La Frida Epistolar

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& (AND) LA FRIDA EPISTOLAR

El surrealismo es la mgica sorpresa de encontrar un len dentro de un


armario, donde se est seguro de encontrar camisas.

Frida Kahlo, en la cara posterior del dibujo Fantasa I, (1944)


Otras dos Fridas.

Como Antonio Alatorre, quien prolog Escrituras de Frida Kahlo, yo tampoco
vi la pelcula esa de Salma Hayek e, igual que el finado escritor y profesor del
Colegio de Mxico, creo que a veces hay demasiados intereses sobre la figura
de Frida. Por otro lado, parece que ambos admiramos algunas obras de Kahlo,
sobre todo Las dos Fridas. Aqu quiero aclarar que yo vi dicha obra maestra
en la coleccin del Museo de Arte Moderno, y que no tengo idea de dnde la
vio Don Antonio.
El libro en cuestin es parte de la fructfera investigacin fridista de
Raquel Tibol experta en el tema, quien presenta una seleccin de cartas
ntimas (entre otros escritos como recados o dedicatorias) de la famosa pintora
poblana. Aunque Tibol introduce a Frida como una verdadera escritora y
aquello se puede llevar chorromil caracteres de discusin en el prlogo
encontrarn algunos. Lo cierto es que los tres; el prologuista, la investigadora y
yo; encontramos textos muy divertidos y originales entre estas pginas.
No queda duda de que Frida Kahlo fue una artista plstica insuperable,
soadora y harto creativa; tanto que se le puede leer tal cual a travs de sus
lneas. De actitud suelta y hasta pcara, Frida escribi (desde tiernos quince
aos) cartas a amigos, familiares o amantes. Dominaba el ingls y saba algo
de alemn, italiano y francs, as que se daba el lujo de combinar idiomas para
darle fluidez a sus textos: () he sido siempre sometimes brutilla.
Si con todas esas palabras no se poda expresar a gusto, inventaba
alguna. De su vocabulario personal resalta el trmino buten, que ella usaba
para decir mucho: () soy buten de mndriga, por ejemplo. Queda claro que
tambin aprovechaba el folclor de las palabras de uso cotidiano.
Otros detalles que dejan entrever su personalidad astuta y solazada son
sus rbricas: algunas veces firm como Frieda, otras como Frieducha, unas
como Frieduchn y hasta hubo las que sell con un simple tringulo (hpster!).
Esa actitud festiva resalta, sobre todo, porque se mantena en sus das
ms difciles: durante el duro accidente de camin que la postr, los
tratamientos mdicos tortuosos, el noviazgo a distancia aparentemente no
correspondido con Alejandro Gmez Arias cuando ella estaba en medio de su
rehabilitacin, las peleas con Diego Rivera (Genio Panzudo en alguna
ocasin), las diferencias con su familia, las enfermedades del padre o del
esposo, un doloroso aborto espontneo, algn pasaje con drogas y un largo
viaje a los Estados Unidos que nunca acab de disfrutar. Curioso, eso ltimo,
porque a pesar de ser claramente anglfila escribi textos completos en
ingls y alemn opinaba que es como todo en los Estados Unidos: feo y
estpido.
Adems de los pasajes significativos en su vida, tambin se encuentran
en estas hojas conversaciones casuales con sus amistades; gente que defini
el Mxico cultural del siglo XX. Para nombrar algunos: Miguel Covarrubias,
Oscar Chvez, Antonio Ruiz El Corcito o la diva Dolores del Ro, a quien en
ms de una ocasin le pidi prestados unos del guila. Con ellos se
expresaba libre, amistosa; haca bromas y aprovechaba figuras literarias o
retricas: poemas, corridos, acrnimos, caligramas, entre ms. Asimismo, dej
recomendaciones literarias; hizo observaciones polticas y econmicas o
formul lo que ella consideraba qu era su arte y cmo lleg a l.
En concreto, este libro (Plaza Jans, 2005) es una edicin que cualquier
entusiasta de Magdalena del Carmen Frida Kahlo Caldern habra de disfrutar
y que el resto, como yo, no debera de dudar en hojear o pedir de prestado.
Hasta ganas le dan a uno de retomar la escritura epistolar, porque quin sabe
si en medio siglo salga una cosa como sta sobre los grandes personajes
nacidos en los das de Facebook.

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