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MANUAL DEL MINISTRO CRISTIANO

Este manual ha sido adaptado a las necesidades delos ministros cristianos.

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INDICE PREFACIO 1. SOLEMNIZACION DEL MATRIMONIO CEREMONIA (1) CEREMONIA (II) CEREMONIA III ORACIONES SUGERIDAS 2. EL BAUTISMO Candidatos al bautismo 3. RECEPCIN DE MIEMBROS NUEVOS CEREMONIA 4. S A NTA CENA CEREMONIA (1) CEREMONIA (II) 5. DEDICACIN DE NIOS CEREMONIA (1) CEREMONIA II 6. MINISTERIO A LOS ENFERMOS Escrituras sobre sanidad divina La Visita La Palabra de Dios para sanidad 7. SERVICIO FNEBRE sermones Seleccin de Escritura para servicios funerales Para un nio

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PREFACIO Ante la necesidad de una pauta que facilite el fcil y libre ejercicio del ministerio cristiano en una forma ordenada y reverente, se ha elaborado este Manual para pastores, ministros y obreros cristianos. Se ha tenido en cuenta tambin a aquellos que desempean el cargo pastoral y que no han gozado del privilegio de una preparacin especial al efecto. Es bueno aclarar que este libro no pretende establecer normas fijas o rituales inflexibles para las iglesias evanglicas. Las sugerencias y detalles de cada ceremonia pueden modificarse segn lo requieran las circunstancias, guardando, desde luego, los principios fundamentales evanglicos. Por supuesto, en cada pas varan algunas cosas, por causa de la cultura. Se recomienda esta obra no solamente al que mi nistra la Palabra de Dios, sino a todo miembro o funcionario de la Iglesia que se interesa profundamente en el progreso del Reino de Dios. Se le agradece especialmente a los hermanos Demetrio Bazn y al Lic. Vctor David Ching Meletz, por su valiosa colaboracin en la redacin de este libro, y asimismo a otros numerosos esforzados hermanos, cuya lista sera larga de enumerar.

Magister Joel Ching Meletz [email protected]

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1. SOLEMNIZACION DEL MATRIMONIO El matrimonio es una institucin civil as como religiosa, y por lo tanto sujeto a reglamentos legales. El ministro deber familiarizarse con las leyes del Estado o nacin donde vaya a ejecutarse esta ceremonia, para estar seguro de cumplir con los requisitos de la ley. Adems de llevar un registro en el cual har constar los Matrimonios' con todos los datos necesarios, la firma de los contrayentes, los testigos y el ministro. La ceremonia, puede verificarse en el templo en una casa particular, pero siempre ante testigos. NOTA: En muchos pases de preciso que los contrayentes presenten el certificado de las autoridades civiles, comprobando que ya se ha verificado el matrimonio civil en su forma legal. Datos Generales de la Ceremonia Conviene que el ministro y los Contrayentes ensayen de antemano el orden del programa de la ceremonia para evitar confusiones; el ministro debe ensear y hacer practicar la manera de entrar y salir en una ceremonia nupcial. CEREMONIA (1) Introduccin: Los contrayentes estarn juntos, ante el ministro; el hombre a la derecha de la mujer. Dirigindose a la congregacin, el ministro dir: "Estamos aqu reunidos en la presencia de Dios y de estos testigos para solemnizar ante el Todopoderoso, y en el nombre de nuestra santa - religin, el contrato de matrimonio que este hombre y esta mujer ya han celebrado ante las autoridades civiles. El matrimonio es un estado honroso instituido por Dios, y santificado por la presencia de nuestro Seor en las bodas de Cana en Galilea. En las Sagradas Escrituras se lee que es honroso en todo el matrimonio, y se le consagra como smbolo de la unin mstica entre Cristo y su Iglesia. El matrimonio debe contraerse con reverencia y en el temor de Dios, considerando los fines para que fue ordenado, es decir, para compaerismo, apoyo y consuelo que marido y esposa deben tributarse recprocamente, mientras perdure la vida. El matrimonio fue ordenado para continuar la sagrada institucin de la familia, y para que los hijos que son herencia del Seor, sean criados en piedad y rectitud. El matrimonio contribuye tambin al bienestar de la sociedad y a transmitir por el buen orden de familias la pureza, la santidad y la verdad, de generacin en generacin. Esta clase de unin fue instituida por Dios con la primera pareja humana, Adn

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y Eva, all en el huerto del Edn; su fin fue proporcionar felicidad a la humanidad. Desde entonces los seres humanos la han practicado y para darle consistencia la han Legalizado. Puede decirse que el matrimonio es el contrato legal de una unin espiritual. La Palabra de Dios expresa que `honroso sea en todos el matrimonio' (Hebreos 13:4). Estas dos personas han decidido abrazar este estado tan honroso Oracin "Nuestro Padre y nuestro Dios, ningn gozo nuestro es perfecto, si t no lo haces completo. Falta algo sublime en nuestras horas ms felices, si tu bendicin no nos acompaa. Te salpicamos que si el Seor Jess estuvo presente en las bodas de Cana de Galilea, as tambin disfrutaremos nosotros en estos momentos del gozo de tu divina presencia. "Pedimos que la bendicin de tu presencia sea una realidad en la vida de este hombre y de esta mujer, que van a hacer juramento solemne ante ti y estos testigos, de modo que el recuerdo de esta hora santa les fortalezca y les consuele en medio de todas las pruebas y todos los cambios del futuro. Llena de felicidad estos momentos, y manifiesta tu presencia verdadera en estas bodas. Amn". Preliminares Luego el ministro se dirigir a los contrayentes con voz clara y audible "Habis venido ante m, ministro de Cristo, para ser unidos, delante de Dios, con los santos lazos del matrimonio. Esto representa un paso serio y solemne donde os tomis el uno para el otro para afrontar las circunstancias que se os presenten, sea en riqueza o en pobreza, para gozo o tristeza, para salud o enfermedad, en todo lo que la vida da y en todo lo que quita, y seris el uno al otro fiel, verdadero marido y verdadera esposa hasta que la muerte os separe." "Od, pues, la Palabra de Dios, escrita para vuestra instruccin, y para que tengis luz en vuestro camino" (el ministro seleccionar las porciones que desea leer). Lectura de Escrituras El ministro leer, Efesios 5:25-33: "Maridos, amad a vuestras mujeres, as como Cristo am a la iglesia, y se entreg a s mismo por ella, para santificarla, habindola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, a fin de presentrsela a s mismo, una iglesia
La esposa no es la reina del hogar sino la corona del esposo Proverbios 12:4

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gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha. As tambin los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a s mismo se am a. Porque nadie aborreci jams a su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como tambin Cristo a la iglesia, porque somos miembros e su cuerpo, de su carne y de sus huesos. Por esto el hombre a su padre y a su madre, y se unir a su mujer, y los dos sern una sola carne. Grande es este misterio; mas yo digo esto respecto de Cristo y de la iglesia. Por lo dems, cada uno de vosotros ame tambin---a su mujer como a s mismo; y la mujer respete a su marida." "Vosotros, maridos- *igualmente, vivid con ellas sabiamente, dando honor a la mujer como a vaso ms frgil como a coherederas de la gracia de la vida, para que vuestras oraciones no tengan estorbo." Otras Escrituras "As mismo od lo que dicen las Sagradas Escrituras." 'Las casadas estn sujetas a sus propios maridos como al Seor; porque el marido es cabeza de la mujer, as como Cristo es cabeza de la iglesia, la cual es su cuerpo, y l es su Salvador. As que, como la iglesia est sujeta a Cristo, as tambin las casadas lo estn a sus maridos en todo."

1 Pedro 3:'1. Asimismo vosotras, mujeres, Estad sujetas a vuestros maridos; para que tambin los que no creen a la palabra, sean ganados sin palabra por la conducta de sus esposas. "Amn. Que Dios bendiga la lectura de su Santa Palabra."
Luego el ministro dir, dirigindose al hombre: (Pronunciando el nombre completo) Quieres prometer delante de Dios y estos testi gos,, as como lo has prometido ante las autoridades civiles, tomar a esta mujer (nombre), por tu legtima esposa para vivir con ella conforme a lo ordenado por Dios en el santo estado del matrimonio? Prometes amarla, honrarla, consolarla, y conservarla en tiempo de salud y enfermedad, en prosperidad y sus sufrimientos, y conservarte exclusivamente mente para ella, mientras los dos vivieren? El hombre responder con voz alta (Si lo Prometo) A la mujer Pronunciando el nombre completo Quieres prometer delante de Dios y estos testigos, as como lo has prometido ante las autoridades civiles, tomar a este hombre (nombre) por tu legtimo esposo, para vivir con l conforme a lo ordenado por Dios, en el santo estado del matrimonio? Prometes amarlo, honrarlo, respetarlo, ayudarlo, y cuidarlo en tiempo de enfermedad y de salud, en prosperidad y en sufrimiento, conservarte exclusivamente para el mientras los dos vivieren?

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La mujer responder con voz clara Si lo prometo. Entrega de anillos

En caso de que la ceremonia incluya la entrega de un anillo o anillos, se proceder de la forma siguiente: El ministro dir al novio:
"Qu prenda le entregas como testimonio de tus promesas?" El novio pondr el anillo sobre el libro que tiene el ministro en la mano, y el ministro tomando el anillo, har que el novio pronuncie las siguientes palabras: Con este anillo, te desposo, uniendo contigo mi corazn y mi vida, y te hago partcipe de todos mis bienes". Luego el ministro dir, entregando el anillo al novio para que lo coloque sobre el dedo anular de la novia: "Que este anillo sea el smbolo puro e inmutable de vuestro amor". (Se har de igual manera cuando la novia entregue el anillo al novio) . Luego se arrodillan los novios, si as se creyese convenientemente, y el ministro dir: "En seal de vuestra fidelidad a los votos que os habis hecho, daos mutuamente la mano derecha". El ministro colocar entonces la mano derecha sobre las manos unidas de los novios, y elevar una oracin, en la cual incluir las siguientes peticiones: "Dios eterno, creador y consolador del gnero humano, dador de toda gracia espiritual, autor de la vida eterna: bendice a este hombre y a esta mujer, a quienes bendecimos en tu nombre, a fin de que cumplan y se guarden siempre en paz y amor, viviendo conforme a tus santos mandamientos, y ordenando su hogar y vida en armona con tu Santa Palabra, mediante nuestro Seor "Te rogamos, oh Dios Todopoderoso, que seas Salvador gua de sus almas inmortales, para que alcancen mediante la redencin de nuestro Seor, la eterna gloria, Amn." Al terminar la oracin el ministro se dirigir a los concurrentes diciendo: "A los

que Dios ha unido, ningn hombre los separe."

"Por cuanto (nombre de ambos) han consentido ingresar en el estado de matrimonio, y en efecto han celebrado el contrato matrimonial, primero delante de las autoridades civiles, y despus aqu delante de Dios y estos testigos, habindose dado y empeado, su fe y palabra el uno al otro, lo cual han

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manifestado por la unin de las manos, yo los; declaro marido y mujer en el nombre del Padre, del Hijo y del Espritu Santo. Amn." ` Al terminar el acto el ministro colocar su mano derecha sobre las manos de los novios y pronunciar la siguiente bendicin. "El Dios Todopoderoso, Padre, Hijo y Espritu Santo os bendiga, conserve y guarde. El Seor por su misericordia vuelva a vosotros los ojos de su favor y os colme de tal manera de su gracia y bendiciones espirituales que vivis en este mundo en su santo temor y gocis en el otro de la vida celestial Amen. CEREMONIA (II) El ministro dir a los invitados: Cuando Jess fue llamado con sus discpulos a una boda, gustosamente accedi ir y all comenz su ministerio y sus obras de poder. Es por eso que tambin hoy nos reunimos aqu para ser testigos ante Dios, de las promesas que este hombre y esta mujer van a ofrecerse mutuamente y encaminarlos en su nuevo estado matrimonial, por medio de nuestras oraciones y saludos cristianos A la pareja: Este rito matrimonial al cual ustedes concurren para ser unidos con lazaos religiosos es el rito primero y mas antiguo del mundo. Fue celebrado al comienzo del mundo ante el mismo creador, como nico testigo, invitado y ministro, y lo que fue antes es tambin ahora; el matrimonio nunca ha cesado, pues sobrevivi al paraso, y ha sido mantenido por el propio Dios, para aliviar a las personas sus penas y consolar las tristezas de nuestro corazn quebrantado. As ser para cada uno de ustedes si en sus corazones abriga el deseo de embellecerlo y endulzarlo por medio del tierno cuidado aun en las cosas mas pequeas por la paciencia y por el sacrificio en beneficio del otro. Todo esto lo imponemos ante ustedes dos, para memoria en el nombre de Dios, y les recomendamos que la oracin constante les permita cumplir fielmente con esas promesas, nanse ahora de la mano derecha. Dirigindose al hombre: "Toma usted esta mujer cuya mano sostiene, como su legtima esposa? Promete usted solemnemente delante de Dios, y de estos testigos, cuidarla, amarla y defenderla, y ser un esposo fiel y verdadero mientras Dios le conceda vida?" Responde el novio:"S, seor."

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Dirigindose a la mujer: "Toma usted este hombre, cuya mano sostiene, como su legtimo esposo; promete usted solemnemente delante de Dios y de estos testigos unirse a l por toda la vida, bajo cualquier circunstancia, y ser una esposa fiel y amorosa hasta que la muerte los separe?" Responde la novia: "S, seor." El anillo (opcional) "Puesto que ahora como esposo es usted la cabeza de la esposa, a quien le da su nombre y la toma para cuidarla y proveerle, procedo a darle a usted este anillo (darle el anillo al hombre) para que lo coloque en el dedo de esta mujer, como seal de que usted le recibe en verdad." El novio coloca el anillo en el dedo de la novia As pues, usted cuidar a su esposa con la fuerza de su vigor y con su amor protector. Usara este anillo como un vinculo de reverencia y fe profunda completando ambos el circulo perfecto del deber que hace de ustedes una sola persona El pronunciamiento En el nombre de Jesucristo y delante de estos testigos, yo los declaro marido y mujer. Lo que Dios ha unido, que ningn hombre lo separe. Se hace una oracin y se finaliza con la bendicin. La Bendicin "Y ahora, que Aquel que camin en ntima comunin con la primera pareja humana en los das de la inocencia; aquel Varn de dolores que trajo gran regocijo en la fiesta de bodas con su ministerio milagroso; aquel que morando en vuestros corazones puede hacer vuestra casa una morada de amor y paz, el Padre, el Hijo y el Espritu Santo- sean con vosotros para siempre. Amn." CEREMONIA III El ministro est en entera libertad para usar la forma que ms le agrade al solemnizar los lazos matrimoniales como ejercicios que preceden o anteceden a la ceremonia matrimonial. Unos principian leyendo las Sagradas Escrituras, parte seleccionadas; otros principian orando, o haciendo reminiscencias oportunas de ejemplos bblicos. Otros omiten todo esto al principio y lo reservan para el final. Unos oran al principio y al fin. Lo mejor es que cada ministro determine desde el principio la forma de ceremonia que va a usar, segn el caso lo pide. El ministro debe estar seguro que los contrayentes han cumplido con los requisitos de la ley civil.

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Los contrayentes puestos de pie ante el ministro, el hombre a la derecha de la mujer, y los respectivos testigos. El ministro dir: La divina revelacin declara que el matrimonio es un estado honroso; instituido por Dios cuando el hombre an era inocente, antes que pecara contra su Hacedor y fuera echado del Paraso. Fue una concesin sabia y benfica, para contener inclinaciones impuras, guardar el orden social y transmitir, por el buen orden de familias, la pureza, la santidad y la verdad, de generacin en generacin. Cristo aprob el matrimonio cuando hizo su primer milagro y santific con su presencia las bodas de Cana de Galilea; y San Pablo recomienda que es digno de honor entre todos; por tanto debe ser contrado con reverencia y en el temor de Dios. En seguida el ministro aadir:" tmense de la mano derecha. Dirigindose al hombre: Toma usted a esta mujer, cuya mano sostiene, como su legtima esposa; promete usted solemnemente delante de Dios y de estos testigos, que usted la amar, honrar, consolar; que se conservar solamente para ella, cumpliendo los deberes de un esposo para con su esposa, mientras Dios le conceda vida?" El hombre responder: "S, lo prometo". El ministro dirigindose a la mujer: "Toma usted a este hombre cuya mano sostiene, como su legtimo esposo; promete usted solemnemente delante de Dios y de estos testigos, que lo amar, honrar, consolar; que se consagrar solamente para l, cumpliendo con todos los deberes y obligaciones que una esposa tiene para con su esposo, mientras Dios les conceda vida?" La mujer responder: "S, lo prometo" Si va a usar anillo, el ministro lo tomar de la mano del hombre. Dirigindose a l: "Le ha dado usted este anillo a ella como prenda y prueba de que la toma como su legtima esposa, y que es seal de amor puro y sincero de que usted la amar, y cumplir fielmente los sagrados votos con que ahora se ha comprometido con ella, tomndola como su esposa?" El hombre responder: "S, seor." Dirigindose a ella:

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"Acepta usted este anillo de este hombre, a quien ha tomado como su legtimo esposo, como prueba y prenda de amor verdadero, y de que cumplir fielmente los votos sagrados que le ha hecho?" La mujer responder: "S, seor." El ministro devolver el anillo al hombre indicndole que se lo ponga a la mujer. (En seguida dir:) les recuerdo de este sagrado servicio, y de los

sacrosantos lazos del matrimonio, por cuales os habis unido en santo matrimonio, hasta que la muerte os separe ". Sea ste el sello de vuestra fe mutua y de vuestro mutuo afecto y felicidad,

Por cuanto este hombre y esta mujer solemnemente, y delante de Dios y de estos testigos se han dado y empeado su fe y palabra el uno y el otro, y lo han manifestado por la unin de las manos, yo los declaro marido y mujer en el nombre del Padre, del Hijo y del Espritu Santo. Amn. A los que Dios ha unido, ningn hombre lo separe.

Porciones Bblicas Se pueden leer antes o despus de la ceremonia Gnesis 2: 18-24. Proverbios 7:6-27; 12:4; 31:10-12, 14, 20, 23; 31:10-31 Mateo 19:3-12; 22:30 Romanos 7:2, 3 Tito 2:3-5 Hebreos 13:4 1 Pedro 3:1-7 Coloreases 3:18, 19 Eclesiasts 9:9 ORACIONES SUGERIDAS

El Padrenuestro puede recitarse al principio de la ceremonia. Para el fin de la ceremonia, se ofrece lo siguiente:
"Dios eterno, Creador y Gobernador del gnero humano, Dador de toda gracia espiritual, Autor de la vida eterna: Bendice a este hombre y a esta mujer, aydales da por da a formar su hogar del cual T seas la cabeza y el Husped invisible; aydales a fin de que cumplan, y guarden siempre los votos y promesas que se han hecho este memorable da. "Dios el padre, Dios el hijo, y Dios el Espritu Santo os bendiga, conserve y os guarde;

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el Seor en su misericordia vuelva a vosotros su rostro para bendecirs rica y abundantemente, y os llene de su santo amor, y Votis en el mundo venidero de la vida perdurable. Amn." 2. EL BAUTISMO Su significado El cristianismo neo testamentario no es una religin de ritos; el corazn mismo de ella expresa el contacto directo del hombre con su Dios, por medio del Espritu Santo. Por lo tanto no establece un sistema rgido de culto, sino que le permite a la iglesia adaptar el mtodo que mejor expresa su vida. Existen, sin embargo, dos ceremonias que son esenciales puesto que fueron divinamente ordenadas, es decir, el bautismo en agua y la Santa Cena. En virtud de su carcter sagrado se las describe a veces como sacramento, es decir, cosas sagradas; tambin se las llama ordenanzas, porque fueron ceremonias ordenadas por el Seor Jesucristo. La palabra bautizar empleada en la frmula, significa literalmente sumergir. Esta interpretacin est confirmada por estudiosos del idioma griego e historiadores eclesisticos. El bautismo por inmersin est en consonancia con el significado simblico del bautismo, es decir, muerte, sepultura y resurreccin. Romanos 6:1-4. Candidatos al bautismo Slo las personas que han reconocido su pecado, que se han arrepentido y han aceptado a Cristo Jess como su Salvador personal, son idneas para el bautismo. El pastor debe instruir de antemano a los candidatos para que la ceremonia resulte solemne. El pastor recibir a los nuevos convertidos en clases especiales para los catecmenos. Estudiarn -Manual de Doctrinas Cristianas" y cuando el pastor est satisfecho de la sinceridad de los candidatos, los instruir sobre la necesidad del bautismo en agua. Conviene interrogar a los candidatos respecto a sus propsitos cristianos, no bautizando al que no d pruebas de sinceridad. La forma Se tiene costumbre de celebrar un corto servicio devociones antes de comenzar la ceremonia de bautismo. Si el culto se realiza en un lugar pblico donde se han congregados los no convertidos, es ideal explicar el plan de la salvacin y el significado maravilloso del bautismo en agua. Instrucciones para el pastor: "Mediante el sufrimiento expiatorio del Seor Jesucristo hemos establecido una relacin con Dios, relacin que se llama nuevo pacto, segn la cual hemos recibido el perdn de los pecados y la vida eterna.

El pastor podr leer lo siguiente:

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"Esta ceremonia de bautismo nos recuerda nuestras obligaciones hacia Dios y hacia el hombre. Por lo tanto, lo hacemos una oportunidad para consagrarnos de nuevo y renovar nuestras promesas. Prometemos trabajar para el progreso de la iglesia en conocimiento y santidad; para promover su espiritualidad; para sostener su culto, disciplina y doctrina. "Como mayordomos o administradores de lo que Dios ha confiado nos comprometemos a contribuir con alegra y regularmente el sostn del ministerio, gastos de la iglesia, ayuda a los pobres, y la extensin del evangelio por todo el mundo "Respecto de nuestra casa y seres amados nos comprometemos a mantener el altar de familia y la oracin particular; criar a nuestros hijos en el temor del Seor; y buscar la salvacin de nuestros seres amados y conocidos. En virtud de nuestro llamado como creyentes, y por amor a los inconversos por quienes tambin muri el Seor Jess, nos comprometemos a andar con prudencia y discrecin ante el mundo, evitando lo pecaminoso o discutible; justo en nuestro trato, fiel a nuestros compromisos y ejemplar en nuestra conducta; evitar los chismes, las murmuraciones y la ira pecaminosa; y ser fervoroso en nuestro esfuerzo de fomentar el reino de nuestro Seor y Salvador. "Porque uno es nuestro Seor y somos hermanos, nos comprometemos a velar los unos por los otros en amor fraternal; en orar los unos por los otros; en ayudarnos en la enfermedad y en las dificultades; en ser corteses en nuestro hablar, en no ofendernos por cualquier cosa, ' y siempre estar preparados para la reconciliacin segn las enseanzas de nuestro Seor. "Confesando humildemente los pecados y fracasos del pasado, oremos pidiendo la gracia y la fortaleza a fin de cumplir estas promesas por amor de Dios y el Seor Jesucristo." Instrucciones para el que bautiza Cuando los bautismos se realizan en el bautisterio, el ministro bajar primero y ayudar a los candidatos a bajar para evitar una cada. Procurar dar el frente al auditorio para que la gente pueda ver el acto del bautismo. El ministro dirigir una oracin por los candidatos y despus cada uno de ellos dar un testimonio de su fe en el Seor Jesucristo y de su firme y fiel determinacin de seguir hasta el fin. Luego los candidatos sern bautizados uno por uno.

El ministro bautizar de derecha a izquierda . El ministro le pedir al candidato que cruce las manos sobre el pecho. Luego, con la mano derecha, el ministro tomar las manos cruzadas del candidato y con la izquierda sostendr el cuello del candidato, para facilitar el ser levantado del agua. Cuando el bautismo se realiza en el rio bautice contra la corriente; de esta manera la fuerza de la corriente le ayudar a levantarlo.

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Frmula

La frmula ms prctica es:

'"Hermano (nombre y apellido), por cuanto usted ha credo en el Seor Jesucristo, r lo ha aceptado como su Salvador personal, yo lo bautizo en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espritu Santo. Amn." Luego sumrjalo y de igual manera levntelo, evitando siempre cualquier actitud que reste solemnidad o provoque risa en la congregacin. Tambin otra de las formas corrientes es la siguiente: "En obediencia a la gran comisin, y segn la profesin de su fe en el Seor Jesucristo, yo le bautizo (sese aqu el nombre de la persona) en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espritu Santo. Amn."

Puede decirse tambin:

"Por la confesin de su fe en Jess como Cristo, el Hijo de Dios y su Salvador, le bautizo en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espritu Santo. Amn." Despus de que todos hayan sido bautizados, se har oracin por ellos y el pastor desde el agua despedir a la congregacin. LECTURAS BBLICAS Mat 3:1 En aquella temporada se dej ver Juan Bautista predicando en el desierto de Judea, Mat 3:2 y diciendo: Haced penitencia, porque est cerca el reino de los cielos. Mat 3:3 Este es aquel de quien se dijo por el profeta Isaas: Es la voz del que clama en el desierto, diciendo: Preparad el camino del Seor. Haced derechas sus sendas. Mat 3:4 Traa Juan un vestido de pelos de camello y un cinto de cuero a sus lomos, y su comida eran langostas y miel silvestre. Mat 3:5 Iban, pues, a encontrarle las gentes de Jerusaln y de toda la Judea, y de toda la ribera del Jordn; Mat 3:6 y reciban de l el bautismo en el Jordn, confesando sus pecados. Mat 3:7 Pero como viese venir a su bautismo muchos de los fariseos y saduceos, les dijo: Oh raza de vboras!, quin os ha enseado que con solas exterioridades podis huir de la ira que os amenaza? Mat 3:8 Haced, pues, frutos dignos de penitencia; Mat 3:9 y dejaos de decir interiormente: Tenemos por padre a Abrahn; porque yo os digo que poderoso es Dios para hacer que nazcan de estas mismas piedras hijos de Abrahn. Mat 3:10 Mirad que ya el hacha est aplicada a la raz de los rboles; y todo rbol que no produce buen fruto, ser cortado y echado al fuego. Mat 3:11 Yo a la verdad os bautizo con agua para moveros a la penitencia; pero el que ha de venir despus de m es ms poderoso que yo, y no soy yo digno siquiera de llevarle las sandalias; l es quien ha de bautizaros en el Espritu Santo y en el fuego.

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Mat 3:12 El tiene en sus manos la pala, y limpiar perfectamente su era; y su trigo lo meter en el granero; mas las pajas quemars en un fuego inextinguible. Mat 3:13 Por este tiempo vino Jess de Galilea al Jordn en busca de Juan para ser de l bautizado. Mat 3:14 Juan se resista a ello, diciendo: Yo debo ser bautizado de ti, y t vienes a m? Mat 3:15 A lo cual respondi Jess, diciendo: Djame hacer ahora, que as es como conviene que nosotros cumplamos toda justicia. Juan entonces condescendi con l. Mat 3:16 Bautizado, pues, Jess, al instante que sali del agua se le abrieron los cielos, y vio bajar al Espritu de Dios a manera de paloma y posar sobre l. Mat 3:17 Y se oy una voz del cielo que deca: Este es mi hijo amado, en quien he puesto toda mi complacencia. ll PRINCIPIO DEL EVANGELIO DE JESUCRISTO HIJO DE DIOS Mar 1:2 Conforme a lo que se halla escrito en el profeta Isaas: He aqu que despacho yo mi ngel o enviado ante tu presencia, el cual ir delante de ti preparndote el camino: Mar 1:3 Esta es la voz del que clama en el desierto: Preparad el camino del Seor, hacedle rectas las sendas. Mar 1:4 Estaba Juan en el desierto de la Judea bautizando y predicando el bautismo de penitencia para la remisin de los pecados; Mar 1:5 y acuda a l todo el pas de Judea y todas las gentes de Jerusaln; y confesando sus pecados, reciban de su mano el bautismo en el ro Jordn. Mar 1:6 Andaba Juan vestido con un saco de pelos de camello, y traa un ceidor de cuero a la cintura, sustentndose de langostas y miel silvestre. Y predicaba diciendo: Mar 1:7 Despus de m viene uno que es ms poderoso que yo, ante el cual no soy digno ni de postrarme para desatar la correa de sus zapatos. Mar 1:8 Yo os he bautizado con agua; mas l os bautizar con el Espritu Santo. Mat 28:18 Entonces Jess, acercndose, les habl en estos trminos: A m se me ha dado toda potestad en el cielo y en la tierra. Mat 28:19 Id, pues, e instruid a todas las naciones, bautizndolas en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espritu Santo; Mat 28:20 ensendolas a observar todas las cosas que yo os he mandado. Y estad ciertos que yo mismo estar siempre con vosotros, hasta la consumacin de los siglos. Mar 16:14 En fin, apareci a los once cuando estaban a la mesa; y les ech en cara su incredulidad y dureza de corazn; porque no haban credo a los que le haban visto resucitado. Mar 16:15 Por ltimo, les dijo: Id por todo el mundo; predicad el mensaje de salvacin a todas las criaturas;

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Mar 16:16 el que creyere y se bautizare se salvar; pero el que no creyere ser condenado. Mar 16:17 A los que creyeren, acompaarn estos milagros: En mi nombre lanzarn los demonios, hablarn nuevas lenguas, Mar 16:18 manosearn las serpientes; y si algn licor venenoso bebiere, no les har dao; pondrn las manos sobre los enfermos, y quedarn stos curados. (Torres Amat) Act 2:38 A lo que Pedro les respondi: Haced penitencia, y sea bautizado cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para remisin de vuestros pecados; y recibiris el don del Espritu Santo; Act 2:39 porque la promesa de este don es para vosotros, y para vuestros hijos, y para todos los que ahora estn lejos de la salud, para cuantos llamare a s el Seor Dios nuestro. Act 2:40 Otras muchsimas razones aleg, y los amonestaba, diciendo: Poneos en salvo de entre esta generacin perversa. Act 2:41 Aquellos, pues, que recibieron su doctrina, fueron bautizados; y se aadieron aquel da a la Iglesia cerca de tres mil personas. Act 2:42 Y perseveraban todos en or las instrucciones de los apstoles, y en la comunicacin de la fraccin del pan, o Eucarista, y en la oracin. Ver: Hechos 8:26 Hechos 10:4 Hechos 16:25 Romanos 6:3-4 Colosenses 2:12 Galatas 3:27 Hechos 2:38-39 3. RECEPCIN DE MIEMBROS NUEVOS Los candidatos deben llenar los requisitos delineados por la Iglesia para ser aceptados como miembros. En la Iglesia de Dios de la Profeca se administra el pacto que consiste en aceptar solemnemente la Biblia como palabra de Dios, creer y practicarla correctamente dividida, el Nuevo testamento como regla de fe y conducta, gobierno, andar a la luz a su mejor conocimiento y habilidad. CEREMONIA Reunida la congregacin, los candidatos se pondrn delante de la congregacin. El ministro se dirigir a la congregacin diciendo: Amados hermanos, las Escrituras nos ensean que la iglesia es el cuerpo del cual Cristo es la Cabeza, un ejrcito dirigido por su Capitn, Cristo Jess. El plan de Dios consiste en juntar en un mismo rebao a todos los nacidos de nuevo, para mantener la edificacin de los santos y proseguir con la prdica de la Palabra al

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mundo entero. Son deberes de los miembros procurar la paz y la unidad de la iglesia, sobrellevando los unos las cargas de los otros, socorrindose mutuamente, guardando fidelidad a la iglesia y contribuyendo al sostenimiento de la misma en sus actividades.

Dirigindose a los candidatos, el ministro dir:

Hermanos, habiendo hecho confesin pblica de su fe en Cristo y habindose bautizado en el nombre del Padre, del Hijo, y del Espritu Santo, y habiendo sido ustedes recomendados por el cuerpo oficial de la iglesia para ser admitidos como miembros, prometen cooperar con sus vidas de santidad como fieles seguidores de Cristo a la paz, prosperidad y unidad de la iglesia? Contestarn: S, lo prometo.

Entonces el ministro dando la bienvenida, estrechar la diestra de cada uno de los miembros nuevos, y dir: Por cuanto han hecho profesin de su fe en el seor Jesucristo, les doy la bienvenida a la fraternidad de la iglesia y a la comunin de la mesa del seor. El pastor terminar con una bendicin de la siguiente manera: "Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espritu Santo les bendiga y les guarde ahora y para siempre. Amn. "Y el Dios de paz que resucit de los muertos a nuestro Seor Jesucristo, el gran Pastor de las ovejas, por la sangre del pacto eterno, les haga aptos en toda obra buena para que hagan su voluntad, haciendo l en ustedes lo que es agradable delante de l por Jesucristo; al cual sea la gloria por los si glos de los siglos. Amn." 4. S A NTA CENA El pastor debe anunciar con debida anticipacin el servicio de la Santa Cena, exhortar a los creyentes a prestar atencin a la conveniente preparacin espiritual y avisarles a los inconversos del peligro de tomarla sin estar en condiciones. La Santa Cena suele celebrarse generalmente a la conclusin del culto ordinario del da del Seor, el primer domingo del mes, por la maana o por la noche. Se debe extender una invitacin a participar en la cena a todos los presentes que sean miembros en plena comunin de alguna iglesia evanglica. Cada iglesia debe dictar las medidas necesarias de disciplina por medio de las

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cuales se excluyan las personas indignas a tomar parte de la santa cena. No se debe precipitar esta ceremonia. Es un acto profundamente solemne y santo, y debe esperarse que los participantes reciban ricas bendiciones por la presencia del Espritu Santo. Durante la ceremonia. Es importante que los miembros entiendan que a la mesa del Seor deben venir con corazones limpios y sin pecado. Leer 1 Corintios 11:27-32. CEREMONIA (1) Cuando se celebra la Cena del Seor el predicador o el ministro bajar de la plataforma y se colocar frente a la mesa ya preparada de antemano. Pedir a los diconos o personas indicadas que pasen a la mesa juntamente con l. Despus que el pastor baja de la plataforma y los ayudantes se sitan a su lado, se elevar una oracin a Dios pidiendo su bendicin sobre los elementos. Acto seguido el pastor y los diconos designados, procedern a repartir el pan y el jugo de uva a cada participante. Antes de ingerir el pan, el pastor leer: "Porque yo recib del Seor lo que tambin os he enseado: Que el Seor Jess, la noche que fue entregado, tom pan; y habiendo dado gracias, lo parti, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de m." (1 Co rintios 11:23-24.) Y dir: '_Comed todos el pan; Luego de la misma manera leer: "asimismo tomo tambin la copa, despus de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangr e; haced esto todas las veces que la bebiereis, en memoria de m. "As, pues, todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Seor anunciis hasta que l venga." (1 Corintios 11: 25,26.) Y dir: "Bebed Despus de haber bebido el vino (jugo de uva) y haber tenido unos segundos de meditacin y de alabanzas al Seor, el pastor dir: "Pues, todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Seor anunciis hasta que l venga." 1 Corintios 11:26. Dice la Palabra de Dios que despus que Cristo y sus discpulos comieron y bebieron el pan y el vino, celebrando as la primera Cena del Seor, cantaron un himno antes de retirarse del aposento alto (Mateo 26:30; Marcos 14:26). (Se puede cantar un himno.) Algunas iglesias acostumbran a tomar una ofrenda para los pobres al fin de la Cena. Cantaron un himno antes de retirarse del aposento alto (Mateo 26:30; Marcos 14:26). Se puede cantar un himno. Algunas iglesias acostumbran a tomar una ofrenda para los pobres o para el ministro al final de la Cena.

todos el vino."

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CEREMONIA (II) 1) Para participar en la Cena del Seor se re quiere una preparacin del corazn por parte de todos los hermanos. El que haya cado en pecado, debe arrepentirse y buscar el perdn. En caso de existir entre algunos de los miembros, enemistades, odios, rencores, disgustos, deben amistarse antes de acercarse a la mesa del Seor. 2) El pastor debe recordar a los miembros que tanto l como los ancianos estn a la orden para ayudar espiritualmente a los que lo soliciten. Despus de la exhortacin, conviene que todos se entreguen a la oracin y meditacin, delante de Dios. 3) Como esta ceremonia es de carcter netamente espiritual y exclusivamente para los creyentes, se debe celebrar preferiblemente en un culto cuando estn reunidos los hermanos, y no en un culto comn de evangelizacin. As habr mayor libertad para entrar en ntima comunin con el Seor. 4) El pastor debe explicar con anticipacin el orden del servicio y quines le ayudarn a repartir el pan y el vino. 5) En una asamblea pequea es conveniente que los participantes se renan en el altar y all esperar en actitud silenciosa y en oracin, la presencia del Seor. 6) El pastor y los ayudantes, en frente de la mesa y los elementos, (pan y vino), estarn al cargo de la distribucin de los mismos, pero con anterioridad leern una de las siguientes porciones de la Escritura, dando preferencia a la primera de la siguiente lista: 1 Corintios 11:23-26; Mateo 26:1720, 26-29; Marcos 14: 12-17, 22-25; Lucas 22:7-20. (La exhortacin y explicacin de la Palabra debe hacerse antes de acercarse los participantes al altar). 7) Despus de una oracin el pastor leer otra vez los versculos respecto del pan, lo tomar y lo entregar a sus ayudantes quienes lo distribuirn entre los participantes. Se pueden cantar algunas estrofas de algn himno durante la distribucin. 8) Servidos todos, el pastor sirve a los ayudan tes, y el ltimo servido ser el pastor. 9) Todos unidos comern en silencio. 10) De la misma manera se servir el vino, y al final se cantar un himno de alabanza. 11) El pastor se sentir en plena libertad para introducir unos himnos, o un

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perodo de oracin o de alabanza durante el servicio conforme gue el Espritu Santo. Nota: En la iglesia de Dios de Profeca, juntamente con la Cena del Seor se ministra el lavatorio de pies por los santos, donde todos participan; segn San Juan 13. 5. DEDICACIN DE NIOS En las Sagradas Escrituras no se halla ni enseanza ni ejemplos que autorice el bautismo de nios. Segn el Nuevo Testamento el candidato al bautismo debe arrepentirse de sus pecados (Hechos 2:38), y creer en Jesucristo (Hechos 8:37). Estas dos condiciones no son posibles en aquellos que no han llegado al uso de la razn. Por otro lado, las Sagradas Escrituras nos ensean que la presentacin y dedicacin pblica de los nios a Dios, solicitando su bendicin sobre ellos y su vida futura, fue y es una prctica admitida por la iglesia de todos los tiempos. Esto no es un bautismo. Es una presentacin del nio a Dios, una accin de gracias y de fe, una splica de la bendicin divina. CEREMONIA (1) Los padres traen al nio al altar mientras se canta un himno apropiado. El ministro bajar del plpito y proceder a leer las siguientes escrituras : "Y le presentaban nios para que los tocase; y los discpulos reprendan a los que los presentaban."Vindolo Jess, se indign, y les dijo: Dejad a los nios venir a m, y no se lo impidis; porque de los tales es el reino de Dios. "De cierto os digo, que el que no reciba el reina de Dios como un nio, no entrar en l. "Y tomndolos en los brazos, poniendo las manos sobre ellos, los bendeca. (Marcos 10:13-16.) "Entonces le fueron presentados unos nios, para que pusiese las manos sobre ellos, y orase; y los discpulos les reprendieron. Pero Jess dijo: Dejad a los nios venir a m, y no se lo impidis; porque de los tales es el reino de los cielos. Y habiendo puesto sobre ellos las manos, se fue de all." (Mateo 19: 1315.) "Oye, Israel: Jehov nuestro Dios, Jehov uno es. "Y amars a Jehov t Dios de todo tu corazn, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. "Y estas palabras que yo te mando hoy, estarn sobre tu corazn; y las repetirs a tus hijos, y hablars de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. "Y las atars como una seal en tu mano, y estarn como frontales entre tus ojos; y las escribirs en los postes de tu casa, y en tus puertas." (Deuteronomio 6: 4-9.)

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"As, no es la voluntad de vuestro Padre que est en los cielos, que se pierda uno de estos pequeos." (Mateo 18:14.) Entonces el Ministro dir a la congregacin: "Mis amados hermanos y amigos: "Dios orden la familia como una institucin divina desde los comienzos de la humanidad. Los hijos son la herencia que el Seor ha encomendado al cuidado de sus padres. De aqu la obligacin que ellos tienen ante Dios y la sociedad de velar por sus hijos. Confesamos que sobre nuestras vidas y las vidas de nuestros hijos, Cristo es Rey y Seor. Nos comprometemos en cuanto nos sea posible, a instruir a estos nios en su Ley y en su Santa vo luntad. La Santa Palabra nos ofrece muchos ejemplos de todo esto. Seor. Ana reconoci que su hijo Samuel perteneca a Jehov. La virgen Mara trajo al templo a su nio para dedicrselo al Seor. Los padres de este nio (nia) reconocen su responsabilidad de nutrir, ensear y amonestar a esta criatura en el temor y obediencia de la Palabra de Dios desde su temprana edad. Traemos a Dios a los nios que l nos ha confiado, los dedicamos a l y suplicamos para ellos la bendicin de Dios. Entonces el ministro dirigindose a los padres dir: Ministro: Ante la presencia de Dios, y de estos testigos, prometen ustedes criar esta criatura en el temor del Seor? Los padres: S, lo haremos. Ministro: Prometen, adems guiarle en todo el conocimiento del camino del Seor diariamente? Los padres: S lo haremos. Ministro: Prometen ustedes instruirlo para que conozca a Cristo como su Salvador personal? Los padres: S, lo haremos. Ministro: Prometen ustedes que, en cuanto est de su parte, darle a esta criatura un ejemplo consecuente y piadoso de vida cristiana? Los padres: S lo haremos. Ministro : Presentan ustedes este nio (o nia) en solemne y sincera dedicacin? Los padres: S, seor. Ministro:

Jocabed instruy a su propio hijo Moiss despus de haberlo entregado al

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Se consagran ustedes a criar a este nio en la doctrina y enseanza de la Santa Palabra de Dios? Los padres: S, seor. Prometen ustedes criar este nio en la prctica diaria de la oracin, y ayudarle
Ministro:

a formar el carcter cristiano, y a hacer todo lo que est de su alcance para criar un ambiente hogareo como ejemplo de devocin? Los padres: S, lo haremos. Ministro: Por cuanto ustedes han prometido delante de Dios, y de estos testigos, y de esta congregacin dedicar este nio (o nia) a Dios, y ustedes mismos lo han afirmado con sus mismas palabras, les aconsejo que se dediquen a su sagrada obligacin con sabidura, perseverancia y santa devocin. Entonces el ministro (si no hay inconveniente) tomar al nio en sus brazos y poniendo las manos sobre l dir: "(Nombre del nio), te dedicamos a Dios el Padre, el Hijo y el Espritu Santo. El Seor te fortalezca todos los das de tu vida."

Oracin dedicatoria: "Ahora, Padre bendito, Creador del cielo y de la tierra, te ha placido ordenar la vida de esta manera, porque lo viste bueno y benfico para las criaturas que t hiciste; te ruego por el bienestar futuro de este nio (nia). Lbralo de las corrientes del pecado, y de las enfermedades que hacen estrago entre la infancia. Que a medida que crezca, en edad y en estatura, crezca tambin en la gracia y en el conocimiento de nuestro Seor Jesucristo. Dales gracia y sabidura a sus padres para que lo cren en el camino cristiano. Lo dedico a tu honra y servicio, en el nombre del Padre, del Hijo, y del Espritu Santo. Amn." El ministro queda en entera libertad de hacer la oracin que mejor le parezca. Cuando el ministro concluye estas palabras, acto continuo se contara un himno, y mientras se canta, los padres se retirarn a tomar asiento y el ministro volver a la tribuna para despedir a la congregacin. CEREMONIA II Mientras los padres pasan al frente con el nio, se cantara un himno apropiado. El ministro bajara del pulpito a encontrarse con los padres del nio y proceder a leer lo siguiente "Ana dio a luz un hijo, y le puso por nombre Samuel Y lo trajo a la casa de Jehov en Silo a Eli, y ella dijo: Por este nio oraba, y Jehov me dio y Jehov me dio lo que le ped Yo, pues, lo dedico tambin a Jehov; y Samuel creci y Jehov estaba con el y no dejo caer a tierra ninguna de sus palabras. 1 Samuel 1:2024-28, 3: 19

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En el Nuevo Testamento leemos concerniente a Cristo, que al cumplir los ochos das de nacido, le pusieron por nombre Jess. Y le trajeron a Jerusaln para presentarle al Seor. Y he aqu haba en Jerusaln un hombre llamado Simn y l le tom Seor, despides a tu siervo en paz, porque han visto en sus brazos, y bendijo a Dios, diciendo: Ahora, mis ojos tu salvacin. Y Jos y su madre estaban maravillados de todo lo que se deca de l. Y el nio creca y se fortaleca, y se llenaba de sabidura; y la gracia de Dios era sobre l. Lucas 2:21, 22, 25, 28, 29, 30, 33, 40 Instruye al nio en su camino, y aun cuando fuere viejo no se apartar de l. Proverbios 22: 6. Y dijo Jehov: Yo s que Abraham mandar a sus hijos y a su casa despus de s, que guarden el camino de Jehov, haciendo justicia y juicio. Gnesis 18:19. Y estas palabras que yo te mando hoy, estarn sobre tu corazn; y las repetirs a tus hijos, y hablars de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. Deuteronomio 6:6, 7. Dirigindose a los Padres: Hermanos, nos reunimos con motivo de una ocasin feliz al igual que Mara y Ana. Ustedes han trado a este nio (a) al templo a presentarlo al Seor. Conocen lo que Jess dijo: Dejad a los nios venir a mi y no se lo impidis porque de los tales es el reino de los cielos . Dirigindose a los padres Hermanos, nos reunimos con motivo de una ocasin feliz. Al igual que Mara y Ana de antao, Ustedes han trado este nio (nia) al templo para presentarlo al Seor. Ustedes ya conocen las palabras del Maestro: "Dejad a los nios venir a m y no se lo impidis; porque de los tales es el reino de los cielos." El propsito de este servicio es ayudarles a instruir al nio en los caminos del seor, para cuando arribe a sus aos que requiera responsabilidad, pueda distinguir y elegir entre el bien y el mal y as aceptar a Jesucristo como salvador y maestro. Es un privilegio y deber guiar a este nio(a) dentro de la voluntad perfecta de dios para su vida cristiana. En este empeo, ustedes deben consagrarse hoy mismo; para este fin hoy dedican ustedes a su hijo al seor. De acuerdo al propsito para el cual ustedes han venido, deben responder al siguiente convenio. PACTO Y CONVENIO solemnemente al servicio del Seor?

Ministro - Presentan ustedes a su hijo (hija) ante Dios para dedicarlo

Los Padres - S, seor.

Ministro - Se consagran ustedes como padres de este nio (nia) a instruirle en las enseanzas y caminos del Seor?

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Los Padres - S, seor. Ministro - Prometen instruirlo en las enseanzas de Jesucristo, y en las prcticas de la 'oracin, y guiarle en el desarrollo de un carcter cristiano? Los Padres - S, seor. Ministro - Prometen modelar hasta donde sea posible la vida de su hijo (hija) en
el hogar, por medio de sus devociones familiares, por la palabra y por el ejemplo, para que a la edad apropiada, acepte a Jesucristo y participe de la comunin de los hermanos cristianos y preste servicios a la iglesia de Cristo.

Los Padres S, seor.

Ministro - Por cuanto ustedes me han prometido delante de Dios, de estos

testigos y de esta congregacin, dedicar este nio (nia) a Dios, y ustedes mismos lo han afirmado con sus palabra, les aconsejo que se consagren a la sagrada obligacin con sabidura, perseverancia y santa devocin."

Oracin dedicatoria

Ahora, Padre bendito, Creador del cielo y de la tierra, te ha placido ordenar la vida de esta manera porque lo viste bueno y benfico para las criaturas que t hiciste; te ruego por el bienestar futuro de este nio (nia). Lbralo de las corrientes del pecado, y de las enfermedades que hacen estrago entre la infancia, que a medida que crezca en edad y estatura, crezca tambin en la gracia y en el conocimiento de nuestro Seor Jesucristo. Dales gracia y sabidura a sus padres para que lo cren en el camino cristiano. Lo dedico a tu honra. Haga Jehov resplandecer su rostro sobre ti y tenga de ti miseri cordia; alce Jehov a ti su rostro, y ponga en ti paz." Cuando el ministro termine de pronunciar estas palabras, acto continuo se cantar con la congregacin un himno adecuado. 6. MINISTERIO A LOS ENFERMOS Es conveniente mencionar que los creyentes es peran que sus pastores los visiten. A continuacin ofrecemos datos y consejos referentes a este precioso ministerio. 1) El Seor demanda con amor que sus ministros visiten a los enfermos ofrecindoles la compasin y ayuda espiritual que necesitan. Un pastor aptico o indiferente al dolor ajeno no es un digno representante de Aquel que llev nuestras enfermedades y nos mira con sus ojos de compasin eterna. 1 Juan 3: 11-16; 1 Juan 4:7-21; Juan 21: 15-17. 2) El quehacer de Dios es tambin el del pastor en su dignidad o de embajador del gran Rey (2 Corintios 5:20). El pastor debe ayudar al enfermo a acercarse a Dios (Salmo 145: 18; 34:18).

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3) El ministro ayudar al enfermo a aprender la leccin que Dios intenta ensearle a travs de la enfermedad. Quiz Dios quiera inculcarle una leccin de disciplina o de demostrar su fidelidad en la prueba (Job 23:10; Daniel 3:19-28). 4) El pastor no debe censurar a los enfermos de su congregacin que consultan con los mdicos, aunque debe ensearles a confiar en el gran Mdico. 5) Si el pastor o ministro es casado, debe visitar a los enfermos en compaa de su esposa. Algunas veces puede visitarlos en unin de los diconos de la iglesia. 6) El ministro debe visitar a los enfermos y afligidos (Santiago 1: 27) y tratar de inculcar en sus corazones porciones bblicas para ser usadas por el Santo Espritu de Dios. 7) Despus de instruir al enfermo y prepararlo para recibir por fe su sanidad, debe orar confiando que Dios lo sanar. Es conveniente unirse a personas de fe, para orar por los enfermos. 8) Resulta de mucha ayuda para el enfermo la lectura de la Palabra de Dios, y los testimonios de aquellos que han sido sanados por el Seor. Es bueno mantener esa atmsfera de fe despus de la sanidad, hasta que el enfermo se fortalezca en la experiencia que ha tenido. Escrituras sobre sanidad divina Deuteronomio 7:12-15 Deuteronomio 28: 1-30 Sal. 103.3 107:17-21 Is. 53.4,5 Juan 10.10; 14:12-14 Mateo 8:16,17 Mateo 10:8 Mateo 12:15 Santiago 5: 14-161 Juan 3: 8 xodo 15:23-26 xodo 23:20-25 Nmeros 21:4-10 La Visita Debe ser breve, de acuerdo con las circunstancias y a juicio del pastor. En los casos de ser hospitalizado el paciente, el ministro deber inquirir en las oficinas del hospital si se puede visitar al enfermo, pues a veces no es posible por asuntos relacionados con la enfermedad y el enfermo. Al acercarse al cuarto y al enfermo, el pastor debe hacerlo con mucho cuidado y quietamente, su rostro complaciente, y con palabras tiernas y bondadosas. El propsito principal de la visita es estimular la fe del enfermo, con la esperanza e inspiracin que Jesucristo trae al corazn. El ministro mantendr siempre una actitud gentil y afectuosa hacia el enfermo. Debe hacerle pocas preguntas; en general los enfermos estn dbiles y no resisten visitas largas. Si el enfermo desea hacer preguntas, debe permitrsele que las haga, pues eso le ayudar espiritual y fsicamente. Ninguna impresin negativa referente a la condicin fsica del enfermo debe traslucirse en las pa -

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labras del ministro. Se leer al enfermo una porcin corta de la Pa labra de Dios, usndose un tono suave en la voz. Algunas veces le es muy beneficioso al enfermo un himno apropiado, cantado en voz baja . La Palabra de Dios para sanidad Si la Palabra de Dios no ensea sanidad divina, aquellos que la predican estn caminando sobre un terreno peligroso. Si las Escrituras hablan de la sanidad divina, los que se resisten a creer que es para ellos, y an peor, la niegan abiertamente y atacan esta doctrina, tendrn que ajustar sus cuentas con el Autor de la Palabra Inspirada. Ms abajo expresamos algunos de los numerosos textos que consideramos claros, amplios y positivos. 1. Yo soy Jehov tu sonador." xodo 15:26 2. Yo quitar toda enfermedad de en medio de ti." xodo 23:25 3. "Y quitar Jehov de ti toda enfermedad". Deuteronomio 7:15 4. Y cuando alguno miraba a la serpiente de bronce, viva." Nmeros. 21:9 5. Bendiciones de la obediencia y consecuencias de la desobediencia. Deut. 28 6. "Y son a todos los enfermos; para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaas, cuando dijo: El mismo tom nuestras enfermedades, y llev nuestras dolencias." Mt. 8:17 7. "Cristo nos redimi de la maldicin de la ley, hecho por nosotros maldicin." Galatas 3:13 8. Cristo los san a todos; por lo tanto, la voluntad de Dios es sanar. "Y san a todos los enfermos." Mateo 8:16 "Si quieres puedes limpiarme... y le dijo: Quiero, s limpio." Marcos 1:41 "Y todos los que le tocaban quedaban sanos." Marcos 6:56 "Y le sigui mucha gente, y sanaba a todos." Mateo 12:15 9. "Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia." Juan 10:10 10. "Cmo ungi con el Espritu Santo y con poder a Jess de Nazaret, y cmo ste anduvo haciendo bienes y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con l." Hechos 10:38. "Para esto apareci el Hijo de Dios, para deshacer las obras del diablo." 1 Juan 3:8 11. "Cuando Jess la vio, la llam y le dijo: Mujer, eres libre de tu enfermedad." Jess san a esta mujer que Satans tena enferma haca dieciocho aos. Jess no pregunt si era la voluntad de Dios que siguiera en ese estado para su bienestar espiritual. Jess dijo que "se le deba desatar de esta ligadura en el da de reposo." Lucas 13:16 12. La sanidad es para los hijos de Dios, y tienen derecho a ella. "Jess le dijo: Deja primero que se sacien los hijos, porque no est bien tomar el pan de los hijos y echarlos a los perrillos." Marcos 7:27

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13. Jess se aplic a s mismo (Lucas 4:16-21) la profeca de Isaas que dice: "El Espritu de Jehov el Seor est sobre m, porque me ungi Jehov; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazn, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la crcel; proclamar el ao de la buena voluntad de Jehov, y el da de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados." Isaas 61:1,2 14. Los milagros de Jess probaron su divinidad."Creis que puedo hacer esto? Ellos dijeron: S, Seor." Mateo 9:28 Adicionalmente lea estas promesas que tienen valor y vigencia: Lucas 5:24- 10:9-17 Juan 2:11- 14:11 15:24 -14:12,13 Mateo 10:8 Marcos 16:18 -2:5-2:11 Santiago 5:16 Salmo 103:2 Jeremas 17:14 7. SERVICIO FNEBRE 1 Muerte: Separacin del alma del cuerpo 2 Muerte es la separacin del alma de Dios Consejos prcticos 1) Tan pronto como el ministro recibe noticia de la muerte de uno de sus miembros se trasladar de inmediato al hogar del difunto para ofrecer su ayuda y consuelo espiritual. 2) El ministro averiguar con mucho tacto los planes de la familia para el funeral y los cumplir en todo lo que sea posible. Puede hacer con mucho cuidado las sugerencias pertinentes. 3) Debe precisarse lugar y hora del funeral, y si se va a realizar en la iglesia, el hogar, o en la capilla mortuoria. 4) Si el ministro disfruta de la confianza de la familia, evitar a toda costa que incurran en gastos excesivos, como sucede con frecuencia cuando las emociones intensas embargan el corazn y los sentidos. 5) El servicio fnebre es una oportunidad digna de la mayor consideracin y meditacin, para tratar de alcanzar una audiencia tan heterognea, con el mensaje de esperanza y salvacin de nuestro Seor Jesucristo. Llegado la hora de la ceremonia: 6) El pastor usar ropa obscura. 7) El sermn deber ser corto, sencillo y fcil de comprender para no perder su objetivo principal: consolar a los dolientes y llevar a los concurrentes a un

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momento de meditacin sobre un futuro encuentro con Dios. 8) Para el servicio en la casa o en la capilla, el ministro llegar a la hora indicada, pero no comenzar hasta recibir la autorizacin de la familia. De antemano, el ministro tendr ya preparado el programa del servicio. 9) El sermn estar de acuerdo con el lugar donde se va a exponer: en el hogar, en la capilla fnebre de la casa mortuoria, o en el cementerio. En caso de ser necesario los tres, se procurar que los sermones sean diferentes. Mensaje; Sugerencias de tpicos y textos para sermones 1) De las tinieblas a la luz, Amos 5: 8. 2) Valor para vivir y fe para morir, 1 Corintos 15:58. 3) Todo lo puedo en Cristo, Filipenses 4:13. 4) Anclados en la Roca, Salmo 27:5. 5) La Tierra Prometida, Apocalipsis 21:4. 6) Qu es la vida? Santiago 4:14. 7) En l est la vida, Juan 1:4. 8) El consuelo de Cristo, 2 Corintios 5:1-8. 9) Vida abundante, Juan 10:10. 10) El ltimo enemigo, 1 Corintios 15:26. 11) El cielo es mucho mejor, Filipenses 1:23. 12) La casa de mi Padre, Juan 14:2. 13) Los muertos bienaventurados, Apocalipsis 14:13. 14) La despedida de Pablo, 2 Timoneo 4:7, 8. 15) Cundo es estimada la muerte, Salmo 116:15. Seleccin de Escritura para servicios funerales Para un nio "En aquel tiempo lo discpulos vinieron a Jess, diciendo: Quin es mayor en el reino de los cielos? "Y llamando Jess a un nio, lo puso en medio de ellos, y dijo: e cierto os digo, que si no os volvis y os hacis como nios, no entraris en el reino de los cielos. "As que cualquiera que se humille como este nio, se es el mayor en el reino de los cielos. "Y cualquiera que reciba en mi nombre a un nio como este, a m me recibe. "Y cualquiera que haga tropezar a alguno de estos pequeos que creen en m, mejor le fuera que se le colgase al cuello una piedra de molino de asno, y que se le hundiese en lo profundo del mar. "Mirad que no menospreciis a uno de estos pequeos; porque os digo que sus ngeles en los cielos ven siempre el rostro de mi Padre que est en los cielos. "Porque el Hijo del Hombre ha venido para salvar lo que se haba perdido. "Qu os parece? Si un hombre tiene cien ovejas, y se descarra una de ellas, no deja las noventa y nueve y va por los montes a buscar la que se haba

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descarriado? "Y si acontece que la encuentra, de cierto os digo que se regocija ms por aquella, que por las noventa y nueve que no se descarriaron. "As, no es la voluntad de vuestro Padre que est en los cielos, que se pierda uno de estos pequeos." (Mateo 18:1-6; 10-14.) "Traan a l los nios para que los tocase; lo cual viendo los discpulos, les respondieron

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