En 7 temas: Andrew Combs

Foto Austin Leih, tomada de la web oficial de Andrew Combs

     Me parece increíble que, en este país tan… curioso…, apenas se haya escrito nada a estas alturas sobre este tipo (honrosa excepción la de dirtyrock.info); así que me toca hacer redoble de tambor señores. Anticipo la jugada con esta entrada, rompiendo una lanza en favor de este gran músico que sigue siendo desconocido para muchos, y completo el movimiento tomando mañana un vuelo a Londres para verlo en directo. Así soy yo.

     Andrew Combs es de esos artistas que llegaron a mí en medio del puñetero confinamiento (que, como toda circunstancia también trajo cosas buenas), y dejó un poso de hondo calado. Aquel álbum llamado Ideal Man apuntaba maneras con contundencia. Partiendo de sus reminiscencias tejanas los temas dejaban evidenciar un sutil eclecticismo de sus principales influencias, pero con una cierta deriva hacia la psicodelia, lo que constituía un fuerte atractivo en aquellas deliciosas escuchas.

     Original de Dallas, en algunos portales se le define como “cantante country-soul con influencias pop”; menos mal que yo lo conocí en esos programas providenciales servidos por Radio3, porque semejante etiqueta, así sin más, puede llevar a confusión. Y es que, perdóneme los entendidos (porque ciertamente mis carencias son muchas), a estas alturas sigo identificando el country y el soul como géneros “arriesgados”, en los que es difícil perderse dado el alto volumen de publicaciones (tal vez por estar muy apegados al sentimiento popular); digamos que, sin un buen guía, podemos pasar horas nadando  en océanos poco consistentes, como si fuese complejo conjuntar los componentes de calidad que hacen florecer esos álbumes realmente exquisitos e imperecederos que constituyen los verdaderos hallazgos. Con Andrew, sin embargo, las cosas son distintas.

     Interesado en la música electrónica al comienzo de su carrera, Combs siempre ha sido un buceador de aguas profundas, y entre sus músicos preferidos podemos encontrar nombres, tan atrayentes, como variados son sus perfiles musicales: Tom Waits, Joni Mitchel, Cass Mc Combs, Radiohead, Big Thief…  De hecho, en un obligado ejercicio de seguimiento de carrera, la evolución musical es más que evidente, y parece ser que yo he llegado en el momento más interesante. Muchos acaban hoy por definirlo como compositor folk, y yo me conformo con decir que es un increíble arquitecto de canciones redondas.

     Como decía, en aquel 2020 caí de lleno en Ideal Man, su cuarto álbum, con todas los lógicas y positivas aportaciones del country y el folk americano, pero con una dotación de calidad y solidez en la mayoría de los temas, llegando algunos de ellos a convertirse en una excelente carta de presentación de este genio (Firestarter, Hide and Seek, Golden, Like a Feather…).

     Sin embargo, para mí el punto de inflexión en cuanto a evolución y direccionabilidad de su obra vino de la mano del siguiente lp, el quinto, llamado Sundays. Fue una obra que añadía algo de intimidad al concepto de los temas, sobre todo por la forma en que fue grabada. Aunque encontramos su habitual riqueza instrumental, a la que se añade una interesante y acertada sección de vientos, el sonido es algo rudo, sobretodo por el empeño de Combs (fijaos qué curioso) de registrar todos los temas en sonido monoaural, lo que obligó a dosificar la instrumentación para no crear una reverberación excesiva. Sea capricho con fundamento o no, lo cierto es que el resultado es de una limpieza sonora aplastante, de hecho hay que fijarse mucho para advertir que, efectivamente, no existe el estéreo. Como favoritas de este lp podría mencionar Anna Please, The Ship, Still Water, Adeline…

     Y así de cómodo y entusiasmado estaba yo con el sonido de Andrew Combs, ya con la lista introductoria de 7 temas armada (la que suelo elaborar para presentar a un músico), cuando, hace unos días, lanzó su sexto larga duración, llamado Dream Pictures… y lo puso todo patas arriba.

     Llegamos en esta ocasión a una obra casi minimalista. La configuración musical del disco suele ser una lenta base de batería o caja de ritmos a la que se suman leves instrumentaciones amorosamente dosificadas,  como la maduración de una caña de azúcar que destila para dar el más dulce ron. Los metales y vientos en esta ocasión han sido sustituidos por fugaces teclados, suaves riffs de guitarra, acústicas y bajos en apariciones relámpago…. Pero no falta tampoco en pequeñas dosis la experimentación con voces en ecos sutiles, guitarras eléctricas distorsionadas, e interesantes impactos de música electrónica. Pero por encima de todo ¿cuál es la clave para que esta obra adquiera tanta, pero tanta fuerza? Pues simplemente la forma en la que en este lp se impone la esencia de este genio: su increíble composición armónica y su impecable ejecución vocal (Dios… ¡qué timbre tan bonito!).

     Y así de loco me tiene estos días, intentando recordar (ya hace años) cuándo fue la última vez que di con un lp tan homogéneo en calidad, tan delicioso, donde cada tema es un universo y donde los favoritos se van pasando el testigo de unos a otros a cada momento, en cada nueva audición. Sugiero la escucha pausada de esta joya, tomándonos tiempo entre tema y tema para encender un nuevo pitillo o aderezar ese whisky que ya empieza a estar aguado. Comenzaremos  con Fly in my wine,  un tema que hace la función de intro para ponernos en contexto, aumentando lentamente la tensión para desembocar en la increíble Eventide; y a partir de ahí comienza el desfile… todas son imprescindibles.

      Como simple introducción al sonido de Combs, os dejo dos listas de Spotify que he elaborado:

     La que justifica esta entrada y sirve para conocer en términos generales a este autor, mi lista de 7 temas: https://open.spotify.com/playlist/54zdbvxYMVwd39WntOPMtT?si=_2M3pyj6RZiWHbjPKVIHZw  Los temas son: Firestarter, Anna Please, Eventide, Adeline, Still Water, I ´m Fine, e Ideal Man.

     Otra que he elaborado según las últimas noticias de la gira que está haciendo por Reino Unido, Irlanda y Países Bajos y que puede ser lo más aproximado al setlist de estos conciertos. Ya os diré a la vuelta en cuánto he acertado y cuáles son las variantes: https://open.spotify.com/playlist/5YmdJxZ58gd8MyhrbBOA5K?si=9m2HqVOySUOa_Ro05BbVdg

     Os invito también a pasar por su magnífica web oficial (https://www.andrewcombsmusic.com) , donde podréis también comprobar lo bien que se desenvuelve con el pincel y los óleos, pues Andrew lleva un tiempo entusiasmado con la pintura y, ciertamente, lo hace muy, pero que muy bien.

        Vamos queridos lectores…. ¡Escuchen y disfruten!!!!!  

Foto Austin Leih, tomada de la web oficial de Andrew Combs