Pastoral Familiar SUBSIDIO 2024

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Introducción

Con motivo de la celebración de la Semana de la Familia, la comisión de la


Pastoral Familiar presenta esta guía metodológica que las familias compartan
momentos de encuentro que les ayuden a crecer en su espiritualidad Familiar y,
a la vez prepararnos para la marcha y encuentro por la vida y la familia con el
lema: “Caminando juntos en santidad sin olvidar a los más pobres”.

Caminar juntos como Pueblo de Dios, es una vocación, una exigencia de la Iglesia
para que ella sea lo que es y lo que está llamada a ser, nos lo dice el Papa
Francisco. Por ello es necesario considerar que este caminar juntos, es una tarea
ardua, comprometida y diaria que conlleva responsabilidad de abrir juntos, como
familia, un camino hacia la esperanza y de cercanía con los demás,
especialmente con los que más sufren. Para este caminar juntos nos necesitamos
mutuamente teniendo a Jesús como “el camino, la verdad y la vida” (Juan 14,6).

Todas las familias tienen problemas en su convivencia, y todos los días necesitan
aprender a vivir juntos, y a descubrir y a apoyar las necesidades de cada uno de
los integrantes, para la familia sea, así, lo que es: un santuario de la vida, es
decir, una comunidad humana abierta a recibir con amor la vida de cada
integrante de ella, que está llamada a trabajar cada día en su buena relación y
en esfuerzos comunes, para alcanzar las metas que se propone como familia. Si
la familia se esfuerza por ser lo que es, entonces se convierte en un modelo de
sinodalidad para la Iglesia.

San Juan Pablo II, en su Exhortación Apostólica “Familiaris Consortio” y en otros


documentos, les decía a las familias: “Familia, sé lo que eres”. Realmente la
familia es «el santuario de la vida..., el ámbito donde la vida, don de Dios, puede
ser acogida y protegida de manera adecuada contra los múltiples ataques a que
está expuesta, y puede desarrollarse según las exigencias de un auténtico
crecimiento humano» (Carta enc. Centesimus annus), por eso los Papas del siglo
XX y del XXI han insistido unánimemente en que la familia cristiana es el ámbito
más eficaz para educar la fe de los hijos y para enseñarles a orar.

Sigamos orando para que cada familia sea lo que debe ser, según la voluntad de
Dios, y viva en sinodalidad, caminando todos juntos como la gran familia de Dios
que somos, en un mismo rumbo e interesados todos por el camino de cada uno.
María, Madre de las familias, ruega por nosotros.

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ORACIÓN A LA SAGRADA FAMILIA
Papa Francisco
Jesús, María y José, Santa Familia de Nazaret,
a ustedes dirigimos hoy la mirada con admiración y confianza;
en ustedes contemplamos la belleza de la comunión en el verdadero amor;
les encomendamos todas nuestras familias,
para que se renueven en ellas las maravillas de la gracia.

Escuela atrayente del santo evangelio:


enséñanos a imitar tus virtudes
con una sabia disciplina espiritual,
dónanos la mirada límpida
en la que se reconoce la obra de la Providencia
en las realidades cotidianas de la vida.

Santa Familia de Nazaret,


custodios fieles del misterio de la salvación:
haced renacer en nosotros la estima por el silencio,
que nuestras familias vuelvan a ser cenáculos de oración,
transformadas en pequeñas Iglesias domésticas.
Renueva el deseo de la santidad,
sostén la noble fatiga del trabajo, de la educación,
de la escucha, de la comprensión recíproca y del perdón.

Santa Familia de Nazaret,


devuelve a nuestra sociedad la conciencia
del carácter sagrado e inviolable de la familia,
bien inestimable e insustituible.

Qué cada familia sea morada acogedora de bondad y de paz


para los niños y para los ancianos,
para quien está enfermo y solo,
para quien es pobre y necesitado.
Jesús, María y José
les suplicamos con confianza, y nos ponemos con alegría
bajo su protección.

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Reflexionar que estamos llamados a caminar juntos como

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“El verdadero vínculo es siempre con el Señor.
Todas las familias, tienen necesidad de Dios: todas, ¡todas!
(Papa Francisco)

ORACIÓN

Padre Santo, estamos aquí ante Ti


para alabarte y agradecerte el gran don de la familia.
ayúdanos para dar testimonio de tu Presencia
y del amor con el que Cristo ama a la Iglesia.
Te pedimos por las familias
que pasan por dificultades y sufrimientos,
por enfermedad, o aprietos que sólo Tú conoces:
Sostenlas y hazlas conscientes
del camino de santificación al que las llamas,
para que puedan experimentar Tu infinita misericordia
y encontrar nuevas formas de crecer en el amor.
Señor, haz que cada familia pueda vivir su propia
vocación a la santidad en la Iglesia
como una llamada a ser protagonista de la
evangelización, al servicio de la vida y de la paz,
en comunión con Tu pueblo.
Amén.

Les invito a leer la siguiente historia de amor:


Santos Luis y Celia Martin, padres de santa Teresa de Lisieux
(Santa Teresita del Niño Jesús)
Estos santos tienen una bella historia de amor marcada por la
confianza en Dios y una intensa vida piadosa.
Tanto Luis como Celia sintieron durante su juventud el deseo de
consagrarse a Dios a través de la vida religiosa, pero Dios tenía
otros planes para ellos. A Luis, el prior del Hospicio de San Bernardo el Grande para
consagrarse por completo a Dios le pide que regrese a su casa a completar los estudios
de latín por lo que Luis renuncia a su proyecto y a Celia, la superiora de las Hijas de la
Caridad donde solicita ingresar, le responde sin titubear que no es ésa la voluntad de
Dios. Ambos se especializan en un oficio, llevaban una vida ordenada, tanto así que los
amigos de Luis comentaban: “Luis es un santo”.
Se enamoraron y se casaron ese mismo año. Ambos, además de ayudarse mutuamente
en las tareas del hogar, llevaron una intensa vida espiritual: Asistían a Misa diaria,

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oraban en forma personal y comunitaria, se confesaban con frecuencia y participaban
en las actividades parroquiales.
Tuvieron nueve hijos, de los cuales sobrevivieron cinco niñas: Paulina, María, Leonia,
Celina y Teresa. A todas les transmitieron el amor a Dios y al prójimo. Además, sus
negocios no fueron impedimento para que pasaran tiempo de calidad con ellas.
Cuando Celia tenía 45 años se enteró que tenía un tumor en el pecho, afrontó esta
enfermedad con firme esperanza cristiana hasta que falleció el 28 agosto de 1877
rodeada de su esposo y su hermano Isidore.
Luis se trasladó a Lisieux, donde la tía Celina lo ayudó a cuidar de sus cinco hijas. Años
más tarde, todas se hicieron religiosas, cuatro en el Carmelo y una en la Visitación.
Luis contrajo una enfermedad que lo fue mermando hasta perder sus facultades
mentales, hasta que murió el 29 de julio de 1894.
Luis y Celia fueron canonizados el 18 de octubre de 2015 por el Papa Francisco durante
el Sínodo de la Familia, y su fiesta se celebra es el 12 de julio, día de su aniversario de
boda.

✓ ¿Qué les parece la historia de estos santos?, ¿Cuál, consideras, que fue la clave para
relacionarse con Dios y los demás¡?

Reflexión

El amor que se ve reflejado en los Santos Luis y Celia Martin, es el fruto de tener
en su vida la presencia de Dios, el amar no es un sentimiento o una emoción
pasajera que se presenta, es una decisión. Pues, sabemos que con quien estas
casado(a), es tan imperfecto(a) como tú. Y, también, tu pareja, a su vez, se dará
cuenta que tienes problemas, inseguridades, luchas, rarezas e incluso ronquidos.
Entonces te darás cuenta de que el verdadero amor, el formar una familia, es un
plan de amarse en la alegría y en el dolor, en la riqueza y en la pobreza, en la
salud y en la enfermedad.
Pero, ¿Qué nos enseña esta sociedad? -Que sigamos nuestros sentimientos y que
hagamos lo que nos hace felices, aunque sea destruyendo de los demás, hasta
a la propia familia-
Los sentimientos son muy volubles y fugaces. El verdadero amor, por el contrario,
es como la estrella polar en las tormentas de la vida; es constante, seguro y
cierto, que cuando estamos perdidos y confundidos podemos encontrar fuerza
en el amor que hemos elegido. Además, este mundo nos ofrece un montón de
espontaneidad: el rechazo, el individualismo, la angustia, la desilusión, la
desesperación, la enfermedad, y una serie de otros problemas. Simplemente no
podemos abandonar el barco, no podemos abandonar a la familia cada vez que
nos encontramos con una tormenta. El amor verdadero ayuda a sobrellevar las
tormentas y salir victoriosos juntos como familia.
Para reflexionar juntos:

1. ¿Cuáles crees que son las principales “sombras” que se ciernen sobre tu familia?,
¿cómo las afrontas?
2. ¿Cómo vivimos la llamada de caminar juntos a la santidad como familia?
3. ¿Consideras importante crecer en nuestra vida espiritual?, ¿por qué?

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Texto bíblico:
…………………………………………………….
¿Quiénes están
llamados a la santidad?
…………………………………………………….
…………………………………………………….
…………………………………………………….
¿Por qué Dios quiere …………………………………………………….
que seas santo?
……………………………………………………
…………………………………………………….
¿Cuándo quiere Dios …………………………………………………….
que seas santo? …………………………………………………….
…………………………………………………….
¿Dónde puedes ser …………………………………………………….
santo?
…………………………………………………….

“Que nuestra familia siempre busque a Jesús para que nos ayude a

Todos estamos llamados a ser santos santidad, donde todos deben ayudarse
viviendo con amor y ofreciendo el a cada día, allí donde cada uno se
propio testimonio en las ocupaciones encuentra.
de cada día, allí donde cada uno se “¿Eres padre, abuela o abuelo? Sé
encuentra. Es una invitación santo enseñando con paciencia a los
infinitamente tentadora y al mismo niños a seguir a Jesús” (Gaudete et
tiempo retadora. Que más tentador Exsultate 14).
que ser realmente feliz, vivir “La vida de la familia, entretejida de
gozosamente, estar cerca de Dios, relaciones, a veces complejas y no
gozar de carismas y dones, poseer una siempre fáciles, se convierte en un
capacidad arrolladora de entusiasmo, lugar especialmente adecuado y
confianza, fe y servicio. Y a su vez, es propicio para contemplar la acción del
un reto que nos permite salir de Espíritu de Dios, que puede convertir
nuestro confort, ver la realidad desde el corazón del hombre, cambiar sus
la fe, iluminar fases y aspectos actitudes y, hacer, de este modo, que
oscuros, que nos desinstala, nos los miembros de la familia sean
interpela y nos cuestiona. capaces de amar como Cristo ama”
La familia está llamada a ser escuela (Catequesis X Encuentro Mundial
de Familias).

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¿Como crecemos en santidad?
 Con la gracia en CIC 1996-2000 nos dice que es un favor, auxilio gratuito
que Dios nos da para responder a su llamada: ser hijos de Dios… es un don
una disposición estable y sobrenatural que perfecciona al alma para hacerla
capaz de vivir con Dios.
 Con la Iglesia nos ayuda aprender como ser discípulos de Cristo y crecer en
santidad.

¿Te atreves a darle play a la santidad en tu vida familiar?

Algunas sugerencias prácticas para poder ser santo:

✓ Descubre a Dios en cada momento de tu vida.


✓ Cambia cada momento desagradable en un pensamiento positivo para tu
alma.
✓ Mantente unido en oración a la voluntad de Dios,
✓ Escoge a Dios antes que a ti mismo.
✓ Imita a Jesús, trata de vivir siempre en Su Presencia.
✓ Visita seguido a Jesús en la Eucaristía.
✓ Pide al Espíritu Santo te ayude a crecer tu Fe cada día.
✓ Llevar una vida sacramental,….

Para reflexionar en grupo o familia:


1. ¿Cuándo piensas en ti como un santo o una santa?
2. Si tu pudieras acompañar a Jesús durante su vida pública, ¿Cuáles
de sus cualidades les llamaría más la atención? y ¿Qué enseña Jesús
acerca de la santidad?
3. ¿Cómo pueden vivir el mandato de Jesús de ser santos en el mundo de hoy?
4. ¿Cuáles son los dones particulares que Dios te ha dado?
5. ¿Cuándo te has sentido guiado en este camino hacia la santidad?
6. ¿Ha habido eventos, encuentros, ocasiones que te hayan mejorado a tí o a tu
familia?

Compromiso:

¿Qué “pequeños gestos” de amor y servicio que expresen de forma concreta y real el
amor que santifica y transforma tendrás con cada uno de los integrantes de tu familia?

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Oración final

Señor Jesús, tú nos dijiste:


“sed perfectos como vuestro Padre
celestial es perfecto”,
llamándonos a ser santos.
Ayúdanos a elegirte siempre a Ti y,
así ser nuestra guía que
ilumina nuestra vida diaria.
Te damos gracias por el modelo
y compromiso de fe
de tantos hermanos nuestros que,
con la fuerza de la gracia divina,
eligieron y consiguieron
vivir a largo de los siglos
una vida evangélica ejemplar en la
Iglesia universal.
Santa María,
madre de Dios y madre nuestra,
ruega por nosotros y
mira a mi familia para que
Tú amado Hijo Jesús la mire.
Amen

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Actividad para realizar en familia:

• A cada participante se le entregará una hoja de block, junto a esta también


ira en forma de matriz: una puerta, un reflector, un techo, y dos ventanas.
• Luego se pedirá que en cada uno de los troqueles escriban lo siguiente:
 Ventanas: Qué aspectos debes cambiar en las relaciones familiares, en una
ventana se escriben las malas costumbres, vicios, y cosas que hay que
purificar; y en la otra ventana las acciones y compromisos que se van a
tomar para cambiar lo plasmado en la primera ventana.
 Puerta: En la parte de atrás, se escribirán tres elementos que consideres
que han ido limitando tu hogar, que lo está esclavizando, que no le deja
crecer en su vida espiritual y deseas que ya no estén. Y en la parte de
adelante tres cosas a las que hoy les abres la puerta para que entren a
transformar tu hogar.
 Bombillo: Pon acá la manera como enseñas en tu familia, lo que consideres
que aportas al hogar con tu presencia, con tu testimonio, las características
que te hacen ser luz, los dones que tienes y deseas compartir para que
otros se beneficien.
 Techo: Trata de identificar cuáles son los enemigos de tu hogar en la
actualidad, los monstruos que le amenazan y asustan, escribe las acciones
que emprenderás para cuidar tu hogar, que medidas y estrategias vas a
utilizar para proteger a los que amas y caminar a la santidad.
• Terminado este ejercicio se invita a que cada uno arme su casa, y le ponga el
nombre de los que la habitan, es decir, su familia.

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Tomar conciencia de la importancia de orar en familia en los
diferentes momentos y circunstancias de la vida, y del
sentido de la espiritualidad familiar, como fundamentos
para fortalecer la unión de los esposos, de los padres con sus

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(San Juan Pablo II)

ORACIÓN

Jesús, María y José,


en vosotros contemplamos
el esplendor del verdadero amor,
a vosotros, confiados, nos dirigimos.

Santa Familia de Nazaret,


haz también de nuestras familias
lugar de comunión y cenáculo de oración,
auténticas escuelas del Evangelio
y pequeñas iglesias domésticas.

Santa Familia de Nazaret,


que nunca más haya en las familias episodios
de violencia, de cerrazón y división;
que quien haya sido herido o escandalizado
sea pronto consolado y curado.

Santa Familia de Nazaret,


as que tomemos conciencia a todos
del carácter sagrado e inviolable de la familia,
de su belleza en el proyecto de Dios.
Amén.

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Los invito a observar las imágenes unos momentos y luego responde las preguntas:

¿Qué rol crees que les


corresponde a los
padres en la vida de
oración de sus hijos?

Te invito a dialogar sobre lo que afecta la falta de oración en la familia y los beneficios que
se obtiene cuando la practicamos en casa. Completa el cuadro:

¿Puede afectar la falta de oración en ¿Crees que la oración en familia beneficia a


familia?, ¿cómo? Señala tres aspectos todos?, ¿en qué? Señala tres aspectos
1. 1.

2. 2.

3. 3.

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La Biblia es la Palabra de Dios, su lectura diaria y
meditativa es para el creyente como una lámpara que
guía su caminar por la vida.
El versículo 105 nos muestra como la Palabra de Dios
se muestra en cada paso de la vida del salmista y en
los planes futuros también, cuando el dice lampara a
mis pies es tu palabra, está dejando claro que cada
paso que el da cada día es iluminado por la palabra
de Dios, y que en su andar en las decisiones que toma
a futuro también la Palabra es quien le ilumina.

Pregúntate:
✓ ¿Es la Palabra de Dios mi brújula en cada paso que doy cada día, es la brújula en mi familia?
………………………………………………………………………………………………………………………………….………
………………………………………………………………………………………………………………………………………….
✓ ¿Es la palabra de Dios la guía para mi camino, mi andar, mis decisiones y planes, también para
mi familia?
………………………………………………………………………………………………………………………………….………
………………………………………………………………………………………………………………………………………….
✓ ¿Estoy yo andando en oscuridad? Mi familia, ¿también está andando en oscuridad?
…………………………………………………………………………………………………………………………………………
…………………………………………………………………………………………………………………………………………

Sólo la Palabra de Dios ilumina nuestros pasos,

¿Consideras que la Palabra de Dios esta iluminando


tu caminar como familia?, ¿cómo?, ¿cuándo?

……………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………
…………………………………………………………………………...

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La familia, primera escuela de oración

 «La familia cristiana es el primer ámbito para la educación


en la oración» (CEC 2685). Los padres cristianos tienen
una gran responsabilidad de enseñar a sus hijos a orar, ya
que han de ser los primeros «maestros de oración» que
guíen a los hijos en el descubrimiento del misterio de Dios
y en el diálogo personal con Él. Es en la familia donde
aprendemos amar a Jesús Eucaristía, a participar en la
Liturgia de la Iglesia….

 En el documento: Vivir el Año de la Oración en preparación al Jubileo 2025,


leemos que la familia, donde los hijos aprenden a dar los primeros pasos y a
decir las primeras palabras, también es donde aprenden a orar y a decir
“gracias” al Señor. Creciendo los hijos, practicarán la oración siguiendo el
ejemplo de sus papás, aprendiendo a confiarse en el Señor, incluso en los
momentos más difíciles.

 San Juan Pablo II, en la Exhortación Apostólica Familiaris Consortio N° 60,


nos dice que el elemento fundamental e insustituible para la educación de la
oración de los hijos, es el ejemplo y el testimonio vivo de los padres; el orar
junto a ellos, es lo que cala profundamente en el corazón de sus hijos,
dejando huellas profundas que los posteriores acontecimientos de la vida no
lograrán borrar” (FC, n. 60).

 En la Exhortación Apostólica Amoris Laetitia N° 228, el Papa Francisco


recuerda que «los momentos de oración en familia y las expresiones de la
piedad popular pueden tener mayor fuerza evangelizadora que todas las
catequesis y que todos los discursos».

Cuando la familia se hace orante y esto lo


comparte en la comunidad parroquial donde
vive y celebra su fe, hace de nuestra Iglesia una
comunidad orante y comprometida, pues no
existe verdadera oración que no lleve a un
mayor compromiso de vida.

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Ejemplos de oración familiar

✓ En la mesa antes y después de los alimentos.


✓ La oración al iniciar y al terminar el día.
✓ El domingo con el rezo de Laudes…

“La oración por más sencilla que sea queda gravada en la vida del ser humano”

Rincón para hacer oración en familia


▪ Cada familia debe tratar de tener un lugar
para la oración, que debe tener, durante la oración,
una luz que este permanentemente encendida
delante del crucifijo o imagen de la Virgen para que
se recuerde la presencia tranquilizadora de Dios.

▪ También puede estar adornarlo con flores


frescas y agregar las peticiones familiares escritas. Esto sobre todo cuando
hay niños pequeños, porque estas actividades pueden hacerlos sentir
participes de este rincón y del momento de oración familiar.

Beneficios de orar en familia


Mejora la salud y reduce el estrés.
Aumenta la confianza mutua entre los
esposos.
Mejora la comunicación y relación entre
padres e hijos

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Preguntas para el diálogo:
❖ ¿Por qué crees que es importante cultivar la oración en la familia?
……………………………………………………………………………………………………………………………
…………………………………………………………………………………………………………………………….
❖ ¿Será importante tener en el hogar un lugar para orar juntos?, ¿Por qué?
……………………………………………………………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………………………………………………………

❖ ¿Qué ventajas provienen de la oración de los padres junto con sus hijos?
……………………………………………………………………………………………………………………………
…………………………………………………………………………………………………………………………..

❖ ¿Promuevo momentos de oración en mi familia?


……………………………………………………………………………………………………………………………
…………………………………………………………………………………………………………………………..

❖ ¿Participo en la Liturgia de la Iglesia con mi familia?


……………………………………………………………………………………………………………………………
…………………………………………………………………………………………………………………………..

❖ ¿Qué propuestas podemos hacer para que nuestras familias sean escuela de
oración? Completa el cuadro:

PROPUESTA BENEFICIO

Delegar a un miembro de la familia que se encargue de Ayuda a que la familia se mantenga más unida
dirigir la oración por semana, también se puede decir la preocupándose el uno por el otro, y compartan sus
hora y de esta manera todos se organizanpara no faltar vivencias diarias por si necesitan orar por algunas
a la oración en familia. situaciones que pueden estar pasando algún miembro
de la familia.

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Juego “El mensaje de Dios”

Para realizarlo en familia o con amigos.


Instrucciones:
✓ Recorta el recuadro grande que contiene todos los letreros.
✓ Pega el recuadro sobre una cartulina y enmícalo.
✓ Después recorta cada uno de los letreros, y ¡listo!
Cómo se juega ‘El mensaje de Dios’
Es muy sencillo: una vez que ya preparaste el juego, acércate a un familiar o amigo y, con los
mensajes en forma de abanico y viendo hacia ti, pregúntale: “¿Sabes qué te quiere decir hoy
Dios?”. La persona debe tomar uno y después leerlo en voz alta.

“¡Sé fuerte y valiente! No temas porque el

«Enjugará Dios toda lágrima de los ojos …; “Dios mío, tú eres mi luz y mi salvación;
y ya no habrá muerte, ni habrá más llanto, ¿de quién voy a tener miedo? Tú eres quien

¡Pondré mi confianza en Dios mi salvador! “Pero los que confían en Dios siempre

¿A qué puedes comprometerte para promover


la oración que en tu familia?

ORACIÓN FINAL
Señor, nos has dado un modelo de vida
en la Sagrada Familia de Nazaret
Ayúdanos, Padre amado,
a hacer de nuestra familia otro Nazaret,
donde reine el amor, la paz y la alegría,
que sea profundamente contemplativa,
intensamente eucarística y vibrante con alegría.
Ayúdanos a permanecer unidos
por la oración en los momentos de gozo y de dolor.
Enséñanos a ver a Jesucristo
en los miembros de nuestra familia
En la oración de la familia, Haz que nos amemos más y más
unos a otros cada día
en sus momentos fuertes y
como Dios nos ama a cada uno de nosotros
en sus pasos difíciles, y a perdonarnos mutuamente nuestras faltas,
nos encomendamos unos a como Tú perdonas nuestros pecados.
otros, para que cada uno de Inmaculado Corazón de María,
nosotros en la familia causa de nuestra alegría, ruega por nosotros.
Santos Ángeles de la Guarda
este protegido por
permaneced a nuestro lado,
el amor de Dios. guiadnos y protegednos.
Papa Francisco Amén.

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“La familia, protagonista

Promover la comprensión y el compromiso de las familias


como agentes esenciales en la construcción de la fraternidad
humana, resaltando la importancia de vivir la solidaridad

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"Somos distintos, somos diferentes, (…),
pero somos hermanos y queremos vivir en paz"
(Papa Francisco)

Dialogamos con Dios…

"Señor, te pedimos que nos guíes


para que nuestras familias
sean reflejo de tu amor y fraternidad.
Que en nuestro hogar reine la
solidaridad y que sepamos ser testigos
de tu bondad en el mundo. Amén."

Leemos el cuento “La fraternidad”


(Fuente: https://www.encuentos.com/cuentos-cortos/la-fraternidad/#google_vignette)

Se cuenta de dos hermanos que habían heredado un


campo de sus padres y ambos habían construido sus casas
allí, distantes unos doscientos metros.
El hermano mayor, Juan, era soltero y estaba muy feliz con
su trabajo en el campo y los diversos hobbies que tenía. El
hermano menor, Pablo, estaba casado y tenía dos hijos y
una hija; también vivía muy feliz con su esposa y su
trabajo. Los dos se dedicaban a la siembra, pero para no tener inconvenientes
de ningún tipo habían separado el campo en dos parcelas iguales y también
guardaban el fruto de la cosecha en graneros separados.
Sin embargo, una noche, Juan pensó que la situación era injusta. Se dijo que él
era soltero y no necesitaba tanto como su hermano que tenía esposa e hijos que
mantener. Entonces decidió ir a su granero, llenar una bolsa grande, cargarla en
sus hombros y llevarla, en el silencio de la noche hasta el granero de Pablo.
Casi al mismo tiempo, Pablo también pensó que la situación era injusta. Se dijo
que él era casado y que tenía hijos que iban a cuidar de él en su vejez. Sin
embargo, su hermano Juan, por ser soltero, necesitaba contar con más recursos.
Entonces decidió ir a su granero, llenar una bolsa grande, cargarla en sus
hombros y llevarla, en el silencio de la noche hasta el granero de Juan.
Así fue que, cada noche, protegidos por el silencio y la oscuridad, los dos
llevaban una bolsa grande de granos hasta el depósito de su hermano.
Claro que, al hacer ambos lo mismo la cantidad de granos permanecía invariable
sin que ellos lo percibieran. Esto fue así durante mucho, muchísimo tiempo,
hasta que una noche coincidieron sus horarios y se encontraron cargando la
bolsa en la mitad del trayecto. No hizo falta que se dijeran ni una sola palabra.
Juan y Pablo se dieron cuenta de inmediato lo que estaba haciendo su hermano.
Dejaron caer la bolsa a un costado del camino y se dieron un fuerte y, casi diría,
interminable abrazo.
Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 21
Los vecinos del lugar se enteraron de lo ocurrido y la historia se fue contando
de generación en generación.
Cuenta la historia que hace muy poquito, por iniciativa de los bisnietos de Pablo,
allí se construyó la estatua de "La fraternidad".

Según el cuento leído:

❖ ¿Cómo definirías la fraternidad y solidaridad?

……………………………………………………………………………………………………
………………………..………………………………………………………………………….

❖ ¿Con qué acciones demostramos la fraternidad y solidaridad?

……………………………………………………………………………………………………
…………………………..……………………………………………………………………….

❖ ¿Cómo podrías vivir la fraternidad y solidaridad en tu familia,


comunidad?

……………………………………………………………………………………………………
……………………….…………………………………………………………………………..

Observa las siguientes imágenes y responde:

• ¿Qué valores crees que están


demostrando?
• ¿Qué cambios podemos hacer para
mejorar nuestras relaciones familiares?
• ¿Qué acciones concretas podemos
llevar a cabo para ayudar a otros como
familia?
• ¿Cómo podemos ser un ejemplo de
fraternidad y amor en nuestra
comunidad?

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Leemos el texto bíblico de Mt 25, 34-46, luego respondemos las preguntas:
“Cuando venga el Hijo del hombre en su gloria con todos sus ángeles, se sentará en su trono glorioso. Todas
las naciones se reunirán delante de él, y él separará unos de otros, como el pastor separa las ovejas de los
cabritos, y pondrá las ovejas a un lado y los cabritos al otro. Entonces el rey dirá a los de un lado: “Vengan,
benditos de mi Padre, tomen posesión del reino preparado para ustedes desde la creación del mundo. Porque
tuve hambre, y me dieron de comer; tuve sed, y me dieron de beber; era un extraño, y me hospedaron; estaba
desnudo, y me vistieron; enfermo, y me visitaron; en la cárcel, y fueron a verme”. Entonces le responderán
los justos: “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento y te alimentamos; sediento y te dimos de beber? ¿Cuándo
fuiste un extraño y te hospedamos, o estuviste desnudo y te vestimos? ¿Cuándo te vimos enfermo o en la
cárcel y fuimos a verte?” Y el rey les responderá: “Les aseguro que cuando lo hicieron con uno de estos mis
hermanos más pequeños, conmigo lo hicieron.”

Reflexión del texto bíblico con el método de la Lectio Divina:

Paso 1: ¿Qué dice el texto? Paso 2 (Meditar): ¿Qué me dice


Para responder esta pregunta, Dios a través del texto?
presta atención de todos los detalles En este paso, escucha tu interior, lo
posibles. Imagina la escena. que sientes. ¿Algún aspecto te parece
Subraya todos los elementos que dirigido por Dios a tu persona, a tu
llaman la atención o te son muy situación personal, familiar,…?
significativos. Disfruta de la lectura
atenta.

Paso 3 (Orar): ¿Qué le dices a Dios Paso 4 (Contemplación): ¿Qué me


gracias a este texto? da Dios a conocer?
En silencio dile al Señor respondiendo Es el momento de saber disfrutar en
estas preguntas: ¿Qué te mueve a silencio de la presencia de Dios,
decirle? ¿Peticiones, alabanza, acción adorarlo en la intimidad, saber callar
de gracias, perdón, pedirle ayuda, (dejar de pedir) y simplemente
compromiso? Habla con Dios quedarse con Él.

Reflexión: El texto bíblico que hemos leído, nos llama a


la compasión y al amor incondicional hacia el prójimo.
Paso 5 (Actuar): ¿A qué te
Este pasaje nos invita a ver más allá de nuestras
compromete el texto?
propias necesidades y a enfocarnos en las de aquellos
¿Qué camino de vida te invita a tomar
que nos rodean, especialmente los más vulnerables y
Dios a través de este texto?, ¿Qué
enseñanza has encontrado, tanto para necesitados. En la vida diaria, en la vida familiar, esto
tu vida personal como para tu familia?, se traduce en acciones simples pero significativas: una
¿Cómo hacer efectiva esa enseñanza? sonrisa, una palabra de aliento, un gesto de ayuda.
Cada acto de bondad es un eco del amor divino que nos
llama a ser reflejo de su luz en el mundo.

“La familia es el contexto en el que nace la experiencia de la fraternidad, es el lugar en el que se reconoce al otro como
hermano. En la familia se aprende a vivir la pertenencia a un vínculo común que es un proyecto de amor” (Papa Francisco)
Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 23
Se forman cuatro grupos y, cada grupo lee y responde la pregunta relacionada al texto
bíblico asignado:

Grupo 1: Gálatas 6:2 Grupo 2: Romanos 12:10:


“Ayúdense unos a otros a llevar sus “Ámense los unos a los otros con amor
cargas, y así cumplirán la ley de fraternal, respetándose y honrándose
Cristo.” mutuamente.
Pregunta reflexiva: ¿Cómo podemos Pregunta reflexiva: ¿De qué manera
ayudar a nuestros familiares en los mostramos respeto y honra dentro de
momentos de necesidad? nuestra familia?

Grupo 3: 1 Juan 4:20 Grupo 4: Hebreos 13:16


“Si alguno dice: Yo amo a Dios, pero odia a “Y no se olviden de hacer el bien y de
su hermano, es un mentiroso. Pues el que no compartir con otros, porque de tales
ama a su hermano, a quien ha visto, no
sacrificios se agrada Dios.” Pregunta
puede amar a Dios, a quien no ha visto.”
Pregunta reflexiva: ¿Qué podemos hacer
reflexiva: “¿Qué acciones de solidaridad
para cultivar el amor genuino en nuestras podemos llevar a cabo como familia para
relaciones familiares? ayudar a los demás?”

La fraternidad como valor nos conlleva a ser Educar en la fraternidad es aprender a


solidarios, respetuosos y empáticos con las gestionar los conflictos con el respeto.
demás personas, porque es allí, en la familia, en Educar para la fraternidad es educar en
donde el ser humano, desde los primeros días de la interioridad, es aportar alimento
su concepción y durante el resto de su vida, espiritual indispensable para su
aprende a socializar, a compartir, a perdonar, a desarrollo, ¿alimentamos en nuestra
pensar en el otro: a amar. familia el espíritu de fraternidad o más
Un buen punto de inicio lo constituyen los bien el de competición?
valores que se inculcan, especialmente en el El “vínculo de fraternidad que se construye en la
hogar. La solidaridad, es una virtud que nos familia entre los hijos, si se lleva a cabo en un
llama a reconocer que todos somos responsables clima de educación abierta a los demás, es la
unos de otros. Se basa en el principio de que gran escuela de la libertad y de la paz." Por este
todos somos hijos de Dios y, por lo tanto, parte motivo, podemos pensar que el gran árbol de la
de una misma familia humana. La solidaridad es sociedad global producirá frutos de paz y
más que un simple acto de caridad; es un convivencia entre los géneros y las
compromiso profundo con el bienestar de los generaciones, entre los pueblos y las culturas
demás, especialmente de los más necesitados, es sólo si está profundamente arraigado a la vida
la manifestación concreta del amor al prójimo, familiar.
que se expresa en acciones que buscan la justicia La solidaridad: en la construcción de la
y el bien común. fraternidad humana
Educar en la fraternidad es ante todo 1 fomenta la Unidad y la Cooperación
hacer descubrir que la diferencia es 2 promueve la Justicia y la Igualdad
fuente de enriquecimiento, cuando 3 refleja el Amor de Dios
muchas veces, no se hace el esfuerzo de 4 construye una sociedad más humana
conocer al otro.

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 24


Preguntas para el diálogo:
1. ¿Cómo asumo mi responsabilidad por vivir y transmitir la fraternidad
en mi familia?
2. ¿De qué forma puedo promover la fraternidad en mi familia?
3. ¿Qué obras de caridad realizamos en mi familia?,
4. ¿Mi familia da testimonio del Evangelio con sus actos y formas de
actuar?
5. ¿Qué puedo hacer con mi familia por “los pequeños” (pobres,
marginados, etc.) que necesitan ayuda o apoyo?

Actividad: Árbol de la Solidaridad Familiar


Objetivo. Promover la solidaridad y el apoyo mutuo dentro de la familia y la comunidad
parroquial, reflexionando sobre la importancia de actuar en beneficio de los demás.

Materiales necesarios:

• Papelógrafo o cartulina
• Plumones de colores
• Papeles de colores cortados en forma de hojas
• Goma
• Cita Bíblica relacionada con la fraternidad y solidaridad (puedes incluir 1 Corintios
12:16)

Instrucciones:
1. Preparación del árbol: Dibuja un gran
árbol en la cartulina, deja el tronco y las
ramas visibles, pero no dibujes las hojas
todavía.

2. Reflexión en grupo: Reúne a los


participantes y reflexionen juntos sobre
la importancia de la solidaridad y cómo
vivirla en sus familias y comunidades.

3. Leen la cita Bíblica luego debaten cómo


pueden apoyarse en las alegrías y
dificultades.

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 25


Cada participante tomará una de las hojas de papel y escribirá en ella un compromiso
familiar o personal para vivir la solidaridad. Ejemplo: “ayudar a un vecino necesitado”,
“pasar tiempo con un miembro de la familia que esté solo”, “Organizar una colecta de
alimentos”…..
Una vez que todos hayan escrito su compromiso, pegarán sus hojas en el árbol,
DECORANDO así el “Árbol de la Solidaridad Familiar”

Mientras pegan sus hojas pueden compartir sus compromisos si se sienten cómodos.

ORACIÓN FINAL

"Padre Celestial, te agradecemos


por el don de la familia.

Ayúdanos a vivir en solidaridad,


siendo siempre conscientes de las
necesidades de los demás.

Que nuestro hogar sea un lugar de amor,


comprensión y apoyo mutuo,
y que podamos ser testigos
de tu paz en el mundo.
Amén."

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 26


Comprender que la familia recibe de parte de Dios una

célula primordial de la vida social y de la Iglesia, ambas

promoverla y defenderla, porque “¡defendiendo a la familia,

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 27


La Iglesia es efectivamente “una familia de familias,
y siente la necesidad de ayudar a las familias en sus esfuerzos
para responder fielmente y con alegría a la vocación
que Dios les ha dado en la sociedad”.
Papa Francisco

“Aquí está mi familia, Señor”.


(https://www.youtube.com/watch?v=Wx7RZSmCH24)

Te presento hoy, lo más grande que tengo;


lo que me da fuerzas para continuar, en cada momento.
Te presento hoy, la razón que poseo;
el por qué día a día salgo a luchar: un tesoro inmenso.

Aquí está mi familia Señor, te necesita;


es lo más grande que tengo, protégelos.
Aquí está mi familia Señor, te necesita
es lo más grande que tengo bendícelos.

Y ahora te quiero pedir, por todos aquellos que se han separado;


que más pronto que tarde, vuelvan a juntarse sus manos.

Nos podemos hablar casi una vez al mes;


pero si las cosas se tornan mal, allí ... Tú los ves;
cometemos errores y hasta nos distanciamos;
pero familia es familia y el amor que tenemos, ¡vuelve a juntarnos!

Aquí está mi familia Señor, te necesita…

Y ahora te quiero rogar, por todos aquellos que un día partieron;


pido un aplauso de pie y que esto se escuche hasta el cielo.

Aquí está mi familia Señor, te necesita…


Es que no hay nada más grande que hoy yo te pueda pedir,
pues mi mayor bendición ¡es ver a mi familia feliz!

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 28


Lee el siguiente diálogo, luego responde lo siguiente:

Un docente de anatomía les explica a sus estudiantes lo


siguiente:
- El cuerpo humano está formado por muchos órganos que a
su vez se componen de tejidos que están constituidos por
pequeñas células.
Continúa diciéndoles: Aunque lo primero que vemos es el
cuerpo, no podríamos verlo si no existieran las células, ellas
no se ven a simple vista, pero constantemente van
renovando los tejidos viejos con células nuevas para
permitir el correcto funcionamiento de todos los órganos y del cuerpo en
general.
- Entonces profesor, le dice un estudiante, ¿las células son muy importantes?,
¿Por qué?
- Responde el maestro: por supuesto que son importantes, porque si las células
están enfermas o no funcionan bien, enferman el cuerpo, como por ejemplo
lo que sucede con el cáncer, que es una reproducción desordenada de células
anormales que afectan los tejidos, los órganos y el cuerpo, hasta el punto de
causarle la muerte.
- Profesor, le dice otro estudiante, en conclusión, es lo que acabo de entender,
¿el bienestar de nuestro cuerpo depende de la salud de cada célula?
- Correcto, dice el profesor, así es.
-

Según lo leído, ¿cómo ¿Consideras importante


podemos relacionar la cuidar, defender y
misión en la sociedad promover una Iglesia y
y en la Iglesia? una sociedad sana,
fuerte y vital?

“Si la familia está en problemas, la sociedad también estará en problemas”.

“Una sociedad sana, está constituida por familias fuertes y estables.

Si se enferma la familia, se enferma la sociedad”

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 29


Reflexionamos con la Palabra de Dios…

Leemos y analizamos el texto bíblico de Romanos 12, 4-6.9-18. 21


“Porque, así como en un solo cuerpo tenemos muchos miembros con diversas funciones, también todos nosotros
formamos un solo Cuerpo en Cristo, y en lo que respecta a cada uno, somos miembros los unos de los otros. Conforme
a la gracia que Dios nos ha dado, todos tenemos aptitudes diferentes. Ámense cordialmente con amor fraterno,
estimando a los otros como más dignos. Con solicitud incansable y fervor de espíritu, sirvan al Señor. Alégrense en la
esperanza, sean pacientes en la tribulación y perseverantes en la oración. Consideren como propias las necesidades de
los santos y practiquen generosamente la hospitalidad. Bendigan a los que los persiguen, bendigan y no maldigan
nunca. Alégrense con los que están alegres, y lloren con los que lloran. Vivan en armonía unos con otros, no quieran
sobresalir, pónganse a la altura de los más humildes. No presuman de sabios. No devuelvan a nadie mal por mal.
Procuren hacer el bien delante de todos los hombres. En cuanto dependa de ustedes, traten de vivir en paz con todos. No
te dejes vencer por el mal. Por el contrario, vence al mal haciendo el bien”.

Considerando el texto bíblico,

 ¿Qué estamos haciendo por la Iglesia y por la sociedad?


……………………………………………………………………………………………………………………………
……….……………………………………………………………………………………………………………………

 ¿Qué dones tienen los miembros de tu familia y qué les permite trabajar por
el bien de la comunidad? Menciónalos.
……………………………………………………………………………………………………………………………
……….……………………………………………………………………………………………………………………

La familia es estructura, comunicación, convivencia, lugar de encuentro,


ambiente de comprensión; escuela de unidad, valores y de amor. Es un modo de
vivir que aporta a cada uno de sus integrantes una identidad que trasciende a la
persona y a la propia familia, haciendo comunidad. Reflexionemos:
Familia célula básica de la sociedad: Cada familia forma un microtejido a
partir del cual se va formando el tejido más grande que es la sociedad. “La familia
posee vínculos vitales y orgánicos con la sociedad, porque constituye su
fundamento y alimento continuo mediante su función de servicio a la vida. De la
familia nacen los ciudadanos, y éstos encuentran en ella la primera escuela de
esas virtudes sociales, que son el alma de la vida y del desarrollo de la sociedad
misma” (Familiaris C 42). Si esta familia, se desarrolla y crece normalmente,
renueva y enriquece a la sociedad, pero si en su desarrollo se reproducen células
enfermas, poco a poco van enfermando a todo el gran organismo social. Lo que
pasa en la familia, afecta a la sociedad y a la Iglesia, por eso ambas necesitan
cuidar, proteger, promover y defender la vida familiar y velar para que cada vez
se multipliquen las familias sanas y fuertes.

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 30


Familia: Comunidad al servicio del hombre: en la familia nacemos y
crecemos, ahí vamos creciendo en humanidad, madurando en la vivencia de
nuestra vocación al amor que es lo que nos humaniza y nos lanza a servir, amar
y respetar a los demás, empezando por nuestra propia familia para poder ir a los
demás, a nuestra comunidad. “La familia es escuela de humanidad, escuela que
enseña a poner el corazón en las necesidades de los otros, a estar atento a la
vida de los demás… Se discute mucho hoy sobre el futuro, sobre qué mundo
queremos dejarle a nuestros hijos, qué sociedad queremos para ellos… dejemos
un mundo con familias. Es la mejor herencia. Cuidemos a nuestras familias,
verdaderos centros de humanidad” (Francisco 22/09/15).

Familia “pequeña iglesia”: cuando la familia que vive el amor en las realidades
cotidianas de la vida familiar, renueva y revitaliza la Iglesia, por ello la familia
nutre a la Iglesia y se nutre de la Iglesia a través de la participación comunitaria
en la liturgia y los sacramentos, de la meditación personal y familiar de la Palabra
de Dios que es fuente de vida y espiritualidad para toda familia y una luz que
ayuda en el discernimiento de los diversos desafíos que deben afrontar los
cónyuges y las familias. Cuando la familia se empeña en vivir su fe, da una fuerza
testimonial que motiva y alienta a otras familias a continuar o emprender el
camino de la vida cristiana y de este modo renueva y fortalece la vida de la
Iglesia y de la sociedad. “La comunión espiritual de las familias cristianas,
enraizadas en la fe y esperanza común y vivificadas por la caridad, constituye
una energía interior que origina, difunde y desarrolla justicia, reconciliación,
fraternidad y paz entre los hombres (Familiaris C 48).

Familia escuela de misericordia: la familia cristiana está invitada a ser escuela


de misericordia, siguiendo los pasos de Jesús, viviéndola al interior del hogar y
desde ahí difundirla a todos, especialmente a los que viven momentos difíciles.
“Animada y sostenida por el mandamiento nuevo del amor, la familia cristiana
vive la acogida, el respeto, el servicio a cada hombre, considerado siempre en
su dignidad de persona y de hijo de Dios…La caridad va más allá de los propios
hermanos en la fe, ya que «cada hombre es mi hermano»; en cada uno, sobre
todo si es pobre, débil, si sufre o es tratado injustamente, la caridad sabe
descubrir el rostro de Cristo y un hermano a quien amar y servir” (Familiaris
C,64)

LA IGLESIA ENSEÑA QUE LA FAMILIA ES UNA ESCUELA DE


HUMANIDAD, AMOR Y ESPERANZA PARA LA SOCIEDAD. ES EL
LUGAR DONDE CADA UNO DE NOSOTROS APRENDE QUIÉN ES
COMO INDIVIDUO Y COMO MIEMBRO DE LA SOCIEDAD
HUMANA.

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 31


Preguntas para el diálogo:

1. Tu familia, ¿es una célula sana o enferma?, ¿por qué?


…………………………………………………………………………………………………...…
……………………………………………………………………………………………………...
2. ¿Cómo estamos vivenciando en nuestra familia la vocación al amor?
…………………………………………………………………………………………………...…
……………………………………………………………………………………………………...
3. ¿Con qué actitudes tu familia nutre a la Iglesia?
…………………………………………………………………………………………………..…
……………………………………………………………………………………………………...
4. ¿Con qué acciones te nutres de la Iglesia?
…………………………………………………………………………………………………...…
……………………………………………………………………………………………………...
5. ¿Cómo vivencia tu familia la misericordia a ejemplo de Jesús?
……………………………………………………………………………………………………...
................................................................................................................................................................................

¿Qué esta aportando tu familia a la

iglesia y a la sociedad?

Actividades:

1. Leemos en Josué 24, 15: “Decidan hoy a quién van a servir... Por mi parte,
mi familia y yo serviremos al Señor”. ¿Tu familia también está dispuesta
seguir sirviendo al Señor?, ¿cómo?

……………………………………………………………………..

……………………………………………………………………..

……………………………………………………………………..

……………………………………………………………………..

2. Se entrega a cada familia una copia de la dinámica ¿Quiénes somos?,


motivándoles que la resuelvan con la más absoluta sinceridad, haciendo
mención que para poder descubrir nuestra misión, tanto en la sociedad como
en la iglesia, es necesario conocernos como personas, como familia.

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 32


¿Cuáles son los sueños, aspiraciones,
proyectos de tu familia para la sociedad
y la iglesia?

¿Cómo pone tu familia sus


cualidades al servicio de la
sociedad y de la iglesia? ¿Qué puede mejor tu familia para
beneficio de la sociedad y de la
iglesia?

¿Qué sentimientos
predominan en tu familia por
la sociedad y la iglesia?

¿De qué manera los


complejos, indiferencia,
intereses dañan a la
sociedad y a la iglesia?

¿Qué sentido le da tu familia a


lo que hace por la sociedad y la
iglesia?

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 33


Terminemos la reflexión de este tema, reflexionando algunas preguntas:
❖ ¿Nuestra familia es la prioridad en mi vida? ¿Por qué?
❖ ¿Nuestra familia es escuela que educa buenos ciudadanos y cristianos? ¿Por
qué?
❖ ¿Qué aspiramos para nuestra familia y sus integrantes?
❖ ¿Nos hemos dado por vencido ante las diversas situaciones que afrontamos
en el mundo de hoy?

Oración final

Jesús, amado Señor,


te pedimos que nos des la fortaleza para
sobrellevar las dificultades que se
presentan en el mundo de hoy
siendo testimonios
de tu amor, de tu misericordia.
Te pedimos también, por
aquellas familias que
no comprenden tu Palabra.
Que la bendición de Dios todopoderoso,
Padre, Hijo y Espíritu Santo
descienda sobre cada de las
familias del mundo y
permanezca para siempre.
Amén.

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 34


Sanando las heridas
en mi familia

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 35


Vivir en una sociedad donde las personas hacen lo mínimo para conocerse,
afecta la vida de nuestra iglesia doméstica (la familia),
pues al vivir ajetreados no nos damos la oportunidad de conocernos más.

Dialogamos con Dios…

Señor, te doy gracias y te bendigo


por la familia en la que has
querido que nazca, en la que has
querido que crezca,
con la que has querido que participe
por el bien de todos y
cada uno de los que la integramos.
Te pido perdón por mis acciones y omisiones
que no han contribuido para el bien de todos
y cada uno de nosotros.
Te ruego que me ayudes y nos ayudes
a todos a valorar nuestra familia,
danos fuerza para que siempre
luchemos por ser mejores.
Acuérdate de aquellos miembros
de nuestra familia
que ya han partido de este mundo,
permíteles gozar de tu presencia.
Pídele a tu Madre,
la santísima Virgen María,
que permanezca siempre bajo
nuestro mismo techo,
que nos inspire y guarde en los buenos
y malos momentos.
Te lo pedimos, por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén

La vida en familia en cuanto proyecto de vida puede encontrar claridad en la


comparación con la posibilidad de transitar un camino en conjunto rumbo a un
destino compartido. Hay momentos en que el recorrido es hermoso, disfrutable.
Pensemos en esos momentos donde disponemos de agua para calmar nuestra
sed. En otras ocasiones, el camino requiere superar diversos obstáculos. Es
necesario que cada uno de nosotros podamos identificar cuáles son las áreas de
oportunidad a nivel personal y familiar para mejorar el camino en conjunto.
Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 36
Formados en grupo o por familia, respondemos las siguientes preguntas:

✓ ¿Cómo ha sido nuestro caminar juntos como familia?, ¿qué ha


predominado en este caminar?
✓ ¿Cómo podemos continuar superando obstáculos y disfrutar
juntos el camino?
✓ ¿Qué debemos comenzar a hacer para no perder el rumbo que
buscamos para nuestra familia?
✓ ¿Qué debemos dejar de hacer para evitar entorpecer nuestro
recorrido como familia?

Lee el texto bíblico Juan 4, 5-24

“Jesús llegó a un pueblo llamado Sicar, cerca del terreno que Jacob dio a
su hijo José. Allí estaba también el pozo de Jacob. Jesús, fatigado por la
caminata se sentó junto al pozo. Era casi mediodía. En esto, una mujer
samaritana se acercó al pozo para sacar agua. Jesús le dijo: —Dame de
beber. Los discípulos habían ido al pueblo a comprar alimentos. La
samaritana dijo a Jesús: —¿Cómo es que tú, siendo judío te atreves a
pedirme agua a mí, que soy samaritana? (Hay que señalar que los judíos
y los samaritanos no se trataban). Jesús le respondió: —Si conocieras el
don de Dios y quién es el que te pide de beber, sin duda que tú misma me
pedirías a mí y yo te daría agua viva. Contestó la mujer: —Señor, si ni
siquiera tienes con qué sacar el agua, y el pozo es profundo, ¿de dónde
vas a sacar el «agua viva»? Nuestro padre Jacob nos dejó este pozo del que bebió él mismo, sus hijos y sus ganados.
¿Acaso te consideras más importante que él? Jesús contestó: —Todo el que bebe de esta agua, volverá a tener sed;
en cambio, el que beba del agua que yo quiero darle, nunca más volverá a tener sed. Porque el agua que yo quiero darle
se convertirá en su interior en un manantial que conduce a la vida eterna. Entonces la mujer exclamó: —Señor, dame
de esa agua para que no tenga más sed y no tenga que venir a aquí hasta aquí a sacar agua. Jesús le dijo: —Vete a
tu casa, llama a tu marido y regresa aquí. Ella le contestó: —No tengo marido. Jesús le contestó: —Cierto; no tienes
marido. Has tenido cinco, y ese, con el que ahora vives, no es tu marido. En esto has dicho la verdad. La mujer le
contestó: —Señor, veo que eres profeta. Nuestros antepasados rindieron culto a Dios en esta montaña; en cambio
ustedes los judíos dicen que es en Jerusalén donde hay que dar culto a Dios. Jesús respondió: — Créeme, mujer, está
llegando la hora, mejor dicho, ha llegado ya, en que, para dar culto al Padre, no tendrán que subir a esta montaña ni
ir a Jerusalén. Ustedes, los samaritanos, no saben lo que adoran; nosotros sabemos lo que adoramos, porque la
salvación viene de los judíos. Ha llegado la hora en la cual los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y
en verdad. El Padre quiere ser adorado así. Dios es espíritu, y los que lo adoran deberán hacerlo en espíritu y en
verdad”.

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 37


Preguntas para reflexionar con el texto bíblico

¿Están dispuestos a que Cristo nos


diga todo lo que hemos hecho, como

Descubrir nuestras oportunidades


de mejora, ¿nos acerca o nos aleja

Reflexión:

En el Evangelio de Juan llenos que Cristo se encuentra con una mujer y una
comunidad, y, que, ante los desafíos de su propia vida, les ofrece como solución
el agua que quita toda la sed. La conversión de la samaritana y su pueblo se
da porque reciben al Señor, están dispuestos a que Él les presente, con su caridad
y misericordia, aquello que pueden y deben mejorar en sus vidas para alcanzar
la salvación que solo Él ofrece.
Este relato bíblico es una invitación para profundizar en la reflexión del rumbo
que ha tomado nuestra familia, lo que podemos y debemos mejorar para
continuar caminando como familia asumiendo el tiempo de estar juntos y que
debemos aprovechar al máximo.

Tú, ¿recibes al Señor?, ¿Él conduce tu vida?


A tu familia, ¿les ofreces al Señor con tu testimonio de vida?
¿Qué tiempo le das a tu familia?

Caminar en familia es en sí mismo un conjunto armonizado de


sueños, esperanzas, alegrías, aprendizajes, tristezas, errores,
fracasos, malas decisiones, grandes oportunidades, algunas
aprovechadas y otras dejadas de lado en el camino; es un sitio
de comunicación que nos explica nuestra propia vida, que
brinda identidad y pertenencia, que asegura confianza y
cercanía, que nos permite construir nuestra persona en un
ámbito de humanidad y de significado profundo a la vida. Por ello es importante:

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 38


 Percibir e identificar nuestras “fortalezas familiares” y detectar con caridad y misericordia, como Jesús con la
Samaritana, nuestras “oportunidades de mejora”.

Podemos definir como fortaleza en nuestra familia todo


aquello que nos permite mantenernos unidos y lo que nos
hace crecer en el amor de los unos por los otros, que nos
ayuda a no dejarnos vencer por los desafíos e imprevistos de
la vida, nos permite ser resilientes, esto es, resistir los
ataques que buscan desviarnos del camino y salir convertidos
de dichas experiencias.
Generalmente, nuestras fortalezas suelen “esconderse” en
cosas pequeñas o en sencillos detalles de la vida cotidiana, como, por ejemplo,
la oración compartida antes de tomar los alimentos. También, nuestras
fortalezas se revelan de modo más directo en nuestras tradiciones y
costumbres compartidas que nos permiten descubrir nuestro valor personal y
familiar de un modo más pleno, como cuando recibimos a un nuevo miembro
de nuestra familia, o, incluso cuando debemos despedir a alguno de los
nuestros que es llamado por Dios a su presencia.
En muchas ocasiones, concentrados en nuestros problemas y preocupaciones,

dejamos de tener presente todo aquello que nos sostiene e impulsa para
perseverar en la vida en familia. Si no tomamos en cuenta las fortalezas, será
más fácil que perdamos el rumbo. Si dejamos de poner atención en todo
aquello que nos une, la tentación vendrá a nuestra mente y habitará en
nuestro interior si no la rechazamos.
Renunciar a nuestras fortalezas es apostar inconscientemente por nuestras
debilidades y hundirnos en las preocupaciones, en esa sed que no parece
saciarse nunca, con lo que podemos poner en riesgo nuestro proyecto
compartido, nuestra vida en común.

 Describir aquello que necesitamos cambiar y hacerlo:

Una oportunidad en nuestra familia es un área de mejora personal y familiar


a realizar para atender y resolver las preocupaciones y problemas de la vida
diaria. Pero muchas veces, ante las adversidades de la vida, nos cegamos y
no reconocemos las fortalezas de nuestra familia para superar y tenemos la
falsa esperanza de que por sí solos, sin nuestra acción y decisión, los
problemas en nuestra familia habrán de desaparecer. ¡Eso no sucederá y
debemos aceptarlo!
Acercarnos a aquellas situaciones adversas que podemos mejorar, se parece
a la actitud de aceptación que hizo la samaritana, Dios es capaz de mostrarnos
todo aquello que hemos hecho y todo aquello que debemos resolver para
beber el agua que nos quitará la sed acumulada. Citando a Juan Pablo II
podemos hacer nuestra la frase: “No debemos tener miedo, debemos abrir
las puertas de nuestro interior, de cada uno y de nuestra familia, a Cristo, el
Señor”.
Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 39
Es necesario tener el valor de descubrir lo que tenemos y lo que no, lo que
hacemos y no, y debemos actuar en consecuencia. Lo bueno de todo esto es
que podemos sanar a nuestra familia, resolviendo las áreas de mejora, desde
las fortalezas que ya tenemos y que Dios nos ha regalado como dones y
herramientas para el camino que transitamos juntos.

Afirmar nuestras fortalezas y aprovechar nuestras áreas de mejora nos permitirá darle
sentido y rumbo a nuestro proyecto de vida en familia

Preguntas para el diálogo:

La familia reunida, procura identificar las fortalezas que poseen para poder
corregir y atender sus áreas de oportunidad:

¿Cuáles son las fortalezas de ¿Cuáles son las mejoras en


tu familia? ¿Qué vas a hacer las que debemos trabajar con
para continuar desarrollando mayor dedicación para
tus fortalezas familiares? transformarlas en fortalezas?
Por lo menos anota dos acciones por Por lo menos anota dos mejoraras para
cada característica que sea una fortaleza transformarlas en fortaleza

¿Cuáles son tus ¿Qué característica de


oportunidades que tienes fortaleza de tu familia te hace
como como tu familia? sentir mayor orgullo?
Anota dos acciones que podrías realizar Comparte, al menos, una fortaleza que te
por cada “oportunidad”, y señala que enorgullezca.
podrías hacer para lograr convertir en
una fortaleza.

Actividades

▪ La samarita le responde a Jesús: “Señor, dame de esa agua para que no tenga
más sed”, ¿Qué le quieres al Señor pedir para tu familia?

……………………………………………………………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………………………………………………………
……………………………………………………………………………………………………………………………
Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 40
▪ Compromiso:

Escribe tu compromiso que ayude a


………………………………………………………………………… fortalecer tu familia

…………………………………………………………………………

……………………………………………………………..

……………………………………………..

………………………..

▪ Oración final

Señor Jesús,
si como familia caminamos juntos contigo,
no existirá trecho en soledad,
ni tiempo mal invertido.
¡Camina con nosotros Señor!
Sé Tú el centro de nuestras alegrías,
sé Tú la confianza y la esperanza en nuestras tristezas,
el motor de nuestro ánimo,
el consuelo de nuestra inquietud.
Permítenos recorrer el camino de la vida
de tu mano para llegar juntos,
sin que falte ninguno de nosotros,
a tu presencia.
Nos guardamos por completo bajo tu mirada,
consagramos a ti nuestras decisiones y confiamos
también en los pasos dados bajo la protección materna
de María Santísima, madre tuya y nuestra.
Que nada sea solo por nosotros,
que todo sea por ti;
que este camino compartido
sea también nuestra forma de alabarte, agradecerte y
amarte.
¡Amén!

Subsidio para la Pastoral Familia 2024| 41

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