Hola a todos voy a ir publicando el excelente trabajo que me ha pasado Carlos con el planning del viaje.
Aquí van los dos primeros días.
14/08/2014
04.00
Reunión de los viajeros delante de el mostrador de Turkish Airlines (en la T1) a las 04.00 en punto.
06.00
Salida del vuelo hacia Estambul.
10.25
Llegada a Estambul. Desde ésta hora hasta las hora de salida del vuelo hacia Tokio hacer cada uno lo que les salga de las pelot.... o del choc....
17.10. Hora de Estambul.
Salida de Estambul.
15/08/2014 VIERNES
10.25. Hora de Tokio.
Llegada del
avión a Narita 10.25
Narita airport terminal 1 –
Hamamatsucho
Salida a las
11.18, Keisei Skyliner 10 (40 min) / Llegada Nippori 11.58 y salida 12.05 JR
Yamanote Line (Outer loop) / Llegada Hamamatsucho 12.22. Tiempo total 64 min,
distancia 70.9 km.
12.22
Haremos
turnos de vigilància de maletas/comida y visita, porque nos cobran 7 euros por maletas para
dejarlas en el hotel.
- Salida hacia el Templo Zojoji, visita y comida.
- Visita por los alrededores de la
Torre de Tokio
A apenas 700
metros de Roppongi Hills, dirección sudeste, se erige la monstruosa Torre de
Tokio, situada todavía en el distrito de Minato, entre Roppongi y los
jardines Hamarikyu, ya en la bahía. Esta majestuosa
estructura de metal se ha convertido en uno de los más famosos iconos de Tokio
y es una pieza distintiva de la arquitectura de la ciudad. Sobra decir que su
diseño se basa en la Torre Eiffel, sin embargo es un pelín más alta que esta,
ya que desde la base la torre alcanza los 333 metros de altura, 9 metros más
que su homónima francesa, por lo que está considerada como la torre
autosoportada de hierro más alto del mundo.
Durante la década de 1950, en pleno auge económico de posguerra, Japón estaba
buscando un monumento que simbolizara su ascenso como potencia mundial y no le
fue difícil encontrar en occidente su inspiración, así, el Gobierno de Tokio
decidió erigir su propia Torre Eiffel. Su construcción fue completada por la
Corporación Takenaka en 1958 con un impresionante coste total de 2.800 millones
de yenes y en el momento de su finalización fue la estructura más alta de la
ciudad, aunque hoy en día ha sido ampliamente superada por varios de los nuevos
edificios de Shinjuku e Ikebukuro.
Su estructura sólo pesa alrededor de 4.000 toneladas, lo que es extremadamente
ligero en comparación con las 10.100 toneladas que alcanza la torre Eiffel, y
está pintada de blanco y naranja de acuerdo a las normativas de seguridad de la
aviación.
Desde la caída del sol hasta las 23:00 su estructura se ilumina en color
naranja brillante, aunque ocasionalmente cambia de color para celebrar eventos
especiales, como el estreno en Japón de The Matrix, por ejemplo, cuando la
torre fue espectacularmente iluminada con luces de neón verde.
A pesar de que
principalmente funciona como antena de radio y televisión, lo más interesante
para sus visitantes es la posibilidad de acceder a su estructura y disfrutar de
todo lo que tiene para ofrecer. Lo más llamativo a simple vista son desde luego
sus dos observatorios, el primero situado a 150 metros del suelo ofrece la
posibilidad de disfrutar de una panorámica de 360 grados, además de hacer
compras en sus inevitables tiendas o beber algo en su cafetería. Por otra parte,
el segundo observatorio se alza a 250 metros de altura y ofrece inigualables
vistas del Monte Fuji y el Monte Tsukuba si la meteorología lo permite.
En la parte más baja encontramos una estructura de cuatro pisos de altura
denominada Foot Town, que alberga gran variedad de actividades entre las
que se destacan algunas galerías, restaurante, el Tokyo Tower Wax Museum, la
Trick Art Gallery, la Mysterious Walking Zone y la Aquarium Gallery, hogar de
hasta 50.000 peces.
El acceso a la torre permanece abierto a diario entre las 9:00 y las 22:00 y el
coste para un adulto para ascender al primer observatorio es de 820 ¥ al que,
si queremos subir al segundo observatorio, deberemos añadir otros 600 ¥.
Al pie de la torre se extiende el parque Shiba y sobre sus terrenos, creando un
maravilloso contraste con la torre al fondo, se alzan
los edificios del templo Zojoji, principal institución de la rama
budista del Jodo (Tierra Pura).
Su historia
arranca en el año 1393 cuando fue fundado como seminario en Japón para la
secta. Originalmente el enorme complejo contaba con hasta 48 templos y daba
cobijo a más de 3.000 sacerdotes y 150 escuelas, sin embargo en 1598 fue
trasladado a su actual emplazamiento por orden de Tokugawa Ieyasu y hoy en día,
tras los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial, a perdido todo su glorioso
pasado dado que solo ocupa una pequeña fracción de su superficie anterior, a lo
que hay que añadir que la mayoría de los edificios que lo forman datan de la
década de 1970. La única estructura que ha pervivido en el tiempo es el Sangedatsumon,
una enorme puerta de madera de 21 metros de altura que data de 1622.
Zojoji estaba estrechamente asociado a la familia Tokugawa, que gobernó Japón
durante el Período Edo, y por ello acoge los mausoleos de 6 de los 15 shogun
Tokugawa que gobernaron el Shogunato.
El templo esconde algunas otras cosas de
interés como Daibonsho, una campana gigante de 15 toneladas de peso
forjada en 1673 que suena seis veces al día o un cedro del Himalaya plantado
por el general Ulysses S. Grant, el 18 presidente de Estados Unidos, cuando
visitó el templo como invitado de la nación en 1879.
A las espaldas del templo nos topamos con cientos de pequeñas estatuas de Buda
vestidas con ropas infantiles. En principio es una estampa bastante divertida,
pero su significado es tan crudo que sobrecoge el corazón y es que cada una de
las estatuas allí presentes ha sido erigida para proteger el alma de un niño
muerto o no nacido en su camino hasta el paraíso.
15.30
- Checking hotel y distribución habitaciones. (Todos los pasaportes listos y aconsejamos dejarlos
todos en la caja fuerte del hotel a menos que tengamos que llevarlos encima
para identificación del rail pass).
16.30
- Salida caminando hacia Ginza. Pasear por Ginza y Teatro
Kabuki-za.
Ginza
Al otro lado de las pistas ferroviarias, a unas pocas manzanas al sur de la
estación central se extiende el acaudalado barrio de Ginza, famoso por
sus grandes almacenes, boutiques, galerías de arte, restaurantes, clubes
nocturnos y cafés.
Un metro cuadrado de tierra en el centro del distrito tiene un valor aproximado
de más de diez millones de yenes, lo que la convierte probablemente en la zona
más cara de Japón. Es el lugar donde podemos pagar hasta 10 € por una taza de
café y en el que prácticamente todas las marcas líder en moda y cosmética están
presentes.
El distrito
debe su nombre, que se puede traducir al castellano como "tierra de
plata", al hecho de que en 1612 se construyó una casa de moneda en la
zona, sin embargo la historia del Ginza que podemos visitar hoy en día se
remonta a 1872, cuando la mayoría de edificios fueron destruidos por un gran
incendio.
Tras el desastre, la reconstrucción de Ginza se asignó al arquitecto británico
Thomas Waters, quien abarrotó la zona de edificios de arquitectura occidental
en torno a una avenida comercial que unía el puente Shinbashi con el puente
Kyobashi.
La gran mayoría de estos edificios ha desaparecido con el tiempo para dejar
espacio a una nueva generación de construcciones puramente japonesas y
mastodónticos centros comerciales, sin embargo en el cruce entre Chuo dori y
Harumi doro aún sobrevive la tienda departamental Wako (12), un fino ejemplo arquitectónico occidental construido en 1932.
Ginza también concentra un importante
número de sedes corporativas como la de Sony, situada en el cruce de
Ginza, donde se pueden ver los últimos adelantos de la compañía o la de Toho
Pictures, empresa filmográfica que produjo las películas de Godzilla y
frente a cuya fachada se puede ver una pequeña estatua de su monstruoso
protagonista en bronce.
-
Andando hacia Tokyo Central. Oficina de información Manunochi (kimono).
Jardin Imperial, Templo Yasukini y Jardin Kuishikawa.
Chiyoda
A diferencia de las ciudades de la vieja Europa, en la megalópolis de Tokio se
distinguen claramente varios "centros" urbanos, sin embargo, si
tuviéramos que elegir uno de ellos como centro único de la ciudad, este se
localizaría en el barrio de Chiyoda, aunque no precisamente por ser el
más popular o comercial de Tokio, si no por albergar probablemente los dos
edificios de mayor importancia simbólica para la ciudad: La Estación Central
de Tokyo (1) y el Palacio Imperial Kokyo (2).
Ambos se
localizan en el distrito de Marunouchi, zona financiera y núcleo
político de la ciudad, donde encontramos una densa amalgama de grandes torres y
rascacielos cubiertos de cristal en cuyo interior se asientan las sedes de las
más importantes compañías financieras japonesas. De entre todos estos edificios
de construcción moderna destaca sobre todo el Tokyo International Forum,
un espectacular complejo utilizado como sede de conferencias y exposiciones que
fue construido en 1996 bajo el diseño del uruguayo Rafael Viñoly, quien lo
concibió con la forma de un barco surcando las "aguas" urbanas de
Tokio.
La Estación Central es la principal de la ciudad y la primera de todo
Japón en número de operaciones diarias. Desde las 20 pistas que alberga su
destacable estructura, diseñada y construida al estilo occidental por el
arquitecto japonés Tatsuno Kingo en 1914, parten la mayoría de los Shinkansen
con origen en Tokio y sirven a varias líneas de metro y de los ferrocarriles
japoneses.
La fachada principal, parte del edificio
original, se sitúa en la zona este del edificio y está construida mediante
ladrillo rojo, sin embargo el resto de la superestructura ha sido
cuidadosamente reconstruido tras los severos bombardeos sufridos durante la
Segunda Guerra Mundial.
Bajo la estación se extiende una inimaginable red laberíntica de interminables
pasillos donde se suceden pequeños comercios, cafeterías, restaurantes y demás
servicios y que completan una maravillosa ciudad subterránea conectada a los
edificios de oficinas y centros comerciales más importantes del área. Para
hacernos una idea de la extensión de esta ciudad, basta saber que la estación
central de Tokio esta interconectada con las estaciones de metro de Otemachi,
Nihonbashi, Kayabacho, Hibiya, Ginza Itchome, Yuracucho, Ginza e Higashiginza,
esta última situada a casi un kilómetro de la estación ferroviaria.
ZONA FREE.
Café SEC, Oficina de información Marunouchi.
Sitio para descansar un rato, tomar un té, ponerte un
kimono, consultar libros internet, etc, todo free.
Esta en un centro comercial frente a la estación, preguntar por la oficina y el
café está en el segundo piso.
Por otra parte
es un estupendo medio de moverse sin padecer los estragos de la lluvia de
Tokio, donde por alguna extraña razón, rara vez llueve de arriba a abajo, sino
que lo suele hacer de lado.
El otro edificio emblemático de la zona, el Palacio Imperial Kokyo (6) también fue dañado durante la Segunda Guerra Mundial, hasta tal punto que
su reconstrucción no se dio por terminada hasta 1968.
Se sitúa frente a la fachada principal de la estación, a unos 400 metros hacia
el oeste y su importancia radica en su función, ya que sirve como residencia
para la familia imperial japonesa desde la restauración Meiji, cuando la corte
se traslado de Kioto a Tokio. El actual palacio es producto del paulatino
desarrollo del antiguo Castillo de Edo, propiedad de los shogun
Tokugawa, que dominaron el país desde el año 1600 hasta el año 1867.
Los terrenos circundantes están rodeados
en todo su perímetro por imponentes muros de enormes piedras y fosos llenos de
agua donde actualmente nadan apaciblemente varios cisnes. En su interior una
enorme extensión ajardinada conocida como la Explanada Imperial mantiene
el palacio lejos del Tokio moderno, tras los muros de un segundo anillo
defensivo del antiguo castillo.
La mayor parte del complejo no puede ser visitado excepto el 23 de diciembre,
cumpleaños del Emperador y el 2 de enero, por el año nuevo. Sin embargo el
acceso a los jardines del este, Kokyo Higashi Gyoen (3), y las ruinas
de la torre del castillo y de las murallas de Edo están permanentemente
abiertas al público.
ZONA FREE.
Se puede pasear
gratuitamente por la sección Este del Jardín del Palacio Imperial todos
los sábados por la tarde,
inclusive con un guía en inglés reservando en ésta página: http://tokyofwt.wordpress.com/.
Préstamo gratuito de bicicletas Los domingos
por la mañana, en el mismo jardín, podemos conseguir una bicicleta y pasear por
una ruta de casi dos millas. Belleza natural alrededor así como impresionante
arquitectura.
Inmediatamente
al norte de los terrenos de palacio se extiende el Parque Mizugami, que
sirve de asiento para el Santuario Yasukuni, un templo sintoísta
construido en 1869 con el fin de salvaguardar las almas de aquellos que algún
día dieron su vida por Japón.
El santuario se construyó por orden del Emperador Meiji en recuerdo a los
caídos durante la Guerra Boshin contra los partidarios del antiguo gobierno del
shogunato Tokugawa. Una vez terminado, el nuevo mandatario lo visitó por
primera vez, e inspirado compuso un poema que traducido queda algo así:
"Les aseguro a todos aquellos que lucharon y murieron por su país que
vuestros nombres vivirán para siempre en este templo". Y como dichos
versos rezan, el templo alberga hoy en día el alma de algo más de 2.466.000 de
japoneses que hicieron un último sacrificio por su nación y que son
considerados divinidades conocidas por los sintoístas como kakis.
El complejo
tiene una superficie de 6,25 hectáreas y está precedido por un tranquilo paseo
rodeado de linternas en cuyo extremo exterior se erige el impresionante Daiichi
Torii, construido en metal y cuyas dimensiones alcanzan los 25 metros de
ancho por 34 de alto. En 1921, momento de su construcción, era el más alto de
Japón.
A continuación nos topamos con el segundo torii, el Daini Torii, erigido
en 1887 para reemplazar a uno anterior de madera que se encontraba bastante
deteriorado y considerado actualmente el mayor torii de bronce del país.
Inmediatamente después del Daini Torii se yergue el shinmon, la puerta
principal del templo, que alcanza los 6 metros de altura y está construida en
madera de ciprés hinoki. Cada una de sus
dos hojas presenta un bonito crisantemo encrestado de 1,5 metros de diámetro.
Finalmente el Chumon
Torii nos brinda la entrada definitiva al recinto sagrado donde se
extienden las estructuras religiosas propias de un templo jinja,
abundantemente rodeadas de árboles gingko y cerezos. Además del haiden,
el salón principal de adoración, destaca el honden, destinado a albergar
las almas de los kami y el Reijibo hoanden, donde se almacena un
registro simbólico donde aparecen los nombres de todos aquellos que
"duermen" en el templo.
Junto al templo se encuentra el museo de los caídos de la guerra, donde
entre otras cosas, se expone un caza zero japonés de la Segunda Guerra Mundial.
El carácter gubernamental del barrio lo encontramos en la zona situada al
suroeste del recinto del palacio conocida como Kasumigaseki y su
edificio más visible es el Kokkai-gijido (6), palacio donde se reúne la Dieta, el órgano máximo de poder del
estado de Japón de acuerdo a la Constitución japonesa.
El edificio
destaca por una torre central de 65 metros de altura de extraño aspecto y
estilo hibrido, difícilmente clasificable probablemente debido al hecho de que
cuando se construyó, en 1936, se mezclaron varios diseños presentados a
concurso público.
En torno al Kokkai-gijido se localizan una notable cantidad de edificios
administrativos. Al norte se sucede la Kokuritsu Kokkai Toshokan (7), Biblioteca Nacional de la Dieta, y tras sus sencillas dependencias
encontramos el edificio de Saiko-Saibansho (8), la Corte Suprema del Japón, cuya estructura destaca por un diseño masivo
y pesado, ideal para su propósito.
Por otra parte,
al sur del Kokkai-gijido (6) se extienden
varios edificios de un estilo solamente clasificable como "administrativo
asiático", destinados a albergar las sedes de los ministerios de
exteriores, asuntos internos, finanzas, ministerio de la tierra, economía,
medioambiente, agricultura, etc.
Rodeado de todas estas grises torres destaca el pintoresco edificio del
ministerio de justicia, Homu-sho (9), construido en
1895 siguiendo el estilo neobarroco de una mansión francesa y considerado
actualmente como un magistral ejemplo de la arquitectura de la era Meiji.
Al sur, el distrito gubernamental termina sobre los terrenos del Hibiya Park,
un estupendo parque de 161 metros cuadrados donde encontraremos, además de
jardines y lagos, un anfiteatro, la Biblioteca Hibiya y el magnífico edificio Shisei
Kaikan (10), una obra maestra del neogótico cuya maravillosa
arquitectura bien podría competir con el neogótico de los mejores rascacielos
de New York.
20.00
Punto de control: Puerta sur Templo Yasukini.
Cena de
camino al hotel.
Buenas noches mis valientes.