero una crisis fi-
nanciera llevó a que en 2005 se hicieran El nuevo concepto del mrj
modificaciones. Así, la primera piedra se El mrj tendrá una superficie de tres mil seiscientos metros cuadrados en tres niveles para las
puso el 14 de junio de ese año, y la inau- rutas temáticas y una sala de cuatrocientos metros cuadrados para exposiciones especiales.
guración se planea para la primera mitad El equipo de conservación e investigación desarrolló un concepto para exponer las colec-
de 2009. ciones. Tras la mudanza de la vieja sede, se abandonará el discurso de grandes regiones
26 GACETA DE MUSEOS
geográficas separadas y las vitrinas para Rutas temáticas Al comienzo del itinerario se presenta-
rutas temáticas serán remplazadas con la El lema para la apertura de exposiciones rá un conjunto de instrumentos históricos
mayor frecuencia posible. del mrj será "El hombre en sus mun- de Java Central, Indonesia, conocido con
El diseño arquitectónico será flexible. En dos". Como las colecciones proceden de ese nombre.
las salas grandes se organizarán cambios culturas antiguas no europeas, serán ar- Atracción y rechazo: el encuentro con
completos. Con el tiempo, el público admirará ticuladas en el presente con base en un mundo extraño, regido por otros valores
todas las colecciones, con variaciones en la los modernos medios de comunicación. y costumbres, crea inseguridad. El extraño
interpretación y presentacion de los objetos. En cada sala habrá estaciones de in- es a su vez objeto de fascinación y angus-
Las culturas estarán representadas en rutas formación que relacionarán los temas tia; genera atracción y rechazo. Mientras
temáticas, senderos o calles, a manera de me- con las experiencias del visitante en su que la curiosidad anima al acercamiento,
táforas conceptuales y con base en el principio propia sociedad. Las rutas tematicas "ser- existe la tendencia a enfatizar la identi-
de comparación cultural. Tales presenta- pentearán" por el edificio –escaleras y dad estableciendo fronteras, segregando
ciones capturarán temas socioculturales de ascensores llevarán a la sala deseada y y rechazando al "otro", al diferente. Los
interés en cualquier parte del mundo y mos- permitirán una visita selectiva, según el siguientes cuatro bloques motivarán a re-
trarán las diferentes formas de vida de la gusto y las necesidades individuales. En flexionar sobre el acercamiento y rechazo,
gente y la manera como enfrenta sus pro- la planta baja se planea un "modelo de- la comprensión y el conflicto:
blemas. La intencion es mostrar tolerancia tonante" que auxiliará a comprender la "Encuentro con un mundo diferen-
y respeto a los grupos humanos y sus lo- información sobre la totalidad de los reco- te" ilustrará la aportación de Wilhelm
gros culturales, con énfasis en la balanza de rridos y se organizarán bloques temáticos Joest y Max von Oppenheim, que con sus
la justicia y del Dasein –concepto de Mar- que, con la ayuda de objetos clave, esti- colecciones e investigaciones cientifícas
tin Heidegger sobre la existencia del ser en mulen el interés del visitante, aunados a enriquecieron el acervo del Museo Rau-
el mundo. la proyección de audiovisuales con salu- tenstrauch-Joest en las postrimerías del
El nuevo proyecto incluye el cam- dos rituales de bienvenida de diferentes siglo xix y comienzos del xx.
bio anual de exposiciones y, cada cinco regiones del mundo. En "Cliché y prejuicio" se abordará la
años, la organización de una muestra El itinerario completo de visita tomará cultura cotidiana africana desde su épo-
de gran escala. El rico archivo fotográfi- aproximadamente tres horas y media. Dada ca colonial hasta el presente. La finalidad
co posibilitará el montaje de exposiciones la imposibilidad de hacer una presentación es mostrar que la imagen que se tiene so-
temporales, mientras que la colaboración de todos los bloques temáticos, a continua- bre este continente nada tiene que ver con
con investigadores de sitios arqueológicos ción se citan los más destacados: la verdadera África. Se tocará el tema de la
e históricos dentro y fuera de Alemania Gamelán: la música dará la bienve- desconfianza y el odio al "otro", la discrimi-
permitirá presentar resultados de traba- nida a los visitantes de todo el mundo. nación, el racismo y el genocidio.
jos recientes. La combinación de muestras "El mundo dentro del museo" será un
con intervalos de cinco años mantendrá el taller metodológico, con materiales de Pa-
atractivo entre los visitantes tanto loca- púa, Nueva Guinea, que permitirá mirar "tras
les como extranjeros. La piedra angular de bambalinas" una investigación etnografica y
las exhibiciones especiales será la coope- expondrá sus limitaciones y errores.
ración con el vecino Museo Schnuetgen, En "Arte" se hará un acercamiento
dedicado a la Europa del medievo y, es- con otros pueblos mediante sus produc-
pecialmente, al arte sacro, cuya primera tos culturales. Aun cuando originalmente
exposición conjunta, Arte y culto, será in- Tiempos de recorrido: completo: 3½ horas; abreviado:
haya tenido un uso funcional y ritual, la
augurada hacia 2010. 2½ horas; intensivo (por ruta temática): 3 horas contemplación de un artefacto como obje-
GACETA DE MUSEOS 27
to artístico es una costumbre occidental, por lo que, en contraste con los museos de arte,
el mrj proporcionará información de contexto. En este núcleo el acervo se expondrá en ex-
hibiciones temporales.
Comunidad humana: este bloque temático contará con objetos y fotos que revelen for-
mas de expresión particulares.
"Puertas" incluirá una docena de estos armazones procedentes de varias culturas,
cada uno de los cuales relatará su propia historia.
En "Formas de vivienda", el visitante recorrerá, desde una sala de exhibición europea,
cuatro casas amuebladas que ilustrarán otros modos de vida: una sala de recepción de un
comerciante sirio de Kayseri, en Anatolia, ejemplificará la hospitalidad del imperio otoma-
no; la tienda del tuareg mostrará la cotidianidad de los criadores de ganado nómadas en
un ambiente hostil; los indios tipi de las llanuras de Norteamérica acentuarán la conviven-
cia entre niños, mujeres y adultos, mientras que la casa de hombres de los asmat de Nueva
Guinea hablará de la segregación de género. En cada vivienda se proyectará una entrevis-
ta con un miembro actual de cada cultura.
"Identidades sociales" reflejará la individualidad dentro de una comunidad por medio
de la ornamentación, decoración o modificación en el cuerpo con pinturas, tatuajes, mu-
tilaciones o alteraciones corporales, tanto en los dientes pulidos como en la ropa y otros
accesorios. "Diez escenas regionales" mostrarán los rasgos de jerarquía dentro de un gru-
po étnico, como marcas de género, iniciación, matrimonio, religión y guerra.
El hombre y sus mundos: mediante "El cuarto del silencio" se introducirá simbólicamente
al visitante en el tema de las religiones: en el bloque "La muerte y el más allá" dominará el co-
lor blanco, asociado por varias culturas con el final de la vida, y se expondrán las costumbres
funerarias de las islas Celebes, Kalimantán y Bali, Indonesia. Una pieza clave es una torre cre-
matoria de cuatro metros de altura y ricamente decorada; otra, un sarcófago indio en forma de
toro de Bali, así como una "embarcación de los muertos" maori, de cinco metros de largo. Fi-
gurillas ancestrales de África, Oceanía e Indonesia ilustrarán la creencia sobre la influencia de
los muertos en los vivos.
El tema "Recuerdos" será enfatizado con un altar-ofrenda ricamente decorado, en me-
moria de un mexicano fallecido. Una instalación de un malangan tallado en madera de Nueva
Irlanda ejemplificará el honor a los ancestros. Se exhibirán ofrendas funerarias de las tri-
bus moche y chimu del antiguo Perú, que ofrecen al difunto una vida confortable tras su
paso por la tierra.
En "Religiones del mundo" habrá objetos de culto del judaísmo, cristianismo, islamismo,
hinduismo y budismo, con énfasis en figuras indias y budistas de piedra, bronce y madera
del sur y el sureste de Asia, cuya antigüedad abarca un milenio. Fotos y películas ilustran la
cotidianidad y los rituales. Además, se abordarán temas como el fundamentalismo, las sec-
tas y la arreligiosidad de las sociedades modernas.
Por último, "Rituales" incluirá máscaras de África, Oceanía y Asia, para ilustrar ceremo-
Figura masculina, región de Dogon-Tintam, Mali, África nias de iniciación, fertilidad, expiación y curacion.
28 GACETA DE MUSEOS
El recorrido por el museo terminará con
breves proyecciones de videos sobre los ri-
tuales de despedida en varias regiones del
mundo.
Conclusión
El proceso de globalización, que incremen-
ta el contacto directo con otras culturas, ha
llevado a los museos etnográficos, como el
Rautenstrauch-Joest, a redefinir tanto su
misión como su función social, es decir,
comprender al "otro" por medio de las dife-
rencias, con el objetivo de diluir los prejuicios
y contribuir al entendimiento transnacional y
transcultural.
El nuevo concepto del Museo Rauten-
strauch-Joest se propone activar el interés
del visitante en una comunicación intercul-
tural participativa. La percepción puede ser
intelectual, estética, sensorial, emocional, o
bien, una combinación de los cuatro aspec-
tos. Más allá de la exhibición y descripción
de los objetos, en las exposiciones del mrj
la cultura y el arte desarrollarán en el visi-

tante una empatía con otras culturas ✣
Bibliografía
Engelhard, Jutta B., "Das neue Rautenstrauch-
Joest-Museum. Aussereuropaeische Kunst und
Kulturen", en Museen-Welt verstehen Kultu-
ren begreifen, respektieren, tolerieren, Stadt
Koeln, Colonia, 2006.
Schneider, Klaus, "Eroeffnung im Fruehsommer
2009", en Museen-Welt verstehen Kultu-
ren begreifen, respektieren, tolerieren, Stadt
Koeln, Colonia, 2006.
Stumm, Rodereich, "Chronologie des Neubaus", en
Museen-Welt verstehen Kulturen begreifen,
respektieren, tolerieren, Stadt Koeln, 2006.
* Corresponsal en Europa de la GACETA DE

MUSEOS y voluntaria del mrj Granero de arroz Sa'dan-Toraja, pueblo Sallebayo, Sulawesi, Indonesia, siglo xx
GACETA DE MUSEOS 29
De los públicos
D esde los años setenta se reconoce que los Historia de la naturaleza y crisis
museos deben involucrar a la comunidad y
se propugna su misión de hacer concien-
cia de la necesidad de comprensión entre
medioambiental
los grupos humanos y de éstos con el en- Yudith Lamothe Crespo*
torno en sus acepciones física, biológica y
psicosocial. Súmese la agudización de la
problemática ambiental, reconocida en dife-
rentes foros, a la cual es imposible darle la
espalda porque pone en peligro la vida ac-
tual y, sobre todo, futura del planeta.
Cabe preguntarse si los museos de his-
toria natural pueden continuar con la visión
que han trabajado o si se impone un cam-
bio que, sin perder de vista la historia de la
formación y desarrollo del universo, del pla-
neta y de la vida, no aborde las cuestiones
ambientales con el clásico enfoque conser-
vacionista, sino mediante la participación
en el análisis y las propuestas de solucio-
nes. Así se reafirmaría la función social del
museo más allá de su tradición cultural,
ya que actuaría como agente de cambio
y contribuiría a la formación de valores y
actitudes que refuercen su labor educativa, Ilustración digital Mario Carrasco Teja
pero con enfoques novedosos de la peda-

gogía y la museología. del planeta y de la vida? ¿Puede conformarse con este enfoque cuando una de sus característi-
¿Se enfrentan de esta manera las posi- cas es propiciar la integración entre el hombre y el mundo? Contribuir, descubrir e intervenir son
ciones culturalista y ambientalista? ¿Acaso acciones que requieren la guía de especialistas para forjar conductas coherentes y asertivas.
la cultura no forma parte del medio ambiente
en su significado más amplio y contemporá- Tradición y contemporaneidad
neo? Los que defienden que el museo es un Contar la historia del universo, del planeta y de la vida ha sido la tradición de estos museos,
instrumento para la transmisión de la cul- desde su surgimiento como tales hasta fechas recientes, cuando las nuevas tecnologías
tura olvidan los significados de uno de los de información y comunicación hicieron posible la difusión audiovisual de los procesos
términos más polisémicos de cualquier len- naturales por otras vías. En muchas ocasiones hoy se ve mucho mejor este proceso en un
gua; se concentran en la historia y el arte, y documental educativo que en un museo, y esto hace que la comunicación con el público sea
dejan de lado las dimensiones antropológi- un constante desafío, sujeto a cambios en el lenguaje, la forma, los soportes y la integración
ca, procesual y simbólica. de los componentes museológicos.
En el caso de un museo de historia na- El cine en particular brinda visiones dinámicas y contextualizadas sobre estos temas.
tural, ¿la cultura se limita a narrar la historia Las películas de ficción acaparan el interés del público al abordar cuestiones de astronomía
30 GACETA DE MUSEOS
o a los tan atractivos dinosaurios y otras especies extintas, ya sea por su rareza, tamaño o posiciones divergentes: hay quienes opinan
peligrosidad, habida cuenta de la atracción humana por el riesgo y lo desconocido. Ejem- –con un concepto estrecho de la cultu-
plos hay muchos, que son el elemento de partida para analizar el significado actual de los ra, vista sólo como arte e historia– que la
museos de historia natural. Acaso por su desarrollo histórico, se ha estereotipado al públi- misión de estos museos es "cultural" y que,
co que los visita como gente a la búsqueda de cosas raras o de animales prehistóricos o de por lo tanto, deben limitarse a exponer la
otras latitudes. Eso está bien, pero ¿es la única posibilidad? El museo establece puentes en- historia de la evolución. Otros se concen-
tre pasado y presente, y nada más presente en relación con el hombre y su mundo que los tran en la función conservacionista, pero se
problemas ambientales, en ocasiones críticos, que confronta a diario. enfocan en las especies en peligro de extin-
Dentro de las actividades propias de un museo, la educación ambiental puede y debe ción. Y no faltan las visiones catastróficas.
tener su espacio como vía de aprendizaje no formal. En nuestras complejas sociedades Si la función última de las instituciones
contemporáneas los diversos modos de enseñanza se complementan entre sí y es su ejer- culturales es contribuir al conocimiento y dis-
cicio, precisamente, el que demuestra los mejores resultados. frute de las personas, a su enriquecimiento
espiritual y, por ende, al bienestar humano,
Una visión de conjunto ¿darles información, enseñarlos a preservar
En general, cuando se habla de museos, su historia y situación actual, se hace énfasis en los el medio en que viven, partiendo de la casa
de arte, etnología o historia. Los demás apenas son mencionados "de pasada", como si fue- particular hasta llegar a la casa común, no es
ran una derivación de los anteriores. Sin embargo, se afirma que desde la edad de piedra los una forma de contribuir a este bienestar?
hombres reunían objetos obtenidos de su entorno natural. No es posible cerrar el caso con clichés;
Una visión rápida nos lleva a los naturalistas de los siglos xviii y xix que dieron un impulso al contrario, queda abierto a un debate a par-
a estas instituciones –entre los que Charles Darwin ocupa un lugar especial–, donde los res- tir de los planteamientos enunciados ✣
tos fósiles tuvieron una posición privilegiada ante la necesidad de los científicos de la época
Bibliografía
de romper con el dogma bíblico del Génesis, apoyados en la filosofía racionalista, el empiris-
Arjona, Martha, Patrimonio cultural e identidad,
mo y otras corrientes de pensamiento que surgían y se superponían, pero siempre desde una
Letras Cubanas, La Habana, 1986.
perspectiva científica. Esta posición continuó hasta la primera mitad del siglo xx y fue cam- Burns, M. J., "Tendencias actuales de los museos de
biando en la medida que la evolución de la museología como ciencia fue abriendo nuevas historia natural en EU", en M. Bolaños (comp.),
posibilidades de atención y participación del público. La museología de hoy o "nueva museo- La memoria del mundo. Cien años de museolo-
logía", como la llaman algunos, trasciende el enfoque original y se vuelca hacia la calle, hacia gía 1900-2000, trea, España, 2002.
García González, A., Historia del Museo de la Real
el público, hacia la comunidad y sus inquietudes.
Academia de Ciencias Médicas, Físicas y Naturales
de La Habana, Academia, Cuba, 1994.
Los problemas ambientales Linares, José, Museo, arquitectura y museografía, Fondo
Mientras predominaba una mentalidad triunfalista sobre el desarrollo alcanzado por el hombre de Desarrollo de la Cultura-Dirección de Patrimo-
y se defendía la sociedad del bienestar, se alzaban voces sobre los peligros que amenazan al nio Cultural-Ministerio de Cultura, Cuba, 1994.
planeta, voces que nadie quería oír porque significaban –y significan– "frenar el desenfreno" M'Bow, A. Mathar, "La dimensión humana", Correo
consumista que está agotando a la naturaleza. El libro La primavera silenciosa de Rachel Car- (Unesco), julio de 1982.
O'Byrne, Patrick y Claude Pecquet, "La programación,
son fue el detonante para despertar el interés de la opinión pública. Así comenzó la eclosión de
una herramienta que no envejece", Museum
la ecología y el análisis de los problemas ambientales como temas específicos de estudio.
(Unesco), núm. 4, 1989.
En este contexto de urgencia vital, de cuestionamiento científico, ¿puede un museo de
historia natural continuar simplemente exhibiendo fósiles o presentando "historias de dino- * Vicedirectora cultural, museo nacional
saurios"? ¿Su rol dentro de la sociedad no exige que tome una posición ante las posibles de historia natural de cuba
consecuencias de la vida contemporánea? En nuestro quehacer cotidiano hemos encontrado [email protected]
GACETA DE MUSEOS 31
Alfonso Soto Soria

y el proyecto museográfico
Carlos Vázquez Olvera*
Con la intención de dar a conocer los sistemas de trabajo desarrollados por especialistas en nuestro campo a lo largo de su
trayectoria profesional, comparto las experiencias sistematizadas que me transmitió Alfonso Soto Soria durante la serie de entrevistas
que realizamos como parte de mi investigación Museógrafos mexicanos,1 cuyo objetivo central ha sido el rescate de vivencias y
conocimientos de los personajes que han contribuido al desarrollo de la museografía en México. En el siguiente relato, de 1999, el
profesor Soto Soria explica a detalle, en su propia voz, las fases de su trabajo mediante la aplicación de un sistema personal que
fue creando y perfeccionando en la diversidad de proyectos que ha coordinado. Para no omitir ninguna etapa, la información publicada
en estas páginas fue sintetizada, la misma que el lector encontrará en su versión completa en mi libro sobre Soto Soria.
Definición de objetivos –local, regional, nacional o internacional–,

Narraré un recorrido de lo que hago cuando me llaman para montar una exposición o un mu- que condiciona el lenguaje y las posibili-
seo. Lo primero y más importante es establecer un plan de trabajo, que consiste en responder dades de exhibición. Habrá que tomar en
a una serie de preguntas –no muchas, seis o siete– que darán una idea clara del proceso cuenta las edades, pues la organización
y los requerimientos para llevarlo adelante. Las primeras dos están ligadas: qué haré y para debe tener características diferenciadas
qué, es decir, determinar con claridad el objetivo de la muestra o de la sala del museo, que cuando está especialmente dirigida a un
depende del material a exhibir. Una vez identificado, debe discutirse, ajustarse y estar estre- público multivalente, a grupos rurales o a
chamente enlazado con las personas o instituciones promotoras, y ver cuántas interrogantes escolares y niños. El lenguaje, la conno-
se presentan para llevarlo a su término cabal. tación de los objetos, su organización y el
Una misma colección, digamos, de artesanías mexicanas, puede tener distintos pro- entorno tienen que relacionarse con estos
pósitos, que requieren encuadrarse en el objetivo de la institución. Por decir algo, si es el aspectos. Esto se resuelve más fácil con
Instituto Nacional de Bellas Artes, el sentido estará más dirigido a mostrar las soluciones la experiencia acumulada montando ex-
estéticas, las cualidades plásticas de los objetos, sin que se pierda la necesidad de una posiciones. Llega un momento en que la
introducción para ponerla en contexto. Sería distinto con la Secretaría de Turismo: el ma- familiaridad es suficiente para que, sin mu-
terial tendría que organizarse, por ejemplo, con base en la belleza de los lugares donde se cho meditar, sin mucho pensar, uno sepa
produce para la difusión del turismo en México. Si es la Secretaría de Comercio y Fomento qué hará, especialmente cuando se trata de
Industrial, se resaltarían los aspectos tecnológicos, de producción, las materias primas y
2 materiales, objetos, colecciones que se ma-
la comercialización de los objetos, inclusive. Si se trata del inah, se mostrará al ser humano nejaron en el pasado y de las que se tiene
como productor y los aspectos humanísticos, antropológicos y etnográficos determinarán información y documentación. Sé cómo en-
el desarrollo del guión. carar estos problemas porque ya los resolví
Si se piensa en los objetivos generales de la institución y en los fines de la muestra, es fá- alguna vez, con las adiciones necesarias
cil determinar los propósitos museográficos. Éstos también deben estar ligados con el público por los matices en los objetivos.
32 GACETA DE MUSEOS
Análisis de los recursos teriales; nuevos sistemas de iluminación y electrónicos que incrementan las posibilidades
Después de contestar las primeras pre- de información; investigaciones recientes, descubrimientos, materiales que deben incor-
guntas –qué haré y para qué–, vienen porarse a las exhibiciones.
las siguientes: dónde, cómo y con quién, Son las características a considerar cuando se analizan los recursos para la instala-
es decir, el análisis de los recursos para ción: determinar los materiales y si existen localmente, la obsolescencia de los sistemas, si
llevar a cabo el plan de trabajo y cum- será fácil conseguir repuestos para la iluminación, a fin de lograr la máxima seguridad y per-
plir con los objetivos. Hay muchos asuntos manencia. Éste es un análisis obligatorio, aparte de la información, que requiere de otros
que cubrir: por un lado, el manejo, estu- especialistas, y cómo serán complementados los objetos con elementos de apoyo –mapas,
dio y documentación de las colecciones; ilustraciones, esquemas, gráficas– que los pondrán en contexto y les permitirán contar su
por otro, el lugar, sus posibilidades y los historia en relación con el objetivo. Estos análisis determinan los criterios generales de infor-
recursos económicos. Eso permitirá ini- mación, de diseño, y qué personal se necesitará en cuanto a construcción, documentación,
ciar el estudio del manejo de los espacios limpieza, preservación y conservación –si hay que restaurar objetos, habrá que tomar en
para determinar las áreas de exhibición, cuenta a otro equipo de especialistas.
las de circulación, el movimiento del pú-
blico, que será distinto si se espera uno
masivo u otro restringido por las caracte-
rísticas del museo.
No es igual montar una muestra en la
ciudad de México que en Pátzcuaro, Mi-
choacán, o Teotitlán del Camino, Oaxaca.
Los recursos son distintos; lo que se puede
conseguir de los proveedores locales, tam-
bién. Necesito conocer las complejidades
técnicas y de captación de materiales, y no
sólo eso, sino las dificultades que supondrá
el mantenimiento museográfico para que
la exposición o el museo trabajen con efi-
ciencia por muchos años –las calidades en
función de la duración– y que no se estén ca-
yendo seis meses después.
Por ejemplo, lo que estamos hacien-
do en el Museo Nacional de Antropología
(mna) lo calculamos para un mínimo de
treinta años. Treinta y tantos años des-
pués de que se inauguró –en 1964– ya
era conveniente hacer una remodelación:
hay cambios en la tecnología, en los ma- Resultado de la aplicación del sistema modular Bocetos museográficos Alfonso Soto Soria
GACETA DE MUSEOS 33
Cuando ya se conocen estos recursos, En este momento estoy interviniendo

se tienen los elementos suficientes para como consultor del que será un Museo de
iniciar el diseño de la exposición y desa- Arte Popular, en el antiguo edificio de bom-
rrollar el proyecto, que se divide en dos beros del centro de la ciudad de México, en
etapas. La primera consiste en los ante- Revillagigedo e Independencia. Es un edificio
proyectos, con los que se consigue una art déco que la Secretaría de Marina ocu-
imagen inicial. El proyecto definitivo será pó por una temporada y desalojó después
muy distinto de lo que se propuso en las del terremoto de 1985, aunque no sufrió
primeras ideas, que se irán ajustando con muchos daños. Como está planeado para
las que surjan sobre la marcha y en rela- cuartel de bomberos, tiene espacios gene-
ción con los elementos y recursos que rosos, amplios, perfectamente adaptables
ya he comentado. El anteproyecto inicial como museo. Son enormes galerones, em-
Propuesta de dos sistemas modulares, a base de se ajustará hasta lograr uno definitivo, a pezando por el área donde están las bombas,
un módulo de 30 x 30 y 40 x 40 centímetros consultarse con la institución y los espe- que es una cochera gigantesca, mucho me-
cialistas. En esta primera fase se hacen tros cuadrados con techos altos donde puede
muestras y prototipos, como de los materiales en que se imprimirán las cédulas, la informa- hacerse cualquier exposición. Los tres pisos
ción que se proporcionará, la cuantificación de textos, las posibilidades de diseño y los me- siguientes tienen más o menos las mismas
dios audiovisuales. características: eran los dormitorios y los lu-
La segunda etapa consiste en el proyecto ejecutivo, que se hace una vez que se aprue- gares de equipamiento. Es mucho más fácil
ba el anteproyecto y se realizan los ajustes. Este proyecto, que raras veces entra a revisión, adaptar para museo un edificio de ese tipo.
sufrirá pequeños arreglos durante la instalación –por ejemplo, un objeto que requiere un Ahora, si el museo ya existe y hay que mo-
montaje especial–. Luego se entrega y se difunde entre los contratistas, constructores, dificar o reestructurar las salas, como ya hay
carpinteros y demás participantes. Para esto ya se debe contar con muestrarios de colo- una arquitectura pensada para esa función
res y gamas establecidas. se facilitan mucho las cosas. Es el caso del
Mientras más compleja sea la exposición, más complejo será el proceso; mientras más Museo Universitario, que tiene dos mil qui-
sencilla, más simple. Y empieza la producción y, al final, el montaje. nientos metros cuadrados –más o menos el
tamaño de la sala Mexica del mna–, con piso,
Continente arquitectónico columnas y una cubierta. El espacio queda
Cada problema requiere una solución específica. Si hablamos de un museo que no se ha totalmente libre para construir lo que uno ne-
construido, se tiene que pensar desde la arquitectura, a diferencia de un edificio que se adap- cesite: meter muros falsos y cambiarlos; usar
tará para la exposición, como el caso del Franz Mayer. Algunos inmuebles se construyeron distintas alturas –tiene cinco metros del piso
especialmente, como el de Villahermosa, Tabasco, o el mna, pero lo más común es que se use al techo bajo de plafón, así que se pueden
un edificio proyectado para una función distinta. Entonces hay que adaptarlo, y a veces resul- construir muros de 4.8 metros de alto o de
ta complicado. La sede del Museo Nacional de las Intervenciones, en Churubusco, está llena 3.66 o de 2.44–; incluso es posible hacer
de celdas pequeñas donde dormían los monjes que, por su tamaño, resultan difíciles de utili- mezanines. Además, las columnas forman
zar como salas de exposición; además, como es un monumento histórico, no puede alterarse una retícula aprovechable para manejar los
y la adaptación es sumamente complicada. espacios.
34 GACETA DE MUSEOS
Los problemas son distintos porque dependen del edificio donde se hará la instalación. Por tad, especialmente cuando no se requiere
un lado, la cantidad de temas generará los espacios en función del material, de las necesidades una secuencia determinada de visita. Cuan-
de mobiliario museográfico y de la circulación del público. El estudio de las colecciones –sus cado se hace una exposición de etnografía, en
racterísticas, sus dimensiones– proporciona mucha información para definir el manejo de los la que se cuenta una historia, el mobilia-
espacios. Si se hará una exposición de pintura de grandes dimensiones, se requiere un área am- rio debe ser diferente, porque se exhibirán
plia para admirar la obra desde una distancia adecuada. Piezas como la Coatlicue o la Piedra del objetos disímbolos y hay que encontrar la
Sol, en el mna, o el cuadro Las bodas de Canaán de Paolo Caliari, el Veronés, en el Louvre, París, manera de presentarlos con eficiencia.
que debe de medir unos doce metros de largo y cinco de alto, necesitan salas enormes para ser En términos generales, divido las ne-
apreciados en todas sus calidades, pero los grabados de José Guadalupe Posada o las cabezas cesidades de mobiliario en tres elementos
de Palenque y el monito de obsidiana de la sala Mexica del mna no requieren esas dimensiones, condicionantes: el primero es el espacio
sino distancias cortas y un espacio mínimo, porque son muy pequeños. arquitectónico con sus características. En
un continente dado no es posible alterar
La producción de mobiliario la arquitectura, sino integrar el mobiliario.
Las características están determinadas por el espacio y las necesidades de las piezas. Si Cuando se trabaja en monumentos don-
es una muestra de esculturas exentas, sólo se necesitan bases. Existe mucho mayor liber- de no pueden tocarse las paredes, los
Resultado de la aplicación del sistema modular
GACETA DE MUSEOS 35
plafones ni los pisos, uno debe pensar empujón y evitar agrietamientos o movimientos de materiales que echen a perder el mon-
en mobiliario exento, que no esté ancla- taje en poco tiempo.
do para no afectar el monumento. Caso En tercer lugar, el resto del mobiliario, como las vitrinas, tiene que estar adaptado a las
contrario es el del mna, donde es posible características de los materiales: si vamos a exhibir textiles, cerámica o lítica, la iluminación
aprovechar la estructura y se permiten to- será distinta. Para los metales habrá que hacer vitrinas con microclimas para piezas que sean
das las posibilidades de instalación a base afectadas por la temperatura o los cambios de ambiente. Todo está en función del estudio de
de cremalleras en los muros, pero de todas la colección a exhibir.
maneras hay una arquitectura que debe
respetarse y ser visible. La solución gráfica
El segundo elemento son los mu- Aparte de esto viene la cuestión de los elementos gráficos, elaborados por un equipo que
ros que sí están incorporados al espacio resolverá el diseño y la producción con los sistemas que se decidan de acuerdo con los
arquitectónico y planeados para ser com- presupuestos, los tiempos, las posibilidades y los recursos industriales –fotografías, com-
plementados con los elementos específicos putación, serigrafía.
de la exhibición, como vitrinas y bases. Esto Además, hay que atender la producción de los textos y cédulas. La información es-
supone otro equipo de trabajo. Construir crita tiene distintas características según lo que se quiera decir, pero siempre debe haber
muros requiere un tipo especial de car- una cédula introductoria a la sala que explique, en términos generales, sintéticos, qué verá
pinteros, porque es una labor masiva que la gente allí.
debe ser lo más perfecta posible, con sus
propios acabados, a los que se incorpora-
rán –como en una casa– los muebles. Para
la producción de los espacios que conten-
drán las piezas habrá que tomar en cuenta
la información complementaria –mapas,
gráficos, ilustraciones–, así como prever
los pasos para colocar los objetos en el in-
terior de las vitrinas o en exteriores, según
las dimensiones y las necesidades de in-
formación. Asimismo debe considerarse la
ubicación de los sistemas audiovisuales e
interactivos, en caso de que se incluyan.
Se requiere que la construcción de muros
esté bien planeada para que las instalacio-
nes queden ocultas pero utilizables, ya sea
por piso, plafón o de manera directa. Cuan-
do la exposición durará muchos años, la
estabilidad de los muros debe estar bien
planeada para que no se caigan con un Resultado de la aplicación del sistema modular
36 GACETA DE MUSEOS
Después viene la producción del cedulario, según el formato: si tendrá un adorno, una
ilustración, un complemento gráfico o sólo texto. También habrá que determinar el tamaño
y la tipografía adecuados para que sean legibles; con este objetivo se contrata a un equipo
de producción que trabaja con los formatos, los materiales y las características definidos
en el proyecto.
El montaje
Cuando ya se tiene la producción –acabados, material gráfico y textos– viene la solución
del montaje de las colecciones de acuerdo con la sensibilidad, experiencia y conocimien-
to del museógrafo.
Es muy difícil establecer reglas –yo no creo en la ortodoxia–. Estoy absolutamente con-
Estudio sobre posibilidades de montaje vencido de que la colocación de las piezas en una vitrina puede tener muchas soluciones
acertadas, y el problema es escoger una de ellas, la que uno sabe por experiencia que da
Como la exposición seguramente estará buenos resultados. Sin embargo, resolver el diseño interior de vitrinas de acuerdo con ese co-
dividida en varias secciones, se necesitarán nocimiento no quiere decir que alguien no lo pueda hacer con la misma eficiencia con una
cédulas de sección. Luego habrá una serie colección totalmente distinta.
de cédulas temáticas –por ejemplo, sobre El montaje depende de muchas características, entre ellas el sentido de composición que
cerámica, metalurgia, elaboración de obje- se tenga: resolver composiciones gráficas, darle a las piezas más importantes el lugar desta-
tos de barro o de textiles–, desarrolladas en cado o resaltarlas con recursos que uno ya maneja. Por decir algo, si tenemos veinte figuras
un texto más o menos largo, según la infor- de cerámica en la vitrina y una de ellas es muy importante, a ésta le ponemos una base roja
mación que se quiera dar. Por último vienen y a las otras diecinueve, una blanca. Puede ser un recurso muy barato, pero ejemplifica con
las cédulas de agrupamiento y las individua- claridad que es posible destacar los objetos por medio del montaje, según las características
les, con un tamaño y una extensión mucho de los mismos.
menores, pero un poco más especializadas. Cuando hablo de estas cosas en clases o pláticas con museógrafos, les digo que es un
Todos los textos deben estar previstos poco como el teatro. En un ballet hay cuarenta bailarinas vestidas de blanco y, de repente, en
desde el proyecto ejecutivo, en el que ya se el centro, vemos a una vestida de amarillo o que recibe el chorro de luz: es la primera bailarina.
conoce cuántas piezas se exhibirán, cómo En la composición, las otras le sirven de fondo. Estos recursos se usan mucho en el monta-
serán agrupadas y cuáles son sus caracte- je de vitrinas. Hay objetos que por sus características, tamaño, calidad o material destacan de
rísticas. El curador o investigador remitirá inmediato para ponerlos en un lugar de honor, más arriba o más abajo. Todo depende de la
los textos a revisión a alguien que conoz- sensibilidad del museógrafo ✣
ca de corrección de estilo y del lenguaje que
Notas
deben tener para un público multivalente; si
1 Los tres primeros libros publicados del proyecto, editados por el inah, son Felipe Lacouture Fornelli, museólo-
se enviarán a traducción, no debe hacerse
go mexicano, de 2004, Alfonso Soto Soria, museógrafo mexicano e Iker Larrauri Prado, museógrafo mexicano,
antes de la corrección, a fin de que estén to- ambos de 2005.
talmente depurados, aprobados y firmados 2 Secretaría de Economía desde el año 2000.
por los autores, con la seguridad de que es-
tán correctos. * Antropólogo, cnme-inah/GACETA DE MUSEOS
GACETA DE MUSEOS 37
Ideas d e i d a y v u e lta : l a v i t r i n a d e l m e s
Reciclado
de vitrinas
O de cómo sacarle
provecho a la museografía
P ara realizar cualquier proyecto de exposición es deseable que
tanto el mobiliario como la museografía sean diseñados en sis-
temas modulares. De esta manera se garantiza la posibilidad de
reutilizar cada uno de estos elementos, ya sea de manera total o
parcial.
Una de las prioridades durante la planeación de la mues-
tra temporal Persia: fragmentos del paraíso. Tesoros del Museo
Nacional de Irán, vigente en el Museo Nacional de Antropología
(mna) desde noviembre del año pasado hasta junio de este año,
fue el aprovechamiento de la museografía de exhibiciones previas,
en particular la de España medieval y el legado de Occidente, que
permaneció en el mna y el Museo Nacional de Historia desde octu-
bre de 2005 hasta febrero de 2006.
El mobiliario reutilizado en Persia incluyó desde los muros, las
ambientaciones, las mamparas y las plataformas hasta los sopor-
tes de objeto y las vitrinas. Estas últimas en especial son susceptibles
de reutilizarse cuantas veces se requiera, de acuerdo con el desa-
rrollo museográfico, ya que fueron diseñadas con medidas estándar,
precisamente para facilitar su aprovechamiento en exposiciones
posteriores, como se muestra en las imágenes comparativas entre
España medieval y Persia: fragmentos del paraíso, en las que se
observan vitrinas adaptadas con pantallas electrónicas, el espacio
lúdico y la fuente de los atriles.
Por último, en lo que respecta a las ambientaciones, cuando
el tema lo permitió se retomaron salas museográficas enteras, con
pequeñas modificaciones.
Ulises Tovar
Arquitecto, cnme-inah Mobiliario y museografía para España medieval Fotografías cnme
38 GACETA DE MUSEOS
Bueno, bonito, barato (y bien hecho)
Los beneficios inmediatos del reciclado museográfico –vitrinas,
soportes, medios electrónicos, computadoras, proyectores y pan-
tallas, entre otros elementos– para Persia: fragmentos del paraíso
fueron la amortización del presupuesto general y los tiempos de
producción.
Los ejemplos referidos por Ulises Tovar sobre la reutilización en
los espacios lúdicos el "Pabellón blanco" y la fuente con los atriles
en la muestra sobre Persia –producidos originalmente para el tema
"Expansión de los reinos cristianos" de España medieval y el legado
de Occidente– son tan sólo dos aciertos de esta práctica, ya que
se integraron a la perfección y tuvieron una gran aceptación entre
el público.
Teóricamente, como menciona Tovar, éste debería ser –per
se– uno de los lineamientos al desarrollar proyectos de exhibiciones
internacionales. Pero la realidad es otra, pues en la mayoría de los
casos estas adecuaciones obedecen, en principio, a las limitaciones del
presupuesto. Basta como ejemplo la propia Persia, en la que el proyec-
to inicial contemplaba salas de planta circular con nichos en los muros,
lo que hubiera implicado anular el reciclado –a excepción de algunas
vitrinas– y, lo dicho, un aumento en los costos de producción.
Uno de los logros museográficos del equipo de la cnme fue
alcanzar el equilibro entre el reciclado y un diseño museográfico
original, ya que la muestra se encuentra a la altura de exposiciones
anteriores del ciclo Grandes civilizaciones.
Por la experiencia adquirida en el desarrollo de proyectos
internacionales, sería idóneo prever, desde la gestación de los
proyectos, el diseño de elementos museográficos y espacios mu-
seables que permitan su fácil reutilización o, como señala Tovar,
planear museografías modulares. De esta manera, al abatir los
costos se destinarían más recursos a la investigación, la difusión y
la comunicación educativa.
La creatividad de los especialistas es una parte medular del
proceso de reciclaje. Queda en manos de los diseñadores, inves-
tigadores y museógrafos innovar en las propuestas que incluyan
elementos utilizados en exhibiciones anteriores ✣
Sabrina Farías Pelayo y Edmundo Saavedra

Mobiliario y museografía reciclados para Persia: fragmentos del paraíso Arqueólogos, cnme-inah
GACETA DE MUSEOS 39
Ideas d e i d a y v u e lta : l a c é d u l a d e l m e s
Escultura en bronce
La técnica de la "cera perdida"
U na parte fundamental del trabajo académico de Persia: fragmen- del antiguo Oriente medio y, por el otro, un análisis morfológico del
tos del paraíso fue la escritura de los guiones para los audiovisuales incensario para inferir su manufactura.
y las cédulas electrónicas. Con imágenes de contexto, los pasos básicos de la técnica se
Las técnicas de manufactura son un tema atractivo para el pú- sintetizaron en ocho ilustraciones trazadas desde una perspectiva en
blico porque muestran aspectos que no son evidentes y mejoran la "primera persona", como si las manos de la cédula fueran las del es-
comprensión del contexto sociocultural original. Ante la dificultad pectador, para crear una empatía. Los textos que las acompañan, más
para explicar en breve y por escrito un proceso tan complejo como que descriptivos, refuerzan las escenas y la secuencia, junto con la in-
el de la escultura en bronce con la técnica de la "cera perdida", se clusión de imágenes de lámparas de aceite con las que se derretía la
recurrió al formato multimedia y se eligió, para ejemplificarlo, un in- cera y de cuencos para contener agua similares a los expuestos en las
censario en forma de pavo real fechado entre los siglos xii y xiii dC. vitrinas contiguas. Al final se presenta una animación tridimensional
Como el tema de la sala donde éste se encuentra se refiere a las que invita a observar el objeto con mayor detenimiento. Esta experien-
artes aplicadas del islam, la cédula electrónica complementaría la cia reafirmó que el alma de cualquier exposición es la investigación
información histórica e iconográfica del cedulario impreso. y al mismo tiempo permitió desarrollar una propuesta museológica y
Dado que un objeto ofrece múltiples lecturas, al integrarlo a un museográfica que conjugara diversas disciplinas y enfoques metodo-
discurso temático se excluyen detalles que tal vez serían de mayor lógicos en un solo material educativo y aun de difusión.1
relevancia para algunos visitantes. En este caso la decisión estribaba
entre mantener un criterio arqueológico-histórico o uno estético- Nota
1
artístico. Para ir más allá de los aspectos formales, se hizo énfasis Durante las visitas guiadas escuché comentarios como los siguientes: "Yo creía que
'cera perdida' se refería a un pedazo que se le había perdido a la pieza" o "la próxima
en el trabajo del metal entre las culturas del antiguo Irán y el alto
vez que vea una escultura en bronce me acordaré de lo laborioso que es hacerlas".
grado de especialización que implicaba. La síntesis de la informa-
ción se logró mediante la conjunción de la arqueología experimental
y las artes plásticas: por un lado se realizó una investigación en pu- Gerardo Pérez Taber
blicaciones académicas especializadas en las técnicas metalúrgicas Pasante de arqueología y asistente en la muestra sobre Persia
1 2 3 4
Pasos básicos para la elaboración de escultura en bronce con la técnica de la "cera perdida": 1. se modela un núcleo de barro; 2. se recubre el núcleo con cera de abeja; 3. se
modela y se esculpen los detalles con herramientas como estiques, estiletes y gubias; 4. se añaden conductos a la figura de cera para permitir la entrada del bronce; 5. se cubre
40 GACETA DE MUSEOS
Cuando la imagen se funde con las palabras a participar–, seleccionó como uno de los temas a difundir por este
En esencia, en una exposición temporal se exhiben objetos selecciona- medio la descripción del proceso de la cera perdida para la elaboración
dos con un criterio, articulados bajo un discurso, dispuestos según una de esculturas en bronce, de particular importancia porque numerosas
museografía, pero al fin y al cabo se trata de mostrarlos para que el esculturas producidas en otras épocas y sociedades tienen esta técnica
visitante los observe, aprecie, disfrute, comprenda y se los "apropie". de manufactura. La sencillez y claridad de las imágenes y del texto ex-
El problema surge cuando el discurso académico o museográfico tie- plican, de una manera efectiva, los pasos elementales de la técnica.
ne más peso que las obras exhibidas, por ejemplo, cuando los textos y Cabría anotar un par de sugerencias de carácter museográfico:
las cédulas temáticas abordan la historia o las características de una las cédulas electrónicas permiten incluir una banda sonora, recurso no
cultura pero no nos dicen cuál es el personaje representado en la escul- utilizado en la exhibición que hubiera posibilitado abundar sobre la im-
tura situada a un lado, o cuando nos impresiona la ambientación de portancia del bronce y explicar objetos como el de la imagen. Por otro
una tumba pero no percibimos las vasijas que componen la ofrenda lado, la altura en que están colocadas las cédulas –en la parte superior
de la misma. En estas situaciones los objetos pierden fuerza, se restan de las vitrinas donde los objetos se encuentran exhibidos– no permiten
las posibilidades de entenderlos y de apreciarlos. De allí la trascenden- una observación cómoda de las mismas. Se pensaría que ambas deci-
cia de todo cedulario de objeto que vaya más allá de la información siones –la ausencia de sonido y la ubicación elevada, en vez de abajo o
elemental sobre el título, el material y la época, y profundice en aspec- a un lado– respondieron a la intención de no “hacer un ruido” visual ni
tos como su proceso de elaboración, su uso o significado. auditivo en el discurso museográfico. Si éste fuera el caso, la pregunta
En el caso de Persia: fragmentos del paraíso, el cedulario electró- es: ¿por qué utilizar un recurso informativo tan caro, que será utilizado
nico –en pequeñas pantallas que transmiten imágenes y texto sobre de manera parcial y tendrá un lugar secundario? En este sentido, una
determinados objetos en exhibición– permitió, precisamente, brindar cédula portátil o un gráfico colocado en alguno de los muros hubiera
información que facilitara una mayor comprensión de las magníficas sido igual de efectivo –y mucho más barato ✣
colecciones provenientes de Irán. La curaduría e investigación de la
muestra, a cargo de Alejandra Gómez Colorado y Zahra Jafarmoha- Emilio Montemayor
mmadi –en cuyo equipo de colaboradores Pérez Taber fue invitado Antropólogo, GACETA DE MUSEOS
5 6 7 8
la figura con arcilla para crear un molde –al hornearse, la cera se evapora: de ahí el nombre de la técnica–; 6. se vierte el metal fundido en el molde; 7. se deja enfriar y se rompe
el molde para liberar la escultura de metal; 8. se retiran los conductos, se pule el metal y se graban los detalles en la pieza Explicación e ilustraciones Gerardo Pérez Taber
GACETA DE MUSEOS 41
Ideas d e i da y v u e lta : e l m at e r i a l e d u c at i v o d e l m e s
La
'Guía infantil'
del Museo Arocena
D esde su fase de formación, los que integramos el Departamento de Comunicación Edu-
cativa del Museo Arocena en Torreón, Coahuila, pensamos en desarrollar materiales que
satisficieran a los públicos, tanto infantil como adulto y joven.
Con este fin desarrollamos una amplia gama de actividades, como conferencias, ta-
lleres, ciclos de cine y publicaciones, de las que actualmente contamos con dos: la Guía
para Maestros y la Guía infantil.
Esta última fue diseñada con el propósito de ofrecer un apoyo durante la visita de los
niños a las salas del museo. Con un formato carta, impresa en papel cultural y a una tinta,
la publicación incluye actividades que permiten a los jóvenes visitantes conocer el con-
tenido de las salas de arte e historia de una manera divertida y didáctica, mediante un
recorrido alterno y actividades con algunos de los objetos exhibidos.
Por ejemplo, invitamos a los niños a descubrir las diferencias entre la pintura Escena en
una taberna, de la sala de arte europeo, y la que aparece en la guía, así como a pintar con
gises un retrato estilo rococó, similar al Retrato de joven situado en la misma sala. Otros
juegos son la "Sopa de letras" de arte virreinal, un crucigrama sobre Crónica de La Laguna
–que es otra de nuestra exposiciones– y un laberinto para ayudar a santa Catalina de Ale-
jandría a encontrar su palma y su libro.
Sobre los temas arqueológicos e históricos se presentan algunos vocablos mayas,
identificables por medio de imágenes, y se fomenta la imaginación al dibujar algunos de
los objetos con que Hernán Cortés se encontró tras su desembarco en el continente ame-
ricano, en el siglo xvi. La guía se complementa con los "Sabías que…", que incluyen datos
históricos sobre los temas de cada actividad, además de un glosario para fortalecer la
comprensión de los textos.
El número inaugural, el primero en su tipo en la región lagunera, tuvo una buena acep-
tación del público infantil, que realiza las actividades tanto en el salón de clases como en
las salas del museo, interactuando con los objetos.
Esta publicación didáctica se consigue en la taquilla por tres pesos, pero también se
inserta en los paquetes escolares, con el pago de la visita guiada.
Fabiola Favila Gallegos

Coordinadora de Comunicación Educativa, museo arocena
42 GACETA DE MUSEOS
El público más exigente
Para que una visita a cualquier museo interese al público infantil no sólo es menester conducirlo
por el recorrido preexistente de las salas, sino despertar, pausada y reposadamente, las activida-
des internas del sujeto: las que se generan al entrar en contacto con los fragmentos del pasado.
Las relaciones del público con los objetos expuestos deberían ir mas allá de la inercia
visual distraída; esa inercia que ha deteriorado y se ha impuesto sobre el otro tipo de aproxi-
maciones sensoriales y cognitivas hacia el acervo de los museos. Si estas modificaciones a la
percepción no se reconcen de facto ni se establecen de manera inmediata entre los niños, por
lo menos sería deseable entablar una vinculación entre los materiales didácticos –relativos a
las muestras– y las actividades de los visitantes.
Mediante un proyecto estructurado de comunicación lúdica, que incorpore tanto activi-
dades museísticas, consulta de impresos, folletería y el manejo de interactivos o cd rom, el
escolar procesará la información vertida en las salas museográficas de una manera más ama-
ble –menos obligatoria– y de mayor disfrute, pues la vinculación que haga con los objetos
devendrá conocimiento autónomo de sus experiencias y no impuesto ni dirigido por la gente
que trabaja en los museos. Mientras al joven se le abran mayores cauces de comunicación,
éste canalizará los conocimientos adquiridos a lo largo de los años en un imaginario que lo ubi-
que temporal y espacialmente dentro de las exhibiciones que visite.
Los investigadores de comunicación educativa del Museo Arocena han logrado la prime-
ra emisión periódica de una Guía infantil que retroalimenta las labores de extensión y difusión
del recinto, como talleres, conferencias y ciclos de cine. De esta publicación cabe destacar
el esfuerzo por integrar, en actividades y ejercicios, una parte de las colecciones expuestas,
y en ese sentido queda la expectativa de que los siguientes números sigan ofreciendo al pú-
blico novel alternativas para acercarse a las exposiciones, a la historia de los objetos y al
entorno cotidiano en que fueron creados.
La estructura de la guía resulta práctica, con espacios bien distribuidos en cuanto a conteni-
dos y actividades; esperamos que en un futuro crezca en extensión y que se amplíen los ejercicios
de observación, pues en algunos casos se quedan en la vista superficial, sin fomentar el gusto por
la contemplación. Por otra parte, casi al final hay un cedulario de las colecciones, pero sin puntos
de referencia que indiquen a qué pieza corresponden: valdría la pena aclarar desde el principio
que la lista está en la última página o poner la información como pie de objeto.
A reserva de una constante mejora de las secciones, sería deseable que en las próximas
entregas se incluyan los créditos de los autores, editores y diseñadores, además de que se
haga énfasis en el cuidado editorial y la revisión ortotipográfica, con el objetivo de fomentar en-
tre los niños el uso correcto de nuestro idioma, tanto hablado como escrito ✣
Carla Zurián
Historiadora, cnme-inah/GACETA DE MUSEOS
GACETA DE MUSEOS 43
Noticias y reseñas
‘La espada y la pluma’: las armas de Urquizo

En el marco de las actividades conmemorativas del centenario de
la Revolución mexicana, el Museo Casa de Carranza (Río Lerma 35,
colonia Juárez, ciudad de México) participa en las festividades con
la exposición temporal La espada y la pluma, que se inauguró el 27
de mayo y concluirá en septiembre de este año.
La temática es un homenaje a la vida y obra del general Fran-
cisco L. Urquizo, personaje estrechamente ligado a don Venustiano
Carranza y hombre de toda su confianza. El discurso de la exposición
sigue un orden cronológico con objetos y fotografías que ejemplifican
algunas batallas y hechos relevantes de la Revolución en los que Ur-
quizo participó. Entre las piezas más destacadas están el original del
Plan de Guadalupe, las balas extraídas de los cráneos del presiden-
te don Francisco I. Madero y el vicepresidente José María Pino Suá-
rez, y la ropa que portaba don Venustiano cuando lo asesinaron
–presumiblemente una piyama que le había prestado el general Ur-
quizo–. También hay una ambientación de su despacho, con la mesa
de trabajo y su silla, diplomas, cigarreras, plumas, condecoraciones
y medallas, como la Belisario Domínguez, así como fotografías de su
familia, de episodios de la Decena Trágica y de generales estadouni-
denses de la Segunda Guerra Mundial con dedicatorias para él, entre
otros objetos personales.
Urquizo nació en San Pedro de las Colonias, Coahuila, el 21de
junio de 1891. Realizó sus primeros estudios en su tierra natal y
posteriormente se trasladó a la ciudad de México, donde estudió una
carrera comercial en el liceo Fournier. A la edad de dieciocho años,
y después de leer el libro de Madero La sucesión presidencial en
El general Francisco L. Urquizo Fotografía Museo Casa de Carranza-inah 1910, decidió unirse al levantamiento armado en contra del gobier-
44 GACETA DE MUSEOS
no de Porfirio Díaz. Al triunfo del maderismo se incorporó a la guardia En España creó su más nutrida producción literaria, en la que
presidencial y participó en la llamada Decena Trágica, los días de lu- destacó tanto en la narrativa como en la crónica y, principalmen-
cha provocados por los porfiristas Victoriano Huerta, Bernardo Reyes te, en la novela, debido a que fue protagonista y testigo de calidad
y Félix Díaz, que culminaron con el encarcelamiento y asesinato del en varios hechos de la Revolución, con obras como Fui soldado
presidente y el vicepresidente. Estos sucesos derivaron en la usur- de levita, de ésos de caballería y Tropa vieja. Por eso fue llama-
pación del gobierno por parte de Huerta y en una nueva etapa de la do por Salvador Novo, de manera atinada, “el mejor novelista de
Revolución. El primero en levantarse en armas contra el gobierno la Revolución”.
usurpador fue don Venustiano Carranza, gobernador del estado de Hacia finales de los años treinta, el general Lázaro Cárdenas lo
Coahuila, con el Plan de Guadalupe, en el que se desconoció el go- invitó a regresar a nuestro país, y durante el gobierno de Manuel
bierno de Huerta, se creó el ejército constitucionalista y se nombró a Ávila Camacho fue elevado al rango de general de división. Poste-
Carranza como primer jefe. riormente encabezó la Secretaría de la Defensa Nacional. Abanderó
Francisco L. Urquizo se sumó al movimiento constitucionalista y al escuadrón 201 de la Fuerza Aérea Expedicionaria Mexicana, que
fue comandante de la escolta de don Venustiano. Después de pro- combatió con los aliados en el frente del Pacífico durante la Se-
mulgada la Constitución, en febrero de 1917, Carranza fue electo gunda Guerra Mundial.
presidente de la República. Su gobierno se caracterizó por la defen- La muerte del general Urquizo, en 1969, y el traslado de sus res-
sa del orden y la legalidad; sin embargo, se enfrentó al conflicto por tos a la ahora Rotonda de las Personas Ilustres fueron precedidos por
la sucesión presidencial. El general Álvaro Obregón, su brazo mili- el homenaje que en vida le rindió el Senado de la República, al confe-
tar, decidió participar en la contienda electoral, pero el presidente rirle la medalla Belisario Domínguez, que se entrega a los mexicanos
propuso a un candidato civilista: Ignacio Bonillas, motivo del des- que hacen un gran bien a la patria.
contento de Obregón, aunado a la proclamación del Plan de Agua Francisco L. Urquizo protagonizó un papel relevante en la his-
Prieta por Adolfo de la Huerta, en el que, a su vez, se desconocía el toria contemporánea de México por su contribución al impulso y la
gobierno carrancista. modernización del ejército y por su labor como hombre de letras,
Ante el conflicto, Carranza marchó por segunda vez a Veracruz, en la que dejó una huella imborrable. Escogió la vocación militar
donde establecería de nuevo su gobierno, acompañado, entre otros, para participar en cada batalla y escribir con el ideal que lo inspiró
por Urquizo, pero el 21 de mayo de 1920, a su paso por la ranchería de a unirse a Madero y Carranza para construir una patria justa, de-
Tlaxcalantongo, Puebla, donde pernoctaban, a los gritos de “¡Viva Pe- mocrática y libre ✣
láez!” y “¡Viva Obregón!” sus enemigos acabaron con su vida. Después Martha Vela Campos
de estos sucesos el general Urquizo salió hacia el exilio en Europa. Historiadora, cnme-inah
GACETA DE MUSEOS 45
Noticias y reseñas
Lírica inmarcesible
Persia en la eternidad recoge el trabajo realizado para el recorrido so-
noro de Persia: fragmentos del paraíso, a exhibirse hasta el 24 de junio
de 2007 en el Museo Nacional de Antropología. En veinte pistas el gru-
po La Giralda, acompañado de ejecutantes del kemanché, la fídula,
la chirimía, el gu xheng y los cornos, musicaliza pasajes literarios del
antiguo Irán. Los textos más arcaicos fueron grabados en español y
persa, en busca de encontrar la sonoridad de esta lengua en el periodo
preislámico. En el librillo que acompaña al cd los textos son ilustrados
con fragmentos de su escritura original. La inscripción protoelamita en
una copa de plata de 3000 aC da inicio al recorrido, antecediendo a la
escritura cuneiforme de la placa fundacional de Persépolis, con las pa-
labras que Darío, el Rey de Reyes, registró para la eternidad en el siglo
v aC. En escritura pahlevi hay un canto que invita a respetar la tierra
generosa y a seguir los preceptos de Zaratustra: buenos pensamientos,
buenas palabras y buenas obras. Las traducciones directas de poemas
de los siglos xi, xii y xiii fueron hechas por el vocalista Kaveh Parmas y el
laudista Manuel Mejía Armijo, que rescataron versos de los grandes es-
critores que han dado inmortalidad y universalidad a la literatura persa:
Omar Jayyam, Hafez, Rumi y Saadi. El recorrido finaliza con la narración
del “Pabellón blanco”, tomada de Las siete bellezas, el gran poema de
Nizami que cuenta las historias escuchadas por el sha Bahram en los
pabellones de sus siete princesas, cuyos colores reflejaban las virtudes
de las bellezas del imperio: el blanco fue destinado a la princesa per-
sa, la más pura entre las puras, que todos los viernes relataba al sha
su sensual historia ✣
Alejandra Gómez Colorado
Antropóloga, Cnme-inah/GACETA DE MUSEOS
46 GACETA DE MUSEOS
Las ‘Revelaciones’ de San Ildefonso
Entre los festejos por su XV aniversario, el Antiguo Colegio de San
Ildefonso, en el centro histórico de la ciudad de México, ofrece la
exposición internacional Las artes en América latina 1492-1820,
mejor conocida como Revelaciones, fruto de varios años de trabajo
del Museo de Arte de Filadelfia, en colaboración con el Museo de
Arte del Condado de Los Ángeles, ambos en Estados Unidos, y el
Antiguo Colegio de San Ildefonso, en custodia de la unam. Allí se
ofrece un mosaico del arte durante los virreinatos españoles y la co-
lonia portuguesa de Brasil, con cerca de doscientas cincuenta obras
procedentes de trece países de América: Argentina, Brasil, Bolivia,
Chile, Colombia, Cuba, Ecuador, Guatemala, México, Perú, Puerto
Rico, República Dominicana y Venezuela.
La exposición se encuentra agrupada en cinco salas, con los
siguientes núcleos temáticos: “Encuentros de materiales y pro-
cesos”, “Lugares debatidos”, “Tradiciones artísticas americanas”,
“Devociones para la vida y la muerte” y “Sociedades de individuos
diversos y variopintos”.
Revelaciones incluye una colección representativa de pinturas,
esculturas, relieves, retablos portátiles, cerámica, talavera poblana,
textiles, custodias, dalmáticas y casullas, así como algunos de los
magníficos óleos de los maestros Miguel Cabrera, Cristóbal de
Villalpando y Melchor Pérez de Holguín, que desvela las similitudes
y diferencias entre las actuales naciones latinoamericanas. Tras su
paso por el Distrito Federal la muestra viajará al Museo de Arte del
Condado de Los Ángeles ✣
Carlos González Cabello
Historiador Custodia, Lima, Perú, 1649 Fotografía Antiguo Colegio de San Ildefonso-unam
GACETA DE MUSEOS 47
ColaboracionesLa GACETA DE MUSEOS invita a la comunidad de trabajadores de museos y al público
en general a contribuir con la entrega de textos para sus diversas secciones:
Desde los museos y las exposiciones Sección de referencia de museos y exposiciones que incluye historia,
acervos y temáticas. Extensión: cinco cuartillas.
Colecciones y acervos Sección sobre documentación, investigación, restauración y conservación de objetos
o acervos de los museos. Extensión: tres cuartillas.
Comunicar y educar Sección que invita a la reflexión sobre la comunicación, difusión, promoción y servicios
educativos en los museos. Extensión: tres cuartillas.
Museos y exposiciones en proceso Sección sobre la planeación como un medio para asegurar la continuidad
del trabajo museístico. Se presentan los esfuerzos que actualmente se realizan. Extensión: cinco cuartillas.
De los públicos Presentación de análisis de los resultados de los estudios de público realizados en museos
o exposiciones. Extensión: cinco cuartillas.
Consultas y consejos Propuestas concretas sobre cómo efectuar actividades en conservación, comunicación
educativa, investigación, curaduría, administración y museografía. Extensión: de una a dos cuartillas.
Ideas de ida y vuelta Envío de propuestas de diseños y materiales para su revisión crítica en tres grandes
áreas: la vitrina del mes (museografía), la cédula del mes (cedularios) y el material educativo del mes (opciones
educativas). Extensión: una cuartilla.
Noticias y reseñas Difusión de exposiciones, actividades, publicaciones y programas. Extensión: una
cuartilla.
Foto del recuerdo Fotografía en contraportada que documente museografía, procesos de trabajo, públicos,
junto con un texto en el que se ubique la época y datos adicionales. Extensión: una cuartilla.
Los textos deben entregarse en archivo electrónico, formato Word. La extensión por cuartilla es de 1 960 caracteres
con espacios. Las imágenes propuestas pueden entregarse en diapositiva o negativo –que serán devueltos–, o bien,
en archivo digital a 300 dpi, formato jpeg o tiff, con dimensiones de 21.7 por 28 centímetros.
Contacto y envío de colaboraciones: [email protected] y gacetademuseos@yahoo.com.mx
48 GACETA DE MUSEOS
Foto del recuerdo
Fotografía Anónimo, col. particular
'El Palacio Azteca' en París

Ignacio Gutiérrez Ruvalcaba*
E l suceso cultural más importante en el que se involucró nuestro país durante el siglo xix, o al menos
hasta esas alturas del porfiriato, fue la Exposición universal de París de 1889, en el contexto de la cele-
bración del centenario de la toma de La Bastilla. La presencia mexicana en Europa puso en evidencia el
apego de los políticos, funcionarios e intelectuales porfiristas, es decir, de la élite nacional, por Francia y
su cultura. El pabellón de México, bautizado como el Palacio Azteca y diseñado por los arquitectos Vicen-
te Reyes y José María Alva, dirigidos por el ingeniero Luis Salazar, aspiraba a constituirse en una síntesis
histórica y etnográfica de nuestro pasado prehispánico y de los pueblos indígenas. La edificación, sobre
todo en la fachada, reunía elementos de la cultura azteca y diseños arquitectónicos de Mitla, ciudad zapo-
teca-mixteca del valle de Oaxaca, y de las antiguas urbes mayas de Yucatán, como parte de un discurso
ideológico en el que orden y progreso quedaban de manifiesto en los contenidos exhibidos en su interior.
Tal exotismo, sustentado en la tradición, fue el polo atractor en medio de un foro universal de las cultu-
ras –hoy día de particular vigencia en Monterrey, Nuevo León– cuyos prodigios fueron encabezados por
la inauguración de la torre Eiffel, actualmente nominada a nueva maravilla del mundo pero en sus tiem-
pos aborrecida por celebridades como Alexandre Dumas hijo y Guy de Maupassant, que el 14 de febrero
de 1887 publicaron un manifiesto contra su construcción en el parisiense Le Temps, donde la calificaron,
entre otros epítetos, como "inútil y monstruosa". En la sección de documentos manuscritos de la Bibliote-
ca Nacional de Antropología e Historia existe un álbum con veintiséis fotografías –incluida la que aquí se
publica– titulado México en París, con la siguiente dedicatoria: "Al eminente estadista Sr. Lic. Dn. Ignacio
Mariscal. Secretario de Estado y del despacho de Relaciones Exteriores. Con los homenajes de la afectuo-
sa admiración de Gilberto Crespo y Martínez. Julio 31 de 1894" ✣
* Investigador independiente
Foto del recuerdo
GACETA DE MUSEOS
'El Palacio Azteca' en París (1889)
anónimo, col. particular
Instituto Nacional Consejo Nacional

de Antropología para la
e Historia Cultura y las Artes

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T e r c e r a é p o c a J u n i o - S e p t i e m b r e 2007 N ú m e r o 41

Soto Soria, museógrafo

Con­se­jo Na­cio­nal pa­ra la Cul­tu­ra y las Ar­tes Comité editorial

Coor­di­na­ción Na­cio­nal de Mu­seos y Ex­po­si­cio­nes Diseño original

Por­ta­da Antonio Garduño, Nahui Olin como la Venus Calípiga,

Instituto Nacional Consejo Nacional

04 La musicalización de 'Persia: fragmentos del paraíso'

14 Las urnas zapotecas de Monte Albán

18 Recursos didácticos en Uruguay

20 Amor divino: Nahui Olin y el Dr. Atl

30 Museos de historia natural y medio ambiente

32 La museografía según Alfonso Soto Soria

38 La vitrina del mes: Reciclado museográfico

El edén y otros idilios

Trompa retráctil Fotografía Gliserio Castañeda GACETA DE MUSEOS 05

Leer a los antiguos

Una nueva propuesta museística en

Socorro C. de la Vega Doria*

Artistas mexicanas en ´la Ciudad de los Vientos´

* un lado de él, como lo hizo de alguna manera Tina Modotti en su sober-

que sería tu llamada. Botas, México, 1950, págs. 98-156.

Señor, tengo el cuerpo cubierto de llagas, pero sólo destruyen mi mate-

En una de sus últimas cartas se advierte una sombría despedida:

exprimió el dolor de mi martirio te ofrecí y las gotas de sangre que ma-

E n el número 39 de la GACETA DE MU-

seguridad –desde 1993 el río Rin se ha

la cultura y el arte desarrollarán en el visi-

* Corresponsal en Europa de la GACETA DE

pero con enfoques novedosos de la peda-

consecuencias de la vida contemporánea? En nuestro quehacer cotidiano hemos encontrado [email protected]

Alfonso Soto Soria

Definición de objetivos –local, regional, nacional o internacional–,

Cuando ya se conocen estos recursos, En este momento estoy interviniendo

Resultado de la aplicación del sistema modular

Sabrina Farías Pelayo y Edmundo Saavedra

Fabiola Favila Gallegos

‘La espada y la pluma’: las armas de Urquizo

Contacto y en­vío de co­la­bo­ra­cio­nes: [email protected] y ga­ce­ta­de­mu­seos­@ya­hoo­.com.mx

Fotografía Anónimo, col. particular

'El Palacio Azteca' en París

Instituto Nacional Consejo Nacional

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