Optimismoysaludf 001
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Artículo especial
Optimismo y salud
J.A. Flórez-Lozano
Catedrático de Ciencias de la Conducta. Departamento de Medicina. Universidad de Oviedo. Asturias. España.
Optimismo y salud
Artículo especial J.A. Flórez-Lozano
samiento de estos sujetos esté determinado por interpretaciones fatiga y la depresión. El coste psicológico de una “personali-
negativas del pasado, del futuro y de las propias realidades que dad pesimista” es muy elevado, ya que vive continuamente en
experimentamos día a día. El resultado puede ser un pensamien- situaciones de estrés, de ansiedad, de arrebatos emocionales,
to catastrofista, la angustia y la depresión. Los pesimistas son de impulsividad o de una pasividad total (conductas pasivas).
personas hastiadas, quemadas, resignadas y tristes que se inmo- Se puede pensar, no obstante, que el optimismo no se correla-
lan en su culpabilidad y en su silencio. Además, el estilo cognitivo ciona con la salud, con el bienestar físico y emocional y, quizá,
de funcionamiento del pesimista ve el fracaso como algo perma- se pueda tener razón. Paro aun así, ¿no es deseable permane-
nente, generalizado y personal, mientras que el optimista lo con- cer optimista y feliz ante los avatares de la vida? O, tal vez, ¿es
sidera como algo temporal, específico y no personal. preferible vivir amargados, tristes, deprimidos y sin una pers-
La ausencia de optimismo equivale a una “parálisis psicológi- pectiva positiva de la vida? ¿Con quién prefiere usted compar-
ca integral”; el individuo pierde la esperanza y no hace nada por tir su trabajo, su vida, sus ilusiones y su proyecto de futuro?
reparar la situación, superar los errores o potenciar las oportu-
nidades para aprender. Frente a ello, tratan de establecer fór-
mulas compensatorias que puedan equilibrar su angustia y/o Un fármaco llamado optimismo
desesperación. Pero lamentablemente utilizan estrategias in-
operantes que no hacen más que incrementar su angustia; ge- El optimismo es un auténtico antídoto frente a numerosas enfer-
neralmente tratan de utilizar fórmulas rápidas para conseguir el medades; es incluso un predictor muy potente de salud y longe-
placer, el optimismo y la supuesta felicidad. Para ello consumen vidad. Un estudio reciente realizado en la Clínica Mayo, de Ro-
televisión, abusan de las drogas y de los medicamentos, practi- chester (EE.UU.), ha confirmado estos hechos, es decir, que los
can el sexo sin ningún tipo de afectividad o amor, etc. optimistas tienen un envejecimiento más satisfactorio, una me-
A partir de ahí, el pesimismo sigue generando múltiples pa- jor salud física y una mayor alegría de vivir. Otros estudios longi-
tologías relacionadas con el ensimismamiento, la tristeza, la tudinales también han concluido que el optimismo disminuye la
sintomatología depresiva, modera la tensión arterial, refuerza el
sistema inmune y disminuye la aparición de los síntomas de an-
Figura 1. Claves terapéuticas del humor. siedad. En enfermedades graves, como el cáncer de mama, se ha
comprobado que las mujeres optimistas que se enfrentan a las
adversidades con fuerza y espíritu de superación presentan me-
Controla nores niveles de angustia, menos recidivas y más porcentaje de
el estrés supervivencia que las enfermas pesimistas. Sin duda, las emocio-
nes positivas que integran el optimismo de una persona la prote-
Eleva las concentraciones
plasmáticas de cortisol gen contra la enfermedad, el dolor y el estrés (fig. 1).
Incrementa las cifras de En la historia encontramos múltiples casos que ilustran lo
linfocitos T activados Sentido
Aumenta elnúmero y la del humor que comentamos. El emperador Augusto, que llegó a una
actividad de los linfocitos avanzada edad, tenía un carácter optimista y le gustaba siem-
citotóxicos naturales Desconecta
(NK, natural killers) pre rodearse de un ambiente sencillo y agradable; poco antes
del sufrimiento
de morir dijo a sus cortesanos y familiares: “Aplaudid, amigos
Trascenderemos
nuestros problemas míos, la comedia ha terminado”. Ciertamente era lo que pen-
diarios saba, que toda su vida había sido una pura comedia. Estudios
antropológicos realizados en personas centenarias en el Cáu-
caso, los Andes, Pakistán y Japón también han concluido que
Prof. Dr. J.A. Flórez Lozano (2005)
el optimismo es un denominador común de todos ellos; se sen-
tían contentos y satisfechos en medio de la pobreza y tantas li-
mitaciones. Uno de los ancianos entrevistados, que tenía 121
Figura 2. El optimismo como fármaco. años, exclamaba: “¡Cada día es un regalo cuando se pasa de
los cien años!”. Esta manera de ser tal vez sea el mayor bien
Fuerte
de la Tierra y lo más conveniente para prolongar la vida del
Mayores Bienestar
expectativas subjetivo compromiso hombre. La abuela del mundo, como se conocía a Jeanne Cal-
de éxito ment, que falleció a los 120 años, también había tenido una vi-
Se enfrentan da llena de optimismo y esperanza y le gustaba decir: “Hay
eficazmente a la que mantener siempre la sonrisa; a esto atribuyo mi larga vida,
adversidad,
Optimismo rescatando lo yo creo que moriré riendo”. Un estilo de vida y una frase que
positivo y aceptan resumen todo cuanto hemos de hacer si queremos vivir más y
tal dificultad
Reduce mejor. En fin, es deseable conseguir un talante expansivo, to-
Afrintamiento el estrés lerante y creativo que facilita nuestra tendencia al optimismo.
activo psicológico
Optimismo y salud
Artículo especial J.A. Flórez-Lozano
to en su obra El túnel. El pesimismo sería, en última instancia, coronaria, etc. De ahí la importancia terapéutica de rebatir los
la antesala de los trastornos neuróticos (fobias, neurosis obse- pensamientos pesimistas que nos anulan y coartan. El pesi-
siva, fobia social), la depresión y otras enfermedades psicoso- mista siempre ve la peor causa y piensa en términos de “siem-
máticas (catarro común, trastornos del sueño, problemas gas- pre” o “nunca”. Ese optimismo que nos permite entender y
trointestinales, cefaleas, dolores de espalda, dolores muscula- comprender a los demás se queda ciertamente oscurecido. Jo-
res erráticos, reumatismo psicógeno, psoriasis, dermatitis, sé Saramago ya decía a este respecto: “Lo más difícil no es
disfunciones sexuales, etc.). Por eso es lógico que los pesimis- convivir, es comprender a los demás”.
tas utilicen más frecuentemente los servicios médicos y consu- Frente al virus del pesimismo, es necesario desplegar todos
man muchos más medicamentos. El pesimismo también nos los mecanismos que impulsan la alegría, la euforia y el opti-
sumerge en emociones negativas (ansiedad crónica, tristeza y mismo por vivir (fig. 3). ¡Saber disfrutar es saber vivir! Es la
pesimismo, tensión continua u hostilidad, complejo ira-hostili- clave de ese sentimiento tan deseado que podemos llamar el
dad, cinismo o suspicacias implacables) y nocivas para la salud; “bienestar subjetivo”. ¿De qué me sirven los pensamientos ne-
la rabia, el odio, el enojo, el desprecio, la incomodidad, la ingra- gativos? En este desarrollo del optimismo, lo más saludable es
titud, la intolerancia, la antipatía, el resentimiento y numerosos adaptarnos y asumir progresivamente la realidad. La mayor
traumas emocionales hacen su aparición poniendo en peligro parte de las cosas que necesitamos para ser felices no son en
nuestro equilibrio mental y físico. absoluto importantes; en muchas ocasiones no hay que cam-
Hay una serie de enfermedades que se relacionan con este biar la realidad para ser más feliz; sólo hay que saber lo que es
tipo de emociones: asma, artritis, cefaleas, úlceras pépticas, no tener una “moneda valiosa” y, entonces, uno se alegra de
enfermedades infecciosas, problemas cardíacos, enfermedad tenerla. Una persona ciega como Hellen Keller expresaba: “Si
puedo encontrar tanto placer por el tacto, cuánta más belleza
debe revelarse a la vista”. Lo que se necesita es muy poco, pe-
Figura 3. Estrategias de afrontamiento ideal para abordar ro lo que se quiere es mucho. Todo lo que podemos hacer para
y superar la enfermedad. potenciar nuestro optimismo es aceptarnos más y valorarnos
más. Las personas optimistas son las que esperan cosas positi-
Espíritu de lucha vas y poder enfrentar efectivamente el estrés y los desafíos de
cada día. Asimismo, la calidad de la amistad percibida, la in-
tensidad de las relaciones sociales y la realización de activida-
Tasas de supervivencia