Historiadelapsicociruga LobotomadelPremioNobelaloprobio PDF

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Historia de la psicociruga.

Lobotoma: del Premio Nobel al oprobio Diego Hernndez *, Zaloff Dakoff Juan Manuel *, Rosler Roberto * + * Docente de Neurologa. Carrera de Medicina. + Docente de Filosofa e Historia de la Medicina. Carrera de Medicina. Universidad Abierta Interamericana. Buenos Aires. Palabras clave: psicociruga historia lobotoma Premio Nobel

Resumen En 1949, Egas Moniz, un prestigioso neurocirujano portugus, recibe el Premio Nobel de Fisiologa o Medicina por su descubrimiento del valor teraputico de la lobotoma prefrontal en determinadas psicosis. Hasta ese momento no se ha entregado un Nobel en esta categora a un procedimiento quirrgico, y menos an tan especfico, lo cual nos da una idea de la soberana importancia que tuvo en su momento el desarrollo de esta prctica. Desde 1935 a 1955 se realizan decenas de miles de intervenciones, en diversos pases de Europa, en Japn y en EE.UU. En la dcada de 1960 con el desarrollo de los frmacos antipsicticos, la laureada lobotoma es erradicada e incluso considerada por la comunidad psiquitrica como una prctica barbrica, llegando a declararse ilegal en varios pases.

Introduccin Lobotoma o leucotoma prefrontal se denomina a un procedimiento quirrgico por el cual se seccionan fibras nerviosas de la regin frontal del cerebro, desconectando la corteza frontal del resto del cerebro. El procedimiento consiste en perforar el crneo e introducir instrumentos especiales para seccionar las fibras nerviosas del lbulo frontal. La hiptesis que sostiene este procedimiento est dada por el conocimiento de la implicancia que tiene la corteza frontal en el control y modulacin de la conducta y las emociones en seres humanos y primates superiores. De esta forma, muchas patologas como la depresin, la ansiedad generalizada, las psicosis y el trastorno obsesivocompulsivo tendran relacin con alteraciones neurofisiolgicas en la corteza frontal. Antecedentes Segn la descripcin del Dr. C. George Boeree 1 en A Brief History of the Lobotomy, la idea de la ciruga como tratamiento de los problemas de salud mental surgen alrededor de 1890, cuando Friedrich L. Goltz2 reseca porciones de los lbulos temporales de sus perros, observando que luego del procedimiento stos se muestran ms tranquilos y menos agresivos. Es seguido rpidamente por
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Holanda 1952, Profesor de psicologa Universidad Shippensburg, Pennsilvania EE.UU. Investigador alemn, 1834-1902

Gottlieb Burckhardt 3 , a cargo de una institucin mental suiza, que procura cirugas similares en seis de sus pacientes esquizofrnicos. Algunos logran mitigar los sntomas agresivos, y mostrarse de hecho ms tranquilos. Dos pacientes mueren. Con este antecedente, uno pensara que este es tanto el comienzo como el final de la idea. Pero en 1935, Carlyle Jacobsen de la Universidad de Yale (New Haven, Connecticut, EE.UU.) practica lobotomas en chimpancs, logrando el objetivo de que se muestren ms calmos luego del procedimiento. Su colega en Yale, John Fulton4, analiza el temperamento de dos chimpancs, Lucy y Becky. En ambos animales describe diferentes alteraciones emocionales como frustracin y ansiedad cuando los chimpancs no consiguen sus objetivos. El comportamiento de Becky es descrito como neurosis experimental. Despus de un perodo de entrenamiento, les extirpa los lbulos frontales del cerebro y estudia nuevamente sus respuestas emocionales. La neurosis de Becky ha desaparecido, se encuentra menos ansiosa y ms tranquila. De esta forma preliminar se intenta plantear la posibilidad de regular los trastornos psiquitricos por medio de lesiones en el lbulo frontal que aboliran trastornos conductuales o emocionales patolgicos, relacionados principalmente con la agresividad. Desde fines del siglo XIX y hasta la primera mitad del siglo XX, la psiquiatra como especialidad tiene un campo de accin sumamente reducido. Los fracasos teraputicos5 han horadado las esperanzas y empujan a crear definiciones peligrosas como la idea imperante de que la psicosis y otras alteraciones son enfermedades hereditarias. Esta es una postura derivada de algunas corrientes epistmicas del siglo XIX, como el determinismo fisiolgico y el degeneracionismo, que sostiene entre otras cosas la irreversibilidad de ciertas condiciones asociadas a grupos familiares afectados por enfermedades mentales, (degenerados). Estas corrientes hacen eco de los temores burgueses en una sociedad de masas marcada por la intranquilidad proletaria y la amenaza socialista. En este contexto desalentador, el emergente es esta agresividad que desvela a los mdicos, y es en este aspecto donde se pone mayor nfasis en la bsqueda de soluciones. El nico y exclusivo objeto de la reclusin de enfermos mentales en esta poca es aislarlos de la sociedad sana; consecuentemente, no preocupa la locura en s (como ya vimos es algo irresoluble), sino si la agresividad asociada puede ser un problema de manejo en instituciones mentales con escaso personal, sobrepobladas y con nulos recursos teraputicos para controlar estas manifestaciones. La lobotoma en este contexto surge como un recurso invaluable.

El Premio Nobel

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Psiquiatra suizo, 1836-1907 Neurofisilogo estadounidense 1899-1960 5 Algunos de estos fracasos teraputicos son el shock insulnico en esquizofrenia y electroshock en depresin. Estos procedimientos reflejan: 1. la desesperacin de los psiquiatras para ofrecer algo a la masa de enfermos mentales. 2. la impotencia de los pacientes frente a mdicos imprudentes. 3. lo fcil que los pacientes se transforman en animales de experimentacin.

El 29 de noviembre de 1874 en el seno de una familia de la aristocracia rural, nace en la villa de Avanca (Portugal) Antonio Caetano de Abreu Freire, un neurlogo, psiquiatra y neurocirujano portugus con una interesante y prolfica vida. Su to, el sacerdote Caetano de Pina Resende Abreu S Freire, hace agregar Egas Moniz al apellido, en virtud de que la familia desciende en lnea directa de Egas Moniz (1080-1146), consejero del rey Alfonso I de Portugal (1109-1185). Estudia medicina en la Universidad de Coimbra (Portugal), completando su formacin como mdico en Bordeaux y Pars (Francia). En 1902 es designado profesor en la Universidad de Coimbra, y en 1911 es transferido a su nuevo cargo de Jefe de Neurologa en Lisboa, donde permanece hasta su muerte. En 1903 ingresa a la poltica como diputado del parlamento portugus hasta 1917 cuando es designado embajador en Espaa. Entre otras de sus diversas actividades se destacan el haber sido Ministro de Asuntos Exteriores de Portugal, presidente de la delegacin portuguesa en la conferencia de paz del armisticio de Pars en 1918, y primer presidente de la Sociedad Espaola de Neurociruga, la segunda en el mundo, luego de la estadounidense. Hacia 1930 ya es una consagrada eminencia mundial por haber inventado la angiografa cerebral (procedimiento de diagnstico por Rayos X para visualizar las arterias y venas del cerebro), y su nombre resuena como candidato al Nobel por este notable aporte al diagnstico mdico. Pero deber esperar casi dos dcadas y otro argumento para alcanzar este galardn. En 1938 (contando con 63 aos de edad), un paciente psiquitrico suyo le dispara ocho tiros, dejndolo paraltico el resto de su vida. El paciente aduce que el mdico no le est dando las drogas adecuadas para su enfermedad. Once aos despus, en 1949, finalmente Moniz obtiene el Premio Nobel de Fisiologa y Medicina, compartido con el neurlogo suizo Walter Rudolf Hess6. Cmo llega Egas Moniz al Premio Nobel? En 1935 se celebra en Londres el III Congreso Internacional de Neurologa, al cual acuden algunas de las figuras ms prominentes de la neurociencia experimental como Pavlov 7 y Wilder Penfield 8 . Egas Moniz asiste al congreso con el objetivo de mostrar su nueva tcnica pionera de diagnstico, la angiografa cerebral. Coincidentemente en el mismo congreso, John Fulton expone sus experimentos sobre la fisiologa de los lbulos frontales y las arriba mencionadas lobotomas en chimpancs. Moniz asume la posibilidad de lograr los mismos resultados en seres humanos, con el objetivo de reducir o abolir el componente agresivo de los trastornos psiquitricos. A diferencia de Fulton, sortea la engorrosa fase metodolgica de la experimentacin animal y salta directa y presurosamente a los lbulos frontales de seres humanos. Junto con su colega neurocirujano, Almeida Lima, avanza con las lobotomas en una veintena de pacientes internados en una institucin psiquitrica. En 14 de estos 20 pacientes se reporta una considerable mejora. A partir de ah sus resultados cobran notoriedad; acua el trmino psicociruga para denominar esta nueva disciplina, y producto de esto se dispara una fiebre lobotmica por

(1881-1973) Logra el Premio Nobel por su trabajo sobre el mapeo de las reas cerebrales envueltas en el control de los rganos internos. 7 (Ivan Petrovich) fisilogo ruso (1849-1936) 8 Neurocirujano canadiense (1891-1976)

toda Europa y EE.UU. Moniz nunca reconoce que los resultados observados en los chimpancs de Fulton han sido su inspiracin. Egas Moniz no asiste a la entrega del Premio Nobel. De todas formas, en la cena de gala Carl Skottsberg9, Presidente de la Academia Real de Ciencias de Suecia, se dirige al laureado con estas palabras que resumen la consideracin sobre Moniz que se tena en la poca: El profesor Moniz era un notorio erudito en varios terrenos cuando, accidentalmente, arrib a la conclusin que el bistur podra ser el alivio o an la cura de pacientes que sufren de ciertos disturbios psiquitricos serios. Se puso a trabajar con audacia, y a los 61 aos realiz su primera operacin cerebral con este propsito. Su mtodo se practica actualmente por todas partes con muy buenos resultados. Lamentamos que no haya podido venir, porque hubisemos tenido la satisfaccin de conocer a este hombre maravilloso, un cientfico famoso, un historiador, un poltico, un estadista y un diplomtico, todo en una persona, y tanto ms pues l es el primer portugus cuya carrera se corona con un Premio Nobel. Pedir que el representante oficial de Portugal amablemente felicite al profesor Moniz en nuestro favor y le exprese nuestra gratitud y admiracin10 Egas Moniz fallece el 13 de diciembre de 1955, habiendo inaugurado el captulo de la psicociruga con la implementacin de la lobotoma frontal, pero resulta insignificante su aporte cuando se compara con el legado del siguiente personaje, quien lleva esta prctica a escala global. El lobotomista entusiasta El principal proponente de la lobotoma en EE.UU. fue Walter Freeman11, un neurlogo y psiquiatra de la escuela de medicina de la Universidad George Washington (Washington DC, EE.UU.). En junio de 1937, en la reunin anual de la Asociacin Mdica Americana, Freeman y su colega, James W. Watts 12 , presentan datos sobre 20 pacientes sometidos a lobotoma. Trece de estos 20 pacientes mejoran notablemente luego del procedimiento. Como ejemplo, describen entusiastamente el caso de una ama de casa de 63 aos, con un cuadro de ansiedad y agitacin progresivas de aos de evolucin, a quien la lobotoma
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Botnico y explorador de la Antrtida (1880-1963), adems de Presidente de la Real Academia de las Ciencias de Suecia, en 1949 fue miembro de la Royal Society de Londres y Presidente del 7 congreso internacional de botnica en 1950. 10 Traduccin del autor tomada de: http://nobelprize.org/nobel_prizes/medicine/laureates/1949/moniz-speech.html 11 Al igual que Egas Moniz, Walter Jackson Freeman II (1895-1972) tambin proviene de una familia distinguida e influyente. Nace en Filadelfia, Pennsylvania (EE.UU.), con el antecedente de ser su padre un exitoso mdico, y su abuelo, William Keen, Presidente de la Asociacin Mdica Americana. Freeman se grada en la prestigiosa Universidad de Yale, abocndose luego a la neurologa y la psiquiatra. 12 Neurocirujano estadounidense (1904-1994)

mejora significativamente su calidad de vida ya que, segn la visin de los autores, le permite llevar adelante las cuentas y tareas del hogar, gozar de las relaciones sociales, concurrir al teatro y conducir su propio auto 13 . Esta presentacin motiva una feroz discusin entre colegas; por un lado algunos miembros de la profesin condenan de entrada el procedimiento por considerarlo brutal, lesivo y carente de suficiente base cientfica, otros por el contrario, abrazan la prctica y se transforman en los responsables de las casi 400.000 lobotomas realizadas de ah en ms por todo el mundo. Alentado por sus resultados, el entusiasmo de Freeman lo lleva a desarrollar en 1946 la lobotoma transorbitaria, o lobotoma con picahielo (icepick lobotomy), ya que el instrumento con el cual se perfora directamente el techo de la rbita semeja un picahielo. Este procedimiento que hoy erizara la piel de cualquier neurocirujano, consiste en introducir con un golpe de martillo este punzn de metal a travs del techo de la rbita (que comunica directamente con el lbulo frontal) seccionando las fibras nerviosas. De esta manera transforma la lobotoma en una prctica ambulatoria y rpida, prescindiendo de quirfano o anestesia general. Sumamente adecuado para realizar en las instituciones mentales donde no se cuenta con infraestructura quirrgica especial. Freeman recomienda el procedimiento para una amplia gama de trastornos psiquitricos que van desde la psicosis a la depresin, desde la neurosis a la criminalidad. Desarrolla lo que se conoce como lobotomas industriales o en cadena de montaje, ya que realiza el procedimiento en varios pacientes a la vez, incluso probndose a s mismo en velocidad, y superando sus propios rcords. Se debe reconocer que ms all de lo ticamente censurable, Freeman mantiene cierta ecuanimidad en sus publicaciones, y no soslaya referencias a las complicaciones observadas, como el desarrollo de diferentes grados de sndrome frontal, crisis epilpticas, apata, dificultad en la atencin, trastornos en el comportamiento y disminucin en la capacidad para experimentar emociones. Dos factores caracterizan el boom de la lobotoma transorbitaria: por un lado, la inexistencia de alternativas teraputicas satisfactorias, y por otro la propia y exitosa labor promocional de Freeman. Cuando el huracn lobotmico termina en 1960, se han realizado, slo en EE.UU., 100.000 lobotomas, incluyendo a Rosemary Kennedy14, una mujer con retardo mental leve que empeora sus funciones cognitivas luego de una lobotoma realizada por el propio Freeman.

Derivaciones socioculturales Es importante evaluar los eventos histricos en su contexto temporal. Aunque la nocin de seccionar el cerebro para resolver la agresividad de las personas y volverlas sumisas y manejables, resulta ticamente reprobable desde la perspectiva cientfica actual, la posibilidad de transformar un paciente psiquitrico violento en un ser aptico, indiferente y dcil, es percibido socialmente como un triunfo teraputico en las dcadas de 1940 y 1950.
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Traduccin del autor tomada de: Lerner BH. Last-Ditch Medical Therapy -Revisiting Lobotomy. N Engl J Med 2005 Jul 14; 353 (2): pg. 119 14 Hermana de John F. Kennedy (presidente de EE.UU. 1961-1963)

Este comportamiento podra tener su origen en el positivismo y en el determinismo biolgico que dominan las ciencias naturales a fines del siglo XIX y principio del siglo XX, y que propenden a generar posturas reduccionistas en la traslacin de los resultados observados en ciencias bsicas hacia el campo de la medicina en este caso. Otro elemento contribuyente a este fenmeno reduccionista es el aporte de la frenologa, que si bien se halla desacreditada entrado el siglo XX, ha dejado su impronta en el ambiente mdico. El modelo de pensamiento que se aplica es el siguiente: se parte del supuesto determinista que los trastornos mentales radican en conexiones neurales anmalas en el lbulo frontal (que podra ser cierto, pero que no es seguro) y, aplicando el ms drstico reduccionismo se llega a la conclusin que cortando estas conexiones anmalas se soluciona el problema. Esto lleva al peligroso extremo de establecer casi un enfoque frontalocntrico15 de la patologa psiquitrica como es la perspectiva de Walter Freeman. Determinismo, evolucionismo y frenologa aportan quizs el marco filosfico que justificar algunas iniciativas, como es el caso de la lobotoma, dentro de la comunidad mdica en la primera mitad del siglo XX. Los protagonistas principales (Moniz y Freeman) en este contexto, renen caractersticas comunes -como reflejan sus biografas-, y representan prototipos de esta poca: un origen privilegiado, formacin en centros universitarios de gran prestigio, y adems de una considerable ambicin, un slido reconocimiento de pares reflejado en sus logros acadmicos. Todas estas cualidades agregan posiblemente un sentido de omnipotencia en el papel de lderes de la comunidad mdica, que los lleva a transgredir ciertos lmites ticos y morales, que si bien hoy por hoy son fuertemente cuestionables, no son explcitamente objetados por la comunidad cientfica de la poca, ni por la sociedad que, por el contrario, los avala ampliamente. Aos despus, por otro lado, la imagen negativa de la lobotoma ingresa a travs de la literatura, con la novela de 1962 de Ken Kesey16 One Flew Over the Cuckoo's Nest (Alguien vol sobre el nido del Cuckoo), luego llevada al cine en 1975. En ella se describe el estado casi catatnico en que queda su protagonista luego de ser sometida a una lobotoma. Por nuestros das, Christine Johnson cuya abuela fue sometida a una lobotoma en 1954, ha fundado un sitio de internet -www.psychosurgery.orgdedicado a las vctimas de la lobotoma, y cuyo principal objetivo es promover la rescisin del Premio Nobel otorgado a Egas Moniz en 1949.17

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Referido al lbulo frontal como origen exclusivo de la patologa psiquitrica. Escritor estadounidense 1935-2001 17 Como si se tratara de una tragedia histrica que debiera ser reconocida y reparada en el presente, en su portada este sitio expresa la siguiente dedicatoria: Este sitio est dedicado a las vctimas de la lobotoma. Psychosurgery.org busca honrar sus memorias y aseverar que la tragedia no ha sido olvidada. La lobotoma no fue un procedimiento en el margen de la ciencia. Fue un tratamiento convencional recomendado por muchos mdicos e instituciones prestigiosas, alabado en artculos, y recomendado como un asombroso avance neuroquirrgico. Ms an, al inventor de la operacin, Egas Moniz, le fue concedido un Premio Nobel por ello. Si deseamos sinceramente evitar repetir los errores de los tratamientos psiquitricos del pasado, debemos estudiar con denodada honradez el fiasco de la lobotoma y otras psicocirugas relacionadas (traduccin del autor)

De 1960 a la actualidad Con la introduccin de la clorpromazina -una droga especfica para el tratamiento de la psicosis- en 1954, se logra finalmente la ansiada quimera de tratar las enfermedades psiquitricas con medicacin. La clorpromazina permite controlar satisfactoriamente los sntomas agresivos de numerosas entidades patolgicas en el campo de la neuropsiquiatra. La disponibilidad de una terapia farmacolgica eficaz en contraposicin del dilema tico y los efectos secundarios de la lobotoma, y de su uso, conducen a la desaparicin repentina y casi completa de la psicociruga como disciplina. Diferentes alegaciones, como la falta de criterio objetivo o de bases cientficas para su empleo, e incluso su posible utilizacin como un modo de control social, culminan con la creacin, en 1977, de una comisin nacional que examina las prcticas neuroquirrgicas llevadas a cabo en EE.UU. sobre diferentes patologas psiquitricas desde lobotomas frontales a los procedimientos estereotcticos. Se presta especial cuidado al anlisis de eficacia y seguridad de estas tcnicas. Tal como expresa el responsable de la comisin en su informe: A la vista de los datos obtenidos, observamos que nuestros prejuicios realmente carecen de base. Personalmente, no esper llegar a estar de acuerdo con la psicociruga, pero pude observar, al igual que el resto de los miembros de la comisin, que algunos pacientes con una enfermedad muy avanzada se han beneficiado de este tipo de ciruga. Sorprendentemente, la comisin queda muy impresionada por el beneficio potencial de la neurociruga psiquitrica, al punto de recomendar la elaboracin de una revisin ms extensa de estos procedimientos y el seguimiento de un mtodo ms cientfico; sin embargo, este estudio nunca se lleva a cabo. De todas formas, si analizamos concienzudamente esta respuesta contraria a lo esperable, comprenderemos la vigencia del determinismo en la interpretacin de algunos hechos cientficos, independientemente de los juicios ticos. En 1986, el Departamento de Asesoramiento de Tecnologa (Gran Bretaa) publica una revisin de la literatura relativa a estos procedimientos y se enfra an ms la propensin a la prctica de la psicociruga. El trabajo concluye que, puesto que la neurociruga psiquitrica nunca se ha analizado segn un estudio aleatorizado, a doble ciego, debera considerarse como una tcnica meramente experimental hasta que un estudio con tales caractersticas demuestre lo contrario. Este ltimo aspecto apunta al pequeo porcentaje de pacientes con enfermedades psiquitricas refractarias al tratamiento farmacolgico que se podran considerar actualmente para tratamiento quirrgico. Hoy da, tan slo unos pocos centros en el mundo estn abocados a esta prctica.

Conclusin: Generalmente nos resultan interesantes, sorprendentes y curiosas las prcticas de la medicina en tiempos remotos. Tenemos una mirada habitualmente condescendiente por ms espantosas que puedan parecernos las aberraciones mdicas realizadas hace siglos, ya que les cabe, y as lo entendemos, la

inimputabilidad en el juicio por la ignorancia propia del amanecer de la ciencia. Contrariamente, cuando el escenario histrico es tan prximo como el tiempo de nuestros abuelos, conmueve sobrecogedoramente la idea de un procedimiento hoy por hoy ignominioso, pero aceptado y reconocido notoriamente por la comunidad cientfica de su poca. Si alguien quisiera embarcarse hoy en una epopeya parecida, encontrara un escenario mucho ms condicionado, debido a la incorporacin de la tica mdica y el respeto de los derechos individuales de los pacientes a la hora de decidir cualquier nueva teraputica. Sin embargo, esto no exime a la lobotoma prefrontal de ser un buen ejemplo de la inexistencia de lmites en la naturaleza humana, para justificar sus procederes, sobre todo en el mbito de la salud donde an hoy todo sigue siendo relativo y controversial.

Referencias: 1. Gmez Rodrguez, A; Ciencia y valores en los estudios del cerebro. Madrid, Arbor CLXXXI N 716, 2005, pp. 478-492. 2. http://es.wikipedia.org/wiki/Antonio_Caetano_De_Abreu_Freire_Egas_M oniz 3. http://neurosurgery.mgh.harvard.edu/Functional/psysurg.htm 4. http://nobelprize.org/nobel_prizes/medicine/laureates/1949/monizbio.html 5. http://piramidescerebro.blogspot.com/2006/09/una-breve-historia-de-lalobotoma-segn.html 6. http://webspace.ship.edu/cgboer/lobotomy.html 7. http://www.cerebromente.org.br/n02/historia/psicocirg_i.htm 8. http://www.psychosurgery.org/ 9. Lerner BH. Last-Ditch Medical Therapy Revisiting Lobotomy. N Engl J Med 2005 Jul 14; 353 (2):119-21 10. Lewontin, R; Rose E y Kamin, LJ. No est en los genes. Racismo, gentica e ideologa. Barcelona, Crtica, 1987, pp 160-199. 11. M. Pedrosa-Snchez, R.G. Sola. La moderna psicociruga: un nuevo enfoque de la neurociruga en la enfermedad psiquitrica. Rev Neurol 2003; 36 (9): 887-897 12. Manjila S, Rengachary S, Xavier AR, et al. Modern psychosurgery before Egas Moniz: a tribute to Gottlieb Burckhardt. Neurosurg Focus 25 (1):E9, 2008. 13. Porter, Roy. The Greatest Benefit to Mankind: A Medical History of Humanity. London. Ed. Harper Collins. 1997

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