Tema Perversiones
Tema Perversiones
Tema Perversiones
Definición: Hay que pensar la perversión como horror a la castración (al falo, no al pene), el niño frente a la
diferencia sexual anatómica lo que genera angustia, comienza a resignificar aquella amenaza que le hicieron hace
tiempo; cómo se va a defender va a depender de su vida sexual: se vuelve homosexual, fetichista o lo supera. Pero
1
que lo supere tampoco implica que no haya dificultades. El objeto fetichista es un sustito que tapa la castración de la
madre.
Freud toma el concepto de perversión de la psiquiatría clásica pero lo que hace es sacarlo de lo patológico y empezar
a pensar en la causalidad psíquica, en los mecanismos específicos de la perversión vs la perversión como algo del
niño perverso polimorfo. Ósea Freud habla de la perversión desde 2 puntos de vista:
Desde el niño perverso polimorfo en el sentido de que son las pulsiones parciales independientes una de la otra,
que hasta finalmente pasando las distintas fases del desarrollo libidinal se van unificando hasta crear a la sexualidad
adulta “normal”.
Lo que no quita que frente al horror a la castración el perverso se defiende de una manera que lo lleve a una
estructura perversa donde vuelve a la fase del autoerotismo o de la homosexualidad o genere un objeto fetiche
sustituto de esa castración.
Lo que sucede en la perversión es que el niño no puede aceptar la castración y desmiente la realidad y aflora la
perversión como estructura.
En este texto de Freud trabaja la homosexualidad masculina y va a tomar un nuevo eje teórico “la homosexualidad
sublimada” y es un texto en que escribe ligado a la noción de narcisismo. En ese análisis de un recuerdo infantil de
Leonardo pone énfasis en la constitución subjetiva que puede devenir perversa, es decir, Freud va perfilando la idea
de que las condiciones de amor y la elección de objeto van a depender de su posición en relación a 2 cuestiones: al
narcisismo y al Edipo. Va a tomar a Leonardo como el modelo de un tipo de homo masculina que elige al partener, al
obj amoroso a imagen del propio yo libidinizado, poniendo de manifiesto que se trata de una elección narcisista de
objeto, así va a trabajar Freud la génesis psíquica de la homosexualidad y evidencia un fuerte vínculo a un obj
femenino que es oralmente la madre, por la excesiva ternura que ésta desarrolla para con el niño y también en el
aislamiento del padre de esa relación. Entonces Freud dice que se reprime el amor a la madre sustituyendola a ella,
identificándose con ella y tomando como modelo a su propia persona a cuya semejanza elige los objs eróticos. Allí
Freud está señalando una “teoría psicógena del devenir homosexual”, en el curso de su constitución subjetiva y en
relación a la identidad que se producen en relación a la constitución narcisista del sujeto que amara a su partener
como la madre lo amó a sí mismo en los primeros años. De ese modo retornara un fin sexual que se satisface en sí
mismo pq el otro es el, el gusto por los objs sexuales púberes, latencia y sobre todo con la figura de la madre fálica.
En el capítulo 1 va a contar la historia de él, el cual quiere inventar un aparato que vuele (acá vamos a hablar del
buitre) y en uno de esos inventos lo que Freud va hallar es un recuerdo, una fantasía cuando estaba en su cuna. Dice
así: “parece que ya de antes me estaba destinado a ocuparme del buitre como tempranísimo recuerdo que estando
yo en la cuna, cuando un buitre descendió sobre mí, me abrió la boca con su cola y golpeo muchas veces con esa
cola suya contra mis labios”. Esta es una fantasía de felatio que Leonardo forma y traslada a su infancia. La fantasía
del buitre es una fantasía donde aparece la mitología egipcia como el buitre, la diosa Mut porque él era una persona
muy leída. Freud dice que esta es una fantasía que arma a partir de la mitología, en verdad es todo lo que vivencio
2
da vinci de pequeño: fue criado desde pequeño hasta los 5 años por su madre, su padre estaba casado con otra
señora que no podía tener hijos, entonces da vinci fue adoptado por su verdadero padre y esta señora a los 5 años;
luego de haber vivido todas las fases de su desarrollo con su madre.
Freud toma la fantasía infantil de da vinci y va a ir llenando ciertas lagunas para analizarla. Va a tratar de traducirlo a
su lenguaje privado apuntando a lo erótico, donde cola es uno de los familiares símbolos designados como la
ecuación simbólica COLA CODA= PENE, la situación de que el buitre pone la cola en la boca del niño y se empeñase
en que la fantasía de felatio es la introducción del pene en la boca. Esta fantasía de felatio es pasiva, ya que el niño
está en la cuna y el buitre le introduce la cola (fantasía homosexual pasiva). En realidad, él es como amamantado
por el buitre de la diosa Mut que es femenina, pero con pene. Si volvemos a Freud a la madre preedipica, en un
primer momento de desarrollo sexual del niño todos tienen pene incluida la madre. La fantasía de ser amamantado
por el buitre es imp porque en los antiguos egiptos la madre es como la imagen del buitre símbolo de la maternidad
porque se creía que todas estas eran hembras y no machos; y se creía que concebían por medio del viento (carácter
unisexual). Esto se relaciona con que da vinci tenia madre, pero no padre y a esto se le unió un goce que termino en
el pecho materno. Esto caracteriza a una madre tierna y muy presente. Entonces lo que hace es sustituir a la madre
por el buitre, lo que significa que el niño echa de menos al padre. Los primeros 3 o 4 años de su vida se fijan
impresiones y se abren caminos al exterior donde realiza significados.
Lo homosexual acá tiene que ver con la fijación a una etapa donde la mujer para el niño todavía tiene pene. Que el
niño pueda resignificar la castración, la pérdida del pene, la pérdida del pecho, de la caca, etc todas las pérdidas las
resignifica, la castración no es solamente la pérdida del pene, sino es justamente perder el lugar de objeto. Esto
tiene que ver con cómo se tambalea el mundo del niño cuando se da cuenta que no es el único que no está ahí, no
es solo perder su falo sino también perder la posición de falo que completa al otro; que es lo que el perverso no
soporta y va a hacer todo lo posible para sostener ese lugar, aunque ya vio la castración de la mujer, por eso
hablamos todo el tiempo de escisión psíquica. En el cual en el perverso hay 2 ideas paradójicas donde ya vio la
castración, la niega y necesita crea el fetiche.
¿Porque Freud dice que esta es una fantasía homosexual pasiva? Lo homosexual tiene que ver con la posición. Freud
dice en “pegan un niño” que cada vez que resignamos un objeto siempre hacemos un cambio, hacemos una
identificación y nos quedamos con un pedacito de ese objeto a resignar (identificación ideal). Lo que sucede en da
vinci es que este se identifica narcisisticamente con toda su madre y con respecto a esta aparentemente como una
persona con una sensibilidad homosexual. Esto se ve en la elección de sus discípulos donde elije gente muy bella, los
cuales ninguno triunfo, el los elije desde un modelo donde da vinci está ubicado en un lugar de madre que cuida a
estos discípulos como su madre lo cuido a él.
¿Cuál es el efecto de esta constelación cuando es llevado con su padre? Freud dice que esto es lo que lleva a ser un
gran investigador, querer saber de dónde vienen los niños, las teorías sexuales infantiles y qué relación tiene el
padre con su génesis.
3
En la fantasía de Leonardo, el buitre es el contenido mnémico objetivo. Freud va tratar de entender porque este
significado mnémico fue refundido en una situación homosexual. La madre que amamanta al niño (pasivo) se ha
mudado en un buitre, donde se ve lo masculino de la introducción del pene, como el pájaro llego a tener el
significado de masculinidad. La identificación fálica que, en algún momento, lo que hace el perverso es pasar a una
identificación perversa. Lo que vemos en el buitre es lo fálico a esta debilidad materna, y como esta está dotada de
masculino y femenino a la vez.
Freud va a decir que el esclarecimiento viene del lado de las teorías sexuales infantiles donde el genital masculino lo
gobierna en el interés por sus propios genitales, haya demasiado valioso como para creer que esto le puede faltar a
las demás personas. Este prejuicio es tan fuerte de que todos lo tienen que cuando ve la diferencia sexual anatómica
y dice que es chiquito, pero ya ira a crecer, esto se vuelve una representación insoportable para el perverso que no
acepta la castración. Si el niño necesita crear nuevas teorías es porque la amenaza de castración algún efecto ya
tuvo. La atracción erótica que el niño sentía por su madre culmino pronto en la añoranza de sus genitales; con el
discernimiento de que la mujer no posee pene, esa añoranza a menudo se vuelca a su contrario. Hay una fijación al
objeto ansiosamente anhelado, entonces la atracción erótica es abandonada porque ante la angustia de castración
el niño reprime todas las pulsiones eróticas hacia la madre. El perverso no acepta la castración, entonces aborrece a
las mujeres, se vuelve homosexual. Freud dice que en realidad Da Vinci busca lo femenino en el hombre, en su
psiquis todavía sostiene la idea de la lógica de la falta.
El significado la cola del buitre seria así por el hecho de que da vinci le atribuía este genital a la madre. Lo más
importante de esto es que mudaba un ser que amamantaba con un pecho materno por el buitre y le da lugar a un
carácter homosexual. Lo que dio lugar a la homosexualidad fue una ligazón sexual muy intensa con una persona del
sexo femenino (la madre). Esta madre es súper tierna que en vez de poner límites incita al goce sin que el niño lo
pida, no aparece el padre y le deja el papel de implementar la ley. En el caso de la perversión hay un goce donde la
persona no sabe que está prohibido y le genera un enigma. Entonces vemos una ligazón erótica muy intensa con la
madre o con el sexo femenino, y la ausencia del padre provoco esta curiosidad de cómo nacen los niños, quedando
el niño librado a los influjos femeninos. El amor hacia la madre está destinado a suprimirse, pero es lo que no sucede
con el perverso, el cual utiliza otros mecanismos de defensa (como poniéndose en el lugar ella) como la
identificación con la madre, y tomando a su propia persona como el modelo para buscar objetos de amor (elección
de objeto narcisista), es decir, trata de buscarse a sí mismo. Así se ha vuelto homosexual, en realidad se ha
deslizado hacia atrás (regresión) hacia el autoerotismo, los muchachos son ahora personas sustitutivas y nuevas
versiones de su propia persona infantil y los ama como la madre lo hacía con él. Hay fijación a las necesidades
amorosas hacia la madre, este es el mecanismo de defensa que deviene homosexual. La madre con una plasmación
fálica, porque si volvemos al autoerotismo decimos que la madre aun lo tiene. También esto de buscar a los hombres
es una forma de continuar siendo fiel a la madre. Cuando sale corriendo atrás de los hombres, lo que hace es huir de
las mujeres que lo podrían llevar a serle infiel a su madre. Hay una cuestión de un diario íntimo en el cual da vinci
escribe todo lo que gastaba por sus discípulos, el desembolso que hizo para el funeral de su madre; esto denotaría
un conflicto. Por obra de ese conflicto erótico con la madre ha devenido como homosexual.
4
Si bien Freud toma a la pulsión para tratar de explicar todo lo que tiene que ver con el desciframiento del proceso
perverso y la fijación, esto le va a ser insuficiente, entonces se va a centrar en las nociones metapsicológicas ante el
horror a la castración como la negación de la realidad, negación de la castración y la escisión del yo (hay 2 ideas
que conviven todo el tiempo sin influirse mutuamente, es decir, vio la castración, la niega y necesita crear un fetiche)
como algo para poder entender que claramente el proceso perverso:
Fijación como mecanismo de defensa implica una regresión y es propia de la homosexualidad. Es esencia la
defensa marxista ante la castración, reacción por la cual el niño se fijará intensamente a la representación de una
mujer provista de pene. Dicha representación permanece en lo INC.
Negación de la realidad es un mecanismo de defensa con respecto a la castración (ausencia de pene en la
madre), esto lo lleva a tal extremo de seguir sosteniendo el pene en la mujer creando fetiche (sustitutito de falo de
en la mujer). Esta operación se produce en 2 tiempos:
- 1er tiempo: la desmentida de la realidad propiamente dicha, es decir, la persistencia de una actitud estrictamente
infantil ante la ausencia del pene femenino, aunque percibida por el sujeto esa ausencia es recusada con el fin de
neutralizar la angustia de castración. Acá encontramos la diferencia con lo que ocurre en la homosexualidad, la
excitación de la representación de la madre fálica es más lábil y entonces puede producir una especie de situación de
compromiso pq puesto que la mujer carece de pene en la realidad.
- 2do tiempo: el fetichista va a encarnar el obj que supuestamente falta por medio de otro objeto de la realidad que
adquiere valor de objeto fetiche que pasa a ser la encarnación del falo. El fetiche es el sustituto del falo de la mujer
de la madre en el que ha creído el niño y al que no quiere renunciar. Es decir, la solución fetichista, la encarnación
del falo en el objeto fetiche sustrae al fetichista de la salida homosexual
Desde Freud, lo que intenta sostener el perverso a partir de esto es la mujer con pene, y después desde Lacan es ser
el único objeto que completa a la madre (el niño como falo); en todo se puede ver que hay un goce sobre el cual el
perverso cree saber, pero en realidad no sabe nada. Vamos a tratar de entenderlo desde la identificación fálica (que
es eso que sostiene el perverso) y a partir de sentir al padre como un rival vacila la identificación por medio de la
pregunta que se hace ¿Qué soy? “si yo no soy el falo que completa al otro, entonces que soy”. La elección perversa:
me vuelvo fetichista, me vuelvo homosexual o lo supero. El perverso decide no superarlo esto y hace una elección
perversa, es una adhesión singular, es algo propio con respecto al deseo y a la castración, el perverso hace algo
singular por eso se diferencia del neurótico.
Freud comienza a hablar de una identificación pregenital que es ante todo identificación fálica en la medida en que
es una identificación con el falo materno, donde su deseo lo lleva a posicionarse como objeto único y posible del
deseo de la madre (mi madre me desea a mi), como consecuencia el niño se vuelve todo con la madre y le asegura al
niño un capital de goce más allá de sus satisfacciones de sus necesidades propiamente dichas. La madre viene a
ocupar para el niño el lugar del otro y es una instigadora de goce que surge para el niño sin haberlo pedido. Lo que
5
no tolera el perverso es que la madre desea al padre, el cual aparece como privador y perturbador. El niño debe
enfrentarse con su identificación fálica (falta en la madre), con la castración que es angustiante es que cobra eficacia
la amenaza de castración y con la diferencia sexual anatómica (que viene desde la realidad) que viene a hacer
tambalear todo esto y termina por dejar presente que el objeto de deseo de la madre no es exclusivo de la persona
del niño y da como resultado la oposicion falico-castrado. El niño se enfrenta con la presencia de un deseo materno
que se manifiesta como deseo otro, el imaginario del niño lo lleva a negar la ausencia de pene, es lo que el perverso
no soporta porque si percibe a su madre como carente quiere decir que le faltan cosas. El niño se inscribe en la
perversión ilusoria ante ser el mismo el objeto que puede colmar esa falta, es decir, hay una certeza imaginaria de la
identificación fálica del niño hacia la madre que se ve confrontada con la realidad, el niño cree que es el objeto que
colma a la madre. Hay toda una apertura de un goce nuevo, que quiere decir que el niño percibe que él no es todo
para colmar a la madre, eso es lo novedoso para el niño, que es tan extraño como prohibido, puesto que el niño no
puede sentirse sino excluido de él; y el perverso se ofrece como objeto de goce del otro. Freud va a localizar el
proceso constitutivo propio de las perversiones alrededor de la problemática de la atribución fálica de la madre que
es una de las respuestas que el niño elabora frente al enigma de la diferencia de los sexos que corresponde a la
concepción de que alguna cosa que una vez estuvo allí y es vivida como faltante. Ósea la vacilación fálica va a hacer
que se pregunte por su propio deseo “sino soy el falo que completa a la madre, entonces que soy”. A partir de esta
vacilación de la fijación fálica, que tiene que ver con la intuición del padre imaginario como competidor, todo eso
produce un cambio de realidad y eso lleva a que el niño se pueda interrogar sobre su deseo.
Freud ubica la emergencia de la angustia de castración y en ella el origen de ciertas reacciones defensivas que
muestran el rechazo del niño para aceptar la diferencia de los sexos y a orientar el curso de la economía psíquica de
los sujetos. Entonces, aquello que se ponga en marcha frente a la angustia de la castración va a determinar distintas
respuestas en términos de estructura psíquica, hay 3 posibilidades:
Otras 2 donde el sujeto aceptara de modo moderado la imposición de la castración e ira sometiéndose, pero al
mismo le espera una inagotable nostalgia sintomática ante la pérdida sufrida (este es el neurótico y el histérico);
6
monumento a la castración, la vela, pero también la denuncia. A partir de esta concepción la PERVERSIÓN va a ser
para Freud la negación de la diferencia sexual, la persistencia de esas 2 corrientes (no tiene y tiene).
Los fetichistas no sienten su elección de objeto como un síntoma, elogian las ventajas que tienen en cuanto a la
satisfacción erótica que les hace sentir. El fetiche es el sustituto del falo de la mujer (de la madre) en que el varoncito
ha creído y al que no quiere renunciar. El varoncito rehusó darse por enterado de un hecho de su percepción, a
saber, que la mujer no posee pene, debido a que, si es así, su propia posesión de pene corre peligro. El muchacho
desmiente la percepción de la falta de pene en la mujer; entonces emprende una acción enérgica para sustentar su
desmentida. En lo psíquico la mujer sigue teniendo un pene que ya no es el mismo que antes era, ya que lo ha
reemplazo, fue designado su sustituto; es decir, el fetiche perdura como signo del triunfo sobre la amenaza de
castración y de la protección contra ella, y le ahorra al fetichista el devenir homosexual. Esto acontece cuando se
ha desarrollado una fuerte identificación-padre; el fetichista desempeña el papel de padre, a quien el niño había
atribuido la castración de la mujer.
Freud: “Conferencia 20° La vida sexual de los seres humanos” (1917)
Aquí Freud explica las miradas que se tiene de la sexualidad y empieza mostrando cómo la sexualidad en el ser
humano se expresa de formas diferentes entre sexualidad normal y perversa, señalando el homosexual como la
persona en la cual se ha cambiado el objeto sexual y el fetichismo como la persona en la que se afecta la meta
sexual, además se hace una relación de la sexualidad del niño con la perversión considerando así la sexualidad del
niño como perversa, porque solo busca el placer como único propósito, también dada con frecuencia en adultos y
como generalidad de esta perversión es el hecho de que no se pretende reproducirse sino una ganancia de placer.
Entre los perversos podemos encontrar: homosexual (dependiendo de la cultura), zoofilia, fetichista, pedofilia,
necrofilia, gerontofilia, sadismo, masoquismo, voyerismo y exhibicionismo.
Señala Freud que en los neuróticos (personas que enferman por la frustración de la sexualidad normal) existe latente
la homosexualidad y que estos son mucho más que los homosexuales que lo han admitido. En estas perversiones las
partes del cuerpo consideradas con mayor excitabilidad pueden ser reemplazadas por cualquier parte el cuerpo.
Todos estos “males” comienzan con la frustración de la sexualidad normal del niño cuando se le reprime
constantemente y se llega incluso al castigo físico, Freud resalta en el texto “la sexualidad perversa no es otra cosa
que la sexualidad infantil aumentada y descompuesta en sus mociones singulares”.
Joel dor va a tomar a Freud y a lacan y va a decir que el niño se para en un punto de vacilación que lo precipitara
hacia una etapa de la economía de su deseo, es decir, cuando se produce la inauguración por su deseo va o no a
asumir la castración:
En el caso del neurótico una vez que se produce todo esto (intrusión del padre imaginario, intervención por su
deseo) automáticamente este asume la castración. El pasaje del ser al tener solo se realiza en la medida en que el
7
padre se presenta ante el niño como el que supuestamente tiene el falo que desea la madre (esta es la atribución
fálica al padre)
El perverso se resiste a la castración simbólica, no soporta no ser el falo que completa al otro y no quiere saber
nada ni reconocer algo del orden de la falta en el otro. En la medida en que la intrusión paterna suscita en el niño la
idea de que la madre carente no desea al padre sino poseer el falo, por lo tanto, este pequeño se ofrece como ese
falo que colma a la madre. Entonces lo que hace es mantener indefinida la diferencia de los sexos, postula una
unisexualidad, se crea un encegecimiento fantasmático (mi madre no desea mi padre sino al falo, entonces yo me
ofrezco como tal), pero esto tiene un costo porque si es el objeto que colma a la madre se renuncia al propio deseo;
es decir, el perverso renuncia a su propio deseo.
El perverso dice: mi madre fue castrada por papa y en este sentido papa es responsable del horror de una castración
presunta y que obliga a la madre a comprometerse con el pecado del deseo; es decir, como el padre le saco el falo
(responsable), ahora la madre salió a buscarlo. El horror de la castración no existiría si la madre no se hubiese
comprometido con el padre en el pecado de su deseo; de esta manera el perverso puede entonces entregarse al
fantasma de un padre totalmente no castrado, por lo tanto, la posibilidad de una ausencia de castración.
En todo esto hay una idea de buscar un sentido al goce, y justamente una reacción ante el horror a la castración,
tratar de explicar la castración de alguna manera (construcción fantasmática que consiste en instituir a la madre
todo poderosa, idealización). Es decir, el perverso ve a la mujer por un lado como puta (aquella que siguió su deseo y
termino castrada) o como virgen, todo el tiempo oscila entre esas dos para poder responder a la castración.
Joel Dor postula que justo en el momento en donde el niño se interroga por su deseo se va a topar con 2 factores
predisponentes cuya sinergia captura al niño en la frontera de la dialéctica del ser y el tener, que serían:
La complicidad libidinal de la madre: la madre seduce al niño en la realidad, es decir, hay un llamado al goce a las
solicitaciones eróticas del niño que ocurre en el momento del Edipo. El niño ve que la madre desea al padre por eso
es un goce prohibido, pero por otro lado está toda esta incitación al goce, es decir, del lugar que ocupa el padre, la
madre no dice nada
La complacencia silenciosa del padre: el padre por un lado perturba, pero por otro lado hay una incógnita (padre
enigmático), es decir, el padre es cómplice de todo esto porque sabe todo, pero no hace nada.
Entonces, esta suspensión de significante hace que el niño este en un terreno ambiguo, que él no puede llegar a
comprender, ya que el niño está en la dialéctica del ser y el tener, es decir, “soy el que colma, pero a la vez mi
madre desea a mi padre”; si el padre no está entonces hablamos de psicosis, en cambio si el padre pone cierto freno
8
estamos del lado de la neurosis. Entonces la suspensión del significante es en el lugar del padre, que para el
perverso queda como perturbador y enigmático a la misma vez, esta cosa ambigua. Frase: “la madre del perverso no
le hace la ley al padre” directamente el psicótico no introduce la ley del padre; por otro lado la complacencia
silenciosa paterna concurre a reforzar al equívoco al autorizar al discurso materno; es decir, lo que hace el padre es
dejar a la madre embajadora de la prohibición, pero es una madre que incita y que prohíbe, es esto ambiguo todo el
tiempo; el resultado es que el principio complaciente de esta tiene por efecto confundir al niño que lo captura en las
redes de una alternativa inmanejable (soy o lo tengo? No puede dejar de ser el falo tampoco). Frase: “la alienación
del niño frente a la intriga de la seducción materna y a la injuria simbólica paterna, tiene como consecuencia esencial
el invitar al niño a reforzar el fantasma por la madre todopoderosa, y es la madre fálica a la cual no renunciara.
Perseguido por el fantasma de la madre fálica el perverso se condena de ante mano a mantener la economía del
deseo sino imposible todo esquívante con las mujeres”. La ambigüedad parental inductora como esta ambigüedad
de permisión y seducción, y un padre que prohíbe, pero por otro lado se queda mudo, le deja a la madre como
embajadora encargada de transmitir la ley, y esta última que el perverso todo el tiempo va a trasgredir y a desafiar
es la ley del padre. Freud habla de neurosis, perversión y por otro lado la psicosis, entonces podemos decir que el
niño y la niña van por un caminito y de pronto con respecto al horror de la castración lo resolvió de diferente
manera; en la psicosis no llego ahí (a la conflictiva edípica). En el perverso es transmitida tímidamente por la madre.
Desde Lacan podemos ver que este padre sería un padre real (fantasma real), donde la castración la realiza el, a la
madre y al niño (que este último no quiere ver). La complacencia silenciosa paterna autoriza a la madre a que sea la
embajadora de la prohibición, pero esta por un lado prohíbe y por otro lado incita al goce. Como efecto de esto el
niño queda confundido en una ambigüedad que lo captura en las redes de la alternativa inmanejable. Cuando Freud
habla de escisión psíquica, entonces por un lado la madre prohibidora y por otro lado incitadora al goce.
La denegación del perverso es hacia la castración (diferencia sexual anatómica), la falta y hacia el deseo de la
madre por el padre (no quiere saber nada). El perverso, por un lado, no acepta la castración, pero, por otro lado,
pero él se siente excluido de ese goce; que no se implique quiere decir que algo sabe. El perverso necesita conocer la
ley para transgredirla y desafiarla para asegurarse algo (de que la ley exista). El perverso necesita asegurarse de la
ley para poder asegurar la economía de su goce. El perverso encuentra siempre por otra parte la sanción que busca
en este desplazamiento metonímico de la transgresión puesto que esta función es el límite que remite a la
prohibición del incesto. Lo que el niño desafía es la ley del padre, que se sitúa en el registro de la dialéctica del ser.
Entonces lo que hace el perverso es imponer su propia ley (del deseo): “ser el único que completa al otro, el único
objeto que desea la madre, es la ley del perverso (su trasgresión)”.
En los manuales de diagnóstico contemporáneos no está nombrada la perversión, sino que habla de PARAFILIAS
(hace referencia a la norma) y en donde aparecen determinadas formas como pedofilia, masoquismo, sadismo,
parafilias no especificadas, exhibicionismo, voyerismo etc, pero se sacó de la perversión a la homosexualidad. Lo que
se requiere para el diagnóstico de todos estos cuadros es que haya durante 6 meses fantasías recurrentes altamente
9
excitantes, impulsos sexuales o comportamientos. Por otro lado, allí estaría faltando lo que es absolutamente
paradigmático del cuadro que es el acto perverso y hay otra cuestión que es común a los diagnósticos del DSM, en el
que se dice que debe provocar malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral o de otras áreas de la
actividad del individuo. Lacan explica la cuestión del fantasma perverso en donde el malestar clínico lo tiene el
partener del perverso.
1.¿Perversión o psicopatía?: Conviene despegar la perversión de la psicopatía pues son categorías que provienen de
campo referenciales diferentes. La perversión desde el psicoanálisis, la psicopatía desde la clasificación de él de dsm
y una larga historia específicamente psiquiátrica.
2.El perverso y la ley: Lacan, en el seminario sobre la angustia, al jerarquizar el objeto a va a plantear que el deseo
es siempre perverso porque no hay manera de desear sino transgrediendo de alguna manera la ley. Así, la antinomia
no se da entre el deseo y la ley, sino entre el deseo-ley versus goce. El goce refiere al usufructo de la cosa, sobre el
cual la ley (que hace al deseo) pone límites al generar su sustracción. Así plantea Lacan que perverso y neuróticos
están ubicados dentro de la dialéctica deseo-ley, ninguno tiene modo alguno de acceder al goce inefable de la cosa.
Cuando Lacan dice que el deseo es perverso solo expone que no hay un objeto natural ni para el deseo ni para la
correlación de los sexos; ya que los objetos del deseo son el resultado de una sustitución y de un desplazamiento.
La concepción del deseo como perverso echa por tierra también aquello de que la renegación (desmentida de la
castración) pueda ser la referencia clave para ubicar la posición del sujeto perverso. No es posible sostener la
división en las estructuras clínicas: represión para neurosis, renegación para la perversión, y la forclusión para la
psicosis.
Lacan buscara otros caminos para ordenar la diferencia entre las estructuras. Se orienta por la lógica del fantasma y
la castración del Otro.
Refuta la concepción de que el perverso desconozca la ley y por eso sea un transgresor que la desafía. Al contrario, el
perverso no desafía la ley sino la hace cumplir ciegamente.
3.El fantasma perverso y el fetiche: luego de la formulación del objeto a cambia su concepción de la estructura
perversa, ya no pone el acento en el fetiche relacionado con el falo, ahora da preeminencia a la cuestión del fetiche
vinculado con el objeto a. Se trata del fetiche como objeto que tapona la castración del Otro. En la estructura del
fantasma del perverso el fetiche no es el objetivo del goce perverso, sino el objeto causa de goce. En la perversión el
sujeto se sirve del fetiche para sostener su deseo y su goce que se halla del lado del objeto, tomando la estructura
del fantasma perverso la siguiente fórmula (a<>$):
El deseo perverso soportado por el fetiche sustenta la voluntad de goce y que producen el desmayo del partener ($),
estratagema con la que intenta tapar la castración del Otro y producir el sujeto puro, no castrado (S). Condición de
más para angustia ver a cualquier partener, y para hacer dificultosa la instauración de la transferencia con un
perverso.
En el seminario 10, Lacan dice si el Otro (-A-) nunca es autentificable por completo es porque está castrado, y esto es
lo que no soportan ni el neurótico ni el perverso: anhelan un Otro autentificable, más aún, se ofrecen para
10
autentificarlo para así suponer que cuentan con sus garantías. Pero neurótico y perverso difieren en la manera en
que intentan autentificarlo al Otro:
El neurótico reniega de la falta del Otro, pero soporta que “no sea así” e insiste, la division subjetiva está
plenamente del lado del Otro por ello apela a la demanda para hacerse reconocer por el Otro. El objeto queda como
resto de la operación del sujeto en el campo del Otro.
El perverso, es tajante en la renegación, por eso su jugada es más fuerte, no la tapa con el falo imaginario (-ᵠ), la
etapa con el fetiche y de allí obtiene su certidumbre; el sujeto se sirve del fetiche para sostener el deseo que se halla
del lado del objeto, asumiendo la estructura del fantasma perverso la siguiente forma (a<>$). El objeto queda en la
zona del sujeto, lo cual habla de los profundos impasses en el establecimiento de la transferencia, así como del
interrogante sobre la verdadera posibilidad del análisis del perverso. El sujeto se sirve del fetiche para sostener el
deseo que se halla del lado del objeto.
Lacan resume la posición perversa dura: ubica la voluntad del goce del lado del sujeto que produce el desmayo del
partenaire. Todo esto nos permite ver las dificultades para el establecimiento de la transferencia con el perverso.
Desde Teórico
En Freud hay varias conceptualizaciones respecto de la perversión: la perversión vista como la persistencia de una
fijación a una pulsión parcial, como un retraso en el desarrollo hacia la pulsión genital, una detención en tal o cual
placer preliminar al acto sexual normativo. Sin embargo, Freud va a terminar concibiendo a la PERVERSIÓN en una
articulación por y con el complejo de Edipo; y en la enseñanza lacaniana es esa lectura lo que va a dar lugar a la idea
lacaniana de la perversión.
Es a partir de la falta en el otro que el sujeto tiene el primer encuentro con el deseo, es solo a partir de perder algo
que un sujeto puede instaurar para él la posibilidad de sujeto deseante. Recuerden la definición de Lacan, la
castración quiere decir que “un goce debe ser rechazado para poder ser realcanzado en la escala invertida de la ley
del deseo”, es decir, significa que es posible instaurar un deseo a partir de una falta. Allí podríamos ubicar el punto
de báscula del perverso, dado que se encierra en la representación de una falta no simbolizable que aliena al
perverso en una dimensión de recusación como defensiva inagotable, ejercida incansablemente en relación a la
desmentida o renegación de la castración en la madre. Es decir, hay un momento en que para el sujeto futuro
perverso se obtura la posibilidad de acceso a la castración simbólica donde sabemos que es lo real de la diferencia
de los sexos, lo que es promovido como causa del deseo.
Esto que Lacan escribe “el sgte de la falta en el otro” es la castración del otro, hace a la problemática perversa en la
medida en que ese sgte de la falta en el otro, que debería ser lo que conduzca al niño a abandonar el registro del SER
en beneficio del registro del TENER esta problematizado. Este pasaje puede producirse en tanto el padre simbólico
aparece ante el niño como el poseedor de lo que la madre desea, en función de una mediación estructurante de la
prohibición del incesto. En el PERVERSO de esa figura del padre simbólico no quiere saber nada pq ese padre
simbólico implicaría reconocer algo del orden de la falta en el otro y la renegación es la recusación de toda
posibilidad de simbolizar esa falta. Es decir, en el funcionamiento perverso encontramos una verdad referente al
11
deseo de la madre que es encontrada y negada, el sujeto se encierra en la convicción contradictoria en la que: por
un lado, la intrusión de la figura paterna le deja entrever al niño que la madre, que no tiene falo, desea al padre pq el
es quien lo tiene; pero por otro, si la madre no lo tiene podría tenerlo sin embargo, es decir, para el yo basta con la
atribución imaginaria fálica, atribución que anula la diferencia entre los sexos y la falta que la diferencia entre los
sexos actualiza y es la consistencia entre esas 2 opciones lo que le impone un cierto perfil al deseo que constituye la
estructura misma del funcionamiento perverso se trata de una ley ciega que tiende a sustituir la ley del padre, es
una ley imperativa del deseo que se ocupa de no ser referida jamás al deseo del otro. No se trata de la ley en la
escala invertida en la ley del deseo que implica a la falta, si el otro está en falta es que es posible constituir el deseo
como del deseo del otro, y por lo mismo que la ley del deseo es recusada para el PERVERSO se fija de manera arcaica
puesto que, frente al hecho de tener que renunciar al obj primordial (falo), lo que hace el perverso es renunciar al
deseo, pq el deseo tal como lo regula la castración, siempre es deseo de cosa.
La economía psíquica particular del perverso implica que se vea sustraído ese al deseo, con lo cual permanece fijado
en una gestión ciega que lo lleva a sostener que la única ley del deseo es la suya, y no la del otro y eso es lo que
permite los rasgos estructurales que caracterizan al perverso, para el cual el DESAFÍO y la TRANSGRESIÓN son las 2
únicas vías posibles de su deseo.
La renegación recaería sobre la cuestión del deseo de la madre por el padre y por lo tanto hay renegación de la
diferencia de los sexos, pero a la vez si algo es renegado es pq previamente se tiene una noticia de ello. Entonces,
por un lado, el perverso reconoce lo real de la diferencia de los sexos, pero recusa sus implicancias y como
consecuencia cae la causa sgte del deseo. Con lo cual podríamos decir que el perverso se esfuerza por mantener la
apuesta de una posibilidad de goce capaz de eludir esa causa sgte. Esto hace que el perverso tenga siempre una idea
muy cabal de donde está la ley, osea, para poder transgredirla hay que poder reconocerla, ya que la trasgresión es el
elemento correlativo e inevitable del desafío.
- Uno se ordena alrededor del fetichismo como la “perversión paradigmática” presente en el sem 4, 5 y 10.
- Otro que gira alrededor del sem 16 en donde la perversión paradigmática va a ser el masoquismo.
Lacan va a ordenar todo eso y va a buscar en Freud como no se trata del órgano real sino del falo imaginario y
simbólico. Y esa argumentación lacaniana se va a ordenar en 3 tiempos tomando la elaboración freudiana:
Primer tiempo, la madre no tiene el falo, designa lo que le falta. Entonces el niño puede hacerse para ella obj
fálico como imagen, lo cual es anotado por Lacan como “fi minúscula”. Y esto produce un
Segundo tiempo, el niño se pregunta ¿cómo estar a la altura del deseo de la madre? Dice Lacan, de lo imposible
de responder nace la angustia de castración. Es decir, ser el objeto fálico imaginario para colmar el deseo de la
madre es la angustia misma de ser tragado por ella.
Tercer tiempo, la madre tiene el falo. Y esa es la desmentida, la renegación de la primera posición según la cual la
madre no tiene el falo. Dice Lacan allí el sujeto puede respirar, postula el fetiche como sustituto del falo, allí donde
12
falta en ella el falo simbólico el sujeto sitúa a un fetiche como falo imaginario. La mujer por lo tanto tiene el falo en el
marco del hecho de no tenerlo dice Lacan, hay una disyunción. Por eso en ese primer momento de la obra de Lacan
el fetiche se torna el paradigma de toda perversión, es decir, esa disociación por el lado del obj materno tiene efecto
de spliting por el lado del sujeto, él es el falo y no lo es, pq la madre no lo tiene en cuanto deseante y lo tiene como
fetiche en cuanto está colmada, así el sujeto va a parar a una posición singular, porque no elige entre ser y no ser el
falo.
El FETICHE es una defensa contra la angustia del deseo de la madre; por eso es que tiene la misma función que la
Fobia, instalar una protección frente al peligro de ser devorado por el deseo insaciable del otro materno. Esto lo
podemos volver a ver a la PLACA GIRATORIA, cuando hablamos de FOBIA, frente a la angustia del deseo de la madre
tenemos 2 tipos de objs posibles:
Objeto fobígeno: creado por represión y desplazamiento. Donde había angustia flotante, el objeto tiende a
evitarla, ya que está solucionando un conflicto de ambivalencia.
Objeto fetiche: creado por desmentida y escisión. Este objeto desmiente y obtura la castración, es el significante
del falo en la mujer (sustituto de pene en la mujer) y es el monumento a la castración.
En el sem 10 de la angustia, al jerarquizar el objeto <a> va a plantear que el deseo es siempre perverso pq siempre
el deseo implica transgredir una ley, vinculado a lo prohibido. Y en el sem de “la lógica fantasma” sigue esa misma
línea en donde Lacan enfatiza la oposición deseo-ley por un lado VS goce por el otro. El GOCE en Lacan va a referirse
a lo que denomina el usufructo de la cosa, sobre la cual después viene la ley y es esa ley la que hace al deseo, es
decir, en eso encuentra la antinomia ley-deseo, por un lado, goce por el otro. Cuando Lacan dice que el deseo es
perverso está diciendo que no hay objeto natural para el deseo, no hay obj natural correlativo a los sexos; los objs
del deseo son resultados de una sustitución y un desplazamiento, es decir, el resultado de una SUBVERSIÓN. O sea,
Lacan completa la demolición de las ideologías de la normalidad que había comenzado Freud.
Lacan va a decir es el PERVERSO es el que más afianzado a la ley está, pq son los últimos creyentes pq se trata de la
TRANSGRESIÓN, impostura que precisa del fetiche como condición para tratar de tapar la castración del otro.
En el sem 10 se produce uno de los giros que tiene que ver con el modo en que conceptualiza el FETICHE. Una vez
que formula su concepto del obj <a> ya no pone el acento en el falo, lo va a pensar mas en términos del OBJ <a> al
fetiche, es decir, se trata del fetiche como el objeto que tapona la castración en el otro.
Tanto en el sem 10 como en el 14 va a replantear la ESTRUCTURA PERVERSA, donde el FETICHE va a ser causa
también del sadismo y del masoquismo, es decir, el fetiche no es el objetivo de goce del perverso, sino el objeto
causa de goce del perverso, y es que en la perversión el sujeto se sirve del fetiche para sostener su deseo y su goce
que se halla del lado del objeto. Es decir, el deseo perverso soportado por el fetiche (objeto) sustenta la voluntad de
goce (la forma que toma el deseo en la perversión) que produce el desmayo, la angustia del partener, estratagema
con la que intenta tapar la castración del otro y producir un sujeto puro y no barrado, no castrado. Tal es el cálculo
del sujeto en la perversión, condición demás para angustiar a cualquier partener y hacer dificultosa la instauración
13
de la transferencia con un perverso, ya que el no se considera enfermo y además la angustia es la del partener. Acá
no hay una pregunta, sino sólo una voluntad de goce que está al servicio de angustiar al partener y de obtener un
goce puro; por eso el perverso es el más creyente, el que sostiene la posibilidad de ese goce, de ese objeto puro.
Entonces, Lacan va a decir que solo la lógica del fantasma hace posible distinguir la posición del sujeto ante el deseo
del otro tanto como neurótico tanto como perverso. Si el otro nunca es autentificable por complejo es pq esta
castrado y esto es lo que no soportan ni el NSS ni el PERVERSO, anhelan otro AUTENTIFICABLE, se ofrecen para
autentificarlo para así suponer que cuentan con sus garantías. Ellos difieren en la manera de intentar autentificar al
otro:
- En el perverso: funciona la renegación que es más tajante, su jugada es más fuerte porque tapa con el fetiche y
allí obtiene su certidumbre.
- El neurótico: no quiere ver la falta del otro, pero no es categórico, termina soportando que no sea así.
FANTASMA NEURÓTICO ($<>a), donde la división subjetiva es del lado del otro (el perverso produce eso en un
neurótico). El objeto queda como resto de la operación del sujeto en el campo del otro, el sujeto se hace la pregunta
qué significó para el otro en términos de una división y en el encuentro con el otro da como resto un objeto.
FANTASMA PERVERSO (a<>$), es decir como el neurótico enmarca en el fantasma el obj <a> y como lo hace el
perverso. El sujeto se sirve del fetiche para sostener el deseo que se halla del lado del objeto.
En el NSS hay incertidumbre: como me quiere, que me quiere, es decir, no soy el falo del otro; en el PERVERSO al
revés, hay certidumbre. Entonces, desde el lugar de objeto el perverso produce la división en el partener, en el otro.
A partir de allí Lacan hace un desarrollo más claro de la perversión y se va a ocupar del fetichismo, del sadismo, del
masoquismo, etc y sobre todo va a ser del masoquismo el paradigma de la perversión.
En el sem 16 Lacan profundiza la idea de la posición del sujeto perverso como identificación con el objeto <a> para
servir como instrumento del goce del otro. Acá Lacan trabaja la idea de diagnóstico diferencial (aquello que
diferencia nns, perversión y pss):
- La NSS presenta una clínica de la pregunta. En la nss se constituye un cuerpo vaciado de goce, el goce queda fuera
del campo, pero también fuera del otro.
- En la PSS presenta una clínica de las respuestas sin que se haya formulado la pregunta . en la pss hay una invasión
de goce en el cuerpo (esquizo) o bien la identificación del goce en el lugar del otro (paranoia).
- En el PERVERSO hay una clínica de la demostración. En el perverso el goce si bien está perdido como en la nss, hay
voluntad de goce, está la orientación hacia la recuperación del goce y devolverlo al otro.
NSS, PSS y PERVERSIÓN son estructuras subjetivas, el sexo masculino es el sexo débil respecto de la perversión pq
estamos ligando la perversión a la angustia de castración, y la angustia de castración funciona con mas especificidad
en el hombre.
14
La función del FANTASMA en la NSS es la de sostener el deseo, en el PERVERSO voluntad de goce. El NSS otorga al
fantasma el papel de sostener su deseo desfalleciente pq no dispone de un deseo fuerte o decidido. ¿Cómo
definimos las variedades de la NSS? Por el modo de sostener el deseo:
Nss obss deseo imposible: para sostenerlo el obsesivo se aleja de las situaciones o lugares en los que el deseo
puede estar en sujeto, poniéndose obstáculos de paralización.
Histeria deseo insatisfecho: para sostener el deseo cultiva la insatisfacción en el deseo del otro. La histeria se
acerca, produce situaciones en las cuales está puesto el deseo, como la manera de mantener y estimular el deseo; a
través de su insatisfacción y de la insatisfacción del deseo del otro.
Fobia deseo prevenido: el fóbico reconoce un deseo y lo evita por las consecuencias que pueda traer. No es que
hay ausencia de deseo, hay deseo, pero frente a ese deseo lo que hay es toda una serie de precauciones para
evitarlo.
El neurótico no es un hombre de deseo, tiene un deseo débil, cobarde y para sostener al nivel del deseo tiene que
acentuar su insatisfacción, su imposibilidad o prevenirse. Para ello se sostiene también en su fantasma para darle
consistencia al deseo que el neurótico no conduce al acto, está todo el tiempo en la pregunta, incertidumbre. El
cumplimiento de deseo es casi alucinatorio (sueño, fantasías) mientras que el acto que es el verdadero
cumplimiento de deseo suele resultar evadido en el neurótico.
El perverso sabe que la relación sexual no existe, que no hay goce sexual, que el goce sexual es asexual y el sabe
cómo sostenerlo. La instauración del valor de goce a partir de la negativización de un cierto órgano sexual, el cual es
decisivo para el perverso, pondría en evidencia su carácter accesorio. Ej: cuando el perverso dice, no, es el fetiche,
no, es la botella, no, es la exhibición, la mirada; está diciendo que no es el pene, eso es accesorio, yo sé cómo. De allí
que el perverso articula el fantasma en relación con el goce del acto sexual pero no refutando ese acto, o sea, en
lugar del acto pone otra cosa, la mirada, como exhibición, voyeurismo, el fetiche, etc. El perverso es por eso un
demostrador, sabe que la complementariedad hombre mujer no existe y debe ser constituida por otro recurso de
producción de goce; pone el acento (no en la interrogación como el neurótico) en la demostración, hace evidente
que esa complementariedad a la que aspira el neurótico no existe. Por ej: en el caso de Leonardo se sustituye por la
complementariedad entre madre-hijo, el sujeto se identifica con la madre y desde allí elige objetos que lo
representan al niño. Otra forma seria en la relación entre objeto <a> y Otro, y tenemos el segundo tipo de
perversiones (pares opuestos). El NSS no sabe, es el lugar de la incertidumbre, en la PSS el otro es el que sabe, el
PERVERSO es el que sabe (sabe de la castración del otro, de sus carencias, pero sabe cuáles son los recursos
necesarios para recuperarla). El perverso tiene la creencia de la posibilidad de recuperar el goce, por eso es el más
creyente, pero esto no significa que su goce sea sin límites o mayor que el de otro sujeto, pq su goce permanece en
lo fantasmático, es una escenificación; tanto en la NSS como en la PERVERSIÓN el goce es fantasmático.
En el sem 4 (cap 9) Lacan va tratando cada una de las perversiones y habla de la función del velo en la perversión
que oculta y a la vez designa la falta del otro. La tarea del perverso sería ocultar la falta fálica de la madre a la vez
que el velo que pone designa aquella falta evidenciada. Entonces, el velo oculta la nada que está más allá del objeto
15
en cuanto deseo del otro, la madre no tiene el falo, pero al mismo tiempo el velo es el lugar en el cual se proyecta la
imagen fija del falo simbólico, la madre tiene el falo. A partir de eso Lacan divide las perversiones en aquellas en las
que la proyección de la imagen fálica que oculta y designa la nada en el otro es lo que el sujeto coloca delante de el,
entonces habla de las perversiones que implican colocar algo delante del velo y de las perversiones detrás del velo:
2) En las Perversiones de detrás del velo: aquello que puede ser puesto por un sujeto al identificarse con la madre.
Entonces habla de lo que se pone detrás del velo, allí habla de:
El travestismo: así como el impermeable del exhibicionista es como una especie de fetiche necesario para el
exhibicionista, en el travestismo hay algo que se asemeja a esto, hay un envolverse en trajes femeninos en una
identificación del sujeto masculino con la madre poseedora del falo, o sea, se trata de un cuerpo con falo que se
envuelve en ropas femeninas. La protección contra la angustia es exitosa y se trata de ocultar la falta de objeto, es
preciso que siempre sea posible pensar que está precisamente donde no está, o sea, en esa figura femenina donde
precisamente no está, que se pueda pensar que esta.
El sadismo: el látigo, el basto, presentifican la imagen fálica, la identificación con la madre que lleva los
pantalones para protegerse de la angustia.
El exhibicionismo: así como en el voyerismo vimos la cuestión de la hendidura, el exhibicionista no es espía,
entreabre su pantalla, como un pantalón que se abre para ofrecerse a la vista del otro y tocarlo más allá de su pudor
y ponerse a merced a su deseo. Lacan decía que la técnica del acto de exhibir consiste en mostrar lo que tiene en la
medida en que el otro no lo tiene, se trata de revelar al otro lo que supuestamente no tiene para hundirlo en la
vergüenza de lo que le falta, presentifica a la madre como si en ella no hubiera falta.
16
La homosexualidad masculina: en el sujeto se trata de su falo, pero en cuanto va a buscarlo en otro, pq se
identifica con una madre que debe tenerlo, es decir, en el lugar que ocupa la madre que hace la ley para el padre. El
homo puede demandar a su partener es que muestre lo que tiene, es decir, hay una inversión, esta identificación
con la madre, Lacan toma a Freud y dice, el joven ha estado fijado a su madre en el complejo de Edipo y con una
intensidad grande, al complementarse el proceso de la pubertad llega el momento de permutar a la madre por otro
objeto sexual, sobreviene entonces una inversión. El joven no abandona a su madre, sino que se identifica con ella y
ahora busca objetos que puedan sustituir al yo de él, y que él pueda amar y cuidar como lo cuido su madre. En ese
punto Lacan retoma a Freud y dice, la identificación (no con el deseo de la madre y tampoco con su amor) con su
goce, hay repetición del mismo goce por inversión, el hijo en tanto fue el objeto del goce del otro, lo perpetúa
gozando a su vez de un objeto semejante a lo que él mismo fue, hay narcisismo en materia de elección del objeto,
pero al servicio del goce del otro que debe mantenerse.
Preguntas:
1) ¿Cómo es el deseo en el perverso?
2) ¿qué función cumple el objeto fetiche en la perversión?
3) Explique el vínculo del perverso con la ley.
4) Describir perversión, objeto fobígeno y fetiche.
5) Explicar la crítica a la indiferencia que hace el DSM sobre neurosis y perversión.
6) ¿Cómo caracteriza Freud la perversión? Ejemplifique con el caso Leonardo.
7) Que corresponde calificar de perverso en la neurosis ¿La fantasía o la pulsión? De serlo ambas ¿En qué sentido
podrían ser calificadas de perversas?
17