Cartilla Educación Sexual
Cartilla Educación Sexual
Cartilla Educación Sexual
[email protected]
CELULAR: 0387- 154838485
MODULO N 1
LEY NACIONAL DE EDUCACIN SEXUAL INTEGRAL
Introduccin:
El 23 de Octubre de 2006 se sancion en el honorable congreso de la Nacin la Ley de Educacin
Sexual Integral 26.150, que crea el Programa de Educacin Sexual Integral que seala la
obligatoriedad de brindar educacin sexual integral en todos los establecimientos educativos
privados y pblicos del pas, desde el Nivel Inicial hasta el Superior de Formacin Docente y de
Educacin Tcnica no universitaria. Al tener carcter de ley se transforma en un derecho del
educando y un deber del Estado.
sta ley fue diseada dentro del marco legal ms general de la Constitucin Nacional, que establece
la garanta de los derechos de los nios, nias y adolescentes a acceder a los mejores niveles de
salud, de informacin y a desplegar sus capacidades y potencialidades sin riesgos para sus vidas y
dentro del marco especfico de la Ley Nacional de Educacin.
La Ley de Educacin Sexual Integral considera a la educacin en sexualidad como una prctica
intencional que a diferencia de concepciones tradicionales parte en primer lugar del educando, de
sus experiencias, de su contexto.
Una relacin que tiene un sentido intencional de desarrollar capacidades, habilidades, modos de
relacin, es decir, modos de sentir, actuar y pensar. Una relacin que implica espacios de
intercambio, de experiencias y de enriquecimiento mutuo.
El educando es el punto de partida y de llegada de procesos educativos que le otorgan la posibilidad
de construir y reconstruir representaciones acerca de la vida y de s mismo y que le permiten la
participacin cultural, activa y crtica.
Si la sexualidad es un componente fundamental de la persona -comprendida desde los aspectos
biolgicos, psicolgicos, sociales, culturales, afectivos y ticos, aspectos que conforman e integran
una unidad- y de la relacin con los otros, entonces, se construye desde el nacimiento y a lo largo de
toda la vida. Construccin que se realiza en el marco de procesos sociales de encuentro con el otro
y con el entorno socio cultural en el que vive.
La construccin de la sexualidad es armona, proceso, crecimiento continuo, respeto por los tiempos,
los espacios y las creencias propias y de la comunidad educativa y social.
Bajo este enfoque, la Educacin Sexual Integral de nios, nias, adolescentes y jvenes, implica la
participacin de la familia, escuela y comunidad, propiciando procesos integrativos y armonizantes
en una doble dimensionalidad que apunta no solo a la constitucin de ciudadanos sino tambin a la
conformacin holstica del ser humano entendido en toda su plenitud como un verdadero ethos
cultural.
Ofrecer oportunidades de ampliar el horizonte cultural desde el cual cada nio, nia o
adolescente desarrolla plenamente su subjetividad reconociendo sus derechos y
responsabilidades y respetando y reconociendo los derechos y responsabilidades de las otras
personas.
Estimular la apropiacin del enfoque de los derechos humanos como orientacin para la
convivencia social y la integracin a la vida institucional y comunitaria, respetando, a la vez, la
libertad de enseanza, en el marco del cumplimiento de los preceptos constitucionales.
Propiciar aprendizajes basados en el respeto por la diversidad y el rechazo por todas las
formas de discriminacin.
A nivel de la tarea educativa, el aporte central de los lineamientos curriculares es la orientacin para
la seleccin y definicin de contenidos vinculados con la ESI para cada nivel educativo. Esta
seleccin responde a una organizacin por reas, de modo de facilitar la inclusin de los temas en
las planificaciones institucionales y ulicas.
En la primaria y nivel inicial es pertinente un abordaje transversal, es decir como un contenido
presente en los diversos espacios curriculares contemplados en el Proyecto Curricular Institucional.
En la secundaria, la educacin sexual integral sin perder la transversalidad, podr abordarse como
materia independiente.
Orientaciones para la articulacin entre la ESI y el Diseo curricular para Educacin Inicial:
En el Nivel Inicial, se definen cuatro agrupamientos de contenidos, tanto conceptuales como
actitudinales y procedimentales:
Orientaciones para la articulacin entre la ESI y el Diseo curricular para Educacin Primaria:
En el Nivel Primario, las reas contempladas por los lineamientos curriculares son las siguientes:
Ciencias sociales.
Ciencias naturales.
Lengua.
Educacin fsica.
Educacin artstica.
Por otra parte, acerca de la educacin sexual en el nivel superior, especficamente en el mbito de la
formacin docente, la prioridad radica en la capacitacin a quienes tienen y/o tendrn la
responsabilidad de llevar a cabo las estrategias de ESI en las escuelas.
En este sentido, explicita: El rol protagnico que ocupan los docentes en ofrecer a los alumnos y
alumnas oportunidades formativas integrales en la temtica, obliga a disear acciones sistemticas
que ofrezcan a los docentes la posibilidad de alcanzar una slida formacin integral inicial y una
capacitacin continua que comprenda, en primera instancia, la reflexin y problematizacin de sus
saberes previos y representaciones sobre la sexualidad.
De esta manera queda establecida no solo la finalidad de las instituciones educativas en la
enseanza de la educacin sexual integral sino principalmente su funcionalidad en la conformacin
de ciudadanos cuyo desarrollo pleno se basa en la conformacin a lo largo de su vida de su proyecto
personal.
LA SEXUALIDAD HUMANA
Los seres humanos, a diferencia de las dems especies, poseemos sexualidad mientras que el resto
posee sexo. El sexo surge del dato biolgico y su objetivo fundamental es la supervivencia
filogentica mientras que la sexualidad supera lo biolgico y se inscribe en el plano de lo simblico
de la experiencia humana misma.
La sexualidad si bien parte de un rasgo biofisiolgico al ser una dimensin constitutiva del ser
humano al igual que el mismo no se mantiene al margen de la interaccin con el entrono que lo
rodea y en ese accionar de mutua construccin la misma va adquiriendo sentidos mediatizados que
la diferencia no solo de acuerdo a pocas histricas sino entre los diferentes sujetos.
Es decir que la sexualidad como un constructo ha de ser sumamente compleja, heterognea,
diferencial y nica en cada sujeto en funcin de las formas en que los mismos acten con sus
entornos y las mltiples maneras en que estos sean interiorizados por los primeros.
Por consiguiente si bien existe un componente gentico que nos permite la sexuacin el proceso de
construccin de nuestra sexualidad supera lo rgidamente prescripto por la herencia y se constituye
en una potencialidad que se materializa de manera diferencial en cada uno de los contextos de
realizacin del sujeto.
Para comprender claramente este complejo juego de interacciones y mediatizaciones partamos de la
definicin que la Organizacin mundial de la Salud otorga a la sexualidad y observemos su
multidimensionalidad.
La Organizacin Mundial de la Salud (OMS) en colaboracin con la Asociacin Mundial de Sexologa
(WAS) en Guatemala en Mayo del 2000 determina que:
El trmino sexualidad se refiere a una dimensin fundamental del hecho de ser un ser
humano. Basada en el sexo, incluye al gnero, las identidades de sexo y gnero, la
orientacin sexual, el erotismo, la vinculacin afectiva y el amor, y la reproduccin. Se
experimenta o se expresa en forma de pensamientos, fantasas, deseos, creencias, actitudes,
valores, actividades, prcticas, roles y relaciones. La sexualidad es el resultado de la
interaccin de factores biolgicos, psicolgicos, socioeconmicos, culturales, ticos y
religiosos o espirituales. Si bien la sexualidad puede abarcar todos estos aspectos, no es
necesario que se experimenten ni se expresen todos. Sin embargo, en resumen, la sexualidad
se experiencia y se expresa en todo lo que somos, sentimos, pensamos y hacemos.
Esta forma de considerar a la sexualidad implica necesariamente una nueva manera de concebir al
ser humano como un sujeto constituido por mltiples dimensiones que lo atraviesan y conforman y a
la sexualidad como una ms de las tantas que le permiten el desarrollo de s en el proceso de
identificacin en el mundo y con los otros, es concebir al sujeto como un todo holstico es decir que
7
sus dimensiones son conductos irreductibles que no son posibles de separar para analizar sus
componentes sin perder su cualidad holstica en donde el todo es ms que la suma de sus partes en
la medida en que en la interrelacin de las mismas construye nuevas cualidades que subsumen a
las existentes en las dimensiones separadas .
Dimensiones de la sexualidad humana:
Segn Martin la sexualidad es ms que sexo y genitalidad. La vida y el ser del hombre no se agotan
en la dimensin biolgica o Physis.
Por su parte Belgich considera que la sexualidad es, en oposicin al sexo, la capacidad afectiva que
el sujeto despliega en sus relaciones intersubjetivas. Es, en esencia, la energa sexual que dispone
para cargar objetos y envolverlos con libido (entendida como energa sexual en sentido freudiano)
Es decir, que la sexualidad es ms que el sexo. Es el sexo en cuanto asumido por una psiquis
humana, en cuanto es contextualizado en un ethos cultural, en una familia, en una cultura, en una
sociedad, en un momento histrico especfico atravesado por valores, creencias, representaciones e
imaginarios.
La sexualidad incluye y concreta el afecto, las emociones, fantasas, miedos y culpas. Se nace con
un sexo y se aprende a vivir (adecuada o inadecuadamente) con una sexualidad.
Esta concepcin de sexualidad se fundamenta en una concepcin de sujeto especfico que no se
realiza en un vaco contextual sino por el contrario es un sujeto producido en y con el medio.
Desde Riviere este sujeto no es solo un sujeto relacionado, es un sujeto producido. No hay nada en
l que no sea la resultante de la interaccin entre individuos, grupos y clases. Ello significa que no
hay nada en el sujeto que no implique la presencia de otro social, culturizado.
Parafraseando a Martn1, la ley parte de una antropologa superadora del dualismo, o sea de la
divisin del ser humano entre mente y cuerpo, lo considera al mismo un ser ntegro. Considera al ser
humano como una unidad constituida por dimensiones o aspectos biolgicos, psicolgicos, sociales,
afectivos y ticos.
Por ello, a los efectos de la ley de Educacin Sexual Integral se entiende como educacin sexual
integral la que articula aspectos biolgicos, psicolgicos, sociales, afectivos y ticos.
Este posicionamiento implica necesariamente el desarrollo de un enfoque comprehensivo,
personalista, holstico e integral, el cual tiende a procesos tanto de hominizacin y humanizacin, de
madurez en la percepcin de las distintas reas que integran este estudio, y exige un esfuerzo
educativo convergente (multi, inter y transdisciplinario) y complejo, pero gratificante ya que sus
logros tienden a un desarrollo pleno del ser humano.
Dimensin Biolgica:
Existe una anatoma diferenciada para el varn y para la mujer, determinada desde el momento de la
fecundacin. Los rganos sexuales y el sistema nervioso desempean su papel en momentos de
excitacin y deseo sexual
La sexualidad
especie.
Dimensin psicolgica:
En esta dimensin del ser sexuado puede dividirse en dos: la intelectual (desarrollo que permite
disponer de las capacidades y potencialidades que permite convertir el instinto sexual en un impulso
capaz de controlar) y la afectiva (por la cual se relaciona e involucra sensaciones y sentimientos).
Este proceso en los adolescentes es la identificacin sexual.
La sexualidad se integra en el yo ntimo, que siempre se define a s mismo como ser sexuado, se
percibe desde adentro y se proyecta hacia afuera en su masculinidad, femineidad o la mezcla de
ambos.
Existe un indisoluble vnculo entre la personalidad humana y la sexualidad: la personalidad es
siempre sexuada y la sexualidad tiene un carcter personalizado. Nacemos con un sexo biolgico,
pero devenimos psicolgica y socialmente sexuados a travs de un proceso que discurre en los
marcos del desarrollo ontogentico de la personalidad y conduce a la construccin individual activa
de la identidad de gnero (conciencia y sentimiento ntimos de ser hombre, mujer o una mezcla de
ambos), la orientacin sexoertica (direccin de las preferencias sexuales hacia el otro sexo, el
propio o ambivalente) y el correspondiente rol de gnero (expresin pblica de la identidad asumida
a travs del desempeo de diversos papeles en la vida sexual, de pareja, familiar y social), que son
los componentes psicolgicos medulares de la sexualidad
Dimensin sociocultural:
En cada cultura y sociedad hay una serie de normas y se establecen determinados roles para el
hombre y la mujer.
El ser humano interioriza las normas en un proceso de socializacin, llegando a influir en parte en su
personalidad. Asume su sexualidad de acuerdo a los patrones culturales de su medio.
Al asumir su sexualidad, cada individuo lo hace a travs de este proceso llamado socializacin que
culmina con la tipificacin sexual. Este aspecto o dimensin est estrechamente ligado a los
contextos que rodean al ser humano, es decir a formas aprendidas de comportamientos respecto al
placer sexual, de lo que est permitido o prohibido, de lo que es un mito o leyenda
Dimensin tica:
Esta dimensin hace referencia al conjunto de valores que cada uno incorpora durante su vida, los
que definen el ser y el quehacer sexual. En un proceso de autoconocimiento, auto- valoracin, autoestima y discernimiento. La misma se desarrolla no solo en la interaccin con el otro sino
fundamentalmente en el reconocimiento del otro como diferente a m pero necesario para mi
completitud.
ACTIVIDADES MODULO N 1:
Analice detalladamente los propsitos formativos de los Lineamientos Curriculares:
1. Responden al concepto de Educacin Sexual Integral? Fundamente conceptualmente su
respuesta.
2. Consideran las distintas dimensiones
conceptualmente su respuesta.
de
la
sexualidad
humana?
Fundamente
MODULO N 2
DESARROLLO PSICOSEXUAL DESDE LA INFANCIA A LA ADOLESCENCIA
A continuacin se presentan las diferentes etapas del desarrollo psicosexual del ser humano hasta la
adolescencia desde una perspectiva holstica e integral.
Tambin se indagar sobre los factores como la afectividad, el erotismo y los complejos que se
relacionan con el desarrollo psicosexual.
Cabe mencionar que el abordaje de la sexualidad y de la educacin sexual puede encararse desde
diferentes posturas. En este espacio, con la intencin de profundizar el anlisis, trabajaremos
algunos aportes psicolgicos y sociales que permitan construir ideas para tenerlas en cuenta
luego en el trabajo en el aula o bien realizar las derivaciones
Desarrollo psicosexual en la infancia
En principio desarrollaremos algunos aportes de Sigmund Freud, autor de la teora psicoanaltica.
De acuerdo a este autor, el hombre ha sufrido un triple descentramiento. En primer lugar y como
consecuencia de los descubrimientos en el campo de la fsica y la astronoma, la Tierra dej de ser
el centro del universo; con el Evolucionismo, el hombre mismo pas a formar parte del reino animal;
el descubrimiento del inconsciente rest a la conciencia su importancia como centro regulador de la
actividad psquica.
El psicoanlisis establece una serie de fases a travs de las cuales se verifica el desarrollo del
sujeto. Desde el punto de vista de dichas fases, los conflictos psquicos - y su posibilidad de
resolucin- dependern del estancamiento de una fase (fijacin) o del retorno a una fase precedente
(regresin). De ah que esta teora apunte a un concepto dinmico sobre lo psquico. Las fases del
desarrollo psicosexual segn Freud son las siguientes:
Fase Oral: Comprende los doce-dieciocho primeros meses del bebe. Esta primera fase libidinosa
se relacionada con el placer del beb en el momento de la alimentacin, en la que tanto labios
como boca tienen un papel preponderante. La satisfaccin ligada en un primer momento al acto
de comer, adquirir pronto autonoma, como en el caso del mero chupeteo, y se convertir a su
vez, en el prototipo inicial de toda satisfaccin.
Fase Oral-sdica: Es considerada una segunda etapa de la fase oral, coincidente con la aparicin
de la denticin y, por tanto, ligada al acto de morder. Dado que la nueva adquisicin tiene un
sentido destructivo (aunque slo sea implcitamente), da lugar a la aparicin del concepto de
ambivalencia (relacin de amor-odio respecto a un mismo objeto).
Fase Anal: Se extiende, aproximadamente, entre los dieciocho meses y los cuatro aos. La
actividad anal adquiere unas connotaciones libidinosas. El ano se constituye en la zona ergena
(fuente corporal de excitacin) por excelencia. Otra caracterstica de esta fase es la aparicin de
la polaridad actividad- pasividad, ligada a la posibilidad tanto de retener como expulsar los
excrementos.
Fase Flica: En este momento, las pulsiones parciales de fases precedentes se concretan en una
cierta primaca de lo genital. Es la primera organizacin libidinal del nio respecto al caos de las
pulsiones parciales anteriores (orales-anales), que se completar mas adelante en la pubertad.
10
De la forma especfica en que se afronten las distintas fases, dependern las caractersticas
psquicas del sujeto. Desde un punto de vista patolgico, las perturbaciones en las distintas fases
darn lugar a fijaciones o regresiones, que se traducirn en el adulto en estados de neurosis o
psicosis.
Complejos psicosexuales durante la infancia
Veremos muy sintticamente los complejos desde el punto de vista de la teora psicoanaltica, para
que de esta manera nos acerquemos a la comprensin del psiquismo infantil.
El complejo de Edipo, tiene lugar de manera aproximada, entre los tres y los cinco aos. El complejo
de Edipo es una de las concepciones mas controvertidas del sistema freudiano. Y segn la forma en
que el sujeto resuelve este conflicto nuclear aparecern o no perturbaciones neurticas posteriores.
En cuando a su significado esencial es que el nio se halla situado en una especie de tringulo
afectivo con relacin a sus padres, de modo que est envuelto en una red de deseos amorosos
hostiles con respecto a aqullos.
Segn Freud, el Edipo se resuelve por el temor (la fantasa del varn ser castrado por su padre).
Evidentemente, este postulado es radicalmente abstracto. Una manera de explicarlo, lo ms
sencillamente posible, sera sta: el padre se interpone en una suerte de <<idilio>> entre madre e
hijo. Sin embargo el nio percibe que el padre es el sujeto amoroso de la madre (es su rival). Por
otro lado tambin participa del afecto de su padre, del que se siente corresponsable. Este conflicto
ir perdiendo fuerza (es decir, el nio renunciar a poseer a la madre), en la medida que el nio se
sienta ligado al padre por un fuerte afecto, y por el temor de ser castigado por el. De esta manera, la
madre deja de ser el todo para el nio, el cual realizar un desplazamiento de sus sentimientos
amorosos hacia otros objetos.
Freud desatendi el mecanismo de Edipo en los casos de las nias, para limitarse a afirmar que el
complejo de castracin (es decir, el resentimiento por la ausencia del pene) promueve su entrada al
complejo de Edipo. Ciertamente ni siquiera a un nivel simblico es aceptable este postulado, el cual
implica que la fisiologa distinta de la nia, con respecto al varn, es el ncleo del problema.
La persona debe superar las distintas fases de evolucin pulsional hasta acceder al estado de
madurez, en que los instintos primigenios son sacrificados en aras de un desarrollo armonioso de las
potencialidades creadoras humanas. Igual que los nios varones pasan una fase en la que se
enamoran de mam, las nias viven una poca en la que estas se enamoran del pap.
Para la nia, el proceso es un poco ms complicado que en el caso de los varones. Tambin ella
dirige sus primeros sentimientos de amor hacia la madre, pero al hacerse mayor debe transferirlos al
padre, una persona del sexo opuesto. En este proceso le ayuda el hecho de que su creciente trato
con otras personas -por ejemplo en el jardn de infantes- le hace sentirse un ser distinto a la madre:
una pequea mujercita enamorada que hace todo lo posible para atraer la atencin de su objeto de
amor.
En nuestra sociedad, la mayora de las madres pasan ms tiempo en casa que los padres, de
manera que la nia tiene que vivir sus sentimientos romnticos hacia el padre ms en la fantasa que
en la realidad. La rivalidad con la madre hace que la pequea se sienta mal. Mam es la que la
cuida y se ocupa de ella. Estos temores se expresan a menudo en pesadillas en las que la nia se
ve perseguida por brujas.
En una familia normal, la nia aprende con el tiempo que pap pertenece a mam y ella no puede
tenerlo. Poco a poco renuncia a sus sentimientos romnticos hacia el padre y los dirige a otra -an
nebulosa- figura masculina: el hombre con quien se casar algn da. Al mismo tiempo comienza a
identificarse con la madre, que le da el ejemplo de la mujer que ella ser cuando sea mayor.
Y EN LA ADOLESCENCIA QUE OCURRE CON LA SEXUALIDAD?
Conceptuar la adolescencia implica definir criterios polifacticos en el aspecto biolgico psicolgico
espiritual y social de una fase vital del hombre y la mujer en la cual se deja atrs la infancia en la
bsqueda del camino hacia la adultez.
11
La adolescencia y sus cambios puberales dan inicio de una intensa sexualidad y de sentimientos
relacionados que al ser expresados generan ansiedad disgusto y rechazo por parte de los adultos y
temor, culpa o vergenza en los jvenes. Esto induce al ocultamiento del sentir, que dificulta la
comunicacin y el desarrollo de una sexualidad bien orientada, favoreciendo el aumento de una
actividad sexual temprana embarazos no deseados abortos enfermedades de transmisin sexual y
de cncer uterino.
Qu podemos decir del desarrollo fsicopsicolgico del adolescente?
El comienzo de la pubertad esta relacionado (en lo fsico) con cambios muy notorios en la estatura,
complexin y rasgos faciales.
La hormona del crecimiento acelera el desarrollo que lleva al cuerpo hasta casi su altura, peso
adulto, en dos aos, aproximadamente. Este rpido desarrollo se da antes en las mujeres que en los
varones; ellas maduran fsica y sexualmente antes que los varones. La madurez sexual en las
mujeres viene marcada por el comienzo de la menstruacin y en los varones por la produccin de
semen y las eyaculaciones nocturnas. Las hormonas que dirigen estos cambios son los andrgenos
(en el varn) y los estrgenos (en la mujer).
Estas sustancias provocan la aparicin de las caractersticas sexuales secundarias que son las
manifestaciones que resultan de los cambios hormonales como por ejemplo: el cambio de voz,
desarrollo del vello facial.
Recordemos que las caractersticas sexuales primarias corresponden
internos y externos: ovarios, pechos, tero, pene y testculos.
La adolescencia es una etapa en la que contina el proceso de sexuacin iniciado desde el mismo
momento de la concepcin, que supone la integracin de diversos niveles que conforman el hecho
sexual humano cuya naturaleza es biolgica, psicolgica y social.
No puede reducirse solamente a la aparicin y desarrollo de los comportamientos sexuales en esta
etapa, sino a modo de integrarse en el mundo en tanto que mujer u hombre y los procesos
implicados en ello.
La adolescencia es una etapa intensa en el proceso de sexuacin. Si afirmamos que la sexualidad
es la manera en que nos integramos como personas sexuadas, es el modo de vivir esta realidad,
entonces la adolescencia es la etapa en la que el proceso de sexuacin va a producir
transformaciones especiales para tal fin.
Estas se van a producir en tres reas:
En la redefinicin de la identidad sexual
En la aparicin y configuracin del deseo sexual,
La evolucin de los afectos relacionados con la sexualidad.
Qu se entiende por sexualidad?
Goldstein y Gleizer (2006) definen a la sexualidad como: un concepto que integra la historia
personal de cada individuo, incluyendo su contexto histrico y sociocultural, sus cuerpos,
sentimientos y emociones.
A su vez el manual de Medicina de la Adolescencia expone lo siguiente: La sexualidad es una parte
integral de nuestras vidas, es una de sus caractersticas que involucra esferas ms amplias en el
mbito biolgico psicolgico espiritual y socio cultural define la base que nos permite comprender el
mundo y vivirlo como hombre o como mujer. La sexualidad es un proceso en permanente
construccin y resignificacin.
La sexualidad es una necesidad humana expresada a travs del cuerpo elemento bsico de la
feminidad o masculinidad de la auto imagen y de la autoconciencia del desarrollo personal.
12
Como bien sabemos, los afectos, los deseos, las conductas sexuales, las fantasas ocupan un
espacio muy importante en la vida de las personas y de los grupos sociales. De ah, que no nos
vamos a referir a la sexualidad como una funcin solamente biolgica, debemos considerar tambin
los aspectos social, tico, psicolgico y sanitario.
El deseo sexual
Etapas de la adolescencia
Adolescencia Temprana (1213 aos): Caracterizada por el inicio de la maduracin sexual,
extrema curiosidad por su cuerpo y pares, muchas fantasas sexuales, explotacin acentuada de
autoerotismo y se interrelaciona con una sexualidad donde lo fsico no predomina (coquetera,
amor platnico, etc.)
Adolescencia Media (1417 aos): Caracterizada por la completa maduracin sexual, narcisismo,
manifestacin de alta energa sexual con nfasis en el contacto fsico y conducta sexual
exploratoria (pueden presentarse experiencias homosexuales, relaciones heterosexuales no
planificadas), negacin de las consecuencias de la conducta sexual (por sentimiento de
invulnerabilidad, falta de informacin y educacin sexual), relaciones intensas y fugaces.
Adolescencia Tarda (Mayores de 18 aos): Caracterizada por la completa maduracin fsica y
socio cultural, logros definitivos en la maduracin psicolgica, conducta sexual ms expresiva y
puede establecer relaciones intimas ms estables, con definicin de su rol sexual.
Mientras se va desarrollando un conocimiento de lo que tenemos o somos, el contexto social enva
mensajes significativos
sobre los roles genricos, as tambin nosotros
observamos e
incorporamos patrones de comportamientos a nuestro repertorio de conducta.
El rol sexual constituye otro aspecto de la sexualidad que es la manera de cmo nos comportamos
como varones y mujeres. La expectativa del rol sexual, que los nios recogen desde muy temprano,
es no actuar como si fuera del otro sexo. Estas calificaciones tienen una efecto limitante sobre lo
sobre los jvenes varones, a quienes de los desalienta a explorar inclinaciones que tienen que ver
por Ej., con la danza
Como aspecto ms sobresaliente de nuestra sexualidad se incluyen las actitudes y valores
acerca del comportamiento sexual, el gnero y el rol sexual. As podramos hacer referencia a la
identidad genrica o del gnero, la cual es la tiene que ver con el reconocimiento y la aceptacin
de nosotros mismos como varn y mujer.
La afectividad en la Psicosexualidad del adolescente.
Se pueden clasificar en:
Los afectos pueden ser considerados como indicadores de necesidades bsicas, en el terreno de las
dimensiones afectiva y sexual, y la necesidad de seguridad emocional. La primera se refiere al
deseo sexual mientras que la segunda se refiere a la necesidad de seguridad emocional.
Se puede definir que el amor romntico es como un proceso de apego, es decir adopcin de la
persona amada como figura de apego, de seguridad y puerto de refugio.
El enamoramiento puede ser interpretado como una fuerza adicional que impulsa al individuo hacia
la persona amada cuyo fin es garantizar la vinculacin. Por ello el enamoramiento es un estado con
una duracin determinada y el amor es un sentimiento estable. En trminos psicolgicos el deseo
sexual y el amor romntico son dos dimensiones diferentes, se pueden expresar de manera
13
independiente a lo largo de diferentes momentos vitales, aunque todo parece indicar que el deseo
sexual y el amor romntico generalmente se funden en una misma persona, de hecho las teoras del
amor contemplan la pasin, en tanto que la atraccin ertica, como un componente principal.
Los nios y adolescentes tienen intereses sexuales y expresan en conducta su sexualidad. Pero la
sexualidad cambia en relacin con la edad, de forma que en cada periodo de la vida tiene
caractersticas propias. El desarrollo psicosexual del ser humano va paralelo al desarrollo evolutivo
general y, como este ltimo, es nico es decir a que cada nio o nia tiene su propio patrn de
desarrollo, sigue una secuencia de etapas.
Psicosexualidad en el desarrollo de la autoestima y los vnculos
Hemos realizado un recorrido por las diferentes etapas del desarrollo psicosexual y hemos
explorado del perodo de la infancia el complejo de Edipo en la nia y el varn; y de la adolescencia,
la configuracin del deseo sexual vinculada a la afectividad. Esta ubicacin contextual del desarrollo
psicosexual de la persona fue necesaria para abordar otros conceptos fundamentales que
permitirn comprender su naturaleza compleja que junto a otras reas disciplinares hacen posible
configurar a la educacin sexual en un rango de integralidad.
Un concepto central es el de la construccin de la identidad que Gmez Zapiain la define como la
conciencia de ser un ser autnomo y diferenciado de los dems.(2005)
La construccin de la identidad comprende un proceso en el cual, alrededor de los tres aos, los
nios y las nias adquieren la identidad de ncleo genrico o identidad bsica de gnero. En este
sentido, desde un punto de vista evolutivo, los nios y las nias perciben por primera vez, su
identidad sexuada (Lpez, 1988; Kholberg, 1973). Pero cabe aclarar que en realidad, la identidad
sexual y de gnero adquirir una madurez, recin a lo largo de la adolescencia.
Pero previamente a hacer referencia a la pubertad y la adolescencia, es necesario hacer una
aclaracin terminolgica: La identidad sexual hace referencia a la conciencia de pertenecer a uno
sexo en funcin de los atributos corporales en especial los genitales, mientras que la identidad de
gnero hace referencia a los contenidos de la identidad que provienen de las atribuciones que una
cultura determinada hace al hecho de ser mujer u hombre, respecto a actitudes, valores,
comportamientos, etc. (Gmez Zapiain, 2005)
Entonces podemos decir que la sexualidad es el modo de vivir el resultado de la propia sexuacin.
Siguiendo con los cambio que ocurren en la adolescencia es importante comprender comprender
como se conforma el deseo sexual en esta etapa, de acuerdo con el autor Levine (19881992).
Este autor indica que el deseo sexual esta constituido por tres elementos moderadamente
independientes:
El impulso sexual representa la base biofisiolgica del deseo sexual, esta constituido por lo que
podramos considerar el sistema sexual. La testosterona es la hormona relacionada con el deseo
sexual en ambos sexos. Hace referencia a la activacin que puede generarse desde la propia
dinmica biolgica, o inducirse a partir de determinados incentivos, es decir, estmulos que en
diversas situaciones tienen valencia ertica, activacin en definitiva.
El motivo constituye la articulacin psicolgica del impulso sexual. Representa la disposicin
hacia la actividad sexual. Se manifiesta por la integracin del impulso en el conjunto de la
personalidad y supone la aceptacin o el consentimiento de la activacin sexual, la disposicin
hacia lo ertico.
El anhelo se corresponde con la representacin socio cultural del deseo sexual y significa el
deseo de llegar a estar involucrado en la experiencia sexual, siendo este componente
independientemente del impulso y del motivo. Estos tres componentes del deseo sexual son
realidades moderadamente separada, la armona entre ellos producen una adecuada integracin
del mismo.
El deseo sexual se instala en un sustrato biolgico heredado genticamente que produce una
predisposicin comportamental a la bsqueda del placer sexual. Esta activacin es interpretada e
14
El grupo social donde nace el nio, necesita tambin de la incorporacin de este para mantenerse y
sobrevivir y, por ello, adems de satisfacer sus necesidades, le trasmite la cultura acumulada a lo
largo de todo el curso del desarrollo de la especie. Esta transmisin cultural implica valores, normas,
costumbres, asignacin de roles, enseanza del lenguaje, destrezas y contenidos escolares, as
como todo aquello que cada grupo social ha ido acumulando a lo largo de la historia y se lleva a
cabo a travs de determinados agentes sociales, que son los encargados de satisfacer las
necesidades del nio e incorporarlo al grupo social.
Entre estos agentes sociales estn determinadas personas, la madre, el padre, los hermanos, otros
familiares, amigos, maestros y otros adultos, algunas instituciones familia y escuela, los medios de
comunicacin social y otros instrumentos, libros, juguetes. Todos ellos tienen una importancia
decisiva en el proceso de socializacin del nio.
Los procesos de socializacin son fundamentalmente tres:
Procesos mentales de socializacin: adquisicin de conocimientos;
Procesos afectivos de socializacin: formacin de vnculos;
Procesos conductuales de socializacin: conformacin social de la conducta.
Ya en el segundo trimestre de vida, antes de los seis meses, los nios reconocen perfectamente a
determinadas personas que adquieren un gran significado conductual para ellos. Este
reconocimiento, puesto de manifiesto en numerosas conductas, exige que los nios tengan, al
menos, un rudimentario concepto de la persona. Ya durante el segundo semestre se produce un
cambio cualitativo en el conocimiento social de los conocidos y extraos. Los nios no solo
discriminan entre personas que le son familiares y los conocidos, sino que adoptan una posicin de
cautela, recelo o miedo ante los desconocidos.
El conocimiento social tiene vital importancia porque se ha comprobado que depende de la forma de
encuentro con el extrao el que el nio manifieste menor o mayor cautela, recelo o miedo. Ya a
finales del primer ao de vida los nios demuestran cierta habilidad para reconocerse a s mismos
diferencindose de los dems, siempre que la imagen presentada se corresponda con la que tienen
en ese momento. A partir de los 15 y 18 meses, la capacidad de reconocimiento depende menos del
carcter contingente de su propia imagen, distinguindola de la de los dems con mayor xito.
Tambin en estos aos de vida del nio, juegan un papel decisivo las figuras de apego porque ellas
son las que controlan al ambiente social que vive el nio y a la vez quienes ponen en juego, ms que
ningn otro, todos los procedimientos antes sealados. Las figuras de apego tienen para el nio un
significado totalmente especial, favoreciendo la identificacin del nio con ellas y, de esta forma, la
asimilacin social a sus valores, normas y conductas.
Es importante destacar que uno de los aspectos cruciales del desarrollo social durante los dos
primeros aos de vida es el desarrollo afectivo. Los nios nacen con una gran capacidad de
aprender, preorientados a buscar y preferir estmulos sociales y necesitados de vnculos afectivos
con algunos de los miembros de su especie. El apego y la amistad son los vnculos afectivos
bsicos, jugando el apego un rol fundamental en estos primeros aos de vida.
El apego es un vnculo afectivo que establece el nio con las personas que interactan de forma
privilegiada con l, estando caracterizado por determinadas conductas, representaciones mentales y
sentimientos.
Conductas que intentan conseguir o mantener la proximidad con la persona a que se est apegado y
conductas de interaccin privilegiada: llamadas, lloros, gestos, vocalizaciones, contacto ntimo,
abrazos, vigilancia y seguimiento perceptivo de las figuras de apego., conductas motoras de
aproximacin y seguimiento.
El apego, es por ltimo, tambin, un conjunto de sentimientos asociados a las personas con las que
el nio est vinculado. La adecuada relacin con las figuras de apego conlleva sentimientos de
16
seguridad, bienestar y placer, asociados a la proximidad y contacto con ellas, y de ansiedad, cuando
tienen lugar separaciones o dificultades para restablecer el contacto.
Este vnculo afectivo se forma a lo largo del primer ao de vida, como resultado de la necesidad de
vinculacin afectiva que tiene el nio y las conductas que para satisfacerla pone en juego, por un
lado, y el ofrecimiento de cuidados y atenciones especficas que le ofrece la madre, por otro. Este
vnculo es, por ello, el resultado de la interaccin privilegiada entre el nio y algunos adultos.
Es importante destacar que las relaciones del nio con las figuras de apego deben ser vistas no solo
desde una perspectiva dual (nio-madre, nio-padre) sino dentro del sistema familiar como un todo.
Padre e hijos, abuelos, tos y primos forman, en muchos casos, una verdadera red de relaciones que
mutuamente se influyen. La relacin con esta amplia red es ms deseable que la reduccin a la
familia nuclear. Tener en cuenta esta amplia red que rodea el microsistema familiar y los contextos
de influencia que lo rodean es de fundamental importancia para el desarrollo social del nio.
Por lo que se refiere a la primera etapa de la escuela, esta puede enriquecer el mundo social del
nio y ofrecerle la oportunidad de recibir asistencia educativa ms planificada y profesional que la
recibida en la familia.
En la incorporacin a las instituciones educativas debe cuidarse especialmente el periodo de
adaptacin, familiarizndoles previamente con el lugar y las educadoras, aumentando
progresivamente el tiempo de estancia, incorporando poco a poco los nios nuevos, apoyar y vigilar
las interacciones de unos nios con otros, y planificar, de forma muy flexible experiencias adecuadas
que favorezcan el desarrollo fsico, motor, cognitivo, lingstico y social.
Desde una perspectiva psicoanaltica, podemos afirmar que a partir de los tres aos, los nios
acaban por reconocer que las cosas son como son, que entre padre y madre existe en todos los
sentidos una relacin privilegiada. Se produce una identificacin con el progenitor del mismo sexo y
una postergacin de los deseos edpicos.
El principio de realidad termina por imponerse al deseo de placer y el sper yo se fortalece por la
interiorizacin del progenitor con el que se realiza la identificacin. El sper yo as reforzado impone
limitaciones a los deseos del ello y permite al yo una existencia menos angustiosa y conflictiva.
De este modo, podemos afirmar que desde distintas perspectivas se enfatiza la importancia de las
relaciones padres, hijos en estas edades de cara a la constitucin de la personalidad infantil.
Tambin es importante recordar que ninguna etapa del desarrollo constituye una realidad evolutiva
separada de las dems y que cada contexto evolutivo produce efectos que se unen a los producidos
en otros contextos de tal manera que la personalidad no se construye solo en la familia sino tambin
en el contexto escolar y en la interaccin con los pares.
2) Grupo de pares
Qu es un grupo?, Cul es su estructura? Qu es lo que define a un grupo? Cual es la
sustancia de ese proceso interaccional? Estos y otros interrogantes surgen a toda persona que
investigue sobre esta realidad de nuestras sociedades.
En realidad, estamos cuestionndonos sobre la esencia de la situacin que constituye, el escenario,
el horizonte de toda experiencia humana. En consecuencia la temtica del grupo nos lleva
necesariamente a la problemtica del sujeto.
Segn el planteo de Pichon Riviere la subjetividad est determinada histrica y socialmente, en tanto
el sujeto se constituye como tal en proceso de interaccin, en una dialctica o nter juego entre
sujetos, de la que el vnculo como relacin bicorporal y el grupo como red vincular constituye
unidades de anlisis.
El sujeto aparece entonces con un doble carcter: como agente, actor del proceso interaccional, a la
vez configurndose en ese proceso, emergiendo y siendo determinado por las relaciones que
constituyen sus condiciones concretas de existencia. Siendo el sujeto para esta Escuela, sujeto de
la necesidad pero el eje central que plantea el autor, se sita en la contradiccin interna inherente
17
al sujeto como ser vivo, nter juego entre la necesidad emergente del intercambio material del
organismo con el medio y la satisfaccin de esa necesidad.
Esa contradiccin interna vuelca al sujeto sobre el mundo externo en busca de la fuente de la
gratificacin en relacin con otro sujeto. La necesidad experimentada como tensin interna,
promueve en el sujeto la realizacin de un conjunto de operaciones materiales y simblicas, a las
que se denomina conducta. La accin transformada, modifica el contexto, pero el protagonista de la
accin realiza un aprendizaje.
Cules son los principios organizadores del proceso interaccional que constituye al grupo?
En una situacin de interaccin aparecen dos o ms sujetos comparten un tiempo y un espacio, hay
entre ellos un juego corporal, de miradas de gestos. Se perciben recprocamente y sobre la base de
esa percepcin recproca intercambian mensajes, utilizando un lenguaje verbal y gestual. Se
establece entre esos sujetos un proceso de comunicaciones, en tanto intercambian signos de un
cdigo, por los que se describen objetos y expresan emociones.
Se da una interaccin en tanto tiene lugar una determinacin recproca o nter juego que es efectivo
cuando la presencia y la respuesta del otro es incluida, anticipada en la actitud de cada sujeto.
Inclusin y anticipacin que se configura como expectativa.
Hacia el otro, en este nter juego de expectativas recprocas, en el que cada sujeto aparece como
significativo para el otro, se habla de una accin direccional de un actor hacia otro y estas
manifestaciones de direccionalidad recproca de orientacin y ajuste mutuo nos revelan la presencia
de un proceso interaccional. La unidad interaccional se caracteriza por ser una integracin de tiempo
y espacio, sujetos que se perciben mutuamente y cuyas acciones estn articuladas por leyes de
causalidad recproca.
Por otra parte es importante destacar que la relacin vincular requiere un fundamento motivacional.
En la interaccin el fundamento motivacional es necesidad. Desde la perspectiva individual las
primeras experiencias del sujeto estn determinadas desde la necesidad, constituyndose como
modelos primarios de reconocimiento del otro y de conducta direccional
El fracaso en la operatividad vincular implica perturbaciones en el proceso de aprendizaje y
comunicacin, implica una patologa del vnculo. As el grupo se define como estructura de accin y
operacin todo conjunto de personas, ligadas por constantes de tiempo y espacio y articuladas por
su mutua representacin interna se propone en forma explcita o implcita una tarea que constituye
su finalidad.
Concluyendo podemos considerar la constitucin del vnculo como estructura de interaccin que
implica un aprendizaje. El aprendizaje implica un gran cambio en el proceso de interaccin y est
dado por la internalizacin del vnculo, que se inscribe en la interioridad del sujeto, en su mundo
interno y en cada uno de los sujetos de la relacin. En l interacta, se reconstruye la trama
relacional de la que es partcipe.
3) Escuela
Los nios crecen, se desarrollan, cambian sus preguntas, se preocupan, de manera tal que la
educacin sexual debe ser permanente, habitual, tan natural como la lecto-escritura
Como dice Beatriz Goldstein, ningn docente ni directivo de una escuela se le ocurrira organizar la
gran charla en tal grado, o invitar a un panel de especialistas en cada ciclo escolar para explicarles
las preposiciones a sus alumnos/ as. Por qu s cuando se trata de sexualidad?.
Si los docentes y los familiares encontramos excusas para no tratar esta temtica a diario,
deberamos ser conscientes de que lo estamos dejando en manos de otros: de la televisin, de los
sitios de internet muchas veces pornogrficos.
Una educacin sexual basada en la verdad y no en los prejuicios; que explique todo lo que tiene que
explicar; que las acciones sean lo suficientemente profundas para ayudar a aprender, a adoptar o
cambiar actitudes, valores y comportamientos.
18
Por ello la educacin sexual debe comenzar de manera seria y actualizada desde muy temprana
edad. Tanto en la familia como en la escuela.
Jhorima Vielma (2003) manifiesta que El proceso de socializacin es un mediador. A travs de la
socializacin todos los individuos quedan sumergidos en un mundo de relaciones e interacciones
que dejan huella en la emotividad, en la efectividad, en las elaboraciones mentales y estructuracin
cognitiva, en las actitudes y orientacin del comportamiento. Gracias al proceso de socializacin, los
individuos logran desarrollar la capacidad del aprendizaje social interiorizado o internalizando los
elementos normativos implcitos en las prcticas sociales, en el discurso y en el quehacer cotidiano.
Una gran cantidad de autores que comparten la conviccin de que a partir de una perspectiva
psquica y social, ser hombre o ser mujer, implica haber internalizado una realidad que ya est dada
en el entorno cultural. De all que induce a tomar, consciente e inconscientemente, una serie de
actitudes frente a lo exigido como comportamientos, sentimientos y pensamientos femeninos o
masculinos.
Dentro del proceso de socializacin, la familia y la educacin son las fuentes fundamentales de
transmisin y reproduccin de los mensajes y actitudes, contenidos en ellas; mantenidos y tambin
diferenciados para el gnero.
En este orden de ideas, pretende abordarse un fenmeno social; la socializacin de gnero
orientada hacia la revalorizacin de la familia, la descodificacin o des-sexualizacin de los afectos;
la aceptacin de nuevas conceptualizaciones de las relaciones de pareja que logren ser establecidos
con mayor compromiso humano, menos rivalidad, venganza o agresin y/o competitividad.
Para cerar este mdulo vamos a retomar lo que Coivin y Rubio manifiestan de manera muy clara lo
siguiente: Educar sexualmente no slo significa proporcionar informacin cientfica y orientacin
general acerca de los cambios fsicos, psicolgicos y sociales, significa conocer, aceptar,
transformar y vivir nuestra propia sexualidad, significa conocer, aceptar y respetar diferentes formas
de comportamiento sexual, significa intercambiar valores, conocimientos y comportamientos,
significa ejercer un pensamiento crtico de nuestras potencialidades, significa poder vivir una
sexualidad reflexiva, sana, congruente, respetuosa y responsable (1992).
ACTIVIDADES MODULO N 2:
1- a) Lea detenidamente el siguiente caso:
Anita que cursaba el sptimo grado de la escuela haba iniciado por primera vez una relacin de
noviazgo con Julin, un compaero de clase. Inicialmente se mostraba muy contenta e ilusionada,
comentando su relacin a todo el mundo. Sin embargo a las pocas semanas dej de hablar de l y
su carcter haba cambiado un poco. Siempre se caracteriz por ser alegre, espontnea y muy
sociable. En realidad no saba bien qu le pasaba, pero se encontraba muy angustiada. Por una
parte no entenda porqu sus sentimientos por Julin haban cambiado, ya que haba hecho hasta lo
imposible para que l se fijara en ella y le propusiera ser su novia. Por otra parte, extraaba mucho
a su amiga Ester con quien comparta prcticamente todo y casi no la vea por su relacin con
Julin. Senta un cario especial por ella que le preocupaba y le haca plantearse preguntas que
antes no hubiera imaginado, pero por el temor a la opinin de los dems decidi no comentar a
nadie lo que le suceda ni siquiera a su madre y seguir saliendo con Julin, como si nada pasara.
b) Responda las siguientes preguntas:
A qu etapa de la adolescencia pertenece Anita? Justifique su respuesta.
Qu conflicto psicosexual se manifiesta en Anita? Explique el mismo y plantee hiptesis de su
surgimiento en esta etapa.
Qu concepto de s misma infiere en Anita? Cmo es su autoestima?
Cules son los afectos que se manifiestan en Anita?
Cmo imagina se compone su grupo social?
19
2- Luego del recorrido por lo desarrollado en el mdulo, fundamente cul es la importancia del rol de
la familia y de la escuela en la educacin sexual del nio y/o adolescente.
MODULO N 3
SEXUALIDAD Y SALUD
Como educadores, en ningn momento debemos olvidar que nuestra tarea no se limita a la
transmisin de contenidos como estamos acostumbrados a escuchar, y lamentablemente en
algunos casos afirmar. Nuestra tarea debe estar fundamentalmente orientada a la formacin de la
persona en todos sus aspectos. Uno de esos aspectos, inherente a la estructura esencial de del ser
humano es la sexualidad. Cuando hablamos de sexualidad no nos referimos solo a una realidad de
orden genital, sino ms profundamente a una dimensin fundamental de la persona que reviste todo
su ser y representa un valor confiado a su responsabilidad.
El hombre en su constitucin psico-somtica es un ser sexual y esto determina su ser. El ser sexual
no se refiere entonces al cuerpo, los genitales y lo que se hace con los genitales, sino que hace
referencia al SER TOTAL de la persona, en el cual podemos diferenciar las siguientes dimensiones:
Dimensin psicolgica: La dimensin psicolgica del ser sexual puede dividirse en dos: la
intelectual : desarrollo cerebral que posibilita en el ser humano capacidades y potencialidades a
nivel de pensamiento y conocimiento que convierten lo sexual de un instinto en un impulso
sobre el cual puede ejercer control; y la afectiva: capacidad humana de establecer relaciones
de distinto grado de intensidad e intimidad con otros seres de su misma especie, con los cuales
se relaciona de una manera que involucra sentimientos y sensaciones.
20
Dimensin socio-cultural: cada sociedad y cada cultura establecen una normativa cuya finalidad
es regular y controlar el comportamiento sexual de sus miembros y unos roles sexuales los
cuales implican y, a la vez, definen una imagen determinada de hombre - mujer y relacin. La
norma, inicialmente externa al ser humano, termina siendo interiorizada por ste, a travs del
proceso de socializacin, llegando a constituir parte de su propia personalidad. En relacin con
los roles, "la cultura condiciona las cualidades, caractersticas y funciones que corresponden a
cada sexo, y el ser humano concreto dentro de una sociedad, los asimila a travs de la
socializacin. Cuando el ser humano asume su sexualidad est asumiendo, en parte, los
patrones culturales vigentes en su medio.
Dimensin tica: la dimensin tica del ser sexual hace referencia al conjunto de valores que
cada uno construye individualmente a lo largo de su vida, con los cuales se compromete,
definiendo estos el ser y quehacer sexual especfico de cada persona. La base de la tica
individual est en la auto-valoracion: el ser humano valora a los dems teniendo como
referencia el valor que se da a s mismo. El refuerzo de la auto-estima es, por tanto, punto clave
en la construccin de esta escala de valores.
Tenidas en cuenta las dimensiones del SER SEXUAL, es obvio que una Educacin sexual
restringida a informar o formar sobre una sola de estas dimensiones es una educacin incompleta y
deshumanizante.
Hasta ahora, la mayora de los adultos, demuestran no comprender la diferencia entre los conceptos
SER SEXUAL Y SER GENITAL y los consideran como sinnimos. El concepto de ser sexual, en
lugar de modificarse hacia una interpretacin amplia e integral, se ha ido reforzando en la medida en
la cual los adultos lo siguen transmitiendo as o, al no transmitir ningn contenido de sexualidad,
mantienen la idea de que esta hace referencia exclusivamente a lo fsico.
Es por esto que para poder brindar a nuestros nios y adolescentes una formacin completa e
integral en educacin sexual, y desarrollar en ellos una concepcin completa e integrada de lo que
es la sexualidad, debemos hacerlo desde el inicio de sus vidas. La educacin de la sexualidad ha de
realizarse siempre bajo vigilancia y direccin, tanto en la casa como en la escuela. Para ello
debemos prepararnos para ser adultos modelos y guas.
Para poder llevar a cabo semejante desafo, como docentes debemos:
Poseer una personalidad madura ya que nuestra
fuertemente sobre nuestros educandos.
Tener una exacta y completa visin del significado y del valor de la sexualidad y una serena
integracin de la misma en la propia personalidad.
Poseer una capacitacin que no es slo fruto de la necesaria preparacin y juicio terico, sino
tambin resultado de una madurez afectiva, lo cual no dispensa de la adquisicin de nuevos
conocimientos, adaptados a nuestra tarea educativa particularmente ardua en nuestros das.
SALUD
La Organizacin Mundial de la Salud (OMS) define la salud como un estado de completo bienestar
fsico, psquico y social y no solamente la ausencia de enfermedad.
Establecido el concepto general de salud, se hace necesario determinar que se entiende por salud
sexual y reproductiva. Para ello es necesario repasar las acepciones del concepto tomadas de
diversas fuentes.
Salud Sexual y Reproductiva: Este concepto implica el derecho de tener relaciones sexuales
gratificantes sin coercin, sin temor a infecciones o a embarazos no deseados, la posibilidad de
poder regular la fecundidad, el derecho a un parto seguro y sin riesgos, el derecho a dar a luz y a
21
criar nios saludables. Estos derechos son considerados en la actualidad como fundamentales para
mantener y mejorar la salud, practicar el auto cuidado y el cuidado del otro/a.
La salud sexual est estrechamente relacionada con la salud reproductiva. Sin la primera, no se
tiene la segunda. Sin la primera, entendida como la capacidad de mujeres y hombres de disfrutar y
expresar su sexualidad y de hacerlo sin riesgo de enfermedades transmitidas sexualmente,
embarazos no deseados, coercin, violencia y discriminacin, no se puede contar con la segunda:
el estado general de bienestar fsico, mental y social, y no de mera ausencia de enfermedades o
dolencias, en todos los aspectos relacionados con el sistema reproductivo y sus funciones y
procesos.
Salud tambin implica goce. De tal manera que no se trata slo de pensar la sexualidad desde la
procreacin, sino de disfrutar de una sexualidad plena y por ende saludable. En este punto la
discusin se eleva a posiciones contrarias en cuanto a si los jvenes son capaces de decidir por s
mismos, a partir de qu edad, qu participacin deben tener los padres, cules son los derechos
tanto de unos como de otros.
ASPECTOS BIOLOGICOS DE LA SEXUALIDAD
Desde el punto de vista de estrictamente biolgico, se considera al sexo de un individuo como una
condicin referida a la reproduccin, y a la sexualidad como el conjunto de rasgos anatmicos y
fisiolgicos que caracterizan cada sexo.
Pero al hablar de la sexualidad humana, desde un punto de vista multidimensional, se observa que,
bien comparte elementos comunes con otras especies de seres vivos, entre ellas la funcin
reproductiva, difiere radicalmente en su esencia, va ms all de lo meramente bio-fsico-orgnicogenital y se presenta como una relacin con otro ser humano. El espritu, la inteligencia y el amor le
dan su sello distintivo y nico que lo distingue de la genitalidad animal.
Las conductas sexuales tienen un componente que no existe en otros seres vivos: voluntad e
intencin, lo que le permite al hombre integrar conscientemente su comportamiento sexual dentro de
su plan de vida. Si bien los instintos, deseos e impulsos estn inscriptos o programados
biolgicamente, la expresin de los mismos depender de la razn y voluntad.
En la sexualidad humana no se trata, por tanto de una funcin o actividad genital, sino ms bien del
ser personal humano total y de la realizacin del hombre como tal. La genitalidad es solo una funcin
localizada mientras que la sexualidad es un modo de ser, un modo nico y necesario de pertenencia
al gnero humano. Freud en su obra Compendio de psicoanlisis dice claramente Es necesario
establecer una neta distincin entre los conceptos de lo sexual y lo genital. El primero es un
concepto ms amplio y comprende muchas actividades que no guardan relacin alguna con los
rganos genitales.
Por esto no puede considerarse la sexualidad como localizada o limitada a la genitalidad. La primera
comprende a la segunda, pero no se agota en ella. Obviamente todos los fenmenos genitales son
sexuales; hay sin embargo fenmenos sexuales que no tienen nada que ver con la genitalidad.
El nivel de genitalidad no puede ser totalizante en la comprensin de la sexualidad, que se presenta
como mucho ms amplia. La genitalidad es un dato anatmico y una funcin fisiolgica. La
sexualidad no es ni un mero dato, ni un objeto, ni una funcin: es una dimensin constitutiva de la
persona que permea todo su ser.
El hombre y la mujer establecern con los dems siempre y necesariamente relaciones sexuadas,
pero no necesariamente relaciones sexuales-genitales
El conocimiento del cuerpo, de sus posibilidades, limitaciones y funciones, es una base
indispensable para poder vivir la sexualidad sin miedos, sin falsas expectativas y sin angustias. La
sexualidad, como se dijo, es muy amplia e implica la comunicacin, la afectividad y el placer. Pero el
cuerpo es su base y por este motivo es importante conocerlo bien.
22
depende del contexto socioeconmico. En nuestra sociedad la adolescencia se hace cada vez ms
prolongada, hacindose cada vez ms lento el proceso de maduracin afectivo-volitivo. La sociedad
pide al adolescente que solamente se prepare, estudie, que postergue su ingreso a las
responsabilidades.
Esta postergacin del ingreso al mundo de los adultos, a su vez, se contradice con la exacerbacin
del sexo provocada por los medios de comunicacin, exacerbacin que en general no est
acompaada de informacin o de una correcta educacin sexual. Por un lado, se incentiva el inters
por lo sexual y por otro se sigue negando la posibilidad de un conocimiento adecuado.
Los mtodos anticonceptivos son poco o mal conocidos por los adolescentes y estn menos a su
alcance que en el caso de los adultos. Se acepta que la sexualidad no es incompatible con la
reproduccin responsable, pero no se hace partcipes a los jvenes de los mtodos de regulacin de
la fertilidad. Esto se fundamenta en el convencimiento de que los jvenes no deben tener relaciones
sexuales, pero las estadsticas de embarazos precoces demuestran que estas relaciones existen,
por lo que no tiene sentido ignorarlas.
Las consecuencias del embarazo precoz son en su mayora negativas dando origen a
perturbaciones psquicas, problemas de resentimiento, rechazo por el beb, perturbaciones en la
pareja.
En cuanto los varones, se asume la concepcin de que generalmente no pueden ni quieren hacerse
cargo de la paternidad. Pero en realidad la reaccin de los varones adolescentes frente a un
embarazo no intencionado vara desde la negacin, el deseo de abortar, la aceptacin de su
responsabilidad hasta la participacin como padre. Sus actitudes influencian las actitudes de las
adolescentes mujeres tanto directa como indirectamente. La actitud del padre frente al embarazo
usualmente es un factor clave en la decisin de una muchacha sobre cmo manejar el embarazo.
(Papalia y Wendkos, 1997).
Desde el discurso social se suele sostener que los varones jvenes no se involucran en el embarazo
de sus parejas, sin embargo hay distintos factores que influyen en esta situacin. En muchos
contextos los varones son educados con la creencia de que ellos no son los responsables de los
embarazos o los nios que resulten de su primera actividad sexual.(Baker, 1996). Las instituciones
sociales, familia, colegio y sistema de atencin de salud, suelen apoyar esta versin, la aceptacin
varonil de la paternidad a menudo es condicional, contingente a la prueba de paternidad, a la calidad
de la relacin con la madre, las expectativas de los padres y de la sociedad y su habilidad de
proveer apoyo econmico (Castillo, Dwek y Levi, 1988)
Muchos adolescentes manifiestan que sus propios padres son la fuente ms importante de concejos,
y apoyo respecto de su rol paternal, temiendo desilusionarlos si no actuaban de acuerdo a sus
expectativas. Tambin son susceptibles a la presin social, temiendo dar un mal ejemplo y fallar ante
los seres queridos y la comunidad.
En los padres jvenes la responsabilidad aparece vinculada al rol protector-proveedor, permitiendo el
proceso de independizacin que le permita conformar su propio hogar y enfrentar las necesidades
diarias de su familia. Pero los jvenes deben enfrentarse a la falta de trabajo y a los trabajos
precarios, lo que dificulta las posibilidades de independizacin.
La conducta sexual de los adolescentes forma parte de la salud integral, la posibilidad de integrar la
sexualidad al marco total de sus vidas depender de: la integracin con los padres (contencin) y de
la internalizacin de normas (lmites).
La tarea de los adultos ser ayudar a lograr un efectivo control interno por parte del adolescente en
base a sus valores y a su plan de vida.
FAMILIA Y ESCUELA COMO PROMOTORAS DE LA SALUD SEXUAL
La familia constituye el primer ambiente en el que el individuo se desarrolla. Por lo tanto la salud de
sta tendr una influencia decisiva en las futuras caractersticas psicofsicas de cada uno de sus
integrantes.
24
La familia debe satisfacer las necesidades de amor y proteccin del nio, crendose as las
condiciones bsicas de salud. Luego la escuela se suma a esa tarea al fomentarla a travs de la
enseanza y de su funcin socializadora.
La socializacin primaria del nio se lleva a cabo en el seno de la familia. La identificacin con los
padres tiene como consecuencia la incorporacin de modos de actuar, la formacin de la conciencia
moral y la adquisicin de los valores que llegan a persistir toda la vida.
La educacin para vivir en el amor se realiza en la familia desde el inicio mismo de la vida. La familia
es la primera responsable de la formacin afectiva del nio, del adolescente y del joven. Frente a la
sexualidad, un organismo maduro expresa un determinado acto y puede desarrollar una
determinada actitud. Por el contrario, un organismo inmaduro, insatisfecho, frustrado o incompleto
tendr dificultades en su relacin con el mundo y las situaciones que lo rodean.
La familia es el lugar privilegiado para asegurar la educacin sexual gradual. El nio necesita en sus
primeros aos un ambiente experiencial de amor. Solo en ste marco de fondo la informacin deja
de ser nicamente un aprendizaje nocional para ser de verdad una autntica formacin de la
persona.
Durante la primera infancia hasta los 3 aos, los agentes educativos, mama y pap, deben
proporcionar al nio continencia y afecto, lmites con explicacin que lo orienten hacia nuevas
experiencias. Durante esta etapa el nio debe alcanzar a desarrollar la confianza y seguridad
bsicas: amar su cuerpo, desarrollar sensibilidad, curiosidad e inteligencia. Si enfrentara situaciones
opuestas como falta de contencin, ternura o lmites pueden llevarlo a fijaciones y frustraciones
profundas, lo que podra derivar en relaciones humanas posteriores posesivas, exigentes y rgidas.
De los 4 a los 5 aos, los agentes educativos siguen siendo los padres que deben ser
capaces de proporcionarle continencia y afecto, orientacin. A ellos se les suma la maestra jardinera
y los compaeros. En esta etapa en nio debe ser capaz de expresar sus sentimientos comprender
la intimidad de sus padres, compartir juegos, desarrollar amor a su cuerpo. Para ello se debe educar
en hbitos de higiene y alimentacin, el control de esfnteres, en la valoracin y respeto del cuero y
hbitos de identidad. Se pueden presentar complicaciones si el nio no se siente amado, no recibe
respuestas a sus interrogantes, ocasionando autoencierros e incapacidad de abrirse a nuevos
grupos.
Durante el perodo de latencia los agentes educativos son la familia y la escuela a travs de la
continencia, la orientacin y propiciando el desarrollo por el respeto a su intimidad. Los padres
deben observar las amistades, juegos, lecturas, reacciones, posibles caricias y la maduracin normal
de la edad. Adems informar sobre todo lo que se les pregunte, con explicaciones breves y claras.
Se debe educar en hbitos de higiene, orden y responsabilidad; en respeto y valoracin del propio
cuero. En respeto por los dems en actitudes de servicio por amor. Tambin se debe educar en la
intimidad, como derecho personal y respeto mutuo. Es importante que el nio se sienta respetado y
valorado. Coherencia en las actitudes. El nio debe adquirir seguridad personal, confianza y amor
por s mismo y una actitud positiva frente a la sexualidad.
Durante la pubertad, a los agentes educativos nombrados se les suma los grupos del mismo sexo.
Durante esta etapa tales agentes deben acompaar la comprensin de los cambios por parte de los
pberes. Guiar en la valoracin positiva de la sexualidad.
En la adolescencia los agentes educativos son adems de la familia y la escuela, grupos de
adolescentes, amigos, parejas de adolescentes y otros adultos. En ste momento es importante
recalcar que la comunicacin entre padres e hijos es muy escasa y en la mayora de los casos
difciles. Por sta razn es recomendable siempre hablar con la verdad, previa conversacin entre
padres, para implementar un clima de responsabilidad compartida. Educar a alguien es formarlo
para que salga de si que haga algo entre otros, con otros, para otros. Solo entonces la vida toma
sentido. Y aqu la accin de los padres es sumamente influyente. Aqu aparece la regla, la norma, los
lmites. Hay que ser exigentes, ya que esto forma el carcter y la apreciacin de que nada se
alcanza sin esfuerzo.
25
26
2)
MODULO N 4
AMBITO LEGAL
La Ley de Educacin Sexual Integral incorpora ciertas normativas como las siguientes:
Los derechos humanos - Declaracin Universal sobre los derechos humanos:
Los Derechos Humanos son derechos fundamentales que todo ser humano tiene por el hecho de ser
persona. Tienen como punto de partida los principios de dignidad, libertad y de igualdad. Tienen las
caractersticas de ser: innatos, intransmisibles, irrenunciables, imprescriptibles, nicos,
extrapatrimoniales, absolutos, irreductibles, indisponibles, a los cuales una persona no puede
renunciar, slo a su ejercicio. Se les considera como derechos inherentes a la persona que estn por
encima de cualquier Estado.
En relacin a los Derechos Humanos, es deber de los Estados Nacionales promover el
afianzamiento del respeto por los derechos y libertades de cada persona, sin discriminacin de
ningn tipo.
El Documento ms importante con respecto a los Derechos Humanos es la Declaracin Universal de
los Derechos Humanos de fecha 10 de diciembre de 1945. La Declaracin Universal de Derechos
Humanos tuvo como fuente principal a la Carta de las Naciones Unidas, donde prevalece el inters
por la proteccin de los derechos humanos, as como el reconocimiento de las libertades de la
persona humana, a travs de una cooperacin internacional.
El objetivo de la Declaracin era disear un modelo que sirva de inspiracin a todos los pases para
promover los derechos humanos. Es decir, que es de carcter universal, por lo que todos los
sistemas del mundo deben adoptar los mismos derechos recogidos en la Declaracin, para
plasmarlos en sus respectivas legislaciones internas, como lo han venido realizando. Es as que se
reconoce a la persona humana como sujeto de derecho internacional. Cabe precisar que si bien la
Declaracin no obliga a los Estados, por no ser un documento de carcter vinculante, la misma ha
logrado una autoridad de orden moral tan grande, que no existe duda con respecto a su
cumplimiento y respeto por parte de todos los Estados.
Los derechos de nios y adolescentes Convencin sobre los Derechos del Nio.
La historia social, y por lo tanto la evolucin jurdica de los pueblos, han ido evolucionando en
relacin a la concepcin de la proteccin de la infancia y la juventud. Actualmente se observa una
tendencia a reconocer y defender al nio en la sociedad, mediante la afirmacin de sus derechos y
responsabilidades. El nio o adolescente deja de ser llamado menor: en cuanto menor objeto de
proteccin, y se convierte en sujeto de derecho, considerado como persona humana.
27
En el campo de los derechos humanos, el hecho de que los nios/as estn transitando por sus
primeros aos de vida, implica para ellos una vulnerabilidad especial que requiere de cuidado y
proteccin especfica.
Los Estados del mundo reconocieron formalmente esta especificidad por primera vez con la
Declaracin Universal de los Derechos del Nio, aprobada por la Asamblea General de las Naciones
Unidas en 1959. Ms adelante, en 1989 ratificaron su posicin mediante la firma de la Convencin
sobre los Derechos del Nio.
La Declaracin de los Derechos del Nio, consta de diez principios y declara en su Prembulo que el
nio necesita de proteccin y cuidado especiales, debido a su falta de madurez fsica y mental, y que
esa es la razn de ser de la Declaracin, para que el nio pueda gozar de una infancia feliz y de los
derechos y libertades enunciadas:
Gozar de una proteccin especial y disponer de oportunidades para que pueda
desarrollarse fsica, mental, moral, espiritual y socialmente en forma saludable y normal, en
condiciones de libertad y dignidad. Adems se aade que al promulgar leyes para tal fin, "la
consideracin fundamental a que se atender ser el inters superior del nio."
peligrosa
Indicadores comportamentales:
o bien consienten el abuso (los compaeros/as) o bien lo desconocen (padres, madres, docentes),
reforzando as la accin intimidatoria.
La intimidacin ocurre de muy distintas maneras:
presin verbal, amenazas o burlas;
abuso fsico, empujones, patadas y golpes;
indiferencia, rechazo;
mano dura y a veces chantajes; o
vandalismo.
Abuso sexual en la Infancia:
El abuso sexual es toda actividad sexual que un adulto impone, ya sea con engaos, chantaje o
fuerza, a una persona que no tiene la madurez mental o fsica para entender de lo que se trata.
El abuso sexual es cometido por alguien que tiene dominio sobre otra persona, ya sea porque tiene
ms fuerza, jerarqua, o est en una situacin que le da poder: tutor, profesor, jefe, padre, to, etc.
Indicadores del abuso sexual en la infancia:
Indicadores fsicos:
Indicadores comportamentales:
Preescolares:
Conductas autoerticas e hipersexualizadas
Trastornos del sueo
Conductas regresivas
Enuresis, encopresis
Retraimiento social
Temores inexplicables
Fenmenos disociativos
Escolares:
Cambios bruscos en el rendimiento escolar
Problemas con la autoridad
Mentiras
Fugas del hogar
Delincuencia
Coercin sexual hacia otros nios/as
Excesiva sumisin al adulto
Quejas somticas (cefaleas y dolores abdominales)
Sobreadaptacin y pseudomadurez
Adolescentes:
33
Promiscuidad sexual
Coercin sexual hacia otros nios/as
Drogadiccin
Delincuencia
Conductas autoagresivas
Intentos de suicidio
Excesiva inhibicin sexual
Trastornos disociativos
Anorexia y bulimia
Conducta de tutor:
Extremadamente protector
Alienta al nio/a a implicarse en actos sexuales
Sufri abuso sexual en su infancia
Abuso de droga o de alcohol
Est frecuentemente fuera del hogar
PREVENCION DEL MALTRATO Y ABUSO INFANTIL
34
ACTIVIDADES MODULO 4:
1. Realice una reflexin sobre la importancia de respetar los derechos del nios/as y
adolescentes.
2. Considera que la institucin educativa, en la que Ud. se desempea, respeta los derechos de
sus alumnos/as?. En caso de que su respuesta sea afirmativa comente, brevemente, de qu modo
se manifiesta. Si por el contrario es negativa, seale los motivos que considera no posibilitan que
sean respetados los mismos.
3. Comente un caso donde se hayan vulnerado los derechos humanos de sus alumnos/as. Indique
a que tipo se hace referencia y seale los indicadores fsicos, psicolgicos y de conducta en la
vctima/s.
MODULO N 5:
SEXUALIDAD Y PEDAGOGIA: UN DESAFIO
La educacin como la sexualidad humana puede ser expresada en trminos de escenarios, es
decir, como procesos de interaccin en contexto. Ya que estos escenarios estarn sustentados por
prcticas sociales y sistemas de significados vinculados con la complejidad de factores personales y
sociales que dan forma a sistemas de emociones, creencias, mitos. Segn la poca y el contexto,
ciertas prcticas sern bien vistas o condenadas, las experiencias sexuales adquirirn un sentido u
otro segn los sistemas de roles, valores y vnculos de la trama social en la que estemos inmersos,
dando lugar a la existencia de mltiples y variados escenarios para la sexualidad y,
consecuentemente, para la educacin de la sexualidad. Los tradicionales valores morales en que
fuimos educados no constituyen conceptos invariables de la humanidad sino que son, simplemente,
expresiones de una poca.
La pregunta seria: Cul es el escenario que, hoy por hoy, estara dando forma al sistema de valores
y prcticas vinculadas con la sexualidad?
En la actualidad nos encontramos en un momento de posiciones muy antagnicas, de luchas
ideolgicas muy fuertes. Prevalece una situacin de confusin en el mundo de los adultos, en las
familias y en las organizaciones educativas. El temor se ha instalado en muchos lugares donde
debera haber orientacin, prevencin y acompaamiento de las jvenes generaciones.
Es una poca atravesada por combates morales y polticos, involucrada con la herencia de
tradiciones y prcticas sociales que tienen implicancias econmicas, jurdicas, religiosas, cientficas
y familiares. En este terreno conflictivo, son muy frecuentes los mensajes contradictorios que
evidencian hasta qu punto, el mundo de la sexualidad est dividido por gnero, clase social y raza.
Cada grupo defiende sus perspectivas y con frecuencia elabora prioridades diametralmente
opuestas. Hombres y mujeres se posicionan como expertos en seduccin, en la bsqueda del deseo
del otro, en la provocacin. Se prioriza el enamoramiento y sus emociones concomitantes evitando
avanzar en la consolidacin de relaciones ms estables y comprometidas. Se habla
permanentemente del sexo y sin embargo se seala que la disfuncin por excelencia es el desgano
sexual.
Sexualidad entre lneas
En silencio, entre lneas o alzando una voz escandalizada, las instituciones sociales siempre dicen
algo acerca de la sexualidad. Estas omisiones dan cuenta de la supervivencia de tabes sobre lo
sexual que impiden hablar abiertamente del tema. No se nombra la sexualidad, el cuerpo, la
genitalidad, el sexo, las emociones y sentimientos sea porque se los considera sagrados, o bien, tan
negativos, que no se los puede invocar. Todas estas afirmaciones silenciadas u oprimidas son
incorporadas como actitudes hacia lo sexual por parte de nios y jvenes, y van configurando,
progresivamente, una determinada forma de relacin con uno mismo y con los dems.
35
Adultos docentes o padres- que no saben cmo tratar temas sexuales por incomodidad,
vergenza o falta de conocimientos especficos.
Docentes que temen que sus autoridades, o los padres, no aprueben el tratamiento de estos
temas en las aulas. Es frecuente el pedido de autorizaciones para evitar posibles sanciones o
enojos.
Seria importante tener en cuenta y analizar qu tipo de bibliografa selecciona el docente. Todos los
libros utilizados en las aulas deberan guardar cuidado en cuanto a las definiciones de lo femenino y
masculino, los roles asignados, etc. Sin embargo, nos encontramos muchas veces con que el texto
seleccionado no es el ptimo.
Se podra decir que un libro sexista es aquel que presenta en el texto, los dibujos o las fotografas,
figuras masculinas o femeninas que ejecutan funciones estereotipadas que no reflejan la diversidad
de roles existentes; o cuando describe situaciones y prcticas de discriminacin de gnero sin
criticarlas o presentar alternativas.
Preguntas que podramos realizarnos cuando estamos frente a la bibliografa:
Qu profesiones y roles asumen varones y/o mujeres? (Se deben analizar aqu las
actividades domsticas, las relacionadas con la educacin, con el ocio y el deporte, con la
poltica o la sociedad).
Cmo se muestran las relaciones sociales de los personajes masculinos y femeninos? (Por
relaciones sociales entendemos el estado civil, la relacin familiar o el nivel de empleo).
Tienen que presentar los personajes femeninos cualidades extraordinarias para conseguir la
aceptacin social? Qu sucede con los personajes masculinos?
Cabe hacer aqu una aclaracin: no todos los textos a utilizar en la escuela van a pasar por nuestras
manos. Podemos intervenir en la seleccin de algunos materiales, pero otros, van a llegar a las
aulas sin un anlisis previo de nuestra parte. Se nos plantea el desafo de trabajar tambin con los
textos que muestren ciertos sesgos sexistas. Porque estos materiales forman parte de la vida
cotidiana de los chicos y chicas y merecen una lectura crtica.
Desde nuestro rol educativo, como orientadores en el proceso de aprendizaje de nuestros alumnos y
alumnas, tenemos la posibilidad de desmenuzar el texto: Analizar crticamente ilustraciones y
frases, idear juntos situaciones alternativas a las planteadas, desnaturalizar lo dicho es decir,
ubicar las afirmaciones del texto como una opcin entre muchas otras-. De este modo, estaremos
promoviendo la concientizacin acerca de las desigualdades de gnero.
El docente como Modelo
La vida del aula y del centro educativo es un escenario vivo de relaciones donde se intercambian
directa o indirectamente ideas, valores e intereses mediante los procesos de comunicacin. En la
comunicacin diaria, las personas van estableciendo una relacin con los dems y van
construyendo su identidad individual y social.
En el da a da, cada maestro o profesor pone en acto una determinada forma de concebirse como
varn o mujer, ejerce ciertos roles y ocupa espacios dentro de la institucin que van a dar cuenta de
un status, de un modo particular de transitar la cotidianeidad escolar.
La significatividad del rol docente en el proceso formativo de los alumnos/as le confiere un papel
central como modelo en accin de patrones de gnero femenino y masculino.
Esta influencia se observa en pequeos gestos que ponen en evidencia las expectativas del docente
en cuanto al comportamiento de sus alumnos segn sean nias o nios (por ejemplo, en relacin
con la prolijidad personal y de sus trabajos, el cumplimiento con tareas propuestas, al considerar
natural la mayor destreza fsica, las agresiones y los juegos motores entre los varones, mientras que
en las nias se esperan juegos tranquilos y mayor desarrollo de la expresin oral, etctera).
37
Asimismo, en sus modos, actitudes, expresiones y forma de vincularse, el docente da cuenta de una
particular forma de asumir la propia sexualidad, ofrece un ejemplo encarnado de ser varn o mujer,
ciertos patrones de conducta que para los nios/as y adolescentes revisten una gran significatividad.
El docente, entonces, es un modelo de identificacin en cuanto a la identidad sexual de sus
formandos.
Es indudable que la institucin escolar ejerce una pedagoga del gnero y la sexualidad. Mediante
sus rituales y rutinas diarias, en sus modos de evaluar y calificar, en sus formas diferenciadas de
sancionar. La escuela produce un rgimen de verdad acorde con las construcciones culturales de su
entorno. Este orden escolar est basado en la lgica binaria de lo normal/patolgico que se
corresponde con la dicotoma inclusin/exclusin. Esta legalidad trae como consecuencia la
posibilidad de supervivencia social, dado que apartarse de los patrones establecidos implica
desviarse.
En este contexto sociocultural e institucional, es indispensable el replanteo acerca del tratamiento
que se da a la sexualidad desde la escuela y en las familias.
Una pedagoga de la sexualidad debe partir del reconocimiento de que la sexualidad es condicin
existencial para el ser humano, es vector fundamental en el encauzamiento y organizacin de la
personalidad y factor decisivo en la creatividad y procreatividad humana.
Como educadores, debemos asumir en forma activa nuestro rol, comenzando por una profunda
revisin de nuestras prcticas para develar los sentidos ocultos de nuestras intervenciones. Slo
desde el entendimiento de nuestras propias actitudes y posicionamientos frente a lo sexual
podremos ofrecernos como orientadores en el proceso de formacin y discernimiento de nuestros
alumnos/as.
SEXUALIDAD HUMANA, UNA CONDICIN Y DIMENSIN FUNDAMENTAL PARA EL
DESARROLLO DE LA PERSONALIDAD
La sexualidad humana, desde nuestra perspectiva, es un constructo especfico, es la persona
humana en cuanto es sexuada, es la actividad y conducta humana sexuada. Abordar este constructo
adecuadamente, slo ser posible desde una mirada comprehensiva, integral y personalizante.
Es imprescindible asumir que la sexualidad se instala en lo nuclear humano; adems de ser
garanta de una funcin biolgica muy determinada la generacin de la prole-, es un principio de
una configuracin: el hombre percibe, siente, piensa y quiere como varn o como mujer (Vidal, M.
Moral de la Persona, pg. 478).
El hombre es apertura, es transparencia, es comunicacin. La sexualidad es una dimensin que
configura al hombre todo entero, participa y expresa su modo de existir. Todo el ser del hombre es
comunicativo desde lo psico-fsico y fisiolgico hasta las dimensiones ms profundas. La sexualidad
es la gran fuerza que nos empuja a abrirnos y a salir de nosotros mismos. El hombre, al abrirse a
otra persona, hace el descubrimiento del t, y al mismo tiempo se descubre a s mismo como un
yo. Y quizs en este punto, llegamos a la comprensin ms significativa respecto de la dimensin
sexual humana: yo y t no son suficientes en cuanto tales, la relacin yo-t da lugar a la aparicin
de un nosotros. La aceptacin del nosotros es la raz de este vnculo de donacin y reciprocidad.
En la sexualidad es donde se evidencia con mayor claridad la aparicin de un tercero para formar
el nosotros familiar. El hijo es el fruto del amor interpersonal, un amor de donacin y de aceptacin
en sentido amplio y total.
La sexualidad es lenguaje, es palabra y es gesto de esa comunicacin. Para que ello ocurra es
necesario siempre el afecto y el encuentro yo-t.
Cmo se realiza esta comunicacin interpersonal? Cmo interviene la sexualidad en esta
comunicacin? Aqu aparecen el cuerpo y la corporeidad como medio y realizacin de la
intersubjetividad humana. El cuerpo da a nuestra existencia la posibilidad de pensarse, sentirse,
vivenciarse, expresarse de modo gestual, significativa o simblicamente. Por el cuerpo o desde el
cuerpo soy.
38
personal que cada uno tiene de expresarse de acuerdo a sus potencialidades propias y segn sus
actitudes, carcter y personalidad.
El cuerpo, es el medio de estar en el mundo. Sus actitudes, su expresividad y sus movimientos
estructuran nuestras relaciones, hacia nosotros mismos y hacia los dems. Todo cuanto vivimos se
proyecta corporalmente, implicndose toda nuestra gestualidad, nuestra mmica y nuestro lenguaje
con nuestro equilibrio, nuestro tono y nuestras emociones.
La expresin corporal, entonces, se transforma en comunicacin cuando, con nuestros gestos y
nuestra mmica queremos, consciente o inconscientemente, convertir esa expresin en mensaje
hacia el otro.
Entonces cuerpo en educacin
Todo lo considerado anteriormente sobre el cuerpo nos induce a pensar que a lo largo del tiempo,
tanto padres como educadores hemos confundido la ubicacin del cuerpo dentro del desarrollo del
nio, dejando de lado su carcter existencial para quedarse meramente con el cuerpo-objeto. Todos
los responsables de la educacin de los nios debemos reflexionar sobre este tema y descubrir o
redescubrir la corporeidad del ser humano como vehculo nico de existencia en el mundo, de
presencia y de comunicacin.
La dificultad estriba en que ese descubrimiento debemos llevarlo a cabo desde nuestra propia
corporeidad, que a su vez ha sido limitada, familiar y socialmente, a lo largo de los aos.
Al educador le queda la tarea de que el proceso educativo, no sea mera instruccin, sino que vaya
orientado realmente, hacia un desarrollo global del nio, sin que esto se quede en objetivos escritos
en proyectos de centro, que no pocas veces dejan de hacerse realidad. La escuela tiene la
responsabilidad de la educacin integral del nio y no solo de su instruccin, puesto que el
desarrollo del nio es global y, la atencin a su corporeidad es su mejor posibilidad existencial en el
mundo en que vive.
La vivencia corporal, en una educacin sexual integral, favorece la mejor captacin de
conocimientos, as como el desarrollo, la comunicacin corporal, el lenguaje y las relaciones con los
dems. El nio se desarrolla como una persona que siente, piensa y acta desde su propia
corporeidad, que es el eje de referencia de sus relaciones, aprendizajes y comunicacin.
Por tanto, su educacin quedar muy menguada si cuando acude a la escuela as, corporalmente,
que es como el nio va, lo que recibe son una serie de contenidos de educacin sexual
desvinculados entre s. Lo que el nio reciba en la escuela debe partir de su propia realidad.
Educacin sexual y educacin para el amor
Habitar plena y concientemente nuestro cuerpo es indispensable para lograr el autocuidado como
expresin concreta del amor que cada uno tiene por s mismo. Y la manera de hacer conciente
nuestra corporeidad es explorando, experimentando, sintiendo.
Como seres humanos, disfrutar de nuestro cuerpo tal como es, conocerlo y aceptarlo, es un proceso
permanente, que supone aprendizajes mltiples: aprender a percibir nuestras sensaciones, nuestros
deseos y nuestros miedos; aprender a discernir nuestras necesidades y preferencias; aprender a
actuar coherentemente, respetando ideales y valores.
Estas experiencias van a permitir un proceso paulatino de apropiacin de nuestro cuerpo, van a ir
propiciando la construccin de la autoestima (entendida como el conjunto de ideas y sentimientos
acerca de uno mismo).
Indudablemente, durante la infancia y la adolescencia se atraviesan vivencias y cambios que hacen
crisis en el cuerpo: el proceso de crecimiento puede generar estadios de angustia y desorientacin.
Sobre todo en la adolescencia, las transformaciones corporales irn dejando huellas segn sean las
vivencias personales y singulares que cada uno atraviese.
40
Educar para el amor implica equipar a los individuos con repertorios de conductas positivas y
prosociales que les permitan entablar relaciones no violentas y solidarias, que permitan justamente,
la donacin desinteresada, la entrega mutua.
Entendemos por comportamientos prosociales: Aquellos comportamientos que, sin la bsqueda de
recompensas externas, favorecen a otras personas, grupos o metas sociales y aumentan la
probabilidad de generar una reciprocidad positiva, de calidad y solidaria en las relaciones
interpersonales o sociales consecuentes, salvaguardando la identidad, creatividad e iniciativa de las
personas o grupos implicados (Roche, 1991). Definimos, entonces, a las conductas prosociales por
oposicin de las conductas antisociales.
Educando para el amor y el desarrollo de conductas prosociales, el sistema educativo estar
colaborando intensamente en la construccin de una sociedad basada en la cultura de la empata,
de la generosidad, del servicio, de la gratuidad y de la solidaridad.
Observar la necesidad que tenemos de los dems, estimular la comunicacin, concientizar que las
diferencias no imposibilitan una buena convivencia, fomentar la apertura al conocimiento de los
otros, son formas explcitas de educar en el amor y para amar.
En el marco de un enfoque integral de la sexualidad es indispensable promover la conducta
prosocial de nuestros alumnos y alumnas, ayudndolos a identificar las necesidades ajenas y a
sentirse capaces de ayudar. La conducta prosocial facilita al alumno/a el aprendizaje de nuevas
competencias: adoptar la perspectiva del otro, percibir la felicidad del otro como la felicidad propia,
desarrollar la autoestima, mejorar la conducta y aumentar los vnculos sanos.
El comportamiento prosocial conlleva las capacidades de detectar las necesidades del otro y
empatizar con sus sentimientos. Qu acciones podemos considerar como prosociales? Qu
conductas deberamos promover en nuestros alumnos y alumnas para potenciar su capacidad de
amar?
Hay mltiples acciones en la interaccin humana que responden, en principio, al comportamiento
prosocial.
Siguiendo una categorizacin de Roche, citamos las siguientes:
Ayuda fsica: Conducta no verbal que procura asistencia a otras personas para cumplir un
determinado objetivo, y que cuenta con la aprobacin de las mismas.
Servicio fsico: Conducta que elimina la necesidad a los receptores de la accin de intervenir
fsicamente en el cumplimiento de una tarea o cometido, y que concluye con la aprobacin o
satisfaccin de stos.
Dar: Entregar objetos, alimentos o posesiones a otros perdiendo su propiedad o uso.
Ayuda verbal: Explicacin o instruccin verbal o compartir ideas o experiencias vitales, que son
tiles y deseables para otras personas o grupos en la consecucin de un objetivo.
Consuelo verbal: Expresiones verbales para reducir tristeza de personas apenadas o en apuros y
aumentar su nimo.
Confirmacin y valorizacin positiva del otro: Expresiones verbales para confirmar el valor de
otras personas o aumentar la autoestima de las mismas, incluso ante terceros. (Interpretar
positivamente conductas de otros, disculpar, interceder, mediante palabras de simpata, alabanza
o elogio).
Escucha profunda: Conductas metaverbales y actitudes de atencin que expresan acogida
paciente pero activamente orientada a los contenidos expresados por el interlocutor en una
conversacin.
41
45
MODULO N 6
LA EDUCACION SEXUAL EN LOS NIVELES EDUCATIVOS
Introduccin:
A partir de la creacin del Programa Nacional de Educacin Sexual Integral, la escuela tiene la
obligacin de incorporar contenidos curriculares especficos en este terreno. Y en medio de este
desafo, puede construir espacios de dilogo con los alumnos respecto a su sexualidad. Espacios
que evidencien que los adultos tampoco tenemos todas las respuestas, pero donde sea posible
expresar la confianza y el compromiso de formular juntos las preguntas, para luego, buscar juntos
las respuestas.
En relacin al abordaje de la educacin sexual en la escuela, como se menciono en el modulo 1
existen dos alternativas de incorporacin de la temtica:
a) Como un contenido transversal, con presencia en los diversos espacios curriculares
contemplados en el Proyecto Curricular Institucional;
b) Como un contenido especfico, implicando la creacin de espacios curriculares
especficos.
La determinacin de la modalidad de abordaje de la educacin sexual corre por cuenta de cada
institucin, en consonancia con las disposiciones jurisdiccionales sobre la materia.
En sintona con lo expresado, los presentes lineamientos curriculares proponen la
perspectiva transversal para inicial y primaria. Establecen contenidos relacionados
con la ESI a ser trabajados en las distintas reas, considerando los propsitos
formativos generales enunciados en este documento.
Con relacin a la escuela secundaria se sugiere la adopcin de la perspectiva
transversal en el primer ciclo. Para el resto de los aos del nivel se ofrecen dos
posibilidades: continuar trabajando la inclusin de contenidos especficos de la ESI
en las distintas asignaturas o crear espacios especficos que concentren esos
contenidos y otros ms puntuales en talleres
u otros espacios de definicin institucional.
Cabe nuevamente aclarar que esta opcin no debe implicar el abandono del
tratamiento de la temtica en las distintas asignaturas.
(Lineamientos Curriculares para la Educacin Sexual Integral.
Programa Nacional de Educacin Sexual Integral. Ley Nacional N 26.150)
Solo esta explicitacin abrir la posibilidad de la divergencia, del dilogo entre posturas y
experiencias diferentes en torno a la sexualidad.
LA EDUCACION SEXUAL EN EL NIVEL INICIAL
Los cambios biolgicos en relacin a la edad cronolgica son de carcter universal. Pero las
respuestas de cada persona a dichos cambios difieren enormemente.
Desde que nace, el nio se est educando sexualmente a travs de todas las acciones, actitudes,
opiniones, consideraciones u omisiones de todas las personas con las que tiene contacto.
Durante la edad habitual en que un nio asiste al Jardn de Infantes, la sexualidad se expresa en
todo su esplendor, ya que an los chicos no tienen internalizadas totalmente las normas de lo que se
debe y no se debe hacer, de lo que se considera pblico o privado.
La curiosidad es el motor de la investigacin, y por ende, de los aprendizajes. La llegada de un
hermanito, o la relacin con nios del sexo opuesto, darn lugar a la formulacin de innumerables
preguntas relacionadas con la sexualidad, especialmente con el nacimiento, la vida y la muerte.
La curiosidad, en lugar de ser coartada o sancionada debe aprovecharse para que la nia o el nio
conozcan ms sobre s mismos y sobre su entorno. Es preciso responder con la verdad y utilizando
un lenguaje comprensible y sencillo.
La investigacin acerca del propio cuerpo tambin es una manifestacin de la curiosidad sexual
infantil. Las conductas de automanipulacin (masturbacin), siempre que no sean compulsivas,
permitirn al nio/a la construccin de su cuerpo y su sexualidad mediante la exploracin. Por este
motivo, es importante que los adultos no censuremos, reprimamos o castiguemos este tipo de
comportamientos.
Es as que, frente a este tipo de comportamientos, lo deseable es orientar al nio o nia acerca de
que estas conductas son privadas y forman parte de la intimidad de cada uno.
Las reacciones adultas ante las conductas sexuales manifiestas de los nios dejan marcas
-favorables o no- en la estructuracin de su autoestima, su esquema corporal y su identidad sexual.
El juego y el aprendizaje de la sexualidad:
El juego simblico o de ficcin es la actividad que le posibilita al nio/a la apropiacin del mundo, ya
que le permite ensayar roles y funciones de la vida adulta. El juego colabora en la organizacin y
exploracin de las relaciones, papeles y mandatos sociales.
En esta etapa, surgen los llamados "juegos sexuales": jugar a "tener un beb", al "doctor", al pap
y a la mam" y otros similares. Al igual que los otros modos de exploracin .
Estos juegos resultan indispensables para la construccin de la imagen del propio cuerpo y para la
configuracin, en los varones, de la imagen de la mujer y, en las nias, la del varn.
Nada ms errneo que acudir a criterios de adultos para juzgar una prctica necesaria en la
estructuracin de la identidad.
Mientras se d entre nios y nias de ms o menos la misma edad, el juego sexual ser una
experiencia grata, nada culposa y que, como suele acontecer, ser luego reprimida para siempre.
En materia de juego, el papel del educador es fundamental ya que sus intervenciones colaborarn
con la reduccin de estereotipos de gnero y ofrecern un modelo de educacin orientado a la
igualdad de oportunidades entre ambos sexos.
La intimidad:
Inculcar el sentido del pudor y de la intimidad es parte de la educacin sexual en esta etapa del
desarrollo de nuestros alumnos y alumnas.
47
Existen claras evidencias de que el trabajo sobre estas nociones es un modo de prevenir situaciones
de abuso sexual infantil, ya que permiten al nio o nia advertir cuando estn frente a situaciones de
riesgo.
Lo ms importante es que padres y docentes, construyan una relacin cercana con el nio/a, donde
predomine la comunicacin abierta, franca y de confianza.
Objetivos de la educacin sexual en el Nivel Inicial:
Por una parte, la ESI debera facilitar, por parte de los nios/as, el reconocimiento de las diferencias
sexuales anatmicas entre varones y mujeres, ya que este ser el fundamento de su identidad
sexual.
Este reconocimiento les ayudar a conformar el esquema corporal, entendido como la vivencia que
cada ser humano tiene de su propio cuerpo.
Es preciso poner nfasis en el aprendizaje de los nombres cientficos de los genitales, de modo de
colaborar con la integracin de los saberes acadmicos y los hogareos.
El segundo gran objetivo de la ESI en el Nivel Inicial es dar inicio al proceso de reconocimiento de la
identidad y el rol de gnero. Reconocerse como varn o mujer, ser una tarea cuya consecucin
culmine en la etapa de la adolescencia. Sin embargo, sus cimientos se edifican durante los primeros
aos de vida y escolaridad.
El Jardn de Infantes puede ocupar un rol importantsimo como facilitador de espacios de revisin y
ensayo de diversas tareas y juegos tradicionalmente atribuidos a nios o nias. Por ejemplo,
promoviendo que los varones participen en actividades de cocina, o que las nias trepen, corran,
etc.
Lineamientos curriculares para la Educacin Inicial:
El Nivel Inicial desarrollar contenidos que apunten al despliegue de cuatro reas:
reas
Conocimie
nto y
exploracin
del
contexto
Desarrollo
de
competencias y
Contenidos Sugeridos
El conocimiento de las distintas formas de organizacin familiar y sus
dinmicas y la valoracin y el respeto de los modos de vida diferentes a los propios.
La exploracin de las posibilidades del juego y de elegir diferentes
objetos, materiales e ideas, brindando igualdad de oportunidades a nias y nios.
El reconocimiento y valoracin de los trabajos que desarrollan mujeres y
varones en diferentes mbitos, identificando cambios y permanencias a lo largo del
tiempo.
El reconocimiento de la existencia de una gran diversidad de seres vivos
en cuanto a sus caractersticas (relacin: estructuras y funciones) y formas de
comportamiento y la especificidad de los seres humanos.
La valorizacin y respeto de las propias opiniones y las de todas las
personas por igual, sin distinciones de gnero, cultura, creencias y origen social.
La puesta en prctica de actitudes que promuevan la solidaridad, la
expresin de la afectividad, el respeto a la intimidad propia y ajena y el respeto por
la vida y la integridad de s mismos y de los otros-as
La posibilidad de respetar, ayudar y solidarizarse con los otros-as.
El reconocimiento y expresin de los sentimientos, emociones, afectos y
necesidades propios y el reconocimiento y respeto por los sentimientos, emociones
y necesidades de los-as otros-as.
El desarrollo de capacidades para tomar decisiones sobre las propias
48
habilidades
psicosociales
Conocimiento y
cuidados
del cuerpo
Desarrollo
de
comportam
ientos de
autoprotec
cin
51
53
BIBLIOGRAFIA:
COVIN. S. Y RUBIO. M. (1992,). Programa de los talleres para nios "Yo y mi sexualidad" y
"Aprendiendo sobre tu sexualidad". Manuscrito indito. Asociacin Mexicana para la Salud
Sexual, A.C., Mxico.
GOLDSTEIN, B. y otro. (2006) La educacin sexual en al escuela Ed. Nov. Educativas. Bs.As.
MARTIN, Orlando R.; MADRID, Encarnacin M. (1993) Didctica de la Educacin Sexual. Ed.
El Ateneo, Argentina
54
MINISTERIO DE SALUD. Ley 25.673, de creacin del Programa Nacional de salud Sexual y
Procreacin Responsable.
Ley 26.061 de Proteccin Integral de los Derechos de los Nios, Nias y Adolescentes
55