PERLA SNEH
Mencionada por:
Pablo Makovsky
Menciona a:
Américo Cristófalo
Laura Estrin
Fogwill
Roberto Raschella
Hugo Savino
Nota Biográfica:
Nació en Villa Crespo en noviembre de 1952. Vive en Buenos Aires. Estudió en la Universidad Hebrea de Jerusalén, en Betzalel (Academia de Arte y Diseño de Jerusalén) y en la UBA. Autora, con J. C. Cosaka, de La Shoah en el siglo – Del lenguaje del exterminio al exterminio del discurso (Bs. As. IIª ed., 2000). Docente de posgrados en la UBA, la UNR y la UNTREF. Integra la revista Redes de la letra-Escritura del psicoanálisis. Es miembro de Ensayo y crítica del psicoanálisis. Publicó ciudad autónoma (Zama/Paradiso, Bs, As, 2004) y bíblicos (del Dock, Bs. As., 2006). Organizó y coordinó el encuentro Buenos Aires ídish (Biblioteca Nacional, 18- 21 de septiembre de 2006). Traduce a Itzik Manger y a Yaakov Glatshtein. Investiga la poesía ídish porteña.
Poemas:
arévalo y guatemala*
País del propio sonido, documento
en las orejas, runrún de los adoquines
que asoman por el asfalto, un aleluya
de trenes, una piedra de afilar, el himno
de los mosquitos, la loca del edificio
que canta por la ventana: tanto, tanto
te esperé, sílabas antiguas que duelen
en los dientes, sombra que silba bajito,
ecos de maldición. Entre los autos
retumba el hambre de los ladrones,
la rima de los poetas, la tos del que ya
no está, el crujir de la vereda que se queda
sin pisar, canciones de andar de noche. ¿Oís
el ruido, corazón? Vení, no hagamos nada
miserere*
Somos tártaros, papá, la gente como nosotros
no camina por la calle. Cabalga por los desiertos,
frecuenta la batalla, usa dagas de oro y diamantes
en la cara. La gente como nosotros no se halla
en las memorias; nos faltan celebraciones, ni qué
hablar, los modales. El ruido, papá, el-rui-do, que
hacemos al respirar: ruido a papel rasgado, a mano
que agarra el puñal, a vidrio en los remolinos,
a muerto en el fondo del mar. Con menos de eso
alcanza para hacernos echar. Mirá, papá, cómo
insisten las condenadas rimas. ¿Te acordás cuando
quise enterrarlas en la arena? Me saltaron a los ojos
y yo me puse a llorar. Y vos me dijiste méidele,
dejate de llorrriquear, que la cosa esss más difícil
de lo que vvos te pensssás. Todavía, también dijiste,
queda mucho porrr andar, arrastrabas algunas letras:
la ere, la ese, la ve, ¿o vos qué te crrreésss? ¿que
esto es assí nomásss? Pero no te contesté porque no
hablo lengua eslava, ni siquiera el castellano,
apenas, hasta ahí. ¿Te acordás cuando el tiempo
era tiempo y la gente nos saludaba? Buenos días,
ensayaban y después cerraban el puño. ¿Qué decís?
¿Qué daga? ¿Qué lumbre? ¿Qué pedernal? Qué se
yo, papá, será que la tarde nos pone bobos. Mejor,
caminemos un rato y después nos tomamos el subte,
vení, dame la mano, ya es tiempo, guarda el escalón.
* de ciudad autónoma, Zama/Paradiso, Bs. As., 2004:
י**
ciudad llena de juicios, muro
alto, torre y estandarte; aires
del almendro y bálsamos de rey,
nombre escrito en las paredes;
mesa tendida en la arena, templo
dos veces ruina, puerta para los
muchos, pregunta de las naciones;
lloras por la noche y contigo,
los planetas; arde, hermanitos,
arde, la nunca tan hermosa
** de bíblicos, del Dock, Bs. As., 2006
Pablo Makovsky
Menciona a:
Américo Cristófalo
Laura Estrin
Fogwill
Roberto Raschella
Hugo Savino
Nota Biográfica:
Nació en Villa Crespo en noviembre de 1952. Vive en Buenos Aires. Estudió en la Universidad Hebrea de Jerusalén, en Betzalel (Academia de Arte y Diseño de Jerusalén) y en la UBA. Autora, con J. C. Cosaka, de La Shoah en el siglo – Del lenguaje del exterminio al exterminio del discurso (Bs. As. IIª ed., 2000). Docente de posgrados en la UBA, la UNR y la UNTREF. Integra la revista Redes de la letra-Escritura del psicoanálisis. Es miembro de Ensayo y crítica del psicoanálisis. Publicó ciudad autónoma (Zama/Paradiso, Bs, As, 2004) y bíblicos (del Dock, Bs. As., 2006). Organizó y coordinó el encuentro Buenos Aires ídish (Biblioteca Nacional, 18- 21 de septiembre de 2006). Traduce a Itzik Manger y a Yaakov Glatshtein. Investiga la poesía ídish porteña.
Poemas:
arévalo y guatemala*
País del propio sonido, documento
en las orejas, runrún de los adoquines
que asoman por el asfalto, un aleluya
de trenes, una piedra de afilar, el himno
de los mosquitos, la loca del edificio
que canta por la ventana: tanto, tanto
te esperé, sílabas antiguas que duelen
en los dientes, sombra que silba bajito,
ecos de maldición. Entre los autos
retumba el hambre de los ladrones,
la rima de los poetas, la tos del que ya
no está, el crujir de la vereda que se queda
sin pisar, canciones de andar de noche. ¿Oís
el ruido, corazón? Vení, no hagamos nada
miserere*
Somos tártaros, papá, la gente como nosotros
no camina por la calle. Cabalga por los desiertos,
frecuenta la batalla, usa dagas de oro y diamantes
en la cara. La gente como nosotros no se halla
en las memorias; nos faltan celebraciones, ni qué
hablar, los modales. El ruido, papá, el-rui-do, que
hacemos al respirar: ruido a papel rasgado, a mano
que agarra el puñal, a vidrio en los remolinos,
a muerto en el fondo del mar. Con menos de eso
alcanza para hacernos echar. Mirá, papá, cómo
insisten las condenadas rimas. ¿Te acordás cuando
quise enterrarlas en la arena? Me saltaron a los ojos
y yo me puse a llorar. Y vos me dijiste méidele,
dejate de llorrriquear, que la cosa esss más difícil
de lo que vvos te pensssás. Todavía, también dijiste,
queda mucho porrr andar, arrastrabas algunas letras:
la ere, la ese, la ve, ¿o vos qué te crrreésss? ¿que
esto es assí nomásss? Pero no te contesté porque no
hablo lengua eslava, ni siquiera el castellano,
apenas, hasta ahí. ¿Te acordás cuando el tiempo
era tiempo y la gente nos saludaba? Buenos días,
ensayaban y después cerraban el puño. ¿Qué decís?
¿Qué daga? ¿Qué lumbre? ¿Qué pedernal? Qué se
yo, papá, será que la tarde nos pone bobos. Mejor,
caminemos un rato y después nos tomamos el subte,
vení, dame la mano, ya es tiempo, guarda el escalón.
* de ciudad autónoma, Zama/Paradiso, Bs. As., 2004:
י**
ciudad llena de juicios, muro
alto, torre y estandarte; aires
del almendro y bálsamos de rey,
nombre escrito en las paredes;
mesa tendida en la arena, templo
dos veces ruina, puerta para los
muchos, pregunta de las naciones;
lloras por la noche y contigo,
los planetas; arde, hermanitos,
arde, la nunca tan hermosa
** de bíblicos, del Dock, Bs. As., 2006
* * *
Muy buenos, muy.
no sé si habría que dejar un comentario. Uno acá se posa a leer y todo está dicho. Pero,en todo caso, agradecer esta caraduría, como ponen en el título, porque acerca muchísimo a todos estos buenos autores.
Sólo eso.
saludo.
recuerdo al quijote de villa crespo, que con gestos de malabia y cabreos de camargo , se invitaba de parte de la fundacion huesped a cuanta caceria pacifica se adivinaba en el parque centenario algo mas abajo de donde la calle antonio machado recuerdo.
chema rubio.v.
preciosos, hermosos tus poemas!!!
me gusta el tono que tienen (especialemente en el primero resuena algo tanguero).
gracias!!! (voy a buscarte en google)
saludos
Lili
Perla. me gusto Misserere. Una alusión al amor al padre, tan importante en esta época de des encuentros. Vi la pág. de festival de poesía en rosario.¿durante que años se hizo que no me enteré? ¿cuando se vuelve a realizar?.
Ah...La foto que entregaste en ese sitio...te muestra tan bonita como siempre.¿Haremos alguna presentación de trabajos de poesía en santa [email protected]
Un beso.
Néstor Sosa. Santa fe.
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