Cómo Endurecer Las Uñas
Cómo Endurecer Las Uñas
Cómo Endurecer Las Uñas
1. Aloe vera y aceite de oliva: en un bol, mezclamos una cucharada sopera de gel de aloe vera con unas
tres gotas de aceite de oliva virgen. Después, cogemos un disco o una bola de algodón y nos lo
pasamos por las uñas, dejando que se absorba la mezcla.
2. Aceite de oliva, huevos y miel: en un bol echamos una cucharada generosa de aceite de oliva, otra de
miel y una yema de huevo. Mezclamos hasta obtener una mezcla homogénea, la colocamos con
cuidado en las uñas y dejamos que actúe durante al menos media hora. Aplicamos dos o tres veces
por semana, y notaremos cómo se endurecen las uñas de forma progresiva.
3. Menta, manzanilla y aceite de oliva: la menta y la manzanilla, además de mejorar notablemente la
apariencia de las uñas, fortalecen las uñas y además alivian problemas como la sequedad. Hervimos
agua, y vertemos en una taza. Introducimos la infusión de manzanilla, media cucharadita de aceite de
oliva, y un par de hojas de menta. Dejamos reposar durante media hora, y aplicamos la mezcla con un
algodón, dejando actuar durante al menos otra media hora.
4. Pasta de cebolla: picamos una cebolla, la trituramos hasta conseguir una pasta y cubrimos las uñas.
Dejamos que actúe durante unos 10 minutos hasta que se seque la pasta, y nos enjuagamos. Repetir
el tratamiento un par de veces por semana.
El agua y el bicarbonato son productos que fortalecen las uñas de forma rápida y efectiva. El ajo también
es conocido por sus propiedades para endurecer las uñas de manera natural. Podemos hacer una mezcla
con jugo de limón y bicarbonato y remojar las uñas dos veces al día. Si queremos hidratar tanto los dedos
como las uñas, podemos añadir una cucharada de aceite de oliva. Además, el bicarbonato ayudará a
blanquear las uñas si están amarillentas y debilitadas.
Otro remedio casero que funciona bien y es muy rápido es sumergir las uñas en zumo de limón y luego
frotarlas con un diente de ajo. Sin enjuagarlas, aplicamos agua oxigenada en un disco de algodón y nos
impregnamos bien las uñas. Finalmente, las introducimos en vinagre de manzana durante unos minutos.
Esta técnica debe aplicarse durante al menos una semana antes de acostarnos. Nos sorprenderá
comprobar cómo las uñas crecen más fuertes en pocos días.