DESplanificación

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Metodologa de la investigacin - Jos Ignacio Vielma

Investigacin de seminario, semestre otoo 2015:

Conflictos en la Planificacin Urbana en la Comuna de Padre Hurtado: 20


aos de evolucin de un rea urbana con bajo grado de autonoma relativa e
integracin intercomunal

Alumna: Carolina Bustamante Herrera


Prof. Gua: Dr. Arqto. M. Isabel Pavez Reyes

INTRODUCCIN
La comuna de Padre Hurtado es relativamente nueva, nace hace 21 aos tras
desligarse de la comuna de Peaflor, el 17 de octubre de 1994. Dos aos despus
comienza sus actividades administrativas. Esta rea se caracteriza por ser una zona
agrcola, pero est compuesto mayoritariamente por poblacin que habita en zonas
urbanas, un 88% de sus habitantes viven en la zona urbana de la comuna, y slo el
12% en zonas rurales.

MAIP

CURACAV

SIMBOLOGA
LMITE COMUNAL

PEAFLOR

LMITE URBANO

CALERA DE
TANGO

REA URBANA

Fig.01.-Area urbana Padre Hurtado (25% de la superficie total de la comuna). Fte: Elaboracin propia a
base de imagen de Google Earth.

La siguiente investigacin constituye un anlisis de los procesos de desplanificacin


que han ocurrido en la comuna, a travs de la planificacin territorial que ha sido
aplicada y la forma en que han operado los diversos instrumentos, debido a ciertas
problemticas

con

respecto

al

desarrollo

territorial,

en

el

mbito

urbano

principalmente.
De esta manera, se discuten una serie de casos que han dificultado la evolucin
correcta del rea urbana, bajo un enfoque que considera el territorio como sistema
integral entre el espacio urbano y rural, estudiando el valor del patrimonio natural, los

procesos de fragmentacin y de conectividad ecolgica en el mbito comunal e


intercomunal.

Instrumentos de Planificacin Territorial.


Desde su creacin la comuna cont con un Plan Regulador que fue heredado de
Peaflor que data del ao 1971 cuyas ltimas modificaciones se realizaron los aos
1993 y 2002, que determinaba bsicamente el lmite urbano (menor al actual) y usos
de suelo habitacional e industrial entorno a los caminos a Valparaso y Melipilla. Fue en
el ao 2005 cuando entr en vigencia el primer y actual Plan Regulador Comunal que
ampli su radio urbano, definiendo una trama urbana con proyecciones para una trama
vial, distintos usos de suelos, zonas de equipamiento y reas verdes. En el ao 2010
caduc la vialidad bsica dejando calles inconclusas y otras perdidas totalmente que
afectan la conectividad local.
En la actualidad el Plan Regulador se encuentra desactualizado y no est respondiendo
al desarrollo urbano que como comuna est presentando Padre Hurtado debido a la
expansin urbana producida por la presin del desarrollo inmobiliario.

Estructura urbana
La formacin de la estructura urbana de la comuna, surge de la conformacin de
parcelas, que con el tiempo desarroll un proceso de expansin por medio de
cooperativas, formando nuevas poblaciones junto a tomas de terreno que con el paso
de los aos fueron regularizndose, lo que explica la falta de fluidez en la trama
urbana y el desarrollo inorgnico de la comuna.
Vialidad
En cuanto al sistema vial de Padre Hurtado, este posee tres ejes fundamentales:
camino a Valparaso, camino a Melipilla, y la autopista del Sol, esta ltima, mejora la
conectividad con la ciudad de Santiago, pero representa un limitante, al no disponer de
un acceso directo y expedito a la comuna, debiendo pasar por Malloco para su ingreso
y salida.

reas urbanizables

En cuanto a las reas Urbanizables, se definen reas urbanizables adyacentes a los


lmites urbanos, de centros poblados que no presentan territorio suficiente al interior
de sus reas urbanas, para adoptar su crecimiento propio. Estas reas urbanizables
establecen reas de reserva para el desarrollo urbano, proyectndose densidades bajas
(160 hab/h) que pueden ser cambiadas en cuanto los Planes Reguladores Comunales
se modifiquen, reconocindose como tales por un nivel bajo de consolidacin y que no
cuentan con instrumentos de planificacin urbana a nivel local, pero presentan
importancia dentro de la estructuracin territorial de los poblados.
De estas reas se localizan 4 en la comuna, siendo dos las ms importantes, por su
extensin y tipo de proyecto a desarrollar, emplazadas entre la Autopista del Sol y
Camino a Melipilla. Representan aproximadamente un 35% de la superficie urbana
actual, conduciendo a duplicar la poblacin de la comuna dentro de los prximos aos,
siendo un tema de preocupacin la oferta de infraestructura y servicios que la comuna
dispone actualmente.

Fig.02.- reas urbanizadas y urbanizables de la comuna de Padre Hurtado. Fte.: Modificacin 73, Plan
Regulador Metropolitano de Santiago, MINVU 2006.

Loteos Irregulares
En la formacin del territorio de Padre Hurtado se refleja la urgencia por generar
viviendas en gran cantidad y a un menor costo posible, surgiendo situaciones como
loteos irregulares o los loteos brujos, como se conocen popularmente, entendidos
como una

subdivisin irregular de un terreno agrcola para fines habitacionales o

cuando en una zona urbana se vende un loteo sin urbanizacin correspondiente,


externos a los planes reguladores.
A mediados de los aos 90 se inicia un proceso de loteos irregulares a gran escala que
se denomina San Ignacio y que corresponde aproximadamente a 3.500 lotes y que
consisti en la compra de terrenos rurales aledaos al lmite urbano los que fueron
subdivididos y vendidos de forma irregular sin obras de urbanizacin o saneamiento
bsico (agua potable, alcantarillado, pavimentacin, etc.).
En la actualidad y por medio de la aplicacin de la ley 20.234 se encuentran en
proceso de regularizacin la totalidad de estos loteos, sin embargo a la fecha las
condiciones de urbanizacin son muy precarias ya que an no cuentan con
alcantarillado ni pavimentaciones y el agua potable se ha resuelto provisoria con la
instalacin de pilones por parte de Aguas Andinas y la construccin de pozos profundos
para su captacin.

Rio Mapocho
Otro tema importante dentro de la comuna, es la presencia del Rio Mapocho, que
alcanza una mayor anchura, y destaca en su belleza natural, a diferencia de otras
zonas de Santiago, pero la apropiacin de terrenos cercanos al borde del rio, por parte
de habitantes de la comuna, ha dificultado la utilizacin correcta de este y presentando
altos ndices de contaminacin. En tanto a la planificacin urbana, se analizan las
modificaciones al Plan Regulador Metropolitano y al Plan Intercomunal con respecto al
Ro Mapocho, las proyecciones a futuro, y la forma de abordar de la comuna frente al
parque metropolitano planteado.

As cualquier tipo de planificacin es sobrepasada por decisiones no pensadas, no


cumpliendo las normativas y directrices establecidas en los planes reguladores. Todas
estas problemticas dan paso a pensar sobre la falta de continuidad en la planificacin
urbana, la poca coordinacin con otras comunas, la necesidad de proteger el medio
ambiente y los recursos naturales.
LA PREGUNTA
La pregunta central de esta investigacin, interroga al rol que han tenido los proyectos
de planificacin urbana e intercomunal en el proceso de ordenamiento territorial de la
comuna de Padre Hurtado, cules han sido los conflictos asociados a la ausencia de
coordinacin entre los instrumentos de planificacin y su causa.
MARCO TERICO
La visin holstica del territorio y los corredores fluviales como una matriz
geogrfica (Pavez, 2009). Siete puntos relevantes.
(1).-La naturaleza sistmica y compleja del territorio, que se admite hoy ampliamente,
desautoriza todos los reduccionismos provenientes de diversas actitudes perceptivas
parciales del territorio, por ejemplo: -la actitud productivista, en la perspectiva de
generar de bienes de mercado; las decisiones estn en funcin del momento
productivo; -la actitud utilitarista, segn la cual el territorio cambia de valor segn
vare el precio del suelo; -la actitud funcionalista, con arreglo a la cual el territorio es el
espacio por el que circulan las cosas y los flujos, a cuyos efectos todo debe
supeditarse; -la actitud formalista, que lo contempla como si fuese un dibujo; -la
actitud patrimonialista, preocupada sobre todo por los derechos de propiedad y las
transmisiones generacionales; -la actitud naturalista, proclive a considerar oportuno
slo lo intocado, o a lo sumo rstico (Folch,2003).
Slo un posicionamiento holstico permitira generar una metapercepcin, resultado de
considerar todos los puntos de vista disponibles. La actitud holstica ir dando lugar a
una metarealidad a partir de todas las realidades perceptivas parciales.
(2).-Por otra parte, la consideracin desde hace tiempo (Terradas, 2003) de la
naturaleza como un sistema dinmico, y no como un escenario pasivo, exige un
cambio en la actitud de los transformadores actuales del paisaje que tienden a ignorar
sus procesos naturales (Mc Harg, 1969) y en la de los conservacionistas extremos, que

tienden a ignorar los aspectos histricos, azarosos, contingentes de la naturaleza.


Paisaje es "el pas de los paisanos", seala Chiozza, subrayando que el paisaje se
constituye como tal cuando lo reconocemos y lo hacemos nuestro, conociendo sus
leyes y valorando su lenguaje1.
(3).- Por otra parte, la teora sostenibilista promueve que la conservacin y
restauracin de los conectores ecolgicos es una estrategia territorial imprescindible
para conservar el capital natural de un pas. La conectividad ecolgica significa ms
cosas que la conectividad biolgica. Buena parte de los flujos que permiten el
funcionamiento del paisaje y que es necesario mantener, o modificar si es necesario,
son de carcter abitico: flujos de energa advectiva 2, de aire, de agua, de nutrientes,
de suelo, de sedimentos y de contaminantes.
En cuanto a la conectividad biolgica ella significa ms cosas que los pasos de fauna
(esta ltima adems se entiende como los animales vertebrados terrestres no
voladores, porque estos animales son especialmente vulnerables al efecto de las
barreras de las infraestructuras). An en el caso de las reas periurbanas, donde ya
han desaparecido estas especies, existe la necesidad de mantener las conexiones
ecolgicas.
La existencia de corredores biolgicos eficaces que realmente sean ocupados por las
especies de inters puede evitar o paliar el aislamiento biolgico entre poblaciones
que ocupan diferentes teselas del paisaje.
Los corredores biolgicos (anchura ms bien escasa, mtrica o decamtrica; un slo
hbitat, hbitat de borde o margen) no deben ser confundidos con los conectores
ecolgicos (gran anchura, kilomtrica; multihabitat; interior de hbitat) que permiten
tanto flujos abiticos como biticos.

1 Expresin de Elena CHIOZZA, lder de la Geografa en Argentina, citada por PESCI, Rubn. 2002. "El
urbanismo y la cultura ambiental. Sostenibilidad y levedad: territorio, urbanismo y ambiente" (2002), en
FOLCH, Ramn (coordinador) El territorio como sistema. Conceptos y herramientas de ordenacin. Ed.
Diputacin de Barcelona, noviembre de 2003, 291 pgs. ilustradas; pp.101-119.

2 Adveccin: es variacin de un escalar en un punto dado, por efecto de un campo vectorial. Por ejemplo: el
transporte de una sustancia contaminante por la corriente de un ro; en meteorologa, el proceso de
transporte de una propiedad atmosfrica, como el calor o la humedad, por efecto del viento; en
oceanografa, el transporte de ciertas propiedades, como la salinidad, por las corrientes marinas. Tales
propiedades tienen una distribucin espacial.

Muy estrechamente vinculados con la funcin conectora, se encuentran los mbitos


fluviales y costeros, que tienen adems unos valores naturales, territoriales y sociales
propios de primera magnitud. La visin sistmica de los espacios libres ofrece un papel
estratgico adicional a las reas fluviales y costeras que se deberan apoyar mediante
un tratamiento adecuado a todo su potencial.
La matriz de un territorio sustenta la mayor parte de los servicios ecolgicos que puede
generar un territorio. Estos y los hbitats no son cosas que nos proporcionan slo las
teselas (a escala territorial, los espacios naturales singulares protegidos), tambin los
proporcionan los sistemas agrarios, los cultivos extensivos de secano, los bosques y los
matorrales de tierras bajas. Por tanto, una poltica de conservacin de la naturaleza no
debe considerar exclusivamente las reas protegidas, sino el conjunto del territorio
(Rod, 2003).
El mantenimiento de la biodiversidad en el territorio depende en gran medida de cmo
tratamos la matriz, porque constituye la mayor parte del paisaje; lo que afecte a la
matriz, tarde o temprano afectar tambin a la flora y la fauna.
Una biodiversidad adecuada en un paisaje agrcola o forestal quiere decir por ejemplo
que los flujos biocidas que aplicamos a los cultivos estn dentro de los lmites
soportados por muchos organismo incluidos los humanos. Por lo general la matriz del
paisaje no slo aloja una biodiversidad de considerable inters y contribuye a
mantener las teselas y corredores, sino que realiza otras funciones ecolgicas
esenciales, como la destoxificacin de contaminantes, el control de la erosin, la
regulacin hidrolgica, etc.
Los conectores ecolgicos son territorialmente potentes, y por lo tanto estructuran el
territorio, debiendo ser una pieza en pleno dilogo con los sistemas urbanos y de
infraestructuras. Al aportar grandes extensiones de hbitats un conector ecolgico
hace, las funciones de la matriz del paisaje. Esta convergencia entre las funciones de
conector y de matriz es una caracterstica altamente deseable segn Rod, en la lnea
de considerar el conjunto del territorio y los papeles de las diversas piezas del
conjunto. Sin embargo, al comenzar el siglo XXI, estas nociones estn lejos de la
prctica de la planificacin y de la gestin del territorio.

Cabe destacar en este punto que no existe el equilibrio en la naturaleza sino equilibrios
transitorios a los que se tiende ("naturaleza en flujo" (Pickett, 1995)). Comprender el
dinamismo del paisaje, los procesos que mantienen a los sistemas ecolgicos en
funcionamiento y los equilibrios transitorios a los que tienden, es indispensable segn
Terradas, para una insercin sostenible de las sociedades humanas en el marco de la
biosfera.
Releva Folch que desde el punto de vista de la economa, an en la actualidad no se
admite que los parmetros de la matriz biofsica tienen un enorme valor, por lo cual los
clculos econmicos no son correctos. El caso del cambio climtico es un exponente
claro, y el consumo desenfrenado de espacio, es otro. El espacio libre es un bien sobre
todo cuando se vuelve escaso.
(4).-La cultura sostenibilista aboga por la internalizacin progresiva de costos y
residuos. La mayora de los sistemas naturales son muy eficientes en esto. A la escala
que nos concierne seala Folch que "la sostenibilidad [relativa] es concebir todo el
territorio como espacio interior, sin lugar a externalizaciones". Y, no habra que
confundir desarrollo sostenible con higiene ambiental: en la eliminacin sostenibilista
de los desechos no se saca de encima los residuos por la va de la destruccin o del
vertido sistemtico, sino por la va de su reinscripcin hasta donde resulte
razonablemente posible en el proceso productivo.

"Los productos industriales tuvieron que internalizar en su momento los costos de las
mejoras sociales de los trabajadores (vacaciones, salud, etc.) pero todava no lo han
hecho totalmente con los costos socioambientales, lo que propala la falsa especie de
que gestionar correctamente el medio ambiente en concreto, y en el territorio en
general, es caro. Lo es en la medida que se paga tarde y mal lo que debiera haber sido
imputado es decir, internalizado al proceso causante de la disfuncin". (Folch, 2003)
A partir de esa concepcin debe entenderse que la consecucin de la sostenibilidad
global es correlativa a la instauracin de un nuevo modelo de desarrollo econmico,
social, y ambiental. El desarrollo sostenible sera la expresin de una nueva cultura
sostenibilista, que responde a un nuevo y emergente paradigma de relaciones de los
humanos entre s y con su entorno. Cabra hablar de una sociedad sostenible en su
conjunto.
Como modelo socioeconmico y ambiental, la sostenibilidad es conducente:

-al consumo de recursos renovables por debajo de su tasa de renovacin; -al consumo
de recursos no renovables por debajo de su tasa de substitucin; -al vertido de
residuos por debajo de sus posibilidades de asimilacin; -a la conservacin in situ de la
biodiversidad; -a la superacin de la inequidad social; y propende, con ptica
planetaria y con arreglo a la lgica biosfrica:
-a la internalizacin de los costos sociales y ambientales de los procesos productivos;
-a la priorizacin del valor del trabajo y de los recursos; -a la globalizacin de la
estrategia socioeconmica en lugar de la simple mundializacin del mercado; -a la
redistribucin equitativa de los productos y de los valores aadidos.
(5).- Por otra parte, la sostenibilidad impulsa la investigacin de una serie de ndices
ecolgicos con el fin de avaluar la vulnerabilidad del territorio frente a diferentes
actuaciones urbansticas y de infraestructuras, estudiar el valor del patrimonio natural
o determinar los procesos de fragmentacin y de conectividad ecolgica en el mbito
metropolitano. No slo se trata de describir la situacin actual, sino tambin predecir la
que resultara de distintos escenarios (tendenciales, propuestas alternativas, etc.). Se
tendr presente que una evaluacin es siempre un acto de subjetividad coherente,
responsable, referida a los componentes ms relevantes de una realidad compleja
(metarealidad).
El tipo de urbanizacin dispersa en el territorio y las infraestructuras que conectan los
componentes, tienden a disgregar los espacios agropecuarios y forestales en miles de
fragmentos, cada vez ms pequeos, menos funcionales, ms desconectados los unos
de los otros. Muchos crecimientos urbansticos de los ltimos aos siguen acabando los
cada vez ms escasos conectores ecolgicos metropolitanos y ocupando superficies con
evidentes riesgos geotcnicos o reas inundables (urban sprawl, desbarajuste urbano).
Ello sin contar los contaminantes atmosfricos, los ruidos, las aguas residuales, los
vertidos industriales y domsticos, etc., que afectan negativamente de una u otra
forma, a todos los sistemas naturales.
Seala Marull:
"... cualquier planeamiento metropolitano sostenible tendra que prestar
una especial atencin al tratamiento de los espacios fronterizos e

intersticiales de los sistemas urbano y periurbanos, dar un tratamiento


integrado a los espacios que todava son susceptibles de ser recuperados,
evitar las zonas ms vulnerables a la actuacin urbanstica, preservar las
zonas de valor ecolgico y configurar un sistema de redes ecolgicas
funcionales conectadas con los espacios naturales protegidos y tambin con
los grandes espacios libres urbanos. En definitiva, es necesario gestionar el
espacio libre como un bien muy valioso que hay que preservar".
(Marull,2003)
No se trata de evitar que los espacios libres se vean incorporados a los procesos de
urbanizacin a medio plazo sino de valorar estos espacios y dotarlos de un proyecto
ecolgico, social y econmico adecuado como nica va para garantizar su conservacin
a largo plazo.
Siendo el paisaje un sistema con una serie de procesos que tienen lugar dentro y entre
las teselas que lo integran, gestionar un paisaje no es disear un escenario, sino
reorganizar, segn unas constricciones naturales y unos objetivos, un sistema de tal
modo que siga funcionando (Terradas, 2003).
Segn Terradas la gestin del paisaje no puede basarse en meras deducciones de un
modelo genrico, sino en el conocimiento preciso y detallado de la situacin de partida
por lo que se refiere a vegetacin, suelo, bancos de semillas, rgimen de perturbacin,
etc., y a una decisin sobre los objetivos que se desea alcanzar.
(6).-Se admite tambin ms ampliamente hoy, que el sistema urbano no puede
desligarse del sistema territorial global en el que se encuentra inmerso.
La ciudad es el sistema ecolgico y social que constituye el mbito existencial de la
mayora de los humanos en nuestro tiempo. Constatamos las grandes magnitudes de
energa, agua, alimentos y materias primas que la ciudad importa de una amplia
periferia, lo que la convierte en un agente estructurador o desestructurador, segn el
caso del territorio global3. Tambin la ciudad exporta a una reducida periferia grandes
cantidades de productos residuales fraccin no utilizada de los bienes importados, o
restos metablicos de la fraccin aprovechada, lo que la convierte en un agente
contaminante.

3 A pesar del costo de ello, los elementos no llegan a todos los habitantes.

"Sin un ambiente urbano de calidad, la ciudad fracasa en uno de sus


objetivos fundamentales, pero para conseguirlo no puede esquilmar todo el
territorio, ni tampoco deteriorar su inmediata periferia"4. (Folch, 2003)
Que la ciudad no sea autosuficiente no significa que sea necesariamente insostenible
remarca Folch. La concepcin de la trama urbana, la forma de inscripcin de su trazado
en el relieve, la disposicin y proporcin de las calles y de los bloque edificados, el
diseo urbanstico de cada barrio y sus formas de sutura con los barrios adyacentes, la
conformacin y situacin de las grandes infraestructuras, el tratamiento de las
principales vas de comunicacin, el peso, ubicacin y naturaleza de las zonas verdes
relictos de la vegetacin preexistente, parques de nueva planta, pequeos o grandes
jardines pblicos o privados, verde intersticial, etc. son elementos cargados de
informacin histrica, poltica y ambiental, imprescindibles para la comprensin de la
realidad sociolgica global. El espacio urbano es pues una parte capital del territorio
real, y no habr solucin del territorio urbano sin articulacin integral urbano-rural
(Pesci, 2005). Los mapas temticos de carcter naturalista suelen prescindir del
espacio urbano, pero esto no puede admitirse en cartografa ecolgica o ambiental.
"Actualmente [2003], por fortuna, hemos pasado a tener una concepcin
sistmica de la ciudad y tambin del territorio: sabemos que toda esta
anatoma urbana (urbs) slo tiene sentido cuando responde a la actividad y
necesidades de la ciudadana (civitas), y que slo cuando se adecua a los
acondicionamientos ambientales mayores (oikos) llega a servir de base
para una verdadera ciudad (polis). En este contexto las palabras recobran
el valor semntico que etimolgicamente siempre tuvieron: la 'poltica' de
la 'urbe' se muestra como un ejercicio de 'ecologa' cargado de sentido
'civil' ". (Folch,2003)
(7).-Por ltimo, sostiene Torres5, tres razones fundamentales para planificar hoy el
sistema metropolitano:
-por un principio de justicia democrtica: las decisiones que, constantemente, se
adoptan por una multiplicidad de agentes son ms coherentes si hay un marco de
referencia, compartido y conocido, sobre qu modelo se quiere aplicar;
-por un principio de eficiencia inversora: la escasez estructural de los recursos
pblicos,

siempre

insuficientes

ante

las

expectativas

sociales,

recomienda

la

optimizacin de las inversiones. Esta se alcanza ms fcilmente si el programa de

4
5

inversiones de las distintas administraciones pblicas se apoya en una estrategia


comn de desarrollo;
-por un principio de sostenibilidad: al fijarse un horizonte temporal de 25-30 aos,
incorporamos

automticamente

la

reflexin

sobre

las

necesidades

futuras.

(Torres,2003)
Garanta democrtica, eficacia en la accin pblica y solidaridad intergeneracional son
motivos suficientes para planificar el sistema metropolitano. Y los objetivos de la
planificacin territorial a escala metropolitana no podran soslayar:
-desarrollar un sistema metropolitano equilibrado y policntrico, que integre la relacin
ciudad-campo;
-asegurar

la

igualdad

de

oportunidades

de

acceso

al

conocimiento

las

infraestructuras de comunicacin, e
-impulsar el progreso sobre la base de la sostenibilidad y la gobernanza.
La ciudad y el campo como reas paseables al comenzar el siglo XXI.
Las ventajas de la marcha a pie, cuando el planeta aparece amenazado por el
calentamiento global y los cambios climticos, aparecen ms ntidas que nunca
(POZUETA, et al., 2009). Muchas de sus ventajas tienen que ver con su mayor
sustentabilidad ambiental frente a otros modos de desplazamiento, pero comprenden
tambin aspectos econmicos, sociales y de salud.
La marcha a pie es un medio de transporte sostenible toda vez que no consume fsiles,
ni recursos no renovables, no es fuente de emisiones ni contamina por ruido,
contribuye a bajar los niveles de dixido de carbono en la medida que sustituya los
viajes por medios motorizados. Es tambin una prctica saludable y una actividad
econmica, esto ltimo tambin, porque da soporte al comercio y el turismo se ve
potenciado en centro urbanos caminables. La propiedad inmobiliaria ve incrementado
su valor en zonas con bajo o sin ruido de trfico y sin contaminacin. Dado que la
mayor parte de las personas puede caminar, esta sera la forma de desplazamiento
ms equitativa socialmente hablando (POZUETA et. al., 2009).
La promocin de las infraestructuras peatonales ampliar las posibilidades de movilidad
de toda la sociedad a un costo muy inferior al de otros modos. Se observa que el paso

de personas por una banda de 3 m de ancho es muy superior a la de automviles, por


lo cual se deduce un mejor aprovechamiento del escaso espacio pblico, y difcilmente
se genera fenmenos de congestin importantes (POZUETA et al., 2009).
Los aspectos urbanos a los que se confiere mayor capacidad de influencia en los
condicionantes de los desplazamientos peatonales seran los siguientes (POZUETA et
al., 2009):
El grado de dispersin urbana. Es de gran trascendencia para las ciudades y sus pautas
de movilidad: a medida que las densidades urbanas disminuyen, las distancias medias
intraurbanas aumentan y a la inversa. Una cierta densidad puede llevar adems
asociado un paisaje urbano ms estimulante y rico, ser ms animado y ms seguro
por la presencia de la gente.
La disposicin de los usos de suelo. Particularmente la mayor mezcla de estos, es otro
rasgo urbano de reconocida incidencia en la movilidad urbana. Dado que los
desplazamientos urbanos ms frecuentes se producen entre distintos usos de suelo
(vivienda a centros de empleo, a comercio, escuelas, servicios, etc.), la opcin de
separar los usos que tuvo el Movimiento Moderno en el urbanismo del siglo XX, llev
irremediablemente a un aumento de las distancias medias de los viajes, reduciendo las
posibilidades de marcha a pie para afrontarlas.
La separacin de usos tambin reduce la animacin urbana a las horas de
funcionamiento de la actividad dominante, y deja amplias reas vacas durante
determinadas horas, hacindolas poco atractivas, adems de inseguras, para los
peatones.
A comienzos del siglo XXI se propugna al igual que lo hizo el arquitecto chileno Muoz
Maluschka en Chile en la primera mitad del siglo XX avanzar hacia la mayor mezcla
posible de usos de suelo compatibles con la residencia, y tambin de tipos edificatorios
favorables al concepto de ciudad paseable.
La red peatonal y su acondicionamiento. Seala POZUETA et al., 2009, que:
Una red peatonal continua, sin lagunas o barreras, segura frente al trfico
automvil, amplia y bien pavimentada, de pendientes moderadas, con

reas de estancia y mobiliario de apoyo, que discurre por calles o espacios


atractivos y que tiene una estructura adecuada en relacin a los flujos de la
demanda de movilidad y una gran permeabilidad urbana [manzanas de
tamao adecuado], ser sin duda ms utilizada que una red sin estas
cualidades.
El tamao de la manzana y la anchura de la calle influyen significativamente en la
accidentabilidad

peatonal.

Las

propiedades

de

interrelacin

conectividad

(accesibilidad axial de la trama) indican que las calles ms continuas y centrales


reciben mayores flujos peatonales. En nuevas reas de planeamiento urbano, la
consideracin de tramas de alta permeabilidad y conectividad o la concepcin de redes
de infraestructuras peatonales especficas, autnomas respecto de los trazados del
viario rodado, constituyen los espacios ms fructferos para promover la caminabilidad
urbana.
La relacin entre edificacin y espacio pblico. Esta se expresa a travs de diversos
rasgos: la mayor o menor separacin del edificio respecto de la calle, la configuracin y
el grado de transparencia de la planta baja, la proporcin de frentes de fachada a calle,
la proporcin entre anchura de calle y altura del edificio, el inters y riqueza de la
edificacin (composicin, colores, materiales, texturas), su mayor o menor grado de
apertura hacia la calle (disposicin y carcter de los huecos), los usos en planta baja,
el nmero y disposicin de los accesos a la edificacin, etc.
Se trata segn los autores antes citados, de rasgos que definen la confortabilidad
climtica de la calle (refugio y proteccin frente a la lluvia o las temperaturas
extremas), la animacin urbana, el inters visual del recorrido (vistas de interiores,
fachadas), la seguridad ciudadana (grado de vigilancia natural de la calle, accesos a
edificios), etc.
As, avanzar hacia una arquitectura amigable con los peatones es una de las lneas de
trabajo que puede mejorar la disponibilidad de las personas a desplazarse a pie por la
ciudad.
En lo referido al tratamiento de zonas no urbanas, ni urbanizables (naturales,
paisajsticas, agrcolas, forestales),

ellas alojarn slo algunos establecimientos

aislados necesarios para cumplir las funciones por las que ha sido preservado. Aqu, la

mejora de las posibilidades de los peatones no puede entenderse de la misma forma


que el resto de los suelos.
Dos aspectos resultan de inters para reflexionar sobre el suelo no urbanizable y su
caminabilidad. Por un lado, el hecho de que en l existen caminos y sendas rurales,
cuando no vas pecuarias y vas verdes, que podran formar parte de la red peatonal
del municipio. Por otro, la creciente aficin de los habitantes urbanos a realizar paseos
a pi por las reas rurales y naturales prximas.

Los corredores fluviales en la regin urbana.


Si en la poca industrial los ros representaron un lugar de vertido de aguas negras e
industriales, de residuos y basura, esto es, una funcin de cloaca, actualmente las
funciones que van adquiriendo protagonismo en las ltimas dcadas estn ligadas a la
proteccin y recuperacin de la naturaleza (los ros como sistema arterial del medio
natural) y la valoracin del paisaje, algo, esto ltimo, que no es nuevo en la historia,
pero que actualmente ha pasado a primer plano.
De acuerdo con estos cambios en las funciones de los ros, tambin sus tratamientos y
acondicionamientos han variado desde las obras bsicas de canalizacin para controlar
inundaciones, para crear muelles, para encajarlos en tramas urbanas, para sanear o
desecar zonas pantanosas, etc., y las obras para bordearlos de infraestructura de
transporte (muelles, carreteras, ferrocarriles), hasta conferirles una funcin territorial
articuladora, basada en su consideracin como soporte de prcticas de ocio y
culturales, lo que implica otro tipo de tratamientos (hay algunos ejemplos interesantes
que continan la tradicin de la primera mitad del siglo XX).

Desde el punto de vista de la accesibilidad y de la construccin de infraestructuras de


transporte, el principal cambio en la consideracin de los ros es la generalizacin de
los modelos de redes viales en peine,

que evitan la construccin de

vas

longitudinales rodadas contiguas al cauce y optan por alejarlas, liberando las reas
ribereas de mayor inters, aadindoles penetraciones hacia los puntos del cauce con
mayor capacidad de acogida y minimizando el nmero o el impacto de las vas que
deben atravesarlos (Pozuela, 2010). Un sistema, de hecho similar al tratamiento de

costa, que reserva el borde para vas no motorizadas, aprovechando las carreteras
existentes y potenciando los trazados ferroviarios longitudinales, de cara a su
utilizacin ocio-turstica cultural, ocurre en el curso medio del Danubio, o en el ro
Guadiana en Mrida, por ejemplo.

Fte.: Tratamiento de bordes del Ro Guadiana, Mrida, Espaa, como lugares paseables peatonalmente,
Mrida Espaa. Fotos de Francisco Ferrando A., mayo de 2010 (FONDECYT 1090199, I.R.: M.I.Pavez R.).

Cabe observar que en Chile, la propuesta MINVU 20086 de crecimiento para el rea
sur-poniente de la ciudad de Santiago, destaca por aspectos negativos de ella, en
especial, la vialidad propuesta (costaneras pagadas o incluso no pagadas-) que
estara impidiendo la accesibilidad tranquila de los habitantes al borde ro y al parque
inundable y, en definitiva, representando lo opuesto al esquema de trazado vial
vehicular en peine conveniente para lograr continuidades slo peatonales y ciclsticas
en especial en el caso de los parques inundables como sera el caso (en especial en
tramo Maip a El Monte).

6 Al trmino del presente trabajo la Modificacin MPRMS- 100 se encuentra ya


aprobada.

Crecimiento para el rea sur-poniente de Santiago segn MPRMS-100


Fte: PLAN REGULADOR METROPOLITANO DE SANTIAGO, MODIFICACION
MPRMS-100, MINISTERIO DE VIVIENDA Y URB., SECRETARIA REGIONAL
MINISTERIAL METROPOLITANA.

HIPOTESIS
La nueva Comuna de Padre Hurtado no habra visto un desarrollo espacial urbano
especialmente asociado a su proyecto de Plan Regulador Comunal. Tampoco habra
desarrollado acciones para lograr una adecuada conectividad intercomunal, ni para
aprovechar el potencial recreacional del

ro Mapocho (Parque Metropolitano del ro

Mapocho), en el Plan Intercomunal. No habra una voluntad de coordinacin a travs


del tiempo, ni tampoco una continuidad en la planificacin entre comunas aledaas.
Las explicaciones a ello podran estar en las caractersticas del modelo neoliberal
radical en curso en Chile desde 1979, tendiente a la desplanificacin de hecho, a la
pobreza de la comunidad de base, a la falta de coordinacin de los equipos municipales
a travs del tiempo, entre otros.

OBJETIVOS
El objetivo principal de la investigacin se centra en la comprensin del territorio al
nivel de los diversos casos de conflictos que afectan a la comuna en trminos de
planificacin urbana. Se analizan los siguientes puntos para comprender lo anterior:
1.- Observar evidencias de los casos de desplanificacin planteados y dar un criterio
coherente con el marco terico expuesto.
2.- Ver los efectos en el objetivo de ir configurando barrios y vecindades de naturaleza
urbana integral, junto a una integracin a nivel intercomunal.
3.- Analizar la capacidad de la comuna para evaluar la planificacin anterior recibida
por la comuna de Peaflor, y la generacin de un nuevo Plan Regulador Urbano,
tomando atencin a la conectividad planteada con las comunas de entorno, y el
manejo de los recursos naturales, como por ejemplo el aprovechamiento del potencial
recreacional del Parque Metropolitano del Mapocho.

METODOLOGIA
La metodologa utilizada consiste primeramente en observar el grado de autonoma
relativa que haba alcanzado el asentamiento humano de Padre Hurtado al momento
de convertirse en comuna. Durante un periodo de 20 aos comprendido entre 1994 y
2014, se observa la capacidad para realizar el plan propio de la comuna, considerando
la planificacin heredada de Peaflor y su aptitud para evaluarla. Se observa adems,
las evidencias de casos concretos de desplanificacin dando una mirada crtica.
En segundo trmino, se realiz una revisin de los instrumentos de planificacin
territorial de Padre Hurtado desde el momento en que se reconoce como una nueva
comuna, en dos niveles de registro:

(1) Nivel intercomunal: Planes reguladores intercomunales y metropolitanos en el Gran


Santiago. En este nivel cobra importancia la definicin del lmite urbano metropolitano
y de densidades promedio para la comuna. Tambin son relevantes las propuestas de
vialidad y transporte y su articulacin con la implementacin de otras polticas
relacionadas, como la concesin de autopistas urbanas y las polticas habitacionales.
En este nivel se encuentra el Plan Regulador Metropolitano de Santiago ms sus
modificaciones, el plan de Desarrollo urbano y el Plan Intercomunal de Santiago.
(2) Nivel comunal: Plan Regulador Comunal de Padre Hurtado, sus respectivas
memorias explicativas y modificaciones.
Se realiza un anlisis interpretativo de dichos instrumentos legales y de planificacin y
su implementacin en el caso de Padre Hurtado. Todo ello, dentro del marco terico
anteriormente establecido.
En cuanto al catastro de los casos especficos se realiza un anlisis sobre las causas y
efectos en el desarrollo urbano, siempre bajo una mirada urbana sustentable,
considerando sus implicancias y significancia.

PLAN DE TRABAJO
Actividades a realizar:
1.-Compilacin

de

Proyectos

seccionales

planes

reguladores

habidos

modificaciones:
Plan regulador comunal de Peaflor ao 1970
Proyectos seccionales de Padre Hurtado en el periodo de dependencia de Peaflor.
Plan regulador comunal Padre Hurtado ao 2005 ms modificaciones en los aos:
2010, 2011,2013.
2.-Registro fotogrfico de la comuna.
3.-Ordenanzas locales habidas para seccionales y planes reguladores habido y
modificaciones.

Ordenanza plan regulador comunal Padre Hurtado ao 2005.


4.-catrastro de casos de desplanificacin.
5.-Confrontacin planos seccionales de Peaflor frente al plan regulador actual de
Padre Hurtado, adems de considerar un anlisis de los datos entregados
6.-Entrevistas a las autoridades del urbanismo local (Director de Obras de la
Municipalidad de Padre Hurtado)
7.-Entrevistas a los habitantes.

Carta Gantt tentativa:

Semana/Da
s
04 Mayo

11 Mayo

Lunes

Martes

Mircoles

Jueves

Viernes

Sbado

Domingo

Catastro casos, determinacin y descripcin

Elaboracin y realizacin entrevista


Director de Obras, Municipalidad de
Padre Hurtado.

Confrontacin de Instrumentos de
Planificacin Urbana de Padre Hurtado.

Entrevista a habitantes.

18 Mayo

25 Mayo

Anlisis y desarrollo de los casos de estudio.

01 Junio

Anlisis y desarrollo de los casos de estudio.

Revisin general seminario y conclusiones finales.

08 Junio

15 Junio

Formato

Impresin

22 Junio

Preparacin
presentacin.

ENTREGA

REFLEXIN PERSONAL
La investigacin realizada ha resultado ser interesante en la manera en que se
plantean

ciertas

problemticas

que

resultan

ser

derivadas

del

trmino

desplanificacin, como desde dcadas atrs ha habido este retroceso en temas


relacionados a la planificacin territorial, y como Padre Hurtado, junto a muchas otras
comunas del pas sufren estas consecuencias.

Es necesario decir que se requiere un nivel de competicin interurbana, cooperacin y


coordinacin entre las comunas, para el desarrollo integral de la ciudad. Tambin son
requisitos la conservacin natural e histrica, la participacin de la comunidad en la
toma de decisiones respecto de las transformaciones del territorio, espacios pblicos y
equipamiento de calidad y la integracin espacial de estos, presentndose como un
desafo para la comuna.
En cuanto a la investigacin de por si, en este momento es necesario organizar bien los
casos a tratar, guiarlos por una misma lnea, que junto al marco terico, den una
postura frente a ellos, y al igual, controlar el tiempo de trabajo.

BIBLIOGRAFA
Libros, monografas, captulos de libros y artculos en revistas:
FOLCH, Ramn (coordinador) El territorio como sistema. Conceptos y herramientas de
ordenacin. Ed. Diputacin de Barcelona, noviembre de 2003, 291 pgs. Ilustradas

Mc HARG, Ian L. 1969. Design with nature. Nueva York, The American Museum of
natural history, 1969. [Edicin en castellano: Proyectar con la naturaleza. Barcelona,
Gustavo Gili, 2000]. Citado por Terradas, op. cit.
PAVEZ R., Mara Isabel (Ed. Y sntesis) El territorio como sistema: Fundamentos
epistemolgicos y conceptuales en diversos autores, Serie DOC-UR N441, Santiago de
Chile, Departamento de Urbanismo, FAU, U. de Chile, 15 pgs., 2009.
PICKETT, Steward

T.A.; CADENASSO, Mary L. 1995. "Landscape ecology: spatial

heterogeneity in ecological systems", Science, 269, 1995, pp.331-334.


POZUETA, Julio; Francisco LAMQUIZ, y

Mateus PORTO, 2009, La ciudad paseable,

CEDEX, Madrid, Espaa, 430 pgs.


TERRADAS, Jaume. 2003. El paisaje y la ecologa del paisaje. La historia y los
conceptos en torno a la idea del paisaje, en FOLCH, Ramn (coordinador) El territorio
como sistema. Conceptos y herramientas de ordenacin. Ed. Diputacin de Barcelona,
noviembre de 2003, 291 pgs. ilustradas; pp. 57-72.
Noticias de prensa y portales web:
http://www.lanacion.cl/noticias/pais/tribunales/dictan-acusacion-contra-ex-alcalde-depadre-hurtado-por-loteos-brujos/2013-01-09/113411.html
http://www.minvu.cl/opensite_det_20071108132509.aspx
http://www.portalinmobiliario.com/diario/noticia.asp?NoticiaID=3745

Proyectos de Investigacin terminados:


PAVEZ REYES, M. Isabel I.Responsable (CONCURSO FONDECYT N 1090199 (20092010) (terminado, aprobado). El corredor fluvial del ro Mapocho siglo XXI: hacia un
conjunto de variables para la definicin y el manejo de un polgono de intervencin
multifactica e integral entre Quinta Normal y El Monte. Co-I: Dr. F. Ferrando
(Geografa);

Dr.

J.

Hernndez

(Ciencias

Forestales);

Arqto.

Alberto

(Urbanismo), Universidad de Chile. Asesor internacional: Dr. Ing.

Gurovich

Julio Pozueta

Echvarri (Urbanismo, Universidad Politcnica de Madrid).


Archivos:
-Departamento de Urbanismo de la F.A.U. de la Universidad de Chile (planos diversos).
-Municipalidad de Padre Hurtado, Provincia de Talagante (Plan Regulador)
-MINVU, plan regulador metropolitano de Santiago modificacin-73 ao 2006,
modificacin-100 ao 2008

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