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Usos políticos de la Historia: Juan Basilio Cortegana

2024, FLACSO-Ecuador

Esta tesis aborda al manuscrito Historia del Perú, compuesto por trece tomos, redactado por Juan Basilio Cortegana, un veterano militar de la emancipación peruana. Este es un esfuerzo para explicar el pasado peruano, especialmente antes de la formalización y la institucionalización de la disciplina histórica en Perú. Cortegana se diferencia de sus escritores contemporáneos, la mayoría de los cuales eran exmilitares, que se limitaron a proporcionar recuerdos parciales y memorias aisladas sobre eventos y aspectos específicos de la independencia del Perú. En contraposición, este autor también emprendió la ambiciosa tarea de compilar una "historia general". Su objetivo era brindar una perspectiva integral del país, considerándolo como una entidad orgánica, y cubriendo los períodos prehispánico, colonial y emancipador de la historia peruana.

www.flacsoandes.edu.ec Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, FLACSO Ecuador Departamento de Antropología, Historia y Humanidades Convocatoria 2019-2021 Tesis para obtener el título de Maestría de Investigación en Historia Usos políticos de la escritura de la Historia a inicios del siglo XIX en el Perú: El manuscrito ´Historia del Perú´ de Juan Basilio Cortegana Juan Antonio Lan Ninamango Asesora: Carmen Mireya Salgado Gómez Lectores: Viviana Alexandra Velasco Herrera y José Demetrio de la Puente Brunke Quito, mayo de 2024 Índice de contenido Epígrafe......................................................................................................................... 4 Resumen ........................................................................................................................ 6 Introducción ................................................................................................................... 9 Capítulo 1: Trayectoria de vida de Juan Basilio Cortegana ................................................. 13 1.1. Vida militar ........................................................................................................... 16 1.2. Vida política .......................................................................................................... 18 1.3. Líder entre los vencedores ....................................................................................... 22 1.4. Reflexiones a partir de este capítulo .......................................................................... 31 Capítulo 2: Algunas consideraciones sobre el manuscrito Historia del Perú ......................... 32 2.1. Un manuscrito, muchas manos ................................................................................. 32 2.2 Formas de hacer Historia en el siglo XIX .................................................................. 36 2.3. Historia del Perú .................................................................................................... 42 2.4. Reflexiones sobre este capítulo ................................................................................ 47 Capítulo 3: ¿Historia General de los peruanos o una memoria parcial del héroe celendino? .... 48 3.1. Descripción y análisis de los primeros siete primeros tomos del manuscrito ................... 49 3.1.1. Sumilla literal de los tomos I y II .............................................................................. 49 3.1.2. Sumilla literal de los tomos III y IV ...................................................................... 50 3.1.3. Sumilla literal de los tomos V, VI y VII ................................................................ 51 3.2. Cotejo de fuentes en los siete primeros tomos ............................................................ 53 3.3. Descripción y análisis de los primeros seis últimos tomos del manuscrito ...................... 58 3.3.1. Sumillas de los tomos XVIII, XIX, X y XI ............................................................ 58 3.3.2 Sumillas de los tomos XII y XIII y cotejo de fuentes ............................................... 59 3.4. Las intenciones de Cortegana al escribir su Historia del Perú ...................................... 61 3.5. Reflexiones sobre este capítulo ................................................................................ 64 Conclusiones ................................................................................................................ 66 Referencias .................................................................................................................. 69 Anexos ........................................................................................................................ 79 2 Lista de ilustraciones Fotos Capítulo 1 Foto 1. 1 Fotografía de estudio de Juan Basilio Cortegana. ..................................................... 15 Foto 1. 2 Estadística Histórica, Geográfica, Física y Política del Distrito de Celendín. .......... 19 Foto 1. 3 Retrato de Juan Basilio Cortegana por Etna Velarde. ............................................... 23 Foto 1. 4 Busto de Juan Basilio Cortegana. Ubicado en la Benemérita Sociedad Fundadores de la Independencia. ................................................................................................................. 28 Foto 1. 5 Obituario de Juan Basilio Cortegana. ....................................................................... 29 Foto 1. 6 Testamento de Juan Basilio Cortegana. .................................................................... 30 Tabla Capitulo 2 Tabla 2. 1. Contenido de los tomos del manuscrito “Historia del Perú”. Porras Barrenechea (1954, 492) ............................................................................................................................... 44 Tabla Capitulo 3 Tabla 3. 1 Tomo I y II del manuscrito...................................................................................... 54 Tabla 3. 2 Tos III y IV del manuscrito ..................................................................................... 54 Tabla 3. 3 Tomo V, VI y VII del manuscrito ........................................................................... 57 3 Epígrafe Por eso, el gran escritor norteamericano Arthur Miller, incluyó en una obra teatral estrenada hace poco tiempo en Nueva York un diálogo entre Dios y Lucifer. Este último ofrece al Supremo Hacedor un programa a través del cual será cambiar el futuro del mundo, un porvenir devorado por la guerra. Y Dios responde: "No es posible cambiar el futuro; únicamente cambia el pasado". A lo cual, sorprendido, Lucifer dice: "¿Cómo se puede cambiar el pasado?". Nuevamente unas palabras divinas: "La gente no se acuerda de nada y basta con soltar unos documentos". A pesar de todo, el historiador cuya ambición máxima es la de ser fiel a su tarea ha de tratar de acercarse, dentro de sus limitaciones, a la verdad. Basadre, Jorge. 2021. El azar en la historia y sus límites. 44-45 pp. 5 Resumen Esta tesis aborda al manuscrito Historia del Perú, compuesto por trece tomos, redactado por Juan Basilio Cortegana, un veterano militar de la emancipación peruana. Este es un esfuerzo para explicar el pasado peruano, especialmente antes de la formalización y la institucionalización de la disciplina histórica en Perú. Cortegana se diferencia de sus escritores contemporáneos, la mayoría de los cuales eran exmilitares, que se limitaron a proporcionar recuerdos parciales y memorias aisladas sobre eventos y aspectos específicos de la independencia del Perú. En contraposición, este autor también emprendió la ambiciosa tarea de compilar una "historia general". Su objetivo era brindar una perspectiva integral del país, considerándolo como una entidad orgánica, y cubriendo los períodos prehispánico, colonial y emancipador de la historia peruana. Sin embargo, a pesar de sus esfuerzos por aparecer como un "narrador" en esta visión general y de largo alcance de la historia peruana, Cortegana no pudo desligarse completamente de su posición como testigo directo de los eventos que estaba narrando. Por lo tanto, en la tesis se argumenta que su manuscrito se sitúa en un espacio intermedio, oscilando entre dos géneros de escritura principales: las memorias personales y la historia general. Al analizar el contexto en el que Cortegana escribió su obra, esta tesis propone que sus motivos para emprender esta labor estaban alineados con los intereses políticos y reivindicativos de los veteranos que participaron en las guerras de emancipación. Ellos buscaban presentarse como los fundadores legítimos de la naciente república, y el trabajo de Cortegana puede ser visto como un reflejo de ello. Para enriquecer la comprensión de la obra de Cortegana, este estudio la compara y la contextualiza con otras obras similares escritas por autores que se dedicaron a documentar historias generales y memorias personales antes de 1848. Así, al examinar Historia del Perú se obtiene una visión más matizada de las concepciones del pasado que tenían los excombatientes y veteranos que participaron en estos procesos de cambio histórico. Por último, este análisis contribuye de manera significativa a nuestro conocimiento de la cultura letrada e ilustrada de los veteranos de guerra, así como a un entendimiento más profundo y contextualizado de las memorias de la independencia peruana. Palabras clave: Cortegana; Independencia del Perú; Historiografía; Memoria; Historia Cultural. 6 Agradecimientos Valoro, en primer lugar, a mi asesora, Mireya Salgado, de quien tuve la oportunidad de ser su discípulo. Como maestra, no solo aprecio sus enseñanzas, sino también su amabilidad y consideración, además de su insuperable ayuda que me pues sin su soporte, mi paso como estudiante extranjero en la ciudad de Quito y en la FLACSO-Ecuador hubiera sido menos llevadera. Por su parte, Roberto Chauca también fue alguien fundamental en el tramo inicial del desarrollo de esta tesis, debido a sus minuciosos comentarios, correcciones, asesorías y sugerencias que acompañaron cada una de las cinco materias que cursé con él. Tanto en las clases presenciales como virtuales, recordaré para siempre los cursos de Mercedes Prieto, María Fernanda Troya, Viviana Velasco y Valeria Coronel, quienes fueron denominadas como “las profas” de la Historia por sus estudiantes. Reconozco, también, que las materias que cursé con el profesor Nicolás Cuvi fueron de mucha ayuda para profundizar y consolidar mis conocimientos en la línea de investigación de Historia de la Ciencia; así como él, las clases con Michael Uzendoski fueron más que motivadoras para acercarme más a la Antropología y a los estudios sobre el Medio Ambiente. No dejaré de mencionar la importancia del profesor Fernando García al mostrar los vínculos entre la Antropología y la Historia. No menos importante fue la guía de Alicia Torres desde la coordinación de la Maestría de Investigación en Historia para que los historiadores prospectos puedan desempeñarse de la mejor manera. Con el apoyo de Diego Paladines y la incansable labor de Marcia Suárez, los colegas tenían un sólido sostén ante cualquier duda administrativa. Agradezco también que ellos me brindaron la oportunidad de formar parte del equipo de publicidad para la campaña de atracción de alumnos de la nueva cohorte junto a mi colega María Isabel Naranjo. En la Universidad, además pude desarrollar y consolidar otras habilidades y capacidades pues tuve la suerte apoyar en la Escuela de Verano Chimborazo, en un proyecto editorial en inglés y en la confección de una plataforma web bilingüe anclada en las humanidades digitales. Estos proyectos fueron coordinados por Mark Thurner, Juan Pimentel, Mireya Salgado y Vanessa Montenegro, de quienes aprendí mucho. Asimismo, mi participación en FLACSORadio fue más que provechosa y me abrió un mundo nuevo por explorar, además de posteriores oportunidades laborales en mi país. La guía de Xavier Macas fue importante y más 7 que motivadora para adentrarme en la producción y conducción de podcasts y programas radiales virtuales. Gracias a la beca y al estipendio por excelencia académica, conté con un apoyo material sin igual que me permitió dedicarme de forma exclusiva a todo lo concerniente a la Maestría por el lapso dos años. Tengo que añadir que esta tesis no hubiera sido posible sin el soporte de dos financiamientos concursables: el XXVIII Financiamiento de Tesis de FLACSO-Ecuador y el Concurso Nacional de Investigación Histórica del Perú. Asimismo, el auspicio de la Biblioteca Nacional y la Fundación BBVA fueron cruciales para seguir sosteniendo la investigación más allá de acabado el estipendio. Como sabemos, la financiación y los auspicios en nuestra disciplina rara vez ocurre y, más aún, en América Latina. Varios maestros y colegas peruanos dieron grandes recomendaciones, comentarios y sugerencias en proceso de la tesis. Así, tengo que agradecer a José de la Puente, Carmen Mc Evoy, Marcel Velásquez, Joseph Dager, Francisco Quiroz, Claudia Rosas, Carlos Gálvez Peña, Cristóbal Aljovín, Víctor Arrambide, Nelson Pereyra, Gustavo Montoya y Elizabeth Hernandez. Escribir en pandemia tuvo severas limitaciones por el acceso a las bibliotecas y los archivos, así que sin los recursos digitalizados esta investigación no hubiera podido llevarse a cabo y, en ese sentido, fue mucho más que importante la plataforma “Fuentes Históricas Peruanas” dirigida por el historiador Jair Miranda. También, en la Biblioteca Nacional del Perú, tengo que mencionar el apoyo de Gerardo Trillo, Jimmy Martínez, Jorge Huamán y Leandro Villalobos. Debo agradecer a mis compañeros de la FLACSO como Laura Barreros, Juan Fernando Graterol, Maelyn Jaramillo, Claudio Yépez, Michelle Andrade, Liliana Rocha, Angie Clara, Toña Coronel, Jairo Nicolalde, Jazmín Duque, Javier Saravia, Mayra Pardo, Danny del Pozo y Esteban Enríquez. A mis amigos peruanos como Christopher Cornelio, José Mogrovejo Palomo, Marcos Alarcón, David Mogrovejo y Carlos Aime les debo mucho por su apoyo incondicional en este proceso. Asimismo, mi madre estuvo siempre a mi lado en este accidentado y gratificante camino del historiador. Por último, deseo dedicar esta tesis a la memoria de Eduardo Barriga Altamirano con quien no solo nos unía la incontrastable ciudad de Huancayo, el Arsenal FC y ciertos grupos de metal, sino también una gran amistad. Tengo que admitir que su partida prematura todavía se me hace muy difícil de procesar. 8 Introducción Es un hecho que, en las guerras de independencia en el Perú, participaron distintos actores políticos, sociales y militares; en consecuencia, cada uno se propuso dejar por escrito sus experiencias bélicas con la finalidad de justificar sus actos en ellas. Uno de ello fue un miembro del ejército patriota poco conocido en los libros de Historia: Juan Basilio Cortegana (1801-1877). Tras haber estado presente en las batallas claves para el triunfo en la guerra, como Junín y Ayacucho, redactó, desde el barrio popular de Malambo, el manuscrito Historia del Perú, compuesto por trece tomos, que abordaba las épocas prehispánica, colonial y emancipadora. Aunque nunca fue publicado, finalmente llegó a la Biblioteca Nacional del Perú en 1945 gracias a la gestión del historiador Jorge Basadre. En ese sentido, con esta tesis busco rescatar el manuscrito de Cortegana como parte de una escritura histórica que surgió mucho antes de la institucionalización de la Historia como disciplina y en medio del proceso de construcción del Perú como Estado-nación. Así, en estas líneas planteo que esta fuente se sitúa entre el género de memorias testimoniales y el de historias generales. Para demostrarlo, estudio las características del manuscrito en relación con ambos géneros y cuáles fueron sus implicancias escriturales y políticas para los primeros años de la República del Perú. Una de las primeras formas de escribir historia en el Perú decimonónico fue a través de las memorias vivenciales. Sus autores, utilizando fuentes orales y diversa documentación histórica, narraron, de forma subjetiva, los sucesos políticos no solo con la finalidad de destacar su participación en ellos, sino también, como señaló el historiador Félix Denegri Luna, para la “defensa de la fama y el buen nombre de sus propios autores, que escribieron para protegerlos” (Denegri Luna1971a, p. XIII). Cortegana siguió esa tendencia, pero también se interesó en mostrarse como “narrador” de un ente historiable como el Perú, cuya historia trascendía los hechos circunstanciales y testimoniales de una época en particular. A este último género, Jorge Basadre le denominó “historia general”. Uno de sus máximos exponentes en la primera mitad del siglo XIX fue José María Córdova y Urrutia con su obra Las 3 épocas del Perú. Al ofrecer una visión en conjunto de la historia nacional, se dividió en tres partes: 1) Fundación del imperio de los incas, 2) Dinastías ultramarinas, y 3) Perú independiente. Su estilo es lineal e incorpora las tres épocas señaladas como parte de una sola tradición, sin solución de continuidad. Pese a ello, para Mark Thurner (2012), esta fuente 9 inaugura la historia patria en el Perú, pues su autor rechazaba las especulaciones de intelectuales europeos que habían sugerido que el fundador de la dinastía inca no había sido “peruano”. Por ello, de la versión del Inca Garcilaso, se cita el mito de los hermanos Ayar e insiste en que tanto Manco Cápac como Mama Ocllo (la reina madre inca original) indudablemente “provinieron de una pequeña isla del Lago Titicaca”. En suma, se puede concluir que Córdova y Urrutia fue el primer autor en mostrar una historia completa del Perú en tiempos republicanos. Ese también fue el interés de Cortegana al presentar una visión total del Perú como un ente que transcurre en el tiempo, los hechos y otros acontecimientos de la independencia. En ese sentido, Historia del Perú es uno de los pocos casos en el que se propone escribir una historia general, mucho antes que la publicación de la obra emblemática de Sebastián Lorente, que apareció durante la segunda mitad del siglo XIX y que es considerada como la primera producción que hacía una historia total. El propósito principal de esta tesis es analizar el manuscrito Historia del Perú de Juan Basilio Cortegana, enfocándose en su rol dentro de la escritura del pasado en la primera mitad del siglo XIX en Perú e Hispanoamérica. Los objetivos secundarios incluyen examinar cómo se forjó una narrativa nacional peruana en el género de historia general, comparar el contenido del manuscrito con los escritos testimoniales sobre la independencia y, finalmente, contextualizar y vincular la biografía de Juan Basilio Cortegana con los usos políticos de la escritura del pasado. Por ello, en esta tesis demuestro que el manuscrito representó una forma de escritura en transición al oscilar entre dos géneros, ya que se presentó como una historia general que mantenía características del género de memorias; en otras palabras, el autor se mostró como un “narrador” que buscaba brindar una visión total e histórica del Perú, pero que, en su narración, no pudo abandonar por completo su posición como testigo. Esto se sostiene en los distintos tomos que redactó: en la mayoría, se preocupó por presentar los orígenes incaicos y coloniales del Perú, en tanto que en los últimos se concentró en narrar hechos vividos durante las guerras de independencia y primeros años de la República naciente. Estos rasgos están ligados a las transformaciones políticas del periodo y a sus modalidades de la escritura histórica. Por ende, las memorias de la independencia se encuentran relacionadas con contextos políticos cuyo distintivo esencial es el conflicto entre caudillos y veteranos de 10 las guerras de emancipación; mientras que las historias generales están vinculadas a proyectos políticos orientados a la construcción de la nación. De este modo, se postula que la obra de Cortegana representa un importante hito en la cultura letrada de inicios de la República de cambio y transición, y su manuscrito es un híbrido documental que manifiesta esta presión política que se experimenta en las primeras décadas de la república peruana. Del mismo modo, su autor, siendo parte del colectivo de veteranos de guerra, emplea el pasado -en este caso, construye una "historia general" con objetivos políticos y reivindicativos para así lograr derechos y beneficios económicos del Estado. Para aproximarme a este tema de investigación, primero me inmiscuyo con detalle en la fuente primaria, con el propósito de analizarla y contextualizarla. Además, realicé una base de datos que compara lo escrito por Cortegana y las fuentes escritas en las que se inspira y usa, la cual se encuentra en la sección de anexos. Para adicionar la información recogida, busqué otros documentos y fuentes que dejaron huella en el manuscrito; así, tampoco faltó el trabajo de archivo. Para ello, pude acceder al Archivo Histórico Militar del Perú, cuyos fondos y documentos están catalogados desde 1821 hasta 1874. Entre los tipos de documentos que se pueden encontrar tenemos cartas, peticiones y fojas de vida. En estas últimas, es posible conocer los servicios prestados por cada militar. Por último, revisé documentación en el Archivo General de la Nación (AGN) del Perú, institución rectora que concentra la información estatal y privada. Todo esto nos ayudó a bosquejar la biografía de Juan Basilio de Cortegana, tanto en su cumplimiento militar como de veterano de guerra en los primeros años de la República. La presente tesis tendrá un itinerario determinado. Ciertamente, es una decisión arbitraria, pero, a la vez, un camino, una forma de exposición, que tiene una secuencia lógica que pretende brindar solidez a la argumentación. Esto no significa que las historias de Juan Basilio Cortegana y su respectivo manuscrito solo puedan narrarse de esta manera; al contrario, existen muchas posibles formas de mostrar los usos políticos de la Historia; y, más aún, con la compleja vida de este y su obra manuscrita. Sin embargo, este trabajo tiene como fin seguir los lineamientos académicos e institucionales. Es, por tal razón, que he determinado la composición de tres capítulos de la siguiente manera. El capítulo primero contextualiza y narrar la vida de Juan Basilio Cortegana. Esto es necesario para entender el contexto y el lugar de enunciación en el cual fue producido el manuscrito Historia del Perú. Todo historiador es un biógrafo, aunque muchas veces lo omita y no se 11 anime a decirlo de manera explícita. En ese sentido, este capítulo tiene como meta esbozar la historia de vida de nuestro personaje desde los retazos y las huellas que nos dejó en los archivos y repositorios. El héroe celendino se movió entre tres esferas distintas y, a la vez, complementarias como son lo militar, lo político y el liderazgo de la sociedad civil. En él, se pudo lograr la intersección entre estas esferas, ya que fue un militar que tuvo un papel importantísimo en la gesta independentista y en los primeros años de la República peruana; además, luego alcanzó a ser representante de su región ante el parlamento y, finalmente, fue un líder entre sus pares al tener cargos importantes en asociaciones de exveteranos. En el segundo capítulo, pretendo mostrar la significancia del manuscrito Historia del Perú. Cortegana al escribir una Historia General deseaba superar a las memorias individuales, aunque no lo hizo de manera exitosa. A pesar de esa intención, su historia representa una transición, un paso entre dos formas de escribir y entender el pasado. Por un lado, las memorias están ligadas al honor de cada individuo y el realce de sus acciones con fines políticos; mientras que, por otro lado, las historias generales están más en consonancia con los proyectos políticos de construcción del clásico Estado-nación del siglo XIX. Todo esto es importante, no son antes explicar la circulación del manuscrito como objeto cultural que aparece y desaparece en la historiografía y la cultura histórica peruana. El tercer capítulo parte de la necesidad de hacer inteligible el origen de los constructos e idea que son utilizados en las narrativas históricas que construye Juan Basilio Cortegana en su manuscrito. El tercer capítulo establecerá un contrapunto entre el trabajo de Juan Basilio Cortegana de su Historia del Perú, y otras fuentes relevantes. A través de una minuciosa comparación con otras fuentes históricas, se evaluará su aporte, y su conexión con otras obras y corrientes de pensamiento de su época, lo cual brindará una comprensión más completa del trabajo de Cortegana y la cultura letrada e ilustrada de los militares participes de las guerras de la independencia y los primeros años del Estado nación peruano. 12 Capítulo 1: Trayectoria de vida de Juan Basilio Cortegana1 El 4 de abril de 1984 es una fecha de suma importancia en nuestra narración, pues ese dìa se trasladaron los restos mortales de Juan Basilio Cortegana y Vergara desde el cementerio Presbítero Maestro, Cuartel N 123, Letra “B”, al Panteón de los Próceres. A este acto asistieron distintas personalidades civiles, militares y eclesiásticas; también participaron tanto el batallón de los Húsares de Junín como la Banda de Guerra del Perú; se realizaron tres discursos de distintas personalidades; y el historiador Apolonio Carrasco Limas, principal investigador de la vida y obra del prócer, declaró a la prensa. En la descripción de la lápida de Juan Basilio Cortegana, dedicada por su hija Corina, se señalaba lo siguiente: “héroe fallecido en 11 de diciembre de 1877, quien fuera fundador de la independencia y restaurador de la patria; además de vencedor de Junín y Ayacucho, el Sitio del Callao”2. Este acto iba en cumplimiento con la ley 23631 del 15 de junio de 1983, que rendía homenaje al “Prócer, Historiador, Parlamentario Don Juan Basilio Cortegana y Vergara”. Asimismo, traía consigo los siguientes artículos: el primero era rendirle homenaje; el segundo, declarar que se traslade sus restos mortales del cementerio Presbítero Maestro al Panteón de los Próceres; el tercero, autorizar al Poder Ejecutivo para que, a través del Sector correspondiente, se disponga la publicación de su obra Historia del Perú; el cuarto, derogar las leyes y demás disposiciones que se opongan a tales mandatos; y, por último, afirmar que la ley estaría en vigencia al día siguiente de su publicación3. Si bien se trasladaron los restos del héroe a un lugar apropiado por su desempeño en las guerras de independencia, no se cumplió con el tercero. No sabemos exactamente las razones de aquel incumplimiento. Recién en el año 2020, se volvió a discutir sobre el manuscrito, y el nombre de Juan Basilio Cortegana reapareció en la palestra pública gracias a iniciativas de distintos actores públicos y de la sociedad civil en El presente capitulo es una versión ampliada del estudio preliminar y cronología que realicé para la publicación de la selección de los trece tomos de la Historia del Perú (2022). Agradezco, el apoyo económico de la Fundación BBVA y de la Biblioteca Nacional del Perú. 2 En estos enlaces pueden observarse la videograbación del acto. https://www.youtube.com/watch?v=hdaAyVLxQ9w y https://www.youtube.com/watch?v=mJcVoOOA2Cw. Revisados el 1 de mayo de 2021. 3 Pueden encontrar esta información en el siguiente enlace: https://peru.justia.com/federales/leyes/23631-jun-151983/gdoc/ Revisado el 25 de abril de 2020 a las 22:44 horas. 1 13 nuestro país4. Antes de entender la producción del manuscrito Historia del Perú, es necesario saber sobre la biografía de su autor y entender la época en la que fue redactado. A lo largo de su vida, se desempeñó en tres ámbitos: militar, político y líder de la sociedad civil. En efecto, desde su papel como militar, cumplió un rol importante en estos procesos y, por tal razón, fue considerado uno de los fundadores militares de la naciente república; no obstante, no solo participó en la carrera de las armas, sino que, posteriormente, también fue un parlamentario que representó a su región y, finalmente, un actor importante de la sociedad civil como líder de asociaciones de ex veteranos que buscaban reclamar sus derechos y prerrogativas del Estado como guerreros que se sacrificaron por la independencia del Perú. En resumidas cuentas, Juan Basilio Cortegana posee una historia de vida significativa para entender la Independencia y los primeros años de la República. 4 Roxana Judith Padilla, quien es parte de la Dirección Desconcentrada de Cultura Cajamarca (DDC), comentó, en una entrevista publicada el 21 de enero de 2021, que hay un trabajo conjunto para visibilizar las memorias de Juan Basilio Cortegana en su región. Para ello, se desea realizar publicaciones y actividades oficiales para llevar el manuscrito a distintos niveles educativos. Inclusive, una de las intenciones es renombrar como Juan Basilio Cortegana a una calle en Celendín. Con estas iniciativas, se desea revalorar a este prócer en Celendín y en la región Cajamarca. Véase: https://www.facebook.com/elportalcelendino/videos/234074101583192 14 Foto 1. 1 Fotografía de estudio de Juan Basilio Cortegana. Fuente: (Cortegana, 2023, Volumen 5: 373). 15 1.1. Vida militar5 Juan Basilio nació en 1801, en Celendín (Cajamarca). Gracias a la influencia de sus padres Dionisio Cortegana y María Vergara-, y con una tradición católica muy presente en el seno familiar, aprendió, desde una temprana edad, la Antigüedad Clásica, la declamación, el latín y el griego. A pesar de ello, no siguió una vida religiosa, como sus padres hubiesen deseado, sino que se sintió inclinado por la vida militar. Así, siendo tan solo un adolescente, se enroló en las filas del ejército realista, y tuvo una carrera militar en ascenso (Carrasco 1954, 9). No hay que prestar atención que el ejército Real del Perú estaba compuesto, en su mayoría, por criollos, como Cortegana, e indígenas de diversas regiones. Además, de acuerdo con Luqui Legleayze (2006), se puede observar que “los americanos prevalecieron en los cuerpos milicianos (80% de oficialidad)”, los siguientes eran los cuerpos veteranos que constituyeron un tercio del total y eran jóvenes que no pasaban del grado de capitán. Cabe precisar que los peninsulares poseían los grados más altos de la oficialidad, y su experiencia bélica se rastreaba desde las guerras napoleónicas y las peninsulares por la defensa de la Constitución de 1812 (Sobrevilla 2019: 480-481). Las guerras de independencia en América generaron un conflicto de intereses al interior de la sociedad: hubo grupos que apoyaron la llegada de la patria, en tanto que otros deseaban seguir perteneciendo a la monarquía hispánica. Por tal razón, detrás del arribo de José de San Martín y la Expedición Libertadora en Paracas, muchos jóvenes oficiales, como Andrés de Santa Cruz y Agustín Gamarra, desertaron del ejército realista, y el joven Juan Basilio fue también uno de ellos. Estos oficiales se trasladaron a Huaura para jurar lealtad a la nueva causa, y brindar sus servicios a San Martín, quien los recibió con los brazos abiertos. De esta manera, se formó el primer regimiento peruano, el Cuerpo de la Legión Peruana de la Guardia, que estaría bajo el mando de José Bernardo de Tagle. Este cuerpo militar estaba conformado por un batallón de infantería, dos escuadrones de caballería y una campaña de artillería volante de cien piezas: Guillermo Miller fue el coronel a cargo de la infantería, y el mayor Eugenio Necochea hizo lo propio con los escuadrones (Carrasco 1954, 10). Bajo estas nuevas banderas, Cortegana fue testigo de la proclamación de la independencia en Lima el 28 de julio de 1821. Sin embargo, la euforia libertaria no duraría mucho tiempo. Si 5 Para entrar a aspectos de la biografía de Juan Basilio Cortegana, tenemos como pilar estudio realizado por Apolonio Carrasco (1954). La Historia del Perú de Juan Basilio Cortegana. Una contribución al estudio de la historia nacional. 16 bien los realistas abandonaron la capital virreinal, todavía no habían sido derrotados militarmente; por el contrario, se hicieron más fuertes en el centro y sur del Perú, por lo que se organizaron diversas expediciones entre 1822 y 1823. A estas campañas se les conoció como la de Puertos Intermedios porque “la idea era desembarcar en uno o dos de los puertos entre el Callao y Valparaíso, y mandar una columna de choque, mientras otra atacaba por la sierra central y desde el sur se avanzaba sobre el Alto Perú” (Sobrevilla 2022, 128). Cortegana estuvo presente en ambos escenarios bélicos, que resultaron en un fracaso para las armas patriotas. Al año siguiente, gracias al genio táctico de Simón Bolívar, y al desgaste de los realistas, se consolidó la independencia nacional a través de las batallas de Junín y Ayacucho: Cortegana estuvo presente como subordinado de José de la Mar, y del coronel José María Plaza respectivamente (Carrasco 1954, 11). Durante los primeros años del Perú independiente, la carrera militar de Cortegana no fue para nada fácil. Fue así como, apareció un artículo controversial y se le adjudicó a Cortegana la autoría, por lo que tuvo un altercado con dos oficiales del ejército en la vía pública. Las confrontaciones subían en la escalada y, también, participó en los enfrentamientos entre caudillos militares. Debido a su participación en la insurrección de Felipe Santiago Salaverry contra el gobierno de Gamarra en marzo de 1833, fue exiliado a Maynas que era considerada como zona de frontera. Los documentos del Archivo del Centro de Estudios Histórico Militares del Perú fueron muy importantes para reconstruir la historia de la institución militar en los primeros años de la naciente República. A partir de los fragmentos y retazos que pude encontrar, ciertas cartas entre los distintos estamentos militares, tuve la oportunidad de identificar los lugares a los que Cortegana iba siendo designado, así como sus respectivos ascensos militares. Así, el 11 de abril de 1834 se le otorgó el grado de comandante general de Nazca para la provincia de Ica; no obstante, rechazó el ascenso por aducir problemas del deterioro de salud por el excesivo trajín de las guerras de independencia6. Pero volvería años después a Trujillo para unirse de nuevo a Salaverry. Hacia 1838, ascendió al grado de teniente coronel, y participó en las campañas de la Restauración contra el protectorado de Andrés Santa Cruz y la Confederación 6 N 3 / N 400 (400) / págs 2 (1). Archivo del Centro de Estudios Histórico Militares. 17 Perú-boliviana. Dos años más tarde, fue destinado al sur del Perú, específicamente en el límite con Bolivia, pero, en 1841, fue procesado y separado del servicio militar activo. Cuando estuvo en el norte, el 6 de enero de 1839, mostró conocimientos de hierbas medicinales para curar a mulas enfermas en la provincia de Santa. Su cometido sirvió de poco, ya que, ese mismo mes, aparecieron más problemas y unos enemigos robaron doscientas cabezas de ganado, y secuestraron al gobernador y al comandante. Dado que los adversarios contaban con trescientos hombres y conocían bien la geografía del lugar actuaron desde los altos para cortar la comunicación y capturar pertrechos- Cortegana solicitó refuerzos, lo cuales fueron enviados desde Huanta. De esta manera, para el 20 de enero, bajo las órdenes del general Jaramillo, se logró recuperar lo robado y liberar a las autoridades secuestradas. A partir de estos actos, es más que seguro que Cortegana tuvo una vida militar bastante activa, que no solo se reducía a las guerras civiles entre caudillos. Definitivamente, su conocimiento sobre el cuidado de mulas y reses, así como enfrentamientos con bandas locales muestra una faceta mucho más cotidiana del ámbito militar y menos protocolar de la investidura de héroe de la independencia del Perú. 1.2. Vida política Una vez alejado de la vida militar, nuestro protagonista decidió optar por una carrera política, por lo que en 1842 postuló como senador por Cajamarca, aunque sin éxito alguno. Hacia los primeros meses de 1850, Cortegana juntó esfuerzos con Leandro Pereyra, José Burga y Manuel Pereyra para que Celendín sea elevado a la categoría de provincia. No era la primera vez que se realizaba este pedido, pues hubo otros similares en 1810 y 1812. Cinco años más tarde, en 1855, Cortegana insistió con su solicitud a través del folleto titulado Estadística Histórica, Geográfica, Física y Política del Distrito de Celendín. Se trata de una fuente estadística muy valiosa porque ofrece contenido vinculado a la demografía o recursos cuantitativos de la región, lo cual, según el militar, era prueba suficiente para elevar a Celendín a provincia. 18 Foto 1. 2 Estadística Histórica, Geográfica, Física y Política del Distrito de Celendín. Fuente: Burga, José et. al (1855). Estadística Histórica, Geográfica, Física y Política del Distrito de Celendín. Lima: Imprenta y Litografía de Miguel Saona. 19 Para el 25 de agosto de 1857, desde Cajamarca Cortegana y otros coterráneos enviaron una carta dirigida al Ministro de Estado en el Despacho de Gobierno Culto y Obras Públicas para que sea elevada a la Convención Nacional. En esta carta, se pedía la creación de municipalidades para tres pueblos y la erección de la provincia de Celendín: “Se que la capital de esta nueva provincia sea Celendín por el deseo del progreso de los pueblos de este departamento cumpliendo con un deber de justicia reproduce en todas sus partes el tenor de ellas y el de los informes expedidos en el particular, como que se halla al corriente de las necesidades actuales de aquellas poblaciones, de los perjuicios que les son consiguientes de permanecer en el estado en el que se hallan, no obstante su crecido número de vecindad, las ventajas que recibirá con la concesión de la gracia que solicita como precisa para su prosperidad” (citado en Macera 1998, Tomo 2. 84-85). Pero hablemos un poco del contexto de estas peticiones. No era la primera vez que se recurría a los estudios sobre población y uso de información estadística con fines políticos. Entre 1791 y 1876, la estadística se convirtió en una herramienta de poder para muchos pueblos del interior, ya que, además de formar identidades regionales, los datos podían reforzar las agendas locales en el contexto de la política nacional. En la mayoría de los casos, los reclamos tenían como fin ascender de jerarquías y pasar de categorías de pueblos a provincias. Sin embargo, la recopilación de estos datos debía ser cuidadosa, ya que si existía alguna cifra tomada de manera incorrecta podría ocasionar menos representantes de la localidad en el Parlamento o un ataque al orgullo local. Al conseguir la meta, se fomentaba sentimientos de unidad nacional. En el caso de Celendín, debido a las gestiones de Cortegana, los vecinos, en la Legislatura de 1868, lo eligieron su representante” (Carrasco 1954, p. 15). Aquí empieza su trayectoria política como representante formal. Pese a su vida política activa, su situación económica no era la mejor, por lo que tuvo que aceptar un puesto administrativo en un establecimiento comercial en Lima. De acuerdo con Apolonio Carrasco, fue probable que, por estos años, alejado de la vida militar, y alojado en el barrio negro de Malambo -considerado una de las zonas más pobres del Rímac- empezara a redactar su Historia del Perú. Además, para Luis Tejada, fue un lugar donde habitaron no solo negros, sino también indios, cholos, chinos y muchos blancos empobrecidos. Los orígenes de este barrio venían desde la colonia y estuvo vinculado a la cárcel de esclavos, así como al gran basurero de Lima. El hospital San Lázaro y su parroquia adjunta también 20 estuvieron allí, ya que servía como hospicio de ciegos, mancos y tullidos. Fue alrededor de estos centros que se concentraron tugurios que comprendían a familias negras, mulatas, indios yungas, mancos, leprosos y tullidos. No faltaron, además, los tambos, pulperías chinganas, burros alfareros, cocineras ambulantes y callejones tugurizados. La religión también tuvo su lugar, lo que explica las múltiples cofradías que convivían en el barrio; además, también podemos afirmar que era un lugar de gran jarana y de fiesta. Cortegana pasó sus últimos días en aquel lugar viudo y, al parecer, sin recursos. Inclusive, puedo arriesgar la idea de que a pesar de que Juan Basilio era un héroe reconocido y legislador, al encontrarse en un lugar no privilegiado podría afirmar que su obra nació desde un lugar no hegemónico de aquel entonces. Cuando eligieron a Basilio Cortegana parlamentario (1868-71), uno de sus principales objetivos fue convertir a su lugar natal en una de las primeras provincias de Cajamarca. Para ello, consideró que la educación era necesaria: su concepción no solo era en enseñar funciones y pensamientos abstractos sino también debía “orientarla hacia la praxis para conseguir la felicidad individual y social” (Carrasco 1954, 15). Apoyó, por tanto, la inauguración de varias escuelas elementales, y logró la promulgación de una ley que ordenaba abrir el primer Colegio de Instrucción Secundaria en su provincia; consciente de que era necesario contar también con buenos docentes, buscó también mejorar los salarios a los maestros. Es sorprendente que, para 1870, estuviera en la avanzada y propusiese crear un colegio de señoritas en Celendín, aunque no tuvo la acogida que esperaba. No descuidó tampoco otros rubros que podrían beneficiar a Celendín. Se concentró, primero, en las obras públicas, como la construcción de un cementerio, la mejora del servicio de agua a través de acueductos, ferrocarriles en noviembre de 1970. Como segundo punto de su agenda política, buscó, en 1869, que se reconociese el aporte de distintos ciudadanos de su provincia a las guerras de independencia, pero fue desestimado. Hacia agosto de 1870, fue designado como principal de guerra en el Poder Legislativo, lo que le otorgó más autoridad para dar opiniones en el pleno. Con ello, empezó su labor a favor de los veteranos de guerra, específicamente para los vencedores de Junín y Ayacucho, que no habían alcanzado ni pedido ascensos o remuneraciones al Estado. Según informó Cortegana, el gobierno peruano poco había hecho por sus excombatientes, por lo que el 7 de diciembre de 1870 solicitó que den beneficios en base a la ley del 23 de enero de 1869. 21 Si bien Apolonio Carrasco enfatiza que la carrera parlamentaria de Cortegana finalizó en 1871, se ha identificado informes que demuestran que su actividad no se detuvo hasta 1874. En efecto, Cortegana insistió en el asunto de la gratificación de los veteranos. Hacia el 27 de febrero de 1873, increpó al parlamentario Becerril por no considerar las gratificaciones. Su principal argumento fue que no se trataba de una ley de aumento, sino la justa devolución monetaria por sus acciones en la guerra. Por último, y no menos importante, es pertinente rescatar que para el 27 de enero de 1871 Cortegana, junto con otros parlamentarios, solicitar a un presupuesto de 40 000 soles para la construcción de una pirámide en honor a la victoria en Ayacucho. También, Juan Basilio discutió sobre las guardias nacionales y el da el ejemplo a partir de su experiencia en la guardia, la cual existe desde la época colonial. Finalmente, pidió exoneración de servicio militar a mineros y pastores, pues ellos contribuyen activamente en la economía peruana. 1.3. Líder entre los vencedores Según Víctor Peralta, existió una sociedad patriótica en 1822, pero fue una institución intrascendente, elitista y criolla que tuvo una duración de pocos meses durante el gobierno del general San Martín. Pasaron décadas y no hubo un interés genuino para constituir una asociación con debate doctrinario y nacionalista; sin embargo, esto cambió al inicio del gobierno de Ramón Castilla y, al igual que la época de la independencia, los miembros eran personajes liberales (Peralta 2005, 97) Este fue un tema que interesó a Cortegana, ya que conectaba su pasado militar con su vida actual como civil. Es así como, en 1845, fundó la Sociedad Humanitaria, pensada como espacio de asistencia mutua entre veteranos de la independencia. Por ello, el 9 de septiembre de 1848, solicitaron al Poder Ejecutivo que se proporcionara a estos exmiembros del ejército un auxilio económico porque la gran mayoría vivía en la indigencia. 22 Foto 1. 3 Retrato de Juan Basilio Cortegana por Etna Velarde. Fuente: (Cortegana, 2023, Volumen 5: 374). 23 Cortegana también fue participé de colectivo de exmilitares como la Sociedad Fundadores de la Independencia (institución posterior a la Humanitaria), integrada por jefes y oficiales, veteranos civiles, capellanes y médicos que lucharon en las guerras de independencia, desde la batalla de Pichincha hasta el Segundo Sitio del Callao. Con el lema Igualdad, Fraternidad y Unión, tanto D. Miguel San Román y D. Benito Laso desempeñaron cargos de primer presidente y vicepresidente respectivamente, y, a iniciativa de Cortegana, los socios debían llamarse “hermanos”. Para la instalación de esta comunidad, se organizó una misa en el templo del Convento de San Francisco de Asís el 9 de diciembre de 1848: el clérigo Nicolás Garay ofició la ceremonia, apoyado por María José de Arce, Gabino Uribe y Juan Sánchez7. Al finalizar, se llevó a cabo una reunión que contó con las palabras de Francisco Javier Mariátegui, Benito Laso, Blas José Alzamora, José María Arce, Nicolás Garay y Juan Basilio Cortegana cumplió el rol de maestro de ceremonias (Carrasco 1954, 14). Entre sus actividades, destacaban ciertas designaciones. Las sesiones preparatorias de su constitución en la que intervinieron treinta y nueve ciudadanos comenzaron el 2 de septiembre de 1848 y culminaron el 4 de diciembre con la designación como su presidente del general Miguel de San Román, recayendo a continuación la primera vicepresidencia en Benito Laso, la segunda en el general José Agustín Lerzundi y la tercera en Francisco Javier Mariátegui. El estreno público de la institución ocurrió el 28 de noviembre al organizar esta unas honras fúnebres al ex presidente general Agustín Gamarra (Peralta 2003: 99-100). Según la historiadora Carlota Casalino, la Sociedad en cuestión tenía características de un esquema de ayuda mutua, por lo que los miembros debían contribuir económicamente para cubrir los gastos funerarios de los miembros. A cambio, cada uno de ellos recibía un diploma y debía asistir con sus medallas a las ceremonias oficiales y funerales de la organización al lucir sus mejores galas. “La condición indispensable establecida para ser miembro nato de dicha sociedad era el haber participado en las guerras de independencia. Paulatinamente, conforme se va institucionalizando, el Estado va asumiendo mayor presencia en dicha asociación. Conforme se va produciendo dichos cambios, la institución ampliará sus funciones y las condiciones para pertenecer a la institución. En ese sentido, a los fundadores de la 7 Garay y Arce fueron colaboradores en la redacción de las memorias de Pruvovena de José de la Riva Agüero 24 Patria, se sumarán los que la defendieron el 2 de mayo, después los que participaron en la Guerra del Pacífico y posteriormente los que participaron en otras guerras defendiendo el territorio, finalmente se incorporaron los descendientes de los héroes. (Carlota Casalino 2008, 213-214) A pesar de los esfuerzos realizados, por temas políticos, se presentó a esta institución como un centro de conspiración contra el gobierno de Ramón Castilla. En consecuencia, se buscó su disolución, y prisión y confinamiento para los miembros de su directiva: Miguel San Román, Agustín Lezundi y Mariano Pagador fueron algunos de los detenidos. En palabras de Peralta: Todo indica que éste (Castilla) estuvo convencido de que la Sociedad Patriótica encubría en realidad una plataforma política creada por los liberales para promover actos sediciosos y, en última instancia, actuar como un club electoral en los comicios generales que se avecinaban. La asociación no pudo mantenerse en el espacio público y languideció hasta desaparecer (Peralta, 2003: 103). La Sociedad insistió en que el gobierno reconociera la sociedad, y el 28 de septiembre de 1857 Juan Basilio Cortegana y Casimiro Negrón se acercaron a Palacio de Gobierno para exponer los propósitos de la institución: nacía para atender los males e infortunios de los veteranos de guerra. Muchos de ellos, abandonados por el Estado, fallecieron con pocos recursos, olvidados en hospitales, e, incluso, sus familias tuvieron que pedir ayuda para poder enterrarlos con honor. En respuesta a estas necesidades, el gobierno aceptó la instalación de la Sociedad. De acuerdo con Peralta (2005, 100), la sociedad de 1846 se diferenció de la nueva sociedad en que esta última fue más inclusiva al incluir a los vencedores de las batallas de Junín y Ayacucho, a los que participaron en el sitio de la última resistencia española en la fortaleza de El Callao y a los veteranos de las guerras de independencia de la república. Tanto las decisiones adoptadas como los actos celebrados fueron objeto de comunicados positivos en las páginas del periódico El Comercio. Se elogiaba el carácter particular, incluyente y apolítico de la institución. Según Peralta (2005, 100), la Sociedad Patriótica se autodenominaba como una organización particular y se comprometía a establecer las bases de una buena moral entre sus miembros. Además, obligaba a sus miembros a contribuir con el uno por ciento de sus sueldos en un fondo que se destinaba, en primer lugar, a cubrir los gastos reportados por enfermedad, entierro, honras fúnebres y recuerdo anual de cualquiera de sus miembros. En segundo lugar, el fondo se destinaba a la celebración de varias fechas conmemorativas, como la jura de la 25 independencia, las batallas de Junín y Ayacucho y la fundación de la Sociedad. En estos casos, el acto central comprendía una misa de acción de gracias, un Te Deum y un panegírico.: “Cortegana apuntó que en los tiempos que se vivía ningún hombre podía ser fuerte por sí solo sino asociándose con los demás de su especie. Siguiendo ese principio, continuaba Cortegana, la sociedad que se había conformado tenía como misión hacer predominar como su fin exclusivo la unión de todos los defensores de la patria antes olvidados y divididos en la consolidación y defensa de las independencias peruana y americana. Para lograrlo, concluía que la asociación de la que formaba parte debía procurar mantenerse «ajena de la política, inclinar sus laureles al imperio de la ley, y sin tomar entre sus labios la menor inducción a esa tendencia, solo encaminar su actividad, resignación y celos al consuelo de sus miembros y a la marcha progresiva de su indudable establecimiento»”. (Peralta 2003: 101) Podemos observar de manera explícita los puntos de la constitución de la Sociedad Patriótica: Titulo 3: Objeto, Fin y Medios de la Sociedad Art 8°- La Sociedad tiene por objeto: 1) Conservar vivos los recuerdos de los grandes hechos practicados en obsequio del pais durante la época de la independencia, 2) Hacer efectivos y prácticos, en cuanto de sus esfuerzos depende, los fecundos y consoladores principios de libertad, igualdad y fraternidad que constituyen su divisa y son los mismos que proclamó la América al dar el grito de la emancipación, 3) Asegurar a sus miembros las ventajas de una asociación humanitaria y desinteresada. Tiene por fin:- Inspirar a los hijos de los fundadores y de los demas asociados, asi como a la generación que se levanta, el amor a la patria y a sus instituciones; el respeto a la ley y a sus defensores; el culto de la democracia; el sincero y constante deseo de introducirla gradualmente en la vida pública, ilustrando a las masas populares; la abnegación y el sacrificio de todo interés personal, siempre que se trate de la gloria y de la prosperidad de la Nación, y el bienestar y la honra de los socios. ((1861) Constitución de la Sociedad de Fundadores de la Independencia del Perú. Lima, Impreso por Francisco Solís, p.5). Titulo 26: De los Derechos y Obligaciones de sos Socios 26 Art 54°.- Es obligación de todo socio: 1) Pagar puntualmente sus cotizaciones; 2) Asistir con exactitud a las sesiones, cumplir las resoluciones y acuerdos de la Sociedad, desempeñar fielmente los cargos que esta le confiera, sin escucharse jamás, a no ser por muy graves motivos o en caso de reelección; 3) Servir con benevolencia y decision a sus consocios siempre que lo soliciten, sin omitir diligencia ni medio lícito y honesto para ayudarles a lograr su propósito, y ver en cada miembro de la Sociedad un hermano a quien debe procurar los bienes que para si mismo apeteciese. (Constitución de la Sociedad de Fundadores de la Independencia del Perú. 1861. Lima: Impreso por Francisco Solís, pp. 22-23) Francisco de Vidal, Juan Manuel del Mar, Francisco Forcelledo, José Montes, Eugenio C. Sosa, Gavino Pizarro, Gabriel Grados, Juan Basilio Cortegana, Manuel de Uriza, Enrique Montes, Estanislao Correa y Garay, José Toribio del Río, José Francisco del Río, Pedro José Castilla, Juan Delgado, Pablo J. Delgado, Felipe Santiago Romero, Ambrosio Taboada, José Rufino Álvarez, Mateo Estrada, Pedro Rios, Agustin Mispireta, Luis Llaque, J. Antonio Alvarado, José del Carmen Gallegos, Simon Velarde, Lorenzo Medina, José Terán, J. Mariano Alvarez, M. Munar, José Manuel Bravo, José María Palomo, Manuel Salcedo, Juan Espinoza 2°, Julian Chirinos, José María Sanchez Sosa, José Silva, José Aranaga, J.A. Rojas, Manuel Pérez, Francisco Garfias, José Santivañez, Manuel G. y Vera, Manuel Mendoza, José del Carmen Mecia, Juan Pedro Tobal, Ascencio del Carpio, José Lombardi, José Ramón Andrade, José Cosio, Manuel Sotelo, José Eduardo Castro, Apolinario Choza, Dr. Juan Sanchez, Andres Rocel, Dr. Gavino Uribe, Antonio Padilla, José Benigno Carrillo, Lorenzo Iraola, Mariano Pagador, Manuel Luza, Manuel Garro, Marcelino Oyarzun, Hilarion H. Dalens, J.M. Mier y Terán, Cirilo Coronel, Manuel Salazar y Ayala, Atanacio Pagador, Estevan Jimenez, Manuel de la Maza, Mariano Denaho, Pedro J. Torres, José María Guerrero, Ceferino de la Puente, Toribio Barrantes, Rafael Garcia de Mancebo, José Teodoro Lamas, Mariano José Rodríguez, Domingo Negrón, Pedro Jaramillo, Celestino Vargas, José Tejada, Tomás Guerra, Juan Gonzalez, Julio Molina, Pedro José Iglesias, Mariano Gomez Flores, Manuel de Uribe, J. Manuel Pila. (Constitución de la Sociedad de Fundadores de la Independencia del Perú. 1861. Lima: Impreso por Francisco Solís, pp. 26-27) 27 Durante el conflicto con España, en 1864, el Perú tuvo que realizar un empréstito forzoso de diez millones de pesos. Paradójicamente, La Sociedad colaboró monetariamente con las necesidades económicas del Estado, por lo que Juan Basilio, como tesorero, hizo la entrega de 500 pesos a la Tesorería del Crédito Público. En el lapso de esta guerra, Cortegana tuvo otros roles importantes para el país: participó en comisiones de gratitud con Chile, ya que su apoyo fue vital para enfrentarse a los españoles que habían ocupado las islas de Chincha. Foto 1. 4 Busto de Juan Basilio Cortegana. Ubicado en la Benemérita Sociedad Fundadores de la Independencia. Fuente: (Cortegana, 2023, Volumen 5: 375). 28 Los últimos días de Cortegana fueron complicados por su enfermedad de las úlceras. Pocos fueron los amigos que lo visitaron en su lecho en el barrio de Malambo, pero los que siempre estuvieron con él fueron su hija natural Corina y su yerno Agustín Rosillo. En su testamento, citado en el estudio preliminar de Carrasco, se registró que, en noviembre de 1877, reconocía a Corina como heredera de todos sus bienes, derechos y acciones. Lastimosamente, pasó lo que tenía que suceder y en la madrugada del martes 11 de diciembre de ese año, exactamente a las 5.30 am., falleció tras recibir confesión por Narciso Alvarado, clérigo de San Lázaro. A las ocho de la mañana del día siguiente, se realizaron las honras fúnebres, en las que participaron personas cercanas a Cortegana al igual que ex combatientes de guerra; y el batallón Pichincha le rindió los honores de héroe de guerra. Foto 1. 5 Obituario de Juan Basilio Cortegana. Fuente: (Cortegana, 2023, Volumen 5: 379). Sobre los bienes que dejó, Apolonio Carrasco, su principal biógrafo, afirma que el veterano murió pobre, pero en su testamento, fechado el 26 de mayo de 1868, ubicado en el Archivo General de la Nación, dio cuenta de varios inmuebles que dejó: 29 “mis bienes una casa solar situada en la misma población de Celendín que compré a los [] de ese pueblo. Otra parte de ese [45r] solar en el [] pueblo, frente a la casa de don Pedro Ortiz. Del mismo modo, otra casa solar aquí mismo que compre a donde Pedro Silva, natural y [] de Sumampa, cuyos documentos o títulos de propiedad de todas las fincas mencionadas antes existen entre mis papeles lo que expongo para que conste” (AGN Colonia, Prot. N° 180 S. XIX). Esta información, que reseña varias propiedades de Juan Basilio, nos muestra un panorama con más matices a la opinión de Carrasco sobre los últimos días pobres de Cortegana. Foto 1. 6 Testamento de Juan Basilio Cortegana. Fuente: (Cortegana, 2023, Volumen 5: 377). 30 1.4. Reflexiones a partir de este capítulo Juan Basilio Cortegana fue un personaje de suma importancia para entender el proceso de independencia y los primeros años de la República peruana. En primer lugar, como militar, su actuación, al igual que muchos otros jóvenes que desertaron del ejército realista, fue vital para la consumación de la independencia. Su trayectoria no acabaría en Ayacucho, sino que se mantendría por muchos años, solo que se enfrentaría a otros compatriotas suyos, como cuando estuvo en el bando de Salaverry o formó parte de las fuerzas militares que acabaron con la Confederación Peruana-boliviana. Además de estos grandes conflictos, también estuvo involucrado en luchas locales. Fue en el norte, específicamente en Celendín, su lugar de origen, donde inició su vida política. Pensando en el bienestar de sus vecinos, propuso varias iniciativas para mejorar su calidad de vida. En este caso, sus luchas ya no se resolverían por la fuerza de las armas, sino a través de las palabras y la negociación con los poderes centrales. No obstante, como político, nunca abandonó del todo su pasado militar. Por el contrario, aprovechó la oportunidad para promover iniciativas legales que mejorasen la vida de los excombatientes de las guerras de independencia. En otras palabras, fue un líder indiscutible en las asociaciones de héroes y veteranos, y un nexo entre el gobierno y colectivos civiles. Sin duda, su participación en el proceso de construcción del Estado-nación sería fundamental en su manuscrito Historia del Perú. Por ello, en los capítulos siguientes, se argumentará cómo es que este contexto influyó en la forma de escritura de Historia de Cortegana, lo que lo diferenciará de otros militares e intelectuales que también se aventuraron a escribir una historia de su país. 31 Capítulo 2: Algunas consideraciones sobre el manuscrito Historia del Perú En este capítulo trazaremos consideraciones generales sobre el manuscrito y disiparemos dudas como ¿qué características tiene?, ¿qué peculiaridades posee como fuente histórica? Para resolverlas, se analizará la naturaleza del escrito en comparación con el género testimonial y las memorias de la independencia. Así, también se explicará la circulación del manuscrito como objeto cultural para mostrar cómo aparece en la historiografía y cultura histórica peruana. 2.1.Un manuscrito, muchas manos Fue en 1945 cuando la Biblioteca Nacional del Perú adquirió los tomos de Historia del Perú de Juan Basilio Cortegana de la Biblioteca del General P. Justo, fondo argentino considerado una de las mejores bibliotecas particulares de Sudamérica8. Antes de la adquisición, el trabajo de Cortegana ya era ciertamente conocido entre la intelectualidad limeña. Emilio Gutiérrez de Quintanilla, quien fuera director del Museo de Historia del Perú, en su texto La entrega del Oriente Peruano a la Gran Colombia Fue Ambición I Empeño del Libertador Bolívar presentado en el número tres de la Revista del Museo Nacional en 1932, citó tres veces la Historia del Perú para complementar información sobre los movimientos geopolíticos en la disputa en que se encontraba Maynas: «El material inserto en el presente número es un corto fragmento de la Introducción que escribí, hace tres años, para la enorme Compilación de documentos originales, que 30 grandes tomos, forman mi obra histórica intitulada La Acción peruana en la independencia del Perú, todavía tan inédita como la Historia General del Perú que en trece tomos escribió hace ochenta i cuatro años, nuestro ilustre i benemérito prócer D. Juan Basilio Cortegana, vendedor en Junín i Ayacucho, -adquirida i poseída por mí». (Gutiérrez de Quintanilla 1932, 77). Contenía alrededor de 28 000 volúmenes, de los cuales casi el 90% eran obras americanas o referentes a América (Boletín de la Biblioteca Nacional 1945, 409-416). 8 32 No se sabe a ciencia cierta cómo llegaron los tomos a manos de Gutiérrez de la Quintanilla. De acuerdo con el artículo de Hugo Ludeña Restaure, para José de la Riva-Agüero y Osma, Gutiérrez de Quintanilla era un férreo defensor del patrimonio histórico y documental peruano al punto que se le había encomendado la tarea de reunir los materiales para la obra La Acción Peruana de la Independencia, los cuales constaban de más de treinta tomos (Vargas Ugarte 1971, 227-278). Sin embargo, hacia la década de los treinta, los documentos que se encontraban bajo su custodia fueron vendidos al embajador argentino Colombres Mármol luego de varias negociaciones secretas. Así, para 1939, Fernando Gutiérrez de la Quintanilla, hermano de Emilio, «(...) puso a disposición de dicha comisión (argentina) seis mil documentos (…)»; además, el revisor «informó haber hallado treinta documentos vinculados al año 1822 y a la entrevista de Guayaquil. La Comisión Argentina mencionada consideró que dentro de este grupo de treinta documentos solo dieciocho eran realmente importantes» (Ludeña Restaure 2006, 131). Fuera del anecdótico hecho que Colombres Mármol pagó la mitad del valor correspondiente de los documentos, a partir de este material, publicó un trabajo histórico en 1940 sobre la entrevista de Guayaquil titulado “San Martín y Bolívar frente al hallazgo de nuevos documentos”. El prólogo estuvo a cargo del historiador argentino Rómulo Carbia «quien indicó que los documentos eran del archivo de Gutiérrez de la Quintanilla» (Ludeña Restaure 2006, 131). En trabajos posteriores, Carbia y el hijo de Colombres defendieron, en otros trabajos, la autenticidad de los documentos e indicaron que estos fueron vendidos por Gutiérrez de Quintanilla (Ludeña Restaure 2006, 131). Asimismo, Ludeña Restaure afirma que estos fueron usados por la Dirección de Asuntos Históricos del Ejército Argentino en una publicación titulada Comando en Jefe del Ejército Dirección de Estudios Históricos. Colección documental Emilio Gutiérrez de Quintanilla: Guerras de la Independencia. (Ludeña Restaure 2006, 131). Sin duda, el manuscrito de Cortegana tuvo una circulación azarosa, y dada su importancia como fuente histórica, pudo servir a diversos autores en Argentina. Gracias a las gestiones del historiador Jorge Basadre, el manuscrito regresaría a su lugar de origen. En su libro La Vida y la Historia (1975), narró los pormenores de adquisición de la Biblioteca Justo como una gran hazaña para la Biblioteca Nacional del Perù. Como su director, estuvo al tanto sobre las gestiones que el general argentino Agustín P. Justo realizaba «para adquirir obras raras y valiosas, peruanas y americanas (…) Justo ansiaba emular y 33 superar a su compatriota el general Bartolomé Mitré, en el esfuerzo de para atesorar una gran biblioteca». Ya para inicios del año 1943, Basadre se enteró, con mucha emoción, que aquella biblioteca se encontraba a la venta, pero también preocupado por el precio, dado que la Biblioteca Nacional no disponía de ese dinero (Basadre 1975). Este asunto fue comentado a uno de sus acaudalados amigos, quien le confirmó que podían reunir el dinero junto a sus allegados. Ante esto, Basadre se comunicó con el presidente de aquel entonces, Manuel Prado, «quien aceptó el aporte de los particulares sólo hasta por la mitad de la cantidad pedida por la familia Justo». La compra no fue una tarea fácil, pues Perú se enfrentaba a un competidor grande como era la Universidad de Texas, que ofrecía una suma mucho mayor; no obstante, la familia Justo prefirió negociar con la Biblioteca Nacional y el Perú por su visión antiimperialista en contra de los Estados Unidos de América. A pesar de esto, el gobierno argentino trató de impedir la exportación del corpus documental por su valioso contenido, pero, para tranquilidad de los peruanos, después del pago a la familia Justo, se trasladó la biblioteca a la Embajada de Perú en Argentina, lo que impidió cualquier acción coercitiva. Otro obstáculo fue también las críticas de algunos ministros por miedo a roces diplomáticos con Argentina. Para complicar la situación, el acaudalado amigo de Basadre se ausentó de Lima y se encontraba fuera de comunicación. Por ello, se tuvo que «buscar donativos de empresas y capitalistas particulares para completar los fondos necesarios». (Basadre 1975). Esto puede complementarse con la información que aparece en los dos tomos de Introducción a las bases documentales para la Historia de la República del Perú con algunas reflexiones. En este trabajo, Basadre brinda al público más que una bibliografía de Historia de la República, “una lista sencilla, una guía práctica para quienes les interesen en los temas, autores o períodos anotados, organizándolos en lo posible, de modo sistemático, con algunos comentarios". Entre las fuentes que usó Basadre, podemos ver que cataloga a la Historia del Perú de Cortegana con las etiquetas de manuscritos y de Historias generales de la República que obras mayores o textos universitarios, además de nombrar que bajo su gestión fue adquirida (Basadre 1971, 108). En otro informe publicado en el octavo Boletín de la Biblioteca Nacional de 1945, se cita una carta, fechada el 29 de diciembre de 1944, en que el R.P. Vargas Ugarte se dirigía al Director de la Biblioteca Nacional «comunicándole que estaba en venta la librería del General Agustín P. Justo, cuyo precio era, más o menos, medio millón de pesos (…). El original de esta carta 34 fue puesto en manos del presidente de la República, Dr. Manuel Prado, quien manifestó inmediatamente el más cordial interés por el asunto» (Boletín de la Biblioteca Nacional 1945, 409). Además de esto, se describía detalladamente el fondo peruano de la Biblioteca Justo: «Entre los manuscritos, el de mayor valor para nosotros es la “Historia del Perú” de Juan Basilio Cortegana. Son trece tomos que llevan la fecha de 1848, y que pertenecieron al historiador peruano Emilio Gutiérrez de Quintanilla» (Boletín de la Biblioteca Nacional 1945, p. 416). Pese al alto valor del manuscrito, el historiador Víctor Arrambide (2020) asevera que se encuentra prácticamente en el olvido. Pero hay evidencia de que la obra de Cortegana ya era relativamente conocida entre la intelectualidad peruana. Para ello, nos remontamos al trabajo crítico del historiador peruano Apolonio Carrasco Limas titulado La Historia del Perú de Juan Basilio Cortegana. Una contribución al Estudio de la Historia Nacional (1954). Aunque útil por la información que dispone, enfatizó en el accionar heroico de Cortegana. Tampoco prestó atención a la época incaica y virreinal, pese a que la mayoría de los tomos comprendía ambas etapas; por el contrario, centró su narración en la emancipación9. (Carrasco 1954) Por su parte, Rubén Vargas Ugarte los usó para realizar una edición de fuentes primarias sobre las batallas de Junín y Ayacucho a 150 años de su aniversario. Su propósito era mostrar testimonios de los participantes directos y presenciales de ambas batallas, por lo que usó el manuscrito Historia de Perú y las memorias del español Manuel de la Haza (Vargas Ugarte 1974). En la década de 1980, Gonzalo Portocarrero y Patricia Oliart (1989) utilizaron a Cortegana en el primer capítulo de su libro El Perú desde la escuela. Como su objetivo era analizar cómo se construyeron las narrativas en los textos escolares decimonónicos sobre las épocas prehispánica, la conquista y la colonia, visibilizaron el aporte de Cortegana. Sin embargo, concluyen que su obra carece de investigación histórica, y en su lugar hay un predominio de la descripción del pasado (Portocarrero y Oliart, 1989 23). Finalmente, Francisco Quiroz menciona al manuscrito en su obra Historia y nación: Historiografía peruana desde Túpac Amaru a la Guerra del Pacífico (2012), pero no la examina con detenimiento, puesto que no Tampoco hay que olvidar la denuncia y gestiones de Apolonio Carrasco sobre la desaparición del tomo X de Cortegana, el cual se encontraba en un taller en los Estados Unidos hasta su regreso al Perú. 9 35 había acceso completo a todos los tomos, y parte de sus ideas ya habían sido señaladas por Carrasco. 2.2 Formas de hacer Historia en el siglo XIX Jorge Basadre, en el prólogo a la reedición de Historia de los Partidos de Santiago Távara (1955) presentó un listado de las obras más consultadas de la primera mitad del siglo XIX: Félix Devoti10, Basil Hall11, A. Gonzales12, Guillermo Miller13, Mariano Torrente14, José M. Córdoba y Urrutia15, Andrés García Camba16 y William Prescott17. Aunque estos autores también ensayaron el género de crónica y memoria, sus cualidades, estilo y características de forma son distintas al manuscrito de Cortegana. Para entender mejor estas formas de escritura histórica de la época, analizaremos dos géneros historiográficos: las memorias de Miller, García Camba y la historia general de Córdova y Urrutia. En primer lugar, tenemos a Guillermo Miller, quien después de combatir contra los franceses en España, se incorporó al bando patriota y al ejército de San Martín. Luego se trasladó al Perú con la Expedición Libertadora del Sur y, también, estuvo en las campañas de intermedios y en las batallas de Junín y Ayacucho. Después de retornar a su patria, reapareció en 1830 para participar como militar o diplomático en los conflictos políticos del Perú y para apoyar a Santa Cruz y la Confederación Perú-boliviana, hasta que en 1839 fue degradado por Gamarra. Por iniciativa de su hermano John, quien reunió la correspondencia y los documentos que Guillermo le enviaba desde el Perú, se publicaron sus memorias. Según el historiador Percy Cayo, las memorias de Miller constituyen un testimonio, cuyas características principales son Devoti, Félix. 1822. En el Cuadro Histórico Político de la Capital del Perú (s. l.). Hall, Basil. 1906 Estracto de un diario de viaje a Chile, Perú i Méjico: en los años de 1820, 1821, 1822. Santiago de Chile Universitaria,1906. 293 p. ;19 cm. 10 11 Miller, John. Memorias del general Guillermo Miller: al servicio de la República del Perú. Madrid: Librería de Victoriano Suárez, 1829. 14 Torrente, Mariano. Historia de la Revolución hispano-americana (1829-1830)-Torrente, Mariano, 1792-1856. Madrid: (s. l.), 1830. 15 Córdova y Urrutia, José María. Las 3 épocas del Perú, o, Compendio de su historia. Perú: Imprenta del Autor, 1844. 16 García Camba, Andrés, Memorias para la historia de las armas españolas en el Perú. Madrid: Sociedad Tipográfica de Hortelano y Compañía, 1846. 17 Prescott, William Hickling. History of the Conquest of Peru: With a Preliminary View of the Civilization of the Incas. New York: Harper and Brothers, 1847. 13 36 el romanticismo y el afán de aventuras. El gran éxito editorial de las Memorias se entiende por su cercanía con el lector, ya que Miller era un actor y testigo directo de su relato. Cayo sostiene que este escrito no tuvo influencia de otro libro similar sobre la época, así que se puede afirmar que es una fuente primaria básica. Asimismo, en una edición reciente publicada por el Proyecto Bicentenario (2020), la historiadora Scarlett O’Phelan resaltó la interacción de Miller con sectores populares, como montoneras y afrodescendientes que lucharon bajo su mando. Miller mostró una gran empatía hacia ese grupo, a quienes “elogiaba por su valor, constancia, y patriotismo; además, de su buena conducta”.18 Esto se debe resaltar debido a que, por lo general, los personajes más importantes en las memorias eran los generales y grandes caudillos de los ejércitos patriotas o realistas.19 Desde el plano realista y español, en 1846, el general Andrés García Camba presentó sus memorias. Este oficial de origen gallego luchó contra los franceses en América y luego en el Perú. Allí se unió a los oficiales que se oponían al virrey Pezuela. Después de la caída de este, García Camba ascendió a brigadier y combatió en las batallas de La Macacona, Torata y Moquegua. Asimismo, en la batalla de Ayacucho, dirigió una brigada de caballería realista. Es importante recordar que la publicación de la obra de García Camba se dio en un período de inestabilidad en España, ya que los "Ayacuchos" (los oficiales españoles que habían combatido en la independencia peruana) eran criticado por ciertos sectores del ejército y los partidos moderados y progresistas. Así, el testimonio de García Camba puede entenderse como una defensa pública de los "Ayacuchos". Por ello, su objetivo era realzar y poner en relieve la valentía de su grupo (Sobrevilla, 2021). Otro estilo que también destacó fue la historia general. La más importante en la primera mitad del siglo XIX en dar una visión en conjunto de la historia nacional fue Las 3 épocas del Perú, O'Phelan, Scarlett. 2020. “Prólogo” a Memorias del General William Miller al Servicio de la República del Perú. Lima: Proyecto Bicentenario del Consejo de Ministros.. 19 De otro lado, en un artículo de Sandro Patrucco (2019) se califica a Miller como un viajero atípico que no solo estuvo en momentos importantes de la Independencia, sino que estuvo vinculado por cuatro décadas al Perú. Este autor recalca que tiene grandes intereses historiográficos, arqueológicos y etnográficos sobre el Perú, los cuales serían más comunes a mediados del XIX. En palabras del autor: “Si bien no es un viajero de la Ilustración cuyos móviles atañen solo al conocimiento de estas regiones, tampoco es un “viajero interesado” que sólo cifra sus afanes en ligar los recursos del país a los destinos imperiales. Dista mucho de ser un adelantado de los intereses británicos, aun cuando preste atención a los mercados que se abre para las producciones inglesas, le interesa genuinamente la libertad de los países sudamericanos y la viabilidad de su ulterior desarrollo” (Patrucco 2019, p. 2). 18 37 de José María Córdova y Urrutia20. Su obra, al abordar los orígenes del Perú republicano21está dividida en tres partes: 1) Fundación del imperio de los incas, 2) Dinastías ultramarinas, y 3) Perú independiente. De acuerdo con Francisco Quiroz, “La historia que narra está ordenada en función de los gobernantes en sus dos primeros momentos: incas y reyes españoles”. En esa línea, la historia que narra Córdova y Urrutia es lineal e incorpora las tres épocas señaladas como parte de una sola tradición, sin solución de continuidad. Además de este providencialismo, Mark Thurner destaca que esta inaugura la historia patria, pues su autor rechazaba las especulaciones de intelectuales europeos que habían sugerido que el fundador de la dinastía inca no había sido “peruano”. Al contrario de ese planteamiento, en Las 3 épocas del Perú se cita de la versión del Inca Garcilaso el mito de los hermanos Ayar, e insiste en que tanto Manco Cápac como Mama Ocllo (la reina madre inca original) indudablemente “provinieron de una pequeña isla del Lago Titicaca”.22 Pese a ser un texto hecho de forma apresurada, con poca investigación y sin demostrar un curso progresivo de las épocas, Córdova y Urrutia fue el primer autor en mostrar una historia completa del Perú en tiempos republicanos.23 Para tener una visión más amplia de este manuscrito, también debemos situarlo dentro de ciertos estudios realizados sobre la historiografía decimonónica latinoamericana. Al respecto, Bradford Burns24 afirma que los historiadores decimonónicos impusieron, a sus respectivas sociedades, lecturas del pasado según sus temas de estudio, sus valores y sus interpretaciones. Asimismo, estos escritores, al pertenecer a sectores privilegiados, adscribían a sus historias a una narrativa de homogeneidad y armonía, lo que demostraba su visión limitada en asuntos de clase y posición social. Además, esta historiografía, al rechazar las ideas provenientes de la península ibérica, buscó otros referentes filosóficos e históricos; por ello, seguían la producción intelectual de Inglaterra, Francia o Alemania. El progreso, para estos historiadores, significaba recrear sus naciones a imagen y semejanza de los modelos europeos. Córdova y Urrutia, José María. 1844. Las 3 épocas del Perú, o, Compendio de su historia. Perú: Imprenta del Autor. 21 Dager, Joseph. 2009. Historiografía y Nación en el Perú del siglo XIX. Lima: Pontificia Universidad Católica del Perú, p. 96. 22 Thurner, Mark. 2012. El nombre del abismo. Meditaciones sobre la historia de la historia. Lima: Instituto de Estudios Peruanos, p. 150. 23 Quiroz, Francisco. 2012. De la patria a la nación. Historiografía peruana desde Garcilaso hasta la Era del Guano. Lima: ANR, pp. 148-149. 24 Burns, Bradford. 1789. “Ideology in Nineteenth-Century Latin American Historiography,” Hispanic American Historical Review 58, pp. 409-431. 20 38 Para Guillermo Palacios (2009), es preferible usar “relato historiográfico” y no “historia” para la historiografía decimonónica latinoamericana. Sin duda, esta terminología permite diferenciarla con las narrativas propias de la profesionalización de la disciplina del siglo XX. En efecto, su principal diferencia es que las primeras buscaron crear y justificar al Estado nacional y a sus ocupantes, con el objetivo de desdibujar a los adversarios y a los grupos subalternos. Así, estos relatos configuraban las identidades que justificarían el funcionamiento del aparato estatal y el control de la sociedad local; reivindicaban las aspiraciones de grupos o facciones que inventaban raíces, genealogías y linajes que sostendrían los privilegios de unos y la subordinación de otros. Por todo ello, Palacios considera que la historiografía del siglo XIX latinoamericano fue un escenario de lucha política e ideológica. Los análisis de la historiografía decimonónica de América Latina de Burns y Palacios son distintos al del historiador colombiano Germán Colmenares25. Su principal interrogante gira en torno a las condiciones intelectuales o discursivas en la que se formó dicha historiografía y cómo se proyectó hacia el futuro. Por lo general, aunque vista como un simple hábito de una élite intelectual, para Colmenares la ideología supera las barreras sociales: esta podía silenciar la agencia o cultura de algunas comunidades o sujetos subalternos, pero no significaba que se reconocieran en ella o utilizaran varios de sus conceptos. Podemos observar, por tanto, que las luchas por la construcción de naciones no solo se desarrollaron en escenarios bélicos sino también en el mundo de las letras: militares e intelectuales, a través de sus escritos, justificaban sus proyectos políticos y su permanencia en el poder. Para afianzar sus posiciones, se valieron de la escritura histórica, que constituyó en un discurso reivindicativo al permitir a determinados grupos o facciones a inventar sus raíces, genealogías y linajes. Fue en ese contexto en que Cortegana, miembro de un sector bajo de la élite, escribió su manuscrito que inventó una historia general para conseguir ciertos derechos y privilegios del Estado. Historia del Perú, presuntamente redactada en 1848, aborda, en trece tomos, la historia general del país en sus tres etapas: prehispánica, colonial y emancipadora. Cabe destacar el interés de Cortegana por redactar una historia “nacional” que presentara una visión total del Perú como un ente que transcurre en el tiempo, a diferencia de otros veteranos y Colmenares, Germán. 1997. Las convenciones contra la cultura: Ensayos sobre historiografía hispanoamericana del siglo XIX. Bogotá: Tercer Mundo Editores, Universidad del Valle, Banco de la República, Colciencias. 25 39 contemporáneos que solo dejaron memorias parciales de hechos y otros acontecimientos de la independencia. En ese sentido, este manuscrito es uno de los pocos casos en el que se pretende escribir una historia total, mucho antes que la publicación de la obra emblemática de Sebastián Lorente, que apareció durante la segunda mitad del siglo XIX (Dager 2010, Quiroz 2012, Thurner 2012). Tanto Quiroz como Thurner demuestran que Lorente fue el autor emblemático de su siglo para la Historia. El primero de ellos explica que la visión de Lorente presentaba un marco interpretativo e integrador de escritores coloniales como el Inca Garcilaso de la Vega y Pedro Peralta. Su peculiaridad era que trataba de ir más allá de lo ocurrido en Lima y el Cuzco, además de mostrar una visión progresiva de la historia en que los nuevos períodos superan a los precedentes. Así, Lorente reconoció no solo la importancia del imperio incaico sino también del periodo colonial porque son la base para la conformación del Perú moderno. En palabras de Lorente, a través de la colonia, el Perú se inserta insertó en el mundo occidental. Para el historiador norteamericano Mark Thurner (2009; 2012), el tratamiento de la historia peruana en el siglo XIX estuvo marcado por la muerte poscolonial del “libro de los reyes”, lo que significó un desplazamiento de una escritura de la historia al servicio de la monarquía a una al servicio de la ciudadanía. Lorene, como su máximo exponente, escribió una historia bastante crítica que contemplaba el desarrollo nacional como la armonía de los elementos civilizados desde un pasado remoto y primitivo hasta el futuro. De esa manera, se establece «un marco genealógico perdurable del discurso histórico peruano contemporáneo» (Thurner 2009, 114). Con ello, el Perú presentaría una narrativa nacional propia cuyas raíces eran antiguas y cuyo futuro solo estaba limitado por el alcance providencial de su glorioso nombre propio. Ambos trabajos nos ayudan a contrastar los escritos de Lorente y el manuscrito de Cortegana. En ambas narrativas, se dejan huellas de una visión genealógica y teleológica de las etapas de la historia del Perú, comenzando con el pasado prehispánico. Sin embargo, a diferencia de Lorente, Cortegana sí fue testigo de los hechos en la emancipación, por lo que su “Historia” mezcla descripciones, aspectos cronísticos y características propias de las memorias, pese a que su principal interés es brindar una visión total y temporal de la Historia del Perú. Finalmente, Joseph Dager plantea que la historiografía decimonónica tenía como fin consolidar la nación y el nacionalismo, lo que facilitaría la integración de todos los peruanos a un proyecto colectivo. Entre los temas más recurrentes en estos escritos se encuentran: a) el 40 pasado inca como utópico, b) crítica a la conquista española, c) visión de la etapa virreinal como germinadora de la nación, d) la emancipación como un sentimiento compartido por todos los peruanos, y e) visión de Chile como enemigo. Aunque Dager no incluye a Cortegana, su marco conceptual es útil para analizar el manuscrito. Como se explicará, estos cinco puntos se cumplen en el manuscrito, a excepción del último por cuestiones temporales. En cuanto al género histórico, los autores decimonónicos reconstruyeron acontecimientos, a través de fuentes orales y diversa documentación histórica, y narraron sucesos políticos (De la Puente 2020). De esta forma, nació la escritura de memorias vivenciales, cuya principal característica era su subjetividad sobre procesos que vivieron sus autores, como las guerras de independencia; no se debe perder de vista también, como señaló Denegri, que estos escritos “hacen frecuente la defensa de la fama y el buen nombre de sus propios autores, que escribieron para protegerlos” (1971a, p. XIII). Por todo ello, el manuscrito ayuda a visibilizar las formas de escritura de la historia antes de que la disciplina se formalice o se institucionalice. En particular, se debe entender que a diferencia de sus contemporáneos interesados en escribir “memorias” de la época de la independencia, Cortegana intentó dejar de lado su función de “testigo” –no necesariamente de forma exitosa- y se presentó también como un “narrador” que buscaba dar una visión en conjunto de un ente historiable como el Perú que trasciende los hechos circunstanciales y testimoniales de alguna época particular. El historiador Gustavo Montoya afirma que las primeras narrativas sobre la independencia provenían de los mismos actores, en su mayoría militares y políticos, que fueron testigos de los hechos. Entre algunos ejemplos se encuentran las memorias de Guillermo Miller, Daniel O´Leary, Francisco O’Conors, José Rufino Echenique, Andrés García Camba, Manuel de Mendiburu, Antonio Gutiérrez de la Fuente, Francisco J. Mariátegui, Bernardo Monteagudo, Santiago Távara, José de la Riva Agüero, José Bernardo de Torre Tagle, Juan de Berindoaga, Manuel Lorenzo de Vidaurre, José San Martín y Simón Bolívar. Al ser, en su mayoría, discursos reivindicativos, estos personajes apelaban a la memoria de los hechos. Por ello, “esta es una narrativa justificatoria en la medida que sus gestores privilegian en sus relatos la participación que les tocó desempeñar, así tenemos diversas imágenes encontradas con respecto a un mismo acontecimiento” (Montoya 2000, 1). En esa línea, el discurso decimonónico privilegiaba el papel del individuo en la historia, lo que opacaba la participación de los actores colectivos y sociales. A pesar de esto, ninguno puso en discusión el carácter revolucionario de las independencias, “más aún, conscientes de que asistían a la 41 inauguración de un nuevo orden histórico, se imaginaron a sí mismos como portadores de una modernidad política que admitía formas de organización social y política realmente avanzadas para su época. La república popular democrática” (Montoya 2000, 2). Otro estilo de escritura histórica fue el de la Historia General. Para Joseph Dager, la primera obra en ofrecer una visión global de la historia nacional es el libro Las tres épocas del Perú de José María Córdova y Urrutia, publicado en 1844, y que abordó la pregunta sobre los orígenes del Perú (Dager 2009, 96). Por su parte, para Francisco Quiroz, Córdova y Urrutia fue el primero en mostrar una historia completa del Perú en tiempos republicanos a pesar de ser un texto hecho con prisa y poca investigación y sin demostrar un curso progresivo entre las cuatro épocas (Quiroz 2012 248-149). Por todo lo anterior, se sostiene que el manuscrito de Cortegana constituye una fuente importante que nos muestra el uso de la escritura histórica con fines políticos y reivindicativos de parte de un sector de los veteranos de las guerras de independencia en el contexto de las tempranas repúblicas latinoamericanas. Basilio Cortegana representaría el caso de un autor que era miembro de un grupo de poder tras las guerras de la intendencia y que necesitaba inventar una “historia general”, que sería el sostén fundamental para conseguir ciertos derechos y privilegios económicos por parte del Estado (Sobrevilla 2019). Es imperativo entender los vínculos entre política y escritura de la historia durante las primeras décadas del Perú posindependiente, mediante recursos ideológicos que se encuentran presentes en el manuscrito “Historia del Perú” de Juan Basilio Cortegana. Esto es relevante en tanto nos permite comprender la cultura letrada de las primeras generaciones de veteranos de las guerras de independencia americanas, así como el lugar que la escritura de la historia podría ocupar como componente de sus proyectos políticos. Entonces, vemos que existe un contrapunto entre el plano ideal del autor y el aspecto pragmático de usar a la historia con fines políticos. 2.3.Historia del Perú Según Francisco Quiroz, si el manuscrito se hubiese publicado “es muy probable que la historia de Cortegana hubiese coadyuvado a la tendencia nacionalista en el pensamiento histórico del Perú, tanto por rescatar el devenir incaico (aunque en un texto dudoso por su falta de originalidad y fundamentación) como en su enfoque patriótico del período colonial y, 42 sobre todo, su reivindicación de lo peruano en la gesta fundacional de la nacionalidad peruana” (2012, p. 248). Ese fue uno de los objetivos explícitos de Cortegana, pues busca construir nación a partir de la historia y encontrar la continuidad del Perú. Según Nazario Chávez Aliaga, “Cortegana quería salvar este vacío nacional; deseaba escribir una historia articulada, vertebrada, que abarcará todos los hechos en conjunto y fuese el exacto reflejo de la vida entera del país” (Chávez 1962, p 37). Estas características se observan en las primeras hojas de Cortegana, específicamente en su dedicatoria a la nación peruana. En ella, también se aprecia el lugar de enunciación del autor, quien se considera «uno de sus más leales y mas desididos hijos que ha trabajado y trabaja por vuestro engrandecimiento y felicidad» (Cortegana 1848, T1, pp. ii). Es así que encontramos a un personaje que afirma «llevarse desde luego la gloria de ser uno de los primeros que han procurado con valor y con constancia afianzarle su Yndependencia y su libertad en la guerra, y ahora con positivas letras, también su historia» (Cortegana 1848, T1, pp. ii). Con estas citas, se puede afirmar que Cortegana sabía, desde el inicio, el papel que cumplió como héroe militar en el proceso de emancipación: ello le daba suficiente autoridad para escribir una “Historia General”. Al final de la dedicatoria, encontramos la siguiente expresión: “¡O magnanima Nación Peruana acoged pues con protección y aprecio estas primeras pajinas históricas que se ovaciona uno de sus más leales y mas desididos hijos que siempre ha trabajado y trabaja por vuestro engrandecimiento y felicidad!” (Cortegana 1848, T1, pp. ii). La asociación entre las armas y las letras de la historia no debe resultar extraño, pues pertenece al ámbito de la cultura letrada militar, resaltado por la historiadora Carmen Mc Evoy. Cortegana, al igual que muchos otros, representa al militar intelectual, que ya no lucha solo en la guerra sino también en el mundo de las letras26. Escribir una Historia General no fue sencillo para Cortegana, y solo le fue posible cuando se encontraba en la «paz de su retiro». Esta labor también incluyó ordenar y «desarrollar tantos y tantos acontecimientos antiguos, de variedad de nombres, épocas y encadenamiento de los multiplicados hechos» (Cortegana TI 1848, pp. iii). Pese a esta labor, criticó a los historiadores, a quienes califica como escritores que solo dan pequeñas versiones de lo ocurrido en su tiempo y no realizan una narrativa que va de manera correlativa y clara, pues Carmen Mc Evoy y Víctor Arrambide. Conversatorio “El manuscrito de Cortegana” en la Feria del Libro de Cajamarca, 27 de noviembre 2021. https://www.facebook.com/FeriadelLibroCajamarca/videos/1070783373390661/ 26 43 «ha sido preciso recoger muchas páginas de todos aquellos confusos historiadores pasados, que si dan una pequeña idea de lo ocurrido en sus tiempos no los absuelven en su plenitud correlativamente, sino de un modo cortado, y luego nada específico ni claro, y he aquí el mayor trabajo que se ha tenido que superar» (Cortegana 1848, pp. iii). Los contenidos de los tomos pueden describirse de la siguiente manera: Tabla 2. 1. Contenido de los tomos del manuscrito “Historia del Perú”. Porras Barrenechea (1954, 492) Tomo I Los orígenes del Perú hasta el reinado de Yahuar Huacac y un ensayo sobre las costumbres de los Incas Tomo II Los reinados de Viracocha, Pachacutec e Inca Yupanqui, las conquistas de Túpac Yupanqui y Huayna Cápac, con una Descripción del carácter civil y moral de los antiguos y presentes peruanos Tomo III La guerra civil entre Huáscar y Atahualpa y la llegada de los españoles Tomo IV Desde la entrada de Pizarra a Tumbes hasta la muerte de Manco Tomo V La revolución de Gonzalo, la reacción de la Gasca y el epílogo de Hernández Girón Tomo VI La época de los Virreyes desde Cañete a Armendáriz (1556-1724) Tomo VII La de Armendáriz a Abascal (1724-1811) Tomo VIII La agitación revolucionaria en los períodos de los Virreyes Abascal y Pezuela (1812-1819) Tomo IX La etapa de 1819 a 1820 Tomo X perdido y recuperado, se ocupa de la acción de los guerrilleros peruanos Y el Protectorado 44 Tomo XI Los preparativos de la conferencia de Guayaquil, la caída de Monteagudo, la obra administrativa del Protectorado, el regreso de San Martín del Norte y su renuncia ante el primer Congreso Constituyente Tomo XII Relata las campañas finales de la Independencia Tomo XIII Los años de 1825 a 1827, se ocupa del asesinato de Monteagudo, la dictadura de Bolívar y el viaje del Libertador al Alto Perú A partir de este cuadro, se observa que Juan Basilio Cortegana inició su historia con los tiempos prehispánicos y utilizó, como base, a escritores que realizaron obras canónicas sobre la época incaica. Por ello, cita al padre “Blas Valera”, al jesuita Padre de Velasco, al Inca Garcilaso de la Vega, además de mencionar a otros autores como Francisco López de Gómara, Agustín de Zarate, Joseph de Acosta, Pedro Peralta, Doctor Castro y otros. De todos ellos, dio más importancia al padre Blas Valera y al Inca Garcilaso de la Vega por los siguientes motivos: El Padre Blas Valera fue el primero que escribió como Peruano su obra presentando la historia política de los Yncas. El mestizo y nuevo Garcilazo que sin embargo de ser de la línea materna más inmediato pariente de la familia de los Yncas en ese orden de legitimidad que ellos observaban y al que al final acabaron de destruirla los espresados conquistadores Españoles no lo hizo sino mucho después, públicamente cuando sus primeros comentarios en Italia con el objeto de que no fueran impedidas en España. Tiempos después y en los mismos más comentarios llegó a reimprimirse y publicarse en Madrid a la de agosto de 1823 (Cortegana 1848, TI pp 6). Para Cortegana, el hecho de ser peruano otorga mayor legitimidad a la escritura de la historia. ¿Qué significa ello? A lo largo de su obra, argumenta que la construcción de una historia no consiste en la escritura de un solo hombre, sino que es el recuerdo del pasado de un pueblo, cuya narración de acontecimientos obedece a configurar el orden social y político de la vida del Perú (Cortegana 1848, TI pp. 7). Por ello, fue también crítico con el desconocimiento de los peruanos frente a la historia antigua y presente del país: “ignorándola, es el colmo de la estupidez y abandono o en el de la más infamante insensatez ignorando así aun su mismo origen” (Cortegana 1848, TI, pp 6-7). 45 En sus escritos, hay un diálogo bastante fluido entre su tiempo y los inicios de la historia peruana, ya que muestra que el carácter civil y moral de los antiguos peruanos era muy similar a los presentes. En esta sección, crítica a filósofos como Conde de Buffon y William Robertson puesto que estos “escritores extranjeros” caracterizaban a los indianos débiles a nivel físico y cívico. A diferencia de estos autores, otros referentes suyos como el padre de Velasco, Jorge Juan y Charles Marie Le Condamine sí creían en la civilidad de los antiguos peruanos. A pesar de que Juan de Velasco es considerado precursor de la nacionalidad ecuatoriana, Cortegana lo trata como un autor peruano porque defendía a los antiguos habitantes. En esto, el militar celendino se diferenciaba de la mayoría de los escritores decimonónicos peruanos. Según Joseph Dager, “los primeros historiadores peruanos no extendieron los sentimientos de admiración por la cultura incaica a la población general y, menos aún, a la deprimida realidad que travesaban por aquel entonces. No deja de ser paradójico que el propósito nacionalista de enorgullecerse del pasado inca no le hubiese acompañado uno de valorar a quienes eran los descendientes más directos de aquellos antepasados” (Dager 2009, 135). No obstante, el caso Cortegana era distinto, pues criticó a pensadores como Bass que solo calumniaban a los “yndianos” por considerarlos “estúpidos de poco entendimiento, de las potencias del alma muy limitadas, que no tienen ideas”. Por el contrario, en su obra señalaba que los antiguos peruanos eran individuos que vivían en completa civilidad: En la época del Ymperio una sociedad bien regalada y llena de magnificencia. Esto lo prueban las riquezas de que se hicieran los conquistadores. Sus agriculturas y las crías que tuvieron habían llegado a sú perfección. La sanidad en todos ellos, la prueba hasta el día manifestando que es la gente más sana que puebla casi la mayoría del Perú, y en quienes jamás se oye decir que mueren acabada de un mal venéreo que se les supone tan impúdicamente. Sus males epidémicas más ben son cortadas, tabadillos, calenturas o disentería. Así que el Señor Bass está muy equivoco de que de ella emanan ese mal destructor que tal ves vino de Europa a difundirla en lo inocentes naciones de América (Cortegana T1, 1847, pp 143 y 144). 46 2.4.Reflexiones sobre este capítulo Por un lado, la Historia del Perú de Juan Basilio Cortegana significó un intento por una Historia General para lo cual debía ir más allá del género de memorias, que solo consistía en narrar acontecimientos que buscasen realzar individualidades. En ese sentido, el trabajo de Juan Basilio Cortegana fue el ejemplo de un cambio de escribir historia, ya que, al abordar las etapas incaica, virreinal y emancipadora, su Historia General estaría anticipando los planteamientos del historiador que marcó la historia peruana del siglo XIX: Sebastián Lorente. Por otro lado, sostengo que el manuscrito representó una forma de escritura en transición, pues se encuentra entre las memorias personales y la historia general, género no tan practicado durante la época estudiada (1848). Nos arriesgamos a decir que, como propuesta, esta transformación estuvo vinculada a los cambios políticos de la época y a sus formas de expresión historiográficas. En esa línea, las memorias de independencia están más en sintonía con un escenario político caracterizado por la lucha de facciones entre caudillos y veteranos de las guerras emancipatorias, mientras que las historias generales responden a proyectos políticos de construcción de nación. Por ello, la obra de Cortegana es un hito historiográfico de cambio y transición, y su manuscrito es un híbrido que refleja esta tensión política que se vive en las primeras décadas de la república peruana. En sus páginas encontramos que la mayoría de los tomos están vinculados a la forma de hacer historia general, mientras que los últimos están más vinculados a testimoniar sus hechos vividos. A continuación, nos centraremos en el plano de la historia general y por ello analizaremos los volúmenes antes de los hechos y procesos de la independencia. 47 Capítulo 3: ¿Historia General de los peruanos o una memoria parcial del héroe celendino?27 En una conferencia virtual realizada durante las Jornadas Historiográficas de la Pontificia Universidad Católica del Perú, el historiador José de la Puente Brunke presentó una investigación enfocada en esbozar un retrato colectivo de los historiadores -tanto peruanos como extranjeros que residían en el país- del siglo XIX28. Este autor se sumergió en la vida, ocupaciones y publicaciones de 132 individuos, a quienes los dividió entre “metódicos” y “aficionados”. Los primeros correspondían a eruditos y escritores que demostraron persistencia en la elaboración de sus proyectos historiográficos, lo cual se vio reflejado en el impacto de sus publicaciones. En el caso de Juan Basilio Cortegana, De la Puente lo situó con los “metódicos”. No obstante, considerando que su obra ni circuló ampliamente ni fue leído en el siglo XIX, estaría mejor ubicado en la categoría de los “aficionados”, dado que su obra uso a muchos autores canónicos como el Inca Garcilaso, Juan de Velasco, etc., y las utilizó reiteradamente, lo que reduciría su originalidad en comparación con otros historiadores “metódicos”. No es de extrañar que, para Raúl Rivera Serna, el autor celendino: “para escribir sobre la época incaica se sirvió de las obras de Garcilaso, el Padre de Velasco y Marmontel y para la parte virreinal de las memorias de los virreyes fundamentalmente, y para la Independencia utilizó las memorias de Álvarez de Arenales, Hall, Proctor, Miller, García Camba y la Historia del español Torrente, versiones, que matizó con informaciones de carácter personal. La obra es meramente descriptiva y carece de originalidad. Para la parte de independencia plagia las versiones de algunos memorialistas como Álvarez de Arenales”.29 En esta misma línea, para Mark Thurner, la piratería ha sido una vía para la circulación del conocimiento y del saber a lo largo de la historia de la humanidad. Por ello, es comprensible Este capítulo se basa en dos productos académicos y los amplia. En primer lugar, el ensayo producto del Concurso Nacional de Historia del Proyecto Bicentenario del Perú (2022) y al estudio preliminar del facsimilar de la Historia del Perú en 5 volúmenes de la Fundación BBVA y la BNP. 28 Evento realizado en el marco de las Jornadas Historiográficas de la Especialidad de Historia de la Facultad de Letras y Ciencias Humanas de la PUCP. Los comentaristas de la ponencia fueron Claudia Rosas y Joseph Dager. https://www.youtube.com/watch?v=lSiWyw8eF6A 29 Raúl Rivera Serna. 1981, Historia del Perú. Tomo X. Procesos e instituciones. Lima: Editorial Juan Mejía Baca. p. 309. 27 48 que, en los siglos XVIII y XIX, se citara muy poco, motivo por el cual resultara difícil, desde la perspectiva de la historia del libro, rastrear las citas o identificar el grado de originalidad de un autor30. Ante la necesidad de comprender el origen de las ideas y las referencia utilizadas en narrativas históricas, este capítulo establecerá contrapuntos entre el trabajo de Juan Basilio Cortegana en su Historia del Perú y otras fuentes relevantes. A través de una minuciosa comparación con otras fuentes históricas, se evaluará conexión con corrientes de pensamiento de su época, lo cual brindará una comprensión más completa del manuscrito de Cortegana y la cultura letrada de la época. 3.1.Descripción y análisis de los primeros siete primeros tomos del manuscrito 3.1.1. Sumilla literal de los tomos I y II En el Tomo I del manuscrito Historia del Perú, Cortegana aborda la historia de los incas, desde sus orígenes hasta su declive. A través de un estilo narrativo, comienza su relato con los acontecimientos de los primitivos pobladores de esta región. En opinión del militar celendino, estos grupos habían llegado al continente americano desde Asia debido a su estilo de vida nómada, su participación en ejércitos en constante movimiento y el uso de embarcaciones, cuya movilidad se veía favorecida por las corrientes marítimas. Así, América experimentó un proceso de poblamiento y difusión cultural, lo que dio lugar a la diversificación de las lenguas. Es de suma importancia resaltar la relevancia de los incas en su obra. En ese sentido, proporciona una cronología detallada de sus gobernantes, iniciando con Manco Cápac y culminando con Atahualpa. De forma particular, destaca la descripción de los reinados de figuras claves como Sinchi Roca y la colonización forzada de los pueblos indígenas. Otro gobernante importante fue Yahuar Huacac, quien precedió el mandato de su hijo Viracocha. No faltaron comentarios sobre la vasta extensión territorial del Tahuantinsuyo, desde el río Acamaya al norte hasta el Maule al sur, y desde la Cordillera Nieves al este hasta el Océano Pacífico al oeste. Subraya, además, el inicio mítico del linaje incaico con la llegada del primer Inca, Manco Cápac, y su compañera Mama Ocllo, quienes, según la leyenda, emergieron del 30 Conversación entre Mireya Salgado, Mercedes Prieto, Mark Thurner y Carlos Sanhueza sobre “Prácticas y materialidad del conocer en Ciencias Sociales". 23 de abril de 2021 https://www.facebook.com/watch/live/?v=586772395631561&ref=search 49 Lago Titicaca y se establecieron en la ciudad de Cuzco. Finalmente, no se olvidó de abordar la organización social del imperio, con una población distribuida en barrios y distritos, estructurados en los sectores de Hanan Suyo (arriba) y Hurin Suyo (abajo). En relación con los temas religiosos, Cortegana ofrece una descripción detallada del templo del Sol y del culto de los antepasados. Uno de los temas que más le llamó la atención fue la veneración de las momias de los antiguos incas y los múltiples símbolos que representaban el poder y la riqueza incaica. El autor también proporciona información sobre la organización y estructura del templo, lo que permite al lector comprender la complejidad y significado de estas prácticas religiosas. Entre los aspectos culturales, Cortegana resalta las celebraciones del Inti Raymi. Esta festividad era considerada la más grande entre los incas y tenía lugar en el mes de junio, durante la época de cosecha, ocasión que el gobernante aprovechaba para exhibir su prestigio y poder ante su pueblo a través de sus riquezas en su vestimenta y accesorios de oro. En el Tomo 2 del manuscrito Historia del Perú, se profundiza en los orígenes de los incas, presentando el mito de los tres reyes, Manco Cápac, Colla Tocay y Pinahua, quienes realizaron un viaje desde Tiahuanaco con la intención de repartir tierras. También se hace referencia a los cuatro Suyos, que eran las divisiones del Imperio Inca. El autor no omite los logros de varios incas, como Inca Viracocha, Pachacútec, Tupac Inca Yupanqui y Huayna Cápac. Especialmente, se destaca a este último por sus hazañas para expandir el imperio y su amplia legitimidad ante sus vasallos, ya que impulsó la construcción de templos, santuarios y adoratorios al sol, además de casas circundantes al Cuzco. Finalmente, se explica la competencia por el trono entre sus hijos, Huáscar y Atahualpa. Esta disputa llevó al debilitamiento del imperio incaico, y junto con la llegada de los españoles y la muerte de Huayna Cápac, marcó el inicio de la caída del imperio inca. 3.1.2. Sumilla literal de los tomos III y IV El Tomo III de la obra "Historia del Perú" se centra en la conquista del Perú, y en las interacciones entre los conquistadores y los incas. La narración comienza con las primeras menciones del Tahuantinsuyo proporcionadas por Vasco Núñez de Balboa y sus compañeros, quienes describieron la existencia de un reino muy rico y poderoso gobernado por el Inca, considerado el hijo del sol. En su relato, Balboa es retratado como un hombre de extraordinaria intrepidez, y se diferenciaba de sus contemporáneos por su audacia y valentía. 50 Uno de los hombres más valerosos de Balboa era Francisco Pizarro, cuya mejor habilidad era la apertura de la comunicación con los pueblos que serían posteriormente conquistados Otro acontecimiento crucial en este tomo es la muerte de Huayna Cápac, su entierro y la sucesión de Huáscar. Presentado como un gobernante pacífico, el reinado de Huáscar se vio interrumpido por las guerras civiles, en parte instigadas por su madre. En relación con las interacciones entre los indígenas y los españoles, los primeros consideraron a los conquistadores como seres divinos; sin embargo, algunos de ellos, como Alonso de Molina, no abusaron de esta cortesía. Por último, según Cortegana, Atahualpa estaba al tanto de la llegada de los españoles y de lo ocurrido en la Conquista de México, pero no era una de sus mayores preocupaciones: Huáscar, al no reconocerlo como rey de Quito, ponía en duda su legitimidad como hijo de Huayna Cápac y generaba tensiones entre sus súbditos. Otros hechos marcan también la narrativa de Cortegana: la captura y ejecución de Atahualpa, el enfrentamiento entre Pedro Alvarado y Diego de Almagro con las tropas incas lideradas por Quisquis; la fundación de Lima; la expedición de Almagro a Chile; la decisión de Manco Inca de atacar a los conquistadores luego de ser nombrado inca por Pizarro; y el fin del cerco de Lima, lo que, para Cortegana, significó el fin del imperio incaico. Como anexo, se presenta el destino de los sucesores de Manco Inca, la unión de las hijas de Atahualpa con los conquistadores y la genealogía de los incas. 3.1.3. Sumilla literal de los tomos V, VI y VII En el tomo V, se abordan las distintas estrategias para consolidar el poder de Gonzalo Pizarro mediante alianzas con indígenas. Una de las formas más efectivas fue la concretización de un matrimonio entre Pizarro y una princesa inca de linaje real, para que así se puede conseguir el apoyo población local. Por otra parte, aparecieron tensiones entre Gonzalo Pizarro y la corte española. Por ello, para representar sus intereses, se enviaron embajadores a la corona. Como consecuencia, la corte designa al sacerdote Pedro de la Gasca para conseguir la pacificación de la región; sin embargo, la llegada de la Gasca a América conllevó a varias tensiones políticas con Gonzalo Pizarro. También se narra las traiciones sufridas a Gonzalo Pizarro de parte de personajes muy cercanos a él como Pedro de Hinojosa quien cambió de bando. En el tomo, además, se narra la batalla de Huarina, en donde Gonzalo Pizarro se impone sobre Diego de Centeno. El documento también aborda revueltas y conflictos entre españoles tras la muerte del virrey, como el levantamiento de Hernández Girón. 51 El Tomo VI de narra los eventos relacionados con la conquista de Chile y su desarrollo posterior. Cortegana destaca la figura de Pedro de Valdivia, quien fundó ciudades y enfrentó a los araucanos, y Francisco de Villagrán, quien asumió un papel crucial tras la muerte de Valdivia. También se menciona a García de Mendoza, el hijo del virrey, y la obra La Araucana de Alonso de Ercilla. En el contexto peruano, se resalta el gobierno de Cañete, la exploración de Chiloé y la muerte de Caupolicán. También se menciona el intento de establecer una tregua con el Inca Sayri Túpac. En el Libro 2º, que corresponde al reinado de Felipe II, se mencionan eventos en Chile, como la construcción de un puente de piedra y la prohibición de la servidumbre de los indígenas. Durante este período, varios virreyes se sucedieron en el cargo. En 1641, el Marqués de Mancera propuso una tregua en Quilín, en la que los araucanos acordaron condiciones de paz. También se enfrentaron desafíos comerciales y ataques de piratas. Además, se menciona una expedición al legendario Paititi y la construcción de la muralla de Lima. Bajo el gobierno del Conde de la Monclova, se supervisó la reconstrucción después de un terremoto y se prohibió la entrada de navíos franceses. En el mismo período, se produjo una rebelión en Chiloé y se estableció el virreinato de Nueva Granada. Los araucanos se levantaron nuevamente en Chile, pero finalmente se logró firmar un tratado de paz en Negrete. El Marqués de Castellfuerte fue nombrado virrey y proclamó a un nuevo rey El tomo VII se centra en el periodo del Virreinato del Perú desde 1724 hasta 1811, y se enfoca en el segundo reinado de Felipe V en el Perú. En este manuscrito, se realiza un análisis minucioso de este período histórico, incluyendo un examen de los virreyes que gobernaron durante este tiempo, como el marqués de Castelfuerte, el marqués de Villagarcía y el conde de Superunda. También se abordan las políticas que implementaron y se exploran eventos relevantes, como terremotos y epidemias que impactaron a la población peruana, además de distintas rebeliones, siendo la rebelión de Túpac Amaru II y su posterior represión uno de los hechos destacados. El manuscrito también se adentra en el funcionamiento de la Inquisición en el Perú y su influencia en la sociedad de la época. Además, el volumen comienza a examinar la lucha por la independencia del Perú, detallando cómo los independentistas de la Junta de Buenos Aires diseñaron estrategias para lograr la emancipación de los territorios americanos sin recurrir a la violencia, para así evitar confrontación con el ejército español y organizándose en la línea española. El texto también relata las acciones de figuras como Goyeneche y los patriotas Castelli y Balcarce, quienes se dirigieron hacia La Paz en busca de refuerzos. 52 3.2.Cotejo de fuentes en los siete primeros tomos La descripción de los primeros siete tomos que hicimos en los dos apartados anteriores se realiza a partir de una impresión literal las páginas del manuscrito Historia del Perú de Juan Basilio Cortegana ha permitido seguir los acontecimientos que marcaron la historia de los incas, y la conquista y el dominio español en el Perú. Ciertos historiadores poseen una apreciación similar como Gabriela Alejos31, para quien estos documentos constituyen valiosos recursos para la historia militar, la historia política y la etnohistoria. Asimismo, para el Ricardo Sánchez Cabanillas32, la obra de Cortegana ofrece datos inéditos y sorprendentes que enriquecen la comprensión de la historia peruana durante la conquista y la guerra civil, como por ejemplo la participación de Alonso de Molina. En efecto, la visión de Cortegana sobre la conquista, tal como lo señala Sánchez, muestra una inclinación hacia ciertos personajes y eventos históricos. Su preferencia por Blas Valera y su crítica hacia el Inca Garcilaso de la Vega obedece a cómo cada uno retrata a los líderes incas: en vez de ser neutral, Garcilaso ensalza a Huáscar en desmedro de Atahualpa. En ese sentido, Cortegana se alinea más con la perspectiva del sacerdote quiteño Velasco, lo que puede explicarse por su origen norteño y celendino: “obviamente tenía que ser por un inca quiteño o norteño como es el caso de Atahualpa que lo va a considerar como legítimo heredero del trono”. Tampoco se debe perder de vista, siguiendo la argumentación de Sánchez, que Cortegana combinaba sucesos y tiempos de manera vertiginosa, lo que sugiere que en su relato pueden darse algunas licencias narrativas o aproximaciones históricas. Es cierto que, en su obra, Juan Basilio hace referencia a diversos autores y cronistas que escribieron la historia incaica, como Gómara, Zárate, Acosta y el mítico Padre Blas Valera. Además, menciona a Garcilaso, Peralta y el doctor Castro en relación con la exploración y documentación sobre esta civilización. Sin embargo, hasta ahora, no disponíamos de una lista exhaustiva de todas las fuentes utilizadas por él: Tabla N 1 31 Conferencia virtual de Gabriela Alejos para la Municipalidad de Celendín y la sección Cultura de la región Cajamarca el 26 de julio de 2021 https://www.facebook.com/DDCulturaCajamarca/videos/564902297845821 Sánchez Cabanillas, Ricardo, “Congreso Nacional de Historia | Mesa 5B: Proyectos políticos e instituciones en conflicto”, https://www.youtube.com/watch?v=zukCa5IuH90&t=2525s 32 53 Tabla 3. 1 Tomo I y II del manuscrito Tomo I y II del manuscrito • Inca Garcilaso de la Vega: Comentarios reales de los Incas (1609) • Juan de Velasco: Historia del reino de Quito en la América Meridional (1789) • William Robertson: History of America (1777) • Antonio de Herrera y Tordesillas: Historia general de los hechos de los castellanos en las Islas y Tierra Firme del mar Océano que llaman Indias Occidentales (1601) • José Pastor de Larrinaga: Mercurio Peruano (1793) / Poemas En los dos primeros tomos del manuscrito, la principal fuente de información es Comentarios Reales de los Incas del Inca Garcilaso de la Vega. Además, se pueden apreciar referencias a distintas obras, como Historia del reino de Quito en la América Meridional de Juan de Velasco, History of America de William Robertson, e Historia general de los hechos de los castellanos en las Islas y Tierra Firme del mar Océano que llaman Indias Occidentales de Antonio de Herrera y Tordesillas. Es importante mencionar que, al final de cada relato, Cortegana introduce un poema sobre el Inca correspondiente, extraído de las páginas del "Mercurio Peruano". Estas referencias se pueden corroborar y evidenciar de maneras explícita en el anexo N°1.Asimismo, es interesante observar que existe una correlación entre el contenido del manuscrito de Cortegana en los tomos III y IV, y lo escrito por Garcilaso y Marmontel. Tabla 3. 2 Tomos III y IV del manuscrito Tomos III y IV del manuscrito • Inca Garcilaso de la Vega: Historia general del Perú (1617) • Jean-François Marmontel: Les Incas ou la destruction de l'Empire du Pérou (1777) 54 Una lectura sin exégesis heurística de la obra de Cortegana podría convencernos de que estamos ante una fuente original. Sin embargo, al contrastar los tomos III y IV con otras fuentes, se evidencia que son principalmente una apropiación y adaptación del trabajo de Jean-François Marmontel de su obra Los Incas o La destrucción del Imperio del Perú. De acuerdo con Estuardo Núñez el trabajo del escritor francés no fue bien recibido por la Inquisición y, por lo tanto, fue objeto de condena. No obstante, intelectuales notables como José Baquíjano, Manuel Lorenzo de Vidaurre y José Faustino Sánchez Carrión mantuvieron en sus colecciones personales obras del mencionado autor francés. Una de las principales obras de Marmontel fue Les Incas33, una novela escrita en prosa, y ambientada entre el descubrimiento y la muerte de los Pizarro. Su objetivo era presentarse en contra del fanatismo religioso de los conquistadores en México y Perú. Para lograrlo, se basó en diversos planteamientos de Montesquieu, quien sostenía que la religión era funcional para la dominación de aquellos que no la profesaban, lo cual se manifestó en el contexto americano. En la elaboración de su obra, Marmontel recopiló información sobre los incas y los aztecas a partir de las obras del Inca Garcilaso, Antonio de Herrera y Bartolomé de las Casas, entre otros autores. En palabras del erudito Estuardo Núñez: “Lo característico en Los Incas es la extraña mezcla de elementos aztecas e incaicos en una misma trama, con prescindencia no sólo de la noción del tiempo sino también de la noción de espacio. No importa nada que lo mexicano suceda en el Perú o que lo peruano suceda en México, ni significa nada, en la inspiración marmonteliana, la enorme distancia que media geográficamente entre un pueblo y el otro, ni las diferencias esenciales de sus circunstancias humanas e históricas. En esa actitud de desconocimiento de precisiones y de transmutación de las realidades espaciales y temporales, no es único Marmontel”.34 Con Les Incas, Marmontel buscaba llamar criticar a la sociedad francesa, por lo que empleó a la incaica como un modelo ideal. Aunque la obra contiene elementos propios de una obra histórica, resulta confusa y desordenada en su estructura. En el primer tomo, incorpora datos y 33 Jean François Marmontel. 1873. Los incas ó La destrucción del imperio del Perú. Barcelona, Calle Escudellers, n.o 25. Imprenta de Juan Oliveares. 34 Núñez, Estuardo. 1997. Las letras de Francia y el Perú: apuntaciones de literatura comparada. Lima: UNMSM. 55 noticias tomados de Las Casas y Antonio de Herrera, pero sin una secuencia clara de los acontecimientos de la conquista en las Antillas, Centroamérica y México. En el segundo tomo, los personajes históricos son presentados de manera novelada en lugares como Panamá y Perú. Aquí encontramos a figuras como Francisco Pizarro y Diego Almagro, así como personajes ficticios como Cora, una virgen del sol, y Alonso de Molina, homónimo de uno de los trece compañeros de Pizarro en la Isla del Gallo. Desde la trama ficticia, se desarrollan diálogos amorosos entre Molina y Cora, quienes encuentran un destino trágico35. Efectivamente, Les Incas se inspiró en diversas fuentes para su elaboración. Garcilaso de la Vega Inca fue la fuente principal, y su obra Comentarios Reales de los Incas proporcionó valiosa información sobre la civilización incaica. También se mencionan los relatos de otros cronistas como Cieza y Agustín de Zárate, quienes ofrecieron perspectivas importantes sobre la historia de América. Adicionalmente, se incorporaron episodios relacionados con las islas del Mar del Sur, particularmente en Tahití, basados en los relatos de exploradores como Bougainville, Leonel Wafer y Des Brosses. No podemos olvidar a La Condamine. una fuente de referencia obligatoria para proporcionar detalles y contexto sobre ciertas ubicaciones geográficas36. Esta narración estuvo acompañada de temas espectaculares como hambrunas en el mar, erupciones volcánicas y tempestades en regiones ecuatoriales. Estos paisajes eran complementados por diálogos filosóficos entre aztecas e incas sobre diversos temas, como la ilustración, ideas políticas de progreso, reforma, libertad y tolerancia. En consecuencia, era notorio una dura crítica hacia la colonización española: los protagonistas españoles eran retratados con términos negativos como "fieras", "tigres", "loups" o "lions", lo que parecía ser una crítica directa a las élites francesas de la época. En la obra de Marmontel, estas ideas reflejaban las corrientes de pensamiento de la época, influenciadas por autores como Buffon, Montesquieu y Rousseau. Pese a su carácter moralizador, la ficción superaba a los hechos históricos, por lo que Núñez la caracterizó como un texto de "poco de verdad"37. Por todo lo anterior, podemos confirmar, siguiendo lo planteado por Rivera Serna y Waldermar Espinoza, que los contenidos de los tomos III y IV de Cortegana están más que 35 Núñez, Estuardo. 1997. Las letras de Francia y el Perú: apuntaciones de literatura comparada. Lima: UNMSM. 36 Núñez, Estuardo. 1997. Las letras de Francia y el Perú: apuntaciones de literatura comparada. Lima: UNMSM. 37 Núñez, Estuardo. 1997. Las letras de Francia y el Perú: apuntaciones de literatura comparada. Lima: UNMSM.. 56 influenciados por la novela Les Incas de Marmontel. Y es uno de los muchos ejemplos de cómo el autor se apropió de diversas fuentes para elaborar su historia de los incas. Pese a ello, debemos destacar la intención de Cortegana de elaborar una historia general del Perú utilizando una amplia gama de fuentes, entre las cuales se encontraban obras de historiadores y cronistas, así como obras literarias de su época. Tabla 3. 3 Tomo V, VI y VII del manuscrito Tomos V, VI y VII del manuscrito • Inca Garcilaso de la Vega: Comentarios reales de los incas (1723). Edición: Andrés González de Barcia (Gabriel Cárdenas) • Inca Garcilaso de la Vega: Historia general del Perú (1617). • José María de Córdova y Urrutia: Las 3 épocas del Perú o compendio de su historia (1844) • Juan Ignacio Molina: Compendio de la historia civil del reino de Chile (1795) • Andrés García Camba: Memorias para la historia de las armas españolas en el Perú (1846) El manuscrito V se ancla desde la Historia general del Perú (1617) del Inca Garcilaso de la Vega. Así, Cortegana sigue la estructura de esta obra en la mayoría de los casos, y parafrasea, reproduce, menciona, comenta, interviene y amplia. Con estas, tiene la intención de opinar y guiar a su línea interpretativa. También, menciona otras fuentes Primera y segunda parte de la historia del Perú de Diego Fernández, el Palentino, y Historia general de las Indias de Francisco López de Gómara. Todo apunta a que se remite a estas fuentes desde la lectura del Inca, así que no podríamos afirmar sí las leyó de primera mano. En el tomo VI, en forma similar al tomo anterior, Cortegana sigue apoyándose en la Historia general del Perú (1617) del Inca y, además del prólogo a los Comentarios reales de los incas de Alberto González de Barcia. Asimismo, Cortegana usó Las 3 épocas del Perú o compendio de su historia de José María Córdova y Urrutia como recurso primordial para hacer la guía del período virreinal; además de utiliza también la estructura “antigua, colonial e independiente” para narrar cronológicamente la sucesión de reyes y virreyes respectivamente. Al asumir este 57 esquema, usa otras fuentes como Compendio de la historia civil del reino de Chile de Juan Ignacio Molina, además la mencionada obra de Garcilaso hasta el gobierno del virrey Toledo. Hay otros autores que también son usados como Alonso de Ercilla y su La Araucana, el cual proviene de su lectura Juan Ignacio Molina. Cita la Crónica moralizada del orden de San Agustín en el Perú de fray Antonio de la Calancha, mencionado en el prólogo de Andrés González de Barcia. En ciertas ocasiones, Cortegana cita brevemente a obras como la de Estadística histórica, geográfica, industrial y comercial de los pueblos que conforman las provincias del departamento de Lima de Córdova y Urrutia. Para el tomo VII, Juan Basilio continúa usando Las 3 épocas del Perú para obtener la información sobre los virreyes en términos generales; no obstante, en los capítulos que abordan el proceso de la independencia, ahora se apoya en una nueva fuente: Historia de la revolución hispanoamericana, la cual fue escrita por el español Mariano Torrente que aborda los movimientos independentistas en Sudamérica a principios del siglo XIX. Veremos a continuación que Cortegana seguirá recurriendo a esta obra como referencia en sus futuros escritos. 3.3.Descripción y análisis de los primeros seis últimos tomos del manuscrito 3.3.1. Sumillas de los tomos XVIII, XIX, X y XI El tomo VIII describe los gobiernos de los virreyes José Fernando de Abascal y Joaquín de la Pezuela, quienes intentaron sofocar los movimientos independentistas en Sudamérica. Son ocho capítulos y cada uno corresponde un año determinado. También se relata temáticas fundamentales como la travesía de José de San Martín, el surgimiento de las guerrillas patriotas, las medidas dadas por la autoridad real y los actos políticos y simbólicos. Además, se destaca la narración de las batallas y las acciones de los líderes militares, tanto patriotas como realistas. El tomo IX está en muy malas condiciones y debido a la tinta corroída su lectura es una tarea prácticamente imposible; no obstante, a Emilio Gutiérrez de Quintanilla, se sabe que este aborda los acontecimientos de 1820 durante el gobierno del virrey Pezuela. A partir de este crítico, el tomo consta de cuatro capítulos que se enfocan en la Expedición Libertadora liderada por José de San Martín. Por su parte, el manuscrito X recopila documentos que narran el período en que José de San Martín fue protector del Perú en 1821. En este tomo empieza con la conspiración de Aznapuquio, la cual llevó a que se destituya al virrey Pezuela. 58 Después de ello, narra los eventos que llevaron a la proclamación el 28 de julio de 1821. Finalmente, describe el sistema de gobierno que San Martín estableció en el Perú, conocido como el Protectorado. Lamentablemente, estos tomos están muy deteriorados, pero se pueden rescatar ciertos pasajes en donde se puede observar más las opiniones de Juan Basilio gracias a que fue testigo de época. El tomo XI aborda los sucesos de 1822. Por ello, se abordan las acciones de José de San Martín como protector del Perú, los decretos relacionados con los líderes Torre Tagle y Monteagudo, las batallas como la de Ica y la de Pichincha, así como eventos políticos y militares, como el incendio de ministerios. También, resalta la entrevista entre San Martín y Bolívar y la caída de Monteagudo debido al impacto de los limeños de élite. Cortegana da una apreciación favorable para Monteagudo y, además, muestra detalles de la instalación de la Asamblea Constituyente y la salida de San Martín del Perú. También muestra las acciones iniciales de Bolívar y es así que narra eventos como la entrevista de Guayaquil. 3.3.2 Sumillas de los tomos XII y XIII y cotejo de fuentes El tomo XII inicia abordando las campañas preliminares para las batallas de Junín y Ayacucho. En este tomo, aparecen personajes como el Virrey La Serna, el teniente coronel Barahona y destaca la figura Sucre como militar y hombre de Estado, además de virtudes morales; se nota la ausencia de Bolívar. Como Cortegana fue testigo corrige a Miller, Torrente y Camba para rectificar y dar observaciones, pues no daban los méritos necesarios de los peruanos en la independencia. De todas maneras, el centro de este tomo son las Batallas de Junín y Ayacucho. Si bien es cierto que muestra muchos elementos bélicos y tácticos sobre la Batalla de Junín, fue en su descripción de los hechos de la Batalla de Ayacucho donde mostró mayores detalles. Coincido con el análisis de Nelson Pereyra (2022), quien afirma que Cortegana tuvo una gran importancia estratégica gracias a su ubicación en el campo de batalla, lo que hizo posible no solo observar los acontecimientos, sino también ser partícipe de ellos. Así, Cortegana hace mención del ataque de la división de Valdés contra las fuerzas de La Mar, así como las decisiones tomadas por Sucre para fortalecer sus líneas. Otro aspecto relevante en la Batalla de Ayacucho fue la disposición de los ejércitos. Cortegana indica que el ejército libertador se encontraba en una posición desfavorable debido a la emboscada en Colpahuaycco y el respaldo brindado por los habitantes de Huanta y Quinua al ejército realista, así como la 59 superioridad en términos de equipo militar, número de soldados y artillería del enemigo. Sin embargo, algo importante que destaca Cortegana fue la captura al virrey La Serna por Pantaleón Baraona. Esto tuvo un impacto los realistas, quienes se retiraron de manera caótica. Por último, la victoria fue asegurada por el batallón Caracas, que arrolló a las columnas españolas y se apoderó de la artillería en el centro del campo de batalla. Las fuerzas realistas intentaron persistir en su ataque al flanco izquierdo patriota, pero al notar que las fuerzas patriotas habían triunfado en otros frentes, optaron por retirarse. Algo sumamente importante y que regresaremos es que Cortegana reproduce la lista de participantes en las Batallas de Junín y Ayacucho publicada en El Peruano. Realiza notas a pie página para describir cómo fue la trayectoria de cada uno de ellos. Además, subraya la falta de reconocimiento y apoyo que experimentaron los veteranos en los años posteriores por parte del Estado y la sociedad. Por su parte, el tomo XIII del manuscrito se enfoca en los años 1825, 1826 y 1827, un período crucial en el que la República va tomando forma bajo el liderazgo de Simón Bolívar y, además, destaca el viaje del líder a la región del Alto Perú. Los contenidos de este tomo se basan principalmente en decretos, proclamaciones y correspondencia entre diversas autoridades gubernamentales, recopiladas de diversas fuentes. A pesar de la reproducción fragmentada de documentos, todo se alinea alrededor de la figura de Bolívar. También, se puede destacar la creación de la Constitución vitalicia, así como la creación y organización del Congreso. Asimismo, el contenido muestra el deseo de los peruanos de que Bolívar no se vaya del país y esté en un gobierno duradero bajo su mando. Por ello, Cortegana cita aclamaciones y homenajes por parte de políticos como del pueblo hacia el héroe libertador. En cuanto al cotejo de fuentes, en estos últimos seis tomos del manuscrito Historia del Perú, Cortegana mezcla, transforma y crítica las versiones de diversas fuentes. Su principal combatiente a quien se opuso fue Andrés García Camba y a sus Memorias para la historia de las armas españolas en el Perú. También, corrigió en las algunas ocasiones a Guillermo Miller, a pesar de haber luchado bajo su mando. También hay que decir que agrega información específica, aunque ello involucre reiteraciones y ampliaciones de los pasajes de los memorialistas. Además, modifica la secuencia de los eventos que se presentan en las fuentes de acuerdo con la conveniencia de Juan Basilio. También, utiliza a la Historia de la revolución hispanoamericana de Mariano Torrente y las 3 épocas del Perú de Córdova y Urrutia, para construir su propia perspectiva de la evolución histórica y versión general totalizante. 60 Cortegana usa además diarios oficiales y documentos de circulación pública, como la Gaceta del Gobierno de Lima y el diario El peruano, para narrar la declaración de independencia del 28 de julio. Con estos documentos, Cortegana rescata selectivamente qué fragmentos deben estar en el manuscrito. También, usa las Memorias y documentos para la historia de la independencia del Perú de P. Pruvonena y Lima justificada en el suceso del 25 de julio impresa por Manuel del Río. Me atrevo a decir que Cortegana no fue solo un compilador de documentos y hechos, ya que emite juicios de las fuentes y dándoles otro sentido. Esta maniobra muestra como en los manuscritos de Cortegana era narrador y, también, testigo crítico de los sucesos del pasado. 3.4.Las intenciones de Cortegana al escribir su Historia del Perú Para Juan Basilio Cortegana, es criticable que la información sobre la historia antigua del Perú sea desconocida por los peruanos: “ignorándola, es el colmo de la estupidez y abandono o en el de la más infamante insensatez ignorando así aun su mismo origen” (Cortegana 1848, TI, pp. 6-7). Por ello, uno de los objetivos principales de los dos primeros tomos de la Historia del Perú de Cortegana es, precisamente, proporcionar una narración detallada de los acontecimientos que marcaron el orden social y político de la vida en el país desde sus orígenes. Así, el autor muestra a los incas de forma favorable, pues la fundación del imperio de Manco Cápac y sus sucesiones, que con espressión de su culto, sus leyes y costumbres, os presentasen a la faz del mundo desde vuestro primitivo origen en sociedad civil, muy distante de aquella barbaridad ó ignorancia desde que hubo de suponérseles entonces, a estos primeros moradores de quienes emanamos, por sus crueles conquistadores los Españoles, y de quienes también, y a participamos – sin remedios (Cortegana 1848, T1, pp. iii). Otro objetivo de Cortegana es demostrar que el carácter civil y moral de los antiguos peruanos era muy similar al de los presentes. Así, el autor critica duramente a filósofos extranjeros como Bass, Buffon y Robertson, quienes caracterizaban a los "indianos" como personas física y cívicamente no óptimas. En contraste, resalta el enfoque de otros pensadores hispanos como el Padre de Velasco, Jorge Juan, e incluso del científico francés La Condamine, quienes sí creían en la civilidad de los peruanos. De esta manera, Juan Basilio es contundente al señalar que estos pensadores europeos simplemente calumniaban a los "indianos" al considerarlos como seres de poco entendimiento y con capacidades mentales limitadas. Para el autor celendino, esta perspectiva es totalmente falsa, ya que, según su investigación, los antiguos 61 peruanos tenían todas las capacidades intelectuales y morales acordes al nivel de civilización de su época. La siguiente cita ilustra este pensamiento: “Pero vamos á refutar la cadena de imposturas que han proguado los filósofos a los Yndianos. Hablase aquí de los peruanos. La tradición de los antiguos peruanos antes de los Yncas queda manifestado que muy pocos fueron las provincias que no vivían en sociedad y bajo un régimen civil y político. Esta aserción la paveta bien las conquistas de los Yncas. En la época del Ymperio una sociedad bien regalada y llena de magnificencia. Esto lo prueban las riquezas de que se hicieran los conquistadores. Sus agriculturas y las crías que tuvieron habían llegado a sú perfección. La sanidad en todos ellos, la prueba hasta el día manifestando que es la gente más sana que puebla casi la mayoría del Perú, y en quienes jamás se oye decir que mueren acabada de un mal venéreo que se les supone tan impúdicamente. Sus males epidémicas más ben son cortadas, tabadillos, calenturas o disentería. Así que el Señor Bass está muy equivoco de que de ella emanan ese mal destructor que tal ves vino de Europa a difundirla en lo inocentes naciones de América. Otro tanto sucede con las viruelas, pues raro o ningunas casi son los que tienen la cutis dañada de ellas, no obstante de ser la gente más respuesta a las interferencias del clima. Se les calumnia de estúpidos de poco entendimiento, de las potencias del alma muy limitadas, que no tienen ideas y falta de relección contrayéndose solo á los objetos presentes de todo lo que por la experiencia se asevera que es falso: los antiguos peruanos tenían todos los dotes estendidos al tamaño de la civilidad de entonces. Los de ahora bajo la misma ilustración que presente el siglo. Que se les atribuya cobardía, lo que tampoco fue así: sus conquistas no prueban cobardía, lo que prueba es el ningún conocimiento que tenían de las armas de fuego, del hierro y de los caballos, y sobre todo, de la precufiacioso de sus últimos reyes. Sin embargo, véase lo que al fin les costó a los españoles de sometimiento. Véase las guerras de Arauco …. (pp. 143 y 144) Al igual que los pensadores ilustrados que critico Juan Basilio Cortegana, autores del género de memorias como García Camba quitaban protagonismo a los peruanos en la gesta de la independencia. Las razones del español son obvias, ya que desea reivindicar a la versión de los hechos de los realistas; sin embargo, Cortegana también corrige en ciertos momentos a Miller y así da más respaldo a la versión de los peruanos, pues en última instancia, él también era extranjero. Para redondear su propuesta y propósito, Cortegana reproduce una lista de combatientes tanto en las Batallas de Junín y Ayacucho en el tomo XII que fueron publicadas en el diario El 62 Peruano. Al nombrar a uno por uno de ellos, les da un espacio en su Historia General. Así, tiene un lugar simbólico como héroes Independencia y como constructores de la nueva República. En los “combates por la memoria” a la que hemos aludido anteriormente la lucha no fue solo por el reconocimiento político y el honor, también por lo material y vida digna de los excombatientes. Cortegana rescata sus nombres y sus historias. Ello es fundamental para preservar su legado y otorgarles la justicia que merecen. El hecho de que los veteranos aparezcan en la Historia del Perú es también un uso político de la memoria y la Historia. Esto va en correlación con las solicitudes de pensiones de los excombatientes que buscaban beneficios económicos y el apoyo del Estado peruano de aquel entonces. No es casual que muchos de los pies de página explicativos mencionan las penurias económicas que experimentaron muchos de ellos, a pesar de que algunos alcanzaron el éxito económico o político. Los reclamos muestran que la conexión entre memoria, la Historia y la política es evidente: las pensiones servían como una herramienta pragmática para obtener beneficios estatales y una mejor calidad de vida de personas que avanzaban en la edad. En suma, la cultura y la memoria histórica son asuntos políticos y económicos, pero también pudieron ayudar a la construcción de Estado-nación. El hecho de nombrar a estos héroes y buscar que se les de reconocimiento es un acto de preservación de la memoria. Para cerrar este punto citaré un pasaje de uno de los ensayos ganadores del II Concurso Nacional de Historia (Mogrovejo 2023, p1): “Dos años antes de la asunción al poder político del Partido Civil, los diputados del Congreso de la República debían abordar la aprobación de una propuesta de ley de la Comisión Auxiliar de Guerra, como uno de los puntos a tratar en su agenda del día. No se trató de cualquier iniciativa legislativa, ya que se proponía implementar el abono correspondiente a los vencedores en el Combate del 2 de Mayo de 1866, sin distinguir la condición de los beneficiarios de dicha pensión. Algunos diputados no conocían de la exactitud del monto, o si acaso ciertos artículos de la ley que les concedía una gratificación mensual tomó en cuenta lo propuesto por la comisión. Por sobre todo, les preocupó que aceptar dicha iniciativa suponga un mayor gasto al Estado por tener que cumplir mensualmente con cerca de dos mil individuos. En medio de la discusión, el representante por Celendín y veterano de la guerra de Independencia, Juan Basilio Cortegana, tomó la palabra para decir que «los vencedores en Junín y Ayacucho, desde que triunfaron, no pidieron nada. Cuando vencimos, lo que se nos dijo a los peruanos, fue: “ustedes han cumplido con su deber, no han hecho más que libertar a su patria del 63 yugo español”». Afirmó Cortegana que, tras el fin de la guerra, «entonces no se hablaba nada de premios, ni de millones. Una tira de papel, era todo lo que se nos daba»38. Para finalizar, aludo al historiador norteamericano Mark Thurner (2019) propone que los procesos de las independencias latinoamericanas de finales del XVIII e inicios del XIX deberían considerarse como la "primera ola de descolonización". Esta ola es un punto de quiebre no solo para América Latina, ya que también influyó en los cambios políticos más allá de lo que fue el Imperio Hispánico. Por otro lado, para fines argumentativos, tengo que traer a colación un fenómeno del siglo XX llamada como la “ola memorial” en América Latina, que suelen asociarse históricamente con las décadas finales del siglo XX, particularmente en el contexto de dictaduras, violencia estatal e insurgencia. No obstante, esta “ola memorial” o también “combate por la memoria” no es la primera que se dio en la región, al contrario, la pionera es la que se dio al período de construcción de los estados poscoloniales en América Latina. Estos “combates por la memoria” estaban estrechamente vinculados a la narración de las experiencias militares de los veteranos de las guerras de independencia. Así, estos veteranos escribieron memorias en las que detallaban los aspectos relacionados con las guerras, como tácticas, estrategias y batallas, con la intención de que estas obras fueran leídas en el futuro, de manera similar a los relatos históricos militares clásicos, como las memorias de Julio César. En otras palabras, al extrapolar la propuesta de Mark Thurner de "primera ola de descolonización", se podría que la primera “ola memorial” está vinculada a la narración de los veteranos de las guerras de independencia. De esta manera, el vínculo y paso de la espada a la pluma contribuye a la configuración de las memorias del pasado en la transición de la colonia a la República en América Latina. Así, para Nelson Pereyra (2022), los recuerdos de los participantes militares de los bandos tanto patriota como realista adoptaron el género memorial y se convirtieron en documentos qué muestran tanto las batallas como las victorias patriotas, así como la derrota de los realistas. 3.5.Reflexiones sobre este capítulo En resumen, la obra de Cortegana podría parecer, a simple vista, un aporte inédito para la entender la forma de escritura histórica, pero, como este capítulo demostró, es esencial 38 Sesión del 8 de noviembre de 1870. Diario de Debates del Congreso, Cámara de Diputados, pp. 875-881. 64 considerar el uso que realizó de otras fuentes. De acuerdo con Waldermar Espinoza, no es de extrañar que hace más de cincuenta años, exactamente en 1951, se elaboró un informe por expertos de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, que incluyó figuras destacadas como Ella Dumbar Temple, Raúl Porras Barrenechea y Carlos Daniel Valcárcel, donde se puso al descubierto la existencia de una notable cantidad de plagio en las páginas de su manuscrito. Específicamente, sostenían que, para el período prehispánico, Cortegana se había apropiado de Cieza de León, Zárate y Mena. No obstante, como se ha demostrado en este capítulo, la intención de Cortegana era realizar una Historia General que de solidez y justifique al grupo de veteranos. Creo que, para sus fines últimos, realizar un sopesado uso de las fuentes no era lo más importante. Su intención era realizar ya no un combate con la espada, sino desde las palabras. Para ello, debía refutar a Camba y, hasta, Miller y demostrar la grandeza del accionar de los peruanos. 65 Conclusiones Juan Basilio Cortegana fue un personaje importante en el proceso de la independencia y los primeros años de la República peruana. Como militar, su actuación fue vital para la independencia, al igual que muchos otros jóvenes que desertaron del ejército realista. Además de su participación en grandes conflictos como la guerra contra la Confederación Peruanaboliviana, también estuvo involucrado en luchas locales. Gracias a su representación por Celendín, inició su vida política y propuso varias iniciativas para mejorar la calidad de vida de sus coterráneos. Como político, nunca abandonó del todo su pasado militar. Por el contrario, aprovechó la oportunidad para promover iniciativas legales que mejorasen la vida de los excombatientes de las guerras de independencia. Asimismo, fue un líder indiscutible en las asociaciones de héroes y veteranos, y un nexo entre el gobierno y colectivos civiles. El manuscrito Historia del Perú de Juan Basilio Cortegana es relevante para entender la cultura militar e ilustrada y, además, de las formas de escribir historia. Por un lado, representa un intento de escribir una historia general, más allá de las memorias personales, que solo narran eventos destacados de individuos específicos. De esta manera, Cortegana introdujo un cambio significativo en la forma de escribir historia, ya que abordó las etapas incaica, virreinal y emancipadora, anticipando los enfoques del destacado historiador Sebastián Lorente y la Córdova y Urrutia. Por otro lado, estos tomos también se ubican entre las memorias personales y la historia general, un género poco común en la época en que se escribió (1848). Esta evolución está relacionada con los cambios políticos de la época y las tendencias historiográficas emergentes. En este contexto, las memorias de independencia estaban más alineadas con un escenario político caracterizado por la lucha entre facciones, mientras que las historias generales estaban relacionadas con proyectos políticos de construcción nacional. La obra de Cortegana representa un cambio y una transición significativos. Su manuscrito es un híbrido que refleja la tensión política que caracterizó las primeras décadas de la República peruana. En sus páginas, la mayoría de los volúmenes se enfocan en la narración de la historia general, mientras que los últimos se centran en testimoniar los hechos vividos. A primera impresión, esta Historia del Perú puede deslumbrarnos y aparecer como asuntos inéditos. No obstante, he realizado una triangulación de fuentes para observar de dónde salen las referencias e influencias de cada uno de los trece tomo del manuscrito. En los dos 66 primeros tomos, la principal fuente es Comentarios Reales de los Incas del Inca Garcilaso de la Vega. Además, se hacen referencias a obras como Historia del reino de Quito en la América Meridional de Juan de Velasco, History of America de William Robertson, e Historia general de los hechos de los castellanos en las Islas y Tierra Firme del mar Océano que llaman Indias Occidentales de Antonio de Herrera y Tordesillas. Cada relato concluye con un poema sobre el Inca correspondiente, extraído del "Mercurio Peruano". Estas referencias se pueden verificar en el anexo. Al analizar los tomos III y IV, se evidencia que son principalmente una apropiación y adaptación del trabajo de Jean-François Marmontel en su obra Los Incas o La destrucción del Imperio del Perú. Este literato francés se basó en diversas fuentes, incluyendo las obras del Inca Garcilaso, Antonio de Herrera y Bartolomé de las Casas, para desarrollar su narrativa. En el tomo V, Cortegana se apoya en Historia general del Perú de Inca Garcilaso de la Vega, siguiendo la estructura de esta obra en la mayoría de los casos. En el tomo VI, Cortegana continúa utilizando Historia general del Perú del Inca Garcilaso de la Vega como fuente principal y agrega el prólogo a los Comentarios reales de los incas de Alberto González de Barcia. Además, se apoya en Las 3 épocas del Perú de José María Córdova y Urrutia para guiar la narración del período virreinal. También hace referencia a otras fuentes como Compendio de la historia civil del reino de Chile de Juan Ignacio Molina, "La Araucana" de Alonso de Ercilla, y la "Crónica moralizada del orden de San Agustín en el Perú" de fray Antonio de la Calancha. En el tomo VII, Cortegana sigue utilizando Las 3 épocas del Perú para obtener información sobre los virreyes, pero ahora incorpora una nueva fuente, Historia de la revolución hispanoamericana de Mariano Torrente, que aborda los movimientos independentistas en Sudamérica a principios del siglo XIX. En estos últimos seis tomos del manuscrito, Cortegana mezcla, transforma y critica las versiones de diversas fuentes. Se enfrenta a las Memorias para la historia de las armas españolas en el Perú de Andrés García Camba y corrige a Guillermo Miller en ocasiones. También agrega información específica y modifica la secuencia de los eventos según su conveniencia. Además, utiliza diarios oficiales y documentos de circulación pública, como la Gaceta del Gobierno de Lima y el diario El peruano, para narrar eventos como la declaración de independencia del 28 de julio. 67 El objetivo de Cortegana con su manuscrito es demostrar la similitud entre el carácter civil y moral de los antiguos peruanos y los actuales. Por ello, critica a filósofos extranjeros que denigraban a los "indianos" y destaca el enfoque de otros pensadores hispanos y científicos que creían en la civilidad de los peruanos. Basilio Cortegana defiende la idea de que los antiguos peruanos tenían capacidades intelectuales y morales acordes a su época. De manera similar a los pensadores ilustrados, García Camba minimiza la contribución de los peruanos a la independencia. Por su parte, Miller a pesar de respaldar la versión peruana también es criticado por Cortegana. La Historia del Perú incluye una lista de combatientes en las Batallas de Junín y Ayacucho, otorgándoles un lugar simbólico como héroes de la independencia y constructores de la nueva República. Así, Cortegana rescata los nombres y las historias de los excombatientes, lo que es esencial para preservar su legado y otorgarles justicia. También destaca la relación entre memoria, historia y política, ya que los veteranos buscaban pensiones y apoyo del Estado peruano. La cultura y la memoria histórica tienen implicaciones políticas y económicas, contribuyendo a la construcción del Estado-nación. Por último, Mark Thurner propone que las independencias latinoamericanas fueron la "primera ola de descolonización", influyendo en cambios políticos más allá de América Latina. Se menciona la "ola memorial" del siglo XX, pero se aclara que la primera "ola memorial" se dio durante la construcción de los estados poscoloniales en América Latina. Así, los "combates por la memoria" de la primera "ola memorial" estaban vinculados a las narraciones de veteranos de las guerras de independencia. Estos veteranos escribieron memorias detalladas sobre las guerras, sus tácticas y estrategias, con la intención de que fueran leídas en el futuro. Este vínculo entre espada y pluma contribuyó a la configuración de las memorias del pasado en la transición de la colonia a la República en América Latina, según Nelson Pereyra. 68 Referencias Allier Montaño, Eugenia y Emilio Crenzel. 2013. Las luchas por la memoria en América Latina. Historia reciente y memoria política. México: IIS/UNAM. https://ru.iis.sociales.unam.mx/handle/IIS/4930 Basadre, Jorge. 1951. “Prólogo” a Historia de los Partidos de Santiago Távara. Lima: Editorial Huascarán. ____________. 1971. 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Confeccione la presente cronología y se publicó por la Fundación BBVA. Esta se basó en la obra de Apolonio Carrasco, en el libro Historia de la Benemérita Sociedad Fundadores de la Independencia, Vencedores el 2 de Mayo de 1866 y Defensores Calificados de la Patria (1988) de Manuel Augusto de Ingunza Simonetti y en documentos de instituciones como el Archivo General de la Nación, Biblioteca Nacional, Archivo Histórico del Centro de Estudios Militares y el diario de debates del Archivo del Congreso del Perú. (Cortegana 2023, vol. 5, 39 73 18 de agosto de 1821 Se crea la Legión Peruana de la Guardia, al mando del marqués de Torre Tagle. En esta unidad del ejército Cortegana y otros patriotas se unieron en las guerras por la independencia del Perú. 1822 14 de enero de 1822 Cortegana participa en la batalla de Torata. 1823 25 de agosto de 1823 Cortegana interviene en la batalla de Zepita. 1824 6 de agosto de 1824 Cortegana lucha en la batalla de Junín. 9 de diciembre de 1824 Juan Basilio combate en la batalla de Ayacucho. 1828 29 de enero de 1828 74 Cortegana es atacado por dos jefes del ejército. Esto se debe, posiblemente, a la publicación de un artículo atribuido a la autoría de Cortegana, texto en que se difama a los agresores. 1833 Marzo de 1833 Durante el gobierno de Agustín Gamarra, Felipe Salaverry y un grupo de militares, entre los que se encontraba Cortegana, son acusados de rebelión y, en consecuencia, puestos en cautiverio. 11 de julio de 1833 Cortegana es enviado a Huanchaco en la fragata Monteagudo. Salaverry y el grupo de militares capturados están presentes en la embarcación. Como preso político, Cortegana es enviado a la región de Maynas. 1834 Febrero de 1834 Salaverry viaja a Trujillo para enfrentarse a las autoridades durante el gobierno de Luis José de Orbegoso. Cortegana decide acompañar a Salaverry. 11 de abril de 1834 Por orden del comandante general de armas Don Franco Valleriesta, se le otorga a Cortegana el grado de comandante general de Nazca para la provincia de Ica. Sin embargo, debido a su salud deteriorada y habiendo ya luchado en la guerra por la independencia, Cortegana decide no aceptar el ascenso. 1838 75 Cortegana obtiene el grado de teniente coronel. Participa en la Campaña de la Restauración contra el protectorado de Santa Cruz; se le designó la región norte. 1839 6 de enero de 1839 Cortegana informa acerca de la salud de unas mulas que están a punto de morir en la provincia de Santa. Se menciona que Cortegana conoce las propiedades de ciertas hierbas medicinales y las emplea para salvar a los animales que tiene bajo su custodia. Enero de 1839 Cortegana informa que la comandancia está al tanto de que el comandante general de la provincia de Santa dio informe sobre el robo de 200 cabezas de ganado por parte del enemigo y el secuestro del gobernador y el comandante. Se menciona que las fuerzas enemigas estaban conformadas por 300 hombres y actuaron desde los altos, buscando cortar la comunicación y capturar pertrechos. 15 de enero de 1839 Cortegana informa que han llegado pertrechos y tropa enferma de Nepeña y son enviados a Huanta con el objetivo de protegerlos del avance enemigo. Se resalta la carencia de recursos y que el camino estaba tomado por el enemigo. Cortegana informa que el 16 de enero se da la orden de que todo lo obtenido (municiones) sea enviado al cuartel general. El 17 se enviaron las municiones y el 20 se encontró al enemigo y a las autoridades apresadas. Se confirma la presencia de 300 cabezas de ganado. El 16 de enero se le ordena al general Jaramillo recuperar las reses del enemigo. El 19 de enero de 1839, Cortegana informa el traspaso de munición al cuartel general. 1840 76 Cortegana es enviado a la región sur del Perú, cerca al límite territorial con Bolivia. 1841 Cortegana es alejado del ejército porque se le abre un proceso; sin embargo, es declarado inocente de las acusaciones. 1842 Cortegana decide postular como senador de Cajamarca. No logra los votos necesarios. 1843 Mayo de 1843 Cortegana decide iniciar los trámites para su retiro de las Fuerzas Armadas. Sin embargo, se involucra en una disputa con el vocal Manuel Orosco debido a que Cortegana lo tacha como parte de la junta que revisa su caso de retiro. Ante dicho suceso, el vocal Orosco pide que sea él quien revise su cédula de retiro. Por otro lado, se menciona en la correspondencia del oficial del ejército que el general Agustín Gamarra estaba al mando de Cortegana en su estancia en el ejército. 1846 Entre 1846 y 1848, Cortegana apoya a la fundación de la Sociedad Humanitaria. 1848 77 Cortegana inicia la redacción de la Historia del Perú. 9 de setiembre de 1848 Cortegana y José Domingo Espinar solicitan al Poder Ejecutivo una ayuda económica para los veteranos de la guerra por la independencia. 9 de diciembre de 1848 Cortegana apoya en la creación de la Sociedad de Fundadores de la Independencia, la primera institución patriótica del Perú. No obstante, el gobierno de Ramón Castilla clausuró la sociedad por temor a una confabulación en contra del presidente. 1850 Cortegana impulsa que se nombre como provincia a Celendín. Luego de diversas discusiones en el Parlamento, se aceptó el pedido. 1855 Se publica la Estadística Histórica, Geográfica, Física y Política del Distrito de Celendín. Fue editado por el gobernador del distrito José Burga, en asociación con el síndico procurador José Manuel Pereira Merino y los tenientes coroneles del ejército Juan Basilio Cortegana, Leandro Pereira Pita y Gabino Rodríguez. 1857 28 de setiembre de 1857 78 Se presenta un acta ante el Supremo Gobierno para obtener el reconocimiento de institución humanitaria para la Sociedad de Fundadores de la Independencia. Cortegana y Casimiro Negrón entregaron el pedido, que fue aceptado en los días siguientes. 1858 13 de marzo de 1858 Juan Basilio Cortegana contrae matrimonio con doña Manuela Arnáez Camacho. 15 de marzo de 1858 Fallece Manuela Arnáez Camacho, esposa de Cortegana. 1864 Durante el conflicto con España, Cortegana mantiene el puesto de tesorero en la Sociedad de Fundadores de la Independencia. Una de sus labores fue entregar 500 pesos a la Tesorería de Crédito Público. 1868 Gracias al texto Estadística de la Provincia de Celendín, Cortegana es electo como representante de la provincia en el Parlamento. Como representante en el Poder Legislativo, Cortegana no apoya con su voto a la propuesta del señor Peña por los ascensos a los coroneles graduados. Cortegana apoya con su voto a la propuesta del señor Gadea por el mal estado de los pueblos del interior. 79 Cortegana apoya que se examine el proyecto del ministro de Hacienda y del señor Bernalez para que se autorice al Poder Ejecutivo a hacer uso de los bienes económicos del Tesoro Público para subsanar el déficit presupuestal. 1869 Cortegana pide que se reconozcan las contribuciones económicas que la provincia de Celendín realizó durante la guerra por la independencia. Debido a la mala situación económica, no se aceptó el reclamo. 20 de enero de 1869 Cortegana pide una mayor cantidad de obras públicas en Celendín. 1870 1 de agosto de 1870 Cortegana es designado como principal de guerra en el Poder Legislativo. 21 de setiembre de 1870 Cortegana propone crear un colegio de señoritas en la provincia de Celendín y reconocer créditos a los excombatientes de la guerra por la independencia. Cortegana y otros parlamentarios se oponen a la división de la provincia de Aymaraes del departamento de Cusco. 8 de noviembre de 1870 En la Cámara de Diputados, la Comisión auxiliar de guerra discute sobre la aprobación del proyecto que concede a los vencedores del combate del 2 de Mayo la tercera parte del sueldo de 80 un oficial por sus hazañas en defensa de la nación. Cortegana señala que los vencedores de Junín y Ayacucho no pidieron ascensos o remuneraciones monetarias por participar en la guerra contra la Corona española. Más bien, Cortegana informa que el Gobierno le ofrecía sueldos a los excombatientes que le prestaban ayuda, mientras que a los que se oponían se les dejaba de lado. 18 de noviembre de 1870 En la Cámara de Diputados se propone el proyecto de contratación del ferrocarril de Pacasmayo a Cajamarca. Cortegana demuestra sus conocimientos del terreno de Huamachuco y Pacasmayo, da su opinión sobre el camino del ferrocarril y menciona el río Magdalena como posible ruta. 7 de diciembre de 1870 Cortegana solicita que se den beneficios a los excombatientes (vencedores) en base a la ley del 23 de enero de 1869. 81 Anexo II Evidencia de cotejo de fuentes primarias Cotejo de fuentes con base en los 5 volúmenes del BBVA Autor original del texto Texto empleado por Cortegana Texto escrito por Cortegana Volumen Inca Garcilaso de la Vega. 1967 [1609]. Otra manera del origen de los Incas Otra idea del origen de los incas, Volumen I - Comentarios reales de los Incas. Lima: cuentan semejante a la pasada, y éstos es que después del diluvio Manuscrito II Editorial Universo S.A. son los indios que viven al levante y salieron por la ventana de en https://shorturl.at/irBIS al norte de la Ciudad del Cozco. medio de tres que habían de estas Dicen que al principio del mundo en unas peñas —que están cerca salieron por unas ventanas de unas de la ciudad en un lugar llamado peñas que están cerca de la ciudad, en Paucartambo— cuatro hombres y un puesto que llaman Paucartampu, cuatro mujeres todas hermanas, y cuatro hombres y cuatro mujeres, a la cual le llamaron desde todos hermanos, y que salieron por la entonces ventana real, y por cuya ventana de en medio, que ellas son razón se conceptúa que la tres, la cual llamaron ventana real. Por superchería de esta fábula haya esta fábula aforraron aquella ventana sido la embarcación de Noé por todas partes con grandes planchas cuando el diluvio universal, según de oro y muchas piedras preciosas. así lo conjeturaban los españoles Las ventanas de los lados al oírle contar esta historia por su 79 guarnecieron solamente con oro mas analogía en los cuatro hijos, de no con pedrería. Al primer hermano que hubiesen tenido tal llaman Manco Cápac y a su mujer conocimiento. (Cortegana, 2023, Mama Ocllo. Dicen que éste fundó la 24). ciudad y que la llamó Cozco, que en la lengua particular de los Incas quiere decir ombligo, y que sujetó aquellas naciones y les enseñó a ser hombres, y que de éste descienden todos los Incas. Al segundo hermano llaman Ayar Cachi y al tercero Ayar Uchu y al cuarto Ayar Sauca. La dicción Ayar no tiene significado en la lengua general del Perú; en la particular de los Incas la debía de tener. Las otras dicciones son de la lengua general: cachi quiere decir sal, la que comemos, y uchu es el condimento que echan en sus guisados, que los españoles llaman pimiento, no tuvieron los indios del Perú otras especias. La otra dicción, sauca, quiere decir regocijo, contento 80 y alegría. (Garcilaso de la Vega, 1967 [1609], Cap. XVIII). La primera parada que en este valle Después que habían reparado el Volumen I - hicieron —dijo el Inca— fue en el cansancio del largo camino que Manuscrito I cerro llamado Huanacauri, al traían, estos dos célebres viajeros [Libro I, Capítulo 2] mediodía de esta ciudad. Allí procuró entre claro y oscuro, se pusieron hincar en tierra la barra de oro, la cual en marcha sobre el valle del con mucha facilidad se les hundió al Cusco y a la primera parada que primer golpe que dieron con ella, que hicieron vencida alguna distancia no la vieron más. Entonces dijo en la cima del cerro Huanacauri, nuestro Inca a su hermana y mujer: hincó Manco Cápac a la tierra con la vara de oro, la cual con una —«En este valle manda Nuestro Padre el Sol que paremos y hagamos nuestro asiento y morada para cumplir su voluntad. Por tanto, Reina y hermana, conviene que cada uno por su parte Vamos a convocar y atraer esta gente, para los doctrinar y hacer facilidad admirable se hundió al primer golpe en él todo y de modo que no la vieron más. De lo que coligieron Manco Cápac y su compañera que ese era el sitio que quería su padre el Sol para que edificase la ciudad e hiciese asiento para morarla por todo el 81 el bien que Nuestro Padre el Sol nos tiempo de su vida y la de sus manda». descendientes. Tomada así la posesión «Del cerro Huanacauri salieron entrambos esposos se dedicaron a nuestros primeros Reyes, cada uno reducir a los salvajes cada uno por por su parte, a convocar las gentes, y su parte, y para que se conociera por ser aquel lugar el primero de que en todo tiempo el trabajo de cada tenemos noticia que hubiesen hollado uno formaron dos departamentos. con sus pies por haber salido de allí a Los que redujera Manco Cápac bien hacer a los hombres, teníamos poblaban en la parte superior del hecho en él, como es notorio, un monte de Huanacauri y los que templo para adorar a Nuestro Padre el reducía la coya, su esposa, al pie Sol, en memoria de esta merced y beneficio que hizo al mundo. [...] de él, de manera que los del cerro se denominaban Hanan Cusco, es decir, pueblo situado en la altura del Cusco, y los del pie de él, »Nuestros príncipes, viendo la mucha Hurin Cusco, que es decir, pueblo gente que se les allegaba, dieron situado en el bajo Cusco. orden que unos se ocupasen en proveer de su comida campestre para todos, porque la hambre no los volviese a derramar por los montes; mandó que otros trabajasen en hacer Tomada así la posesión entrambos esposos se dedicaron a reducir a los salvajes cada uno por su parte, y para que se conociera en todo tiempo el trabajo de cada 82 chozas y casas, dando el Inca la traza uno formaron dos departamentos. cómo las habían de hacer. De esta Los que redujera Manco Cápac manera se principió a poblar esta poblaban en la parte superior del nuestra imperial ciudad, dividida en monte de Huanacauri y los que dos medios que llamaron Hanan reducía la coya, su esposa, al pie Cozco, que, como sabes, quiere decir de él, de manera que los del cerro Cozco el alto, y Hurin Cozco, que es se denominaban Hanan Cusco, es Cozco el bajo. Los que atrajo el Rey decir, pueblo situado en la altura quiso que poblasen a Hanan Cozco, y del Cusco, y los del pie de él, por esto le llaman el alto, y los que Hurin Cusco, que es decir, pueblo convocó la Reina que poblasen a situado en el bajo Cusco. Este Hurin Cozco, y por eso le llamaron el acontecimiento ha reputado bajo. Esta división de ciudad no fue Garcilaso de la Vega en su obra, para que los de la una mitad se que tal denominación la hizo aventajasen de la otra mitad en Manco Cápac por una especie de exenciones y preeminencias, sino que superioridad que debería haber de todos fuesen iguales como hermanos, los que él reducía sobre los que se hijos de un padre y de una madre. atraía su esposa. Pero Sólo quiso el Inca que hubiese esta conceptuando este asunto en su división de pueblo y diferencia de verdadero punto de vista, no hay nombres alto y bajo para que quedase razón para aceptarlo de ese modo, perpetua memoria de que a los unos porque siendo el objeto uno había convocado el Rey y a los otros mismo, la colocación de los la Reina. Y mandó que entre ellos reducidos parece que no sería más 83 hubiese sola una diferencia y que para el estímulo y reconocimiento de superioridad: que conocimiento de que ambos los del Cozco alto fuesen respetados y trabajaban para un mismo fin, tenidos como primogénitos, hermanos probándole así cada cual de los mayores, y los del bajo fuesen como departamentos según su aumento hijos segundos; y en suma, fuesen y cuidado que tomaban como el brazo derecho y el izquierdo instantáneamente más y más sus en cualquiera preeminencia de lugar y fundadores sobre el particular. oficio, por haber sido los del alto Le puso el inca el nombre atraídos por el varón y los del bajo de Cusco a la ciudad, porque en por la hembra. A semejanza de esto su idioma quiere decir esta hubo después esta misma división en expresión quechua ombligo, todos los pueblos grandes o chicos de dando a entender así que ahí es la nuestro Imperio, que los dividieron primera creación del hombre, por barrios o por linajes, diciendo después de Adán y su compañera Hanan ayllu y Hurin ayllu, que es el Eva, y que siendo ese el primer linaje alto y el bajo; Hanan suyu y pueblo del imperio debía Hurin suyu, que es el distrito alto y denominarse así, porque de él iba bajo. a emanar la creación de todos los demás pueblos, como sucedió »Juntamente, poblando la ciudad, tanto por él como por sus enseñaba nuestro Inca a los indios sucesores. varones los oficios pertenecientes a 84 varón, como romper y cultivar la Así que iban aumentando tierra y sembrar las mieses, semillas y sus reducidos de entrambos sexos, legumbres que les mostró que eran de Manco Cápac cuidaba de que comer y provechosas, para lo cual les hicieran sus casas con toda enseñó a hacer arados y los demás comodidad enseñándoles a instrumentos necesarios y les dio cultivar la tierra, a mejorar sus orden y manera como sacasen costumbres, a respetar a sus acequias de los arroyos que corren por mayores, a ser obedientes, a no este valle del Cozco, hasta enseñarles hacer mal a sus semejantes y a hacer el calzado que traemos. Por sobre todo a adorar el Sol, su otra parte la Reina industriaba a las padre, // [f. 20] para cuyo efecto indias en los oficios mujeriles, a hilar les hizo edificar un hermoso y tejer algodón y lana y hacer de templo conocido por el del Sol, en vestir para sí y para sus maridos e donde tenían colocada su efigie, hijos: decíales cómo habían de hacer construida del oro más refulgente. los demás oficios del servicio de casa. La coya Mama Ocllo se encargó En suma, ninguna cosa de las que del mismo modo a educar a las pertenecen a la vida humana dejaron reducidas de su sexo en todos los nuestros príncipes de enseñar a sus quehaceres mecánicos de una primeros vasallos, haciéndose el Inca mujer para el manejo de una casa Rey maestro de los varones y la Coya y madre de familia. Les instruyó Reina maestra de las mujeres». en el hilado, tejido y demás (Garcilaso de la Vega, 1967 [1609], habilidades, que no solo adornan a una mujer sino que le son 85 Cap. XVI). necesarias para vivir unidos al matrimonio, y por sí mismas manejándose llenas de agrado para con todos los de su especie, y sin olvidar por esto, lo más esencial y sobre todo privilegiado de tributar el culto debido al Sol, como deidad paternal para todos ellos y hacían de él desde luego emanar su origen. (Cortegana, 2023, 15 - 16). El uno fue Cápac, que quiere 1.° Cápac tiene todas estas Volumen I - decir rico, no de hacienda, que, como acepciones en la quichua, grande, Manuscrito I los indios dicen, no trajo este Príncipe rico, manso, piadoso, clemente, [Libro I, Capítulo 3] bienes de fortuna, sino riqueza de liberal, justiciero y de mucha ánimo, de mansedumbre, piedad, magnanimidad para hacer bien clemencia, liberalidad, justicia y con sus obras a los pobres. magnanimidad y deseo y obras para 2.° Huaccha cuyac es otro hacer bien a los pobres, y por haberlas título que significa amador y tenido este Inca tan grandes como sus bienhechor de los pobres. Manco vasallos las cuentan, dicen que era nombre propio del inca. dignamente le llamaron Cápac; 86 también quiere decir rico y poderoso 3.° El título inca significa en armas. El otro nombre fue llamarle emperador, rey o señor de mucho Huacchacúyac, que quiere decir poder o autoridad; y cuyas amador y bienhechor de pobres, para insignias declaró que fueran el que, como el primero significaba las llauto imperial, que cubría su grandezas de su ánimo, el segundo cabeza con una borla colorada significase los beneficios que a los llamada mascaypacha, orejeras de suyos había hecho, y desde entonces oro; y en lugar de cetro una hacha se llamó este príncipe Manco Cápac, corta del mismo metal en la mano. habiéndose llamado hasta allí Manco 4.° Cápac Inca es solo Inca. Manco es nombre propio: no señor, y de la manera que al sabemos qué signifique en la lengua Emperador Turco le llaman los general del Perú, aunque en la suyos Gran Señor. particular que los Incas tenían para hablar unos con otros (la cual me escriben del Perú se ha perdido ya totalmente) debía de tener alguna 5.° Coya significa emperatriz o reina. 6.° Intip-Churin significa significación, porque por la mayor hijo del Sol, título del inca parte todos los nombres de los Reyes príncipe heredero. (Cortegana, la tenían, como adelante veremos 2023, 18). cuando declaremos otros nombres. El nombre Inca, en el Príncipe, quiere decir señor o Rey o Emperador, y en los demás quiere decir señor, y para 87 interpretarle en toda su significación, quiere decir hombre de sangre real, que a los curacas, por grandes señores que fuesen, no les llaman Incas. Palla quiere decir mujer de la sangre real, y para distinguir al Rey de los demás Incas, le llaman Zapa Inca, que quiere decir Solo Señor, de la manera que los suyos llaman al Turco gran señor. Adelante declararemos todos los nombres regios masculinos y femeninos, para los curiosos que gustaran saberlos. También llamaban los indios a este su primer Rey y a sus descendientes Intip churin, que quiere decir hijo del Sol, pero este nombre más se lo daban por naturaleza, como falsamente lo creían, que por imposición. (Garcilaso de la Vega, 1967 [1609], Cap. XXIV). La sucesión de los incas es en la Es muy sabido que el inca Manco Volumen I - siguiente manera: Cápac fue el fundador del imperio Manuscrito I 88 1° Mancocápac I comenzó en el 1021, y que reinó 52 años habiendo reino de Quito en la América reinó 40 años, murió el de 1062. muerto bien viejo, pues que tenía Meridional. https://shorturl.at/ajuZ0 2° Sinchi-Roca, su hijo, comenzó en como nieve sus cabellos cuando el 1062, reinó 30 años, murió el de falleció. Su hijo Sinchi Roca más 1091. de 46 años gobernó, porque casi Velasco, Juan de. 1789. Historia del 3° Lloque-Yupanqui, su hijo, comenzó en el 1091, reinó 35 años, murió el de 1126. estaba lo mismo que su padre de encanecido. El hijo de este, Lloque Yupanqui, mandó 55 años con ejércitos, y su vejez 4° Maita-Cápac, su hijo, comenzó en sobrepujaba aun a la de Manco el 1126, reinó 30 años, murió el de Cápac, según la tradición de sus 1156. momias. El hijo de este, Mayta 5° Cápac- Yupanqui, su hijo, Cápac, de 53, porque era muy comenzó en 1156, reinó 41 años, poca la indiferencia que todos murió el de 1197. demostraban respecto de sus 6° Inca-Roca, su hijo, comenzó en el 1197, reinó 51 años, murió el de 1249. [Libro I, Capítulo 1] edades en las momias embalsamadas. Cápac Yupanqui, hijo del antecedente, gobernó 48 años. Inca Roca, 59. Yahuar 7° Yaguar-guárac, su hijo, comenzó Huaca, 22 años, tres meses, en el 1249, reinó 40 años, murió e l de porque fue separado del trono a 1289. esta fecha por su hijo el príncipe Este aún viviendo renunció la corona Viracocha. Este Inca Viracocha, 77 años nueve meses. El Inca 89 en su hijo y, sobreviviendo 7 años en Urco, que fue hijo mayor de vida privada, murio en el de 1296. Viracocha según el Padre Velasco 8° Viracocha, su hijo, comenzó en el y Herrera, a quien da por época de 1289, reinó 51 años, murió en el su gobierno el primero once días y 1340. el segundo meses, por cuya razón Este Inca tenido por deidad: de él se dice que predijo la pérdida del Imperio con la entrada de los extranjeros blancos y poblados de barba. Algunos le dan el reinado de sólo 36 años, pero mal. no se señala época alguna de su reinado. A este sucedió su hermano menor Inca Pachacútec, que rigió el imperio 57 años. Su hijo Inca Yupanqui, 60 años. Túpac Inca Yupanqui, hijo del anterior, 50 años. Huayna Cápac, 10° Pachacútec, su hermano, comenzó el grande, hijo y sucesor de en el 1340, reinó 60 años, murió en el Túpac, 58. Huáscar gobernó con 1400. separación del reino de Quito 6 Este se llamaba antes Titu-Manco- años, 8 meses, y Atahualpa, inca y Cápac; y en su coronación tomó el rey quiteño, gobernó a entrambos nombre de Pachacútec, que significa reinos después de ser prisionero el que da nuevo ser al mundo; y es suyo su hermano Huáscar y hasta fama que murió de 103 años. que fue sacrificado por los 11° Yupanqui, su hijo, comenzó en el 1400, reino 39 años, murió en el españoles, año y cuatro meses. (Cortegana, 2023, 7 - 8). 1439. 90 12° Tupac-Yupanqui, su hijo, comenzó en el 1439, reinó 36 años, murió en el 1475. Algunos le dan el reinado de sólo 30 años. 13° Huaynacápac, su hijo, comenzó en el 1475, reino 50 años, murió en el 1525. Este reinó los primeros 12 años en sólo el Imperio y los otros 38 juntamente en Quito. 14° Huáscar, su hijo, comenzó en el 1526, reinó 07 años, murió en el 1532. Este fue depuesto por su hermano Atahualpa en el mes de abril de 1532, y muerto al fin del mismo año de edad de 51. 15° Atahualpa, su hermano, comenzo en el 1532, reinó un año y 4 meses, murió en el 1533. (Velasco, 1789, 31 91 – 32). El triunfo y la palma lleva sobre todos Aquel mismo Paw citado dice: Volumen I - el Señor Paw. Hablando sobre el conforme son informes los Manuscrito II presente punto dice: “Como son los cuerpos de los americanos, son Libro II, Capítulo 7 cuerpos de los americanos, son también imperfectas sus almas. también imperfectas sus almas. Ellos Ellos son insensibles al mal, son insensibles al mal, viviendo y viviendo y muriendo muriendo tranquilamente como tranquilamente como bestias. bestias… Alguna pasión no tiene el Alguna pasión no tiene el poder poder necesario para despertar sus necesario para despertar sus almas almas, y alzarlas sobre si mismas. y alzarlas sobre sí mismas. Superiores a los animales porque Superiores a los animales porque tienen el uso de las manos y la lengua, tienen el uso de las manos y de la son realmente inferiores al mínimo lengua, son realmente inferiores al entre los europeos. Privados al mismo mínimo entre los europeos. tiempo de la inteligencia y de la Privados al mismo tiempo de la perfectibilidad, no obedecen sino al inteligencia y de la impulso de sus instintos… Son de tal perfectibilidad, no obedecen sino suerte privados de memoria que hoy a los impulsos de su instinto. Son se acuerdan de lo que hicieron ayer… de tal suerte privados de memoria No saben hacer reflexiones ni ordenar que hoy no se acuerdan de lo que sus ideas, ni son capaces de hicieron ayer. No saben hacer 92 mejorarlas, ni aun de pensar; porque reflexiones ni ordenar sus ideas, de sus cerebros sólo circulan humores ni son capaces de mejorarlas, ni gruesos y viscosos… Su voluntad es, aun de pensar; porque en sus insensible a los estímulos del amor… cerebros solo circulan humores su cobardía se hizo patente en la gruesos y viscosos. Su voluntad es conquista… sus vicios morales eran insensible a los estímulos del correspondientes a estos defectos amor; su cobardía se hizo patente físicos… La borrachera, la mentira y en la conquista; sus vicios la sodomía, eran comunes en las islas, morales eran correspondientes a en Méjico, en el Perú y en todo el estos defectos físicos. La nuevo continente". (Velasco, 1789, borrachera, la mentira y la 243). sodomía eran comunes en las islas, en México, en el Perú y en todo el nuevo continente. (Cortegana, 2023, 34 - 35). No pretendo por eso, ni tengo qué por No pretendo ser ni tengo por qué Volumen I - qué o para qué hacer apología de los o para qué hacer apología de los Manuscrito II Indianos. La hago de la verdad, de la razón y de la justicia. No sigo el indianos. La hago de la verdad, de Libro II, Capítulo 7 la razón y de la justicia. No sigo sistema de Dor. Pernety, porque yo el sistema del Doctor Pernety, conozco mejor que él lo que son porque yo conozco mejor que él aquellas naciones. Confieso que lo que son aquellas naciones. 93 tienen muchos y grandes defectos. Confieso que tienen defectos; mas Más sé distinguir quiénes y cuáles son sé distinguir quiénes y cuáles son los que los tienen, y de qué causas les los que le tienen, y de qué causas provienen. Veo que el hacer la debida les provienen. Veo que el hacer la definición, es práctica común de todo debida distinción, es práctica escritor que precia de racional, común de todo escritor que se aunque sea filósofo libre en el pensar precia de racional, aunque sea y franco en decidir. No sé que en estas filósofo libre en el pensar y franco propiedades le haga ventaja el Señor en decidir. No sé qué en estas Paw al filósofo por antonomasia propiedades le hagan ventaja el Raynal. Uno y otro hacen irrisión de señor Paw al filósofo Raynal. Uno los libros sagrados de la Religión, de y otro hace irrisión de los libros los Santos Padres, de la Silla sagrados de la religión de los Apostólica y de los soberanos. Con Santos Padres de la silla todo eso, cuando Raynal habla de los apostólica y de los soberanos. Con defectos de los americanos, los todo eso, cuando Raynal habla de atribuye solamente a las naciones los defectos de los americanos los bárbaras, incultas y salvajes; mas no a atribuye solamente a las naciones las que él mismo distingue y separa bárbaras, incultas y salvajes; mas como cultas, políticas y civiles de los no a las que él mismo distingue y Imperios Megicano y Peruano. separa como cultas, políticas y Cuando a éstas les atribuye algunos civiles de los imperios mexicanos defectos, hace la distinción del tiempo y peruano. Cuando a estas antiguo en que no los tenían, y del atribuye algunos defectos, hace la 94 presente en que los tienen, provenidos distinción del tiempo antiguo en del estado que llama de esclavitud y que no los tenían y del presente en sumo desprecio; más no de otras que los tienen, provenidos del causas disparatadas, ni menos de la estado que llama de esclavitud y incapacidad radical de ellos. Oigase sumo desprecio, más no de otras primero como habla de las naciones causas disparatadas, ni menos de bárbaras e incultas. la incapacidad radical de ellos. “Nada, dice, han perfeccionado más Sígase primero como habla de las que los animale, en los cuales se naciones bárbaras e incultas. admira alguna mayor industria; no «Nada», dice, «han perfeccionado muestran tener otras ideas que las más que los animales, en los relativas a las cosas más necesarias, cuales se admiran alguna mayor de tal suerte que la suma idea de toda industria; ni muestran tener otras una nación salvaje, jamás excede a la ideas que las relativas a las cosas suma idea de cualquier individuo”. más necesarias, de tal suerte que Hablando de las naciones cultas del la suma idea de toda una nación Perú, en tiempo de los Incas, parece salvaje, jamás excede a la de que todavía excede a los escritos cualquier otro individuo». españoles en el entusiasmo que les Hablando de las naciones cultas notan, para celebrarlos y aplaudirlos del Perú en tiempo de los incas, por las leyes, político gobierno, arte, parece que todavía // [f. 174] ciencias y costumbres. Hablando de excede a los escritores españoles esos mismos, según se hallan al en el entusiasmo que les notan, 95 presente, muy al contrario, dice: “Los para celebrarlos y aplaudirlos por peruanos modernos son el ejemplo de las leyes, político gobierno, artes, aquella profunda estupidez, a que la ciencias y costumbres. tiranía puede reducir la humana Hablando de esos mismos, según especie. Son por eso del todo se hallan al presente, muy al insensible a las riquezas, a los honores contrario dice: «Los peruanos y aun al temor. No tengo hambre, es modernos son el ejemplo de la respuesta, a quien quiere pagar aquella profunda estupidez, a que porque trabajen. Son todos, sin la tiranía puede reducir la humana diferencia, Cacique o mitayos, esto es, especie. Son por eso del todo cabezas o forzados, el objeto de la insensibles a las riquezas, a los derisión del público”. honores y aun al temor. “No tengo Este modo de diferenciar naciones, hambre”, es la respuesta a quien tiempos y circunstancias, se propone quiere pagar porque trabajen. Son también el Dor. Robertson. Examina todos sin diferencias caciques o largamente por espacio de 52 fojas el mitayos, esto es cabezas o moral carácter de las naciones incultas forzados, el objeto de la decisión y salvajes, tarde otras 9 tojas e del público». señalarlo. Protesta que en esto no Este modo de diferenciar mete a las naciones civiles de Méjico naciones, tiempos y circunstancias y Perú; y para que nadie le acuse en lo se propone también el doctor que dice de los salvajes, cita Robertson. Examina largamente escrupulosamente en su abono los por espacio de cincuenta y dos 96 escritores modernos de más fama, fojas el moral carácter de las quienes han hecho esa misma naciones incultas y salvajes, y distinción, para confundir tarda otras nueve fojas en injustamente a todos los habitadores señalarlo. Protesta que en esto no del Nuevo Mundo, según costumbre mete a las naciones civiles de del Señor Paw. Pone literalmente el México y el Perú, y para que testimonio de los viajeros académicos nadie lo acuse en lo que dice de españoles y franceses, don Antonio los salvajes, cita Ullo, don Jorge Juan, Señor Bogner y escrupulosamente en su abono los Señor La Condamine. (Velasco, 1789, escritores modernos de más fama, 243 - 245). quienes han hecho esa misma distinción, para no confundir injustamente a todos los habitantes del Nuevo Mundo según costumbre de Paw. Pone literalmente el testimonio de los viajeros académicos españoles y franceses don Antonio Ulloa, don Jorge Juan, Señor Bouguer y señor La Condamine. (Cortegana, 2023, 35 - 37). 97 Robertson, William. 1777. History of Un joven cacique, testigo de la [...] presenció que un joven America. escena, admirado de ver apreciar tanto cacique, testigo de ver disputarse, https://shorturl.at/hB147 una cosa cuya utilidad no conocía, y apreciar tanto entre españoles a arrojó con indignación el oro que un metal cuya utilidad estaba en unas balanzas, y desconocían, el que les dijera volviéndose a los españoles, les dijo: lleno de arrojo y de indignación: “¿Por qué disputais sobre una cosa de «¿Por qué disputáis sobre una tan poco valor? ¿Si el amor del oro es cosa de tan poco costo? Si el quien os ha obligado a abandonar deseo del oro es quien os ha vuestro pais para venir a turbar la obligado a abandonar vuestro país tranquilidad de pueblos tan remotos, para venir a turbar la tranquilidad yo os conducire a uno en donde este de pueblos tan remotos, yo os metal, que parece ser el grande objeto conduciré a uno, en donde este de vuestra admiracion y de vuestros metal que parece ser el grande deseos, es tan comun, que ha servido objeto de vuestra admiración y para fabricar aun los utensilios mas vuestros anhelos, es tan común despreciables”. Arrebatados de gozo, que ha servido para fabricar aun Balboa y sus compañeros preguntaron los utensilios más domésticos de con empeño cual era esta feliz region, las casas de sus moradores». y como podrian llegar a ella; y el Semejante nueva arrebató de gozo cacique les contestó que a la distancia a Balboa y sus compañeros, de seis soles, esto es, de seis dias de quienes le preguntaron con gran camino hacia el sur, descubriran otro empeño que cuál era esta feliz Volumen I Manuscrito III 98 Oceano cerca del cual estaba situada región donde se encontraban esas esta rica comarca; perro que si se inmensas riquezas, y cómo es que proponian atacar este poderoso reino, podrían llegar a ella para no podrian verificarlo sino reuniendo poseerlas; y el cacique les fuerzas muy superiores a las que satisfizo entonces diciéndoles: entonces tenian. «que a la distancia de seis soles, Esta fué la primera indicacion que esto es de seis días de camino tuvieron los españoles del grande hacia el sur, descubrirían otro Océano meridional, y del rico y vsto océano, cuyas aguas surcándolas pais conocido en seguida con el en la misma dirección, por el nombre de Perú. (Robertson, 1777, tiempo de algunos soles y noches 213 – 214) en navegación, arribarían en las costas de tan rica comarca gobernada por el más poderoso de los reyes, titulado inca hijo del Sol, del mismo que jamás, en el estado de debilidad en que se encontraban los castellanos, no podrían apropiarse si pretendían atacarle con tan poco número como eran ellos a tan poderosísimo reino». Así que les advertía, que antes de intentarlo no lo verificasen, sin primero 99 reunir para la empresa fuerzas superiores a las que por entonces tenían de qué disponer. He aquí la primera noticia que tuvieron los españoles del grande océano meridional, y del rico y vasto país llamado la tierra del Sol, que ha sido conocido enseguida con el nombre de Perú en todo el mundo. De esta indicación nació el proyecto de Balboa para descubrir al referido mar meridional, agitado más de curiosidad y admiración que aún de creer su evidencia por el solo aviso del cacique; porque lleno de dudas vacilaba // [f. 7] entre la verdad de este o entre persuadirse que fuera una fábula inventada por solo lograr cortar los disgustos que entre españoles se habían concitado por la codicia del 100 reparto del oro. (Cortegana, 2023, 53 - 54). Balboa tuvo entonces a su vista Mas Balboa, que siempre le objetos dignos de su ilimitada era característico el emprender ambicion y de la osada actividad de su descubrimientos difíciles, junto genio: infirió ambicion y de la osada que con el ardiente deseo de actividad de su genio: inifirió hacerse célebre con algún suceso inmediatamente que el Oceanó de que glorioso que le atrajeran sobre su hablaba el cacique, era el propio que persona fama y poder, se llenó de Colon habia buscado en esta misma decisión a ejecutarle. Aquí fue parde de América, con la esperanza de donde tuvo a su vista Balboa abrir por él una comuncacion mas como hombre de genio, y como directa con las Indias orientales; y de un valor a toda prueba todos conjenturó que el rico pais cuya los objetos dignos de su ilimitada descripcion le hacian, debia ser una ambición, y de la osada actividad parte de esta grande y opulenta region a que estaba acostumbrado según de la tierra. Lisonjeando con la idea sus intereses personales, al paso de ejecutar lo que un hombre de tanto que, bien sobrecogido de estas mérito habia intentado en vano, y ideas lisonjeras que alucinaban a solícito por efectuar un su fantástica nombradía, se descubrimiento que debia ser tan resolvió a realizar el agradable al rey como útil a la nacion, descubrimiento, infiriendo que el Volumen I Manuscrito III 101 espero con independencia el momento océano de que se había hablado, de partir para esta expedición, en era el propio que Colón había cotejo de la cual sus anteriores buscado en esta misma parte de la hazañas le parecian cosas de poca América y que no le habían importancia. Pero era necesario tomar podido hallar, con la esperanza de algunas medidas, y hacer los abrir por él una comunicación preparativos indispensables para más directa con las Indias asegurarse del resultado; y para ello Orientales. Y conjeturó asimismo comenzó por buscar y obtener la que el seco país cuya descripción amistad de los caciques vecinos. había tomado, debía ser sin duda Despachó tambien algunos de sus cuando menos una parte de tan oficiales a la Española con una grande grande y opulenta región de tierra, cantidad de oro, que era prueba de los que la fama y la casualidad de buenos sucesos que habia tenido, y haberla encontrado otros antiguos anuncio de los que esperaba tener. descubridores, la habían hecho Los regalos que hizo, distribuidos resonar por todo el orbe oportunamente, le merecieron la descubierto. Así pues Balboa, protección del gobernador, y atrajeron reputándose venturoso, o por una multitud de voluntarios a su mejor decir lisonjeado con la servicio: de modo que luego que concepción de llevar al cabo lo recibio el considerado refuerzo que que un hombre de tantos esperaba de esta isla, se creyó en conocimientos náuticos y de un estado de emprender su expedición. mérito sobresaliente no lo había podido conseguir, haciéndose 102 (Robertson, 1777, 211 – 212) todos sus intentos vanos, y desde luego solícito por efectuar ya un descubrimiento que debía ser tan agradable a su rey como de mucha utilidad a su nación, esperó con impaciencia el momento de partirse, convencido de que si lograba el feliz éxito de esta expedición, no era en nada cotejable a sus anteriores hazañas, pues todas le parecían insignificantes cosas, o de ninguna importancia a la grandeza de esta última, que iba con tanto empeño y entusiasmo a plantear. Hecha así la resolución, era necesario tomar algunas medidas y hacer los preparativos indispensables para asegurarse del resultado, y para ello comenzó por buscar y obtener la amistad de los caciques vecinos. Despachó también a algunos de sus oficiales a la isla La Española con una gran 103 cantidad de oro, que era prueba de los buenos sucesos que había tenido y anuncio de los que esperaba tener. Los obsequios que hizo, distribuidos oportunamente, le merecieron el favor del gobernador y atrajeron una multitud de voluntarios a su servicio, de modo que luego que recibió el considerable refuerzo que esperaba de esta isla, se creyó en estado de emprender su marcha a descubrir el océano que se le había noticiado. (Cortegana, 2023, 54 - 55). El istmo de Darien no tiene mas que Este descubrimiento sesenta millas de ancho; pero esta consistía en vencer el terreno que lengua de tierra que une el continente distaba desde Santa María hasta el meridional de la América con el istmo de Darién, el que no tiene septentrional está fortificada por una más que sesenta millas de ancho, cadena de altas montañas que se cuya lengua de tierra que une el extienden en todo su largo, y forman continente meridional de la Volumen I Manuscrito III 104 una barrera bastante sólida para América con el septentrional, está resistir al impulso de los dos mares fortificada por una cadena de altas opuestos. Las montañas estan montañas, que se extienden en cubiertas de bosques impenetrables; y todo su largo, y forman una en este clima húmedo, en donde barrera // [f. 8] bastante sólida llueve dos terceras partes del año, los para resistir al impulso de valles son tan pantanosos y estan entrambos mares, opuestos como inundados tan frecuentemente, que los dignos de la mayor habitantes en muchos puntos contemplación. Todas las necesitan construir sus casas sobre los montañas de este istmo están árboles, a fin de estar un poco cubiertas de bosques elevados de un terreno húmedo, y á impenetrables, siendo su clima cubierto de los réptiles que se húmedo y en donde llueve dos engendran en las aguas corrompidas. terceras partes del año. Sus valles Esta region, cortada por caudalosos son tan pantanosos y están rios que se precipitan con inundados tan continuamente, que impetuosidad de las mimsa montañas, los habitantes en muchos puntos solo estaba poblada de salvajes necesitan construir sus casas entre errantes y en corto número, y la mano árboles a fin de estar un poco de salvajes errantes y en corto elevados de un terreno húmedo, y número, y la mano de la industria a cubierto de los reptiles que se nada habia hecho en ella para corregir engendran en las aguas ó suavizar estos incenvenientes corrompidas. Esta parte de terreno naturales. En tal estado de cosas, el tan angosto, está cortado por 105 intento de atravesar un pais caudalosos ríos que se precipitan desconocido, sin tener otras guias que con impetuosidad de las mismas indios sobre cuya fidelidad no se montañas al mar; sus riberas solo podia contar mucho, era la empresa estaban pobladas de indios mas arriesgada que hubiesen formado salvajes, errantes, y en corto aun los españoles en el Nuevo número, y la mano de la industria Mundo; pero la intrepidez de Balboa nada había hecho en ella para era tan extraordinaria que le corregir o suavizar estos distinguian de todos sus compatriotas inconvenientes naturales. En tal en un tiempo en que el último de los estado de cosas, Balboa intentó aventureros se hacia notar por su atravesar semejante país audacia y por su valor. Este gefe unia desconocido, sin tener otros a la valentia la prudencia, la itinerarios que indios sobre cuya generosidad, la afabilidad, y estos fidelidad no se podía fiar mucho talentos populares que en las para un discreto resultado. Debe empresas mas temerarias inspiran la considerarse esta empresa como la confianza y fortifica la adhesion. Sin más arriesgada que llegaron a embargo, despues de la reunion de los formar los españoles en el Nuevo voluntarios de la Española, solo pudo Mundo, pero la intrepidez de juntar ciento y noventa hombres para Balboa era tan extraordinaria que su expedición; pero todos eran le distinguía de todos sus veteranos robustos, acostumbrados al compatriotas, en un tiempo en que clima de la America, y prontos a el último de los aventureros se seguirle en los mayores peligros. Se hacía notar por su audacia y por 106 hicieron acompañar de mil indios que su valor. Este español unía a la llevaban sus provisiones, y para valentía la prudencia, a la completar el armamento militar, generosidad la afabilidad, al paso llevaron muchos de estos perros que tenía también cierta feroces tan formidables a unos popularidad para conseguir el enemigos enteramente desnudos. éxito de las empresas más (Robertson, 1777, 214 – 215) arriesgadas en que de frecuencia se lanzaba, presentando el carácter de temerarias, pero que sus talentos naturales junto que su decisión por salir avante en ellas, con su total adhesión de la mejor buena fe para su persona y servicio. Conseguido esto de su parte, y teniendo ya reunidos los voluntarios que le habían llegado de La Española, solo pudo juntar 190 hombres útiles para su expedición, pues eran todos veteranos, robustos, acostumbrados al clima de América, y a la clase de conquistas que en ella se hacían entonces, superando como su 107 caudillo, aun los mayores peligros y necesidades. Alistados de tal manera para la marcha, se hicieron servir de mil indios que llevaban sus provisiones, y para completar el armamento militar, llevaron consigo muchos de esos perros feroces, de que siempre los castellanos se hallaban, y eran tan formidables para con unos enemigos enteramente desnudos, como lo estaban los indios de aquellos enmarañados bosques. (Cortegana, 2023, 55 - 56). De Herrera y Tordesillas, Antonio. Finalmente llegaron a la cumbre de Después de haber trepado Historia general de los hechos de los las más altas tierras, a veinte y cinco con mucha fatiga la mayor parte castellanos en las Islas y Tierra Firme de septiembre de este año, de donde el de esta escarpada montaña, del mar Océano que llaman Indias mar parecía. Y un poco antes que Balboa mandó a hacer alto a su Occidentales (1601) Basco Nuñez al la cumbre llegase, le tropa y se adelantó solo hasta la http://hdl.handle.net/20.500.11938/71235 avisaron los indios de Quarequa, cumbre, para gozar antes que como estaba ya muy cerca: mandó nadie de un espectáculo apetecido que todos allí hiciesen alto. Subió por tanto tiempo. Luego de que Volumen I Manuscrito III 108 solo, y vista la mar del Sur, se hincó divisó el mar que se extendía de rodillas, y alzadas las manos al delante de él en un horizonte sin cielo, dio grandes alabanzas a Dios, límites, se arrodilló, y levantando por la merced tan grande que le había las manos al cielo, dio gracias a hecho, en que fuese el primero que la Dios por haberle conducido a descubriese y viese. descubrimiento tan ventajoso para Hecha esta devota demostración, su país y tan glorioso para él. Sus llamo a toda la gente, y volviendo otra compañeros, observando sus vez a hincarse de rodillas, repitiendo transportes, se adelantaron hacia las gracias a Dios, de aquel beneficio: él para participar de su lo mismo hicieron todos, estando admiración, de su reconocimiento, como atónitos los Indios, viendo el y de su gozo. Se apresuraron en regocijo y alegría de los castellanos. seguida a ganar la playa, y [...] Tomó luego por testimonio, cómo Balboa, metiéndose en las aguas en nombre de los Reyes de Castilla y del mar con su escudo y su de León, tomaba posesión de aquella espada, tomó posesión de este mar, y de todo lo que en ella había, y océano en nombre del rey de en señal de posesión corto arboles, España; y juró defenderlo con las puso cruces , llegó piedras y armas que tenía contra todos los amontonó muchas de ellas, y en enemigos de su soberano. árboles grandes con un cuchillo (Cortegana, 2023, 56 - 57). escribió los nombres de los reyes de Castilla. (De Herrera y Tordesillas, 109 1601, 332 – 333). Todos los Castellanos, y indis estaban Así pues, esta parte del gran mar Volumen I - muy regocijados, los unos porque Pacífico, o mar del Sur que Manuscrito III juzgaban que había de ser todo descubrió Balboa en el principio y aquello para su buena dicha: los que está situado al este de indios, y en particular los Caciques, Panamá, conserva aún el nombre por el amistad de los cristianos, que él mismo le dio de golfo de creyendo que estimaban en mucho el San Miguel. Obligó con las armas oro, y las perlas que les daban, que a muchos de los régulos que ellos tenían en poco, y mayormente se gobernaban los distritos vecinos holgaba Chiapes, por haber sido de este golfo, a que le diesen instrumento del amistad de Tumaco. víveres y oro, y otros se lo Certeficaron estos dos Caciques a enviaron voluntariamente. Basco Nuñez, que estaba una isla Algunos caciques añadieron a distante de alli obra de cinco leguas, estos dones preciosos una según por señas daban a entender, cantidad considerable de perlas, y dentro en aquel golfo, que señoreaba supo de ellas con mucha un Cacique poderoso, adonde había satisfacción que las conchas que multitud de grandes ostias, en las las producían abundaban en el cuales se criaban perlas tan grandes mar que acababa de descubrir. como habas. No quiso Basco Nuñez Esta fuente de riquezas que halló perder tiempo, mandó luego aparejar Balboa le contribuyó mucho a 110 las canoas para pasar a ella. animar a sus compañeros, y tanto Rogavante los dos caciques, que en tal más fue esto, cuanto que recibió tiempo no se pusiste en aquel peligro, al mismo tiempo noticias que le que lo dejase para el verano cuando la confirmaban en la esperanza // [f. mar estaba en sosiego, y que entonces 10] de sacar ventajas aún más podría ir a su placer, y alcanzar considerables de su expedición. cumplimiento de su deseo, y que para Todos los indios de las costas del entonces, con su gente, ellos le mar del Sur le aseguraron de acompañarán. Temió Basco Nuñez no acuerdo que a una distancia le aconteciese como la otra vez en la bastante considerable hacia el este isleta, y tuvo por bueno el consejo de había un rico y poderoso reino, sus amigos. Aquel cacique Tumaco cuyos habitantes tenían animales dio nuevas a Basco Nuñez, como toda domésticos para llevar cargas. Y aquella costa adelante con la deseando hacerle formar idea de larguisimamente, señalando hacia el ellos, trazaron sobre la arena la Piru, y que en ella había gran cantidad figura de las llamas o guanacos de oro, y que vivían los naturales, que después se encontraron en el ciertos animales a donde ponían sus Perú, y a cuáles animales cargas, que eran las ovejas de aquellas cuadrúpedos habían docilitado de provincias, y de tierra hizo una figura tal modo los peruanos que se para que mejor se entendiese. (De servían de ellos como de Herrera y Tordesillas, 1601, 336 – acémilas. Como la llama tuviese 337). cierto aparecimiento en su forma al camello, bestia considerada 111 como particular al Asia, cual circunstancia junta que al descubrimiento de las perlas, también producción asiática, hicieron ambas cosas contribuir mucho a la imaginación de los españoles, a que se afirmasen en la falsa idea que se habían formado de que el Nuevo Mundo estaba próximo a las Indias Orientales, cuando más lejos se hallaba de ellas. (Cortegana, 2023, 57). Marmontel, Jean François. 1837. Los Aunque este odio implacable de los La pérdida por otra parte de las Volumen I - incas ó La destrucción del imperio del naturales hacia tan difícil como naves de estos, por accidentes Manuscrito III Perú. Barcelona, Calle Escudellers, n.o peligrosa la formación de un imprevistos sobre unas costas 25. Imprenta de Juan Oliveares. establecimiento en su pais, la desconocidas, y las enfermedades https://shorturl.at/mrCDI perseverancia de los españoles, la del clima más insalubre de toda la superioridad de sus armas y su América, los obligaron a esto habilidad en el arte de la guerra decididamente. Así que pues, hubieran podido con el tiempo vencer escasos de las provisiones este obstáculo; mas todos los convenientes para sus 112 desastres imaginables se amontonaron subsistencias, a causa de estar el sobre ellos, y pareció que se país que pisaban mal cultivado, y combinaban para completar su ruina. además de las disensiones que se La pérdida de sus naves, que diversos suscitaron entre ellos mismos, y accidentes hicieron perecer sobre una las hostilidades continuas de los cosa desconocida; las enfermedades habitantes que los envolvieron en propias del clima mas insalubres de una sucesión de calamidades, toda la América; el defecto de cuya simple relación si la subsistencias, inevitable en un pais hiciéramos, haría temblar de mal cultivado; las disensiones que se horror a cualquiera que aún se suscitaron entre ellos, y las jactara de ser insensible a los hostilidades contínuas de los desastres de una humanidad habitantes, los envolvieron en una insufrible y codiciosa, porque aún sucesion de calamidades cuya simple estos caudillos en las posesiones relacion hace temblar de horror. en que se hallaban coloreados, Aunque recibieron de la Española dos habían recibido de la isla La refuerzos considerables, la mayor Española dos refuerzos parte de los que se comprometieron considerables, pero la mayor parte en esta desgraciada expedicion de estos habían perecido antes de perecieron antes de un año en la mas un año en la más espantosa espantosa miseria; y el corto número miseria, y el corto número que de los restantes formó una pequeña y pudo sobrevivirlos, llegó al fin a débil colonia en Santa María la formar una pequeña y débil Antigua, sobre el golfo de Darien, colonia en Santa María la 113 bajo las órdenes de Vasco Nuñez de Antigua, sobre el golfo de Darién, Balboa. (Marmontel, 1837, 203 – bajo el comando de Vasco Núñez 204). de Balboa. (Cortegana, 2023, 52). A pesar de los recientes A pesar de los recientes servicios de Balboa, que le servicios de Balboa, que le designaban como el hombre a designaban como el hombre más a propósito para llevar el cabo la propósito para llevar a cabo la gloriosa empresa que había gloriosa empresa que había comenzado, Fernando fué tan ingrato comenzado, Fernando fue tan que en nada los estimo, y nombró a ingrato que en nada los estimó y Pedrarias Davila gobernador del nombró a Pedrarias Dávila, Darién, confiando al mismo tiempo el gobernador del Darién, mando de quince naves de gran porte, confiándole al mismo tiempo el con mil y doscientos soldados. Estas mando de quince naves de gran naves se equiparon a expensas del porte con mil y doscientos público con una magnificencia que soldados. Estas naves se Fernando nunca había manifestado en equiparon a expensas del público, los armamentos destinados al Nuevo con una magnificencia que Mundo, y los hidalgos españoles se Fernando nunca había dieron tal priesa a seguir al jefe que manifestado en los armamentos debía guiarlos en un país en que, destinados al Nuevo Mundo, y los según la fama, no tenían más que hidalgos españoles se dieron tal Volumen I Manuscrito III 114 echar las redes en el mar para sacar prisa seguir al jefe que debía oro, que mil y quinientos de entre guiarlos en un país en que, según ellos se embarcaron en la flota, y un la fama, no tenían más que echar mayor número se hubiera alistado las redes en el mar para sacar oro, para esta expedición, si se hubiese que mil y quinientos de entre ellos querido recibirlos. (Marmontel, 1837, se embarcaron en la flota, y un 217 – 218). mayor número se hubieran alistado para esta expedición si se hubiese querido recibirlos, pero los recursos de subsistencia faltaban para ello. (Cortegana, 2023, 58 – 59). Sin embargo que Pedrarias Así que pues, no obstante debiese a esta moderación la posesión que Pedrarias debiese a esta pacífica de su gobierno, nombró una moderación el poseimiento [sic] comisión para hacker informaciones pacífico de su gobierno, nombró jurídicas sobre la conducta que una comisión para hacer Balboa había observado mientras informaciones jurídicas sobre la estuvo a las órdenes de Nicuesa y de conducta que Balboa había Enciso, y le impuso una multa observado mientras estuvo a las considerable en reparación de las órdenes de Nicuesa y de Enciso, y faltas de que sus jueces le hallaron le impuso una multa considerable Volumen I Manuscrito III 115 culpable. Balboa sintió vivamente en reparación de las faltas de que verse sometido a un proceso y sus jueces le hallaron culpable. castigando en el mismo lugar en que Balboa sintió vivamente verse acababa de ocupar el primer puesto: sometido a un proceso y castigado por otra parte, Pedrarias no podía en el mismo lugar en que acababa ocultar la envidia que excitaba en el la de ocupar el primer puesto. Por superioridad del mérito de Balboa, de otra parte, Pedrarias no podía manera que el resentimiento del uno y ocultar la envidia que excitaba en los zelos de otro fueron un manantial él la superioridad // [f. 12] del de divisiones muy perniciosas para la mérito de Balboa, de manera que colonia; pero esta se veía amenazada el resentimiento del uno y los de una calamidad aún más triste. celos del otro fueron un manantial Pedrarias desembarcó en el Darién en de divisiones muy perniciosas la estación menos favorable del año, para la colonia, pero esta se vio de esto es, a mediados de la temporada pronto amenazada de una de las lluvias, en una parte de la zona calamidad aún más triste. tórrida en que las nubes arrojan Pedrarias desembarcó en el torrentes de agua de un modo Darién en la estación menos desconocido en los climas más favorable del año, esto es, a templados. (Marmontel, 1837, 219). mediados de la temporada de las lluvias, en una parte de la zona tórrida, en que las nubes arrojan torrentes de agua, de un modo 116 desconocido en los climas más templados. (Cortegana, 2023, 59). Inca Garcilaso de la Vega. 1967 [1617]. Hernando Pizarro y sus dos hermanos, Pero no bien oyeron la grita Historia general del Perú. Lima: y los doscientos compañeros que allí atolondrante de la gente del inca, Editorial Universo S.A. estaban, viendo que eran pocos, cuando al instante se armaron y https://shorturl.at/HKP06 siempre se alojaban juntos, y, como enfrenando a treinta de sus hombres de guerra y buenos soldados, caballos —que cada noche no dormían; antes, como gente dejaban este número ensillados recatada, tenían centinelas puestas al para salir al momento sobre ellos derredor de su alojamiento y atalayas a contener cualquier desorden o en lo alto de la casa. Luego que tumulto que apareciese en la sintieron el ruido de los indios, se ciudad— los monteros y se armaron y enfrenaron sus caballos, dirigieron con presteza de los que cada noche tenían treinta de ellos primeros a reconocer a sus ensillados para estar apercibidos innumerables adversarios. La cuando se ofreciese algún rebato, y así multitud que de estos vieron a luz salieron los primeros a reconocer los de los primeros incendios y el enemigos. Más viendo la multitud de ningún conocimiento que tenían ellos, no sabiendo qué armas traían de la clase de armas que traían para ofender los caballos (que era lo para ofender a sus caballos, que los indios más temían), acordaron acordaron para evitar todo mal recogerse todos a la plaza, que, por suceso a los animales, a quienes Volumen I Manuscrito IV Libro II, Capítulo 5 117 ser tan grande, eran más señores de temían más los indios, el los enemigos en ella que en las calles. posesionar de todos de la plaza, la Así lo hicieron y estuvieron puestos que por ser bien plana y extensa en escuadrón. Los infantes, que eran podían ser en ella más [ilegible] ciento y veinte, estaban en medio, y con el furor de estos, al paso que ochenta, que eran los de a caballo, se estarían también libres de ser pusieron de veinte en veinte a los ofendidos, a mansalva de los lados y a la frente y espaldas del mismos si incautos o divididos escuadrón, para que pudiesen resistir anduvieran por las calles. Así lo a los indios por donde quiera que hicieron, replegándose a la acometiesen. Los cuales, viendo los expresada plaza tanto los que españoles juntos, arremetieron a ellos habían salido al reconocimiento, por todas partes con gran ferocidad, como los que se quedaron pensando llevárselos del primer alistándose en el cuartel. Luego encuentro. Los caballeros salieron a que estuvieron en la plaza se ellos y les resistieron valerosamente. formaron en un cuadro sólido. Los Así pelearon unos y otros con gran infantes, que eran ciento veinte porfía, hasta que amaneció. [Libro II: (120), ocuparon el centro y los Capítulo XXIV: El levantamiento del ochenta hombres de caballería Príncipe Manco Inca; dos milagros en (80), divididos de veinte en veinte favor de los cristianos, jinetes, cubrieron los cuatro (Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p. frentes para resistir así al empuje 172] de los indios por cualquiera parte 118 que lo hiciesen. (Cortegana, 2023, 166). Con el día reforzaron los indios Estos inocentes campeones la batalla. Sobre los españoles llovían hacían en vano llover sobre los flechas y piedras tiradas con hondas españoles nubes de flechas y que era admiración, más con los piedras, pero ellas no penetraban caballos y las lanzas se vengaban de sus armaduras de hierro, y por ellos, que ninguna arremetida hacían tanto este infructuoso denuedo era que por lo menos no dejasen muertos siempre vengado con usura por ciento y cincuenta y doscientos los caballos y las lanzas de los indios; porque no tenían armas castellanos, pues cada arremetida defensivas, ni usaron de las picas que les daban estos a más de (aunque las tuvieron) contra los tumbarlos al suelo a pechadas, los caballos, porque no habían tratado privaban y atropellándolos en su con caballeros, sino que sus guerras y fuga, dejaban doscientos o batallas eran pie a pie unos con otros, trescientos indios muertos, y esta y desarmados con desarmados. Más la era la razón por qué ellos tenían pujanza de la mucha gente que tenían más miedo a los caballos que aun les hacía sufrir las ventajas que los a los infantes que les dirigían sus españoles en armas y caballos les rayos destructores. hacían, con tanta mortandad de los indios; pero ellos lo llevaban todos Volumen I Manuscrito IV Libro II, Capítulo 5 Fueron tan inocentes los peruanos en esta guerra, que no 119 con la esperanza que tenían de hicieron uso de las picas que degollarlos presto. [Libro II: Capítulo tenían contra los caballos solo XXIV: El levantamiento del Príncipe porque jamás habían peleado con Manco Inca; dos milagros en favor de esta clase de animales, y como los cristianos.] todas sus batallas que habían dado (Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p. y aun la que se hallaban 173] ejecutando era tan solamente a pie, unos contra otros en el mismo estado y naturalmente desarmados, porque no tenían las que contra ellos empleaban con tanta destrucción los españoles. (Cortegana, 2023, 167 - 168). Habiendo apartado los indios de Y así es que por más que se sí, les pareció a los españoles esforzaran los españoles en acometer la fortaleza, porque allí era mostrarse sobre la fortaleza, no lo el mayor concurso de los enemigos, y, pudieron hacer en seis días que mientras no les ganaban aquella plaza, duró el ataque, menos abrirle les parecía no haber hecho nada. Con brecha alguna ni asaltarle porque este acuerdo subieron a ella, dejando los vasallos del rey hacían llover presidio en su alojamiento. Los indios sobre ellos nubes interminables de se defendieron valientemente, que en piedras, flechas y palos que no los Volumen I Manuscrito IV Libro II, Capítulo 5 120 seis días no pudieron sujetarlos. Una dejaban operar tan libremente. Y noche de aquellas, habiendo peleado para mayor frustración de sus todo el día los unos y los otros con designios, acaeció la última noche mucho valor, se retiraron a sus de los días citados, la desgracia de puestos donde Juan Pizarro, hermano Juan Pizarro. Este valeroso del Marqués Don Francisco Pizarro, castellano, hermano de los demás que de días atrás andaba herido y Pizarro, estando de noche en su podía sufrir mal la celada que traía, se puesto de descanso después de la quitó antes de tiempo, que luego haber combatido todo el día, se que se la quitó llegó una piedra tirada quitó de la cabeza la celada que le con honda, y le dio una mala herida cubría porque le era insufrible, en en la cabeza, de que murió dentro de razón de que le comprimía a sus tres días; la cual muerte (como lo dice heridas anteriores, causándole Agustín de Zárate por estas mismas mucho dolor // [f. 311] por estar palabras), «fue gran pérdida en toda la recientemente cicatrizadas, y tierra, porque era Juan Pizarro muy cuando así estaba descubierto, una valiente y experimentado en las piedra arrojada con honda le dio guerras de los indios, y bien quisto y en la cabeza con tanta fuerza que amado de todos». [Libro II: Capítulo se la partió dejándolo como XXVI: Ganan los españoles la muerto. Y aunque al instante los fortaleza con muerte del buen Juan cuidados y auxilios de sus Pizarro.] hermanos y compañeros fueron activos en recoger su persona y curar su herida, esto no le pudo 121 (Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p. salvar del fin que le venía a prisa 182] encima, sino tan solamente para hacerle durar tres días con vida, pero que al fin falleció vencido este periodo, y con cuyo fatal suceso desistieron los españoles de la toma de la fortaleza, retirándose a su primera posición en la misma noche, y sin que los indios lo percibieran. (Cortegana, 2023, 182 - 183). Inca Garcilaso de la Vega. 1967 [1617]. Gonzalo Pizarra no quiso Gonzalo Pizarro no quiso Volumen II - Historia general del Perú. Lima: Editorial determinarse en el hecho de llamarse determinarse en el hecho de Manuscrito V, Universo S.A. https://shorturl.at/HKP06 Rey, porque el respeto natural que a titularse rey del Perú, en razón del Capítulo 2 su Príncipe tenía pudo en él más que respeto natural que le tenía a su la persuasión de sus amigos; y príncipe. Pudo en él más esto que también porque nunca perdió la todas las persuasiones de sus esperanza de que la Majestad Imperial amigos. Es cierto que él nunca le haría merced de confirmarle la perdió las esperanzas de que su Gobernación del Perú, por haberlo monarca le hiciera la merced de ganado con sus hermanos y por sus confirmarle el gobierno del Perú, particulares servicios, y porque cargo que estaba desempeñando 122 conocía los que habían servido a Su durante las discusiones con el Majestad en la conquista de aquel agreste virrey Núñez de Vela. Imperio para gratificarles sus Estas motivadas esperanzas servicios; y que todas estas cosas eran estaban fundadas en que era uno partes para que Su Majestad le hiciera de los principales que habían merced de la Gobernación, demás de ganado el imperio de Manco con que había dado cédula a su hermano sus hermanos y porque se creía el Marqués para que después de sus acreedor al cargo por sus días fuese Gobernador el que él particulares servicios y porque nombrase, y que su hermano había todas estas cosas le hacían amado hecho nombramiento en él; y que en de los que habían hecho la las cosas pasadas y sucesos contra el conquista. Así, teniendo el Visorrey, le parecía tener excusa gobierno en sus manos con la bastante, por el rigor con que el aprobación del emperador Carlos, Visorrey había querido ejecutar las podía premiarlos a todos, con Ordenanzas, sin oír al Reino ni a sus conocimiento de los sacrificios de procuradores, de cuya causa todo cada uno; y es que también tenía aquel Imperio le había elegido por cédula real en favor de su Procurador general; y que los Oidores hermano, el Marqués, para que habían preso al Visorrey y enviádolo después de sus días fuera a España, y no él. Por todo lo cual le gobernador el que él nombrase y, parecía a Gonzalo Pizarro que no ya que este había nombrado a solamente merecía perdón de lo Gonzalo, era sin duda alguna su pasado, sino nueva merced de la legítimo sucesor. Respecto a los 123 Gobernación presente, porque es sucesos pasados contra el virrey natural costumbre de los hombres Núñez de Vela, se encontraba belicosos, favorecer y estimar sus bien cubierto de toda hechos, aunque sean culpables. responsabilidad que quisiesen [Capítulo XLI: Buenos respetos de hacerle, ya que solo el rigor del Gonzalo Pizarro en servicio de su virrey en cumplir las ordenanzas Rey. El cual, saliendo de Quitu, va a reales había alarmado a todos los Trujillo y a Los Reyes, y la fiesta de españoles dueños de su entrada.] repartimientos del imperio. Su (Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p. aprehensión y remisión para 214] España no había sido obra de sus acuerdos, sino de la de los oidores, como fruto preciso de sus violencias y temeridades. Había sido la acción más compasiva y benéfica para la humanidad indefensa y tolerante, como la de quitar a un feroz león del destrono de un rebaño entero. Él le había vencido después en la batalla de Iñaquito como procurador general de todas las provincias del Perú que espontáneamente le habían elegido para que los defendiera de 124 los decretos del virrey. La muerte de este en aquella jornada solamente había sido la indispensable consecuencia de quien busca los peligros de esta clase de ejercicios. Imbuido de estas razonables reflexiones, Pizarro creía no solamente merecer la indulgencia de Carlos de todo lo pasado, sino el ser nuevamente confirmado // [f. 29] en el gobierno presente, ya que era natural costumbre de los hombres belicosos favorecer y estimar a los hechos de valor. (Cortegana, 2023, 11 - 12). Por no haberse atrevido Gonzalo Por no haberse atrevido Gonzalo Volumen II - Pizarro a emprender un hecho que tan Pizarro a verificar un hecho que lo Manuscrito V, bien le estaba, según sus amigos ponía al mismo nivel que todos decían, entendiendo la gente común los soberanos de la tierra y que que era por falta de discreción y no tan bien le convenía, le por sobra de buen respeto a su Rey, le censuraron con la generalidad de Capítulo 2 125 notaron de falta de ánimo, y que había sido su indecisión motejaron de cortedad de indiscreta, y por su falta de entendimiento, por donde los resolución, su cortedad de historiadores lo dijeron en sus entendimiento y su torpeza al no historias, más por siniestra relación conocer lo que podía salvarle de que les dieron que por decir lo que en todo riesgo. Así lo han dicho esto había, porque Gonzalo Pizarro, todos los historiadores contra en la común opinión de los que le Gonzalo, como común opinión de trataban de cerca y le conocían, era los que no lo trataron de cerca y hombre de bastante entendimiento, no no lo conocieron a fondo; pero yo, caviloso ni engañador ni de palabras que tuve el alto honor de comer dobladas, sino sencillo, hombre de en su mesa con él, digo que era verdad, de bondad y nobleza, hombre de bastante confiado de sus amigos, que le entendimiento, nada caviloso ni destruyeron, como los mismos engañador. Jamás prometía cosa historiadores lo dicen. Y no hay que que no iba a dar o cumplir. No culpar a los que escribieron en este usaba palabras arteras o particular, porque los que daban las compuestas, sino muy llanas y relaciones procuraban adular por sus sencillas. Era hombre de verdad, pretensiones, y el Palentino fue nobleza y suma bondad. Y si mandado que escribiese, como él algún defecto tuvo, fue el de mismo lo dice en su dedicatoria por haber sido muy confiado con sus estas palabras: «Más queriendo amigos, que lo llegaron a destruir proceder se me acobardó la pluma, y traicionándolo, ingratos como lo 126 rehusé la carrera por algunos manifiestan los más de los inconvenientes que se me oponían. historiadores; y si alguno de estos Estando así confuso, yo vine en esta lo denigran en esta parte de su sazón a la corte de Vuestra Majestad, vida pública y privada, entiéndase donde hice demostración ante los de que solo son como Palentino vuestro Real Consejo de las Indias de mandaba que escribiesen, aquella primera historia que antes yo pintándolo con los colores odiosos había escrito (que ahora en orden es de un rebelde o traidor a su rey. El segunda), y pareciéndoles bien el mismo Palentino dice estas verdadero discurso de su narración, palabras en su dedicatoria entendieron que sería útil y hablando al monarca. Queriendo provechoso y aún necesario que yo yo proceder con la pintura acabase la historia comenzada, y así verdadera de los hechos, se me lo mandaron, dándome esperanza de acobardó la pluma y rehusé la gratificación y premio, con que tomé cartera por algunos nuevo aliento y ánimo para cumplir inconvenientes que se me mandado de tan alto tribunal, oponían. Estando yo así de lanzando de mí el temor y recelo que confuso, vine a esta sazón a la ya tenía para no acabar la empresa Corte, donde hice demostración comenzada», etc. Siendo esto así, ante los de vuestro Real Consejo ¿qué mucho que dijesen de los de las Indias de aquella primera enemigos, principalmente de las historia que antes yo había escrito, cabezas, lo que los apasionados les que ahora es segunda en orden. relataban? Antes se hubieron De ese modo, como les pareció 127 cortamente, según lo que hoy se usa. bien el verdadero discurso de su [Capítulo XLI: Buenos respetos de narración, entendieron que sería Gonzalo Pizarro en servicio de su útil y provechoso, y aun Rey. El cual, saliendo de Quitu, va a necesario, que yo acabase la Trujillo y a Los Reyes, y la fiesta de historia comenzada. Y así me lo su entrada.] mandaron, dándome esperanza de (Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p. gratificación y premio para que 410] tome nuevo aliento, y ánimo para cumplir el mandado de tan alto tribunal, lanzando de mí el temor y recelo, que ya tenía, para no acabar la empresa comenzada. He aquí que mucho es que no dijera, de los enemigos y muy especialmente de los que habían sido cabezas, todas las expresiones apasionadas en su contra, dando, al antojo, solo relaciones de sus venganzas. (Cortegana, 2023, 12 - 13). Tunconobal vestido de miserable y El estratégico Tunconobal, Volumen II - andrajoso, a la par de sus compañeros, vestido de miserable andrajoso, a Manuscrito VI 128 Molina, Juan Ignacio. 1795. Compendio de la historia civil del reino de Chile. https://shorturl.at/ajuZ0 se presentó temblando delante de Don la par de sus compañeros, se García, y despues de haberlo presentó temblando delante de cumplimentado con terminos don García y, después de haberle groseros, le entregó una cestilla, en la cumplimentado con términos cual habia lagartijas asadas, con groseros, le entregó una cestilla algunas frutas silvestres. Los que contenía lagartijas asadas españoles que no podian contener la adjuntadas de algunas frutas risa a vista de los embajadores, y de silvestres. Los españoles, al ver su regalo, comenzaron a disuadir al esto, no pudieron contener la risa, gobernador de aquella empresa, que ni tampoco quitar la vista de los segun todas las apariencias debia ser que se calificaban de infructuosa. Pero él, aunque estuviese embajadores; pero el resultado fue persuadido de la miseria de aquellos que, de // [f. 53] la pobreza del pueblos, sin embargo, por no mostrar regalo, se agarraron sus validos haberse determinado ligeramente, los para disuadir al gobernador de exhortó a proseguir el viaje aquella empresa en que se había empezando, diciendo que mas lanzado, diciéndole que, según adelante se debia encontrar, segun las todas las apariencias que noticias que tenia, una region presentaba, su conquista era abundante de toda suerte de metales: infructuosa. Mas él, aunque se que no era raro en América encontrar veía persuadido de la miseria de después de horribles desiertos paises los cuncos, no quiso ceder riquisimos: luego preguntó a los prontamente, para que no dijeran Cuncos cual era el mejor camino para que se había determinado a ella Libro I, Capítulo 3 129 ir hacia el medi dia. Tunconobal ligeramente y, por lo tanto, señalo el de occidente, que a la verdad desoyendo a sus sugestiones, los era el mas fragoso; y pidiole una guia, exhortó a proseguir el viaje destino uno de sus compañeros, al empezado. Alegó para ello que, cual encargo condujese el ejercito por más adelante, según estaba los lugares mas escabrosos de la informado, encontrarían una costa. La guia siguió con tanta región abundante de toda suerte puntualidad las instrucciones del de metales; porque no era raro en Araucano, que los españoles, América encontrar, después de acostumbrados en sus conquistas a horribles desiertos, países sobrellevar con gusto las mas duras riquísimos. Luego, tornándose a fatigas, confesaban no haber trabajado los cuncos, les preguntó cuál era nunca tanto en una marcha tan penosa el camino mejor para ir hacia el como aquella. La impaciencia de ellos mediodía. Tunconobal le señaló el se aumentó mucho mas, cuando del occidente, que, la verdad, era despues de cuatro dias de viajes se el más fragoso; y, como le pidió vieron abandonados del pretendido que haya un guía, destinó a uno de conductor, sin poder encontrar salida sus compañeros, al cual le entre los espantosos peñascos que los encargó que condujese al ejército circuian. Toda su admirable por los lugares más escabrosos de constancia no hubiera sido suficiente la costa. Puéstose en marcha, el para hacerlos caminar adelante, si guía siguió con puntualidad las Don Garcia no les hubiese instrucciones del araucano, de incesantemente sostenido con la manera tal que los españoles, 130 lisonjera esperanza de llegar dentro de siempre acostumbrados a poco a la feliz comarca que le habia sobrellevar en sus conquistas con prometido. (Molina, 1795, 186 – 188). gusto las más duras fatigas, confesaron desesperados no haber trabajado entonces nunca tanto en una marcha tan penosa como aquella que practicaban. La impaciencia de ellos aumentó mucho más cuando, después de cuatro días de viaje, se vieron abandonados del pretendido conductor, sin poder encontrar salida entre los espantosos peñascos que los circuían. Toda su admirable constancia no habría sido suficiente para hacerlos caminar adelante, si don García no los hubiese incesantemente sostenido con la lisonjera esperanza de llegar dentro de poco a la feliz comarca que les había prometido encontrar. (Cortegana, 2023, 136 - 137). 131 Habiendo superado finalmente todos Por medio de esta insistencia y Volumen II - los obstáculos, llegaron a descubrir tras haber asimismo superado Manuscrito VI - desde la cima de un alto monte el finalmente todos los obstáculos Libro I, Capítulo 3 grande Archipiélago de Ancud, que se les habían presentado, nombrado más comúnmente de llegaron a descubrir, desde la Chiloe, cuyos canales estaban cima de un alto monte el gran surcados de una infinidad de archipiélago de Ancud, nombrado barquillos que navegaban a vela y más comúnmente como Chiloé, remo. Este inesperado prospecto los cuyos canales se hallaban colmó de alegria: molestados ya surcados de una infinidad de muchos dias de la hambre corrieron barquillos que navegaban a vela y hacia la ribera, y tuvieron bien presto remo. Este inesperado prospecto el contento de ver acercarse una barca los colmó al instante de alegría y, montada de quince personas como ya se hallaban molestados decentemente vestidas, las cuales, de hambre por algunos días, esto saltando sin miedo en tierra y los hizo correr hacia la próxima saludando con gran cordialidad, les ribera que veían cubierta de preguntaron quienes eran, donde iban, flotantes navecillas. Así que, y si tenian necesidad de alguna cosa. cuando llegaron, tuvieron pronto Los españoles pidieron víveres. El el contento de ver acercarse hacia Capitan de aquella buena gente hizo donde ellos una barca montada de luego sacar todas las provisiones que 15 personas decentemente llevaba sobre la barca, y sin querer vestidas, las cuales, saltando sin 132 admitir la menor paga, se las miedo en tierra y saludando con distribuyó amigablemente, gran cordialidad, les preguntaron prometiendp hacerlas venir en mayor quiénes eran, a dónde iban y si copia de las Islas circunvecinas. tenían necesidad de alguna cosa. (Molina, 1795, 188). Los españoles, primero que todo, pidieron víveres. Mas el capitán de gente tan buena hizo luego sacar todas las provisiones que llevaban sobre la barca y, sin querer admitir la menor paga, se las distribuyó amigablemente, prometiéndoles que les haría traer cosas en mayor copia de las islas circunvecinas que tenía a la vista. (Cortegana, 2023, 137). En efecto, apenas los hambrientos // [f. 54] Ciertamente, ni bien se Volumen II - aventureros se habían acampado, habían acampado los hambrientos Manuscrito VI - cuando arribaron de todas partes aventureros en la ribera deliciosa, Libro I, Capítulo 3 piraguas cargadas de maíz, de frutas, cuando arribaron de todas partes y de peces, que fueron del mismo piraguas cargadas de maíz, de modo presentadas, sin ningún interés. frutas y de peces, todas las cuales Los españoles, siempre regalados por fueron, del mismo modo, 133 aquellas isleños, costearon el presentadas sin ningún interés al archipiélago hasta el seno de devoramiento de los españoles. Relocavi, y algunos de ellos pasaron a De esa manera, estos siempre las islas vecinas, donde encontraron la relegados por aquellos isleños tierra muy cultivada, y las mujeres costearon el archipiélago hasta el empleadas en hilar lana mezclada con seno de Reloncaví, y algunos de plumas de los pájaros marinos, de lo ellos pasaron a las islas vecinas, cual hacían sus vestidos. El famoso donde encontraron la tierra muy poeta Ercilla que era de la comitiva, cultivada y las mujeres empleadas queriendo tener la gloria de haberse en hilar lana mezclada con plumas introducido al mediodia mas que de los pájaros marinos, de la cual ningún otro Europeo, paso el hacían sus vestidos. El famoso susodicho golfo de mar, y sobre la poeta Ercilla, que era de la ribera opuesta dejó escrito en verso en comitiva, queriendo tener la gloria la corteza de los árboles su nombre, y de haberse introducido al la dará de su descubrimiento, que fue mediodía más que ningún otro a 31 de enero de este año. (Molina, europeo, pasó el susodicho golfo 1795, 188 – 189). de mar y, sobre la ribera opuesta, dejó escrito en verso, en la corteza de los árboles, su nombre y la data de su descubrimiento, que fue el 31 de enero de 1558. (Cortegana, 2023, 137). 134 Córdova y Urrutia, José María. 1844. En 9 de Enero de este, de 570 Ya por su tiempo sucedió, el 9 de Volumen II - Las 3 épocas del Perú́ , o, Compendio de entraron en la capital los individuos enero de 1570, la entrada a la Manuscrito VI, Libro su historia Perú. Imprenta del Autor. que debían componer el Tribunal de capital de Lima de las personas I, Capítulo 8 https://t.ly/VtYXz la Inquisición presididos por el que habían de componer el primer Licenciado Servan de Cerezuela; Tribunal de la Inquisición, siendo notable este año por el gran presidido por el licenciado Serván terremoto que hubo en Chile, que de Cerezuela. En este año hubo trastornó algunos cerros y asoló lu también un gran terremoto en gares enteros. En 18 de Febrero el Chile, que trastornó a los cerros y señor Arzobispo elevó la Iglesia de asoló a los lugares en que Santa Ana a parroquia. Se erigió el desarrolló su furor. Obispado del Tucuman por su primer El 18 de febrero de este mismo prelado D. F. Gerónimo de Albornoz, año, el arzobispo de Lima Loayza é igualmente fué nombrado para el instituyó en parroquia a la iglesia Cuzco D. Sebastian Lartaun. Se de Santa Ana. estableció en Lima el Tribunal del Protomedicato. La casa de Moneda que existía en esta, se trasladó por disposición del virey á la villa de Potosí. (Córdova y Urrutia, 1844, 52). Por este propio tiempo, también se erigió el obispado de Tucumán, siendo su primer prelado don fray Jerónimo de Albornoz, a la vez que también fue nombrado para la diócesis del Cusco don Sebastián de Lartaún. Igualmente, fue establecido en Lima el Tribunal 135 de Protomedicato, y la Casa de la Moneda que había en esta fue trasladada, por orden del virrey, a la villa de Potosí. (Cortegana, 2023, 200). Este año de 71 dio fin la guerra de los Entrando el año de 1571, le Volumen II - Moros en Granada con la muerte de vinieron al virrey Toledo varias Manuscrito VI, Libro su rey Aben Aboo lo que se celebró noticias de Europa y, entre estas, I, Capítulo 8 con grandes fiestas. Se expidió por el estuvo la finalización de la guerra Sumo Pontífice Pio V, la bula de los moros en Granada, con confirmatoria de la Universidad de motivo de la muerte del rey de San Marcos. Pedro Fernandez de estos, Aben Aboo, nueva que se Velasco descubrió el secreto de celebró con grandes fiestas en beneficiar la plata con azogue, lo que todo el Perú. Otra fue la dió mucho realce al mineral de expedición, por el pontífice de Huancavelica al extremo de haberse Roma Pío V, de la bula mandado por el virrey en 5 de agosto confirmatoria de la Universidad de 1572 que don Francisco Angulo de San Marcos de Lima. En este tirase las medidas para la fundación mismo año, Pedro Fernández de de la población titulando “Villa rica Velasco descubrió el secreto de de Oropesa en memoria de su casa. beneficiar los metales de plata con En Lima se erigió la Doctrina del azogue; este ingenioso 136 Cercado al cargo de los Jesuitas conocimiento le dio mucho realce donde fundaron un Colegio para la al mineral de cinabrio de enseñanza de los indios. (Córdova y Huancavelica. Como la fama de Urrutia, 1844, 52). los ricos azogues de Huancavelica se hicieron bastante codiciables, el virrey tuvo por conveniente, el 5 de agosto de 1572, mandar a que don Francisco Angulo le tirase las medidas para fundar la población, a la que tituló Villa Rica de Oropesa, en memoria de su casa. Pero, como el bautismo natural de su nombre nadie se lo pudo quitar, pronto se quedó solo con el nombre de Villa de Huancavelica. En Lima se erigió, también por este año, la doctrina del Cercado, a cargo de los jesuitas, donde consiguientemente fundaron un colegio para la enseñanza de los naturales. (Cortegana, 2023, 201 - 202). 137 Murió este año en Roma el Papa Pio Por este año, se supo en Lima que Volumen II - V, haciendo instituido la fiesta del en Roma había muerto el papa Manuscrito VI, Libro Rosario y añadiendo en la letania, Pío V, después de haber instituido I, Capítulo 8 estas palabras “Auxilium la fiesta del Rosario; de haber christianorum” por la protección que añadido a la letanía las palabras habían recibido en la batalla contra «Auxilium Cristianorum», por la los moros el primer Domingo de protección que habían recibido los Octubre del año anterior de 71. cristianos en la batalla contra los Expidió breve para que en los moros el primer domingo de conventos Dominicos se bendijesen octubre del año anterior de 71; y las velas de Candelaria para la hora de de haber expedido, asimismo, el la muerte. breve para que en los conventos Se fundó en Lima en esta año de 73 el dominicos se bendijesen las velas monasterio de la Concepcion y en el de Candelaria para ayudar a bien mismo los religiosos Agustinos morir. tomaron posesion del sitio que Terminado el año de 72 y entrado actualmente ocupan. Se mandó poblar el de 1573, tuvo lugar ya en él la en este año, en la provincia de fundación del monasterio de la Cochabamba la ciudad de Oropesa, Concepción en Lima, al mismo sobre las ruinas de otra que en 1565 tiempo que los religiosos se habia establecido. (Córdova y agustinos, en posesión, ocuparon Urrutia, 1844, 52 - 53). el actual local, que consta de su iglesia y su casa conventual. En 138 este propio año, se mandó // [f. 111] poblar, en la provincia de Cochabamba, una nueva ciudad de Oropesa, con el mismo objeto de dejar a la posteridad el nombre de la casa del virrey, sobre las ruinas de otra que en 1365 se había establecido con diverso nombre. (Cortegana, 2023, 202). Inca Garcilaso de la Vega. 1967 [1617]. Procediendo el Visorrey en su El nuevo conquistador de Volumen II - Historia general del Perú. Lima: gobierno con la suavidad y blandura las riberas del Marañón, Ursúa, Manuscrito VI, Libro Editorial Universo S.A. que hemos dicho, concedió la jornada era hombre de mucha bondad, de I, Capítulo 5 https://shorturl.at/HKP06 y conquista de las Amazonas del río gentil persona y de mucho agrado Marañón que atrás dijimos, que para con todos. Para formar su Francisco de Orellana, negando a expedición, se tomó el trabajo de Gonzalo Pizarro vino a España, y ir, desde el Cusco hasta Quito, pidió a Su Majestad la dicha enganchando soldados que conquista, y acabó en el camino sin quisieran ir con él a las nuevas llegar donde pretendía. Dióla el conquistas, a causa de que, como Visorrey a un caballero llamado Pedro estaba el Perú en una quietud de Orsúa, que yo conocí en el Perú, efectiva, ya no tenían los hombre de toda bondad y virtud, aventureros matachines cómo 139 gentil hombres de su persona y poder medrar, porque todo él agradable a la vista de todos. Fue estaba repartido entre los más desde el Cozco hasta Quitu antiguos favorecidos por la recogiendo los soldados que fortuna y por la protección de los pretendían salir a nuevas conquistas, mandatarios. Cuando andaba así porque en el Perú ya no había en qué Ursúa en este proyecto, recibió medrar, porque todo él estaba también caballos, armas y repartido entre los más antiguos y bastimentos; a él acudieron todos beneméritos que había en aquel los vecinos de las ciudades con Imperio. Recogió así mismo Pedro de estos artículos, con mucha Orsúa las armas y bastimento que liberalidad, porque todos ellos pudo para su conquista; a todo lo cual trataban de favorecerlo como el los vecinos y los moradores de más. Del Cusco salieron con él aquellas ciudades acudieron con muchos soldados y, entre ellos, un mucha liberalidad y largueza, y todo don Fernando de Guzmán, joven y buen ánimo, porque la bondad de recién llegado de España, con otro Pedro de Orsúa lo merecía todo. Del soldado Lope de Aguirre, ya Cozco salieron con él muchos antiguo en el país, pero de un soldados, y entre ellos un Fernando de físico muy ridículo y de una Guzmán, que yo conocí, que era muy perversa condición. Ursúa, con nuevo en la tierra, recién llegado de sus buenas maneras y su notoria España, y otro soldado más antiguo bondad, consiguió reunir 500 que se decía Lope de Aguirre, de ruin hombres y, con ellos, entró sobre talle, pequeño de cuerpo y de perversa el curso del enunciado río, 140 condición y obras, como lo refiere en llevándose consigo a una hermosa sus Elegías de varones ilustres de dama que hacía de su compañera. Indias, el Licenciado Juan de De hecho, por la codicia hacia Castellanos, clérigo, presbítero, ella, al cabo de un mes de camino, beneficiado de la ciudad de Tunja en convinieron entre Aguirre y el Nuevo Reino de Granada: en las Guzmán, y un tal Salduendo, que cuales Elegías gastan seis cantos de su era el apasionado por la bella, en verdadera y galana historia, aunque matar a don Pedro de Ursúa, bajo escrita en verso. En ellas cuenta las el pretexto de nombrar por rey de jornadas de Pedro de Orsúa, que ellos a don Fernando Guzmán. llevaba más de quinientos hombres Este joven indiscreto, que también bien armados y aderezados con era bien apersonado por solo ser muchos y buenos caballos. Escribe su rey, cooperó con la infausta muerte que se la dieron sus propios ejecución de su bienhechor. Pero compañeros y los más allegados a él, Aguirre y Salduendo, pocos días por gozar de una dama hermosa, que después, mataron también a Orsúa llevaba en su compañía. Pasión Guzmán y se declararon los que ha destruido a muy grandes principales caudillos, llevándose capitanes en el mundo, como al bravo consigo a la dama. Poco tiempo Aníbal y a otros tales. Los principales después, se quedó solo Aguirre autores de la muerte de Orsúa fueron como el caudillo de ellos, cuando don Fernando de Guzmán y Lope de mató a Salduendo y a más de Aguirre, y Salduendo, que era doscientos hombres de su partido. apasionado por la dama, sin otros En seguida, saqueó la isla de la 141 muchos que aquel autor nombra. Y Margarita, donde perpetró toda dice como aquellos traidores alzaron clase de atrocidades. Luego, pasó por Rey a su don Fernando, y él era a las otras islas comarcanas, tan discreto, que consintió en ello y donde fue vencido por sus holgó que le llamasen Rey, no moradores y, antes de rendirse, habiendo Reino que poseer, sino pasó a cuchillo a una hija suya, a mucha mala ventura, como a él le causa de que no quedase viva sucedió, que también lo mataron los estando él muerto y la llamasen mismos que le dieron el nombre de «hija del traidor Aguirre». Tal fue Rey. Aguirre se hizo caudillo de ellos, el fin de la jornada de Ursúa. y mató en veces más de doscientos (Cortegana, 2023, 160 - 161). hombres, saqueó la isla Margarita, donde hizo grandísimas crueldades. Pasó a otras islas comarcanas, donde fue vencido por los moradores de ellas; y antes que se rindiese, mató una hija suya que consigo llevaba, no por otra causa, más de que porque después de él muerto no la llamasen hija del traidor. Esta fue la suma de sus crueldades, que cierto fueron diabólicas; y este fin tuvo aquella jornada que se principió con tanto aparato como yo vi parte de él. 142 [Capítulo XIII: Que trata de los pretendientes que vinieron desterrados a España, y la mucha merced que Su Majestad les hizo. Don García de Mendoza va por Gobernador a Chile, y el lance que le sucedió con los indios.] (Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p. 737] Luego que vieron preso al Puesto así el príncipe, en Volumen II - príncipe, le criaron un fiscal que le estrecha prisión, el virrey le crio Manuscrito VI, Libro acusase sus delitos; el cual le puso los un fiscal, el cual se puso de I, Capítulo 8 capítulos que atrás apuntamos, que acuerdo con su superior sobre los mandaba a sus vasallos y criados que capítulos que ya anteriormente saliesen de aquellas montañas a fueron descifrados. El virrey no saltear y robar a los caminantes solo se contentó con perder al inca mercaderes, principalmente a los y a toda su real familia, ya que lo españoles, que los tenía a todos por que más escandalizó a todos en enemigos; que tenía hecho trato y este ruidoso procedimiento fue contrato con los Incas sus parientes, cómo envolvió, en la causa del que vivían entre los españoles, que a inca, a los mestizos —hijos de 143 tal tiempo y en tal día, concertándose conquistadores en Indias, unos en con los caciques, señores de vasallos las infantas de la sangre real, otros que habían sido de sus padres y en las mujeres nobles, como lo abuelos, se alzasen y matasen cuantos eran las hijas, sobrinas y nietas de españoles pudiesen. También entraron los curacas y señores de en la acusación los mestizos hijos de vasallos—, a quienes les quitaron los conquistadores de aquel Imperio y los pocos bienes que tenían para de las indias naturales de él. dárselos a otros españoles o les Pusiéronles por capítulo, que se quitaron sus existencias solo habían conjurado con el príncipe porque eran nacidos en el país, y Túpac Amaru, con los demás Incas los tenían pereciendo sin que les para alzarse con el Reino; porque sirvieran de nada los méritos de algunos de los mestizos eran parientes sus padres ni la naturaleza de los Incas por vía de sus madres, y legítima de sus madres y abuelos, estos en su conjuración se habían para que se les considerara con quejado al príncipe Inca diciendo, que algo de las haciendas y destinos siendo hijos de conquistadores de de su misma patria. De aquí fue aquel Imperio, y de madres naturales ya que, por esta mala conducta de de él, que algunas de ellas eran de la los gobernantes españoles, que sangre real, y otras muchas eran todo lo querían para sí y para sus mujeres nobles, hijas y sobrinas y parientes, paisanos y amigos, se nietas de los curacas, señores de empezó a engendrar esa rivalidad vasallos. Y que ni por las haciendas y ese odio implacable entre el de sus madres y abuelos, que no les criollo peruano y el español 144 había cabido nada, siendo hijos de los europeo. En efecto, dejaron a los más beneméritos de aquel Imperio, primeros desamparados hasta el porque los Gobernadores habían dado extremo de que, llegando a la a sus parientes y amigos lo que sus mendicidad o forzados por la padres ganaron, y había sido de sus miseria, salían a robar por los abuelos maternos, y que a ellos los caminos y concluían luego dejaron desamparados, necesitados a degradados e infamados en los pedir limosna para poder comer, o cadalsos, con gran gozo de sus forzados a saltear por los caminos verdugos. Asimismo, suponían para poder vivir, y morir ahorcados. que los mestizos habían mandado Que Su Alteza el príncipe se doliese decir al príncipe Túpac Amaru de ellos, pues que eran naturales de su que Su Alteza se doliese de ellos Imperio, y los recibiese en su servicio, y, considerando que sus parientes, y admitiese en su milicia, que ellos amigos y vasallos eran naturales harían como buenos soldados hasta de su imperio, los recibiese en su morir todos en la demanda. Todo esto servicio y admitiese en sus pusieron en la acusación de los ejércitos, cierto de que ellos solo mestizos, prendieron todos los que en obrarían hasta morir como buenos el Cozco hallaron de veinte años soldados de su voluntad y arriba, que pudieran ya tomar armas. persona, y harían todo lo que él se Condenaron algunos de ellos a dignase a mandarles. Y por esa cuestión de tormento, para sacar en imputación, nacida solo de la limpio lo que se temía en confuso. mente del virrey y sus consejeros, [Capítulo XVII: El proceso contra el hizo poner también presos en la 145 Príncipe y contra los Incas parientes cárcel a todos los mestizos hijos de la sangre real, y contra los de conquistadores que, con la mestizos hijos de indias y de edad de 20 años, se hallaban a la conquistadores de aquel Imperio.] sazón en el Cusco y que (Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p. consideraba que // [f. 116] fuesen 742] capaces de tomar las armas. Como en el séquito del juicio todos estaban inconfesos, fueron condenados a tormento, a fin de arrancarles, por este bárbaro medio, las palabras que les apetecía sacar en limpio; pero, en esta cuestión, todo se hallaba en un caos de confusión. El Cusco, por esos días, todo él era un laberinto. Sus habitantes veían al inca y su familia sumidos en una asquerosa mazmorra. Por otra parte, los hijos de los conquistadores y sus parientes queridos fueron arrastrados también a la misma, por la más arbitraria injusticia de sus tiranos. En aquella ciudad, todo era furia 146 de prisión, acusación y delitos, por un lado; y todo era desesperación y odio, por otro. (Cortegana, 2023, 208 - 209). En aquella furia de prisión, acusación En esta varia posición de cosas, Volumen II - y delitos, fue una india a visitar su sucedió el hecho siguiente. Una Manuscrito VI, Libro hijo que estaba en la cárcel: supo que india fue a visitar a un mestizo I, Capítulo 8 era de los condenados a tormento. hijo suyo que, con este motivo, se Entró como pudo donde estaba el hijo hallaba en la cárcel, sabiendo que y en alta voz le dijo: «Sabido he que estaba condenado a pasar por el estás condenado a tormento, súfrelo y tortor. Entró como pudo adonde pásalo como hombre de bien sin estaba el hijo y, en alta voz, le condenar a nadie, que Dios te ayudará dijo: y pagará lo que tu padre y sus compañeros trabajaron en ganar esta tierra para que fuese de cristianos, y los naturales de ella fuesen de su iglesia. Muy bien se os emplea, que todos los hijos de los conquistadores muráis ahorcados, en premio y paga de haber ganado vuestros padres este Imperio». [Capítulo XVII: El proceso «Hijo mío, he sabido que estás condenado a tormento y esta noticia es la que me ha traído para prevenirte que, a lo que te den, debes sufrir y pasar como hombre de bien, sin culpar ni nombrar a este o a aquel; porque si así lo haces, Dios te ayudará y pagará 147 contra el Príncipe y contra los Incas con lo que tu padre y sus parientes de la sangre real, y contra compañeros trabajaron, que es el los mestizos hijos de indias y de haber ganado esta tierra. Muy conquistadores de aquel Imperio. bien el virrey los emplea ahora, (Inca Garcilaso de la Vega. 1967 p. puesto que pretende que todos los 742] hijos de los conquistadores mueran ahorcados en premio y recompensa por lo que ellos tanto se esforzaron en la adquisición de este imperio». (Cortegana, 2023, 209). Córdova y Urrutia, José María. 1844. En este año de 1746 fue ascendido al Entrado ya el año de 1746, fue Volumen II - Las 3 épocas del Perú́ , o, Compendio de Obispado de Huamanga D. Fr. ascendido al obispado de Manuscrito VII, su historia Perú. Imprenta del Autor. Francisco Galeano auxiliar de la Huamanga el doctor don fray Capítulo 3 https://t.ly/VtYXz Metrópoli de su patria Lima. Sucedió Francisco Galeano, auxiliar de la en 28 de Octubre el terremoto que metrópoli de Lima, su país natal. inundó y asoló la ciudad del Callao y En este año, seguían las destruyó todos los edificios de la operaciones de Llamas en la capital, habiéndose notado que al caer montaña, hasta entonces, si no el arco alto de piedra que hace entrada vencido, sumamente estropeado al puente, vino por tierra la estatua por las escabrosidades de ella y 148 ecuestre de Felipe V, el mismo que por el clima calenturiento que según se supo después, había muerto infectaba a la mitad de sus tropas. en el palacio de Belsain el 9 de Julio Mientras que así seguían estas de aplogeia. El terremoto dicho en su operaciones con alguna lentitud, y dirección O. a E. hizo grandes no con el favorable resultado que estragos: en la quebrada mineral del el virrey se prometía alcanzar, Rio-biseca de la provincia de Lucanas tuvo lugar, para mayores trabajos rompiendose la tierra, abortó de su gobierno, el gran terremoto monstruosas sabandijas que en su que inundó y asoló a la ciudad y seno ocultaba: en la quebrada de puerto del Callao. Fueron Totopo once leguas de Pativilca se partícipes en su destrucción todos partieron dos cerros que llaman Julcan los edificios de la capital de Lima y lo mismo sucedió en Huayas: en y también la estatua ecuestre del Ayapata (provincia de Carabaya) se rey Felipe V, que había sido abrió la tierra y saliendo agua colocada en la cumbre del arco cenagosa inficionó la de los ríos e grande del puente por el virrey hizo perecer mucha gente. (Córdova y Villagarcía; después se notó que, Urrutia, 1844, 117 – 118). cuando esto sucedía en Lima con su efigie, él ya había muerto en España en el palacio de Belsain el 9 de julio, de una terrible apoplejía. Este grandioso terremoto, en su dirección oeste a este, hizo los más grandes 149 estragos; pues, en la quebrada mineral del río Viseca de la provincia de Lucanas, rompió la tierra e hizo abortar monstruosas sabandijas que en su seno ocultaba. En la quebrada de Totopo, a once leguas de Pativilca, se partieron dos cerros llamados Julcán, y lo mismo sucedió en Huaylas y en Ayapata, provincia de Carabaya, donde se abrió la tierra y esta exhaló agua cenagosa que infectó la de los ríos, al paso que hizo perecer a muchos de sus moradores. (Cortegana, 2023, 224). Don Agustin de Jauregui, caballero de El virrey Guirior, que solo Volumen II - la orden de Santiago, teniente general gobernó al Perú cuatro años, fue Manuscrito VII, de los reales ejercitos, de presidente reemplazado en el virreinato del Capítulo 8 de chile paso a servir el virreinato del Perú por don Agustín de Jáuregui, Perú, entrando en la capital de Lima caballero de la orden de Santiago en 21 de Julio, día en que se habia y teniente general de los reales 150 recibido en el real Acuerdo D. José ejércitos, a quien, cuando estaba Antonio de Areche de de presidente de Chile, la Corte lo Superintendente de real Hacienda. En nombró para el desempeño de este 20 de Agosto murió el V. Fr. Ramon gobierno. Con ese motivo, entró Tagle de la órden de San Francisco. públicamente en Lima el 21 de Recibiose en público el Virrey el 5 de julio de 1780 y, en el mismo día, Noviembre de este año, estallando en se hizo cargo de la autoridad 10 del mismo mes, la sublevacion de suprema de él. En este propio día, D. José Gabriel Condorcanqui-Tupac- se recibió, en real acuerdo, don Amaru, cacique del pueblo de José Antonio de Areche de Tungazucca de la provincia de Tinta, superintendente de real hacienda. efectuadapor las atrocidades que En 20 de agosto de ese año, murió cometia el corregidor D. Antonio en Lima el venerable fray Ramón Arriaga, al cual aprendió e hizo Tagle, de la orden de San ahorcar en toda forma: Francisco. El 5 de noviembre se inmediatamente el corregidor de la recibió en la Real Audiencia al inmediata provincia de Quispicanchi virrey, de una manera pública y D. Fernando … (Córdova y Urrutia, 1844, 127). ostentosa, a prescindir sus reales acuerdos. El día 10 de este mismo mes, estalló la sublevación de don José Gabriel Condorcanqui, Túpac Amaru, cacique del pueblo de Tungasuca, de la provincia de 151 Tinta, efectuada por la mala conducta del corregidor don Antonio de Arriaga, cuyos pormenores son los siguientes. (Cortegana, 2023, 235). En 15 de febrero de este año entró en El 15 de febrero de este mismo Volumen II - Lima de arzobispo el D. D. José año de 1782, entró en Lima el Manuscrito VII, Domingo González de Larreguera. arzobispo doctor don Juan Capítulo 8 Fue nombrado obsipo de Huamanga Domingo González de la Reguera. D. Francisco Lopez Sanchez, y para Fue nombrado obispo de Arequipa D. Fr. Miguel de Gonzales Huamanga don Francisco López Pamplona, capuchino. En Sánchez y obispo de Arequipa Lambayeque se fundó un hospital con don Miguel González de el fondo de diez mil pesos que para Pamplona, de la orden de ello dio D. Carlos Vigil. En mayo de capuchinos. En Lambayeque se este mismo año acaeció en el asiento fundó un hospital, con el fondo de mineral de Huallanca un tumulto, diez mil pesos, que para ello contra los mineros de la Provincia de piadosamente dio don Carlos Huamalíes, que fué sosegada con la Vigil, natural y vecino de Chota. deposicion del Corregidor D. Ignacio En mayo de este mismo año, de Santiago y Ulloa, que como acaeció, en el asiento mineral de perteneciente al gremio la habia Huallanca, un tumulto bastante 152 fomentado. Se estancó el papel ardoroso contra los mineros de la sellado y breas de Santa Elena y provincia de Huamalíes, a la que Amotape. (Córdova y Urrutia, 1844, pertenece aquel puesto; este se fue 129). apaciguado con la deposición del corregidor don Ignacio de Santiago y Ulloa, que, como perteneciente al gremio, la había fomentado de un modo perjudicial y escandaloso. Se estableció el estanco del papel sellado y también el de breas de Santa Elena y Amotape, por convenir así a la utilidad del erario real. (Cortegana, 2023, 268). Torrente, Mariano, Historia de la Los negocios públicos se presentaban Pese a todo esto, los patriotas de Volumen III - Revolución hispano-americana (1829- del modo mas halagüeño para los Buenos Aires no desmayaron en Manuscrito VIII - 1830). Madrid: (s. l.). insurgentes de Buenos Aires. Las sus propósitos, porque, aún más Capítulo 2 https://shorturl.at/jkqBQ victorias del Tucumán, i las ventajas alentados con la victoria obtenidas contra la plaza de alcanzada en el Tucumán y las Montevideo en el año anterior los obtenidas contra la plaza de habian constituido en un estado de Montevideo en el año anterior, vigor i firmeza, superior a sus mismos esperaban en lo sucesivo 153 calculos i esperanzas. Para dar mayor resultados más grandiosos de sus solidez a su gobierno habian instalado armas. Así es que, con motivo de una asamblea nacional, que principió dar mayor respetabilidad legal a sus sesiones en 31 de nero bajo la sus deliberaciones gubernativas, presidencia de Alvear i de los instalaron un congreso nacional, secretarios Vieites i Gomez, quedando de conformidad con la promesa confiado el poder ejecutivo a los hecha cuando ocurrió la mutación mismos que ya lo desempeñaban, del gobierno en el año absuelto. excepto Pasos que fue reemplazado En efecto, sus sesiones dieron por Perez. Dicha asamblea tomó el principio el 31 de enero, bajo la título de Congreso Soberano presidencia del general, que había Constituyente. (Torrente, 1829 – de ser el vencedor de Montevideo, 1830, 543). don Carlos María Alvear, y de los secretarios Vieytes y Gómez, quedando confiado el poder ejecutivo a los mismos que lo estaban desempeñando, a excepción de Paso, a quien se le reemplazó por Pérez, que merecía la opinión pública. Esta asamblea tomó el lema de Congreso Soberano Constituyente y sus sanciones fueron ya las primeras leyes nacionales de la república 154 ar-// [f. 106]gentina. (Cortegana, 2023, 4). Desde que se instituyó esta nueva Como ya desde la instalación Volumen III - forma de gobierno quedó proscrito de solemne de esta representación Manuscrito VIII - sus actas el nombre de Fernando, y se nacional porteña, se había Capítulo 2 dirigieron todos sus pasos a establecer variado, de derecho y hecho, la una independencia absoluta de la forma de gobierno de colonia metrópoli. Se cambiaron las banderas realista a nación independiente y i las divisas reales; se acuño moneda soberana; quedó, por naturaleza con los emblemas de aquella justa, proscrito para siempre de república; i siendo uno de los sus actas y trabajos políticos el principales intentos de sus corifeos nombre del rey Fernando de ganarse el aura popular para dar vigor España. De ese modo, ella solo se a su empresa, hicieron alarde de una dirigió, con todos sus patrióticos filantropia i generosidad que pasos, a establecer su desmentir sus mismas acciones, independencia absoluta de la decretando la libertad de los que metrópoli, que tanto anhelaban los naciesen de padres esclavos desde pueblos, reasumiendo en sí su aquella época, i la supresión de la soberanía política en el presente y mita i del tribuno. No dudaban de que para adelante. Bajo este principio por este medio podrían contar con la legal, timbre y empeño, se fidelidad de la raza africana, i con la comenzaron a expedir las leyes, 155 firme adhesión de los indios, con cuya los decretos, los títulos y las causa trataron de identificarlos. comunicaciones y órdenes (Torrente, 1829 – 1830, 343 - 344). oficiales, como el cambio de banderas y divisas reales, con las adoptadas nuevamente como nacionales por sanción del Congreso. Además, se acuñaron monedas con los emblemas de la república y, en razón de filantropía humanitaria, se declaró la libertad de los que naciesen de padres esclavos en adelante. (Cortegana, 2023, 4). Las numerosas partidas, que se Es cierto que, para esta empresa Volumen III - levantaron al favor de estas ventajas, de Salta, a Belgrano lo Manuscrito VIII - compuestas de gentes sumamente acompañaron numerosas partidas Capítulo 2 diestras en el manejo del caballo, mui de gauchos, como gente conocedoras de aquel terreno sumamente diestra en el manejo monstruoso i quebrado, expertas en la del caballo y muy conocedora de guerra de sorpresa, i emboscadas, i de sus terrenos montuosos y una particular habilidad para penetrar quebradas; al paso que experta en por los espesos bosques i matorrales, la guerra de sorpresa y de 156 entendieron sus incursiones hasta las emboscadas, y de una particular mismas cercanias de Salta. Las tropas sutileza para penetrar por los más del Rei tenian que vivir en una ásperos bosques y matorrales, continua agitacion i alarma, debiendo extendiendo de tal modo sus sostener continua agitacion i alarma, incursiones hasta las goteras del debiendo sostener continuos choques propio Salta. En una palabra, los parciales contra aquellos cosacos de tales gauchos, en aquellos América, llamados gauchos, que terrenos suyos, son lo mismo que huían cuando se les buscaba, pero que los árabes en el desierto de con la misma facilidad se echaban Egipto, los cosacos en los hielos encima para interceptar los víveres, de Rusia y los naturales del Perú cortar las comunicaciones, i sacar en sus quebradas y montañas. partido de todo descuido o Acometidas por aquellas nubes de desprevención. (Torrente, 1829 – caballería errante, las tropas del 1830, 543). rey tuvieron que vivir de continuo en agitación o alarma, sosteniendo todos los días repetidos choques parciales, a fin de alejarlos de las cercanías de la población del indicado Salta, que sin trabar un recio ataque huían cuando los realistas los buscaban. Los gauchos se echaban encima de ellos con la misma facilidad en 157 masa, tan luego como los sentían algo débiles o fatigados, y sin dejar por su natural condición de ser así volátiles, para interceptar los víveres, cortar las comunicaciones y sacar partido de todo descuido o desprevención de las tropas a las que les hacían la guerra con astucia y eficacia. (Cortegana, 2023, 7). García Camba, Andrés. 1846. Memorias De conformidad con las prevenciones El general en jefe Goyeneche, Volumen III - para la historia de las armas españolas del virrey y deseoso por su parte el antes de saber la pérdida y Manuscrito VIII - en el Perú. Madrid: Sociedad general en jefe de auxiliar la capitulación de Tristán en Salta, Capítulo 2 Tipográfica de Hortelano y Compañía. permanencia de Tristan en Salta habia cumpliendo con las prevenciones https://t.ly/smoDl hecho partir para la vanguardia al del virrey Abascal y deseoso por coronel D. Miguel Tacon y al su parte de auxiliar la ingeniero D. Francisco Javier de permanencia de Tristán en Salta, Mendizabal, y ambos juntos llegaron había hecho partir para la a Jujuy el 19 de febrero, vispera de la vanguardia al coronel don Miguel derrota de Salta. El 21 se recibio en Tacón y al ingeniero don Jujuy la noticia de esta desgracia por Francisco Javier de Mendizábal, tres soldados fugados despues de los que, tras hacer juntos su viaje, 158 perdida la accion, y en su vista el llegaron el 19 de febrero a Jujuy, coronel Tacon tomo sobre si la víspera de la derrota en Salta, sin responsabilidad de mandar que la saber hasta entonces ocurrencia guarnicion emprendiera sin demora la alguna de lo que estaba retirada hacia Tupiza, y asi se verifico sucediendo en este punto. El poniendose en marcha a las nueve de descanso que hicieron en el la noche del mismo dia, porque era primero les dio lugar a que, el 21, fundado temer que no tardarse aquella tres soldados de los fugados tropa en ser atacada y destruida. Con después de la pérdida de la batalla esta acertada medida dió Tacon una llegasen al citado Jujuy y diesen prueba de su buen juicio, pues la primera noticia de esta entonces ignoraba la capitulacion desgraciada jornada de los celebrada en Salta por consiguiente realistas. En su visita, el coronel que por una de sus condiciones se Tacón tomó sobre sí la autorizaba a la guarnicion de Jujuy responsabilidad de mandar que la para retirarse libremente sin hostilizar guarnición emprendiese sin los pueblos del tránsito. El brigadier demora la retirada hacia Tupiza, y Tristan comunico luego al así se verificó y se puso en comandante Estevez la capitulacion marcha a las nueve de la noche aceptada, por la que las tropas del rey del mismo día, fundados en el debían evacuar el territorio del temor de que no tardaría aquella gobierno de Salta y no volver a otmar tropa en ser atacada y destruida, las armas contra el de Buenos Aires; puesto que el ejército al que pero se padecio el notable olvido de pertenecía había sido vencido. 159 no expresar en esa comunicacion la Semejante medida de precaución cláusula acordad respecto a la manera dada por el buen juicio de de hacer su retirada la guarnicion de indicado Tacón, que ignoraba las Jujuy. (García Camba, 1846, 90). condiciones de la capitulación celebrada en Salta entre Tristán batido y Belgrano triunfante, puso a salvo, de hecho, a la división Estévez, que resguardaba de parte de los realistas a Jujuy, pese a que, por uno de los artículos del tratado, se le concedía a la mencionada guarnición que pudiese retirarse libremente sin que los pueblos le hostilizaran el tránsito por motivo o pretexto alguno. Así es que, a pocos momentos de emprendida la marcha, el comandante Estévez recibió la comunicación de la capitulación aceptada, que le remitía Tristán para su observancia; por medio de ella, las tropas del rey debían evacuar el territorio del gobierno de Salta 160 y no volver a tomar las armas contra el de Buenos Aires. Pero no se acordó poner en ella, por olvido, la cláusula pactada respecto al modo como debía hacer su retirada la guarnición de la que se habla; sino tan solamente, en globo, lo que se había verificado, en mérito de las críticas circunstancias a las que la suerte de las armas la había reducido. (Cortegana, 2023, 13 14). A los dos días de haber abandonado No habían pasado más de dos días Volumen III - esta ciudad TAcon, Estevez y de haber abandonado a la ciudad Mendizabal, les alcanzó un oficial de de Jujuy, cuando a Tacón, Estévez Capítulo 2 los capitulados de Salta que conduce y Mendizábal, con la guarnición pliegos de Tristan para el general en que conducían, los alcanzó un jefe que se hallaba en Potosí, y este oficial de los capitulados de Salta, oficial les refirio los pormenores de la que conducía pliegos de Tristán malhablada batalla de Salta y los para el general en jefe Goyeneche, articulos de la capitulacion convenida, que se hallaba en Potosí (que sin Manuscrito VIII - 161 y enterados nuestros jefes de que la duda contenían ellos el parte de la guarnición de Jujuy no debía de ser batalla y las capitulaciones). Y él perseguida ni molestada continuaron // [f. 114] todavía vino a referirles la retirada con menos zozobra y los pormenores del mayor comodidad. ¡Tanta era todavia acontecimiento de Salta y de los la buena fe con que se entendian los artículos del convenio. Así, tratados! Entre tanto llegaron a manos enterados por boca de este oficial del general en jefe los mencionados de que la guarnición de Jujuy no pliegos de Tristan y con ellos un podía ser perseguida ni molestada billete, escrito en francés, en el que por estar garantizada su aconsejaba a su primo pusiese a salvo desocupación de la plaza en que su persona retirándose lo menos a se hallaban por aquella Oruro. (García Camba, 1846, 91). capitulación, continuaron ya la retirada con más sosiego y mejor comodidad, tanto en los alimentos de la tropa, cuanto en sus proporcionadas jornadas de marcha para no fatigarla. (Cortegana, 2023, 14). Instruido Goyeneche del desastre de En consecuencia, obligado a Volumen III - la vanguardia de su ejercito dio evacuar la plaza de Potosí, Manuscrito VIII - muestras claras de una verdadera Goyeneche se retiró a la de Oruro. Capítulo 2 162 sorpresa: convocó seguidamente una Pero, antes de proceder, convocó junta de guerra y resolvió abandonar a a una junta de guerra y resolvió Potosí mereciendo por ello la censura con ella abandonar Potosí. Por de precipitado, porque no obstante de esta decisión, mereció la censura hallarse 150 leguas al norte de Salta y de los jefes españoles de con la division de Picoaga avanzada, precipitado, en razón de que la puso por obra este pensamiento a las verificó a las 48 horas de haberla 48 horas de haber recibido las concebido, disentido y aprobado, comunicaciones de Tristan, aun cuando estaba a 150 le-// habiendose visto en la dolorosa [f. 115]guas al norte de Salta, con precision de mandar inutitilizar por la división Picoaga avanzada en falta de acémilas cantidad Suipacha y con reliquias del considerable de munición, 300 tiendas ejército de Tristán, que aún no de campaña y algunos efectos de habían llegado al cuartel general vestuario. (García Camba, 1846, 91). donde él estaba. De ese modo, por hacerlo de tal manera, se vio en la dolorosa previsión de mandar inutilizar, por falta de acémilas, cantidad de considerable de municiones, 300 tiendas de campaña y algunos efectos de vestuario que tenía de repuesto para reparar la desnudez de sus veteranos y la de los desgraciados 163 juramentados. (Cortegana, 2023, 15 - 16). Córdova y Urrutia, José María. 1844. A principios de este año se Por esta razón es que hubieron de Volumen III - Las 3 épocas del Perú́ , o, Compendio de aparecieron frente a las isla de San presentarse, al principio del año Manuscrito VIII - su historia Perú. Imprenta del Autor. Lorenzo del puerto del Callao, una de 1816, a la boca del citado Capítulo 5 https://t.ly/VtYXz fragata corsaria nombrada “Hercules”, puerto del Callao y por el frente que había salido de Montevideo y de la isla de San Lorenzo, primero después dejaron verse los demás la fragata Hércules y después los buques que por varios días estuvieron demás buques, que estuvieron por entrando a la rada y tiroteandose con varios días entrando a la rada y los castillos. (Córdova y Urrutia, tiroteándose con los castillos. 1844, 143). (Cortegana, 2023, 91). Para alistar un armamento que saliese Como el comercio de la capital de Volumen III - en persecución de dichos buques, se Lima se vio perjudicado con los Manuscrito VIII - reunió en 20 de enero una junta de apresamientos hechos por Brown, Capítulo 5 comercio y acordaron armar seis el virrey Abascal trató de alistar buques exhibiendo el consulado 300 un armamento que saliese en mil pesos para el efecto, y el 13 de persecución de dichos buques, a febrero dio a la vela, al mando del cuyo efecto se reunió el 20 de capitán D. Isidro Canseyro. (Córdova enero una junta de dicho comercio y Urrutia, 1844, 143). y se resolvió que se armasen seis 164 buques, por lo que el Consulado exhibió 300 000 pesos para sus aprestos y el 13 de febrero dio la vela el armamento, al mando del capitán en jefe don Isidro Couseyro, para las costas de Chile. (Cortegana, 2023, 92). Torrente, Mariano, Historia de la El ataque de frente no podia ofrecer Arrojándose, pues, así a los Volumen IV - Revolución hispano-americana (1829- esperanza alguna de la victoria, los patriotas los españoles, como los Manuscrito XI - 1830). Madrid: (s. l.). soldados de Lopez se arrojaron al soldados más guerreros del Capítulo 5 https://shorturl.at/jkqBQ enemigo como los mas aguerrridos mundo, se empeñó del mundo; pero al llegar al término obstinadamente el combate. Pero, de aquella empinada cuesta se al llegar al término de aquella hallaban ya sin aliento, i los enemigos empinada cuesta, se hallaban ya pudieron con muy poco trabajo sin aliento, y los independientes rechazarlos poniéndose 500 hombre pudieron con serenidad fuera de combate, aunque perdieron imperturbable rechazarlos, ellos mismos unos 400 entre muertos poniéndoles 500 hombres fuera de y heridos, que sucumbieron al combate, aunque perdiendo ellos extraordinario arrojo de aquellas mismos unos 400, entre muertos y valientes tropas a pesar de su falta de heridos, que sucumbieron al extraordinario // [f. 361] arrojo de 165 posición. (Torrente, 1829 – 1830, aquellas buenas tropas, a pesar de 339). su falsa posición de atacar repechando la subida. (Cortegana, 2023, 53). Siendo los realista dueños de la Los realistas eran dueños de la Volumen IV - fortuna del Panecillo que domina la fortaleza del Panecillo, que Manuscrito XI - ciudad y la misma altura de dominaba la ciudad y la misma Capítulo 5 Pichincha, no se convive como se altura de Pichincha; por lo mismo, cometió la imprudencia de atacar de estos españoles no alcanzaron a frente esta posición cuando por la concebir cómo es que se cometió espalda podía contarse con mayores la imprudencia de atacar de frente ventajas. Tal vez se apresuraron a dar esta posición, cuando por la este paso Aymerich y Lopez en la espalda podía contarse con confianza de que no habiendo llegado mayores ventajas a la suerte de todavía sino una pequeña parte de las sus armas. Se cree, no sin fuerzas rebeldes podrían apoderarse fundamento, que Aymerich y de dicho punto sin embargo de lo López se apresuraron a dar este desfavorable del terreno. (Torrente, paso, confiados en que todavía no 1829 – 1830, 339). habían llegado, de los independientes, sino una pequeña parte de sus fuerzas, y que por lo tanto podrían fácilmente 166 apoderarse de dicho punto, pese a lo desfavorable del terreno y de la propia aventura a que se habían lanzado. (Cortegana, 2023, 53). Completamente desanimados los Por ella, cayeron en poder Volumen IV - realistas de Quito con la retirada de la de estos el fuerte del Panecillo Manuscrito XI - caballería, y estrechados al mismo que se hallaba bien defendido y Capítulo 5 tiempo para que rindieran las armas, con bastantes provisiones, 2000 ajustaron una honrosa capitulación, prisioneros de tropa, 160 oficiales, por la que cayeron en poder de los 14 piezas de artillería, 2100 insurgentes el fuerte del Panecillo que fusiles y una porción considerable se hallaba bien defendido y con de fornituras, cornetas, pertrechos, bastante provisiones, 1100 prisioneros banderas, vestuarios, cajas de de tropa, 160 oficiales, 14 piezas de guerra y cuanto de útil poseía el artillería, 1700 fusiles y porción ejército español para la guerra y considerable de fornituras, cornetas, su sostenimiento en el poder. El banderas, cajas de guerra y cuanto día 25 de mayo fue en el que se poseía el ejército español. Fue, pues, entregó la plaza de Quito, por la el día 25 de mayo el en que se sepultó indicada capitulación, a los al dominio del Rey sobre el reino de patriotas vencedores, y fue Quito, y precisamente a los 280 años también en el que se sepultó para cabales en que el pabellón de Castilla siempre el dominio del rey de 167 fue tremolado en el por primera vez. España sobre este reino; es decir, (Torrente, 1829 – 1830, 339). a los 280 años justos en que el pabellón de Castilla fue tremolado en él por primera vez cuando sucedió su conquista por Sebastián Belalcázar. (Cortegana, 2023, 53). Miller, John. 1829. Memorias del Poco después de puesto el sol, Poco después de puesto el Volumen IV - general Guillermo Miller: al servicio de salieron los patriotas aquella misma sol, salieron los patriotas de Manuscrito XI - la República del Perú. Madrid: Librería tarde y llegaron a Camaná al Quilca aquella misma tarde y Capítulo 12 de Victoriano Suárez. https://t.ly/6sCof amanecer del 27; donde fueron bien llegaron a Camaná al amanecer recibidos por los habitantes, los cuales del 27, donde fueron bien dijeron que el subdelegado teniente recibidos por los habitantes, los coronel Piñera había huido hacía tres cuales dijeron que el subdelegado horas con ochenta hombres, teniente coronel Peñera había atravesando el río que corre a una huido hacía tres horas con 80 milla al norte de la villa y que había hombres, atravesando el río que destruido las balsas para impedir que corre a una milla al norte de la le persiguiesen. Las isletas o bancos villa, y que había destruido las que separan los varios brazos de este balsas para impedir que lo río están cubiertos de arbustos, y persiguiesen. Las isletas o bancos aunque se hallan vados, excepto en la que separan los varios brazos de 168 estación en que las nieves de las este río están cubiertos de montañas se derriten, es difícil arbustos y, aunque se hallan encontrarlos, puesto que rara vez lleva vados, excepto en la estación en el río dos días seguidos la misma que las nieves de las montañas se cantidad de agua. Y que la costumbre derriten, es difícil encontrarlos, de atravesarlo en balsas hace que puesto que rara vez lleva el río consideren de poca importancia los dos días seguidos la misma vados. Habiendo ofrecido el coronel cantidad de agua, y que la Miller una recompensa al que costumbre de atravesarlo en descubriese un vado, algunos paisanos balsas hace que consideren de salieron inmediatamente en busca de poca importancia los vados. él, y para estimularlos más, les Habiendo ofrecido una prometió que les volvería el ganado recompensa al que descubriese un que les habían quitado los realistas si vado, algunos paisanos salieron alcanzaba los fugitivos. A las diez de inmediatamente en busca de él; y, la mañana, volvió un paisano con la para estimularlos más, les prometí agradable noticia de que había que les devolvería el ganado que encontrado uno, y en el acto salieron les habían quitado los realistas, a treinta soldados y otros tantos quienes hallaron durmiendo en el paisanos, todos bien montados, en campo, a ocho leguas de Camaná, persecución de los realistas, a quienes sobre el camino de Majes. hallaron durmiendo en el campo a Veinticinco soldados y el ocho leguas de Camaná, sobre el subdelegado fueron hechos camino de Majes. Veinticinco prisioneros y el resto se dispersó, 169 soldados y el subdelegado fueron quitándoles 70 bueyes, algunos hechos prisioneros y el resto se caballos, mulas y armas. dispersó, quitándoles setenta bueyes, (Cortegana, 2023, 204 - 205). algunos caballos, mulas y armas. (Miller, 1829, 214). Miller volvió a Camaná el Volví para Camaná el Volumen IV - domingo por la mañana, y antes de ir domingo por la mañana y, antes Manuscrito XI - al alojamiento que le tenían de ir al alojamiento que se me Capítulo 12 preparado, fue a oír misa. Los había preparado, fui a oír misa. habitantes, desde su primera llegada, Los habitantes, desde mi primera deseaban saber cuál era su religión, y llegada, deseaban saber cuál era este paso no solo satisfizo su mi religión, y este paso no solo curiosidad, sino que le consideraron satisfizo sus curiosida-// [f. desde aquel momento “como buen 794]des, sino que me cristiano” y cuyo importante consideraron desde aquel descubrimiento se esparció momento como buen cristiano, y rápidamente por todo el país. (Miller, ese importante descubrimiento se 1829, 215). esparció rápidamente por todo el país. (Cortegana, 2023, 205). Camaná está situado en una pradera que forma un semicírculo de Camaná está situado en una pradera que forma un semicírculo Volumen IV Manuscrito XI 170 cerca de dos leguas de ancho de norte de cerca de dos leguas de ancho a sur, y de casi la mitad de extensión de norte a sur, y de casi la mitad en la parte más larga de la costa, de extensión en la parte más larga rodeada por lomas de arena.46 La de la costa, rodeada de lomas de villa está situada a media legua del arena. Estas producen pasto para mar. En la barra a la desembocadura el ganado por la humedad que les del río hay siempre una horrible suministran las garúas o grandes resaca, y no hay ningún sitio donde nieblas que reinan la mayor parte poderse embarcar más inmediato que del año. La villa está situada a la caleta de Quilca. Camaná es un media legua del mar. En la barra a ejemplo marcado de lo que puede la desembocadura del río hay alcanzarse por la aplicación de siempre una horrible resaca, y no capitales en las manos de un hay ningún sitio donde poderse individuo de talento y perseverancia. embarcar más inmediato que la Cincuenta y seis años antes se caleta de Quilca. Camaná es un componía únicamente de media ejemplo marcado de lo que puede docena de chozas y unos treinta alcanzarse por aplicación de habitantes, que ganaban su sustento capitales, en las manos de un sirviendo de barqueros pasando los individuo de talento y viajeros y efectos en balsas, de un perseverancia. Cincuenta y seis lado al otro del río. Un caballero años antes se componía español llamado Flores, que había únicamente de media docena de vivido de un modo extravagante, chozas y unos treinta habitantes, consagró veinte mil duros que le que ganaban su sustento sirviendo Capítulo 12 171 quedaban para abrir grandes acequias de barqueros pasando a los y extraer del río una cantidad de agua viajeros y efectos en balsas de un suficiente para fertilizar un terreno lado al otro del río. Un caballero que en el día mantiene una población español llamado Flores, que había de cinco mil almas, y que puede ser vivido de un modo extravagante, capaz de mantener diez veces este consagró veinte mil duros que le número. Cualquiera que construía una quedaban para abrir grandes casa recibía por solo aquel acto, y sin acequias y extraer del río una cargas o condición alguna, una cantidad de agua suficiente para porción proporcionada de tierra. fertilizar un terreno que en el día (Miller, 1829, 215). mantiene una población de cinco mil almas, y que puede ser capaz de mantener diez veces este número. Cualquiera que construía una casa recibía por solo aquel acto, y sin cargas o condición alguna, una porción proporcionada de tierra. (Cortegana, 2023, 205 - 206). Del Río, Manuel. Lima justificada en el La heroica Ciudad de los Libres, la La heroica Ciudad de los Libres, Volumen IV - suceso del 25 de julio 1822. ilustrada Lima, había sido la que, la ilustrada Lima, había sido la Manuscrito XI - https://shorturl.at/cDFYZ desde el principio de la revolución de que, desde el principio de la Capítulo 7 172 América, cooperó eficazmente de un revolución de América, cooperó modo indirecto, por su opinión, a que eficazmente de un modo sacudiesen el yugo de la tiranía indirecto, por su opinión, a que muchos pueblos de su continente. sacudiesen el yugo de la tiranía Pero, por otra parte, los virreyes muchos pueblos de su continente. hacían uso de sus inagotables recursos Pero, por otra parte, los virreyes y, con ellos, la guerra a la hacían uso de sus inagotables independencia. (Del Río, 1822, 3 – 4) recursos y, con ellos, la guerra a la independencia. (Cortegana, 2023, 110). Para poder dar el verdadero valor al Para poder dar el verdadero valor Volumen IV - patriotismo de Lima, es necesario al patriotismo de Lima, es Manuscrito XI - tener conocimiento del número de las necesario tener conocimiento del Capítulo 7 tropas que lo ahogaban, del de los número de las tropas que lo españoles que la habitaban y, ahogaban, del de los españoles últimamente, de sus relaciones. No que la habitaban y, últimamente, obstante tantos y al parecer de sus relaciones. No obstante insuperables obstáculos, Lima tantos y al parecer insuperables siempre se conservó muy celosa de obstáculos, Lima siempre se sus derechos y su dignidad. Apenas se conservó muy celosa de sus le llamó por España a tener un derechos y su dignidad. Apenas se representante en la junta central le llamó por España a tener un 173 instalada en Aranjuez el año de 1808, representante en la junta central sus esforzados hijos representaron instalada en Aranjuez el año de notablemente lo que en aquella época 1808, sus esforzados hijos les convenía. Tembló, pues, el representaron notablemente lo que despotismo, y Lima se colocó desde en aquella época les convenía. entonces en el lugar al que la Tembló, pues, el despotismo, y naturaleza la llamaba. (Del Río, 1822, Lima se colocó desde entonces en 4). el lugar al que la naturaleza la llamaba. (Cortegana, 2023, 110). Si un cúmulo de circunstancias le Si un cúmulo de circunstancias le Volumen IV - hicieron parecer después, en el teatro hicieron parecer después, en el Manuscrito XI - de la revolución, con menos energía, teatro de la revolución, con menos Capítulo 7 fue no por pusilanimidad, sino por un energía, fue no por pusilanimidad, efecto de prudencia y de política. sino por un efecto de prudencia y Creían, y muy sabiamente, los de política. Creían, y muy peruanos que el mejor modo de sabiamente, los peruanos que el afianzar su independencia sería mejor modo de afianzar su cuando el amor a la libertad no independencia sería cuando el estuviese solamente generalizado, amor a la libertad no estuviese sino que también fuese la opinión más solamente generalizado, sino que ilustrada. Para esto se establecieron también fuese la opinión más reuniones patrióticas y se escribían en ilustrada. Para esto se 174 secreto interesantes papeles que establecieron reuniones patrióticas circulaban con rapidez y propagaban y se escribían en secreto ideas saludables. (Del Río, 1822, 4). interesantes papeles que circulaban con rapidez y propagaban ideas saludables. (Cortegana, 2023, 110 - 111). García Camba, Andrés. 1846. Memorias Así, estas tropas de conocida calidad, Estas tropas de conocida calidad, Volumen IV - para la historia de las armas españolas descansadas, bien armadas, vestidas, descansadas, bien armadas, Manuscrito XI - en el Perú. Madrid: Sociedad instruidas, disciplinadas, engreídas y vestidas, instruidas, disciplinadas, Capítulo 8 Tipográfica de Hortelano y Compañía. bajo la más severa moralidad de orden engreidas con tres años de https://t.ly/smoDl y subordinación, en tres años de triunfos, acostumbradas á la recientes triunfos, estaban movilidad y á la rigidez de la acostumbradas a la movilidad más temperatura, cuando esta sola rápida y a la rigidez de los habia de producir en gran parte de temperamentos de la cordillera de los las enemigas notable sensacion, Andes y de los caldeados arenales de no habrá militar alguno que nos la costa, así como a los templados que contradiga si creemos que bien brindan los variados valles de la podian habérselas sin desventaja sierra. Por ello, cuando esta sola con los cinco ó seis mil divergencia había de producir en gran colombianos, que formaban el parte de las tropas enemigas notable nervio principal del ejército sensación y atraso, por ser ellos independiente, pues que las 175 naturales de los temperamentos restantes tropas 6 eran colecticias cálidos del norte, no habrá militar y visoñas ó habian sufrido ya alguno que contradiga si se cree que repetidas derrotas. (Cortegana, bien pudieron habérselas como se las 2023, 197). hubieron con excesiva ventaja contra los cuatro mil setecientos treinta y un colombianos que auxiliaban a cuatro mil doscientos setenta y cinco peruanos, inclusive los guerrilleros que formaban el ejército nacional y ochenta y cinco granaderos de los Andes, también auxiliares de los expresados peruanos, y restos fieles de aquellos que se habían pasado a los españoles, en el mes de febrero del mismo año. (García Camba, 1846, 28). García Camba, Andrés. 1846. Memorias Peruanos, la campaña que debe Bolivar mismo, despues de la Volumen V - para la historia de las armas españolas completar vuestra libertad ha señalada ventaja que obtuvo en Manuscrito XII - en el Perú. Madrid: Sociedad empezado bajo los auspicios más Junin sobre el ejército real del Capítulo 12 Tipográfica de Hortelano y Compañía. favorables. El ejército del general Norte decia á los peruanos en la https://t.ly/smoDl Canterac ha recibido en Junín un proclama que les dirigió con fecha 176 golpe mortal, habiendo perdido por 15 de agosto desde Huancayo: « consecuencia de este suceso un tercio Dos gran- »des enemigos acosan á de su fuerza y toda su moral. Los los españoles del Perú , el ejército españoles huyen despavoridos, unido y el »ejército del bravo abandonando las más fértiles Olañeta, que desesperado de la provincias; mientras el general tiranía española ha »sacudido el Olañeta ocupa el alto Perú con un yugo y combate con el mayor ejército verdaderamente patriota y denuedo á los enemigos de protector de la libertad. Peruanos, dos »América y á los propios suyos. grandes enemigos acosan a los El general Olañeta y sus ilustres españoles del Perú: el Ejército Unido >compañeros son dignos de la y el ejército del bravo Olañeta, que, gratitud americana y yo los desesperado por la tiranía española, considero »como eminentemente ha sacudido el yugo y combate con el beneméritos, acreedores á las mayor denuedo a los enemigos de mayores recom- » pensas . Asi el América y a los propios suyos. El Perú y la América toda deben general Olañeta y sus ilustres reconocer en el gene- »ral Olañeta compañeros son dignos de la gratitud á uno de sus libertadores. » americana, y yo los considero Finalmente las tropas de este eminentemente beneméritos general , desde que se sustrajo de acreedores // [f. 185] a las mayores la obediencia que debia al virey recompensas. Así, el Perú y la en fines de 1823 hasta que , ó bien América toda deben reconocer en el arrepentido de su conducta ó general Olañeta a uno de sus reconociendo la red en que habia 177 libertadores. Peruanos, bien pronto caido quiso en vano librarse de visitaremos la cuna del imperio ella y murió á manos de los peruano y el templo del sol. El Cusco mismosque le habian sostenido, tendrá, en el primer día de su libertad, no fueron molestadas por los más placer y más gloria que bajo el independientes, que al propio dorado reino de sus incas. Cuartel tiempo empleaban todo género de general libertador, en Huancayo, a 15 esfuerzos por hostilizar á las que de agosto de 1824. (García Camba, dependian de las autoridades 1846, 40 - 41). legítimas. (Cortegana, 2023, 189). García Camba, Andrés. 1846. Memorias Como a las diez o poco más de la Como á las diez ó poco mas de la Volumen V - para la historia de las armas españolas mañana, el ejército del virrey rompió mañana el ejército del virey Manuscrito XII - en el Perú. Madrid: Sociedad su movimiento con contento y rompió su movimiento con Capítulo 14 Tipográfica de Hortelano y Compañía. esperanza, que así suelen ser los contento y esperanza, que asi https://t.ly/smoDl propósitos del hombre. El general suelen ser los propósitos del Villalobos bajó con el primer batallón hombre. El general Villalobos del primer regimiento hasta colocarlo bajó con el primer batallon del en el punto señalado, donde debía Primer regimiento hasta colocarlo esperar a que todas las tropas en el punto señalado , donde debia descendieran al llano del cerro y a que esperar á que todas las tropas las siete piezas de artillería, descendieran á la indicada destinadas al ala izquierda, fuesen planicie y que las siete piezas de descargadas de las mulas, montadas y artillería , destinadas al ala 178 armadas, para secundar el ataque izquierda, fuesen descargadas de cuando la derecha se hubiese las mulas, montadas y armadas decididamente empeñado. El para secundar el ataque cuando la escuadrón San Carlos, que mandaba derecha se hubiese decididamente don Manuel de la Canal, recibió orden empeñado. El escuadron de San de seguir el primer movimiento y de Carlos , que mandaba D. Manuel acelerar el desfile, para poder sostener de la Canal, recibió órden de las guerrillas del centro a la izquierda, seguir el primer movimiento, y de encargo que cumplió a costa de la acelerar el desfile , para poder mayor parte de sus individuos. Poco sostener las guerrillas del centro á después de haber alcanzado la la izquierda , encargo que cumplió infantería realista sus designados á costa de la mayor parte de sus puestos de preparación, rompió el individuos . Poco despues de general Valdés el ataque desalojando haber alcanzado la infantería el batallón del centro, que mandaba realista sus designados puestos de don Felipe Rivero, y poniendo en fuga preparacion, rompió el general las compañías enemigas que Valdés el ataque desalojando el ocupaban la casa que promediaba el batallon del Centro , que mandaba campo por aquella parte. (García D. Felipe Ribero , y poniendo en Camba, 1846, 118 - 119). fuga las compañías enemigas que ocupaban la casa que promediaba el campo por aquella parte. (Cortegana, 2023, 234 - 235). 179 García Camba, Andrés. 1846. Memorias Tamaña resolución, en los momentos Tamaña resolucion en los Volumen V - para la historia de las armas españolas en que la superioridad de nuestras momentos en que la superioridad Manuscrito XII - en el Perú. Madrid: Sociedad fuerzas navales podía prestar gran de nuestras fuerzas navales podia Capítulo 14 Tipográfica de Hortelano y Compañía. protección a nuestros intereses y prestar grande proteccion á https://t.ly/smoDl familias de españoles desgraciados, muchos intereses y familias de parecía inconcebible, cualesquiera españoles desgraciados parecia que pudieran ser las instrucciones del inconcebible , cualesquiera que gobierno de Su Majestad. Los jefes pudieran ser las instrucciones del del ejército vencidos en Ayacucho no gobierno de S. M. Los jefes del se habían olvidado, en medio de su ejército vencidos en Ayacucho no triste suerte, de estipular lo se habian olvidado , en medio de conveniente para asegurar la su triste suerte , de estipular lo salvación de aquella escuadra, que tan conveniente para asegurar la indolentemente se apresuraba a salvacion de aquella escuadra. abandonar. Pero, como, entre los Entre los sugetos que se hallaban sujetos que se hallaban en la caleta de en la caleta de Quilca era uno el Quilca, estaba el rico comerciante rico comerciante español D. español don Lucas García de la Lucas Garcia de la Cotera, por Cotera, 66 por su disposición se cuya disposicion se trasmitió por trasmitió por extraordinario a La extraordinario á La Serna el Serna el acuerdo definitivo del capitán acuerdo definitivo del capitan de de navío don Roque Guruceta, quien navío D. Roque Guruceta , quien para economizar raciones había para cconomizar raciones habia 180 resuelto desembarcar la tropa del resuelto tambien desembarcar la batallón Arequipa, que había sacado tropa del batallon de Arequipa del Callao y tenía a bordo del navío que habia sacado del Callao y Asia. El virrey recibió la referida tenia á bordo del navio Asia . El noticia al descender a la costa entre virey recibió la referida noticia al Ocoña y Camaná, y ofició descender á la costa entre Ocoña y inmediatamente a Guruceta para que Camaná y ofició inmediatamente suspendiera su partida al menos hasta á Guruceta para que suspendiera su inmediata llegada a Quilca, y así su partida al menos hasta su ofreció cumplirlo, y lo cumplió en inmediata llegada á Quilca, y así efecto, pero esperando a la vela, ofreció cumplirlo , y lo cumplió después de haber echado en tierra a la en efecto , pero esperando á la expresada tropa del batallón vela , despues de haber echado en Arequipa. El general Tristán había tierra la espresada tropa del igualmente mandado licenciar la hatallon de Arequipa. El general mayor parte de la poca tropa que Tristan habia igualmente había en dicha capital para facilitar mandado licenciar la mayor parte más, sin duda, el término de la de la poca tropa que habia en avenencia iniciada por él con los dicha capital para facilitar mas sin independientes. (García Camba, 1846, duda el término de la avenencia 229 - 230). iniciada por él con los independientes . De este modo finalizó el presente año de 1824 sin quedar á los afortunados 181 enemigos mas obstáculos que vencer en todo el Perú que los que ofrecian la dudosa conducta de Olañeta y la noble resistencia de la plaza del Callao , contra la cual comenzaban todos los aprestos de un sitio largo y mortífero. (Cortegana, 2023, 272 - 273). 182