Vuestra Revolución No Es La Mía
Vuestra Revolución No Es La Mía
Vuestra Revolución No Es La Mía
FILM:
http://www.youtube.com/watch?v=om-S5_JeNn0&feature=related
LIBRO:
http://ecritscorsaires.free.fr/
http://personal3.iddeo.es/arridi/mayo.ht
m
Muchos de ustedes estaban esperando con impaciencia, otros
temían su lanzamiento y más que nada habría acogido con
satisfacción un poco de retraso ...
Algunos mal que ya están circulando versiones traducidas en el
astuto ...
... Las principales películas y François Lonchampt Yasushiro Ozu,
alojamiento gratuito para la pequeña pantalla y Lonchampt libro
Tizón "Su revolución no es mía", publicado en 1999, ediciones
Sulliver, está disponible en Ioutube! Esto es parte 5, pero se puede
ver independientemente de los otros 9.
Cuando Lefort, Castoriadis, Morin, Bounan, Camatte, Jappe, Görtz,
Marcuse, y todos los magos que sostienen que la clase obrera está
integrado, o ya no existe, será definitivamente refutadas!
Cuando las luchas de clase y el concepto central de las operaciones
se presentan en el centro de la explicación del mundo
contemporáneo y su evolución!
Cuando el pensamiento de Michel Foucault, ahora reservorio
inagotable de paltoquets que dobló a la pérdida de todos los puntos
de vista desde el que se puede hacer una evaluación general de
esta compañía, se denuncia por lo que realmente es ahora , en
contra de una teoría revolucionaria de nuestro tiempo!
O el interrogatorio a encontrar algunos de aporía heredado del
antiguo movimiento revolucionario, algunas de estas rutinas de
pensamiento heredado del pasado, convertido, por falta de nuevas
obras, las variantes de un mismo pensamiento único, como dijo
André Prudhommeaux, el rendimiento de la única crítica, el
fanatismo, el materialismo que simplemente no es su contraparte
sin plato perfecto, y el optimismo ingenuo de algunos Rousseauism,
el cinismo y la brutalidad de los demás, el frío, la mala fe, la la
iluminación, el gusto por la destrucción y el nihilismo, la
supervivencia de los antiguos y milenarios antecedentes
apocalíptica, el fetichismo de la Asamblea General y la lucha contra
el principio jerárquico empujado a la absurda, inmoderado gusto por
la provocación y la immoralism militante heredado de Sade y el
dadaísmo, que ayudó a marginar a las últimas tendencias de
verdadera ola revolucionaria que se agotó en 30 años ...
Donde encontrará todo esto y muchas otras cosas, las razones para
la esperanza, y la revuelta, nuevos pensamientos, palabras de
orden, de la pasión, la intriga, el diálogo y el misterio, suspenso y
encanto de la vida en el fondo ...
Prefacio
Alain Tizon, François Lonchampt, 1999
"Todo el fondo, todas las exasperaciones de nuestra querella giran en torno de la palabra
Revolución."
En 1968, en plena sociedad de consumo y del pleno empleo, estalla la primera huelga
general salvaje que paraliza un gran país europeo. Se cuestionan todas las instituciones, se
ocupan fábricas, oficinas y edificios públicos, por todas partes se crean "comités de acción" y
se asiste a una extraordinaria liberación de la palabra e, incluso, a algunas tentativas de
reorganización revolucionaria de los intercambios bajo el control de esos comités. En ese
clima de exaltación y libertad, algunos creyeron ver la posibilidad de llevar la crítica de la
sociedad mercantil hasta sus últimas consecuencias y de reanudar el sueño de una historia
por fin transparente a los hombres que la realizan. No todos los que se lanzaron entonces a
todo tipo de viajes y aventuras, políticas y existenciales, han guardado en su fuero interno la
necesaria reserva para operar a tiempo un razonable giro estratégico.
No todos los que sintieron la sacudida de Mayo se han convertido en grandes modistos,
periodistas de "Libé" o productores cinematográficos, que en su mayor parte arrojan una
cínica mirada sobre su juventud y que hoy pisotean lo que constituía el honor de sus veinte
años. Esos tienen el derecho a todo nuestro desprecio.
Otros no resistieron lo que Pasolini calificaba en sus Écrits corsaires "uno de los periodos
reaccionarios más violentos y quizás más decisivos de la historia [1]". Todos conocimos a
alguien para quien esta historia ha acabado muy mal. Ebrios de vida en Mayo, no resistieron
los años oscuros y no consiguieron dar rumbo a su vida. Algunos se suicidaron, otros
acabaron en la miseria, las drogas, o víctimas de estúpidos y premeditados accidentes.
A ellos dedicamos este libro, así como a quienes, en la actualidad, se mantienen
dignamente.
Este libro es el fruto de una tentativa para sobrepasar las decepciones de estos veinte
últimos años, de honrar ese espíritu de Mayo, a pesar de sus ambigüedades, y para aportar
razones a quienes no han renunciado a esperar, así como a las nuevas generaciones
asfixiadas por el culto al Dios-Yo y que, a menudo, no oyen hablar de aquel tiempo sino a
nuestros enemigos.
Para escribirlo, y para conjurar una suerte que nos fue contraria, nos ha sido necesario
sumergirnos dolorosamente en un pasado en el que muchos de nuestros sueños se han
perdido, ya que parece que todas las tentativas en las que nos jugamos nuestra existencia
no han contribuido sino al advenimiento del mundo que hoy día conocemos.
Pues hasta hace poco, aún vivíamos a la espera de un enfrentamiento decisivo que trajese
ineluctablemente la quiebra de todos los tiempos, el declive y la caída de la economía
mercantil, el advenimiento de la sociedad sin clases y el reino de la libertad. Completamente
convencidos de que "retardar la hora del levantamiento de los obreros en cada país
constituía la única y real preocupación de la estrategia política mundial de los estados [2]",
igual que los autores de una revista de ultraizquierda [3] en 1976, habríamos podido escribir
que "nuestra época contempla el desarrollo, y contemplará la extensión de una tendencia
inherente a todas las instituciones y a todos los aspectos de la vida dominante (...) la crisis
muestra la fragilidad del sistema (...) los disturbios de los negros americanos, Mayo 68, el
mayo rampante italiano, la insurrección polaca, la revolución portuguesa, las huelgas y las
manifestaciones españolas que preludian un enfrentamiento de gran magnitud, han mostrado
e ilustrado el nuevo punto de partida de la revolución (...) la evolución general nos parece
clara. Lleva al comunismo".
Pero el asalto de los proletarios a todas las plazas fuertes del viejo mundo ha sido
desactivado, y hemos conocido el fracaso de larevolución en un sistema capitalista que
funciona bien que nos había anunciado la Internacional Situacionista.
Por doloroso que pueda resultar, es necesario que pongamos en cuestión un buen número
de certidumbres e intentar comprender la manera como hemos sido atrapados tan
rápidamente y, después, sobrepasados por esta sociedad que queríamos destruir y que, a
nuestro pesar, hemos contribuido a perfeccionar.
[4] "La decadencia del régimen capitalista es el periodo durante el cual aquél entra en un
estado de crisis permanente mientras continúa desarrollando las condiciones materiales y
humanas para la aparición de un orden social superior ; dicho de otro modo, mientras
continúa desarrollando las premisas de la revolución socialista. La descomposición de ese
régimen comenzaría, por el contrario, a partir del momento en que la posibilidad objetiva de
creación de un orden social superior desapareciese, es decir, cuando el sistema arrastrase
en su decadencia las premisas de la revolución socialista. Es ahí, precisamente, cuando se
da la posibilidad de la barbarie moderna, no ya como tendencia que se desarrolla
constantemente en la sociedad de la explotación, sino en tanto que fase de descomposición
durante la cual tanto las fuerzas productivas, como la conciencia de clase revolucionaria
conocerían una regresión sensible y duradera. La barbarie moderna sería el periodo histórico
en el que la posibilidad de la revolución comunista estaría ausente". P. Chaulieu, "La
consolidation temporaire du capitalisme mondial", Socialisme ou Barbarie,1948.
[5] Sin duda, por revolución comunista no entendemos ninguna de las que pretenden o han
pretendido haber triunfado en el siglo XX con ese nombre.