Peticiones - Camino Hacia Las Promesas
Peticiones - Camino Hacia Las Promesas
Peticiones - Camino Hacia Las Promesas
Las Promesas constituyen un área de competencia clave para asegurar buen trabajo en equipo. A través de nuestra
capacidad de hacer promesas transformamos el futuro. Las promesas nos permiten, literalmente, construir pirámides,
llegar a la luna, mover montañas, construir familias, crear empresas. Alguien que, sistemáticamente, no cumple sus
promesas desarrollará relaciones sociales precarias con los demás y comprometerá la confianza que estos tengan en él.
Las promesas representan unos de los elementos claves en la conformación de nuestra identidad pública, en la manera
como somos vistos y apreciados por los demás. Dos factores intervienen en esta relación entre promesas e identidad
pública:
1. El poder de las promesas que seamos capaces de hacer, Prometer acciones menores, construimos una identidad
débil, si nuestras promesas responden a inquietudes vitales, generamos una identidad poderosa. En el proceso
educativo su objetivo es expandir la capacidad de los individuos de ejecutar acciones que los lleven a hacer
promesas más poderosas.
2. La IMPECABILIDAD con la que tratamos nuestras promesas, es decir, ser competente en el arte de hacer y cumplir
promesas y en responder por ellas. Ello determinará, en mayor o menor grado, nuestra impecabilidad y la
identidad que de nosotros tengan los demás.
Quién sea incompetente en hacer promesas no sólo compromete su efectividad, también sacrifica su bienestar, la
satisfacción que obtiene de lo que hace y el aprecio de los demás.
Hablaremos de promesa sólo para referirnos aquellas que involucren al menos dos persona. Sólo tendremos promesa si
al declarar la primera persona su intención de prometer, podemos simultáneamente afirmar que esa declaración fue
aceptada, implícita o implícitamente, por la otra persona.
En las peticiones la
acción futura eventual En las ofertas la
que conformará la acción futura a realizar
promesa recaerá en la recaerá en quien hace
persona que escucha la oferta y no en quién
la petición y no en el escucha
que pide
Lo anterior determina quién será el PROVEEDOR y quien será el USUARIO-CLIENTE de concretarse la promesa.
Pedir o no pedir, ¡esa es la cuestión!
Saber pedir ayuda, es una competencia crucial en nuestras vidas. Saber pedir es la base de COORDINAR ACCIONES con
otros y de generar relaciones sociales. Quien no sabe pedir suele desarrollar una tendencia no sólo a la autosuficiencia,
sino muchas veces también al aislamiento. La competencia de pedir se distribuye desigualmente en distintos dominios de
mi vida. Hay quienes no tienen problema en pedirles cualquier cosa a determinadas personas, pero se congelan cuando
se trata de pedirles a otros. Una pregunta fundamental, por lo tanto, es ¿Dónde observo dificultades para pedir? Y luego,
enseguida, ¿cuál es el carácter de mis dificultades?, ¿qué me frena?
Para que se justifique pedir debemos tener el juicio de que algo falta, una necesidad, una inquietud.
No todo lo que falta lo pedimos. Pedimos sólo aquello que nos interesa
Cuando algo que rompe nuestra transparencia en el fluir de la vida.
Algo que no acontecerá en el curso normal de los eventos
Algo que es posible generarlo
Algo que nosotros no podemos o no queremos hacerlo
Descubrirán que no sé. Pedir es una herramienta que nos permite, entre otras cosas, hacernos cargos de aquello
que no sabemos
Muestro que soy vulnerable. Pedir es hacernos cargo de nuestra vulnerabilidad.
Quedo comprometido. Los seres humanos no podemos recluirnos en nuestra plena autonomía, el pedir resulta
una herramienta importante
Voy a molestar, ¿Quién soy yo para pedir esto a? Se esconde un problema de dignidad, le estoy confiriendo al
otro un valor superior al que me confiero yo mismo.
Me van a decir que no, sospecho que me pueden decir que no, si me dicen que no, me estarían rechazando. El
pedir, se funda en el respeto por el otro, por lo tanto, en la aceptación de su legítimo derecho de negarse
Algunas preguntas claves frente a juicios que bloquean el pedir son las siguientes:
EJEMPLO
Necesito el informe sobre Campex para el jueves
-¡Alguien dejó la puerta abierta!
¡Este cheque espera la firma!
¿Puedes hacerte cargo de conversar con Alfredo?
Las anteriores son todas expresiones que muchas veces utilizamos creyendo estar haciendo una petición y que encierran
un alto grado de ambigüedad en quien la escucha. La primera es en rigor una declaración sobre la necesidad que tengo
de disponer del informe, la segunda afirma que alguien ha dejado la puerta abierta, la tercera apunta que algo le falta al
cheque y la cuarta pregunta si puedo conversar con Alfredo pero no pido que lo haga. En rigor, ninguna pide con claridad
la acción que cree estar pidiendo. Por lo tanto el aprendizaje es eliminar la ambigüedad haciendo que la petición está
claramente contenida en lo que se dice y no descansa en que ella tenga que ser producida en el escuchar del otro.
Quien habla
Acción futura
Quien escucha
Claridad sobre quien Toda inquietud es un Condiciones de satisfacción
Algo que falta espacio interpretativo
pide. Promete ejecutar la Un trasfondo
Distinguir la inquietud compartido de
Implica un compromiso acción. Sólo pedimos cuando del cliente (el juicio de
entre dos personas Establecer con obviedad
Identificar a quien juzgamos que algo que algo falta) de la claridad las
que entran en pedimos falta. acción pedida. condiciones que lo Nunca podemos
Coordina- La petición sea clara en dejarán satisfecho al
Carácter generativo y especificarlo todo.
ción de Acciones especificar las acciones término del proceso
transformador que concretas que está de cumplimiento de la Compartir un trasfondo
tienen las peticiones pidiendo promesa que el hablar no
explicita
Tiempo
Emocionalidad
Toda petición
La confianza
requiere Una misma
especificar su petición efectuada
tiempo de Para aceptar una
desde promesa tenemos
cumplimiento emocionalidades que confiar en
diferentes puede quien promete.
concitar muy
distintas Sin confianza el
respuestas prometer pierde
todo sentido
Te pido
Te solicito
Te sugiero
Te recomiendo Se hace cargo el otro
Te aconsejo
Te ruego
Te imploro Amplio espacio para para que el otro diga que no
Te suplico
Te invito Requiere la presencia
Te exijo
Te ordeno El espacio para decir no se reduce
Te exhorto
Demando Pública
El contexto
El sentido de todo hablar está fuertemente influenciado por el contexto dentro del cual se habla. Las mismas palabras
pueden tener significados muy distintos dependiendo del contexto dentro del cual se emiten. Por ejemplo el decir “Yo te
sugiero que hagas…” puede ser expresivo de un gran respeto por el otro, como puede acompañar una amenaza a su
integridad de no hacer lo que le indicó. Cuando no disponemos del contexto desde el cual hablamos tenemos alto riesgo
de malinterpretar lo dicho.
El problema principal con una declaración ambigua consiste precisamente en que probablemente tomaremos acciones e
iniciaremos compromisos contando con un cumplimiento que, en el momento que recurramos a él, descubriremos que
no se ha realizado. Los daños que resultan de situaciones como éstas son significativos en términos de productividad,
bienestar e identidad. De allí que sostengamos que es preferible contar oportunamente con un “no” que confiar en un
“si” que posteriormente se esfumará.
Se me
parte el Que irá a
alma si pensar
digo no
Quien soy
para decir
no