Leyenda de La Virgen de Guadalupe
Leyenda de La Virgen de Guadalupe
Leyenda de La Virgen de Guadalupe
PATRONA DE NASCA
Cuenta la historia que en las primeras décadas del siglo XIX (1800) era
costumbre de los pueblos de Nasca y Palpa, formar grupos para viajar a
pescar lenguados, mariscos, cangrejos y otras especies a las lejanas playas
de Caballas, Santa Ana, San Nicolás, Marcona y Tres Hermanas, generosas
en especies marinas, como también en busca de sal, la que se encuentra en
abundancia por aquellos lugares. Estos viajes, por aquel entonces, lo hacían
a lomo de mula, formando las recordadas "piaras" o"recuas" de acémilas.
Aprovechaban también para cazar venados, tarugas y vizcachas, animales
que abundaban en las tranquilas lomas de aquellos tiempos. Fue así que
unos de estos grupos de pescadores, según la tradición, estaban pescando
entre las playas de Coyungo y San Ana, lugar preferido por la gente de
playa, por hallarse cerca del lugar denominado "Monte Grande", sitio que
reunía las condiciones necesarias para el viajeros como pastos frescos y
manantiales de agua dulce y además de existir una cueva que era usada
como pascana para dormir a cubierto. Y varios gritaron ¡Mira! un cajón
negro, en la playa varado está; corrieron todos a ver la caja, tuvieron miedo
y con gran sigilo se acercaron a la rara caja. El más audaz fue a pulsearla;
la sintió pesada y al punto dijo, "somos ricos, la caja pesa, vamos a abrirla
para ver qué tiene". Y abrieron la caja, ¡Oh, Dios Santo! Gritaron todos; es
una Virgen.