"Hagan

todo

lo que

Él les

diga"
Juan 2:5

Reflexiones sobre
María,
Madre de Jesús
y nuestra Madre
Por Sierva de Dios
Hermana Ida Peterfy,
SDSH
 "Hagan
todo lo que
Él les diga"
Juan 2:5

Reflexiones sobre
María,
Madre de Jesús
y nuestra Madre
Por Sierva de Dios
Hermana Ida Peterfy, SDSH

Sociedad Consagrada al Sagrado Corazón

2022
 El amor y honor que Hermana Ida sentía por
nuestra Santísima Madre fueron evidentes
todos los días de su vida, porque ella sabía
que la Santísima Virgen no tenía otro deseo
que el de llevarnos a su Hijo. Estas palabras de
Hermana Ida lo describen mejor:

"Si quieres tener una ventana al

corazón de María, mira sus propias
palabras y auto-revelación justo
después de que ella fue honrada y
felicitada por su estado especial.
Lo que viene a tu mente, tu corazón y
tus labios dicen mucho sobre ti.
Sus pensamientos, palabras y alegría
son todos acerca de Dios".

Ofrecemos estas reflexiones y puntos de vista

para usted como un regalo de Sierva de Dios
Hermana Ida Peterfy.

Hermanas de la
Sociedad Consagrada al Sagrado Corazón

Al presentar este librito, declaramos nuestra sincera

sumisión a las enseñanzas de la Iglesia Católica.
 Entrégate a Jesús totalmente.
Renuncia a todo lo que es tu ser,
tu futuro,
tu preocupación,
tu bienestar,
tu cruz.

Sé uno con Cristo

como María se hizo uno con Él, para
que haya
un solo futuro,
una preocupación,
un bienestar,
una cruz,
un plan:
¡El suyo!
Sierva de Dios Hermana Ida Peterfy, SDSH
 Contenido

María,
el Ensayo de Dios sobre la Santidad 1

Madre de Dios y nuestra Madre 7

Mujer de Oración 23

Elegida de Dios  32

María, causa de nuestra alegría  41

Hija de Israel  49

La fiesta de las bodas de Caná  53

La boda en Caná / Arte de portada  56

Hermana Ida: una amiga santa  58

Sierva de Dios
Hermana Ida Peterfy, SDSH  63

Píde la intercesión de Hermana Ida 82

 María, el Ensayo de Dios
sobre la Santidad
Dios no da ningún ensayo sobre lo que
debería ser un cristiano, pero en su brillante
manera, nos da una mujer: una que confía
en Dios y vive en su guía.

Estamos tan acostumbrados a "lo que quiero

ser" y a ser nuestros propios maestros. La
llamada proviene de Dios que elige. En la
vida de María, está claro. ¿Podemos decir
que también está claro en nuestras vidas?
¿Es verdad en la vida de todo cristiano?
Le el Salmo 139. A menudo cuestionamos
la llamada porque nosotros somos los que
escuchamos, vinimos, elegimos ... Mira el
misterio más profundo de la vocación. Lo
vemos en la vida de María.

LA UNIÓN CON JESÚS es obvia en María.

"El que hace la voluntad de Dios es mi
madre" (Marcos 3:35). Jesús no rechaza a
María, sino que explica que la unión física
no es necesaria. UNIÓN DEL ESPÍRITU es
esencial; es más que solo "estar cojidos de la
mano". Por ejemplo, ¿cuál es la razón más
1
profunda para que alguien se convierta
en religioso? Lee Lucas 1:46. Creemos. Él
nos llamó tal como somos. ¡Por eso somos
bendecidos, porque HA HECHO GRANDES
COSAS con nosotros! Dios puede hacer
cualquier cosa con un pecador.

MARÍA FUE EL PRIMER DISCÍPULO. Las

Bienaventuranzas describen al cristiano
ideal (Mateo 5:3-10); en María, vemos las
ocho Bienaventuranzas vividas. No hay
nada espectacular, simplemente ordinario:
Jesús entra en nuestra vida, en lugar de
sacarnos de lo ordinario. Cuando Jesús,
de 12 años, se perdió en el templo, esa
fue una triste ocasión para María, y ella lo
maneja completamente humanamente. Ella
no espera que Dios lo busque, ¡ella busca a
Jesús!

MARIA ES EL ENSAYO DE DIOS sobre

nosotros. Debajo de la Cruz, ¿que sufrió
ella? Perseguida, dolorida, humillada?
El sufrimiento en sí mismo no vale nada;
solo si nos acerca a él. En el sufrimiento,
no podemos ver o sentir que Dios nos ama
... ¡estamos bajo la Cruz! Las cosas van y
vienen: éxito, fracasos ... ¡María nos enseña
2
a siempre tener esperanza! ¡Incluso en los
momentos más oscuros de la vida!

Con grandes privilegios vienen grandes

cargas. María es un gran ejemplo para esto.
Las gracias y PRIVILEGIOS QUE RECIBIÓ
FUERON PARA LOS DEMÁS, para
nosotros. ¿Vale la pena? En la Cruz, María
probablemente no se sentía feliz. ¡Ella no
quería a otro hombre por un hijo!

Cuando alguien te habla con amor acerca

de sus hijos, ¿notas un tono emocional en
su voz? Cuando conocemos a sus hijos,
inmediatamente los amamos. ¿Por qué?
¿Quiénes son sus hijos para nosotros? Sería
un tipo extraño de amor si te amara a ti,
¡pero yo no amaría a nadie que tu ames!
¿Cómo podría decir que te amo, pero no
estoy tan seguro de que amo a tu madre,
a tu padre y a tu familia? Es una realidad
importante recordar que amamos a aquellos
que pertenecen a aquellos a quienes ya
conocemos y amamos. ¡GRACIAS, MARÍA,
POR ACEPTARNOS COMO PARIENTES
DE JESÚS!

¿Y nosotros? También tenemos que aceptar a

3
los parientes. En la oración, "la Memorare",
decimos "Acordaos, ¡Oh, piadosísima
Virgen María ..." María está allí, ya sea que
la reconozcamos más o menos, ya sea que la
apreciemos más o menos. Si un niño le pide
algo a su mamá todos los días, ella lo hará.
Le pedimos a María: "Ruega por nosotros
en la hora de nuestra muerte". María tiene
un lugar en la Iglesia, en nuestra vida;
no tenemos que hacerle un lugar. Ella no
será más rica si lo hacemos, pero seremos
nosotros más pobres si no la tenemos en
nuestra vida.

Reza el Rosario. Especialmente cuando

estás en una situación difícil; nos calma
rezar el Rosario. O al lado de la cama, reza
el Rosario cuando las horas se vuelvan más
y más largas, o en el tráfico pesado cuando
hay molestia, o en las montañas sentado
en una roca, o cuando deseas orar por una
intención especial.
Mira lo que María significa para los
cristianos en tantos países. Las personas que
cuestionan el lugar de María en nuestras
vidas probablemente no la conocen; tal vez
quieren conocerla; o tal vez no entienden
4
del todo la humanidad de Jesús. Tal vez,
para ellos, Jesús puede ser "alguien allá
arriba" o alguien que ellos piensan que es
completamente diferente de nosotros. Si
aceptas la humanidad de Jesús, si aceptas
quién es realmente, ¡entonces su madre
significa mucho!

“THEOTOKOS”: Dio a luz a Jesús que es

totalmente Dios y totalmente hombre.

¿Cuál fue la formación espiritual de María?

¿Qué se destaca en su vida espiritual?
¿Qué la preparó para hacer todo lo que fue
llamada para hacer? ¿Qué la preparó para
decir "FÍAT", "SÍ, PADRE"? Mira la historia
de María a través de la vida de Jesús:
 LA ANUNCIACIÓN Lucas 1:26-38

 LA VISITACIÓN– MAGNIFICAT
Lucas 1:39-56

 NACIMIENTO DE JESÚS – PROFECÍAS

EGIPTO Lucas 2:1-20, Mateo 1:18-2:23

 PRESENTACIÓN (ofreciendo un par de

palomas para el primogénito) Lucas 2:21-40

5
 JESÚS EN EL TEMPLO (cuando tenía 12 años)
cuando se perdió y fue encontrado
Luke 2:41-52

 CANÁ – ¡Que atrevida era al pedirle

a Jesús un milagro! Juan 2:1-12

 EN LA CRUZ
es mencionada nuevamente por su
nombre; ella está presente cuando Jesús
la necesita. Juan 19:25-27

 EN LA SALA SUPERIOR
donde recibieron el Espíritu Santo
Hechos 1:13-2:12

La vida de María está muy fuertemente

conectada a la vida de Jesús. Esto es la
santidad: estar CON CRISTO totalmente en
FE, ESPERANZA Y AMOR.

6
 Madre de Dios
y nuestra Madre
Si miramos fijamente el sol, cuanto más lo
miramos al sol, menos vemos las cosas más
cercanas al sol. Nuestra Madre bendita está
tan cerca de Nuestro Señor que cuando
miremos atentamente a Nuestro Señor,
por completo podríamos perderla de vista.
Y ella no se ofende. Ella está feliz de que
hagamos eso. Pero es bueno clarar los ojos
en ella de vez en cuando y pedirle su ayuda
para ser fiel a Nuestro Señor.

En la vocación de María, podemos ver

la vocación de la Iglesia, y podemos ver
nuestra propia vocación. Dios escogió a
María desde toda la eternidad para un papel
muy especial. Dios, en Su misericordia, en
Su integridad, no nos forza ni nos quita
nuestra libertad. Le preguntó a María si ella
aceptaría este papel. Ella tenía libertad real
para decir "Sí" o "No" a la voluntad de Dios.

¿Por qué Dios eligió a María? Este es el

misterio del amor ¿Por qué te eligió Dios a
ti? Lee Deuteronomio 7:7. Este es el misterio
7
del amor, y Dios es amor. Él quiere ser
amado. Él eligió a María, y María lo amó de
regreso. Antes de que María se convirtiera
en la Madre de Dios, ella ya era la Novia de
Dios. ¿Por qué? Porque Dios la eligió desde
toda la eternidad. ¿Por qué? Porque Él la
amaba. Ella fue la novia elegida de Dios,
elegida para ser la Madre de la Segunda
Persona de Dios.

María misma no sabía los planes que

Dios tenía con ella hasta que el ángel se
lo anunció. Cuando el mensajero de Dios
vino a ella, cuán diferente era ella de Eva.
(Génesis 3:1-13) No hay rastro de vanidad
en ella. Es por eso que el Espíritu Santo le
habla palabras de bendición a través del
ángel. Todo se revierte que vino sobre
nosotros a través de Eva. Eva nos llevó a la
caída, la Virgen María nos abrió el camino
de la redención.

María en todos los sentidos refleja a la

Iglesia, el "pueblo de Dios". Ese amor nupcial
que Dios expresa hacia su pueblo es visible
y expresado humanamente a través de
María que se convirtió en Madre del eterno
Hijo de Dios por el poder del Espíritu Santo.
8
A través de ella, tenemos a Dios-hecho-
hombre, Dios en forma visible.

En la escena de la Anunciación, tenemos

la miniatura más perfecta de todo nuestro
viaje a Dios, de toda nuestra experiencia de
Dios. Ubícate en esa escena. Ve todo lo que
le está sucediendo a María. En cierto modo,
es paralela a nuestras propias vidas, a
nuestra propia existencia. Misteriosamente,
incluso antes que el Salvador, ella es la
"primera cristiana" en dignidad y eficiencia.
El "ángelus", el mensajero de Dios viene.
Piensa en la palabra de Dios que se nos
dirigió a cada uno de nosotros: Dios nos
habló la "palabra" de nuestra vocación.
¿Cuando sucedió? ¿Dónde ocurrió? ¡Sucedió!
Recibiste un mensaje de Dios, una "palabra"
de Dios. Cada uno de nosotros es claramente
una "palabra de Dios".

La historia continúa: el mensajero de Dios

le explica a María: "No temas". Mira en
tu propia vida. Hubo miedos. Todo lo
desconocido es temeroso. Ese paso hacia
lo desconocido fue temeroso para María.
El Señor acompañó la gracia de nuestra
vocación con ese recordatorio espiritual
9
de que no deberíamos temer. Y luego
escuchamos la vocación, la palabra de Dios.
Tal vez tuvimos algunas dificultades con
esto inicialmente; tal vez hubo problemas,
dificultades de las que tuvimos que
ocuparnos. Hablamos con el Señor acerca
de ellos. Sin embargo, al final, vinieron esas
palabras que siguen bendiciendo nuestras
vidas y se ciernan sobre nosotros para
siempre: "El Espíritu Santo descenderá
sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá
con su sombra" (Lucas 1:35).

El Espíritu Santo nos eclipsó, y ha

continuado cubriéndonos. No tenemos
nada de qué temer. Y al final, contra todos
los obstáculos, contra cualquier dificultad,
hemos podido estar presentes para el
Señor. El ángel puede decir: "No hay nada
imposible para Dios" (Lucas 1:37) ¡Nada!

Responde como María responde: "Mi alma

canta la grandeza del Señor. Él miró con
bondad la pequeñez de su servidora. El
Todopoderoso ha hecho en mí grandes
cosas: ¡su Nombre es santo! "(Lucas 1:46-49)
Cada uno de nosotros está firmado por esa
palabra de Dios, eclipsado por el Espíritu
10
Santo. Cada uno de nosotros puede invocar
esa gracia del Espíritu Santo para dotarnos
de todo lo que necesitamos para lograr todo
lo que el Señor nos ha llamado hacer.

La Visitación: ve que los eventos del

Evangelio no son meramente privados, sino
acciones oficiales. La Visitación muestra
la prominente tarea de María en el plan
de la redención. Se apresuró ir a la casa de
Isabel para que el Salvador, sin demora,
santificara a Juan el Bautista. La primera
acción santificadora del Redentor fue
realizada por medio de la Santísima Virgen.
Ella es el instrumento de Jesús, dando Sus
innumerables beneficios a las personas. Ella
es el canal de gracia para todos nosotros.
Jesús aún no ha nacido y exhibe su poder
redentor a través de María.

Luego mira y ve la reacción de Isabel. María

no está ciega a los favores que recibió de
Dios, o la posición a la que fue criada. No
hay rastros de falsa humildad en ella.
Hay una profunda gratitud. La gratitud
asegura que estos grandes beneficios,
estas bendiciones, sean reconocidos y
agradecidos. ¿Podemos ser como ella en
11
esto, en dar gracias a Dios por todos los
beneficios que nos da: nuestra vocación,
nuestro trabajo, la dignidad de ser sus
instrumentos para la salvación y el más
importante trabajo de enseñar sobre Él y
ayudar a los demás para que llegen al cielo?

Nuestra Santísima Madre le dice a Isabel:

"El Todopoderoso ha hecho en mí grandes
cosas: ¡su Nombre es santo!" (Lucas 1:49).
¡Y todas las generaciones han confesado su
dignidad y la han homenajeado como la
Madre del Señor! Ella dice: "Su misericordia
se extiende de generación en generación"
(Lucas 1:50). La operación de Dios en su
Iglesia y en cada alma es muy similar a lo
que le sucedió a nuestra Santísima Madre.
También en nosotros, Dios "desplegó la
fuerza de su brazo" y la "abundancia" de su
misericordia. (Lucas 1:51)

Cuando Jesús se perdió en Jerusalén

y María y José lo buscaban, la gente
preguntaba: "¿Cómo es el niño?" José pudo
responder: "Se parece a su madre". Esto
no significa que se viera como una mujer;
simplemente significa que Él se parecía a
María en Sus rasgos.
12
Jesús pasó 30 años con María y solo 3 años
con sus apóstoles. Imagina la gran cantidad
de comunicación que se produjo entre
Jesús y María, tanto verbal como no verbal.
Si queremos estar cerca de Jesús, unidos a
Jesús, preguntale a María cómo hacerlo.

Podemos ver muchas reflexiones de la

unidad entre María y Jesús en la Sagrada
Escritura. Se nota en Caná. No hay mucha
comunicación verbal entre ellos. De María
solo tenemos las palabras: "Hagan todo lo
que Él les diga" (Juan 2:5). Ella estaba tan
segura de lo que Jesús podía hacer, y al
mismo tiempo esos años están en tinieblas.
Ella tenía una verdadera unidad de corazón
y alma con Jesús. Tanto debe haber sucedido
en esos 30 años con Jesús, pero María no
cuenta historias. Para ambos, eso no era
importante. Lo importante era "hacer la
voluntad del Padre".

Caná: el primer milagro. ¿Por qué se realizó?

Nuestra Santísima Madre tiene un cuidado
atento y afectuoso; ella está lista para
interceder y usar su influencia para nosotros
por ninguna otra razón sino para ayudarnos
en nuestra necesidad. Así que confiemos en
13
su intercesión, incluso en cosas pequeñas.
Dios no los considera demasiado pequeños.
Él está listo para actuar para que la gente se
mueva a la fe, al amor y a la gratitud.

María es como su Hijo, se da cuenta de

la necesidad de la gente, y ella es muy
accesible. Piensa en Nuestra Señora de
Guadalupe: "Yo soy tu Madre. No tengas
miedo. Ven a mí y voy a secar tus lágrimas".

Para mí, la cualidad más llamativa de una

madre es su falta total de competitividad.
Una buena madre realmente daría su vida
por sus hijos, por nosotros. Ella quiere que
tengamos éxito, que seamos bellos, que
"lo logremos", que seamos amados. Una
verdadera madre es totalmente "para" sus
hijos. María es realmente una madre para
nosotros, ella es "para nosotros", sus hijos
y demasiadamente "por" nuestra relación
con Jesús. Ella hace todo lo que puede para
promoverlo, al igual que una buena madre
promueve a sus hijos en lo que considera
bueno. Ella no fuerza, ella anima.

Podemos actuar como lo hizo Nuestra

Señora y podemos obtener favores similares

14
de Jesús para quienes nos rodean que lo
necesitan: para amigos, parientes. Aprende
de Nuestra Bendita Madre; ella se dirige a
Nuestro Señor con confianza total creyendo
que Él actuará. Ella no duda de que Él
ayudará. Ella cree completamente en Su
bondad de corazón, Su amor misericordioso.
Pero también es importante darse cuenta de
que ella deja que sea Jesús quien seleccione
el momento y el método para ayudar en la
dificultad. De la misma manera, tenemos
que tener confianza en Nuestro Señor y
creer que Él ayudará, y luego esperar que Él
elija el tiempo y el camino. ¡Él tiene tantas
maneras de ayudar!

Es normal apreciar a una madre que es

tan buena como María. Nos alejamos de
la humanidad de Jesús si no creemos que
ciertas cosas sucederán porque ella se
lo pidió. Esto no significa que estamos
"torciendo el brazo de Dios" o interfiriendo
con la providencia divina, simplemente
significa que Jesús es humano y le hace caso
a su Madre.

Durante Su vida pública Nuestro Señor

favoreció a los pecadores y guardó silencio
15
acerca de Su Madre. En cierto sentido, Jesús
nos pone a nosotros, pecadores incluso por
encima de su Madre. Deja a María y sale a
buscar a los noventa y nueve. (Lucas 15:1-7)
Y María no se queja.

Se puede aprender muchas cosas de lo que

no sucedió. Solo piensa en el momento
en que las personas alababan a Jesús y
una mujer de la multitud elogio a María
diciendo: "¡Feliz la que te dio a luz y te
amamentó!" Jesús dijo: "Felices sobre todo
los que escuchan la Palabra de Dios y la
practican". (Lucas 11:27-28) María también
escuchó eso. La Sagrada Escritura podría
haber dicho: "Y desde ese momento, María
nunca más le visitó a Jesús", o "Ella regresó
a casa con tristeza".

Pero eso no está en la Sagrada Escritura.

Jesús facilmente podría decir lo que dijo
porque conocía a su Madre. Sabía que ella
lo tomaría como un cumplido, como una
afirmación de quién era ella. Jesús sabía
que María vivía para hacer la voluntad del
Padre. Es por esto que fue "bendecida", por
eso dio a luz a Jesús, porque deseaba tanto
hacer la voluntad del Padre. María no fue
16
rechazada por Jesús diciendo: "¿Quién es mí
madre y quiénes son mis hermanos?" Ella lo
tomó como un complemento.

Mira a María al pie de la Cruz. (Juan 19:25-

27) Tanta gente estaba allí parada. Para
algunos, la crucifixión fue solo la ejecución
de un perturbador de la paz; para otros, fue
el martirio de un hombre bueno; algunos lo
consideraban el fracaso de una causa noble;
y para otros, fue el triunfo del mal. Solo
María solá reconoció que el plan divino
para la redención de la humanidad estaba
llevandose a cabo.

María le dio a su Redentor la sangre que

derramó para preservarnos del pecado. Él
era más su Hijo que en los casos ordinarios
de maternidad porque solo ella le dio a
él de su sustancia. Y a través de María,
nosotros llegamos a nuestro segundo
nacimiento, nuestro nacimiento espiritual,
porque cuando ella se convirtió en la Madre
de Cristo, también se convirtió en la fuente
de nuestra vida, nuestra vida en Cristo. Allí,
en la Cruz, se declara que ella es la Madre
espiritual de todos nosotros. Si queremos
saber cómo es Dios el Padre, miramos
17
a Jesús. Y si queremos saber cómo es la
"maternidad" de Dios en forma humana,
mira a María. Dios exigió tanto de ella, y a
ella le confirió tanto.

Ve la unidad total de María con la voluntad

de Dios. En este sentido ella soportó las
consecuencias del pecado en unión con
su Hijo, nuestro Señor. Ella sostuvo a su
Hijo, y ella sostiene a la Iglesia. Ella es
nuestra "Madre de la Ayuda Perpetua". Es
una ayuda total y continua, siempre para
los demás. Ella es la "Madre de todas las
gracias". No hay nada que ella no hará por
nosotros, nada que no pueda obtener de
Dios para nosotros. Ella nos dio a Jesús;
Ella nos dio la Fuente de la Gracia, entonces
¿por qué no nos daría un regalo continuo
de gracia? Más que cualquier otra criatura,
Dios nos la ha dado para que nos conduzca
a Dios.

María recibió a Jesús corporalmente en

su hogar aquí en la tierra; es correcto y
justo que Dios la llevara corporalmente
a Su hogar eterno. La devoción a nuestra
Santísima Madre es un poderoso medio
de gracia para nosotros debido a su
18
intercesión por nosotros y por la gran
eficacia de sus oraciones. ¿Hay algo que
ella no le puede pedirle a su divino Hijo?
¿Hay algo que Él le negaría si ella está
pidiendo? Recibimos tanto a través de la
intercesión de María. Jesús es el "Señor" y
María es "nuestra Señora". Ella toma todo
el cuidado y responsabilidad por nosotros;
ella felizmente ejerce esta dignidad y
responsabilidad.

¿Cómo se siente María con nosotros?

Nuestra Santísima Madre nos tomará en
sus brazos y nos dirá que nos ama más que
a los demás porque amamos a su Hijo. Esto
es lo que más quiere: que todos amen a su
Hijo. Durante la oración, pídele y habla con
María de corazón a corazón. Si ponemos
nuestra vida en sus manos, si de verdad
le pedimos ayuda, podemos estar seguros
de que nunca nos meteremos en ningún
problema serio porque ella nos brindará
ayuda aun antes de que lo sepamos. Solo en
el cielo sabremos cuántos errores evitamos,
cuántas accidentes evitamos, cuántos
pecados no cometimos porque ella estuvo
con nosotros ayudándonos, implorando

19
por nosotros, dándonos tanto por la bondad
de su corazón, no por nuestros méritos o
bondad o de acuerdo a una estricta justicia.

En Nuestra Santísima Madre se descubre

todo lo que queremos que sea la Iglesia
y todo lo que nosotros necesitamos ser.
Lo que Jesús dijo sobre la Iglesia, María
lo tenía en sí misma: estrecha unión con
Jesús, unidad total, gentileza, autenticidad,
humanidad, oración y el cuidado extendido
por los demás que vemos en Caná. También
vemos este cuidado de María en los Hechos
de los Apóstoles cuando están esperando el
Espíritu Santo. (Hechos 1:14) María estaba
allí apoyándolos en ese tiempo de espera.

Invocale a María con amor. No hay nada

imposible para su corazón maternal. Ella
no es una madre regañona; ella no quiere
alejarnos de Jesús. Cuando reconocemos
a Jesús en nuestra vida, cuando somos
movidos por el Espíritu Santo, quizás
también nos conmuevamos a agradecerle a
nuestra Santísima Madre. Agradécele por
ayudarte a encontrar a Jesús. En esto ella
está muy unida con nosotros; ella también
da gracias porque encontramos a Jesús, que
20
estamos unidos a Él, que lo amamos y que
somos amados por él.

Cuando recibimos la Palabra de Dios,

cuando abrimos la Sagrada Escritura,
¿tenemos la misma maravilla que María?
Podemos aceptar la palabra de Dios como
un regalo especial para nosotros, o las
palabras pueden pasar por nuestros oídos.
Abrir la Biblia, escuchar la palabra de Dios,
es como abrir una carta de amor dirigida
personalmente a nosotros. ¡Ese gran amor
es asombroso! Dios espera que vayamos
a Él, Él espera nuestra respuesta. ¡Esto es
increíble!

Pide la gracia de tener una confianza cálida

y amorosa hacia María, para poder pedirle
ayuda ahora, no solo a la hora de nuestra
muerte. Quédate con nuestra Bendita
Madre. Este puede ser un momento especial
para agradecerle a Dios por darnos Su
Palabra, y para decirle a Dios nuestro Padre
lo que esto significa para nosotros.

21
 Mujer de Oración
¿Cuáles son algunos de los títulos de
nuestra Santísima Madre? Podemos
pensar en muchos países diferentes y
tantos títulos. También podemos pensar en
algunos de los títulos de nuestra Santísima
Madre que provienen de las Escrituras,
particularmente en los salmos. Jesús y María
son inseparables. Piensa en Belén, Caná, y
especialmente, la Cruz del Calvario.

María, aunque era una mujer joven, conocía

las Sagradas Escrituras y durante toda su
vida la viría y oraba hasta que llegaron
a ser parte tan importante de su "Fíat"
definitivo, su total "Sí" al Padre, y Jesús se
hizo hombre.

Ahora es nuestro turno de decir "Sí" en

nuestra vida diaria, de vivir también estos
títulos de Nuestra Señora y ser y sernos:
madre/padre de "buen consejo", madre-
padre "más puro", madre/padre/hermana/
hermano "más casto".

Cuando pienso en María, tengo la tendencia

de pensar en ella en momentos aislados en
23
su vida: ya crecida, llena de sabiduría, al pie
de la cruz, experimentando la resurrección,
María de las apariciones, María del Rosario.

¿Pero qué de títulos como "Santa María",

"Madre de Dios", "Virgen de las Vírgenes",
"Reina de los Apóstoles", "Sede de la
Sabiduría", "Arca de la Alianza"?

Veamos algunos de los títulos de María

de un área posible de su vida de oración,
los salmos. Los salmos fueron escritos por
un hombre, principalmente el Rey David,
pero en realidad eran oraciones para el uso
de ambos sexos. La Iglesia le dio a María
estos títulos, y como dije, también podemos
llevar estos títulos porque María es "nuestra
Madre" y el niño siempre hereda algo de su
Madre.

Cuando era niña, María rezaba los

salmos como cada joven judío aprendió
hacerlo. Muchas de sus oraciones fueron
memorizadas y las líneas favoritas las tenía
prominentes en su corazón.

Salmo 4: (una oración por su pueblo)

"Respóndeme cuando te invoco, Dios, mi
defensor..." "en mi angustia me diste alivio,
24
ten compasion de mí y escucha mi oración..."
"Hay muchos que preguntan: «¿Quién nos
mostrará la felicidad, si la luz de tu rostro,
Señor, se ha alejado de nosotros?»".

Ella oró con la esperanza del Mesías; ella

oró para que el Mesías se le fuera entregado
a ella y a su pueblo. Ella oró, y sus oraciones
fueron tan seriamente respondidas que se
convirtió en un instrumento de la respuesta.

Las oraciones de María por la misericordia,

por la liberación de su pueblo, fueron
contestadas en su corazón. "Tú has puesto
en mi corazón más alegría que cuando
abundan el trigo y el vino." (Salmo 4:8).

"Me acuesto en paz y en seguida me

duermo, porque sólo tú, Señor, aseguras mi
descanso." (Salmo 4:9).

¿Cómo son nuestras oraciones? ¿Somos

tan abiertos con nuestro Señor? Nuestros
corazones están cargados, oh Señor, por
la situación mundial, por la paz ... por mi
familia ... ¿Cómo rezamos nosostros?

Le llamamos a María, "Madre de la Divina

Gracia". Divino significa "de, cómo, o de

25
Dios". La gracia es el amor o favor de Dios.
¿Puedes pensar en tu cónyuge como esa
persona de gracia divina para ti, un "regalo"
de Dios? ¿Eres ese regalo para él / para ella?

María, "Madre más pura, más casta".

Significa estilo decente, modesto y simple.
Escucha a María rezando el Salmo 139,
creo que ella tuvo que tener una buena
autoimagen: "Tú creaste mis entrañas, me
plasmaste en el seno de mi madre: te doy
gracias porque fui formado de manera
tan admirable. ¡Qué maravillosas son tus
obras!". Escucha a María diciendo:" ¡Qué
preciosos son para mí tus pensamientos,
O Señor! Y qué inmenso, Dios mío, es el
conjunto de ellos! Examíname, Dios mío, y
reconoce mi corazón; examíname y conoce
mis pensamientos ansiosos. Observa si
estoy en un camino falso y llévame por el
camino eterno".

¡Imagina que alguien te está hablando de

esta manera! Tal amor y asombro moverían
mi corazón a una gran ternura. ¡Dios Padre
debe haber amado tanto a María!

A través de su oración y el reconocimiento

26
diario de Dios trabajando en su vida,
María se llenó de asombro y admiración.
¿Cuáles podrían haber sido esos tiempos
diarios de reconocimiento: lavando los
platos, limpiando, cocinando y en marcha
al trabajo? ¿Y nosotros? ¿Reconocemos que
Dios trabaja en nuestra vida todos los días?

El Salmo 37:4 dice: "que el Señor sea tu

único deleite, y él colmará los deseos de tu
corazón.". Salmo 104:33-34 dice: " Cantaré
al Señor toda mi vida; mientras yo exista,
celebraré a mi Dios: que mi canto le sea
agradable, y yo me alegraré en el Señor."
¡Nuestro mundo se mueve demasiado
rápido! ¡Tenemos que frenar y ver los dones
de Dios a nuestro alrededor!

María debe haber rezado el Salmo 16:7-8,

"Bendeciré al Señor que me aconseja, ¡hasta
de noche me instruye mi conciencia! Tengo
siempre presente al Señor: él está a mi lado,
nunca vacilaré". "María es nuestra "Madre
del Buen Consejo", ella buscó la verdad;
ella da buenas recomendaciones, buenos
consejos.

María estaba criando a un niño pequeño: ¡el

27
Hijo de Dios, el Mesías, el Redentor! ¡Qué
responsabilidad portaba! Ella le enseñó a
orar con una lengua humana; ella le enseñó
en forma de historia, que luego se conocería
como parábolas. Los niños a menudo crecen
para ser "reflejos" de las palabras, hechos
y acciones de sus padres. ¡María tuvo que
enseñarle a Dios ser un hombre! María es
la "Madre del Creador", "¡Madre de nuestro
Salvador!"

María es "Madre más prudente", ejerciendo

un buen juicio en asuntos prácticos; ella
es "María más renombrada" por su buena
reputación y fama. Ella es "Madre más
poderosa", fuerte, poderosa e influyente;
ella es "Espejo de justicia", un reflejo de la
justicia de Dios, un reflejo del Padre, del
Hijo y del Espíritu Santo; ella es "María más
fiel".

María realmente podía cantar el Salmo

89:2-3, "Cantaré eternamente el amor del
Señor, proclamaré tu fidelidad por todas
las generaciones. Porque tú has dicho:
«Mi amor se mantendrá eternamente, mi
fidelidad está afianzada en el cielo»”.

28
María es una mujer llena de fe, llena de
confianza. Pero recuerda, ¡ella perdió a su
Hijo por 3 días! Su vida no era sólo rosas,
ella es la "Mujer de Confianza" que vio a
su Hijo caminar hacia su ejecución y ella
permaneció allí a Su lado.

¡Realmente podemos decir de María que

ella es la "Causa de nuestra alegría" porque
la alegría de su Hijo también es nuestra
fortaleza! Salmo 89:16-17, "¡Feliz el pueblo
que sabe aclamarte! Que caminarán a la luz
de tu presencia, Señor; Se alegran sin cesar
en tu Nombre, serán exaltados a causa de
tu justicia". María es el "Arca de la Alianza".
En 1 Crónicas 17:1 leemos: "Cuando David
se estableció en su casa, dijo al profeta
Natán: «Mira, yo habito en una casa de
cedro, mientras el Arca de la Alianza del
Señor está bajo una tienda de campaña»". Y
en Apocalipsis 11:19, escuchamos: "Se abrió
en el cielo el Templo de Dios y dentro del
templo uno podía ver el Arca de la Alianza".
Esa es María, quien dice con el Salmo 126:3:
"¡Grandes cosas hizo el Señor por nosotros
y estamos rebosantes de alegría!".

María es "Reina de los Ángeles", "Reina

29
de los Patriarcas", "Reina de los Profetas",
"Reina de los Apóstoles", "Reina de los
Mártires", "Reina de los Confesores",
"Reina de las Vírgenes", "Reina de todos los
Santos". Con María, ora el Salmo 111:9-10,
"El envió la redención a su pueblo,
promulgó su alianza (promesas) para
siempre: Su Nombre es santo y temible.
El temor del Señor es el comienzo de la
sabiduría: son prudentes los que practican
sus preceptios. Su alabanza por siempre
permanece".

María es "Consoladora de los que sufren".

Ora con el Salmo 46:2-4: "Dios es nuestro
refugio y fortaleza, una ayuda siempre
pronta en los peligros".

María es "Reina de los Apóstoles" y "Reina

de los Profetas". Ora con el Salmo 22:23,
"Yo anunciaré tu Nombre a mis hermanos,
te alabaré en medio de la asamblea:" Y el
versículo 29, "Porque sólo el Señor es rey y
él gobierna a las naciones".

María es la "Santa Madre de Dios". Le Isaías

7:10-14 "Por eso el Señor mismo les dará
un signo. Miren, la joven está embarazada

30
y dará a luz un hijo, y lo llamará con el
nombre de Emanuel", porque Dios está con
nosotros.

Las oraciones de María, y sus títulos,

pueden enseñarnos mucho y llamarnos a
un tipo práctico de santidad, una santidad
que nos pide tomar al Señor de la mano,
a confiar, a pedir, a proclamar. Nuestra
verdadera respuesta a Dios traerá tal
respuesta de Dios a nosotros.

Toma estos títulos de María, y en oración

piensa en tu cónyuge, o en una persona a
quien aprecias profundamente, y dale a esa
persona uno de estos títulos de María. ¿Por
qué elegirías ese título? Ofrézcelo como un
verdadero regalo de oración y amor.

31
 Elegida de Dios
¿Alguna vez has pensado en lo que sería
si pudieras elegir a tus propios padres?
¿Cómo te gustaría que fueran? (¿Jovenes?
¿Guapos? ¿Ricos? ¿Apacibles? ¿Amables?
¿Socialmente prominentes?)

Si pudieras elegir tu casa, ¿dónde te gustaría

vivir? (¿En una grande ciúdad? ¿Cerca del
mar? ¿En las montañas? ¿En una granja?
¿En el desierte?) Incluso si fueras rico y
pudieras permitirte el lujo de tener una
casa en cada lugar bello y emocionante, aún
sería muy difícil decidir. ¿Por qué? ¡Porque
no tendrías suficiente tiempo o energía
para disfrutarlos a todos o vivir mucho
tiempo en alguno de ellos! Por supuesto,
esto es solo una posibilidad imaginaria; no
podemos elegir nada por nosotros mismos
antes de nacer. ¡Pero lo que es imposible
para nosotros es completamente posible
para Dios!

Cuando se hizo hombre, pudo elegir a la

madre cuyo hijo iba a ser. Él no necesitó
elegir un padre porque Jesús es el Hijo de

32
Dios el Padre desde toda la eternidad. Él
siempre vivió con el Padre, su vida no
tuvo comienzo. Siempre tuvo la plenitud
de la naturaleza divina y la integridad de
una Persona divina, pero nunca tuvo una
naturaleza humana hasta que nació como
bebé hace más de 2000 años. Tenía que
tener una madre humana para nacer tal
como somos, en cuerpo y alma, corazón,
mente y voluntad, con los pensamientos y
sentimientos de un ser humano real.

¿A quién elegiría Dios ser la Madre? Él

la hizo especial, hermosa, sin mancha de
pecado, el humano perfecto. ¿Y en qué
tipo de ambiente viviría el Hijo de Dios?
El gusto de Dios es diferente; Sorprendió a
todos los que estaban pensando en términos
humanos. Eligió a una joven sencilla, María,
comprometida con un joven carpintero, José,
de la familia del Rey David. María y José
estaban lejos de ser importantes, conocidos,
ricos o influyentes. Eran pobres y vivían
en una ciudad pequeña e insignificante; no
era bonito, ni siquiera silencioso. La gente
preguntaba: "¿Acaso puede salir algo bueno
de Nazaret?" cuando escucharon que Jesús
era de allí. (Juan 1:46)
33
¿Por qué Dios eligió a María? Cuando
leemos la Palabra de Dios en la Biblia,
encontramos que no hay mucho escrito
sobre María, pero lo que está escrito nos da
muy buena idea de por qué Dios la escogió
entre tanta gente. Es muy importante
que sepamos esto porque estamos muy
involucrados con María. ¿Recuerdas lo
que significa ser cristiano? Significa que
pertenecemos a la persona de Jesucristo.
También significa que la familia de Cristo es
nuestra familia, su Padre es nuestro Padre y
su Madre es nuestra Madre.

¿Cómo se dío cuenta María que ella había

sido elegida para ser la madre del Hijo de
Dios? Dios le envió un ángel para entregarle
el mensaje y anunciarle a María que ella fue
elegida. Escuchemos sus palabras en Lucas
1:26-38: "¡Alégrate!, llena de gracia, el Señor
está contigo. No temas, María, porque Dios
te ha favorecido. Concebirás y darás a luz
un hijo, y le pondrás por nombre Jesús..."
¿Qué hizo María después de recibir el
mensaje? ¿Ella simplemente se recostó
sintiéndose muy especial y muy feliz?
¿Corrió a los vecinos para compartir las
34
buenas noticias? Si deseas tener una ventana
en el corazón de María, escucha sus propias
palabras y auto-revelación justo después
de que ella fue honrada y felicitada por su
estado especial. Lo que viene a la mente,
el corazón y los labios dice mucho sobre
la persona. María inmediatamente dirigió
los elogios a Dios: ¡Él es el centro de sus
pensamientos y sentimientos, ella proclama
Su grandeza! Él ha hecho grandes cosas para
ella. Él ha demostrado su poder. Él es el que
humilla al orgulloso y levanta al humilde.
Él llena a los hambrientos. La ayuda para
Israel viene de Él. ¡Todos los pensamientos,
las palabras y la alegría de María tienen que
ver con Dios! Ella simplemente respondió:
"Yo soy la servidora del Señor, que se
cumpla en mí lo que has dicho" (Lucas 1:38).
"Fiat". Que así sea. Ella acepta.

¿Qué fue lo que condujo María al Corazón

de Dios? ¡Su veracidad! Toda su actitud fue:
"Soy pequeña, pero Dios es grande, con Su
ayuda nada es imposible". Esta veracidad
también se puede llamar humildad. Ella
no pidió señales, confiaba en que Dios
resolvería los detalles; que Él no la dejaría

35
sola si Él la escogió. Lo que Dios quería
era lo más importante para ella. Este es el
verdadero amor: sentirse privilegiado de
hacer algo por el que amas.

María era confiada y feliz al hacer la

voluntad de Dios, y estaba activa, haciendo
todo en el espíritu del mensaje. Ella también
sabía que estaba a cargo. Cuando Dios la
escogió a María, no envió ángeles para
cuidar al Niño Jesús. Era responsabilidad
de María. Y aunque las circunstancias
no fueron las mejores, no se quejó ni se
preocupó.

El amor de María se expresó claramente

en su obediencia activa a Dios. Las
emociones van y vienen, el amor es para
siempre. Podemos recordar algunas de las
dificultades que María tuvo que enfrentar:
 María y José tuvieron que hacer el viaje
de cinco días para ir a Belén y registrarse;
ese fue un viaje difícil para María .
(Lucas 2:1-5)
 No había lugar para ellos en la posada
(Lucas 2:7); lo unico que encontraron fue
un establo. No había familiares ni amigos

36
cuando nació Jesús, nadie con quien
compartir su alegría. ¿A quién envió Dios?
Los pastores, los Reyes Magos. (Lucas
2:15-18, Mateo 2:11) María aceptó a los
visitantes y escuchó lo que tenian que decir
sobre los acontecimientos excepcionales:
la estrella, los ángeles ... "Mientras tanto,
María conservaba estas cosas y las meditaba
en su corazón" (Lucas 2:19). Ella también
amablemente aceptó los regalos simples, y
los regalos elegantes.
 En cumplimiento de la Ley, María y José
llevaron a Jesús al templo y ofrecieron un
par de palomas a Dios por el niño, la ofrenda
de los pobres. El anciano, Simeón, reconoció
al Mesías prometido en el Niño y gritó:
"Ahora, Señor, puedes dejar que tu servidor
muera en paz, como lo has prometido,
porque mis ojos han visto la salvación que
preparaste delante de todos los pueblos"
(Lucas 2:29-30) Y luego le dijo a María que
su corazón será aplastado, traspasado de
tristezas. ¿Conocía María las profecías que
predijeron que el Mesías sería un hombre de
dolores, que su propio pueblo lo rechazaría,
que sería escupido y asesinado por los
pecados de su propio pueblo? Aunque si,

37
conocía las profecías, María como madre
joven, probablemente trató de olvidar, o al
menos, no pensar en ello.
 Luego vino la huida a Egipto.
Posiblemente hayas visto imágenes preciosas
de José conduciendo el burro y María sentada
en el con el Bebé durmiendo pacíficamente
en sus brazos. ¡Pero no fue tan tranquilo
o fácil! ¡Tuvieron que correr para salvar la
vida del Niño! En el desierto había calor,
sequedad, tormentas de arena, tormentas
de polvo, noches frías, escasez de comida
y bebida. Y una vez que llegaron a Egipto,
un nuevo idioma, nuevas costumbres, la
necesidad de encontrar un lugar para vivir,
encontrar un trabajo ... Y cuando finalmente
se acomodaron, recibieron la noticia a través
del ángel: "Levántate, toma al niño y a su
madre, y regresa...porque han muerto los
que los que querían matar al niño" (Mateo
2:20). Ellos no dudaron; hicieron el mismo
duro viaje de regreso, esta vez con el niño
pequeño, que probablemente fue más difícil
que con un bebé.
 Hubo un tiempo cuando Jesús de 12
años se perdió en Jerusalén. Tal vez María
estaba asustada porque pensó en esas
38
profecías (Lucas 2:34-35) y no sabía cómo se
cumplirían. Ella debe haberse preguntado
muchas veces con angustia, "¿Es este el
momento?"

 La grandeza de María brilló con más

fuerza cuando Jesús fue crucificado. No
tenía que estar allí, pero lo quería estar.
Ella estaba más cerca de Jesús en unidad de
corazón y mente y alma. No tenemos sus
palabras, pero "Hágase tu voluntad" (Lucas
22:42) debe haber tenido eco en su alma
tantas veces desde que ella se convirtió en la
Madre de Jesús.
 A lo largo de su vida, María le dio a
Dios la oportunidad de llevarla a través de
alegrías y tristezas, y finalmente, a presenciar
a Cristo Resucitado.

María es nuestra Madre. Una madre es la

"aficionada" más desinteresada de su hijo.
Ella está tan dispuesta a "criarnos" como
crió a Jesús, nuestro hermano. Nuestra vida
también es una muerte constante con Cristo
y una constante resurrección. María, Madre
de Jesús y nuestra Madre, está con nosotros
en nuestras alegrías y nuestras tristezas.

39
Ella está ansiosa por alentarnos a seguir
adelante, a hacer nuestro mejor esfuerzo,
pero no a preocuparnos porque "Dios
nuestro Padre proveerá". (Génesis 22:8,
Isaías 25:6) Y si confiamos en los problemas
más grandes, podremos ver "lo bueno" que
puede salir incluso de momentos tristes.

Podemos aprender de María a buscar la

voluntad del Padre, a escuchar al dulce
y amoroso Espíritu de Dios, el Espíritu
Santo, que vive en nosotros pero que no
nos conmoverá a menos que lo dejemos, le
preguntemos y reconozcamos su obra. y
cooperamos con Él.

Sé amigo de María. La oración, "El Ave

María" se compone de la Palabra de Dios
a María a través del ángel (Lucas 1:28), las
palabras de Isabel (Lucas 1:42) y nuestras
propias palabras; es hermoso en su
significado y profundidad. Dilo con todo
tu corazón. Y cuando reces el Rosario,
recuerda los momentos más grandes de la
vida de María. Podemos regocijarnos en el
triunfo de María mientras ella se regocija
con nosotros en nuestro éxito.

40
María, causa de nuestra alegría
La alegría es el fruto de la esperanza, así
como la paz es también uno de los grandes
frutos de la esperanza. La alegría es un
rasgo maravilloso de Nuestra Señora.
Tenemos muy poco que sabemos sobre ella,
pero en la Sagrada Escritura tenemos una
imagen completa.

Una de las primeras imágenes de María

es una imagen de alegría que de alguna
manera nunca nos deja. Es una alegría
que nace de la esperanza. Ella sola, de
todos los seres humanos que rodeaban la
aparente tragedia del Calvario, ella sola
era consciente de la victoria final. Esta es la
razón por la que podría continuar allí, por
qué podría comenzar su nuevo trabajo con
tanta energía, por qué podría convertirse en
el centro de apoyo para la Iglesia naciente
y comenzar a construir este Cuerpo místico
del que somos parte hoy. Fue construido
sobre la profunda esperanza de María
consciente de la Resurrección.

San Ignacio de Loyola pensó que Jesús tenía

41
que haber ido primero a su madre después
de la Resurrección. Ella era la que podía
mirar más allá del dolor de la impactante
crucifixión a la visión de la Resurrección.
Ella se convierte en la imagen de esperanza
para nosotros, en y a través de la cruz.

Miramos a María en busca de inspiración y

ayuda para construir el Reino de Dios aquí
en la tierra. Ella nos enseña por su vida, esa
obediencia para decir "Sí" a Dios cuando
Él nos llama. Ella es nuestro modelo,
nuestra inspiración, ella es la "Causa de
nuestro gozo" que nos muestra cómo estar
preparados para Dios, cómo vaciarnos del
egoísmo, del interés, solo por si, para que Él
nos convierta en instrumentos de su amor.

De tal palo tan astilla. La rendición de

nuestro Señor y la de María se hacen eco
mutuamente. ¿Cómo pudo Nuestra Señora
hacerlo, ese total "Sí" a Dios? En María,
vemos lo que significa rendirse. La rendición
tiene un aspecto pasivo y un aspecto
activo. La rendición a la voluntad de Dios
es en realidad obediencia. Nuestra Señora
le respondió a Dios: "Yo soy tu sierva".
Sabemos lo que significa ser un siervo, es
42
preguntar: "¿Qué te gustaría que yo haga
por ti? Y lo haré ". Esta es la rendición activa
del servidor. La parte pasiva es: "Hágalo de
acuerdo a su voluntad".

Está diciendo: "No sé qué me va a pasar a mi

ni a los que amo, pero cualquiera que sea Tu
voluntad, lo recibo de ti, Señor".

Si recibimos cosas buenas de Dios, ¿por

qué somos tan maldispuestos a aceptar lo
que consideramos cosas no tan buenas?
De algo que no es tan bueno, puede venir
mucho bien. Lo que aparentemente parece
muy difícil y no tan fácil de recibir de la
mano de Dios en realidad puede ser una
bendición. Es posible que no lo veamos de
inmediato. María no dijo: "¿Por qué tengo
que ir a Egipto?" Algo bueno vino de esa
experiencia difícil. Tal vez la ayudó a tener
una mayor aceptación de los extranjeros
porque experimentó lo difícil que era ser
extranjera. Sabemos que, si realmente nos
entregamos a Dios, Él traerá lo bueno del
sufrimiento.

Esta es la esencia de lo que llamo la "Oración

de Pánico". Está diciendo: "Señor, si acepto tu

43
voluntad, entonces también aceptó la posibilidad
de que tengas más soluciones a este problema
que las que yo puedo ver ahora". No sabemos
el futuro; no sabemos lo que la gracia de
Dios le puede hacer a una persona en una
situación difícil. Donde hay sufrimiento,
miseria, pecado, también su gracia estará
allí para nosotros, si no bloqueamos esa
gracia.

Cuando sentimos que se avecina algo

amenazante, podemos bloquear la gracia de
Dios diciendo: "¡Si eso sucede, simplemente
moriré!" O: "¡Basta! ¡No puedo soportarlo
más!" O decir algo similar. Cuando decimos
cosas así nos estamos condicionando a
nosotros mismos, estamos poniendo un
bloque entre nosotros y Dios.

En su rendición total, María fue totalmente

receptiva. Ella voluntariamente recibe todo
de la mano de Dios. De su entrega y total
receptividad vino una gran fuerza y unidad
con Dios.

Otra forma de llamar a la oración de pánico

es "La oración de la entrega total". Es como
decir, "Estoy completamente desamparado,

44
no veo ninguna salida. Pero tu sí Señor, y me
coloco a mí y a esta situación en tus manos. Creo
que ayudarás. Gracias." Y, verdaderamente,
Nuestro Señor milagrosamente ayudará.

Si tenemos esta actitud de entrega total

a la voluntad de Dios, como María,
experimentamos una paz interior y alegría
en nuestro corazón que tal vez nunca antes
hayamos experimentado. En esto, Nuestra
Santísima Madre es nuestro modelo. Ella
puede ayudarnos porque es real! ¡Ella esta
viva! Necesitamos pedirle a María que esté
con nosotros en nuestra oración: "Quédate
conmigo, María, y preséntame a tu Hijo".

Si hacemos las cosas por amor, tanto bien

vendrá. Entonces, hagan las cosas de
"siervos" porque somos los "siervos del
Señor". Se nos pide que hagamos tantas
cosas en nuestras vidas. Si lo hacemos con
el espíritu de "Esto soy yo en conformidad
con la persona más amada, Nuestra
Señora", entonces no desarrollaremos un
complejo de servidores. Suceden eventos
que no planeamos. ¿Qué haremos al
respecto? La rendición pasiva de María
fue de aceptación. Pero eso no le impidió
45
mantenerse activa y de hacer algo, por
ejemplo, acudir a su prima, Isabel; o estar
allí al pie de la cruz. La Sagrada Escritura
habla muy elocuentemente al no decir nada;
nunca escuchamos ni una pequeña queja de
María.

¿Cuál es nuestra relación con Dios? ¿Es

realmente una de creador-criatura? Padre-
hijo? ¿Madre-hijo? Como niños, sabemos
que no tenemos que pagar las facturas;
no nos preocupamos por algo que no es
"nuestro trabajo". Si nos preocupamos por
si la voluntad de Dios para nosotros es
buena y si Él quiere lo mejor para nosotros,
entonces en realidad estamos asumiendo
el control, estamos tratando de ser Dios.
Recuerda la oración de entrega total: "Señor,
aquí está el problema ..."

Dirígete a Dios todas las mañanas. Pídele

a María que te ayude a tener esa sensación
interior de paz y alegría al rendirte a Dios.
Sé atento para ver a través por quién Dios te
hablará durante el día. Y estate activamente
unido con Dios; confía que Él te inspirará en
tus acciones durante el día.

46
María logró su fuerza y valentía de Dios. Su
corazón todavía está con los necesitados,
los pobres, los desatendidos, los ignorantes
y los dudosos. María tiene una parte real
en nuestras vidas espirituales. Podemos
amarla y acudir a ella con confianza porque
ella es nuestra Madre. Con el corazón tierno
de una madre, ella nos salvará de dolores
innecesarios y de vergüenza como lo hizo
con la familia en Caná.

María nos guía y nos protega en nuestra

peregrinación en la tierra hacia el Reino
celestial. Confiamos en que su amorosa
protección obtenga para nosotros las
bendiciones de su Hijo por toda la eternidad.
"María, causa de nuestra alegría, ruega por
nosotros".

47
 Estos son los pasos básicos de la "Oración
de pánico" de Hermana Ida para que puedas
orar con tus propias palabras:

Oración de la entrega total

Mis cinco pasos en una situación dolorosa o de
pánico

1. Entra a la Presencia de Dios.

Aquí estoy, te amo y creo en ti.
2. Ayúdame - Te necesito, no sé qué
hacer. Esta es mi carga ...
es del tamaño de Dios. Te la doy.
3. Tienes 1,000,000...formas de resolver
esto. Por favor, ven, ayuda, entra en
esta situación. Saca provecho de
la situación a tu manera.
4. Sé que me amas y todas las
otras personas involucradas
5. Gracias. Sé que dijiste que siempre
responderías y darías cuando te
lo pidiéramos, así que antemano te lo
agradezco

48
 Hija de Israel
Piensa en nuestra Santísima Madre como
la verdadera hija de Israel, una de las
"santas" (Deuteronomio 33:3) esperando
la venida del Salvador. Ella representa
a ese grupo de personas que escribieron
los Salmos, aquellos que eran "pobres y
oprimidos" (Salmo 74:21) delante de Dios,
independientemente de su estado financiero.
Sabían que sin Dios no podían hacer nada;
ellos desesperadamente necesitaban su
ayuda. Confiaban en que Él estaba cerca e
iba a ayudar, y por lo tanto, lo imploraron
con todo el corazón.
Nuestra Santísima Madre fue una
verdadera hija de Israel, que significa que
ella guardó el pacto. Moisés subió la colina.
Dios escribió su voluntad. (Éxodo 31:18)
"Si guardas mi voluntad, yo estaré contigo"
(véa Deuteronomio 7:7-13) "Haré de ustedes
mi Pueblo y yo seré su Dios" (Éxodo 6:7)
Dios nunca rompió este pacto. Los hombres
rompieron el pacto, pero Dios nunca lo hizo.
Nuestra Santísima Madre guardó los Diez
Mandamientos por completo y fielmente.
Muchas veces las personas no dicen la

49
verdad y ni siquiera piensan que van en
contra de los Mandamientos. Dicen cosas
como, "se me olvidó. No me acordaba".
Pero eso es mentira, porque realmente lo
recuerdan muy bien.
Las Bienaventuranzas se basan en los
Mandamientos. (Mateo 5:3-10) Puedes
ver cómo se relacionan los dos. ¿Cómo
puede alguien que realmente está sediento
y anhelando la verdad decir mentiras?
Nuestro Señor no vino a destruir los
Mandamientos ni a anularlos, sino a
realizarlos.
Pregúntale a nuestra Santísima Madre
cómo ella guardó los Mandamientos. Ella
tuvo momentos muy difíciles en su vida:
fue un tiempo de sufrimiento y ansiedad
para ella cuando José dudaba de su bondad
(Mateo 1:18-19); fue difícil para ella cuando
no había lugar para ella y el Hijo de Dios
en la posada; ella tuvo que esperar a que
Dios actuara, pero esperó con la certeza de
que Dios vendría y ayudaría. Esa ansiedad
penetró profundamente su corazón
cuando presentó el niño al Padre y escuchó
la profecía de Simeón (Lucas 2:22-35);
no fue fácil oír que su corazón sería
atravesado por una espada y que su hijo
50
estaba destinado a ser la señal del ascenso
y la caída de muchos en Israel, un signo que
sería contradicho. El alma de María estaba
en agonía en ese momento, y nuevamente
cuando perdió a su hijo en el templo
cuando tenía doce años. También sintió esa
ansiedad en Caná, cuando Nuestro Señor
le recordó la voluntad del Padre antes de
hacer lo que ella le pidió que hiciera. Así es
como María aprendió la obediencia.
Cuando las personas le hablaron a Jesús
acerca de su madre y el vínculo entre él y
ella (Lucas 11:27, Mateo 12:46), Jesús lo
hizo muy claro ambas veces que el lazo
que los unía era la fidelidad a la voluntad
del Padre. Este era el espíritu de los anawim,
el espíritu de los pobres del Señor. Sin
esto, María no habría podido permanecer
junto a Nuestro Señor, especialmente en la
Cruz, y "abandonar" a su Hijo a quien ella
dio a luz y tomar como hijo a Juan que era
mucho menos. La suya fue la rendición más
perfecta a la voluntad de Dios. La respuesta
natural de una madre sería decir: "¡Quiero a
mi hijo, no a otra persona ofrecida en lugar
de mi hijo!" ¡Cuánto más podría renunciar!
Esto fue rendición total a la voluntad de
Dios. En lugar de Jesús, se le pide que

51
acepte a Juan. Y ella lo hace.
María es la "Reina de los pobres". Ella dijo
lo que Dios estaba esperando escuchar. Ella
lo dijo al principio, y lo dijo al final: "Yo
soy la servidora del Señor, hágase en mí tal
como has dicho" (Lucas 1:38). Así fue como
siempre fue con ella.
Cuando Nuestro Señor estaba hablando
acerca de "Felices los que ..." (Mateo 5:3-
12) Estaba recordando a su madre. Sí,
por supuesto que estaba recordando a los
profetas, los salmos, la historia, pero todos
estos estaban tan obviamente presentes en
su madre. Ella lo inspiró. Fue su espíritu
puesto en palabras, porque Nuestro Señor
vio en ella a la más humilde y hermosa de
los anawim, los pobres y necesitados del
Señor.
Lee las palabras de Dios y permite que esas
palabras penetren en tu alma, y construyan
una relación con Nuestra Santísima Madre,
una relación preciosa.

52
La fiesta de las bodas de Caná
¿Alguna vez has estado en una boda? La
mayoría de nosotros si hemos estado. Es
una ocasión feliz celebrar al hombre y la
mujer cuando la Iglesia los bendice. En la
fiesta hay buena comida, bebida y música
alegre para que todos disfruten.

¿Sería una sorpresa para ti saber que Jesús

también asistió a una boda? Fue con sus
amigos y con su madre, María. (Juan 2:1-12)
Estoy segura de que tenían comida deliciosa
para comer y vino bueno para beber. Pero
en algún momento durante la recepción,
María vio que había problemas por delante.
Ella notó que el gran recipiente que había
sido llenado con vino se estaba volviendo
cada vez menos, ya que los sirvientes
servían a los invitados; y había solo una
pequeña cantidad de vino en el fondo de la
jarra.

Hubiera sido muy vergonzoso para los

novios no tener suficiente vino para todos
los invitados. María fue a Jesús y le susurró
al oído: "¡No tienen vino!" (Juan 2:3) Luego

53
fue con los sirvientes y les dijo: "Hagan todo
lo que Él les diga" (Juan 2:5).

¿Qué les dijo Jesús? Había seis jarras

grandes a un lado que contenían agua
para que los invitados se lavaran cuando
llegaban a la fiesta de bodas. Jesús les dijo
a los sirvientes que llenaran las jarras con
agua, y luego que sacaran un poco y se
lo llevaran al encargado de la fiesta. Los
sirvientes debieron haber pensado que era
algo extraño de hacer, pero recordaron lo
que María les había dicho: "Hagan todo lo
que Él les diga". Así que llenaron las jarras
con agua y luego la llevaron al encargado
de la fiesta. Cuando lo probó, estaba muy
sorprendido. ¡Era el vino más delicioso que
aún había probado! Fue a los novios y dijo:
"¿Cómo es que dejaste el mejor vino hasta
lo último? Todo el mundo sirve primero el
mejor vino, y cuando los invitados ya no
se dan cuenta, se sirve el vino de menos
calidad" (Juan 2:10).
Solo los sirvientes se dieron cuenta de lo que
había sucedido: Jesús había transformado
el agua en vino. Hizo este milagro porque
su madre, María, se lo había pedido. Jesús
54
nunca le negó nada a su madre.

María es la madre de Jesús, pero nunca

deberíamos olvidarnos que también es
nuestra madre. Ella está feliz de ir a Jesús
para pedirle que nos ayude cuando lo
necesitemos. Cuando nuestra Santísima
Madre pida a Jesús por nosotros, seremos
salvos de muchos momentos infelices.

María nos enseña por su vida a decirle "Sí"

a Dios. Cuando rezamos el "Ave María", le
pedimos a María, nuestra madre, que nos
ayude y esté con nosotros "ahora", pero
especialmente que esté con nosotros "a
la hora de nuestra muerte". Sabemos que
necesitamos la ayuda de nuestra Madre para
obtener al cielo. María puede ayudarnos
a escucharle a Dios. Podemos pedirle a
María, nuestra madre, que nos proteja del
dolor y sufrimientos innecesarios, tal como
les ayudó a los de Caná. Con el corazón
tierno de una madre, ella se conmueve por
nuestras necesidades, y podemos seguir sus
indicaciones de "Hacer todo lo que Él nos
diga".

55
 La boda en Caná / Arte de portada

Trozo escogido de la descripción teológica y

artística de Isabel Piczek de las vidrieras de la
Capilla del Convento del Centro de Retiros del
Corazón de Jesús

El camino desde Caná hasta la Cruz y hasta

la victoria de la tumba, tiene un diseño en
su suma profundidad que solo Dios podría
haber planeado y logrado. Este camino no es
el más eficiente para el éxito, no es un camino
militar de poder o de ganancia política. Cada
piedra de este camino estaba hecha de amor
monumental y heroico. Es el eterno esposo
que avanza en el hacia el sacrificio total de sí
mismo, el regalo nupcial real a su Esposa, la
Iglesia Universal.

Qué señal tan increíble es Caná que incluye

todo lo que se dijo arriba. ¡Qué comienzo!
No es por casualidad que la Virgen en
realidad causó este primer y profundamente
significativo milagro de Cristo: una señal
que incluía todo el carácter de la misión de
Cristo.

56
Es una boda, que es una figura fuertísima de
la boda de Cristo con su Esposa inmaculada,
la Iglesia Universal, una indicación profunda
del futuro final. Como María es la Iglesia en
su forma mística, aquí la Virgen representa a
la Madre de Dios así como a su inmaculada
Esposa.

La Eucaristía también está bien expresada:

el agua se transforma en vino, ya como el
vino se transforma en la sangre de Cristo.
La plenitud del vino nos recuerda a Cristo
derramando Su sangre en la Cruz. La sangre
comienza a fluir de los frascos de piedra. No
hay límite este amor, para este sacrificio.

57
Hermana Ida: una amiga santa
Hermana Ida se encontró por primera vez con Isabel
Piczek mientras Isabel pintaba el fresco para el altar
de la iglesia de San Ladislao en Courtland, Ontario,
Canadá, en 1952. Desde ese primer encuentro, nació
una gran amistad espiritual. Cuando Hermana
Ida decidió responder a la invitación de ir a la
Arquidiócesis de Los Ángeles, hizo los arreglos con
Isabel y su hermana, Edith, ya que se habían mudado
a Los Ángeles y eran buenas amigas del Cardenal
McIntyre.

A lo largo de los años, Isabel y Hermana Ida hablaron

(I - D) Isabel y Edith Piczek con Hermana Ida

Bienvenidas a Los Ángeles 1956

58
sobre muchos temas espirituales, especialmente sobre
los temas de la obra de arte de Isabel. Esa amistad
duró toda la vida y continúa en la vida eterna.

Aquí sigue parte de una carta que Isabel les escribió a

las Hermanas el día después del funeral de Hermana
Ida:

Fue ayer cuando todos nos paramos

alrededor del sepulcro abierta de
Hermana Ida. ¿Fue trágico? Yo
diría, absolutamente no. ¿Fue triste?
Desde una visión personal muy
estrecha, sí. Pero todos nos sentimos
profundamente elevados a otro plano,
a un espacio auxiliar, donde la realidad
era increíblemente intensa. Al observar
todo el evento desde esa elevación, el
funeral y el sepulcro de Hermana Ida
fue uno de los eventos más grandiosos,
más elevadores y más victoriosos que
he vivido. Vivimos un momento muy,
muy histórico, pero de alguna manera,
incluso si suena contradictorio, ese
momento histórico fue el primer
momento del futuro.
Mi hermana, Edith, vino al funeral muy
enferma con una gripe grave. Ella no
pudo asistir al sitio del sepulcro. Hacía

59
demasiado frío. Sentada en el coche, nos
miraba desde la distancia, escuchando
los cantos. Cuando regresé al coche,
esperaba encontrarla media muerta. En
cambio, con ojos brillantes me dijo; "No
entiendo lo que sucedió, pero este fue el
momento más feliz y más elevador de mi
vida". Yo simplemente le respondí que
todos sentimos exactamente lo mismo.
La razón de eso se puede conocer de
inmediato. Hemos celebrado una Santa
viviente. No enterramos a nadie. Nadie
estaba muerto allí.
No hay duda de que tuvimos el
privilegio de compartir nuestro paquete
de tiempo con una Santa. Inmensa
responsabilidad recae en todos
nosotros. Tenemos que dejar que el
mundo sepa lo que hemos visto. Hemos
vivido la misma experiencia misteriosa
que los Apóstoles. Ellos también han
visto a un hombre, que tuvo que lavarse,
que experimentó hambre, sudor, se
cansó, tuvo que dormir e incluso se
enojó a veces. Sin embargo, a través del
sudor y el hambre tenían que ver a Dios
omnipotente parado frente a ellos: "Tú
eres el Hijo del Dios viviente".
60
Tenemos que formar una idea
similar. Hemos visto a Hermana Ida
preparándo un cappuccino, limpiando
pescado, preocupada por un millón de
problemas terrenales y atormentada
por la enfermedad con todos sus
realidades a veces repugnantes. Sin
embargo, tenemos que ver en todo
esto y más allá de ellos a la gran Santa
parada frente a nosotros. Doy crédito
a Cardenal Mahony. Debido a una
aparente inspiración, en su pequeña
charla al final de la Misa funeraria usó
esta expresión "el cuerpo sagrado de
Hermana Ida".
...Ahora, para esta época y más allá,
Hermana Ida fue enviada. Ella introdujo
una "nueva manera"; todas las cosas,
todo el tiempo en coro cantan a Dios
a través de una conexión natural y
constante con él. En lugar de sacrificio,
hay amor. En lugar de piedad, hay
comprensión y la alegría que se deriva
de ella. Las cosas, todas las cosas son
razonables, alegres, bien ordenadas,
adecuadas y fáciles de explicar si vemos
a Dios a través de ellas. Servir a Dios
no es un sacrificio, es un Apostolado
61
 Gozoso. En la persona de Hermana Ida
tenemos una Santa extraordinariamente
universal ...
Este es precisamente el espíritu y el
don que este mundo necesita. La vida
de Hermana Ida no termina aquí.
Comienza aquí a gran escala a través
de ustedes.
Con cariño, Isabel
13 de febrero de 2000

Hermana Ida después de haber sido elegida Superiora

General en el Primer Capítulo en 1976.
Está de pie junto a una imagen de la Santísima Madre
que fue dibujada por Isabel Piczek

62
 Sierva de Dios
Hermana Ida Peterfy, SDSH
1922-2000
Fundadora, Sociedad Consagrada al Sagrado Corazón

¿Cuándo comienza una comunidad

religiosa? ¿Quiénes son las personas que
Dios elige y exige a una tarea de fe, fervor y
amor extraordinarios?
Esta es la historia de la acción dinámica de
Dios en la vida de Hermana Ida Peterfy y
las Hermanas de la Sociedad Consagrada
al Sagrado Corazón. No se le dieron signos
extraordinarios; solo el llamado interior de
Dios que ella reconoció y a cuál respondió
en el silencio de su corazón.
Fue en el verano de 1939 y el alcalde
de Kassa, Hungría, solicitó que las
‘exploradoras’ dirigieran un campamento
de dos semanas para niños desfavorecidos.
Ida, una joven vivaz de 16 años en ese
momento, estaba disfrutando de unas
vacaciones de verano en la hermosa
región del norte de Hungría. Le pidieron
que asumiera el rol de liderazgo y, sin
vacilar, ella renunció a sus vacaciones

63
 Ida Peterfy (izquierda) con otros exploradoras elegidas para
representar a sus países en el primer Campamento Internacional de las
'exploradoras' celebrado en 1939
para satisfacer la necesidad. Su corazón
se conmovió con los 120 niñas pequeños
que necesitaban desarrollar una relación
con Dios y también entre ellas mismas.
Para enseñarles, ella desarrolló un método
con animadas dramatizaciones y ayudas
visuales imaginativas. En el verano de
1940, Ida una vez más dirigió el programa
de campamento de dos semanas. Al final
del campamento hizo su primer retiro
silencioso de tres días.
Fue durante este tiempo silencioso de
oración y reflexión que Dios le habló a Ida
de una manera que penetraría su corazón
y alteraría su vida. Sin signos externos
ni regalos milagrosos, fue simplemente,
aunque profundamente, la Palabra de Dios
encontró un hogar en el corazón de una
joven de 17 años. La profunda comprensión
de que "Dios me conoce por mi nombre, y me
ama personalmente" y "Dios se preocupa por
los niños que enfrentan la amenaza del nazismo
y el comunismo" provocó la respuesta en
ella: "¿Quién les enseñará a estos niños acerca
de Dios?" La respuesta estereotípica: "La
Iglesia lo hará" ya no le sonaba bien. En la
oración se hizo obvio para Ida: "Tú eres la
Iglesia, depende de ti; necesitas trabajar para

65
que conozcan a Dios". Lo extraordinario
había tenido lugar: oyó la realidad del amor
personal de Dios y respondió.
Con el apoyo del director de retiros y
con la aprobación del monseñor Nicolas
Pfeiffer, su mentor espiritual, Ida estaba
lista para ofrecer su vida a Dios. Cuando
cumplió 18 años, hizo votos privados de
castidad, pobreza y obediencia en la iglesia
franciscana de Kassa, frente al Santísimo
Sacramento y en compañía de una de
las primeras miembras de la brotando
Comunidad. Así comenzó el fascinante
e inspirador ministerio de Hermana
Ida Peterfy y las Hermanas del Sagrado
Corazón que, con el tiempo, se convirtió
en una Congregación Religiosa totalmente
aprobada en la Iglesia Católica, la Sociedad
Consagrada al Sagrado Corazón de Jesús.
Mientras que Hermana Ida estaba
organizando a los jóvenes para participar
en la Consagración de la ciudad de Kassa
al Sagrado Corazón de Jesús, Hermine
Jaschko, Aurelia Majorossy y Eva Batta
fueron atraídas por su fervor y también
comprometieron sus vidas a Dios en la
Comunidad.

66
 (frente, de izquierda a derecha)
Hermana Hermine, Padre Viragh, Hermana Aurelia
Hermana Ida (justo detrás de Hermana Aurelia)
después de su primer retiro de 8 días en 1942
(la madre de Hermana Ida está atrás de Hermana Aurelia)

67
Los años de la Segunda Guerra Mundial,
seguidos por la ocupación comunista,
parecían ser los tiempos más sombríos y
menos estables en Europa. Sin embargo,
los métodos de enseñanza innovadores
de Hermana Ida y el número creciente de
compañeras demostraron ser el mensaje
de esperanza en el amor de Dios para
muchos de los maestros, jóvenes y niños de
Hungría. Sin desanimarse por las amenazas
del régimen comunista y el encarcelamiento
de Hermana Aurelia en un campo de trabajo
ruso, las Hermanas continuaron su trabajo y
sus logros apostólicos. Nunca pensaron en
dejar a Hungría. Sin embargo, después del
arresto del cardenal József Mindszenty, los
líderes de la Iglesia alentaron a Hermana
Ida a salir del país con las Hermanas para
continuar su trabajo en el mundo libre. Se
hizo evidente para Hermana Ida que Dios
tenía planes muy diferentes para ella y para
la Comunidad. Ella continuó confiando y
siguiendo la llamada de Dios.
El 14 de febrero de 1949, Hermana Ida y
una compañera se escaparon de Hungría
a Austria y prepararon el camino para que
la Comunidad siguiera. En junio de 1949,
Hermana Ida emigró a Canadá e hizo los

68
preparativos para el viaje de las Hermanas.
El 15 de agosto de 1950, Hermana Herminia
Jaschko, Hermana Eva Batta, Hermana
Aurelia Majorossy, Hermana Inez Raday y
Hermana Elena Clara Nagy llegaron a salvo
a Toronto, Canada.
Se requirió perspicacia, valor y
determinación para que Hermana Ida
y la joven Comunidad no se desviaran
de su ministerio original de educación
religiosa debido a la barrera del idioma.
Dirigir la escuela de verano para los hijos
de los productores húngaros de tabaco
llevó las Hermanas al trabajo real en la
cosecha de tabaco. A través de este arduo
trabajo, adquirieron fondos suficientes
para establecer una imprenta. Por lo tanto,
optaron trabajar con sus manos, mientras
adquerían fluidez en inglés en lugar de
comprometer su objetivo original de
educación religiosa.
En 1954, las Hermanas estaban listas para
compartir sus conocimientos espirituales y
métodos de enseñanza en inglés. Formaron
voluntarios para ser catequistas y, a través
de sus programas de liderazgo, los jóvenes
de Toronto participaron activamente en el
Año Mariano. Las Hermanas se esforzaron
69
 De la carta de Hermana Ida
a un amigo
el 24 de mayo de 1954

"El Día de María fue realmente

hermoso. Obtuve una buena
realización de cuán seriamente
los niños tomaron la idea,
y cuán devota y solemne es
cuando dan una explicación
con sus propias palabras
mientras traen sus cajas de
buenas obras al escenario .

Las Hermanas se emocionaron

al ver cuán sincero, honesto y
devoto fue todo el evento.
¡Todos prestaron atención!
¡No se necesitaba disciplina! "
Bandera del "Día de María" con cajas de
buenas obras para niños en el escenario

El "Año Mariano" en 1954 marcó el comienzo del

apostolado de la comunidad en ingles. Hermana Ida inició
una consagración solemne a la Santísima Virgen María y
desarrolló un programa espiritual para incorporar a los
niños de escuela primaria de la Arquidiócesis de Toronto a
vivir su fe cristiana católica de una manera dinámica. Esto se
logró a través de lecciones de catequesis, cartas de buenas
obras y teatro de títeres. Hermana Ida y las Hermanas
organizaron un Día de Oración para niños a gran escala
con el apoyo completo y la presencia del cardenal James
McGuigan, Arzobispo de Toronto

70
a ponerse en contacto con los recien
llegados estudiantes universitarios chinos,
y con el Método Ilustrado de Cinco Pasos de
Hermana Ida, las Hermanas se deleitaron al
descubrir que podían comunicar y enseñar
bien; desvaneciendose las barreras étnicas y
culturales.
Con el impacto de sus enseñanzas y el
ejemplo de sus vidas, las noticias sobre
el trabajo de las Hermanas comenzaron a
extenderse. En 1956, la edición canadiense
de la revista TIME había publicado un
artículo sobre la Comunidad.

Hermana Ida presentando la lección al entrevistador

de la revista TIME

71
Reconocida por varios obispos durante
el Congreso de Educación Religiosa en
Buffalo, Nueva York, se le pidió a Hermana
Ida que llevará a la Comunidad a trabajar
en varias diócesis. Aceptando la invitación
del obispo Robert J. Dwyer en noviembre
de 156, se estableció un convento en Reno,
Nevada en 1957. Simultáneamente, por
invitación del cardenal James Francis
McIntyre, abrieron la Casa Madre y
el Noviciado de la Comunidad en la
Arquidiócesis de Los Ángeles, California .

El crecimiento constante de la Comunidad

podría verse tanto en números como en
logros. Hermana Ida, Hermana Eva y
Hermana Inez fueron las primeras en dar
cursos de Formación de Maestros en la
Arquidiócesis y las Hermanas participaron
en los Programas de Educación Religiosa
y en las Escuelas de Verano de Religión.
Las jóvenes del Sur de California, el
Medio Oeste, la Costa Este y Hong Kong
ingresaron a esta vibrante, alegre y
dedicada Comunidad de las Hermanas del
Sagrado Corazón.
Durante la década de 1960, las Hermanas
dirigieron retiros juveniles, los cuales

72
ahora son populares, pero eran una gran
innovación sorprendente en esa época.
En su nuevo país continuaron su programa
favorito: campamentos de verano para
niños. Los campamentos dieron una
oportunidad para que los niños escucharan
la Palabra de Dios y se regocijaran en el
amor de Dios en medio de la belleza creada.
Se establecieron escuelas de oración para
adultos y campamentos de retiros familiares
para apoyar a la unidad familiar.
En 1970, se realizó el ministerio más
amplio de las Hermanas: llegaron a través
de los medios a un gran número de niños,
produciendo veintisiete episodios de "Mi
amigo, Pookie" a petición del Arquidiócesis
de Los Ángeles (por ABC-TV).

el obispo Connolly y Hermana Ida en el estudio de

“My Friend Pookie” (“Mi amigo Pookie”)

73
Las Hermanas estaban, sin saberlo,
perfeccionando las habilidades y talentos
que más tarde se utilizarían para producir
la famosa serie de video catequesis, el Club
del Sagrado Corazón, brindando ayuda alegre
para enseñar a los catequistas de todo el
mundo.
La confirmación de su trabajo continuo
tomó la forma del primer Capítulo General
de la Sociedad en 1976. El Capítulo
restableció a Hermana Ida como Superiora
General y sancionó las Constituciones
reformuladas por ella. Las Constituciones
fueron aprobadas por el Cardenal Timothy
Manning en 1980 y recibieron la aprobación
de la Santa Sede en 1985.
Mientras que Hermana Ida siguió siendo
la inspiración espiritual de la comunidad,
el Capítulo de 1982 eligió a Hermana Eva
Batta como Superiora General. En 1988,
Hermana Jane Stafford se convirtió en la
primera americana en ocupar el cargo de
Superiora General.
El final de los años setenta estuvo marcado
por una multitud de bendiciones, cuando las
Hermanas lanzaron el Centro de Retiros del
Corazón de Jesús en Santa Ana, California.

74
La generosidad de un bienhechor amoroso,
combinado con la enérgica recaudación
de fondos dirigida por Hermana Ida
y Hermana Jane, produjo los recursos
necesarios para adquirir una propiedad de
23 acres en Big Bear Lake, California. En
1980 las Hermanas abrieron el Campamento
de Retiros del Sagrado Corazón. Ambos
centros establecieron lugares únicos para el
trabajo continuo de las Hermanas y un firme
compromiso al enriquecimiento espiritual
de niños, jóvenes y adultos, con un enfoque
especial en el apostolado familiar.

Hermana Ida hablando en la dedicación del Campamento de Retiros del

Sagrado Corazón en Big Bear Lake durante el Campamento para Familias

En 1985, después de mucha oración,

la pequeña Comunidad reconoció la
necesidad de establecer una misión en

75
Taiwán para ayudarle al pueblo, tanto en
los campos de la medicina y la educación
religiosa.
Hermana Ida y sus hermanas pueden
encontrarse en una variedad de ministerios
de Educación Religiosa, desde enseñar a
niños, jóvenes y adultos, dirigir programas
de educación religiosa parroquial,
programas sacramentales, RICA, de hecho,
en cualquier lugar donde la Palabra y el
amor de Dios necesitan ser proclamados.

(Izq. - D) Hermana Catherine Marie, Susan Coppola (hija de Francis Ford

Coppola),Hermana Jane, Hermana Ida y Hermana Yolanda detrás de las
escenas de Educación Religiosa Dinámica y Efectiva

En respuesta a una creciente necesidad de

formación de catequistas, Hermana Ida
produjo un video curso: Educación Religiosa
Dinámica y Efectiva! A través de este, su
método catequético único, “El Método
Ilustrado de Cinco Pasos”, trae éxito a los
76
catequistas y educadores en lugares que
anteriormente estaban fuera del alcance de
las Hermanas.
Las necesidades espirituales de Hungría
y los países vecinos en Europa están cerca
de los corazones de las Hermanas. En
1992, un equipo misionero de Hermanas
fue enviado de regreso a Hungría, el lugar
donde Hermana Ida inicialmente recibió
la inspiración del Señor para comenzar la
Comunidad.
El liderazgo de Hermana Ida en la
Comunidad continuó en enseñándoles a
las novicias, dando retiros y seminarios
mensuales a las Hermanas, participando
activamente en el gobierno de la
Comunidad y viajando como oradora de
educación religiosa tanto a nivel nacional
como internacional.
Un diagnóstico de linfoma no Hodgkin en
1995 no disuadió a Hermana Ida de dar
a conocer el amor del Padre. Durante el
mismo tiempo en que ella estaba recibiendo
quimioterapia, Hermana Ida dio un retiro de
30 días a las Hermanas que recientemente
habían hecho su profesión perpetua.

77
 Hermana Ida dando un retiro de 30 días en 1995

En anticipación de la celebración del

Gran Jubileo en el año 2000, ella inspiró
espiritualmente la preparación y, con el
obispo Gerald Wilkerson, ella fue la primera
en cruzar la Puerta Santa erigida para el
evento en la propiedad del noviciado.
La vida de Hermana Ida en la tierra terminó
como había sido vivida, se centró en Aquel
a quien ella le había entregado su vida y
rodeada por sus Hermanas que se unieron
a ella en este amor. Pasó a la vida eterna el
8 de febrero de 2000 en la Casa Madre de la
Sociedad Consagrada al Sagrado Corazón
en Northridge, California.
La celebración de la Misa de Resurrección
fue de hecho una celebración. El cardenal

78
Roger Mahony, el celebrante principal,
mencionó la gracia especial y maravillosa
de este momento: "Estos son momentos
que leemos en la vida de hombres y
mujeres santos. Fuimos bendecidos, por
cualquier razón en la providencia de Dios,
de tener a Hermana Ida aquí, para tener
la oportunidad de conocerla y amarla
... también oramos para que podamos
capturar ese espíritu de Hermana Ida
en nuestro propio compromiso de fe en
Cristo, y en nuestras vidas viviríamos el
discipulado que ella vivió al máximo, y
compartió con nosotros de una manera tan
visionaria".

Imagen del "Tidings" del cardenal Roger Mahony incensando el ataúd

de Hermana Ida durante la Misa de la Resurrección
en la Iglesia de San Juan Eudes, 12 de febrero de 2000

79
"El Apostolado Gozoso debe continuar",
dijo el entonces arzobispo Justin Rigali en la
homilía durante el funeral. "Hermana Ida,
en su legado de amor generoso, todavía nos
habla". Este rito de entierro cristiano "es un
himno de alabanza y acción de gracias por
el amor de Dios manifestado en el Sagrado
Corazón de Jesús y reflejado en la vida
apacible y la devoción vivaz de nuestra
Hermana Ida".
A pesar de que la vida terrenal de Hermana
Ida ha terminado, el Apostolado Gozoso
continúa en su espíritu a través de las obras
de catequesis de sus Hermanas. Es obvio
que es Dios quien mueve los corazones de
estas dedicadas mujeres y que toman en
serio las últimas palabras de Hermana Ida:

"Creo que mi mensaje fue, desde

el primer día hasta el último,
que si no amas a Dios, no amas
a Jesús, no te amas, y luego a
la gente, entonces de alguna
manera te estás perdiendo el caso
de la vida."
El significado y el impacto de los logros de
las Hermanas del Sagrado Corazón en el
80
campo de la Educación Religiosa continúan
siendo reconocidos a nivel mundial.
Conocer a las Hermanas de Hermana Ida es
conocer el amor, la gracia y la sencillez de
Dios. Continuamente siguen la directriz de
la Santísima Madre, como Hermana Ida las
animó a hacer:

Hagan lo que
él les diga.

Hermana Ida presentando un regalo a Nuestra Bendita Madre

en el Día de las Madres en el Centro de Retiros del Corazón de Jesús,
en Santa Ana, CA

81
 Píde la intercesión de
Hermana Ida

Dios amoroso,
llamaste a Hermana Ida para enseñar
y vivir tu Verdad y tu mensaje de amor
de una manera alegre e inspiradora.

Que su ejemplo también nos inspire

a vivir en fe y atraer a otros
a tu Sagrado Corazón

Por la intercesión de tu Sierva,

concédenos la siguiente gracia que
te pedimos por tu bondad amorosa:
(aquí haz tu petición).
Te lo pedimos por medio de Cristo,
nuestro Señor. Amén
------------------------------------------------------------
Para obtener más información, solicitar materiales, compartir
un testimonio de la virtud heroica de Hermana Ida o informar
cualquier gracia obtenida por su intercesión, se comunica con:
Sociedad Consagrada al Sagrado Corazón
10480 1/2 Winnetka Ave., Chatsworth, CA 91311
[email protected]
www.sacredheartsisters.com
Del Día de Apertura, Primer Capítulo General, 21 de
junio de 1976:

Nuestra Santísima Madre tiene una parte

muy importante en nuestras vidas, y Dios
la ha puesto allí. Le imploro, como lo hago
cada vez que algo importante sucede en
nuestra vida, que ella estaría con nosotros y
nos ayudaría como lo hizo en Caná, viendo
de antemano lo que necesitamos y lo que
podría causar problemas. Y a través de la
bondad de su corazón maternal, sin que
se le obliga hacerlo, ella intervendría y
provee. Muy a menudo ni siquiera sabemos
de qué nos ha salvado. Nos ponemos en sus
manos, que ella sería quien predecirá las
cosas que ni siquiera soñamos, y que ella
nos provee. Le pedimos a su Hijo bendito,
nuestro Señor Jesús, que Él en su bondad,
haga que nuestro gozo sea completo.

Sociedad Consagrada al Sagrado Corazón

www.sacredheartsisters.com

Arte de la portada por Isabel Piczek

La boda de Caná, vidriera
Capilla del Convento del Centro de Retiros del Corazón de Jesús, Santa Ana, CA
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