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Voto de Ferdydurke:
4
5,3
24.419
Acción. Fantástico
Motivado por la fe que había recuperado en la humanidad e inspirado por la acción altruista de Superman, Bruce Wayne recluta la ayuda de su nueva aliada, Diana Prince, para enfrentarse a un enemigo aún mayor. Juntos, Batman y Wonder Woman se mueven rápidamente para intentar encontrar y reclutar un equipo de metahumanos que combata esta nueva amenaza. El problema es que a pesar de la formación de esta liga de héroes sin precedentes ... [+]
28 de noviembre de 2017
7 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
La duda se plantea rápido y la respuesta debe ser clara, si titubeas, estás perdido, muerto.
¿Te podrás aguantar la risa primera cuando observas a esos actores vestidos de carnaval, carnaval te quiero, gente de incluso cuarenta años con calzones y todo tipo de ridículos disfraces, capas, lanzas, falditas, pechos lobo, como escapados de la fiesta glam más psicotrónica y lisérgica, infames atuendos que ni en la noche más loca llevarías ni en sueños?
Y lo que todavía es peor. ¿Te podrás contener las lágrimas que arrasan los ojos de tu cara ante la inmensa, oceánica pena que sientes al contemplar el terrible espectáculo de ver a gente ya madura teniendo que ganarse la vida el pan de ese siniestro patético modo solo por unos cuantos millones de dólares al vuelo, haciendo el mamarracho por un atroz antojo si podrían estar en cambio limpiando suelos y de esa honrada maniera ganarse mucho más ética honestamente el sueldo hermoso?
Y ya el acabose. ¿Podrás seguir adelante con tu miserable vida, con la cabeza alta y algo de orgullo en la mirada a sabiendas de que tú mismo has colaborado con tu tiempo y dinero en esa farsa para niños meones, de teta o que se muerden las piernas y se comen los mocos?
Si eres capaz de responder a las tres preguntas afirmativamente, habrás demostrado que eres un superhombre nietzscheano, más allá del bien y el mal, cada vez más fuerte, crecido ante el más inclemente castigo. Podrás ver la película, la luz.
"Amazonas y Atlantes, guerreros legendarios, aliados de otros mundos, hasta los dioses participaron en aquella orgía aberrante que perpetramos en medio de una oligofrénica algarabía bélica para salvar la vida, en contra de los designios e infortunios que Steppenwolf, el destructor de mundos, nos quería imponer. La armonía nació de aquel horror. Fue un tiempo de héroes."
Homérico, Helénico, Épico.
Así habla la suprema amazona de origen isleño y princesa de un pueblo de mujeres peleonas, Gal Gadot, mezcla feliz de María Valverde y Ana de Armas, algo más alta que ambas pero (así, a gustos) igual de guapa, valiente y doliente.
Esta pieza superheroica es mejor que muchas de su ramo y especie, pero es mediocre, seamos claros. Demasiado larga, idiota y, por momentos, aburrida. Le sobran bobas explicaciones, cháchara muy reiterativa y algún rato excesivamente pueril.
Así es. Así fue.
Pero aguanta el tipo; la historia, dentro de su feriante contexto grotesco, tiene sentido, se entiende lo que pasa, cuando se lían a mamporros la belleza asoma y, en fin, tampoco molesta. Está en el borde del precipicio, a punto del coma cerebral. Por poco se libra.
¿Te podrás aguantar la risa primera cuando observas a esos actores vestidos de carnaval, carnaval te quiero, gente de incluso cuarenta años con calzones y todo tipo de ridículos disfraces, capas, lanzas, falditas, pechos lobo, como escapados de la fiesta glam más psicotrónica y lisérgica, infames atuendos que ni en la noche más loca llevarías ni en sueños?
Y lo que todavía es peor. ¿Te podrás contener las lágrimas que arrasan los ojos de tu cara ante la inmensa, oceánica pena que sientes al contemplar el terrible espectáculo de ver a gente ya madura teniendo que ganarse la vida el pan de ese siniestro patético modo solo por unos cuantos millones de dólares al vuelo, haciendo el mamarracho por un atroz antojo si podrían estar en cambio limpiando suelos y de esa honrada maniera ganarse mucho más ética honestamente el sueldo hermoso?
Y ya el acabose. ¿Podrás seguir adelante con tu miserable vida, con la cabeza alta y algo de orgullo en la mirada a sabiendas de que tú mismo has colaborado con tu tiempo y dinero en esa farsa para niños meones, de teta o que se muerden las piernas y se comen los mocos?
Si eres capaz de responder a las tres preguntas afirmativamente, habrás demostrado que eres un superhombre nietzscheano, más allá del bien y el mal, cada vez más fuerte, crecido ante el más inclemente castigo. Podrás ver la película, la luz.
"Amazonas y Atlantes, guerreros legendarios, aliados de otros mundos, hasta los dioses participaron en aquella orgía aberrante que perpetramos en medio de una oligofrénica algarabía bélica para salvar la vida, en contra de los designios e infortunios que Steppenwolf, el destructor de mundos, nos quería imponer. La armonía nació de aquel horror. Fue un tiempo de héroes."
Homérico, Helénico, Épico.
Así habla la suprema amazona de origen isleño y princesa de un pueblo de mujeres peleonas, Gal Gadot, mezcla feliz de María Valverde y Ana de Armas, algo más alta que ambas pero (así, a gustos) igual de guapa, valiente y doliente.
Esta pieza superheroica es mejor que muchas de su ramo y especie, pero es mediocre, seamos claros. Demasiado larga, idiota y, por momentos, aburrida. Le sobran bobas explicaciones, cháchara muy reiterativa y algún rato excesivamente pueril.
Así es. Así fue.
Pero aguanta el tipo; la historia, dentro de su feriante contexto grotesco, tiene sentido, se entiende lo que pasa, cuando se lían a mamporros la belleza asoma y, en fin, tampoco molesta. Está en el borde del precipicio, a punto del coma cerebral. Por poco se libra.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
Diálogo insuperable entre Lois Lane y Superman recién resucitado:
- Hueles bien. Hueles mejor, dice ella dejándolo caer, como si nada.
- ¿Antes no olía bien?, se escama él ante tamaña indirecta malévola.
Silencio de ella. Cambiamos de escena. Pasemos a otra cosa menos incómoda. Ni Buñuel y la tropa, tomando coca cola.
¿Se puede decir tanto con tan poco? ¿No es para descorchar el champán que en una película de este horrísono jaez oigamos frases de este (alto) nivel? ¿Qué quería decir Lois? ¿Que Superman era un guarro? ¿Que la muerte os sienta tan bien, que aquí huele a muerto, que muerto el perro se acabó la rabia, que el muerto al hoyo y el vivo al bollo, que murieron con las botas puestas, que ni te mueres padre ni cenamos... ?
Otra gloria. Ahora escuchamos las sabias palabras del rompeuniversos. Un tipo creído, algo vanidoso y quizás un pelín violento, pero que suelta, como si fuese metralleta, verdades como puños:
- Sois tan débiles que no podéis asimilar la verdad. Os destruiría.
Así se habla. Lo firmo con mi bilis y todas mis plaquetas.
Finalizaremos (en todo lo alto) con un análisis fino e individualizado, pormenorizado, de cada sujeto en cuestión. Ellos lo merecen. Que mi pluma alada los eleve y nombre. Su posible y discutible inmortalidad depende del acierto de mis paranormales, estas sí, habitualmente inmortales, letras.
- Batman. Christian Bale es mucho mejor. Dónde va a parar. Este ridículo murciélago de Affleck parece un jubilado a punto de reventar después de una vida jugando a la petaca y fichando en la fábrica (de Indiana), con mucho alcohol y tabaco malo en sangre, en su organismo intoxicado; reumático, impotente, ofuscado, triste como el destino, destruido por el enemigo tiempo, agónico. Mejor enterrado que vivo.
- Aquaman. Sirenito. Exacto apodo. Muy penoso. Completamente sobrante. Mamarracho. Absurdo. Delirante. Sin sentido. Ni como chiste. No recuerdo ahora ni un solo fotograma que lo redima.
- Ella. Bien. No se pasa. Es la reina pero discreta. Tiene un acento raro pero se lo perdonamos (ahora nos hemos vuelto multiculturales y muy sociales, filantrópicos y diversos). Es bella, prudente, buena. Qué más quieres.
- El maquinón negro. Lamentable. Pobre. Otro que no aporta una hostia. Aunque no es tan chusco ni vergonzoso como Momoa. Puesto por el ayuntamiento y de relleno.
- El chaval. El graciosillo. El joven chistoso. Es muy obvio. Un cebo para el público más niño (¿todo?). Pero me gustan sus poderes, su velocidad, su tono casi como de aprendiz lejano, hijo bastardo de Woody Allen que mejor explotado hasta podría tener su gracia a lo "Antz (Hormigaz)".
- Superman. Capo di tutti capi. Se mea en los demás y lo demuestra. Sobrado. Gélido. Un verdadero superhéroe. Que se murió, se ve, de tedio, de aburrimiento, harto de tanto tonto que le daba la lata para nada y de unos humanos todos los días al muere y al fin del mundo. Cansado de una novia tan mona e imposible y de una madre hermosa y tierna como un pastel de manzana (Amy y Diane, a cual más maja). Se retiró y ha vuelto. Que Dios le tenga en su gloria. Que lo cuide como comandante con mando en plaza para que ponga orden y dirija la tierra con salsa y fundamento, alegría, cosa buena.
... Dos horas después de que acabara la película y tras observar con fruición todos los títulos de crédito, ansiosos, muertos de intriga y suspense los pacientes y sufridos espectadores comprobamos, sentimos que parece como que pueda llegar a haber otra parte contratante, los dedos huéspedes, de la primera ración o Liga de Injusticia segunda tanda tanga dios mediante y atorrante suerte reparta.
Qué sorpresa y emoción, extremaunción. Que corra el tiempo y llegue ya el día de su, espero deseo, próxima emisión.
(Entre Pinto y Valdemoro. De Leonard Cohen a los Beatles. Dos buenas versiones de dos clásicos colosales. De lo del medio... nada más que silencio.)
- Hueles bien. Hueles mejor, dice ella dejándolo caer, como si nada.
- ¿Antes no olía bien?, se escama él ante tamaña indirecta malévola.
Silencio de ella. Cambiamos de escena. Pasemos a otra cosa menos incómoda. Ni Buñuel y la tropa, tomando coca cola.
¿Se puede decir tanto con tan poco? ¿No es para descorchar el champán que en una película de este horrísono jaez oigamos frases de este (alto) nivel? ¿Qué quería decir Lois? ¿Que Superman era un guarro? ¿Que la muerte os sienta tan bien, que aquí huele a muerto, que muerto el perro se acabó la rabia, que el muerto al hoyo y el vivo al bollo, que murieron con las botas puestas, que ni te mueres padre ni cenamos... ?
Otra gloria. Ahora escuchamos las sabias palabras del rompeuniversos. Un tipo creído, algo vanidoso y quizás un pelín violento, pero que suelta, como si fuese metralleta, verdades como puños:
- Sois tan débiles que no podéis asimilar la verdad. Os destruiría.
Así se habla. Lo firmo con mi bilis y todas mis plaquetas.
Finalizaremos (en todo lo alto) con un análisis fino e individualizado, pormenorizado, de cada sujeto en cuestión. Ellos lo merecen. Que mi pluma alada los eleve y nombre. Su posible y discutible inmortalidad depende del acierto de mis paranormales, estas sí, habitualmente inmortales, letras.
- Batman. Christian Bale es mucho mejor. Dónde va a parar. Este ridículo murciélago de Affleck parece un jubilado a punto de reventar después de una vida jugando a la petaca y fichando en la fábrica (de Indiana), con mucho alcohol y tabaco malo en sangre, en su organismo intoxicado; reumático, impotente, ofuscado, triste como el destino, destruido por el enemigo tiempo, agónico. Mejor enterrado que vivo.
- Aquaman. Sirenito. Exacto apodo. Muy penoso. Completamente sobrante. Mamarracho. Absurdo. Delirante. Sin sentido. Ni como chiste. No recuerdo ahora ni un solo fotograma que lo redima.
- Ella. Bien. No se pasa. Es la reina pero discreta. Tiene un acento raro pero se lo perdonamos (ahora nos hemos vuelto multiculturales y muy sociales, filantrópicos y diversos). Es bella, prudente, buena. Qué más quieres.
- El maquinón negro. Lamentable. Pobre. Otro que no aporta una hostia. Aunque no es tan chusco ni vergonzoso como Momoa. Puesto por el ayuntamiento y de relleno.
- El chaval. El graciosillo. El joven chistoso. Es muy obvio. Un cebo para el público más niño (¿todo?). Pero me gustan sus poderes, su velocidad, su tono casi como de aprendiz lejano, hijo bastardo de Woody Allen que mejor explotado hasta podría tener su gracia a lo "Antz (Hormigaz)".
- Superman. Capo di tutti capi. Se mea en los demás y lo demuestra. Sobrado. Gélido. Un verdadero superhéroe. Que se murió, se ve, de tedio, de aburrimiento, harto de tanto tonto que le daba la lata para nada y de unos humanos todos los días al muere y al fin del mundo. Cansado de una novia tan mona e imposible y de una madre hermosa y tierna como un pastel de manzana (Amy y Diane, a cual más maja). Se retiró y ha vuelto. Que Dios le tenga en su gloria. Que lo cuide como comandante con mando en plaza para que ponga orden y dirija la tierra con salsa y fundamento, alegría, cosa buena.
... Dos horas después de que acabara la película y tras observar con fruición todos los títulos de crédito, ansiosos, muertos de intriga y suspense los pacientes y sufridos espectadores comprobamos, sentimos que parece como que pueda llegar a haber otra parte contratante, los dedos huéspedes, de la primera ración o Liga de Injusticia segunda tanda tanga dios mediante y atorrante suerte reparta.
Qué sorpresa y emoción, extremaunción. Que corra el tiempo y llegue ya el día de su, espero deseo, próxima emisión.
(Entre Pinto y Valdemoro. De Leonard Cohen a los Beatles. Dos buenas versiones de dos clásicos colosales. De lo del medio... nada más que silencio.)