Metapolítica Autores PDF
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Metapoltica
http://filosofia.org/ave/002/b039.htm
r t u l o s
Juan Caramuel escribe una Metapoltica avanzado el siglo XVII Juan Luis de Lolme propone la
metapoltica en 1784 Amadeo Hufeland introduce en 1785 la metapoltica en alemn
Augusto Luis de Schlzer reclama en 1793 prioridad metapoltica El Barn de Stein ejercita la
metapoltica germnica desde Prusia Jos de Maistre lleva la metapolitique al francs
Ramn Salas incorpora la metapoltica al espaol Unamuno y la metapoltica Eugenio
Relgis apstol de la metapoltica de Follin y su Cosmometpolis Peter Viereck asocia la
metapoltica con el nazismo hitleriano Alain de Benoist y la metapoltica de la Nueva Derecha
europea Silvano Panunzio y la metapoltica tradicionalista catlica desde 1976 Alberto
Buela del disenso a la metapoltica Csar Cansino y la revista Metapoltica
Metapoltica es concepto que, con ms de tres siglos de solera, va logrando alcanzar cierta presencia
creciente en las ltimas dcadas (con ms xito que otros de formato similar: metageometra,
metamatemticas, metafilosofa, metaciencia, metafisiologa, &c.).
Juan Caramuel escribe una Metapoltica avanzado el siglo XVII
Juan Caramuel
1606-1682
Se debe a un sabio e ilustre clrigo catlico espaol, nacido en Madrid el 23 de mayo de 1606 y gloria del
Imperio hispnico, la utilizacin por vez primera, que nosotros sepamos, del rtulo Metapoltica. As
titul Juan Caramuel (1606-1682), fraile cisterciense, uno de los manuscritos inditos que se conservan
en el Fondo Caramuel del Archivio Storico Diocesano de Vigevano, la ciudad de la provincia de Pava de la
que fue Obispo desde septiembre de 1673 hasta su fallecimiento en 1682. (En la relacin de manuscritos
que ofrece Julin Velarde, Juan Caramuel, vida y obra, Pentalfa, Oviedo 1989, pg. 390, figura en el
estante II, carpeta 5.) Como esta obra permaneci indita, e indita permanece, que sepamos, es
arriesgado aventurar sobre cualquier posible influencia que pudiera deberse a tal ocurrencia del que
algunos dicen el Leibniz espaol. Convendr recordar que Caramuel es autor tambin de una Metalgica,
disputationes de logicae essentiae proprietatibus, impresa en Frankfurt en 1654; de Coelestes
Metaphoses; de Primus Calamus ab oculos ponens Metametricum, &c.
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Por influencia de Caramuel, aunque ms probablemente de manera independiente, fue el concepto
construido de nuevo en 1784 en lengua inglesa por Juan Luis de Lolme, un ginebrino francfono exilado
en Londres, por analoga al de metafsica, y desde el siguiente ao comienza a florecer en ambientes
filosfico jurdicos alemanes, en tiempos de revoluciones ideolgicas y polticas, pero no lleg a cuajar
all, quiz por la competencia del concepto kantiano de metafsica del derecho. El influyente idelogo de
la derecha primaria Jos de Maistre lo acept en francs buscando ajustarlo doctrinalmente, y en 1821 ya
lo encontramos en espaol, de la mano del catedrtico salmaticense Ramn Salas Corts, en sus
Lecciones de derecho pblico constitucional para las escuelas de Espaa. Semiolvidado a medida que
transcurra el siglo XIX reaparece con fuerza en ciertos entornos cercanos al anarquismo en los aos
veinte del siglo pasado. Podra darse ciertamente la circunstancia de poligenismos en cuanto a la
formacin del concepto metapoltica a lo largo de las dcadas, pero poco variara la situacin respecto
de las irisaciones observadas en sus usos actuales si slo fueran resultado de meras variaciones de un
monogenismo primordial. Google registra aproximadamente, durante la primera dcada del siglo XXI,
unas 400.000 utilizaciones de metapolitics en ingles, ms de 300.000 de metapoltica en espaol
(italiano y otras lenguas, al menos 200.000 en espaol), cerca de 30.000 de metapolitik en alemn (y
alguna otra lengua minoritaria) y slo unas 500 del metapolitique francs. Como puede imaginarse las
diferencias entre las diferentes metapolticas no deben ser menores que las que se producen entre las
metafsicas correspondientes. La Academia de la Lengua Espaola no tiene incorporada la palabra
metapoltica en su Diccionario en 2011, algo que tampoco preocupa mayormente a la metapoltica.
Juan Luis de Lolme propone la metapoltica en 1784
Juan Luis de Lolme
1740-1806
El abogado ginebrino Juan Luis de Lolme, miembro del Consejo de los Doscientos de la Repblica de
Ginebra, de quien se dijo que fue el mejor discpulo de Montesquieu, logr con el opsculo Examen de
trois parts de droit enfadar mucho a sus democrticos conciudadanos, por lo que hacia 1768 entendi
que era mejor alejarse unos aos de las tierras suizas. En Londres est fechada, el 24 de diciembre de
1770, la dedicatoria al Conde de Abingdon de una famosa apologa que escribi sobre el sistema poltico
de Inglaterra, muchsimas veces reeditada, que apareci primero en francs (Constitution de lAngleterre,
Amsterdam 1771), al ao siguiente en neerlands (Staatsgesteldheid van Engeland, Dordrecht 1772),
despus en ingls (The Constitution of England, or an account of the English Government, Londres 1775) y
tres cuartos de siglo ms tarde en espaol (con notas, por J. A.: La constitucin inglesa comparada con los
gobiernos republicanos y monrquicos de Europa, Madrid 1847, siguiendo la londinense de 1826). En la
autotitulada cuarta edicin (Londres 1784, tras las de 1777 y 1781; pues en ingls tambin apareci en
Dubln en 1776), dedicada al rey de Inglaterra (en mayo de 1784), corregida y ampliada con varios
captulos enteramente nuevos, advierte De Lolme que los asuntos que est tratando, al remover
principios que afectan a las mismas cuestiones sobre la naturaleza del Hombre, pertenecen ms
propiamente a la filosofa (pero a una rama suya an inexplorada) que a la poltica, y se alejan por
supuesto de la esfera de la ciencia poltica vulgar; y en una nota a pie de pgina sugiere que, si al lector le
agrada, perteneceran a la ciencia de la metapoltica, en el mismo sentido que decimos que la metafsica
est ms all de la fsica.
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1784 To give a demonstration of the manner in which all these things are brought to bear and
operated, is not, as I said before, my design to attempt here: the principles from which such
demonstration is to be derived, suppose an enquiry into the nature of Man, and of human
affairs, which rather belongs to Philosophy (though to a branch hitherto unexplored) than to
Politics: at least such an enquiry certainly lies out of the sphere of the common Science of
Politics (a).
(a) It may, if the reader pleases, belong to the Science of Metapolitics; in the same sense as
we say Metaphysics; that is, the Science of those things which lie beyond physical, or
substantial, things. A few more words are bestowed upon the same subject, in the
Advertisement, or Preface, at the head of this Work. (J. L. de Lolme, The Constitution of
England, or an account of the English Government, which it is compared, both with the
Republican form of Government, and the other Monarchies in Europe, the fourth edition,
corrected and enlarged, Londres 1784, pgs. 419-420.)
Esta breve nota en la que alumbra Juan Luis de Lolme el concepto de metapoltica se mantuvo en casi
todas las ediciones posteriores, tambin tras su fallecimiento en 1806. La hemos visto en las de Londres
de 1789 (pg. 419), Londres de 1800 (pg. 405), Londres de 1816 (pg. 415), Halifax de 1822 (pg. 390),
Londres de 1853 (pg. 272), &c. Pero curiosamente fue eliminada en la londinense de 1826 (no aparece
en la pg. 228, que es donde correspondera), de suerte que la madrilea de 1847, que la sigue, est
ayuna de ese fragmento. El traductor espaol desvela las iniciales J. A. el peridico El Espectador de
Madrid del jueves 5 de agosto de 1847, Juan Alix Martnez (Murcia 1790-1863, director mdico por
oposicin de los Baos de Archena en 1817, diputado liberal en 1822 por Murcia, exilado en Suiza tras el
trienio liberal figuraba entre los 63 diputados condenados a muerte por auto de la Audiencia de Sevilla
de 11 de mayo de 1825, diputado en 1841 por Badajoz, renunci al ser nombrado Jefe poltico de
Ciudad Real...), se crea seguro al adoptar su fuente (No consta al traductor si con posterioridad al ao
de 1826 se ha hecho alguna otra edicin; pero si tal es el caso, habiendo fallecido Mr. De-Lolme en 1807,
es seguro que no puede hallarse enriquecida con nuevas observaciones suyas, pg. xviii), pues ni se le
ocurri que la edicin sobre la que trabajaba pudiese estar empobrecida. Edicin londinense afeitada,
an ms estreida en su versin madrilea:
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1826 To give a demonstration of the manner in which all these things are brought to bear and
operated, it is not, as I said before, my design to attempt here: the principles from which
such demonstration is to be derived, suppose an enquiry into the nature of man, and of
human affairs, which rather belongs to philosophy (though to a branch hitherto unexplored)
than to politics; at least, such an inquiry certainly lies out of the sphere of the common
science of politics. (J. L. de Lolme, The Constitution of England, in which it is compared both
with the Republican form of Government, and the other Monarchies in Europe, Londres 1826,
pgs. 227-228.)
1847 Dar una demostracin de la manera en que suceden y se operan estas cosas, no es mi
designio, como ya dejo dicho; los principios de donde se puede derivar esta demostracin,
suponen una investigacin en la naturaleza del hombre y en los procedimientos humanos,
que pertenece ms bien a una parte, aunque poco trillada, de la filosofa, que a la poltica.
(Juan Luis de Lolme, La constitucin inglesa, comparada con los gobiernos republicanos y
monrquicos de Europa, Imprenta de Sanchiz, Madrid 1847, pg. 267.)
Amadeo Hufeland introduce en 1785 la metapoltica en alemn
Amadeo Hufeland
1760-1817
El joven Amadeo Hufeland, nacido en Danzig en 1760 y formado inicialmente en el gymnasium de su
ciudad natal antes de pasar a ser estudiante en Leipzig, public all en 1785 un ensayo sobre los
fundamentos del derecho natural (Versuch ber den Grundsatz des Naturrechts, Leipzig 1785, 294 pgs.).
En esta su primera obra presenta, entre otras cosas, a Hugo Grocio como iniciador de la ciencia del
derecho natural (en la lnea de quienes ms adelante, al identificar derecho natural con derecho
internacional, tomarn a Grocio como punto de partida). Hufeland, al ao siguiente de que Juan Luis de
Lolme propusiera en ingls un concepto preciso de metapolitics, lo introduce en esta obra en alemn,
metapolitik. La forma en que lo hace es muy similar a la seguida por De Lolme un ao antes: tras la
primera y aislada aparicin del extico trmino en el texto una llamada remite a la oportuna nota
explicativa a pie de pgina. En ningn momento Hufeland se atribuye novedad en el hallazgo, sino que
reconoce desde el primer momento que el trmino, pues le parece interesante, lo ha tomado de otro
autor, de quien en todo caso no ofrece ninguna referencia.
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1785 Von Hobbes, dem ersten wichtigen Nachfolger des Grotius in diesem Felde der
Wissenschaften, kann man wohl nicht erwarten, daher dieselbe Idee vom Naturrecht habe.
Denn sobald man wei, da er Recht die Freiheit nenne, seine natrlichen Fahigkeiten and
Krfte nach der Vernunft zu gebrauchen, Freyheit aber bei ihm die Abwesenheit uerer
Hindernie bedeute, und da seine sogenannten natrlichen Gesetze nichts als Mittel
lehren, sich gegen die Uebel des natrlichen Zustandes zu sichern, aus deren
Zusammenhange eine Art von Metapolitik (*) oder von Prolegomenen zum Staatsrecht
entsteht, so sieht man leicht ein, da bei solchen Grundsahen berhaupt kein Naturrecht
statt haben knne.
(*) Dieses Wort wird von einem berhmten Gelehrten fr die Wissenschaft gebraucht,
welche Vor erkenntnisse ber die Natur des Menschen und ber die Geschichte des
Naturstandes liefert, und deshalb eine Vorbereitung zum Staatsrecht und zur Politik
ausmacht; man erlaube mir, da ich es ihm nach brauche. (pgs. 20-21) (Gottlieb Hufeland,
Versuch ber den Grundsatz des Naturrechts, G. I, Gschen, Leipzig 1785, pgs. 20-21.)
De Hobbes, el primer sucesor importante de Grocio en este campo de la ciencia, no se
puede esperar nada bueno, pues tena la misma idea del derecho natural. Pues tan pronto
como se sabe que l llamaba derecho a la libertad, su facilidad natural y capacidad para
utilizar la razn, pero libertad en l significaba desprenderse de dificultades externas, y que
las llamadas leyes naturales no se enseasen como medios, para as asegurar frente al mal
las situaciones naturales, y de ah la conexin de una especie de Metapoltica (*), o algo que
surgiera de los prolegmenos a un derecho del Estado, de suerte que as se facilitase que
sobre tales fundamentos ningn derecho natural pudiese tener lugar.
(*) Esta palabra ha sido utilizada para la ciencia por un conocido erudito, que la ofrece para
el conocimiento sobre la naturaleza del hombre y sobre la historia de las disposiciones
naturales, y como facilita una preparacin para el derecho del Estado y de la poltica, me
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parece que puede serme de utilidad. (Amadeo Hufeland, Investigacin sobre el fundamento
del derecho natural, Leipzig 1785, pgs. 20-21.)
Hufeland se gradu despus en Jena, donde comenz en 1788 una brillante carrera como profesor,
destacado cultivador de los principios jurdicos kantianos. Firmando ya como doctor en Filosofa y
Derecho y profesor de la Universidad de Jena escribe cinco aos despus:
1790 Zweiter Abschnitt. Metapolitische Einleitung. . 358. Metapolitik ist ein Innbegriff von
Erfahrungsstzen, welche Veranlassungen zu Bestimmungen fr die Rechte und Anstalten
im Staat geben, aber dabei den Staat und die Anstalten desselben nicht voraus setzen. Ein
Theil desselben dient dem allgemeinen Staatsrechte zur Vorbereitung und Erluterung. S.
meinen Versuch ber den Grundsatz des Naturrechts s. 21. (Gottlieb Hufeland, Lehrstze
des Naturrechts und der damit verbundenen Wissenschaften, Jena 1790, pg. 176.)
Seccin segunda. Introduccin metapoltica. . 358. Metapoltica es un resumen de
proposiciones de experiencia, las cuales dan ocasin para determinaciones sobre el derecho
y las instituciones en el Estado, pero en tanto que el Estado y las instituciones mismas no
estn presupuestas. Una parte de las mismas sirve para la preparacin y la explicacin del
derecho general del Estado. Ver mi Investigacin sobre el fundamento del derecho natural, p.
21. (Amadeo Hufeland, Principios del derecho natural y ciencias afines, Jena 1790, pg. 176.)
Carlos Federico Augusto Hochheimer (1749-1825), profesor particular en Gotinga y Leipzig, public
annimamente en 1791 (figura que en Lausana) una gua imparcial dirigida a posibles estudiantes de
Gotinga, donde recopila cotilleos, crticas a la calidad de la cerveza y el vino, sarcasmos sobre los
profesores y hasta se queja de los muchos perros de la ciudad. Para lo que aqu nos interesa, y al margen
de las circunstancias de la seora de Schlzer o de lo que pesaban sus hijos: segn Hochheimer el
profesor Augusto Luis de Schlzer, adems de repetirse en sus clases, se entretendra la mayor parte del
tiempo en consideraciones metapolticas, por lo que sus alumnos tenan que recurrir necesariamente al
estudio privado:
1791 Diese Einleitung aber enthielt nichts anders als, mit einem Worte, das allgemeine
Staatsrecht, und diese nennet er mit einem seltsamen Nahmen Metapolitik. Was fr groe
Begriffe er mit dem Wrtchen Meta verbindet, wei ich nicht. Vermuthlich denkt er sich so
etwas darunter, als wie des Aristoteles Metaphysic, und gleichwohl hunzet er den armen
Vater Aristoteles grausam aus, weil seine Politik nicht aussieht, wie eine europische Politik
des achtzehnten Jahrhunderts. Diese sogenannte Metapolitik macht ohngefhr zwey
Drittheile seiner Vorlesungen aus, und wenn er damit sertig ist, so hebt er ein paar Materien
aus der eigentlichen Politik aus, und berlt die brigen dem Privatstudium seiner
Zuhrer. (Karl Friedrich August Hochheimer, Gttingen: nach seiner eigentlichen
Beschaffenheit zum Nutzen derer, die daselbst studieren wollen, dargestellt von einem
Unpartheiischen, Laussane 1791, 57.)
Esta introduccin no trataba de otra cosa que, en una palabra, la ley general del Estado, y lo
que l denomina con el nombre extrao de Metapoltica. Quin sabe que tipo de grandes
ideas asocia con la palabra Meta? Imagino que piensa que algo por debajo, como la Metafsica
de Aristteles, y sin embargo es cruel con el Padre Aristteles porque su poltica no se parece
a la poltica europea del siglo XVIII. Dedica a esta llamada Metapoltica las dos terceras partes
de sus conferencias, y cuando est terminando se esfuerza por tocar algunos asuntos de la
poltica actual, y deja el resto al estudio privado de sus oyentes. (Carlos Federico Augusto
Hochheimer, Gotinga: de acuerdo con su verdadera naturaleza para beneficio de quienes
quieren estudiar all, representada por un Imparcial, Lausana 1791, pg. 57.)
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Augusto Luis de Schlzer reclama en 1793 prioridad metapoltica
Augusto Luis de Schlzer
1735-1809
El historiador alemn Augusto Luis de Schlzer, nacido en Gaggstatt en el seno de una familia de
pastores protestantes, se form en teologa en la universidad de Wittenberg y en historia en la de
Gotinga. Entre 1755 y 1759 estuvo por Suecia y entre 1761 y 1767 por Rusia, asentndose despus
como profesor en la universidad de Gotinga, donde desarroll una gran actividad acadmica y editorial.
Con su colega de universidad Gatterer mantuvo una disputa sobre la paternidad de la categora
historiogrfica Edad Media (Mittelalter, para designar precisamente al periodo de la historia universal
que va desde la cada del imperio romano hasta el descubrimiento de Amrica: como es bien sabido
Carlos Marx utiliz ampliamente la historia universal de Schlzer, interesado particularmente por la
Edad Media). Se le atribuye haber acuado en 1771 el trmino etnografa. Fue el primero en publicar
en 1791 en alemn la declaracin francesa de los derechos del hombre y del ciudadano. En la tradicin
germnica suele atribursele la paternidad del trmino metapoltica, suponiendo quienes tal hacen que
Hufeland se refiere a l sin citarlo en su nota de 1785: Schlzer menciona a Hufeland en su nota de 1793.
1793 3. B. Cursus politicus philosophicus. [...] I. Metapolitik {9}, ein Abstract aus dem
NaturRechte {10}: Untersuchung des Menschen vor dem Staat, und seines physischen und
geistigen Wesens; Betrachtung ber seine daraus entspringende Rechte, und Anlsse zum
Uebergang in die huslichen, und in die brgerliche Gesellschaft; Darstellung, was ihn
endlich, beim Gefhl der Gebrechen aller dieser Gesellschaften, und beim Erwachen Hherer
Vernunft, in die StadtGesellschaft zwngt, wo sodann Moral und Politik, erstaunlich viel an
seinem metapolitischen Zustand ndern werden. II. StaatsRecht, Scientia Imperii, Jus
publicum universale. Brgerliche Gesellschaft ist Bedrfnis der Menschheit; aber sie hat
natrliche Gebrechen, die nur durch Annahme einer Herrschaft heilbar sind. [...] III. Lehre
von der Staatsverfassung, oder von den Regirungsformen, Scientia imperii Costituendi. [...]
{9} Zu dieser Reihe von Stzen, aus denen teils die Stze im allgemeine StaatsRecht, teils
selbst oft strittige Stze in den positiv Rechten, demonstrable werden, brauchen wir einen
eignen Namen. Die franzsische (auch einige amerikanische) Schriftsteller nennen jene
Reihe Philosophie, wol gar Metaphysique, die ersteren seit 3 Jahren Droits de lhomme. Mir
kam der Name Metapolitik schicklicher, und mit dem von Aristoteles aufgebrachten Worte
Metaphysik, analogisch, vor. Er bat bereits, ehe ich mich noch damit ins Publicum wagte, den
Beifall von Hufeland (ber den Grundsatz des NaturRechts s. 21, und NaturRecht s. 176)
erhalten.
{10} Zweite Hlfte der Anthropologie, einer ebenfalls beinahe neuen Wissenschaft, deren
erste Hlfte (die unhfische), Lader in Jena bekanntlich mit so vielem Glcke bearbeitet.
(August Ludwig von Schlzer, Allgemeines Staatsrecht und Staats Verfassungslehre, Voran:
Einleitung in alle Staatswissenschaften Enzyklopdie derselben Metapolitik, Gttingen 1793,
pgs. 12-14.)
I. Metapoltica {9}, un resumen del Derecho Natural {10}: investigacin sobre el hombre en
relacin con el Estado, y su esencia fsica y espiritual; consideraciones sobre los derechos
que surgen de ellos y en la sociedad familiar y burguesa; representacin, finalmente, ante el
sentimiento de todas estas sociedades, y el despertar de la ms alta razn, en lo que depende
de la sociedad estatal, donde tanto la moral como la poltica descubrir otras muchas cosas
en los aspectos metapolticos. II. Derecho constitucional, Scientia Imperii, Jus publicum
universale. La sociedad burguesa es una necesidad de la humanidad; pero tiene una
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enfermedad natural que slo es curable mediante la adopcin de una autoridad. [...] III.
Doctrina de la constitucin poltica del Estado, o de las formas de gobierno, Scientia imperii
Costituendi. [...]
{9} De esta serie de proposiciones, de las cuales participan las proposiciones sobre el
derecho del Estado en general y a menudo incluso las mismas proposiciones disputadas en
el derecho positivo, podemos deducir que necesitamos un nombre adecuado. Los escritores
franceses (y tambin algunos americanos) llaman a esta serie Filosofa, tambin a veces
Metafsica, desde hace tres aos Derechos del Hombre. Me parece que el nombre Metapoltica
es ms apropiado, y que se aplica analgicamente a la palabra Metafsica de Aristteles. Yo
ya lo anunci en pblico antes incluso de que lo hubiera sostenido con xito von Hufeland
(Principios del Derecho Natural p. 21, y Derecho Natural, p. 176).
{10} Segunda mitad de la Antropologa, casi tambin una ciencia nueva, cuya primera mitad
(la ms primitiva) se estudia en Jena con gran xito. (Augusto Luis de Schlzer, Allgemeines
Staatsrecht und Staats Verfassungslehre. Seguido: Introduccin a la enciclopedia de las
ciencias polticas y de la metapolitica, Gotinga 1793, pgs. 13-14.)
1890 Nach einer Einleitung in die Staatsgelehrsamkeit und einer politischen Encyclopdie wird
die Metapolitik ein von Schlzer gebildetes Wort zur Bezeichnung der Lehre von dem
vorstaatlichen Zustande der Menschen, dann allgemeines Staatsrecht und die Lehre von
den Regierungsformen vorgetragen. (Ferdinand Frensdorff, August Ludwig von Schlzer,
Allgemeine Deutsche Biographie, Leipzig 1890, tomo 31, 567-600.)
1990 Was freilich A. L. Schlzer 1793 nach G. Hufeland (1785/90) mit dem Begriff Metapolitik
zu konzipieren suchte, nmlich eine dem aufklrerischen Naturrecht verpflichtete Theorie
des status naturalis (63. Vgl. Art. Metapolitik, in: Historisches Wrterbuch der Philosophie,
Darmstadt 1980, Bd. 5, Sp. 1295-1298 M. Forschner/A. Hgli.), ist der Maistreschen
Intention durchaus entgegengesetzt. (Frankreich 1800: Gesellschaft, Kultur, Mentalitten,
Steiner, Stuttgart 1990, pg. 133.)
Diez aos despus de que Hufeland difundiese por escrito el trmino metapolitik por primera vez en
alemn, son ya muchos los profesores que lo han asumido e incorporado a sus libros y sus comentarios,
aunque otros lo tengan por superfluo. As Johann Christian Gottlieb Schaumann, Wissenschaftliches
Naturrecht, Halle 1792, pgs. 314-315; o Theodor Schmalz, Das natrliche Staatsrecht, Knigsberg 1794,
que organiza su obra en tres partes: Metapoltica (I-V), Derecho estatal absoluto (VI-XV) y Derecho
estatal hipottico (XVI-XVII); o Karl Heinrich Heydenreich, Grundstze des Natrlichen Staatsrechts,
Leipzig 1795, pgs. 44-47. Incluso el profesor Schmalz contempla una Hyper-Metapolitik. En los Anales
de Filosofa y de Filosofa del Espritu de 1795 poda leerse:
1795 Daher ist das erste Hauptstck, welches der Verf. Metapolitik (*) nach Schlzer und
Hufeland betitelt hat, und das ein recht artiges Fragment aus einer hypothetischen
Geschichte der Menschheit darstellt, dem ganzen Werke mehr nachtheilig als vortheilhaft
und eine strenge philosophische Untersuchung ber den wahren Begriff, die wesentlichen
Merkmahle und Zwecke eines Staats im allgemeinen, wrde den Gednken des Verf. eine
weit vortheilhaftere Richtung gegeben haben, als dieses dem Staasrechte so heterogene
Fragment.
(*) Ein Ausdruck, welcher nach der Analogie des Werts Metaphysik aber sehr unglcklich
geformt ist, weil zwischen den Gegenstnden, die man mit beyden bezeichnet, nicht die
mindeste Analogie Statt findet. Denn fr die Physik giebt es wohl Grundstze, die ausserhalb
der Physik ( ) gegrndet sind (principia peregrina); aber die Principien der
Politik liegen smmtlich in der Erfahrung und sind in der Politik selbst einheimisch (principia
domestica). Die , welche fr eine Politik Leitungs-Regeln abgeben knnen, lind
negativ und sind in der Rechtslehre und Moral zu suchen; welche, da sie beyde schon ihre
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Nahmen haben, nicht mir neuen zu belstigen sind und auch gar nicht als constitutive
Grndstze fr die Politik gehren. Wie aber gar diese Prliminarien des Staats-Rechts
Metapolitica heissen knnen, ist eben so unbegreiflich, als was sie berall in einem Staats-
Rechte sollen. Der bekannte D. Mller in Leipzig hat schon ehedem ein hnliches Wort fr die
reine Sittenlehre nmlich Meta-Ethica in Vorschlag gebracht. Aber es ist recht gut, dass es
nicht in Gang gekommen ist. Denn auch die Sittenlehre bedient sich ihrer eigenen Principien;
alle ihre Beweisgrnde sind ethica, keine meta-ethica. Es ist also zum Vortheile der
Wissenschaft zu wnschen, dass der obige neu erknstelte, aber hchst unbestimmte und
zweydeutige Ausdruck, (wie schon der verschiedene Gebrauch, den drey oder vier Mnner
davon gemacht haben, beweiset,) mit dem letztern einerley Schicksal erfahre und die
Philosophie fetner nicht belstige, die es weit eher bedarf, dass man sie der unntzen
Terminologie entledige, als dass man ihr neue aufbrde. (Ludwig H. Jakob, Philosoph.
Staats-Recht. Knigsberg bei Nicolovius: Das natrliche Staats-Recht, Annalen der
Philosophie und des Philosophischen Geistes, 29 stck. den 9 mrz 1795, col. 226.)
El Barn de Stein ejercita la metapoltica germnica desde Prusia
Enrique Federico Carlos Stein
Barn de Stein 1757-1831
Enrique Federico Carlos Stein (toda la historia de Prusia se resume en el Barn Stein, aseguraba
Segismundo Moret y Prendergast en el ardoroso discurso que le dedic en 1868 en el Ateneo de Madrid)
tiene ya incorporado el concepto de metapoltica a los postulados ideolgicos que le hicieron ser el
reformador germnico de Prusia. El profesor Maximilian Herberger (1946), en Die Staats- und
Gesellschaftstheorie des Freiherrn vom Stein (1973) (en Hans-Jrgen Becker ed., Rechtsgeschichte als
Kulturgeschichte. Festschrift fr Adalbert Erler, Aalen 1976, pgs. 611-648), asegura que el de
metapoltica es un concepto clave en Stein y analiza algunos de los lugares de sus obras donde lo utiliza
(V: 532, 674; VI: 97, 149, 627; VII: 777, 901, 1037, 1072, 1077, 1079, 1080, 1081, 1089, 1095; IX: 758,
759, 767, 770, 772, 786, 802): Diese Bezeichnung drfte in loser Assoziation zu "Metaphysik" gebildet
und auf alle diejenigen gemnzt sein, die auf Erfahrung gegrndetes Wissen fr zweitrangig halten und
sich statt dessen durch die innere Konsequenz ihrer frei gestalteten Lehrgebude mitreien lassen.
Dieser Wut metapolitischer Systeme gilt Steins ganze Abneigung, weil er ihr maschinenmiges
Funktionieren fr freiheitsgefhrdend hlt. As, por ejemplo: Sie [die Nationalversammlung] glaubte,
ihr eine metaphysische Einleitung geben zu mssen, die berchtigte metapolitische Dclaration des
droits de lhomme, die das Volk von seiner Souvernitt belehrte (IX, 767)
El historiador britnico Sir John Robert Seeley (1834-1895), profesor de la Universidad de Cambridge,
public en 1878 un reconocido estudio sobre Stein y su poca que contribuy no poco a difundir la
asociacin metapoltica / Stein en los ambientes anglosajones:
1878 The resemblance between the Stein-Hardenberg movement and the French Revolution is
confined to their results. In the manner of the two movements there was the greatest
possible difference. The changes in Prussia were so quietly made and have had so little fame
that this book is actually the first in which it has been seriously attempted to give a full and
connected explanation of them to other nations. The French changes were made amidst
incredible tumult and excitement, so that the innovations themselves have always seemed
far less important than the revolution in opinion and feeling that accompanied them. A
whole nation threw itself into political speculation and, as might be expected from its
inexperience, misapprehended the subject so as to produce a spurious system of
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metapolitics, but at the same time to give the greatest stimulus to political thought in all
nations. (Sir John Robert Seeley, Life and Times of Stein, or Germany and Prussia in the
Napoleonic Age, At the University Press, Cambridge 1878, pgs. 182-183.)
1879 Life and Times of Stein, or, Germany and Prussia in the Napoleonic Age, by J. R. Seeley,
Cambridge University Press. [...] Stein would have contemptuously dismissed all this as the
mere Metapolitics of history, but with such dissertations Prof. Seeleys pages abound. (The
Academy and literature, vol. 15, 1879, pg. 87.)
1881 All the ideology, all the metapolitics, to use the expression of my friend Stein, the
inveterate confusion between politics and philosophy, or between politics and religion all
this has now become naturalized in England. [...] But it is only in the newly enfranchised
classes that this novel political tone may be observed. Almost as much metapolitics may now
be detected in the political discussion of the middle classes. (Sir John Robert Seeley,
Political Somnambulism, Appletons journal, a magazine of general literature, vol. 10, n 55,
enero 1881, pg. 44.)
I do not find the English tongue so poor as to make it needful to talk in any such way. I do
not want to hide my thoughts, but to set them forth; and I find that, for that end, the plain
English tongue does thoroughly well. Perhaps my thoughts may not be so deep as those of
some of my neighbors; I certainly do not know about the unconditioned, nor yet about
metapolitics the last new and strange word that I have come across. (Edward A. Freeman,
On certain abuses in language, The Princeton review, vol. 2, 1881, pg. 271.)
1902 Metaphysic. The term metaphysic, originally intended to mark the place of a particular
treatise in the collection of Aristotle's works, has, mainly owing to a misunderstanding,
survived several other titles, such as "First Philosophy," "Ontology," and "Theology," which
Aristotle himself used or suggested. Neo-Platonic mystics interpreted it as signifying that
which is not merely "after" but "beyond" physics, and found in it a fit designation for a
science which, as they held, could not be attained except by one who had turned his back
upon the natural world. And writers of a different tendency in a later time gladly accepted it
as a convenient nickname for theories which they regarded as having no basis in experience,
in the same spirit in which the great German minister Stein used the analogous title of
"metapolitics" for airy and unpractical schemes of social reform. (E. C., Metaphysic,
Encyclopaedia Britannica, twentieth century edition, Nueva York 1902, vol. XVI, pg. 79.)
1914 Yet not Stein nor any of the builders of Germany had less patience with the abstractions of
Metapolitics, the counterpart in theories on government, to Metaphysics in speculation
upon Being, than had the first effective builder of Italy. The ideas in which he had faith,
were ideas with practical aims tested by open discussion. With uncriticized bureaucracy
called to no account by those over whom it is set, he had as little sympathy as with
metapolitics. Bureaucracy has not to persuade, to compromise, to give and take, to prove
and win its case in the course of free personal debate in face of rival ideas and antagonistic
interests. (Viscount Morley, Notes on Politics & History, Londres 1914 pg. 96.)
1915 But it was not only in summoning the creative spirit in politics from its long slumber in the
German people that Fichte stamped himself in his time. The actual course of the new
constructions was largely fashioned by men who were steeped in Kantian and Fichtean
ideas. Stein himself, it is true, in spite of his debt to Fichte, suspected what he called
metapolitics, but his friend and right-hand man von Schn was a devout student of idealistic
metaphysics. (John Henry Muirhead, German philosophy in relation to the war, Londres
1915, pg. 26.)
2005 Freilich hat dies wste Spektakel am Rande des Wartburgfests, organisiert von einer
radikalen Minderheit um den Turnvater Jahn, die auf einen freien geeinten Nationalstaat
gerichteten Bestrebungen der Studenten eher in Misskredit gebracht. Einen mystichen,
11
metapolitischen, anarchischem Unsinn hat der Freiherr vom Stein das genannt. {28. Brief
and Gersdorff, 10. Dezember 1817. Bezogen auf die Ideen des Professors Jakob Friedrich
Fries, der beim Wartburgfest die jungen Gemter aufregte und irreleitete. (Freiherr vom
Stein: Briefe und amtliche Schriften. Hg. von Walther Hubatsch. Bd 5, neubearbeitet von
Manfred Botzenhart. Stuttgart 1964. S. 674.} (Albrecht Schne, Vom Betreten des Rasens:
siebzehn Reden ner Literatur, Munich 2005, pgs. 199-200.)
Jos de Maistre lleva la metapolitique al francs
Jos de Maistre
1753-1821
1814 Mais cest dans ce que la politique a de plus substantiel et de plus fondamental, je veux dire
dans la constitution mme des empires, que lobservation dont il sagit revient le plus
souvent. Jentends dire que les philosophes allemands ont invent le mot mtapolitique pour
tre celui de politique ce que le mot mtaphysique est celui de physique. Il semble que
cette nouvelle expression est fort bien invente pour exprimer la mtaphysique de la
politique; car il y en a une, et cette science mrite toute lattention des observateurs.
(Joseph de Maistre, Essai sur le principe gnrateur des constitutions politiques et des autres
institutions humaines, Socit typographique, Pars 1814, Prface iii.)
Je ne connais pas deux genres douvrages qui se ressemblent plus que ceux des visionnaires
des deux coles. Les crits de M. de Bonnald, et ceux des Constituans de 1793, se
ressemblent, on ne peut plus, par cette thorie mtapolitique qui en fait la base, qui cherche
le Gouvernement dans les pures abstractions, au lieu de le chercher dans lexprience et les
faits. (Louis-Andr Pichon, De nos constitutions futures, Imprimerie de Porthmann, Pars
1814, Avertissement, pg. v.)
1874 Mtapolitique s. f. (m-ta-po-li-ti-k - du prf. mta, et de politique). Nol. Politique gnrale
et thorique, philosophie de la politique: Jentends dire que les philosophes allemands ont
invent le mot de mtapolitique pour tre celui de politique ce que le mot de mtaphysique
est celui de physique; il semble que cette nouvelle expression est fort bien invente pour
exprimer la mtaphysique de la politique; car il y en a une, et cette science mrite toute
lattention des observateurs. (J. de Maistre.) (Pierre Larousse, Grand dictionnaire universel
du XIX sicle, Pars 1874, tomo XI, pg. 142.)
12
Ramn Salas incorpora la metapoltica al espaol
1821 Esta ciencia importantsima fue como todas muy informe en el principio: se trat por
suposiciones voluntarias y por razonamientos abstractos en que se proceda de lo
desconocido a lo conocido: se inventaron teoras y sistemas, tal vez brillantes, pero sin
solidez: hubo una metapoltica como una metafsica: se compusieron novelas polticas ms o
menos ingeniosas; pero la ciencia no existi verdaderamente hasta que se pens en fundarla
sobre la experiencia, lo que hizo hallar el gobierno representativo, que realmente no ha sido
conocido hasta los ltimos tiempos (Ramn Salas, Lecciones de derecho pblico
constitucional para las escuelas de Espaa, Madrid 1821, tomo 1, pgs. xxxi-xxxii.)
[1827 Metapolitik ist ein Ausdruck, den (soviel mir bekannt) Schlzer zuerst gebildet hat. Es
sollte sich nmlich diese Metapolitik zur Politik eben so verhalten, wie die Metaphpysik zur
Physik. S. diese beiden Ausdrcke und Politik. Es ist jedoch jene angeblich neuerfundne
Wissenschaft im Grund nichts anders, als eine philosophisch Lehre vom Staat berhaupt, wie
sie schon bei Plato und Aristoteles vorkommt. Sonach knnte man das philosophische oder
natrliche Staatsrecht (mit Einschlu de Staaten oder Vlkerrechts) ebenfalls ein Metapolitik
nennen. Die Sptterei ber dieselbe als eine Hyperpolitik ist jedoch bel angebracht. Denn
ungeachtet der mglichen oder wirklichen Verirrungen der Metapolitiker ober
Staatsphilosophen ist es doch unumgnglich nthig, ber die gemeine oder historische
Politik, die sich im Kreise der bloen Empirie herumdreht, sich mit seinem Nachdenken zu
erheben und das Wesen des Staats nach Principien der Vernunft zu erforschen. S. Staat und
Staatswissenschaft. (Wilhelm Traugott Krug, Allgemeines Handwrterbuch der
philosophischen Wissenschaften, Leipzig 1827, vol. 2, pgs. 754-755.)]
[1831 Le mot nation a trois diffrentes significations; il est considr sous le rapport de la
mtapolitique, du droit public intrieur (ou droit public proprement dit), et du droit des gens
ou droit public extrieur. Confrez J. Th. Roths Archiv fr das Volkerrecht, Hest. I, p. 1-12.
(Jean-Louis Klber, Droit des gens moderne de lEurope, Pars 1831, tom. 1, pg. 2.)]
[1839 Jos Mara Hone-Wronski (1776-1853), Messianisme, union finale de la philosophie et de la
religion constituant la philosophie absolue. Tomo II. Mtapolitique messianique, dsordre
revolutionnaire du monde civilis, Pars 1839.]
1843 La palabra nacin tiene tres significaciones: se la considera bajo la relacin de la
metapoltica, del derecho pblico interior y del internacional. (Jos Mara de Pando,
Elementos del derecho internacional, Madrid 1843, pg. 41.)
1917 Metapoltica. f. Poltica terica o filosofa de la poltica. Es la ciencia del Estado sin referirse a
un Estado determinado ni a ninguna forma de gobierno en particular. Metapoltico, ca. adj.
13
Perteneciente o relativo a la metapoltica. (Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo-
Americana, Hijos de J. Espasa, Barcelona 1917, vol. 34, pg. 1209.)
1921 De estos supuestos, a la vez racionales y de experiencia, parte el autor de este libro para
estudiar la Metafsica individualista. Divide su obra en tres partes. En la primera, titulada
Fundamentos psicolgicos, examina lo que pudiramos llamar la organizacin interior del
hombre (instinto, ideas, entendimiento, conciencia, amor, voluntad, carcter, sentimientos,
&c.). En la segunda, llamada Metapoltica, estudia los ltimos fundamentos de la libertad
individual, y en la tercera las evoluciones y el valor de la moral. Hemos ledo pocos libros
filosficos tan clara y precisamente expuestos y con tan firme lgica fundamentados.
(Pascual Santacruz, Metafsica del individualismo, por Jos de Santiago y Gmez, Nuestro
Tiempo, n 275, Madrid, noviembre 1921, pg. 240.)
Estas ideas han sido propagadas por el libro de Oswald Spengler, La decadencia de
Occidente, cuya doctrina se ha llamado meta-poltica, y segn la cual la misin futura de
Alemania es preparar la victoria de la conciencia... (Reforma social. Revista mensual de
cuestiones sociales, 1921, vol. 20-21)
Unamuno y la metapoltica
Miguel de Unamuno
1864-1936
1932 Aqu, en Espaa, no hay hoy una idea muy clara respecto al estado de las cosas espirituales
poltica, arte, literatura, cultura, &c. en Portugal. Y lo peor es que no interesan lo bastante.
Por otra parte los emigrados portugueses que viven en Espaa no contribuyen a ilustrar a
nuestro pblico. Y hay adems un prejuicio en el fondo muy justificado contra los
regionalistas gallegos, vascos, catalanes, &c. que hablan sin ton ni son de Federacin ibrica,
una frmula ambigua y que tiene poco que ver con la unidad espiritual metapoltica.
(Miguel de Unamuno, carta desde Salamanca, 14 de septiembre de 1932, a Victorino
Nemesio, Epistolario indito, Espasa Calpe, Madrid 1991.)
1963 Mas dejemos ahora esto, para volver pronto a ello, esto que degenera en pometa politica
haba que ir a ello con sinceridad. Su gran crisis de 1924 es, como sabemos, producto de su
fracaso poltico: la poltica no era poltica corriente para don Miguel de Unamuno, sino
metapoltica. La haca a la manera quijotesca. (Iris M. Zavala, Unamuno y su teatro de
conciencia, Acta Salmanticensia XVII:1, Salamanca 1963.)
1988 Se transforma y transforma el texto nico en su proceso; demuestra segn mtodos
diferentes, en procesos de seleccin de gneros internos, desarrollando siempre el mismo
metablema, en demostraciones de metahistoria, metapoltica, metaertica. Nunca el puro
contemplador y siempre contra el mero lector absurdo e inhumano. (Iris M. Zavala,
Unamuno: Niebla, el sueo y la crisis del sujeto, en Estelas, laberintos, nuevas sendas,
Anthropos, Barcelona 1988, pg. 43.)
2007 A su realizacin estamos, "ante este terrible misterioso de la mortalidad" (STV, 139), pro-
puestos y apelados atravesando y yendo ms all del espacio socio-poltico y moral, pues
Unamuno hace de la meterica su "metapoltica". (47. Teresa, O. C., VI, pp. 560, 569 y 669
respectivamente). (Juan Manuel Navarro Cordn, Unamuno y el problema de la
metafsica, en Experientia et sapientia: estudios dedicados a la memoria de ngel lvarez
Gmez, Universidad de Santiago de Compostela, Santiago 2007, pg. 335.)
14
1927 El tema general del congreso [Segundo Congreso Psicosociolgico, Pars, 24 abril-1 mayo
1927] de este ao es: La conciencia. El trabajo ha sido dividido en siete secciones. La primera
tratar de problemas cientficos y consta de tres subsecciones: general, biolgica y mdica.
La segunda seccin discutir asuntos filosficos y principalmente acerca de la
superconciencia, como fuente de la conciencia. La tercera se ocupar de temas sobre
sociologa y educacin y tratar de explicar el capital y el trabajo a la luz de la conciencia
colectiva de la sociedad. La cuarta estudiar algunos problemas de la metapoltica. La quinta
consiste en dos subsecciones: mstica y arte; tema de la primera divisin es: la objetividad
en los trances msticos, y de la segunda: el arte moderno y la conciencia de la verdad. La
sexta estudiar la cuestin acerca de la Supervida (Survie), es decir, sobre la vida
posterior a la muerte y la duracin de la conciencia. La sptima discutir acerca de
cuestiones religiosas y morales: el reino de Dios como ideal de la conciencia social.
(Traducido de la revista esperantista Oomoto Intenacia, febrero 1927; Vida masnica, ao II,
n 1, Madrid, marzo 1927, pg. 16.)
Eugenio Relgis apstol de la metapoltica de Follin y su Cosmometpolis
Eugenio Relgis
1895-1987
El idelogo individualista pacifista Henri Lon Follin (1866-1949) public en 1903, como prsident de
la socit havraise pour lArbitrage entre Nations y miembro de la delegacin permanente de las
Sociedades Francesas de la Paz, el opsculo La marche vers la paix (Biblioteca Pacifista Internacional,
Pars 1903, 66 pgs.). Bajo el pseudnimo Lon Hendryk, La volont dharmonie (Pars 1913, 334 pgs.).
Como Follin: La idolatra poltica (Lindividualiste europen, Aix-en-Provence 1916, 110 pgs.), Las
condiciones de un movimiento individualista y supranacional (Liber, Pars 1922, 63 pgs.), ABC del
ciudadano supranacional (Secretariado del Consejo Inicial de Propaganda de la Organizacin de la
Repblica supranacional, Pars 1925, 85 pgs.). Ese mismo ao 1925, en tanto que fundador de la
Repblica supranacional firma Follin su presentacin a la obra Pan Europa, del conde Coudenhove-
Kalergi, fundador de la Unin Pan Europea de Viena. Follin en 1927 redefine sus proyectos en
trminos de metapoltica: La mtapolitique supra nationale: gense et volution de son concept et dune
organisation adquate (Andr Delpeuch, Pars 1927, 38 pgs.). El rumano luego hispanizado Eugenio
Relgis (1895-1987) se convirti desde finales de los aos veinte, en Espaa principalmente a travs de la
anarquista Revista Blanca, en apstol principal de la metapoltica de Follin y de su proyecto de
Cosmometpolis. La obra de Eugenio Relgis, Cosmometapolis (Editura cultura poporului, Bucarest) fue
traducida del rumano al frncs por Rose Arp (G. Mignolet et Storz, Pars 1935, 192 pgs.) y, revisada y
aumentada, por Eloy Muiz al espaol (Ediciones Humanidad, Montevideo 1950, 144 pgs.), y del
espaol al italiano por Gaspare Mancuso (Libero Accordo, Turn 1977, 108 pgs.)
1929 H. L. Follin, que es el terico de la Metapoltica, proclama la voluntad de armona que
opone a la voluntad de potencia de Nietzsche. (Eugen Relgis, Humanitarismo e
individualismo, La Revista Blanca, n 158, Barcelona, 15 diciembre 1929, pg. 328.)
1933 H. L. Follin, que es el terico de la Metapoltica (convertida despus en
Cosmometapolis), proclama la voluntad de armona que opone a la voluntad de potencia
de Nietzsche. (Eugen Relgis, Individualismo, Esttica y Humanitarismo, versin espaola de
Eloy Muiz, Cuadernos de Cultura n 89, Madrid 1933.)
1935 1931 la tercera y la ltima fase. En una de las numerosa hojas volantes, que H. L. Follin
hace aparecer con una perseverancia digna de admiracin y que precisan los momentos de
15
la evolucin de su pensamiento y de su accin, encontramos una evocacin de la situacin
catica en que se debate el mundo en estos ltimos aos. Proclamando por medio de una
expresin ms amplia su metapoltica, cosmometpolis, Follin toma por ejemplo a los
iniciadores que, en los siglos pasados, han elevado a la humanidad y han ayudado a la
realizacin de las revoluciones intelectuales y morales. No vacila en anunciar que la
amplificacin del movimiento cosmometapolita igualar en importancia y en consecuencias
al de 1789. 1789 ha visto la abolicin del derecho divino real. 1939, lo ms tarde, debe de
ver, despus de siglo y medio, la abolicin del derecho mstico nacional. (Eugen Relgis,
Cosmometpolis III, La Revista Blanca, n 349, Barcelona, 27 septiembre 1935, pg. 927.)
Despus de una serie de diferentes Cartas elaboradas para la Repblica metapoltica
Supranacional (2. Documentos de la Repblica Supranacional, n 3, Organizacin y accin,
1927), Follin ha redactado Los Fundamentos de la Cosmometpolis que ha reducido a su ms
simple expresin y que son para l la frmula definitiva. La frmula de Follin no obliga al
individuo que quiere gozar de sus derechos apolticos y metapolticos, a separarse de las
colectividades donde pueden ejercerse mejor sus actividades y satisfacer sus intereses de
orden local y tradicional. (Eugen Relgis, Cosmometpolis IV, La Revista Blanca, n 351,
Barcelona, 11 octubre 1935, pgs. 977-978.)
Ni el progreso econmico perseguido por las agrupaciones cooperatistas, profesionales,
librecambistas, ni el progreso social perseguido por las agrupaciones igualitarias,
solidaristas, fraternitarias, educativas, feministas, &c., son suficientes por s mismos si todos
ellos no se apoyan en el espritu metapoltico y supranacional, en el Cosmometpolis, que
puede crear ese equilibrio necesario entre ellos mismos y con las fuerzas de tradicin.
(Eugen Relgis, Cosmometpolis IV, La Revista Blanca, n 352, Barcelona, 18 octubre 1935,
pg. 1001.)
En la rplica mencionada anteriormente precisa Follin que ni la Metapoltica ni
Cosmometpolis, representan toda su doctrina individualista. La idea cosmometapolista
hllase, pues, comprendida en el individualismo. Ella implica solamente ese mnimum de
individualismo que debe liberar al mundo del caos actual. En ese mnimum, los paternalis-
estatistas, socialistas y comunistas, si son de buena fe, pueden agruparse para realizar el
medio en el cual sus teoras y sus prcticas puedan confrontarse libre y lealmente entre s y
con las teoras y prcticas individualistas. (Eugen Relgis, Cosmometpolis IV, La Revista
Blanca, n 353, Barcelona, 25 octubre 1935, pg. 1026.)
1936 Y la supranacin o Repblica universal, asociacin voluntaria de hombres que garanticen
entre s la mutua libertad y la mutua seguridad, no ejecutando ni haciendo lo que pudiera
perjudicar a los otros, desechando los conflictos violentos y hostiles entre las colectividades.
La Repblica supranacional es, naturalmente, metapoltica, apoltica o antipoltica. Esa
Repblica tendr, claro est, una capital y que ser Cosmometpolis, esto es (universal)
meta (superior, encima de) y polis (ciudad). (Fabio Luz, Eugen Relgis, campen de la paz,
La Revista Blanca, n 368, Barcelona, 7 febrero 1936, pg. 101.)
1950 El manifiesto metapoltico comprende tambin la exposicin de los principios de
organizacin de esa Comunidad suprema, en relacin con las funciones econmicas,
intelectuales y polticas de la humanidad. Por lo tanto, la Repblica Supranacional es
metapoltica, pues sobrepasa todas las concepciones y organizaciones polticas. (Eugenio
Relgis, Cosmometpolis, Humanidad, Montevideo 1950, pgs. 21 y 22.)
16
Peter Viereck asocia la metapoltica con el nazismo hitleriano
Peter Viereck (1916-2006)
Metapolitics (1941), ed. 2004
En 1941 el norteamericano Peter Viereck, un joven que tiene la mala suerte de ser hijo de un agente
nazi y conserva sin embargo su pureza e integridad, titula Metapolitics un libro riguroso que ofrece la
evolucin ideolgica desde el romanticismo hasta Hitler, que vena preparando desde 1936. And
already a half century before Hitler, the Wagnerian Konstantin Frantz from whose letter we derived
our term metapolitics was proclaiming... El libro se public tres meses antes del ataque japons a
Pearl Harbor, y se convirti en un xito editorial tras la entrada norteamericana en la guerra. El
prestigio de Viereck como ensayista e historiador, ganador de un Premio Pulitzer, asoci
necesariamente entre los norteamericanos la metapoltica con el nazismo. La portada de la edicin de
2004, revisada y aumentada por el autor, ofrece fotografas de Wagner y Hitler sobre el ttulo destacado.
Los editores fueron ajustando el subttulo a los tiempos: en 1941: Metapolitics, from the romantics to
Hitler, Alfred A. Knopf, Nueva York 1941, xviii+335 pgs.; en 1961: Metapolitics, the roots of the Nazi
mind, Capricorn Books, Nueva York 1961, xxvii+364 pgs.; en 2004: Metapolitics, from Wagner and the
German Romantics to Hitler, Transaction Publishers, New Brunswick 2004, lxxxix+530 pgs.
The type of politics discussed in this book is nor really politics in the unpretentious
American sesnse of the word but is best described as well, there is no ordinary English
word for it as Metapolitik: metapolitics. No English word expresses so well the
Weltanschauung which Hitler has instilled into German youth and which, backed by German
military and economic efficiency, is the menace of the hour to all free peoples. The composer
Richard Wagners Circle of nationalists was the first to use this word Metapolitik as
Germanys political ideal. Among Wagners letters from ardent admirers one from a
prominent nationalist offeref a singularly startling suggestion: To be genuinely German,
politics must soar to metapolitics. The latter is to commonplace pedestrian politics as
metaphysics is to physics. {2. Constantin Frantz: Offener Brief and Richard Wagner,
Bayreuther Bltter, Jahrgang I, n 6 (june 1878), p. 169.} As if abashed by the audacity of his
own imagination, this correspondent surged patriotically on without stopping to define the
word he had coined. The word is here borrowed advisedly; it expresses, more adequately
than any existing dictionary term, the highfalutin mysticism welding the political, economic,
and national philosophy of Wagner and Hitler into a unity very much its own and very
German. I shall use metapolitics to mean the semi-political ideology resulting from the
intertwining of four distinct strands. These four are romanticism (as interpreted in the
chapter following this), the science of racism; a vague economic socialism, protesting
sometimes demagogically and sometimes sincerely against capitalist materialism, and the
alleged supernatural and unconscious forces of Volk collectivity. (pgs. 3-4.)
The term metapolitics, a coinage from Richard Wagners nationalist circle, signifies an
ideology resulting from five distinct strands: romanticism (embodied chiefly in the
Wagnerian ethos), the pseudo-science of race, Fuehrer worship, vague economic socialism,
and the alleged superntaural and unconscious force of the Volk collectivity. Together, those
elements engendered an emphasis on irrationalism and hysteria and belief in a special
German mission to direct the course of the worlds history. [contracubierta edicin 2004.]
Thomas Mann sobre Metapolitics:
September 7th, 1941. Dear Mr. de la Torre Bueno: I have received the bound galleys of
17
Metapolitics, and have occupied myself throroughly with it. [...] I believe it desirable that his
book would find at least as wide a circulation as Rauschnings Revolution of Nihilism, a work
which Metapolitics surpasses and rectifies in may respects. Sincerely yours, Thomas Mann.
Klaus Mann (1906-1949), primognito de Thomas Mann, en su autobiografa The turning point (1942),
escribe:
16 de septiembre de 1941. Ocupado en editar un conjunto de artculos y poemas: "La otra
Alemania", que aparecer en el nmero de octubre. Estimulantes conversaciones con Peter
Viereck, hijo, que contribuir con un ensayo sobre Stefan George. Entre todos los jvenes
estadounidenses que conozco, Peter es el ms versado en el intrngulis de la ideologa nazi.
Su libro Metapoltica: de los romnticos a Hitler, demuestra una notable comprensin del
laberinto del alma teutnica. Creo que su alma no ha sido contaminada por su intenso
estudio de Alfred Rosenberg y sus semejantes. Un joven que tiene la mala suerte de ser hijo
de un agente nazi y conserva sin embargo su pureza e integridad, debe ser inmune a todos
los gneros y tentaciones nazis. (Cambio de rumbo, traduccin de Alfredo Weiss y Hctor F.
Miri.)
1955 [Thus metapolitics reveals that the change needed in human life and human affairs is an
achievement which must be sought in a sphere above the level of the physical, in which
politics works. Metapolitics becomes important when we realize that politics, labor concerns,
the application of science to human physical needs, even social service though all are good
work on a lower level of good. (Ernest Wall, Simone Weil and Metapolitics, Religion and
Life (Nueva York), XXIV (1955), pgs. 417-429.]
1962 En la sede central de la Organizacin Sindical se ha inaugurado el Curso del Seminario
Universitario de Estudios Sindicales, con la iniciacin de unos coloquios sobre Metapoltica,
organizados por el Centro de Estudios Sindicales con la colaboracin de Accin Cristiana
Ecumnica, cuyas tareas van dirigidas a la informacin de los mtodos subversivos de esta
hora, utilizados por el comunismo internacional. El primero de los coloquios ha estado a
cargo del teniente general del Ejrcito de los Estados Unidos, Mr. P. A. del Valle, una de las
ms destacadas personalidades de la lucha anticomunista en Norteamrica. (Curso
Universitario de Estudios Sindicales, ABC, Madrid, domingo 18 de noviembre de 1962, pg.
96.)
1950-1968 Pero lo que se trata es de considerar en toda su gravedad el hecho de que toda
poltica est hoy sumergida en un espacio de tensiones que excede por todas partes el
mbito de la soberana del Estado-Nacin y que lo excede, no slo en las correlaciones
estrictamente polticas, sino, adems, en el desbordamiento absoluto de las fronteras en
orden tanto a la visin tpica del mundo del llamado "hombre de la calle" envuelto en una
atmsfera de informacin mundializada, como tambin en lo que hace al "sistema de
necesidades" dominado al menos en los pases que han salvado el "take off" del desarrollo
por las lneas de tendencia y los avatares de un mercado de dimensiones mundiales. Esta
superacin si se quiere metapoltica del Estado-Nacin, es precisamente el centro y la
sntesis de lo que hemos dado en llamar el "fin de la poltica moderna". (Jess Fueyo
lvarez, Estudios de teora poltica, Instituto de Estudios Polticos, Madrid 1968.) [CORDE]
1964 [A new science is emerging, to which has been given the name "Metapolitics". It is
expressive of an effort to move beyond politics, in search of the values and principles that
determine, or should determine, political action or policy. (John Alexander Mackay,
Ecumenics: the science of the church universal, Prentice-Hall, 1964, pg. 260.)
Leslie Wolf-Phillips [London School of Economics], Metapolitics: reflections on a
'methodological revolution', Political Studies, vol. 12, n 3 (octubre 1964), pgs. 362-369.]
18
1967 Despus de analizar algunos pasajes de esta Ley, el seor Becerril acaba su discurso
detenindose en el concepto de transustanciacin del Derecho como valor, cultura y otros
temas no menos importantes. Para el nuevo acadmico, el dilogo entre la filosofa y el
pueblo ha hallado la voz adecuada en nuestro siglo. El juez posee una alta funcin
metapoltca, puesto que los teoremas teolgicos, polticos y econmicos se acercan, en el
actual concepto del pensamiento y de la Iglesia, a una pauta de aproximacin cordial entre
los hombres. (Recepcin de don Juan Becerril en la Academia de Jurisprudencia, ABC,
Madrid, martes 21 de febrero de 1967, pg. 69.)
1968 Desde el observatorio singular de sus circunstancias personales, el estudiante ya
especialmente sensibilizado para ello, cuando contempla la sociedad que le espera,
encuentra que todas las dimensiones de la vida estarn sometidas a control, a planificacin:
el hogar, y las diversiones, y las profesiones y los ocios, el alimento y el vestido y hasta el
nmero de hijos... El estudiante percibe que su futuro va a consistir en salir de su actual
dependencia respecto de personas concretas para entrar en otra dependencia an ms
odiosa, de carcter "impersonal": la impuesta por la actual sociedad tecnificada. Su rebelda
no es, por tanto, "poltica" en el sentido concreto y usual de esta palabra, sino ms bien
"metapoltica"; se dirige a estratos bsicos de la vida social actual, que estn "ms all" de la
poltica. Por eso su posicin ante la "poltica" es, en realidad, "negativa". El estudiante se
rebela contra el capitalismo, que lo que puede ofrecerle (y de ello se ufana) es convertirle en
"consumidor". Su vida va estar orientada a consumir cada vez ms y a inventar nuevas
formas de consumir, bajo la tirana psicolgica del "anuncio", de la "propaganda", de los
"convencionalismos" y bajo la tirana casi fsica de los "monopolios invisibles", creados por el
"liberalismo" democrtico. Y se rebela tambin contra el socialismo, que le ofrece una
"mstica materialista" (cuyos "dogmas" la Historia misma est destruyendo) bajo el control y
la dependencia de una rgida burocracia estatal que planifica la vida. Ante el aparente dilema
mundial, entre capitalismo y socialismo, el estudiante no se plantea una "opcin" sino una
"superacin", aunque no sabe cmo. (Enrique Gutirrez Ros [Presidente del Consejo
Nacional de Educacin], La Universidad. 5. El estudiante frente a la poltica, ABC, Madrid,
domingo 20 de octubre de 1968, pg. 63.)
19
Alain de Benoist y la metapoltica de la Nueva Derecha europea
Alain de Benoist
En el agitado 1968 francs, el joven escritor y periodista Alain de Benoist (1943) puso en marcha el
peridico Nouvelle Ecole (febrero-marzo) y organiz el 11 y 12 de noviembre, en Lyon, un primer
seminario bajo la pregunta: Qu'est-ce que la mtapolitique? Dos meses despus, en enero de 1969,
cuarenta militantes nacional europestas franceses, capitaneados por Benoist, fundaban oficialmente
GRECE, Groupement de Recherche et dtudes pour la Civilisation Europenne, organizacin que no se
define como un movimiento poltico, sino como una escuela de pensamiento que adopta una perspectiva
metapoltica. Diez aos despus ya eran conocidos sobre todo como Nouvelle Droite, Nueva Derecha
(europea). Treinta aos despus de su fundacin, en el manifiesto la Nueva Derecha del ao 2000, decan
Alain de Benoist y Charles Champetier:
La metapoltica no es otra manera de hacer poltica. No es en absoluto una "estrategia" que
tratara de imponer una hegemona intelectual; tampoco pretende descalificar a otras
posiciones o actitudes posibles. Sencillamente, la metapoltica reposa sobre la constatacin
de que las ideas juegan un papel fundamental en las conciencias colectivas y, de forma ms
general, en toda la historia humana. Herclito, Aristteles, Agustn, Toms de Aquino, Ren
Descartes, Immanuel Kant, Adam Smith o Karl Marx provocaron en su da, con sus obras,
revoluciones decisivas cuyo efecto an se percibe. Es verdad que la historia es resultado de
la voluntad y de la accin de los hombres, pero tal voluntad y tal accin se ejercitan siempre
en el marco de un cierto nmero de convicciones, creencias y representaciones que les
confieren un sentido y las orientan. La ambicin de la Nueva Derecha es contribuir a la
renovacin de esas representaciones sociales-histricas.
Por otra parte, el acierto de esta perspectiva metapoltica viene avalado por la reflexin
sobre la evolucin de las sociedades occidentales al alba del siglo XXI. En efecto, hoy
constatamos, por un lado, la creciente impotencia de los partidos, los sindicatos, los
gobiernos y el conjunto de las formas clsicas de conquista y ejercicio del poder, y por otro,
la acelerada obsolescencia de todas las viejas fronteras y divisiones que haban venido
caracterizando a la modernidad, empezando por la tradicional dada derecha/izquierda.
Simultneamente estamos asistiendo a una explosin sin precedentes de los conocimientos,
que se multiplican sin que sus consecuencias lleguen a ser siempre totalmente percibidas.
En un mundo donde los conjuntos cerrados han dejado paso a las redes interconectadas,
donde los puntos de referencia resultan cada vez ms confusos, la accin metapoltica
consiste en intentar volver a dar un sentido a las cosas, al ms alto nivel, a travs de nuevas
sntesis; en desarrollar, al margen de la insignificancia de la poltica, un modo de
pensamiento resueltamente transversal; en definitiva, en estudiar todos los campos del
saber con el fin de proponer una visin coherente del mundo.
1993 Le principe en est simple: la conqute du pouvoir politique prsupose celle du pouvoir
culturel. Or, celui-ci tant monopolis par l'intelligentsia de gauche, il faut commencer par
dnoncer le terrorisme intellectuel de la gauche. L'ide d'une stratgie mtapolitique
est introduite ds la premire anne d'existence officielle du GRECE, dont le premier
sminaire national (Lyon, 11-12 novembre 1968) portait sur la question: Qu'est-ce que la
mtapolitique? partir de 1973-1974, A. de Benoist a donn un contenu plus prcis la
stratgie mtapolitique en la prsentant comme un gramscisme de droite. Gramsci est
lu comme un thoricien du pouvoir culturel (Vu de droite, Paris, Copernic, 1977, p. 456), et
le retournement antigauche de sa stratgie ainsi thoris: Le GRECE a entrepris une action
20
mtapolitique sur la socit. Une action consistant rpondre au "pouvoir culturel" sur son
propre terrain: par un contre-pouvoir culturel (R. de Herte, La rvolution conservatrice,
lments, n 20, fvrier-avril 1977, p. 3). Jusqu' la fin des annes 1970, c'est la culture
marxiste qui est dsigne comme l'ennemi idologique. Mais l'hritage anticommuniste est
reformul: le marxisme n'est stigmatis qu'en tant qu'il constitue la forme la plus extrme
de l'galitarisme (J.-C. Valla, Dix ans de combat culturel pour une renaissance, Paris, GRECE,
1977, p. 68). (Pierre-Andr Taguieff, Origines et mtamorphoses de la Nouvelle Droite,
Vingtime Sicle. Revue d'histoire, n 40, oct.-dec. 1993, pg. 8.)
2008 Presentada a s misma como una escuela de pensamiento ms que como una ideologa
poltica, la Nueva Derecha gusta de situarse en una ptica metapoltica. Ello significa, y tal es
su primera caracterstica, que a su parecer las ideas juegan un papel axial en el devenir de la
historia, mayor sin duda que el propio de la economa. Quiere colocarse as de entrada en
una perspectiva opuesta a la marxista (y tambin a la liberal) que, regida por un
economicismo rudimentario, localizara en el modo de produccin la infraestructura
determinante del sistema socio-poltico en el que se desarrolla nuestra vida. En su lugar, la
metapoltica de la Nueva Derecha otorga al factor cultural (creencial, simblico,
representacional, incluso lingstico) la clave que condiciona la voluntad y accin humanas,
retomando as la idea gramsciana de la hegemona cultural. (Jos Andrs Fernndez Leost,
Nueva Derecha, extrema derecha o derecha extravagante?, El Catoblepas, marzo 2008, n
73, pg. 11.)
[1971 Anthony James Gregor, An introduction to metapolitics, a brief inquiry into the conceptual
language of political science, Free Press, Nueva York 1971, 403 pgs.]
1972 Una amplsima campaa, tpicamente ideolgica, pretende convencernos de las amenazas
que el desarrollo actual significa para la ecologa... El potencial cientfico es presentado como
fuerza metapoltica causante de por si de los peores males. La verdad es que el peligro no
viene de la ciencia; viene de la perduracin del capitalismo que "administra" fuerzas
cientficas enormes segn la ley del beneficio. (Manuel Azcrate, Algunas consecuencias
del nuevo papel de la ciencia, Realidad [Partido Comunista de Espaa, Roma, Pars], n 23,
junio de 1972, pg. 9.)
[Yaron Ezrahi, The metapolitics of science in the modern state: a study in the political sociology
of science, Ph. D. dissertation, Harvard University, Massachusetts 1972.]
1975 Las Iglesias que pretenden colocarse en una neutralidad apoltica o metapoltica son ellas
mismas Iglesias politizadas. Con su neutralidad pagan el precio de sus privilegios y de su
inmunidad. (A. lvarez Bolado, Dios y la ciudad, en Dios y la ciudad: nuevos
planteamientos en teologa poltica, Instituto Fe y Secularidad, Madrid 1975, pg. 59)
Que una paz, segura, salvadora, con basamento en la concordia y la libertad, venga a
nosotros, los europeos. A los de all y a los de aqu. Y por obra de lo mejor de Europa, que es
su propio espritu, alimentado por tres lenguas teolgicas Jerusaln, Roma y Atenas. Por
obra del espritu europeo, librado de esa modorra en que hartas veces lo meten los
desgobernadores de unas patrias cuya unin real y efectiva y poltica, primero, y
metapoltica, despus debemos pedir todos. (Juan Iglesias, Concordia y libertad, ABC,
Madrid, 23 de diciembre de 1975, pg. 3.)
Manfred Riedel, Metaphysik und Metapolitik, Suhrkamp Verlag, Frankfurt 1975. Trad. esp.:
Metafsica y Metapoltica, Alfa, Buenos Aires 1977.
1976 El General Franco pudo haberlo hecho, como lo hizo el general De Gaulle en Francia, pero no
quiso hacerlo. Ahora tenemos la Monarqua, pero la Monarqua tiene que ser sobre todo,
como se ha dicho, una fuerza moral metapoltica. Tiene que haber hombres que, bajo la
sombre de la Monarqua, pero sin comprometerla, consigan el asentimiento de la gran
21
mayora de los espaoles y estn dispuestos a sacrificarse en esa aventura. Pero vale la pena
quemarse por la convivencia entre los espaoles. (Antonio Garrigues, La unidad moral de
Espaa, ABC, Madrid, 8 de septiembre de 1976, pg. 3.)
Silvano Panunzio y la metapoltica tradicionalista catlica desde 1976
Silvano Panunzio
1918-2010
En 1976 comienza a publicarse Metapolitica, Rivista di Studi Universali, fundada por Silvano Panunzio
(1918-2010), Mario Pucci, Primo Siena y Giovanno DAloe. En su primer nmero Silvano Panunzio
firmaba Alfa ed omega della Metapolitica. Se public entre 1976 y 1990 (colaboraron Giuseppe
Palomba, Raimundo Panikkar, Emilio Servadio, Vintila Horia, Isidro J. Palacios, &c.). Conoci una
segunda poca (1998-2005): Metapolitica, Nuovi cieli nuova terra. Desde 2007 mantienen el sitio
metapolitica.net donde puede leerse (2011) la siguiente nota histrica, en la que tal parece que dan por
supuesta la existencia de una metapoltica trascendente que se va desplegando a lo largo del tiempo:
La parola Metapolica fu coniata da August Ludwig von Schlzer, appartenente allOrdine
degli Illuminati di Baviera, nel suo trattato Allgemeines Staatsrecht und
Staatsverfassungslehre (Gttingen 1793). La lingua tedesca, per la sua struttura, adatta alla
costruzione di neologismi: nel 1733 Friedrich Lebrecht Goez aveva gi inventato il
nichilismo.
Joseph De Maistre, nel suo saggio sul Principio Generatore delle Costituzioni (S.
Pietroburgo, 1809) espresse la sua approvazione per il vocabolo, destinato ad esprimere la
metafisica della politica.
Seguirono Carl Wenzeseaus von Rotteck (1830) e Jozef Maria Wronski, misconosciuto genio
della matematica, il quale, nella sua opera Metapolityka (Parigi, 1839) caldeggi una
Metapolitica messianica, unione finale della filosofia e della religione.
Nel 1930, nelle sue lezioni di dottrina dello Stato, Sergio Panunzio, filosofo e giurista, padre
di Silvano, riesum il vocabolo, attribuendogli il significato di senso trascendente della
storia.
Segu Benedetto Croce, col gi citato In qual senso la libert sia un concetto metapolitico (in
Pagine Sparse, II, Bari 1953).
Menfred Riedel, nel suo Metaphisik und Metapolitik - Studien in Aristoteles und zur Politischen
Sprache der neuzeitlichen philosophie (Frankfurt am Main, 1975), tradotto in italiano sotto il
titolo Metafisica e Metapolitica (ed. il Mulino, 1990) neg radicalmente la dottrina del
fondamento, tentando di dimostrare, secondo i dettami del moderno strutturalismo, che il
significato dei termini politici (Societ Civile, Stato, Polis etc.) pu essere compreso solo
indagando sulle loro relazioni semantiche: le stesse parole, inventate ed usate da Aristotele,
vengono oggi usate dai moderni politologhi in tuttaltro contesto. Ma, come abbiamo visto,
proprio Aristotele aveva teorizzato lautosufficienza dei cittadini come fondamento della
politica.
Silvano Panunzio, nella sua opera principale, Metapolitica La Roma eterna e la nuova
Gerusalemme (ed. Babuino, Roma 1979) non solo rivaluta la dottrina del fondamento, ma
la supera, collegando tale dottrina al vincolo trascendente dellescatologia.
Alain De Benoist, principale storico della Nouvelle droite francese, nel suo Orientations pour
des annes decisives (Paris, 1982) riparte (pag. 92) da Antonio Gramsci, il quale ha
dimostrato che la conquista del potere politico passa attraverso la conquista del potere
22
culturale, restringendo la metapolitica su un piano nel contempo culturale e teorico e
svincolandola del tutto dallattivit politica: cfr. la donna sterile cui accennava Silvano
Panunzio.
Sulle orme dello stesso Panunzio, Primo Siena, scrittore italiano emigrato in Cile, accentua,
in numerosi saggi, laspetto tradizionalista della metapolitica, traducendo le categorie del
Panunzio in scienza sacra (la metafisica), scienza profana (la politica) e ars regia et
profetica (lescatologia). V. per tutti La metapolitica y el destino superior de nuestra Amrica
Romnica, in Conferencia en III encuentro ibero americano de metapolitica, Via del Mar,
Agosto 1995, 2.
Lopera di Attilio Meliad La Comunit dellirreparabile. Saggio di metapolitica del Terzo (ed.
F. Angeli, Milano 2001) distingue la politica (come Comunit dellIrreparabile,
caratterizzata dallimmanenza e, aristotelicamente, dallautosufficienza dei singoli) dalla
Metapolitica (come Terzo unificante, Teologico ed escatologico, invocato mediante la
preghiera).
Largentino Alberto Buela, nella sua opera principale Metapolitica y filosofia, Buenos Ayres
2003, torna alla dottrina del fondamento non politico della politica, qualificando la
metapolitica come filosofia e politica al tempo stesso: filosofia, in quanto comprende le
idee e i miti che muovono la storia, politica in quanto getta le basi culturali per soppiantare i
governanti, nel senso gi sostenuto da Antonio Gramsci.
Infine, va citata lopera di Carl Schmitt Teologia Politica, nelledizione argentina (Struhart,
Buenos Ayres 1985) citata da Primo Siena; e quella di Giovanni DAloe I colori simbolici.
Origini di un linguaggio universale (ed. Gabrielli, Verona 2004), che indica nei colori i primi
simboli fondanti della struttura sociale (bianco = sacerdozio, rosso = governo, nero =
produzione) e, al tempo stesso, della lingua originaria diffusa su tutta la terra.
1979 Silvano Panunzio, Metapolitica, la Roma eterna e la nuova Gerusalemme (dottrina dello
spirito), Edizioni Babuino, Roma 1979, 2 vols., 940 pgs. Pregunta: Qu cosa es la
Metapoltica? Respuesta: es la Escatologa adquirida. En un sentido recproco, mas
correspondiente, la Escatologa puede considerarse como la Metapoltica inspirada. Esta
segunda es propia de los Profetas, los cuales la revelan en el smbolo; la primera es propia de
los Sapientes, los cuales la interpretan segn un sistema tradicional de doctrinas que tiene
ya el carisma de los milenios. La Metapoltica es el punto de encuentro del Oriente y del
Occidente, de la Contemplacin y de la Accin, del Ser y del Deber Ser. De naturaleza
tpicamente mediterrnea, no casualmente desemboca en los confnes del Cielo, de la Tierra
y del Mar. De hecho son metapolticos: Platn y San Agustn, Dante y Santo Toms, San
Buenaventura y Vico, Leibnitz y De Maistre, Sturzo y Po XII. Todos estos espritus magnos
no son solamente cultores de la Metafsica pura, o sea de la Ciencia de los Primeros Principios,
sino testigos e intrpretes de la Metafsica aplicada, o sea de la Ciencia de los Fines y de los
Medios: precisamente la Metapoltica. Si se quiere inquirir todava y aclarar hasta el detalle,
puede agregarse que las dimensiones de la Metafsica, de la Escatologa y de la Poltica estn
todas presentes en el carcter quadridimensional de la Metapoltica la cual, en sustancia,
resulta de una singular combinacin de cada una de las tres. De hecho, si la Metafsica es
propiamente el Arte de los Medios, y la Escatologa la Ciencia de los Fines, la Poltica
verdadera y mayscula es la Ciencia y el Arte de los Medios, a la primera pertenece la
Sapiencia divina, a la segunda la Justicia csmica, a la tercera pertenecen, simultneamente,
la Fortaleza y la Prudencia humanas y terrestres. (traduccin de Gianfranco Sangalli Ratti,
en Arbil, n 117.)
23
1977 Sostener un cuerpo de valores fundamentales es obligacin del Estado, puesto que, al estar
los mismos radicados en la naturaleza humana, ste recibe de ellos su identidad y su
autoridad. No es la defensa de dichos valores una cuestin metapoltica que puede ser
cmodamente abandonada a la competencia de las iglesias. (Jos Zafra Valverde,
Encrucijada de los valores fundamentales, ABC, Madrid, 22 de septiembre de 1977, pg. 3.)
1978 Ciertamente es la funcin primaria del Estado garantizar esa seguridad, necesaria tambin
para el hombre racional, ms libre en la Ciudad, pese al aspecto coactivo de las leyes, que en
la soledad (Eth. IV, p. 73); pero la sociedad a la que Espinosa se refiere tiene adems una
misin que podramos denominar pedaggica: conduce a sus miembros en la direccin del
objetivo metapoltico planteado. (Javier Pea, Espinosa: proyecto filosfico y mediacin
poltica, El Basilisco, n 1, Oviedo 1978, pg. 81.)
1979 Cmo salir de semejante impasse? De nuevo, y trasladndonos al modelo de la teora de la
comunicacin, se desprende que slo metacomunicando se puede salir del crculo de unas
comunicaciones que se atienen a una determinada regla. Slo metacomunicando se puede
cambiar de regla. Pero la metacomunicacin no es posible en la medida en que existe una
situacin de doble vnculo. De ah la necesidad de una teraputica. De ah, en fin, la
pertinencia de sustituir la poltica por la metapoltica. [...] ste es el apasionante tema de la
metapoltica. La metapoltica ha de conseguir proveer metacomunicando lo que ningn
sistema es capaz de generar: un cambio de sus propias reglas. La metapoltica es ya una
teraputica. Salvado lo cual, conviene aadir que, de todos modos, la cosa tampoco es tan
dramtica. Al fin y al cabo la vida real est llena de paradojas pragmticas, y casi siempre que
dos personas discuten es porque no consiguen metacomunicar. Tiempo atrs escrib que,
en Espaa, adems de poltica procede hoy hacer metapoltica. Lo que pginas arriba he
denominado metapoltica se tradujo, en la prctica, por el famoso consenso, es decir, por la
posibilidad de enmarcar el juego poltico dentro de unas coordenadas comunes, o si se
prefiere dentro de un metasistema democrtico aceptable por todos. Sin esta metapoltica,
sin este consenso, posiblemente no se hubiese consolidado la democracia postfranquista.
(Salvador Pniker, La dificultad de ser espaol y otras contrariedades, Kairs, Barcelona 1979,
pgs. 236-238, 263, 322.)
1980 [Maximilian Forschner & Anton Hgli, Metapolitik, en Historisches Wrterbuch der
Philosophie, Darmstadt 1980, volumen 5, pgs. 1295-1298.]
1984 La Iglesia no cumpli una misin de suplencia poltica. Aquello fue una manifestacin
puntual que facilit el trnsito a la democracia formal. Pero slo una manifestacin puntual
de una funcin ms abarcadora que se ha calificado por algunos como metapoltica: ser
fermento, con su palabra y sobre todo con sus hechos, de una comunidad ms fraterna y, por
tanto, con unas estructuras en que la igualdad de los hijos ante el Padre comn tenga como
signo la igualdad de los hijos en la participacin de todos los bienes recibidos
mancomunadamente del Padre. (Caritas Espaola, La pobreza como desigualdad, en
Pobreza y marginacin, Documentacin Social, nmero extraordinario, Madrid 1984, pg.
460.)
1985 Pero lo que me ha llamado ms la atencin es el hecho de que nadie hasta ahora haya
emprendido una lectura poltica del libro [Juan sin Tierra], siendo as que estimo que se trata
de la obra ms poltica que he escrito o, si quieres, metapoltica: todos los problemas que
acabamos de discutir son ingredientes esenciales de su estructura. (Juan Goytisolo,
Contracorrientes, Montesinos, Barcelona 1985, pg. 288.)
1987 La segunda es un juego de verdad, y no como el pquer, el casino o doa Primitiva. Consiste
en que dos amigos se citen para el da siguiente, los dos con dinero en el bolsillo (cheque o
billetes). El que ha trado ms dinero se queda con el del otro. En este caso, la intencin
parablica la pongo yo: el juego que digo se puede asimilar a toda negociacin ora poltica,
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ora extrapoltica, ora metapoltica, ora parapoltica presente o futura. (Julio Cern, Dos
cosas tremendas, ABC, Madrid, 7 de septiembre de 1987, pg. 33.)
1988 Gran inters suscit la comunicacin de Quintn Racionero: Logos, lenguaje y smbolo, que
partiendo de La Retrica aristotlica contrastaba las epistemologas metafsicas con la
perspectiva hermenutica, sealando o anunciando el final de una concepcin de la ontologa
que en sus fundamentos ltimos no es sino metapoltica. (Teresa Oate, La frente de fuego
y de cristal, Dilogo Filosfico, n 10, Madrid 1988.)
El viaje de Hitler. Miguel Serrano no es exactamente un idelogo de los nacionalsocialistas
chilenos, sino una especie de augur, profeta de la causa aria, cuyos orgenes fue a buscar a la
India. Para l, el hitlerismo es una organizacin invisible. Se basa en una cosmologa, una
cosmogona, una poltica que no es poltica, sino metapoltica. Los que comparten esa
concepcin del mundo afirma se reconocen inmediatamente entre s. En los ltimos aos
en Chile los adeptos han aumentado. Le agrad comprobar que en el homenaje a Rudolf Hess
haba muchachos de doce y catorce aos. "Nacen nazis", afirma con satisfaccin. (Volodia
Teitelboim, En el pas prohibido. Sin el permiso de Pinochet, Plaza y Jans, Barcelona 1988.)
1989 Frente al punto de vista ontolgico, que necesita siempre la referencia a una realidad a una
physis detrs de los fenmenos, el punto de vista no ontolgico entiende que hay slo,
detrs, una plis: que toda metafsica es, en rigor, y nicamente, metapoltica y que, por
ello mismo, el regressus no conduce a una suerte de hontanar de la produccin verdadera,
sino a la re-memoracin, al re-nombramiento de las condiciones de la produccin misma.
(Quintn Racionero, Consideraciones sobre el materialismo (a propsito de los Ensayos
materialistas de G. Bueno), La filosofa de Gustavo Bueno [congreso enero 1989], Editorial
Complutense, Madrid 1992, pg. 68.)
En 1981, el seor Mitterrand se vali de su tener l la mayora absoluta para dar al traste
con siglos de centralismo (lo que no haba sabido hacer De Gaulle) en un pas
empedernidamente jacobino, y fue la gran descentralizacin, medida, por lo dems, apoltica
o extrapoltica o metapoltica. (Julio Cern, De los resultados reales de las pasadas
elecciones, ABC, Madrid, 6 de noviembre de 1989, pg. 3.)
Antes de entrar en el fondo de la cuestin, queda todava por hacer una ltima precisin
preliminar sobre la esencia de la palabra clave metapoltica. Lejos de limitarse a recalcar la
distincin por lo dems bien conocida por el discurso clsico entre poltico y estatal,
sta seala que, hoy como ayer (y en una medida considerablemente mayor), la legitimidad,
sea de las categoras, sea de la accin prctica, de lo poltico, depende de ncleos
simblicos y de constelaciones semnticas que constituyen sus prerrequisitos (metafsicos,
religiosos, ticos) y, en cierto sentido, el lugar de la preformacin normativa. En este sentido
la expresin metapoltica reclama directamente la categora de secularizacin (Schrey,
1981). (Giacomo Marramao, Palabra-clave Metapoltica: ms all de los esquemas binarios
accin/sistema y comunicacin/estrategia, en Razn, tica y Poltica, el conflicto de las
sociedades modernas, Anthropos, Barcelona 1989, pg. 64.)
1990 Sobre la actual situacin poltica, Manuel Chaves seal que "estamos asistiendo a un
proceso de encanallamiento de la vida poltica espaola, y creo que esto 'no es bueno'". El
candidato socialista aadi que "estamos en la metapoltica, es decir, hablamos mucho de los
polticos, pero no de la poltica". (Manuel Chaves: "Guerra no es imprescindible en el
Gobierno", ABC, Sevilla, 28 de abril de 1990, pg. 9.)
Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, Jos Bono, declar [...] en cuanto a los
enfrentamientos en el PSOE [...] "La metapoltica interesa a los polticos, a los periodistas y a
los cien mil de siempre pero, gracias a Dios, 39.900.000 espaoles pasan olmpicamente de
los chismes de los polticos", agreg. (Chaves afirma durante el homenaje a Besteiro que en
el PSOE "no se cortan cabezas", ABC, Sevilla, 30 de septiembre de 1990, pg. 46.)
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Alberto Buela del disenso a la metapoltica
Alberto Buela
En 1994 se publica en Buenos Aires el primer nmero de la revista Disenso, dirigida por Alberto Buela
(1947) y editada por la Fundacin Cultura et Labor. Aunque en ese primer nmero no aparece en ningn
momento el trmino metapoltica, la revista Disenso, que a partir de su nmero 14 (1997) adopta el
subttulo revista de Metapoltica, culminar su primera poca 1994-1999, nmeros 1 a 19/20 como el
principal instrumento de un grupo empeado en construir una metapoltica en lengua espaola,
organizador incluso de cuatro Encuentros Iberoamericanos de Metapoltica (Buenos Aires 1995, Via del
Mar 1996, Asuncin 1997 y el cuarto virtual en 1998).
1995 Una guerra espiritual. Para hablar de metapoltica internacionalmente es menester
establecer la distincin entre orden internacional, que se ocupa de codificar las relaciones
entre los estados y orden mundial, que son las pautas-econmicas, polticas y sociales que
poderes superiores a los estados, el poder sinrquico, imponen a los estados mismos. [...]
Queremos rescatar la funcin rectora y arquitectnica de la poltica a quien debe
subordinarse la economa, y no a la inversa como se postula hoy da. Y si prescindimos de
embanderamientos concretos, no es porque pretendamos ser un pensamiento neutro o
abstracto, sino porque deliberadamente elegimos un terreno que hoy no est trabajado en la
sociedad argentina e iberoamericana como lo es el mbito de reflexin que se ocupa de
desenmascarar, de desmitificar las categoras que condicionan la accin poltica. Esto es, la
metapoltica. (Disenso, editorial del n 2, 1995.)
Nos presentamos como una revista de metapoltica que se ocupa de desenmascarar, de
desmitificar las categoras que condicionan la accin poltica. Y comenzamos la
deconstruccin de aquellas categoras, tales como las de globalizacin y homogeneizacin de
las culturas en una sola, que el nuevo orden mundial presenta como evidentes y los
gobiernos dependientes ejecutan acrticamente. El desmantelamiento de Occidente, la
unidad hispanoamericana, el mundialismo, el origen de las constituciones modernas, la
tcnica, la arquitectura moderna como negacin de lo sagrado, los retos del pensamiento
crtico iberoamericano, la decadencia y esplendor del nacionalismo, la cultura meditica, la
realidad virtual y la economa, son algunos de los tpicos tratados en esta mproba tarea de
deconstruccin intelectual y de desmitificacin ideolgica que venimos llevando a cabo.
Estamos en camino. (Disenso, editorial del n 4, 1995.)
Hablar y or hablar en fecundo intercambio sobre el tema: Globalizacin y grandes
espacios, pero desde nuestro espacio, afrontando la empresa sin ceder respecto de la
reflexin ni de la ubicacin. A esto nos atrevimos el 25 y 26 de agosto [1995] prximos
pasados, con motivo del Primer Encuentro Iberoamericano de Metapoltica, efectuado en la
ciudad de la Santsima Trinidad del puerto de Santa Mara de los buenos aires, como la
bautizara Juan de Garay seguramente porque soplaban otros vientos. Con tal propsito se
organizaron tres paneles en jornadas consecutivas, correspondiendo la bienvenida de
apertura al coordinador de editorial Alfredo Mason y las palabras de cierre y despedida al
subdirector de la revista Nstor Gmez de Saravia, culminando el evento en un fraternal
almuerzo al que concurrieron participantes, expositores y organizadores. Los panelistas de
Buenos Aires fueron: Alberto Buela, Jorge Bolvar, Hctor Martinotti, Alberto Guerberof,
Francisco Bosch y Horacio Cagni. Los del interior del pas: Carlos Urban (San Nicols) y
Nstor Montezanti (Baha Blanca). Expusieron invitados del exterior: Jos I. Vzquez
Mrquez, Erwin Roberston (ambos de Chile) y Marco Tarchi (Italia). (Disenso, editorial del
n 5, 1995.)
26
1996 Con este octavo nmero cumplimos el segundo ao de vida. Y si al cumplir un ao
afirmamos que estbamos en camino, hoy decimos que seguimos en camino. Pues seguimos
siendo una revista de metapoltica, no-conformista, ni acadmica ni petardista. A caballo
entre la farragosa erudicin y el panfleto acrtico. [...] As, este ao entre el 30/8 y el 1/9
[1996] se organiza el Segundo Encuentro Iberoamericano de Metapoltica en Via del Mar,
organizado por mis amigos de la revista chilena Ciudad de los Csares. En lo que hace a los
temas desarrollados este segundo ao, continuamos nuestra tarea de desenmascaramiento y
desmitificacin de las categoras que condicional la accin poltica. (Disenso, editorial del n
8, 1996.)
1997 Nos han robado hasta el nombre. Este es el gran desafo, llegar a ser lo que somos, como
deca el viejo Pndaro. Y en esto empearemos hasta el ltimo nmero de Disenso. [se
refiere probablemente a la aparicin de la revista Metapoltica en Mxico.] El Grupo
Disenso invita al Tercer Encuentro Iberoamericano de Metapoltica, a realizarse del 27 al 29
de agosto [1997] prximo en Asuncin del Paraguay... (Disenso, n 12, 1997.)
En el nmero 13 (1997), con ocasin de su tercer aniversario, titula su editorial Sobre
meth politik. [...] Los das 27, 28 y 29 de agosto [1997] se realiz en Formosa, a orillas del
Paraguay, el Tercer Encuentro Iberoamericano de Metapoltica, el cual reiter el rotundo
xito de los anteriores, con sede en Buenos Aires y Via del Mar (Chile).
Disenso, a partir del nmero 14 (1997) adopta el subttulo Revista de Metapoltica. Del
editorial: Algunos nos critican porque no hacemos poltica, porque no nos comprometemos
polticamente. Y, para qu? Para hacer el papel de papanatas ante los polticos
profesionales, que nos superan en astucia y embuste. [...] No es mezclando al pordiosero con
el seor, ni al zafio con el sabio, segn pretende la ideologa del igualitarismo, que
lograremos una mejor calidad de vida sino rescatando los talentos especficos de cada uno
para una mayor perfeccin de s mismos y de la comunidad donde viven. Estas enseanzas
que son tan viejas como la filosofa han sido dejadas de lado desde hace ya bastante tiempo.
Es hora de recuperarlas. Desde nuestro lugar en el mundo, Iberoamrica, nosotros
respondemos con el estudio y rescate de los insobornables pensadores nacionales de
nuestra ecmene cultural, sus temticas y propuestas.
1998 El grupo Disenso invita al IV Encuentro Iberoamericano de Metapoltica, que se realizar en
la ciudad de Cuzco (Per) los das del 3, 4, y 5 de septiembre prximo [1998]. El tema
general ser: Iberoamrica frente al neoliberalismo. (Disenso, n 16, 1998.)
Esto de no ser un perro mudo me trae a colacin la realizacin del IV Encuentro
Iberoamericano de Metapoltica que bajo el tema Iberoamrica frente al neoliberalismo
realizamos en forma virtual a principios de septiembre en Cuzco (Per). Y decimos que fue
un Encuentro virtual porque el acta con las conclusiones del mismo ha sido publicada, pero
los panelistas no pudieron reunirse fsicamente debido a las presiones de servicios de
inteligencia internacionales y a la estulticia de algn tilingo local. (Disenso, editorial del n
17, 1998.)
1999 Con este nmero doble llegamos al fin de un ciclo en esta aventura intelectual que es
Disenso, pues alcanzamos el primero de los objetivos propuestos hace ya un lustro: difundir
los mejores pensadores de cada uno de los pases iberoamericanos que tienen en la unidad
de Nuestra Amrica su fuente de inspiracin y deseo de concrecin. [...] En este lustro
realizamos IV Encuentros Iberoamericanos de Metapoltica, tres reales y uno virtual, a travs
de los cuales dejamos instalada en Amrica la metapoltica como disciplina filosfico-
cientfica. (Disenso, editorial del n 19/20, 1999.)
Alberto Buela, Ensayos de Disenso: sobre metapoltica, Nueva Repblica, Molinos de Rey
1999, 189 pgs.
2000 Finalmente Buela fund y dirigi desde 1994 a 1999 la primera revista iberoamericana de
27
metapoltica, disciplina de la que es precursor en Amrica y sobre la que est trabajando
actualmente para imponerla dentro de la curricula universitaria. Fruto de este postrer
trabajo es su libro Ensayos de Disenso, Barcelona 1999, que lleva el enjundioso prlogo del
eminente filsofo peruano Alberto Wagner de Reyna, introductor de Heidegger en lengua
espaola. [...] Como dijramos ut supra, Buela es el principal creador y divulgador en
Nuestra Amrica de la metapoltica como ciencia interdisciplinaria que tiene por objeto el
estudio de las grandes categoras que condicionan la accin poltica de los partidos y
gobiernos. As las categoras de homogeneizacin cultural, globalizacin, grandes espacios,
identidad, alteridad, pensamiento nico et alia son estudiadas por esta nueva disciplina
desde una ptica nueva como lo es la del "pensamiento encarnado" en su genius loci clima,
suelo y paisaje. La primera tarea de la metapoltica es la desmitificacin de la cultura
dominante (ponerla entre parntesis) cuya consecuencia natural es quitarle sustento al
poder poltico. El segundo momento es el planteo de la posibilidad de un pensamiento
alternativo. Segn Buela existen cuatro concepciones de lo que es metapoltica: 1) La de
aquellos que pretenden hacer metapoltica sin poltica al estilo de nouvelle droite. 2) Los que
sostienen que debe hacerse metapoltica sin metafsica como el filsofo Manfred Riedel y
algunos analticos . 3) Los que afirman que metapoltica es la metafsica de la poltica y ac
se inscriben autores pertenecientes al denominado "tradicionalismo filosfico" simbolizado
por Evola, Guenon, Schuon, Panunzio etc. y 4) Es la posicin de Buela que sostiene: "Como su
nombre lo indica en griego th meth politik, la metapoltica es la disciplina que va ms all
de la poltica, que la trasciende, en el sentido que busca su ltima razn de ser, el
fundamento no-poltico de la poltica. Es una disciplina que tiene una doble faz, es filosfica
y poltica al mismo tiempo ... en cuanto disciplina bivalente no es un pensamiento
simplemente teortico sino que exige abrirse a la accin poltica como productora de sentido
dentro del marco de pertenencia o ecmene cultural donde se sita el metapoltico"
(Ensayos de Disenso, p. 98). (Nora Pavn, Alberto Buela, en ensayistas.org)
2002 Alberto Buela, Metapoltica y filosofa, Ediciones Teora, Buenos Aires 2002. Estudio
preliminar por Monseor Hctor Aguer.
2003 [entrevista con Alberto Buela] Usted es quizs el principal precursor de la metapoltica,
cmo definira a sta? R. No s si el principal pero al menos, junto a un grupo de amigos, el
primero que en la ecmene iberoamericana ha trabajado sobre esta disciplina mltiple.
Nuestro antecedente es la revista de metapoltica Disenso editada regularmente durante el
lustro 1994-1999. Esta tarea nuestra en tanto publicistas ha sido continuada en Mxico,
aunque desde una ptica poltica distinta, por la revista Metapoltica, que dirige el profesor
Csar Cansino. Dado que nuestro cursus honorum acadmico ha sido tan irregular, tanto por
los lugares donde hemos enseado desde la Patagonia, a los Andes y desde el Atlntico a la
Puna como por las materias desarrolladas desde la lgica a la tica pasando por la
antropologa filosfica, la gnoseologa, la metafsica, la poltica, la filosofa antigua y la
filosofa de la historia hemos, con los aos, sumado un cmulo de amigos de diferentes
disciplinas con los que atacamos los mismos fenmenos. Ello nos llev a la conviccin que
uno piensa en soledad, pero no solo. Piensa gracias a esa comunidad de compaeros que
permiten la retroalimentacin de lo pensado y as pude, con los aos, reemplazar la
envidiosa y estril comunidad acadmica por una comunidad de amigos, la mayora
provenientes del mundo sindical, que me han permitido desarrollar en plenitud mi propia
vocacin filosfica. El hombre piensa en soledad pero no piensa solo, sino a partir de un
entorno o situacin dada. Y mis compaeros en tanto comunidad de amigos me han
permitido a mi crear mi propia comunidad filosfica y es por ello que puedo pensar un poco
distinto a lo que se piensa y se dice bajo la forma espuria de pensamiento nico y
polticamente correcto. El hbito de estudiar los fenmenos interdisciplinariamente nos
28
llev a pensar en la metapoltica como disciplina indispensable para nuestro tiempo. Habida
cuenta, sobre todo, de la sucesin de imgenes truncas que nos ofrece la visin de una
postmodernidad desencantada. La metapoltica en una primera aproximacin significa la
tarea de desmitificacin de la cultura dominante cuya consecuencia natural es quitarle
sustento al poder poltico, para finalmente reemplazarlo, pero para esto ltimo, hay que
hacer poltica. Y en esto nos diferenciamos de la nouvelle droite que pretende hacer
metapoltica sin poltica. Como su nombre lo indica en griego th meth politik, la
metapoltica es la disciplina que va ms all de la poltica, que la trasciende, en el sentido
que busca su ltima razn de ser. Es una disciplina bifronte pues es filosfica y poltica a la
vez. Es filosfica en tanto que estudia en sus ltimas razones las megacategoras
homogenizacin, pensamiento nico, hombre light, globalizacin, monotesmo del mercado,
&c. que condicionan la accin poltica de los gobiernos de turno. Y es poltica, en cuanto
busca con su saber crear las condiciones para reemplazar a los gobernantes mantenedores
de la presente conduccin segn palabras de Max Scheler. (Noticia Digital, Espaa, 2
agosto 2003.)
Desde noviembre de 2010 se mantiene activo el dominio disenso.org (registrado por Alberto Eduardo
Buela Lamas, Buenos Aires), que publica Disenso, revista hispanoamericana de metapoltica, filosofa,
geopoltica e ideas disidentes:
DISENSO es la revista hispanoamericana de metapoltica, filosofa, geopoltica e ideas
disidentes que desde la Primavera de 1994, y con un receso de ms de 10 aos, concentra
sus esfuerzos en la develacin de las Grandes Categoras Polticas, en el rejuvenecimiento
del debate contemporneo y en la desmitificacin de aquellos dogmas propuestos por el
Pensamiento nico.
1995 Lo que pasaba es que ella se haba ido para otro lado. Haba entrado en un vuelo propio que
l supo inteligentemente respetar. Era una accin transpoltica o metapoltica, si usted me
acepta estas palabras exactas pero complicadas. (Abel Posse, La pasin segn Eva, Planeta,
Barcelona 1995.)
Csar Cansino y la revista Metapoltica (Mxico 1997-)
Csar Cansino
Metapoltica, revista trimestral de teora y ciencia de la poltica. Benemrita Universidad Autnoma de
Puebla (Mxico). Vol. 1, n 1 (marzo 1997. Dirigida por Csar Cansino. Fundada en 1996, Metapoltica
es una revista trimestral dedicada a la reflexin y debate sobre temas polticos, cientficos y culturales,
as como sus campos afines, tales como la literatura, la sociedad y la persona, desde una perspectiva
plural y crtica. De igual modo, dedica una seccin especial a las artes plsticas y visuales. Cabe agregar
que entre los autores que se han hecho presentes en nuestra publicacin se encuentran Jrgen
Habermas, Ulrich Beck, Amartya Sen, Fernando Savater, Vaclav Havel, Giovanni Sartori, Danilo Zolo,
Leonardo Morlino, Gianni Vattimo, Luis Villoro, Arnaldo Crdova, Roger Bartra, Jorge Bustamante,
Lorenzo Meyer, Jean Meyer, Fernando Escalante, Miguel Carbonell y Roderic Ai Camp, entre muchas
otras renombradas firmas de la cultura nacional e internacional. [ metapolitica.com.mx ] En 2011 ha
publicado su n 73.
Csar Cansino. Naci en 1963 en la Ciudad de Mxico. Sus primeros ensayos publicados datan de 1984.
Estudi filosofa y poltica en la UNAM. En 1987 se traslad a Europa, donde se Doctor en Ciencia
29
Poltica (Florencia) y en Filosofa Poltica (Madrid). En los primeros aos noventa realiz varias
estancias posdoctorales y de investigacin en Estados Unidos, Europa y Amrica Latina. A partir de 1993
ha alternado sus actividades acadmicas en varias universidades de Mxico, pero principalmente la
UNAM, la BUAP y el CIDE, y ha sido profesor invitado en varias universidades del extranjero, como la
Universidad de Florencia, el European University Institute, Cambridge University, Stanford University y
la Universidad de Campinas. Nunca ha dejado de colaborar, al menos desde 1985, como columnista de
opinin en diversos peridicos nacionales, como La Jornada, Reforma y El Universal. En 1996 fund en
Mxico dos importantes proyectos culturales: el Centro de Estudios de Poltica Comparada, A.C. y la
revista bimestral Metapoltica, heredera sta ltima de dos proyectos previos igualmente significativos y
dirigidos tambin por l: la revista trimestral Breviario Poltico y el semanario cultural La Brecha. Su
extensa obra, ms de 25 libros publicados en varios idiomas y pases, comprende: Liberalism in Modern
Times (en coautora con Ernest Gellner); Construir la democracia. Lmites y perspectivas de la transicin
en Mxico; La filosofa poltica de fin de siglo; La ciencia poltica de fin de siglo; Amrica Latina:
Renacimiento o decadencia?; Gobiernos y partidos en Amrica Latina; Political Leadership in Changing
Societies (en coautora con Jean Blondel); Historia de las ideas polticas. Fundamentos y dilemas; La
transicin mexicana, 1977-2000. Sus libros ms recientes son: El desafo democrtico. La transformacin
del Estado en el Mxico postautoritario (2005) y En el nombre del pueblo. Muerte y resurreccin del
populismo en Mxico (2006). Recibi el Premio Nacional de Periodismo en 1995 por artculo de fondo, y
el Jean Monnet Award en 1991, otorgado por la Comunidad Europea. Es Investigador Nacional nivel III y
Miembro de la Academia Mexicana de Ciencias. Actualmente es Profesor-investigador titular del
Instituto Tecnolgico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO). [ www.uacam.mx ]
Csar Cansino es Licenciado y Maestro en Ciencia Poltica por la Universidad Nacional Autnoma de
Mxico (UNAM) y Doctor en Ciencia Poltica por la Universidad de Florencia (Italia). Actualmente [2011]
es Catedrtico-Investigador de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Benemrita Universidad
Autnoma de Puebla (BUAP) y del Instituto Internacional de Estudios Polticos Avanzados (IIEPA) de la
Universidad Autnoma de Guerrero (UAG). Asimismo, es Director del Centro de Estudios de Poltica
Comparada (CEPCOM). [ http://textoshereticos.wordpress.com ]
2004 La idea de Metapoltica nace en Mxico, en 1997, de un grupo de amigos interesados en la
discusin de diversos temas relacionados con la teora poltica, la filosofa, la cultura y la
historia que, como indica su director, Csar Cansino, supieron reconocer un espacio que no
estaba suficientemente ocupado por otras publicaciones un proyecto editorial original e
independiente. Debido a que sus integrantes eran en su mayora politlogos, concibieron en
principio la revista como un foro de reflexin y debate sobre los principales temas y
corrientes de la teora y la ciencia poltica contemporneas. Sin embargo segn nos
confiesan, conforme la revista evolucion y madur con el paso del tiempo, nos dimos
cuenta de que, si queramos ser consecuentes con nuestra propia maduracin intelectual,
tenamos que tomar cierta distancia crtica de la ciencia poltica. (Mnica Cruz,
Metapoltica: un ejemplo a seguir, Foro interno, Madrid 2004, 4:155-156.)
2009 Para ello, Cansino sugiere la Metapoltica como un enfoque que va ms all de aserciones
empricas y normativas que son en s limitadas e inhiben el desarrollo de la ciencia poltica.
Segn Cansino, Metapoltica tiene diversos significados dependiendo de los autores que la
han desarrollado: a) como pospoltica (Marramao y Zolo), es un dispositivo de anlisis que
"debe dirigirse a datos oblicuos o reas que se presentan como remotas o excntricas
respecto de las nomenclaturas tradicionales" (p. 248); b) como metafsica (Reidel y Cortina),
busca limpiar a la propia teora poltica de todas aquellas elaboraciones demasiado
metafsicas, que tan distantes de la realidad emprica, terminan siendo intiles para
cualquier propsito de comprender mejor lo poltico; c) como macroteora (Skinner), es la
reconsideracin de las grandes y profundas preguntas de las Ciencias Sociales a lo que
Cansino acertadamente seala que en realidad no sucedi as; d) como debate pblico
30
(Arendt y Castoriadis), significa construir la poltica como espacio pblico, porque es
discurso y accin; y finalmente e) como metateora (Miller, Weinstein y Weinstein) buscar
resaltar el estudio de la teora poltica como una disciplina particular, considerando la gran
diversidad de tradiciones tericas y perspectivas de estudio. Cansino concluye que la ciencia
poltica, para revitalizarse, necesita ir ms all de la multidisciplinariedad (accin de aportar
a una disciplina los saberes de otras), y de la interdisciplinariedad (trasladar los mtodos de
una disciplina a otra), y adoptar la transdisciplinariedad, que es un nivel superior de
complementariedad con las otras disciplinas de las ciencias sociales, porque permite la
interaccin de discursos en trminos de lgicas cientficas y entre la diversidad de lenguajes
y escrituras. Por ello, la ciencia poltica no slo debe acercarse de nuevo a la filosofa poltica,
sino tambin aprovechar el potencial de la literatura para entender lo poltico. (Fernando
Barrientos del Monte, La ciencia poltica ms viva que nunca, Andamios. Revista de
Investigacin Social, agosto 2009, vol. 6, n 11, pgs. 358-359.)
Cansino trata de hacer una 'historia interna de la Ciencia poltica', con un conjunto de
supuestos que el llama Metapoltica (?), una perspectiva que no tienen ninguna respaldo
filosfico serio a sus espaldas (sobre todo si tomamos en cuenta que tiene como seis
definiciones diferentes). Cansino no dice nada nuevo, el argumento 'al que llega' es que la
Ciencia poltica se ha alejado de la Filosofa y la Teora y en la bsqueda de cientificidad se
ha perdido en el dato duro. Menciona el autor estudios de ste tipo? No Profundiza y
critica agudamente obras que tengan este defecto? No. Solo las menciona de repaso. E
incluso aqui merece decir que al autor le falta ponerse al da en materia bibliogrfica. [... ] Si
Cansino ha decretado la muerte de la ciencia poltica, entonces habra que llamarlo ex-
politlogo, pues no se puede ser predicador de una iglesia que ya no existe. (Fernando
Barrientos del Monte, Los desvarios de un ex-politlogo: Csar Cansino y La 'muerte' de la
Ciencia Poltica, http://criticacida.wordpress.com )
1998 Alain Badiou, Abrg de mtapolitique, Seuil, Pars 1998, 166 pgs. Por 'metapoltica',
entiendo los efectos que una filosofa puede obtener, en s misma y por s misma, del hecho
que las polticas reales son pensamientos. La metapoltica se opone a la filosofa poltica,
segn la cual, puesto que las polticas no son pensamientos, es al filsofo a quien le
corresponde pensar 'lo' poltico. (A. B., abril 1998).
Esto es: el mtodo no es una suerte de metaciencia o metapoltica, como si la ciencia o la
sociedad tuvieran que esperar a Hegel para constituirse como tales. (Flix Duque, Historia
de la filosofa moderna, Akal, Madrid 1998, pg. 600, nota.)
1999 En el exterior, el franquismo (esa etapa de la Historia de Espaa que acaba de desentraar,
de una vez para siempre, el gran Javier Esparza en su precioso artculo "Franco. Una
interpretacin metapoltica", publicado en Razn Espaola, mayo-junio de 1999). Un
franquismo sin alma, languideciente, desarrollista, tendiendo puentes ya al inevitable
futuro. (Luis Alberto de Cuenca, Tambores del 68, ABC, Madrid, 16 de junio de 1999, pg.
3.)
Jos Luis Ontiveros, Conquista del poder y metapoltica, Nueva Repblica, Molinos de Rey
1999, 63 pgs.
Planteada de este modo la cuestin, es evidente que los lugares reales desde donde
podemos oponer al imperio (diapoltico) realmente por ejemplo, el Imperio romano unas
Ideas-fuerza de Imperio metapoltico, dotadas de causalidad histrica suficiente como para
poder otorgarle etic beligerancia en el conjunto del proceso histrico, habrn de ser los
lugares en donde actan, fuera de los lmites que el Imperio mantiene con su medio. [...] En
una palabra, la Idea metapoltica del Imperio, o mejor, el cuarto concepto de Imperio, no lo
consideraremos conformado desde la Idea teolgica de Dios, sino (para el caso del Imperio
31
de Occidente) desde la Iglesia romana (en la medida en que representa a clases oprimidas de
las ciudades y a muchos esclavos y, muy especialmente, a unos Estados ante otros Estados);
ni estar conformado desde la Idea filosfica del "Gnero Humano", sino desde los brbaros o
desde los pueblos marginados del Imperio, y muy principalmente desde el pueblo judo
(Gustavo Bueno, Espaa frente a Europa, Alba. Barcelona 1999, pg. 201.)
2000 La metapoltica del II y del III Reich tienen un mismo mito e ideologa: Prometeo. En 1933
Heidegger retom el mito de Prometeo en su Discurso de Rectorado. [...] A nuestro entender
el Discurso tiene dos partes claramente diferenciadas: A) la Metapoltica de la esencia
cultural alemana y B) la Poltica propiamente dicha. (Julio Quesada, Metafsica y
metapoltica para el II y el III Reich: Prometeo como hermeneuta (Nietzsche y Heidegger),
en Poltica, historia y verdad en la obra de F. Nietzsche, Huerga & Fierro, Madrid 2000, pgs.
140, 142.)
2001 Se comprende tambin as la paradoja que, a medida en que las circunstancias histricas o
la real politik arroje a los militantes de partidos de izquierda a formas de vida muy prximas,
y aun de mayor calidad de vida que las de tantos y tantos militantes de la derecha, es decir, a
medida que se vacen ms y ms de contenido las diferencias positivas o empricas entre los
militantes de izquierda y los de derecha, se aducir con mayor nfasis la condicin de su
pertenencia a una izquierda unvoca, absoluta y casi meta-poltica (por no decir metafsica).
(Gustavo Bueno, En torno al concepto de izquierda poltica, El Basilisco, n 29, Oviedo
2001.)
Tampoco se trata de un planteamiento aislado, pues desde hace unos aos (pongamos que
desde mediados los aos ochenta) y bajo distintos rtulos (impoltica, metapoltica o
retirada de lo poltico) se aboga, desde la filosofa, por la liquidacin de la filosofa poltica.
(Antoni Mora, La poltica del filsofo o lo que va quedando de la filosofa poltica, VI
Encuentros de Filosofa en Gijn, julio 2001.)
Pero este exterior extrapoltico que conforma la Idea meta-poltica de Imperio, que es, sin
duda, la Idea que ms ha influido en la evolucin de las sociedades humanas histricas, es
precisamente el exterior religioso constituido por la Idea de Dios desarrollada en la
cercana del Dios terciario; un Dios cuya definicin plena atribuimos, por nuestra parte, a la
accin de los filsofos griegos, en su continuada lucha contra las religiones secundarias, es
decir, contra los dioses zoomrficos y antropomrficos de las religiones populares.
(Gustavo Bueno, La religin en la evolucin humana, Ciencia y Sociedad, Ediciones Nobel,
Oviedo 2001.)
Sin gran controversia pblica de por medio, a pesar del enorme debate en torno al gnesis
que entabla con el fundamentalismo religioso, el nuevo giro del destino manifiesto podr
deslizarse ya dentro de las pautas establecidas por el positivismo evolucionista adoptado y
divulgado entonces como el sustituto ms inclusivo y secular de la metapoltica democrtica
y esencialmente desordenada del primer expansionismo. La bipolaridad que traza
Jefferson entre el absolutismo europeo y "la residencia de la libertad" en Amrica ahonda las
diferencias al acudir a aquella apologa del Pueblo Blanco, servicial sta, a su vez, para
jerarquizar el "conjunto de intereses" que, en la Amrica del Norte y la Amrica del Sur,
apenas si rebasan la enemistad comn codificada por la metapoltica norteamericana. Ms
al tono de la teologa que al de la metapoltica moderna, la democracia posesiva, o como
quiera llamrsele, suple la legitimidad del derecho divino, la sangre o la poltica dinstica
para traducirlas en ventajas comparativas, econmicas y polticas. (Jos Luis Orozco, De
telogos, pragmticos y geopolticos. Aproximacin al globalismo norteamericano, Gedisa,
Barcelona 2001.)
Presentacin. En los ltimos lustros ha sido cada vez ms frecuente en los medios
acadmicos y, en general intelectuales, el uso del vocablo metapoltica, el que, como veremos,
est urgido de una explicitacin adecuada, as no sea slo por el hecho de que distintos
32
autores se sirven del mismo segn diversas y an heterogneas connotaciones, toda vez que
su utilizacin no se restringe nicamente a finalidades de ndole acadmica... La nueva
derecha. Una de las acepciones prevalecientes de metapoltica es la que asimila la palabra a
una actividad predominante o exclusivamente cultural, que en todo caso es antecedente y
precondicin explcita de la actividad poltica, y an incluso, faena abiertamente dirigida a la
toma del poder poltico, despus de realizar una labor de reemplazo del anterior paradigma
cultural, que dotaba de sustento al poder poltico dominante, como veremos. A finales de los
aos sesenta, el grupo cultural francs conocido como la nouvelle droite, encabezado por
Alain de Benoist, va a ser quien ponga en circulacin el vocablo en una acepcin virtualmente
coextensiva a la de teora del poder cultural del filsofo italiano Antonio Gramsci... Visin
desde la hermenutica y la teora crtica. Decamos lneas arriba que no era sta la nica
manera de conceptualizar la metapoltica; existen otras visiones [...]. Una segunda versin de
esta nocin que se va abriendo paso progresivamente la encontramos en la confluencia en
lo que respecta al tema que nos ocupa de las corrientes hermenuticas y analliticas del
pensamiento, que tienen en comn la pretensin de elaborar una filosofa sin metafsica, ...
Autonomismo y metapoltica del deseo. Sin hacer necesariamente uso de la expresin
metapoltica, encontramos una muy original y poco atendida visin metapoltica en el
pensador y luchador social italiano Antonio (Toni) Negri... Tradicionalismo. El escritor
argentino Alberto Buela, en el nmero correspondiente al ao 1997 de la revista Disenso nos
da noticia de la concepcin metapoltica presente en la corriente denominada
tradicionalismo, que en el presente contexto hace referencia a una lnea de pensamiento que
se ocupa del estudio de un supuesto saber primordial comn a todas las civilizaciones...
(Ricardo Miguel Flores, Esclarecimientos sobre la nocin de metapoltica, corrientes y
planteamientos, en Freddy Marinz Navarro, Ciencia poltica: nuevos contextos, nuevos
desafos, Editorial Limusa, Mxico 2001, pgs. 51-75.)
2002 En cuarto lugar y sin duda sera ste el momento ms problemtico del relato, por cierto
sin mezcla de narratividad postmoderna alguna, que resumo, habra un sentido del imperio
como concepto o como idea transpoltica o metapoltica. El peso del lado teolgico del
concepto metapoltico de imperio se confirmara en el libro bblico Daniel, en el paso en que
Daro impone a todos los pueblos y tribus y lenguas, en todo su imperio, el Dios vivo y
eterno por los siglos que haba librado a Daniel de los leones. La pregunta sera ahora si
esa idea metapoltica de imperio remite necesariamente a fuentes metafsicas. Bueno
recurre a la distincin esencial emic-etic (introducida por el lingista y misionero Kenneth
Pike, ampliamente divulgada por los estudios de antropologa social de Marvin Harris, y
dialcticamente reexpuesta por el propio Gustavo Bueno en Nosotros y ellos, Pentalfa, 1990)
y desde luego a la doctrina materialista de la subjetividad corprea operatoria para situar y
explicar la causalidad poltica efectiva de la idea metapoltica de imperio. La idea filosfica
del imperio, o mejor, el nivel filosfico de la Idea de Imperio, la quinta acepcin pues de la
serie, resulta de la confrontacin dialcticamente expuesta entre los conceptos diapolticos y
metapolticos. Cierto que, y a ello volvemos luego, por lo que se refiere sobre todo a las
acepciones cuatro y cinco (Imperio metapoltico, e Imperio en filosofa), la clave Roma es
aqu mayormente releda a su vez en clave catlica. El significado de ese uso
historiogrfico evidentemente retrospectivo (anacrnico, se dira) de la voz imperio
(con su irreductible connotacin romana) es las ms de las veces una combinacin inestable
de lo que en el esquema de Gustavo Bueno seran la acepcin tres (Imperio diapoltico,
organizacin interestatal sobre la base de un poder hegemnico) y la acepcin cuatro
(Imperio metapoltico, hegemona de un Estado sobre otros con suplemento de legitimidad
y de consenso junto a la fuerza del dominio). (Patricio Pealver Gmez, Contextos de
Imperio, Revista de Occidente, n 259, Madrid, diciembre 2002)
33
Nihil obstat, revista de ideas, cultura y metapoltica. N 1 (otoo-invierno 2002). Ediciones
Nueva Repblica, Molinos de Rey (Barcelona).
2007 Este artculo presenta una triple naturaleza: de opinin, crtica literaria y poltico-
humanstica. Su esencia "trinitaria" toma prestado su ttulo de un libro recientemente
publicado por el filsofo Raimundo Panikkar (Pennsula, 1999), un libro que todo poltico
profesional, cualquiera que sea su sensibilidad, debera tener muy presente. Extraan
muchas de las opiniones y discurso de esta privilegiada mente y espritu, mundialmente
reconocido en el mbito de la gran cultura, tanto occidental como oriental. Introduce el
concepto de lo "metapoltico" como solucin de dicotomas. Tan slo a partir de lo
metapoltico la realidad externa, dice Panikkar, incluso todo fenmeno de violencia
sociopoltica, puede ser comprendida, pero nunca desde el nivel de conciencia del Sistema
actual ni tampoco desde la misma violencia. (Salvador Harguindey, El espritu de la
poltica, espiritualidadypolitica.blogspot.com 7 abril 2007.)
Diego Luis Sanromn, La nueva derecha: cuarenta aos de agitacin metapoltica, Centro de
Investigaciones Sociolgicas, Madrid 2008, ix+388 pgs.
2010 [Bruno Bosteels, Metapolitics, en Mark Bevir (dir.), Encyclopedia of Political Theory, Sage,
Thousand Oaks CA 2010, vol. 1, pgs. 878-879: Metapolitics designates, either positively or
negatively, a particular relation between politics and the thinking of politics, that is, between
historical instances of politics, governance, and policy making, on one hand, and categories of
theory, intellectual history, or philosophy, on the other. It is the name for an encounter, or
missed encounter as the case may be, between action and thought, even while its most recent
usage is meant precisely to cancel out all traditional oppositions between practice and
theory, between history and conceptuality, or between the real and the speculative. In the
ideological realm, the invocation of metapolitics over the past 200 years has covered the full
spectrum of possibilities, from the liberal Enlightenment to antirevolutionary Catholicism
and from a neo-pagan New Right to the proposal for a reivention of communism. This
vacillation is partly due to the fact that the term is used both as a programmatte self-
description and as the name for a position pejoratively ascribed to others. Among German
liberal thinkers such as Gottlieb Hufeland, August Ludwig von Schlzer, and Carl von Rotteck,
credited with having coined the term, metapolitics refers, first, to the theoretical study of the
principles of right derived from the state of nature and, then, to the theory of the state as
such [...]
Bruno Bosteels, Archipolitics, parapolitics, metapolitics, en Jean-Philippe Deranty (ed.),
Jacques Rancire, key concepts, Acumen, Durham 2010, pgs. 80-92.]
2012 Alberto Buela presenta su libro Disyuntivas de nuestro tiempo, ensayos de metapoltica en
Oviedo (2 de octubre de 2012), en el Saln de Actos de la Fundacin Gustavo Bueno: se hace
mencin a esta pgina y el profesor Buela corrobora, con importantes y novedosos
testimonios, el proceso de expansin de la metapoltica en los ltimos aos, y asegura que
sus principales representantes desconocan, antes de conocer esta pgina, la solera que tiene
tal rtulo.
Diramos, segn esto: la metapoltica antecede a la poltica en el plano ontolgico (porque la poltica
estricta no puede moverse al margen de las causas metapolticas que impulsan y alientan a la sociedad
poltica); pero la poltica antecede a la metapoltica en el plano gnoseolgico, porque la metapoltica slo
puede definirse desde una concepcin precisa de la poltica. La paradoja encerrada en el rtulo
metapoltica podra, en definitiva, formularse de este modo: el rtulo metapoltica, que pretende
indicar el mbito de una nueva disciplina (la ciencia que se busca, no necesariamente filosfica), slo
alcanza su sentido cuando ya se ha definido la poltica. No puede esperarse, segn esto, que la
Metapoltica garantice una profundizacin, incluso una redefinicin de la Poltica, ms all de la poltica
de superficie, como tampoco hay que esperar que la Metafsica csmica garantice una profundizacin
(incluso una redefinicin) de la Fsica, tal que la propia Fsica no pudiera establecer. El campo de la
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poltica, como el campo de la fsica, si es un campo definido (un campo categorial cerrado), ha de ser
definido desde l mismo, lo que no excluye que su alcance se precise desde otros campos externos o
colindantes. Lo que s nos parece seguro es esto: que el proyecto metapoltico, en s mismo, es confuso y
oscuro, por no decir catico, y, por tanto, vaco. Porque tal proyecto tanto nos conduce a una
fundamentacin teocrtica de la poltica, como a una fundamentacin etolgica, o econmica, o
antropolgica. Pero, sobre todo, tambin nos conduce a la negacin absoluta de la poltica en el estado
final de la Humanidad (un estado que tal como lo dibujan Bakunin, o Marx o Zerzan, habra que
considerar metapoltico). (Gustavo Bueno, En torno al rtulo Metapoltica, El Catoblepas, octubre
2012, n 128, pg. 2: Con ocasin de la intervencin de Alberto Buela en la presentacin de su libro
sobre metapoltica, celebrada en Oviedo el martes 2 de octubre de 2012.)