Sociología y Educación 2
Sociología y Educación 2
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ÍNDICE
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Ü'IOICE 13
12 SOCIOLOGÍA Y EDUCACIÓN
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22 SOCIOLOGÍA Y EDUCACIÓN LA CIENCIA SOCIOLÓGICA Y SU APLICACIÓN A LA EDUCACIÓN 23
en Ja actualidad el colectivo de físicos tiene como herencia común, aceptada puede hablarse de «el método científico» en un sentido dogmático e indis
por todos, la obra de Galileo, Newton o Einstein (KUHN, 1986). cutible, como si éste ya f u era un asunto cerrado ele una vez por todas. Se
Como puede verse, al definir el conocimiento científico en general no trata ele un tema controvertido. Aquí, sin embargo, simplificaremos esta
hemos incluido ninguna referencia a la experimentación, porque no todas las cuestión siguiendo una de las posiciones más conocidas: el método por ex
ciencias son experimentales, como por ejemplo el Álgebra, rama de la Mate celencia de las ciencias empíricas es el llamado «hipotético deductivo» (en
mática anteriormente mencionada. Pero hay dos requisitos que en ninguna adelante MHD), al que de modo más completo podría denominarse «hipo
investigación científica pueden faltar: estar abierta a Ja crítica, propia del tético deductivo experiencia! o experimental». Consiste éste en formular
pensamiento moderno, y ser rigurosa en la aplicación sistemática del método hipótesis o supuestos para explicar algunos hechos; tales hipótesis se aven
de conocimiento. La Sociología no es una excepción, ha de atenerse al rigor turan a partir de conocimientos científicos previos y/o, a menudo, nuevos
metodológico, a Ja autocrítica y a Ja capacidad de sostener sus contenidos y datos u observaciones hechas en un campo de trabajo. A partir de la hipó
procedimientos con pruebas. · tesis se deducen consecuencias concretas que habrán de cumplirse en expe
Veamos con mayor detenimiento el lugar de la Sociologia en la clasifica rimentos diseñados para ello o en una recogida rigurosa de datos. De ese
ción de las ciencias y sus peculiaridades metodológicas. modo se pone a prueba la validez de la hipótesis: si la hipótesis resulta
«falsada»* se abandona o reformula, y si resiste Ja prueba repetidas veces,
entonces se admite como válida provisionalmente. Una hipótesis nunca
lI. CIENCIA Y M ÉTODO CIENTÍFICO: LA SOCIOLOGÍ A queda absolutamente comprobada, pues pueden seguir deduciéndose de
ella infinidad de consecuencias que nunca terminaríamos de verificar; pero
Como se contempla en el cuadro que se expone más adelante, la Sociolo basta una experiencia significativa para desautorizar la hipótesis en cues
gía pertenece al tipo de ciencias denominadas «sociales», que se ocupan de tión (POPPER\ 1980: 75 ss.).
hechos relativos a Ja vida colectiva del ser humano. Sin embargo, a veces, a Un ejemplo nos permitirá entender mejor esta explicación abstracta del
este tipo de ciencias se les llama «humanas» para poder incluir entre ellas MHD. Supongamos que un sociólogo estima que, entre otras cosas, las jóve
también a Ja Psicología, cuyo objeto es Ja conducta humana en relación con nes generaciones ( 18 a 25 años) de una ciudad española, o una comarca rural,
Jos fenómenos de la percepción, el aprendizaje, la inteligencia, la motiva consideran moralmente legítimo el uso libre de técnicas preventivas del em
ción, la personalidad, etc.; aunque en todos esos campos Ja conducta se cons barazo (preservativo, píldora, diafragma) con cierta independencia de su
truya socialmente, no son los aspectos sociales los que interesan a esta cien identificación o no como católicos. Para probar esta hipótesis puede preparar
cia, salvo en su rama de Psicología Social. Las ciencias sociales o humanas una encuesta con diversas cuestiones: si el individuo es o no creyente, cató
han sido llamadas por algunos autores «ciencias de Ja cultura», o «ciencias lico, practicante .. ., y por otro lacio se pregunta, directa o indirectamente, por
del espíritu» (DILTHEY, siglo x1x), aunque esta última denominación ya está las hipótesis que se quieran poner a prueba. Recogiendo una muestra estrati
en desuso. ficada, estadísticamente fiable, y cruzando los datos ele modo conveniente,
Las Ciencias Formales, como la moderna Lógica Simbólica o las diver pueden averiguarse las correlaciones que más interesen, por ejemplo la exis
sas disciplinas matemáticas, se sirven de la deducción como método fünda tente entre ser o nó católico y ser partidario ele las mencionadas técnicas.
mental. Se entiende por deducción* la operación mediante la cual, a partir de Comoquiera que la Iglesia Católica se opone frontalmente a su uso, los datos
datos, fórmulas o propuestas, que se suponen válidas, se llega a una conclu nos permiten conocer el grado de independencia de Jos jóvenes católicos lo
sión sin necesidad de recurrir a la experiencia. Piénsese cómo, a partir de cales en ese punto; lo cual nos sirve también como dato indicador del avance
deftniciones y postulados*, la Geometría va deduciendo un cuerpo de teore de la secularización, l a pérdida de influencia de la Iglesia en materia de cos
mas, o cómo se resuelven los problemas numéricos dentro de un sistema de tumbres, etc. Corno resultado de este estudio, si la hipótesis ha resistido, se
cálculo. La deducción va a ser u n instrumento metodológico presente en to acepta provisionalmente como válida, se formula con mayor precisión si
das las ramas del saber racional. cabe a la vista de Jos datos; en ocasiones es posible y conveniente expresar la
Las Ciencias Empíricas, en cambio, precisan del concurso de la expe hipótesis matemáticamente, en forma de expresión algeb1:aica que relacione
riencia, por variad.os caminos y en diferentes momentos, para obtener resul las variables que intervienen.
tados, para desarrollar su saber. En realidad ni siquiera para estas ciencias
LA CJENCJA SOCIOLÓGJCA Y SU APLIC1\CIÓN A LA EDUCACIÓN 25
24 SOCIOLOGÍA Y EDUCACIÓN
de ese modo creen sus partidarios explicar mejor los fenómenos sociales, que
Clasificación de las ciencias. Sus métodos
limitándose sólo a las regularidades estadísticas observadas. Esta orientación
Método
es la más proclive al uso de técnicas cualitativas y a la investigación de los
Ciencias -Lógica significados que configuran el curso de las acciones sociales
Ciencias deductivo puro
Formales -Matemática
(MD) Bajo Ja denominación de «saberes tecnológicos» podemos encuadrar co
nocimientos aplicados como la Medicina, la Ingeniería o la Arquitectma;
--Física aunque quienes detentan tal saber aplicado necesitan una alta formación en
-Química MD
Ciencias ciencias teóricas como Biología, Física o Matemáticas.
Naturales -Biología +
Empíricas
-Geología MHD
En el cuadro previo, aunque incompleto, atendemos a la división clásica
-
... de ciencias básicas y aplicadas. Pero a partir de ellas se han desarrollado nu
merosas ramas, combinaciones y agrupaciones (Bioquímica, Ecología, Me
-Economía MD teorología ... ). Y también va quedando claro que para estudiar algunos proble
-Sociología +
mas complejos (desarrollo rnral, educación, salud pública... ) se precisa el
Humanas
-Antropología MHD
O Sociales concurso de varias ciencias (pluridisciplinariedad), y la construcción de ca
-Historia +
o de-la Cultura tegorías o conceptos clave comunes entre ellas (interdisciplinariedad). Así,
-Psicología M. hermenéutico
- ... -
.. . para la práctica de la Agroecología como estrategia de desarrollo rural, es
menester la confluencia de estudios económicos, agronómicos, sociológicos,
Saberes Tecnológicos o Ciencias Aplicadas: etc., articulados bajo la categoría de «sustentabilidad».
-Ingeniería Queda, pues, aclarado el lugar de Ja Sociología como ciencia. El discurso
-Medicina (técnicas de diagnóstico y curación)
sociológico es un discurso científico, pues cumple la definición que dábamos
-Derecho (como práctica jurídica)
-Arquitectura (que a la vez es un Arte) al principio; pero no todo lo que se escribe acerca de los hechos o estructuras
..
.
sociales puede encuadrarse dentro de la Sociología, para ello han de cumplir
se los requisitos metodológicos que hemos ido exponiendo. La investigación
y el discurso sociológicos se construyen tomando como referencia los tém1i
El MHD, con variaciones u otros nombres, fue teorizado y aplicado prác
nos, significados y reglas aceptados por la comunidad de sociólogos; a lo
ticamente desde los albores de la Ciencia Moderna (GALILEO), y aún antes,
largo d� tal discurso se hacen propuestas teóiicas, se desarrollan o discuten
en el campo de las Ciencias Naturales. Éstas tienen la ventaja de que es po
hipótesis, y la investigación correspondiente genera gran cantidad de cono
sible manipular su objeto, en muchas ocasiones, preparando experimentos
cimiento sobre los hechos sociales.
destinados a probar hipótesis. En cambio en las Ciencias Sociales esta posi
Pero el ténnino «rnétodm> no sólo es empleado para referirse a un proce
bilidad es más reducida, y además han de vérselas con un objeto dotado de
dimiento lógico general, común a todas las ciencias o a todas las ciencias
conciencia y libertad de decisión dentro de unos márgenes; adicionalmente
experimentales, sino que tiene otros usos, como vamos a ver a continuación
considérese que el ser humano es capaz de cambiar su conducta si sabe que
en el caso de la Sociología.
hay una predicción sobre ella (predicción autonegadora: se da este caso con
algunos pronósticos electorales). Merton* hablaba de profecías autonegado
ras o autocumplidoras, segÍln los casos. Queda claro, pues, que no es lo mis
III. NOCIÓN DE MÉTODOS Y TÉCNICAS DE INVESTIGACIÓN
mo predecir un eclipse que el compo1iamiento de un individuo o grupo so
SOCIOLÓGICA
cial. En el segundo caso, por otra parte, intervienen tantas variables que la
predicción es harto más compleja y problemática, habiendo de hacerse en
La palabra «método» tiene un carácter polisémico. En concreto, no es
términos de probabilidad o tendencia. Por estas y otras razones, a las Cien
usada con el mismo significado en los discursos epistemológicos* generales
cias S ociales les resulta necesario, muy frecuentemente, echar mano de en
foques complementarios propios del método hem1enéutico. A éste se le ha como el anterior, que cuando estamos refiriéndonos a una ciencia particular
sin compararla con las demás.
llamado en Sociología «método comprensivo», que insiste en tener en cuen
ta las razones y Jos valores que mueven a la acción al actor social (WEBER*);
26 SOCIOLOGÍA Y EDUCACIÓN LA CIENCIA SOCIOl.ÓGIC/\ Y SU Al'LICAC!ÓN A l A EDUCACIÓN 27
En So ciología. cuando se hace referencia a las diversas orientaciones me tigaciones; sólo con el uso apropiado de ese aparato teórico el estudio d e los
todológicas dentro ele ella, se está entendiendo por «método» un enfoque fenómenos sociales puede llamarse investigación sociológica. A este fondo
teórico general para el estudio de su objeto. El enfoque metodológico es, teórico se le llama orientación metodológica.
pues, en este caso, todo un entramado teórico y heurístico desde el que se Pero en Sociología hay diversas orientaciones metodológicas para abor
formulan las hipótesis y se ponen a prueba sirviéndose de las técnicas más dar la i nvestigación d e lo social, que arraigan en tradiciones teóricas o de
apropiadas al caso. Se trata, entonces, del soporte y orientación previos en i11vestigació11* diferentes. Expondremos las más notorias, que definen las
los que el investigador se sitúa para hacer sus aportaciones. Por ej emplo, corrientes más conocidas.
cuando un investigador hace constar que está utilizando el método estructu
ral-funcional, lo que quiere dar a entender es que se sitúa dentro de los plan l. El Posilivis1110-F1111cio11alis1110 (Durkhei111 *, Parsons* .). Es la tradi
..
teamientos teóricos de la sociología funcionalista para abordar su objeto de ción o modelo teórico-metodológico ele mayor presencia en la producción
esh1dio. sociológica habida hasta el momento actual. El positivismo consiste básica
E n cambio las «técnicas» serían los procedimientos concretos que nos mente en seguir el pri ncipio ele remitirse fuertemente a los hechos, con mar
permiten producir o encontrar datos para inspirar o validar empíricamente cada orientación hacia los observables externamente y cuantificables (DuRK
las hipótesis de trabajo. Así, la encuesta de opinión es una técnica cuantitati HEIM, 1 9 7 1 : 1 4 ss.). Durkheim es el clásico que mejor representa el inicio de
va, mediante la cual se obtienen datos cuantificables, expresables en números u n discurso sociológico maduro i nspirado e n el espíritu positivista heredado
con los que se puede operar; la discusión de grupo es una técnica cualitativa de Augusto Comte*. Además de este rasgo empirista, también es caracterís
que permite conocer, por ejemplo, de qué modo entran en conflicto algunas tica de Durkheim la tendencia a considerar la soci edad como u n Todo orga
posiciones ideológicas típicas . . . nizado en el que cada norma o institución no ha surgido al azar, sino que
Estas técnicas s o n uti.lizablcs por todas las corrientes sociológicas, aun cumple funciones de mantenimiento de ese entramado, de esa forma de vida.
que l a orientación positivista prefiere las técnicas cuantitativas. En cambio, El füncionalismo, introducido en la Sociología desde la Antropología, acen
los marcos teórico-metodológicos hacen sih1arse al sociólogo preferente túa esta tendencia que acabamos de describir. La sociedad es concebida como
mente en alguna de l as escuelas sociológicas; decimos «preferentemente» un Todo estructurado de r e laciones, posiciones, papeles sociales i nstitucio
porque en la actualidad no se trata de tradiciones cerradas, sino de corrientes nalizados y valores compartidos que hacen vi able una forma d e vida colecti
de la ciencia sociológica, cada una de las cuales tiene en cuenta las aporta va. Existe una inclinación en este tipo de planteamientos a legitimar el orden
ciones de las demás, aunque guarden diferencias teórico-metodológicas. social exist e nte, es decir, a darlo por bueno y legítimo, puesto que hace posi
Antes de o cuparnos de dichas escuelas o corrientes, permítasenos insistir ble la vida social. El conflicto social es concebido como una disfunción del
en que el uso del término «método» es muy flexible. A veces, a pesar de l a tocio, es valorado negativamente, es decir, por principio no se le considera
distinción hecha anteriormente, s e emplea con poco rigor para referirse, por como un factor de progreso sino de perturbación social. Es por esto por lo
ej emplo, a las técnicas de investigación utilizadas; hay que estar atento al que a menudo se ha llamado a este enfoque el «paradigma del orden» o del
contexto en que se emplea el término para advertir si su significado apunta a «consens0>>. Algunos funcionalistas adoptaron orientaciones metodológicas
la teoría o a la técnica de recogida de información. De todos modos, la divi provenientes del Estructuralismo, desarrollado antes en la Antropología y la
sión entre los dos ámbitos no es tan tajante, pues el uso ele toda técnica_ d e Li ngüística, y llamaron a su método «estructural-funcional». E l norteameri
investigación conlleva detrás u n complejo planteamiento teórico. cano Talcott Parsons y su discípulo Robert M erton llevaro n el funcionalismo,
a mediados del siglo xx, a su máximo esplendor.
El funcionalismo, pues, aunque prefigurado en Durkheim, se constituye
IV. PRINCIPALES TRADICIONES TEÓRICAS propiamente corno paradigma en la obra de los antropólogos A.R. Radcliffe
DE LA SOCIOLOGÍA Brown y Bronislaw Malinowsky (influidos por el anterior). Sólo posterior
mente aparece en Sociología presentándose explícitamente como tal, y como
La investigación sociológica no consiste sólo en ponerse a recoger datos modelo bien estmcturado, en los trabajos de Parsons y Merton, enriquecien
de los fenómenos colectivos y ordenarlos. El sociólogo dispone de todo un do así la tradición positivista. Pero, pasado este momento de esplendor, s e
acervo de conceptos propios y teorías para interpretar y organizar sus inves- vio que el funcionalismo muy estricto tenía problemas d e aplicación al estu-
28 SOCIOLOGÍA Y EDUCACIÓN LA CIENCIA SOCIOLÓGICA Y SU APLICACIÓN A LA EDUCACIÓN 29
narquía borbónica), y algunos jefes del gobierno central o autonómico con 4 . Otras orie11tacio11es acl//a/es. Aunque las tres tradiciones que hemo�
siguieron gran aceptación por su carisma personal ante los votantes (Felipe expuesto siguen siendo las más frecuentadas por los sociólogos, éstos lo ha
González o Jordi Pujo!). Sin embargo, aunque la realidad social sea «impu cen de un modo mucho más abierto que antes; de manera que usan gran nú
ra», Jos tipos puros de Weber nos ayudan a entender algunos motivos básicos mero de conceptos comunes sea cual fuere su tradición preferente o su país
por los que Ja población está dispuesta a dejarse gobernar bajo un determina de origen. Pero desde los años setenta se hace más notoria la aparición de
do régimen o por una determinada persona. nuevas orientaciones, que nos limitaremos aquí poco más que a mencionar, y
Para Weber Jos mecanismos de dominación y unidad social a los que se que difícilmente son encajables en las tres tradiciones madre.
someten Jos individuos tienen un carácter psicosocial, y para su cabal com De entre ellas, una de las que más afluencia ha tenido es Ja llamada teoría
de la sociedad «posli11d11sh"ial», denominada por otros «hipermodernm>, <<post
prensión sociológica no basta con dar cuenta estadísticamente de las regula
modema» o «del co11oci111ie1110 y de la i11.for111ació11». De tal corriente nos hare
ridades externamente observables. Piénsese en lo que acabamos de decir del
estudio comprensivo del poder o de la educación... No basta con saber cuán mos eco en próximos capítulos. Habrá quien considere esta corriente más bien
tos alumnos hay escolarizados en cada nivel, por ejemplo, sino qué sentido una rama de la Sociología que una tradición de investigación, sin embargo aquí
tiene esh1diar en esa sociedad para sus miembros ... ; bueno es saber cuántos preferirnos considerarla una nueva perspectiva de la disciplina: La razón es que
actores sociales esh1vieron dispuestos a dejarse gobernar de cierta forma o los clásicos -Comte, Marx, Durkheim, Weber-, e incluso neoclásicos como
por tal persona, pero más aclaratorio es conocer por qué motivo lo hicieron Parsons, se situaban en la perspectiva del paso de la sociedad tradicional a la
i ndustrial en cuanto paradigma y horizonte del mundo moderno; mienh·as que
de buen grado.
Sin embargo, algunos weberianos han aproximado este planteamiento los autores mencionados consideran ese mundo como algo ya concluido, o en
«comprensivo» a un punto de vista general funcionalista o positivista, mien h·ance de mutación profunda, y que pertenece a nuestro pasado irunediato.
tras que otros lo han articulado con una perspectiva dada al estudio de la Esta nueva orientación se fragua con las aportaciones iniciales del esta
dominación y las desigualdades sociales, acercándose de ese modo al con dounidense Daniel Bell ( 1973) y el francés Alain Touraine ( 1 971 y 1 993).
ftictivismo; un caso de esto último lo constih1ye la obra de Pierre Bourdicu; Posteriormente, al calor de una polémica filosófica sobre «la Modernidad»,
en ella se estudia la «violencia simbólica» operante en la escuela, la forma entre postmodernos (LYOTARD, 1 979) y neo ilustrados (HABERMAS, 1 989), en
ción clasista del gusto o los estilos de vida y su repercusión en el rendimien Sociología se intentan teorizar las mutaciones sociales.fin de siecle. Algunos
to escolar desigual según clases sociales. sociólogos enfatizan que la sociedad industrial avanzada ha cambiado su es
La «sociología comprensiva» no sólo incluye la producción inspirada en tructura y dinámica profunda en el último tercio del siglo xx, mientras oh·os
Weber sino que abarca además otras líneas sociológicas; todas aquellas que insisten en que lo que se ha producido es una remodernización o acentuación
· atienden preferentemente al esh1dio de la «interacción de los actores sociales de la modernidad social. Todavía prosigue esa discusión, muy de moda du
simbólicamente mediada». Esta última expresión se refiere a la interacción rante años en los EEUU y la UE, pero ha ido cediendo el paso a la reflexión
social con un significado colectivo que comparten los agentes. sobre nuevos conceptos para teorizar las sociedades avanzadas dercambio de
Pondremos un ejemplo del campo de la educación para aclarar mejor lo siglo. Algunos de los más conocidos son: «sociedad del riesgo» y «lnodemi
que esto quiere decir. El acto académico de aprobar o suspender, como san zac_;ión reflexiva», sobre Jos que ahora no podemos detenernos. Han contri
ción al rendimiento del estudiante, no es sólo un mecanismo de selección buido a ir trazando esa l ínea teórica autores de diversos países, en fecunda
formal del alumnado; para los «sociólogos comprensivos» de la educación comunicación internacional: los alemanes Beck ( 1 992 y 2000) y Luhmaun
tan importante como eso es el estudio del significado social que encierra un (1993), los británicos Lash ( 1 997) y Giddens ( J 994), o los españoles Castclls
suspenso: si socialmente se culpabiliza al alumno suspendido, si ello consti ( 1 997-1 998) y Lamo de Espinosa ( 1 996). A la polémica sobre la modernidad
htye una vergüenza o se considera «normal», si se valora el aprobado como se ha sobrepuesto la de «la globalizacióro>*. Aunque esta segunda se sitúe
un mérito personal o resultado de las dotes 11ah1rales, etc. más en el plano económico y político, prolonga el interrogante sobre si la
Algunos sociólogos representativos de esta línea son el norteamericano historia está pasando página al mundo moderno, sujeto a una mutación pro
G. H. Mead* o los autores que se inspiran en l a filosofia fenomenológica funda e irreversible, y si empieza un nuevo período histórico. Algunos soció
como Berger* y Luckmann. logos enfatizan las consecuencias sociales de todo género que la globaliza
ción está promoviendo (GIDDENS, 2000).
32 SOCIOLOGÍA Y EDIJCACIÓN LA CIENCIA SOCIOLÓGrCA Y SU APLICACIÓN A LA EDUCACIÓN j3
Oh·os sociólogos han tomado prestados conceptos o metodología de la tal orden no es sino un producto histórico social con su carga de explotación,
ciencia económica, siguiendo la teoría de la decisión racional, el individua privilegios, dominaciones e injusticias, y en cambio los cientistas pasan esos
lismo metodológico o la teoría de los j uegos (que no es ahora cuestión de hechos por alto como si fuera lo más natural. Esta clase de críticas ya fueron
explicar aquí). A tal orientación pertenecen obras del norteamericano Cole planteadas por Marx a mediados del siglo XIX.
man (1990) o los europeos Boudon ( 1 9 8 1 ) y Elstcr ( 1 982). Y con esto creo que el lector se habrá ido fo1mando ya una primera idea
También hay otra corriente, calificada a veces como cog11itivisla o etno aproximada de lo que ha sido la Sociología, como saber científico, idea que
gráfica, que se sirve de técnicas empleadas por los antropólogos o los socio iremos emiqueciendo paulatinamente a lo largo de este l ibro a la vez que nos
lingüistas. En ella habría que inscribir nombres como Cicourel ( l 980), Willis vamos refiriendo a la educación.
( 1988, en Aprendiendo a trabajar, que precisamente es un estudio sociológi Pero la Sociología, aun sumando todas sus orientaciones, no tiene el mo
co sobre educación) o Latour ( 1983), por poner ejemplos. Una de sus orien nopolio del estudio de lo social; también la H istoria, la Economía, la Antro
taciones básicas la constituye el dejar hablar y actuar a los agentes en su pología ... o la Filosofía Social se ocupan de ello desde otros conceptos y
propio ambiente, para captar al hamo sociologicus sin violentarlo, sin obli técnicas de investigación, por lo que seguiremos haciendo precisiones sobre
garle a encajarse en hipótesis o preguntas predeterminadas. Sus investigacio el objeto de la Sociología.
ues son a menudo rnicrosociológicas y reveladoras de esquemas de compor
tamiento grupal oculto. Gustan del «estudio de caso»; algunos renuncian a
veces incluso al MHD; consideran que éste es demasiado generalizador y V SOCIOLOG Í A, CIENCIAS SOCIALES Y FILOSOFÍA SOCIAL
desatiende lo peculiar de los grupos concretos. Precisamente esto último, lo
grupal concreto, es lo que más interesa a quienes optan por este enfoque ra Hay conocimientos que ocupan un lugar fronterizo entre dos ciencias so
dicalmente hermenéutico y cualitativo, que de este modo se sitúan muy cerca �iales. Así, por ejemplo, el estudio de l a interacción en el aula «X>> del cole
de una tradición de investigación de los antropólogos sociales. gio «Y» puede considerarse objeto de un estudio microsociológico (Sociolo
Desde posiciones próximas a Jo que hemos llamado «sociología del or gía) o psicológico (Psicología Social); el sociólogo pondrá más énfasis en los
den social>>, corriente predominante hasta hoy, se ha hecho una nueva formu papeles sociales desempeñados por los alunmos, procesos de interacción re
lación del panorama que hemos ido exponiendo (BouooN, 2003, y GoL gulares (o «normales»), grupos, jerarquía, conflictos, procedencia social,
DTHORPE, 2003). Tales autores distinguen entre la sociología científica más desviación, marginación ... ; el psicólogo social se ocupará de las afinidades,
ortodoxa (MHD y técnicas cuantitativas), la sociología descriptiva (también rechazos, liderazgo .. ., es decir que, con otro enfoque, más ccnh·ado en lo in
llamada «cameralista», es decir, la que se despliega dirigiendo y explotando dividual, y con otras categorías o conceptos, también se ocupa de los grupos,
cognitivamente censos, padrones, encuestas oficiales y otros esh1dios para desviación, jerarquía y marginación en el aula ...
las administraciones públicas ... ), la sociología expresiva y la sociología crí Pero la relación entre la Sociología y otras ciencias sociales va mucho más
tica. Las dos primeras se desarrollan en estrecha colaboración (y añadiremos allá de Ja mera confluencia de objetos de estudio con perspectivas diferentes.
nosotros que, a menudo, bajo un impulso cienlista*, hegemónico desde Com Se dan casos de enfoques interdisciplinares o de influencias metodológicas
te* a Popper*). Las dos últimas, en cambio, no merecen a su juicio ser con recíprocas. En Jo que se refiere a lo primero, puede apreciarse con claridad en
sideradas científicas. A la sociología expresiva se la acusa de indagar el sen buena parte de la sociología marxista, comenzando por la del propio Marx.
tido de lo social en experiencias personales (entrevistas cualitativas o de Este desarrolla una ciencia general de Ja sociedad en l a que se entrelazan fuer
grupo), en lugar de observar las regularidades empíricas, con lo que más bien temente elementos sociológicos, económicos y un proyecto de transfonna
se aproxima a Ja literah1ra. En cuanto a la sociología crítica -neomarxistas ción social, ligado a una cierta filosofía de l a hist01ia (enfoque h·ansdiscipli
y otros sociólogos que problematizan e l orden vigente- es descalificada por nar). En cuanto a transvases metodológicos, como ya hemos visto, el llamado
mezclar lo positivo (los hechos) con lo normativo; es decir, por poner en re «funcionalismo» fue desarrollado por los antropólogos antes de su introduc
lación indebida el conocimiento social teórico-empírico con la valoración ción en la sociología; el «estrncturalismo» también vino a parar a la Sociolo
moral o el compromiso político. gía h·as su éxito en la Lingüística y en la propia ciencia antropológica.
A su vez, los sociólogos críticos acusan a los cientistas de que de modo Algunos de los sociólogos más clásicos fueron filósofos de formación; tal
tácito se comprometen funcionalmente con el orden social reinante; ya que fue el caso de Karl Marx y Emite Durkheim (muy influido por la filosofía
34 SOCIOLOGÍA Y EDUCACIÓN l A CJENCIA SOCIOLÓGICA Y SU APLICACIÓN A l.1\ l:.DUCACIÓN 35
positivista). En la actualidad esa confluencia prosigue; por ejemplo l a filoso b) Nivel explicativo
fía de Jürgen Habermas está influenciando recientemente algunas ciencias
-
sociales de forma notoria. Si la investigación no se propone sólo producir y acumular datos organi
Sin embargo una cosa son las reflexiones :filosóficas y otra Ja puesta en zados sobre hechos sociales, sino contrastar también hipótesis causales que
pie de un discurso científico que proponga públicamente hipótesis que pue los expliquen, dar cuenta también de los hechos que condicionen o detcnni
den ser falsadas por los hechos. De todos modos la Filosofia se introduce a nen los que estamos estudiando, es decir, las causas de las regularidades ob
veces en los supuestos del sociólogo, o inspira su labor crítica una vez que ha servadas, entonces esa investigación es explicativa.
organizado e interrelacionado los hechos. Esto último merece una explica La formulación de hipótesis obliga a aislar las variables relevantes que
ción de cómo se entrelazan en Sociología la búsqueda de datos sobre los he intervienen en un proceso fenoménico, de modo que puedan aventurarse pre
chos y la crítica sociológica. dicciones.
En el primer ejemplo presentado anteriormente, se buscaría una explica
ción de por qué escasean los alumnos de origen social bajo en determinadas
VI. NIVELES EN LA INVESTIGACIÓN DE UN OBJETO carreras, y si es previsible que esta tendencia se mantenga o se corrija en un
SOCIOLÓGICO cierto plazo. En el segundo caso podría explicarse el bajo nivel de renta de
los pequeños agricultores de una zona por razones económicas, como el ta
Procedimentalmente distinguiremos tres niveles en el discurso sociológi maño insuficiente de su explotación; pero también pueden aducirse razones
co sobre un objeto empírico; pero a sabiendas de que no son incompatibles, sociales, como la falta de integración en organizaciones para defender su
sino que pueden operar sobre el mismo objeto simultánea o sucesivamente. producción en el mercado o para presionar políticamente.
Nos ocuparemos Juego de un cuarto nivel que rompe con la ciencia conven
cional, que no es considerado una práctica científica «normal» (KUHN) por la
comunidad de sociólogos, y en especial por los más académicos. Se sitúa c) Nivel crítico
más cerca de lo que algunos han llamado «ciencia postnormal» o «ciencia
con la gente» (FuNrow1cH y RAvETZ, 2000), aunque para otros este nivel que Consiste en tener en cuenta no sólo los hechos sociales tal como apare
da fuera de la ciencia propiamente dicha. cen, tal como se muestran, sino sus raíces económicas o políticas, o Jos he
chos tal como podrían ser. Es decir, se tienen en cuenta las posibilidades al
ternativas.
a) Nivel descriptivo Acerca de los hechos sociales que hemos venido considerando, y cen
trándonos en el primero de ellos, una reflexión crítica haría caer en Ja cuenta
Hay investigaciones sociológicas que se proponen simplemente des de la desigualdad real de oportunidades de éxito escolar a pesar-de la gratui
cribir una situación social, es decir, pretenden sólo informar sobre una dad de la escuela obligatoria; y analizada los medios posibles para transfor
situación o proceso en lo que a los hechos sociales se refiere, sin pretender mar esta situación. En relación con el segundo caso la reflexión crítica anali
buscar más causas que las que revelan los datos en una primera aproxi zaría los efectos negativos de la mala distribución ele la tierra o exploraría
mación. algunas soluciones; por ejemplo, organizar cooperativas verticales, en las
Si Ja investigación no sobrepasa este nivel es descriptiva: a partir de las que los propios agricultores o ganaderos pudieran controlar algunos proce
hipótesis recoge datos para contrastarlas, los clasifica, los correlaciona y or sos de transformación y comercialización para colocar sus productos en el
ganiza por regularidades, llegando a conclusiones acerca del estado de hecho mercado local o los mercados próximos .. ., asociarse sindicalmcnte y organi
de la cuestión. Sirva como ejemplo un estudio descriptivo sobre el origen zar movilizaciones ... Una crítica más radical podría atacar la economía de
social del estudiantado universitario en España, o sobre la estratificación por mercado como una estructura que prima a las empresas de comercialización
renta de Ja población agraria. y financiación frente a la actividad de campesinos y agricultores.
En la crítica está presente a menudo una filosofía social de fondo, que es
mejor dejar al descubierto para no colarla de rondón. Por ejemplo, se puede
36 SOCIOLOGÍA Y EDUCACIÓN LA CIENCIA SOCIOLÓGICA Y SU APLICACIÓN A LA EDUCACIÓN 37
ejercer la crítica desde los ideales modernos de la filosofía ilustrada: libertad, RA 1992: 64-65). Desde planteamientos no muy a lejados de éste, trabajan
equidad y solidaridad; contcxtuándolos y llenándolos de contenido social algunos sociólogos embarcados en la constitución de «comunidades de
concreto. aprendizaje», «ciudades educadoras», trabajos de TAP con población margi
Una investigación sociológica concreta puede comprender dentro de sí, nada rural o urbana, etc. Tal es el caso del grupo CREA en la Universidad de
entrelazadamente, los tres niveles que hemos expuesto, o centrarse sólo en Barcelona o del ISEC en la de Córdoba (vid., respectivamente, FLECH A et. al,
uno o dos de ellos; aunque una línea de investigación sociológica que renun 200 1 , y SEVJLLA, 2006).
cie sistemáticamente a alguno de los tres niveles, que las hay, es, a nuestro
juicio, válida pero incompleta como csh1dio global.
Queda claro, pues, que no todas las investigaciones sociológicas han de Vil. SOCIOLOGÍA GENERAL Y SOCIOLOGÍAS ESPECIALES
constar de los tres niveles para ser válidas; ello depende de los objetivos de (O RAMAS)
la investigación. Son perfectamente válidas investigaciones descriptivas, o
esh!dios explicativos de descripciones de otros, o ejercicios críticos sobre La Sociología consta de un tronco común (Sociología General), aplicable
explicaciones ajenas ... a cualquier objeto sociológico, y diversas ramas especializadas en alguna
Los objetos sociológicos que pueden investigarse en tres niveles abarcan área de la realidad social.
un espectro muy amplio de los hechos sociales, a los que se extienden las Se entiende por Sociología General aquella parte de la ciencia sociológica
diversas ramas de la Sociología que expondremos h·as dar noticia de un dis que se ocupa de conceptos o teorizaciones útiles para cualquier rama de la So
cutido cuarto nivel (considerado exh·acientífico por los más oxtodoxos). ciología. Tal es el caso de la teoría sobre normas, desviación, papeles y posicio
nes sociales, grupos, instituciones, estratificación, conflicto social, cambio so
cial... o los discursos sobre metodología sociológica o hisforia de la sociología.
d) Más allá del co11oci111ie11to representat�vo y de la crítica discursiva En cambio existen Sociologías Regionales, Especiales o Específicas, que
sólo se ocupan de una zona del objeto sociológico, es decir, que son ramas es
Este modo de entender la investigación no encaja en la concepción de la pecializadas de la Sociología. Podemos decir que hay tantas corno objetos sufi
ciencia como un mero discurso que representa cliticamente la realidad social, cientemente consistentes que atraen la atención sistemática de grupos de soció
sino en el entendimiento de la ciencia como una actividad social. No nos es logos, de modo que se cree una cierta continuidad y tradición en su estudio.
tamos refiriendo a la ciencia aplicada, sino, por ejemplo, a la l lamada «inves H e aquí unas cuantas ramas, cuyo objeto queda manifiesto en su propia
tigación-acción participativa» (IAP), vista en el medio académico predomi denominación: Sociología de la Educación, Sociología de la Familia, de la
nante como actividad social pero no como investigación científica. Sea como Empresa y el Trabajo, de la Religión, del Conocimiento y de la Ciencia, del
fuere, el asunto es que hay toda una tradición heterodoxa de trabajo muy fruc- , Deporte, de la Medicina, de los Medios de Comunicación, Sociología del
tífera practicada por científicos sociales; es el caso de los sociólogos que tra Desarrollo, Sociología Rural, Urbana, Política, etc.
bajan con comunidades campesinas o indígenas en planes de desarrollo sus Como es obvio, cualquier estudiante de alguna de esas ramas precisará
tentable, o en zonas urbanas con alto nivel de exclusión social (MARTí, dominar los conceptos y l íneas teóricas de la Sociología General, aunque se
MONTAÑÉS; y VlLLASANTE, 2001 ). Los actores sociales u «objeto» a investigar le pueden ir suministrando esos últimos a medida que los va necesitando.
son considerados «sujeto»; no sólo a efectos de conocer la situación por sí Aquí hare1i1os una presentación ülicial de los conceptos básicos, para luego
mismos sino para transformarla con la práctica de la IAP. El gran pedagogo irlos ampliando o introduciendo otros nuevos a lo largo de otros capít11los.
brasileño Paulo Freire fue uno de los impulsores de este modo de proceder.
En España, desde otros presupuestos, el sociólogo Jesús Ibáñez enfatizó
la importancia de este cuarto nivel, al que llamó «la perspectiva dialéctica»; vm. OBJETO y CONCEPTOS BÁ SICOS DE LA TEORÍA
en vez de tratar de fijar la realidad en su estado positivo al modo de la «so SOCIOLÓGICA
ciología del ordc11» proponía i ntentar moverla hacia otro estado posible (me
diante un socioanálisis en asamblea de Jos sttjetos implicados que había de Ya hemos visto cómo la Sociología es una de las ciencias humanas. A su
desembocar en acción transformadora) (GARCÍA FERRANDO, lBAÑEZ, y ALvr- objeto se le denomina a veces el «'101110 sociologic11s» (DAIIRENDORr, 1975 ) ,
38 SOCIOLOGÍA Y l'DUCACIÓN LA CIENCIA SOCIOLÓGICA Y SU APLICACIÓN A LA EDUCACIÓN 39
expresión latina que hace referencia a los aspectos sociológicos del s<.:r hu piación del trabajo, a las que consideran la estructura básica de la sociedad,
mano. De modo semejante se habla en E conomía del «liomo eco110111ic11s», y que está dividida en clases con intereses enfrentados (MARX). Así, en nuestra -
en Psicología del <<psycological man». O sea, que tales ciencias se ocupan sociedad actual, la forma de trabajo predominante es aquella en la que éste
del estudio de los hechos acerca de l a realidad humana, pero cada una se en se realiza vendiendo la propia actividad por un salario, y Ja economía de mer
carga de una parte de ellos y de una perspectiva difcreutc. cado prevaleciente se sostiene en base a los beneficios que las empresas de
Los sociólogos positivistas definen l a Sociología como la ciencia de los capital privado obtienen contratando trabajadores; las dos clases sociales an
hechos o fenómenos sociales; los conflictivistas más bien se refieren a ella tagónicas que resultan de esta división social del trabajo son: la de los asala
como la ciencia de las sociedades humanas, sus clases sociales y sus co1!ffic riados con funciones no directivas por un lado, y por otro la de quienes ob
tos; los weberianos la conciben como estudio comprensivo de l a acciÓI/ so tienen sus ingresos fundamentales de los beneficios que les renta su propiedad
cial, los funeionalistas como ciencia d e las instituciones. No obstante, tras de medios de producción (empresas, acciones, tierras, activos financieros . . . );
esta aparente dispersión, todos ellos se estún refiriendo al mismo objeto, el el neomarxismo asocia a los intereses de este último grupo a los directivos de
'101110 sociologicus, con diferentes énfasis, pues todos esos conceptos forman las grandes empresas, los cuales no son propietarios pero obtienen salarios
parte de un entramado al que tocios los sociólogos se refieren en un momento muy altos y disponen del trabajo ajeno (gerentes, directores generales ... ).
u otro. Si quisiéramos recoger en una definición las orientaciones de la cien Precisamente, la estratificación global de la población según clases socia
cia sociológica más achial, podríamos decir que es la ciencia que se ocupa de les es uno de los puntos de estudio más concurridos por los sociólogos de
la i11/eracció11, estmcturas, conffictos y cambios sociales. cualquiera de las ramas de la sociología. Así, por ejemplo, para un sociólogo
Por «hecho social» entendía Durkheim toda interacción, o reg ularidad de la educación es importante conocer la procedencia social de los estudian
del comportamiento colectivo, suficientemente extendida en una sociedad tes universitarios, y las causas de la desigualdad de acceso a las diferentes
como para tener existencia propia, exterior a los individuos, a los que presio carreras que se observa, según clases o grupos de origen. Para un sociólogo
na para que se acomoden a ella. Así, las coshtmbrcs, creencias, modas, el rural es básico conocer la distribución del trabajo y la propiedad agrarios en
matrimonio, el lenguaje o la educación son para Durkhcim hechos sociales cada zona de estudio...
( DURKHElr-1, 1 97 1 : 23 ss). Pero si es cierto que las sociedades se estructuran en clases sociales, y
Más adelante, los sociólogos füncionalistas dieron centralidad en la teoría que éstas t ienden a reproducirse establemente, también lo es su contrario: la
sociológica a los conceptos «posicióm> y <<papel social», también expresados existencia de conflictos permanentes entre clases, la movilidad de porcenta
por los términos «status» y «rol». Posición social es el lugar que se ocupa en jes de población de una clase a otra, el cambio en las instituciones, e incluso
una red social jerarquizada; así, por ejemplo, el padre ocupa una posición pre grandes cambios histórico-sociales que alteran la naturaleza y relación de las
minente en la familia tradicional, el alcalde o el latifundista Ja ocupan en un clases. El conflicto y el cambio, junto con la estruch1ra, son, pues, focos per
municipio rural, el Jefe de Gobierno en la estructura política, el obispo en la manentes de atención del sociólogo.
Iglesia.. . Ya cada posición le corresponde un comportamiento adecuado que Los conceptos hasta aquí expuestos, que ampliaremos en el capítulo si
«normalmente» se espera de cualquiera que ocupe tal posición, a eso se le guiente, nos dan a entender qué aspectos relacionados con el campo educati
llama «papel social». Las i11stit11ciones, para estos sociólogos, vienen a ser vo van a interesar al sociólogo de la educación, es decir, cuál es el objeto
conjuntos estructurados de papeles, posiciones, normas y relaciones sociales, sociológico. No es, pues, exacto decir que la Sociología se ocupa de «lo so
sancionadas, fijadas socialmente en torno a algunas necesidades básicas de J a cial», o que la Sociología de la Educación se ocupa de los «aspectos sociales
sociedad. Las instituciones básicas son l a familiar, las educativas, económi ele la cclucaciótm. La dimensión social es objeto de cualquiera de las ciencias
cas, políticas, religiosas, comunicacionales y recreativas. sociales (Antropología, Economía, H istoria ... ), pero la Sociología se ocupa
Las instituciones estún estructuradas. Y estr11ct11ms son, precisamente, de ella bajo el punto de vista que hemos expuesto más arriba, a lo cual se
sistemas de rel aciones, posiciones y papeles organizados regularmente de denomina «lo sociológico» (LER.ENA, 1 985: 228-235). Cada ciencia humana
una forma duradera, y con una cierta lógica interna, de tal modo que dan aborda la realidad social desde sus propios dispositivos teóricos y metodoló
co11ti11uidad a las formas de vida social. gico s, con conceptos y técnicas distintas, aunque todas ellas coincidan en
Los sociólogos marxistas, en cambio, tomaron como concepto clave las aplicar el método hipotético deductivo (o el enfoque hermenéutico para el
«relaciones sociales de producción», gue son las formas de propiedad y apro- estudio de caso).
40 SOCIOLOGÍA Y EDUCACIÓN LA CIENCIA SOCIOLÓGICA Y SU APLICACIÓN A LA EDUCACIÓN 41
Con respecto al objeto de la Sociología, merece mencionarse una pecu e n cuanto que tienen que ver con los asuntos que expo1úamos en e l apartado
liaridad. En ocasiones, las invesligacioncs sociológicas, aun sin proponérse anterior: patrones <mormalcs» de interacción social, grupos, papeles y posi
lo, pueden conlribuir a modificar aqtiello que estudian. Es muy conocido el ciones sociales, clases sociales y sus enfrentamientos, estructuras de poder,
hecho de que las encucslas electorales publicadas pueden hacer variar la op dominación, control social, conflictos y cambios . . .
ción de los ciudadanos a la hora de votar, bien reforzando los pronósticos, Los encargados de diseñar los planes de reforma son, como observó
bien contraviniéndolos. Y no es éste un caso aislado, las estadísticas sobre Durkheim, los pedagogos; pero para ello han de apoyarse sobre el conoci
divorcios o conductas sexuales, sobre roles de varón o mujer, etc., pueden miento científico de los hechos relativos a la educación, entre los cuales se
contribuir a modificar comportamientos al difundirse con ayuda de los me encuentran los que conciernen a la ciencia sociológica. No obstante, algu
dios de comunicación ... La Sociología, pues, no sólo consh·uyc representa nos sociólogos insisten en que Ja Sociología no debe concebirse como cono
ciones de su objeto al investigarlo, sino que a veces lo afecla al conocerlo, es cimiento puro de la educación, que se desentiende de la práctica a seguir;
decir, contribuye a la estabilidad o cambio de algunos aspectos de la socie sino que la Sociología también puede inquirir sobre la trascendencia social
dad moderna sometidos a su estudio (GIDDENS, 1994: 27 y 48-49), si de él se de los diversos proyectos educativos posibles y no debe serle ajena la inter
siguen acciones polílicas o colectivas. Esta capacidad ele las sociedades ac vención escolar. De todos modos, aun desde esa posición, que aquí suscri
tuales de construir su futuro mediante su autoobservación, ha hecho que al bimos, serán los pedagogos los encargados de decidir los procedimientos
gunos autores hablen de «sociedades construidas» (COLEMAN, 1 990), o de más idóneos, dentro de la escuela, pa�a conseguir los objetivos educaciona
«modernización reflexiva» (BECK, GIDDENS, y LASH, 1 994). les que una reforma se haya propuesto.
Para terminar este capítulo dejemos clara una idea. La Sociología de la
Educación no agota e l estudio de todos los aspectos de la educación, sino
IX. PEDAGOG ÍA, SOCIOLOG Í A E INTERVENCIÓN ESCOLAR sólo los relativos al <<horno sociologicus». Del hecho educativo se ocupan
disciplinas dispares y para abordarlo en su complejidad se requiere el con
Son varias las ciencias humanas que se ocupan de lo concerniente a Ja curso de todas ellas. La Sociología aporta investigaciones desde sus propios
educación. Así, por ejemplo, la Psicología estudia Jos procesos de aprendiza planteamientos teóricos, que vamos a exponer de una forma general en el
je, que son clave en la educación escolar. Conocer los mecanismos psicoló capítulo siguiente.
gicos de aprendizaje puede servirle al sociólogo para entender qué condicio
nes influyen en la desigualdad social de oporhmidades educativas, aunque lo
primero no sea objclo ele su estudio sino del de la Psicología. Las investiga
ciones ele psicólogos y sociólogos de la educación pueden ser complementa
rias y mutuamente útiles, pero no por ello deben confundirse sus campos. Lo
cual no es óbice, sin embargo, para que defendamos la conveniencia de esh1-
dios interdisciplinares acerca de la educación para abordar ciertos problemas
complejos.
Con todo, es preciso diferenciar la Sociología de la Educación de Ja Pe
dagogía. Emite Durkheim, buen conocedor de ambas, solía decir que la Pe·
dagogía reflexiona sobre cuál es la educación ideal, con otras palabras, cómo
se debe educar; en cambio, la Sociología de la Educación esh1dia el origen,
desarrollo y funciones de la institución escolar tal como se dan realmente
(DURKHEIM, 1989: 8 1 ss.).
Aunque esta demarcación peque de simplista e incompleta, sigue siendo
válida en líneas generales. En Pedagogía estudiar los procedimientos más
adecuados para conseguir fines educativos es una cuestión central, mientras
que al sociólogo pueden i nteresarle las cuestiones pedagógicas o curriculares