Termografia Marco Teorico
Termografia Marco Teorico
Termografia Marco Teorico
7. MARCO TEÓRICO
7.1. TERMOGRAFÍA
La termografía en una técnica que permite medir temperaturas exactas a distancia y sin
necesidad de contacto físico con el objeto a estudiar. Mediante la captación de la radiación
infrarroja del espectro electromagnético, utilizando cámaras termográficas o de
termovisión, se puede convertir la energía radiada en información sobre temperatura.
El análisis termográfico en una técnica de mantenimiento predictivo cada vez más usada en
las industrias la cual permite, a distancia y sin ningún contacto, medir y visualizar
temperaturas de superficie con precisión. La física permite convertir las mediciones de la
radiación infrarroja en medición de temperatura y pueden ser aplicadas en cualquier
situación donde un problema o condición pueda ser visualizado por medio de una diferencia
de temperatura.
La imagen de la izquierda es una fotografía común que muestra las imágenes de los objetos,
es una imagen obtenida con luz visible.
La imagen de la derecha muestra las temperaturas de los objetos, es una imagen
termográfica.
a. Análisis cualitativo: Son imágenes que poseen diversos colores por medio de los cuales
se pueden identificar los puntos más calientes y verificar la uniformidad de la
temperatura de un equipo..
b. Análisis cuantitativo: Son valores exactos de temperatura de los puntos calientes que
sirven para determinar la gravedad de un problema existente para realizar la acción
correctiva pertinente que le permita al equipo volver a su estado normal de operación.
Los infrarrojos están a medio camino entre el espectro visible y las microondas del espectro
electromagnético. La fuente principal de radiación de infrarrojos es el calor o la radiación
térmica. Cualquier objeto con una temperatura superior al cero absoluto (-273,15 °C o 0
Kelvin) emite radiación en la región infrarroja. Hasta los objetos más fríos que podamos
imaginar, como los cubitos de hielo, emiten rayos infrarrojos.
Todos los días estamos expuestos a rayos infrarrojos. El calor de la luz solar, del fuego o
de un radiador son formas de infrarrojos. Aunque nuestros ojos no los vean, los nervios de
nuestra piel los perciben como calor. Cuanto más caliente es un objeto, más radiación de
infrarrojos emite.
La energía de infrarrojos (A) que irradia un objeto se enfoca con el sistema óptico (B)
sobre un detector de infrarrojos (C). El detector envía los datos al sensor electrónico (D)
para procesar la imagen. Y el sensor traduce los datos en una imagen (E), compatible con
el visor y visualizable en un monitor de vídeo estándar o una pantalla LCD.
Por tanto, cada píxel de la imagen radiométrica es, de hecho, una medición de
temperatura. Para ello, se incorporan complejos algoritmos a la cámara de infrarrojos.
Esto hace de la cámara termográfica una herramienta perfecta para el mantenimiento
predictivo.
Con solo poder prever qué componentes están a punto de averiarse, podría precisar en qué
momento adoptar las debidas medidas correctivas. Por desgracia, los peores problemas
permanecen ocultos hasta que es demasiado tarde.
Las cámaras termográficas son la herramienta perfecta para predecir fallos ya que
consiguen hacer visible lo invisible. En una termografía,los problemas saltan a la vista de
inmediato.
Con el fin de mantener sus plantas operativas en todo momento, muchas empresas han
combinado sus programas de mantenimiento predictivo con las herramientas de
diagnóstico más valiosas para el mantenimiento predictivo del mercado: las cámaras
termográficas.
Tanto si tiene que supervisar equipos de alta tensión, cuadros eléctricos de baja tensión,
motores, bombas, equipos de alta temperatura, como buscar pérdidas de aislamiento… una
cámara termográfica es justo la herramienta que necesita para VERLO todo.
La termografía es una herramienta que cada día va ganando más importancia en los planes
de mantenimiento de las industrias porque ayuda a detectar problemas existentes de una
manera rápida, segura y sin tener que interrumpir el funcionamiento normal de un equipo
ya que la gran mayoría de los problemas y averías en el entorno industrial; ya sea de tipo
mecánico, eléctrico y de fabricación; están precedidos por cambios de temperatura que
pueden ser detectados mediante el monitoreo de temperatura.
Permite el monitoreo continuo de piezas que están presentando problemas que no son
tan graves, brindando el tiempo necesario para la programación de su revisión y
reparación.
Ayuda a ahorrar tiempo y dinero en las empresas porque descubre las partes de los
equipos que necesitan ser intervenidas de forma inmediata para impedir que se
interrumpa el proceso normal de producción.
Brinda protección al personal de mantenimiento porque no requiere del contacto físico
con los equipos para ejecutarse.