Teoría Sobre Mitos-1

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Complejo Antonio Machado – Escuela Pablo Neruda

Literatura 4º año

El mito puede ser concebido como un relato.


Es decir, como una narración de hechos. Pensado así,
la forma predominante que adquiere es la de un
texto oral. Es una práctica discursiva sobre los
acontecimientos primigenios ocurridos en el
principio de los tiempos, entre seres
sobrenaturales, y que dan cuenta de la cosmogonía,
de la antropogonía y del origen de algo en el mundo.
Narran también todos los acontecimientos
También puede ser primordiales como consecuencia de los cuales el
hombre ha llegado a ser lo que es hoy; es decir, un
ser mortal, sexuado, organizado en sociedad,
obligado a trabajar para vivir, y que trabaja según
ciertas reglas.

También el mito puede ser concebido como un complejo entramado de creencias


que ayudan a percibir la realidad y a expresarla. Estas creencias, junto con las
intenciones, los deseos, los intereses y las emociones, forman parte de lo que Carlos
Pereda ha denominado la "trama conceptual de la mente". Sin ella no podríamos entender
o explicar nuestra propia vida.

Características de los mitos

Los mitos se caracterizan por ser:

Un producto social, es decir, que no se presentan con una


autoría.

Desde el instante en que son percibidos como mitos, sea


cual haya sido su origen real, no existen más que encarnados
en una tradición oral colectiva.

Tienen un modelo universal, es decir que si se examinan mitos de diferentes pueblos


que no han tenido contacto entre sí, se descubre que son muy similares en su estructura.

Hacen referencia a los tiempos primigenios.

El espacio mítico es de carácter sagrado.

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Funciones de los mitos

Desde las civilizaciones primitivas, el mito desempeñó una función indispensable.


Según el antropólogo Bronislav Malinowski los mitos:

“Expresan, realzan y codifican las creencias, salvaguardan los principios morales


y los imponen, garantizan la eficacia de las ceremonias rituales y ofrecen reglas
prácticas para el uso. El mito es, pues, un elemento esencial de la civilización humana,
lejos de ser una vana fábula, es, por el contrario, una realidad viviente a la que no se
deja de recurrir, no es en modo alguno una teoría abstracta o un desfile de imágenes,
sino una verdadera codificación de la religión primitiva y de la sabiduría práctica”.

En Grecia, las alegorías platónicas encargaron al mito la tarea de educar el


intelecto y mejorar la moral. El mito fija modelos ejemplares de todas las actividades
humanas, entre las cuales se halla la educación. La narración mítica enlaza a las
generaciones en la transmisión de valores y conocimientos. Los mitos son también
medios de descubrimiento. Son una revelación estructural progresiva en nuestra
relación con la naturaleza y con nuestra propia existencia. Al hacer aflorar la realidad
interna capacitan a la persona para que experimente una realidad más amplia en el mundo
externo. Entre otras, el mito cumple una función educativa y brinda modelos de
conducta.

Clasificación:

Los mitos pueden clasificarse en:

Cosmogónicos: narran cómo fue creado el cosmos, la vida, el mundo, toda la


existencia.
Teogónicos: narran el origen de los dioses.
Antropogónicos: narran el origen de la humanidad.
De fundación: narran cómo surgieron determinadas ciudades, poblaciones,
tribus o religiones.
Morales: narran confrontaciones entre principios morales opuestos -el bien y
el mal-.
Naturales: narran el origen de los fenómenos naturales, por ejemplo, truenos,
relámpagos, fuertes temporales, etc.
Etiológicos: narran el surgimiento de algunas instituciones o prácticas
cotidianas.

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Escatológicos: narran historias apocalípticas sobre cómo podría ser el fin del
mundo.
Tiempo de los mitos

Para la conciencia mítica, el tiempo primordial emergió de golpe, no le precedió


ningún tiempo, porque no podía existir tiempo alguno antes de la aparición de la realidad
relatada por el mito. En contraste, el tiempo profano, es decir, el que vivimos
cotidianamente, puede ser medible ya que tiene principio y fin. Por lo tanto, las historias
que narran los mitos no pueden ser ubicadas en un tiempo específico.

El mito y sus personajes

En los mitos griegos podemos reconocer tres tipos de personajes diversos:

1- Dioses: sus características físicas eran semejantes a las de los hombres, al igual que
los rasgos de su personalidad. Estos dioses se enamoraban, sentían celos, o podían
ejercer la bondad o la venganza, como los seres humanos. Los rasgos que los distinguían
eran la inmortalidad y el poseer poderes sobrenaturales.

2- Héroes: se destacan dentro de su comunidad porque encarnan los valores que esta
promueve como positivos o ideales. Atributos tales como el valor, el coraje o la fuerza
física hacen que los héroes puedan sortear dificultades por el bien a la comunidad que
pertenecen. Podemos citar a Hércules y a Eneas.

3- Seres fantásticos: se trata de criaturas asociadas, en ocasiones, a formas animales


y humanas, tales como el Minotauro, las sirenas, Pegaso, las Gorgonas, los centauros,
Medusa, los gigantes, la Esfinge, etcétera.

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Estos seres dejan traslucir de manera ambigua una doble condición, una más
salvaje y otra más humana, propia de etapas de precivilización. Su función es, en
ocasiones, poner de manifiesto la dimensión heroica de algunos personajes que se les
enfrentan. De este modo, el héroe y la criatura que se le opone aparecen vinculados en
una relación casi indisociable; tal es el caso de Ulises y las sirenas, Teseo y el Minotauro
o Perseo y la Medusa.

La historia de todo héroe mítico puede pensarse como un camino que debe
transitar y que se compone de tres fases: partida – enfrentamiento y superación de
pruebas – retorno.
El héroe se separa de su medio o parte de su comunidad con algún objetivo hacia
una región donde deberá enfrentarse a diversos peligros: seres fabulosos, fuerzas de
la naturaleza o sobrenaturales.
El triunfo por sobre esas fuerzas o seres lo inicia en el camino heroico, le acarrea una
victoria y el regreso a su comunidad, con nuevos atributos y beneficios. Además de los
obstáculos, el héroe puede recibir la ayuda de otros personajes o fuerzas que lo
favorezcan para concretar la victoria final.

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