Después que los miniboogies llegaran a casa y la revolucionaran por completo, nuestra cabecita volvió a ponerse en marcha y pensamos en darle la vuelta a la tortilla, es decir, crear boogies más grandes... ¡¡¡los maxiboogies!!!.
Este naranjita, que por cierto, es el más grande de todos, forma parte de un burlete para la puerta de entrada de mi casa. Así, además de evitar que se cuele el frío por las rendijas, alegra un montón el recibidor y te despide cuando sales de casa...
A mi amiga Dania le gustó tanto, que le hice uno para su casita...