Corbiere, Emilio - Guenon y Marx
Corbiere, Emilio - Guenon y Marx
Corbiere, Emilio - Guenon y Marx
Seoras y Seores:
Estudiar los escritos, ideas y concepciones de Ren Gunon y Carlos Marx parece una
osada, ya que a primera vista se tratara de proyectos raigalmente diferentes, uno
espiritualista y el otro, materialista. Sin embargo sta es una interpretacin sumaria y
un estudio metodolgico, sin prejuicios, permite encontrar aspectos que se escapan a
las visiones dogmticas.
El pensador francs Ren Allau fue el primero que intent una aproximacin al tema
en su ensayo De Marx a Gunon: de un 'crtico radical' a un 'crtico de principios' de
las sociedades modernas, en el libro de homenaje a Gunon, en 'Les Dossier H',
compilacin dirigida por Pierre-Marie Sigaud, en la coleccin 'L'Age d'Homme',
publicado en Pars en 1984.
Marx muri en 1883, en Londres, y tres aos despus, naca Ren Jean Marie Joseph
Gunon, en Blois, Anjou, en el apacible Valle del Loira. Seguramente, en el caso de
Gunon tuvo referencia sobre las ideas de Marx y Engels, aunque su camino cultural-
espiritual fue distinto, diferente, al de los comunistas.
Otro error muy comn al abordar la metafsica guenoniana es creer que esta
metafsica tiene races teolgicas o religiosas exotricas. Tratar de explicar que lo de
Gunon tiene como fundamento dos cuestiones esenciales: su carcter inicitico y su
explicacin del simbolismo porque el mundo y la vida humana se desarrollan en un
contexto simblico sobre lo cual Ernest Cassirer se refiri en sus estudios Filosofa
de la Ilustracin y Antropologa filosfica (Introduccin a una filosofa de la cultura).
Prueba de ello es que hoy cuando el mundo acadmico, las ciencias oficiales, la
filosofa y la teologa, miran con despreocupacin los textos antiguos, es decir, los
escritos hermtico-alejandrinos y otros linderos o signos que vienen de edades
pretritas, incluso desde Sumeria y an antes, sin embargo reconocen que no se
puede explicar la matemtica filosfica, la lingstica, la ciberntica, la semitica, las
ecuaciones infinitesimales o la fsica nuclear y quntica, si no se recurre a la
explicacin simblica, a una explicacin de sus smbolos.
En Occidente, donde Gunon cree que las formas tradicionales se han perdido,
considera que las nicas organizaciones que siguieron siendo iniciticas son la
Francmasonera y el Compagnonnage. As lo afirma en Aproximacin a la iniciacin.
Tanto Marx y como Gunon ensearon que hay que pensar de otra manera y no
continuar repitiendo los pensamientos aprendidos. En el caso de Gunon, es all, en la
iniciacin donde reside la verdadera funcin de lo que denomin 'transmutacin
psicolgica'. Lo de Gunon se distingue de las filosofas contemporneas como
tambin de los sistemas occidentales clsicos. Es importante no confundir la
'realizacin metafsica' en el sentido de Gunon, con una 'metafsica' tal como la
entienden los historiadores de la filosofa. Por eso no se puede equiparar la metafsica
con la ideologa porque esta, para Gunon, sera solamente una consecuencia de
aquella.
Es posible, entonces, que se comprenda dentro de un siglo que todo el desarrollo del
anlisis crtico de las sociedades modernas estuvo marcado por dos enfoques
metdicos, no menos rigurosos uno que el otro, uno 'radical', el de Marx, el otro 'de
principios', el de Gunon, y bien dice Ren Alleu que 'a pesar de estar situados en las
antpodas uno de otro, han aclarado de alguna manera las bases 'terrestres' y las
cspides 'celestes' de las sociedades 'modernas' y 'tradicionales'. Es as que ms all
de una oposicin bastante evidente, el historiador futuro percibir mejor que nosotros
la profunda complementariedad de dos rebeliones de estos dos exiliados que fueron,
con bases muy diversas, Marx y Gunon. A travs de ellos, pueden orse dos grandes
voces: la de un proletariado an oprimido al este y al oeste; la de un Tercer Mundo
culturalmente devastado y econmicamente esclavizado por la sociedad industrial
occidental'.
Tradicin y ciclos
Para Gunon su doctrina cclica, que extrae de la India, excluye toda repeticin, ya que
los cambios se producen agotndose en cada perodo sucesivo. Lo ejemplifica con la
sucesin de las cuatro edades mencionadas, oro, plata, bronce y hierro, proveniente
de la tradicin de Hesodo y Platn. Nos encontraramos, segn la India, al final de la
edad de hierro o de los conflictos (el Kali-Yuga) de acuerdo a la terminologa hind,
perodo al que le seguir un cambio cualitativo, segn la explicacin del metafsico.
Fue Herclito de feso, quien plante una teora de los ciclos, segn lo han
desarrollado Oswald Spengler, Theodor Gomperz y Rodolfo Mondolfo. Deca mi
maestro Mondolfo en su Herclito. Textos y problemas de su interpretacin: 'El
principio universal divino representa para Herclito la inteligencia y la vida universales
(Zeus) que en todo ser, as como en todo el cosmos, se manifiestan como ciclos
incesantes de construccin y destruccin, que se han realizado y se realizarn
infinitas veces en el curso infinito del tiempo. La teora de los ciclos csmicos se
asocia a la del flujo universal de la materia 'eternamente viviente', comparable con el
fluir de un ro cuyas aguas cambian sin cesar. Todo se mueve y cambia
incesantemente, aun cuando sus transformaciones escapan a nuestra percepcin, lo
que le parece a Gomperz una anticipacin heracltea del descubrimiento de los
movimientos invisibles, que explicar ms tarde la teora atomista'.
'Sin embargo -agrega Mondolfo- Herclito nos reserva una sorpresa an mayor con la
intuicin de una ley nica que domina en la vida de la naturaleza tal como en la de los
hombres: ley de medida, ley divina, logos eterno, cuyo imperio sustituye a la
multiplicidad arbitraria de los dioses del politesmo. Gomperz juzga semejante idea
inspirada a Herclito por los descubrimientos pitagricos de la ley del nmero en la
astronoma y en la acstica'.
Sigue Mondolfo expresando que Herclito 'Esta impelido hacia la intuicin de la ley
universal por la exigencia de una permanencia eterna frente al flujo universal de las
cosas; esta permanencia la encuentra en la ley inmutable que se unifica con la materia
animada e inteligente, en la concepcin mstica de la razn universal. No es fcil de
reconocer esta ley o razn universal, porque la naturaleza ama ocultarse; pero (agrega
Herclito) hay que esperar lo inesperado y ver, aun en las leyes humanas, la ley divina
que lo domina todo'.
Concluye aqu Mondolfo: 'Por esta idea de una ley eterna inmutable -dice Gomperz-
herclito pudo ser fuente de una corriente religiosa y conservadora; por el principio de
la relatividad, en cambio, fue iniciador de una corriente escptica y revolucionaria. De
l procede, por un lado, el fatalismo resignado de los estoicos y la identidad hegeliana
entre real y racional; por otro lado, el radicalismo de la izquierda hegeliana y
Proudhon. Puede decirse, segn Gomperz, que Herclito es conservador porque ve en
toda negacin el elemento positivo y es revolucionario porque en toda afirmacin ve
el elemento negativo. La relatividad le inspira la justicia de sus valoraciones
histricas, pero le impide considerar como definitiva cualquier institucin existente'.
Es que en Herclito no solo se presenta el naturalismo jnico sino tambin la
influencia pitagrica y del orfismo inicitico.
Holbach conoci las ideas del martinismo o martinecismo, es decir las de Martnez
(Martnes) de Pasqually (o Pascalis o Pascualis), clebre taumaturgo, para algunos
nacido en 1715 1727 en Grenoble y para otros en Portugal y fallecido, probablemente
en 1774, para unos en Santo Domingo y para otros en Hait. Este sorprendente
personaje fue autor del libro Trait de la rintgration des tres dans leur premires
propiets, vertus et puissance spirituelle et divine, de mucha influencia entre los
masones iluministas e iluminados del siglo XIX. Su discpulo, Luis Claude de Saint-
Martin, (Amboise, Francia, 1743-Aulnay, 1803), tambin mstico y espiritualista,
interes por las doctrinas de su maestro al revolucionario de la Conspiracin de los
Iguales y uno de los precursores del socialismo utpico, Filippo Buonarroti,
compaero del revolucionario Graco Babeuf.
En la primera edicin inglesa de este libro, corregida por el propio Engels, hay una
nota que luego desapareci en las ediciones posteriores, ya fallecidos Marx y Engels.
Este explicaba ''Qual' es un juego de palaras filosficas. 'Qual', en alemn, significa,
literalmente, la tortura que incita a realizar una accin cualquiera. Al mismo tiempo, el
mstico Behme transfiere a la palabra alemana algo del trmino latino qualitas
(calidad). Su 'Qual' era -por oposicin al dolor del desarrollo expontneo de la cosa, de
la relacin, o de la personalidad sometida a su influjo y que, a su vez, provocaba este
desarrollo'.
Dice acertadamente Erich Fromm: 'Para Marx, el hombre se caracteriza por el principio
del movimiento y es significativo que cite al gran mstico Jacobo Behme en relacin
con este punto. El principio del movimiento no debe entenderse mecnicamente sino
como un impulso, vitalidad creadora, energa; la pasin humana, para Marx es la
fuerza esencial del hombre buscando enrgicamente su objeto'.
Es probable que el conocimiento sobre Jacobo Behme lo puede Marx haber obtenido
de su padre, el masn Enrique Marx, ya que en las logias alemanas del siglo XVIII y
XIX los libros de Behme eran de lectura comn. Todava los masones escocistas
estudian, entre otros, a Behmen. Si bien Ramn Martnez Zalda lo incorpora a
Carlos Marx como miembro de la masonera o iniciado en algn momento de su vida,
no existen pruebas concluyentes de ello. En cambio, hay documentacin sobre el
carcter de masn de Enrique Marx, su padre, difundido recientemente por la
masonera nrdica.
Considero, sin embargo, que el conocimiento sobre Jacobo Behme podra haberlo
adquirido Marx del propio Hegel, que le dedic al sabio y mstico del siglo XVI un
captulo en sus Lecciones sobre Historia de la filosofa. Sobre la vinculacin posible
aunque no probada suficientemente de Hegel con la masonera me he referido en mi
libro La masonera. Poltica y sociedades secretas.
Pero no solo los masones o msticos interesaban a los revolucionarios por sus ideas.
Algunos de ellos como el taumaturgo Alphonse-Louis Constant, el clebre 'Eliphas
Lvi', particip activamente de la primera Comuna parisina de 1848, alent a la
socialista y feminista peruana Flora Tristn y debati con Etinne Cabet sobre el
socialismo y el comunismo. El socialista Anatole France se sinti atrado por
personajes como el 'mago Papus', seudnimo del mdico Grard Encausse, sobre
quien dej una interesante semblanza y reportaje y as pas, sucesivamente, con
otros jefes socialistas, como Jean Jaurs, miembro de la francmasonera, que visit la
Argentina y muri asesinado en 1914 por oponerse a la Guerra Mundial.
Esteban Cabet, que public dos libros Viaje a Icaria y El Comunismo, acuando por
primera vez el trmino, habra pertenecido a la direccin de doce miembros de los
Carbonarios. Fund con sus amigos varias 'comunas' al estilo de los Falansterior
fourieristas. Constantn Pecqueur constituy la Sociedad Filadelfa, un socialismo
utopista que proclam: 'Filadelfos de todos los pases, unos'. Fue miembro del Gran
Oriente de Francia.
En la primera mitad del siglo XIX, era enorme la cantidad de ncleos que reunan el
socialismo utopista, el esoterismo, la masonera y el revolucionarismo social basado
en el librepensamiento. Haba expresiones polticas y otras reunan lo poltico con la
masonera, como fue el caso de los Iluminados de Baviera. Competan las sociedades
legitimistas y monrquicas como la Sociedad de los Francos Regenerados, la
Sociedad de los Caballeros del Trpico con las sociedades revolucionarias
republicanas. La cada de la Restauracin permiti el desarrollo de los movimientos
nacionales y sociales que convergieron en la Joven Europa. El revolucionario Blanqui
fue carbonario, pero la sociedad ms significativa fue la de los 'Iluminados de Baviera'
creada algunas dcadas antes, en 1776, por Adam Weishaupt. En Alemania fueron
perseguidos y combatidos pero en Francia pudieron desarrollarse sin grandes
contratiempos. Es probable que el conde de Mirabeau, Saint Just, Camile Desmoulins,
Danton, Herbert y tal vez Marat, hayan pertenecido a esta sociedad. Curiosamente, los
revolucionarios alemanes de 1919, tomaron como nombre el simblico o pseudnimo
de Adam Weishaupt, que fue el de 'Espartaco'. Los revolucionarios encabezados por
Rosa Luxemburgo se denominaron espartaquistas y los principales destacamentos de
obreros, intelectuales, empleados, periodistas y profesionales eran bvaros.
Para tener una idea del plan de las concepciones hermticas y masnicas, me permito
sealar a los filsofos materialistas jnicos (Herclito, Anaximandro, Anaxmenes,
Demcrito, Leucipo, Epcuro, entre otros, y sus continuadores latinos como Lucrecio).
Pero no solo los atomistas y materialistas mecanicistas, sino tambin Pitgoras y su
geometra sagrada. En el segundo rubro, el hermetismo, las doctrinas de los libros
antiguos, como el Poimandrs, concepciones que venan de la Mesopotamia y Egipto,
y fueron probablemente compiladas en Alejandra, y La Tabla de Esmeralda, que
renov posteriormente esta orientacin. Parte de estas doctrinas hermticas se
encuentran tambin en la gnosis juda, cristiana y musulmana suf, en el
neoplatonismo, en los renacentistas italianos (Giovanni Pico della Mirndola y los
llamados humanistas), en la mstica germana de Maese Eckhart, Suso, Tauler, Gaspar
Schwenckfeld, Sebastin Frank, Paracelso, Valentn Weigel y en la Alquimia, Rogelio
Bacon, Arnaldo de Vilanova, Raimundo Lulio, Sendivogius y en el ltimo grupo, los
msticos e idealistas de los siglos XVII y XVIII, especialmente Jacobo Behme, Francis
Bacon, Ren Descartes, Baruch Spinoza, Hlderlin, Scheling, Herder, Goethe, Lessing,
Fichte hasta llegar a Hegel.
Hay, sin embargo, un punto de inflexin, o mejor dicho de conexin entre los antiguos
y los modernos, entre las doctrinas hermticas y la filosofa y la ciencia moderna. Ello
se debi a la fundamental obra escrita y a la actividad pblica de Giordano Bruno,
cuya valenta moral e intelectual pag con un largo cautiverio, torturas y finalmente la
muerte en la hoguera. Pero antes tengo que hacer una referencia al pensador y
filsofo masnico Herder, que Peyret haba ledo. Herder exponente del mundo
masnico de su tiempo y filsofo que desde el campo espiritualista, no olvidemos que
era un pastor cristiano, va al encuentro del materialismo, como ocurrir en el siglo XX
con el eminente Pierre Teilhard de Chardin S. J. y anteriormente con Gassendi, aunque
estos dos ltimos, eran sacerdotes catlicos, que si bien no pertenecieron a la
masonera, no parece casual que el pensamiento teilhardiano fuera respetado hasta
por los masones agnsticos o ateos y en las logias se difundiera el trabajo pstumo
del jesuita, nunca editado, por los menos en castellano, titulado Lo Crstico.
Pantesmo
'...todos los seres que existen, Asclepios, son en Dios, estn producidos por Dios y
dependen de lo alto, ya ejerzan su actividad por medio de los cuerpos, ya sean
vivificados por medio de un soplo o ya reciban en s lo que est muerto: es razonable
que esto sea as. Y digo ms: (Dios) no los contiene sino que, a decir verdad, l es
todos los seres'. (Tratados Hermticos, Poimandrs, Tratado IX, 9, 'Sobre la inteleccin
y la sensacin').
'Dios crea todas las cosas l slo, por mediacin suya, y todas las cosas son partes
de Dios; y si todas ellas son parte de Dios, con toda seguridad Dios es todas las
cosas. As, creando todas las cosas, Dios se crea a s mismo' (Tratados Hermticos,
Poimandrs, Tratado XVI, 19, 'De Asclepios al Rey Amn. Definiciones').
'Al principio haba Dios y hyl, que es como los griegos llaman a la materia. El soplo
estaba con la materia, es ms, estaba dentro de la materia...' (Libro II. Asclepios, IV.
Las Causas Primeras, Dios, la materia, el soplo, 'a) Dios').
Devenir
'La materia constituye el vaso del devenir, y el devenir no es sino el modo de actividad
del Inengendrado y Preexistente, Dios. Al recibir el germen del devenir, la materia
comenz a ser' (Libro III. Fragmentos de Estobeo, Tratado IX, 1, 'De Hermes.
Fragmentos de los discursos a Tat').
Tiempo
'El movimiento del mundo es la vida de la eternidad, y esta vida eterna es su lugar
apropiado. Por ello el mundo no presentar jams reposo ni podr ser destruido,
puesto que esa eternidad de vida le protege como un muro y, por as decirlo, lo
encierra. Este mundo dispensa por s mismo la vida a todos los seres contenidos en
l, y es el lugar propio de todos los seres sometidos al gobierno divino bajo el Sol'.
'En cuanto al movimiento del mundo, es el resultado de una doble operacin: por una
parte, el mundo es vivificado desde el exterior por la eternidad, por otra parte vivifica a
todos los seres contenidos en l, diversificando todas las cosas de acuerdo con el
nmero y el tiempo fijados y determinados por la accin del Sol y el curso de los
astros, habiendo sido prescrito el ciclo regular del tiempo por una ley divina' (Libro II.
Asclepios, XI) El tiempo y la eternidad, 30, 'a) Oposicin').
Movimiento
'...As pues, aunque la eternidad sea estable, inmvil y fija, puesto que el curso del
tiempo, que es mvil, tiende siempre a la eternidad, y dado que este movimiento,
segn la ley del tiempo, es una revolucin cclica, la eternidad parece que est en
movimiento a causa del tiempo, pues ella misma entra en el tiempo, en ese tiempo en
el que todo es movimiento puede tener lugar. De esto resulta que la estabilidad de la
eternidad comporta movimiento, y la movilidad del tiempo se vuelve estable por la
inmutabilidad de la ley que rige su curso...' (Libro II. Asclepios, 31, 'b) Implicacin').
'Por otra parte, lo que es movido, se mueve por la actividad del movimiento que mueve
el Todo, pues la Naturaleza del Todo, abastece al Todo de dos movimientos: uno
segn la potencia propia de esa Naturaleza, el otro segn la actividad. El uno penetra
a travs de la totalidad del mundo y se mantiene en su interior; el otro es coextensivo
al mundo y lo envuelve por fuera; y estos dos movimientos van y vienen
conjuntamente a travs de todas las cosas' (Libro III. Fragmentos de Estobeo, Tratado
XV, 1, 'De Hermes. Fragmento de los discursos a Amn').
'La Naturaleza del Todo, al hacer nacer a las cosas que tienden al ser, concede la
facultad de hacer crecer a todo lo que nace, por una parte, sembrando sus propias
semillas, por otra parte, teniendo a su disposicin una materia mvil'.
'Una vez movida, la materia se calienta y se convierte en fuego y agua, el uno lleno de
vigor y de fuerza, la otra pasiva; el fuego, al ser contrario al agua, seca una parte de
ella y da lugar a la tierra, que flota sobre el agua; el agua continua siendo secada y
separndose del agua, del fuego y de la tierra, y da lugar a un vapor: as nace el aire'
(Libro III. Fragmento de Estobeo, Tratado XV, 2, 'De Hermes. Fragmento de los
discursos a Amn').
Materia
'Hermes: Supn, hijo mo, que la materia existiera separada de Dios, a qu lugar la
asignaras? Acaso (la materia) es algo ms que una masa confusa cuando no est
trabajada? Y si es trabajada, por quin lo es? Pues las energas que operan, ya lo
hemos dicho, son partes de Dios. Por quin son vivificados todos los seres vivos?
Por quin son inmortalizados los seres inmortales? Quin produce el cambio en los
seres cambiantes?'
'Ya hables de materia, o de cuerpo, o de sustancia, has de saber que todas estas
cosas son en s mismas energas de Dios: la materialidad es energa de la materia, la
corporeidad, de los cuerpos, la sustancialidad, de la sustancia, y Dios es el Todo'
(Tratados Hermticos, Poimandrs, Tratado XII, 22, 'De Hermes Trismegisto a Tat.
Sobre el intelecto comn').
'Ahora bien, los elementos, gracias a los cuales toda la materia ha tomado forma, son
cuatro: el fuego, el agua, la tierra, el aire' (Libro II. Asclepios, I. Jerarqua y continuidad
del mundo, 3, 'De Hermes Trismegisto. Libro sagrado dedicado a Asclepios').
'En cuanto a la hyl, es decir, en cuanto a la naturaleza material, y en cuanto al soplo,
aunque sean manifiestamente inengendrados desde el principio, tienen en ellos el
poder y la facultad natural de nacer y de engendrar, pues el principio de la generacin
es una de las propiedades de la materia; sta posee en ella misma el poder y la
capacidad esencial de concebir y traer al mundo; as pues, es capaz de engendrar por
s misma, sin la ayuda de ningn elemento extrao' (Libro II. Asclepios, IV. Las Causas
Primeras, Dios, la materia, el soplo, 'b) La materia').
Evolucin
Dialctica
'...est la Heimarmen, que tras lanzar, por as decirlo as, la semilla, permite que se
produzca, una despus de otra, todas las razas de las cosas futuras; le sigue la
Necesidad, que es la fuerza que impulsa a todas las cosas a alcanzar su trmino
efectivo; y en tercer lugar est el Orden, que mantiene la conexin de todos los
acontecimientos que han sido determinados por la Heimarmen y por la Necesidad.
As pues, la eternidad, que no tiene ni comienzo ni fin, determinada en la ley inmutable
de su curso, cumple su revolucin por un movimiento perpetuo, que nace sin fin y
que, a su vez, debe morir en alguna de sus partes, aunque por el cambio de los
momentos, la parte de ella que muere es la misma que renace...' (Libro II. Asclepios,
XIII, El hombre creador de los dioses, 39, 'XIV) Heimarmen, Necesidad, Orden').
Dioses creados
'...Aqul que dispensa la vida y que nosotros llamamos Jpiter, ocupa el lugar
intermedio entre el cielo y la tierra. En cuanto a la tierra en s misma y en cuanto al
mar, se encuentran bajo el dominio de Jpiter Plutonius, que es el que nutre a todos
los seres vivos mortales y que dan fruto. As pues, las producciones del Sol, los
rboles y la propia tierra deben su subsistencia a las virtudes activas de todos esos
dioses. Pero hay an otros dioses cuyas virtudes activas y operaciones se distribuyen
a travs de todo lo que existe. En cuanto a aquellos dioses cuyo dominio se ejerce
sobre la tierra, un da sern restaurados y morarn en una ciudad en el ltimo extremo
de Egipto, una ciudad que ser fundada en el lado del sol poniente, y donde afluir,
por tierra y por mar, toda la raza de los mortales'.
Fecundidad
'Dios contiene en l todas las cosas y est repleto de la fecundidad de los dos sexos,
siempre fecundo por su propia voluntad, infanta siempre todo aquello que decide
procrear. Su voluntad es toda bondad, y esta bondad que existe en todos los seres
surge naturalmente de la divinidad de Dios, para que todos los seres sean como son y
como han sido, y para que aquellos que existirn posean la facultad de reproducirse.
Que en estos trminos, oh Asclepios!, te sea transmitida la doctrina sobre las causas
y el modo de la produccin de todos los seres' (Libro II. Asclepios, VI) Causas y modo
de la produccin de todos los seres, 20, 'a) Fecundidad del Dios creador').
'Oh Trismegisto! Quieres decir que Dios contiene en s los dos sexos?'
'Hermes: S Asclepios, y no slo Dios, sino tambin todos los seres animados e
inanimados. No puede ser que ninguno de los seres que existen sea infecundo, pues
si a todos los seres que existen en el presente se les quita la fecundidad, las razas
actuales no podrn ser para siempre. En cuanto a m, yo declaro que en la naturaleza
de los seres tambin est la facultad de sentir y engendrar, y que conserva todas las
razas que alguna vez alcanzaron el ser'.
'As es, ambos sexos estn repletos de fuerza procreadora, y la conjuncin de los dos
sexos o, mejor, su unin, puede ser llamada con justicia Eros o Venus, o con ambos
nombres a la vez: y esto es algo que sobrepasa el entendimiento'.
'Por ello ten bien presente en tu espritu, como la verdad ms cierta y ms evidente,
que este gran soberano de toda la naturaleza, Dios, ha inventado y acordado para
todos los seres el misterio de la reproduccin eterna, con todo los seres el misterio de
la reproduccin eterna, con todo lo que sta conlleva de afecto, gozo, con todo lo que
sta conlleva de afecto, gozo, alegra, deseo y amor, don de Dios'.
'Este sera el lugar apropiado para decir con cunta fuerza nos atae este misterio si
cada uno de vosotros, al examinarse a s mismo, no lo supiera por sus ms ntimos
sentimientos. Pues si consideras ese momento supremo y, por el tratamiento
reiterado, percibes el momento en el que cada naturaleza influye en la otra su semilla,
vers cun rpidamente es amparada por la otra encerrndola en s misma, y en este
momento puedes constatar que por la mezcla entre ambas naturalezas la hembra
adquiere el vigor del macho, y el macho se suspende en una femenina languidez...'
(Libro II. Asclepios, 21, 'b) Fecundidad de los seres creados').
Psiquis
Tabla de esmeralda
'Es verdad, sin mentira, cierto y muy verdadero: lo que est abajo es como lo que est
arriba y lo que est arriba es como lo que est abajo para hacer los milagros de una
sola cosa, y as como todas las cosas han sido y han venido de uno por mediacin de
uno, as todas las cosas han nacido de esta cosa nica por adaptacin'.
'Separars la tierra del fuego, lo sutil de lo espeso, suavemente y con gran industria;
subir de la tierra al cielo y de nuevo bajar a la tierra: de este modo recibe la fuerza
de las cosas superiores e inferiores'.
'Por este medio tendrs la gloria de todo el mundo y toda oscuridad se alejar de ti. Es
la fuerza fuerte de toda fuerza, pues vencer toda cosa sutil y penetrar toda cosa
slida. As fue creado el mundo. De esto se harn y surgirn admirables adaptaciones
cuyo medio est aqu'.
'Por eso ha sido llamado Hermes Trismegisto, porque poseo las tres partes de la
sabidura de todo el mundo. Lo que he dicho de la Operacin del Sol est cumplido y
acabado' ('Tabula smaragdina', Corpus Hermeticum, Obras Completas, recopilacin y
notas, por Santiago Jubany i Closas).
La idea del 'Artesano del Universo' hace recordar la idea masnica moderna del Gran
Arquitecto del Universo (GADU), ratificando, una vez ms, la filiacin hermtica de la
francmasonera.
En cuanto a que los dioses habitan sobre una montaa de Libia -segn la referencia
de Hermes en el Asclepios-, se trata de un nuevo mito antiguo, el lugar sagrado, el
'paraso terrenal', una 'tierra de Luz', expresin que tom fuerza con el Maniquesmo y
que aparece en toda la mitologa desde la antigedad: Hiperbrea, Salem, Shambala,
Agartha, o es una isla, Avalon, Thule. Hay centros confesionales que la han
representado en el curso histrico, Babilonia, Tebas, Jerusaln, Roma, Cuzco. Fue el
Castillo de Montsegur, de los ctaros. Pero tambin en el mundo moderno el horizonte
social de los utopistas habl de lugares paradisacos: Utopa, Ciudad Sol, Icaria.
Durante la Revolucin Francesa de 1789, y las dos Comunas del siglo XIX, Pars
cautiv a los revolucionarios del mundo y all iban a morir por un ideal.
Los masones hablan de una 'Jerusaln celeste' o mtica, la que dicen construir por la
labor que realizan en sus templos y por la accin que despliegan en la vida profana. El
grado 19 del Rito Escocs Antiguo y Aceptado tiene como ttulo 'Prncipe de la
Jerusaln Celeste' y eso se repite en casi todos los ritos: es la palabra de pase de los
Caballeros del Arco Iris, lleva ese nombre en el grado 68 del Rito de Misraim; se
denomina Prncipe de Jerusaln al trado 6 del Rito Primitivo de los Filadelfos de
Narbona; era el grado 8 del Rito del Martinismo, 8 del Escocismo Reformado de
Tschoudy, 16 del Rito de Heredom, 45 del Rito de Misraim; o Soberano Comendador de
Jerusaln para el grado 27 del Rito Escocista y Proslitos de Jerusaln para el grado
68 del denominado Captulo Metropolitano.
Masonera y hermetismo
Fue tan importante su coleccin particular sobre cuestiones hermticas y otros temas
similares que, en 1677, don su gran coleccin de antigedades con el objeto de
organizar el Ashmoleam Museum, la primera institucin britnica de su clase,
instalada en 1638 en un edificio especial. Posteriormente cedi su biblioteca sobre
alquimia y otras materias afines a la Universidad de Oxford.
Ashmole fue amigo de los alquimistas William Lilly y George Wharton y habra
recibido lecciones prcticas de W. Backhouse (1651). A. E. Waite sostuvo
atinadamente que no existen ms que fbulas sobre la pertenencia de Ashmole a una
organizacin rosacruz. Pero la masonera s le debe a este pensador ingls, nacido en
Lichfield, los rituales que constituyeron representaciones eclcticas de los Misterios
de la antigedad y que fueron adoptados en 1717 por las logias londinenses aunque
luego, Anderson, desde su ptica presbiteriana-confesional, haya tratado de diluirlos.