Introducción

Objetivo
Nueva Zelanda tiene el objetivo de contar con 250 000
coches eléctricos en sus carreteras dentro de cinco años. El
Gobierno neozelandés tiene el objetivo de eliminar las emisiones
netas de dióxido de carbono para 2050, lo que requerirá, entre
otras acciones, una amplia estrategia de electrificación de la
sociedad.
 Percepción del producto español

En cuanto a las empresas españolas presentes en Nueva

Zelanda, destaca Siemens Gamesa, por su intervención
en el parque eólico Waipipi. El proyecto, que comenzó su
construcción en octubre de 2019 y empezará a funcionar a
finales de 2020, incluye 31 turbinas eólicas de Siemens
Gamesa. Las turbinas de 4,3 MW y 130 m de diámetro
generarán unos 455 GWh al año, suficiente electricidad
como para cubrir las necesidades de 64.000 hogares. El
proyecto total del parque eólico costará 276 millones NZD,
unos 158 millones de euros. Además de la fabricación de
las turbinas, Siemens Gamesa será la encargada de su
instalación y mantenimiento. El parque eólico de Waipipi pertenece a Tilt
Renewables, con la que Siemens Gamesa
ya había trabajado en Australia, en el
parque eólico SnowTown.
Canales de distribución
Para poder desarrollar un proyecto greenfield, después de que los desarrolladores de parques eólicos
investiguen los posibles emplazamientos, se puede solicitar una autorización administrativa
(Resource Management Act Consent), que tendrá que ser aprobada por la autoridad local
correspondiente, tras un periodo de consulta pública.
A la hora de desarrollar un nuevo proyecto, los acuerdos de compra de energía (PPA, Power
Purchase Agreement) desempeñan un papel importante en los mercados maduros como América del
Norte y Europa. En Nueva Zelanda, los acuerdos de ventanilla o over-the-counter son muy frecuentes
para suavizar los impactos de la volatilidad en los precios al por mayor.
Aun así, los parques eólicos de más de 10 MW o que estén conectados a la red nacional están
obligados a ofertar dentro del mercado spot, aunque con algunas reglas especiales debido a su
carácter de generadores intermitentes, incluidas en el Apartado 13 del Código de Participación de la
Industria Eléctrica.

Spot: Modalidad de operaciones de divisas – El intercambio de monedas se da al contado. Por convención,

ocurre dos días hábiles por delante del que se llevo a cabo la transacción. Si no ocurre se ajusta su fecha
valor por roll-over (es el proceso de mantener una posición abierta más allá de su vencimiento.)
Gran parte de la demanda mundial de energías renovables ha sido impulsada con ayudas públicas,
incluidas las subastas o licitaciones, que han ejercido una presión a la baja sobre los precios. Siendo
Nueva Zelanda una excepción, ya que son principalmente las empresas las que buscan realizar los
proyectos sin ningún tipo de subvención estatal, aunque, con el cambio hacia una economía
renovable que sustituya a industrias tradicionales, algunos gobiernos regionales, como el de
Taranaki, están a la búsqueda de proyectos que les ayuden a dar este paso.

En cuanto a las líneas de transmisión, Transpower posee y opera la red de transporte eléctrico
nacional en régimen de monopolio. La Comisión de Comercio (COMCOM) regula las tarifas de pago
de las líneas por periodos de 5 años. La COMCOM ha aprobado incrementos nominales a los costes
de transmisión en los dos últimos periodos regulatorios.
Demanda
Puesto que a los consumidores les suele
ser indiferente la fuente de la que
proviene la energía que consumen, la
demanda de energía eólica está
condicionada por las tendencias de
consumo eléctrico del país.

El consumo eléctrico total en Nueva

Zelanda se ha mantenido estable en los
últimos años, compensándose el
incremento del número de consumidores,
debido al crecimiento de la población, con
las medidas que se han tomado para
reducir el consumo energético en
viviendas y negocios, y la concienciación
de la población de la necesidad de un
consumo responsable.
Los consumidores de energía eléctrica se dividen en 4 segmentos: mercados industriales,
mercados agrarios, mercados comerciales y viviendas. La cuota que representa cada uno de
los segmentos se puede apreciar en el siguiente gráfico.

La industria de metales básicos supone la mayor demanda eléctrica dentro del segmento de
mercados industriales. La principal empresa de este sector es la fundidora de aluminio Tiwai
Point, cuyo cierre en agosto de 2021, por falta de rentabilidad, supone un gran riesgo para los
operadores eléctricos, ya que consume el 13 % de la electricidad del país. Este hecho podría
originar un exceso significativo de oferta, que haría que cayesen los precios de la electricidad
y, con ellos, los ingresos de las empresas generadoras, si bien la limitada interconexión con el
resto del país de la central hidroeléctrica de Manapouri, que es la que suministra a Tiwai Point,
dificulta que esta posibilidad se sustancie en el corto plazo, especialmente en la Isla Norte.
DISTRIBUCIÓN DEL CONSUMO SEGÚN SEGMENTOS (en GWh)
Factores que determinan la demanda
La demanda de electricidad varía según las estaciones y está condicionada por las tendencias de consumo residencial, comercial e
industrial. Los factores externos que determinan la demanda se detallan a continuación:
- Crecimiento económico y riqueza. Cuanto mejor sea la situación económica de la unidad familiar o comercial, menor
preocupación tendrá por gastar en la factura eléctrica.
- Tamaño de la población. El crecimiento de la población supone el aumento del número de consumidores.
- Precio mayorista de la electricidad. A corto plazo, el precio retail de la electricidad es relativamente estable, pero las
tendencias del precio mayorista acaban reflejándose en el mismo, a pesar de su volatilidad.
- Estrategias de eficiencia energética. Todas aquellas mejoras en la eficiencia que permiten un menor consumo también afectan
a la demanda, disminuyéndola.
o Warmer Kiwi Homes es un programa gubernamental de 4 años de duración que ofrece subvenciones para cubrir dos tercios de
los costes de aislamientos de techos y suelos y que empezó en julio de 2019.
o Estándares de rendimiento energético mínimo (MEPS). Estos estándares, elaborados dentro del programa E3 de Nueva
Zelanda y Australia, requieren que sólo aquellos productos que cumplan unos requisitos mínimos de eficiencia energética podrán ser
vendidos en el país (este programa se incluye las etiquetas de calificación energética)
- 100% energía renovable para 2035. Este objetivo del Gobierno neozelandés supone una gran oportunidad para el sector de la
energía eólica, ya que las dos principales fuentes renovables del país, la hidráulica y la geotérmica, tienen pocas posibilidades de
desarrollar grandes proyectos.
- Electrificación acelerada. El ICCC propuso al Gobierno que se centrase en la electrificación de los medios de transporte y el
calor residual, lo que generaría una reducción neta de emisiones de 5,4 millones de toneladas métricas de CO2 equivalente en
2035. Como parte de este proceso, el Gobierno ha lanzado una serie de proyectos y financiación, como el Government’s Low
Emission’s Vehicles Contestable Fund de 45 millones NZD para el desarrollo de proyectos de vehículos eléctricos. Este
objetivo podría suponer nuevas oportunidades para el sector eléctrico, ya que haría que aumentara la demanda.
Oferta
Nueva Zelanda es un país con un mercado reducido, ya que su población es de 5 millones de habitantes, aunque con un notable
desarrollo económico. El PIB neozelandés nominal alcanzó en 2019 un total de 310.000 millones NZD, unos 182.000 millones de
euros, y su crecimiento en términos reales fue del 2,3 % respecto al año anterior.
El país se divide en dos grandes islas, Isla Norte e Isla Sur, cuya superficie total es equivalente a la mitad de España, si bien el
grueso de la población y de la actividad económica (más del 75 %) se concentran en la Isla Norte, especialmente en la región de
Auckland (37 %).
Esta distribución geográfica tiene mucho impacto en el sector eléctrico, pues la interconexión entre las dos islas es limitada (una
línea bipolar de 1.200 MW), y el potencial de generación eléctrica renovable es mucho mayor en la Isla Sur, mientras que el
crecimiento de la demanda se centra en la Isla Norte.
En 2020, debido a la crisis de la COVID-19, que ha contribuido a la caída de la actividad económica, el precio al por mayor de
la electricidad previsiblemente estará por debajo del nivel de años anteriores y, consecuentemente, se reducirán los ingresos
de los productores eléctricos.
Producción local

Nueva Zelanda cuenta con grandes recursos eólicos. La primera turbina eólica instalada en el país fue la de
Brooklyn, Wellington, en el año 1993, con una capacidad de 255 kW (fue reemplazada posteriormente). Desde
entonces, la producción de energía proveniente del viento ha ido en aumento en el país (en los últimos 15 años,
cuando se ha cuadruplicado casi la producción).
En 2015 experimentó el mayor pico de producción de su historia en el país, sufriendo un ligero descenso en favor de
la energía hidráulica, debido a los trabajos de renovación del parque eólico Te Āpiti.
En 2019, la energía eólica aportó el 5,2 % de la generación anual total de electricidad o, lo que es lo mismo, para
unos 300.000 hogares (un 16 % del total).
En el primer trimestre de 2020, la producción de energía eólica aumentó un 8,2 %6 respecto al mismo periodo del
año anterior, siendo este el mayor crecimiento dentro de las energías renovables. Por su parte, las energías no
renovables disminuyeron un 8,6 % en el mismo tiempo.
En cuanto a las plantas generadoras, en Nueva Zelanda operan 17 parques eólicos con una capacidad de 690 MW.
La construcción de otros dos parques eólicos concluirá a finales de este año y añadirán una capacidad de 355 MW,
hasta alcanzar los 1.045 MW en total.
hay aproximadamente 2.500 MW de
generación eólica adicionales aprobados
en Nueva Zelanda y se siguen explorando
nuevos sitios en todo el territorio que
sean apropiados para la construcción de
nuevos parques eólicos.
Competencia: Dentro del mercado eólico podemos distinguir dos tipos de competencia: externa e
interna.

La competencia externa estaría formada por las Las principales empresas dentro del sector de generación
formas alternativas a la eólica de generación de de energía eólica se describen a continuación.
energía. El 82,4 % de la producción eléctrica en
Nueva Zelanda en 2019 provenía de fuentes Genesis Energy. es el mayor comercializador minorista de
renovables, destacando la hidroeléctrica y la electricidad de Nueva Zelanda y cuenta con una cartera de
geotérmica, que son las principales fuentes de generación eléctrica muy diversificada. fue el primer parque
eólico comercial del país.
energía en el país.
Mercury. Mercury genera toda su energía a través de una cartera
100% de energías renovables, tanto en Australia como en Nueva
Zelanda, a través de fuentes hidráulicas y geotérmicas.
Meridian Energy. es el mayor generador de electricidad del país,
con el 100 % de la energía que produce proveniente de energías
renovables. Tiene 6 parques eólicos en Nueva Zelanda
Tilt Renewables. Formada tras la escisión de Trustpower a finales
de 2016, Cuenta con 2 parques eólicos en funcionamiento en el
país, y con tres más en desarrollo o bajo construcción.
Pioneer Energy. es una empresa energética 100 % neozelandesa
con una cartera de inversiones en energías renovables. Posee 3
parques eólicos en Nueva Zelanda: Flat Hill, Mt. Stuart,
Horseshoe Bend.
Acceso al Mercado
Aranceles:
Los productos relacionados con la industria eólica tienen los siguientes aranceles en Nueva Zelanda:
Barreras Legales.-
Los participantes en la industria están monitorizados por la Autoridad Eléctrica (Electricity Authority) y la Comisión de
Comercio (Commerce Commission).
La Autoridad Eléctrica monitoriza la generación, transporte, distribución y comercialización de electricidad en Nueva
Zelanda. La regulación es mayor entre los aspectos monopolísticos de la cadena de suministro, como el transporte y
la distribución. La Comisión de Comercio, por su parte, monitoriza los precios de transporte, lo que afecta la
estructura de costes de los actores de la industria.

Las leyes que afectan a la industria se detallan en los apartados siguientes:

+Electricity Industry Participation Code
El Código de Participación en la Industria Eléctrica 201021 contiene el conjunto de reglas que dirigen la industria,
incluidas las obligaciones y responsabilidades de los participantes de la industria. En el Código se regulan todos los
aspectos: generación, transporte, operación del sistema, seguridad del suministro, acuerdos de mercado, medición,
distribución y comercialización.
+Electricity Industry Act 2010
La Ley sobre la Industria Eléctrica 2010 provee un marco regulatorio a toda la industria eléctrica en Nueva Zelanda.
Esta norma creó la Autoridad Eléctrica (Electricity Authority) y establece quiénes son los participantes de la industria y
sus obligaciones:
-Registrarse como participante en la industria proveyendo a la Autoridad con información especificada en la sección
27(2) de la Ley, y
-Acatar el Código de Participación en la Industria.
+Commerce Act 1986
La parte 4 de la Ley de Comercio de 1986 contiene un régimen regulatorio especial para la actividad de
transporte de electricidad.
 +8.2.4. Resource Management Act 1991
La Ley de Gestión de Recursos25 promueve la gestión sostenible de los recursos naturales y cómo deben usarse.
Esta Ley es especialmente relevante en el sector ya que, para poder construir un parque eólico, los desarrolladores
necesitan un consentimiento de recursos de la autoridad local. Para conseguir ese consentimiento, en la aplicación
tendrá que explicar detalladamente el proyecto, así como las evaluaciones de los efectos ambientales, de
construcción, paisajísticos, visuales, de tráfico, de ruido, culturales y arqueológicos y los planes de mitigación
previstos.

Barreras técnicas
- Disponibilidad de emplazamientos. Encontrar la localización adecuada donde haya viento el 97 % del tiempo con
una fuerza suficiente para mover las turbinas.
- Intermitencia del suministro. Al tratarse de una fuente de energía intermitente, se han de buscar alternativas para
cuando los niveles sean más bajos.
- -Conexión a la red. Una vez generada, la electricidad necesita transferirse a la red nacional o una red de
distribución local para ser transportada a los usuarios finales. Por esa razón, existen limitaciones a la hora de
asegurar los derechos de acceso legales y físicos para la transmisión, la capacidad de adaptarse a las variaciones
de generación, así como la capacidad de vender la electricidad a largo plazo.
- Infraestructuras existentes. Además de lo anteriormente citado, es necesario tener en cuenta la situación de las
infraestructuras existentes en la zona, como la cercanía a puertos, telecomunicaciones y carreteras en las que
puedan circular vehículos de grandes dimensiones.
- Intensidad de capital. La intensidad de capital en esta industria es alta.
- Barreras medioambientales. El posible impacto que pueda ocasionar la instalación de turbinas en el entorno es
una de las principales barreras a la hora de desarrollar un parque eólico.
Precios
Las estimaciones en los costes de la electricidad eólica varían, ya que existen muchos factores
variables que afectan el coste del desarrollo de un parque eólico, como la velocidad del viento, la
posibilidad de maximizar la generación, los costes de construcción, las condiciones de mercado de
las turbinas eólicas, etc.
El coste normalizado de la electricidad (LCOE por su nombre en inglés), representa los ingresos por
unidad de electricidad generada que serían necesarios para cubrir los gastos de construir y operar
una planta generadora durante un supuesto periodo de vida.
Los principales factores y que se podrían considerar los componentes del coste, serían los
siguientes:
En el caso de la energía eólica, los gastos por combustibles son inexistentes y los costes de mantenimiento son
relativamente bajos, por lo que el LCOE cambia principalmente en proporción al coste estimado de la tecnología.
El LCOE mundial de nuevos proyectos de energía eléctrica cayó un 10 % en proyectos onshore, a una media de
48,5 USD/MWh de 2018 a 2019, mientras que en los offshore cayó un 18 % (83,50 USD/MWh). Esta reducción en
los costes ha venido dada por una combinación entre menores costes de capital y una mejora en el rendimiento
de estos15.
La drástica caída en los costes de la electricidad proveniente de energía eólica, tanto offshore como onshore, ha
incrementado la competitividad de la energía eólica, convirtiéndola en una de las más baratas, como se muestra
en el siguiente gráfico. Se espera que los costes se sigan reduciendo en los próximos años.
Perspectivas del sector
La generación eléctrica procedente de combustibles fósiles se prevé que vaya desapareciendo en los próximos
años en Nueva Zelanda, para alcanzar el objetivo del 100 % de energía generada a partir de fuentes renovables en
años hidrológicos normales en 2035.

Debido al potencial que tiene Nueva Zelanda de generar mucha más energía eólica se estima que la energía eólica
supondrá el 20 % de la electricidad del país para 203029. A finales de 2020 empezarán a funcionar dos nuevos
parques eólicos que aumentarán la
capacidad instalada de 690 MW a
1.044 MW y hay más de 2 GW de
proyectos de parques eólicos que
ya han sido autorizados por las
autoridades locales. De hecho,
según la Autoridad Eléctrica, la
mayor cantidad de capacidad
generadora con consentimiento en
el país pertenece al sector eólico.

Los proyectos eólicos propuestos y

con visto bueno en Nueva Zelanda
se detallan a continuación.
Oportunidades
El sector neozelandés de energía eólica tiene un gran potencial de expansión, con numerosas localizaciones viables
para el emplazamiento de parques eólicos todavía sin desarrollar. Las principales oportunidades dentro del sector :

+ Aumento de la demanda/Electrificación
El objetivo de alcanzar para 2035 en años hídricos normales una cuota 100 % de la electricidad generada en el
país gracias a energías renovables supone una enorme oportunidad para estos sectores.
Además, como se ha comentado en el capítulo anterior, se espera que la demanda de electricidad crezca en un
70 % para 2050, como consecuencia del proyecto de electrificación de las industrias y transportes para alcanzar el
nivel cero en las emisiones netas de gases de efecto invernadero. Esto supondría una amplia inversión en
energías renovables para cubrir la demanda.
+ Mejoras en la tecnología
Los parques eólicos neozelandeses actualmente no proporcionan una frecuencia estable de generación ni tienen
opciones de almacenamiento, aunque las mejoras en la tecnología de turbinas pueden hacer que los nuevos
parques dispongan de estos servicios, lo que le daría una ventaja frente a su competencia actual.
Es por esta razón por la que una de las oportunidades de negocio reside en la introducción de este tipo de
tecnología en el país, ya que Nueva Zelanda no tiene capacidad propia para desarrollarla.
+ Offshore
Como se ha comentado anteriormente, Nueva Zelanda no cuenta con parques eólicos marítimos,
aunque dispone de la capacidad para hacerlo en caso de que la demanda aumentara y se abarataran
los costes para equipararla a la onshore.
Un ejemplo de esto es el informe de la agencia gubernamental de desarrollo Venture Taranaki34, que
plantea un proyecto de energía eólica offshore en la región, con potencial para duplicar el suministro
eléctrico neozelandés sólo contando con turbinas fijas, siendo el potencial mucho mayor si se
utilizasen turbinas flotantes.
 Vehículos electricos
La isla Waiheke, en Nueva Zelanda,

Según informa la prensa local, el objetivo es conseguir la

transición de la isla a energía eléctrica limpia y barata para
todos los vehículos para 2030, y lo cierto es que las
características de la isla la hacen perfecta para los coches
eléctricos.
Mide 19,3 km de largo, de este a oeste, variando su
ancho entre 0,64 km hasta 9,65 km y su superficie total es
de 92 km². Su limitada red de carreteras y las cortas
distancias hacen de este lugar el entorno ideal para no
preocuparse por la autonomía del vehículo. "En Waiheke,
el camino se agota antes de que lo haga tu batería"

Para conseguir alcanzar su objetivo de aumentar el número de eléctricos a 64.000, este grupo de presión aboga por
el mercado de segunda mano, que cree que se disparará para 2030: "De los 635 eléctricos nuevos o usados ​
registrados por primera vez en Nueva Zelanda el mes pasado, un asombroso 450 (o más del 70 %) fueron Nissan
LEAF importados de Japón o el Reino Unido", explica Whitehead.
Plan Establecido

El plan presentado está encaminado a lograr que la isla tenga el menor coste medio del transporte de
toda Nueva Zelanda, pero también alude a los beneficios medioambientales que aportan los vehículos
ecológicos.
Actualmente, por la isla circulan aproximadamente 80 vehículos
eléctricos que representan alrededor de un 1% del parque de
vehículos de la isla, que entre coches, autobuses y camiones es de
7.000 unidades. Para aquellos que hoy no pueden pagar el precio
de un vehículo eléctrico, la solución será recurrir a un mercado de
segunda mano que, en 2030, ofrecerá vehículos asequibles
facilitando la consecución del plan.

La acción iniciada por esta asociación está siendo respaldada por

los políticos de Nueva Zelanda que se están involucrando en su
desarrollo y trasladando algunas de las iniciativas a otros lugares
del país. En la ciudad de Whanganui, el concejal de distrito
Hadleigh Reid ha adquirido recientemente un Tesla Model S y se ha
manifestado en varias ocasiones a favor de los vehículos eléctricos.
Había 1.015 coches eléctricos registrados en
el país a mediados de marzo de 2016,
incluyendo las importado usados. De los 769
vehículos eléctricos registrados en septiembre
de 2015, 419 eran vehículos híbridos y
aproximadamente 45 fueron fabricados antes
de 2005, algunos de estos son vehículos
convencionales convertidos en eléctricos. El
número de eléctricos y vehículos híbridos en
flota comenzó a aumentar a partir de 2009
cuando modelos como el Mitsubishi i - MiEV
 fueron lanzados al mercado y se aceleró a
partir de 2015 desde que se importaron 
Nissan Leaf de segunda mano desde Japón
 los cuales proporcionaron un método de
compra más barato. Para febrero, un total de
414 Nissan Leaf se habían registrado en el
país, de los cuales, 86 son nuevas unidades y
328 importados usados. Nissan detuvo las
ventas del Leaf en noviembre de 2015.
Nueva Zelanda tiene un único subsidio, el
gobierno le da menor importancia para los
vehículos eléctricos; solo una exención del
pago de peajes, entre 2009 y 2020.