Uso Responsable Del Agua - Final

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Uso responsable del agua

El agua es un bien escaso y valioso


Es nuestra obligación utilizarla de forma racional y responsable.

¿Sólo el 2,8% del agua del planeta esdulce?


¡Sí! Además, si esta cantidad ya es reducida, el agua
que podemos utilizar de ríos y lagos apenas llega al 0,01%.
Se ha de pensar en el agua como un bien escaso necesario para
todas las personas que no podemos
malgastar, ni degradar.

En estas páginas veremos


numerosas formas de usar el
agua en nuestra vida
cotidiana, de manera
responsable.

Agua para vivir


El agua es la base de la vida en el planeta, de manera que nuestra calidad
de vida y la salud de los ecosistemas naturales dependen directamente de
la calidad del agua.

Un agua de buena calidad beneficia al medio ambiente y protege la salud


de las personas y del resto de seres vivos.

Por el contrario, la mala calidad del agua propaga enfermedades y daña a la


naturaleza.

Desgraciadamente, más de 2.500 millones de personas en el mundo viven


en comunidades que carecen de un sistema adecuado de saneamiento. Ser
solidario con esas comunidades es una labor humanitaria importante.
USO RESPONSABLE DEL AGUA

La calidad del agua


De la calidad del agua depende la salud de los ecosistemas y de las
personas

. Sin embargo, en los países en desarrollo la calidad se ve cada vez más


amenazada. Más del 90% de los residuos urbanos y del 70% de los
desechos industriales se vierten sin tratar ni procesar directamente en las
aguas de los ríos.

Esto ocasiona numerosos efectos negativos, como:


• Brotes de enfermedades gastrointestinales y posible
muerte. Especialmente entre las personas
vulnerables (niños y niñas, personas enfermas y
ancianas).

• Proliferación perjudicial de algas y bajo nivel de oxígeno en los


ríos.

• Acumulación de productos químicos


contaminantes en los ecosistemas y en la cadena
alimentaria.

• Cambios en la diversidad biológica y desaparición de


especies.

• Cierre de playas, restricciones a la navegación recreativa y


efectos en otras utilizaciones del agua.
¿Qué pueden hacer las instituciones para proteger la
calidad del agua?
Además de las medidas de prevención y control del vertido de
contaminantes, las instituciones han de establecer leyes y normas
que regulen el proceso de captación y suministro de las aguas
potables.

También tienen que promover leyes y normas que regulen la

depuración y tratamiento de las aguas residuales.

Es importante proteger los humedales naturales. Su efecto es


beneficioso para la calidad del agua y la vida de animales

y plantas. Y es necesario proteger los cinturones ecológicos y las


franjas ribereñas de ríos y lagos.

Tienen que colaborar con los sectores industrial y agrícola

para desarrollar buenas prácticas ambientales que protejan el


recurso agua.
USO RESPONSABLE DEL AGUA

Y yo...…¿Cómo puedo hacer un uso responsable del


agua en mi vida cotidiana?
Tengo en cuenta y llevo a cabo en lo posible estos consejos:

1. Utilizo la lavadora y el lavaplatos solo cuando están llenos. Y


activo preferentemente los programas cortos.

2. Uso el agua de la cisterna del váter solo por necesidad. Utilizo el


pulsador de descarga pequeña. De no contar con el sistema de doble
pulsador, coloco dentro una botella llena de agua. Por supuesto, no
tiro restos de comida, ni basuras por el váter. El WC no es un
basurero.

3. Me ducho en lugar de bañarme. Con una ducha diaria por debajo


de los 5 minutos puede valer para asearnos. Si he de usar la bañera,
no la lleno por completo, con ¼ de su capacidad puede ser
suficiente.

4. Coloco difusores de agua en los grifos y duchas. Con estos


aparatos reduzco mucho mi consumo. Como alternativa, cierro un
poco la llave de paso para reducir el caudal. Utilizo grifos
monomando para controlar la temperatura. Así, cada vez que abro el
grifo, no tengo que volver a regular la temperatura.

5. Uso detergentes ecológicos. De este modo, el agua que utilizo se


podrá depurar más fácilmente.

6. Cierro los grifos mientras me afeito, me lavo los dientes, las


manos, lavo los platos, limpio la comida, me ducho.

7. Si tengo jardín, evito plantar especies que consumen mucha agua.


Riego al amanecer o al anochecer, para evitar la evaporación del
agua.

8. Si limpio la acera de mi casa, utilizo escobones en lugar de


mangueras. Si tengo coche y lo lavo a mano, utilizo cubos para
reducir el gasto. Reduzco el uso de la manguera al mínimo
imprescindible.

9. Vigilo el estado de las cañerías, los sanitarios y la grifería de la casa


para evitar fugas de agua. Arreglo cuanto antes las averías.

10. Pienso en el agua como un recurso social y medioambiental de


suma importancia. Como Patrimonio de la Naturaleza que debo
cuidar en todo momento.
Cambio climático ¿Cómo afecta a la calidad
del agua?
La alteración climática está vinculada a cambios
experimentados por el ciclo del agua a gran escala.

El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el


Cambio Climático (IPCC), así lo afirma en sus estudios e
informes.

Las estimaciones realizadas para el siglo XXI pronostican


un cambio en el régimen de precipitaciones, cuya
intensidad y variabilidad crecientes agravarán el riesgo
de inundaciones y sequías en numerosas áreas.

También se estiman otros efectos como la disminución


de glaciares y capas de nieve, cambios en la circulación
oceánica, en la humedad del suelo, etc.

Toda esta alteración climática afectaría a la calidad del


agua y agudizaría la polución del agua por múltiples
causas: acumulación de sedimentos, nutrientes,
carbono orgánico disuelto, patógenos, plaguicidas,
polución térmica,… Crearía posibles efectos negativos
sobre los ecosistemas y la salud humana.

A su vez, los cambios de la cantidad y calidad del agua


por efecto del cambio climático afectarían a la
disponibilidad, la estabilidad, la accesibilidad y la
utilización de los alimentos.

Y los fenómenos extremos (sequías, inundaciones, etc.)


disminuyen de la capacidad de los ecosistemas para
diluir el agua contaminada y mantener el equilibrio de la
naturaleza.
USO RESPONSABLE DEL AGUA

El agua en la industria
El agua es utilizada por la industria de muchas maneras:
para limpiar, para enfriar, para reaccionar
químicamente, para formar parte del producto, etc.

Por ejemplo: para fabricar un automóvil se necesitan


400.000 litros de agua. Para fabricar una bobina de
1.000 kilos de papel blanco se necesitan 100.000 litros.
Más del 10% de esa agua queda después muy
contaminada, si no se aplican prácticas de prevención y
tratamiento de esa contaminación.
Los países más ricos utilizan el 58% de su agua en la
industria. Los países más pobres sólo dedican el 8%. Apenas
tienen industrias

El agua es un derecho humano


En el año 2010, la Asamblea General de las
Naciones Unidas reconoció el derecho humano al
agua y al saneamiento. También reconoció que el
agua potable y el saneamiento son esenciales para
la realización de todos los derechos humanos.

Asimismo, esté derecho se recoge en los Objetivos


de Desarrollo del Milenio de la propia ONU que es
su “hoja de ruta” para el desarrollo humano en este
principio de siglo.

El Agua es el bien más básico de la humanidad.


Aproximadamente 20 de cada 100 personas del
planeta, no disponen de suficiente agua potable
para cubrir sus necesidades mínimas.

En ocasiones, las personas que habitan una región


seca, han de caminar grandes distancias para tener
acceso al agua. Pero a menudo el mayor problema
es la falta de infraestructuras para captarla,
almacenarla y distribuirla.
USO RESPONSABLE DEL AGUA

¿Cuánta agua necesitamos las personas?


Hoy en día hay más de 7.000 millones de personas que alimentar en el
planeta. Se prevé que habrá 9.000 millones para el año 2050.

Las estadísticas indican que las personas bebemos de 2 a 4 litros de agua al


día.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera 50 l/hab-día la cantidad


adecuada de agua para consumo humano básico: beber, cocinar, higiene
personal y limpieza del hogar.

Si le sumamos el agua necesaria para la agricultura, la industria y la


conservación de los ecosistemas dependientes del agua dulce, tenemos una
cantidad mínima de 100 l/hab-día.

Los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística ( señalan que el


consumo de agua en los hogares vascos se situó en los 117 litros/hab/día,
disminuyendo un 4,1 % en comparación con 2010.

Pero ignoramos que la mayor parte del agua que ‘bebemos’ está incorporada
en los alimentos que consumimos. Producir 1 kilo de carne de vacuno, por
ejemplo, consume 15.000 litros de agua y 1 kilo de trigo, para poder elaborar
pan, pasta o cereales del desayuno ‘bebe’ 1.500 litros de agua.

Yo quiero contribuir con las siguientes medidas


porque mil millones de personas en el mundo viven en
condiciones de hambre crónica

y los recursos hídricos sufren presiones:

• Consumo productos que hacen un uso menos intensivo


de agua.

• Reduzco el desperdicio de alimentos y evito que el agua


utilizada para producirlos se pierda y se degrade
innecesariamente.

• Si soy agricultor, utilizo buenas prácticas agroambientales,


con sistemas de riego eficientes.

• Llevo una alimentación saludable

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