Trabaja duro que algún día te lo recompensarán

4 comentarios:

Anónimo dijo...

La moraleja me suena y eso que yo no llegué a instalar mi propia empresa, pero al final de mi vida laboral ya no sabía hacer casi nada.
Saludos

Resentido dijo...

Yo fui una hormiga productiva y feliz, ahora soy una hormiga cabreada y ahora no me veo montando mi propia empresa; pero nunca se puede decir " de esta agua no beberé"

Saludos

Franziska dijo...

Ay, qué curioso. Todo esto me suena a conocido, algo como muy familiar. No lo digo por el tema. Es que recuerda a una persona que creo que, a estas alturas, conozco bastante bien y que ya montó otro blog sobre un pesimista.

No quiero afirmar nada sólo son intuiciones.

Te agradezco el comentario en un espacio muy frío -apenas han entrado comentarios- y, además, tengo que decirte que en ese blog no recibo avisos de las entradas. Así es que he contestado de verdadera chiripa.

Bienvenido y el pesimismo que tú practicas es a la vez agudo y divertido.

Resentido dijo...

Muchas Gracias Franziska