Apuntes Literaturaii Grado
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Apuntes Literaturaii Grado
Literatura Dramtica II
extinguir
unos
comportamientos
indeseables
utilizando
tcnicas
inspiradas
en
el
condicionamiento.
Entenderemos esta teora con una cita de Paulov: "La humanidad obtendra el control de la
conducta humana cuando los investigadores cientficos fueran capaces de someter al hombre al
mismo anlisis externo que emplean para los objetos naturales y cuando la mente humana se
contemplara no desde dentro sino desde fuera".
Marx.
La filosofa de Marx tiene una finalidad prctica y poltica. No slo era filsofo, sino tambin
historiador, socilogo y economista. A Marx le interesaba un cambio de una sociedad capitalista a
comunista. Este cambio puede producirse mediante la revolucin. Para Marx son las condiciones
materiales de la sociedad las que deciden como pensamos y son los cambios materiales la fuerza
decisiva que impulsa la historia.
Positivismo.
Trmino usado para definir la doctrina de A. Comte. Consiste en "analizar los hechos reales
verificados por la experiencia". El artista debe describir objetivamente la realidad como un cientfico,
con una finalidad pedaggica y crtica, ha de guardar una absoluta fidelidad a la naturaleza, lo que
exige mostrar lo feo y lo bello por igual.
NATURALISMO
El teatro moderno nace con el Realismo del que el Naturalismo es su inevitable acentuacin.
Cualquier puesta en escena actual de Ibsen, Chjov y O'Neill permite reconocer referencias a
nuestro tiempo y a nuestras preocupaciones como si fusemos sus contemporneos. El
advenimiento del teatro realista ocurre con evidente retraso con respecto a la novela.
El naturalismo es la teora segn la cual la composicin literaria debe basarse en una
representacin objetiva y emprica del ser humano. Se diferencia del realismo en que incorpora
una actitud amoral en la representacin objetiva de la vida. Los escritores naturalistas
consideran que el instinto, la emocin o las condiciones sociales y econmicas rigen la
conducta humana, rechazando el libre albedro y adoptando en gran medida el determinismo
biolgico de Darwin y el econmico de Marx.
Literatura Dramtica II
Surge en Europa a partir de 1880, defiende la reproduccin de la realidad tal cual es, sin
ningn tipo de ornato estilstico o de embellecimiento potico. El naturalismo bebe de las tesis
de Marx, de los materialistas alemanes y de los positivistas ingleses y franceses, quienes
coinciden en oponer la naturaleza al idealismo.
Zola, "Naturalismo en el teatro", pone las bases de la nueva actitud esttica. A partir de
Antoine, el naturalismo se impone en el panorama francs.
NATURALISMO EN FRANCIA
Francia sigue manteniendo su prestigio en todo el mundo. Esto se debe entre otras cosas a su
liberacin de las censuras que lo agobiaron en el pasado, las autoridades dejan en cierto modo
de inmiscuirse y el teatro se transforma en un hecho mundano, dirigindose a una burguesa
ms o menos viva, y tambin porque al organizarse de acuerdo con las necesidades del
momento, se transforma en un gran negocio, en una diversin. Francia se encuentra en la
vanguardia del espectculo, al igual que en otros campos sociales (arte, pintura...) Pars dicta
leyes en el campo de la cultura, el progreso y lo mundano.
En Pars predomina el Naturalismo, resultado del contacto entre el Romanticismo tardo y las
verdades cientficas que amparaba el Positivismo. Pretende guardar una absoluta fidelidad a la
naturaleza, lo que exige mostrar lo bello y lo feo por igual.
Su mayor representante lo encontramos en Emile Zola (1875) Fue el mximo terico del teatro
naturalista. Sus ideas estticas las llev a la prctica Antoine, director del Thetre Libre,
montando las obras ms importantes del momento y revolucionando la tcnica escnica.
Literatura Dramtica II
Cuid del pblico: abarat las entradas y se interes por el confort de la sala.
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EL NATURALISMO EN ALEMANIA.
LOS MEININGEN
El "teatro libre" de Andr Antoine tom sus bases de la compaa alemana "Los Meiningen",
1871. El duque Jorge II se hizo cargo de la direccin de los actores de su teatro de corte. Era
consciente de la decadencia de la escena alemana en la poca precedente, y advirti que las
programaciones alemanas estaban calcadas de las del bulevar parisino (operetas, piezas
sentimentales...), imponindose la fantasa sobre la autenticidad escnica.
El duque aspiraba en su teatro a la verosimilitud, la semejanza con la verdad, opuesta al papel
pintado, la declamacin y el divismo parasitario.
El propio duque entrenaba a los actores, los diriga con frrea disciplina tanto a los protagonistas
como a la comparsa. Procuraba para el intrprete un alto grado de concentracin para su
personaje, la comprensin y significado de cada pasaje, de cada estado de nimo y se
preocupaba de la situacin del actor y hasta del ltimo elemento de la comparsera. Hasta el
teatro de Meiningen, la concepcin plstica de la escena, era, por lo general, plana. l mismo
diseaba los decorados, buscaba originales perspectivas y dibujaba el vestuario. El actor debera
moverse, en lo sucesivo, entre los elementos de la decoracin. Jorge II sustituy bambalinas por
paredes y techos, implant puertas y ventanas verdicas, quebr la tabla lisa del escenario con
plataformas y niveles distintos, en una palabra, dio al volumen carta de naturaleza teatral. Su
ltima innovacin reside en el manejo de las masas, que tanto impresion a Antoine, intervenan
no comparsas eventualmente contratadas, sino todos cuantos componan el conjunto de
Meiningen (sesenta actores) Tenan una unidad armnica instruida no slo con accin sino
tambin con palabras, permanentemente activos: "El figurante tiene que cambiar de posicin no
bien se da cuenta de que se halla en la misma que su vecino". Gracias a las giras al exterior
(Budapest, Amsterdam, Mosc, Bruselas, Londres, Francia...) los Meiningen fueron conocidos en
todo el mundo.
El teatro de Meiningen fue el primer exponente del naturalismo. El repertorio de Jorge II consisti
principalmente en obras histricas o romnticas. Meiningen significa la ruptura total y definitiva
con el teatro caduco que le fue contemporneo y un ndice recto y claro hacia el futuro. Este
naturalismo no era el de Zola, sino que persegua la fidelidad histrica y la verdad absoluta en
ella (las armas tenan que ser autnticas).
Represent a Shakespeare, Moliere y a Schiller, y se interes tambin por autores alemanes no
estrenados, como Kleist, y jvenes dramaturgos nrdicos. Estuvieron de gira por Europa, aunque
su campo preferido era Alemania. Supieron estimular el teatro (el nmero de salas pasa de 200 a
600 en slo 15 aos)
En 1889, el movimiento naturalista alemn funda la "escena libre" (Free Bhne), dirigida por Otto
Brahn.
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NATURALISMO EN RUSIA
En Rusia, el teatro durante siglos se confundi con los ritos religiosos, sin separarse de
ellos lo suficiente para adquirir plena autonoma. En esto influyeron el relativo aislamiento, tanto
geogrfico como histrico, el clima y otros factores de menos importancia.
El teatro realista ruso hunde sus races en el teatro de siervos, que cubre el ltimo
tercio del siglo XVIII y la primera mitad del XIX. Emulando a los reyes europeos, los grandes
seores rusos organizaron sus propias cortes ilustradas, en las que el teatro constituy un tipo
de ocio frecuente. Cuando en 1861 fue abolido este rgimen de servidumbre, Rusia se
encontr con un elenco impresionante de actores, bailarines, msicos y pintores provenientes
de la servidumbre. Estos actores-siervos comprendieron la necesidad de crear un teatro ms
conectado con la realidad rusa. Esta poca coincide con la creacin en 1898 del Teatro de Arte
de Mosc (MAT). Este teatro, gracias a un mecenas entusiasta, Morozov, dispuso pronto de un
moderno edificio, bien dotado, en el que los actores disponan por primera vez de confortables
camerinos y de un saln-biblioteca. El Teatro de Arte contaba con actores, directores y
tcnicos. Slo faltaba el elemento esencial, los dramaturgos.
Los fundadores del Teatro de Arte de Mosc, que fueron Stanislavski y Dantchenko,
propusieron un nombre, Antn Chjov, y como texto La gaviota (texto estrenado con
anterioridad y que haba sido un fracaso.
STANISLAVSKI (1863 1938)
Naci en Mosc. Era hijo de un rico fabricante, y esto le proporcion un gran apoyo financiero
para sus aventuras teatrales de aficionado. En 1897, Danchenko se uni a Stanislavsdi para
crear el MAT (Teatro de Arte de Mosc), el primer teatro de Rusia con una compaa
completamente profesional, que sera considerado uno de los ms importantes del mundo.
Apoyado por mecenas privados y por aportaciones de otra ndole, el MAT ofreca una
temporada anual de teatro de alta calidad.
De 1907 hasta su muerte, Satnislavski se dedic a desarrollar un revolucionario sistema de
formacin dramtica. Aplicaba con rapidez lo que aprenda al trabajo escnico. Descubri que
los actores que recordaban sus propios sentimientos y experiencias y los sustituan por los de
los personajes eran capaces de establecer un vnculo especial con el pblico (tcnica
vivencial). Esto permita a los actores y actrices repetir su trabajo escnico sin tener que confiar
en la inspiracin.
Actor, director y autor de Un actor se prepara (1936) y La construccin del personaje
(publicada pstumamente en 1948), Stanislavski cre un tcnica interpretativa que tuvo un
enorme efecto sobre el arte dramtico estadounidense, y desarroll un sistema de formacin
de actores que goz de amplia aceptacin por todo el mundo.
Intent cambiar los viejos vicios de actuacin, consistentes en el nfasis exterior (tonos
exagerados y gestos grandilocuentes), buscando un tono natural. Busc la verdad y la
autenticidad del trabajo personal, la identificacin de cada personaje y sus relaciones con los
dems, tratando de encontrar el germen de la obra y la accin fundamental, manteniendo el
respeto a la obra del autor.
Los puntos bsicos de su tcnica teatral, el Realismo Psicolgico, se basan en:
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AUTORES
1. Datos biogrficos
2. Su obra. Clasificacin. Temas.
3. Algunas notas sobre Ibsen.
1. Datos biogrficos.
Nace en Skien (Noruega), el 20 de marzo de 1828, de familia burguesa pero criado con
austeridad. Pronto se dedic al teatro, y durante 11 aos, de 1851 a 1862, fue administrador y
director escnico. Una beca de estudios en 1863 le permiti dedicarse a su labor creadora.
Visita Italia y se establece all por algn tiempo.
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Ninguna de estas obras tuvo mucho eco, entre otras razones por sus dificultades de montaje
(dramas en verso).
Etapa realista:
Espectros (1881)
poca simbolista.
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Conflicto generacional.
Algunas de sus obras son verdaderas tesis sobre la libertad e independencia de la persona
frente a la opresin de la sociedad, e incluso a cualquier norma moral.
Adquiere gran relieve el tema de la liberacin de la mujer (dicen que el dramaturgo se identifica
frecuentemente con sus protagonistas femeninas). Se convirti en abanderado del movimiento
feminista.
Ibsen despierta la conciencia, hace salir de su letargo a las mentes y pretende eliminar la
hipocresa.
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1. Datos biogrfico
2. Su obra. Clasificacin. Temas.
1. Datos biogrficos
Naci en Estocolmo en 1849. Hijo de un comerciante y de la que fue anteriormente ama de
llaves y amante del mismo. La diferencia de clase entre sus padres era patente.
Su infancia, en una familia de clase media, era relativamente cmoda, aunque Strindberg la
experiment como desgraciada.
Inici estudios universitarios de medicina y despus de letras, pero las dificultades econmicas
le impidieron finalizar las carreras iniciadas. Fracas en su intento de ingresar en la escuela de
actores del Teatro Real Dramtico de Estocolmo, donde actu como figurante en algunas
representaciones.
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Instalado en Estocolmo, conoce a la joven actriz de 20 aos Harriet Bosse y se casa con ella.
Al mismo tiempo, termina La danza de la muerte, uno de sus ms demoledores ataques a la
vida matrimonial. El matrimonio es tan poco exitoso como los anteriores, y seis aos ms tarde
se divorcia.
Es una poca esta de gran creatividad. En ocho aos escribe una 20 obras dramticas, entre
ellas La danza de la muerte, El sueo y La sonata de los espectros.
En 1912, Strindberg muere vctima de un cncer.
El padre (1887)
La ms fuerte (1888)
Segunda etapa: la inaugura con su autobiografa Infierno (1897), en la cual el autor describe
el perodo de tiempo en el que estuvo mentalmente incapacitado. Su trabajo durante este
perodo fue menos realista, influido por sus creencias religiosas y por movimientos literarios
como el Simbolismo y el Expresionismo.
De su produccin literaria en esta etapa podemos destacar:
El sueo (1901)
Tanto El sueo como La sonata de los espectros tuvieron una importancia extraordinaria a la
hora de liberar el teatro de comienzos del siglo XX de las convenciones realistas de tiempo,
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(1903), son sus mximos exponentes dramticos. Obras que describen un mundo cansado,
sooliento y melanclico, con notas de ternura y humor, dramas sin nfasis ni apasionamiento.
Chjov, ms que explicar o gritar, insina, sugiere.
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Los tejedores
El cochero Henschel
Michael Kramer
Pipa baila
Balada de invierno
Su produccin fue desigual en calidad y en especie, pero siempre mantuvo algo de distincin. Su
extensa obra abarca todos los temas de la poca: la miseria del individuo de las masas
trabajadoras, la cuestin religiosa, la desaparicin paulatina del mundo pequeo-burgus, la
proletarizacin...
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Se ocup de la tragedia de la clase trabajadora en Antes del amanecer, de las miserias de las
masas en Los tejedores, en Rose Bemd desarroll un drama campesino y elabor dramas
histricos como Florian Geyer y El salvador blanco. Tambin toc el drama potico en Hannele.
Su obra teatral muestra los rasgos ms diferentes: realistas, neorromnticos, simbolistas,
expresionistas y surrealistas. Hauptmann opina que la tragedia es "una frmula para el problema
ms hondo y ms doloroso de la vida".
Una fuerza positiva caracteriza la visin pesimista del teatro de Hauptmann, para quien el
hombre, por desgraciado y dbil que sea, siempre vale la pena, porque el bien existe a pesar de
todas las experiencias negativas que no hacen sino afirmar ms an la necesidad de avanzar
hacia l.
SIMBOLISMO
Movimiento esttico, literario y teatral surgido en Francia entre 1870 y 1880, como reaccin
contra el naturalismo y el realismo. Su objeto es acceder a lo inefable, a las verdades existentes
ms all de lo aparente, mediante una estilizacin del lenguaje y del asunto dramtico. El desdn
por la realidad llev a prescindir de la prosa a favor del verso.
De forma general, el simbolismo desea definir al ser humano en su totalidad y no de la forma
parcial en que es vista en los escenarios naturalistas. Por ello, en su bsqueda de imgenes que
definen a la persona en su totalidad, investigan los procesos de la mente, el espritu humano, la
cultura clsica, la mitologa, el pasado y la historia, para llegar al acto de anteponer el espritu a la
materia, de ah su fuerte oposicin al Naturalismo. Lo racional frente a lo irracional. Sus piezas
van a inspirarse en relatos mticos y en leyendas. Todo en escena es interpretado de forma
simblica, desde la fuerza de la naturaleza hasta el ms nimio acto humano para llegar a una
total abstraccin donde ha desaparecido lo fsico y queda nicamente lo intangible.
Probablemente sea el teatro menos representado en nuestros das, sin embargo la influencia en
la concepcin escnica de sus espectculos y la de los directores de escena que los llevaron a
cabo -Appia, Gordon Graig, Meyerhold- , no siempre simbolistas pero s partcipes activos del
rechazo al naturalismo, sigue siendo hoy muy importante para conocer la evolucin del teatro
moderno,
La prctica totalidad de los dramaturgos naturalistas evolucionaron hacia el simbolismo,
exceptuando los que murieron prematuramente como Chjov.
A continuacin hablaremos de dos grandes autores teatrales que cultivaron en algunos de sus
textos el simbolismo, es el caso se Salom, de Wilde y de El hombre de la flor en la boca, de
Pirandello.
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AUTORES
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El autor ataca las convenciones de la alta sociedad victoriana, ridiculizando sus prejuicios. Wilde
despliega sus grandes dotes de observador y prodiga su agudo ingenio, que se complace en
llevar la contraria y escandalizar de un modo exquisito y refinado.
La mayora de sus comedias presentan a una pareja de enamorados, en la que el joven suele
ejercer de alter-ego del autor, inteligente, ingenioso, divertido,Casi siempre acompaan a los
enamorados, amigos, tas solteronas, personajes enemigos del protagonista que aparecen para
sacar a la luz alguna falta del pasado que enturbie su felicidad y que como es natural terminan
viendo sus propsitos truncados.
PIRANDELLO (1867 1936)
A este revolucionario de la escena es difcil de encasillarlo totalmente dentro de este lenguaje
escnico, y aunque se pueden notar influencias del mismo, de lo que no cabe duda es que su
teatro se inscribe dentro de la ms absoluta vanguardia.
Pirandello naci el 28 de junio de 1867 en Agrigento, Sicilia, y estudi en las universidades de
Roma y Bonn. Fue profesor de literatura italiana en la Escuela Normal Femenina de Roma,
entre los aos 1897 y 1921, su creciente reputacin como escritor le permiti dedicarse por
completo a su carrera literaria. Se hizo mundialmente conocido en 1921, a raz de la
publicacin de Seis personajes en busca de autor. Las obras ms sorprendentes de
Pirandello son las teatrales, cuyos protagonistas, suelen pertenecer a la clase media-baja. En
estas obras se reflejan las ideas filosficas del autor, como la existencia de un arraigado
conflicto entre los instintos y la razn, que empuja a las personas a una vida llena de grotescas
incoherencias; igualmente considera que las acciones concretas no son ni buenas ni malas en
s mismas, sino que lo son segn el modo en que se les mire; y, por ltimo, cree que un
individuo no posee una personalidad definida, sino muchas, dependiendo de cmo es juzgado
por los que entran en contacto con l. Sin fe en ninguno de los sistemas morales, polticos o
religiosos establecidos, los personajes de este autor encuentran la realidad slo por s mismos
y, al hacerlo, descubren que ellos mismos son fenmenos inestables e inexplicables. Pirandello
expres su profundo pesimismo y su pesar por la condicin confusa y sufriente de la
humanidad a travs del humor. Sin embargo, ste es singularmente macabro y desconcertante.
La sonrisa que despierta procede ms bien de lo embarazoso, y a veces amargo, que resulta
reconocer los aspectos absurdos de la existencia.
Escritor de naturaleza filosfica, desech la teora naturalista realista del teatro de su poca
y llev al plano del arte teatral las teoras del relativismo. En sus obras no existe una verdad
unvoca , por eso como espectadores, nos enfrentamos a realidades huidizas e inaprehensibles
y a personajes con un yo mltiple (actores espectadores personajes) que nos desorientan.
Logr acortar la distancia entre vida y ficcin, llevando sta ltima al lmite de sus posibilidades.
Como dramaturgo, su gran innovacin fue la tcnica del teatro dentro del teatro expresada
fundamentalmente su triloga: As es si as os parece (1917), Esta noche se improvisa
(1930), Seis personajes en busca de autor (1921). En ella Pirandello expuso una serie de
temas que lo obsesionaban como dramaturgo: el problema del autor, de los personajes como
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FUTURISMO
El Futurismo es un movimiento literario y artstico que surge en Italia en el primer decenio del S.
XX. Gira en torno a la figura de Marinetti, quien publica en el peridico parisiense Le Figaro el
20 de Febrero de 1909 el Manifiesto Futurista. Proclama el rechazo frontal al pasado y a la
tradicin, defendiendo un arte anticlasicista orientado al futuro, que respondiese en sus formas
expresivas al espritu dinmico de la tcnica moderna y de la sociedad masificada de las
grandes ciudades.
Declaremos que el esplendor del mundo se ha enriquecido con una belleza nueva; la belleza
de la velocidad. Un automvil de carreras... un automvil rugiente, que parece correr sobre una
estela de metralla, es ms hermoso que la Victoria de Samotracia
En 1910 ya se puede hablar de un grupo liderado por Marinetti. El futurismo fue llamado as por
su intencin de romper absolutamente con el arte del pasado, especialmente en Italia, donde la
tradicin artstica lo impregnaba todo. Quieren crear un arte nuevo, acorde con la mentalidad
moderna, los nuevos tiempos y las nuevas necesidades. Para ello toma como modelo las
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No puede decirse que la Revolucin haya dado al teatro grandes autores. Ha preferido estudiar
de cerca la maquinaria teatral, crear los instrumentos, el lenguaje prctico (mecnico) de un
teatro del futuro que, tambin debido probablemente al exceso de propaganda, de control y de
censura que tuvo que sufrir durante el perodo stalinista, puede perfectamente decirse que an
no ha nacido.
EXPRESIONISMO
Movimiento esttico, intelectual, filosfico y artstico que tuvo lugar en Alemania, fundamentalmente
en la primera dcada del siglo XX, contrario al positivismo y al naturalismo, dominantes hasta
entonces, el expresionismo se propone encontrar y desvelar en las zonas ms ocultas del alma y el
cuerpo de la persona, los elementos no bastardeados de la civilizacin. El expresionismo en teatro
tiene sus precedentes en Strindberg y Wedekind.
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El expresionismo se caracteriza por una visin emocional y subjetiva del mundo, rechaza el
Naturalismo y afirma la supremaca de la vida del alma.
El autor de algunas piezas expresionistas se confiesa en un drama autobiogrfico donde el hroe
principal le representa. El hombre de este momento rompe con la sociedad que le oprime, se niega
a dejarse atar por la familia, a observar las normas de la moral, del deber. Nihilista e incluso
anarquista. Es esencialmente individualista y quiere sacar a la luz pblica lo que instintivamente
siente en lo ms profundo de su ser. El mundo est en l y lo proyecta en sus visiones onricas.
En el corazn del expresionismo estn las experiencias vividas y las relaciones individuales con el
mundo en lo que tienen de difcil, de atormentado, de trgico. Se desafan las comentes estticas y
sociales.
El dramaturgo expresionista piensa que la realidad no existe ms que a travs de su visin
personal. Se rechazan las leyes del antiguo teatro, se huye de la verosimilitud.
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en las que cre el prototipo de la mujer fatal. Adems, escribi El cantante de cmara, 1899, y
El marqus de Keith, 1902.
Su postura cnica de bohemio y moralista antiburgus, su exaltacin del erotismo y su
predileccin por los personajes asociales (aventureros, criminales, prostitutas) le crearon
constantemente problemas con la censura.
Sus ltimas obras son expresionistas: Danza macabra, 1906; Msica, 1908; El castillo
Wetterstein, 1910.
Las obras de Wedekind son al mismo tiempo morales y morbosas, eran naturalista - realistas, e
introdujeron algunos elementos del expresionismo del siglo XX.
RAMN MARA DEL VALLE-INCLN (1866-1936) EL ESPERPENTO
Vida:
Nacido en Villanueva de Arousa y muerto en Santiago de Compostela. Su nombre
original fue Ramn Valle y Pea, que decidi sustituir por el definitivo.
Escritor que escapa a su tiempo y supera con su labor los estilos de la literatura
hispana de su poca, para convertirse en anunciador de corrientes renovadoras y
vanguardistas. Miembro de la generacin del 98, y considerado unnimemente como el
bohemio ms caracterstico de su tiempo, tuvo una vida aventurera, que pasa por sus estudios
de bachillerato en Pontevedra y de derecho en Santiago, sus repetidos viajes a Mxico (1892,
1895 y 1922), su gira artstica por Amrica del Sur como director artstico de la compaa
Guerrero-Mendoza (1910), su visita al frente de Verdn, su ctedra de Esttica en la Escuela
de Bellas Artes de San Fernando (1917) y sus presidencias del Ateneo de Madrid (1931) y de
la Academia Espaola de Roma (1933). Fue asimismo conservador del Tesoro Artstico
Nacional (1932).
Casado con la actriz Josefina Blanco, con la que tuvo tres hijos, su vida de escritor
estuvo permanentemente vinculada al teatro, y dio a la escena espaola la produccin ms
original e innovadora del siglo XX, en la que evolucion del modernismo inicial hasta el
esperpento, imbuido de la ms pura esencia de lo tragicmico. Valle-Incln ensaya distintas
vas de invencin teatral, no sucesivas ni excluyentes, sino paralelas y entrecruzadas, lo cual
hace inoperante toda clasificacin cronolgica de su obra dramtica.
Es el ms radical y revolucionario en lo que respecta al lenguaje, el ms vanguardista y
al propio tiempo atento de lo popular. Nunca gan dinero y se limit a exhibirse en Madrid o en
su tierra gallega. En 1924 la dictadura de Primo de Rivera lo encarcel. Debi esperar el
advenimiento de la 2 Repblica para que, en 1953, se le nombrara director de la Escuela de
Bellas Artes de Espaa en Roma. Tres aos ms tarde muere en Santiago de Compostela.
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Estilo:
Literariamente, parte Valle-Incln del modernismo. En los tres gneros que cultiva
(poesa, teatro y novela) se observa, en su primera etapa, una influencia claramente
modernista y a ello debe algunos elementos caractersticos de su estilo
Con el esperpento supera el modernismo en cuanto a tcnica y, en cuanto a ideologa,
se acerca a la Generacin del 98 por compartir con sus miembros el sentimiento ms genuino
de dolor de Espaa y de protesta contra la situacin hispana. Pedro Salinas llama a Valle hijo
prdigo del 98.
Hay otros riesgos en Valle que aminoran su vinculacin al 98: nueva conciencia del
lenguaje, distinta perspectiva en el tratamiento de algunos temas, adopcin de tcnicas
vanguardistas y evolucin dentro de su esttica.
Cuando Valle supera la etapa decadente modernista, no es capaz de permanecer en
un realismo verista, sino que entra en otra fase de estilizacin, llegando a lo grotesco; es el
esperpento. La definicin de esperpento nos llega por boca de Max Estrella en Luces de
bohemia
literatura-, se da a los personajes, a los hroes, una condicin superior a la condicin humana,
cuando menos a la condicin de narrador o poeta (...) Hay una segunda manera, que es mirar
a los protagonistas novelescos, como de nuestra propia naturaleza, como si fueran ellos
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Escenografa (decorado):
Esttica hiperrealista y distorsin de la realidad. Detenindose en lo
deteriorado, en la miseria, la decadencia, la suciedad, la podredumbre... Contrastar
la clase baja y alta, dando a sta ltima suntuosidad en avanzado estado de
decadencia y deterioro. Colorido ajado, polvoriento, agrisado, destruido. Creacin
de decorados en ruptura con los cnones de la armona y del equilibrio clsicos y
las reglas de la perspectiva. Un conjunto ambiental al servicio del clima. Huida del
barroquismo y lo recargado. La ambientacin debe estar al servicio de la
expresividad. Aquello que no vaya a expresar algo concreto, eliminarlo.
2.
Iluminacin:
Tcnicas al servicio del clima y de las fuerzas dramticas primordiales. Luz
que crea atmsfera. Rechazo de la luz de ambientacin naturalista (momento del
da, estacin...) Uso del contraste entre luces y sombras. Empleo de otro tipo de
iluminacin alternativa no tecnificada como: velas, quinqus, antorchas, lmparas
de aceite, candiles...
3.
Utilera y atrezo:
Uso del mobiliario apropiado y necesario relacionado con la poca pero sin
barroquismos, slo lo imprescindible. Objetos muy manipulados por los personajes
que a veces tienen un nico objetivo acstico. Objetos con variacin de uso
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Vestuario y caracterizacin:
Colorido y estilo relacionados con las pautas de la ambientacin. Vestuario
asociado a la construccin fsica del personaje y a la caracterizacin para lograr la
apariencia esperpntica. Vestuario y caracterizacin relacionados con la poca o la
intemporalidad. Caracterizacin basada en el gesto fijo (mueca esperpntica) y
toda la accin gestual. Bsqueda de lo grotesco, lo deformante, lo ridculo y lo
pattico.
5.
Sonido:
La msica puede estar en consonancia con la ambientacin naturalista
(lugar y tiempo histrico) o no, pero ha de tener un valor expresivo en lnea con las
fuerzas dramticas, la atmsfera y el clima.
6.
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Teatro dialctico: fusiona los principios del entretenimiento con los del didctico (El
crculo de tiza caucasiano, 1954)
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El teatro pico no revela personajes, no desata un drama; cuenta, narra una historia. Y lo que
tiene que mantenerse es la historia.
La obra pica no desarrolla una nica gran accin: ata mltiples pequeas acciones que
aclaran una situacin. El ritmo pico es un ritmo que avanza (Madre coraje y sus hijos, 1939)
Brecht
quiere
aparecrsenos, de pronto, en escena, extraa, alejada de nosotros. Por ello Brecht la insertar
en parbolas (La persona buena de Sezun, 1938)
Todos los temas ardientes y contemporneos que aborda Brecht quedan distanciados de
nosotros tanto por la invencin potica y la irona como por el alejamiento en el espacio y el
tiempo (Galileo Galilei, 1938)
Las obras de Brecht estn absolutamente ligadas a razones polticas e histricas, y tienen un
sobresaliente desarrollo esttico. En Brecht se encuentran siempre unidos el fondo y la forma,
la esttica y los ideales. Su teatro se opone al mundo y teatro burgus, apunta a provocar la
conciencia crtica de espectadores y actores.
En el teatro pico, los personajes no se plantean problemas sociales, los viven. Para nuestro
autor nada debe ser intil en la escena, los decorados son siempre alusivos. El arte debe
exaltar los rasgos caractersticos de lo real. Los coros y grupos que aparecen en sus obras
tienen una significacin social, y no puramente esttica. Brecht reinventa el coro y lo introduce
en la escena paralelamente a la msica y el canto (pera de los tres centavos, 1928)
En las puestas en escena de Brecht se muestra con claridad que estamos en el teatro, ste
aparece desnudo, se deja ver todo el artificio, las iluminaciones, las sujeciones de los
decorados
Brecht hizo gala de antisentimentalismo, de ah surge su famoso efecto V: Verfremdung,
distanciamiento o extraamiento. El actor no debe identificarse con el personaje, debe limitarse
a mostrarlo.
Para poner en prctica sus postulados tericos, se vale de ciertas tcnicas que rompen con la
tradicin teatral de entonces. Para provocar en el espectador una sensacin de extraeza
utiliza mltiples recursos:
Msica y canciones.
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Carteles explicativos, para evitar que el espectador siga con suspense las alternativas
de la accin.
Todo esto contribuye a crear un teatro cientfico en el que la representacin induce a revelar la
realidad oculta.
La oposicin del teatro dramtico o aristotlico y el teatro pico concierne al contenido de la
obra, a su estructura y a la impresin que debe producir en el espectador.
El teatro antiguo y medieval distanciaba a los personajes con mscaras de hombres y
animales. El asitico emplea efectos musicales y mmicos. El teatro de Brecht, que rechaza la
identificacin aristotlica, es denominado pico para resaltar la necesidad de establecer una
distancia semejante a la que los antiguos espectadores establecan con las narraciones.
Brecht postula que el espectador debe darse cuenta, a travs de varios artificios, de que lo
presenciado es un espectculo, y hacerle despertar una actitud crtica racional ante lo
mostrado.
Los principios del teatro pico tienen una contrapartida prctica en las obras didcticas en las
que la accin se reduce a una corta fbula para ilustrar una leccin poltica partidaria: La
medida, La excepcin y la regla, El que dice que s y el que dice que no, etc.
Sin embargo, en sus composiciones ms famosas, Madre coraje, Galileo Galilei, El crculo
de tiza caucasiano, El Sr. Puntila y su criado Matti, Brecht se expresa con demasiada
fuerza potica como para que el espectador se olvide de sus sentimientos.
En estas obras llega a conjugar una maravillosa unin de entretenimiento, doctrina y emocin,
encumbrando la esttica marxista ms all de su fondo ideolgico.
La produccin de Brecht abarca un gran nmero de textos, desde obras teatrales, piezas
didcticas con msica, peras y adaptaciones.
Su primer gran xito se produce en 1928 con La pera de tres centavos, que se estren en
Berln. Es una adaptacin de La pera del mendigo de Gay, autor ingls del siglo XVIII. Brecht
introduce letras y canciones. Tambin llena de canciones y msica Esplendor y decadencia
de la ciudad de Mahagonny, 1929. En esta poca, Brecht se siente tan autor lrico como
dramtico. Poco despus comienza a introducir didactismo en sus obras y busca medios
escnicos sencillos, dilogos esquemticos, y usa la parbola como lnea dramtica (La
excepcin
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En el exilio, el teatro pico de Brecht alcanza su plena madurez: Madre coraje y sus hijos, La
persona buena de Sezun, El crculo de tiza caucasiano, El Sr. Puntila y su criado Matti,
La irresistible ascensin de Arturo Ui, etc.
Cuando en 1948 se establece en Berln, escribe El pequeo organn, una compilacin de
ideas escnicas.
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(1967), contra la poltica colonial portuguesa en Angola; el clebre Discurso sobre el Vietnam
(1968), de implacable radicalismo, y Trostky en el exilio (1969).
En los aos setenta Peter Weiss dirige su atencin hacia dos grandes figuras de la historia
literaria alemana: Hlderlin y Kafka, en torno a las cuales giran sus dos ltimas obras teatrales:
Hlderlin (1971) y El nuevo proceso. Pieza en tres actos. Dedicada a Franz Kafka (1975).
A su etapa final pertenece la monumental triloga novelesca La esttica de la resistencia,
publicada sucesivamente en 1975, 1978 y 1981, donde reelabora, a partir de una base
autobiogrfica, los temas del desarraigo, la angustia y el exilio exterior e interior. De su
produccin ensaystica conviene destacar Laocoonte o Sobre los lmites del lenguaje (1965)
Informes (1968) y Escritos polticos (1971).
SURREALISMO
En 1924 Andr Bretn public su manifiesto surrealista en el que seal que el arte debe brotar del
subconsciente (relacin con las teoras psicoanalticas)
As, el artista recogera, en una libre inspiracin sus imgenes soadas en las que ya no existe
distincin entre el sueo y la realidad. Tambin era importante para un artista derrumbar la censura
de la conciencia con el fin de dejar correr libremente las palabras y las imgenes. La influencia del
surrealismo en el teatro fue importante. El nuevo teatro se caracterizar por:
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Su primera obra teatral fue El maleficio de la mariposa (1920), un gran fracaso a pesar de
que la direccin corri a cargo de Martnez Sierra, con la actriz Catalina Brcena como
protagonista y La Argentinita aportando su baile. El pblico qued desconcertado viendo a los
actores vestidos de insectos: demasiada trasgresin para la poca. En principio se pens en la
obra para muecos. No es la primera vez que veremos como tema el amor frustrado, en este
caso el que siente la cucaracha macho por una mariposa.
Su segunda obra, Mariana Pineda (1927), tiene reminiscencias del teatro potico modernista.
Mariana, una mujer pasional situada en un ambiente andaluz extremadamente poltico, resulta
mrtir de la libertad. En su estreno los decorados fueron pintados por Dal. En el prlogo y en el
eplogo aparece el romance que genera la obra: coplas populares que presagian la accin
dramtica:
Yo soy la libertad porque el amor lo quiso!
Lo ms innovador del teatro de Lorca no procede de su teatro potico, sino del de tteres.
Desde que proyecta un teatro cachiporra andaluz (1921) en colaboracin con Falla, Lorca lee
la tradicin popular con los ojos de la vanguardia. Retablo de don Cristbal y doa Rosita,
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Tragicomedia de don Cristbal y la se Rosita: Lorca nos habla del teatro de muecos,
vieja esencia del teatro andaluz y a la vez paradigma de libertad. La dramaturgia moderna
europea valora las posibilidades del mueco, que ejerce de distanciador de la verosimilitud
naturalista. Esas peculiaridades tienen que ver con la trasgresin de las convenciones
teatrales. Don Cristbal es puro cuerpo con cachiporra y Doa Rosita, supuestamente sumisa,
cuando se enfrenta a un matrimonio impuesto ejerce libremente su sexualidad.
El patrn de todas las piezas es el del viejo y la nia que est en la comedia del arte y en los
entremeses cervantinos.
Su siguiente obra es la primera escrita en prosa, La zapatera prodigiosa (farsa violenta, 1930)
El tema es nuevamente el del viejo y la nia. Segn Lorca, en este texto quera resaltar la lucha
entre fantasa y realidad. Los personajes secundarios son estereotipos cercanos al mundo de
los muecos.
El ltimo acercamiento de Lorca al matrimonio desigual es El amor de don Perlimpln con
Belisa en su jardn (1933) Es una pequea obra maestra que nos remite al mundo de las
aleluyas y entronca con la farsa bufa y la herencia de los tteres. Lorca seala el contraste
entre lo lrico y lo grotesco. Perlimpln ha conseguido ser amado por ella y con su sacrificio le
ha despertado el alma. Pasan de muecos a personajes trgicos.
En cuanto al teatro imposible o comedias irrepresentables, estn llenas de elementos
surrealistas y simbolistas. Tras su viaje a Nueva York, Lorca escribe As que pasen cinco
aos, subtitulada La leyenda del tiempo, y El pblico. A este grupo habra que aadir
Comedia sin ttulo, que qued incompleta.
En As que pasen cinco aos, Lorca parece decir: no hay que esperar nunca, hay que vivir. El
tiempo no circula en una nica direccin; en el ambiente clausurado de una biblioteca
encontramos un tiempo lento y ensoado, mientras en la calle es vitalista y activo:
El sueo va sobre el tiempo
Flotando como un velero.
Ayer y maana gimen
Oscuras flores de duelo.
En El pblico se conservan todos los cuadros menos el cuarto. La pieza aborda la relacin del
teatro y la identidad del yo, sobre todo en el terreno de la identidad sexual y amorosa (el amor
homosexual)
Comedia sin ttulo indaga de nuevo en el mundo del teatro y en la homosexualidad. Como dice
el autor en su prlogo, quiere hacer una encerrona al pblico para conmover sus corazones y
ensearles lo que no quieren ver.
Tragedias y dramas rurales.
Sin renunciar a sus propsitos renovadores, Lorca ensaya un teatro comercial.
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Bodas de sangre (1933) es una pieza pensada como la primera de una triloga de tierra
espaola, a la que seguir Yerma. Partiendo de un suceso real, una joven que huye con su
primo y amante la maana de la boda, la trama se resuelve como tragedia: el destino ciego que
recae sobre la colectividad e impone a los personajes decisiones sin libertad.
Se alternan el verso y la prosa. Las partes poticas estn distribuidas por toda la obra y
cumplen la funcin de los antiguos coros trgicos y, al mismo tiempo, sitan la tragedia en un
espectculo de gran riqueza plstica y musical.
Yerma (1934) ser la tragedia de la mujer estril. Una tragedia con cuatro personajes y coros.
Yerma es la imagen de la fecundidad castigada a la esterilidad. El destino ciego recae sobre
Juan, y sobre el matrimonio sin amor. El conflicto ocurre en el interior de Yerma, que no
transgredir las reglas sociales que le oprimen. Al igual que en Bodas de sangre, el verso y la
msica complementan lo trgico. El desenlace (yo misma he matado a mi hijo) implica la
autodestruccin y un acto supremo de libertad.
Con Doa Rosita la soltera o el lenguaje de las flores (1935), ltima obra que estren en su
vida, Lorca iniciaba un ciclo diferente, al que se refiri como crnicas granadinas, que
comprende tambin Los sueos de mi prima Aurelia (1936), de la que slo pudo escribir el
comienzo, orientado no hacia la tragedia sino a la comedia.
El texto est lleno de notas costumbristas. Doa Rosita vive en el carmen con sus muros
cerrados al exterior y su jardn acenta dentro de la escena la importancia de lo interior. La
accin dramtica es reducida: la espera. Doa Rosita vive en una constante prrroga del
presente. A travs de canciones, modas, objetos, veremos el fluir del tiempo.
En el primer acto se nos muestra una jovencita impaciente. En el segundo, ha comenzado el
siglo XX con sus adelantos, y Rosita borda el ajuar. En el tercer acto aparece el desengao:
Ya soy vieja La esperanza muerta.
La casa de Bernarda Alba se represent por primera vez en 1945 por Margarita Xirgu, ya en
el exilio. El autor reduce la presencia de la poesa en escena: Ni una gota de
poesa!Realidad! Realismo puro! Lorca lo subtitul drama de mujeres en los pueblos de
Espaa. Predomina el blanco y negro en toda la obra, hay un despojamiento de todo lo
accesorio. La casa de Bernarda es la casa de la ley y de la rebelin. Las acciones ocurren en
espacios interiores al que vemos. Las ventanas son fronteras sin proteccin. El tiempo exterior
sirve de contraste con el tiempo interno de las esperas y las comprobaciones. La casa acta
como convento, crcel o manicomio, y tanto como las palabras cuentan los silencios. Bernarda
ordena y manda. Esta autoridad es importante ante la libertad de Adela, sus convenciones
intiles ante la explosin del instinto. Se enfrentan la sociedad artificial contra la naturaleza:
Esto hago yo con la vara de la dominadora (Adela) Pero no hay refugio en el exterior salvo
para la vieja loca Mara Josefa: Me escap porque me quiero casar, porque quiero casarme
con un varn hermoso de la orilla del mar
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REALISMO
Realismo americano
MILLER (Se realizar un trabajo de investigacin)
TENNESSIS WILLIAM (Se realizar un trabajo de investigacin)
Realismo espaol
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Su primer gran xito, Escuadra hacia la muerte (18/3/1953), drama en dos actos, fue
estrenado por el T.P.U., Teatro Popular Universitario.
Escuadra hacia la muerte, presentaba el destino de una escuadra -cinco soldados y un cabocastigada en una tercera guerra mundial. Los soldados, tras matar al cabo, sienten angustia y
soledad: Adolfo intentar sobrevivir en el monte, Andrs se pasar al enemigo y Javier se
ahorcar. Pedro y Luis confan en el perdn. La obra fue prohibida en su tercera
representacin.
Al ao siguiente se estrena La Mordaza (17/9/1954). El dspota Isaas Krappo asesina a
quien fue vctima suya de la guerra civil. Su familia lo sabe, pero slo su nuera rompe la
mordaza del silencio, compuesta de miedo, respeto y fidelidad familiar. Isaas muere en prisin
y sus hijos reconocen el alivio que supone este desenlace.
De este ao es Tierra roja, "drama de la revolucin, en (...) una zona minera colonizada por
un pas extranjero."
Al ao siguiente escribe dramas como La muerte de Dios. Ana Kleiber (1955; estrenada en
Atenas, 1960) recompone, tras la muerte de esta mujer en un hotel, su vida: amores
tormentosos, persecuciones polticas...
Guillermo Tell tiene los ojos tristes (1955) se represent en Cagliari (Italia) en 1972. Es la
historia de este personaje, fracasado por el sacrificio de su propio hijo. Anuncia una evolucin
de nuestro autor el tono grotesco y satrico de algunas escenas. Reconocemos situaciones de
la Espaa de los 50: reuniones de intelectuales, represin policial, supuesto terrorismo... La
obra fue criticada y prohibida por problemas polticos, pero marca una nueva direccin.
De este ao ser Muerte en el barrio dilogo entre un comisario y un tabernero sobre el
linchamiento de un mdico, ausente de su trabajo cuando deba atender a un nio, que muere
vctima de un camin. Le siguen obras como En la red o La cornada, ambas de 1959.
Colabora ya en guiones cinematogrficos.
Hasta aqu, sus dramas revolucionarios. En 1960 redacta el Manifiesto del G.T.R. (Grupo
de Teatro Realista), tambin con J.M. Quinto, por un teatro de calidad. Esta experiencia se
refleja en su Anatoma del realismo (1965).
Un intento de teatro infantil fue El circulito de tiza (1962), basado en un aplogo chino.
Una nueva etapa vendr con su teatro penltimo (1965-1972), coleccin de seis obras:
M.S.V. (o la sangre y la ceniza) (1965), El Banquete (1965), La taberna fantstica (1966),
Crnicas romanas (1968), Ejercicios de terror (1970) y El camarada oscuro (1972).
Con ellas presenta la tragedia compleja, fusin de la aristotlica, la brechtiana -o
postbrechtiana- y el esperpento.
La sangre y la ceniza, o M.S.V. -iniciales de Miguel Servet Villanueva- se escribe entre 1962 y
1965. Se edita en italiano y francs, antes que en castellano (1976). Trata el proceso
inquisitorial de Miguel Servet, quemado por Calvino. Presenta elementos heterogneos: a una
slida documentacin histrica superpone himnos nazis, periodistas contemporneos,
imgenes proyectadas, efectos sonoros, inclusin del pblico en el drama y un lenguaje de
contrastes entre el cultismo, el arcasmo y la jerga. Una sensacin de alienacin prepara la
toma de conciencia del espectador.
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magistralmente
construido,
con
elementos
realistas
esperpnticos.
Culmina con romances y coplas a las "virtudes" del muerto, al modo valleinclanesco de Los
cuernos de don Friolera. La desestructuracin social de los personajes es absoluta y el
lenguaje la reproduce hasta lo ininteligible en las jergas de gitanos y quinquis madrileos. Es la
denuncia magistral de un sistema injusto.
Crnicas romanas (1968) es una versin del cerco de Numancia (133 a.C.), un homenaje a
Cervantes y una exhibicin de tcnica dramtica: el collage incluye imgenes nazis y
referencias al Ch Guevara, segn el anacronismo de obras anteriores. Reconocemos grupos
universitarios: sus hbitos -la obra se cierra con la cancin "No nos movern"- y su argot. Habla
el historiador Polibio, que no figuraba en las versiones clsicas de Numancia.
Sastre denuncia la violencia con que las civilizaciones se imponen, atropellando los principios
de humanidad. Los numantinos sucumben bajo cargas policiales idnticas a las actuales.
En 1971 escribe Askatasuna! y un ao despus viaja a Cuba y Cagliari, donde se
representan sus obras, editadas dos aos ms tarde en francs. Estrena en Rusia y Estados
Unidos. En 1974 encarcelan a su mujer -hasta 1977- y a l mismo -de Octubre de 1974 a Junio
de 1975- por confusos motivos relacionados con E.T.A.
En 1978 terminaba la Tragicomedia fantstica de la gitana Celestina, publicada en italiano
en 1979 y en espaol en 1982. La obra parti de una adaptacin de Celestina que qued en
una versin original. Calixto se enamora de Melibea, antigua prostituta y actual abadesa de un
convento. Parmeno lo conduce all, pero Calixto huye, perseguido por hereje. La gitana
Celestina convence a Melibea para aceptar a Calixto. Durante una entrevista entre los
amantes, unos animales los matan. Celestina muere como monstruo deforme y Sempronio se
ahorca. Desde ultratumba, Calixto y Melibea saborean sus ltimos instantes de amor.
El viaje infinito de Sancho Panza (1984) reelabora las dos partes de Don Quijote: Sancho
intent ahorcarse al morir su amo; ha ingresado en un manicomio, a cuyo siniestro Doctor narra
cmo convenci a don Quijote para buscar aventuras por los campos de La Mancha.
Escribe Jenofa Juncal, la roja gitana del monte Jaizkibel y Los ltimos das de Emmanuel
Kant contados por Ernesto Teodoro Amadeo Hoffmann, estrenada sta ltima en Febrero de
1990. En nota a Dnde ests, Ulalume, dnde ests? (1990) se despide del teatro: "es...el
acabse".
A su obra dramtica debe sumarse una obra de crtica literaria. Present un teatro
imposibilista de gran talento y variedad, que fue prohibido, de manera casi sistemtica, en
Espaa. Sigui la ideologa del Partido Comunista, lo que aade universalidad a su produccin
dramtica.
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maneras destruirn a todos por igual, y una febril preparacin cientfica, que pudiera favorecer
a toda la humanidad, se dirige a nuestra ms completa autodestruccin, al suicidio colectivo. El
teatro refleja la soledad, la inseguridad, la angustia de nuestra existencia. El sueo es una
pesadilla de la que solamente el despertar puede liberarnos. El despertar significa alivio, por
miserable que la realidad sea; en los sueos puede ocurrir todo, tambin lo ms absurdo, no
hay continuidad ni lgica, son reflejo del subconsciente, reas oscuras, desconocidas e
inexploradas de la mente humana. El dramaturgo del teatro del absurdo no cree en una posible
mejora.
Para el teatro del absurdo, el ser humano se encuentra esencialmente aislado, no tiene
relacin con los dems, est solo como condicin humana permanente. Vuelven al monlogo
como recurso teatral. El dilogo desaparece, las figuras hablan pero no dialogan. El lenguaje
ha perdido su sentido, se vuelve un juego montono de palabras, un clich. La realidad se
disuelve, se vuelve irrealidad, sueo. Los seres pierden sus rasgos humanos. No hay unidad
causal entre los pensamientos y la accin. Lo absurdo de lo que el ser humano descubre como
condicin humana. El teatro del absurdo no hace ms que reflejar esta condicin humana al
enfrentar al espectador con lo incomprensible, con lo absurdo de nuestra manera de vivir, con
nuestra angustia al darnos cuenta que no tenemos nada que decirnos, que ya no logramos
establecer un contacto humano, verdadero, profundo, sino un contacto superficial basado en
palabras gastadas, que han perdido su sentido verdadero. Para disfrazar nuestra incapacidad
de comunicarnos, de escuchar realmente al otro, tenemos afortunadamente la televisin, que a
los adultos nos libera de la discusin y a los nios del juego infantil. Gracias a ella todos
estamos quietos. Y el transistor, inseparable compaero, llena el silencio con msica
estridente, y el vacio con relatos escenificados, llenos de accidentes y preocupaciones ajenas.
Ionesco, Beckett, Jean Genet, han expresado estas angustias individuales en juegos
escnicos, en un antiteatro que carece de personajes, de fbula, de conflictos dramticos, de
un desarrollo causal, lgico. Su lenguaje dramtico es un lenguaje formado de palabras
gastadas, repetidas, que se vuelven trozos sonoros, rtmicos, desprovistos de toda idea. El
teatro del absurdo denuncia pero no da respuestas, no seala caminos.
Nace en Rumania, de padre rumano y madre francesa. Pas su infancia en Pars, aunque
volvi a Rumania cuando contaba 13 aos. Regres a Pars en1938, donde fij su residencia y
se dedic a escribir.
Sus obras teatrales describen la ridcula y ftil existencia humana en un universo totalmente
impredecible, en el que las personas son incapaces de comunicarse unas con otras. Su
pesimismo forma parte de la base del teatro del absurdo, en donde se lamenta de la falta de
sentido de la condicin humana. Sus obras rezuman humor y son ricas en situaciones cmicas.
Escribi bastantes obras en un solo acto (tpico del absurdo), utilizando ambientes sofocantes,
llenos de objetos, con situaciones ilgicas para enfatizar la extraeza y alienacin humana.
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Considerado como uno de los padres del absurdo, Ionesco mantuvo una actitud antipoltica
ante la vida, que derivaba de su profundo escepticismo de cara a la imposibilidad de evadirse
de la injusticia, la violencia y la muerte.
La incomunicacin, el miedo y la degradacin del ser humano son los temas centrales de su
produccin, emparentada con el surrealismo, y a la que el propio Ionesco ha calificado de
antiteatro. La voluntaria pobreza del lenguaje, el cultivo del silogismo absurdo y del tpico y una
comicidad rayana con la angustia son caractersticas esenciales de su teatro.
La cantante calva (1950) es una stira que exagera algunos aspectos de la vida cotidiana con
el fin de demostrar la falta de sentido del personaje. stos forman un gran galimatas al hablar
y se muestran incapaces de comunicarse unos con otros. Ionesco utiliza esta misma tcnica
recitativa en La leccin (1950), en la cual un profesor luntico asesina a sus alumnos. En esta
obra toca el tema del miedo a la muerte, que formar parte inseparable de sus ltimos trabajos.
En Las sillas (1952), dos ancianos hablan con dos personajes inexistentes. Amadeo o cmo
salir del paso (1953) trata de una pareja dentro de la cual los sentimientos que una vez
tuvieron el uno hacia la otra, muertos ya, van produciendo un cadver que crece
amenazadoramente hasta que consigue atraparlos a ambos. El nuevo inquilino (1956) se
centra en un personaje confinado en el espacio de un silln. En El rinoceronte (1959), la obra
quiz ms conocida de Ionesco, los habitantes de una pequea ciudad se transforman en
rinocerontes. El personaje principal, prototipo del hombre normal al comienzo de la obra, va
siendo apartado de la vida de la pequea sociedad de su ciudad a medida que lucha contra el
conformismo de sus habitantes. La sed y el hambre (1964) retrata a un hombre que, hastiado
por un estable matrimonio, busca satisfaccin por doquier, aunque sin xito alguno. Entre las
dems obras de Ionesco hay que citar El rey se muere (1962) y Macbeth. Ionesco fue
nombrado miembro de la Academia Francesa en 1970. Escribi asimismo textos sobre teatro,
memorias, y la novela El solitario (1974)
Sus temas centrales son la incomunicacin entre los seres humanos, el miedo a la muerte, la
presin que ejercen las normas sociales sobre el ser humano, la degradacin de las
personas...
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Esperando a Godot (1952): se trata de una farsa trgica en la que dos vagabundos
esperan la llegada de un misterioso Godot, personaje indefinido y omnipotente, quein
de un modo inexplicables lo transformar todo, pero nunca llega. Los dos vagabundos
y el domador con su esclavo animalizado se han convertido ya casi en arquetipos del
teatro moderno. Los temas de la disolucin del individuo y la prdida de identidad, la
imposibilidad del dilogo, la investigacin casi obsesiva del lenguaje heredada de
Joyce van apareciendo en sus obras posteriores.
No yo (1973)
Rescoldo (1959)
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slo existe el placer. Vivir de sorpresas, de cambios, aceptar los riesgos, exponerse a las
afrentas, es lo contrario de la coaccin social, de la comedia social
Dej de escribir y se dedic a liderar distintas causas a favor de los marginados, los pobres, los
homosexuales, ladrones... Genet declar (1970): El teatro es una forma de expresin pasajera
que debe desembocar en la accin poltica. El teatro no es mas que una forma de expresin
oblicua. Hay una forma de expresin directa que es la accin poltica del mundo. He concluido
con la primera forma de expresin, debo pasar a la segunda.
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Los decorados que utiliza son de planteamiento que roza el realismo, aunque muy
despojadas de elementos. Sus descripciones son muy escuetas, disponen de seales
simbolistas que abren la imaginacin del escengrafo.
Teatro pnico.
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Base sagrada.
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Las obras de Arrabal pueden ser unicirculares (el interior de la obra, la misma
estructura vuelve sobre s misma en repetidas ocasiones). Busca un lenguaje meramente
teatral, de imagen. La ceremonia es la forma que explica y da sentido a todos los
elementos que la conforman: el personaje, el espacio, el objeto y el tiempo.
El personaje: especficamente teatral, el actor se investir de gestualidad, de
ceremonia. El personaje pnico tendr un carcter connotativo y simblico.
El espacio: el espacio predilecto del pnico suele ser la habitacin, concebida
como un cubo de salidas vigiladas. La imposibilidad de salir de este espacio explica la casi
constante presencia de los personajes principales a lo largo de la obra. El espacio escnico
representa el espacio materno. Este espacio queda incluido en otro ms amplio, el del
superyo social. La presencia en la representacin del espacio circundante, por lo general
por medio de imgenes acsticas o visuales (sirenas de polica, carcajadas, resplandores
luminosos, proyecciones...) Existe un tercer espacio, el de la libertad. Slo en ese espacio
ser posible el encuentro con el Padre (con l mismo). Se trata de un espacio deseado.
Objetos: en algn momento Arrabal so con un teatro en el que los objetos
cobrasen plena autonoma y fuesen capaces de reemplazar a los personajes. Entre los
objetos aportados por la memoria del mundo de la infancia destacan: candelabros,
cuchillos, atad, corona de espinas, silln-trono, cetro. Dentro de la ceremonia caben
destacar los vestuarios, maquillajes, etc., que contribuyen a la transformacin visible del
personaje. Existen tambin objetos simbolizantes de la huida: triciclos, bicicletas, carrito de
nio, coche, globos de colores...
El tiempo: es el elemento ordenador en el teatro pnico. Anacrona, infringimiento
de la lgica temporal del antes y el despus. Se complica al agrupar en una misma obra
secuencias cronolgicas con secuencias anacrnicas y con secuencias onricas
(acrnicas). Los cambios temporales los marcar Arrabal de varias maneras: cambio de
iluminacin o de espacios o indicar que pasamos al recuerdo por medio del dilogo de los
personajes, o por medio de una voz exterior.
La duracin ceremonial se nos presenta como un tiempo detenido dentro del
tiempo real fsico. Su ritmo es ms pausado, ritual.
Teatro de guerrilla.
Arrabal lanza a partir de aqu sus dramas de la esperanza inmediata (teatro del yo en el
mundo), etapa provocada por su experiencia carcelaria en Espaa (verano del 67). Empieza
a utilizar espacios barrocos. Obras: La aurora roja y negra (1968), Bestialidad ertica
(1968), Una tortuga llamada Dostoievski (1968), Y les pusieron esposas a las flores
(1969), El cielo y la mierda (1970), La guerra de mil aos (1971), Jvenes brbaros de
hoy (1974), La balada del tren fantasma (1975) y Oye patria mi afliccin (1975). Los
decorados ofrecen un mundo de sugestiones, ms cercanas al neoexpresionismo que a su
inicial surrealismo.
Teatro bufo:
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Arrabal, sin dejar de rerse de los dems, se re ante todo de s mismo: Vosotros,
dramaturgos de bulevar, que soy capaz de haceros la competencia en vuestro propio
terreno. Adems de esta razn, reivindic el teatro de vodevil, un gnero injustamente
infravalorado.
Arrabal se interesa ms y en detalles particularizantes (de la actualidad) por los
hitos histricos recientes que ya han pasado la prueba del tiempo (Concilio Vaticano II y
Mayo del 68, el ecologismo, el feminismo...) Arrabal intenta ser exponente de su momento
y perdurar en el futuro.
El espacio utilizado frecuentemente es una casa, que puede estar en cualquier
parte del mundo (un saln, un dormitorio...) Hay que aadir la ilusin del espacio
extraescnico. Los objetos no cumplen funciones simblicas, sino que estn para dar
informacin sobre sus propietarios (sociedad de consumo: telfono, radio, televisin...)
Espacios, ambientes, decorados, objetos, vestuario..., todo es reconocible para que
el espectador se sienta como en su propia casa. Hay escenas iniciales (exposicin) donde
se da informacin sobre los personajes. El espectador debe saber mucho ms que los
personajes para disfrutar de los quid-pro-quo (uno por otro). Debe poseer verosimilitud,
existir un hilo de intriga principal, cruzado por intrigas menores o secundarias.
Hay un empleo usual del transformismo y del travestismo que sustituye en un tono
degradado las investiduras y metamorfosis del Pnico, secuencias onricas provocadas
ahora por somnferos y drogas
Obras: Rbame un billoncito, Apertura orangutn, Punk y Punk y Colegram.
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d) Teatro antiburgus.
Ms difcil, que obliga a pensar y, por consiguiente, resulta minortario, es el de los autores
de la Generacin del 98. Crean un teatro que no es entendido por el pblico del momento
y que presenta dificultades de representacin (Fedra, de Unamuno; Old Spain, de Azorn,
o los esperpentos de Valle)
Unamuno (1864-1936) y Azorn (1873-1967) escriben un tipo de teatro-ensayo, de cierta
hondura filosfica, esquemtico, que, lejos de entretener, complica la vida al espectador.
Ni uno ni otro consiguen el favor del pblico y sus obras son escasamente representadas,
pues son ms aptas para una lectura atenta y reflexiva que para un montaje escnico.
Entre los dramaturgos noventayochistas no debemos olvidar a Baroja (18721956), por
ms que sus aportaciones a la historia del teatro sean escasas, ni a Antonio Machado
(1875-1939), que, en colaboracin con su hermano Manuel, escribi un teatro en verso o
en verso y prosa, que incluye desde el tema folclrico al histrico y leyendas con alguna
incursin en la problemtica de psicoanlisis de Freud. Con los hermanos Machado se
incide en el drama modernista, aunque su obra teatral no ray a la altura de su obra lrica.
Literatura Dramtica II
52
La gran figura ser Valle-Incln (1866-1936), cuyo teatro, como el resto de su obra, est
en constante evolucin; fue tachado de irrepresentable por las dificultades tcnicas que
presentaba y por su violencia lxica. Arranca con obras modernistas y finaliza con los
esperpentos, que constituyen la gran aportacin al teatro espaol del siglo XX y su ms
radical y atrevida renovacin. Busc el realismo en las races populares, el ritual, la
supersticin, el destino trgico de los humildes. La esttica de Valle-Incln rompe los
cnones clsicos y, basada en la deformacin sistemtica, con una temtica expresionista
muy original, profundiza en la negra realidad de la vida espaola, como lo hiciera Goya, a
quien el autor de los esperpentos atribuye su invencin.
Precisamente por el carcter novedoso de su obra, Valle-Incln deber esperar muchos
aos, hasta la dcada de los 50, para que su teatro empiece a ser bien aceptado por el
pblico espaol.
Es innegable la relacin entre el esperpento y el sainete tradicional que Valle dignifica y
categoriza.
e) Novecentismo
Encontramos a Ramn Gmez de la Serna, polifactico y extravagante, antiacadmico y
de fuerte originalidad, que no desde la literatura dramtica. La mayora de sus obras
teatrales son de la poca juvenil, escritas entre los aos 1909 y 1912. La nica pieza
estrenada, Los medios seres, ya es de 1929. Podra ser considerado como un autor
vanguardista, que inicia en Espaa la literatura del absurdo.
Literatura Dramtica II
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extravagante, y su obra debe situarse en el teatro del absurdo, vanguardista, que fue
luego muy cultivado sobre todo en Francia.
Enrique Jardiel Poncela busca sus motivaciones en la irrealidad, en la novedad de lo
inverosmil. Su tcnica se asemeja a las novelas policacas en las que lo inverosmil
encuentra su lgica.
Pedro Salinas (1892-1951) redact sus 14 piezas teatrales en poca tarda, ya en la
posguerra, durante su exilio y, por tanto, cuando ya haba publicado sus ms famosos
libros de poesa. Estas piezas han sido escasamente representadas; slo unas pocas,
espordicamente,
por
grupos
de
aficionados
de
universitarios espaoles y
norteamericanos.
Rafael Alberti (1903-1999) escribi un teatro muy variado: poltico (de tono panfletario),
potico, esperpntico, costumbrista. A excepcin de "El hombre deshabitado" (1931), el
resto de sus obras pertenece a la poca de guerra o de posguerra.
El ms significativo autor dramtico de la Generacin del 27 es Federico Garca Lorca
(1898-1936), cuya temprana muerte no ha sido obstculo para que nos dejara una
importante produccin. Realiz una gran labor didctica tanto a travs de su grupo "La
Barraca" como mediante su obra. Este didactismo es de carcter esttico y no ideolgico,
aunque exista en l crtica social. Empez escribiendo un teatro potico y fue desvindose
hacia un duro y trgico realismo, cada vez ms intenso. La casa de Bernarda Alba, su
ltima obra, es de 1936, con incursiones en el surrealismo El pblico, por ejemplo -, con
el que la tragedia vuelve a ocupar el primer rango dentro del gnero dramtico.
En las primeras obras de teatro de Miguel Hernndez (1910-1942) se descubren las
influencias clsicas de Caldern y de Lope de Vega, pero pasa despus a escribir un
teatro de combate en el que lo esttico le preocupa menos. Su principal valor radica en la
utilizacin del verso, que tiene las caractersticas poticas hernandianas.
En resumen, el teatro espaol del primer tercio del siglo XX va desde el estreno de El nido
ajeno, de Benavente (6 de octubre de 1894), hasta La casa de Bernarda Alba, de Garca
Lorca. Son aos de grandes cambios polticos (monarqua, dictadura, segunda repblica),
y de acontecimientos significativos.
2. Continuidad sin ruptura (aos 40): Teatro burgus.
Aunque no podemos dejar de mencionar el teatro evasivo conformista de tendencia
tradicional, que se escribe y se representa con gran aceptacin del pblico en los aos
inmediatamente anteriores al 36, de acuerdo con las circunstancias externas del momento,
y que prolifera en los aos posteriores.
Literatura Dramtica II
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Literatura Dramtica II
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Literatura Dramtica II
56
Recuerda (1922), Lauro Olmo (1922-1994), Alfredo Maas (1924), Rodrguez Mndez
(1925), Juan Antonio Castro (1928-1980) y, aunque con importantes diferencias, Antonio
Gala (1936).
Literatura Dramtica II
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llegada del PSOE era la plasmacin real de ese propsito constitucional y, por tanto, acababa
la Transicin y comenzaba la normalidad democrtica.
Poco despus de 1975 hay que apuntar varios hechos relevantes desde el punto de vista
teatral:
1) La aparicin de los Teatros Estables, en los que culmina el largo y difcil proceso de
profesionalizacin de los mejores grupos del Teatro Independiente.
2) La creacin del Centro Dramtico Nacional (CDN) por la Direccin General de Teatro y
Espectculo en 1977. El CDN comienza la labor de dar a conocer el teatro que el franquismo
no permiti -las llamadas operacin rescate y restitucin- y atiende tambin a uno de los
sectores ms abandonados del teatro espaol, el teatro del Siglo de Oro, sin olvidar incorporar
al repertorio muestras de teatro extranjero. En el horizonte de CDN, que comienza bajo la tutela
de Adolfo Marsillach (aunque dimiti al ao siguiente), est el poner las bases de un proceso
de descentralizacin del teatro pblico.
3) Desaparicin definitiva de la censura teatral que no slo se ejerca sobre los textos teatrales,
acotando el proceso creativo de los autores de teatro, sino que tambin era especialmente
intensa en la realizacin misma de los espectculos.
Durante aos se pens que la censura franquista estaba arrinconando en los cajones las
mejores obras teatrales, que dejaba inermes a los realizadores con su estrecha legislacin y
puritanismo, que, en ltimo trmino, tena sofocada a una cultura que necesitaba libertad para
crecer y dar frutos.
Sin embargo, aquellas previsiones no se cumplieron:
"Basta ya de recriminaciones lamentosas al franquismo ante la desilusin de que tras la cada
de una dictadura hubiera sido lgico esperar una "eclosin" cultural, valga el galicismo.
Cuando, en efecto, no ha sido as". (Francisco Nieva, "Desvalorizacin cultural", "El Pas", 2-X1977).
"Yo tena la idea de que en el minuto en que aquello terminara [la dictadura de Franco] iba a
haber una explosin de creatividad. Eso era infantil, completamente infantil. Ahora es fcil ver
con qu dificultad se salva un texto de la etapa anterior, con qu dificultad alguien de la etapa
anterior crece un poco ahora y cmo no salen en manada los nuevos autores, ni los nuevos
actores y directores". (Nuria Espert, "El Pas", 4-II-1979).
La situacin sociocultural de la Transicin gener el nacimiento de varias lneas de accin
teatral ms o menos efmeras:
1) El destape: La libertad en la difusin de temas sexuales trajo, por su novedad, una moda de
pseudoproductos teatrales que atraan al pblico por su escabrosidad.
Literatura Dramtica II
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2) El teatro recobrado: Lo que denomin Ruiz Ramn "operacin rescate". Se trataba, por un
lado, de lanzar un puente con la herencia teatral anterior al franquismo, especialmente con
Valle Incln y Lorca, y, por otro, de dar vida escnica al teatro que la censura (Buero -La doble
historia del doctor Valmy-, Lauro Olmo -La condecoracin-, Rodrguez Mndez -Bodas que
fueron famosas del Pingajo y la Fandanga-, Martn Recuerda -Las arrecogas del beaterio
de Santa Mara Egipciaca...-, Muiz -Prncipe don Carlos... ) o el exilio haban impedido (Se
representaron textos de Rafael Alberti y Fernando Arrabal). Unas recuperaciones que no
satisfacan del todo a los que alentaban posturas ms rupturistas: "No nos engaemos: el
teatro que hasta ahora hemos recobrado es slo una parte del teatro silenciado; es el teatro
que la conjuncin de una Administracin reformista y una estructura empresarial de carcter
burgus capitalista espera rentabilizar [...], cuando ya ni los Paso, ni los Pemn, ni los Luca de
Tena, dicen nada". (J.M. Prez Carrera, "El Pas", 16-II-1977).
Como ha denunciado Nieva, todo apunta hacia una gran hipocresa. Mientras la censura se
encargaba de detener este tipo de teatro, todo el mundo lo apoyaba, cuando se qued al albur
de empresarios y pblico, ya no sirva. Para muchos empresarios la censura fue un paraguas.
El pblico que durante el franquismo difrutaba con este tipo de teatro realizaba ms un acto
poltico que un acto teatral. Abierto un cauce poltico se desentendi del teatro, o al menos de
un teatro que se empeaba en recordarle un panorama que quera ser olvidado. Esto justifica
el abandono de los autores crticos al franquismo y la muerte del teatro independiente.
Grupo de la Transicin
Est formado por esos autores que, formados en el periodo anterior -muchos de ellos en el
Teatro Independiente, que justamente en este tiempo se extingue-, comienzan a llevar a
escena desde mitad de los aos setenta sus obras ms personales.
Estas obras siguen las coordenadas del compromiso social, y tienden a una revisin de la
historia desde perspectivas polticas e interpretativas nuevas con la aspiracin de ofrecer
formas vlidas al momento poltico que se vive o a focalizar desde el realismo (un realismo
ampliado, que deja entrar elementos simblicos o subjetivos, que tiene poco que ver con los
cnones del realismo social de los aos cincuenta y sesenta) los lugares ms sangrantes,
menos libres, de la realidad espaola del momento.
Sobre el predominio de un realismo bsico, que no desecha ocasionalmente materiales del
realismo popular como el sainete o la farsa, o de tragicmicos, casi todos los autores se abren,
en uno u otro momento, a formas teatrales donde el testimonio directo de la realidad pierde
importancia. Dos autores destacan en su abandono del realismo: Alfonso Vallejo y Sanchis
Sinisterra, este ltimo progresivamente se ha ido decantando hacia la "dramaturgia de la
recepcin", es decir, un modelo de escritura abierta -donde la intertextualidad y el trabajo vivo
del actor en los ensayos tienen una importancia decisiva- que cuenta con el espectador para
que ste sea el artfice que cierre el significado efectivo de cada pieza.
Literatura Dramtica II
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Domingo Miras (1934): Especializado en dramas histricos como Las brujas de Barahona
(1978), El doctor Torralba (1982), o Las alumbradas de la Encarnacin Benita (1986).
Jos Sanchis Sinisterra (1940): Primero encontr su va de expresin en el teatro pico de
Brecht, despus lleg -dentro de un horizonte temtico personal inspirado en la historia, en la
literatura, en el teatro o en acontecimientos actuales- a un concepto dramatrgico de
estructuras indeterminadas al estilo de Pinter, que le ha convertido en uno de los autores
fundamentales del ltimo cuarto de siglo y quiz tambin de los ms influyentes en las
generaciones posteriores. Entre sus obras destacan: aque o De piojos y actores (1980),
Ay, Carmela! (1986), El cerco de Leningrado, El lector por horas...
Alfonso Vallejo (1943): Un dramaturgo en huida del realismo. Temticamente vinculado a
contenidos de instrospeccin individual y colectiva, Vallejo ha recurrido a recursos de la
vanguardia histrica (especialmente el surrealismo): cido sulfrico, 1975; Gaviotas
subterrneas, 1983; y Espacio interior, 1986...
Ignacio Amestoy (1947): Escritor vasco, admirador de Buero Vallejo, que abunda en un teatro
histrico reivindicativo de determinadas posturas polticas: Ederra (1981), Doa Elvira,
imagnate Euskadi (1985).
Dos autores, creadores de la comedia popular urbana, cobrarn especial significado en la
Transicin y en pocas posteriores:
Jos Luis Alonso de Santos (1942): El autor ms destacado de la comedia urbana.
Realismo crtico basado en la observacin del mundo contemporneo: un mundo poblado de
marginados, de fracasados, de gentes que no encuentran con facilidad su hueco en la trama
social: La estanquera de Vallecas, 1981; Bajarse al moro, 1985; Fuera de quicio, 1987; y
Trampa para pjaros, 1991...
Fermn Cabal (1948): Como Alonso de Santos, un teatro volcado en la realidad inmediata,
con el que denuncia submundo injustos y cambiables: Vade retro!, 1982; Esta noche, gran
velada, 1983; Caballito del diablo, 1985; Ello dispara, 1991; Travesa, 1993; Castillos en el
aire, 1995 , Tejas verdes, 2003
Esta comedia popular, en sus orgenes, fue una manifestacin ms de la llamada movida
madrilea (Joaqun Sabina, Javier Krahe, Alberto Snchez: aplicada a la msica) o comedia de
Madrid (Almodvar, Colomo: cuando se refieren al cine). Sectores juveniles, que durante el
franquismo optaron por formas polticas marxistas, en la transicin, desencantados por la
imposibilidad de conseguir el rupturismo o simplemente hastiados de la poltica, propiciaron el
nacimiento de importantes corrientes contraculturales, una de las cuales fue la famosa movida.
No es casual que Fermn Cabal llevara al teatro Albniz de Madrid una versin teatral de la
pelcula de Almodvar Entre tinieblas en noviembre de 1992.
Literatura Dramtica II
60
Son rasgos del teatro de Alonso de Santos y de Cabal, y por extensin, parte de la generacin
posterior:
1. Defensa de lo marginal (social e individualmente).
2. Afirmacin de principios vitales, incluso advertidos como efmeros, frente a las pautas de la
moral tradicional. No se cree en cdigos morales objetivos.
3. Autoafirmacin afectiva.
4. Ruptura como el modelo social convencional. Tendencia hacia formas de transgresin
del orden (la justicia potica funciona siempre a favor del transgresor del orden establecido).
5. Relativismo poltico. La crtica que en el periodo anterior se ejerca hacia los mecanismos
polticos del Gobierno del Estado, en este teatro -que no ha renunciado a su testimonio crticose dirige a aspectos ms concretos y humanos (el racismo, la marginacin social, la droga, la
soledad, la explotacin, la tortura, la tica del triunfo, la competitividad...) desvinculados, la
mayor parte de las veces, de una inmediata crtica poltica. "La crtica social hoy da es muy
difcil. Porque, por un lado, todo est estructurado para que no exista y, por otro, corres el
riesgo de hacer el juego a la derecha. [...] El problema nmero uno de los creadores ahora
mismo -y la principal ventaja a la vez- es que el futuro no est preescrito ni tiene valores
establecidos..." (Jos L. Alonso de Santos, "El pblico", n 24, IX-1985, p. 34).
6. El abandono de la pretensin de utilizar el teatro como herramienta de pensamiento para
explicar o transformar el mundo. Teatro como reflejo del vivir actual, de su cotidianeidad,
como debate vivo, no abstracto o intelectualizado. "Considero la prensa un material dramtico
de primer orden, tanto como la vida o los libros. La prensa recoge lo que ocurre en la calle y da
una informacin que despus puede canalizarse artsticamente". (Alonso de Santos, "El
Mundo", 4-X-1992). No es una simple reproduccin de una imagen externa, ya que el retrato
social, artsticamente, se dirige a procurar en el espectador un conocimiento significativo de
esa realidad. Ms que en las formas, se cree en la necesidad de renovar contenidos para
generar un nuevo dilogo social basado en los problemas individuales y colectivos reales e
inmediatos.
7. Vuelta a la construccin dramtica tradicional, al juego teatral que se estructura en
planteamiento, nudo y desenlace, y verosimilitud en los caracteres. Algo que -por oposicin al
teatro pico o al experimentalismo- se denomina "aristotelismo":
"Yo soy absolutamente aristotlico. Creo que la historia la escribieron los griegos y en el
aspecto teatral lo inventaron, codificaron y explicaron. Y lo que no se hace tal y como explic
Aristteles es porque pertenece ms al mundo del espectculo que al drama. Ojal
conservramos ese libro, la Comedia de Aristteles". (Alonso de Santos, "El Mundo", 4-X1992).
"Las formas dramticas son las que son, lo dems son artes plsticas; lo que pasa es que los
artistas plsticos han ocupado el espacio del teatro porque los escritores tardan ms en
aparecer y en convencer que los plsticos". (Fermn Cabal, "Boletn ACEE", 7, I-1992).
Se regresa al dramaturgo como creador de historias capaces de interesar a un pblico.
Literatura Dramtica II
61
8. Predominio del humor satrico. Constante presencia del humor como dinamizador de la
accin y suavizante de las posturas ideolgicas.
6. Democracia
Grupo de los 80
Con la llegada del PSOE al gobierno de la nacin (octubre, 1982-marzo, 1996) buena parte del
aparato teatral pasa a manos de antiguos miembros del Teatro Independiente
El PSOE, en consonancia con su visin del teatro como "servicio pblico", afianza el
intervencionismo estatal en temas teatrales, un intervencionismo no siempre bien valorado.
Los recursos econmicos destinados al teatro crecen de una forma muy significativa. Los que
entendan el hecho teatral como un factor de inters social y cultural llevaban aos reclamando
una poltica coherente de subvenciones, sin embargo, pronto algunas voces denunciaron el
otro lado del problema: "El sistema de subvenciones es, evidentemente, un mecanismo de
poder. Es ms sutil que la censura, que corresponde a un proceso traumtico, pero est claro
que forma parte del mismo sistema. [...] El PSOE hoy es un obstculo para el desarrollo
renovador y exigente de nuestro arte. Yo les apoy cuando cre que podan propiciarlo. Pero no
hay desarrollo posible porque han aniquilado el teatro de creacin, de base. Han suprimido las
vas de acceso". (Fermn Cabal,"Boletn ACEE", 7, I-1992).
Parte del esfuerzo se dirige hacia la descentralizacin teatral en apoyo de las nuevas
instituciones autonmicas: se restauran buena parte de los antiguos teatros por toda la
geografa nacional, con la idea de crear un circuito teatral que desnuclearice Madrid y
Barcelona. A lo largo de los aos van surgiendo los Centros Dramticos Nacionales
(Catalua, Galicia, Valencia, Extremadura, Andaluca). En esta misma va, se integran los
numerosos festivales internacionales que surgen por toda Espaa: Almagro, Mrida,
Granada, Madrid, Barcelona, Cdiz... En 1988 se llegaron a celebrar en Espaa 165 festivales,
segn comenta Csar Oliva ("Gestos", XI-1992, n 12).
Sin embargo, al menos inicialmente, no exista una correlacin entre el aumento de
presupuesto pblico dedicado al teatro y el nmero de sus espectadores. Desde 1975 las cifras
globales de asistencia al teatro estaban bajando alarmentemente
Otros hechos de significado escnico del periodo sern:
1983: Jess Cracio, que haba sido actor de los grupos de teatro independiente La Mscara,
Los Goliardos, El Espoln del Gallo y El Gayo Vallecano, da inicio, dentro del Instituto de la
Juventud del Ministerio de Cultura, a un programa de talleres, seminarios, muestras y
encuentros en promocin del teatro escrito por autores jvenes. El Premio de Textos Teatrales
"Marqus de Bradomn" se instituy tambin para este fin.
Literatura Dramtica II
62
1984: Se crea el Centro Nacional de Nuevas Tendencias Escnicas con sede en la Sala
Olimpia de Madrid, con el fin dar cabida y empuje a un teatro de riesgo alentado por un pblico
minoritario. Se encarga de su desarrollo a Guillermo Heras, antiguo director del grupo Tbano.
El CNNTE cerr sus puertas en 1993.
1986: Nace Compaa Nacional de Teatro Clsico, que al estilo de sus homlogas
francesas o inglesas, pretende dar solidez al repertorio clsico espaol, afianzando unas
maneras escnicas cada vez ms eficaces en su relacin con el pblico contemporneo. Se
nombra director de la CNTC a Adolfo Marsillach que la dirige dirige desde enero de 1986 a julio
de 1989, y de enero de 1992 y enero de 1997.
Nace el movimiento alternativo, que, de algn modo, restituye cierta parte del espritu del
teatro independiente, pero que responde a las frmulas off-off ensayadas en Estados Unidos e
Inglaterra. En las grandes ciudades (Madrid -"Cuarta Pared" 1986; "Ensayo 100" 1988...-,
Barcelona -"Beckett" 1989-, Aranjuez- "La Nave" 1989-, Palma de Mallorca -"Teatre Sans"
1990-, Sevilla -"La Imperdible" 1990-, Zaragoza -"Teatro Arbol" 1990, etc.,) surgen un buen
nmero de salas pequeas que sobreviven sobre todo por su actividad como escuelas
teatrales, y que en la dcada siguiente consiguiern agruparse en una asociacin de salas
alternativas y tener una salida pblica a travs de los festivales Alternativos, subvencionados
por las diversas comunidades. Con el tiempo, estas salas sern la nica posibilidad de que
muchos de los autores vivos de teatro estrenen sus obras.
Literatura dramtica
Buena parte del caudal dramtico de este periodo -escrito por autores nacidos entre 19501960, est "vinculado con una serie de autores de la generacin anterior como Alonso de
Santos o Fermn Cabal, que parte de una determinada concepcin aristotlica de la puesta en
escena, aplicada a un teatro de "hoy", por lo general de raz naturalista [...]; dentro de un
determinado estilo que puede conectar tal vez con algunas tendencias del ms reciente
realismo norteamericano". (Lourdes Ortiz, "I Encuentro de Autores en Asturias", 19-I-1990,
"Primer Acto", separata n 233, p. 11-12). Incluso muchos de los ms jvenes asistieron a un
Taller de dramaturgia dirigido por Cabal (Caballero, Pedrero, Onetti, Nancho Novo,
Armada, Garca May...), que les sirvi para tomar una cierta conciencia de generacin, a pesar
de sus diferencias personales en la escritura.
Aunque en parte continan las corrientes de realismo crtico del grupo anterior (tienden a
personajes aturdidos en el torrente existencial, de niveles medios o marginales, en todo caso,
desvalidos y masacrados por cercos sociales especficos), aunque cada autor llev esas lneas
hacia su territorio personal: Pedrero hacia un ahondamiento en las relaciones humanas, Del
Moral fijando su mirada en los protagonistas sociales ms desamparados, Caballero
conduciendo su realismo a un punto de cruce con el simbolismo existencial, Zurro
reencontrndose con la farsa popular y el esperpento.
Literatura Dramtica II
63
Son escritores de esta generacin de los ochenta: Paloma Pedrero (1957), Ignacio del Moral
(1957), Ernesto Caballero (1957), Alfonso Zurro (1953), Miguel Murillo (1953)...
Rasgos comunes a este grupo de autores, que en buena parte ya estn presentes en la
generacin anterior, son:
Casi todos ellos proceden del teatro: de los estudios oficiales o privados, de la prctica
teatral como actores o como directores... Lo que acarrea una determinada manera de entender
la escritura teatral muy prxima a la realidad de la representacin.
La nueva poltica teatral del PSOE no impidi que siguiera acelerndose la estampida general
del pblico de teatro. El primer objetivo de esta generacin de autores es lograr la
recuperacin del pblico teatral. Sin pblico no hay teatro. Si el pblico se ha marchado,
habr que iniciar un camino hacia l desde el teatro. El autor se legitima con un pblico:
"Escribo teatro para representarlo. Lo contrario es una frustracin. Por eso el escritor ha de
tener en cuenta al pblico; el teatro es un arte para el pblico y lo dems son consuelos o
aberraciones". (Ignacio del Moral, "Ya", 19-IV-89). "Nuestra generacin ha llegado al teatro en
una poca, finales de los setenta y comienzos de los ochenta, en la que ya no era importante el
contacto con el pblico, ese buscar la reaccin inmediata. [...] Un teatro sin pblico, un teatro
que no produzca debate, se convierte en una liturgia desprovista de significado y
trascendencia, en lo que ya buena parte del teatro significa hoy, un deber cultural que la
institucin [sic] subvenciona. Se monta y se representa de espaldas a una sociedad que,
adems, y para m es lo ms atacante, es la que paga". (Ignacio del Moral, "I Encuentro de
Autores en Asturias", 19-I-1990, "Primer Acto", separata n 233, p. 7).
Esta necesidad de legitimarse con un pblico condiciona sus armas dramticas:
Valoran la "teatralidad" como elemento constitutivo de sus obras, una teatralidad
descubierta en la escena misma, pero que desea ajustarse al modelo dramtico aristotlico
(dicho sea en contraposicin al teatro pico o a los experimentalismos vanguardistas). "Nuestra
iniciacin en esos mecanismos ['aristotlicos' y de oficio] hay que buscarla en la necesidad de
conectar con un pblico que nos legitime". (Ignacio del Moral, "I Encuentro de Autores en
Asturias", 19-I-1990, "Primer Acto", separata n 233, p. 13)
Su expresin dramtica rehye el experimentalismo por el experimentalismo: "Se
piensa: ya que es joven que traiga algo nuevo, no lo de siempre. Pero, qu es "lo de
siempre"? Para nosotros, "lo de siempre" son teatros vacos, ejercicios pedantes,
vanguardismos forzados... [...]. El deber impuesto de renovar trae consigo un notable vaco de
contenidos". (Ignacio del Moral, "I Encuentro de Autores en Asturias", 19-I-1990, "Primer Acto",
separata n 233, p. 9). Trabajan con recursos teatrales tradicionales (sainete, comedia
urbana) o con nuevas formas de xito social (cmic, publicidad, cine, TV...) en las que esta
generacin se ha formado. Es la primera generacin que ha crecido viendo la televisin.
Literatura Dramtica II
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Su inters por lo visual, siempre queda dentro de un realismo popular, como "militantes de
la inmediatez", en palabras de Ernesto Caballero. ("I Encuentro de Autores en Asturias", 19-I1990, "Primer Acto", separata n 233, p. 12). Realismo en sentido amplio, no en la formulacin
restringida de los aos 50 o 60, con predominio del humor y la irona, y sin dejar de acoger
formas simblicas o poticas.
Aunque defienden la separacin entre literatura dramtica y escritura escnica (entre
literatura y teatro), creen que la prctica escnica puede ajustarse ms o menos al factor
literario sin que deba considerarse el texto escrito como el pretexto de una determinada accin
escnica
El escritor es sobre todo un creador de historias que interesan a un pblico: "Cada uno
ver las cosas a su manera y las comunicar segn sus cdigos ticos y estticos, pero todos
tenemos claro que es necesario despertar el inters de quien nos escuche". (Ignacio del Moral,
"I Encuentro de Autores en Asturias", 19-I-1990, "Primer Acto", separata n 233, p. 7).
Predominio de la stira, de la irona, del simple humor verbal o situacional, como
dinamizadores de la accin que permite un mayor arco de tolerancia en el espectador hacia
determinadas propuestas ideolgicas.
El teatro no es una tribuna intelectual. El teatro excesivamente especulativo aleja al
pblico. "No hay que olvidar que mientras que para un autor el teatro es su vida, para el pblico
es su ocio". (Ignacio del Moral, "Ya", 19-IV-19). El desprestigio de lo intelectual, como
fenmeno desvinculado del mundo inmediato, es un rasgo de ciertas formas de contracultura.
Esta tendencia trata los grandes temas (amistad, la solidaridad, la corrupcin) en tono
deliberadamente menor. Los escritores intentan hallar un punto de encuentro entre lo culto y lo
popular.
El teatro no es un instrumento de concienciacin poltica o de instigacin social. El
escritor, sin embargo, desea ofrecer material para una reflexin sobre el mundo
contemporneo. Entienden el realismo como una forma de dilogo con un mundo real e
inmediato: "Hace ya mucho que el teatro no sirve para cambiar la realidad: no s si alguna vez
sirvi para ello. Pero cada vez estoy ms convencido de que nuestro deber como hombres de
teatro es ofrecer a quienes nos contemplan materia de reflexin sobre s mismos, sobre la
sociedad que todos componemos, sobre el mundo deslumbrante y aterrador que entre todos
estamos construyendo". (Ignacio del Moral, Programa de mano al estreno de "La mirada del
hombre oscuro" (1993). "Frente a un panorama teatral dominado por la oferta institucional del
repertorio clsico, el experimentalismo teatral y el teatro comercial tradicional (casi siempre de
importacin), "Producciones Marginales" ha optado por desarrollar una lnea de trabajo propia
que contribuye de este modo a la consolidacin de una nueva dramaturgia espaola.
Consecuentemente, nuestra apuesta se cifra en reencontrarnos con un nuevo espectador que
se haga cmplice de unas propuestas de teatro vivo, directo, prximo, elaborado a partir de
nuestra realidad ms inmediata. Estamos, pues, ante una comedia en la que, partiendo
Literatura Dramtica II
65
Grupo del 90
Durante el periodo se afianzan una serie lugares comunes alrededor del funcionamiento del
teatro espaol:
1. El teatro espaol sufre una grave crisis de autores dramticos. A parte de los propios
autores, muy pocos defienden la tesis contraria: "Existe en la actualidad del Estado Espaol
una dramaturgia de autores inteligentes y sensibles que caso de disponer de ms posibilidades
para que sus obras accedieran de una manera normalizada a los espectadores, demostraran
la vigencia del texto teatral contemporneo y echaran por tierra ese malintencionado
comentario general de que en Espaa faltan autores teatrales. Lo que falta es riesgo a la hora
de programar y compromiso ideolgico y formal a la hora de apostar por las diferentes
generaciones que configuran nuestro panorama de textualidad teatral". [Guillermo Heras,
Programa de mano a Indian summer (1991)]. Curiosamente, hacia finales de los 80, el CDN
emprendi una promocin de novelistas para la escena -Martnez Pisn, Javier Tomeo, Carlos
Fuentes, Juan Jos Mills, Eduardo Mendoza- con el nimo de atraerlos hacia el mundo del
Literatura Dramtica II
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teatro. Sastre denunciaba que los "verdaderos escritores" eran recibidos "como si fueran un
santo advenimiento". ("El Mundo", "Escritores invisibles", 12-I-1992). Y citaba los nombres
como Garca Mrquez y Vargas Llosa.
2. Hundimiento del prestigio literario del texto teatral y el consiguiente abandono de la
lectura de obras de teatro. Quiz porque, durante un tiempo, la misma profesin teatral
entendi la obra dramtica como un mero guion del espectculo, sin entidad en s misma, o
porque no haya dramaturgos que hayan conseguido atraer el inters de amplios sectores
sociales, lo cierto es que el libro de teatro dej de ser objeto de lectura. Ni el sistema educativo,
ni el mundo editorial han favorecido su difusin. Gener cierta polmica una Antologa de la
literatura espaola editada por el Ministerio de Cultura para la Feria de Frankfurt 1991 en la que
sobre trescientos escritores no se recoga a ningn dramaturgo. Mientras dur el COU, el
captulo dedicado a literatura hispanoamericana slo propona para su estudio la novela y la
poesa. Desde el llamado "Informe de Avin" (1987) elaborado en Francia, todos los pases
viven el intento, ms o menos tmido, de recuperar el texto teatral para la lectura. En Espaa,
muchos han levantado su voz -Antonio Buero Vallejo, Jos Monlen...- para arreglar esta
situacin.
En este contexto, nace en 1990 la Asociacin de Autores de Teatro, que intenta un
progresiva reivindicacin del papel del dramaturgo en la sociedad y en el mismo proceso
teatral, ya que sienten que en los ltimos aos la accin de los directores de escena y las
polticas teatrales han sido poco favorables a los derechos del dramaturgo. La Asociacin
celebra dos congresos nacionales; el primero en San Sebastin en 1991 y el segundo, en
Salamanca en 1995. "Ahora se intenta un rescate del autor para hacer un teatro de nuestra
poca, "moderno", aunque no de vanguardia. La razn de este redescubrimiento es que,
posiblemente, esa poca, en la que, de una manera un tanto eufrica, se prescindi del autor,
tambin puso en evidencia cierta debilidad en las propuestas escnicas". (Ignacio del Moral, I
Encuentro de Autores en Asturias, 19-I-1990, "Primer Acto", separata n 233, p. 4).
El teatro oficial, por su parte, en explcita renuncia a una idea de teatro vinculado a la realidad
social inmediata, parece anclado en una visin culturalista, es decir, el teatro visto como museo
donde, con gran belleza y prepotencia de medios, se exhiben las grandes obras de la
dramaturgia mundial. Sirvan las siguientes muestras sobre el recelo de los dramaturgos
hacia el teatro institucional:
"La cultura teatral emanada de las Administraciones pblicas es mayoritariamente ciega y
necrfila. Aportamos como dato que de 1989 a 1991 de 288 montajes en teatros pblicos, slo
33 lo fueron de autores espaoles vivos, y stos realizados con inferioridad de condiciones
econmicas, de fechas y espacio escnico". (I Congreso de la AAT -Asociacin de Autores de
Teatro-, 5/8 XII-1991).
"Los teatros pblicos, que tienen ciertas pretensiones esttico-artsticos, pero que estn
muertos y repiten un repertorio pretendidamente culto, histrico, etc., y cuando estrenan un
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autor vivo, generalmente es un intelectual cuya conexin con el pblico es nula. La nica
excepcin sera quiz el Centro de Nuevas Tendencias, que presenta cosas de autores como
Sanchis Sinisterra o Rodolf Sirera, pero que programa las obras quince das y se acab".
(Fermn Cabal, "Boletn ACEE", 7, I-1992).
"Luego est el teatro que hacen los organismos oficiales, supermontajes absurdos no
amortizables, que suelen desvirtuar el espritu de las obras y sus autores. Eso es equivocar el
teatro, que es y ha sido siempre el actor y la palabra. El actor y la palabra, nada ms" (Nancho
Novo, "El Mundo" (Magazine), 30-V-1993).
Otros datos de inters teatral del periodo son:
1992. Nace la Red de Teatros Alternativos, una Asociacin que busca dar estabilidad a este
tipo de teatro facilitando una infraestructura estatal y una progresiva identidad jurdica, esttica
e ideolgica. Este tipo de teatros -junto a sala Olimpia entre 1984 y 1994 para un tipo muy
especfico de teatro- siguen siendo los nicos que permite un normal acceso de los jvenes a
la escena. Un acceso silencioso y en capilla.
1995. El modelo instaurado por el Teatre Lluire de Barcelona -un modelo de compaa estable
con administracin semipblica en el que la gestin privada garantiza la autonoma del trabajo,
y los poderes pblicos ejercen estricto control de los fondos atribuidos- hace fortuna tambin en
Madrid y surge el Teatro de la Abada, Centro de Estudios y Creacin Escnicos de la
Comunidad de Madrid. Est regido por una Fundacin Cultural participada por la Comunidad
de Madrid, el Ministerio de Educacin y Cultura y el Ayuntamiento de la Ciudad, y una serie de
personalidades pblicas y artsticas que, con Jos Luis Gmez a la cabeza, conforman el grupo
de patronos "civiles" de la Fundacin. El primer espectculo de la Abada -Retablo de la
avaricia, la lujuria y la muerte, de Valle-Incln, dirigido por Jos Luis Gmez- se estrena el 14
de febrero de 1995, en su sede oficial, una antigua iglesia en la calle Fernndez de los Ros de
Madrid.
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Desde la instauracin, en 1985, del Premio Marqus de Bradomn para Jvenes Autores, se
ha venido hablando de una denominada "Generacin Bradomn". Este hipottico grupo -que
dara sus frutos durante los aos 90- estara formado por todos aquellos que lo ganaron en las
sucesivas ediciones o que slo pudieron lograr algn accsit. Es muy poco probable que salvo,
las coincidencias en la edad, pudieran proponerse rasgos comunes a la escritura de estos
jvenes. Bien es cierto que, al menos en una larga fase del premio, los jurados optaron por
premiar textos que se apartaran decididamente de las propuestas dramticas tradicionales, es
decir, simplificando mucho, de aquellas propuestas que siguen una estructura realista. Quiz
ste sea el nico aspecto comn a todos los bradomines, pero que apenas sirve para
caracterizarlos porque esa ruptura, en el caso en que verdaderamente la hubiera, tena
orgenes y cristalizaciones teatrales muy diversas.
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En todo caso, es cierto que si durante el periodo anterior se da una preponderancia del
realismo crtico -siempre dentro de esas pautas amplias que ya sealamos- y los autores de
referencia son Alonso de Santos y Cabal, en los aos noventa se produce una tendencia hacia
estructuras teatrales ms indeterminadas, al estilo de Pinter, y el autor de referencia es, sin
duda, Sanchis Sinisterra, y, en algunos casos, el escritor y psiquiatra chileno Marco Antonio de
la Parra.
Son dramaturgos pertenecientes a esta dcada: Antonio Onetti (1962), Antonio lamo
(1964), Alfonso Plou (1964), Yolanda Palln (1965), Ignacio Garca May (1965), Laila Ripoll
(1965), Paco Zarzoso (1966), el autodenominado grupo El Astillero, compuesto por Juan
Mayorga (1965), Jos Ramn Fernndez(1962), Ral Hernndez (1964) y Luis Miguel
Gonzlez (1965). Algunos rasgos que, de un modo muy genrico, pudieran ser comunes a
esta nueva generacin de dramaturgos son:
Sigue existiendo una estrecha vinculacin entre el dramaturgo y la escena. El texto se
ve, prioritariamente, como objeto de representacin y el escenario como un medio de
investigacin argumental, actoral, lingstico..., especialmente en los autores ms vinculados a
las teoras dramticas de Sanchis Sinisterra.
Preocupacin por plasmar en el texto una visin integral del teatro, como sistema de
signos complejo (palabra, sonido, movimiento y luz)
Aunque siguen con un firme compromiso social (ahora desde una perspectiva ms global,
ms existencial, menos partidista) y abordan temas parecidos que en periodos anteriores
(antimilitarismo, droga, SIDA, contra el racismo, contra el poder, antisistema, feminismo...), su
tendencia al fragmentarismo argumental, a trabajar minimalsticamente con elementos
imaginativos y onricos fundidos a situaciones cotidianas y al lenguaje coloquial, les da un
aspecto de irrealidad, de absurdo, de fantasmagora o de ritual, segn los casos.
Vanguardismo formal
Paralelamente al teatro de texto y a sus diferentes formalizaciones, el teatro espaol de los
ltimos aos ha indagado en las posibilidades de una esttica vanguardista tanto en el texto
como en la representacin, bien que con una insistente desatencin del pblico, de la crtica y
de las instituciones.
Desde 1985, el novelista lvaro del Amo (1942) dedic algunas creaciones al teatro que se
estrenaron en el CNNTE o en salas alternativas. Geografa, Motor, Lenguas de gato, La
emocin, son alguna de ellas, donde predominan lo enigmtico, la sugerencia existencial, lo
onrico, la indeterminacin...
En Madrid, una parte de estos autores de vanguardia, al menos durante un tiempo, se
movieron en el entorno del teatro Pradillo. Rodrigo Garca (1964), Acera derecha, Antonio
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Fernndez Lera (1952), Muerte de yax, o Carlos Marquere (1951), Otoo, han planteado,
desde lejanas races artudianas y con las experiencias ms cercanas a lo Heiner Mller o lo
Bob Wilson, sus espectculos de textos antidramticos, o de fragmentos llenos de
referencias a autores clsicos o de textos aliterarios, sometidos al ritual, a la burla, a la crtica,
a la descarada obscenidad, al juego de imgenes, al smbolo, al desposeimiento de
teatralidad al personaje que pasa a simple actor, a simple ser que est all intentando
entender porque otros le miran cuando intenta cocinar, o ligar... El teatro como experiencia
esttica irrepetible.
En cierta medida el experimentalismo vanguardista se desvincula del pblico y emprende un
camino minoritario de investigacin formal, habitualmente esteticista y con mensajes que
rebotan en paredes de indudable hermetismo cultural. "Nunca pienso en la audiencia. A los
actores suelo decirles que piensen en ellos mismos. Veo al pblico como a alguien a quien se
invita para que vea lo que hemos elaborado, pero nada ms". (Bob Wilson, "Diario 16", 27-IX1991). La respuesta habitual del pblico ante este tipo de teatro ha sido darle la espalda: en el
Festival de Otoo de 1987, Bob Wilson present en Madrid Hamletmaschine de Mller; segn
la revista "El Pblico" (n 51, XII-1987, p. 64) a la mitad de la funcin se haban marchado la
mitad de los espectadores.
Resumiendo:
En la dcada de los 90, una vez asentada la democracia en nuestro pas, el movimiento teatral
comienza a buscar cauces de expresin dramtica distintos, que partan de cero, olvidando el
pasado y a los autores que lo sufrieron. Las universidades empiezan a editar publicaciones
teatrales con significativa frecuencia, se crean talleres al frente de los cuales se sitan autores
de cierto renombre -como por ejemplo Jos Sanchis Sinisterra-, nacen instituciones con visos
vanguardistas como el Institut del Teatre de Barcelona o el Teatro de Nuevas Tendencias,
con Guillermo Heras al frente, se crean incentivos como el Premio Marqus de Bradomn, con
Sergi Belbel como primer galardonado, etc.
No obstante, los nuevos autores apenas consiguen estrenar sus obras en teatros pblicos y
comerciales. La mayora lo hace en salas alternativas (surgidas en la dcada de los 80) o en
festivales como el de Teatro Internacional de Sitges o la Muestra de Teatro Espaol de
Autores Contemporneos de Alicante, que contribuyen a difundir las nuevas creaciones
dramticas. Dichas creaciones tienen una ptina distinta a todo lo conocido en dcadas
anteriores, ya que se trata del trabajo de gentes que conocen el oficio, que lo han aprendido
sobre las tablas; son producciones cuya autora final es cosa de muchos y en las que el
dramaturgo es una pieza ms.
Sin embargo, una vez ms la falta de apoyo pblico a los nuevos autores y a la investigacin y
experimentacin teatral dificultan el desarrollo de este efervescente movimiento. Entre las
consecuencias de dicha indiferencia institucional cabe destacar la desaparicin del Teatro de
Nuevas Tendencias.
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A modo de conclusin, podramos decir que no todo el teatro que se escribe en la dcada
de los noventa pertenece a las llamadas nuevas dramaturgias. La mayora de los temas
siguen siendo universales, pero es nueva la manera de abordarlos porque el entorno sociopoltico y la visin del mundo que nos rodea han cambiado significativamente. Lo que resulta
novedoso en el tratamiento de temas como la violencia, el racismo, la miseria, la
marginalidad es la inmediatez de su planteamiento, la manifestacin directa de que son
problemas que no slo afectan a nuestro pas sino a todo el planeta; son temas globalizados
que, gracias a la potencia de los diversos medios de comunicacin, no pueden sernos ajenos.
Por eso surgen obras en las que la soledad, la incomunicacin, la huida, etc., impregnan
unos textos que indagan en los lmites de la realidad conformando personajes annimos en
espacios que ponen de relieve su desamparo. Los viejos temas (amor, sexo, muerte) se
entrelazan con otros propios de la actualidad de nuestra poca (divorcio, mundo laboral,
nuevos modelos de relaciones personales) y adquieren dimensiones distintas.
El texto teatral se revaloriza dentro del espectculo, y es en esa textualidad donde se produce
la bsqueda de imgenes. No se siguen las coordenadas aristotlicas, no se dan soluciones.
La funcin denunciadora y crtica del hecho teatral no se produce a travs de los medios
ms tradicionales del gnero dramtico, sino que indaga en sus aspectos estticos,
tcnicos y formales.
En cuanto a la percepcin de la realidad, existe la imposibilidad de un desenlace concluyente.
Las nuevas dramaturgias nos llevan a la ambigedad, a mltiples puntos de vista, a la
confusin entre lo objetivo y lo subjetivo. Personajes de los que no se nos dan antecedentes ni
motivaciones. El ritmo prevalece sobre la fbula. No hay fbula que sirva a los autores para
ejemplificar una visin del mundo, ni personajes que puedan representarla cuando lo que
sienten es desconcierto. Personajes que monologan dilogos sin respuesta.
El texto no busca slo la significacin clara y concreta de lo que se dice, sino que investiga
en la sonoridad de la verbalizacin, organiza el texto con repeticiones que afectan a la
percepcin. Lenguaje conciso y fragmentado, en el que el silencio es un subtexto tan
revelador como el blanco en la pintura. Es un lenguaje que, al no buscar la representatividad,
tampoco busca el decoro en el habla de los personajes. El lenguaje se semantiza de forma
distinta a la tradicional. El espacio como determinante de la accin, tiempo discontinuo, circular.
Todo provoca significados.
Muchos nuevos autores estn inspirados en Beckett. Se refieren a nuestra realidad
inmediata, al mundo actual, con un lenguaje de hoy. Con sentido del humor que acta como
elemento distanciador que evitar cualquier identificacin catrtica del espectador, cualquier
conclusin.
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AUTORES
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nada. Hasta 1971, ao en que la revista "Primer Acto" le publica "Es bueno no tener cabeza",
estrenada en la Escuela de Arte Dramtico de Madrid, de la que es profesor desde 1970.
Sin embargo, Nieva tiene un teatro elaborado desde hace ya muchos aos que
despierta la admiracin de Buero Vallejo, Ruiz Ramn..., y que tmidamente comienza a abrirse
paso. En 1972 empiezan a publicar sus obras. Se le concede el premio Mayte en 1977, el
Premio Nacional de Teatro en 1979 por su adaptacin de "Los baos de Argel, de Cervantes.
En 1982 recibe el Premio de la Crtica por el estreno de "Coronada y el toro". La Real
Academia de la Lengua lo elige para ocupar el silln "J" en mayo de 1986.
A pesar de tantos xitos, se le excluye de la programacin de los teatros nacionales,
nicos organismos capaces de producir obras como las de nuestro autor, cuya envergadura
requiere importantes inversiones econmicas.
La potica de Nieva
Se caracteriza por su afn transgresor, sus mecanismos de ruptura, la consecucin de
un lenguaje y una dramaturgia indita. Su teatro queda definido como la plasmacin de una
tentacin delictiva que supone avanzar por el terreno de lo prohibido mediante la inversin de
los valores convencionales (contravalor).
Tiene influencias de Artaud, ambos comparten la idea de un teatro catrtico y liberador,
cuya finalidad inmediata es mostrar, para que el espectador la encuentre, la esencia ntima,
contraria y en continua guerra, del ser humano. Sin embargo, Nieva, a diferencia de Artaud,
encuentra en la palabra un elemento poderoso: "si tambin la palabra es un instrumento de
dominio, igual lo es de rebelda y liberacin".
En Nieva, la idea de contravalor, de transgresin, es una forma de conocimiento. Nieva
no tiene puntos en comn con lonesco, Beckett, Bertold Brecht, Jarry..., pero hay que recordar
que la potica nieviana nace de una postura vital y existencial que es posible encontrar en
artistas de todos los tiempos: ir ms all, transgredir, violar lo establecido.
La primera pretensin de su teatro ser mostrar caminos de unin que retraten al
hombre y lo conformen como ser dual, en continua guerra de luces y sombras. Nieva elige el
lado oscuro y desconocido del misterio humano, para que lo inconfesable proyecte su luz sobre
la zona visible del alma humana y as quede realmente iluminada. Este tipo de visin tambin
est presente en el Barroco y el Romanticismo. Es una actitud que supone sumergirse en
terrenos inexplorados, traspasando la frontera que atravesamos cuando se trata de "ir ms
all", hacia una totalizacin del ser, o quedarse "ms ac", preservando al hombre de su
acabamiento y destruccin. Nieva invita a la transgresin mediante la creacin de hroes y
personajes que caminan inexorablemente hacia ellos mismos.
El camino del personaje que olvida sus temores y acepta el cumplimiento de sus
deseos es un camino trgico. El "ms ac y el "ms all" establecidos por Nieva no responden
a criterios maquiavlicos, no aparecen previamente marcados con carcter positivo o negativo.
No se elige entre uno y otro, sino que se conciben comunicados. La vida y su doble, el teatro,
son una comunicacin de ambos elementos, en medio de los cuales la CULPA establece una
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frontera que exige ser franqueada para que la comunicacin se verifique. Ah surge el conflicto
del corazn del hombre en la potica nieviana, en la imposibilidad de que ese paso se
produzca sin dolor. Establecido el destino trgico slo cabe una salida existencial, el humor.
Segn Nieva, "si nada hay que transgredir, muere el xtasis dramtico de la transgresin. La
imposibilidad de traspasar el lmite crea frustracin".
Divisin de su obra
1. Teatro furioso, que queda marcado por su concentracin y coralidad. Piezas de un
calculado esquematismo que, aspirando a un respeto por la palabra, la frase y su ritmo,
reclaman la dilatacin interpretativa ms compleja como imprescindible condicin para ser
llevado a escena. Este teatro (segn Prez Coterio) presenta personajes carentes de
psicologa, prototpicos. El teatro furioso viene de estmulos contra la Espaa autoritaria, un
teatro ms acusatorio y ms directo contra la Espaa Negra, contra las instituciones
espaolas como la Iglesia, el Estado, la Moral, etc.
Obras:
El buscn (inacabada)
La diferencia entre ambos (furioso y farsa) radica en el punto de vista del autor, ms
radicalizado en el teatro furioso, donde existe ms rabia e intransigencia, con prisa por
conquistar el ideal transgresor, viviendo la furia de sus personajes y su triunfo o derrota. Es un
teatro agnico, en el que la transgresin se cumple, pero en el que tiene un papel importante la
derrota, la desilusin previa de la que los personajes se pretenden liberar.
En el teatro de farsa y calamidad, el punto de vista vara, la constante transgresora
perdura. El radicalismo de Nieva aparece menguado por la perspectiva de la distancia, por la
ausencia de urgencia, presencia de la risa entendida como elemento vlido para huir de la
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tragedia. No significa esto que el teatro furioso carezca de humor, pero frente al de farsa y
calamidad resulta cnico, agrio, hiriente, porque la furia de la denuncia impide la distancia.
Obras:
4. Adaptaciones:
Temas:
Tres constantes: Espaa, el erotismo y la religin.
La necesidad de penetrar en el misterio de la existencia y del mundo a travs de todos
los caminos posibles, incluyendo lo prohibido y lo culpable, es el tema fundamental de Nieva.
En numerosas obras, la transgresin vendra dada por la necesidad de una liberacin sexual
(es bueno no tener cabeza, La carroza de plomo candente...) Otras veces el autor se sirve de
la idea de una Espaa negra, presentando situaciones injustas de tipo social y poltico que
coartan la libertad de los protagonistas (Coronada y el toro, Malditas sean Coronada y sus
hijas...) La atraccin de lo desconocido y la necesidad de adentrarse en el misterio son los
motivos que Nieva escoge, en otras ocasiones, para expresar su tema central.
Independientemente del tema aparecen tres referencias continuas: a Espaa, al sexo y
a la religin.
En numerosas ocasiones se muestran motivos, temas y personajes de una Espaa
ennegrecida. Los mundos presentados son inslitos; la sexualidad de los personajes, truncada
o desmesurada; el deseo, furioso. Las situaciones reflejan desidia, abandono, pereza. Nieva
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experimenta una evidente atraccin por esa Espaa que pretende liquidar, atraccin que se
concreta en la seguida por los lujos de esa Espaa, aquellos que la sociedad califica como su
peor fruto.
El erotismo, la llamada del deseo, utilizacin de vocablos del lenguaje ertico en
dilogos, las referencias sexuales, directas o indirectas, son constantes y contribuyen a crear
ese lenguaje tan caracterstico de la prosa nieviana.
Encontramos un rey sin sexo (La carroza de plomo candente). Un barbero
homosexual... el conflicto exige una verbalidad ertica. La sexualidad manifestada en el
conflicto supone algo ms que juego a pesar de ese afn provocador.
Su teatro es una reaccin al ostracismo, un afn de vencerlo desde la provocacin, al
tiempo que un anlisis de las frustraciones y anhelos del ser espaol. De ah la desmesura de
ese erotismo, ms amortiguado e irnico en el teatro de "farsa y calamidad" que en el "furioso".
La represin presente en su teatro, aunque referida a Espaa, puede ser trasladada a
otros seres y otros pueblos, pues reflejan una esencia humana que no conoce patria, es la
esencia del hombre, contrario en s mismo, frustrado en s mismo, con ansias de totalizacin.
Las referencias religiosas constituyen la tercera constante temtica. Crtica religiosa,
anticlericalismo, la idea de una religin negra en una Espaa negra. El anticlericalismo queda
reflejado en la actitud y palabras de numerosos personajes, coartan la posibilidad de un
desarrollo total de la existencia. Ciertos personajes quedan ridiculizados por su oficio religioso
o por su fanatismo: Fray Mortela, en Los espaoles bajo la tierra, quien, para no pecar, tiene
que estar subido a un columpio. Otros personajes muestran una moral invertida, para crear
humor y confusin, pone en su boca expresiones de carcter religioso.
Esta crtica religiosa evidencia un afn de herir y ridiculizar. Es una crtica interesada,
rabiosa, alejado de toda religin positiva, pero cercano a lo que toda religin tiene de
esoterismo, magia, misterio, sueo. Todo eso viene de su poca de niez, un Valdepeas de
fanatismo religioso y anticlericalismo, fragua una personalidad contradictoria en la que
confluyen potencias que la convencin considera irreconciliables. As surge el afn de liquidar
una Espaa negra; pero en ella hunde sus races. De ah esos personajes con carcter
religioso, esos conceptos de bien y mal, ese concepto de transgresin, concebido casi como un
sacerdocio.
Personajes:
Se ha afirmado que los personajes de Nieva son prototpicos, carentes de psicologa;
esto nduce a error, falsea la realidad. Nieva desdea el psicologismo del teatro burgus. Sus
personajes aparecen humanizados por medio de la ternura, el dolor o el gozo, aunque creados
para transmitir los propsitos de su autor, consiguen ser entraables y odiosos, amorosos o
repugnantes, independientemente de cuanto representan. Estn llenos de ternura, dotados de
un lenguaje que ya hiera o haga rer o llorar, identifica. El personaje nieviano no viene dado
slo por la accin o por la interpretacin inmediata de sus palabras, sino tambin por la fuerza
y lirismo que transmite.
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Coro
Personaje doble
Nio
Joven hroe
Madre cenagosa
Constrictores.
Su lenguaje viene marcado por la ruptura de los registros lingsticos, que pasan de lo
vulgar a lo lrico, por la concentracin expresiva y la sonora profundidad de la frase, por
su afn hiriente.
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Alargamientos de frases con elementos que desvan la atencin del lector: "Lo juro por
esas estrellas repartidas por el cielo con tan buen gusto como faltas de explicacin"
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Hijo de padres espaoles, vive en Espaa desde 1986. Su primer trabajo fue de ayudante de
carnicero en el negocio familiar, experiencia que aparece
En su estancia en Argentina, se licencia en Ciencias de la Informacin y recibe buena parte de
su formacin teatral. Como autor, en una primera etapa recibe influencias de escritores como
Samuel Beckett, Harold Pinter, Eduardo Pavlosky, Fernando Arrabal y el director de escena
Tadeusz Kantor. Ms adelante, la influencia le llega de autores teatrales como Heinner Mller y
Thomas Bernhard y de los novelistas Louis Ferdinand Cline y Peter Handke.
Rodrigo Garca califica su obra global como "combativa, ingenua y optimista", y rechaza que le
utilicen como un "transmisor de cultura. Lo cierto es que a travs de sus montajes junto a "La
Carnicera Teatro", la crtica ha ido calificando sus obras con palabras como las siguientes:
Busca de un lenguaje propio alejado de todo convencionalismo, de la literatura y
del teatro tal cual lo entendemos. "He querido dejar de ser escritor de teatro para
convertirme en un creador de teatro sin saber muy bien adonde me llevar todo
esto', afirma.
Va a contracorriente. Su teatro carece de personajes y no cuenta historias; el texto
es tan slo una pieza ms de una miscelnea en la que conviven las acciones, el
performance, la coreografa, las artes plsticas, el arte conceptual, la msica
contempornea... "Me preocupa el teatro como edificio, sus olores, colores... Huyo
del teatro puro, de la literatura, no me siento cmodo en ella, la dificultad de mi
trabajo est en que la gente necesita que le cuenten historias.
Segn el autor, slo se puede confiar en las nuevas generaciones para mejorar el mundo. Esta
es una de sus utopas. La segunda, el teatro como foco de resistencia. El arte como
instrumento para cambiar ciertas actitudes. Como vemos, son palabras bastante reveladoras
de la herencia vanguardista.
El teatro de Garca es una propuesta donde la palabra alterna con la imagen y donde se
abordan los problemas marginales con un alto nivel de crtica. Se vale de diferentes disciplinas
para reflejar la realidad y divertir, al tiempo que deja espacio para la reflexin.
Caractersticas de su teatro
Las caractersticas propias del teatro de Rodrigo Garca se pueden hacer extensibles al resto
de los autores de su generacin. Sealamos las siguientes:
El tratamiento del cuerpo como materia creativa frente a la palabra como elemento
exclusivo de informacin; la existencia de cuerpos vivos, plurales, libres, contradictorios.La
asociacin del mundo cotidiano, de lo pequeo con lo potico. La realidad es mltiple,
compleja, plural, y abarca un amplio espectro de posibilidades: lo real, lo onrico, lo
invisible. En una accin srdida puede haber mucho de potico.
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necesariamente significa un actor slo en escena hablando estticamente, sino que puede
ser una experiencia extraordinariamente coral.
La carencia de una cuarta pared frrea. Se rompe la frontera con el espectador y se apela
a su presencia concreta en el espacio emocional y simblico. Su presencia, su actitud, su
energa, influyen en la propia accin teatral, la moviliza.
Se ampla el mundo de los sentidos. Se busca no slo comunicar con espectador a travs
de la vista y el odo, sino tambin a travs del olfato y el gusto.
Se utiliza la revisin como actitud creadora. Es un teatro que descree, que interroga a sus
personajes, que cuestiona, que abre la puerta a los mitos, a los hroes y antihroes
antiguos y contemporneos, que recupera a los figurantes de la vida y les permite dar su
visin del mundo.
Se mezclan los gneros cannicos. Se trata de un teatro que explora las fronteras, que
trasciende el camino entre la tragedia, el drama, la comedia, que propone la cohabitacin
de lenguajes distintos, que se atreve con la farsa, que no descarta la parodia y el
melodrama.
Se establece una clara relacin dialctica entre palabra y cuerpo. Existen trabajos de
movimiento, coreografas, expresin gestual.
El humor est presente, ese humor que aniquila prepotencias, totalitarismos y de paso el
culto a la gravedad de pretensiones trascendentes. Se convierte en una herramienta para
abordar la relacin con el mundo. Rodrigo Garca empieza escribiendo obras de aliento
trgico y el humor se ha ido filtrando cada vez ms en sus textos.
A continuacin, una de las opiniones que Rodrigo Garca tiene sobre teatro:
En el teatro, pienso, todo es ficcin. Y no se muere nadie nunca. Se experimentan,
en el teatro, slo dos cosas como sensaciones reales: miedo y violencia. Miedo de
comunicar lo que tienen la obligacin moral de comunicar. Violencia como sistema
de autodefensa (...)
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