Universidad de Valladolid

Grado en Enfermería
Facultad de Enfermería de Valladolid

Curso 2022-2023
Trabajo de Fin de Grado

INFLUENCIA DE LA MICROBIOTA
INTESTINAL EN LA ANSIEDAD Y
DEPRESIÓN

Paula Crespo Ruiz

Tutor: Gabriel Alberto March Rosselló
RESUMEN

INTRODUCCIÓN: La microbiota intestinal juega un papel fundamental en la

salud psicológica y ha sido identificada como un componente clave en la
regulación de los procesos cerebrales y del comportamiento. Existe una
importante red de comunicación entre el sistema nervioso y el tracto
gastrointestinal que puede afectar la fisiología y la inflamación del sistema
nervioso central, dando lugar a enfermedades psiquiátricas graves y muy
prevalentes a nivel mundial como son los trastornos de ansiedad y depresión.

OBJETIVO: Analizar la influencia que tiene la composición de la microbiota

intestinal en el desarrollo de las enfermedades mentales de ansiedad y
depresión.

MÉTODO: Se ha elaborado una revisión bibliográfica a partir de artículos

seleccionados en inglés y español, publicados en los últimos 7 años y en revistas
de primer y segundo cuartil. Tras la aplicación de descriptores, operadores
booleanos, filtros, criterios de inclusión y exclusión y la lectura crítica de los
textos, se incluyeron 12 artículos.

RESULTADOS: Se ha demostrado que la composición y diversidad de las

bacterias intestinales pueden afectar el funcionamiento del sistema nervioso
central y a la regulación del estado de ánimo. Las personas con trastornos
mentales tienden a tener una menor diversidad bacteriana y una presencia
alterada de ciertas cepas específicas en comparación con individuos sanos.

CONCLUSIONES: Abordar la salud intestinal y promover un equilibrio adecuado

de la microbiota puede ser un enfoque relevante y eficaz en el tratamiento y la
prevención de los trastornos mentales de ansiedad y depresión.

PALABRAS CLAVE:

Microbiota intestinal, ansiedad, depresión, eje microbiota-intestino-cerebro,

probiótico.
ABSTRACT

INTRODUCTION: The gut microbiota plays a fundamental role in psychological

health and has been identified as a key component in the regulation of brain
processes and behavior. There is an important communication network between
the nervous system and the gastrointestinal tract that can affect the physiology
and inflammation of the central nervous system, leading to serious and globally
prevalent psychiatric diseases such as anxiety disorders and depression.

OBJECTIVE: To analyze the influence of gut microbiota composition on the

development of mental illnesses of anxiety and depression.

METHOD: A literature review was carried out based on selected articles in

English and Spanish, published in the last 7 years in first and second quartile
journals. After the application of descriptors, Boolean operators, filters, inclusion
and exclusion criteria and critical reading of the texts, 12 articles were included.

RESULTS: It has been shown that the composition and diversity of intestinal
bacteria can affect the functioning of the central nervous system and mood
regulation. People with mental disorders tend to have a lower bacterial diversity
and an altered presence of certain specific strains compared to healthy
individuals.

CONCLUSIONS: Addressing gut health and promoting proper microbiota

balance may be a relevant and effective approach in the treatment and prevention
of mental disorders of anxiety and depression.

KEYWORDS

Gut microbiota, anxiety, depression, microbiota-gut-brain axis, probiotic.

ÍNDICE DE CONTENIDOS

1. INTRODUCCIÓN……………………………………………………………....1

2. JUSTIFICACIÓN……………………………………………………………….4

3. OBJETIVOS……………………………………………………………............5

4. MATERIAL Y MÉTODOS…………………………………………….............5

5. RESULTADOS…………………………………………………………............8

6. DISCUSIÓN…………………………………………………………………...13

7. CONCLUSIONES…………………………………………………………… 15

8. BIBLIOGRAFÍA………………………………………………………….…...17

I
ÍNDICE DE TABLAS

Tabla 1. Esquema PICO……………………………………………………...............6

Tabla 2. Términos MeSH y sus correspondientes DeSCs…………………...........6

ÍNDICE DE FIGURAS

Figura 1. Factores que influyen en el desarrollo inicial de la microbiota………...2

Figura 2. Interrelación entre la dieta, la microbiota intestinal y la salud

psicológica……………………………………………………………………………...3

Figura 3. Diagrama de flujo…………………………………………………………..8

Figura 4. Suplementos que ayudan en el tratamiento de la depresión y la

ansiedad……………………………………………………………………………… 12

GLOSARIO:

MICROBIOTA: Conjunto de microorganismos (bacterias, virus, hongos,

parásitos) que residen en el cuerpo humano.

MICROBIOMA: Conjunto formado por los microorganismos, sus genes y sus

metabolitos en un hábitat definido.

PROBIÓTICO: Microorganismos vivos (bacterias, levaduras) beneficiosos para

la salud. Se pueden ingerir de forma natural en los alimentos o de forma artificial

a través de suplementos.

DISBIOSIS: Alteración o desequilibrio en el microbioma.

SALUD MENTAL: Estado de bienestar emocional, psíquico y social.

II
NEUROTRANSMISOR: Biomolécula que transmite los impulsos nerviosos en la

sinapsis.

Q1: Cuartil 1. Conformado por el primer 25% del total de las revistas de su área

en cuanto a importancia.

Q2: Cuartil 2. Conformado por el 25-50% del total de las revistas de su área en

cuanto a importancia.

ÍNDICE DE ABREVIATURAS:

OMS: Organización Mundial de la Salud

INE: Instituto Nacional de Estadística

MeSH: Medical Subject Headings

DeSH: Descriptores en Ciencias de la Salud

JCR: Journal Citation Reports

MGBA: Microbiota-gut-brain axis

AGC: Ácidos grasos de cadena corta

SNC: Sistema Nervioso Central

BHE: Barrera Hematoencefálica

GABA: Ácido gamma-aminobutírico

III
1. INTRODUCCIÓN

Según la OMS, en 2019 una de cada ocho personas en el mundo (lo que equivale
a 970 millones de personas) padece un trastorno mental. Los más comunes son
la ansiedad y los trastornos depresivos, que en los años posteriores han
continuado aumentando considerablemente1.

Se prevé que, en los próximos 5 años, alrededor del 15-20% de las personas
sufrirán a lo largo de su vida, algún tipo de enfermedad mental, como un episodio
depresivo o un trastorno de ansiedad2, y estas dos patologías psiquiátricas
figuran entre las 10 principales causas de carga mundial en términos de
morbilidad, discapacidad y costos económicos 3.

En la última década, la microbiota intestinal se ha revelado como un componente

clave en la regulación de los procesos cerebrales y del comportamiento 4.

El término microbiota lo acuñó por primera vez en 2001 Joshua Lederberg,

biólogo molecular que afirma que los microorganismos simbióticos y el huésped
forman una gran unidad metabólica, reconociendo que aquellas bacterias que se
localizan en el organismo actúan, en realidad, como un factor protector 4 .

La composición microbiana intestinal de los humanos comprende bacterias,

virus, hongos, levaduras y bacteriófagos 3 pertenecientes a cientos de especies
diferentes, de los cuales la gran mayoría reside en el tracto gastrointestinal,
donde alcanzan aproximadamente 1013 unidades de colonias por cada gramo de
heces.5

La microbiota intestinal comienza a desarrollarse en la fecundación, prosigue

durante el embarazo (el feto adquiere inicialmente una composición microbiana
similar a la de su progenitora)6 (Figura 1)3, y continúa evolucionando durante dos
o tres años, hasta alcanzar una composición estable.

Sin embargo, a lo largo del ciclo vital, la microbiota intestinal humana sigue
viéndose influenciada por los diferentes factores ambientales y de estilo de vida,
lo que provoca que su composición difiera notablemente incluso entre individuos
sanos 3 .

1
Figura 1. Factores que influyen en el desarrollo inicial de la microbiota.

En condiciones de salud adecuadas, la microbiota intestinal interviene en

numerosos procesos fisiológicos del huésped, como la protección frente a
patógenos, la digestión y absorción de nutrientes, el desarrollo y la adaptación
de múltiples órganos y del sistema inmunitario. Numerosos estudios muestran
fuertes asociaciones entre cambios en la composición de la microbiota (situación
denominada "disbiosis") y diversas patologías del huésped.

También hay enfermedades que afectan a órganos del huésped distales al

intestino, como el sistema nervioso central (SNC). Además, una contribución
relevante de la microbiota intestinal no sólo se limita a los trastornos
neuroinflamatorios y psiquiátricos, sino también al desarrollo cerebral 7 .

La aparición de secuenciadores masivos que permiten leer en paralelo miles de

millones de secuencias o fragmentos del ADN ha revolucionado la microbiología,
permitiendo la posibilidad de efectuar estudios de la microbiota y el microbioma
de una muestra clínica de manera rápida y a coste reducido, lo que permite
avanzar más rápidamente en el diagnóstico de enfermedades, conocimiento de
la taxonomía y la epidemiología de los agentes involucrados, así como de su
virulencia.

La secuenciación masiva de la microbiota intestinal, posibilita la realización de

estudios que comparan la variabilidad genómica, además del descubrimiento de

2
genes o variantes de interés, lo que puede llevar a que enfermedades
inicialmente consideradas de carácter no microbiano sean asociadas a la
presencia de microrganismos 8.

Las bacterias intestinales pueden afectar a la fisiología y la inflamación del

sistema nervioso central (SNC), ya que ambos se comunican a través de una red
bidireccional de vías de señalización denominada eje intestino-cerebro, que
consta de múltiples conexiones, entre ellas el nervio vago, el sistema inmunitario
y los metabolitos y productos bacterianos. Durante la disbiosis, estas vías se
desregulan y se asocian con una alteración de la permeabilidad de la barrera
hematoencefálica (BHE) y la neuroinflamación 9 .

Cada vez hay más evidencia acerca de que tanto la dieta como la microbiota
intestinal tienen una gran influencia en el comportamiento emocional y los
procesos neurológicos, y dado que la microbiota intestinal se ve muy afectada
por la dieta, estos dos factores también están interrelacionados (Figura 1) 3 .

Figura 1. Interrelación entre la dieta, la microbiota intestinal y la salud

psicológica.

Recientemente ha surgido el concepto de psicobiótico, que describe factores

exógenos que influyen en la microbiota (por ejemplo, a través de probióticos,
prebióticos, dieta) con efectos positivos sobre la salud mental y mediados por
bacterias 4 .

3
2. JUSTIFICACIÓN

Actualmente, la ansiedad y la depresión son trastornos mentales que afectan a

un significativo número de personas en el mundo.

A medida que se van dilucidando los mecanismos fisiopatológicos de la ansiedad

y la depresión, se ha descubierto que los factores biológicos juegan un papel
crucial en su desarrollo y manifestación. Uno de estos factores emergentes es la
microbiota intestinal, que interactúa de forma dinámica con el sistema
inmunológico y con el sistema nervioso.

Estudios recientes han revelado una estrecha comunicación bidireccional entre

el intestino y el cerebro, conocida como el eje intestino-cerebro, que implica
señales bioquímicas y neuronales. Numerosas investigaciones han demostrado
que existe una asociación significativa entre la composición de la microbiota
intestinal y la salud mental.

Se ha observado que las personas que padecen ansiedad y depresión presentan

una disbiosis con respecto a las personas que no la padecen. Es decir, las
personas enfermas manifiestan un desequilibrio en la diversidad y la cantidad de
microorganismos intestinales. Además, se ha encontrado que ciertas cepas de
bacterias intestinales pueden influir en la producción y regulación de
neurotransmisores clave, como la serotonina y el ácido gamma-aminobutír ico
(GABA), que intervienen en la regulación del estado de ánimo y la respuesta al
estrés.

La comprensión de esta relación entre la microbiota intestinal y los trastornos de

ansiedad y depresión tiene implicaciones clínicas significativas; por un lado,
puede abrir nuevas vías para el desarrollo de intervenciones terapéuticas
basadas en la manipulación de la microbiota, como los probióticos y los
prebióticos, que pueden mejorar la salud mental y el bienestar emocional. Por
otro lado, también puede llevar a cabo un enfoque más personalizado en el
tratamiento de estos trastornos, teniendo en cuenta las características únicas de
la microbiota de cada individuo

Debido a ello, el presente Trabajo de Fin de Grado pretende arrojar luz sobre
cómo la relación entre la microbiota del intestino y la salud mental puede ayudar

4
 a identificar biomarcadores útiles para la detección temprana, el diagnóstico y el
seguimiento de ambos trastornos psiquiátricos.

3. OBJETIVOS

3.1 Objetivo general:

- Analizar la influencia que tiene la composición de la microbiota intestinal

en el desarrollo de las enfermedades mentales de ansiedad y depresión.

3.2 Objetivos específicos:

- Analizar los mecanismos biológicos a través de los cuales la microbiota

intestinal influye en la ansiedad y la depresión.

- Explorar aspectos básicos como el eje intestino-cerebro, la producción de

neurotransmisores y metabolitos por parte de las bacterias y la interacción
del sistema inmunológico con la microbiota.

- Investigar la relación entre la composición de la microbiota intestinal y la

gravedad de los síntomas ansiosos y depresivos.

- Identificar posibles estrategias de modulación de la microbiota del

intestino que pueden utilizarse como tratamiento preventivo y terapéutico
de la ansiedad y depresión.

4. MATERIAL Y MÉTODOS

4.1 DISEÑO

Se realizó una revisión bibliográfica de artículos científicos que abordaran la

relación entre la composición microbiana del intestino y el desarrollo de
patologías psiquiátricas como la ansiedad y la depresión, junto con el papel del
eje intestino-cerebro y su relevancia.

La búsqueda se realizó entre los días 2 y 6 de marzo de 2023.

5
4.2 ESTRATEGIA DE BÚSQUEDA

Para comenzar la investigación, se planteó la siguiente pregunta basada en el

esquema PICO (Tabla 1): ¿Qué influencia tiene la microbiota intestinal en el
desarrollo de patologías de ansiedad o depresión?

Tabla 1. Esquema estructura PICO utilizado en el presente TFG para formular la

pregunta de investigación.

P Pacientes que padecen ansiedad o depresión

(Paciente/Problema)
I Análisis del microbioma intestinal de pacientes con
(Intervención/Indicador) ansiedad o depresión
C Microbioma intestinal de personas que no padecen
(Comparación/Control) ansiedad o depresión
O Influencia positiva del microbioma en el desarrollo
(Resultado) de la patología

A continuación, se realizó una búsqueda en las bases de datos Dialnet y

PubMed, con los descriptores de ciencias de la salud (MeSH y DeCS) mostrados
en la Tabla 2, combinándolos con los operadores booleanos AND y OR.

Tabla 2. Términos MeSH y sus correspondientes DeSCs utilizados para formular

las ecuaciones de búsqueda.

Inglés Gut Anxiety Depression Humans

(MeSH) microbiota

Español Microbiota Ansiedad Depresión Humanos

(DeSCs) intestinal

Tras ello, se obtuvieron las siguientes ecuaciones para la búsqueda de estudios

originales:

• “Gut Microbiota” [MeSH] AND “anxiety” [MeSH]

• “Gut Microbiota” [MeSH] AND “depression” [MeSH]

6
 • “Gut Microbiota” [MeSH] AND “anxiety” [MeSH] OR “depression” [MeSH]

Las tres utilizadas para la búsqueda en Dialnet.

• “Gut Microbiota” [MeSH], “humans” [MeSH], “anxiety” [MeSH] AND

“depression” [MeSH]

Utilizada para la búsqueda de artículos en PubMed.

Para completar la búsqueda e identificar artículos de interés adicionales, se han

revisado listas de referencias bibliográficas de los estudios seleccionados,
destacando artículos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) e informes
del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Se limitó la búsqueda a artículos publicados en los siete últimos años (2017 -

2023).

4.3 CRITERIOS DE INCLUSIÓN Y EXCLUSIÓN

En cuanto a los criterios de inclusión, se escogieron detalladamente artículos

científicos publicados en inglés o español en los últimos siete años y que
describen de manera rigurosa la influencia de la composición microbiana del
intestino en el desarrollo y tratamiento de dos patologías mentales: la ansiedad
y la depresión.

Respecto a los criterios de exclusión, se han descartado artículos publicados en

revistas científicas de bajo impacto, además de artículos no originales.

Para evaluar la calidad de las publicaciones y conocer el factor de impacto de

las revistas, se utilizó el recurso Journal Citation Reports (JCR), al que se
accedió a través del catálogo en línea disponible de la UVa.

Se descartaron aquellos artículos de revistas que no se enmarcaran en el cuartil

1 o 2 (Q1/Q2) de importancia dentro del total de las revistas de su área.

4.4 ESTRATEGIA DE SELECCIÓN

Tras la búsqueda en la literatura científica, se encontraron 1069 artículos en las

diferentes bases de datos consultadas, 553 en Dialnet y 516 en PubMed.

Debido a la heterogeneidad de los estudios, se consideró sintetizar los resultados

obtenidos mediante un resumen narrativo que diese respuesta a la pregunta de

7
investigación, intentando dotar de un sentido más integrador a los mismos. Como
programa utilizado, se empleó el gestor bibliográfico Mendeley.

5. RESULTADOS

Finalmente, tras la aplicación de los criterios de inclusión y exclusión fueron

seleccionados doce estudios (Figura 3), publicados en el período comprendido
entre noviembre de 2017 y abril de 2023. Se realizaron en los siguientes países:
China, Nueva Zelanda, Italia, Irlanda, Estados Unidos, Polonia, Irán, Países
Bajos, India, Australia y Alemania.

Registros identificados (n=1069):

Dialnet (n= 553), PubMed (n=516)
IDENTIFICACIÓN

Registros eliminados antes

del cribado:
Por no tener relación con el
tema a tratar (n= 5)

Registros excluidos por los filtros

Registros cribados (n= 1048)
(n=1064) -Que no estén disponibles en inglés o
español (n=42)
CRIBADO

-Que no sean artículos originales

(n=73)
-Que no se encuentren en el primer o
segundo cuartil (n=450)
Registros seleccionados
para evaluar su elegibilidad -Que se hayan publicado hace más de
(n=16) 7 años (n=483)
INCLUIDOS

Excluidos tras leer el

artículo (n=4)
Artículos seleccionados
para la revisión (n=12)

Figura 3. Diagrama de flujo.

8
5.1 Composición y características de la microbiota intestinal

Los resultados de la investigación revelaron diferencias significativas en la

composición de la microbiota intestinal entre los individuos con ansiedad y
depresión y los individuos sanos.

Concretamente, en uno de los estudios de casos y controles analizados, se

reclutó a un grupo de individuos diagnosticados con ansiedad y depresión, así
como a un grupo control sin estos trastornos. Se recogieron muestras de heces
de los participantes y se realizó un análisis microbiológico utilizando técnicas de
secuenciación de nueva generación. Se identificaron varias bacterias que
mostraron una mayor abundancia en el grupo de estudio en comparación con el
grupo control, y viceversa. Entre las bacterias más presentes en el grupo de
ansiedad y depresión, se encontraron especies de las familias “Bacteroidaceae”
y “Lachnospiraceae”. Ciertas bacterias de las familias “Ruminococcaceae” y
“Faecalibacterium” se encontraron en menor proporción en el grupo de estudio
en comparación con el grupo control (individuos sanos)10.

Por otro lado, una menor diversidad bacteriana en la microbiota intestinal se ha

asociado en diez de los doce estudios comparados, con un mayor riesgo de
padecer los trastornos mentales de ansiedad y depresión11.

5.2 Neurotransmisores

Las bacterias intestinales producen varios neurotransmisores que influyen en la

función cerebral y el estado de ánimo4 :

Serotonina

Se estima que alrededor del 90% de la serotonina total del cuerpo se encuentra
en el tracto gastrointestinal, donde es sintetizada por ciertas bacterias
intestinales, como las del género “Lactobacillus” y “Bifidobacterium”. La
serotonina tiene un papel importante en la modulación de la ansiedad, la
depresión y el bienestar general12.

Ácido gamma-aminobutírico

El GABA es el principal neurotransmisor inhibidor del sistema nervioso central y

está implicado en la regulación del estado de ánimo, la ansiedad y el estrés.

9
Algunas bacterias intestinales, como las “Lactobacillus” y “Bifidobacterium”,
tienen la capacidad de sintetizar GABA a partir del ácido glutámico12 .

Dopamina

La dopamina es un neurotransmisor relacionado con la motivación, el placer y la

recompensa13 . Aunque la mayor parte de la dopamina se sintetiza en el cerebro,
también se ha encontrado evidencia de que algunas bacterias intestinales
pueden producir este neurotransmisor 14 .

5.3 Eje intestino-cerebro o microbiota-intestino-cerebro (MGBA)

El intestino tiene su propio sistema nervioso: el sistema nervioso entérico, a

menudo denominado "segundo cerebro" 15 . Está compuesto por millones de
neuronas (el segundo órgano con mayor número de neuronas después del
cerebro) que controlan la función intestinal y están en constante comunicación
con el cerebro a través del sistema nervioso central16 .

La microbiota intestinal puede influir en la función cerebral y el comportamiento

a través de múltiples vías, incluyendo la producción de neurotransmisores, la
modulación del sistema inmunológico y la regulación del eje de respuesta al
estrés.17

5.4 Intervenciones dietéticas y probióticos

Cuatro de los doce estudios seleccionados para la investigación, han explorado

los efectos de intervenciones dietéticas y probióticos en el eje intestino-cerebro.
Se ha encontrado que ciertos alimentos y patrones dietéticos, como una dieta
rica en fibra y baja en grasas saturadas, pueden tener efectos beneficiosos en la
salud intestinal y cerebral18.

Los ácidos grasos omega-3 se encuentran en pescados grasos como el salmón,

las sardinas y el atún, así como en semillas de lino, chía y nueces. El estudio
llevado a cabo en el cuarto artículo seleccionado afirma que los ácidos omega-3
tienen efectos positivos en la función cerebral y el estado de ánimo. Algunos
estudios han encontrado que la suplementación con omega-3 puede reducir los
síntomas de la depresión, pero se necesitan más investigaciones. 5

10
Las vitaminas del complejo B, como la B12, B6 y ácido fólico, desempeñan un
papel crucial en la producción de neurotransmisores relacionados con el estado
de ánimo, como la serotonina. Se encuentran en alimentos como carnes magras,
pescado, huevos, productos lácteos, legumbres, nueces y vegetales de hojas
verdes .

El triptófano es un aminoácido esencial que se convierte en serotonina en el

cerebro. Algunos alimentos ricos en triptófano incluyen pavo, pollo, productos
lácteos, nueces, semillas y plátanos.

El consumo excesivo de cafeína y otros estimulantes puede aumentar la

ansiedad y afectar el sueño. Limitar la ingesta de cafeína proveniente del café,
té, bebidas energéticas y refrescos resulta ser beneficioso para la salud de la
microbiota intestinal18 .

5.5 Posibles terapias implicadas en el tratamiento de la ansiedad y

depresión

Entre las posibles estrategias alternativas más recientes que se están

estudiando se encuentran las dietas modificadas, la ingesta de pescado y ácidos
grasos omega-3, los probióticos, los prebióticos, el trasplante de microbiota fecal
y la regulación del 5-hidroxitriptófano6
Estos enfoques restauran directa o indirectamente una composición y diversidad
microbianas intestinales saludables. La Figura 4 representa los diferentes
métodos de restauración de la microbiota intestinal para prevenir y tratar la
ansiedad y la depresión19 .

Trasplante de microbiota fecal

El trasplante de microbiota fecal es un procedimiento en el que se transfiere
material fecal de un donante sano al intestino de un receptor con el objetivo de
restaurar o modificar la composición de la microbiota intestinal 6.
El éxito del trasplante de microbiota fecal en el tratamiento de la infección por “C.
difficile” ha llevado a investigaciones sobre su potencial uso en otras
enfermedades y trastornos, enfermedades inflamatorias del intestino y trastornos
neuropsiquiátricos como la depresión y la ansiedad17 .

11
Regulación 5-HDT
La regulación del transportador de serotonina influye en la disponibilidad de
serotonina en el cerebro y en los estados de ánimo y la ansiedad6 .
Factores genéticos y ambientales afectan a la expresión y función del
transportador de serotonina. Por ejemplo, hay una variante genética conocida
como el polimorfismo 5-HTTLPR que ha sido estudiada en dos de los artículos
seleccionados por su relación con la susceptibilidad a trastornos del estado de
ánimo.

Figura 4. Suplementos que ayudan en el tratamiento de la depresión y la

ansiedad.

12
6. DISCUSIÓN

Debilidades y fortalezas

Actualmente, las etiologías exactas de la mayoría de los trastornos mentales

siguen siendo desconocidas. La mayoría de los estudios exploran las patologías
psiquiátricas como la depresión y la ansiedad comparando los fenotipos entre
pacientes clínicos y personas sanas, pero la investigación sobre la población con
un estado mental insalubre continúa siendo escasa.

Los estudios en humanos, por su parte, tienen la desventaja de que en

numerosas ocasiones presentan un tamaño de muestra muy reducido.
Asimismo, puede haber influencia de la dieta o de sucesos recientes, como el
uso de antibióticos. También pueden estar condicionados por la presencia de
fármacos específicos como los antidepresivos, que pueden actuar sobre la
microbiota y variar su composición.

A pesar de ello, se ha podido recoger información relevante para futuras

investigaciones convirtiendo este trabajo en un punto de partida muy interesante:

6.1. Composición y diversidad de la microbiota intestinal

Se ha observado que las personas con trastornos del estado de ánimo, como la
ansiedad y la depresión, presentan alteraciones en la composición y la diversidad
de la microbiota intestinal. La disminución de ciertas bacterias beneficiosas y el
aumento de bacterias patógenas se han asociado con un mayor riesgo de
desarrollar trastornos del estado de ánimo.

6.2 Eje intestino-cerebro

La comunicación bidireccional entre el intestino y el cerebro desempeña un papel

importante en la influencia de la microbiota en la ansiedad y la depresión. Los
microorganismos intestinales producen metabolitos bioactivos, como los
neurotransmisores encargados del mantenimiento de la función cerebral y la
regulación del estado de ánimo (serotonina, noradrenalina, dopamina y
acetilcolina). Los ácidos grasos de cadena corta hacen de “mensajeros” en dicha
conexión, ya que influyen en la forma en la que el cerebro responde a las
lesiones.

13
6.3 Inflamación y respuesta inmunológica

La microbiota intestinal influye en la respuesta inmunológica y la inflamación, lo

cual está relacionado con los trastornos del estado de ánimo. Las alteraciones
en la composición de la microbiota conducen a un desequilibrio en la respuesta
inmunológica y a la liberación de citocinas inflamatorias, que contribuye al
desarrollo de la ansiedad y la depresión.

6.4 Barrera intestinal e "intestino permeable"

La integridad de la barrera intestinal es crucial para mantener la homeostasis y

prevenir la entrada de sustancias dañinas al torrente sanguíneo. Sin embargo, la
disfunción de la barrera intestinal y el aumento de la permeabilidad intestinal,
conocido como "intestino permeable", se ha asociado con trastornos del estado
de ánimo. Esto permite que los metabolitos microbianos y las toxinas bacterianas
ingresen al sistema circulatorio, desencadenando respuestas inflamatorias y
afectando el funcionamiento cerebral.

6.5 Estudios de trasplante de microbiota fecal

Los estudios de trasplante de microbiota fecal han brindado evidencia adicional

sobre la influencia de la microbiota en la ansiedad y la depresión. La
transferencia de microbiota de individuos sanos a aquellos con trastornos del
estado de ánimo ha demostrado mejoras significativas en los síntomas
depresivos y ansiosos, lo que respalda el papel causal de la microbiota en estos
trastornos.

Estos aspectos resaltan la importancia de la microbiota intestinal en la regulación

del estado de ánimo y sugieren que intervenciones dirigidas a la modulación de
la microbiota podrían tener un impacto significativo en el tratamiento de la
ansiedad y la depresión. Sin embargo, aún se necesitan más investigaciones
para comprender completamente los mecanismos subyacentes y desarrollar
estrategias terapéuticas efectivas basadas en la modulación de la microbiota
intestinal.

Aplicaciones para la práctica clínica

Se puede afirmar que el estudio de la influencia de la microbiota intestinal en la

ansiedad y la depresión ha llevado al desarrollo de diversas herramientas de

14
evaluación que permiten analizar la composición de la microbiota de los
pacientes de manera rápida y precisa. Además, se están investigando terapias
probióticas y prebióticas específicas que pueden modificar la microbiota y
promover una mejor salud mental. Estas terapias podrían incluir la
administración de probióticos o la modificación de la dieta para promover el
crecimiento de bacterias beneficiosas en el intestino.

Las aplicaciones para la práctica clínica derivadas del estudio de la microbiota

en la ansiedad y la depresión tienen el potencial de mejorar la precisión del
diagnóstico y la efectividad del tratamiento, ofreciendo nuevas alternativas para
abordar estos trastornos mentales de manera integral.

Futuras líneas de investigación

Como se ha citado anteriormente, esta revisión puede proponerse como punto

de partida en futuras investigaciones relacionadas con la microbiología y la salud
mental.

Se debe continuar ahondando en prometedoras líneas de trabajo como son: 1)

La identificación de biomarcadores específicos en la microbiota que puedan
utilizarse como indicadores tempranos de la ansiedad y la depresión. Estos
biomarcadores podrían ayudar a mejorar el diagnóstico y el pronóstico de los
trastornos mentales, permitiendo intervenciones más tempranas y
personalizadas; 2) La investigación de los factores ambientales y el estilo de
vida. El estrés y la exposición a sustancias tóxicas pueden interactuar con la
microbiota y contribuir al desarrollo de la ansiedad y la depresión.

Además, se necesitan estudios longitudinales a largo plazo para comprender

mejor la relación causal entre la microbiota y los trastornos mentales. Esto
implica seguir a los pacientes durante un período prolongado, evaluando
cambios en la composición de la microbiota, el estado de ánimo y los síntomas
de ansiedad y depresión.

7. CONCLUSIONES

La revisión exhaustiva de la literatura científica disponible indica que existe una

estrecha relación entre la composición de la microbiota intestinal y la salud

15
mental, lo que respalda la afirmación de que la microbiota desempeña un papel
crucial en el desarrollo y la manifestación de trastornos mentales.

Los individuos con trastornos de ansiedad y depresión presentan alteraciones o

desequilibrios en la composición de la microbiota intestinal en comparación con
individuos sanos: se observa una disminución en la diversidad microbiana y
cambios en la abundancia relativa de ciertas especies bacterianas.

La producción de metabolitos, neurotransmisores relacionados con la regulación

y control del estado de ánimo y moléculas inflamatorias por parte de la
microbiota, puede tener efectos directos en el sistema nervioso central, lo que
confirma la existencia de mecanismos de comunicación bidireccional entre la
microbiota intestinal y el cerebro.

La microbiota intestinal influye en la respuesta inmunológica y puede modular la

inflamación sistémica. Se ha observado que la inflamación crónica de bajo grado
está asociada con trastornos del estado de ánimo.

El estrés crónico puede alterar la composición de la microbiota intestinal, lo que

a su vez puede influir en la respuesta al estrés. Se ha encontrado una relación
bidireccional entre el estrés y la microbiota intestinal, donde el estrés puede
afectar la microbiota y, a su vez, cambios en la microbiota pueden influir en la
respuesta al estrés.

Por último, la administración de probióticos y prebióticos específicos, así como

la modificación de la dieta para promover el crecimiento de bacterias
beneficiosas, ha demostrado efectos positivos en la reducción de los síntomas
de ansiedad y depresión.

16
BIBLIOGRAFÍA

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