Le damos el nombre de Egregor a una Fuerza generada por una poderosa corriente espiritual, la cual es alimentada a

intervalos regulares, conforme a un ritmo en armona con la Vida Universal del Cosmos , o a una reunin de Entidades
unidas por una caracterstica comn.
En el Invisible, fuera de la percepcin fsica del hombre, existen seres artificiales, generados por la devocin, entusiasmo o
fanatismo, que llamamos egregores. Estos son los corazones de las corrientes espirituales, buenas o malas. La Iglesia
Mstica, la Jerusaln Celestial, el Cuerpo de Cristo, y todos los ttulos por el estilo, son los calificativos del egregor que da
comunin al Catolicismo. La Francmasonera , el Protestantismo, el Islam, y el Budismo tienen egregores. Las grandes
ideologas polticas tambin.
Fsicamente integrado a travs de la iniciacin ritual o a travs de la adherencia intelectual a estas corrientes, el afiliado se
convierte en una de sus clulas. El aumenta el poder del egregor a travs de las cualidades o facultades que el posee, y en
cambio el egregor lo asla de las fuerzas externas del mundo fsico, y con la fuerza colectiva que ha reunido anteriormente
aumenta grandemente la dbil actividad del hombre que se une. Instintivamente, el lenguaje popular le da el nombre de
circulo a un egregor, as expresando intuitivamente la idea de un circuito. Entre todas las clulas constitutivas y el egregor,
o sea entre el afiliado y el grupo, una suerte de circulacin squica interna es de este modo establecida.
Esto explica porque los oponentes de un concepto, al estudiar su origen, naturaleza y desarrollo, frecuentemente terminan
por abrazarlo, o al menos por casarse con sus teoras , incluso sin su conocimiento. Ellos estn conectados a una corriente,
la cual, como es mas poderosa que aquellas a las que anteriormente se haba asociado, los lleva sin percatarse fuera del
camino que ellos imaginaban seguir. Si estuvieran libres de afiliacin, esta accin seria solo mas fuerte y brutal.
Esta regla rige para todas las grandes corrientes de ideas: filosficas, religiosas y polticas.
Pero una corriente espiritual no puede estar viva en el sentido oculto de la palabra, al menos que los rituales la vitalicen. Los
Egregores son conceptos vitalizados. Esto explica porque las asociaciones humanas que tienen un carcter ritual ( Religin
Catlica, Masonera, Martinismo, etc.) pueden esperar generar un egregor, y consecuentemente, permanecer por un largo
tiempo.
La destruccin de un egregor solo puede ser alcanzada rpidamente a travs de la muerte por fuego de sus miembros
vivos, la destruccin de los smbolos que lo concretan o a los que esta unido, as como todos los escritos conectados al
mismo (rituales, archivos, etc.).
El egregor ser lentamente destruido cuando es abandonado a su suerte, sin rituales, sin corriente espiritual generada a
travs de reglas ocultas precisas, que podra perpetuar su existencia.
La incineracin de sus miembros vivos y los escritos asociados a ellos, solo asegura la destruccin del cuerpo fsico y del
doble de todos los seres o cosas. Una simple y ordinaria muerte ( sin la destruccin total de la imagen), a la vez que quita la
vida material, no es un obstculo a la vida astral. Por otra parte, una muerte acompaada por derramamiento de sangre lo
nico que lograra es fortalecer la vitalidad oculta del egregor, por la virtud del misterioso poder de la sangre cuando es
liberada en una forma sacrificial.
Esto explica porque las persecuciones paganas en contra del Cristianismo, de hecho solo sirvieron para incrementar su
abundancia, de igual manera el hecho de que los herticos y sus escritos fueran frecuentemente destruidos por fuego nos
hace ver que la Iglesia Catlica sospechaba los secretos de la vida de los egregores.
Las reacciones de un egregor frente a una clula expulsada son frecuentemente muy peligrosas, aunque siempre
manteniendo una misma conducta. Muy frecuentemente este rechazo modificara considerablemente el destino del
excomulgado, un destino ya modificado una vez en el pasado a travs de la afiliacin. Cuando se deja un egregor , seria
prudente integrarse, aunque solo sea por un momento, con la idea de un poder equivalente pero opuesto.
Tal como las clulas constitutivas de un egregor son sacadas de la humanidad, en el plano material, otras clulas
constitutivas del egregor son extradas del mundo de las entidades. Por lo tanto el egregor vive en el plano fsico( en el que
acta a travs del Hombre) y en el plano superior ( donde acta a travs de las Entidades). Entonces el egregor posee un
cuerpo, un doble, un alma.
Esto tiene su equivalente en la triple Iglesia: militante (terrestre), sufriente (astral), y triunfante (celeste).
De suerte que el ritmo de la vida de un egregor es asegurado a travs del ritual, uno puede fcilmente entender que la
menor perturbacin de este ritual trae una idntica perturbacin en el ritmo vital del concepto. Se parece algo a un rgano
humano que empieza a funcionar anormalmente.
Una vez establecido y perpetuado a travs del uso y del tiempo, un ritual no puede ser modificado sin causar un
debilitamiento del egregor. Esto explica porque este secreto es de particular importancia en los rituales de Iniciacin.
Tal como los Nombres Divinos, las Palabras de Poder, etc ( digamos , las definiciones rituales consagradas por la
costumbre) corrientemente permiten a las formulas, oraciones e invocaciones( tambin consagradas por el uso) establecer
un rapport espiritual entre el Hombre y Dios, as tambin los nombres secretos y especiales, las palabras y las formulas son
usadas para despertar y establecer el egregor.

Si bien la vida pasiva de este concepto vitalizado esta asegurada a travs de la masa de fieles, su vida activa solo puede
ser asegurada por aquellos miembros que son los mas constantes y los mas calificados.
Esto implica que hay , por necesidad, una estructura jerrquica en todas las Asociaciones. La igualdad, si debe haberla ,
puede ser solamente tenida para el circulo interno puesto a cargo del egregor.
Finalmente, las grandes leyes csmicas y mas particularmente aquellas relativas al tiempo, pocas, duracin, deben
colaborar con la vida del egregor.
Esto explica porque todas las grandes ceremonias rituales, sean religiosas o filosficas, se llevan a cabo en los equinoccios
y los solsticios, o en fechas correspondientes con las cuatro grandes divisiones anuales , y sus flujos.. Igualmente, la
progresin de los Astros se observa, as como su influencia, que puede ser obtenida para una locacin ,orientacin , etc.
La imagen convencional de un egregor, su representacin mental, se iguala a una realidad en el plano astral o mundo
hiperfisico inmediato superior. La Republica, Pais, Justicia, Guerra y Hambruna son imgenes de egregores. El Hombre,
visualizando estos conceptos, necesariamente los antropomorfiza. En el Plano Divino, donde todo se iguala a una
numeracin , a un numero divino, es el signo o sello (sigillum), lo que concretiza al egregor.
Tales son , sucesivamente, el Sello de Salomon o Hexagrama, el Pentagrama o Estrella de David, la Cruz Latina, el
Tringulo Masnico y los innumerables signos y sellos , que representan Entidades, los cuales nos han sido transmitidos en
los libros de Magia y Kabbalah.
Todos los egregores ,por lo tanto, deben poseer un signo , caracterstico de su naturaleza, sus fines, sus medios. Respecto
al afiliado, este signo es a la vez una proteccin, un soporte , y un punto de contacto. Por lo tanto se convierte en un
verdadero Pantaculo.
Cuando un egregor ha vivido por mucho tiempo, adquiere una existencia relativamente independiente. Por lo tanto no
obedece mas los impulsos, que los maestros de la secta le transmiten a travs del intermedio del ritual, no siendo mas un
dcil esclavo, frecuentemente se vuelve un fiero tirano. Esto explica porque, muy frecuentemente, un movimiento
posteriormente se desva muy lejos de sus metas originalmente declaradas. Incluso, el egregor puede afectar lo material. El
secreto de conquistar un egregor a travs de evocarlo era un secreto conocido por los sacerdotes de Roma.
La creacin squica de egregores ha sido largamente descrita en muchos tratados de ocultismo. Las reglas del yoga forman
parte de ello. Los Ejercicios Espirituales de San Ignacio, un trabajo conocido por todos los discpulos de los Jesuitas, es
tambin parte de este tipo de trabajo.
La vida oculta de los egregores esta asegurada a travs de procesos idnticos a aquellos usados por la Magia para vivificar
aquellas fuerzas llamadas elementarios. La sangre de vctimas( holocaustos de adoracin o expiacin), resinas aromticas,
frankincienso, mirra, etc.( la sangre de los vegetales), la visualizacin de una imagen concreta, corrientes mentales,
cadenas de union, etc, forman parte de la preservacin y animacin ritual de egregores.
La vida material de los egregores es asegurada a travs del numero de sus miembros, su disciplina, su unin espiritual, la
estricta observancia de vivificar y preservar los rituales.
Igualmente las corrientes de simpata y antipata generadas en el mundo profano, son extremadamente dainas para la
vitalizaron de los conceptos, as como para sus acciones. Incluso mas dainos (con mas razn) son los procesos de accin
oculta a travs de la Magia Tradicional y la Teurgia, los cuales poderosos medios de combate relativo a los egregores, pues
sus poderes estn en armona con los mencionados conceptos. Esto explica porque la profanacin y el sacrilegio han sido
considerados en todos los tiempos crmenes religiosos.
Expliquemos ahora el rol y el propsito de la Cadena de Unin Masnica. Es la Generadora y Animadora del Egregor de la
Orden, no tiene otro propsito que aquel de enviar a los reinos espirituales cercanos a los sentidos carnales y su accin,
corrientes de poder para general un ser metafsico, libre de todo antropomorfismo. Surgiendo de esta asamblea humana,
nacido de su voluntad y su substancia ideal, este ser de otro mundo deviene el Dios-gua. La reproduccin de los principios
regentes de la Francmasonera, y el poder del deseo nacido de la mayora, se transforma en la autoridad cuando se ha
extrado de dicha mayora. Entonces el espritu masnico se transforma en el verdadero egregor de la Orden.