Cbci U3 Ea Saho
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DE MÉXICO (UnADM).
09/06/2017
Índice
Introducción
Desarrollo
Propuesta de mejora
Bienestar y derechos
Calidad de vida
Conclusiones
Introducción:
Ecatepec proviene del náhuatl Ehēcatepēc y significa «en el cerro del Dios del
Viento», (Ehēca- 'viento', tepē- 'cerro', -c locativo 'en'). Para los antiguos pobladores
de Ecatepec, su significado era algo más que un término literal; es
decir, Ecatepec tenía una carga mental y emocional que iba mucho más allá de
"vientos" y "montes". Ehecaltepec es el nombre prehispánico. Este significado es
una advocación o nombre alterno al dios mexica Quetzalcóatl (dios del viento).
Los historiadores Róbelo, Olaguíbel y Peñafiel proponen también «en el cerro
consagrado a Ehécatl».6 El glifo utilizado por los antiguos mexicanos para
representar Ecatepec es un monte en cuya parte superior se ve la imagen del dios
Quetzalcóatl, simbolizado por la cabeza estilizada de un ave.
Se sabe que en Ecatepec de Morelos se encuentra la casa de José María Morelos
y Pavón (aunque él nunca la habitó, y actualmente se utiliza como casa de cultura),
que se usó como lugar de descanso por el virrey antes de entrar a la Ciudad de
México; en este lugar Morelos fue fusilado.
Por el cual Ecatepec lo analizaremos con el capítulo dos oportunidades de
desiguales en sociedades de iguales
Cada uno de estos índices se construye con base en variables categóricas de las
condiciones y posesión de bienes de la población, en función del rubro que se esté
analizando. Sin excepción, en todos los índices resulta una desigualdad que pone
en desventaja a la población indígena
Los indígenas tienen familias más grandes pero ingresos, educación, salud, e
inserción social más bajos. Es evidente que los jóvenes indígenas reciben menos
oportunidades educativas, económicas y de salud. Por lo tanto, pese a que los
programas sociales buscan corregir las imperfecciones en los mercados laborales,
de salud y educación, y efectivamente en algunos de ellos los indígenas reciben
beneficios directos, en entornos como el mexicano donde la pobreza, la desigualdad
y la inequidad son, desde hace mucho, un problema estructural, los efectos de la
política social, aunque valiosos, no han sido suficientes para recortar las brechas en
el acceso a más y mejores oportunidades de desarrollo humano.
En este sentido, no sólo hace falta más intervención pública, sino que dicha
intervención sea implementada y/o redireccionada con criterios de eficiencia en la
asignación de recursos y equidad distributiva, en un entorno de sensatez,
factibilidad, responsabilidad social y sostenibilidad de largo plazo, elementos clave
para garantizar el bienestar de las poblaciones más excluidas
Desarrollo:
Una sociedad en donde la identidad, las tradiciones y/o costumbres restringen las
opciones de las personas para elegir, no es una sociedad igualitaria ni libre. Todas
y todos los miembros de una sociedad deben tener el mismo acceso a los bienes
básicos que les permitan cubrir necesidades de salud, educación, generación de
ingreso, y derechos humanos, sociales, económicos y culturales; para después
decidir, con respeto a la libertad de los demás, el modo de vida y la identidad que
prefieran.
Los factores asociados a esta desigualdad son los bienes del hogar y la educación,
seguidos por el acceso a los servicios de salud, la calidad de la vivienda, y la
estatura de los niños de acuerdo a su edad, reflejo de las deficiencias en su
nutrición
De los 222 mil 394 hablantes de alguna lengua indígena de los pueblos originarios
del Estado de México, el pueblo mazahua es el más numeroso, al contar con 116
mil 240 hablantes, es decir, 52.27%; mientras que 43.20% de los hablantes de
alguna lengua indígena de los pueblos originarios en la entidad pertenecen al pueblo
otomí, esto es, 97 mil 820; en tanto que, 6 mil 706 hablantes, es decir, 3.02%,
pertenecen al pueblo nahua; 909 son hablantes del pueblo matlatzinca; mientras
que el pueblo tlahuica cuenta con 719 (0.32%).
Debido al desarrollo histórico que han tenido las comunidades indígenas en el país,
se ha formado la idea de que las personas indígenas se encuentran estrechamente
ligadas a niveles de vida muy precarios y, por lo tanto, los lugares donde residen,
se asocian a dicha característica. En el Estado de México, del total de personas
indígenas, 419 mil 689 personas, es decir, 42.6% viven en localidades (38
municipios) con muy bajo grado de marginación; 150 mil 127, esto es, 15.2% en
(36) municipios con grado de marginación bajo; 276 mil 613, 28.1%, en (39)
localidades con grado de marginación medio; mientras que 138 mil 852 es decir
14.1% en (10) municipios con grado de marginación alto.
De esta manera, mientras en el Estado de México 65 mil 331 (70.8%) son mujeres
indígenas sin instrucción escolar, la proporción de hombres es menor (26 mil 894,
es decir, 29.2%); y mientras hay más hombres con secundaria terminada (87 mil
193, esto es, 54.4%), hay menos mujeres con secundaria completa (73 mil
009, es decir, 45.6%).
La tasa de fecundidad para el estado de México tiene es de 2.1 hijos por mujer
indígena, por debajo del promedio nacional para mujeres indígenas, que es de 2.2
hijos por mujer.
Conclusión:
Ecatepec es un municipio que le hace falta trabajar sobre las oportunidades que le
puede dar a los indígenas ya que no les ha dado la integración adecuada, le hace
falta promover más el trabajo de estos y darles más oportunidades a los niños para
que puedan tener acceso a los servicios que no han tenido.