Transición de los objetivos de desarrollo del milenio a los objetivos de desarrollo

sostenible

Lina Maria Ocampo Pardo

Introducción

Las últimas décadas han sido cruciales para el impulso de nuevas posiciones teóricas acerca
del desarrollo. Se ha desplazado de un marco tradicional de crecimiento económico,
acumulación de capitales e industrialización, propuestas por algunos autores clásicos y
reproducidas con gran importancia hasta finales de 1970; a uno que reconoce las brechas y
desigualdades entre países, resaltando la importancia en la eficacia de criterios macro
sociales.

En este sentido, a mediados de los años 80 y sobre todo a partir del informe de Brutland
(Nuestro futuro en común 1987) el concepto de desarrollo sostenible se generalizo y se
transformó en un objetivo social a escala mundial. En este informe realizado por la comisión
de desarrollo y medio ambiente, se intenta realizar una clarificación del concepto en donde
se requiere que las sociedades satisfagan sus necesidades aumentando el potencial
productivo y asegurando igualdad para todos; Se puede lograr el desarrollo sostenible si se
está en armonía con el cambiante potencial productivo.

Encaminado el desarrollo a la vinculación de las necesidades humanas con el uso de los

recursos naturales, se empiezan a contemplar unos factores fundamentales para la
existencia. Los componentes base como el agua, la alimentación, la energía, la educación, la
sanidad y vivienda, entre otros, han sido temas de permanente discusión, traduciéndose en
distintos sucesos y conferencias de talla internacional.

En septiembre del año 2000, luego de que la preocupación por los aspectos fundamentales
antes mencionados se intensificara, 189 líderes de distintos países, se reunieron en la sede
central de las Naciones Unidas en Nueva York, para tratarlos y llegar a un acuerdo en común.
Esta cumbre internacional se denominó la “Asamblea del Milenio”, puesto que además de
ser el inicio del nuevo milenio, representaba un momento idóneo y trascendental para el
planeta. En esta cumbre se adopto la “Declaración del milenio”, un documento en donde
los países se comprometieron a hacer del mundo un lugar más pacífico, próspero y justo.
Plasmando estos ideales en los “Objetivos de Desarrollo del Milenio”

A poco tiempo de culminarse la visión de los ODM, los distintos mandatarios y

organizaciones mundiales creyeron pertinente crear una agenda post 2015 para dar
continuidad y además mejoría a los objetivos que cambiarían el mundo. Esta agenda se
denominó “Objetivos de Desarrollo Sostenible (2015-2030)” En la cual se incluyeron
aspectos más específicos y trascendentales. Es entonces, en donde el presente documento

1
tiene como fin relatar y analizar la transición de los ODM a los ODS, resaltando de manera
cuantitativa y cualitativa los avances y alcances de cada uno, así como también los
obstáculos y las falencias.

Objetivos de Desarrollo del Milenio

Hace 17 años, en el año 2000 los países comprometidos en satisfacer las necesidades
humanas, pero sin entrar en detrimento del medio ambiente, establecieron un mapa de ruta
con 8 objetivos a lograr y ser alcanzados para el 2015.

Estos ocho objetivos de desarrollo del milenio se basaron en los acuerdos adoptados en la
década de los 90 en conferencias y cumbres de las naciones unidas, los cuales fueron:

1. Erradicar la pobreza extrema y el hambre.

2. Lograr la enseñanza primaria universal.
3. Promover la igualdad entre los sexos y empoderamiento de la mujer.
4. Reducir la mortalidad de los niños menores de 5 años.
5. Mejorar la salud materna.
6. Combatir el VIH/SIDA, la malaria y otras enfermedades.
7. Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente.
8. Fomentar una alianza mundial para el desarrollo.

Los ODM fueron revolucionarios, porque brindaron un discurso común para alcanzar el
acuerdo global, eran realistas, fáciles de comunicar y contaban, además, con un mecanismo
claro para su cuantificación y seguimiento. También constituyeron una prueba de la voluntad
política para establecer asociaciones más sólidas y comprometer a los países a tomar nuevas
medidas para enfrentar los desafíos mundiales. Fueron considerados el primer escalón del
desarrollo humano, que según el PNUD este último, es aquel que sitúa a las personas en el
centro del desarrollo, aumentando sus posibilidades y el disfrute de la libertad para vivir la
vida.1

Cada objetivo ya mencionado, se dividió en una serie de metas, un total de 18, cuantificables
mediante 58 indicadores concretos que se esperaban alcanzar para el año 20152. En este
sentido, se logró poner en marcha la agenda y reafirmar que el bienestar de las personas
necesita esfuerzos articulados desde toda la sociedad, la academia, el sector privado y el
más importante, el público.

1
Naciones Unidas. Objetivos de Desarrollo Sostenible, Colombia (Herramientas de aproximación al contexto
local), 2015. Recuperado de: < file:///C:/Users/USUARIO/Downloads/ODS-
Colombia.%20Herramientas%20para%20la%20Aproximación%20Local%20(1).pdf>
2
Ibid. Pag, 11-12.

2
Las acciones provenientes de los países comprometidos en el logro de los objetivos fueron
sustanciales y de gran importancia. Particularmente, Colombia se acogió este compromiso
a través del Consejo Nacional de Política Económica y Social (CONPES), y por tal razón se
convirtió en política pública nacional, implementando lo objetivos en los planes de
desarrollo nacional y departamental; además de brindar las herramientas necesarias para
que a nivel municipal y provincial se tuviese la oportunidad de garantizar que cada
ciudadano colombiano tuviese acceso a los bienes y servicios básicos.

Finalmente, luego de 15 años y de la culminación del periodo acordado en la agenda, se

torna necesaria la divulgación y el examen del progreso y las brechas en el cumplimiento de
las metas establecidas.

Dentro de los logros alcanzados, se comprueba que los ODM contribuyeron a millones de
vidas, mejorando las condiciones para muchas más. Los datos y análisis que presentan los
distintos informes recalcan que, con intervenciones específicas, estrategias acertadas y
recursos adecuados, todos los países incluso los más vulnerables pueden lograr un progreso
sin precedentes.

Resultados del informe de Naciones Unidas

1. Erradicar la pobreza extrema y el hambre.

 La tasa de pobreza extrema de países en desarrollo paso de 47% en 1990 a 14% en
2015. Lo que traduce una reducción significativa. En 1990 casi la mitad de la
población de las regiones en desarrollo vivía con menos de 1,25 dólares al día.
 A nivel mundial, la cantidad de personas que viven en pobreza extrema se ha
reducido en más de la mitad, cayendo de 1.900 millones en 1990 a 836 millones en
2015.
 El porcentaje de personas con nutrición insuficiente en las regiones en desarrollo
cayó a casi la mitad desde 1990, pasando de 23,3% en el período 1990–1992 a 12,9%
en el período 2014–2016.

2. Lograr la enseñanza primaria universal.

 La tasa neta de matriculación en enseñanza primaria en las regiones en
desarrollo ha alcanzado el 91% en 2015, a partir del 83% en el año 2000.
 La cantidad de niños en edad de recibir enseñanza primaria que no asistió a la
escuela cayó a casi la mitad a nivel mundial, pasando de 100 millones en el año
2000 a aproximadamente 57 millones en 2015.

3. Promover la igualdad entre los sexos y empoderamiento de la mujer.

3
  Muchas más niñas asisten ahora a la escuela que hace 15 años. Las regiones en
desarrollo en su conjunto han alcanzado la meta de eliminar la disparidad de
géneros en la enseñanza primaria, secundaria y terciaria.
 Las mujeres ahora constituyen el 41% de los trabajadores remunerados en sectores
no agrícolas, lo que significa un aumento en comparación con el 35% de 1990.
 En el curso de los últimos 20 años las mujeres han ganado terreno en la
representación parlamentaria en casi el 90% de los 174 países para los que se
dispone de datos.

4. Reducir la mortalidad de los niños menores de 5 años.

 La tasa mundial de mortalidad de niños menores de 5 años ha disminuido en
más de la mitad, reduciéndose de 90 a 43 muertes por cada 1.000 niños nacidos
vivos entre 1990 y 2015.
 La vacunación contra el sarampión ha ayudado a evitar cerca de 15,6 millones
de muertes entre 2000 y 2013. La cantidad de casos de sarampión reportados
en todo el mundo disminuyó en un 67% en el mismo período.

5. Mejorar la salud materna.

 Desde 1990, la tasa de mortalidad materna ha disminuido en un 45% a nivel
mundial y la mayor parte de esta reducción ocurrió a partir del año 2000.
 Más del 71% de los nacimientos en todo el mundo fueron atendidos en 2014
por personal de salud capacitado, lo que significa un aumento a partir del 59%
de 1990.

6. Combatir el VIH/SIDA, la malaria y otras enfermedades.

 Las nuevas infecciones con VIH disminuyeron en aproximadamente 40% entre
2000 y 2013, de un estimado de 3,5 millones de casos a 2,1 millones.
 En junio de 2014, en todo el mundo, 13,6 millones de las personas que vivían
con el VIH recibían la terapia antirretroviral (TAR), un aumento inmenso a partir
de solo 800.000 personas en 2003. La terapia antirretroviral evitó 7,6 millones
de muertes por SIDA entre 1995 y 2013.
 Se estima que entre 2000 y 2013 se salvaron 37 millones de vidas mediante
intervenciones de prevención, diagnóstico y tratamiento de la tuberculosis. La
tasa mundial de mortalidad por tuberculosis cayó en un 45% y la tasa de
prevalencia en 41% entre 1990 y 2013.

7. Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente.

4
  En 2015, 91% de la población mundial utiliza una fuente de agua mejorada, en
comparación al 76% en 1990.
 Desde 1990, de los 2.600 millones de personas que obtuvieron acceso a fuentes
de agua potable mejorada, 1.900 millones lo hicieron a través de agua potable
suministrada por cañería hasta su propio hogar. Más de la mitad de la población
mundial (58%) ahora disfruta de este nivel más alto de servicio.
 La proporción de población urbana que vive en barrios marginales en las
regiones en desarrollo bajó de aproximadamente 39,4% en el 2000, a 29,7% en
2014.

8. Fomentar una alianza mundial para el desarrollo.

 La asistencia oficial para el desarrollo por parte de países desarrollados
aumentó en un 66% en términos reales entre los años 2000 y 2014, alcanzando
135.200 millones de dólares.
 En 2014, el 79% de las importaciones provenientes de los países en desarrollo
hacia países desarrollados fueron admitidas libres de aranceles, en comparación
al 65% del año 2000.
 La penetración de Internet ha crecido de sólo un poco más de 6% de la
población mundial en el año 2000, a 43% en 2015. Como resultado, 3.200
millones de personas están conectadas a una red global de contenido y
aplicaciones.

Como lo demuestra el informe anterior los ODM tuvieron éxito, en gran parte al basarse en
la convicción generalizada de que el progreso en todas partes (particularmente el de los
pobres) nos enriquece a todos. Sin embargo, solo algunos países lograron alcanzar las metas
trazadas, dejando en evidencia que las personas más pobres y vulnerables siguen estando
desamparadas.

Los obstáculos y críticas que se visualizaron en el examen y análisis de resultados de los

ODM, fueron significativos, entre los cuales se encontraron: La lógica de los mercados y la
acumulación no se modifica, no se transforman los procesos de producción de acuerdo con
las reglas de la naturaleza, los límites relativos y no absolutos respecto al crecimiento; El
desarrollo tecnológico puede eliminar los bloqueos al crecimiento, no tienen en cuenta los
problemas de desigualdad en salud; Salud preventiva, no tienen en cuenta la cobertura
sanitaria ambiental y finalmente algunas metas son inconcretas; no cuantificables.3

3
Naciones Unidas. Objetivos de Desarrollo del Milenio (Informe de 2015), 2015. Recuperado de:
<file:///C:/Users/USUARIO/Downloads/Objetivos%20de%20Desarrollo%20del%20Mileno%20Informe%2020
15.pdf>

5
En este sentido el principal reto que marco la ruta para la continuidad de la agenda 2000-
2015 fue el progreso desigual de las distintas regiones, tanto externamente entre países,
como internamente entre provincias. Por tal razón, importante destacar las tareas
pendientes de los ODM. En muchos lugares, el progreso no fue lo suficientemente sostenible
ni equitativo para lograr las metas; en otros, el progreso se frenó o revirtió debido a
desastres, conflictos, degradación ambiental o inestabilidad económica o climática.

Según cifras de la ONU las mujeres siguen siendo objeto de discriminación en el acceso a
trabajo, bienes económicos y para la participación en la toma de decisiones privadas y
públicas. En el 85% de los 92 países para los que existen datos sobre las tasas de desempleo
por nivel de educación para los años 2012 -2013, las mujeres con educación avanzada tienen
tasas de desempleo mayores que los hombres con niveles de educación similar. Otro
aspecto a resaltar es la gran brecha entre los hogares más pobres y los más ricos, puesto
que, para las regiones en desarrollo, los niños del 20% de los hogares más pobres tienen
más del doble de probabilidades de sufrir retrasos de crecimiento que los del 20% más rico;
en cuanto a la asistencia escolar la probabilidad aumenta a cuatro veces de que los niños de
los hogares más pobres no asistan a la escuela.

Además de la desigualdad descrita, la brecha aumenta cuando se trata de zonas rurales y

zonas urbanas, a modo de ejemplo: Las tasas de mortalidad de menores de 5 años son casi
dos veces más altas para los niños más pobres y en zonas rurales.

Finalmente, una de las grandes amenazas para la existencia y la futura generación, es el

cambio climático y la degradación ambiental. La alteración de los ecosistemas, las
condiciones climáticas extremas y los riesgos a la sociedad, continúan siendo un desafío
urgente y crítico para la comunidad global; Se estimo una pérdida de 5,2 millones de
hectáreas de bosque en el año 2010, se sobrexploto la población de peces marinos, entre
otros, lo que dejo al descubierto que los medios de vida de las personas más pobres están
directamente relacionados y vinculados a los recursos naturales y como la mayoría de veces
ellos son los que viven en aquellas zonas, son los que sufren directamente el detrimento
ambiental.

A pesar del enorme progreso, se estima que aun unos 800 millones de personas viven en
pobreza extrema y sufren de hambre; El mundo aún tiene un largo camino por recorrer en
a cuanto a los desafíos planteados, se necesitan esfuerzos específicamente dirigidos a
alcanzar a aquellas personas más vulnerables. Razón por la cual se debe enfatizar y resaltar
el apoyo brindado por el PNUD, puesto que las labores realizadas por esta entidad se
pueden redireccionar para el futuro; Entre ellas se encuentran: La promoción y campaña de
los ODM, la localización e integración, el apoyo de las políticas a favor de los pobres, la
aceleración del progreso de los objetivos, su financiación y el seguimiento e informe de ellos.

6
Teniendo claros los grandes logros, pero también los inmensos desafíos frente a la pobreza,
la educación, la salud, el medio ambiente y la paz, se acrecentó la necesidad de replantear y
dar continuidad a los ocho desafíos mundiales. Por tal razón, la conferencia Rio+20 de las
naciones unidas celebrada en Rio de Janeiro en junio del 2012, estimulo un proceso para
fomentar la adopción de un nuevo cuerpo de objetivos de desarrollo que permitan continuar
con el impulso generado con los ODM dentro de un marco global de desarrollo para más
allá de 2015.

Para crear una nueva agenda de desarrollo, que tuviera como eje central a las personas, se
procedió a realizar una consulta global, tanto on line como por medios convencionales,
puesto que las voces de todos debían ser escuchadas y tenidas en cuenta para así generar
mayor compromiso de las personas. También se incluyeron acciones y escenarios más
consultivos que contemplaran el desarrollo desde múltiples dimensiones y de manera más
integral. Dentro de las acciones realizadas se desarrollaron diálogos presenciales con la
participación de distintas organizaciones, incluyendo pequeños grupos poblacionales y
minorías como indígenas, jóvenes, mujeres, población LGTBI, consultores del sector privado,
ONG y la academia.

De esta manera en julio de 2014 el grupo de trabajo abierto de la asamblea general (GTA)
propuso un documento con 17 objetivos, este último fijo las pautas para la futura
negociación y aprobación de los nuevos retos denominados “Objetivos de Desarrollo
Sostenible (ODS)” la nueva agenda global para el periodo 2015-2030. Finalmente, en
septiembre del 2015 en el marco de la asamblea de las naciones unidas se aprobó la agenda
2030 para el desarrollo sostenible.

Objetivos de Desarrollo Sostenible

1. Poner fin a la pobreza en todas sus formas en todo el mundo.

2. Poner fin al hambre, lograr la seguridad alimentaria y la mejora de la nutrición y
promover la agricultura sostenible.
3. Garantizar una vida sana y promover el bienestar en todas las edades.
4. Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover
oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos.
5. Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas.
6. Garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible y el saneamiento para
todos.
7. Garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna para
todos.
8. Promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenido, el empleo
pleno y productivo y el trabajo decente para todos.

7
 9. Construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización inclusiva y
sostenible y fomentar la innovación.
10. Reducir la desigualdad en y entre los países.
11. Lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros,
resilientes y sostenibles.
12. Garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles.
13. Adoptar medidas urgentes para combatir el cambio climático y sus efectos.
14. Conservar y utilizar en forma sostenible los océanos, los mares y los recursos
marinos para el desarrollo sostenible.
15. Proteger, restablecer y promover el uso sostenible de los ecosistemas terrestres,
gestionar los bosques de forma sostenible, luchar contra la desertificación, detener
e invertir la degradación de las tierras y poner freno a la pérdida de la diversidad
biológica.
16. Promover sociedades pacíficas e inclusivas para el desarrollo sostenible, facilitar el
acceso a la justicia para todos y crear instituciones eficaces, responsables e inclusivas
a todos los niveles.
17. Fortalecer los medios de ejecución y revitalizar la Alianza Mundial para el Desarrollo
Sostenible.

Los ODS se diferencian de los ODM en su alcance universal, por el grado de exigencia, no
solo en ajustes técnicos, sino también en la adopción de las políticas adecuadas y la
transformación de las instituciones, los ODS reconocen las grandes diferencias y dificultades
de los países, y las contribuciones por hacer en función a sus capacidades. La experiencia de
los ODM permitió mejorar la calidad de los datos, las alianzas, los sistemas y las instituciones;
es por esta razón que el mundo no debe partir desde cero, se deben reformular las
estrategias existentes y adoptar las acciones que permitieron el progreso logrado. Es
importante mantener lo que dio resultado y ajustar lo que no funciono, mientras se trata de
fortalecer las capacidades, gestionar los recursos y se logran poner en marcha las políticas
adecuadas.