A todos nos gustaría tener una piel luminosa, suave, sin imperfecciones, sin brillos, en la que el maquillaje se deslizará sin problemas y los tratamientos de belleza penetrasen en su totalidad. Pues todo eso es posible si con cierta periocidad nos hacemos una limpieza facial. Y anualmente acudimos a un profesional de la estética.
La piel del rostro es muy delicada a diario está expuesta a la polución, el humo del tábaco, los residuos de un fast desmaquillaje, el stress...
La limpieza diaria será de dos veces al día, máximo tres. Ya que un abuso puede resecar la piel. Antes de irnos a dormir nos lavaremos la cara, no hablo de desmaquillarte, hablo de limpiar la piel para que pueda oxigenarse. Para ello aplicamos:
- El tónico para repasar y tonificar la piel.
- Según la edad o el tipo de piel nos pondremos el tratamiento de noche.
Y por la mañana nada más levantarnos si tienes la piel grasa repetimos la acción. El resto de tipos de piel os recomendamos que probéis a pasaros un disco humedecido con tónico. Lo dicho antes limpiar sí, resecar no.
Tres veces por semana para tipo graso o semanalmente para el resto de tipos, deberíamos exfoliarnos. Lo haremos después de la limpieza facial diaria.
Una vez al
mes o cada
dos meses nos haremos una
limpieza facial profunda.
Justo después de la
limpieza diaria, y de la
exfoliación semanal. Nos aplicamos una
mascarilla limpiadora ya sea casera o comprada. Por ejemplo para los tipos de piel
normal/mixta/grasa os recomiendo una de
arcilla blanca .
Limpia a fondo y
no hace falta que los de
normal/mixta la uséis siempre en
toda la cara. Y finalmente como
premio podrías aprovechar para poner una
mascarilla HIDRATANTE.
Una vez al año deberíamos acudir a un profesional de la estética sobre todo la gente con problemas de acné o de sequedad en la piel. (Sigo trabajando en la guía de compras que publicaré próximamente, incluiré un listado de centros en España).
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