Cap 10 - Auto-Manejo Intelectual en La Ancianidad
Cap 10 - Auto-Manejo Intelectual en La Ancianidad
Cap 10 - Auto-Manejo Intelectual en La Ancianidad
Anlisis del Comportamiento / Seminario Skinner Enviado por Admin en 07 Nov, 2003 - 07:21 AM
Skinner, B.F. (1984). Auto-Manejo intelectual en la ancianidad. Avances en Psicologa Clnica Latinoamericana. Vol 3, 121-131.
Old age, is only partly a biological condition. Enviroments age as bodies, and fortunately that process can be retarded. This article records personal techniques that have proved helpful in offsetting, some of the psychological limitations of old age and particulary in making it possible to continue to engage in intellectual work. Problems dealt with include sensory and motor deficiencies, memory loss, motivational changes, mental fatigue, and the disruptive effects of the social enviroment of the aged. The emphasis is on constructin a world in wich the behavior of old people will continue to be abundantly reinforced. Hace un cuarto de siglo present un trabajo en la reunin de la Eastern Psychological Association llamado Una historia de caso en el mtodo cientfico. En este trabajo seal que mi vida como cientfico del comportamiento no pareca estar de acuerdo con la imagen generalmente descrita por los estadsticos y metodolgos de la ciencia. El presente artculo es tambin una historia de caso pero en un campo totalmente diferente. He odo decir que G. Stanley may, uno de nuestros padres fundadores, escribi un libro en cada una de las etapas de su vida a medida que iba pasando por ella. Yo no tuve la precaucin de empezar lo suficientemente temprano a hacer eso, pero todava puedo hablar acerca de la ltima etapa. Por lo tanto me presento ante ustedes comportndome verbalmente en la vejez, como alguna vez present aquellos palomos jugando ping-pong.
El desarrollismo es una rama del estructuralismo en el que la forma o topografa del comportamiento se estudia como funcin del tiempo. Se discute cmo el comportamiento cambia a medida que uno se vuelve viejo. Envejeciendo debera ser la palabra correcta para este proceso; pero no quiere decir desarrollarse. En el uso aceptado, desarrollarse no es simplemente volverse viejo sino desdoblar una estructura latente, realizar un potencial interno, que sea ms efectivo. Para Shekespeare las edades del hombre oscilaban desde el lloriqueo del infante, al colegial que se arrastraba como un caracol despegando hacia la escuela, a los enamorados suspirando y a los soldados buscando la reputacin ilusa, a la justicia llena de refranes sabios e instancias modernas, a un estado e el cual la voz mas fuerte chilla y sibla en su sonido, y al final a una segunda infancia de meros olvidos sin dientes, sin ojos y sin gusto y al final lgicamente, sin nada. Los ancianos son gente vieja. El envejecimiento no es solamente volverse viejo sino ser viejo. En el desarrollismo las metforas horticola son muy importantes. Existen estadios de crecimiento, y la madurez es aclamada como un estadio deseable de complementacin. Pero luego la metfora se vuelve menos atractiva, porque hay un punto en el cual estaramos satisfechos de parar el desarrollo. Tras la madurez viene el decaimiento y la descomposicin. Afortunadamente, el recuento desarrollista es incompleto, y lo que falta es especialmente importante si queremos hacer algo con respecto a la vejez. Sin duda hay un proceso biolgico inexorable, una continuacin del crecimiento del embrin que puede obstaculizarse o anularse, pero no detenerse. Hablando de desarrollo de un organismo, el crecimiento no es una metfora, pero las personas se desarrollan de una manera diferente y por diferentes motivos, muchos de los cuales no son inexorables. Mucho de lo que parece ser el despliegue de un potencial interno es el producto de un desarrollo ambiental; el mundo de la persona se desarrolla. El envejecimiento de una persona, a diferencia del envejecimiento de un organismo, depende de los cambios en los ambientes fsico y social. Reconocemos la diferencia cuando decimos que alguno jvenes son adultos para su edad, o cuando, como dijo Shakespeare, los ancianos vuelven a la niez. Afortunadamente, puede cambiarse el curso de un ambienten desarrollo. Este tipo de envejecimiento puede dilatarse.
Si los estadios de nuestras vidas se debieran nicamente al paso del tiempo, tendramos que encontrar una fuente de la juventud que mantuviera la direccin, el cambio, pero si muchos de los problemas de los viejos se deben a limitaciones en sus ambientes entonces dichos ambientes puedan mejorarse. Claro que el organismo y la persona no se desarrollan independientemente, los cambios biolgicos interactan con las contingencias ambientales. Mientras que los sentidos se vuelven pesados, el ambiente estimulante se vuelve menor. Mientras que los msculos se vuelven lentos y dbiles, pocas cosas se pueden hacer conexito. Son claros los cambios en las capacidades sensoriales y motoras en los juegos y en otras formas de competencia, y los atletas se retiran jvenes debido a los procesos del envejecimiento. Lgicamente, se conocen muchas soluciones remediales. Los anteojos compensan la poca visin y los audfonos la poca audicin. Estos son instrumentos prostticos claros, pero lo que se necesita es un ambiente prosttico en el cual, a pesar de las capacidades reducidas, el comportamiento est relativamente libre de consecuencias aversivas y sea reforzado abundantemente. Pueden necesitarse nuevos repertorios lo mismo que nuevas fuentes de estimulacin. Si usted no puede leer, escuche grabaciones de libros de cintas magnetofnicas o discos. Si usted no puede or bien, ponga ms alto el volumen de su tocadiscos (y use audfonos para no molestar a los vecinos). Las comidas pueden condimentarse para los paladares de los ancianos. Paul Tillich, el telogo, defiende la pornografa debido a que extiende la sexualidad a la vejez. Y tambin existe la posibilidad, aunque sea de segunda mano, de vivir la vida altamente reforzada de otras personas, a travs de la literatura, siendo espectador de deportes, teatro, cine y televisin. No hay nada especialmente nievo en todo esto, pero si creo que hay un problema especial al cual se la ha dado poca atencin. Uno de los inexorables efectos del envejecimiento biolgico es especialmente importante para aquellos comprometidos en el trabajo intelectual escribiendo, inventando, componiendo, pintando, teniendo ideas en una palabra, pensando. Es caracterstico de la gente vieja no pensar claramente, coherentemente, lgicamente en particular creativamente. En trminos fisiolgicos debemos decir que el deterioro ocurre no solamente en los rganos de los sentidos y en los efectores sino tambin en los procesos centrales. Los cambios son ciertamente centrales si estamos hablando del sistema nervioso, pero los cambios en el comportamiento son cambios en el cuerpo como un todo. Olvidar es un problema clsico. Es ms frecuente olvidar nombres porque los nombres tienen poco en contexto. Yo estoy convencido de que los nombres muy rara vez se olvidan totalmente. Cuando tengo tiempo, aproximadamente media hora, casi siempre puedo recordar un nombre si ya he recordado la ocasin adecuada para utilizarlo. Trabajo con instigadores temticos y formales, en el ltimo caso recorriendo el alfabeto buscando la letra inicial. Pero este sistema no funciona al presentar a su esposa a alguien cuyo nombre usted olvid. Mi seora y yo utilizamos la siguiente estrategia: si hay alguna posibilidad concebible de que ella haya conocido a la persona, yo simplemente le digo Claro que tu te acuerdas.....? y ella le estrecha la mano y le dice si, claro, cmo est usted?. El individuo puede no acordarse de haber conocido a mi esposa, pero tampoco est seguro de su memoria. La incapacidad de decir un nombre en el momento adecuado, como cuando se hace una presentacin, puede ser especialmente castigador, y el castigo es parte del problema. Los tartamudos tienen ms probabilidad de tartamudear porque en el pasado no pudieron hablar fluidamente, y un estado emocional llamado ansiedad ha sido condicionado. De igual manera podemos olvidarnos. Alguna ayuda puede lograrse haciendo que este tipo de situaciones sea tan libre de consecuencias aversivas como sea posible. Manera simpticas de explicar su fracaso puede ayudar. Adule a su interlocutor dicindole que usted ha notado que entre ms importantes son las personas, ms fcil es olvidar su nombre. Recuerde la simptica historia en la que usted dice que se le olvid su nombre cuando se lo solicit un empleado. Si usted, es hbil en esta clase de cosas, el olvidar puede convertirse an en un placer. Desafortunadamente, no hay una estrategia similar que usar cuando uno est sufriendo de una disminucin del acceso al comportamiento verbal al escribir un artculo. Sin embargo, una aceptacin calmada de las deficiencias y una ms cuidadosa observacin de un buen auto-manejo intelectual puede tener un efecto comparable.
El problema se presenta en la forma como hagamos uso de la experiencia pasada, cuyos efectos parecen desvanecerse muy rpidamente. Se necesita una serie especial de tcnicas para su solucin. Hay ejemplos prcticos que pueden ser tiles antes de volver al comportamiento intelectual comparable. Diez minutos antes de usted salir de casa oye el informe del tiempo: probablemente llover antes de que usted regrese a casa, A usted se le ocurre llevar un paraguas (la frase quiere decir literalmente lo que dice: el comportamiento de llevar un paraguas se le ocurre a usted), pero todava no lo ha llevado a cabo. Diez minutos mas tarde usted sale de casa sin el paraguas. Usted puede solucionar este tipo de problema ejecutando la mayor parte del comportamiento cuando le suceda. Coloque el paraguas en el picaporte de la puerta o pngalo en la manija de su maletn, o de alguna otra manera inicie el proceso de llevarlo con usted. Aqu hay un problema intelectual similar: en la mitad de la noche se le ocurre a usted que puede aclarar una parte del trabajo que est escribiendo hacindole un cierto cambio. En el escritorio al da siguiente usted se olvida de hacer ese cambio. La solucin es hacer el cambio inmediatamente que se le ocurre, utilizando una grabadora que tenga al lado de la cama. El problema en la vejez no es tanto cmo tener ideas sino cmo tenerlas cuando uno pueda utilizarlas. Un registro escrito o dictado, que se consulte de vez en cuando, tiene el mismo efecto que el colgar el paraguas del picaporte de la puerta. Una libreta de bolsillo o una grabadora ayudan a maximizar el resultado intelectual registrando el comportamiento cuando este sucede. La prctica es til a cualquier edad pero ms especialmente para el intelectual viejo. En lugar de memoria, un memorando. Otro sntoma del mismo problema es olvidar lo que uno va a decir. En la conversacin usted espera cortsmente hasta que alguien termine, y el ingenioso comentario que iba a hacer se le desvanece. Una solucin es estar dicindoselo a s mismo; otra es utilizar el privilegio de la vejez e interrumpir al interlocutor; otra es hacer una nota (tal vez pretendiendo que es acerca de lo que la otra persona est diciendo). El mismo problema surge cuando usted est hablando y se pone a divagar. Usted termina la divagacin y no puede recordar por qu se embarc en ella o dnde estaba cuando lo hizo. La solucin es simplemente no divagar, es decir, no interrumpirse a si mismo. Una frase larga siempre hace surgir esa clase de problema: la ltima parte no parece estar de acuerdo con la primera porque la primera se ha salido de su alcance. El efecto es especialmente claro al hablar un idioma que usted no habla muy bien, donde siempre es un error embarcarse en frases muy complejas, Har mucho mejor si solo habla sencillas frases, y el mismo remedio le sirve al pensador de edad que hace una alocucin improvizada en su propio idioma. Se aconsejan tambin frases cortas cuando usted est hablando consigo mismo, es decir pensando. Un tipo diferente de problema se soluciona con instigadores adecuados. Usted tiene que asistir a una reunin de su clase y va a llevar consigo a alguien que tiene que presentar a sus viejos amigos. Cmo puede acordarse de todos los nombres? Antes de ir, mire en el registro de ex alumnos la lista de los que estarn en la reunin, visualcelos si se puede. El estmulo textual le har decir los nombres que seran emitidos, simplemente en respuesta a la presencia de sus amigos. Olvidar un nombre es solamente un ejemplo claro del problema bsico. Al escribir un artculo o pensar en un problema, hay respuestas pertinentes que le sucederan ms pronto o ms abundantemente a una persona ms joven. Su ausencia no es tan clara como olvidar un nombre, pero debe admitirse y tratarse. Una manera de aumentar la probabilidad de que ocurran las respuestas relevantes mientras escribe un trabajo o soluciona un problema es leer material pertinente, y releer lo que usted ha escrito. Libros de referencia de fcil alcance instigarn en cuanto a nombres, fechas, y otra clase de informacin. Puede utilizarse un tesaurus o diccionario no para encontrar una nueva palabra, sino para instigar una vieja. An hablando extemporneamente es posible prepararse por adelantado. Usted puede ponerse en mejor posesin del comportamiento verbal, examinando su discurso una vez ms. La vejez es como la fatiga, excepto que sus efectos no pueden corregirse relajndose o tomando unas vacaciones. Particularmente problemtica es la vejez adems de la fatiga, y la
mitad de esto puede impedirse. Puede ser necesario sentirnos satisfechos con menos horas bien trabajadas al da, y es particularmente necesario gastar el resto del tiempo en lo que los griegos llaman eutrapelia, el uso productivo del ocio. El ocio debe ser relajante. Posiblemente a usted le gustan los rompecabezas complicados, o el ajedrez, u otros juegos intelectuales. Olvdese de ellos. Si usted quiere continuar siendo intelectualmente productivo debe arriesgarse a que se ran de usted sus amigos ms jvenes y admitir libremente que lee historias de detectives o miar a Archie Bunker en la T.V. El tipo de fatiga que causa problema se llama mental, tal vez porque tiene tan poco que ver con la fatiga fsica del trabajo. Usted puede estar completamente descansado en el sentido fsico aunque cansado por lo que est haciendo intelectualmente. Para dar los pasos apropiados uno necesita cierta medida de fatiga. Curiosamente Adolfo Hitler puede ayudar en esto. Es un informe a la Fundacin Neiman, William Lederer llam la atencin acerca de importantes documentos en la biblioteca de Harvard. Hacia finales de la Segunda Guerra Mundial. Hitler les pidi a los pocos cientficos sociales que quedaban en Alemania que averiguaran por qu la gente tomaba decisiones erradas. Cuando ellos informaron que eso suceda cuando estaban mentalmente exhaustos, les solicit que le dieran una lista de los signos de fatiga mental. Luego expidi una orden: cualquier oficial que presentara signos de fatiga mental deba enviarse inmediatamente de vacaciones. Afortunadamente para el mundo, Hitler no se aplic la orden a si mismo. Entre los signos de la lista de Hitler hay varios que yo encuentro tiles. Uno es el uso extremo de vulgaridades o blasfemias. De acuerdo a ese principio, por lo menos dos de nuestros recientes presidentes han estado mentalmente exhaustos. Cuando me encuentro diciendo maldita sea me doy cuenta de que es hora de relajarme. (Esa interjeccin ligera es un signo de mi edad lo mismo que de mi fatiga: nunca me sent bien con el lenguaje vulgar de la gente joven). Otros signos en la lista de Hitler incluyen una inclinacin a culpar a los dems de nuestros propios errores, dilatarse al tomar decisiones, una indiscrecin a trabajar ms horas de las normales, una inclinacin a compadecerse a s mismo, desgano para hacer ejercicios y para relajarse, y extremos en cuanto a dieta: o apetito glotn o casi nada de inters en la comida. Otras claves que he encontrado tiles y que no estn en la lista de Hitler son la mala letra al escribir y los errores al tocar el piano. Los efectos sobre mi manera de pensar son mucho ms difciles de detectar, pero he aprendido a observar algunos de ellos. Uno es hablar bobadas. El antiguo trovador cantaba o recitaba lneas estndar para darse tiempo de recordar lo que iba a decir a continuacin. Frases como en este punto es interesante anotar que ... o volvamos ahora a otro aspecto del problema... cumplen la misma funcin. Mantienen la atencin del auditorio hasta que uno encuentra algo que decir. El comportamiento verbal fatigado est tambin lleno de clichs, descripciones inexactas, frases mal compuestas, frases prestadas, citas memorizadas y los sabios refranes de Shakespeare. Estas son cosas fciles de decir que surgen cuando uno est cansado. Pueden impedirse, si acaso, solamente evitando la fatiga. Habra podido duplicar mi audiencia titulando mi artculo Auto-manejo cognoscitivo en la vejez. Cognoscitivo quiere decir tantas cosas que casi no hay duda de que se aplicar aqu. Pero podra haber descrito este campo mucho ms exactamente al hablar de auto-manejo verbal porque los problemas son principalmente verbales. He discutido algunos de ellos en un artculo que titul Cmo descubrir lo que uno tiene que decir, recientemente publicado en el Behavior Analyst. En un determinado momento estamos en posesin de un repertorio latente de comportamiento verbal, cualquiera de cuyos elementos presumiblemente tiene una probabilidad de ocurrirnos a nosotros. Como podra decir una persona de la calles, hay cantidades de ideas esperando a ocurrrsenos. Algunas de ellas han ocurrido muchas veces, estn fortalecidas por factores comunes de nuestra vida diaria, y por lo tanto son las ideas ms fciles de tener mientras pensamos o escribimos acerca de un problema, pero generalmente producen resultados de poco valor. Lo que vale la pena decirse la idea que es posiblemente nica a nosotros, porque es nicamente de nuestra experiencia y por lo tanto ms claramente llamada original- es menos probable que suceda. En pocas palabras, en la vejez surgen dificultades especiales debido a que el comportamiento verbal se vuelve menos y menos accesible. Tal vez no podemos hacer nada acerca de la accesibilidad, pero podemos mejorar las condiciones en las cuales ocurre el comportamiento verbal.
Ayuda el hacer que el comportamiento sea lo ms fcil posible; no existen muletas o sillas de ruedas para los impedidos verbales, pero hay apoyos prostticos, lpices adecuados, estilgrafos, papel, una buena mquina de escribir (un procesador de palabras si es posible), equipo de dictado y un sistema conveniente de archivo. Yo encuentro difcil pensar grandes pensamientos en el sentido de moverme fcilmente de una parte a otra de un prrafo, o de una parte de un captulo a otra. Las conexiones intraverbales son dbiles, y es posible que aparezcan inconsistencias. E remedio prosttico es utilizar esquemas, arreglos espaciales de los matariales de un prrafo, captulo o libro. Ayuda la anotacin decimal con dgitos sucesivos indicando captulo, seccin, prrafo o frase, en ese orden. Esto puede parecer como limitante, pero es una coaccin contra la deficiencia senil, las inconsistencias y la repeticin. Usted es libre de cambiar el esquema a medida que se desarrollo el prrafo o captulo. El hace un ndice mientras escribe le ayudar a contestar preguntas como estas: Ahora de donde saqu esto? o Dije yo esto?. Se cree que los que ya han pasado la juventud no tienen nada nuevo que decir. Jorge Luis Borges exclam: Qu puedo hacer a los 71 aos excepto plagiarme a mi mismo!. Entre las cosas ms fciles que decir estn las cosas que ya se han dicho, sea por otros o, especialmente por nosotros mismos. Lo que ya hemos dicho se parece mucho ms a lo que ahora debemos decir. Una de las experiencias ms desalentadoras de la vejez es descubrir que un punto que acabamos de presentar tan significativo, tan bellamente expresado, lo habamos presentado antes en algo que habamos publicado hace mucho tiempo. Pero uno puede decir cosas nuevas. El comportamiento verbal creativo no se produce ejerciendo la creatividad, se produce con un hbil auto-manejo. La creacin del comportamiento tiene los mismos problemas que la creacin de las especies. Es un proceso selectivo, y el surgimiento de algo nuevo el origen en el ttulo de Darwin- puede promoverse introduciendo variaciones. Es menos probable que usted se plagie a s mismo si se mueve a un campo nuevo o a un nuevo estilo. Un problema frecuente se denomina falta de motivacin. Los intelectuales viejos pierden inters; encuentran difcil trabajar; trabajan despacio. Es fcil atribuir este cambio a ellos, pero no debemos pasar por alto los cambios en su mundo. Donde se dice motivacin lase refuerzo. En la vejez, el comportamiento no se refuerza tan fuertemente. La vejez biolgica debilita las consecuencias de refuerzo. El comportamiento cada vez ms y ms va seguido de dolores y fatiga rpida. Las cosas tienden a volverse que no valen la pena hacerse en el sentido de que las consecuencias aversivas exigen un precio demasiado alto. Los reforzadores positivos se vuelven menos comunes y menos poderosos. La mala visin cierra el mundo del arte, el poco odo el goce de la msica de alta fidelidad. Las comidas no sabrn tan bueno y los tejidos ergenos se vuelven menos sensibles. Los reforzadores sociales se acentan. Los intereses y los gustos se comparten cada vez con menos gente. En un mundo en el que nuestro comportamiento no se refuerza generosamente, se nos dice que nos falta gusto, alegra de vivir, inters, ambicin, aspiraciones y cientos de otros estados mentales deseables y de sentimientos. Estos son realmente los subproductos de contingencias de refuerzo cambiadas. Cuando falta la ocasin para emitir un comportamiento fuerte o cuando ya no le siguen las consecuencias de refuerzo, estamos aburridos, desilusionados o deprimidos. Pero es un error decir que sufrimos de esos sentimientos. Sufrimos de las contingencias defectuosas de refuerzo, responsables de los sentimientos. Nuestro medio ambiente ya no mantiene un comportamiento fuerte. Nuestra cultura no refuerza generosamente el comportamiento delos ancianos. Tanto la afluencia como el bienestar destruyen las contingencias reforzantes, y lo mismo hace la jubilacin. Los viejos no son especialmente importantes para los jvenes. Cicern describi este punto en su obra Senectud: La vejez es honorfica a condicin de que se defienda a s misma, mantenga sus derechos, no sea servil a nadie, y hasta su ltimo suspiro se mantenga en su sitio. Rechazamos el consejo sabio cuando volvemos las cosas a la otra generacin; perdemos nuestra posicin en el mundo y destruimos importantes reforzadores sociales. Los padres que dan sus fortunas a los hijos y luego se quejan de que ellos los descuidan, son el ejemplo clsico, y los intelectuales viejos frecuentemente hacen lo mismo cuando terminan
su trabajo con la esperanza de estar satisfechos con bien merecidos resultados. Se tornan obsoletos mientras el mundo se mueve hacia delante. Un reforzador comn afecta la vejez de una manera diferente aunque igualmente destructiva. Los intelectuales viejos entran en posicin de in recurso nico, sus memorias. Aprendieron que podran mantener una audiencia impaciente con reminiscencias personales. Thorndike Oh, yo no lo conoc muy bien. Yo tambin he sido un poco culpable de este comportamiento de citar nombres cuando otros reforzadores eran escasos, y he estado envuelto ltimamente en reminiscencias al escribir mi autobiografa. El problema es que lo lleva a uno hacia atrs. Uno empieza a vivir su vida en direccin errada. Hay otras cosas diferentes de los recuerdos que pueden ser explotadas por los viejos, y puede ser til hacer una cuidadosa evaluacin de nuestras posesiones. Harvey Lechman encontr que en ciertos campos, la fsica terica por ejemplo, se hacia el mejor trabajo mucho antes de los 40 aos. Qu haran entonces los fsicos tericos el resto de sus vidas? Hace 20 aos le hice a Lechman esa pregunta acerca de mi mismo (espero que mi referencia personal de Lechman los haya cautivado a ustedes) Yo cre que mi ciencia era bastante rigurosa, y tal vez me encontraba al finadle mi vida productiva como experimentador. Qu iba a hacer? Administracin, me dijo Lechman. Pero yo haba sido antes Director de Departamento, y esa no era una alternativa atractiva para mi. Me volv entonces hacia temas ms amplios en el diseo de culturas culminando con la publicacin de mi libro Mas all de la Libertad y la DignidadK. Aqu se trata de algo ms que de tema. Todo el repertorio que nosotros llamamos intelectual se adquiere cuando uno es joven. Sobrevive como un estilo de vida cuando se envejece, cuando es ms difcil realizarlo. Si el comportamiento intelectual fuera tan obvio como el baseball, entenderamos el problema. La solucin sera simplemente reemplazar un repertorio con otro. Las personas que se mudan de una ciudad a otra sufren una pequea depresin, lo que parece ser simplemente el resultado de un repertorio antiguo de comportamiento se ha vuelto intil. Las viejas tiendas, restaurantes, teatros, y amigos ya no estn all. La depresin puede combatirse adquiriendo un nuevo repertorio comportamental. Es necesario en la vejez adquirir nuevas maneras de pensar, adoptar un nuevo estilo intelectual, dejando que el tamao del repertorio adquirido a lo largo de la vida compense la prdida de habilidad para hacer uso de l. Debemos preguntarnos para qu escribimos artculos o libros. En el mundo intelectual la respuesta rara vez es el dinero. (si excluimos a los autores de texto de gran xito), y en cualquier caso, las circunstancias econmicas en la vejez no se mejoran fcilmente. En la respuesta a prestigio o fama, el problema puede ser la extincin si no logramos prestigio, o la saciedad si hay exceso de prestigio. No hay mucho que hacer al respecto, sino una explicacin, y una que sugiera una accin til: que el intelectual en su escritorio no recibe los previamente acostumbrados e inmediatos refuerzos; las frases no estn diciendo lo que deberan decir; las soluciones a los problemas estn fuera de su alcance; las situaciones no estn eficazmente caracterizados; las secuencias no estn en el orden correcto; con frecuencia la seguimos es non. Algo puede hacerse acerca de esto, como lo suger en el artculo anteriormente mencionado. Los reforzadores no necesitan recibirse muy frecuentemente si fuimos anteriormente afortunados de haber sido reforzados en tan buen programa. Un programa extendido de razn variable se refiere al proceso que todos hemos experimentado cuando adquirimos el gusto por la buena literatura, en los momentos de refuerzo se suceden con mucho meno frecuencia que en la literatura barata. En las tiras cmica usted se re al final de cada cuatro cuadros, y en la literatura barata algo interesante es esencialmente aprender a leer durante periodos ms y ms largos de tiempo antes de llegar a un pasaje conmovedor, un pasaje muchsimos ms conmovedor por haber adquirido una larga preparacin. El juego es reforzado en un programa de razn variable y los jugadores patolgicos muestran el efecto de una historia en la cual empezaron con razonable xito y solamente despus agotaron sus recursos. Muchos de los reforzadores en la vejez tienden a estar en un programa de razn variable. El Marqus de Sade describi muchos ejemplos interesantes. El mismo proceso puede explicar la persistencia del intelectual viejo. Si sus realizaciones como pensador han sido espaciadas en un programa favorable, usted no tendra dificultad para mantenerse
activo aunque sus realizaciones acutales estn muy espaciadas. Como el jugador enviciado, usted gozar su vida como pensador a pesar de la utilidad negativa. Una audiencia es una variable independiente descuidada. Lo que uno diga est determinado de manera muy importante por quin es a quien uno le est hablando. Pero el profesor retirado ya no habla con sus alumnos, el cientfico retirado ya no comenta su trabajo con sus colegas. La gente vieja se encuentra pasando el tiempo con otros que no estn interesados en su rea especfica. Puede recibir menos invitaciones a hablar o encuentra difcil aceptarlas. Aquellos que leen los artculos o los libros que escriben estos ancianos estn muy lejos en el tiempo para servir de audiencia. Una medida apropiada de auto-manejo intelectual es organizar discusiones aunque slo sea en grupos de dos. Encuentre a alguien con intereses similares. Dos cabezas juntas son mejores que separadas. Al hablar con otra persona se nos ocurren ideas que no nos suceden cuando estamos solos en nuestros escritorios. Algo de lo que decimos puede tomarse prestado de lo que el otro dice, pero el mero hecho de rener a alguien que lo diga es generalmente importante. Al buscar una audiencia cercirese de que aquellos estn tratando de ser tiles y no simplemente que estn listos a adularlo. La segunda niez nos devuelve al rango de aquellos profesores de Kinder que dicen pero si eso est muy bien!. Excepto que ahora, en vez de decir Oh verdaderamente ests creciendo, dirn realmente no esta envejeciendo. Como he notado en otra parte, aquellos que ayudan a los que pueden ayudarse a s mismos trabajan en una cierta destruccin, haciendo que las cosas buenas de la vida no sean ya adecuadamente contingentes con el comportamiento. Si usted ha tenido mucho xito, las ms absurdas estupideces que Ud, diga sern recibidas como perlas de la sabidura y sus estndares caern instantneamente. Si usted sigue luchando por tener xito, la adulacin con frecuencia lo coloca en el camino errado al reforzar la conducta intil. Bien, aqu estamos. He estado pegndole a esa bola de ping-pong suficiente tiempo. He presentado algunas formas en la cuales he tratado de impedir volverme viejo como pensador, y adems les he dado un ejemplo del resultado. Tal vez ustedes quieran ahora hacer una comparacin con otra especie diferente y concluir, si se me permite citar al Dr. Jonson, Seor, un pensador de edad avanzada es como un perro caminando en sus patas traseras. No lo hace bien; pero uno no se sorprende de encontrar que es capaz de hacerlo.