BBDD ADVIENTO BACH 24

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Ambientación para todo el Adviento.

Jesús te invita a nacer con Él esta Navidad. Sabe que a veces es difícil
encontrarlo en medio de nuestro día a día, pero durante esta preparación
hacia su nacimiento, Él nos irá mostrando cómo llegar a su lado. En este
Adviento, Jesús nos lanza una cuerda guía para que la agarremos con
confianza y valentía. ¡Acepta el reto y sigue la cuerda!

Cada nudo de esa cuerda te da seguridad de no caerte, porque las propuestas


de Jesús pueden parecerte arriesgadas. Sin embargo, no temas, cada nudo
ilumina el camino a recorrer. Él te marca la ruta hacia la verdadera vida con
el Evangelio de cada domingo de Adviento. ¡Déjate guiar por Jesús, que viene
para quedarse, y CONFÍA en su amor!
1º DOMINGO DE ADVIENTO
Anúdate a Él y acoge su propuesta

Ambientación

Esta semana nos invita a abrir nuestro corazón con confianza.

Despertemos de
nuestro andar sin
rumbo y acojamos su
reto.

¡Estemos atentos,
despiertos y activos!

Quien sigue la ruta


que nos marca con la cuerda que nos ha lanzado, renacerá con él.

Reflexión

Evangelio según San Lucas 21, 25-28

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: “Habrá signos en el sol y la luna
y las estrellas, y en la tierra angustia de las gentes, perplejas por el
estruendo del mar y el oleaje, desfalleciendo los hombres por el miedo y la
ansiedad ante lo que se le viene encima al mundo, pues las potencias del cielo
serán sacudidas. Entonces verán al Hijo del hombre venir en una nube, con
gran poder y gloria. Cuando empiece a suceder esto, levantaos, alzad la
cabeza; se acerca vuestra liberación.
Tened cuidado de vosotros, no sea que se emboten vuestros corazones con
juergas, borracheras y las inquietudes de la vida, y se os eche encima de
repente aquel día; porque caerá como un lazo sobre todos los habitantes de
la tierra. Estad, pues, despiertos en todo tiempo, pidiendo que podáis escapar
de todo lo que está por suceder, y manteneos en pie ante el Hijo del hombre”.

Hoy Jesús nos dice:

“Levantaos, alzad la cabeza”. Querer anudarnos a Él significa que no queremos


escondernos, sino mirar al horizonte con esperanza. Este Adviento
afrontaremos las dificultades con la cabeza bien alta y lucharemos con
humildad y energía por superarlas.

• ¿Qué te impide a veces seguirle y agarrarte con fuerza a su propuesta?


• ¿Eres perezoso o te motivan los retos?
• ¿Confías en ti y te ves capaz de afrontar las dificultades con valentía?

Oración

Dios de la luz
y de la esperanza,
Solo para ti elevo
mi oración;
Solo en ti pongo mi confianza.
Eres el Dios de la libertad y del amor,
de la abundante misericordia y de la firme esperanza.
En este camino hasta Navidad,
Ayúdame a estar atento a tus signos
Y a tener las puertas abiertas para tu llegada.
2º DOMINGO DE ADVIENTO
Anúdate a la esperanza.

Ambientación

La Palabra de Dios nos anima a preparar el camino, a pensar dónde estamos y


hacia dónde queremos ir. Estar en el desierto nos invita a reflexionar,

Lo mejor vendrá si
eres valiente y no te
sueltas de la cuerda
guía que Él te ha
arrojado este
Adviento.

Confía en que, a pesar


de las dificultades,
siempre hay un
futuro lleno de
posibilidades y promesas si caminas a su lado.

Hay personas que nos ayudan a anudarnos a esa cuerda para no desviarnos del
camino marcado por Jesús en este Adviento.

- Ponle nombre a aquellos que te facilitan abrazar la cuerda, mantener el rumbo


o incluso en esta época tan importante de tu vida, al que te ayuda a elegir el
rumbo.
Reflexión

Evangelio según San Lucas 3,1-6

«Voz del que grita en el desierto: Preparad el camino del Señor, allanad sus
senderos; los valles serán rellenados, los montes y colinas serán rebajados; lo
torcido será enderezado, lo escabroso será camino llano. Y toda carne verá la
salvación de Dios».

Mientras nos preparamos para su llegada debemos preguntarnos qué nos falta
para ser felices y qué nos sobra y nos impide serlo. Esto es prepararse para
algo importante. Al igual que los árboles en otoño podemos soltar lo que ya no
nos sirve y desapegarnos de las formas de ser que ya no dan fruto; así,
dejaremos espacio libre para llenarnos de vida.

Esta actitud ante la vida es la que transmite Antonio Orozco en su canción


Entre sobras y sobras me faltas.

Escúchala con calma, escucha lo que le sobra y lo que le falta a él… Y


pregúntate:

- ¿Qué te sobra y qué te falta a ti?


- ¿Le puedes decir a Dios “entre sobras y sobras me faltas”?
Oración

Guíame, Señor, mi luz,


en las tinieblas que me rodean,
¡guíame hacia delante!
La noche es oscura y estoy lejos de casa:
¡Guíame Tú!
¡Dirige Tú mis pasos!
No te pido ver claramente el horizonte lejano:
me basta con avanzar un poco...
No siempre he sido así,
no siempre Te pedí que me guiases Tú.
Me gustaba elegir yo mismo y organizar mi vida...
pero ahora, ¡guíame Tú!
Me gustaban las luces deslumbrantes
y, despreciando todo temor,
el orgullo guiaba mi voluntad:
Señor, no recuerdes los años pasados...
Durante mucho tiempo tu paciencia me ha esperado:
sin duda, Tú me guiarás por desiertos y pantanos,
por montes y torrentes
hasta que la noche dé paso al amanecer
y me sonría al alba el rostro de Dios:
¡tu Rostro, Señor!
3º DOMINGO DE ADVIENTO –
Anúdate con alegría

Ambientación

Esta semana nos recuerda que caminar vinculado o anudado a Él nos llenará
de alegría.

Si en este camino
juntos regalamos lo
que somos y tenemos
al otro, surgirá la
confianza mutua y
seremos más felices.

Compartir es confiar
mutuamente los unos en los otros. Jesús nos indica lo que debemos hacer para
aferrarnos a la verdadera vida.

El tercer domingo es el de la alegría, porque ya casi llega Jesús, y es un


recordatorio de que la verdadera felicidad consiste en estar cerca de Él
Reflexión

Evangelio según San Lucas 3, 10-18

“En aquel tiempo la gente preguntaba a Juan: «Entonces, ¿qué debemos


hacer?». Él contestaba: «El que tenga dos túnicas, que comparta con el que
no tiene; y el que tenga comida, haga lo mismo». (…) Y nosotros ¿qué debemos
hacer?”

- ¿Quién no se ha sentido perdido alguna vez?


- ¿Quién sabe qué hacer en todo momento?

Jesús contesta estas preguntas a través de Juan Bautista, quien invitaba a


todos a preparar el corazón para acoger a Dios diciéndoles cómo debían
comportarse en situaciones concretas: “Compartid de lo que tenéis con quien
no tiene y necesita” o “No hagáis daño ni os aprovechéis de los sencillos y de
los indefensos”

- ¿Cómo podemos preparar el corazón para acogerte cuando nazcas de nuevo


en la próxima Navidad?

Oración

"Jesús, tú que eres la fuente de toda alegría, ayúdanos a compartir y a


caminar juntos con confianza, para que podamos vivir en amistad y unidad."
4º DOMINGO DE ADVIENTO –
Anúdate a la vida

Ambientación

Finalmente, la Palabra de Dios nos invita a no ser perezosos y a continuar


buscando a Jesús.

Aunque no veamos quién nos arrastra con su cuerda, debemos confiar en la


promesa de que Él está al final y de que renacerá en nuestro corazón.

María confío
ciegamente en el
proyecto que Dios tenía
para ella. Imítala y
proclama que llega la
“verdadera vida. Ella nos
enseña que tenemos que
tener confianza en Dios
y debemos decirle sí con
valentía.
Reflexión

Evangelio según San Lucas 1, 39-45

En aquellos mismos días, María se levantó y se puso en camino de prisa hacia


la montaña, a una ciudad de Judá; entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel.
Aconteció que, en cuanto Isabel oyó el saludo de María, saltó la criatura en
su vientre.

Se llenó Isabel del Espíritu Santo y, levantando la voz, exclamó:

-«¡Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy


yo para que me visite la madre de mi Señor? Pues, en cuanto tu saludo llegó
a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. Dichosa tú que has
creído, porque lo que le ha dicho el Señor se cumplirá».

En este cuarto Domingo de Adviento el Señor está cerca y viene a traernos


la alegría y la paz. La presencia del Señor Jesús entre nosotros nos llena de
gozo y alegría. María es quien nos lo hace cercano, quien permite que esa Luz
llegue a nosotros e ilumine nuestra vida. En su compañía comenzamos esta
última etapa de espera.

- ¿Dices sí a todas las propuestas de Jesús como María?


- ¿A cuáles dices Sí?
- ¿A qué has dicho que no?
Oración

Tiempo de Adviento,
tiempo de espera.
Dios que se acerca,
Dios que ya llega.
Esperanza del pueblo,
la vida nueva.
El Reino nace,
don y tarea.
Te cantamos Padre bueno
a la esperanza.
Con María, ayúdanos, Señor,
a vivir generosos en la entrega,
a ofrecer nuestra vida como ella,
a escuchar tu Palabra en todo tiempo,
a practicar sin descanso el Evangelio,
ayúdanos a vivir solidarios
con los que sufren,
con quienes hoy como ayer
en Belén no tienen lugar.
Tiempo de Adviento,
tiempo de espera.
Dios que se acerca,
Dios que ya llega.

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