Derecho Tributario
Derecho Tributario
Derecho Tributario
Son fuentes del derecho tributario las normas que regulan la actividad
financiera del Estado, de su actividad tributaria, son normas generadoras o de
creación, también puede ser origen de otra norma, en el derecho tributario al igual
que sucede con el conjunto del ordenamiento jurídico público la teoría de las fuentes
del derecho se ciñe a los modos de creación del derecho escrito por lo que en
derecho tributario no puede ser fuente del mismo la costumbre.
1.30.3 La ley
Decretos leyes Pueden dictarse decretos con fuerza de ley ordinaria en casos
extraordinarios de necesidad y urgencia; que deben someterse al Organismo
Legislativo el mismo día de su emisión, o ser ratificados dentro de los sesenta
días para perder su eficacia.
Leyes delegadas
La autonomía del derecho tributario cuenta con todos los elementos para ser
considerado autónomo; dentro de los elementos propios del derecho tributario
tenemos: su propia legislación el cual es el código tributario, leyes tributarias
específicas, sus propios principios constitucionales y su propia doctrina. Autonomía
significa que puede integrarse por sí solo; pero no puede concebirse ésta de manera
absoluta.
1.32.1 De legalidad
1.32.3 De no confiscación
1.32.4 De irretroactividad
el Artículo 15 de nuestra Carta Magna preceptúa que “la ley no tiene efecto
retroactivo, salvo en materia penal cuando favorezca al reo”; el principio general que
domina esta materia es que la ley no debe aplicarse retroactivamente en perjuicio
de persona alguna, pero este principio no debe considerarse como absoluto y todos
los autores admiten que sufren excepciones, en materia tributaria existen dos
cuestiones fundamentales por resolver, una de ellas es; que debe entenderse por
aplicación retroactiva de una ley, la otra es en qué casos debe una ley aplicarse
retroactivamente, una ley es retroactiva cuando suprime o modifica las
consecuencias jurídicas de un hecho ocurrido bajo el imperio de una ley anterior.
CAPITULO II
Autonomía didáctica
Autonomía científica
La ciencia es el conjunto de conocimientos generales y especiales sometidos
a un proceso lógico o conjunto de conocimientos verdaderos y ciertos, ese proceso
y esa certidumbre es la que se denomina “método científico”.
Autonomía legislativa
Esto significa que la ciencia debe tener sus propias leyes tanto sustantivas
como procesales, en la Constitución Política de la República de Guatemala, vemos
que están establecidos los principios fundamentales, en ellos vemos que para la
emisión de impuestos ordinarios, extraordinarios, arbitrios y contribuciones
especiales se necesita de una ley imitada por el Congreso de la República; derivado
de la emisión del Código Tributario, Decreto 6-91 del Congreso de la República, se
obtuvo la Autonomía Legislativa, de la que se venía luchando desde hacía varias
décadas, ya que permitió contar con un instrumento específico para regular las
relaciones de los contribuyentes con el Estado, que por aplicar normas supletorias
creaban confusión, duda e incertidumbre, lo cual fomentaba aún más la evasión y
la desconfianza en el sistema tributario.
Por una parte la relación jurídica tributaria es una relación obligatoria cuya
estructura intrínseca es análoga a la relación obligatoria de Derecho Privado de tal
manera que las disposiciones de éste en materia de nacimiento, extinción de las
obligaciones le son aplicables supletoriamente a la primera, en otros casos las
normas del Derecho Privado son extremas a la regulación de la relación tributaria.
Sujetos activos del crédito fiscal guatemalteco; son sujetos activos del crédito
fiscal, estado, el municipio y los entes públicos a cuyo favor se establezca un
impuesto; ya se señaló en el artículo precedente que sujeto activo de la relación
jurídica tributaria es aquel que tiene el derecho de exigir el pago de los tributos, es
decir, el ente acreedor del tributo, y también señalamos que el sujeto activo del
crédito fiscal es el Estado, el municipio y los entes públicos, descentralizados,
autónomos y semiautónomos a cuyo favor se establezca un impuesto; el único ente
legitimado para la determinación y cobro de los impuestos es el Estado, pero éste
puede delegar en otras personas morales su poder tributario; por razones de
conveniencia social y económica, tales como el municipio y otras entidades
autónomas, semiautónomas o descentralizadas en nuestro país, como ejemplo
podemos citar al instituto guatemalteco de seguridad social, que es de las
contribuciones de seguridad social, llamadas parafiscales y que son incluidas dentro
de la denominación genérica de tributos.
Los impuestos deben establecerse por medio de la ley; uno de los principios
esenciales del Estado moderno es el de legalidad de la tributación, también
conocido como reserva de ley, que la doctrina considera como regla fundamental
del derecho público; los impuestos se deben establecer por medio de leyes, tanto
desde el punto de vista material como formal, es decir que ha de tratarse de ley
emitida por el organismo legislativo y por lo mismo de carácter general, abstracto e
impersonal.
2.5 Principio de equidad