Hallinger
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Este documento presenta conclusiones extraídas de una serie de análisis empíricos que
evalúan los efectos de liderazgo colaborativo sobre la capacidad de mejora de la escuela y el
aprendizaje de los estudiantes en una amplia muestra de las escuelas de educación primaria
de Estados Unidos durante un período de cuatro años. El diseño de investigación ofrece un
enfoque satisfactorio para la comprensión de cómo el liderazgo contribuye a la mejora de la
escuela.
• Un modelo de efectos mediados invertido en el que los resultados de la escuela -es decir,
los cambios en los resultados del aprendizaje de los estudiantes– se deben a los cambios en la
capacidad de mejora de la escuela y el liderazgo.
Este informe presenta los resultados del análisis de un conjunto de datos longitudinales
recogidos de 198 escuelas de educación primaria durante un período de cuatro años en los
EE.UU. Estos datos describen las percepciones de liderazgo colaborativo y la capacidad de
mejora de la escuela de estudiantes y profesores, así como el rendimiento de los estudiantes
en lectura y matemáticas. Tengan en cuenta que las pruebas generales de los modelos
presentados en este trabajo se han comparado con lectura y matemáticas, y muestran una
tendencia similar de los resultados en ambas materias.
Nuestro enfoque para la comprensión de los medios por los cuales el liderazgo contribuye a la
mejora de la escuela se encuentra enmarcado por dos supuestos.
1- Parte del supuesto que los estudios de mejora de la escuela deben evaluar el cambio
en los procesos académicos de la escuela y los resultados del aprendizaje en un
período de tiempo.
2- Se supone que el liderazgo centrado en la mejora escolar se dirige hacia el aumento en
el rendimiento del aprendizaje del estudiante. Los investigadores han sugerido
acertadamente que un rol clave del liderazgo es definir los extremos hacia los cuales la
escuela se debe esforzar por mejorar, a veces se denomina "liderazgo para qué".
Efectos de liderazgo de los directores en el aprendizaje de los estudiantes (Bossert et al., 1982;
Hallinger y Heck, 1996). En 1988, Pitner propuso varios modelos conceptuales que trataban de
explicar los medios por los cuales el liderazgo podría afectar el aprendizaje de los estudiantes.
Una década más tarde, llevamos a cabo una revisión de estos modelos y de la investigación
empírica realizada hasta el momento sobre el liderazgo del director y el aprendizaje de los
estudiantes (Hallinger y Heck, 1996).
Mientras que los estudios de efectos prácticamente todos mediados han enmarcado
explícitamente el liderazgo como motor de mejora de la escuela, también se podría
conceptualizar el cambio en los resultados escolares (mejora o disminución), centrado en
proporcionar el impulso para cambios en la capacidad de la escuela y el liderazgo, como se
muestra en el modelo 3 (Heck y Hallinger, 2010a).
“En la medida en que el liderazgo es visto como un proceso de adaptación y no como una
fuerza independiente unitaria, la perspectiva de los efectos recíprocos adquiere creciente
importancia” (Hallinger y Diablos 1996:19). El modelo de efectos recíprocos implica que las
variables (por ejemplo, el liderazgo, la capacidad de mejora de la escuela, el aprendizaje de los
estudiantes) se influyen mutuamente entre sí en el tiempo (Marsh y Craven, 2006).
• Destacar la amplia participación en los esfuerzos para evaluar el desempeño académico del
desarrollo de la escuela.
• Tiene programas educativos que están vinculados con los estándares del plan de estudios del
estado.
• Cuenta con un personal profesional docente bien calificado para las tareas y
responsabilidades, comprometidos con el propósito de la escuela.
3. Resultados
Nos centramos en los recorridos más relevantes que resumen las principales proposiciones
asociadas con cada modelo (las cuales fueron probadas con un nivel de significación de 0,05).
El Modelo 1 postula que el cambio en el liderazgo colaborativo ejerce efectos directos sobre
el aumento en el aprendizaje del estudiante. Sin embargo, nuestros análisis que evaluaron
esta relación, tanto para la lectura como para las matemáticas, no apoyan esta hipótesis. Por
lo tanto, de acuerdo con los comentarios anteriores de estudios de los efectos del liderazgo
escolar (ver Hallinger y Heck, 1996), se concluye que este enfoque es un “pozo seco" para
explorar los efectos del liderazgo sobre el aprendizaje en las escuelas (ver también Hallinger y
Heck, 2010; Heck y Hallinger, 2009, 2010b).
Nuestro Modelo de prueba 2 evaluó la eficacia de un marco de efectos mediados que postula
el cambio en el liderazgo colaborativo como motor de cambio en la capacidad de la escuela y
el aprendizaje de los estudiantes. Las tres conclusiones principales de nuestro análisis de los
datos longitudinales fueron consistentes con estudios transversales anteriores de los
principales efectos del liderazgo (ver Hallinger et al., 1996; Heck et al., 1990; Wiley, 2001). En
primer lugar, el cambio en el liderazgo colaborativo fue positivamente relacionado con el
cambio en la capacidad de la escuela.
El Modelo 4 proporciona aún una mayor evidencia sobre la perspectiva de los efectos
recíprocos del liderazgo y la mejora de la escuela (Heck y Hallinger, 2010a). El cambio en el
liderazgo colaborativo se relacionó positivamente con el cambio en la capacidad de mejora
de la escuela, y el cambio en la capacidad de mejora de la escuela se relacionó positivamente
con el aumento en los resultados de los estudiantes en lectura y matemáticas. Esto es
consistente con la porción de cambio de Modelo 2. A la inversa, sin embargo, hemos
observado que los cambios en el aumento de los aprendizajes escolares también fueron
positivamente relacionados con los cambios en la capacidad de mejora de la escuela y los
cambios en la capacidad de mejora de la escuela fueron positivamente relacionados con
cambios en el liderazgo colaborativo.
Nuestra prueba del Modelo 4, por lo tanto, apoyó la propuesta de que los cambios en el
liderazgo colaborativo y la capacidad de mejora de la escuela se refuerzan mutuamente y
positivamente. Los cambios en las escuelas parecían “ganar impulso” en el tiempo a través
de cambios en el liderazgo y la capacidad de mejora de la escuela, los cuales eran
mutuamente orgánicos y responsables. La presencia del circuito de retroalimentación indirecta
implica que los efectos totales de las variables tales como el liderazgo pueden aumentar a
medida que lo hacen la suma de los ciclos repetidos de influencia entre las variables de los
componentes a través del tiempo (Hayduk, 2009).
4. Discusión
Dos de las limitaciones principales fueron por una parte un dependencia de los estudios
transversales (en contraposición con los longitudinales) y por otra el uso de un enfoque
centrado casi exclusivamente en el liderazgo del director.
5. Conclusiones
• El patrón de hallazgos relacionados con el Modelo de efectos recíprocos sugirió además que
los cambios en el liderazgo colaborativo se agravan con el tiempo a través de un bucle de
retroalimentación indirecta que consiste en cambios en la capacidad de mejora de la escuela y
el crecimiento en el rendimiento en matemáticas de los estudiantes (Heck y Hallinger, 2010a).
• Este estudio también señala que los efectos del liderazgo sobre la capacidad de mejora de la
escuela son más pequeños con el tiempo que los correspondientes efectos del cambio en la
capacidad de mejora de la escuela sobre el liderazgo colaborativo (Heck y Hallinger, 2010a).
Estos resultados ofrecen una idea de cómo ciertos eventos externos (por ejemplo, la
asignación de recursos, sanciones políticas) y las reformas previstas impulsadas internamente
(por ejemplo, plan de estudios y el desarrollo de instrucción en el aula) pueden influir en la
evolución de las percepciones de liderazgo de las partes interesadas de manera sistemática. El
modelo también llama la atención sobre cómo las condiciones iniciales de la organización
relacionadas con los cambios en el liderazgo colaborativo mediado (es decir, los niveles de
rendimiento, capacidad de mejora…) influyen directamente en los cambios posteriores
observados en la capacidad de mejora y aumento del rendimiento y el aprendizaje de los
estudiantes. Por lo tanto, siguiendo nuestro propósito este Modelo refleja la naturaleza
dinámica y reactiva del liderazgo para el aprendizaje.
6. Implicaciones
Como se ha visto en otro estudio reciente que utilizó datos longitudinales (Mulford y Siliņš,
2009), este enfoque ofrece ventajas considerables sobre los diseños de investigación
transversales cuyo los investigadores están tratando de explorar las relaciones causales entre
el liderazgo y otro aspecto educativo.
Las estructuras académicas (por ejemplo, las normas del plan de estudios, el trabajo en
equipo), las normas de la escuela (por ejemplo, el apoyo tangible para los estudiantes y
profesores, el aprendizaje y desarrollo profesional, la comunicación abierta), y los procesos
de organización que se desarrollan (por ejemplo, las oportunidades de participación en la
toma de decisiones, la asignación de recursos, las políticas exteriores) crean oportunidades y
limitaciones para el liderazgo (Bridges, 1977). El liderazgo efectivo para la mejora de la escuela
debe responder a estas características contextuales.
Frente a esta situación, nuestra investigación reafirma la importancia del liderazgo como un
catalizador para mejorar la escuela, pero además también matiza esta afirmación en tres
aspectos importantes.
En primer lugar, nuestra investigación sugiere que no hay un único enfoque sobre el liderazgo
que trabaja para mejorar las escuelas. Los estilos y estrategias de liderazgo eficaces están
altamente contextualizados, por lo que cada escuela necesita un liderazgo diferente. El tipo de
liderazgo debe responder tanto al «estado inicial» de los resultados de la capacidad y del
aprendizaje académico de la escuela como a los cambios en estas condiciones iniciales a
medida que aumentan (o disminuyen) con el tiempo.
En segundo lugar, esta investigación sugiere que el liderazgo, aun siendo un motor
potencialmente importante para el cambio, es de por sí insuficiente para lograr una mejora
en los resultados del aprendizaje. Con esto en mente, la cultura de la escuela, o la capacidad
para la mejora educativa, se convierte en un objetivo clave para las intervenciones de cambio
junto con los esfuerzos para fortalecer el liderazgo. De hecho, los resultados sugieren que el
liderazgo y la capacidad de mejora de la escuela funcionan como parte de un conjunto de
relaciones sistémicas. Centrándose en uno sin desarrollar el otro aspecto es poco probable que
suponga una mejora sostenida en el tiempo.
En tercer lugar, esta investigación representa uno de los esfuerzos más importantes para
examinar el impacto del liderazgo escolar colaborativo en el aprendizaje. Los resultados
apoyan la creencia de que el liderazgo colaborativo, en contraposición con el liderazgo del
director solo, puede ofrecer un camino hacia la mejora de la escuela más sostenible.
En nuestra opinión, estos resultados son sobrios y a la vez alentadores. Éstos pueden
decepcionar a aquellos que han esperado que la mejora de la calidad del liderazgo proporcione
un medio eficiente y listo para resolver el problema de la mejora escolar.
CUESTIONARIO SOLICITADO POR LA DOCENTE
1- Resultados del estudio y sus aportes a la gestión directiva. ¿Este tipo de investigaciones
aporta resultados de interés? ¿Los estudios realizados en otros países / contextos educativos
sirven en mi situación?
Pero tengo la certeza desde mi percepción como directora de centros educativos del CETP
(Consejo de Educación Técnico Profesional) de que en nuestra realidad, la gestión educativa
tiene un componente en el que "el liderazgo marca la diferencia" en la calidad del aprendizaje
en los centros educativos.
Extraje algunos preceptos que resultan de interés para el abordaje de la mejora en el centro.
Los elementos se agrupan en tres dimensiones de liderazgo de la escuela:
*Destacar la amplia participación en los esfuerzos para evaluar el desempeño académico del
desarrollo de la escuela.
Pero considero que la metodología podría resultar de mucha utilidad si tomamos a diferentes
centros educativos de nuestro país:
Desde la mirada de los 4 modelos propuestos, realizar una toma de datos para constatar que
está sucediendo en nuestro país sobre este abordaje en relación a:
El Modelo 1 que postula que el cambio en el liderazgo colaborativo ejerce efectos
directos sobre el aumento en el aprendizaje del estudiante.
El Modelo 3 que plantea que el aumento del rendimiento en cuanto a los resultados
del aprendizaje no parecen servir como motor de cambio en la capacidad de mejora de
la escuela y el liderazgo colaborativo.
Modelo 4 proporciona aún una mayor evidencia sobre la perspectiva de los efectos
recíprocos del liderazgo y la mejora de la escuela.