Deuda Subordinada
Deuda Subordinada
Deuda Subordinada
y servicios especiales que brindan las instituciones financieras que están dentro de sus
La deuda subordinada es un bono idéntico a los bonos simples, pero la diferencia está en
su "prelación de cobro", ya que, en caso de liquidación, el cobro de esos bonos por parte
de sus tenedores está "subordinado” a que el resto de los acreedores comunes haya
cobrado su deuda. Si la deuda subordinada tiene la categoría de 'especial' puede llegar a
ser perpetua y en este caso, si el emisor incurre en pérdidas contables el pago de los
intereses se difieren (acumulativos) o se pierden (no acumulativos). El emisor puede
incluso poder absorber toda la deuda en caso de haber agotado las reservas y los recursos
asimilables al capital (como por ejemplo las participaciones preferentes), es decir: un
inversor en este tipo de producto puede llegar a perder el 100% de lo invertido. Es
importante pues conocer si la deuda subordinada es 'no especial' o 'especial' y en éste
último caso si es 'acumulativa' o 'no acumulativa'.
La liquidez
Hay un punto interesante a tener en cuenta antes de invertir en un instrumento como este:
su liquidez. Si bien en los folletos explicativos se establece que se puede vender cuando uno
quiera en los distintos mercados, y es probable que asi suceda ya que no hay ningún
impedimento legal para ello, hay que saber que en cualquier operación de compra-venta
de títulos siempre hay dos partes: el comprador y el vendedor. En el caso que la entidad
presente problemas financieros: ¿aparecerán los supuestos compradores sabiendo que si
quiebra la sociedad ellos no tienen la seguridad de participar en su liquidación?
Pero el problema de liquidez no aparece solo en los casos de dudosa solvencia de la entidad.
Los bonos cotizarán en un mercado secundario, es decir, si un particular decidiese deshacer
su inversión antes del plazo de vencimiento, podría hacerlo, pero exponiéndose a no
recuperar la totalidad de su inversión.
Fiscalidad
En cuanto al régimen fiscal, es el mismo que el de cualquier activo financiero con
rendimiento explícito: Los intereses o cupones periódicos reciben la calificación de
rendimientos de capital mobiliario a integrar en la renta del ahorro, al igual que el
rendimiento obtenido en la amortización, transmisión, canje o conversión de estos activos.
Hibridad
Al poseer características similares a las acciones y también ante la apariencia de estar ante
un título de deuda común, a este formato se le suele denominar como título híbrido de
capital.
Hay tres clases de deuda subordinada, que dependerán del momento y tipo de vencimiento
estos serían los tres tipos de deuda subordinada: Aunque con diferencias en cuanto a
aparición en el mercado los cueles se detallan a continuación:
La deuda convertible/canjeable en la que en un momento determinado el principal
puede devolverse por su equivalente en acciones. Estas acciones generalmente se
encontrarán a precio del momento de suscripción lo cual puede generar una
devaluación de la inversión muy importante.
Dentro de las malas prácticas relacionadas con deuda subordinada podemos encontrar las
siguientes:
La comercialización del producto sin que ni su emisión de su folleto hayan sido autorizados
por la Comisión nacional del mercado de valores.
Presentar el producto como si se tratara de una especie de depósito a plazo fijo
garantizado.
Ofrecer deuda subordinada como si se tratara de una inversión de bajo riesgo
Éstas tres serían las más habituales, pero, existen otras malas prácticas presentes también
en la colocación de deuda subordinada como por ejemplo la comercialización del producto
como cobertura a otro producto bancario, la omisión de la información relevante de la
propuesta y de la forma de pago del principal y los cupones, la omisión de los resultados
desfavorables del test de idoneidad comercializar los productos sin información anterior…
En definitiva, toda una lista de malas prácticas comerciales que por desgracia acompañaron
a la colocación de millones de euros en deuda subordinada por parte de personas que
desconocían lo que estaban haciendo.
Entender y asumir los riesgos de este tipo de productos es básico, por eso mismo,
repetimos, se trata de modelos de inversión dirigidos fundamentalmente a inversores
avezados.
La deuda subordinada es uno de los instrumentos financieros más complejos y con mayor
riesgo. A diferencia de los depósitos a plazo fijo, se trata de un producto líquido. Está
constituido por títulos de renta fija. Uno de los mayores riesgos de estos bonos es que en
caso de quiebra de la entidad, sus inversores se posicionarían en la parte baja de la lista de
acreedores. Es decir, en ningún caso el capital está garantizado. No están protegidos por el
Fondo de Garantía de Depósitos en el caso de España. Por el contrario, una de las ventajas
de este tipo de deuda es su alto rendimiento.
Existen dos tipos de deuda subordinada con respecto a la garantía de capital. La Upper Tier
II es la de mayor calidad y ocupa las posiciones más altas en las listas de cobros, mientras
que la Lower Tier II, de menor calidad, sitúa al beneficiario en los últimos puestos de las
listas de acreedores en caso de que la entidad se declare insolvente. Este es uno de los
aspectos claves que el inversor medio desconoce, pero no el único.
Conclusiones
Recomendaciones
BIBLIOGRAFIA
http://todoproductosfinancieros.com/deuda-subordinada-concepto-basico/
https://www.gerencie.com/deuda-subordinada.html
http://ferrer-bonsoms.com/obligaciones-subordinadas-caracteristicas/
https://www.bbva.com/es/la-deuda-subordinada/
ANEXOS