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Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, FLACSO Ecuador
Departamento de Antropología, Historia y Humanidades
Convocatoria 2019-2021
Tesis para obtener el título de Maestría de Investigación en Historia
Usos políticos de la escritura de la Historia a inicios del siglo XIX en el
Perú: El manuscrito ´Historia del Perú´ de Juan Basilio Cortegana
Juan Antonio Lan Ninamango
Asesora: Carmen Mireya Salgado Gómez
Lectores: Viviana Alexandra Velasco Herrera y José Demetrio de la Puente Brunke
Quito, mayo de 2024
Índice de contenido
Epígrafe......................................................................................................................... 4
Resumen ........................................................................................................................ 6
Introducción ................................................................................................................... 9
Capítulo 1: Trayectoria de vida de Juan Basilio Cortegana ................................................. 13
1.1.
Vida militar ........................................................................................................... 16
1.2.
Vida política .......................................................................................................... 18
1.3.
Líder entre los vencedores ....................................................................................... 22
1.4.
Reflexiones a partir de este capítulo .......................................................................... 31
Capítulo 2: Algunas consideraciones sobre el manuscrito Historia del Perú ......................... 32
2.1.
Un manuscrito, muchas manos ................................................................................. 32
2.2
Formas de hacer Historia en el siglo XIX .................................................................. 36
2.3.
Historia del Perú .................................................................................................... 42
2.4.
Reflexiones sobre este capítulo ................................................................................ 47
Capítulo 3: ¿Historia General de los peruanos o una memoria parcial del héroe celendino? .... 48
3.1.
Descripción y análisis de los primeros siete primeros tomos del manuscrito ................... 49
3.1.1.
Sumilla literal de los tomos I y II .............................................................................. 49
3.1.2.
Sumilla literal de los tomos III y IV ...................................................................... 50
3.1.3.
Sumilla literal de los tomos V, VI y VII ................................................................ 51
3.2.
Cotejo de fuentes en los siete primeros tomos ............................................................ 53
3.3.
Descripción y análisis de los primeros seis últimos tomos del manuscrito ...................... 58
3.3.1.
Sumillas de los tomos XVIII, XIX, X y XI ............................................................ 58
3.3.2
Sumillas de los tomos XII y XIII y cotejo de fuentes ............................................... 59
3.4.
Las intenciones de Cortegana al escribir su Historia del Perú ...................................... 61
3.5.
Reflexiones sobre este capítulo ................................................................................ 64
Conclusiones ................................................................................................................ 66
Referencias .................................................................................................................. 69
Anexos ........................................................................................................................ 79
2
Lista de ilustraciones
Fotos Capítulo 1
Foto 1. 1 Fotografía de estudio de Juan Basilio Cortegana. ..................................................... 15
Foto 1. 2 Estadística Histórica, Geográfica, Física y Política del Distrito de Celendín. .......... 19
Foto 1. 3 Retrato de Juan Basilio Cortegana por Etna Velarde. ............................................... 23
Foto 1. 4 Busto de Juan Basilio Cortegana. Ubicado en la Benemérita Sociedad Fundadores
de la Independencia. ................................................................................................................. 28
Foto 1. 5 Obituario de Juan Basilio Cortegana. ....................................................................... 29
Foto 1. 6 Testamento de Juan Basilio Cortegana. .................................................................... 30
Tabla Capitulo 2
Tabla 2. 1. Contenido de los tomos del manuscrito “Historia del Perú”. Porras Barrenechea
(1954, 492) ............................................................................................................................... 44
Tabla Capitulo 3
Tabla 3. 1 Tomo I y II del manuscrito...................................................................................... 54
Tabla 3. 2 Tos III y IV del manuscrito ..................................................................................... 54
Tabla 3. 3 Tomo V, VI y VII del manuscrito ........................................................................... 57
3
Epígrafe
Por eso, el gran escritor norteamericano Arthur Miller, incluyó en una obra teatral estrenada
hace poco tiempo en Nueva York un diálogo entre Dios y Lucifer. Este último ofrece al
Supremo Hacedor un programa a través del cual será cambiar el futuro del mundo, un
porvenir devorado por la guerra. Y Dios responde: "No es posible cambiar el futuro;
únicamente cambia el pasado". A lo cual, sorprendido, Lucifer dice: "¿Cómo se puede
cambiar el pasado?". Nuevamente unas palabras divinas: "La gente no se acuerda de nada y
basta con soltar unos documentos".
A pesar de todo, el historiador cuya ambición máxima es la de ser fiel a su tarea ha de tratar
de acercarse, dentro de sus limitaciones, a la verdad.
Basadre, Jorge. 2021. El azar en la historia y sus límites. 44-45 pp.
5
Resumen
Esta tesis aborda al manuscrito Historia del Perú, compuesto por trece tomos, redactado por
Juan Basilio Cortegana, un veterano militar de la emancipación peruana. Este es un esfuerzo
para explicar el pasado peruano, especialmente antes de la formalización y la
institucionalización de la disciplina histórica en Perú. Cortegana se diferencia de sus
escritores contemporáneos, la mayoría de los cuales eran exmilitares, que se limitaron a
proporcionar recuerdos parciales y memorias aisladas sobre eventos y aspectos específicos de
la independencia del Perú. En contraposición, este autor también emprendió la ambiciosa
tarea de compilar una "historia general". Su objetivo era brindar una perspectiva integral del
país, considerándolo como una entidad orgánica, y cubriendo los períodos prehispánico,
colonial y emancipador de la historia peruana.
Sin embargo, a pesar de sus esfuerzos por aparecer como un "narrador" en esta visión general
y de largo alcance de la historia peruana, Cortegana no pudo desligarse completamente de su
posición como testigo directo de los eventos que estaba narrando. Por lo tanto, en la tesis se
argumenta que su manuscrito se sitúa en un espacio intermedio, oscilando entre dos géneros
de escritura principales: las memorias personales y la historia general. Al analizar el contexto
en el que Cortegana escribió su obra, esta tesis propone que sus motivos para emprender esta
labor estaban alineados con los intereses políticos y reivindicativos de los veteranos que
participaron en las guerras de emancipación. Ellos buscaban presentarse como los fundadores
legítimos de la naciente república, y el trabajo de Cortegana puede ser visto como un reflejo
de ello. Para enriquecer la comprensión de la obra de Cortegana, este estudio la compara y la
contextualiza con otras obras similares escritas por autores que se dedicaron a documentar
historias generales y memorias personales antes de 1848.
Así, al examinar Historia del Perú se obtiene una visión más matizada de las concepciones
del pasado que tenían los excombatientes y veteranos que participaron en estos procesos de
cambio histórico. Por último, este análisis contribuye de manera significativa a nuestro
conocimiento de la cultura letrada e ilustrada de los veteranos de guerra, así como a un
entendimiento más profundo y contextualizado de las memorias de la independencia peruana.
Palabras clave: Cortegana; Independencia del Perú; Historiografía; Memoria; Historia
Cultural.
6
Agradecimientos
Valoro, en primer lugar, a mi asesora, Mireya Salgado, de quien tuve la oportunidad de ser su
discípulo. Como maestra, no solo aprecio sus enseñanzas, sino también su amabilidad y
consideración, además de su insuperable ayuda que me pues sin su soporte, mi paso como
estudiante extranjero en la ciudad de Quito y en la FLACSO-Ecuador hubiera sido menos
llevadera. Por su parte, Roberto Chauca también fue alguien fundamental en el tramo inicial
del desarrollo de esta tesis, debido a sus minuciosos comentarios, correcciones, asesorías y
sugerencias que acompañaron cada una de las cinco materias que cursé con él.
Tanto en las clases presenciales como virtuales, recordaré para siempre los cursos de
Mercedes Prieto, María Fernanda Troya, Viviana Velasco y Valeria Coronel, quienes fueron
denominadas como “las profas” de la Historia por sus estudiantes. Reconozco, también, que
las materias que cursé con el profesor Nicolás Cuvi fueron de mucha ayuda para profundizar y
consolidar mis conocimientos en la línea de investigación de Historia de la Ciencia; así como
él, las clases con Michael Uzendoski fueron más que motivadoras para acercarme más a la
Antropología y a los estudios sobre el Medio Ambiente. No dejaré de mencionar la
importancia del profesor Fernando García al mostrar los vínculos entre la Antropología y la
Historia.
No menos importante fue la guía de Alicia Torres desde la coordinación de la Maestría de
Investigación en Historia para que los historiadores prospectos puedan desempeñarse de la
mejor manera. Con el apoyo de Diego Paladines y la incansable labor de Marcia Suárez, los
colegas tenían un sólido sostén ante cualquier duda administrativa. Agradezco también que
ellos me brindaron la oportunidad de formar parte del equipo de publicidad para la campaña
de atracción de alumnos de la nueva cohorte junto a mi colega María Isabel Naranjo.
En la Universidad, además pude desarrollar y consolidar otras habilidades y capacidades pues
tuve la suerte apoyar en la Escuela de Verano Chimborazo, en un proyecto editorial en inglés
y en la confección de una plataforma web bilingüe anclada en las humanidades digitales.
Estos proyectos fueron coordinados por Mark Thurner, Juan Pimentel, Mireya Salgado y
Vanessa Montenegro, de quienes aprendí mucho. Asimismo, mi participación en FLACSORadio fue más que provechosa y me abrió un mundo nuevo por explorar, además de
posteriores oportunidades laborales en mi país. La guía de Xavier Macas fue importante y más
7
que motivadora para adentrarme en la producción y conducción de podcasts y programas
radiales virtuales.
Gracias a la beca y al estipendio por excelencia académica, conté con un apoyo material sin
igual que me permitió dedicarme de forma exclusiva a todo lo concerniente a la Maestría por
el lapso dos años. Tengo que añadir que esta tesis no hubiera sido posible sin el soporte de dos
financiamientos concursables: el XXVIII Financiamiento de Tesis de FLACSO-Ecuador y el
Concurso Nacional de Investigación Histórica del Perú. Asimismo, el auspicio de la
Biblioteca Nacional y la Fundación BBVA fueron cruciales para seguir sosteniendo la
investigación más allá de acabado el estipendio. Como sabemos, la financiación y los
auspicios en nuestra disciplina rara vez ocurre y, más aún, en América Latina.
Varios maestros y colegas peruanos dieron grandes recomendaciones, comentarios y
sugerencias en proceso de la tesis. Así, tengo que agradecer a José de la Puente, Carmen Mc
Evoy, Marcel Velásquez, Joseph Dager, Francisco Quiroz, Claudia Rosas, Carlos Gálvez
Peña, Cristóbal Aljovín, Víctor Arrambide, Nelson Pereyra, Gustavo Montoya y Elizabeth
Hernandez. Escribir en pandemia tuvo severas limitaciones por el acceso a las bibliotecas y
los archivos, así que sin los recursos digitalizados esta investigación no hubiera podido
llevarse a cabo y, en ese sentido, fue mucho más que importante la plataforma “Fuentes
Históricas Peruanas” dirigida por el historiador Jair Miranda. También, en la Biblioteca
Nacional del Perú, tengo que mencionar el apoyo de Gerardo Trillo, Jimmy Martínez, Jorge
Huamán y Leandro Villalobos.
Debo agradecer a mis compañeros de la FLACSO como Laura Barreros, Juan Fernando
Graterol, Maelyn Jaramillo, Claudio Yépez, Michelle Andrade, Liliana Rocha, Angie Clara,
Toña Coronel, Jairo Nicolalde, Jazmín Duque, Javier Saravia, Mayra Pardo, Danny del Pozo
y Esteban Enríquez. A mis amigos peruanos como Christopher Cornelio, José Mogrovejo
Palomo, Marcos Alarcón, David Mogrovejo y Carlos Aime les debo mucho por su apoyo
incondicional en este proceso. Asimismo, mi madre estuvo siempre a mi lado en este
accidentado y gratificante camino del historiador. Por último, deseo dedicar esta tesis a la
memoria de Eduardo Barriga Altamirano con quien no solo nos unía la incontrastable ciudad
de Huancayo, el Arsenal FC y ciertos grupos de metal, sino también una gran amistad. Tengo
que admitir que su partida prematura todavía se me hace muy difícil de procesar.
8
Introducción
Es un hecho que, en las guerras de independencia en el Perú, participaron distintos actores
políticos, sociales y militares; en consecuencia, cada uno se propuso dejar por escrito sus
experiencias bélicas con la finalidad de justificar sus actos en ellas. Uno de ello fue un
miembro del ejército patriota poco conocido en los libros de Historia: Juan Basilio Cortegana
(1801-1877). Tras haber estado presente en las batallas claves para el triunfo en la guerra,
como Junín y Ayacucho, redactó, desde el barrio popular de Malambo, el manuscrito Historia
del Perú, compuesto por trece tomos, que abordaba las épocas prehispánica, colonial y
emancipadora. Aunque nunca fue publicado, finalmente llegó a la Biblioteca Nacional del
Perú en 1945 gracias a la gestión del historiador Jorge Basadre.
En ese sentido, con esta tesis busco rescatar el manuscrito de Cortegana como parte de una
escritura histórica que surgió mucho antes de la institucionalización de la Historia como
disciplina y en medio del proceso de construcción del Perú como Estado-nación. Así, en estas
líneas planteo que esta fuente se sitúa entre el género de memorias testimoniales y el de
historias generales. Para demostrarlo, estudio las características del manuscrito en relación
con ambos géneros y cuáles fueron sus implicancias escriturales y políticas para los primeros
años de la República del Perú.
Una de las primeras formas de escribir historia en el Perú decimonónico fue a través de las
memorias vivenciales. Sus autores, utilizando fuentes orales y diversa documentación
histórica, narraron, de forma subjetiva, los sucesos políticos no solo con la finalidad de
destacar su participación en ellos, sino también, como señaló el historiador Félix Denegri
Luna, para la “defensa de la fama y el buen nombre de sus propios autores, que escribieron
para protegerlos” (Denegri Luna1971a, p. XIII). Cortegana siguió esa tendencia, pero también
se interesó en mostrarse como “narrador” de un ente historiable como el Perú, cuya historia
trascendía los hechos circunstanciales y testimoniales de una época en particular.
A este último género, Jorge Basadre le denominó “historia general”. Uno de sus máximos
exponentes en la primera mitad del siglo XIX fue José María Córdova y Urrutia con su obra
Las 3 épocas del Perú. Al ofrecer una visión en conjunto de la historia nacional, se dividió en
tres partes: 1) Fundación del imperio de los incas, 2) Dinastías ultramarinas, y 3) Perú
independiente. Su estilo es lineal e incorpora las tres épocas señaladas como parte de una sola
tradición, sin solución de continuidad. Pese a ello, para Mark Thurner (2012), esta fuente
9
inaugura la historia patria en el Perú, pues su autor rechazaba las especulaciones de
intelectuales europeos que habían sugerido que el fundador de la dinastía inca no había sido
“peruano”. Por ello, de la versión del Inca Garcilaso, se cita el mito de los hermanos Ayar e
insiste en que tanto Manco Cápac como Mama Ocllo (la reina madre inca original)
indudablemente “provinieron de una pequeña isla del Lago Titicaca”. En suma, se puede
concluir que Córdova y Urrutia fue el primer autor en mostrar una historia completa del Perú
en tiempos republicanos.
Ese también fue el interés de Cortegana al presentar una visión total del Perú como un ente
que transcurre en el tiempo, los hechos y otros acontecimientos de la independencia. En ese
sentido, Historia del Perú es uno de los pocos casos en el que se propone escribir una historia
general, mucho antes que la publicación de la obra emblemática de Sebastián Lorente, que
apareció durante la segunda mitad del siglo XIX y que es considerada como la primera
producción que hacía una historia total.
El propósito principal de esta tesis es analizar el manuscrito Historia del Perú de Juan Basilio
Cortegana, enfocándose en su rol dentro de la escritura del pasado en la primera mitad del
siglo XIX en Perú e Hispanoamérica. Los objetivos secundarios incluyen examinar cómo se
forjó una narrativa nacional peruana en el género de historia general, comparar el contenido
del manuscrito con los escritos testimoniales sobre la independencia y, finalmente,
contextualizar y vincular la biografía de Juan Basilio Cortegana con los usos políticos de la
escritura del pasado.
Por ello, en esta tesis demuestro que el manuscrito representó una forma de escritura en
transición al oscilar entre dos géneros, ya que se presentó como una historia general que
mantenía características del género de memorias; en otras palabras, el autor se mostró como
un “narrador” que buscaba brindar una visión total e histórica del Perú, pero que, en su
narración, no pudo abandonar por completo su posición como testigo. Esto se sostiene en los
distintos tomos que redactó: en la mayoría, se preocupó por presentar los orígenes incaicos y
coloniales del Perú, en tanto que en los últimos se concentró en narrar hechos vividos durante
las guerras de independencia y primeros años de la República naciente.
Estos rasgos están ligados a las transformaciones políticas del periodo y a sus modalidades de
la escritura histórica. Por ende, las memorias de la independencia se encuentran relacionadas
con contextos políticos cuyo distintivo esencial es el conflicto entre caudillos y veteranos de
10
las guerras de emancipación; mientras que las historias generales están vinculadas a proyectos
políticos orientados a la construcción de la nación. De este modo, se postula que la obra de
Cortegana representa un importante hito en la cultura letrada de inicios de la República de
cambio y transición, y su manuscrito es un híbrido documental que manifiesta esta presión
política que se experimenta en las primeras décadas de la república peruana. Del mismo
modo, su autor, siendo parte del colectivo de veteranos de guerra, emplea el pasado -en este
caso, construye una "historia general" con objetivos políticos y reivindicativos para así lograr
derechos y beneficios económicos del Estado.
Para aproximarme a este tema de investigación, primero me inmiscuyo con detalle en la
fuente primaria, con el propósito de analizarla y contextualizarla. Además, realicé una base de
datos que compara lo escrito por Cortegana y las fuentes escritas en las que se inspira y usa, la
cual se encuentra en la sección de anexos. Para adicionar la información recogida, busqué
otros documentos y fuentes que dejaron huella en el manuscrito; así, tampoco faltó el trabajo
de archivo. Para ello, pude acceder al Archivo Histórico Militar del Perú, cuyos fondos y
documentos están catalogados desde 1821 hasta 1874. Entre los tipos de documentos que se
pueden encontrar tenemos cartas, peticiones y fojas de vida. En estas últimas, es posible
conocer los servicios prestados por cada militar. Por último, revisé documentación en el
Archivo General de la Nación (AGN) del Perú, institución rectora que concentra la
información estatal y privada. Todo esto nos ayudó a bosquejar la biografía de Juan Basilio de
Cortegana, tanto en su cumplimiento militar como de veterano de guerra en los primeros años
de la República.
La presente tesis tendrá un itinerario determinado. Ciertamente, es una decisión arbitraria,
pero, a la vez, un camino, una forma de exposición, que tiene una secuencia lógica que
pretende brindar solidez a la argumentación. Esto no significa que las historias de Juan Basilio
Cortegana y su respectivo manuscrito solo puedan narrarse de esta manera; al contrario,
existen muchas posibles formas de mostrar los usos políticos de la Historia; y, más aún, con la
compleja vida de este y su obra manuscrita. Sin embargo, este trabajo tiene como fin seguir
los lineamientos académicos e institucionales. Es, por tal razón, que he determinado la
composición de tres capítulos de la siguiente manera.
El capítulo primero contextualiza y narrar la vida de Juan Basilio Cortegana. Esto es necesario
para entender el contexto y el lugar de enunciación en el cual fue producido el manuscrito
Historia del Perú. Todo historiador es un biógrafo, aunque muchas veces lo omita y no se
11
anime a decirlo de manera explícita. En ese sentido, este capítulo tiene como meta esbozar la
historia de vida de nuestro personaje desde los retazos y las huellas que nos dejó en los
archivos y repositorios. El héroe celendino se movió entre tres esferas distintas y, a la vez,
complementarias como son lo militar, lo político y el liderazgo de la sociedad civil. En él, se
pudo lograr la intersección entre estas esferas, ya que fue un militar que tuvo un papel
importantísimo en la gesta independentista y en los primeros años de la República peruana;
además, luego alcanzó a ser representante de su región ante el parlamento y, finalmente, fue
un líder entre sus pares al tener cargos importantes en asociaciones de exveteranos.
En el segundo capítulo, pretendo mostrar la significancia del manuscrito Historia del Perú.
Cortegana al escribir una Historia General deseaba superar a las memorias individuales,
aunque no lo hizo de manera exitosa. A pesar de esa intención, su historia representa una
transición, un paso entre dos formas de escribir y entender el pasado. Por un lado, las
memorias están ligadas al honor de cada individuo y el realce de sus acciones con fines
políticos; mientras que, por otro lado, las historias generales están más en consonancia con los
proyectos políticos de construcción del clásico Estado-nación del siglo XIX. Todo esto es
importante, no son antes explicar la circulación del manuscrito como objeto cultural que
aparece y desaparece en la historiografía y la cultura histórica peruana.
El tercer capítulo parte de la necesidad de hacer inteligible el origen de los constructos e idea
que son utilizados en las narrativas históricas que construye Juan Basilio Cortegana en su
manuscrito. El tercer capítulo establecerá un contrapunto entre el trabajo de Juan Basilio
Cortegana de su Historia del Perú, y otras fuentes relevantes. A través de una minuciosa
comparación con otras fuentes históricas, se evaluará su aporte, y su conexión con otras obras
y corrientes de pensamiento de su época, lo cual brindará una comprensión más completa del
trabajo de Cortegana y la cultura letrada e ilustrada de los militares participes de las guerras
de la independencia y los primeros años del Estado nación peruano.
12
Capítulo 1: Trayectoria de vida de Juan Basilio Cortegana1
El 4 de abril de 1984 es una fecha de suma importancia en nuestra narración, pues ese dìa se
trasladaron los restos mortales de Juan Basilio Cortegana y Vergara desde el cementerio
Presbítero Maestro, Cuartel N 123, Letra “B”, al Panteón de los Próceres. A este acto
asistieron distintas personalidades civiles, militares y eclesiásticas; también participaron tanto
el batallón de los Húsares de Junín como la Banda de Guerra del Perú; se realizaron tres
discursos de distintas personalidades; y el historiador Apolonio Carrasco Limas, principal
investigador de la vida y obra del prócer, declaró a la prensa. En la descripción de la lápida de
Juan Basilio Cortegana, dedicada por su hija Corina, se señalaba lo siguiente: “héroe fallecido
en 11 de diciembre de 1877, quien fuera fundador de la independencia y restaurador de la
patria; además de vencedor de Junín y Ayacucho, el Sitio del Callao”2.
Este acto iba en cumplimiento con la ley 23631 del 15 de junio de 1983, que rendía homenaje
al “Prócer, Historiador, Parlamentario Don Juan Basilio Cortegana y Vergara”. Asimismo,
traía consigo los siguientes artículos: el primero era rendirle homenaje; el segundo, declarar
que se traslade sus restos mortales del cementerio Presbítero Maestro al Panteón de los
Próceres; el tercero, autorizar al Poder Ejecutivo para que, a través del Sector
correspondiente, se disponga la publicación de su obra Historia del Perú; el cuarto, derogar
las leyes y demás disposiciones que se opongan a tales mandatos; y, por último, afirmar que la
ley estaría en vigencia al día siguiente de su publicación3. Si bien se trasladaron los restos del
héroe a un lugar apropiado por su desempeño en las guerras de independencia, no se cumplió
con el tercero.
No sabemos exactamente las razones de aquel incumplimiento. Recién en el año 2020, se
volvió a discutir sobre el manuscrito, y el nombre de Juan Basilio Cortegana reapareció en la
palestra pública gracias a iniciativas de distintos actores públicos y de la sociedad civil en
El presente capitulo es una versión ampliada del estudio preliminar y cronología que realicé para la publicación
de la selección de los trece tomos de la Historia del Perú (2022). Agradezco, el apoyo económico de la
Fundación BBVA y de la Biblioteca Nacional del Perú.
2
En
estos
enlaces
pueden
observarse
la
videograbación
del
acto.
https://www.youtube.com/watch?v=hdaAyVLxQ9w y https://www.youtube.com/watch?v=mJcVoOOA2Cw.
Revisados el 1 de mayo de 2021.
3
Pueden encontrar esta información en el siguiente enlace: https://peru.justia.com/federales/leyes/23631-jun-151983/gdoc/
Revisado el 25 de abril de 2020 a las 22:44 horas.
1
13
nuestro país4. Antes de entender la producción del manuscrito Historia del Perú, es necesario
saber sobre la biografía de su autor y entender la época en la que fue redactado.
A lo largo de su vida, se desempeñó en tres ámbitos: militar, político y líder de la sociedad
civil. En efecto, desde su papel como militar, cumplió un rol importante en estos procesos y,
por tal razón, fue considerado uno de los fundadores militares de la naciente república; no
obstante, no solo participó en la carrera de las armas, sino que, posteriormente, también fue un
parlamentario que representó a su región y, finalmente, un actor importante de la sociedad
civil como líder de asociaciones de ex veteranos que buscaban reclamar sus derechos y
prerrogativas del Estado como guerreros que se sacrificaron por la independencia del Perú. En
resumidas cuentas, Juan Basilio Cortegana posee una historia de vida significativa para
entender la Independencia y los primeros años de la República.
4
Roxana Judith Padilla, quien es parte de la Dirección Desconcentrada de Cultura Cajamarca (DDC), comentó,
en una entrevista publicada el 21 de enero de 2021, que hay un trabajo conjunto para visibilizar las memorias de
Juan Basilio Cortegana en su región. Para ello, se desea realizar publicaciones y actividades oficiales para llevar
el manuscrito a distintos niveles educativos. Inclusive, una de las intenciones es renombrar como Juan Basilio
Cortegana a una calle en Celendín. Con estas iniciativas, se desea revalorar a este prócer en Celendín y en la región
Cajamarca. Véase:
https://www.facebook.com/elportalcelendino/videos/234074101583192
14
Foto 1. 1 Fotografía de estudio de Juan Basilio Cortegana.
Fuente: (Cortegana, 2023, Volumen 5: 373).
15
1.1.
Vida militar5
Juan Basilio nació en 1801, en Celendín (Cajamarca). Gracias a la influencia de sus padres Dionisio Cortegana y María Vergara-, y con una tradición católica muy presente en el seno
familiar, aprendió, desde una temprana edad, la Antigüedad Clásica, la declamación, el latín y
el griego. A pesar de ello, no siguió una vida religiosa, como sus padres hubiesen deseado,
sino que se sintió inclinado por la vida militar. Así, siendo tan solo un adolescente, se enroló
en las filas del ejército realista, y tuvo una carrera militar en ascenso (Carrasco 1954, 9). No
hay que prestar atención que el ejército Real del Perú estaba compuesto, en su mayoría, por
criollos, como Cortegana, e indígenas de diversas regiones. Además, de acuerdo con Luqui
Legleayze (2006), se puede observar que “los americanos prevalecieron en los cuerpos
milicianos (80% de oficialidad)”, los siguientes eran los cuerpos veteranos que constituyeron
un tercio del total y eran jóvenes que no pasaban del grado de capitán. Cabe precisar que los
peninsulares poseían los grados más altos de la oficialidad, y su experiencia bélica se
rastreaba desde las guerras napoleónicas y las peninsulares por la defensa de la Constitución
de 1812 (Sobrevilla 2019: 480-481).
Las guerras de independencia en América generaron un conflicto de intereses al interior de la
sociedad: hubo grupos que apoyaron la llegada de la patria, en tanto que otros deseaban seguir
perteneciendo a la monarquía hispánica. Por tal razón, detrás del arribo de José de San Martín
y la Expedición Libertadora en Paracas, muchos jóvenes oficiales, como Andrés de Santa
Cruz y Agustín Gamarra, desertaron del ejército realista, y el joven Juan Basilio fue también
uno de ellos. Estos oficiales se trasladaron a Huaura para jurar lealtad a la nueva causa, y
brindar sus servicios a San Martín, quien los recibió con los brazos abiertos. De esta manera,
se formó el primer regimiento peruano, el Cuerpo de la Legión Peruana de la Guardia, que
estaría bajo el mando de José Bernardo de Tagle. Este cuerpo militar estaba conformado por
un batallón de infantería, dos escuadrones de caballería y una campaña de artillería volante de
cien piezas: Guillermo Miller fue el coronel a cargo de la infantería, y el mayor Eugenio
Necochea hizo lo propio con los escuadrones (Carrasco 1954, 10).
Bajo estas nuevas banderas, Cortegana fue testigo de la proclamación de la independencia en
Lima el 28 de julio de 1821. Sin embargo, la euforia libertaria no duraría mucho tiempo. Si
5
Para entrar a aspectos de la biografía de Juan Basilio Cortegana, tenemos como pilar estudio realizado por
Apolonio Carrasco (1954). La Historia del Perú de Juan Basilio Cortegana. Una contribución al estudio de la
historia nacional.
16
bien los realistas abandonaron la capital virreinal, todavía no habían sido derrotados
militarmente; por el contrario, se hicieron más fuertes en el centro y sur del Perú, por lo que
se organizaron diversas expediciones entre 1822 y 1823. A estas campañas se les conoció
como la de Puertos Intermedios porque “la idea era desembarcar en uno o dos de los puertos
entre el Callao y Valparaíso, y mandar una columna de choque, mientras otra atacaba por la
sierra central y desde el sur se avanzaba sobre el Alto Perú” (Sobrevilla 2022, 128).
Cortegana estuvo presente en ambos escenarios bélicos, que resultaron en un fracaso para las
armas patriotas. Al año siguiente, gracias al genio táctico de Simón Bolívar, y al desgaste de
los realistas, se consolidó la independencia nacional a través de las batallas de Junín y
Ayacucho: Cortegana estuvo presente como subordinado de José de la Mar, y del coronel José
María Plaza respectivamente (Carrasco 1954, 11).
Durante los primeros años del Perú independiente, la carrera militar de Cortegana no fue para
nada fácil. Fue así como, apareció un artículo controversial y se le adjudicó a Cortegana la
autoría, por lo que tuvo un altercado con dos oficiales del ejército en la vía pública. Las
confrontaciones subían en la escalada y, también, participó en los enfrentamientos entre
caudillos militares. Debido a su participación en la insurrección de Felipe Santiago Salaverry
contra el gobierno de Gamarra en marzo de 1833, fue exiliado a Maynas que era considerada
como zona de frontera.
Los documentos del Archivo del Centro de Estudios Histórico Militares del Perú fueron muy
importantes para reconstruir la historia de la institución militar en los primeros años de la
naciente República. A partir de los fragmentos y retazos que pude encontrar, ciertas cartas
entre los distintos estamentos militares, tuve la oportunidad de identificar los lugares a los que
Cortegana iba siendo designado, así como sus respectivos ascensos militares. Así, el 11 de
abril de 1834 se le otorgó el grado de comandante general de Nazca para la provincia de Ica;
no obstante, rechazó el ascenso por aducir problemas del deterioro de salud por el excesivo
trajín de las guerras de independencia6. Pero volvería años después a Trujillo para unirse de
nuevo a Salaverry. Hacia 1838, ascendió al grado de teniente coronel, y participó en las
campañas de la Restauración contra el protectorado de Andrés Santa Cruz y la Confederación
6
N 3 / N 400 (400) / págs 2 (1). Archivo del Centro de Estudios Histórico Militares.
17
Perú-boliviana. Dos años más tarde, fue destinado al sur del Perú, específicamente en el límite
con Bolivia, pero, en 1841, fue procesado y separado del servicio militar activo.
Cuando estuvo en el norte, el 6 de enero de 1839, mostró conocimientos de hierbas
medicinales para curar a mulas enfermas en la provincia de Santa. Su cometido sirvió de
poco, ya que, ese mismo mes, aparecieron más problemas y unos enemigos robaron
doscientas cabezas de ganado, y secuestraron al gobernador y al comandante. Dado que los
adversarios contaban con trescientos hombres y conocían bien la geografía del lugar actuaron desde los altos para cortar la comunicación y capturar pertrechos- Cortegana solicitó
refuerzos, lo cuales fueron enviados desde Huanta. De esta manera, para el 20 de enero, bajo
las órdenes del general Jaramillo, se logró recuperar lo robado y liberar a las autoridades
secuestradas.
A partir de estos actos, es más que seguro que Cortegana tuvo una vida militar bastante activa,
que no solo se reducía a las guerras civiles entre caudillos. Definitivamente, su conocimiento
sobre el cuidado de mulas y reses, así como enfrentamientos con bandas locales muestra una
faceta mucho más cotidiana del ámbito militar y menos protocolar de la investidura de héroe
de la independencia del Perú.
1.2.
Vida política
Una vez alejado de la vida militar, nuestro protagonista decidió optar por una carrera política,
por lo que en 1842 postuló como senador por Cajamarca, aunque sin éxito alguno. Hacia los
primeros meses de 1850, Cortegana juntó esfuerzos con Leandro Pereyra, José Burga y
Manuel Pereyra para que Celendín sea elevado a la categoría de provincia. No era la primera
vez que se realizaba este pedido, pues hubo otros similares en 1810 y 1812. Cinco años más
tarde, en 1855, Cortegana insistió con su solicitud a través del folleto titulado Estadística
Histórica, Geográfica, Física y Política del Distrito de Celendín. Se trata de una fuente
estadística muy valiosa porque ofrece contenido vinculado a la demografía o recursos
cuantitativos de la región, lo cual, según el militar, era prueba suficiente para elevar a
Celendín a provincia.
18
Foto 1. 2 Estadística Histórica, Geográfica, Física y Política del Distrito de Celendín.
Fuente: Burga, José et. al (1855). Estadística Histórica, Geográfica, Física y Política del
Distrito de Celendín. Lima: Imprenta y Litografía de Miguel Saona.
19
Para el 25 de agosto de 1857, desde Cajamarca Cortegana y otros coterráneos enviaron una
carta dirigida al Ministro de Estado en el Despacho de Gobierno Culto y Obras Públicas para
que sea elevada a la Convención Nacional. En esta carta, se pedía la creación de
municipalidades para tres pueblos y la erección de la provincia de Celendín:
“Se que la capital de esta nueva provincia sea Celendín por el deseo del progreso de
los pueblos de este departamento cumpliendo con un deber de justicia reproduce en
todas sus partes el tenor de ellas y el de los informes expedidos en el particular, como
que se halla al corriente de las necesidades actuales de aquellas poblaciones, de los
perjuicios que les son consiguientes de permanecer en el estado en el que se hallan, no
obstante su crecido número de vecindad, las ventajas que recibirá con la concesión de
la gracia que solicita como precisa para su prosperidad” (citado en Macera 1998,
Tomo 2. 84-85).
Pero hablemos un poco del contexto de estas peticiones. No era la primera vez que se recurría
a los estudios sobre población y uso de información estadística con fines políticos. Entre 1791
y 1876, la estadística se convirtió en una herramienta de poder para muchos pueblos del
interior, ya que, además de formar identidades regionales, los datos podían reforzar las
agendas locales en el contexto de la política nacional. En la mayoría de los casos, los
reclamos tenían como fin ascender de jerarquías y pasar de categorías de pueblos a provincias.
Sin embargo, la recopilación de estos datos debía ser cuidadosa, ya que si existía alguna cifra
tomada de manera incorrecta podría ocasionar menos representantes de la localidad en el
Parlamento o un ataque al orgullo local. Al conseguir la meta, se fomentaba sentimientos de
unidad nacional. En el caso de Celendín, debido a las gestiones de Cortegana, los vecinos, en
la Legislatura de 1868, lo eligieron su representante” (Carrasco 1954, p. 15). Aquí empieza su
trayectoria política como representante formal.
Pese a su vida política activa, su situación económica no era la mejor, por lo que tuvo que
aceptar un puesto administrativo en un establecimiento comercial en Lima. De acuerdo con
Apolonio Carrasco, fue probable que, por estos años, alejado de la vida militar, y alojado en el
barrio negro de Malambo -considerado una de las zonas más pobres del Rímac- empezara a
redactar su Historia del Perú. Además, para Luis Tejada, fue un lugar donde habitaron no
solo negros, sino también indios, cholos, chinos y muchos blancos empobrecidos. Los
orígenes de este barrio venían desde la colonia y estuvo vinculado a la cárcel de esclavos, así
como al gran basurero de Lima. El hospital San Lázaro y su parroquia adjunta también
20
estuvieron allí, ya que servía como hospicio de ciegos, mancos y tullidos. Fue alrededor de
estos centros que se concentraron tugurios que comprendían a familias negras, mulatas, indios
yungas, mancos, leprosos y tullidos. No faltaron, además, los tambos, pulperías chinganas,
burros alfareros, cocineras ambulantes y callejones tugurizados. La religión también tuvo su
lugar, lo que explica las múltiples cofradías que convivían en el barrio; además, también
podemos afirmar que era un lugar de gran jarana y de fiesta. Cortegana pasó sus últimos días
en aquel lugar viudo y, al parecer, sin recursos. Inclusive, puedo arriesgar la idea de que a
pesar de que Juan Basilio era un héroe reconocido y legislador, al encontrarse en un lugar no
privilegiado podría afirmar que su obra nació desde un lugar no hegemónico de aquel
entonces.
Cuando eligieron a Basilio Cortegana parlamentario (1868-71), uno de sus principales
objetivos fue convertir a su lugar natal en una de las primeras provincias de Cajamarca. Para
ello, consideró que la educación era necesaria: su concepción no solo era en enseñar funciones
y pensamientos abstractos sino también debía “orientarla hacia la praxis para conseguir la
felicidad individual y social” (Carrasco 1954, 15). Apoyó, por tanto, la inauguración de varias
escuelas elementales, y logró la promulgación de una ley que ordenaba abrir el primer
Colegio de Instrucción Secundaria en su provincia; consciente de que era necesario contar
también con buenos docentes, buscó también mejorar los salarios a los maestros. Es
sorprendente que, para 1870, estuviera en la avanzada y propusiese crear un colegio de
señoritas en Celendín, aunque no tuvo la acogida que esperaba.
No descuidó tampoco otros rubros que podrían beneficiar a Celendín. Se concentró, primero,
en las obras públicas, como la construcción de un cementerio, la mejora del servicio de agua a
través de acueductos, ferrocarriles en noviembre de 1970. Como segundo punto de su agenda
política, buscó, en 1869, que se reconociese el aporte de distintos ciudadanos de su provincia
a las guerras de independencia, pero fue desestimado. Hacia agosto de 1870, fue designado
como principal de guerra en el Poder Legislativo, lo que le otorgó más autoridad para dar
opiniones en el pleno. Con ello, empezó su labor a favor de los veteranos de guerra,
específicamente para los vencedores de Junín y Ayacucho, que no habían alcanzado ni pedido
ascensos o remuneraciones al Estado. Según informó Cortegana, el gobierno peruano poco
había hecho por sus excombatientes, por lo que el 7 de diciembre de 1870 solicitó que den
beneficios en base a la ley del 23 de enero de 1869.
21
Si bien Apolonio Carrasco enfatiza que la carrera parlamentaria de Cortegana finalizó en
1871, se ha identificado informes que demuestran que su actividad no se detuvo hasta 1874.
En efecto, Cortegana insistió en el asunto de la gratificación de los veteranos. Hacia el 27 de
febrero de 1873, increpó al parlamentario Becerril por no considerar las gratificaciones. Su
principal argumento fue que no se trataba de una ley de aumento, sino la justa devolución
monetaria por sus acciones en la guerra.
Por último, y no menos importante, es pertinente rescatar que para el 27 de enero de 1871
Cortegana, junto con otros parlamentarios, solicitar a un presupuesto de 40 000 soles para la
construcción de una pirámide en honor a la victoria en Ayacucho. También, Juan Basilio
discutió sobre las guardias nacionales y el da el ejemplo a partir de su experiencia en la
guardia, la cual existe desde la época colonial. Finalmente, pidió exoneración de servicio
militar a mineros y pastores, pues ellos contribuyen activamente en la economía peruana.
1.3.
Líder entre los vencedores
Según Víctor Peralta, existió una sociedad patriótica en 1822, pero fue una institución
intrascendente, elitista y criolla que tuvo una duración de pocos meses durante el gobierno del
general San Martín. Pasaron décadas y no hubo un interés genuino para constituir una
asociación con debate doctrinario y nacionalista; sin embargo, esto cambió al inicio del
gobierno de Ramón Castilla y, al igual que la época de la independencia, los miembros eran
personajes liberales (Peralta 2005, 97) Este fue un tema que interesó a Cortegana, ya que
conectaba su pasado militar con su vida actual como civil. Es así como, en 1845, fundó la
Sociedad Humanitaria, pensada como espacio de asistencia mutua entre veteranos de la
independencia. Por ello, el 9 de septiembre de 1848, solicitaron al Poder Ejecutivo que se
proporcionara a estos exmiembros del ejército un auxilio económico porque la gran mayoría
vivía en la indigencia.
22
Foto 1. 3 Retrato de Juan Basilio Cortegana por Etna Velarde.
Fuente: (Cortegana, 2023, Volumen 5: 374).
23
Cortegana también fue participé de colectivo de exmilitares como la Sociedad Fundadores de
la Independencia (institución posterior a la Humanitaria), integrada por jefes y oficiales,
veteranos civiles, capellanes y médicos que lucharon en las guerras de independencia, desde
la batalla de Pichincha hasta el Segundo Sitio del Callao. Con el lema Igualdad, Fraternidad y
Unión, tanto D. Miguel San Román y D. Benito Laso desempeñaron cargos de primer
presidente y vicepresidente respectivamente, y, a iniciativa de Cortegana, los socios debían
llamarse “hermanos”.
Para la instalación de esta comunidad, se organizó una misa en el templo del Convento de San
Francisco de Asís el 9 de diciembre de 1848: el clérigo Nicolás Garay ofició la ceremonia,
apoyado por María José de Arce, Gabino Uribe y Juan Sánchez7. Al finalizar, se llevó a cabo
una reunión que contó con las palabras de Francisco Javier Mariátegui, Benito Laso, Blas José
Alzamora, José María Arce, Nicolás Garay y Juan Basilio Cortegana cumplió el rol de
maestro de ceremonias (Carrasco 1954, 14). Entre sus actividades, destacaban ciertas
designaciones.
Las sesiones preparatorias de su constitución en la que intervinieron treinta y nueve
ciudadanos comenzaron el 2 de septiembre de 1848 y culminaron el 4 de diciembre
con la designación como su presidente del general Miguel de San Román, recayendo a
continuación la primera vicepresidencia en Benito Laso, la segunda en el general José
Agustín Lerzundi y la tercera en Francisco Javier Mariátegui. El estreno público de la
institución ocurrió el 28 de noviembre al organizar esta unas honras fúnebres al ex
presidente general Agustín Gamarra (Peralta 2003: 99-100).
Según la historiadora Carlota Casalino, la Sociedad en cuestión tenía características de un
esquema de ayuda mutua, por lo que los miembros debían contribuir económicamente para
cubrir los gastos funerarios de los miembros. A cambio, cada uno de ellos recibía un diploma
y debía asistir con sus medallas a las ceremonias oficiales y funerales de la organización al
lucir sus mejores galas.
“La condición indispensable establecida para ser miembro nato de dicha sociedad era
el haber participado en las guerras de independencia. Paulatinamente, conforme se va
institucionalizando, el Estado va asumiendo mayor presencia en dicha asociación.
Conforme se va produciendo dichos cambios, la institución ampliará sus funciones y
las condiciones para pertenecer a la institución. En ese sentido, a los fundadores de la
7
Garay y Arce fueron colaboradores en la redacción de las memorias de Pruvovena de José de la Riva Agüero
24
Patria, se sumarán los que la defendieron el 2 de mayo, después los que participaron en
la Guerra del Pacífico y posteriormente los que participaron en otras guerras
defendiendo el territorio, finalmente se incorporaron los descendientes de los héroes.
(Carlota Casalino 2008, 213-214)
A pesar de los esfuerzos realizados, por temas políticos, se presentó a esta institución como un
centro de conspiración contra el gobierno de Ramón Castilla. En consecuencia, se buscó su
disolución, y prisión y confinamiento para los miembros de su directiva: Miguel San Román,
Agustín Lezundi y Mariano Pagador fueron algunos de los detenidos. En palabras de Peralta:
Todo indica que éste (Castilla) estuvo convencido de que la Sociedad Patriótica
encubría en realidad una plataforma política creada por los liberales para promover
actos sediciosos y, en última instancia, actuar como un club electoral en los comicios
generales que se avecinaban. La asociación no pudo mantenerse en el espacio público
y languideció hasta desaparecer (Peralta, 2003: 103).
La Sociedad insistió en que el gobierno reconociera la sociedad, y el 28 de septiembre de
1857 Juan Basilio Cortegana y Casimiro Negrón se acercaron a Palacio de Gobierno para
exponer los propósitos de la institución: nacía para atender los males e infortunios de los
veteranos de guerra. Muchos de ellos, abandonados por el Estado, fallecieron con pocos
recursos, olvidados en hospitales, e, incluso, sus familias tuvieron que pedir ayuda para poder
enterrarlos con honor. En respuesta a estas necesidades, el gobierno aceptó la instalación de la
Sociedad. De acuerdo con Peralta (2005, 100), la sociedad de 1846 se diferenció de la nueva
sociedad en que esta última fue más inclusiva al incluir a los vencedores de las batallas de
Junín y Ayacucho, a los que participaron en el sitio de la última resistencia española en la
fortaleza de El Callao y a los veteranos de las guerras de independencia de la república. Tanto
las decisiones adoptadas como los actos celebrados fueron objeto de comunicados positivos
en las páginas del periódico El Comercio. Se elogiaba el carácter particular, incluyente y
apolítico de la institución.
Según Peralta (2005, 100), la Sociedad Patriótica se autodenominaba como una organización
particular y se comprometía a establecer las bases de una buena moral entre sus miembros.
Además, obligaba a sus miembros a contribuir con el uno por ciento de sus sueldos en un
fondo que se destinaba, en primer lugar, a cubrir los gastos reportados por enfermedad,
entierro, honras fúnebres y recuerdo anual de cualquiera de sus miembros. En segundo lugar,
el fondo se destinaba a la celebración de varias fechas conmemorativas, como la jura de la
25
independencia, las batallas de Junín y Ayacucho y la fundación de la Sociedad. En estos
casos, el acto central comprendía una misa de acción de gracias, un Te Deum y un
panegírico.:
“Cortegana apuntó que en los tiempos que se vivía ningún hombre podía ser fuerte por
sí solo sino asociándose con los demás de su especie. Siguiendo ese principio,
continuaba Cortegana, la sociedad que se había conformado tenía como misión hacer
predominar como su fin exclusivo la unión de todos los defensores de la patria antes
olvidados y divididos en la consolidación y defensa de las independencias peruana y
americana. Para lograrlo, concluía que la asociación de la que formaba parte debía
procurar mantenerse «ajena de la política, inclinar sus laureles al imperio de la ley, y
sin tomar entre sus labios la menor inducción a esa tendencia, solo encaminar su
actividad, resignación y celos al consuelo de sus miembros y a la marcha progresiva de
su indudable establecimiento»”. (Peralta 2003: 101)
Podemos observar de manera explícita los puntos de la constitución de la Sociedad Patriótica:
Titulo 3: Objeto, Fin y Medios de la Sociedad
Art 8°- La Sociedad tiene por objeto: 1) Conservar vivos los recuerdos de los grandes
hechos practicados en obsequio del pais durante la época de la independencia, 2)
Hacer efectivos y prácticos, en cuanto de sus esfuerzos depende, los fecundos y
consoladores principios de libertad, igualdad y fraternidad que constituyen su divisa y
son los mismos que proclamó la América al dar el grito de la emancipación, 3)
Asegurar a sus miembros las ventajas de una asociación humanitaria y desinteresada.
Tiene por fin:- Inspirar a los hijos de los fundadores y de los demas asociados, asi
como a la generación que se levanta, el amor a la patria y a sus instituciones; el respeto
a la ley y a sus defensores; el culto de la democracia; el sincero y constante deseo de
introducirla gradualmente en la vida pública, ilustrando a las masas populares; la
abnegación y el sacrificio de todo interés personal, siempre que se trate de la gloria y
de la prosperidad de la Nación, y el bienestar y la honra de los socios. ((1861)
Constitución de la Sociedad de Fundadores de la Independencia del Perú. Lima,
Impreso por Francisco Solís, p.5).
Titulo 26: De los Derechos y Obligaciones de sos Socios
26
Art 54°.- Es obligación de todo socio: 1) Pagar puntualmente sus cotizaciones; 2)
Asistir con exactitud a las sesiones, cumplir las resoluciones y acuerdos de la
Sociedad, desempeñar fielmente los cargos que esta le confiera, sin escucharse jamás,
a no ser por muy graves motivos o en caso de reelección; 3) Servir con benevolencia y
decision a sus consocios siempre que lo soliciten, sin omitir diligencia ni medio lícito
y honesto para ayudarles a lograr su propósito, y ver en cada miembro de la Sociedad
un hermano a quien debe procurar los bienes que para si mismo apeteciese.
(Constitución de la Sociedad de Fundadores de la Independencia del Perú. 1861. Lima:
Impreso por Francisco Solís, pp. 22-23)
Francisco de Vidal, Juan Manuel del Mar, Francisco Forcelledo, José Montes, Eugenio
C. Sosa, Gavino Pizarro, Gabriel Grados, Juan Basilio Cortegana, Manuel de Uriza,
Enrique Montes, Estanislao Correa y Garay, José Toribio del Río, José Francisco del
Río, Pedro José Castilla, Juan Delgado, Pablo J. Delgado, Felipe Santiago Romero,
Ambrosio Taboada, José Rufino Álvarez, Mateo Estrada, Pedro Rios, Agustin
Mispireta, Luis Llaque, J. Antonio Alvarado, José del Carmen Gallegos, Simon
Velarde, Lorenzo Medina, José Terán, J. Mariano Alvarez, M. Munar, José Manuel
Bravo, José María Palomo, Manuel Salcedo, Juan Espinoza 2°, Julian Chirinos, José
María Sanchez Sosa, José Silva, José Aranaga, J.A. Rojas, Manuel Pérez, Francisco
Garfias, José Santivañez, Manuel G. y Vera, Manuel Mendoza, José del Carmen
Mecia, Juan Pedro Tobal, Ascencio del Carpio, José Lombardi, José Ramón Andrade,
José Cosio, Manuel Sotelo, José Eduardo Castro, Apolinario Choza, Dr. Juan Sanchez,
Andres Rocel, Dr. Gavino Uribe, Antonio Padilla, José Benigno Carrillo, Lorenzo
Iraola, Mariano Pagador, Manuel Luza, Manuel Garro, Marcelino Oyarzun, Hilarion
H. Dalens, J.M. Mier y Terán, Cirilo Coronel, Manuel Salazar y Ayala, Atanacio
Pagador, Estevan Jimenez, Manuel de la Maza, Mariano Denaho, Pedro J. Torres, José
María Guerrero, Ceferino de la Puente, Toribio Barrantes, Rafael Garcia de Mancebo,
José Teodoro Lamas, Mariano José Rodríguez, Domingo Negrón, Pedro Jaramillo,
Celestino Vargas, José Tejada, Tomás Guerra, Juan Gonzalez, Julio Molina, Pedro
José Iglesias, Mariano Gomez Flores, Manuel de Uribe, J. Manuel Pila. (Constitución
de la Sociedad de Fundadores de la Independencia del Perú. 1861. Lima: Impreso por
Francisco Solís, pp. 26-27)
27
Durante el conflicto con España, en 1864, el Perú tuvo que realizar un empréstito forzoso de
diez millones de pesos. Paradójicamente, La Sociedad colaboró monetariamente con las
necesidades económicas del Estado, por lo que Juan Basilio, como tesorero, hizo la entrega de
500 pesos a la Tesorería del Crédito Público. En el lapso de esta guerra, Cortegana tuvo otros
roles importantes para el país: participó en comisiones de gratitud con Chile, ya que su apoyo
fue vital para enfrentarse a los españoles que habían ocupado las islas de Chincha.
Foto 1. 4 Busto de Juan Basilio Cortegana. Ubicado en la Benemérita Sociedad
Fundadores de la Independencia.
Fuente: (Cortegana, 2023, Volumen 5: 375).
28
Los últimos días de Cortegana fueron complicados por su enfermedad de las úlceras. Pocos
fueron los amigos que lo visitaron en su lecho en el barrio de Malambo, pero los que siempre
estuvieron con él fueron su hija natural Corina y su yerno Agustín Rosillo. En su testamento,
citado en el estudio preliminar de Carrasco, se registró que, en noviembre de 1877, reconocía
a Corina como heredera de todos sus bienes, derechos y acciones. Lastimosamente, pasó lo
que tenía que suceder y en la madrugada del martes 11 de diciembre de ese año, exactamente
a las 5.30 am., falleció tras recibir confesión por Narciso Alvarado, clérigo de San Lázaro. A
las ocho de la mañana del día siguiente, se realizaron las honras fúnebres, en las que
participaron personas cercanas a Cortegana al igual que ex combatientes de guerra; y el
batallón Pichincha le rindió los honores de héroe de guerra.
Foto 1. 5 Obituario de Juan Basilio Cortegana.
Fuente: (Cortegana, 2023, Volumen 5: 379).
Sobre los bienes que dejó, Apolonio Carrasco, su principal biógrafo, afirma que el veterano
murió pobre, pero en su testamento, fechado el 26 de mayo de 1868, ubicado en el Archivo
General de la Nación, dio cuenta de varios inmuebles que dejó:
29
“mis bienes una casa solar situada en la misma población de Celendín que compré a
los [] de ese pueblo. Otra parte de ese [45r] solar en el [] pueblo, frente a la casa de
don Pedro Ortiz. Del mismo modo, otra casa solar aquí mismo que compre a donde
Pedro Silva, natural y [] de Sumampa, cuyos documentos o títulos de propiedad de
todas las fincas mencionadas antes existen entre mis papeles lo que expongo para que
conste” (AGN Colonia, Prot. N° 180 S. XIX).
Esta información, que reseña varias propiedades de Juan Basilio, nos muestra un panorama
con más matices a la opinión de Carrasco sobre los últimos días pobres de Cortegana.
Foto 1. 6 Testamento de Juan Basilio Cortegana.
Fuente: (Cortegana, 2023, Volumen 5: 377).
30
1.4.
Reflexiones a partir de este capítulo
Juan Basilio Cortegana fue un personaje de suma importancia para entender el proceso de
independencia y los primeros años de la República peruana. En primer lugar, como militar, su
actuación, al igual que muchos otros jóvenes que desertaron del ejército realista, fue vital para
la consumación de la independencia. Su trayectoria no acabaría en Ayacucho, sino que se
mantendría por muchos años, solo que se enfrentaría a otros compatriotas suyos, como cuando
estuvo en el bando de Salaverry o formó parte de las fuerzas militares que acabaron con la
Confederación Peruana-boliviana. Además de estos grandes conflictos, también estuvo
involucrado en luchas locales. Fue en el norte, específicamente en Celendín, su lugar de
origen, donde inició su vida política. Pensando en el bienestar de sus vecinos, propuso varias
iniciativas para mejorar su calidad de vida. En este caso, sus luchas ya no se resolverían por la
fuerza de las armas, sino a través de las palabras y la negociación con los poderes centrales.
No obstante, como político, nunca abandonó del todo su pasado militar. Por el contrario,
aprovechó la oportunidad para promover iniciativas legales que mejorasen la vida de los
excombatientes de las guerras de independencia. En otras palabras, fue un líder indiscutible en
las asociaciones de héroes y veteranos, y un nexo entre el gobierno y colectivos civiles. Sin
duda, su participación en el proceso de construcción del Estado-nación sería fundamental en
su manuscrito Historia del Perú. Por ello, en los capítulos siguientes, se argumentará cómo es
que este contexto influyó en la forma de escritura de Historia de Cortegana, lo que lo
diferenciará de otros militares e intelectuales que también se aventuraron a escribir una
historia de su país.
31
Capítulo 2: Algunas consideraciones sobre el manuscrito Historia del Perú
En este capítulo trazaremos consideraciones generales sobre el manuscrito y
disiparemos dudas como ¿qué características tiene?, ¿qué peculiaridades posee como fuente
histórica? Para resolverlas, se analizará la naturaleza del escrito en comparación con el género
testimonial y las memorias de la independencia. Así, también se explicará la circulación del
manuscrito como objeto cultural para mostrar cómo aparece en la historiografía y cultura
histórica peruana.
2.1.Un manuscrito, muchas manos
Fue en 1945 cuando la Biblioteca Nacional del Perú adquirió los tomos de Historia del Perú
de Juan Basilio Cortegana de la Biblioteca del General P. Justo, fondo argentino considerado
una de las mejores bibliotecas particulares de Sudamérica8. Antes de la adquisición, el trabajo
de Cortegana ya era ciertamente conocido entre la intelectualidad limeña. Emilio Gutiérrez de
Quintanilla, quien fuera director del Museo de Historia del Perú, en su texto La entrega del
Oriente Peruano a la Gran Colombia Fue Ambición I Empeño del Libertador Bolívar
presentado en el número tres de la Revista del Museo Nacional en 1932, citó tres veces la
Historia del Perú para complementar información sobre los movimientos geopolíticos en la
disputa en que se encontraba Maynas:
«El material inserto en el presente número es un corto fragmento de la Introducción
que escribí, hace tres años, para la enorme Compilación de documentos originales, que
30 grandes tomos, forman mi obra histórica intitulada La Acción peruana en la
independencia del Perú, todavía tan inédita como la Historia General del Perú que en
trece tomos escribió hace ochenta i cuatro años, nuestro ilustre i benemérito prócer D.
Juan Basilio Cortegana, vendedor en Junín i Ayacucho, -adquirida i poseída por mí».
(Gutiérrez de Quintanilla 1932, 77).
Contenía alrededor de 28 000 volúmenes, de los cuales casi el 90% eran obras americanas o referentes
a América (Boletín de la Biblioteca Nacional 1945, 409-416).
8
32
No se sabe a ciencia cierta cómo llegaron los tomos a manos de Gutiérrez de la Quintanilla.
De acuerdo con el artículo de Hugo Ludeña Restaure, para José de la Riva-Agüero y Osma,
Gutiérrez de Quintanilla era un férreo defensor del patrimonio histórico y documental peruano
al punto que se le había encomendado la tarea de reunir los materiales para la obra La Acción
Peruana de la Independencia, los cuales constaban de más de treinta tomos (Vargas Ugarte
1971, 227-278). Sin embargo, hacia la década de los treinta, los documentos que se
encontraban bajo su custodia fueron vendidos al embajador argentino Colombres Mármol
luego de varias negociaciones secretas. Así, para 1939, Fernando Gutiérrez de la Quintanilla,
hermano de Emilio, «(...) puso a disposición de dicha comisión (argentina) seis mil
documentos (…)»; además, el revisor «informó haber hallado treinta documentos vinculados
al año 1822 y a la entrevista de Guayaquil. La Comisión Argentina mencionada consideró que
dentro de este grupo de treinta documentos solo dieciocho eran realmente importantes»
(Ludeña Restaure 2006, 131).
Fuera del anecdótico hecho que Colombres Mármol pagó la mitad del valor correspondiente
de los documentos, a partir de este material, publicó un trabajo histórico en 1940 sobre la
entrevista de Guayaquil titulado “San Martín y Bolívar frente al hallazgo de nuevos
documentos”. El prólogo estuvo a cargo del historiador argentino Rómulo Carbia «quien
indicó que los documentos eran del archivo de Gutiérrez de la Quintanilla» (Ludeña Restaure
2006, 131). En trabajos posteriores, Carbia y el hijo de Colombres defendieron, en otros
trabajos, la autenticidad de los documentos e indicaron que estos fueron vendidos por
Gutiérrez de Quintanilla (Ludeña Restaure 2006, 131). Asimismo, Ludeña Restaure afirma
que estos fueron usados por la Dirección de Asuntos Históricos del Ejército Argentino en una
publicación titulada Comando en Jefe del Ejército Dirección de Estudios Históricos.
Colección documental Emilio Gutiérrez de Quintanilla: Guerras de la Independencia.
(Ludeña Restaure 2006, 131). Sin duda, el manuscrito de Cortegana tuvo una circulación
azarosa, y dada su importancia como fuente histórica, pudo servir a diversos autores en
Argentina.
Gracias a las gestiones del historiador Jorge Basadre, el manuscrito regresaría a su lugar de
origen. En su libro La Vida y la Historia (1975), narró los pormenores de adquisición de la
Biblioteca Justo como una gran hazaña para la Biblioteca Nacional del Perù. Como su
director, estuvo al tanto sobre las gestiones que el general argentino Agustín P. Justo realizaba
«para adquirir obras raras y valiosas, peruanas y americanas (…) Justo ansiaba emular y
33
superar a su compatriota el general Bartolomé Mitré, en el esfuerzo de para atesorar una gran
biblioteca». Ya para inicios del año 1943, Basadre se enteró, con mucha emoción, que aquella
biblioteca se encontraba a la venta, pero también preocupado por el precio, dado que la
Biblioteca Nacional no disponía de ese dinero (Basadre 1975).
Este asunto fue comentado a uno de sus acaudalados amigos, quien le confirmó que podían
reunir el dinero junto a sus allegados. Ante esto, Basadre se comunicó con el presidente de
aquel entonces, Manuel Prado, «quien aceptó el aporte de los particulares sólo hasta por la
mitad de la cantidad pedida por la familia Justo». La compra no fue una tarea fácil, pues Perú
se enfrentaba a un competidor grande como era la Universidad de Texas, que ofrecía una
suma mucho mayor; no obstante, la familia Justo prefirió negociar con la Biblioteca Nacional
y el Perú por su visión antiimperialista en contra de los Estados Unidos de América. A pesar
de esto, el gobierno argentino trató de impedir la exportación del corpus documental por su
valioso contenido, pero, para tranquilidad de los peruanos, después del pago a la familia Justo,
se trasladó la biblioteca a la Embajada de Perú en Argentina, lo que impidió cualquier acción
coercitiva. Otro obstáculo fue también las críticas de algunos ministros por miedo a roces
diplomáticos con Argentina. Para complicar la situación, el acaudalado amigo de Basadre se
ausentó de Lima y se encontraba fuera de comunicación. Por ello, se tuvo que «buscar
donativos de empresas y capitalistas particulares para completar los fondos necesarios».
(Basadre 1975).
Esto puede complementarse con la información que aparece en los dos tomos de Introducción
a las bases documentales para la Historia de la República del Perú con algunas reflexiones.
En este trabajo, Basadre brinda al público más que una bibliografía de Historia de la
República, “una lista sencilla, una guía práctica para quienes les interesen en los temas,
autores o períodos anotados, organizándolos en lo posible, de modo sistemático, con algunos
comentarios". Entre las fuentes que usó Basadre, podemos ver que cataloga a la Historia del
Perú de Cortegana con las etiquetas de manuscritos y de Historias generales de la República
que obras mayores o textos universitarios, además de nombrar que bajo su gestión fue
adquirida (Basadre 1971, 108).
En otro informe publicado en el octavo Boletín de la Biblioteca Nacional de 1945, se cita una
carta, fechada el 29 de diciembre de 1944, en que el R.P. Vargas Ugarte se dirigía al Director
de la Biblioteca Nacional «comunicándole que estaba en venta la librería del General Agustín
P. Justo, cuyo precio era, más o menos, medio millón de pesos (…). El original de esta carta
34
fue puesto en manos del presidente de la República, Dr. Manuel Prado, quien manifestó
inmediatamente el más cordial interés por el asunto» (Boletín de la Biblioteca Nacional 1945,
409). Además de esto, se describía detalladamente el fondo peruano de la Biblioteca Justo:
«Entre los manuscritos, el de mayor valor para nosotros es la “Historia del Perú” de Juan
Basilio Cortegana. Son trece tomos que llevan la fecha de 1848, y que pertenecieron al
historiador peruano Emilio Gutiérrez de Quintanilla» (Boletín de la Biblioteca Nacional 1945,
p. 416).
Pese al alto valor del manuscrito, el historiador Víctor Arrambide (2020) asevera que se
encuentra prácticamente en el olvido. Pero hay evidencia de que la obra de Cortegana ya era
relativamente conocida entre la intelectualidad peruana. Para ello, nos remontamos al trabajo
crítico del historiador peruano Apolonio Carrasco Limas titulado La Historia del Perú de
Juan Basilio Cortegana. Una contribución al Estudio de la Historia Nacional (1954). Aunque
útil por la información que dispone, enfatizó en el accionar heroico de Cortegana. Tampoco
prestó atención a la época incaica y virreinal, pese a que la mayoría de los tomos comprendía
ambas etapas; por el contrario, centró su narración en la emancipación9. (Carrasco 1954) Por
su parte, Rubén Vargas Ugarte los usó para realizar una edición de fuentes primarias sobre las
batallas de Junín y Ayacucho a 150 años de su aniversario. Su propósito era mostrar
testimonios de los participantes directos y presenciales de ambas batallas, por lo que usó el
manuscrito Historia de Perú y las memorias del español Manuel de la Haza (Vargas Ugarte
1974).
En la década de 1980, Gonzalo Portocarrero y Patricia Oliart (1989) utilizaron a Cortegana en
el primer capítulo de su libro El Perú desde la escuela. Como su objetivo era analizar cómo se
construyeron las narrativas en los textos escolares decimonónicos sobre las épocas
prehispánica, la conquista y la colonia, visibilizaron el aporte de Cortegana. Sin embargo,
concluyen que su obra carece de investigación histórica, y en su lugar hay un predominio de
la descripción del pasado (Portocarrero y Oliart, 1989 23). Finalmente, Francisco Quiroz
menciona al manuscrito en su obra Historia y nación: Historiografía peruana desde Túpac
Amaru a la Guerra del Pacífico (2012), pero no la examina con detenimiento, puesto que no
Tampoco hay que olvidar la denuncia y gestiones de Apolonio Carrasco sobre la desaparición del tomo
X de Cortegana, el cual se encontraba en un taller en los Estados Unidos hasta su regreso al Perú.
9
35
había acceso completo a todos los tomos, y parte de sus ideas ya habían sido señaladas por
Carrasco.
2.2 Formas de hacer Historia en el siglo XIX
Jorge Basadre, en el prólogo a la reedición de Historia de los Partidos de Santiago Távara
(1955) presentó un listado de las obras más consultadas de la primera mitad del siglo XIX:
Félix Devoti10, Basil Hall11, A. Gonzales12, Guillermo Miller13, Mariano Torrente14, José M.
Córdoba y Urrutia15, Andrés García Camba16 y William Prescott17. Aunque estos autores
también ensayaron el género de crónica y memoria, sus cualidades, estilo y características de
forma son distintas al manuscrito de Cortegana. Para entender mejor estas formas de escritura
histórica de la época, analizaremos dos géneros historiográficos: las memorias de Miller,
García Camba y la historia general de Córdova y Urrutia.
En primer lugar, tenemos a Guillermo Miller, quien después de combatir contra los franceses
en España, se incorporó al bando patriota y al ejército de San Martín. Luego se trasladó al
Perú con la Expedición Libertadora del Sur y, también, estuvo en las campañas de
intermedios y en las batallas de Junín y Ayacucho. Después de retornar a su patria, reapareció
en 1830 para participar como militar o diplomático en los conflictos políticos del Perú y para
apoyar a Santa Cruz y la Confederación Perú-boliviana, hasta que en 1839 fue degradado por
Gamarra.
Por iniciativa de su hermano John, quien reunió la correspondencia y los documentos que
Guillermo le enviaba desde el Perú, se publicaron sus memorias. Según el historiador Percy
Cayo, las memorias de Miller constituyen un testimonio, cuyas características principales son
Devoti, Félix. 1822. En el Cuadro Histórico Político de la Capital del Perú (s. l.).
Hall, Basil. 1906 Estracto de un diario de viaje a Chile, Perú i Méjico: en los años de 1820, 1821,
1822. Santiago de Chile Universitaria,1906. 293 p. ;19 cm.
10
11
Miller, John. Memorias del general Guillermo Miller: al servicio de la República del Perú. Madrid:
Librería de Victoriano Suárez, 1829.
14
Torrente, Mariano. Historia de la Revolución hispano-americana (1829-1830)-Torrente, Mariano,
1792-1856. Madrid: (s. l.), 1830.
15
Córdova y Urrutia, José María. Las 3 épocas del Perú, o, Compendio de su historia. Perú: Imprenta
del Autor, 1844.
16
García Camba, Andrés, Memorias para la historia de las armas españolas en el Perú. Madrid:
Sociedad Tipográfica de Hortelano y Compañía, 1846.
17
Prescott, William Hickling. History of the Conquest of Peru: With a Preliminary View of the
Civilization of the Incas. New York: Harper and Brothers, 1847.
13
36
el romanticismo y el afán de aventuras. El gran éxito editorial de las Memorias se entiende
por su cercanía con el lector, ya que Miller era un actor y testigo directo de su relato. Cayo
sostiene que este escrito no tuvo influencia de otro libro similar sobre la época, así que se
puede afirmar que es una fuente primaria básica. Asimismo, en una edición reciente publicada
por el Proyecto Bicentenario (2020), la historiadora Scarlett O’Phelan resaltó la interacción de
Miller con sectores populares, como montoneras y afrodescendientes que lucharon bajo su
mando. Miller mostró una gran empatía hacia ese grupo, a quienes “elogiaba por su valor,
constancia, y patriotismo; además, de su buena conducta”.18 Esto se debe resaltar debido a
que, por lo general, los personajes más importantes en las memorias eran los generales y
grandes caudillos de los ejércitos patriotas o realistas.19
Desde el plano realista y español, en 1846, el general Andrés García Camba presentó sus
memorias. Este oficial de origen gallego luchó contra los franceses en América y luego en el
Perú. Allí se unió a los oficiales que se oponían al virrey Pezuela. Después de la caída de este,
García Camba ascendió a brigadier y combatió en las batallas de La Macacona, Torata y
Moquegua. Asimismo, en la batalla de Ayacucho, dirigió una brigada de caballería realista. Es
importante recordar que la publicación de la obra de García Camba se dio en un período de
inestabilidad en España, ya que los "Ayacuchos" (los oficiales españoles que habían
combatido en la independencia peruana) eran criticado por ciertos sectores del ejército y los
partidos moderados y progresistas. Así, el testimonio de García Camba puede entenderse
como una defensa pública de los "Ayacuchos". Por ello, su objetivo era realzar y poner en
relieve la valentía de su grupo (Sobrevilla, 2021).
Otro estilo que también destacó fue la historia general. La más importante en la primera mitad
del siglo XIX en dar una visión en conjunto de la historia nacional fue Las 3 épocas del Perú,
O'Phelan, Scarlett. 2020. “Prólogo” a Memorias del General William Miller al Servicio de la
República del Perú. Lima: Proyecto Bicentenario del Consejo de Ministros..
19
De otro lado, en un artículo de Sandro Patrucco (2019) se califica a Miller como un viajero atípico
que no solo estuvo en momentos importantes de la Independencia, sino que estuvo vinculado por cuatro
décadas al Perú. Este autor recalca que tiene grandes intereses historiográficos, arqueológicos y
etnográficos sobre el Perú, los cuales serían más comunes a mediados del XIX. En palabras del autor:
“Si bien no es un viajero de la Ilustración cuyos móviles atañen solo al conocimiento de estas regiones,
tampoco es un “viajero interesado” que sólo cifra sus afanes en ligar los recursos del país a los destinos
imperiales. Dista mucho de ser un adelantado de los intereses británicos, aun cuando preste atención a
los mercados que se abre para las producciones inglesas, le interesa genuinamente la libertad de los
países sudamericanos y la viabilidad de su ulterior desarrollo” (Patrucco 2019, p. 2).
18
37
de José María Córdova y Urrutia20. Su obra, al abordar los orígenes del Perú republicano21está
dividida en tres partes: 1) Fundación del imperio de los incas, 2) Dinastías ultramarinas, y 3)
Perú independiente. De acuerdo con Francisco Quiroz, “La historia que narra está ordenada en
función de los gobernantes en sus dos primeros momentos: incas y reyes españoles”. En esa
línea, la historia que narra Córdova y Urrutia es lineal e incorpora las tres épocas señaladas
como parte de una sola tradición, sin solución de continuidad. Además de este
providencialismo, Mark Thurner destaca que esta inaugura la historia patria, pues su autor
rechazaba las especulaciones de intelectuales europeos que habían sugerido que el fundador
de la dinastía inca no había sido “peruano”. Al contrario de ese planteamiento, en Las 3
épocas del Perú se cita de la versión del Inca Garcilaso el mito de los hermanos Ayar, e insiste
en que tanto Manco Cápac como Mama Ocllo (la reina madre inca original) indudablemente
“provinieron de una pequeña isla del Lago Titicaca”.22 Pese a ser un texto hecho de forma
apresurada, con poca investigación y sin demostrar un curso progresivo de las épocas,
Córdova y Urrutia fue el primer autor en mostrar una historia completa del Perú en tiempos
republicanos.23
Para tener una visión más amplia de este manuscrito, también debemos situarlo dentro de
ciertos estudios realizados sobre la historiografía decimonónica latinoamericana. Al respecto,
Bradford Burns24 afirma que los historiadores decimonónicos impusieron, a sus respectivas
sociedades, lecturas del pasado según sus temas de estudio, sus valores y sus interpretaciones.
Asimismo, estos escritores, al pertenecer a sectores privilegiados, adscribían a sus historias a
una narrativa de homogeneidad y armonía, lo que demostraba su visión limitada en asuntos de
clase y posición social. Además, esta historiografía, al rechazar las ideas provenientes de la
península ibérica, buscó otros referentes filosóficos e históricos; por ello, seguían la
producción intelectual de Inglaterra, Francia o Alemania. El progreso, para estos
historiadores, significaba recrear sus naciones a imagen y semejanza de los modelos europeos.
Córdova y Urrutia, José María. 1844. Las 3 épocas del Perú, o, Compendio de su historia. Perú:
Imprenta del Autor.
21
Dager, Joseph. 2009. Historiografía y Nación en el Perú del siglo XIX. Lima: Pontificia Universidad
Católica del Perú, p. 96.
22
Thurner, Mark. 2012. El nombre del abismo. Meditaciones sobre la historia de la historia. Lima:
Instituto de Estudios Peruanos, p. 150.
23
Quiroz, Francisco. 2012. De la patria a la nación. Historiografía peruana desde Garcilaso hasta la
Era del Guano. Lima: ANR, pp. 148-149.
24
Burns, Bradford. 1789. “Ideology in Nineteenth-Century Latin American Historiography,” Hispanic
American Historical Review 58, pp. 409-431.
20
38
Para Guillermo Palacios (2009), es preferible usar “relato historiográfico” y no “historia” para
la historiografía decimonónica latinoamericana. Sin duda, esta terminología permite
diferenciarla con las narrativas propias de la profesionalización de la disciplina del siglo XX.
En efecto, su principal diferencia es que las primeras buscaron crear y justificar al Estado
nacional y a sus ocupantes, con el objetivo de desdibujar a los adversarios y a los grupos
subalternos. Así, estos relatos configuraban las identidades que justificarían el funcionamiento
del aparato estatal y el control de la sociedad local; reivindicaban las aspiraciones de grupos o
facciones que inventaban raíces, genealogías y linajes que sostendrían los privilegios de unos
y la subordinación de otros. Por todo ello, Palacios considera que la historiografía del siglo
XIX latinoamericano fue un escenario de lucha política e ideológica.
Los análisis de la historiografía decimonónica de América Latina de Burns y Palacios son
distintos al del historiador colombiano Germán Colmenares25. Su principal interrogante gira
en torno a las condiciones intelectuales o discursivas en la que se formó dicha historiografía y
cómo se proyectó hacia el futuro. Por lo general, aunque vista como un simple hábito de una
élite intelectual, para Colmenares la ideología supera las barreras sociales: esta podía silenciar
la agencia o cultura de algunas comunidades o sujetos subalternos, pero no significaba que se
reconocieran en ella o utilizaran varios de sus conceptos.
Podemos observar, por tanto, que las luchas por la construcción de naciones no solo se
desarrollaron en escenarios bélicos sino también en el mundo de las letras: militares e
intelectuales, a través de sus escritos, justificaban sus proyectos políticos y su permanencia en
el poder. Para afianzar sus posiciones, se valieron de la escritura histórica, que constituyó en
un discurso reivindicativo al permitir a determinados grupos o facciones a inventar sus raíces,
genealogías y linajes. Fue en ese contexto en que Cortegana, miembro de un sector bajo de la
élite, escribió su manuscrito que inventó una historia general para conseguir ciertos derechos
y privilegios del Estado.
Historia del Perú, presuntamente redactada en 1848, aborda, en trece tomos, la historia
general del país en sus tres etapas: prehispánica, colonial y emancipadora. Cabe destacar el
interés de Cortegana por redactar una historia “nacional” que presentara una visión total del
Perú como un ente que transcurre en el tiempo, a diferencia de otros veteranos y
Colmenares, Germán. 1997. Las convenciones contra la cultura: Ensayos sobre historiografía
hispanoamericana del siglo XIX. Bogotá: Tercer Mundo Editores, Universidad del Valle, Banco de la
República, Colciencias.
25
39
contemporáneos que solo dejaron memorias parciales de hechos y otros acontecimientos de la
independencia. En ese sentido, este manuscrito es uno de los pocos casos en el que se
pretende escribir una historia total, mucho antes que la publicación de la obra emblemática de
Sebastián Lorente, que apareció durante la segunda mitad del siglo XIX (Dager 2010, Quiroz
2012, Thurner 2012). Tanto Quiroz como Thurner demuestran que Lorente fue el autor
emblemático de su siglo para la Historia. El primero de ellos explica que la visión de Lorente
presentaba un marco interpretativo e integrador de escritores coloniales como el Inca
Garcilaso de la Vega y Pedro Peralta. Su peculiaridad era que trataba de ir más allá de lo
ocurrido en Lima y el Cuzco, además de mostrar una visión progresiva de la historia en que
los nuevos períodos superan a los precedentes. Así, Lorente reconoció no solo la importancia
del imperio incaico sino también del periodo colonial porque son la base para la conformación
del Perú moderno. En palabras de Lorente, a través de la colonia, el Perú se inserta insertó en
el mundo occidental.
Para el historiador norteamericano Mark Thurner (2009; 2012), el tratamiento de la historia
peruana en el siglo XIX estuvo marcado por la muerte poscolonial del “libro de los reyes”, lo
que significó un desplazamiento de una escritura de la historia al servicio de la monarquía a
una al servicio de la ciudadanía. Lorene, como su máximo exponente, escribió una historia
bastante crítica que contemplaba el desarrollo nacional como la armonía de los elementos
civilizados desde un pasado remoto y primitivo hasta el futuro. De esa manera, se establece
«un marco genealógico perdurable del discurso histórico peruano contemporáneo» (Thurner
2009, 114). Con ello, el Perú presentaría una narrativa nacional propia cuyas raíces eran
antiguas y cuyo futuro solo estaba limitado por el alcance providencial de su glorioso nombre
propio.
Ambos trabajos nos ayudan a contrastar los escritos de Lorente y el manuscrito de Cortegana.
En ambas narrativas, se dejan huellas de una visión genealógica y teleológica de las etapas de
la historia del Perú, comenzando con el pasado prehispánico. Sin embargo, a diferencia de
Lorente, Cortegana sí fue testigo de los hechos en la emancipación, por lo que su “Historia”
mezcla descripciones, aspectos cronísticos y características propias de las memorias, pese a
que su principal interés es brindar una visión total y temporal de la Historia del Perú.
Finalmente, Joseph Dager plantea que la historiografía decimonónica tenía como fin
consolidar la nación y el nacionalismo, lo que facilitaría la integración de todos los peruanos a
un proyecto colectivo. Entre los temas más recurrentes en estos escritos se encuentran: a) el
40
pasado inca como utópico, b) crítica a la conquista española, c) visión de la etapa virreinal
como germinadora de la nación, d) la emancipación como un sentimiento compartido por
todos los peruanos, y e) visión de Chile como enemigo. Aunque Dager no incluye a
Cortegana, su marco conceptual es útil para analizar el manuscrito. Como se explicará, estos
cinco puntos se cumplen en el manuscrito, a excepción del último por cuestiones temporales.
En cuanto al género histórico, los autores decimonónicos reconstruyeron acontecimientos, a
través de fuentes orales y diversa documentación histórica, y narraron sucesos políticos (De la
Puente 2020). De esta forma, nació la escritura de memorias vivenciales, cuya principal
característica era su subjetividad sobre procesos que vivieron sus autores, como las guerras de
independencia; no se debe perder de vista también, como señaló Denegri, que estos escritos
“hacen frecuente la defensa de la fama y el buen nombre de sus propios autores, que
escribieron para protegerlos” (1971a, p. XIII). Por todo ello, el manuscrito ayuda a visibilizar
las formas de escritura de la historia antes de que la disciplina se formalice o se
institucionalice. En particular, se debe entender que a diferencia de sus contemporáneos
interesados en escribir “memorias” de la época de la independencia, Cortegana intentó dejar
de lado su función de “testigo” –no necesariamente de forma exitosa- y se presentó también
como un “narrador” que buscaba dar una visión en conjunto de un ente historiable como el
Perú que trasciende los hechos circunstanciales y testimoniales de alguna época particular.
El historiador Gustavo Montoya afirma que las primeras narrativas sobre la independencia
provenían de los mismos actores, en su mayoría militares y políticos, que fueron testigos de
los hechos. Entre algunos ejemplos se encuentran las memorias de Guillermo Miller, Daniel
O´Leary, Francisco O’Conors, José Rufino Echenique, Andrés García Camba, Manuel de
Mendiburu, Antonio Gutiérrez de la Fuente, Francisco J. Mariátegui, Bernardo Monteagudo,
Santiago Távara, José de la Riva Agüero, José Bernardo de Torre Tagle, Juan de Berindoaga,
Manuel Lorenzo de Vidaurre, José San Martín y Simón Bolívar. Al ser, en su mayoría,
discursos reivindicativos, estos personajes apelaban a la memoria de los hechos. Por ello,
“esta es una narrativa justificatoria en la medida que sus gestores privilegian en sus relatos la
participación que les tocó desempeñar, así tenemos diversas imágenes encontradas con
respecto a un mismo acontecimiento” (Montoya 2000, 1). En esa línea, el discurso
decimonónico privilegiaba el papel del individuo en la historia, lo que opacaba la
participación de los actores colectivos y sociales. A pesar de esto, ninguno puso en discusión
el carácter revolucionario de las independencias, “más aún, conscientes de que asistían a la
41
inauguración de un nuevo orden histórico, se imaginaron a sí mismos como portadores de una
modernidad política que admitía formas de organización social y política realmente avanzadas
para su época. La república popular democrática” (Montoya 2000, 2).
Otro estilo de escritura histórica fue el de la Historia General. Para Joseph Dager, la primera
obra en ofrecer una visión global de la historia nacional es el libro Las tres épocas del Perú de
José María Córdova y Urrutia, publicado en 1844, y que abordó la pregunta sobre los orígenes
del Perú (Dager 2009, 96). Por su parte, para Francisco Quiroz, Córdova y Urrutia fue el
primero en mostrar una historia completa del Perú en tiempos republicanos a pesar de ser un
texto hecho con prisa y poca investigación y sin demostrar un curso progresivo entre las
cuatro épocas (Quiroz 2012 248-149).
Por todo lo anterior, se sostiene que el manuscrito de Cortegana constituye una fuente
importante que nos muestra el uso de la escritura histórica con fines políticos y reivindicativos
de parte de un sector de los veteranos de las guerras de independencia en el contexto de las
tempranas repúblicas latinoamericanas. Basilio Cortegana representaría el caso de un autor
que era miembro de un grupo de poder tras las guerras de la intendencia y que necesitaba
inventar una “historia general”, que sería el sostén fundamental para conseguir ciertos
derechos y privilegios económicos por parte del Estado (Sobrevilla 2019).
Es imperativo entender los vínculos entre política y escritura de la historia durante las
primeras décadas del Perú posindependiente, mediante recursos ideológicos que se encuentran
presentes en el manuscrito “Historia del Perú” de Juan Basilio Cortegana. Esto es relevante en
tanto nos permite comprender la cultura letrada de las primeras generaciones de veteranos de
las guerras de independencia americanas, así como el lugar que la escritura de la historia
podría ocupar como componente de sus proyectos políticos. Entonces, vemos que existe un
contrapunto entre el plano ideal del autor y el aspecto pragmático de usar a la historia con
fines políticos.
2.3.Historia del Perú
Según Francisco Quiroz, si el manuscrito se hubiese publicado “es muy probable que la
historia de Cortegana hubiese coadyuvado a la tendencia nacionalista en el pensamiento
histórico del Perú, tanto por rescatar el devenir incaico (aunque en un texto dudoso por su
falta de originalidad y fundamentación) como en su enfoque patriótico del período colonial y,
42
sobre todo, su reivindicación de lo peruano en la gesta fundacional de la nacionalidad
peruana” (2012, p. 248). Ese fue uno de los objetivos explícitos de Cortegana, pues busca
construir nación a partir de la historia y encontrar la continuidad del Perú. Según Nazario
Chávez Aliaga, “Cortegana quería salvar este vacío nacional; deseaba escribir una historia
articulada, vertebrada, que abarcará todos los hechos en conjunto y fuese el exacto reflejo de
la vida entera del país” (Chávez 1962, p 37).
Estas características se observan en las primeras hojas de Cortegana, específicamente en su
dedicatoria a la nación peruana. En ella, también se aprecia el lugar de enunciación del autor,
quien se considera «uno de sus más leales y mas desididos hijos que ha trabajado y trabaja por
vuestro engrandecimiento y felicidad» (Cortegana 1848, T1, pp. ii). Es así que encontramos a
un personaje que afirma «llevarse desde luego la gloria de ser uno de los primeros que han
procurado con valor y con constancia afianzarle su Yndependencia y su libertad en la guerra,
y ahora con positivas letras, también su historia» (Cortegana 1848, T1, pp. ii). Con estas citas,
se puede afirmar que Cortegana sabía, desde el inicio, el papel que cumplió como héroe
militar en el proceso de emancipación: ello le daba suficiente autoridad para escribir una
“Historia General”. Al final de la dedicatoria, encontramos la siguiente expresión: “¡O
magnanima Nación Peruana acoged pues con protección y aprecio estas primeras pajinas
históricas que se ovaciona uno de sus más leales y mas desididos hijos que siempre ha
trabajado y trabaja por vuestro engrandecimiento y felicidad!” (Cortegana 1848, T1, pp. ii).
La asociación entre las armas y las letras de la historia no debe resultar extraño, pues
pertenece al ámbito de la cultura letrada militar, resaltado por la historiadora Carmen Mc
Evoy. Cortegana, al igual que muchos otros, representa al militar intelectual, que ya no lucha
solo en la guerra sino también en el mundo de las letras26.
Escribir una Historia General no fue sencillo para Cortegana, y solo le fue posible cuando se
encontraba en la «paz de su retiro». Esta labor también incluyó ordenar y «desarrollar tantos y
tantos acontecimientos antiguos, de variedad de nombres, épocas y encadenamiento de los
multiplicados hechos» (Cortegana TI 1848, pp. iii). Pese a esta labor, criticó a los
historiadores, a quienes califica como escritores que solo dan pequeñas versiones de lo
ocurrido en su tiempo y no realizan una narrativa que va de manera correlativa y clara, pues
Carmen Mc Evoy y Víctor Arrambide. Conversatorio “El manuscrito de Cortegana” en la Feria del
Libro
de
Cajamarca,
27
de
noviembre
2021.
https://www.facebook.com/FeriadelLibroCajamarca/videos/1070783373390661/
26
43
«ha sido preciso recoger muchas páginas de todos aquellos confusos historiadores pasados,
que si dan una pequeña idea de lo ocurrido en sus tiempos no los absuelven en su plenitud
correlativamente, sino de un modo cortado, y luego nada específico ni claro, y he aquí el
mayor trabajo que se ha tenido que superar» (Cortegana 1848, pp. iii).
Los contenidos de los tomos pueden describirse de la siguiente manera:
Tabla 2. 1. Contenido de los tomos del manuscrito “Historia del Perú”. Porras
Barrenechea (1954, 492)
Tomo I
Los orígenes del Perú hasta el reinado de Yahuar Huacac y un
ensayo sobre las costumbres de los Incas
Tomo II
Los reinados de Viracocha, Pachacutec e Inca Yupanqui, las
conquistas de Túpac Yupanqui y Huayna Cápac, con una
Descripción del carácter civil y moral de los antiguos y presentes
peruanos
Tomo III
La guerra civil entre Huáscar y Atahualpa y la llegada de los
españoles
Tomo IV
Desde la entrada de Pizarra a Tumbes hasta la muerte de Manco
Tomo V
La revolución de Gonzalo, la reacción de la Gasca y el epílogo de
Hernández Girón
Tomo VI
La época de los Virreyes desde Cañete a Armendáriz (1556-1724)
Tomo VII
La de Armendáriz a Abascal (1724-1811)
Tomo VIII
La agitación revolucionaria en los períodos de los Virreyes Abascal
y Pezuela (1812-1819)
Tomo IX
La etapa de 1819 a 1820
Tomo X
perdido y recuperado, se ocupa de la acción de los guerrilleros
peruanos Y el Protectorado
44
Tomo XI
Los preparativos de la conferencia de Guayaquil, la caída de
Monteagudo, la obra administrativa del Protectorado, el regreso de
San Martín del Norte y su renuncia ante el primer Congreso
Constituyente
Tomo XII
Relata las campañas finales de la Independencia
Tomo XIII
Los años de 1825 a 1827, se ocupa del asesinato de Monteagudo, la
dictadura de Bolívar y el viaje del Libertador al Alto Perú
A partir de este cuadro, se observa que Juan Basilio Cortegana inició su historia con los
tiempos prehispánicos y utilizó, como base, a escritores que realizaron obras canónicas sobre
la época incaica. Por ello, cita al padre “Blas Valera”, al jesuita Padre de Velasco, al Inca
Garcilaso de la Vega, además de mencionar a otros autores como Francisco López de
Gómara, Agustín de Zarate, Joseph de Acosta, Pedro Peralta, Doctor Castro y otros. De todos
ellos, dio más importancia al padre Blas Valera y al Inca Garcilaso de la Vega por los
siguientes motivos:
El Padre Blas Valera fue el primero que escribió como Peruano su obra presentando la
historia política de los Yncas. El mestizo y nuevo Garcilazo que sin embargo de ser de
la línea materna más inmediato pariente de la familia de los Yncas en ese orden de
legitimidad que ellos observaban y al que al final acabaron de destruirla los espresados
conquistadores Españoles no lo hizo sino mucho después, públicamente cuando sus
primeros comentarios en Italia con el objeto de que no fueran impedidas en España.
Tiempos después y en los mismos más comentarios llegó a reimprimirse y publicarse
en Madrid a la de agosto de 1823 (Cortegana 1848, TI pp 6).
Para Cortegana, el hecho de ser peruano otorga mayor legitimidad a la escritura de la historia.
¿Qué significa ello? A lo largo de su obra, argumenta que la construcción de una historia no
consiste en la escritura de un solo hombre, sino que es el recuerdo del pasado de un pueblo,
cuya narración de acontecimientos obedece a configurar el orden social y político de la vida
del Perú (Cortegana 1848, TI pp. 7). Por ello, fue también crítico con el desconocimiento de
los peruanos frente a la historia antigua y presente del país: “ignorándola, es el colmo de la
estupidez y abandono o en el de la más infamante insensatez ignorando así aun su mismo
origen” (Cortegana 1848, TI, pp 6-7).
45
En sus escritos, hay un diálogo bastante fluido entre su tiempo y los inicios de la historia
peruana, ya que muestra que el carácter civil y moral de los antiguos peruanos era muy similar
a los presentes. En esta sección, crítica a filósofos como Conde de Buffon y William
Robertson puesto que estos “escritores extranjeros” caracterizaban a los indianos débiles a
nivel físico y cívico. A diferencia de estos autores, otros referentes suyos como el padre de
Velasco, Jorge Juan y Charles Marie Le Condamine sí creían en la civilidad de los antiguos
peruanos. A pesar de que Juan de Velasco es considerado precursor de la nacionalidad
ecuatoriana, Cortegana lo trata como un autor peruano porque defendía a los antiguos
habitantes. En esto, el militar celendino se diferenciaba de la mayoría de los escritores
decimonónicos peruanos. Según Joseph Dager,
“los primeros historiadores peruanos no extendieron los sentimientos de admiración
por la cultura incaica a la población general y, menos aún, a la deprimida realidad que
travesaban por aquel entonces. No deja de ser paradójico que el propósito nacionalista
de enorgullecerse del pasado inca no le hubiese acompañado uno de valorar a quienes
eran los descendientes más directos de aquellos antepasados” (Dager 2009, 135).
No obstante, el caso Cortegana era distinto, pues criticó a pensadores como Bass que solo
calumniaban a los “yndianos” por considerarlos “estúpidos de poco entendimiento, de las
potencias del alma muy limitadas, que no tienen ideas”. Por el contrario, en su obra señalaba
que los antiguos peruanos eran individuos que vivían en completa civilidad:
En la época del Ymperio una sociedad bien regalada y llena de magnificencia. Esto lo
prueban las riquezas de que se hicieran los conquistadores. Sus agriculturas y las crías
que tuvieron habían llegado a sú perfección. La sanidad en todos ellos, la prueba hasta
el día manifestando que es la gente más sana que puebla casi la mayoría del Perú, y en
quienes jamás se oye decir que mueren acabada de un mal venéreo que se les supone
tan impúdicamente. Sus males epidémicas más ben son cortadas, tabadillos, calenturas
o disentería. Así que el Señor Bass está muy equivoco de que de ella emanan ese mal
destructor que tal ves vino de Europa a difundirla en lo inocentes naciones de América
(Cortegana T1, 1847, pp 143 y 144).
46
2.4.Reflexiones sobre este capítulo
Por un lado, la Historia del Perú de Juan Basilio Cortegana significó un intento por una
Historia General para lo cual debía ir más allá del género de memorias, que solo consistía en
narrar acontecimientos que buscasen realzar individualidades. En ese sentido, el trabajo de
Juan Basilio Cortegana fue el ejemplo de un cambio de escribir historia, ya que, al abordar las
etapas incaica, virreinal y emancipadora, su Historia General estaría anticipando los
planteamientos del historiador que marcó la historia peruana del siglo XIX: Sebastián
Lorente. Por otro lado, sostengo que el manuscrito representó una forma de escritura en
transición, pues se encuentra entre las memorias personales y la historia general, género no
tan practicado durante la época estudiada (1848). Nos arriesgamos a decir que, como
propuesta, esta transformación estuvo vinculada a los cambios políticos de la época y a sus
formas de expresión historiográficas. En esa línea, las memorias de independencia están más
en sintonía con un escenario político caracterizado por la lucha de facciones entre caudillos y
veteranos de las guerras emancipatorias, mientras que las historias generales responden a
proyectos políticos de construcción de nación. Por ello, la obra de Cortegana es un hito
historiográfico de cambio y transición, y su manuscrito es un híbrido que refleja esta tensión
política que se vive en las primeras décadas de la república peruana. En sus páginas
encontramos que la mayoría de los tomos están vinculados a la forma de hacer historia
general, mientras que los últimos están más vinculados a testimoniar sus hechos vividos. A
continuación, nos centraremos en el plano de la historia general y por ello analizaremos los
volúmenes antes de los hechos y procesos de la independencia.
47
Capítulo 3: ¿Historia General de los peruanos o una memoria parcial del héroe
celendino?27
En una conferencia virtual realizada durante las Jornadas Historiográficas de la Pontificia
Universidad Católica del Perú, el historiador José de la Puente Brunke presentó una
investigación enfocada en esbozar un retrato colectivo de los historiadores -tanto peruanos
como extranjeros que residían en el país- del siglo XIX28. Este autor se sumergió en la vida,
ocupaciones y publicaciones de 132 individuos, a quienes los dividió entre “metódicos” y
“aficionados”. Los primeros correspondían a eruditos y escritores que demostraron
persistencia en la elaboración de sus proyectos historiográficos, lo cual se vio reflejado en el
impacto de sus publicaciones. En el caso de Juan Basilio Cortegana, De la Puente lo situó con
los “metódicos”. No obstante, considerando que su obra ni circuló ampliamente ni fue leído
en el siglo XIX, estaría mejor ubicado en la categoría de los “aficionados”, dado que su obra
uso a muchos autores canónicos como el Inca Garcilaso, Juan de Velasco, etc., y las utilizó
reiteradamente, lo que reduciría su originalidad en comparación con otros historiadores
“metódicos”.
No es de extrañar que, para Raúl Rivera Serna, el autor celendino:
“para escribir sobre la época incaica se sirvió de las obras de Garcilaso, el Padre de
Velasco y Marmontel y para la parte virreinal de las memorias de los virreyes
fundamentalmente, y para la Independencia utilizó las memorias de Álvarez de
Arenales, Hall, Proctor, Miller, García Camba y la Historia del español Torrente,
versiones, que matizó con informaciones de carácter personal. La obra es meramente
descriptiva y carece de originalidad. Para la parte de independencia plagia las
versiones de algunos memorialistas como Álvarez de Arenales”.29
En esta misma línea, para Mark Thurner, la piratería ha sido una vía para la circulación del
conocimiento y del saber a lo largo de la historia de la humanidad. Por ello, es comprensible
Este capítulo se basa en dos productos académicos y los amplia. En primer lugar, el ensayo producto
del Concurso Nacional de Historia del Proyecto Bicentenario del Perú (2022) y al estudio preliminar
del facsimilar de la Historia del Perú en 5 volúmenes de la Fundación BBVA y la BNP.
28
Evento realizado en el marco de las Jornadas Historiográficas de la Especialidad de Historia de la
Facultad de Letras y Ciencias Humanas de la PUCP. Los comentaristas de la ponencia fueron Claudia
Rosas y Joseph Dager.
https://www.youtube.com/watch?v=lSiWyw8eF6A
29
Raúl Rivera Serna. 1981, Historia del Perú. Tomo X. Procesos e instituciones. Lima: Editorial Juan
Mejía Baca. p. 309.
27
48
que, en los siglos XVIII y XIX, se citara muy poco, motivo por el cual resultara difícil, desde
la perspectiva de la historia del libro, rastrear las citas o identificar el grado de originalidad de
un autor30.
Ante la necesidad de comprender el origen de las ideas y las referencia utilizadas en narrativas
históricas, este capítulo establecerá contrapuntos entre el trabajo de Juan Basilio Cortegana en
su Historia del Perú y otras fuentes relevantes. A través de una minuciosa comparación con
otras fuentes históricas, se evaluará conexión con corrientes de pensamiento de su época, lo
cual brindará una comprensión más completa del manuscrito de Cortegana y la cultura letrada
de la época.
3.1.Descripción y análisis de los primeros siete primeros tomos del manuscrito
3.1.1. Sumilla literal de los tomos I y II
En el Tomo I del manuscrito Historia del Perú, Cortegana aborda la historia de los incas,
desde sus orígenes hasta su declive. A través de un estilo narrativo, comienza su relato con los
acontecimientos de los primitivos pobladores de esta región. En opinión del militar celendino,
estos grupos habían llegado al continente americano desde Asia debido a su estilo de vida
nómada, su participación en ejércitos en constante movimiento y el uso de embarcaciones,
cuya movilidad se veía favorecida por las corrientes marítimas. Así, América experimentó un
proceso de poblamiento y difusión cultural, lo que dio lugar a la diversificación de las
lenguas.
Es de suma importancia resaltar la relevancia de los incas en su obra. En ese sentido,
proporciona una cronología detallada de sus gobernantes, iniciando con Manco Cápac y
culminando con Atahualpa. De forma particular, destaca la descripción de los reinados de
figuras claves como Sinchi Roca y la colonización forzada de los pueblos indígenas. Otro
gobernante importante fue Yahuar Huacac, quien precedió el mandato de su hijo Viracocha.
No faltaron comentarios sobre la vasta extensión territorial del Tahuantinsuyo, desde el río
Acamaya al norte hasta el Maule al sur, y desde la Cordillera Nieves al este hasta el Océano
Pacífico al oeste. Subraya, además, el inicio mítico del linaje incaico con la llegada del primer
Inca, Manco Cápac, y su compañera Mama Ocllo, quienes, según la leyenda, emergieron del
30
Conversación entre Mireya Salgado, Mercedes Prieto, Mark Thurner y Carlos Sanhueza sobre
“Prácticas y materialidad del conocer en Ciencias Sociales". 23 de abril de 2021
https://www.facebook.com/watch/live/?v=586772395631561&ref=search
49
Lago Titicaca y se establecieron en la ciudad de Cuzco. Finalmente, no se olvidó de abordar
la organización social del imperio, con una población distribuida en barrios y distritos,
estructurados en los sectores de Hanan Suyo (arriba) y Hurin Suyo (abajo).
En relación con los temas religiosos, Cortegana ofrece una descripción detallada del templo
del Sol y del culto de los antepasados. Uno de los temas que más le llamó la atención fue la
veneración de las momias de los antiguos incas y los múltiples símbolos que representaban el
poder y la riqueza incaica. El autor también proporciona información sobre la organización y
estructura del templo, lo que permite al lector comprender la complejidad y significado de
estas prácticas religiosas. Entre los aspectos culturales, Cortegana resalta las celebraciones del
Inti Raymi. Esta festividad era considerada la más grande entre los incas y tenía lugar en el
mes de junio, durante la época de cosecha, ocasión que el gobernante aprovechaba para
exhibir su prestigio y poder ante su pueblo a través de sus riquezas en su vestimenta y
accesorios de oro.
En el Tomo 2 del manuscrito Historia del Perú, se profundiza en los orígenes de los incas,
presentando el mito de los tres reyes, Manco Cápac, Colla Tocay y Pinahua, quienes
realizaron un viaje desde Tiahuanaco con la intención de repartir tierras. También se hace
referencia a los cuatro Suyos, que eran las divisiones del Imperio Inca. El autor no omite los
logros de varios incas, como Inca Viracocha, Pachacútec, Tupac Inca Yupanqui y Huayna
Cápac. Especialmente, se destaca a este último por sus hazañas para expandir el imperio y su
amplia legitimidad ante sus vasallos, ya que impulsó la construcción de templos, santuarios y
adoratorios al sol, además de casas circundantes al Cuzco. Finalmente, se explica la
competencia por el trono entre sus hijos, Huáscar y Atahualpa. Esta disputa llevó al
debilitamiento del imperio incaico, y junto con la llegada de los españoles y la muerte de
Huayna Cápac, marcó el inicio de la caída del imperio inca.
3.1.2. Sumilla literal de los tomos III y IV
El Tomo III de la obra "Historia del Perú" se centra en la conquista del Perú, y en las
interacciones entre los conquistadores y los incas. La narración comienza con las primeras
menciones del Tahuantinsuyo proporcionadas por Vasco Núñez de Balboa y sus compañeros,
quienes describieron la existencia de un reino muy rico y poderoso gobernado por el Inca,
considerado el hijo del sol. En su relato, Balboa es retratado como un hombre de
extraordinaria intrepidez, y se diferenciaba de sus contemporáneos por su audacia y valentía.
50
Uno de los hombres más valerosos de Balboa era Francisco Pizarro, cuya mejor habilidad era
la apertura de la comunicación con los pueblos que serían posteriormente conquistados
Otro acontecimiento crucial en este tomo es la muerte de Huayna Cápac, su entierro y la
sucesión de Huáscar. Presentado como un gobernante pacífico, el reinado de Huáscar se vio
interrumpido por las guerras civiles, en parte instigadas por su madre. En relación con las
interacciones entre los indígenas y los españoles, los primeros consideraron a los
conquistadores como seres divinos; sin embargo, algunos de ellos, como Alonso de Molina,
no abusaron de esta cortesía. Por último, según Cortegana, Atahualpa estaba al tanto de la
llegada de los españoles y de lo ocurrido en la Conquista de México, pero no era una de sus
mayores preocupaciones: Huáscar, al no reconocerlo como rey de Quito, ponía en duda su
legitimidad como hijo de Huayna Cápac y generaba tensiones entre sus súbditos.
Otros hechos marcan también la narrativa de Cortegana: la captura y ejecución de Atahualpa,
el enfrentamiento entre Pedro Alvarado y Diego de Almagro con las tropas incas lideradas por
Quisquis; la fundación de Lima; la expedición de Almagro a Chile; la decisión de Manco Inca
de atacar a los conquistadores luego de ser nombrado inca por Pizarro; y el fin del cerco de
Lima, lo que, para Cortegana, significó el fin del imperio incaico. Como anexo, se presenta el
destino de los sucesores de Manco Inca, la unión de las hijas de Atahualpa con los
conquistadores y la genealogía de los incas.
3.1.3. Sumilla literal de los tomos V, VI y VII
En el tomo V, se abordan las distintas estrategias para consolidar el poder de Gonzalo Pizarro
mediante alianzas con indígenas. Una de las formas más efectivas fue la concretización de un
matrimonio entre Pizarro y una princesa inca de linaje real, para que así se puede conseguir el
apoyo población local. Por otra parte, aparecieron tensiones entre Gonzalo Pizarro y la corte
española. Por ello, para representar sus intereses, se enviaron embajadores a la corona. Como
consecuencia, la corte designa al sacerdote Pedro de la Gasca para conseguir la pacificación
de la región; sin embargo, la llegada de la Gasca a América conllevó a varias tensiones
políticas con Gonzalo Pizarro. También se narra las traiciones sufridas a Gonzalo Pizarro de
parte de personajes muy cercanos a él como Pedro de Hinojosa quien cambió de bando. En el
tomo, además, se narra la batalla de Huarina, en donde Gonzalo Pizarro se impone sobre
Diego de Centeno. El documento también aborda revueltas y conflictos entre españoles tras la
muerte del virrey, como el levantamiento de Hernández Girón.
51
El Tomo VI de narra los eventos relacionados con la conquista de Chile y su desarrollo
posterior. Cortegana destaca la figura de Pedro de Valdivia, quien fundó ciudades y enfrentó a
los araucanos, y Francisco de Villagrán, quien asumió un papel crucial tras la muerte de
Valdivia. También se menciona a García de Mendoza, el hijo del virrey, y la obra La
Araucana de Alonso de Ercilla. En el contexto peruano, se resalta el gobierno de Cañete, la
exploración de Chiloé y la muerte de Caupolicán. También se menciona el intento de
establecer una tregua con el Inca Sayri Túpac. En el Libro 2º, que corresponde al reinado de
Felipe II, se mencionan eventos en Chile, como la construcción de un puente de piedra y la
prohibición de la servidumbre de los indígenas. Durante este período, varios virreyes se
sucedieron en el cargo. En 1641, el Marqués de Mancera propuso una tregua en Quilín, en la
que los araucanos acordaron condiciones de paz. También se enfrentaron desafíos comerciales
y ataques de piratas. Además, se menciona una expedición al legendario Paititi y la
construcción de la muralla de Lima. Bajo el gobierno del Conde de la Monclova, se supervisó
la reconstrucción después de un terremoto y se prohibió la entrada de navíos franceses. En el
mismo período, se produjo una rebelión en Chiloé y se estableció el virreinato de Nueva
Granada. Los araucanos se levantaron nuevamente en Chile, pero finalmente se logró firmar
un tratado de paz en Negrete. El Marqués de Castellfuerte fue nombrado virrey y proclamó a
un nuevo rey
El tomo VII se centra en el periodo del Virreinato del Perú desde 1724 hasta 1811, y se enfoca
en el segundo reinado de Felipe V en el Perú. En este manuscrito, se realiza un análisis
minucioso de este período histórico, incluyendo un examen de los virreyes que gobernaron
durante este tiempo, como el marqués de Castelfuerte, el marqués de Villagarcía y el conde de
Superunda. También se abordan las políticas que implementaron y se exploran eventos
relevantes, como terremotos y epidemias que impactaron a la población peruana, además de
distintas rebeliones, siendo la rebelión de Túpac Amaru II y su posterior represión uno de los
hechos destacados. El manuscrito también se adentra en el funcionamiento de la Inquisición
en el Perú y su influencia en la sociedad de la época. Además, el volumen comienza a
examinar la lucha por la independencia del Perú, detallando cómo los independentistas de la
Junta de Buenos Aires diseñaron estrategias para lograr la emancipación de los territorios
americanos sin recurrir a la violencia, para así evitar confrontación con el ejército español y
organizándose en la línea española. El texto también relata las acciones de figuras como
Goyeneche y los patriotas Castelli y Balcarce, quienes se dirigieron hacia La Paz en busca de
refuerzos.
52
3.2.Cotejo de fuentes en los siete primeros tomos
La descripción de los primeros siete tomos que hicimos en los dos apartados anteriores se
realiza a partir de una impresión literal las páginas del manuscrito Historia del Perú de Juan
Basilio Cortegana ha permitido seguir los acontecimientos que marcaron la historia de los
incas, y la conquista y el dominio español en el Perú. Ciertos historiadores poseen una
apreciación similar como Gabriela Alejos31, para quien estos documentos constituyen valiosos
recursos para la historia militar, la historia política y la etnohistoria.
Asimismo, para el Ricardo Sánchez Cabanillas32, la obra de Cortegana ofrece datos inéditos y
sorprendentes que enriquecen la comprensión de la historia peruana durante la conquista y la
guerra civil, como por ejemplo la participación de Alonso de Molina. En efecto, la visión de
Cortegana sobre la conquista, tal como lo señala Sánchez, muestra una inclinación hacia
ciertos personajes y eventos históricos. Su preferencia por Blas Valera y su crítica hacia el
Inca Garcilaso de la Vega obedece a cómo cada uno retrata a los líderes incas: en vez de ser
neutral, Garcilaso ensalza a Huáscar en desmedro de Atahualpa. En ese sentido, Cortegana se
alinea más con la perspectiva del sacerdote quiteño Velasco, lo que puede explicarse por su
origen norteño y celendino: “obviamente tenía que ser por un inca quiteño o norteño como es
el caso de Atahualpa que lo va a considerar como legítimo heredero del trono”. Tampoco se
debe perder de vista, siguiendo la argumentación de Sánchez, que Cortegana combinaba
sucesos y tiempos de manera vertiginosa, lo que sugiere que en su relato pueden darse algunas
licencias narrativas o aproximaciones históricas.
Es cierto que, en su obra, Juan Basilio hace referencia a diversos autores y cronistas que
escribieron la historia incaica, como Gómara, Zárate, Acosta y el mítico Padre Blas Valera.
Además, menciona a Garcilaso, Peralta y el doctor Castro en relación con la exploración y
documentación sobre esta civilización. Sin embargo, hasta ahora, no disponíamos de una lista
exhaustiva de todas las fuentes utilizadas por él:
Tabla N 1
31
Conferencia virtual de Gabriela Alejos para la Municipalidad de Celendín y la sección Cultura de la
región Cajamarca el 26 de julio de 2021
https://www.facebook.com/DDCulturaCajamarca/videos/564902297845821
Sánchez Cabanillas, Ricardo, “Congreso Nacional de Historia | Mesa 5B: Proyectos políticos e
instituciones en conflicto”, https://www.youtube.com/watch?v=zukCa5IuH90&t=2525s
32
53
Tabla 3. 1 Tomo I y II del manuscrito
Tomo I y II del manuscrito
•
Inca Garcilaso de la Vega: Comentarios reales de los Incas (1609)
•
Juan de Velasco: Historia del reino de Quito en la América Meridional (1789)
•
William Robertson: History of America (1777)
•
Antonio de Herrera y Tordesillas: Historia general de los hechos de los
castellanos en las Islas y Tierra Firme del mar Océano que llaman Indias
Occidentales (1601)
•
José Pastor de Larrinaga: Mercurio Peruano (1793) / Poemas
En los dos primeros tomos del manuscrito, la principal fuente de información es Comentarios
Reales de los Incas del Inca Garcilaso de la Vega. Además, se pueden apreciar referencias a
distintas obras, como Historia del reino de Quito en la América Meridional de Juan de
Velasco, History of America de William Robertson, e Historia general de los hechos de los
castellanos en las Islas y Tierra Firme del mar Océano que llaman Indias Occidentales de
Antonio de Herrera y Tordesillas. Es importante mencionar que, al final de cada relato,
Cortegana introduce un poema sobre el Inca correspondiente, extraído de las páginas del
"Mercurio Peruano". Estas referencias se pueden corroborar y evidenciar de maneras explícita
en el anexo N°1.Asimismo, es interesante observar que existe una correlación entre el
contenido del manuscrito de Cortegana en los tomos III y IV, y lo escrito por Garcilaso y
Marmontel.
Tabla 3. 2 Tomos III y IV del manuscrito
Tomos III y IV del manuscrito
•
Inca Garcilaso de la Vega: Historia general del Perú (1617)
•
Jean-François Marmontel: Les Incas ou la destruction de l'Empire du Pérou
(1777)
54
Una lectura sin exégesis heurística de la obra de Cortegana podría convencernos de que
estamos ante una fuente original. Sin embargo, al contrastar los tomos III y IV con otras
fuentes, se evidencia que son principalmente una apropiación y adaptación del trabajo de
Jean-François Marmontel de su obra Los Incas o La destrucción del Imperio del Perú. De
acuerdo con Estuardo Núñez el trabajo del escritor francés no fue bien recibido por la
Inquisición y, por lo tanto, fue objeto de condena. No obstante, intelectuales notables como
José Baquíjano, Manuel Lorenzo de Vidaurre y José Faustino Sánchez Carrión mantuvieron
en sus colecciones personales obras del mencionado autor francés. Una de las principales
obras de Marmontel fue Les Incas33, una novela escrita en prosa, y ambientada entre el
descubrimiento y la muerte de los Pizarro. Su objetivo era presentarse en contra del fanatismo
religioso de los conquistadores en México y Perú. Para lograrlo, se basó en diversos
planteamientos de Montesquieu, quien sostenía que la religión era funcional para la
dominación de aquellos que no la profesaban, lo cual se manifestó en el contexto americano.
En la elaboración de su obra, Marmontel recopiló información sobre los incas y los aztecas a
partir de las obras del Inca Garcilaso, Antonio de Herrera y Bartolomé de las Casas, entre
otros autores.
En palabras del erudito Estuardo Núñez:
“Lo característico en Los Incas es la extraña mezcla de elementos aztecas e incaicos en
una misma trama, con prescindencia no sólo de la noción del tiempo sino también de
la noción de espacio. No importa nada que lo mexicano suceda en el Perú o que lo
peruano suceda en México, ni significa nada, en la inspiración marmonteliana, la
enorme distancia que media geográficamente entre un pueblo y el otro, ni las
diferencias esenciales de sus circunstancias humanas e históricas. En esa actitud de
desconocimiento de precisiones y de transmutación de las realidades espaciales y
temporales, no es único Marmontel”.34
Con Les Incas, Marmontel buscaba llamar criticar a la sociedad francesa, por lo que empleó a
la incaica como un modelo ideal. Aunque la obra contiene elementos propios de una obra
histórica, resulta confusa y desordenada en su estructura. En el primer tomo, incorpora datos y
33
Jean François Marmontel. 1873. Los incas ó La destrucción del imperio del Perú. Barcelona, Calle
Escudellers, n.o 25. Imprenta de Juan Oliveares.
34
Núñez, Estuardo. 1997. Las letras de Francia y el Perú: apuntaciones de literatura comparada. Lima:
UNMSM.
55
noticias tomados de Las Casas y Antonio de Herrera, pero sin una secuencia clara de los
acontecimientos de la conquista en las Antillas, Centroamérica y México. En el segundo
tomo, los personajes históricos son presentados de manera novelada en lugares como Panamá
y Perú. Aquí encontramos a figuras como Francisco Pizarro y Diego Almagro, así como
personajes ficticios como Cora, una virgen del sol, y Alonso de Molina, homónimo de uno de
los trece compañeros de Pizarro en la Isla del Gallo. Desde la trama ficticia, se desarrollan
diálogos amorosos entre Molina y Cora, quienes encuentran un destino trágico35.
Efectivamente, Les Incas se inspiró en diversas fuentes para su elaboración. Garcilaso de la
Vega Inca fue la fuente principal, y su obra Comentarios Reales de los Incas proporcionó
valiosa información sobre la civilización incaica. También se mencionan los relatos de otros
cronistas como Cieza y Agustín de Zárate, quienes ofrecieron perspectivas importantes sobre
la historia de América. Adicionalmente, se incorporaron episodios relacionados con las islas
del Mar del Sur, particularmente en Tahití, basados en los relatos de exploradores como
Bougainville, Leonel Wafer y Des Brosses. No podemos olvidar a La Condamine. una fuente
de referencia obligatoria para proporcionar detalles y contexto sobre ciertas ubicaciones
geográficas36.
Esta narración estuvo acompañada de temas espectaculares como hambrunas en el mar,
erupciones volcánicas y tempestades en regiones ecuatoriales. Estos paisajes eran
complementados por diálogos filosóficos entre aztecas e incas sobre diversos temas, como la
ilustración, ideas políticas de progreso, reforma, libertad y tolerancia. En consecuencia, era
notorio una dura crítica hacia la colonización española: los protagonistas españoles eran
retratados con términos negativos como "fieras", "tigres", "loups" o "lions", lo que parecía
ser una crítica directa a las élites francesas de la época. En la obra de Marmontel, estas ideas
reflejaban las corrientes de pensamiento de la época, influenciadas por autores como Buffon,
Montesquieu y Rousseau. Pese a su carácter moralizador, la ficción superaba a los hechos
históricos, por lo que Núñez la caracterizó como un texto de "poco de verdad"37.
Por todo lo anterior, podemos confirmar, siguiendo lo planteado por Rivera Serna y
Waldermar Espinoza, que los contenidos de los tomos III y IV de Cortegana están más que
35
Núñez, Estuardo. 1997. Las letras de Francia y el Perú: apuntaciones de literatura comparada. Lima:
UNMSM.
36
Núñez, Estuardo. 1997. Las letras de Francia y el Perú: apuntaciones de literatura comparada. Lima:
UNMSM.
37
Núñez, Estuardo. 1997. Las letras de Francia y el Perú: apuntaciones de literatura comparada. Lima:
UNMSM..
56
influenciados por la novela Les Incas de Marmontel. Y es uno de los muchos ejemplos de
cómo el autor se apropió de diversas fuentes para elaborar su historia de los incas. Pese a ello,
debemos destacar la intención de Cortegana de elaborar una historia general del Perú
utilizando una amplia gama de fuentes, entre las cuales se encontraban obras de historiadores
y cronistas, así como obras literarias de su época.
Tabla 3. 3 Tomo V, VI y VII del manuscrito
Tomos V, VI y VII del manuscrito
•
Inca Garcilaso de la Vega: Comentarios reales de los incas (1723). Edición:
Andrés González de Barcia (Gabriel Cárdenas)
•
Inca Garcilaso de la Vega: Historia general del Perú (1617).
•
José María de Córdova y Urrutia: Las 3 épocas del Perú o compendio de su
historia (1844)
•
Juan Ignacio Molina: Compendio de la historia civil del reino de Chile (1795)
•
Andrés García Camba: Memorias para la historia de las armas españolas en el
Perú (1846)
El manuscrito V se ancla desde la Historia general del Perú (1617) del Inca Garcilaso de la
Vega. Así, Cortegana sigue la estructura de esta obra en la mayoría de los casos, y parafrasea,
reproduce, menciona, comenta, interviene y amplia. Con estas, tiene la intención de opinar y
guiar a su línea interpretativa. También, menciona otras fuentes Primera y segunda parte de
la historia del Perú de Diego Fernández, el Palentino, y Historia general de las Indias de
Francisco López de Gómara. Todo apunta a que se remite a estas fuentes desde la lectura del
Inca, así que no podríamos afirmar sí las leyó de primera mano.
En el tomo VI, en forma similar al tomo anterior, Cortegana sigue apoyándose en la Historia
general del Perú (1617) del Inca y, además del prólogo a los Comentarios reales de los incas
de Alberto González de Barcia. Asimismo, Cortegana usó Las 3 épocas del Perú o compendio
de su historia de José María Córdova y Urrutia como recurso primordial para hacer la guía del
período virreinal; además de utiliza también la estructura “antigua, colonial e independiente”
para narrar cronológicamente la sucesión de reyes y virreyes respectivamente. Al asumir este
57
esquema, usa otras fuentes como Compendio de la historia civil del reino de Chile de Juan
Ignacio Molina, además la mencionada obra de Garcilaso hasta el gobierno del virrey Toledo.
Hay otros autores que también son usados como Alonso de Ercilla y su La Araucana, el cual
proviene de su lectura Juan Ignacio Molina. Cita la Crónica moralizada del orden de San
Agustín en el Perú de fray Antonio de la Calancha, mencionado en el prólogo de Andrés
González de Barcia. En ciertas ocasiones, Cortegana cita brevemente a obras como la de
Estadística histórica, geográfica, industrial y comercial de los pueblos que conforman las
provincias del departamento de Lima de Córdova y Urrutia.
Para el tomo VII, Juan Basilio continúa usando Las 3 épocas del Perú para obtener la
información sobre los virreyes en términos generales; no obstante, en los capítulos que
abordan el proceso de la independencia, ahora se apoya en una nueva fuente: Historia de la
revolución hispanoamericana, la cual fue escrita por el español Mariano Torrente que aborda
los movimientos independentistas en Sudamérica a principios del siglo XIX. Veremos a
continuación que Cortegana seguirá recurriendo a esta obra como referencia en sus futuros
escritos.
3.3.Descripción y análisis de los primeros seis últimos tomos del manuscrito
3.3.1. Sumillas de los tomos XVIII, XIX, X y XI
El tomo VIII describe los gobiernos de los virreyes José Fernando de Abascal y Joaquín de la
Pezuela, quienes intentaron sofocar los movimientos independentistas en Sudamérica. Son
ocho capítulos y cada uno corresponde un año determinado. También se relata temáticas
fundamentales como la travesía de José de San Martín, el surgimiento de las guerrillas
patriotas, las medidas dadas por la autoridad real y los actos políticos y simbólicos. Además,
se destaca la narración de las batallas y las acciones de los líderes militares, tanto patriotas
como realistas.
El tomo IX está en muy malas condiciones y debido a la tinta corroída su lectura es una tarea
prácticamente imposible; no obstante, a Emilio Gutiérrez de Quintanilla, se sabe que este
aborda los acontecimientos de 1820 durante el gobierno del virrey Pezuela. A partir de este
crítico, el tomo consta de cuatro capítulos que se enfocan en la Expedición Libertadora
liderada por José de San Martín. Por su parte, el manuscrito X recopila documentos que
narran el período en que José de San Martín fue protector del Perú en 1821. En este tomo
empieza con la conspiración de Aznapuquio, la cual llevó a que se destituya al virrey Pezuela.
58
Después de ello, narra los eventos que llevaron a la proclamación el 28 de julio de 1821.
Finalmente, describe el sistema de gobierno que San Martín estableció en el Perú, conocido
como el Protectorado. Lamentablemente, estos tomos están muy deteriorados, pero se pueden
rescatar ciertos pasajes en donde se puede observar más las opiniones de Juan Basilio gracias
a que fue testigo de época.
El tomo XI aborda los sucesos de 1822. Por ello, se abordan las acciones de José de San
Martín como protector del Perú, los decretos relacionados con los líderes Torre Tagle y
Monteagudo, las batallas como la de Ica y la de Pichincha, así como eventos políticos y
militares, como el incendio de ministerios. También, resalta la entrevista entre San Martín y
Bolívar y la caída de Monteagudo debido al impacto de los limeños de élite. Cortegana da una
apreciación favorable para Monteagudo y, además, muestra detalles de la instalación de la
Asamblea Constituyente y la salida de San Martín del Perú. También muestra las acciones
iniciales de Bolívar y es así que narra eventos como la entrevista de Guayaquil.
3.3.2 Sumillas de los tomos XII y XIII y cotejo de fuentes
El tomo XII inicia abordando las campañas preliminares para las batallas de Junín y
Ayacucho. En este tomo, aparecen personajes como el Virrey La Serna, el teniente coronel
Barahona y destaca la figura Sucre como militar y hombre de Estado, además de virtudes
morales; se nota la ausencia de Bolívar. Como Cortegana fue testigo corrige a Miller,
Torrente y Camba para rectificar y dar observaciones, pues no daban los méritos necesarios de
los peruanos en la independencia. De todas maneras, el centro de este tomo son las Batallas de
Junín y Ayacucho.
Si bien es cierto que muestra muchos elementos bélicos y tácticos sobre la Batalla de Junín,
fue en su descripción de los hechos de la Batalla de Ayacucho donde mostró mayores detalles.
Coincido con el análisis de Nelson Pereyra (2022), quien afirma que Cortegana tuvo una gran
importancia estratégica gracias a su ubicación en el campo de batalla, lo que hizo posible no
solo observar los acontecimientos, sino también ser partícipe de ellos. Así, Cortegana hace
mención del ataque de la división de Valdés contra las fuerzas de La Mar, así como las
decisiones tomadas por Sucre para fortalecer sus líneas. Otro aspecto relevante en la Batalla
de Ayacucho fue la disposición de los ejércitos. Cortegana indica que el ejército libertador se
encontraba en una posición desfavorable debido a la emboscada en Colpahuaycco y el
respaldo brindado por los habitantes de Huanta y Quinua al ejército realista, así como la
59
superioridad en términos de equipo militar, número de soldados y artillería del enemigo. Sin
embargo, algo importante que destaca Cortegana fue la captura al virrey La Serna por
Pantaleón Baraona. Esto tuvo un impacto los realistas, quienes se retiraron de manera caótica.
Por último, la victoria fue asegurada por el batallón Caracas, que arrolló a las columnas
españolas y se apoderó de la artillería en el centro del campo de batalla. Las fuerzas realistas
intentaron persistir en su ataque al flanco izquierdo patriota, pero al notar que las fuerzas
patriotas habían triunfado en otros frentes, optaron por retirarse.
Algo sumamente importante y que regresaremos es que Cortegana reproduce la lista de
participantes en las Batallas de Junín y Ayacucho publicada en El Peruano. Realiza notas a
pie página para describir cómo fue la trayectoria de cada uno de ellos. Además, subraya la
falta de reconocimiento y apoyo que experimentaron los veteranos en los años posteriores por
parte del Estado y la sociedad.
Por su parte, el tomo XIII del manuscrito se enfoca en los años 1825, 1826 y 1827, un período
crucial en el que la República va tomando forma bajo el liderazgo de Simón Bolívar y,
además, destaca el viaje del líder a la región del Alto Perú. Los contenidos de este tomo se
basan principalmente en decretos, proclamaciones y correspondencia entre diversas
autoridades gubernamentales, recopiladas de diversas fuentes. A pesar de la reproducción
fragmentada de documentos, todo se alinea alrededor de la figura de Bolívar. También, se
puede destacar la creación de la Constitución vitalicia, así como la creación y organización
del Congreso. Asimismo, el contenido muestra el deseo de los peruanos de que Bolívar no se
vaya del país y esté en un gobierno duradero bajo su mando. Por ello, Cortegana cita
aclamaciones y homenajes por parte de políticos como del pueblo hacia el héroe libertador.
En cuanto al cotejo de fuentes, en estos últimos seis tomos del manuscrito Historia del Perú,
Cortegana mezcla, transforma y crítica las versiones de diversas fuentes. Su principal
combatiente a quien se opuso fue Andrés García Camba y a sus Memorias para la historia de
las armas españolas en el Perú. También, corrigió en las algunas ocasiones a Guillermo
Miller, a pesar de haber luchado bajo su mando. También hay que decir que agrega
información específica, aunque ello involucre reiteraciones y ampliaciones de los pasajes de
los memorialistas. Además, modifica la secuencia de los eventos que se presentan en las
fuentes de acuerdo con la conveniencia de Juan Basilio. También, utiliza a la Historia de la
revolución hispanoamericana de Mariano Torrente y las 3 épocas del Perú de Córdova y
Urrutia, para construir su propia perspectiva de la evolución histórica y versión general
totalizante.
60
Cortegana usa además diarios oficiales y documentos de circulación pública, como la Gaceta
del Gobierno de Lima y el diario El peruano, para narrar la declaración de independencia del
28 de julio. Con estos documentos, Cortegana rescata selectivamente qué fragmentos deben
estar en el manuscrito. También, usa las Memorias y documentos para la historia de la
independencia del Perú de P. Pruvonena y Lima justificada en el suceso del 25 de julio
impresa por Manuel del Río. Me atrevo a decir que Cortegana no fue solo un compilador de
documentos y hechos, ya que emite juicios de las fuentes y dándoles otro sentido. Esta
maniobra muestra como en los manuscritos de Cortegana era narrador y, también, testigo
crítico de los sucesos del pasado.
3.4.Las intenciones de Cortegana al escribir su Historia del Perú
Para Juan Basilio Cortegana, es criticable que la información sobre la historia antigua del Perú
sea desconocida por los peruanos: “ignorándola, es el colmo de la estupidez y abandono o en
el de la más infamante insensatez ignorando así aun su mismo origen” (Cortegana 1848, TI,
pp. 6-7). Por ello, uno de los objetivos principales de los dos primeros tomos de la Historia
del Perú de Cortegana es, precisamente, proporcionar una narración detallada de los
acontecimientos que marcaron el orden social y político de la vida en el país desde sus
orígenes. Así, el autor muestra a los incas de forma favorable, pues
la fundación del imperio de Manco Cápac y sus sucesiones, que con espressión de su
culto, sus leyes y costumbres, os presentasen a la faz del mundo desde vuestro
primitivo origen en sociedad civil, muy distante de aquella barbaridad ó ignorancia
desde que hubo de suponérseles entonces, a estos primeros moradores de quienes
emanamos, por sus crueles conquistadores los Españoles, y de quienes también, y a
participamos – sin remedios (Cortegana 1848, T1, pp. iii).
Otro objetivo de Cortegana es demostrar que el carácter civil y moral de los antiguos peruanos
era muy similar al de los presentes. Así, el autor critica duramente a filósofos extranjeros
como Bass, Buffon y Robertson, quienes caracterizaban a los "indianos" como personas física
y cívicamente no óptimas. En contraste, resalta el enfoque de otros pensadores hispanos como
el Padre de Velasco, Jorge Juan, e incluso del científico francés La Condamine, quienes sí
creían en la civilidad de los peruanos. De esta manera, Juan Basilio es contundente al señalar
que estos pensadores europeos simplemente calumniaban a los "indianos" al considerarlos
como seres de poco entendimiento y con capacidades mentales limitadas. Para el autor
celendino, esta perspectiva es totalmente falsa, ya que, según su investigación, los antiguos
61
peruanos tenían todas las capacidades intelectuales y morales acordes al nivel de civilización
de su época. La siguiente cita ilustra este pensamiento:
“Pero vamos á refutar la cadena de imposturas que han proguado los filósofos a los
Yndianos. Hablase aquí de los peruanos. La tradición de los antiguos peruanos antes de
los Yncas queda manifestado que muy pocos fueron las provincias que no vivían en
sociedad y bajo un régimen civil y político. Esta aserción la paveta bien las conquistas de
los Yncas. En la época del Ymperio una sociedad bien regalada y llena de magnificencia.
Esto lo prueban las riquezas de que se hicieran los conquistadores. Sus agriculturas y las
crías que tuvieron habían llegado a sú perfección. La sanidad en todos ellos, la prueba
hasta el día manifestando que es la gente más sana que puebla casi la mayoría del Perú, y
en quienes jamás se oye decir que mueren acabada de un mal venéreo que se les supone
tan impúdicamente. Sus males epidémicas más ben son cortadas, tabadillos, calenturas o
disentería. Así que el Señor Bass está muy equivoco de que de ella emanan ese mal
destructor que tal ves vino de Europa a difundirla en lo inocentes naciones de América.
Otro tanto sucede con las viruelas, pues raro o ningunas casi son los que tienen la cutis
dañada de ellas, no obstante de ser la gente más respuesta a las interferencias del clima. Se
les calumnia de estúpidos de poco entendimiento, de las potencias del alma muy limitadas,
que no tienen ideas y falta de relección contrayéndose solo á los objetos presentes de todo
lo que por la experiencia se asevera que es falso: los antiguos peruanos tenían todos los
dotes estendidos al tamaño de la civilidad de entonces. Los de ahora bajo la misma
ilustración que presente el siglo. Que se les atribuya cobardía, lo que tampoco fue así: sus
conquistas no prueban cobardía, lo que prueba es el ningún conocimiento que tenían de las
armas de fuego, del hierro y de los caballos, y sobre todo, de la precufiacioso de sus
últimos reyes. Sin embargo, véase lo que al fin les costó a los españoles de sometimiento.
Véase las guerras de Arauco …. (pp. 143 y 144)
Al igual que los pensadores ilustrados que critico Juan Basilio Cortegana, autores del género
de memorias como García Camba quitaban protagonismo a los peruanos en la gesta de la
independencia. Las razones del español son obvias, ya que desea reivindicar a la versión de
los hechos de los realistas; sin embargo, Cortegana también corrige en ciertos momentos a
Miller y así da más respaldo a la versión de los peruanos, pues en última instancia, él también
era extranjero.
Para redondear su propuesta y propósito, Cortegana reproduce una lista de combatientes tanto
en las Batallas de Junín y Ayacucho en el tomo XII que fueron publicadas en el diario El
62
Peruano. Al nombrar a uno por uno de ellos, les da un espacio en su Historia General. Así,
tiene un lugar simbólico como héroes Independencia y como constructores de la nueva
República. En los “combates por la memoria” a la que hemos aludido anteriormente la lucha
no fue solo por el reconocimiento político y el honor, también por lo material y vida digna de
los excombatientes. Cortegana rescata sus nombres y sus historias. Ello es fundamental para
preservar su legado y otorgarles la justicia que merecen. El hecho de que los veteranos
aparezcan en la Historia del Perú es también un uso político de la memoria y la Historia.
Esto va en correlación con las solicitudes de pensiones de los excombatientes que buscaban
beneficios económicos y el apoyo del Estado peruano de aquel entonces. No es casual que
muchos de los pies de página explicativos mencionan las penurias económicas que
experimentaron muchos de ellos, a pesar de que algunos alcanzaron el éxito económico o
político. Los reclamos muestran que la conexión entre memoria, la Historia y la política es
evidente: las pensiones servían como una herramienta pragmática para obtener beneficios
estatales y una mejor calidad de vida de personas que avanzaban en la edad. En suma, la
cultura y la memoria histórica son asuntos políticos y económicos, pero también pudieron
ayudar a la construcción de Estado-nación. El hecho de nombrar a estos héroes y buscar que
se les de reconocimiento es un acto de preservación de la memoria. Para cerrar este punto
citaré un pasaje de uno de los ensayos ganadores del II Concurso Nacional de Historia
(Mogrovejo 2023, p1):
“Dos años antes de la asunción al poder político del Partido Civil, los diputados del
Congreso de la República debían abordar la aprobación de una propuesta de ley de la
Comisión Auxiliar de Guerra, como uno de los puntos a tratar en su agenda del día. No
se trató de cualquier iniciativa legislativa, ya que se proponía implementar el abono
correspondiente a los vencedores en el Combate del 2 de Mayo de 1866, sin distinguir
la condición de los beneficiarios de dicha pensión. Algunos diputados no conocían de
la exactitud del monto, o si acaso ciertos artículos de la ley que les concedía una
gratificación mensual tomó en cuenta lo propuesto por la comisión. Por sobre todo, les
preocupó que aceptar dicha iniciativa suponga un mayor gasto al Estado por tener que
cumplir mensualmente con cerca de dos mil individuos. En medio de la discusión, el
representante por Celendín y veterano de la guerra de Independencia, Juan Basilio
Cortegana, tomó la palabra para decir que «los vencedores en Junín y Ayacucho, desde
que triunfaron, no pidieron nada. Cuando vencimos, lo que se nos dijo a los peruanos,
fue: “ustedes han cumplido con su deber, no han hecho más que libertar a su patria del
63
yugo español”». Afirmó Cortegana que, tras el fin de la guerra, «entonces no se
hablaba nada de premios, ni de millones. Una tira de papel, era todo lo que se nos
daba»38.
Para finalizar, aludo al historiador norteamericano Mark Thurner (2019) propone que los
procesos de las independencias latinoamericanas de finales del XVIII e inicios del XIX
deberían considerarse como la "primera ola de descolonización". Esta ola es un punto de
quiebre no solo para América Latina, ya que también influyó en los cambios políticos más
allá de lo que fue el Imperio Hispánico. Por otro lado, para fines argumentativos, tengo que
traer a colación un fenómeno del siglo XX llamada como la “ola memorial” en América
Latina, que suelen asociarse históricamente con las décadas finales del siglo XX,
particularmente en el contexto de dictaduras, violencia estatal e insurgencia. No obstante, esta
“ola memorial” o también “combate por la memoria” no es la primera que se dio en la región,
al contrario, la pionera es la que se dio al período de construcción de los estados poscoloniales
en América Latina.
Estos “combates por la memoria” estaban estrechamente vinculados a la narración de las
experiencias militares de los veteranos de las guerras de independencia. Así, estos veteranos
escribieron memorias en las que detallaban los aspectos relacionados con las guerras, como
tácticas, estrategias y batallas, con la intención de que estas obras fueran leídas en el futuro,
de manera similar a los relatos históricos militares clásicos, como las memorias de Julio
César. En otras palabras, al extrapolar la propuesta de Mark Thurner de "primera ola de
descolonización", se podría que la primera “ola memorial” está vinculada a la narración de los
veteranos de las guerras de independencia. De esta manera, el vínculo y paso de la espada a la
pluma contribuye a la configuración de las memorias del pasado en la transición de la colonia
a la República en América Latina. Así, para Nelson Pereyra (2022), los recuerdos de los
participantes militares de los bandos tanto patriota como realista adoptaron el género
memorial y se convirtieron en documentos qué muestran tanto las batallas como las victorias
patriotas, así como la derrota de los realistas.
3.5.Reflexiones sobre este capítulo
En resumen, la obra de Cortegana podría parecer, a simple vista, un aporte inédito para la
entender la forma de escritura histórica, pero, como este capítulo demostró, es esencial
38
Sesión del 8 de noviembre de 1870. Diario de Debates del Congreso, Cámara de Diputados, pp. 875-881.
64
considerar el uso que realizó de otras fuentes. De acuerdo con Waldermar Espinoza, no es de
extrañar que hace más de cincuenta años, exactamente en 1951, se elaboró un informe por
expertos de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, que incluyó figuras destacadas
como Ella Dumbar Temple, Raúl Porras Barrenechea y Carlos Daniel Valcárcel, donde se
puso al descubierto la existencia de una notable cantidad de plagio en las páginas de su
manuscrito. Específicamente, sostenían que, para el período prehispánico, Cortegana se había
apropiado de Cieza de León, Zárate y Mena.
No obstante, como se ha demostrado en este capítulo, la intención de Cortegana era realizar
una Historia General que de solidez y justifique al grupo de veteranos. Creo que, para sus
fines últimos, realizar un sopesado uso de las fuentes no era lo más importante. Su intención
era realizar ya no un combate con la espada, sino desde las palabras. Para ello, debía refutar a
Camba y, hasta, Miller y demostrar la grandeza del accionar de los peruanos.
65
Conclusiones
Juan Basilio Cortegana fue un personaje importante en el proceso de la independencia y los
primeros años de la República peruana. Como militar, su actuación fue vital para la
independencia, al igual que muchos otros jóvenes que desertaron del ejército realista. Además
de su participación en grandes conflictos como la guerra contra la Confederación Peruanaboliviana, también estuvo involucrado en luchas locales.
Gracias a su representación por Celendín, inició su vida política y propuso varias iniciativas
para mejorar la calidad de vida de sus coterráneos. Como político, nunca abandonó del todo
su pasado militar. Por el contrario, aprovechó la oportunidad para promover iniciativas legales
que mejorasen la vida de los excombatientes de las guerras de independencia. Asimismo, fue
un líder indiscutible en las asociaciones de héroes y veteranos, y un nexo entre el gobierno y
colectivos civiles.
El manuscrito Historia del Perú de Juan Basilio Cortegana es relevante para entender la
cultura militar e ilustrada y, además, de las formas de escribir historia. Por un lado, representa
un intento de escribir una historia general, más allá de las memorias personales, que solo
narran eventos destacados de individuos específicos. De esta manera, Cortegana introdujo un
cambio significativo en la forma de escribir historia, ya que abordó las etapas incaica,
virreinal y emancipadora, anticipando los enfoques del destacado historiador Sebastián
Lorente y la Córdova y Urrutia.
Por otro lado, estos tomos también se ubican entre las memorias personales y la historia
general, un género poco común en la época en que se escribió (1848). Esta evolución está
relacionada con los cambios políticos de la época y las tendencias historiográficas
emergentes. En este contexto, las memorias de independencia estaban más alineadas con un
escenario político caracterizado por la lucha entre facciones, mientras que las historias
generales estaban relacionadas con proyectos políticos de construcción nacional.
La obra de Cortegana representa un cambio y una transición significativos. Su manuscrito es
un híbrido que refleja la tensión política que caracterizó las primeras décadas de la República
peruana. En sus páginas, la mayoría de los volúmenes se enfocan en la narración de la historia
general, mientras que los últimos se centran en testimoniar los hechos vividos.
A primera impresión, esta Historia del Perú puede deslumbrarnos y aparecer como asuntos
inéditos. No obstante, he realizado una triangulación de fuentes para observar de dónde salen
las referencias e influencias de cada uno de los trece tomo del manuscrito. En los dos
66
primeros tomos, la principal fuente es Comentarios Reales de los Incas del Inca Garcilaso de
la Vega. Además, se hacen referencias a obras como Historia del reino de Quito en la
América Meridional de Juan de Velasco, History of America de William Robertson, e
Historia general de los hechos de los castellanos en las Islas y Tierra Firme del mar Océano
que llaman Indias Occidentales de Antonio de Herrera y Tordesillas. Cada relato concluye
con un poema sobre el Inca correspondiente, extraído del "Mercurio Peruano". Estas
referencias se pueden verificar en el anexo.
Al analizar los tomos III y IV, se evidencia que son principalmente una apropiación y
adaptación del trabajo de Jean-François Marmontel en su obra Los Incas o La destrucción del
Imperio del Perú. Este literato francés se basó en diversas fuentes, incluyendo las obras del
Inca Garcilaso, Antonio de Herrera y Bartolomé de las Casas, para desarrollar su narrativa.
En el tomo V, Cortegana se apoya en Historia general del Perú de Inca Garcilaso de la Vega,
siguiendo la estructura de esta obra en la mayoría de los casos. En el tomo VI, Cortegana
continúa utilizando Historia general del Perú del Inca Garcilaso de la Vega como fuente
principal y agrega el prólogo a los Comentarios reales de los incas de Alberto González de
Barcia. Además, se apoya en Las 3 épocas del Perú de José María Córdova y Urrutia para
guiar la narración del período virreinal. También hace referencia a otras fuentes como
Compendio de la historia civil del reino de Chile de Juan Ignacio Molina, "La Araucana" de
Alonso de Ercilla, y la "Crónica moralizada del orden de San Agustín en el Perú" de fray
Antonio de la Calancha.
En el tomo VII, Cortegana sigue utilizando Las 3 épocas del Perú para obtener información
sobre los virreyes, pero ahora incorpora una nueva fuente, Historia de la revolución
hispanoamericana de Mariano Torrente, que aborda los movimientos independentistas en
Sudamérica a principios del siglo XIX.
En estos últimos seis tomos del manuscrito, Cortegana mezcla, transforma y critica las
versiones de diversas fuentes. Se enfrenta a las Memorias para la historia de las armas
españolas en el Perú de Andrés García Camba y corrige a Guillermo Miller en ocasiones.
También agrega información específica y modifica la secuencia de los eventos según su
conveniencia. Además, utiliza diarios oficiales y documentos de circulación pública, como la
Gaceta del Gobierno de Lima y el diario El peruano, para narrar eventos como la declaración
de independencia del 28 de julio.
67
El objetivo de Cortegana con su manuscrito es demostrar la similitud entre el carácter civil y
moral de los antiguos peruanos y los actuales. Por ello, critica a filósofos extranjeros que
denigraban a los "indianos" y destaca el enfoque de otros pensadores hispanos y científicos
que creían en la civilidad de los peruanos. Basilio Cortegana defiende la idea de que los
antiguos peruanos tenían capacidades intelectuales y morales acordes a su época. De manera
similar a los pensadores ilustrados, García Camba minimiza la contribución de los peruanos a
la independencia. Por su parte, Miller a pesar de respaldar la versión peruana también es
criticado por Cortegana.
La Historia del Perú incluye una lista de combatientes en las Batallas de Junín y Ayacucho,
otorgándoles un lugar simbólico como héroes de la independencia y constructores de la nueva
República. Así, Cortegana rescata los nombres y las historias de los excombatientes, lo que es
esencial para preservar su legado y otorgarles justicia. También destaca la relación entre
memoria, historia y política, ya que los veteranos buscaban pensiones y apoyo del Estado
peruano. La cultura y la memoria histórica tienen implicaciones políticas y económicas,
contribuyendo a la construcción del Estado-nación.
Por último, Mark Thurner propone que las independencias latinoamericanas fueron la
"primera ola de descolonización", influyendo en cambios políticos más allá de América
Latina. Se menciona la "ola memorial" del siglo XX, pero se aclara que la primera "ola
memorial" se dio durante la construcción de los estados poscoloniales en América Latina. Así,
los "combates por la memoria" de la primera "ola memorial" estaban vinculados a las
narraciones de veteranos de las guerras de independencia.
Estos veteranos escribieron memorias detalladas sobre las guerras, sus tácticas y estrategias,
con la intención de que fueran leídas en el futuro. Este vínculo entre espada y pluma
contribuyó a la configuración de las memorias del pasado en la transición de la colonia a la
República en América Latina, según Nelson Pereyra.
68
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71
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__________. 2022. Del imperio a la república: las milicias peruanas de la primera mitad del
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http://repositorio.casadelacultura.gob.ec/handle/34000/1333
72
Anexos
Cronología de Juan Basilio Cortegana y Vergara39
1801
12 de octubre de 1801
Juan Basilio Cortegana y Vergara nace en Celendín, Cajamarca. Sus padres fueron don Dionisio
Cortegana y doña María Vergara.
1820
8 de septiembre de 1820
La Expedición Libertadora desembarca en Paracas.
29 de diciembre de 1820
Cortegana estuvo presente en la jura de la libertad de la ciudad de Trujillo, realizada por el
marqués de Torre Tagle. Posteriormente, toma la decisión de viajar a Huaura acompañando a un
grupo de militares para ofrecer sus servicios a la Expedición Libertadora de José de San Martín.
1821
24 de julio de 1821
Cortegana asiste a la proclamación de la independencia en la plaza de Armas de Lima.
Confeccione la presente cronología y se publicó por la Fundación BBVA. Esta se basó en la obra de Apolonio
Carrasco, en el libro Historia de la Benemérita Sociedad Fundadores de la Independencia, Vencedores el 2 de
Mayo de 1866 y Defensores Calificados de la Patria (1988) de Manuel Augusto de Ingunza Simonetti y en
documentos de instituciones como el Archivo General de la Nación, Biblioteca Nacional, Archivo Histórico del
Centro de Estudios Militares y el diario de debates del Archivo del Congreso del Perú. (Cortegana 2023, vol. 5,
39
73
18 de agosto de 1821
Se crea la Legión Peruana de la Guardia, al mando del marqués de Torre Tagle. En esta unidad
del ejército Cortegana y otros patriotas se unieron en las guerras por la independencia del Perú.
1822
14 de enero de 1822
Cortegana participa en la batalla de Torata.
1823
25 de agosto de 1823
Cortegana interviene en la batalla de Zepita.
1824
6 de agosto de 1824
Cortegana lucha en la batalla de Junín.
9 de diciembre de 1824
Juan Basilio combate en la batalla de Ayacucho.
1828
29 de enero de 1828
74
Cortegana es atacado por dos jefes del ejército. Esto se debe, posiblemente, a la publicación de un
artículo atribuido a la autoría de Cortegana, texto en que se difama a los agresores.
1833
Marzo de 1833
Durante el gobierno de Agustín Gamarra, Felipe Salaverry y un grupo de militares, entre los que
se encontraba Cortegana, son acusados de rebelión y, en consecuencia, puestos en cautiverio.
11 de julio de 1833
Cortegana es enviado a Huanchaco en la fragata Monteagudo. Salaverry y el grupo de militares
capturados están presentes en la embarcación.
Como preso político, Cortegana es enviado a la región de Maynas.
1834
Febrero de 1834
Salaverry viaja a Trujillo para enfrentarse a las autoridades durante el gobierno de Luis José de
Orbegoso. Cortegana decide acompañar a Salaverry.
11 de abril de 1834
Por orden del comandante general de armas Don Franco Valleriesta, se le otorga a Cortegana el
grado de comandante general de Nazca para la provincia de Ica. Sin embargo, debido a su
salud deteriorada y habiendo ya luchado en la guerra por la independencia, Cortegana decide no
aceptar el ascenso.
1838
75
Cortegana obtiene el grado de teniente coronel. Participa en la Campaña de la Restauración
contra el protectorado de Santa Cruz; se le designó la región norte.
1839
6 de enero de 1839
Cortegana informa acerca de la salud de unas mulas que están a punto de morir en la provincia
de Santa. Se menciona que Cortegana conoce las propiedades de ciertas hierbas medicinales y
las emplea para salvar a los animales que tiene bajo su custodia.
Enero de 1839
Cortegana informa que la comandancia está al tanto de que el comandante general de la provincia
de Santa dio
informe sobre el robo de 200 cabezas de ganado por parte del enemigo y el secuestro del
gobernador y el comandante. Se menciona que las fuerzas enemigas estaban conformadas por
300 hombres y actuaron desde los altos, buscando cortar la comunicación y capturar
pertrechos.
15 de enero de 1839
Cortegana informa que han llegado pertrechos y tropa enferma de Nepeña y son enviados a
Huanta con el objetivo de protegerlos del avance enemigo. Se resalta la carencia de recursos y que
el camino estaba tomado por el enemigo. Cortegana informa que el 16 de enero se da la orden de
que todo lo obtenido (municiones) sea enviado al cuartel general. El 17 se enviaron las
municiones y el 20 se encontró al enemigo y a las autoridades apresadas. Se confirma la
presencia de 300 cabezas de ganado. El 16 de enero se le ordena al general Jaramillo recuperar
las reses del enemigo. El 19 de enero de 1839, Cortegana informa el traspaso de munición al
cuartel general.
1840
76
Cortegana es enviado a la región sur del Perú, cerca al límite territorial con Bolivia.
1841
Cortegana es alejado del ejército porque se le abre un proceso; sin embargo, es declarado
inocente de las acusaciones.
1842
Cortegana decide postular como senador de Cajamarca. No logra los votos necesarios.
1843
Mayo de 1843
Cortegana decide iniciar los trámites para su retiro de las Fuerzas Armadas. Sin embargo, se
involucra en una disputa con el vocal Manuel Orosco debido a que Cortegana lo tacha como
parte de la junta que revisa su caso de retiro.
Ante dicho suceso, el vocal Orosco pide que sea él quien revise su cédula de retiro. Por otro lado,
se menciona en la correspondencia del oficial del ejército que el general Agustín Gamarra estaba
al mando de Cortegana en su estancia en el ejército.
1846
Entre 1846 y 1848, Cortegana apoya a la fundación de la Sociedad Humanitaria.
1848
77
Cortegana inicia la redacción de la Historia del Perú.
9 de setiembre de 1848
Cortegana y José Domingo Espinar solicitan al Poder Ejecutivo una ayuda económica para los
veteranos de la guerra por la independencia.
9 de diciembre de 1848
Cortegana apoya en la creación de la Sociedad de Fundadores de la Independencia, la primera
institución patriótica del Perú. No obstante, el gobierno de Ramón Castilla clausuró
la sociedad por temor a una confabulación en contra del presidente.
1850
Cortegana impulsa que se nombre como provincia a Celendín. Luego de diversas discusiones en
el Parlamento, se aceptó el pedido.
1855
Se publica la Estadística Histórica, Geográfica, Física y Política del Distrito de Celendín. Fue editado
por el gobernador del distrito José Burga, en asociación con el síndico procurador José Manuel
Pereira Merino y los tenientes coroneles del ejército Juan Basilio Cortegana, Leandro Pereira
Pita y Gabino Rodríguez.
1857
28 de setiembre de 1857
78
Se presenta un acta ante el Supremo Gobierno para obtener el reconocimiento de institución
humanitaria para la Sociedad de Fundadores de la Independencia. Cortegana y Casimiro Negrón
entregaron el pedido, que fue aceptado en los días siguientes.
1858
13 de marzo de 1858
Juan Basilio Cortegana contrae matrimonio con doña Manuela Arnáez Camacho.
15 de marzo de 1858
Fallece Manuela Arnáez Camacho, esposa de Cortegana.
1864
Durante el conflicto con España, Cortegana mantiene el puesto de tesorero en la Sociedad de
Fundadores de la
Independencia. Una de sus labores fue entregar 500 pesos a la Tesorería de Crédito Público.
1868
Gracias al texto Estadística de la Provincia de Celendín, Cortegana es electo como
representante de la provincia en el Parlamento.
Como representante en el Poder Legislativo, Cortegana no apoya con su voto a la propuesta del
señor Peña por los ascensos a los coroneles graduados.
Cortegana apoya con su voto a la propuesta del señor Gadea por el mal estado de los pueblos del
interior.
79
Cortegana apoya que se examine el proyecto del ministro de Hacienda y del señor Bernalez para
que se autorice al Poder Ejecutivo a hacer uso de los bienes económicos del Tesoro Público para
subsanar el déficit presupuestal.
1869
Cortegana pide que se reconozcan las contribuciones económicas que la provincia de Celendín
realizó durante la guerra por la independencia. Debido a la mala situación económica, no se
aceptó el reclamo.
20 de enero de 1869
Cortegana pide una mayor cantidad de obras públicas en Celendín.
1870
1 de agosto de 1870
Cortegana es designado como principal de guerra en el Poder Legislativo.
21 de setiembre de 1870
Cortegana propone crear un colegio de señoritas en la provincia de Celendín y reconocer créditos
a los excombatientes de la guerra por la independencia.
Cortegana y otros parlamentarios se oponen a la división de la provincia de Aymaraes del
departamento de Cusco.
8 de noviembre de 1870
En la Cámara de Diputados, la Comisión auxiliar de guerra discute sobre la aprobación del
proyecto que concede a los vencedores del combate del 2 de Mayo la tercera parte del sueldo de
80
un oficial por sus hazañas en defensa de la nación. Cortegana señala que los vencedores de Junín y
Ayacucho no pidieron ascensos o remuneraciones monetarias por participar en la guerra contra
la Corona española. Más bien, Cortegana informa que el Gobierno le ofrecía sueldos a los
excombatientes que le prestaban ayuda, mientras que a los que se oponían se les dejaba de lado.
18 de noviembre de 1870
En la Cámara de Diputados se propone el proyecto de contratación del ferrocarril de
Pacasmayo a Cajamarca. Cortegana demuestra sus conocimientos del terreno de Huamachuco
y Pacasmayo, da su opinión sobre el camino del ferrocarril y menciona el río Magdalena como
posible ruta.
7 de diciembre de 1870
Cortegana solicita que se den beneficios a los excombatientes (vencedores) en base a la ley del 23
de enero de 1869.
81
Anexo II
Evidencia de cotejo de fuentes primarias
Cotejo de fuentes con base en los 5 volúmenes del BBVA
Autor original del texto
Texto empleado por Cortegana
Texto escrito por Cortegana
Volumen
Inca Garcilaso de la Vega. 1967 [1609].
Otra manera del origen de los Incas
Otra idea del origen de los incas,
Volumen I -
Comentarios reales de los Incas. Lima:
cuentan semejante a la pasada, y éstos
es que después del diluvio
Manuscrito II
Editorial Universo S.A.
son los indios que viven al levante y
salieron por la ventana de en
https://shorturl.at/irBIS
al norte de la Ciudad del Cozco.
medio de tres que habían de estas
Dicen que al principio del mundo
en unas peñas —que están cerca
salieron por unas ventanas de unas
de la ciudad en un lugar llamado
peñas que están cerca de la ciudad, en
Paucartambo— cuatro hombres y
un puesto que llaman Paucartampu,
cuatro mujeres todas hermanas, y
cuatro hombres y cuatro mujeres,
a la cual le llamaron desde
todos hermanos, y que salieron por la
entonces ventana real, y por cuya
ventana de en medio, que ellas son
razón se conceptúa que la
tres, la cual llamaron ventana real. Por
superchería de esta fábula haya
esta fábula aforraron aquella ventana
sido la embarcación de Noé
por todas partes con grandes planchas
cuando el diluvio universal, según
de oro y muchas piedras preciosas.
así lo conjeturaban los españoles
Las ventanas de los lados
al oírle contar esta historia por su
79
guarnecieron solamente con oro mas
analogía en los cuatro hijos, de
no con pedrería. Al primer hermano
que hubiesen tenido tal
llaman Manco Cápac y a su mujer
conocimiento. (Cortegana, 2023,
Mama Ocllo. Dicen que éste fundó la
24).
ciudad y que la llamó Cozco, que en
la lengua particular de los Incas
quiere decir ombligo, y que sujetó
aquellas naciones y les enseñó a ser
hombres, y que de éste descienden
todos los Incas. Al segundo hermano
llaman Ayar Cachi y al tercero Ayar
Uchu y al cuarto Ayar Sauca. La
dicción Ayar no tiene significado en
la lengua general del Perú; en la
particular de los Incas la debía de
tener. Las otras dicciones son de la
lengua general: cachi quiere decir sal,
la que comemos, y uchu es el
condimento que echan en sus
guisados, que los españoles llaman
pimiento, no tuvieron los indios del
Perú otras especias. La otra dicción,
sauca, quiere decir regocijo, contento
80
y alegría. (Garcilaso de la Vega, 1967
[1609], Cap. XVIII).
La primera parada que en este valle
Después que habían reparado el
Volumen I -
hicieron —dijo el Inca— fue en el
cansancio del largo camino que
Manuscrito I
cerro llamado Huanacauri, al
traían, estos dos célebres viajeros
[Libro I, Capítulo 2]
mediodía de esta ciudad. Allí procuró
entre claro y oscuro, se pusieron
hincar en tierra la barra de oro, la cual
en marcha sobre el valle del
con mucha facilidad se les hundió al
Cusco y a la primera parada que
primer golpe que dieron con ella, que
hicieron vencida alguna distancia
no la vieron más. Entonces dijo
en la cima del cerro Huanacauri,
nuestro Inca a su hermana y mujer:
hincó Manco Cápac a la tierra con
la vara de oro, la cual con una
—«En este valle manda Nuestro
Padre el Sol que paremos y hagamos
nuestro asiento y morada para cumplir
su voluntad. Por tanto, Reina y
hermana, conviene que cada uno por
su parte Vamos a convocar y atraer
esta gente, para los doctrinar y hacer
facilidad admirable se hundió al
primer golpe en él todo y de modo
que no la vieron más. De lo que
coligieron Manco Cápac y su
compañera que ese era el sitio que
quería su padre el Sol para que
edificase la ciudad e hiciese
asiento para morarla por todo el
81
el bien que Nuestro Padre el Sol nos
tiempo de su vida y la de sus
manda».
descendientes.
Tomada así la posesión
«Del cerro Huanacauri salieron
entrambos esposos se dedicaron a
nuestros primeros Reyes, cada uno
reducir a los salvajes cada uno por
por su parte, a convocar las gentes, y
su parte, y para que se conociera
por ser aquel lugar el primero de que
en todo tiempo el trabajo de cada
tenemos noticia que hubiesen hollado
uno formaron dos departamentos.
con sus pies por haber salido de allí a
Los que redujera Manco Cápac
bien hacer a los hombres, teníamos
poblaban en la parte superior del
hecho en él, como es notorio, un
monte de Huanacauri y los que
templo para adorar a Nuestro Padre el
reducía la coya, su esposa, al pie
Sol, en memoria de esta merced y
beneficio que hizo al mundo.
[...]
de él, de manera que los del cerro
se denominaban Hanan Cusco, es
decir, pueblo situado en la altura
del Cusco, y los del pie de él,
»Nuestros príncipes, viendo la mucha
Hurin Cusco, que es decir, pueblo
gente que se les allegaba, dieron
situado en el bajo Cusco.
orden que unos se ocupasen en
proveer de su comida campestre para
todos, porque la hambre no los
volviese a derramar por los montes;
mandó que otros trabajasen en hacer
Tomada así la posesión
entrambos esposos se dedicaron a
reducir a los salvajes cada uno por
su parte, y para que se conociera
en todo tiempo el trabajo de cada
82
chozas y casas, dando el Inca la traza
uno formaron dos departamentos.
cómo las habían de hacer. De esta
Los que redujera Manco Cápac
manera se principió a poblar esta
poblaban en la parte superior del
nuestra imperial ciudad, dividida en
monte de Huanacauri y los que
dos medios que llamaron Hanan
reducía la coya, su esposa, al pie
Cozco, que, como sabes, quiere decir
de él, de manera que los del cerro
Cozco el alto, y Hurin Cozco, que es
se denominaban Hanan Cusco, es
Cozco el bajo. Los que atrajo el Rey
decir, pueblo situado en la altura
quiso que poblasen a Hanan Cozco, y
del Cusco, y los del pie de él,
por esto le llaman el alto, y los que
Hurin Cusco, que es decir, pueblo
convocó la Reina que poblasen a
situado en el bajo Cusco. Este
Hurin Cozco, y por eso le llamaron el
acontecimiento ha reputado
bajo. Esta división de ciudad no fue
Garcilaso de la Vega en su obra,
para que los de la una mitad se
que tal denominación la hizo
aventajasen de la otra mitad en
Manco Cápac por una especie de
exenciones y preeminencias, sino que
superioridad que debería haber de
todos fuesen iguales como hermanos,
los que él reducía sobre los que se
hijos de un padre y de una madre.
atraía su esposa. Pero
Sólo quiso el Inca que hubiese esta
conceptuando este asunto en su
división de pueblo y diferencia de
verdadero punto de vista, no hay
nombres alto y bajo para que quedase
razón para aceptarlo de ese modo,
perpetua memoria de que a los unos
porque siendo el objeto uno
había convocado el Rey y a los otros
mismo, la colocación de los
la Reina. Y mandó que entre ellos
reducidos parece que no sería más
83
hubiese sola una diferencia y
que para el estímulo y
reconocimiento de superioridad: que
conocimiento de que ambos
los del Cozco alto fuesen respetados y
trabajaban para un mismo fin,
tenidos como primogénitos, hermanos
probándole así cada cual de los
mayores, y los del bajo fuesen como
departamentos según su aumento
hijos segundos; y en suma, fuesen
y cuidado que tomaban
como el brazo derecho y el izquierdo
instantáneamente más y más sus
en cualquiera preeminencia de lugar y
fundadores sobre el particular.
oficio, por haber sido los del alto
Le puso el inca el nombre
atraídos por el varón y los del bajo
de Cusco a la ciudad, porque en
por la hembra. A semejanza de esto
su idioma quiere decir esta
hubo después esta misma división en
expresión quechua ombligo,
todos los pueblos grandes o chicos de
dando a entender así que ahí es la
nuestro Imperio, que los dividieron
primera creación del hombre,
por barrios o por linajes, diciendo
después de Adán y su compañera
Hanan ayllu y Hurin ayllu, que es el
Eva, y que siendo ese el primer
linaje alto y el bajo; Hanan suyu y
pueblo del imperio debía
Hurin suyu, que es el distrito alto y
denominarse así, porque de él iba
bajo.
a emanar la creación de todos los
demás pueblos, como sucedió
»Juntamente, poblando la ciudad,
tanto por él como por sus
enseñaba nuestro Inca a los indios
sucesores.
varones los oficios pertenecientes a
84
varón, como romper y cultivar la
Así que iban aumentando
tierra y sembrar las mieses, semillas y
sus reducidos de entrambos sexos,
legumbres que les mostró que eran de
Manco Cápac cuidaba de que
comer y provechosas, para lo cual les
hicieran sus casas con toda
enseñó a hacer arados y los demás
comodidad enseñándoles a
instrumentos necesarios y les dio
cultivar la tierra, a mejorar sus
orden y manera como sacasen
costumbres, a respetar a sus
acequias de los arroyos que corren por
mayores, a ser obedientes, a no
este valle del Cozco, hasta enseñarles
hacer mal a sus semejantes y
a hacer el calzado que traemos. Por
sobre todo a adorar el Sol, su
otra parte la Reina industriaba a las
padre, // [f. 20] para cuyo efecto
indias en los oficios mujeriles, a hilar
les hizo edificar un hermoso
y tejer algodón y lana y hacer de
templo conocido por el del Sol, en
vestir para sí y para sus maridos e
donde tenían colocada su efigie,
hijos: decíales cómo habían de hacer
construida del oro más refulgente.
los demás oficios del servicio de casa.
La coya Mama Ocllo se encargó
En suma, ninguna cosa de las que
del mismo modo a educar a las
pertenecen a la vida humana dejaron
reducidas de su sexo en todos los
nuestros príncipes de enseñar a sus
quehaceres mecánicos de una
primeros vasallos, haciéndose el Inca
mujer para el manejo de una casa
Rey maestro de los varones y la Coya
y madre de familia. Les instruyó
Reina maestra de las mujeres».
en el hilado, tejido y demás
(Garcilaso de la Vega, 1967 [1609],
habilidades, que no solo adornan a
una mujer sino que le son
85
Cap. XVI).
necesarias para vivir unidos al
matrimonio, y por sí mismas
manejándose llenas de agrado
para con todos los de su especie, y
sin olvidar por esto, lo más
esencial y sobre todo privilegiado
de tributar el culto debido al Sol,
como deidad paternal para todos
ellos y hacían de él desde luego
emanar su origen. (Cortegana,
2023, 15 - 16).
El uno fue Cápac, que quiere
1.° Cápac tiene todas estas
Volumen I -
decir rico, no de hacienda, que, como
acepciones en la quichua, grande,
Manuscrito I
los indios dicen, no trajo este Príncipe
rico, manso, piadoso, clemente,
[Libro I, Capítulo 3]
bienes de fortuna, sino riqueza de
liberal, justiciero y de mucha
ánimo, de mansedumbre, piedad,
magnanimidad para hacer bien
clemencia, liberalidad, justicia y
con sus obras a los pobres.
magnanimidad y deseo y obras para
2.° Huaccha cuyac es otro
hacer bien a los pobres, y por haberlas
título que significa amador y
tenido este Inca tan grandes como sus
bienhechor de los pobres. Manco
vasallos las cuentan, dicen que
era nombre propio del inca.
dignamente le llamaron Cápac;
86
también quiere decir rico y poderoso
3.° El título inca significa
en armas. El otro nombre fue llamarle
emperador, rey o señor de mucho
Huacchacúyac, que quiere decir
poder o autoridad; y cuyas
amador y bienhechor de pobres, para
insignias declaró que fueran el
que, como el primero significaba las
llauto imperial, que cubría su
grandezas de su ánimo, el segundo
cabeza con una borla colorada
significase los beneficios que a los
llamada mascaypacha, orejeras de
suyos había hecho, y desde entonces
oro; y en lugar de cetro una hacha
se llamó este príncipe Manco Cápac,
corta del mismo metal en la mano.
habiéndose llamado hasta allí Manco
4.° Cápac Inca es solo
Inca. Manco es nombre propio: no
señor, y de la manera que al
sabemos qué signifique en la lengua
Emperador Turco le llaman los
general del Perú, aunque en la
suyos Gran Señor.
particular que los Incas tenían para
hablar unos con otros (la cual me
escriben del Perú se ha perdido ya
totalmente) debía de tener alguna
5.° Coya significa
emperatriz o reina.
6.° Intip-Churin significa
significación, porque por la mayor
hijo del Sol, título del inca
parte todos los nombres de los Reyes
príncipe heredero. (Cortegana,
la tenían, como adelante veremos
2023, 18).
cuando declaremos otros nombres. El
nombre Inca, en el Príncipe, quiere
decir señor o Rey o Emperador, y en
los demás quiere decir señor, y para
87
interpretarle en toda su significación,
quiere decir hombre de sangre real,
que a los curacas, por grandes señores
que fuesen, no les llaman Incas. Palla
quiere decir mujer de la sangre real, y
para distinguir al Rey de los demás
Incas, le llaman Zapa Inca, que quiere
decir Solo Señor, de la manera que los
suyos llaman al Turco gran señor.
Adelante declararemos todos los
nombres regios masculinos y
femeninos, para los curiosos que
gustaran saberlos. También llamaban
los indios a este su primer Rey y a sus
descendientes Intip churin, que quiere
decir hijo del Sol, pero este nombre
más se lo daban por naturaleza, como
falsamente lo creían, que por
imposición. (Garcilaso de la Vega,
1967 [1609], Cap. XXIV).
La sucesión de los incas es en la
Es muy sabido que el inca Manco
Volumen I -
siguiente manera:
Cápac fue el fundador del imperio Manuscrito I
88
1° Mancocápac I comenzó en el 1021,
y que reinó 52 años habiendo
reino de Quito en la América
reinó 40 años, murió el de 1062.
muerto bien viejo, pues que tenía
Meridional. https://shorturl.at/ajuZ0
2° Sinchi-Roca, su hijo, comenzó en
como nieve sus cabellos cuando
el 1062, reinó 30 años, murió el de
falleció. Su hijo Sinchi Roca más
1091.
de 46 años gobernó, porque casi
Velasco, Juan de. 1789. Historia del
3° Lloque-Yupanqui, su hijo,
comenzó en el 1091, reinó 35 años,
murió el de 1126.
estaba lo mismo que su padre de
encanecido. El hijo de este,
Lloque Yupanqui, mandó 55 años
con ejércitos, y su vejez
4° Maita-Cápac, su hijo, comenzó en
sobrepujaba aun a la de Manco
el 1126, reinó 30 años, murió el de
Cápac, según la tradición de sus
1156.
momias. El hijo de este, Mayta
5° Cápac- Yupanqui, su hijo,
Cápac, de 53, porque era muy
comenzó en 1156, reinó 41 años,
poca la indiferencia que todos
murió el de 1197.
demostraban respecto de sus
6° Inca-Roca, su hijo, comenzó en el
1197, reinó 51 años, murió el de
1249.
[Libro I, Capítulo 1]
edades en las momias
embalsamadas. Cápac Yupanqui,
hijo del antecedente, gobernó 48
años. Inca Roca, 59. Yahuar
7° Yaguar-guárac, su hijo, comenzó
Huaca, 22 años, tres meses,
en el 1249, reinó 40 años, murió e l de
porque fue separado del trono a
1289.
esta fecha por su hijo el príncipe
Este aún viviendo renunció la corona
Viracocha. Este Inca Viracocha,
77 años nueve meses. El Inca
89
en su hijo y, sobreviviendo 7 años en
Urco, que fue hijo mayor de
vida privada, murio en el de 1296.
Viracocha según el Padre Velasco
8° Viracocha, su hijo, comenzó en el
y Herrera, a quien da por época de
1289, reinó 51 años, murió en el
su gobierno el primero once días y
1340.
el segundo meses, por cuya razón
Este Inca tenido por deidad: de él se
dice que predijo la pérdida del
Imperio con la entrada de los
extranjeros blancos y poblados de
barba. Algunos le dan el reinado de
sólo 36 años, pero mal.
no se señala época alguna de su
reinado. A este sucedió su
hermano menor Inca Pachacútec,
que rigió el imperio 57 años. Su
hijo Inca Yupanqui, 60 años.
Túpac Inca Yupanqui, hijo del
anterior, 50 años. Huayna Cápac,
10° Pachacútec, su hermano, comenzó
el grande, hijo y sucesor de
en el 1340, reinó 60 años, murió en el
Túpac, 58. Huáscar gobernó con
1400.
separación del reino de Quito 6
Este se llamaba antes Titu-Manco-
años, 8 meses, y Atahualpa, inca y
Cápac; y en su coronación tomó el
rey quiteño, gobernó a entrambos
nombre de Pachacútec, que significa
reinos después de ser prisionero
el que da nuevo ser al mundo; y es
suyo su hermano Huáscar y hasta
fama que murió de 103 años.
que fue sacrificado por los
11° Yupanqui, su hijo, comenzó en el
1400, reino 39 años, murió en el
españoles, año y cuatro meses.
(Cortegana, 2023, 7 - 8).
1439.
90
12° Tupac-Yupanqui, su hijo,
comenzó en el 1439, reinó 36 años,
murió en el 1475.
Algunos le dan el reinado de sólo 30
años.
13° Huaynacápac, su hijo, comenzó
en el 1475, reino 50 años, murió en el
1525.
Este reinó los primeros 12 años en
sólo el Imperio y los otros 38
juntamente en Quito.
14° Huáscar, su hijo, comenzó en el
1526, reinó 07 años, murió en el
1532.
Este fue depuesto por su hermano
Atahualpa en el mes de abril de 1532,
y muerto al fin del mismo año de edad
de 51.
15° Atahualpa, su hermano, comenzo
en el 1532, reinó un año y 4 meses,
murió en el 1533. (Velasco, 1789, 31
91
– 32).
El triunfo y la palma lleva sobre todos
Aquel mismo Paw citado dice:
Volumen I -
el Señor Paw. Hablando sobre el
conforme son informes los
Manuscrito II
presente punto dice: “Como son los
cuerpos de los americanos, son
Libro II, Capítulo 7
cuerpos de los americanos, son
también imperfectas sus almas.
también imperfectas sus almas. Ellos
Ellos son insensibles al mal,
son insensibles al mal, viviendo y
viviendo y muriendo
muriendo tranquilamente como
tranquilamente como bestias.
bestias… Alguna pasión no tiene el
Alguna pasión no tiene el poder
poder necesario para despertar sus
necesario para despertar sus almas
almas, y alzarlas sobre si mismas.
y alzarlas sobre sí mismas.
Superiores a los animales porque
Superiores a los animales porque
tienen el uso de las manos y la lengua,
tienen el uso de las manos y de la
son realmente inferiores al mínimo
lengua, son realmente inferiores al
entre los europeos. Privados al mismo
mínimo entre los europeos.
tiempo de la inteligencia y de la
Privados al mismo tiempo de la
perfectibilidad, no obedecen sino al
inteligencia y de la
impulso de sus instintos… Son de tal
perfectibilidad, no obedecen sino
suerte privados de memoria que hoy
a los impulsos de su instinto. Son
se acuerdan de lo que hicieron ayer…
de tal suerte privados de memoria
No saben hacer reflexiones ni ordenar
que hoy no se acuerdan de lo que
sus ideas, ni son capaces de
hicieron ayer. No saben hacer
92
mejorarlas, ni aun de pensar; porque
reflexiones ni ordenar sus ideas,
de sus cerebros sólo circulan humores
ni son capaces de mejorarlas, ni
gruesos y viscosos… Su voluntad es,
aun de pensar; porque en sus
insensible a los estímulos del amor…
cerebros solo circulan humores
su cobardía se hizo patente en la
gruesos y viscosos. Su voluntad es
conquista… sus vicios morales eran
insensible a los estímulos del
correspondientes a estos defectos
amor; su cobardía se hizo patente
físicos… La borrachera, la mentira y
en la conquista; sus vicios
la sodomía, eran comunes en las islas,
morales eran correspondientes a
en Méjico, en el Perú y en todo el
estos defectos físicos. La
nuevo continente". (Velasco, 1789,
borrachera, la mentira y la
243).
sodomía eran comunes en las
islas, en México, en el Perú y en
todo el nuevo continente.
(Cortegana, 2023, 34 - 35).
No pretendo por eso, ni tengo qué por
No pretendo ser ni tengo por qué
Volumen I -
qué o para qué hacer apología de los
o para qué hacer apología de los
Manuscrito II
Indianos. La hago de la verdad, de la
razón y de la justicia. No sigo el
indianos. La hago de la verdad, de Libro II, Capítulo 7
la razón y de la justicia. No sigo
sistema de Dor. Pernety, porque yo
el sistema del Doctor Pernety,
conozco mejor que él lo que son
porque yo conozco mejor que él
aquellas naciones. Confieso que
lo que son aquellas naciones.
93
tienen muchos y grandes defectos.
Confieso que tienen defectos; mas
Más sé distinguir quiénes y cuáles son
sé distinguir quiénes y cuáles son
los que los tienen, y de qué causas les
los que le tienen, y de qué causas
provienen. Veo que el hacer la debida
les provienen. Veo que el hacer la
definición, es práctica común de todo
debida distinción, es práctica
escritor que precia de racional,
común de todo escritor que se
aunque sea filósofo libre en el pensar
precia de racional, aunque sea
y franco en decidir. No sé que en estas
filósofo libre en el pensar y franco
propiedades le haga ventaja el Señor
en decidir. No sé qué en estas
Paw al filósofo por antonomasia
propiedades le hagan ventaja el
Raynal. Uno y otro hacen irrisión de
señor Paw al filósofo Raynal. Uno
los libros sagrados de la Religión, de
y otro hace irrisión de los libros
los Santos Padres, de la Silla
sagrados de la religión de los
Apostólica y de los soberanos. Con
Santos Padres de la silla
todo eso, cuando Raynal habla de los
apostólica y de los soberanos. Con
defectos de los americanos, los
todo eso, cuando Raynal habla de
atribuye solamente a las naciones
los defectos de los americanos los
bárbaras, incultas y salvajes; mas no a
atribuye solamente a las naciones
las que él mismo distingue y separa
bárbaras, incultas y salvajes; mas
como cultas, políticas y civiles de los
no a las que él mismo distingue y
Imperios Megicano y Peruano.
separa como cultas, políticas y
Cuando a éstas les atribuye algunos
civiles de los imperios mexicanos
defectos, hace la distinción del tiempo
y peruano. Cuando a estas
antiguo en que no los tenían, y del
atribuye algunos defectos, hace la
94
presente en que los tienen, provenidos
distinción del tiempo antiguo en
del estado que llama de esclavitud y
que no los tenían y del presente en
sumo desprecio; más no de otras
que los tienen, provenidos del
causas disparatadas, ni menos de la
estado que llama de esclavitud y
incapacidad radical de ellos. Oigase
sumo desprecio, más no de otras
primero como habla de las naciones
causas disparatadas, ni menos de
bárbaras e incultas.
la incapacidad radical de ellos.
“Nada, dice, han perfeccionado más
Sígase primero como habla de las
que los animale, en los cuales se
naciones bárbaras e incultas.
admira alguna mayor industria; no
«Nada», dice, «han perfeccionado
muestran tener otras ideas que las
más que los animales, en los
relativas a las cosas más necesarias,
cuales se admiran alguna mayor
de tal suerte que la suma idea de toda
industria; ni muestran tener otras
una nación salvaje, jamás excede a la
ideas que las relativas a las cosas
suma idea de cualquier individuo”.
más necesarias, de tal suerte que
Hablando de las naciones cultas del
la suma idea de toda una nación
Perú, en tiempo de los Incas, parece
salvaje, jamás excede a la de
que todavía excede a los escritos
cualquier otro individuo».
españoles en el entusiasmo que les
Hablando de las naciones cultas
notan, para celebrarlos y aplaudirlos
del Perú en tiempo de los incas,
por las leyes, político gobierno, arte,
parece que todavía // [f. 174]
ciencias y costumbres. Hablando de
excede a los escritores españoles
esos mismos, según se hallan al
en el entusiasmo que les notan,
95
presente, muy al contrario, dice: “Los
para celebrarlos y aplaudirlos por
peruanos modernos son el ejemplo de
las leyes, político gobierno, artes,
aquella profunda estupidez, a que la
ciencias y costumbres.
tiranía puede reducir la humana
Hablando de esos mismos, según
especie. Son por eso del todo
se hallan al presente, muy al
insensible a las riquezas, a los honores
contrario dice: «Los peruanos
y aun al temor. No tengo hambre, es
modernos son el ejemplo de
la respuesta, a quien quiere pagar
aquella profunda estupidez, a que
porque trabajen. Son todos, sin
la tiranía puede reducir la humana
diferencia, Cacique o mitayos, esto es,
especie. Son por eso del todo
cabezas o forzados, el objeto de la
insensibles a las riquezas, a los
derisión del público”.
honores y aun al temor. “No tengo
Este modo de diferenciar naciones,
hambre”, es la respuesta a quien
tiempos y circunstancias, se propone
quiere pagar porque trabajen. Son
también el Dor. Robertson. Examina
todos sin diferencias caciques o
largamente por espacio de 52 fojas el
mitayos, esto es cabezas o
moral carácter de las naciones incultas
forzados, el objeto de la decisión
y salvajes, tarde otras 9 tojas e
del público».
señalarlo. Protesta que en esto no
Este modo de diferenciar
mete a las naciones civiles de Méjico
naciones, tiempos y circunstancias
y Perú; y para que nadie le acuse en lo
se propone también el doctor
que dice de los salvajes, cita
Robertson. Examina largamente
escrupulosamente en su abono los
por espacio de cincuenta y dos
96
escritores modernos de más fama,
fojas el moral carácter de las
quienes han hecho esa misma
naciones incultas y salvajes, y
distinción, para confundir
tarda otras nueve fojas en
injustamente a todos los habitadores
señalarlo. Protesta que en esto no
del Nuevo Mundo, según costumbre
mete a las naciones civiles de
del Señor Paw. Pone literalmente el
México y el Perú, y para que
testimonio de los viajeros académicos
nadie lo acuse en lo que dice de
españoles y franceses, don Antonio
los salvajes, cita
Ullo, don Jorge Juan, Señor Bogner y
escrupulosamente en su abono los
Señor La Condamine. (Velasco, 1789,
escritores modernos de más fama,
243 - 245).
quienes han hecho esa misma
distinción, para no confundir
injustamente a todos los
habitantes del Nuevo Mundo
según costumbre de Paw. Pone
literalmente el testimonio de los
viajeros académicos españoles y
franceses don Antonio Ulloa, don
Jorge Juan, Señor Bouguer y
señor La Condamine. (Cortegana,
2023, 35 - 37).
97
Robertson, William. 1777. History of
Un joven cacique, testigo de la
[...] presenció que un joven
America.
escena, admirado de ver apreciar tanto
cacique, testigo de ver disputarse,
https://shorturl.at/hB147
una cosa cuya utilidad no conocía,
y apreciar tanto entre españoles a
arrojó con indignación el oro que
un metal cuya utilidad
estaba en unas balanzas, y
desconocían, el que les dijera
volviéndose a los españoles, les dijo:
lleno de arrojo y de indignación:
“¿Por qué disputais sobre una cosa de
«¿Por qué disputáis sobre una
tan poco valor? ¿Si el amor del oro es
cosa de tan poco costo? Si el
quien os ha obligado a abandonar
deseo del oro es quien os ha
vuestro pais para venir a turbar la
obligado a abandonar vuestro país
tranquilidad de pueblos tan remotos,
para venir a turbar la tranquilidad
yo os conducire a uno en donde este
de pueblos tan remotos, yo os
metal, que parece ser el grande objeto
conduciré a uno, en donde este
de vuestra admiracion y de vuestros
metal que parece ser el grande
deseos, es tan comun, que ha servido
objeto de vuestra admiración y
para fabricar aun los utensilios mas
vuestros anhelos, es tan común
despreciables”. Arrebatados de gozo,
que ha servido para fabricar aun
Balboa y sus compañeros preguntaron
los utensilios más domésticos de
con empeño cual era esta feliz region,
las casas de sus moradores».
y como podrian llegar a ella; y el
Semejante nueva arrebató de gozo
cacique les contestó que a la distancia
a Balboa y sus compañeros,
de seis soles, esto es, de seis dias de
quienes le preguntaron con gran
camino hacia el sur, descubriran otro
empeño que cuál era esta feliz
Volumen I Manuscrito III
98
Oceano cerca del cual estaba situada
región donde se encontraban esas
esta rica comarca; perro que si se
inmensas riquezas, y cómo es que
proponian atacar este poderoso reino,
podrían llegar a ella para
no podrian verificarlo sino reuniendo
poseerlas; y el cacique les
fuerzas muy superiores a las que
satisfizo entonces diciéndoles:
entonces tenian.
«que a la distancia de seis soles,
Esta fué la primera indicacion que
esto es de seis días de camino
tuvieron los españoles del grande
hacia el sur, descubrirían otro
Océano meridional, y del rico y vsto
océano, cuyas aguas surcándolas
pais conocido en seguida con el
en la misma dirección, por el
nombre de Perú. (Robertson, 1777,
tiempo de algunos soles y noches
213 – 214)
en navegación, arribarían en las
costas de tan rica comarca
gobernada por el más poderoso de
los reyes, titulado inca hijo del
Sol, del mismo que jamás, en el
estado de debilidad en que se
encontraban los castellanos, no
podrían apropiarse si pretendían
atacarle con tan poco número
como eran ellos a tan
poderosísimo reino». Así que les
advertía, que antes de intentarlo
no lo verificasen, sin primero
99
reunir para la empresa fuerzas
superiores a las que por entonces
tenían de qué disponer. He aquí la
primera noticia que tuvieron los
españoles del grande océano
meridional, y del rico y vasto país
llamado la tierra del Sol, que ha
sido conocido enseguida con el
nombre de Perú en todo el mundo.
De esta indicación nació el
proyecto de Balboa para descubrir
al referido mar meridional,
agitado más de curiosidad y
admiración que aún de creer su
evidencia por el solo aviso del
cacique; porque lleno de dudas
vacilaba // [f. 7] entre la verdad de
este o entre persuadirse que fuera
una fábula inventada por solo
lograr cortar los disgustos que
entre españoles se habían
concitado por la codicia del
100
reparto del oro. (Cortegana, 2023,
53 - 54).
Balboa tuvo entonces a su vista
Mas Balboa, que siempre le
objetos dignos de su ilimitada
era característico el emprender
ambicion y de la osada actividad de su
descubrimientos difíciles, junto
genio: infirió ambicion y de la osada
que con el ardiente deseo de
actividad de su genio: inifirió
hacerse célebre con algún suceso
inmediatamente que el Oceanó de que
glorioso que le atrajeran sobre su
hablaba el cacique, era el propio que
persona fama y poder, se llenó de
Colon habia buscado en esta misma
decisión a ejecutarle. Aquí fue
parde de América, con la esperanza de
donde tuvo a su vista Balboa
abrir por él una comuncacion mas
como hombre de genio, y como
directa con las Indias orientales; y
de un valor a toda prueba todos
conjenturó que el rico pais cuya
los objetos dignos de su ilimitada
descripcion le hacian, debia ser una
ambición, y de la osada actividad
parte de esta grande y opulenta region
a que estaba acostumbrado según
de la tierra. Lisonjeando con la idea
sus intereses personales, al paso
de ejecutar lo que un hombre de tanto
que, bien sobrecogido de estas
mérito habia intentado en vano, y
ideas lisonjeras que alucinaban a
solícito por efectuar un
su fantástica nombradía, se
descubrimiento que debia ser tan
resolvió a realizar el
agradable al rey como útil a la nacion,
descubrimiento, infiriendo que el
Volumen I Manuscrito III
101
espero con independencia el momento
océano de que se había hablado,
de partir para esta expedición, en
era el propio que Colón había
cotejo de la cual sus anteriores
buscado en esta misma parte de la
hazañas le parecian cosas de poca
América y que no le habían
importancia. Pero era necesario tomar
podido hallar, con la esperanza de
algunas medidas, y hacer los
abrir por él una comunicación
preparativos indispensables para
más directa con las Indias
asegurarse del resultado; y para ello
Orientales. Y conjeturó asimismo
comenzó por buscar y obtener la
que el seco país cuya descripción
amistad de los caciques vecinos.
había tomado, debía ser sin duda
Despachó tambien algunos de sus
cuando menos una parte de tan
oficiales a la Española con una grande
grande y opulenta región de tierra,
cantidad de oro, que era prueba de los
que la fama y la casualidad de
buenos sucesos que habia tenido, y
haberla encontrado otros antiguos
anuncio de los que esperaba tener.
descubridores, la habían hecho
Los regalos que hizo, distribuidos
resonar por todo el orbe
oportunamente, le merecieron la
descubierto. Así pues Balboa,
protección del gobernador, y atrajeron
reputándose venturoso, o por
una multitud de voluntarios a su
mejor decir lisonjeado con la
servicio: de modo que luego que
concepción de llevar al cabo lo
recibio el considerado refuerzo que
que un hombre de tantos
esperaba de esta isla, se creyó en
conocimientos náuticos y de un
estado de emprender su expedición.
mérito sobresaliente no lo había
podido conseguir, haciéndose
102
(Robertson, 1777, 211 – 212)
todos sus intentos vanos, y desde
luego solícito por efectuar ya un
descubrimiento que debía ser tan
agradable a su rey como de mucha
utilidad a su nación, esperó con
impaciencia el momento de
partirse, convencido de que si
lograba el feliz éxito de esta
expedición, no era en nada
cotejable a sus anteriores hazañas,
pues todas le parecían
insignificantes cosas, o de
ninguna importancia a la grandeza
de esta última, que iba con tanto
empeño y entusiasmo a plantear.
Hecha así la resolución, era
necesario tomar algunas medidas
y hacer los preparativos
indispensables para asegurarse del
resultado, y para ello comenzó por
buscar y obtener la amistad de los
caciques vecinos. Despachó
también a algunos de sus oficiales
a la isla La Española con una gran
103
cantidad de oro, que era prueba de
los buenos sucesos que había
tenido y anuncio de los que
esperaba tener. Los obsequios que
hizo, distribuidos oportunamente,
le merecieron el favor del
gobernador y atrajeron una
multitud de voluntarios a su
servicio, de modo que luego que
recibió el considerable refuerzo
que esperaba de esta isla, se creyó
en estado de emprender su marcha
a descubrir el océano que se le
había noticiado. (Cortegana, 2023,
54 - 55).
El istmo de Darien no tiene mas que
Este descubrimiento
sesenta millas de ancho; pero esta
consistía en vencer el terreno que
lengua de tierra que une el continente
distaba desde Santa María hasta el
meridional de la América con el
istmo de Darién, el que no tiene
septentrional está fortificada por una
más que sesenta millas de ancho,
cadena de altas montañas que se
cuya lengua de tierra que une el
extienden en todo su largo, y forman
continente meridional de la
Volumen I Manuscrito III
104
una barrera bastante sólida para
América con el septentrional, está
resistir al impulso de los dos mares
fortificada por una cadena de altas
opuestos. Las montañas estan
montañas, que se extienden en
cubiertas de bosques impenetrables; y
todo su largo, y forman una
en este clima húmedo, en donde
barrera // [f. 8] bastante sólida
llueve dos terceras partes del año, los
para resistir al impulso de
valles son tan pantanosos y estan
entrambos mares, opuestos como
inundados tan frecuentemente, que los
dignos de la mayor
habitantes en muchos puntos
contemplación. Todas las
necesitan construir sus casas sobre los
montañas de este istmo están
árboles, a fin de estar un poco
cubiertas de bosques
elevados de un terreno húmedo, y á
impenetrables, siendo su clima
cubierto de los réptiles que se
húmedo y en donde llueve dos
engendran en las aguas corrompidas.
terceras partes del año. Sus valles
Esta region, cortada por caudalosos
son tan pantanosos y están
rios que se precipitan con
inundados tan continuamente, que
impetuosidad de las mimsa montañas,
los habitantes en muchos puntos
solo estaba poblada de salvajes
necesitan construir sus casas entre
errantes y en corto número, y la mano
árboles a fin de estar un poco
de salvajes errantes y en corto
elevados de un terreno húmedo, y
número, y la mano de la industria
a cubierto de los reptiles que se
nada habia hecho en ella para corregir
engendran en las aguas
ó suavizar estos incenvenientes
corrompidas. Esta parte de terreno
naturales. En tal estado de cosas, el
tan angosto, está cortado por
105
intento de atravesar un pais
caudalosos ríos que se precipitan
desconocido, sin tener otras guias que
con impetuosidad de las mismas
indios sobre cuya fidelidad no se
montañas al mar; sus riberas solo
podia contar mucho, era la empresa
estaban pobladas de indios
mas arriesgada que hubiesen formado
salvajes, errantes, y en corto
aun los españoles en el Nuevo
número, y la mano de la industria
Mundo; pero la intrepidez de Balboa
nada había hecho en ella para
era tan extraordinaria que le
corregir o suavizar estos
distinguian de todos sus compatriotas
inconvenientes naturales. En tal
en un tiempo en que el último de los
estado de cosas, Balboa intentó
aventureros se hacia notar por su
atravesar semejante país
audacia y por su valor. Este gefe unia
desconocido, sin tener otros
a la valentia la prudencia, la
itinerarios que indios sobre cuya
generosidad, la afabilidad, y estos
fidelidad no se podía fiar mucho
talentos populares que en las
para un discreto resultado. Debe
empresas mas temerarias inspiran la
considerarse esta empresa como la
confianza y fortifica la adhesion. Sin
más arriesgada que llegaron a
embargo, despues de la reunion de los
formar los españoles en el Nuevo
voluntarios de la Española, solo pudo
Mundo, pero la intrepidez de
juntar ciento y noventa hombres para
Balboa era tan extraordinaria que
su expedición; pero todos eran
le distinguía de todos sus
veteranos robustos, acostumbrados al
compatriotas, en un tiempo en que
clima de la America, y prontos a
el último de los aventureros se
seguirle en los mayores peligros. Se
hacía notar por su audacia y por
106
hicieron acompañar de mil indios que
su valor. Este español unía a la
llevaban sus provisiones, y para
valentía la prudencia, a la
completar el armamento militar,
generosidad la afabilidad, al paso
llevaron muchos de estos perros
que tenía también cierta
feroces tan formidables a unos
popularidad para conseguir el
enemigos enteramente desnudos.
éxito de las empresas más
(Robertson, 1777, 214 – 215)
arriesgadas en que de frecuencia
se lanzaba, presentando el
carácter de temerarias, pero que
sus talentos naturales junto que su
decisión por salir avante en ellas,
con su total adhesión de la mejor
buena fe para su persona y
servicio. Conseguido esto de su
parte, y teniendo ya reunidos los
voluntarios que le habían llegado
de La Española, solo pudo juntar
190 hombres útiles para su
expedición, pues eran todos
veteranos, robustos,
acostumbrados al clima de
América, y a la clase de
conquistas que en ella se hacían
entonces, superando como su
107
caudillo, aun los mayores peligros
y necesidades. Alistados de tal
manera para la marcha, se
hicieron servir de mil indios que
llevaban sus provisiones, y para
completar el armamento militar,
llevaron consigo muchos de esos
perros feroces, de que siempre los
castellanos se hallaban, y eran tan
formidables para con unos
enemigos enteramente desnudos,
como lo estaban los indios de
aquellos enmarañados bosques.
(Cortegana, 2023, 55 - 56).
De Herrera y Tordesillas, Antonio.
Finalmente llegaron a la cumbre de
Después de haber trepado
Historia general de los hechos de los
las más altas tierras, a veinte y cinco
con mucha fatiga la mayor parte
castellanos en las Islas y Tierra Firme
de septiembre de este año, de donde el
de esta escarpada montaña,
del mar Océano que llaman Indias
mar parecía. Y un poco antes que
Balboa mandó a hacer alto a su
Occidentales (1601)
Basco Nuñez al la cumbre llegase, le
tropa y se adelantó solo hasta la
http://hdl.handle.net/20.500.11938/71235
avisaron los indios de Quarequa,
cumbre, para gozar antes que
como estaba ya muy cerca: mandó
nadie de un espectáculo apetecido
que todos allí hiciesen alto. Subió
por tanto tiempo. Luego de que
Volumen I Manuscrito III
108
solo, y vista la mar del Sur, se hincó
divisó el mar que se extendía
de rodillas, y alzadas las manos al
delante de él en un horizonte sin
cielo, dio grandes alabanzas a Dios,
límites, se arrodilló, y levantando
por la merced tan grande que le había
las manos al cielo, dio gracias a
hecho, en que fuese el primero que la
Dios por haberle conducido a
descubriese y viese.
descubrimiento tan ventajoso para
Hecha esta devota demostración,
su país y tan glorioso para él. Sus
llamo a toda la gente, y volviendo otra
compañeros, observando sus
vez a hincarse de rodillas, repitiendo
transportes, se adelantaron hacia
las gracias a Dios, de aquel beneficio:
él para participar de su
lo mismo hicieron todos, estando
admiración, de su reconocimiento,
como atónitos los Indios, viendo el
y de su gozo. Se apresuraron en
regocijo y alegría de los castellanos.
seguida a ganar la playa, y
[...] Tomó luego por testimonio, cómo
Balboa, metiéndose en las aguas
en nombre de los Reyes de Castilla y
del mar con su escudo y su
de León, tomaba posesión de aquella
espada, tomó posesión de este
mar, y de todo lo que en ella había, y
océano en nombre del rey de
en señal de posesión corto arboles,
España; y juró defenderlo con las
puso cruces , llegó piedras y
armas que tenía contra todos los
amontonó muchas de ellas, y en
enemigos de su soberano.
árboles grandes con un cuchillo
(Cortegana, 2023, 56 - 57).
escribió los nombres de los reyes de
Castilla. (De Herrera y Tordesillas,
109
1601, 332 – 333).
Todos los Castellanos, y indis estaban
Así pues, esta parte del gran mar
Volumen I -
muy regocijados, los unos porque
Pacífico, o mar del Sur que
Manuscrito III
juzgaban que había de ser todo
descubrió Balboa en el principio y
aquello para su buena dicha: los
que está situado al este de
indios, y en particular los Caciques,
Panamá, conserva aún el nombre
por el amistad de los cristianos,
que él mismo le dio de golfo de
creyendo que estimaban en mucho el
San Miguel. Obligó con las armas
oro, y las perlas que les daban, que
a muchos de los régulos que
ellos tenían en poco, y mayormente se
gobernaban los distritos vecinos
holgaba Chiapes, por haber sido
de este golfo, a que le diesen
instrumento del amistad de Tumaco.
víveres y oro, y otros se lo
Certeficaron estos dos Caciques a
enviaron voluntariamente.
Basco Nuñez, que estaba una isla
Algunos caciques añadieron a
distante de alli obra de cinco leguas,
estos dones preciosos una
según por señas daban a entender,
cantidad considerable de perlas, y
dentro en aquel golfo, que señoreaba
supo de ellas con mucha
un Cacique poderoso, adonde había
satisfacción que las conchas que
multitud de grandes ostias, en las
las producían abundaban en el
cuales se criaban perlas tan grandes
mar que acababa de descubrir.
como habas. No quiso Basco Nuñez
Esta fuente de riquezas que halló
perder tiempo, mandó luego aparejar
Balboa le contribuyó mucho a
110
las canoas para pasar a ella.
animar a sus compañeros, y tanto
Rogavante los dos caciques, que en tal
más fue esto, cuanto que recibió
tiempo no se pusiste en aquel peligro,
al mismo tiempo noticias que le
que lo dejase para el verano cuando la
confirmaban en la esperanza // [f.
mar estaba en sosiego, y que entonces
10] de sacar ventajas aún más
podría ir a su placer, y alcanzar
considerables de su expedición.
cumplimiento de su deseo, y que para
Todos los indios de las costas del
entonces, con su gente, ellos le
mar del Sur le aseguraron de
acompañarán. Temió Basco Nuñez no
acuerdo que a una distancia
le aconteciese como la otra vez en la
bastante considerable hacia el este
isleta, y tuvo por bueno el consejo de
había un rico y poderoso reino,
sus amigos. Aquel cacique Tumaco
cuyos habitantes tenían animales
dio nuevas a Basco Nuñez, como toda
domésticos para llevar cargas. Y
aquella costa adelante con la
deseando hacerle formar idea de
larguisimamente, señalando hacia el
ellos, trazaron sobre la arena la
Piru, y que en ella había gran cantidad
figura de las llamas o guanacos
de oro, y que vivían los naturales,
que después se encontraron en el
ciertos animales a donde ponían sus
Perú, y a cuáles animales
cargas, que eran las ovejas de aquellas
cuadrúpedos habían docilitado de
provincias, y de tierra hizo una figura
tal modo los peruanos que se
para que mejor se entendiese. (De
servían de ellos como de
Herrera y Tordesillas, 1601, 336 –
acémilas. Como la llama tuviese
337).
cierto aparecimiento en su forma
al camello, bestia considerada
111
como particular al Asia, cual
circunstancia junta que al
descubrimiento de las perlas,
también producción asiática,
hicieron ambas cosas contribuir
mucho a la imaginación de los
españoles, a que se afirmasen en
la falsa idea que se habían
formado de que el Nuevo Mundo
estaba próximo a las Indias
Orientales, cuando más lejos se
hallaba de ellas. (Cortegana,
2023, 57).
Marmontel, Jean François. 1837. Los
Aunque este odio implacable de los
La pérdida por otra parte de las
Volumen I -
incas ó La destrucción del imperio del
naturales hacia tan difícil como
naves de estos, por accidentes
Manuscrito III
Perú. Barcelona, Calle Escudellers, n.o
peligrosa la formación de un
imprevistos sobre unas costas
25. Imprenta de Juan Oliveares.
establecimiento en su pais, la
desconocidas, y las enfermedades
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perseverancia de los españoles, la
del clima más insalubre de toda la
superioridad de sus armas y su
América, los obligaron a esto
habilidad en el arte de la guerra
decididamente. Así que pues,
hubieran podido con el tiempo vencer
escasos de las provisiones
este obstáculo; mas todos los
convenientes para sus
112
desastres imaginables se amontonaron
subsistencias, a causa de estar el
sobre ellos, y pareció que se
país que pisaban mal cultivado, y
combinaban para completar su ruina.
además de las disensiones que se
La pérdida de sus naves, que diversos
suscitaron entre ellos mismos, y
accidentes hicieron perecer sobre una
las hostilidades continuas de los
cosa desconocida; las enfermedades
habitantes que los envolvieron en
propias del clima mas insalubres de
una sucesión de calamidades,
toda la América; el defecto de
cuya simple relación si la
subsistencias, inevitable en un pais
hiciéramos, haría temblar de
mal cultivado; las disensiones que se
horror a cualquiera que aún se
suscitaron entre ellos, y las
jactara de ser insensible a los
hostilidades contínuas de los
desastres de una humanidad
habitantes, los envolvieron en una
insufrible y codiciosa, porque aún
sucesion de calamidades cuya simple
estos caudillos en las posesiones
relacion hace temblar de horror.
en que se hallaban coloreados,
Aunque recibieron de la Española dos
habían recibido de la isla La
refuerzos considerables, la mayor
Española dos refuerzos
parte de los que se comprometieron
considerables, pero la mayor parte
en esta desgraciada expedicion
de estos habían perecido antes de
perecieron antes de un año en la mas
un año en la más espantosa
espantosa miseria; y el corto número
miseria, y el corto número que
de los restantes formó una pequeña y
pudo sobrevivirlos, llegó al fin a
débil colonia en Santa María la
formar una pequeña y débil
Antigua, sobre el golfo de Darien,
colonia en Santa María la
113
bajo las órdenes de Vasco Nuñez de
Antigua, sobre el golfo de Darién,
Balboa. (Marmontel, 1837, 203 –
bajo el comando de Vasco Núñez
204).
de Balboa. (Cortegana, 2023, 52).
A pesar de los recientes
A pesar de los recientes
servicios de Balboa, que le
servicios de Balboa, que le
designaban como el hombre a
designaban como el hombre más a
propósito para llevar el cabo la
propósito para llevar a cabo la
gloriosa empresa que había
gloriosa empresa que había
comenzado, Fernando fué tan ingrato
comenzado, Fernando fue tan
que en nada los estimo, y nombró a
ingrato que en nada los estimó y
Pedrarias Davila gobernador del
nombró a Pedrarias Dávila,
Darién, confiando al mismo tiempo el
gobernador del Darién,
mando de quince naves de gran porte,
confiándole al mismo tiempo el
con mil y doscientos soldados. Estas
mando de quince naves de gran
naves se equiparon a expensas del
porte con mil y doscientos
público con una magnificencia que
soldados. Estas naves se
Fernando nunca había manifestado en
equiparon a expensas del público,
los armamentos destinados al Nuevo
con una magnificencia que
Mundo, y los hidalgos españoles se
Fernando nunca había
dieron tal priesa a seguir al jefe que
manifestado en los armamentos
debía guiarlos en un país en que,
destinados al Nuevo Mundo, y los
según la fama, no tenían más que
hidalgos españoles se dieron tal
Volumen I Manuscrito III
114
echar las redes en el mar para sacar
prisa seguir al jefe que debía
oro, que mil y quinientos de entre
guiarlos en un país en que, según
ellos se embarcaron en la flota, y un
la fama, no tenían más que echar
mayor número se hubiera alistado
las redes en el mar para sacar oro,
para esta expedición, si se hubiese
que mil y quinientos de entre ellos
querido recibirlos. (Marmontel, 1837,
se embarcaron en la flota, y un
217 – 218).
mayor número se hubieran
alistado para esta expedición si se
hubiese querido recibirlos, pero
los recursos de subsistencia
faltaban para ello. (Cortegana,
2023, 58 – 59).
Sin embargo que Pedrarias
Así que pues, no obstante
debiese a esta moderación la posesión
que Pedrarias debiese a esta
pacífica de su gobierno, nombró una
moderación el poseimiento [sic]
comisión para hacker informaciones
pacífico de su gobierno, nombró
jurídicas sobre la conducta que
una comisión para hacer
Balboa había observado mientras
informaciones jurídicas sobre la
estuvo a las órdenes de Nicuesa y de
conducta que Balboa había
Enciso, y le impuso una multa
observado mientras estuvo a las
considerable en reparación de las
órdenes de Nicuesa y de Enciso, y
faltas de que sus jueces le hallaron
le impuso una multa considerable
Volumen I Manuscrito III
115
culpable. Balboa sintió vivamente
en reparación de las faltas de que
verse sometido a un proceso y
sus jueces le hallaron culpable.
castigando en el mismo lugar en que
Balboa sintió vivamente verse
acababa de ocupar el primer puesto:
sometido a un proceso y castigado
por otra parte, Pedrarias no podía
en el mismo lugar en que acababa
ocultar la envidia que excitaba en el la
de ocupar el primer puesto. Por
superioridad del mérito de Balboa, de
otra parte, Pedrarias no podía
manera que el resentimiento del uno y
ocultar la envidia que excitaba en
los zelos de otro fueron un manantial
él la superioridad // [f. 12] del
de divisiones muy perniciosas para la
mérito de Balboa, de manera que
colonia; pero esta se veía amenazada
el resentimiento del uno y los
de una calamidad aún más triste.
celos del otro fueron un manantial
Pedrarias desembarcó en el Darién en
de divisiones muy perniciosas
la estación menos favorable del año,
para la colonia, pero esta se vio de
esto es, a mediados de la temporada
pronto amenazada de una
de las lluvias, en una parte de la zona
calamidad aún más triste.
tórrida en que las nubes arrojan
Pedrarias desembarcó en el
torrentes de agua de un modo
Darién en la estación menos
desconocido en los climas más
favorable del año, esto es, a
templados. (Marmontel, 1837, 219).
mediados de la temporada de las
lluvias, en una parte de la zona
tórrida, en que las nubes arrojan
torrentes de agua, de un modo
116
desconocido en los climas más
templados. (Cortegana, 2023, 59).
Inca Garcilaso de la Vega. 1967 [1617].
Hernando Pizarro y sus dos hermanos,
Pero no bien oyeron la grita
Historia general del Perú. Lima:
y los doscientos compañeros que allí
atolondrante de la gente del inca,
Editorial Universo S.A.
estaban, viendo que eran pocos,
cuando al instante se armaron y
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siempre se alojaban juntos, y, como
enfrenando a treinta de sus
hombres de guerra y buenos soldados,
caballos —que cada noche
no dormían; antes, como gente
dejaban este número ensillados
recatada, tenían centinelas puestas al
para salir al momento sobre ellos
derredor de su alojamiento y atalayas
a contener cualquier desorden o
en lo alto de la casa. Luego que
tumulto que apareciese en la
sintieron el ruido de los indios, se
ciudad— los monteros y se
armaron y enfrenaron sus caballos,
dirigieron con presteza de los
que cada noche tenían treinta de ellos
primeros a reconocer a sus
ensillados para estar apercibidos
innumerables adversarios. La
cuando se ofreciese algún rebato, y así
multitud que de estos vieron a luz
salieron los primeros a reconocer los
de los primeros incendios y el
enemigos. Más viendo la multitud de
ningún conocimiento que tenían
ellos, no sabiendo qué armas traían
de la clase de armas que traían
para ofender los caballos (que era lo
para ofender a sus caballos,
que los indios más temían), acordaron
acordaron para evitar todo mal
recogerse todos a la plaza, que, por
suceso a los animales, a quienes
Volumen I Manuscrito IV
Libro II, Capítulo 5
117
ser tan grande, eran más señores de
temían más los indios, el
los enemigos en ella que en las calles.
posesionar de todos de la plaza, la
Así lo hicieron y estuvieron puestos
que por ser bien plana y extensa
en escuadrón. Los infantes, que eran
podían ser en ella más [ilegible]
ciento y veinte, estaban en medio, y
con el furor de estos, al paso que
ochenta, que eran los de a caballo, se
estarían también libres de ser
pusieron de veinte en veinte a los
ofendidos, a mansalva de los
lados y a la frente y espaldas del
mismos si incautos o divididos
escuadrón, para que pudiesen resistir
anduvieran por las calles. Así lo
a los indios por donde quiera que
hicieron, replegándose a la
acometiesen. Los cuales, viendo los
expresada plaza tanto los que
españoles juntos, arremetieron a ellos
habían salido al reconocimiento,
por todas partes con gran ferocidad,
como los que se quedaron
pensando llevárselos del primer
alistándose en el cuartel. Luego
encuentro. Los caballeros salieron a
que estuvieron en la plaza se
ellos y les resistieron valerosamente.
formaron en un cuadro sólido. Los
Así pelearon unos y otros con gran
infantes, que eran ciento veinte
porfía, hasta que amaneció. [Libro II:
(120), ocuparon el centro y los
Capítulo XXIV: El levantamiento del
ochenta hombres de caballería
Príncipe Manco Inca; dos milagros en
(80), divididos de veinte en veinte
favor de los cristianos,
jinetes, cubrieron los cuatro
(Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p.
frentes para resistir así al empuje
172]
de los indios por cualquiera parte
118
que lo hiciesen. (Cortegana, 2023,
166).
Con el día reforzaron los indios
Estos inocentes campeones
la batalla. Sobre los españoles llovían
hacían en vano llover sobre los
flechas y piedras tiradas con hondas
españoles nubes de flechas y
que era admiración, más con los
piedras, pero ellas no penetraban
caballos y las lanzas se vengaban de
sus armaduras de hierro, y por
ellos, que ninguna arremetida hacían
tanto este infructuoso denuedo era
que por lo menos no dejasen muertos
siempre vengado con usura por
ciento y cincuenta y doscientos
los caballos y las lanzas de los
indios; porque no tenían armas
castellanos, pues cada arremetida
defensivas, ni usaron de las picas
que les daban estos a más de
(aunque las tuvieron) contra los
tumbarlos al suelo a pechadas, los
caballos, porque no habían tratado
privaban y atropellándolos en su
con caballeros, sino que sus guerras y
fuga, dejaban doscientos o
batallas eran pie a pie unos con otros,
trescientos indios muertos, y esta
y desarmados con desarmados. Más la
era la razón por qué ellos tenían
pujanza de la mucha gente que tenían
más miedo a los caballos que aun
les hacía sufrir las ventajas que los
a los infantes que les dirigían sus
españoles en armas y caballos les
rayos destructores.
hacían, con tanta mortandad de los
indios; pero ellos lo llevaban todos
Volumen I Manuscrito IV
Libro II, Capítulo 5
Fueron tan inocentes los
peruanos en esta guerra, que no
119
con la esperanza que tenían de
hicieron uso de las picas que
degollarlos presto. [Libro II: Capítulo
tenían contra los caballos solo
XXIV: El levantamiento del Príncipe
porque jamás habían peleado con
Manco Inca; dos milagros en favor de
esta clase de animales, y como
los cristianos.]
todas sus batallas que habían dado
(Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p.
y aun la que se hallaban
173]
ejecutando era tan solamente a
pie, unos contra otros en el mismo
estado y naturalmente
desarmados, porque no tenían las
que contra ellos empleaban con
tanta destrucción los españoles.
(Cortegana, 2023, 167 - 168).
Habiendo apartado los indios de
Y así es que por más que se
sí, les pareció a los españoles
esforzaran los españoles en
acometer la fortaleza, porque allí era
mostrarse sobre la fortaleza, no lo
el mayor concurso de los enemigos, y,
pudieron hacer en seis días que
mientras no les ganaban aquella plaza,
duró el ataque, menos abrirle
les parecía no haber hecho nada. Con
brecha alguna ni asaltarle porque
este acuerdo subieron a ella, dejando
los vasallos del rey hacían llover
presidio en su alojamiento. Los indios
sobre ellos nubes interminables de
se defendieron valientemente, que en
piedras, flechas y palos que no los
Volumen I Manuscrito IV
Libro II, Capítulo 5
120
seis días no pudieron sujetarlos. Una
dejaban operar tan libremente. Y
noche de aquellas, habiendo peleado
para mayor frustración de sus
todo el día los unos y los otros con
designios, acaeció la última noche
mucho valor, se retiraron a sus
de los días citados, la desgracia de
puestos donde Juan Pizarro, hermano
Juan Pizarro. Este valeroso
del Marqués Don Francisco Pizarro,
castellano, hermano de los demás
que de días atrás andaba herido y
Pizarro, estando de noche en su
podía sufrir mal la celada que traía, se
puesto de descanso después de
la quitó antes de tiempo, que luego
haber combatido todo el día, se
que se la quitó llegó una piedra tirada
quitó de la cabeza la celada que le
con honda, y le dio una mala herida
cubría porque le era insufrible, en
en la cabeza, de que murió dentro de
razón de que le comprimía a sus
tres días; la cual muerte (como lo dice
heridas anteriores, causándole
Agustín de Zárate por estas mismas
mucho dolor // [f. 311] por estar
palabras), «fue gran pérdida en toda la
recientemente cicatrizadas, y
tierra, porque era Juan Pizarro muy
cuando así estaba descubierto, una
valiente y experimentado en las
piedra arrojada con honda le dio
guerras de los indios, y bien quisto y
en la cabeza con tanta fuerza que
amado de todos». [Libro II: Capítulo
se la partió dejándolo como
XXVI: Ganan los españoles la
muerto. Y aunque al instante los
fortaleza con muerte del buen Juan
cuidados y auxilios de sus
Pizarro.]
hermanos y compañeros fueron
activos en recoger su persona y
curar su herida, esto no le pudo
121
(Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p.
salvar del fin que le venía a prisa
182]
encima, sino tan solamente para
hacerle durar tres días con vida,
pero que al fin falleció vencido
este periodo, y con cuyo fatal
suceso desistieron los españoles
de la toma de la fortaleza,
retirándose a su primera posición
en la misma noche, y sin que los
indios lo percibieran. (Cortegana,
2023, 182 - 183).
Inca Garcilaso de la Vega. 1967 [1617].
Gonzalo Pizarra no quiso
Gonzalo Pizarro no quiso
Volumen II -
Historia general del Perú. Lima: Editorial
determinarse en el hecho de llamarse
determinarse en el hecho de
Manuscrito V,
Universo S.A. https://shorturl.at/HKP06
Rey, porque el respeto natural que a
titularse rey del Perú, en razón del
Capítulo 2
su Príncipe tenía pudo en él más que
respeto natural que le tenía a su
la persuasión de sus amigos; y
príncipe. Pudo en él más esto que
también porque nunca perdió la
todas las persuasiones de sus
esperanza de que la Majestad Imperial
amigos. Es cierto que él nunca
le haría merced de confirmarle la
perdió las esperanzas de que su
Gobernación del Perú, por haberlo
monarca le hiciera la merced de
ganado con sus hermanos y por sus
confirmarle el gobierno del Perú,
particulares servicios, y porque
cargo que estaba desempeñando
122
conocía los que habían servido a Su
durante las discusiones con el
Majestad en la conquista de aquel
agreste virrey Núñez de Vela.
Imperio para gratificarles sus
Estas motivadas esperanzas
servicios; y que todas estas cosas eran
estaban fundadas en que era uno
partes para que Su Majestad le hiciera
de los principales que habían
merced de la Gobernación, demás de
ganado el imperio de Manco con
que había dado cédula a su hermano
sus hermanos y porque se creía
el Marqués para que después de sus
acreedor al cargo por sus
días fuese Gobernador el que él
particulares servicios y porque
nombrase, y que su hermano había
todas estas cosas le hacían amado
hecho nombramiento en él; y que en
de los que habían hecho la
las cosas pasadas y sucesos contra el
conquista. Así, teniendo el
Visorrey, le parecía tener excusa
gobierno en sus manos con la
bastante, por el rigor con que el
aprobación del emperador Carlos,
Visorrey había querido ejecutar las
podía premiarlos a todos, con
Ordenanzas, sin oír al Reino ni a sus
conocimiento de los sacrificios de
procuradores, de cuya causa todo
cada uno; y es que también tenía
aquel Imperio le había elegido por
cédula real en favor de su
Procurador general; y que los Oidores
hermano, el Marqués, para que
habían preso al Visorrey y enviádolo
después de sus días fuera
a España, y no él. Por todo lo cual le
gobernador el que él nombrase y,
parecía a Gonzalo Pizarro que no
ya que este había nombrado a
solamente merecía perdón de lo
Gonzalo, era sin duda alguna su
pasado, sino nueva merced de la
legítimo sucesor. Respecto a los
123
Gobernación presente, porque es
sucesos pasados contra el virrey
natural costumbre de los hombres
Núñez de Vela, se encontraba
belicosos, favorecer y estimar sus
bien cubierto de toda
hechos, aunque sean culpables.
responsabilidad que quisiesen
[Capítulo XLI: Buenos respetos de
hacerle, ya que solo el rigor del
Gonzalo Pizarro en servicio de su
virrey en cumplir las ordenanzas
Rey. El cual, saliendo de Quitu, va a
reales había alarmado a todos los
Trujillo y a Los Reyes, y la fiesta de
españoles dueños de
su entrada.]
repartimientos del imperio. Su
(Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p.
aprehensión y remisión para
214]
España no había sido obra de sus
acuerdos, sino de la de los
oidores, como fruto preciso de sus
violencias y temeridades. Había
sido la acción más compasiva y
benéfica para la humanidad
indefensa y tolerante, como la de
quitar a un feroz león del destrono
de un rebaño entero. Él le había
vencido después en la batalla de
Iñaquito como procurador general
de todas las provincias del Perú
que espontáneamente le habían
elegido para que los defendiera de
124
los decretos del virrey. La muerte
de este en aquella jornada
solamente había sido la
indispensable consecuencia de
quien busca los peligros de esta
clase de ejercicios. Imbuido de
estas razonables reflexiones,
Pizarro creía no solamente
merecer la indulgencia de Carlos
de todo lo pasado, sino el ser
nuevamente confirmado // [f. 29]
en el gobierno presente, ya que
era natural costumbre de los
hombres belicosos favorecer y
estimar a los hechos de valor.
(Cortegana, 2023, 11 - 12).
Por no haberse atrevido Gonzalo
Por no haberse atrevido Gonzalo
Volumen II -
Pizarro a emprender un hecho que tan
Pizarro a verificar un hecho que lo Manuscrito V,
bien le estaba, según sus amigos
ponía al mismo nivel que todos
decían, entendiendo la gente común
los soberanos de la tierra y que
que era por falta de discreción y no
tan bien le convenía, le
por sobra de buen respeto a su Rey, le
censuraron con la generalidad de
Capítulo 2
125
notaron de falta de ánimo, y
que había sido su indecisión
motejaron de cortedad de
indiscreta, y por su falta de
entendimiento, por donde los
resolución, su cortedad de
historiadores lo dijeron en sus
entendimiento y su torpeza al no
historias, más por siniestra relación
conocer lo que podía salvarle de
que les dieron que por decir lo que en
todo riesgo. Así lo han dicho
esto había, porque Gonzalo Pizarro,
todos los historiadores contra
en la común opinión de los que le
Gonzalo, como común opinión de
trataban de cerca y le conocían, era
los que no lo trataron de cerca y
hombre de bastante entendimiento, no
no lo conocieron a fondo; pero yo,
caviloso ni engañador ni de palabras
que tuve el alto honor de comer
dobladas, sino sencillo, hombre de
en su mesa con él, digo que era
verdad, de bondad y nobleza,
hombre de bastante
confiado de sus amigos, que le
entendimiento, nada caviloso ni
destruyeron, como los mismos
engañador. Jamás prometía cosa
historiadores lo dicen. Y no hay que
que no iba a dar o cumplir. No
culpar a los que escribieron en este
usaba palabras arteras o
particular, porque los que daban las
compuestas, sino muy llanas y
relaciones procuraban adular por sus
sencillas. Era hombre de verdad,
pretensiones, y el Palentino fue
nobleza y suma bondad. Y si
mandado que escribiese, como él
algún defecto tuvo, fue el de
mismo lo dice en su dedicatoria por
haber sido muy confiado con sus
estas palabras: «Más queriendo
amigos, que lo llegaron a destruir
proceder se me acobardó la pluma, y
traicionándolo, ingratos como lo
126
rehusé la carrera por algunos
manifiestan los más de los
inconvenientes que se me oponían.
historiadores; y si alguno de estos
Estando así confuso, yo vine en esta
lo denigran en esta parte de su
sazón a la corte de Vuestra Majestad,
vida pública y privada, entiéndase
donde hice demostración ante los de
que solo son como Palentino
vuestro Real Consejo de las Indias de
mandaba que escribiesen,
aquella primera historia que antes yo
pintándolo con los colores odiosos
había escrito (que ahora en orden es
de un rebelde o traidor a su rey. El
segunda), y pareciéndoles bien el
mismo Palentino dice estas
verdadero discurso de su narración,
palabras en su dedicatoria
entendieron que sería útil y
hablando al monarca. Queriendo
provechoso y aún necesario que yo
yo proceder con la pintura
acabase la historia comenzada, y así
verdadera de los hechos, se me
lo mandaron, dándome esperanza de
acobardó la pluma y rehusé la
gratificación y premio, con que tomé
cartera por algunos
nuevo aliento y ánimo para cumplir
inconvenientes que se me
mandado de tan alto tribunal,
oponían. Estando yo así de
lanzando de mí el temor y recelo que
confuso, vine a esta sazón a la
ya tenía para no acabar la empresa
Corte, donde hice demostración
comenzada», etc. Siendo esto así,
ante los de vuestro Real Consejo
¿qué mucho que dijesen de los
de las Indias de aquella primera
enemigos, principalmente de las
historia que antes yo había escrito,
cabezas, lo que los apasionados les
que ahora es segunda en orden.
relataban? Antes se hubieron
De ese modo, como les pareció
127
cortamente, según lo que hoy se usa.
bien el verdadero discurso de su
[Capítulo XLI: Buenos respetos de
narración, entendieron que sería
Gonzalo Pizarro en servicio de su
útil y provechoso, y aun
Rey. El cual, saliendo de Quitu, va a
necesario, que yo acabase la
Trujillo y a Los Reyes, y la fiesta de
historia comenzada. Y así me lo
su entrada.]
mandaron, dándome esperanza de
(Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p.
gratificación y premio para que
410]
tome nuevo aliento, y ánimo para
cumplir el mandado de tan alto
tribunal, lanzando de mí el temor
y recelo, que ya tenía, para no
acabar la empresa comenzada. He
aquí que mucho es que no dijera,
de los enemigos y muy
especialmente de los que habían
sido cabezas, todas las
expresiones apasionadas en su
contra, dando, al antojo, solo
relaciones de sus venganzas.
(Cortegana, 2023, 12 - 13).
Tunconobal vestido de miserable y
El estratégico Tunconobal,
Volumen II -
andrajoso, a la par de sus compañeros,
vestido de miserable andrajoso, a
Manuscrito VI 128
Molina, Juan Ignacio. 1795. Compendio
de la historia civil del reino de Chile.
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se presentó temblando delante de Don
la par de sus compañeros, se
García, y despues de haberlo
presentó temblando delante de
cumplimentado con terminos
don García y, después de haberle
groseros, le entregó una cestilla, en la
cumplimentado con términos
cual habia lagartijas asadas, con
groseros, le entregó una cestilla
algunas frutas silvestres. Los
que contenía lagartijas asadas
españoles que no podian contener la
adjuntadas de algunas frutas
risa a vista de los embajadores, y de
silvestres. Los españoles, al ver
su regalo, comenzaron a disuadir al
esto, no pudieron contener la risa,
gobernador de aquella empresa, que
ni tampoco quitar la vista de los
segun todas las apariencias debia ser
que se calificaban de
infructuosa. Pero él, aunque estuviese
embajadores; pero el resultado fue
persuadido de la miseria de aquellos
que, de // [f. 53] la pobreza del
pueblos, sin embargo, por no mostrar
regalo, se agarraron sus validos
haberse determinado ligeramente, los
para disuadir al gobernador de
exhortó a proseguir el viaje
aquella empresa en que se había
empezando, diciendo que mas
lanzado, diciéndole que, según
adelante se debia encontrar, segun las
todas las apariencias que
noticias que tenia, una region
presentaba, su conquista era
abundante de toda suerte de metales:
infructuosa. Mas él, aunque se
que no era raro en América encontrar
veía persuadido de la miseria de
después de horribles desiertos paises
los cuncos, no quiso ceder
riquisimos: luego preguntó a los
prontamente, para que no dijeran
Cuncos cual era el mejor camino para
que se había determinado a ella
Libro I, Capítulo 3
129
ir hacia el medi dia. Tunconobal
ligeramente y, por lo tanto,
señalo el de occidente, que a la verdad
desoyendo a sus sugestiones, los
era el mas fragoso; y pidiole una guia,
exhortó a proseguir el viaje
destino uno de sus compañeros, al
empezado. Alegó para ello que,
cual encargo condujese el ejercito por
más adelante, según estaba
los lugares mas escabrosos de la
informado, encontrarían una
costa. La guia siguió con tanta
región abundante de toda suerte
puntualidad las instrucciones del
de metales; porque no era raro en
Araucano, que los españoles,
América encontrar, después de
acostumbrados en sus conquistas a
horribles desiertos, países
sobrellevar con gusto las mas duras
riquísimos. Luego, tornándose a
fatigas, confesaban no haber trabajado
los cuncos, les preguntó cuál era
nunca tanto en una marcha tan penosa
el camino mejor para ir hacia el
como aquella. La impaciencia de ellos
mediodía. Tunconobal le señaló el
se aumentó mucho mas, cuando
del occidente, que, la verdad, era
despues de cuatro dias de viajes se
el más fragoso; y, como le pidió
vieron abandonados del pretendido
que haya un guía, destinó a uno de
conductor, sin poder encontrar salida
sus compañeros, al cual le
entre los espantosos peñascos que los
encargó que condujese al ejército
circuian. Toda su admirable
por los lugares más escabrosos de
constancia no hubiera sido suficiente
la costa. Puéstose en marcha, el
para hacerlos caminar adelante, si
guía siguió con puntualidad las
Don Garcia no les hubiese
instrucciones del araucano, de
incesantemente sostenido con la
manera tal que los españoles,
130
lisonjera esperanza de llegar dentro de
siempre acostumbrados a
poco a la feliz comarca que le habia
sobrellevar en sus conquistas con
prometido. (Molina, 1795, 186 – 188).
gusto las más duras fatigas,
confesaron desesperados no haber
trabajado entonces nunca tanto en
una marcha tan penosa como
aquella que practicaban. La
impaciencia de ellos aumentó
mucho más cuando, después de
cuatro días de viaje, se vieron
abandonados del pretendido
conductor, sin poder encontrar
salida entre los espantosos
peñascos que los circuían. Toda
su admirable constancia no habría
sido suficiente para hacerlos
caminar adelante, si don García
no los hubiese incesantemente
sostenido con la lisonjera
esperanza de llegar dentro de
poco a la feliz comarca que les
había prometido encontrar.
(Cortegana, 2023, 136 - 137).
131
Habiendo superado finalmente todos
Por medio de esta insistencia y
Volumen II -
los obstáculos, llegaron a descubrir
tras haber asimismo superado
Manuscrito VI -
desde la cima de un alto monte el
finalmente todos los obstáculos
Libro I, Capítulo 3
grande Archipiélago de Ancud,
que se les habían presentado,
nombrado más comúnmente de
llegaron a descubrir, desde la
Chiloe, cuyos canales estaban
cima de un alto monte el gran
surcados de una infinidad de
archipiélago de Ancud, nombrado
barquillos que navegaban a vela y
más comúnmente como Chiloé,
remo. Este inesperado prospecto los
cuyos canales se hallaban
colmó de alegria: molestados ya
surcados de una infinidad de
muchos dias de la hambre corrieron
barquillos que navegaban a vela y
hacia la ribera, y tuvieron bien presto
remo. Este inesperado prospecto
el contento de ver acercarse una barca
los colmó al instante de alegría y,
montada de quince personas
como ya se hallaban molestados
decentemente vestidas, las cuales,
de hambre por algunos días, esto
saltando sin miedo en tierra y
los hizo correr hacia la próxima
saludando con gran cordialidad, les
ribera que veían cubierta de
preguntaron quienes eran, donde iban,
flotantes navecillas. Así que,
y si tenian necesidad de alguna cosa.
cuando llegaron, tuvieron pronto
Los españoles pidieron víveres. El
el contento de ver acercarse hacia
Capitan de aquella buena gente hizo
donde ellos una barca montada de
luego sacar todas las provisiones que
15 personas decentemente
llevaba sobre la barca, y sin querer
vestidas, las cuales, saltando sin
132
admitir la menor paga, se las
miedo en tierra y saludando con
distribuyó amigablemente,
gran cordialidad, les preguntaron
prometiendp hacerlas venir en mayor
quiénes eran, a dónde iban y si
copia de las Islas circunvecinas.
tenían necesidad de alguna cosa.
(Molina, 1795, 188).
Los españoles, primero que todo,
pidieron víveres. Mas el capitán
de gente tan buena hizo luego
sacar todas las provisiones que
llevaban sobre la barca y, sin
querer admitir la menor paga, se
las distribuyó amigablemente,
prometiéndoles que les haría traer
cosas en mayor copia de las islas
circunvecinas que tenía a la vista.
(Cortegana, 2023, 137).
En efecto, apenas los hambrientos
// [f. 54] Ciertamente, ni bien se
Volumen II -
aventureros se habían acampado,
habían acampado los hambrientos
Manuscrito VI -
cuando arribaron de todas partes
aventureros en la ribera deliciosa,
Libro I, Capítulo 3
piraguas cargadas de maíz, de frutas,
cuando arribaron de todas partes
y de peces, que fueron del mismo
piraguas cargadas de maíz, de
modo presentadas, sin ningún interés.
frutas y de peces, todas las cuales
Los españoles, siempre regalados por
fueron, del mismo modo,
133
aquellas isleños, costearon el
presentadas sin ningún interés al
archipiélago hasta el seno de
devoramiento de los españoles.
Relocavi, y algunos de ellos pasaron a
De esa manera, estos siempre
las islas vecinas, donde encontraron la
relegados por aquellos isleños
tierra muy cultivada, y las mujeres
costearon el archipiélago hasta el
empleadas en hilar lana mezclada con
seno de Reloncaví, y algunos de
plumas de los pájaros marinos, de lo
ellos pasaron a las islas vecinas,
cual hacían sus vestidos. El famoso
donde encontraron la tierra muy
poeta Ercilla que era de la comitiva,
cultivada y las mujeres empleadas
queriendo tener la gloria de haberse
en hilar lana mezclada con plumas
introducido al mediodia mas que
de los pájaros marinos, de la cual
ningún otro Europeo, paso el
hacían sus vestidos. El famoso
susodicho golfo de mar, y sobre la
poeta Ercilla, que era de la
ribera opuesta dejó escrito en verso en
comitiva, queriendo tener la gloria
la corteza de los árboles su nombre, y
de haberse introducido al
la dará de su descubrimiento, que fue
mediodía más que ningún otro
a 31 de enero de este año. (Molina,
europeo, pasó el susodicho golfo
1795, 188 – 189).
de mar y, sobre la ribera opuesta,
dejó escrito en verso, en la corteza
de los árboles, su nombre y la data
de su descubrimiento, que fue el
31 de enero de 1558. (Cortegana,
2023, 137).
134
Córdova y Urrutia, José María. 1844.
En 9 de Enero de este, de 570
Ya por su tiempo sucedió, el 9 de
Volumen II -
Las 3 épocas del Perú́ , o, Compendio de
entraron en la capital los individuos
enero de 1570, la entrada a la
Manuscrito VI, Libro
su historia Perú. Imprenta del Autor.
que debían componer el Tribunal de
capital de Lima de las personas
I, Capítulo 8
https://t.ly/VtYXz
la Inquisición presididos por el
que habían de componer el primer
Licenciado Servan de Cerezuela;
Tribunal de la Inquisición,
siendo notable este año por el gran
presidido por el licenciado Serván
terremoto que hubo en Chile, que
de Cerezuela. En este año hubo
trastornó algunos cerros y asoló lu
también un gran terremoto en
gares enteros. En 18 de Febrero el
Chile, que trastornó a los cerros y
señor Arzobispo elevó la Iglesia de
asoló a los lugares en que
Santa Ana a parroquia. Se erigió el
desarrolló su furor.
Obispado del Tucuman por su primer
El 18 de febrero de este mismo
prelado D. F. Gerónimo de Albornoz,
año, el arzobispo de Lima Loayza
é igualmente fué nombrado para el
instituyó en parroquia a la iglesia
Cuzco D. Sebastian Lartaun. Se
de Santa Ana.
estableció en Lima el Tribunal del
Protomedicato. La casa de Moneda
que existía en esta, se trasladó por
disposición del virey á la villa de
Potosí. (Córdova y Urrutia, 1844, 52).
Por este propio tiempo, también
se erigió el obispado de Tucumán,
siendo su primer prelado don fray
Jerónimo de Albornoz, a la vez
que también fue nombrado para la
diócesis del Cusco don Sebastián
de Lartaún. Igualmente, fue
establecido en Lima el Tribunal
135
de Protomedicato, y la Casa de la
Moneda que había en esta fue
trasladada, por orden del virrey, a
la villa de Potosí. (Cortegana,
2023, 200).
Este año de 71 dio fin la guerra de los
Entrando el año de 1571, le
Volumen II -
Moros en Granada con la muerte de
vinieron al virrey Toledo varias
Manuscrito VI, Libro
su rey Aben Aboo lo que se celebró
noticias de Europa y, entre estas,
I, Capítulo 8
con grandes fiestas. Se expidió por el
estuvo la finalización de la guerra
Sumo Pontífice Pio V, la bula
de los moros en Granada, con
confirmatoria de la Universidad de
motivo de la muerte del rey de
San Marcos. Pedro Fernandez de
estos, Aben Aboo, nueva que se
Velasco descubrió el secreto de
celebró con grandes fiestas en
beneficiar la plata con azogue, lo que
todo el Perú. Otra fue la
dió mucho realce al mineral de
expedición, por el pontífice de
Huancavelica al extremo de haberse
Roma Pío V, de la bula
mandado por el virrey en 5 de agosto
confirmatoria de la Universidad
de 1572 que don Francisco Angulo
de San Marcos de Lima. En este
tirase las medidas para la fundación
mismo año, Pedro Fernández de
de la población titulando “Villa rica
Velasco descubrió el secreto de
de Oropesa en memoria de su casa.
beneficiar los metales de plata con
En Lima se erigió la Doctrina del
azogue; este ingenioso
136
Cercado al cargo de los Jesuitas
conocimiento le dio mucho realce
donde fundaron un Colegio para la
al mineral de cinabrio de
enseñanza de los indios. (Córdova y
Huancavelica. Como la fama de
Urrutia, 1844, 52).
los ricos azogues de Huancavelica
se hicieron bastante codiciables,
el virrey tuvo por conveniente, el
5 de agosto de 1572, mandar a
que don Francisco Angulo le
tirase las medidas para fundar la
población, a la que tituló Villa
Rica de Oropesa, en memoria de
su casa. Pero, como el bautismo
natural de su nombre nadie se lo
pudo quitar, pronto se quedó solo
con el nombre de Villa de
Huancavelica. En Lima se erigió,
también por este año, la doctrina
del Cercado, a cargo de los
jesuitas, donde consiguientemente
fundaron un colegio para la
enseñanza de los naturales.
(Cortegana, 2023, 201 - 202).
137
Murió este año en Roma el Papa Pio
Por este año, se supo en Lima que
Volumen II -
V, haciendo instituido la fiesta del
en Roma había muerto el papa
Manuscrito VI, Libro
Rosario y añadiendo en la letania,
Pío V, después de haber instituido
I, Capítulo 8
estas palabras “Auxilium
la fiesta del Rosario; de haber
christianorum” por la protección que
añadido a la letanía las palabras
habían recibido en la batalla contra
«Auxilium Cristianorum», por la
los moros el primer Domingo de
protección que habían recibido los
Octubre del año anterior de 71.
cristianos en la batalla contra los
Expidió breve para que en los
moros el primer domingo de
conventos Dominicos se bendijesen
octubre del año anterior de 71; y
las velas de Candelaria para la hora de
de haber expedido, asimismo, el
la muerte.
breve para que en los conventos
Se fundó en Lima en esta año de 73 el
dominicos se bendijesen las velas
monasterio de la Concepcion y en el
de Candelaria para ayudar a bien
mismo los religiosos Agustinos
morir.
tomaron posesion del sitio que
Terminado el año de 72 y entrado
actualmente ocupan. Se mandó poblar
el de 1573, tuvo lugar ya en él la
en este año, en la provincia de
fundación del monasterio de la
Cochabamba la ciudad de Oropesa,
Concepción en Lima, al mismo
sobre las ruinas de otra que en 1565
tiempo que los religiosos
se habia establecido. (Córdova y
agustinos, en posesión, ocuparon
Urrutia, 1844, 52 - 53).
el actual local, que consta de su
iglesia y su casa conventual. En
138
este propio año, se mandó //
[f. 111] poblar, en la provincia de
Cochabamba, una nueva ciudad
de Oropesa, con el mismo objeto
de dejar a la posteridad el nombre
de la casa del virrey, sobre las
ruinas de otra que en 1365 se
había establecido con diverso
nombre. (Cortegana, 2023, 202).
Inca Garcilaso de la Vega. 1967 [1617].
Procediendo el Visorrey en su
El nuevo conquistador de
Volumen II -
Historia general del Perú. Lima:
gobierno con la suavidad y blandura
las riberas del Marañón, Ursúa,
Manuscrito VI, Libro
Editorial Universo S.A.
que hemos dicho, concedió la jornada
era hombre de mucha bondad, de
I, Capítulo 5
https://shorturl.at/HKP06
y conquista de las Amazonas del río
gentil persona y de mucho agrado
Marañón que atrás dijimos, que
para con todos. Para formar su
Francisco de Orellana, negando a
expedición, se tomó el trabajo de
Gonzalo Pizarro vino a España, y
ir, desde el Cusco hasta Quito,
pidió a Su Majestad la dicha
enganchando soldados que
conquista, y acabó en el camino sin
quisieran ir con él a las nuevas
llegar donde pretendía. Dióla el
conquistas, a causa de que, como
Visorrey a un caballero llamado Pedro
estaba el Perú en una quietud
de Orsúa, que yo conocí en el Perú,
efectiva, ya no tenían los
hombre de toda bondad y virtud,
aventureros matachines cómo
139
gentil hombres de su persona y
poder medrar, porque todo él
agradable a la vista de todos. Fue
estaba repartido entre los más
desde el Cozco hasta Quitu
antiguos favorecidos por la
recogiendo los soldados que
fortuna y por la protección de los
pretendían salir a nuevas conquistas,
mandatarios. Cuando andaba así
porque en el Perú ya no había en qué
Ursúa en este proyecto, recibió
medrar, porque todo él estaba
también caballos, armas y
repartido entre los más antiguos y
bastimentos; a él acudieron todos
beneméritos que había en aquel
los vecinos de las ciudades con
Imperio. Recogió así mismo Pedro de
estos artículos, con mucha
Orsúa las armas y bastimento que
liberalidad, porque todos ellos
pudo para su conquista; a todo lo cual
trataban de favorecerlo como el
los vecinos y los moradores de
más. Del Cusco salieron con él
aquellas ciudades acudieron con
muchos soldados y, entre ellos, un
mucha liberalidad y largueza, y todo
don Fernando de Guzmán, joven y
buen ánimo, porque la bondad de
recién llegado de España, con otro
Pedro de Orsúa lo merecía todo. Del
soldado Lope de Aguirre, ya
Cozco salieron con él muchos
antiguo en el país, pero de un
soldados, y entre ellos un Fernando de
físico muy ridículo y de una
Guzmán, que yo conocí, que era muy
perversa condición. Ursúa, con
nuevo en la tierra, recién llegado de
sus buenas maneras y su notoria
España, y otro soldado más antiguo
bondad, consiguió reunir 500
que se decía Lope de Aguirre, de ruin
hombres y, con ellos, entró sobre
talle, pequeño de cuerpo y de perversa
el curso del enunciado río,
140
condición y obras, como lo refiere en
llevándose consigo a una hermosa
sus Elegías de varones ilustres de
dama que hacía de su compañera.
Indias, el Licenciado Juan de
De hecho, por la codicia hacia
Castellanos, clérigo, presbítero,
ella, al cabo de un mes de camino,
beneficiado de la ciudad de Tunja en
convinieron entre Aguirre y
el Nuevo Reino de Granada: en las
Guzmán, y un tal Salduendo, que
cuales Elegías gastan seis cantos de su
era el apasionado por la bella, en
verdadera y galana historia, aunque
matar a don Pedro de Ursúa, bajo
escrita en verso. En ellas cuenta las
el pretexto de nombrar por rey de
jornadas de Pedro de Orsúa, que
ellos a don Fernando Guzmán.
llevaba más de quinientos hombres
Este joven indiscreto, que también
bien armados y aderezados con
era bien apersonado por solo ser
muchos y buenos caballos. Escribe su
rey, cooperó con la infausta
muerte que se la dieron sus propios
ejecución de su bienhechor. Pero
compañeros y los más allegados a él,
Aguirre y Salduendo, pocos días
por gozar de una dama hermosa, que
después, mataron también a
Orsúa llevaba en su compañía. Pasión
Guzmán y se declararon los
que ha destruido a muy grandes
principales caudillos, llevándose
capitanes en el mundo, como al bravo
consigo a la dama. Poco tiempo
Aníbal y a otros tales. Los principales
después, se quedó solo Aguirre
autores de la muerte de Orsúa fueron
como el caudillo de ellos, cuando
don Fernando de Guzmán y Lope de
mató a Salduendo y a más de
Aguirre, y Salduendo, que era
doscientos hombres de su partido.
apasionado por la dama, sin otros
En seguida, saqueó la isla de la
141
muchos que aquel autor nombra. Y
Margarita, donde perpetró toda
dice como aquellos traidores alzaron
clase de atrocidades. Luego, pasó
por Rey a su don Fernando, y él era
a las otras islas comarcanas,
tan discreto, que consintió en ello y
donde fue vencido por sus
holgó que le llamasen Rey, no
moradores y, antes de rendirse,
habiendo Reino que poseer, sino
pasó a cuchillo a una hija suya, a
mucha mala ventura, como a él le
causa de que no quedase viva
sucedió, que también lo mataron los
estando él muerto y la llamasen
mismos que le dieron el nombre de
«hija del traidor Aguirre». Tal fue
Rey. Aguirre se hizo caudillo de ellos,
el fin de la jornada de Ursúa.
y mató en veces más de doscientos
(Cortegana, 2023, 160 - 161).
hombres, saqueó la isla Margarita,
donde hizo grandísimas crueldades.
Pasó a otras islas comarcanas, donde
fue vencido por los moradores de
ellas; y antes que se rindiese, mató
una hija suya que consigo llevaba, no
por otra causa, más de que porque
después de él muerto no la llamasen
hija del traidor. Esta fue la suma de
sus crueldades, que cierto fueron
diabólicas; y este fin tuvo aquella
jornada que se principió con tanto
aparato como yo vi parte de él.
142
[Capítulo XIII: Que trata de los
pretendientes que vinieron desterrados
a España, y la mucha merced que Su
Majestad les hizo. Don García de
Mendoza va por Gobernador a Chile,
y el lance que le sucedió con los
indios.]
(Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p.
737]
Luego que vieron preso al
Puesto así el príncipe, en
Volumen II -
príncipe, le criaron un fiscal que le
estrecha prisión, el virrey le crio
Manuscrito VI, Libro
acusase sus delitos; el cual le puso los
un fiscal, el cual se puso de
I, Capítulo 8
capítulos que atrás apuntamos, que
acuerdo con su superior sobre los
mandaba a sus vasallos y criados que
capítulos que ya anteriormente
saliesen de aquellas montañas a
fueron descifrados. El virrey no
saltear y robar a los caminantes
solo se contentó con perder al inca
mercaderes, principalmente a los
y a toda su real familia, ya que lo
españoles, que los tenía a todos por
que más escandalizó a todos en
enemigos; que tenía hecho trato y
este ruidoso procedimiento fue
contrato con los Incas sus parientes,
cómo envolvió, en la causa del
que vivían entre los españoles, que a
inca, a los mestizos —hijos de
143
tal tiempo y en tal día, concertándose
conquistadores en Indias, unos en
con los caciques, señores de vasallos
las infantas de la sangre real, otros
que habían sido de sus padres y
en las mujeres nobles, como lo
abuelos, se alzasen y matasen cuantos
eran las hijas, sobrinas y nietas de
españoles pudiesen. También entraron
los curacas y señores de
en la acusación los mestizos hijos de
vasallos—, a quienes les quitaron
los conquistadores de aquel Imperio y
los pocos bienes que tenían para
de las indias naturales de él.
dárselos a otros españoles o les
Pusiéronles por capítulo, que se
quitaron sus existencias solo
habían conjurado con el príncipe
porque eran nacidos en el país, y
Túpac Amaru, con los demás Incas
los tenían pereciendo sin que les
para alzarse con el Reino; porque
sirvieran de nada los méritos de
algunos de los mestizos eran parientes
sus padres ni la naturaleza
de los Incas por vía de sus madres, y
legítima de sus madres y abuelos,
estos en su conjuración se habían
para que se les considerara con
quejado al príncipe Inca diciendo, que
algo de las haciendas y destinos
siendo hijos de conquistadores de
de su misma patria. De aquí fue
aquel Imperio, y de madres naturales
ya que, por esta mala conducta de
de él, que algunas de ellas eran de la
los gobernantes españoles, que
sangre real, y otras muchas eran
todo lo querían para sí y para sus
mujeres nobles, hijas y sobrinas y
parientes, paisanos y amigos, se
nietas de los curacas, señores de
empezó a engendrar esa rivalidad
vasallos. Y que ni por las haciendas
y ese odio implacable entre el
de sus madres y abuelos, que no les
criollo peruano y el español
144
había cabido nada, siendo hijos de los
europeo. En efecto, dejaron a los
más beneméritos de aquel Imperio,
primeros desamparados hasta el
porque los Gobernadores habían dado
extremo de que, llegando a la
a sus parientes y amigos lo que sus
mendicidad o forzados por la
padres ganaron, y había sido de sus
miseria, salían a robar por los
abuelos maternos, y que a ellos los
caminos y concluían luego
dejaron desamparados, necesitados a
degradados e infamados en los
pedir limosna para poder comer, o
cadalsos, con gran gozo de sus
forzados a saltear por los caminos
verdugos. Asimismo, suponían
para poder vivir, y morir ahorcados.
que los mestizos habían mandado
Que Su Alteza el príncipe se doliese
decir al príncipe Túpac Amaru
de ellos, pues que eran naturales de su
que Su Alteza se doliese de ellos
Imperio, y los recibiese en su servicio,
y, considerando que sus parientes,
y admitiese en su milicia, que ellos
amigos y vasallos eran naturales
harían como buenos soldados hasta
de su imperio, los recibiese en su
morir todos en la demanda. Todo esto
servicio y admitiese en sus
pusieron en la acusación de los
ejércitos, cierto de que ellos solo
mestizos, prendieron todos los que en
obrarían hasta morir como buenos
el Cozco hallaron de veinte años
soldados de su voluntad y
arriba, que pudieran ya tomar armas.
persona, y harían todo lo que él se
Condenaron algunos de ellos a
dignase a mandarles. Y por esa
cuestión de tormento, para sacar en
imputación, nacida solo de la
limpio lo que se temía en confuso.
mente del virrey y sus consejeros,
[Capítulo XVII: El proceso contra el
hizo poner también presos en la
145
Príncipe y contra los Incas parientes
cárcel a todos los mestizos hijos
de la sangre real, y contra los
de conquistadores que, con la
mestizos hijos de indias y de
edad de 20 años, se hallaban a la
conquistadores de aquel Imperio.]
sazón en el Cusco y que
(Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p.
consideraba que // [f. 116] fuesen
742]
capaces de tomar las armas. Como
en el séquito del juicio todos
estaban inconfesos, fueron
condenados a tormento, a fin de
arrancarles, por este bárbaro
medio, las palabras que les
apetecía sacar en limpio; pero, en
esta cuestión, todo se hallaba en
un caos de confusión. El Cusco,
por esos días, todo él era un
laberinto. Sus habitantes veían al
inca y su familia sumidos en una
asquerosa mazmorra. Por otra
parte, los hijos de los
conquistadores y sus parientes
queridos fueron arrastrados
también a la misma, por la más
arbitraria injusticia de sus tiranos.
En aquella ciudad, todo era furia
146
de prisión, acusación y delitos,
por un lado; y todo era
desesperación y odio, por otro.
(Cortegana, 2023, 208 - 209).
En aquella furia de prisión, acusación
En esta varia posición de cosas,
Volumen II -
y delitos, fue una india a visitar su
sucedió el hecho siguiente. Una
Manuscrito VI, Libro
hijo que estaba en la cárcel: supo que
india fue a visitar a un mestizo
I, Capítulo 8
era de los condenados a tormento.
hijo suyo que, con este motivo, se
Entró como pudo donde estaba el hijo
hallaba en la cárcel, sabiendo que
y en alta voz le dijo: «Sabido he que
estaba condenado a pasar por el
estás condenado a tormento, súfrelo y
tortor. Entró como pudo adonde
pásalo como hombre de bien sin
estaba el hijo y, en alta voz, le
condenar a nadie, que Dios te ayudará
dijo:
y pagará lo que tu padre y sus
compañeros trabajaron en ganar esta
tierra para que fuese de cristianos, y
los naturales de ella fuesen de su
iglesia. Muy bien se os emplea, que
todos los hijos de los conquistadores
muráis ahorcados, en premio y paga
de haber ganado vuestros padres este
Imperio». [Capítulo XVII: El proceso
«Hijo mío, he sabido que
estás condenado a tormento y esta
noticia es la que me ha traído para
prevenirte que, a lo que te den,
debes sufrir y pasar como hombre
de bien, sin culpar ni nombrar a
este o a aquel; porque si así lo
haces, Dios te ayudará y pagará
147
contra el Príncipe y contra los Incas
con lo que tu padre y sus
parientes de la sangre real, y contra
compañeros trabajaron, que es el
los mestizos hijos de indias y de
haber ganado esta tierra. Muy
conquistadores de aquel Imperio.
bien el virrey los emplea ahora,
(Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p.
puesto que pretende que todos los
742]
hijos de los conquistadores
mueran ahorcados en premio y
recompensa por lo que ellos tanto
se esforzaron en la adquisición de
este imperio». (Cortegana, 2023,
209).
Córdova y Urrutia, José María. 1844.
En este año de 1746 fue ascendido al
Entrado ya el año de 1746, fue
Volumen II -
Las 3 épocas del Perú́ , o, Compendio de
Obispado de Huamanga D. Fr.
ascendido al obispado de
Manuscrito VII,
su historia Perú. Imprenta del Autor.
Francisco Galeano auxiliar de la
Huamanga el doctor don fray
Capítulo 3
https://t.ly/VtYXz
Metrópoli de su patria Lima. Sucedió
Francisco Galeano, auxiliar de la
en 28 de Octubre el terremoto que
metrópoli de Lima, su país natal.
inundó y asoló la ciudad del Callao y
En este año, seguían las
destruyó todos los edificios de la
operaciones de Llamas en la
capital, habiéndose notado que al caer
montaña, hasta entonces, si no
el arco alto de piedra que hace entrada
vencido, sumamente estropeado
al puente, vino por tierra la estatua
por las escabrosidades de ella y
148
ecuestre de Felipe V, el mismo que
por el clima calenturiento que
según se supo después, había muerto
infectaba a la mitad de sus tropas.
en el palacio de Belsain el 9 de Julio
Mientras que así seguían estas
de aplogeia. El terremoto dicho en su
operaciones con alguna lentitud, y
dirección O. a E. hizo grandes
no con el favorable resultado que
estragos: en la quebrada mineral del
el virrey se prometía alcanzar,
Rio-biseca de la provincia de Lucanas
tuvo lugar, para mayores trabajos
rompiendose la tierra, abortó
de su gobierno, el gran terremoto
monstruosas sabandijas que en su
que inundó y asoló a la ciudad y
seno ocultaba: en la quebrada de
puerto del Callao. Fueron
Totopo once leguas de Pativilca se
partícipes en su destrucción todos
partieron dos cerros que llaman Julcan
los edificios de la capital de Lima
y lo mismo sucedió en Huayas: en
y también la estatua ecuestre del
Ayapata (provincia de Carabaya) se
rey Felipe V, que había sido
abrió la tierra y saliendo agua
colocada en la cumbre del arco
cenagosa inficionó la de los ríos e
grande del puente por el virrey
hizo perecer mucha gente. (Córdova y
Villagarcía; después se notó que,
Urrutia, 1844, 117 – 118).
cuando esto sucedía en Lima con
su efigie, él ya había muerto en
España en el palacio de Belsain el
9 de julio, de una terrible
apoplejía. Este grandioso
terremoto, en su dirección oeste a
este, hizo los más grandes
149
estragos; pues, en la quebrada
mineral del río Viseca de la
provincia de Lucanas, rompió la
tierra e hizo abortar monstruosas
sabandijas que en su seno
ocultaba. En la quebrada de
Totopo, a once leguas de
Pativilca, se partieron dos cerros
llamados Julcán, y lo mismo
sucedió en Huaylas y en Ayapata,
provincia de Carabaya, donde se
abrió la tierra y esta exhaló agua
cenagosa que infectó la de los
ríos, al paso que hizo perecer a
muchos de sus moradores.
(Cortegana, 2023, 224).
Don Agustin de Jauregui, caballero de
El virrey Guirior, que solo
Volumen II -
la orden de Santiago, teniente general
gobernó al Perú cuatro años, fue
Manuscrito VII,
de los reales ejercitos, de presidente
reemplazado en el virreinato del
Capítulo 8
de chile paso a servir el virreinato del
Perú por don Agustín de Jáuregui,
Perú, entrando en la capital de Lima
caballero de la orden de Santiago
en 21 de Julio, día en que se habia
y teniente general de los reales
150
recibido en el real Acuerdo D. José
ejércitos, a quien, cuando estaba
Antonio de Areche de
de presidente de Chile, la Corte lo
Superintendente de real Hacienda. En
nombró para el desempeño de este
20 de Agosto murió el V. Fr. Ramon
gobierno. Con ese motivo, entró
Tagle de la órden de San Francisco.
públicamente en Lima el 21 de
Recibiose en público el Virrey el 5 de
julio de 1780 y, en el mismo día,
Noviembre de este año, estallando en
se hizo cargo de la autoridad
10 del mismo mes, la sublevacion de
suprema de él. En este propio día,
D. José Gabriel Condorcanqui-Tupac-
se recibió, en real acuerdo, don
Amaru, cacique del pueblo de
José Antonio de Areche de
Tungazucca de la provincia de Tinta,
superintendente de real hacienda.
efectuadapor las atrocidades que
En 20 de agosto de ese año, murió
cometia el corregidor D. Antonio
en Lima el venerable fray Ramón
Arriaga, al cual aprendió e hizo
Tagle, de la orden de San
ahorcar en toda forma:
Francisco. El 5 de noviembre se
inmediatamente el corregidor de la
recibió en la Real Audiencia al
inmediata provincia de Quispicanchi
virrey, de una manera pública y
D. Fernando … (Córdova y Urrutia,
1844, 127).
ostentosa, a prescindir sus reales
acuerdos. El día 10 de este mismo
mes, estalló la sublevación de don
José Gabriel Condorcanqui,
Túpac Amaru, cacique del pueblo
de Tungasuca, de la provincia de
151
Tinta, efectuada por la mala
conducta del corregidor don
Antonio de Arriaga, cuyos
pormenores son los siguientes.
(Cortegana, 2023, 235).
En 15 de febrero de este año entró en
El 15 de febrero de este mismo
Volumen II -
Lima de arzobispo el D. D. José
año de 1782, entró en Lima el
Manuscrito VII,
Domingo González de Larreguera.
arzobispo doctor don Juan
Capítulo 8
Fue nombrado obsipo de Huamanga
Domingo González de la Reguera.
D. Francisco Lopez Sanchez, y para
Fue nombrado obispo de
Arequipa D. Fr. Miguel de Gonzales
Huamanga don Francisco López
Pamplona, capuchino. En
Sánchez y obispo de Arequipa
Lambayeque se fundó un hospital con
don Miguel González de
el fondo de diez mil pesos que para
Pamplona, de la orden de
ello dio D. Carlos Vigil. En mayo de
capuchinos. En Lambayeque se
este mismo año acaeció en el asiento
fundó un hospital, con el fondo de
mineral de Huallanca un tumulto,
diez mil pesos, que para ello
contra los mineros de la Provincia de
piadosamente dio don Carlos
Huamalíes, que fué sosegada con la
Vigil, natural y vecino de Chota.
deposicion del Corregidor D. Ignacio
En mayo de este mismo año,
de Santiago y Ulloa, que como
acaeció, en el asiento mineral de
perteneciente al gremio la habia
Huallanca, un tumulto bastante
152
fomentado. Se estancó el papel
ardoroso contra los mineros de la
sellado y breas de Santa Elena y
provincia de Huamalíes, a la que
Amotape. (Córdova y Urrutia, 1844,
pertenece aquel puesto; este se fue
129).
apaciguado con la deposición del
corregidor don Ignacio de
Santiago y Ulloa, que, como
perteneciente al gremio, la había
fomentado de un modo perjudicial
y escandaloso. Se estableció el
estanco del papel sellado y
también el de breas de Santa
Elena y Amotape, por convenir
así a la utilidad del erario real.
(Cortegana, 2023, 268).
Torrente, Mariano, Historia de la
Los negocios públicos se presentaban
Pese a todo esto, los patriotas de
Volumen III -
Revolución hispano-americana (1829-
del modo mas halagüeño para los
Buenos Aires no desmayaron en
Manuscrito VIII -
1830). Madrid: (s. l.).
insurgentes de Buenos Aires. Las
sus propósitos, porque, aún más
Capítulo 2
https://shorturl.at/jkqBQ
victorias del Tucumán, i las ventajas
alentados con la victoria
obtenidas contra la plaza de
alcanzada en el Tucumán y las
Montevideo en el año anterior los
obtenidas contra la plaza de
habian constituido en un estado de
Montevideo en el año anterior,
vigor i firmeza, superior a sus mismos
esperaban en lo sucesivo
153
calculos i esperanzas. Para dar mayor
resultados más grandiosos de sus
solidez a su gobierno habian instalado
armas. Así es que, con motivo de
una asamblea nacional, que principió
dar mayor respetabilidad legal a
sus sesiones en 31 de nero bajo la
sus deliberaciones gubernativas,
presidencia de Alvear i de los
instalaron un congreso nacional,
secretarios Vieites i Gomez, quedando
de conformidad con la promesa
confiado el poder ejecutivo a los
hecha cuando ocurrió la mutación
mismos que ya lo desempeñaban,
del gobierno en el año absuelto.
excepto Pasos que fue reemplazado
En efecto, sus sesiones dieron
por Perez. Dicha asamblea tomó el
principio el 31 de enero, bajo la
título de Congreso Soberano
presidencia del general, que había
Constituyente. (Torrente, 1829 –
de ser el vencedor de Montevideo,
1830, 543).
don Carlos María Alvear, y de los
secretarios Vieytes y Gómez,
quedando confiado el poder
ejecutivo a los mismos que lo
estaban desempeñando, a
excepción de Paso, a quien se le
reemplazó por Pérez, que merecía
la opinión pública. Esta asamblea
tomó el lema de Congreso
Soberano Constituyente y sus
sanciones fueron ya las primeras
leyes nacionales de la república
154
ar-// [f. 106]gentina. (Cortegana,
2023, 4).
Desde que se instituyó esta nueva
Como ya desde la instalación
Volumen III -
forma de gobierno quedó proscrito de
solemne de esta representación
Manuscrito VIII -
sus actas el nombre de Fernando, y se
nacional porteña, se había
Capítulo 2
dirigieron todos sus pasos a establecer
variado, de derecho y hecho, la
una independencia absoluta de la
forma de gobierno de colonia
metrópoli. Se cambiaron las banderas
realista a nación independiente y
i las divisas reales; se acuño moneda
soberana; quedó, por naturaleza
con los emblemas de aquella
justa, proscrito para siempre de
república; i siendo uno de los
sus actas y trabajos políticos el
principales intentos de sus corifeos
nombre del rey Fernando de
ganarse el aura popular para dar vigor
España. De ese modo, ella solo se
a su empresa, hicieron alarde de una
dirigió, con todos sus patrióticos
filantropia i generosidad que
pasos, a establecer su
desmentir sus mismas acciones,
independencia absoluta de la
decretando la libertad de los que
metrópoli, que tanto anhelaban los
naciesen de padres esclavos desde
pueblos, reasumiendo en sí su
aquella época, i la supresión de la
soberanía política en el presente y
mita i del tribuno. No dudaban de que
para adelante. Bajo este principio
por este medio podrían contar con la
legal, timbre y empeño, se
fidelidad de la raza africana, i con la
comenzaron a expedir las leyes,
155
firme adhesión de los indios, con cuya
los decretos, los títulos y las
causa trataron de identificarlos.
comunicaciones y órdenes
(Torrente, 1829 – 1830, 343 - 344).
oficiales, como el cambio de
banderas y divisas reales, con las
adoptadas nuevamente como
nacionales por sanción del
Congreso. Además, se acuñaron
monedas con los emblemas de la
república y, en razón de
filantropía humanitaria, se declaró
la libertad de los que naciesen de
padres esclavos en adelante.
(Cortegana, 2023, 4).
Las numerosas partidas, que se
Es cierto que, para esta empresa
Volumen III -
levantaron al favor de estas ventajas,
de Salta, a Belgrano lo
Manuscrito VIII -
compuestas de gentes sumamente
acompañaron numerosas partidas
Capítulo 2
diestras en el manejo del caballo, mui
de gauchos, como gente
conocedoras de aquel terreno
sumamente diestra en el manejo
monstruoso i quebrado, expertas en la
del caballo y muy conocedora de
guerra de sorpresa, i emboscadas, i de
sus terrenos montuosos y
una particular habilidad para penetrar
quebradas; al paso que experta en
por los espesos bosques i matorrales,
la guerra de sorpresa y de
156
entendieron sus incursiones hasta las
emboscadas, y de una particular
mismas cercanias de Salta. Las tropas
sutileza para penetrar por los más
del Rei tenian que vivir en una
ásperos bosques y matorrales,
continua agitacion i alarma, debiendo
extendiendo de tal modo sus
sostener continua agitacion i alarma,
incursiones hasta las goteras del
debiendo sostener continuos choques
propio Salta. En una palabra, los
parciales contra aquellos cosacos de
tales gauchos, en aquellos
América, llamados gauchos, que
terrenos suyos, son lo mismo que
huían cuando se les buscaba, pero que
los árabes en el desierto de
con la misma facilidad se echaban
Egipto, los cosacos en los hielos
encima para interceptar los víveres,
de Rusia y los naturales del Perú
cortar las comunicaciones, i sacar
en sus quebradas y montañas.
partido de todo descuido o
Acometidas por aquellas nubes de
desprevención. (Torrente, 1829 –
caballería errante, las tropas del
1830, 543).
rey tuvieron que vivir de continuo
en agitación o alarma, sosteniendo
todos los días repetidos choques
parciales, a fin de alejarlos de las
cercanías de la población del
indicado Salta, que sin trabar un
recio ataque huían cuando los
realistas los buscaban. Los
gauchos se echaban encima de
ellos con la misma facilidad en
157
masa, tan luego como los sentían
algo débiles o fatigados, y sin
dejar por su natural condición de
ser así volátiles, para interceptar
los víveres, cortar las
comunicaciones y sacar partido de
todo descuido o desprevención de
las tropas a las que les hacían la
guerra con astucia y eficacia.
(Cortegana, 2023, 7).
García Camba, Andrés. 1846. Memorias
De conformidad con las prevenciones
El general en jefe Goyeneche,
Volumen III -
para la historia de las armas españolas
del virrey y deseoso por su parte el
antes de saber la pérdida y
Manuscrito VIII -
en el Perú. Madrid: Sociedad
general en jefe de auxiliar la
capitulación de Tristán en Salta,
Capítulo 2
Tipográfica de Hortelano y Compañía.
permanencia de Tristan en Salta habia
cumpliendo con las prevenciones
https://t.ly/smoDl
hecho partir para la vanguardia al
del virrey Abascal y deseoso por
coronel D. Miguel Tacon y al
su parte de auxiliar la
ingeniero D. Francisco Javier de
permanencia de Tristán en Salta,
Mendizabal, y ambos juntos llegaron
había hecho partir para la
a Jujuy el 19 de febrero, vispera de la
vanguardia al coronel don Miguel
derrota de Salta. El 21 se recibio en
Tacón y al ingeniero don
Jujuy la noticia de esta desgracia por
Francisco Javier de Mendizábal,
tres soldados fugados despues de
los que, tras hacer juntos su viaje,
158
perdida la accion, y en su vista el
llegaron el 19 de febrero a Jujuy,
coronel Tacon tomo sobre si la
víspera de la derrota en Salta, sin
responsabilidad de mandar que la
saber hasta entonces ocurrencia
guarnicion emprendiera sin demora la
alguna de lo que estaba
retirada hacia Tupiza, y asi se verifico
sucediendo en este punto. El
poniendose en marcha a las nueve de
descanso que hicieron en el
la noche del mismo dia, porque era
primero les dio lugar a que, el 21,
fundado temer que no tardarse aquella
tres soldados de los fugados
tropa en ser atacada y destruida. Con
después de la pérdida de la batalla
esta acertada medida dió Tacon una
llegasen al citado Jujuy y diesen
prueba de su buen juicio, pues
la primera noticia de esta
entonces ignoraba la capitulacion
desgraciada jornada de los
celebrada en Salta por consiguiente
realistas. En su visita, el coronel
que por una de sus condiciones se
Tacón tomó sobre sí la
autorizaba a la guarnicion de Jujuy
responsabilidad de mandar que la
para retirarse libremente sin hostilizar
guarnición emprendiese sin
los pueblos del tránsito. El brigadier
demora la retirada hacia Tupiza, y
Tristan comunico luego al
así se verificó y se puso en
comandante Estevez la capitulacion
marcha a las nueve de la noche
aceptada, por la que las tropas del rey
del mismo día, fundados en el
debían evacuar el territorio del
temor de que no tardaría aquella
gobierno de Salta y no volver a otmar
tropa en ser atacada y destruida,
las armas contra el de Buenos Aires;
puesto que el ejército al que
pero se padecio el notable olvido de
pertenecía había sido vencido.
159
no expresar en esa comunicacion la
Semejante medida de precaución
cláusula acordad respecto a la manera
dada por el buen juicio de
de hacer su retirada la guarnicion de
indicado Tacón, que ignoraba las
Jujuy. (García Camba, 1846, 90).
condiciones de la capitulación
celebrada en Salta entre Tristán
batido y Belgrano triunfante, puso
a salvo, de hecho, a la división
Estévez, que resguardaba de parte
de los realistas a Jujuy, pese a
que, por uno de los artículos del
tratado, se le concedía a la
mencionada guarnición que
pudiese retirarse libremente sin
que los pueblos le hostilizaran el
tránsito por motivo o pretexto
alguno. Así es que, a pocos
momentos de emprendida la
marcha, el comandante Estévez
recibió la comunicación de la
capitulación aceptada, que le
remitía Tristán para su
observancia; por medio de ella,
las tropas del rey debían evacuar
el territorio del gobierno de Salta
160
y no volver a tomar las armas
contra el de Buenos Aires. Pero
no se acordó poner en ella, por
olvido, la cláusula pactada
respecto al modo como debía
hacer su retirada la guarnición de
la que se habla; sino tan
solamente, en globo, lo que se
había verificado, en mérito de las
críticas circunstancias a las que la
suerte de las armas la había
reducido. (Cortegana, 2023, 13 14).
A los dos días de haber abandonado
No habían pasado más de dos días Volumen III -
esta ciudad TAcon, Estevez y
de haber abandonado a la ciudad
Mendizabal, les alcanzó un oficial de
de Jujuy, cuando a Tacón, Estévez Capítulo 2
los capitulados de Salta que conduce
y Mendizábal, con la guarnición
pliegos de Tristan para el general en
que conducían, los alcanzó un
jefe que se hallaba en Potosí, y este
oficial de los capitulados de Salta,
oficial les refirio los pormenores de la
que conducía pliegos de Tristán
malhablada batalla de Salta y los
para el general en jefe Goyeneche,
articulos de la capitulacion convenida,
que se hallaba en Potosí (que sin
Manuscrito VIII -
161
y enterados nuestros jefes de que la
duda contenían ellos el parte de la
guarnición de Jujuy no debía de ser
batalla y las capitulaciones). Y él
perseguida ni molestada continuaron
// [f. 114] todavía vino a referirles
la retirada con menos zozobra y
los pormenores del
mayor comodidad. ¡Tanta era todavia
acontecimiento de Salta y de los
la buena fe con que se entendian los
artículos del convenio. Así,
tratados! Entre tanto llegaron a manos
enterados por boca de este oficial
del general en jefe los mencionados
de que la guarnición de Jujuy no
pliegos de Tristan y con ellos un
podía ser perseguida ni molestada
billete, escrito en francés, en el que
por estar garantizada su
aconsejaba a su primo pusiese a salvo
desocupación de la plaza en que
su persona retirándose lo menos a
se hallaban por aquella
Oruro. (García Camba, 1846, 91).
capitulación, continuaron ya la
retirada con más sosiego y mejor
comodidad, tanto en los alimentos
de la tropa, cuanto en sus
proporcionadas jornadas de
marcha para no fatigarla.
(Cortegana, 2023, 14).
Instruido Goyeneche del desastre de
En consecuencia, obligado a
Volumen III -
la vanguardia de su ejercito dio
evacuar la plaza de Potosí,
Manuscrito VIII -
muestras claras de una verdadera
Goyeneche se retiró a la de Oruro. Capítulo 2
162
sorpresa: convocó seguidamente una
Pero, antes de proceder, convocó
junta de guerra y resolvió abandonar a
a una junta de guerra y resolvió
Potosí mereciendo por ello la censura
con ella abandonar Potosí. Por
de precipitado, porque no obstante de
esta decisión, mereció la censura
hallarse 150 leguas al norte de Salta y
de los jefes españoles de
con la division de Picoaga avanzada,
precipitado, en razón de que la
puso por obra este pensamiento a las
verificó a las 48 horas de haberla
48 horas de haber recibido las
concebido, disentido y aprobado,
comunicaciones de Tristan,
aun cuando estaba a 150 le-//
habiendose visto en la dolorosa
[f. 115]guas al norte de Salta, con
precision de mandar inutitilizar por
la división Picoaga avanzada en
falta de acémilas cantidad
Suipacha y con reliquias del
considerable de munición, 300 tiendas
ejército de Tristán, que aún no
de campaña y algunos efectos de
habían llegado al cuartel general
vestuario. (García Camba, 1846, 91).
donde él estaba. De ese modo, por
hacerlo de tal manera, se vio en la
dolorosa previsión de mandar
inutilizar, por falta de acémilas,
cantidad de considerable de
municiones, 300 tiendas de
campaña y algunos efectos de
vestuario que tenía de repuesto
para reparar la desnudez de sus
veteranos y la de los desgraciados
163
juramentados. (Cortegana, 2023,
15 - 16).
Córdova y Urrutia, José María. 1844.
A principios de este año se
Por esta razón es que hubieron de
Volumen III -
Las 3 épocas del Perú́ , o, Compendio de
aparecieron frente a las isla de San
presentarse, al principio del año
Manuscrito VIII -
su historia Perú. Imprenta del Autor.
Lorenzo del puerto del Callao, una
de 1816, a la boca del citado
Capítulo 5
https://t.ly/VtYXz
fragata corsaria nombrada “Hercules”,
puerto del Callao y por el frente
que había salido de Montevideo y
de la isla de San Lorenzo, primero
después dejaron verse los demás
la fragata Hércules y después los
buques que por varios días estuvieron
demás buques, que estuvieron por
entrando a la rada y tiroteandose con
varios días entrando a la rada y
los castillos. (Córdova y Urrutia,
tiroteándose con los castillos.
1844, 143).
(Cortegana, 2023, 91).
Para alistar un armamento que saliese
Como el comercio de la capital de
Volumen III -
en persecución de dichos buques, se
Lima se vio perjudicado con los
Manuscrito VIII -
reunió en 20 de enero una junta de
apresamientos hechos por Brown,
Capítulo 5
comercio y acordaron armar seis
el virrey Abascal trató de alistar
buques exhibiendo el consulado 300
un armamento que saliese en
mil pesos para el efecto, y el 13 de
persecución de dichos buques, a
febrero dio a la vela, al mando del
cuyo efecto se reunió el 20 de
capitán D. Isidro Canseyro. (Córdova
enero una junta de dicho comercio
y Urrutia, 1844, 143).
y se resolvió que se armasen seis
164
buques, por lo que el Consulado
exhibió 300 000 pesos para sus
aprestos y el 13 de febrero dio la
vela el armamento, al mando del
capitán en jefe don Isidro
Couseyro, para las costas de
Chile. (Cortegana, 2023, 92).
Torrente, Mariano, Historia de la
El ataque de frente no podia ofrecer
Arrojándose, pues, así a los
Volumen IV -
Revolución hispano-americana (1829-
esperanza alguna de la victoria, los
patriotas los españoles, como los
Manuscrito XI -
1830). Madrid: (s. l.).
soldados de Lopez se arrojaron al
soldados más guerreros del
Capítulo 5
https://shorturl.at/jkqBQ
enemigo como los mas aguerrridos
mundo, se empeñó
del mundo; pero al llegar al término
obstinadamente el combate. Pero,
de aquella empinada cuesta se
al llegar al término de aquella
hallaban ya sin aliento, i los enemigos
empinada cuesta, se hallaban ya
pudieron con muy poco trabajo
sin aliento, y los independientes
rechazarlos poniéndose 500 hombre
pudieron con serenidad
fuera de combate, aunque perdieron
imperturbable rechazarlos,
ellos mismos unos 400 entre muertos
poniéndoles 500 hombres fuera de
y heridos, que sucumbieron al
combate, aunque perdiendo ellos
extraordinario arrojo de aquellas
mismos unos 400, entre muertos y
valientes tropas a pesar de su falta de
heridos, que sucumbieron al
extraordinario // [f. 361] arrojo de
165
posición. (Torrente, 1829 – 1830,
aquellas buenas tropas, a pesar de
339).
su falsa posición de atacar
repechando la subida. (Cortegana,
2023, 53).
Siendo los realista dueños de la
Los realistas eran dueños de la
Volumen IV -
fortuna del Panecillo que domina la
fortaleza del Panecillo, que
Manuscrito XI -
ciudad y la misma altura de
dominaba la ciudad y la misma
Capítulo 5
Pichincha, no se convive como se
altura de Pichincha; por lo mismo,
cometió la imprudencia de atacar de
estos españoles no alcanzaron a
frente esta posición cuando por la
concebir cómo es que se cometió
espalda podía contarse con mayores
la imprudencia de atacar de frente
ventajas. Tal vez se apresuraron a dar
esta posición, cuando por la
este paso Aymerich y Lopez en la
espalda podía contarse con
confianza de que no habiendo llegado
mayores ventajas a la suerte de
todavía sino una pequeña parte de las
sus armas. Se cree, no sin
fuerzas rebeldes podrían apoderarse
fundamento, que Aymerich y
de dicho punto sin embargo de lo
López se apresuraron a dar este
desfavorable del terreno. (Torrente,
paso, confiados en que todavía no
1829 – 1830, 339).
habían llegado, de los
independientes, sino una pequeña
parte de sus fuerzas, y que por lo
tanto podrían fácilmente
166
apoderarse de dicho punto, pese a
lo desfavorable del terreno y de la
propia aventura a que se habían
lanzado. (Cortegana, 2023, 53).
Completamente desanimados los
Por ella, cayeron en poder
Volumen IV -
realistas de Quito con la retirada de la
de estos el fuerte del Panecillo
Manuscrito XI -
caballería, y estrechados al mismo
que se hallaba bien defendido y
Capítulo 5
tiempo para que rindieran las armas,
con bastantes provisiones, 2000
ajustaron una honrosa capitulación,
prisioneros de tropa, 160 oficiales,
por la que cayeron en poder de los
14 piezas de artillería, 2100
insurgentes el fuerte del Panecillo que
fusiles y una porción considerable
se hallaba bien defendido y con
de fornituras, cornetas, pertrechos,
bastante provisiones, 1100 prisioneros
banderas, vestuarios, cajas de
de tropa, 160 oficiales, 14 piezas de
guerra y cuanto de útil poseía el
artillería, 1700 fusiles y porción
ejército español para la guerra y
considerable de fornituras, cornetas,
su sostenimiento en el poder. El
banderas, cajas de guerra y cuanto
día 25 de mayo fue en el que se
poseía el ejército español. Fue, pues,
entregó la plaza de Quito, por la
el día 25 de mayo el en que se sepultó
indicada capitulación, a los
al dominio del Rey sobre el reino de
patriotas vencedores, y fue
Quito, y precisamente a los 280 años
también en el que se sepultó para
cabales en que el pabellón de Castilla
siempre el dominio del rey de
167
fue tremolado en el por primera vez.
España sobre este reino; es decir,
(Torrente, 1829 – 1830, 339).
a los 280 años justos en que el
pabellón de Castilla fue tremolado
en él por primera vez cuando
sucedió su conquista por
Sebastián Belalcázar. (Cortegana,
2023, 53).
Miller, John. 1829. Memorias del
Poco después de puesto el sol,
Poco después de puesto el
Volumen IV -
general Guillermo Miller: al servicio de
salieron los patriotas aquella misma
sol, salieron los patriotas de
Manuscrito XI -
la República del Perú. Madrid: Librería
tarde y llegaron a Camaná al
Quilca aquella misma tarde y
Capítulo 12
de Victoriano Suárez. https://t.ly/6sCof
amanecer del 27; donde fueron bien
llegaron a Camaná al amanecer
recibidos por los habitantes, los cuales
del 27, donde fueron bien
dijeron que el subdelegado teniente
recibidos por los habitantes, los
coronel Piñera había huido hacía tres
cuales dijeron que el subdelegado
horas con ochenta hombres,
teniente coronel Peñera había
atravesando el río que corre a una
huido hacía tres horas con 80
milla al norte de la villa y que había
hombres, atravesando el río que
destruido las balsas para impedir que
corre a una milla al norte de la
le persiguiesen. Las isletas o bancos
villa, y que había destruido las
que separan los varios brazos de este
balsas para impedir que lo
río están cubiertos de arbustos, y
persiguiesen. Las isletas o bancos
aunque se hallan vados, excepto en la
que separan los varios brazos de
168
estación en que las nieves de las
este río están cubiertos de
montañas se derriten, es difícil
arbustos y, aunque se hallan
encontrarlos, puesto que rara vez lleva
vados, excepto en la estación en
el río dos días seguidos la misma
que las nieves de las montañas se
cantidad de agua. Y que la costumbre
derriten, es difícil encontrarlos,
de atravesarlo en balsas hace que
puesto que rara vez lleva el río
consideren de poca importancia los
dos días seguidos la misma
vados. Habiendo ofrecido el coronel
cantidad de agua, y que la
Miller una recompensa al que
costumbre de atravesarlo en
descubriese un vado, algunos paisanos
balsas hace que consideren de
salieron inmediatamente en busca de
poca importancia los vados.
él, y para estimularlos más, les
Habiendo ofrecido una
prometió que les volvería el ganado
recompensa al que descubriese un
que les habían quitado los realistas si
vado, algunos paisanos salieron
alcanzaba los fugitivos. A las diez de
inmediatamente en busca de él; y,
la mañana, volvió un paisano con la
para estimularlos más, les prometí
agradable noticia de que había
que les devolvería el ganado que
encontrado uno, y en el acto salieron
les habían quitado los realistas, a
treinta soldados y otros tantos
quienes hallaron durmiendo en el
paisanos, todos bien montados, en
campo, a ocho leguas de Camaná,
persecución de los realistas, a quienes
sobre el camino de Majes.
hallaron durmiendo en el campo a
Veinticinco soldados y el
ocho leguas de Camaná, sobre el
subdelegado fueron hechos
camino de Majes. Veinticinco
prisioneros y el resto se dispersó,
169
soldados y el subdelegado fueron
quitándoles 70 bueyes, algunos
hechos prisioneros y el resto se
caballos, mulas y armas.
dispersó, quitándoles setenta bueyes,
(Cortegana, 2023, 204 - 205).
algunos caballos, mulas y armas.
(Miller, 1829, 214).
Miller volvió a Camaná el
Volví para Camaná el
Volumen IV -
domingo por la mañana, y antes de ir
domingo por la mañana y, antes
Manuscrito XI -
al alojamiento que le tenían
de ir al alojamiento que se me
Capítulo 12
preparado, fue a oír misa. Los
había preparado, fui a oír misa.
habitantes, desde su primera llegada,
Los habitantes, desde mi primera
deseaban saber cuál era su religión, y
llegada, deseaban saber cuál era
este paso no solo satisfizo su
mi religión, y este paso no solo
curiosidad, sino que le consideraron
satisfizo sus curiosida-// [f.
desde aquel momento “como buen
794]des, sino que me
cristiano” y cuyo importante
consideraron desde aquel
descubrimiento se esparció
momento como buen cristiano, y
rápidamente por todo el país. (Miller,
ese importante descubrimiento se
1829, 215).
esparció rápidamente por todo el
país. (Cortegana, 2023, 205).
Camaná está situado en una
pradera que forma un semicírculo de
Camaná está situado en una
pradera que forma un semicírculo
Volumen IV Manuscrito XI 170
cerca de dos leguas de ancho de norte
de cerca de dos leguas de ancho
a sur, y de casi la mitad de extensión
de norte a sur, y de casi la mitad
en la parte más larga de la costa,
de extensión en la parte más larga
rodeada por lomas de arena.46 La
de la costa, rodeada de lomas de
villa está situada a media legua del
arena. Estas producen pasto para
mar. En la barra a la desembocadura
el ganado por la humedad que les
del río hay siempre una horrible
suministran las garúas o grandes
resaca, y no hay ningún sitio donde
nieblas que reinan la mayor parte
poderse embarcar más inmediato que
del año. La villa está situada a
la caleta de Quilca. Camaná es un
media legua del mar. En la barra a
ejemplo marcado de lo que puede
la desembocadura del río hay
alcanzarse por la aplicación de
siempre una horrible resaca, y no
capitales en las manos de un
hay ningún sitio donde poderse
individuo de talento y perseverancia.
embarcar más inmediato que la
Cincuenta y seis años antes se
caleta de Quilca. Camaná es un
componía únicamente de media
ejemplo marcado de lo que puede
docena de chozas y unos treinta
alcanzarse por aplicación de
habitantes, que ganaban su sustento
capitales, en las manos de un
sirviendo de barqueros pasando los
individuo de talento y
viajeros y efectos en balsas, de un
perseverancia. Cincuenta y seis
lado al otro del río. Un caballero
años antes se componía
español llamado Flores, que había
únicamente de media docena de
vivido de un modo extravagante,
chozas y unos treinta habitantes,
consagró veinte mil duros que le
que ganaban su sustento sirviendo
Capítulo 12
171
quedaban para abrir grandes acequias
de barqueros pasando a los
y extraer del río una cantidad de agua
viajeros y efectos en balsas de un
suficiente para fertilizar un terreno
lado al otro del río. Un caballero
que en el día mantiene una población
español llamado Flores, que había
de cinco mil almas, y que puede ser
vivido de un modo extravagante,
capaz de mantener diez veces este
consagró veinte mil duros que le
número. Cualquiera que construía una
quedaban para abrir grandes
casa recibía por solo aquel acto, y sin
acequias y extraer del río una
cargas o condición alguna, una
cantidad de agua suficiente para
porción proporcionada de tierra.
fertilizar un terreno que en el día
(Miller, 1829, 215).
mantiene una población de cinco
mil almas, y que puede ser capaz
de mantener diez veces este
número. Cualquiera que construía
una casa recibía por solo aquel
acto, y sin cargas o condición
alguna, una porción
proporcionada de tierra.
(Cortegana, 2023, 205 - 206).
Del Río, Manuel. Lima justificada en el
La heroica Ciudad de los Libres, la
La heroica Ciudad de los Libres,
Volumen IV -
suceso del 25 de julio 1822.
ilustrada Lima, había sido la que,
la ilustrada Lima, había sido la
Manuscrito XI -
https://shorturl.at/cDFYZ
desde el principio de la revolución de
que, desde el principio de la
Capítulo 7
172
América, cooperó eficazmente de un
revolución de América, cooperó
modo indirecto, por su opinión, a que
eficazmente de un modo
sacudiesen el yugo de la tiranía
indirecto, por su opinión, a que
muchos pueblos de su continente.
sacudiesen el yugo de la tiranía
Pero, por otra parte, los virreyes
muchos pueblos de su continente.
hacían uso de sus inagotables recursos
Pero, por otra parte, los virreyes
y, con ellos, la guerra a la
hacían uso de sus inagotables
independencia. (Del Río, 1822, 3 – 4)
recursos y, con ellos, la guerra a
la independencia. (Cortegana,
2023, 110).
Para poder dar el verdadero valor al
Para poder dar el verdadero valor
Volumen IV -
patriotismo de Lima, es necesario
al patriotismo de Lima, es
Manuscrito XI -
tener conocimiento del número de las
necesario tener conocimiento del
Capítulo 7
tropas que lo ahogaban, del de los
número de las tropas que lo
españoles que la habitaban y,
ahogaban, del de los españoles
últimamente, de sus relaciones. No
que la habitaban y, últimamente,
obstante tantos y al parecer
de sus relaciones. No obstante
insuperables obstáculos, Lima
tantos y al parecer insuperables
siempre se conservó muy celosa de
obstáculos, Lima siempre se
sus derechos y su dignidad. Apenas se
conservó muy celosa de sus
le llamó por España a tener un
derechos y su dignidad. Apenas se
representante en la junta central
le llamó por España a tener un
173
instalada en Aranjuez el año de 1808,
representante en la junta central
sus esforzados hijos representaron
instalada en Aranjuez el año de
notablemente lo que en aquella época
1808, sus esforzados hijos
les convenía. Tembló, pues, el
representaron notablemente lo que
despotismo, y Lima se colocó desde
en aquella época les convenía.
entonces en el lugar al que la
Tembló, pues, el despotismo, y
naturaleza la llamaba. (Del Río, 1822,
Lima se colocó desde entonces en
4).
el lugar al que la naturaleza la
llamaba. (Cortegana, 2023, 110).
Si un cúmulo de circunstancias le
Si un cúmulo de circunstancias le
Volumen IV -
hicieron parecer después, en el teatro
hicieron parecer después, en el
Manuscrito XI -
de la revolución, con menos energía,
teatro de la revolución, con menos Capítulo 7
fue no por pusilanimidad, sino por un
energía, fue no por pusilanimidad,
efecto de prudencia y de política.
sino por un efecto de prudencia y
Creían, y muy sabiamente, los
de política. Creían, y muy
peruanos que el mejor modo de
sabiamente, los peruanos que el
afianzar su independencia sería
mejor modo de afianzar su
cuando el amor a la libertad no
independencia sería cuando el
estuviese solamente generalizado,
amor a la libertad no estuviese
sino que también fuese la opinión más
solamente generalizado, sino que
ilustrada. Para esto se establecieron
también fuese la opinión más
reuniones patrióticas y se escribían en
ilustrada. Para esto se
174
secreto interesantes papeles que
establecieron reuniones patrióticas
circulaban con rapidez y propagaban
y se escribían en secreto
ideas saludables. (Del Río, 1822, 4).
interesantes papeles que
circulaban con rapidez y
propagaban ideas saludables.
(Cortegana, 2023, 110 - 111).
García Camba, Andrés. 1846. Memorias
Así, estas tropas de conocida calidad,
Estas tropas de conocida calidad,
Volumen IV -
para la historia de las armas españolas
descansadas, bien armadas, vestidas,
descansadas, bien armadas,
Manuscrito XI -
en el Perú. Madrid: Sociedad
instruidas, disciplinadas, engreídas y
vestidas, instruidas, disciplinadas,
Capítulo 8
Tipográfica de Hortelano y Compañía.
bajo la más severa moralidad de orden
engreidas con tres años de
https://t.ly/smoDl
y subordinación, en tres años de
triunfos, acostumbradas á la
recientes triunfos, estaban
movilidad y á la rigidez de la
acostumbradas a la movilidad más
temperatura, cuando esta sola
rápida y a la rigidez de los
habia de producir en gran parte de
temperamentos de la cordillera de los
las enemigas notable sensacion,
Andes y de los caldeados arenales de
no habrá militar alguno que nos
la costa, así como a los templados que
contradiga si creemos que bien
brindan los variados valles de la
podian habérselas sin desventaja
sierra. Por ello, cuando esta sola
con los cinco ó seis mil
divergencia había de producir en gran
colombianos, que formaban el
parte de las tropas enemigas notable
nervio principal del ejército
sensación y atraso, por ser ellos
independiente, pues que las
175
naturales de los temperamentos
restantes tropas 6 eran colecticias
cálidos del norte, no habrá militar
y visoñas ó habian sufrido ya
alguno que contradiga si se cree que
repetidas derrotas. (Cortegana,
bien pudieron habérselas como se las
2023, 197).
hubieron con excesiva ventaja contra
los cuatro mil setecientos treinta y un
colombianos que auxiliaban a cuatro
mil doscientos setenta y cinco
peruanos, inclusive los guerrilleros
que formaban el ejército nacional y
ochenta y cinco granaderos de los
Andes, también auxiliares de los
expresados peruanos, y restos fieles
de aquellos que se habían pasado a los
españoles, en el mes de febrero del
mismo año. (García Camba, 1846,
28).
García Camba, Andrés. 1846. Memorias
Peruanos, la campaña que debe
Bolivar mismo, despues de la
Volumen V -
para la historia de las armas españolas
completar vuestra libertad ha
señalada ventaja que obtuvo en
Manuscrito XII -
en el Perú. Madrid: Sociedad
empezado bajo los auspicios más
Junin sobre el ejército real del
Capítulo 12
Tipográfica de Hortelano y Compañía.
favorables. El ejército del general
Norte decia á los peruanos en la
https://t.ly/smoDl
Canterac ha recibido en Junín un
proclama que les dirigió con fecha
176
golpe mortal, habiendo perdido por
15 de agosto desde Huancayo: «
consecuencia de este suceso un tercio
Dos gran- »des enemigos acosan á
de su fuerza y toda su moral. Los
los españoles del Perú , el ejército
españoles huyen despavoridos,
unido y el »ejército del bravo
abandonando las más fértiles
Olañeta, que desesperado de la
provincias; mientras el general
tiranía española ha »sacudido el
Olañeta ocupa el alto Perú con un
yugo y combate con el mayor
ejército verdaderamente patriota y
denuedo á los enemigos de
protector de la libertad. Peruanos, dos
»América y á los propios suyos.
grandes enemigos acosan a los
El general Olañeta y sus ilustres
españoles del Perú: el Ejército Unido
>compañeros son dignos de la
y el ejército del bravo Olañeta, que,
gratitud americana y yo los
desesperado por la tiranía española,
considero »como eminentemente
ha sacudido el yugo y combate con el
beneméritos, acreedores á las
mayor denuedo a los enemigos de
mayores recom- » pensas . Asi el
América y a los propios suyos. El
Perú y la América toda deben
general Olañeta y sus ilustres
reconocer en el gene- »ral Olañeta
compañeros son dignos de la gratitud
á uno de sus libertadores. »
americana, y yo los considero
Finalmente las tropas de este
eminentemente beneméritos
general , desde que se sustrajo de
acreedores // [f. 185] a las mayores
la obediencia que debia al virey
recompensas. Así, el Perú y la
en fines de 1823 hasta que , ó bien
América toda deben reconocer en el
arrepentido de su conducta ó
general Olañeta a uno de sus
reconociendo la red en que habia
177
libertadores. Peruanos, bien pronto
caido quiso en vano librarse de
visitaremos la cuna del imperio
ella y murió á manos de los
peruano y el templo del sol. El Cusco
mismosque le habian sostenido,
tendrá, en el primer día de su libertad,
no fueron molestadas por los
más placer y más gloria que bajo el
independientes, que al propio
dorado reino de sus incas. Cuartel
tiempo empleaban todo género de
general libertador, en Huancayo, a 15
esfuerzos por hostilizar á las que
de agosto de 1824. (García Camba,
dependian de las autoridades
1846, 40 - 41).
legítimas. (Cortegana, 2023, 189).
García Camba, Andrés. 1846. Memorias
Como a las diez o poco más de la
Como á las diez ó poco mas de la
Volumen V -
para la historia de las armas españolas
mañana, el ejército del virrey rompió
mañana el ejército del virey
Manuscrito XII -
en el Perú. Madrid: Sociedad
su movimiento con contento y
rompió su movimiento con
Capítulo 14
Tipográfica de Hortelano y Compañía.
esperanza, que así suelen ser los
contento y esperanza, que asi
https://t.ly/smoDl
propósitos del hombre. El general
suelen ser los propósitos del
Villalobos bajó con el primer batallón
hombre. El general Villalobos
del primer regimiento hasta colocarlo
bajó con el primer batallon del
en el punto señalado, donde debía
Primer regimiento hasta colocarlo
esperar a que todas las tropas
en el punto señalado , donde debia
descendieran al llano del cerro y a que
esperar á que todas las tropas
las siete piezas de artillería,
descendieran á la indicada
destinadas al ala izquierda, fuesen
planicie y que las siete piezas de
descargadas de las mulas, montadas y
artillería , destinadas al ala
178
armadas, para secundar el ataque
izquierda, fuesen descargadas de
cuando la derecha se hubiese
las mulas, montadas y armadas
decididamente empeñado. El
para secundar el ataque cuando la
escuadrón San Carlos, que mandaba
derecha se hubiese decididamente
don Manuel de la Canal, recibió orden
empeñado. El escuadron de San
de seguir el primer movimiento y de
Carlos , que mandaba D. Manuel
acelerar el desfile, para poder sostener
de la Canal, recibió órden de
las guerrillas del centro a la izquierda,
seguir el primer movimiento, y de
encargo que cumplió a costa de la
acelerar el desfile , para poder
mayor parte de sus individuos. Poco
sostener las guerrillas del centro á
después de haber alcanzado la
la izquierda , encargo que cumplió
infantería realista sus designados
á costa de la mayor parte de sus
puestos de preparación, rompió el
individuos . Poco despues de
general Valdés el ataque desalojando
haber alcanzado la infantería
el batallón del centro, que mandaba
realista sus designados puestos de
don Felipe Rivero, y poniendo en fuga
preparacion, rompió el general
las compañías enemigas que
Valdés el ataque desalojando el
ocupaban la casa que promediaba el
batallon del Centro , que mandaba
campo por aquella parte. (García
D. Felipe Ribero , y poniendo en
Camba, 1846, 118 - 119).
fuga las compañías enemigas que
ocupaban la casa que promediaba
el campo por aquella parte.
(Cortegana, 2023, 234 - 235).
179
García Camba, Andrés. 1846. Memorias
Tamaña resolución, en los momentos
Tamaña resolucion en los
Volumen V -
para la historia de las armas españolas
en que la superioridad de nuestras
momentos en que la superioridad
Manuscrito XII -
en el Perú. Madrid: Sociedad
fuerzas navales podía prestar gran
de nuestras fuerzas navales podia
Capítulo 14
Tipográfica de Hortelano y Compañía.
protección a nuestros intereses y
prestar grande proteccion á
https://t.ly/smoDl
familias de españoles desgraciados,
muchos intereses y familias de
parecía inconcebible, cualesquiera
españoles desgraciados parecia
que pudieran ser las instrucciones del
inconcebible , cualesquiera que
gobierno de Su Majestad. Los jefes
pudieran ser las instrucciones del
del ejército vencidos en Ayacucho no
gobierno de S. M. Los jefes del
se habían olvidado, en medio de su
ejército vencidos en Ayacucho no
triste suerte, de estipular lo
se habian olvidado , en medio de
conveniente para asegurar la
su triste suerte , de estipular lo
salvación de aquella escuadra, que tan
conveniente para asegurar la
indolentemente se apresuraba a
salvacion de aquella escuadra.
abandonar. Pero, como, entre los
Entre los sugetos que se hallaban
sujetos que se hallaban en la caleta de
en la caleta de Quilca era uno el
Quilca, estaba el rico comerciante
rico comerciante español D.
español don Lucas García de la
Lucas Garcia de la Cotera, por
Cotera, 66 por su disposición se
cuya disposicion se trasmitió por
trasmitió por extraordinario a La
extraordinario á La Serna el
Serna el acuerdo definitivo del capitán
acuerdo definitivo del capitan de
de navío don Roque Guruceta, quien
navío D. Roque Guruceta , quien
para economizar raciones había
para cconomizar raciones habia
180
resuelto desembarcar la tropa del
resuelto tambien desembarcar la
batallón Arequipa, que había sacado
tropa del batallon de Arequipa
del Callao y tenía a bordo del navío
que habia sacado del Callao y
Asia. El virrey recibió la referida
tenia á bordo del navio Asia . El
noticia al descender a la costa entre
virey recibió la referida noticia al
Ocoña y Camaná, y ofició
descender á la costa entre Ocoña y
inmediatamente a Guruceta para que
Camaná y ofició inmediatamente
suspendiera su partida al menos hasta
á Guruceta para que suspendiera
su inmediata llegada a Quilca, y así
su partida al menos hasta su
ofreció cumplirlo, y lo cumplió en
inmediata llegada á Quilca, y así
efecto, pero esperando a la vela,
ofreció cumplirlo , y lo cumplió
después de haber echado en tierra a la
en efecto , pero esperando á la
expresada tropa del batallón
vela , despues de haber echado en
Arequipa. El general Tristán había
tierra la espresada tropa del
igualmente mandado licenciar la
hatallon de Arequipa. El general
mayor parte de la poca tropa que
Tristan habia igualmente
había en dicha capital para facilitar
mandado licenciar la mayor parte
más, sin duda, el término de la
de la poca tropa que habia en
avenencia iniciada por él con los
dicha capital para facilitar mas sin
independientes. (García Camba, 1846,
duda el término de la avenencia
229 - 230).
iniciada por él con los
independientes . De este modo
finalizó el presente año de 1824
sin quedar á los afortunados
181
enemigos mas obstáculos que
vencer en todo el Perú que los que
ofrecian la dudosa conducta de
Olañeta y la noble resistencia de
la plaza del Callao , contra la cual
comenzaban todos los aprestos de
un sitio largo y mortífero.
(Cortegana, 2023, 272 - 273).
182