Obra de Hernan Cortes
Obra de Hernan Cortes
Obra de Hernan Cortes
Retrato de Hernán Cortés basado en el enviado por el conquistador a Paulo Giovio, que
sirvió de modelo a muchas de sus representaciones desde el siglo XVI.
Lealtad España
Nacimiento 1485
Medellín, Corona de Castilla
Firma
Fue hijo único de un hidalgo extremeño, llamado Martín Cortés y de su esposa Catalina
Pizarro y Altamirano. Hernán Cortés era pariente lejano de Francisco Pizarro, quien
posteriormente conquistó el Imperio inca.[2] Como otros hidalgos, su padre lo envió a
los catorce años a estudiar leyes en Salamanca, ciudad que abandonó dos años más
tarde, movido por su afán de aventuras. Estos estudios preparatorios y los
conocimientos prácticos de la ley que granjeó en su aprendizaje con un escribano en
Valladolid han dado pie al mito de que Cortés cursó leyes en la Universidad de
Salamanca.[3]
Tras varios intentos fallidos, por una parte de embarcar para las Indias, y, por otra, de
participar en las campañas de Gonzalo Fernández de Córdoba en Italia, finalmente, en
la primavera de 1504, zarpó hacia la isla de La Española, donde se instaló como
plantador y funcionario colonial. Sin embargo, debió regresar a España, pues el 29 de
agosto de 1506 su padre abonó el importe de su pasaje a Santo Domingo en la nao San
Juan Bautista, propiedad de Luis Fernández Alfaro.[4]
Matrimonios y descendencia
Copia de un retrato de Hernán Cortés realizada en el siglo XIX por el pintor mexicano José Salomé
Pina. Museo del Prado, Madrid.
Catalina Pizarro, nacida en 1514 o 1515 en Santiago de Cuba, o quizás más tarde en la Nueva
España. Su madre fue Leonor Pizarro, probable pariente de Cortés. Fue legitimada junto con
sus hermanos Martín y Luis en una bula papal de Clemente VII en 1529.
Martín Cortés Malintzin, nacido en Coyoacán en 1522. Su madre fue la Malinche, la compañera
y traductora indígena de Cortés. Fue legitimado junto con sus hermanos Catalina y Luis en una
bula papal de Clemente VII en 1529.
Luis Cortés, nacido en 1525, hijo de la española Antonia o Elvira Hermosillo, y quien también
será legitimado junto con Martín y Catalina. Se casó con Guiomar Vázquez de Escobar, sobrina
del conquistador Bernardino Vázquez de Tapia.
Leonor Cortés y Moctezuma, nacida en 1528 en la Ciudad de México. Era hija de Tecuichpo o
Ichcaxóchitl, quien fuera bautizada con el nombre de doña Isabel de Moctezuma, a su vez hija
de Moctezuma II Xocoyotzin. Rechazada por su madre desde el nacimiento, fue su padre quien
la reconoció posteriormente. Se casó con el vasco Juan de Tolosa, conquistador de Zacatecas.
María Cortés, hija de una princesa mexica cuyo nombre se ignora. Bernal Díaz del
Castillo menciona que nació con alguna deformación.
En abril de 1528[7] Cortés contrae segundas nupcias con Juana Ramírez de Arellano y
Zúñiga, hija del I conde de Aguilar y sobrina materna del I duque de Béjar. Juana se
establece en el pueblo de Cuernavaca, viviendo en el palacio construido en 1526.[8] De
este matrimonio nacieron seis hijos:
Luis Cortés y Ramírez de Arellano, nacido en Texcoco en 1530 y fallecido poco después de
nacer.
Catalina Cortés de Zúñiga, nacida en Cuernavaca en 1531 y fallecida poco después de nacer.
Martín Cortés y Ramírez de Arellano, nacido en Cuernavaca en 1532. Sucesor de su padre
como II marqués del Valle de Oaxaca.
María Cortés de Zúñiga, nacida en Cuernavaca entre 1533 y 1536. Su padre había pactado su
casamiento con Álvar Pérez Osorio, hijo del IV marqués de Astorga, sin embargo, estos
cancelaron en el último momento, causándole un grave enfado a Cortés, del que incluso se
presume le causó la enfermedad de la que muere. Después María se casó con Luis Fernández
de Quiñones y Pimentel, V conde de Luna.
Catalina Cortés de Zúñiga, nacida en Cuernavaca entre 1533 y 1536. Fallecida soltera en
Sevilla después de morir su padre.
Juana Cortés de Zúñiga, nacida en Cuernavaca entre 1533 y 1536. Se casó en 1564 con
Fernando Enríquez de Ribera, II duque de Alcalá.
Carrera militar
Cuba
En 1511 participó en la expedición de conquista de Cuba dirigida por el
gobernador Diego de Velázquez, de quien recibió tierras y esclavos [9][10] en la isla.
Llegó a ser nombrado alcalde de Santiago de Cuba, aunque fue después encarcelado
por el gobernador, acusado de conspirar en su contra. Liberado, se casó con la cuñada
del propio Diego Velázquez, de nombre Catalina Juárez.
A finales de 1518 Velázquez le confió el mando de la tercera expedición, tras las
de Francisco Hernández de Córdoba y Juan de Grijalva, para continuar sus
descubrimientos en la costa de Yucatán. Pero Velázquez pronto desconfió de él.
Cuenta Bernal Díaz del Castillo, autor de Historia verdadera de la conquista de la Nueva
España, que un bufón de Velázquez, llamado Cervantes el loco, le dijo a su señor, a la
manera de los bufones: «A la gala de mi amo Diego, Diego, ¿qué capitán has elegido?
Que es de Medellín de Extremadura, capitán de gran. Más temo, Diego, no se te alce
con la armada, que le juzgo por muy gran varón en sus cosas».
Hernán Cortés seguía, sin embargo, con los preparativos de la expedición y pronto
logró reclutar a más de 600 hombres
Fue hijo único de un hidalgo extremeño, llamado Martín Cortés y de su esposa Catalina
Pizarro y Altamirano. Hernán Cortés era pariente lejano de Francisco Pizarro, quien
posteriormente conquistó el Imperio inca.[2] Como otros hidalgos, su padre lo envió a
los catorce años a estudiar leyes en Salamanca, ciudad que abandonó dos años más
tarde, movido por su afán de aventuras. Estos estudios preparatorios y los
conocimientos prácticos de la ley que granjeó en su aprendizaje con un escribano en
Valladolid han dado pie al mito de que Cortés cursó leyes en la Universidad de
Salamanca.[3]
Tras varios intentos fallidos, por una parte de embarcar para las Indias, y, por otra, de
participar en las campañas de Gonzalo Fernández de Córdoba en Italia, finalmente, en
la primavera de 1504, zarpó hacia la isla de La Española, donde se instaló como
plantador y funcionario colonial. Sin embargo, debió regresar a España, pues el 29 de
agosto de 1506 su padre abonó el importe de su pasaje a Santo Domingo en la nao San
Juan Bautista, propiedad de Luis Fernández Alfaro.[4]
Matrimonios y descendencia
Hernán Cortés se casó dos veces y tuvo once hijos documentados en seis relaciones
diferentes. Su primera esposa, doña Catalina Suárez Marcaida, murió tras cinco años
de estéril matrimonio el 1 de noviembre de 1522, bajo misteriosas circunstancias.[5]
Previamente y durante este enlace, Cortés tuvo cinco hijos extramatrimoniales:[6]
Copia de un retrato de Hernán Cortés realizada en el siglo XIX por el pintor mexicano José Salomé
Pina. Museo del Prado, Madrid.
Catalina Pizarro, nacida en 1514 o 1515 en Santiago de Cuba, o quizás más tarde en la Nueva
España. Su madre fue Leonor Pizarro, probable pariente de Cortés. Fue legitimada junto con
sus hermanos Martín y Luis en una bula papal de Clemente VII en 1529.
Martín Cortés Malintzin, nacido en Coyoacán en 1522. Su madre fue la Malinche, la compañera
y traductora indígena de Cortés. Fue legitimado junto con sus hermanos Catalina y Luis en una
bula papal de Clemente VII en 1529.
Luis Cortés, nacido en 1525, hijo de la española Antonia o Elvira Hermosillo, y quien también
será legitimado junto con Martín y Catalina. Se casó con Guiomar Vázquez de Escobar, sobrina
del conquistador Bernardino Vázquez de Tapia.
Leonor Cortés y Moctezuma, nacida en 1528 en la Ciudad de México. Era hija de Tecuichpo o
Ichcaxóchitl, quien fuera bautizada con el nombre de doña Isabel de Moctezuma, a su vez hija
de Moctezuma II Xocoyotzin. Rechazada por su madre desde el nacimiento, fue su padre quien
la reconoció posteriormente. Se casó con el vasco Juan de Tolosa, conquistador de Zacatecas.
María Cortés, hija de una princesa mexica cuyo nombre se ignora. Bernal Díaz del
Castillo menciona que nació con alguna deformación.
En abril de 1528[7] Cortés contrae segundas nupcias con Juana Ramírez de Arellano y
Zúñiga, hija del I conde de Aguilar y sobrina materna del I duque de Béjar. Juana se
establece en el pueblo de Cuernavaca, viviendo en el palacio construido en 1526.[8] De
este matrimonio nacieron seis hijos:
Luis Cortés y Ramírez de Arellano, nacido en Texcoco en 1530 y fallecido poco después de
nacer.
Catalina Cortés de Zúñiga, nacida en Cuernavaca en 1531 y fallecida poco después de nacer.
Martín Cortés y Ramírez de Arellano, nacido en Cuernavaca en 1532. Sucesor de su padre
como II marqués del Valle de Oaxaca.
María Cortés de Zúñiga, nacida en Cuernavaca entre 1533 y 1536. Su padre había pactado su
casamiento con Álvar Pérez Osorio, hijo del IV marqués de Astorga, sin embargo, estos
cancelaron en el último momento, causándole un grave enfado a Cortés, del que incluso se
presume le causó la enfermedad de la que muere. Después María se casó con Luis Fernández
de Quiñones y Pimentel, V conde de Luna.
Catalina Cortés de Zúñiga, nacida en Cuernavaca entre 1533 y 1536. Fallecida soltera en
Sevilla después de morir su padre.
Juana Cortés de Zúñiga, nacida en Cuernavaca entre 1533 y 1536. Se casó en 1564 con
Fernando Enríquez de Ribera, II duque de Alcalá.
Carrera militar
Cuba
En 1511 participó en la expedición de conquista de Cuba dirigida por el
gobernador Diego de Velázquez, de quien recibió tierras y esclavos [9][10] en la isla.
Llegó a ser nombrado alcalde de Santiago de Cuba, aunque fue después encarcelado
por el gobernador, acusado de conspirar en su contra. Liberado, se casó con la cuñada
del propio Diego Velázquez, de nombre Catalina Juárez.
A finales de 1518 Velázquez le confió el mando de la tercera expedición, tras las
de Francisco Hernández de Córdoba y Juan de Grijalva, para continuar sus
descubrimientos en la costa de Yucatán. Pero Velázquez pronto desconfió de él.
Cuenta Bernal Díaz del Castillo, autor de Historia verdadera de la conquista de la Nueva
España, que un bufón de Velázquez, llamado Cervantes el loco, le dijo a su señor, a la
manera de los bufones: «A la gala de mi amo Diego, Diego, ¿qué capitán has elegido?
Que es de Medellín de Extremadura, capitán de gran. Más temo, Diego, no se te alce
con la armada, que le juzgo por muy gran varón en sus cosas».
Hernán Cortés seguía, sin embargo, con los preparativos de la expedición y pronto
logró reclutar a más de 600 hombres