proyecto-dana-miñaca
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PROBLEMA DE INVESTIGACIÓN:
A pesar de la creciente evidencia que vincula la alimentación con la salud y el
bienestar, existe una brecha significativa en la disponibilidad de información
práctica y accesible sobre nutrición, debido a que la mayoría de las guías
nutricionales son generales y no abordan las necesidades específicas de cada
persona, además de la escasez de herramientas y recursos disponibles para
ayudar a las personas a implementar cambios en su alimentación, por tales
razones se determina como problema del proyecto:
La necesidad de desarrollar y difundir estrategias nutricionales
personalizadas y accesibles con un carácter preventivo, en función de
mejorar la calidad de vida de las personas y empoderarlas para tomar
decisiones sobre su salud.
Preguntas de investigación:
¿Cómo puede una intervención nutricional personalizada, basada en un
recetario y talleres de cocina, mejorar la calidad de vida de las personas?
MARCO CONCEPTUAL:
Este estudio se basa en la premisa de que la alimentación desempeña un papel
fundamental en la salud y el bienestar, especialmente en personas con
enfermedades autoinmunes como el lupus. A través de un enfoque
personalizado y centrado en el empoderamiento, se busca demostrar que la
cocina terapéutica puede ser una herramienta eficaz para mejorar la calidad de
vida de estas personas. El marco conceptual se fundamenta en el modelo de los
determinantes sociales de la salud y la teoría del comportamiento planificado, y
postula que al proporcionar información nutricional personalizada y talleres de
cocina, se puede aumentar el conocimiento, la confianza y la motivación de las
personas para adoptar hábitos alimentarios saludables y mejorar así su estado
de salud general.
Modelo de los determinantes sociales de la salud y la teoría del
comportamiento planificado.
Este modelo postula que la salud de un individuo no solo depende de factores
biológicos, sino también de una amplia gama de factores sociales, económicos
y ambientales. Estos determinantes pueden clasificarse en diferentes niveles:
Macrosociales: Políticas públicas, sistemas económicos, distribución de la
riqueza, desigualdad social.
Meso sociales: Condiciones de vida, acceso a servicios básicos, entorno físico,
comunidades.
Microsociales: Redes sociales, apoyo social, características individuales (edad,
género, educación).
Teoría del Comportamiento Planificado
Esta teoría sugiere que la intención de una persona de realizar una determinada
acción (como adoptar una dieta saludable) está influenciada por tres factores
principales:
Actitud hacia el comportamiento: Las creencias sobre las consecuencias
positivas o negativas de realizar una acción.
Norma subjetiva: La percepción de la presión social para realizar o no realizar
una acción.
Control percibido del comportamiento: La creencia en la propia capacidad para
realizar una acción.
Relación con la alimentación: La teoría del comportamiento planificado puede
explicar por qué algunas personas adoptan hábitos alimentarios saludables y
otras no. Por ejemplo, una persona puede tener una actitud positiva hacia una
dieta saludable, pero si percibe que no tiene el tiempo o los recursos necesarios
para prepararla, es menos probable que la adopte.
Relación con la alimentación: Los determinantes sociales influyen en la
alimentación de diversas maneras.
Disponibilidad de alimentos saludables: El acceso a frutas, verduras y alimentos
frescos varía según la ubicación geográfica, el ingreso económico y la
infraestructura de los mercados.
Costos de los alimentos: Los alimentos ultra procesados suelen ser más baratos
y accesibles que los alimentos saludables, lo que puede llevar a una dieta
desequilibrada en poblaciones con bajos ingresos.
Cultura alimentaria: Las tradiciones culinarias y las normas sociales influyen en
los hábitos alimentarios de las personas.
Educación nutricional: El conocimiento sobre nutrición y la capacidad de tomar
decisiones informadas sobre los alimentos varía según el nivel educativo.
Basándonos en los elementos y teorías ya mencionados, podemos
profundizar en algunos aspectos clave y añadir nuevas dimensiones:
Microbiota intestinal: La relación entre la alimentación y el microbiota intestinal
es un área de investigación en auge. Podemos explorar cómo ciertos alimentos
pueden modular la composición del microbiota y, a su vez, influir en la salud y el
bienestar.
Inflamación: La inflamación crónica es un factor clave en muchas enfermedades,
incluido el lupus. Se puede explorar cómo la alimentación puede modular los
procesos inflamatorios y mejorar los síntomas de la enfermedad.
Nutrigenómica: Esta disciplina estudia cómo los genes interactúan con los
nutrientes. Se puede considerar cómo las variaciones genéticas pueden influir
en la respuesta individual a diferentes alimentos y nutrientes.
Dimensión Psicosocial:
Teoría de la autoeficacia: Esta teoría sugiere que la creencia en la propia
capacidad para llevar a cabo una tarea (en este caso, seguir una dieta saludable)
es un factor importante para el éxito.
Modelo de los motivos de salud: Este modelo explica cómo diferentes motivos
(intrínsecos y extrínsecos) pueden influir en la adopción de hábitos saludables.
Soporte social: El apoyo de familiares y amigos puede ser crucial para mantener
nuevos hábitos alimentarios.
Dimensión Socioeconómica:
Accesibilidad a alimentos saludables: Se puede analizar cómo factores como el
costo, la disponibilidad y la educación nutricional influyen en el acceso a
alimentos saludables.
Desigualdades en salud: Se puede explorar cómo las desigualdades sociales y
económicas afectan la salud alimentaria y el acceso a recursos de salud.
La Dieta Autoinmune y Protocolos Específicos:
Protocolo Autoinmune (AIP): es un enfoque dietético y de estilo de vida diseñado
para reducir la inflamación en el cuerpo y mejorar los síntomas asociados con
enfermedades autoinmunes. Al eliminar alimentos que comúnmente
desencadenan reacciones inflamatorias, el AIP busca ayudar al sistema
inmunológico a restablecer el equilibrio y reducir la actividad de la enfermedad.
Los FODMAPs son un grupo de carbohidratos de cadena corta que, en algunas
personas, pueden fermentar en el intestino grueso y causar síntomas
gastrointestinales como dolor abdominal, hinchazón, gases y alteraciones en el
ritmo intestinal.
Fructuosa: presentes en el trigo, cebolla, ajo, alcachofa.
Oligosacáridos: presentes en legumbres, granos integrales.
Monosacáridos: fructosa en exceso (frutas como manzana, pera).
Polioles: sorbitol, manitol (edulcorantes artificiales, frutas deshidratadas).
Esta dieta está diseñada principalmente para personas con síndrome del
intestino irritable (SII). Al eliminar los FODMAPs, se reduce la fermentación en el
intestino y, por lo tanto, se alivian los síntomas.
Beneficios de la dieta baja en FODMAPs:
Alivio de los síntomas del SII: Reducción del dolor abdominal, hinchazón y gases.
Mejora de la calidad de vida: Permite a las personas con SII disfrutar de una vida
más normal.
Identificación de alimentos desencadenantes: Ayuda a identificar qué alimentos
específicos causan los síntomas en cada persona. Dieta mediterránea: Analizar
cómo los principios de esta dieta, rica en alimentos vegetales, grasas saludables
y antioxidantes, pueden contribuir a reducir la inflamación y mejorar la salud en
general.
Alimentos permitidos y restringidos:
Permitidos:
Carnes: pollo, pavo, pescado.
Lácteos: leche sin lactosa, quesos duros curados.
Cereales: arroz blanco, maíz, quinoa.
Frutas: plátano maduro, mango, melón.
Verduras: zanahoria, pepino, lechuga.
Restringidos:
Frutas: manzana, pera, cereza, melón.
Verduras: brócoli, coliflor, cebolla, ajo.
Legumbres: garbanzos, lentejas, frijoles.
Granos: trigo, centeno, cebada.
Lácteos: leche entera, yogur.
El Rol de la Psicología y el Comportamiento:
Teoría de la autodeterminación: La Teoría de la Autodeterminación es un marco
teórico en psicología que busca comprender por qué las personas hacen lo que
hacen. Desarrollada principalmente por Edward Deci y Richard Ryan, esta teoría
sostiene que los seres humanos tienen una necesidad innata de crecer y
desarrollarse, y que esta necesidad se manifiesta en tres necesidades
psicológicas básicas:
Autonomía: La necesidad de sentirse en control de nuestras propias acciones y
decisiones. Es decir, de experimentar un sentido de elección y voluntad en lo
que hacemos.
Competencia: La necesidad de sentirse capaces y efectivos en lo que
emprendemos. Deseamos sentirnos competentes y capaces de superar
desafíos.
Relación: La necesidad de sentirnos conectados y vinculados con otros seres
humanos. Buscamos relaciones significativas y un sentido de pertenencia.
La Teoría de la Autodeterminación tiene implicaciones en diversos ámbitos,
como la educación, la salud, el trabajo y las relaciones interpersonales. Al
entender estas necesidades básicas, podemos fomentar la motivación
intrínseca, mejorar el bienestar y optimizar el rendimiento.
El papel del entorno: El entorno social y físico puede facilitar o dificultar la
satisfacción de estas necesidades. Un entorno que promueve la autonomía, la
competencia y las relaciones sociales fomenta la motivación intrínseca.
La Importancia de la Comunidad y el Apoyo Social:
El apoyo social es un pilar fundamental en cualquier proceso de cambio,
especialmente cuando se trata de adoptar nuevos hábitos como una dieta
saludable, aportando un mayor sentido de pertenencia, al formar parte de una
comunidad, las personas se sienten más conectadas y apoyadas, lo que
aumenta su motivación para seguir adelante. Permite compartir experiencias,
intercambiar opiniones, consejos con otros que enfrentan desafíos similares
puede ser muy valioso. El apoyo mutuo crea un sentido de responsabilidad, ya
que las personas se sienten motivadas a mantener sus compromisos para no
defraudar a los demás. Las comunidades pueden ofrecer una amplia gama de
recursos, desde información nutricional hasta recetas y consejos prácticos. El
apoyo social puede empoderar a las personas, dándoles la confianza necesaria
para superar obstáculos y alcanzar sus metas.
Apoyo Social en el Proyecto
Grupos de apoyo: Creación de grupos donde los participantes puedan compartir
sus experiencias, dudas y logros.
Eventos comunitarios: Organizar talleres de cocina, charlas informativas y
actividades sociales para fortalecer los vínculos entre los participantes.
Mentoría: Participantes más experimentados con aquellos que están
comenzando.
Colaboración con profesionales: Invitar a nutricionistas, psicólogos, homeópatas
y otros expertos para brindar orientación y apoyo.