Rosario para La Familia 2024 (Completo) (
Rosario para La Familia 2024 (Completo) (
Rosario para La Familia 2024 (Completo) (
para rezar en familia. Cada misterio está acompañado por la cita del Evangelio,
está iluminado con Amoris Laetitia, y se reza por una intención específica.
Además todos los misterios tienen una especial invocación a nuestra Madre, la
Leemos en Amoris laetitia :“El Dios Trinidad es comunión de amor, y la familia es su reflejo
viviente. Nuestro Dios, en su misterio más íntimo, no es una soledad, sino una familia, que
lleva en sí mismo paternidad, filiación y la esencia de la familia que es el amor”. (AL 11).
Oración: Con este primer misterio del Rosario, te damos gracias Señor por tener una familia,
y te pedimos por todos los que están solos, los niños y abuelos abandonados. Te rogamos
especialmente por las familias divididas, y en las que falta el amor.
Virgen del Rosario protege a nuestras familias y guíanos para ser testimonios del amor de
Dios. De tu mano rogamos al Padre por la PAZ. para todas las familias.
“María fue a visitar a su prima Isabel y a su esposo Zacarías. Isabel estaba embarazada y
llena del Espíritu Santo le dijo a María: “Eres bendita entre las mujeres y también es bendito el
niño que llevas en tu vientre”. Ella le respondió: “Alabo al Señor que hace maravillas en mí”
(Lc 1, 39-45).
Leemos en Amoris laetitia: “Cuando una persona que ama puede hacer un bien a otro, o
cuando ve que al otro le va bien, lo vive con alegría, y de ese modo da gloria a Dios, porque
«Dios ama al que da con alegría». La familia debe ser siempre el lugar donde alguien, que
logra algo bueno en la vida, sabe que allí lo van a celebrar con él” (AL 110).
Oración: Con este misterio Señor te damos gracias por la alegría de poder compartir en
familia, y te pedimos que siempre estemos abiertos a compartir lo que tenemos con los
demás. Te rogamos especialmente por las familias más necesitadas, por los más pobres y
olvidados.
Nuestra Señora del Rosario bendice a nuestras familias y guíanos para vivir la generosidad
y la caridad.
3. Tercer Misterio Gozoso: El nacimiento de Jesús en Belén.
“María y José partieron a Belén. Allí nació Jesús, lo envolvieron en pañales y lo recostaron en
un pesebre porque no había lugar en la posada. Había unos pastores a quienes se les
apareció un ángel y les dijo: “les anuncio una gran alegría ha nacido el Salvador, el Hijo de
Dios”. Y los pastores fueron a adorarlo”. (Lc 2, 4-11).
Leemos en Amoris laetitia: “Los hijos son un don. Cada uno es único e irrepetible [...] Se ama
a un hijo porque es hijo, no porque es hermoso. No porque piensa como yo o encarna mis
deseos. El amor de los padres es instrumento del amor del Padre Dios que espera con
ternura el nacimiento de todo niño, lo acepta sin condiciones y lo acoge gratuitamente” (AL
170).
Oración: En este misterio Señor te damos gracias por nuestros hijos, te pedimos por sus
vidas y su camino de santidad. Y te rogamos especialmente para que todos los hijos puedan
nacer y sus vidas sean respetadas.
Madre del Rosario ampara a nuestras familias, y guíanos para ser siempre defensores de
toda vida.
“María y José, como lo señalaba la Ley, fueron al templo para dar gracias por el nacimiento de
Jesús. Allí se encontraron con dos ancianos, Ana y Simeón que amaban mucho a Dios y se
alegraron de conocer a Jesús, el Salvador”.. (cf Lc 2, 22. 28. 36-38).
Leemos en Amoris laetitia: “La familia es el primer lugar donde se despierta el sentimiento del
mundo y de la sociedad como hogar, para saber «habitar», más allá de los límites de la propia
casa. En el contexto familiar se enseña a recuperar la vecindad, el cuidado, el saludo, se
rompe el primer cerco del egoísmo para reconocer que vivimos junto a otros, que son dignos
de nuestro afecto”. (cf AL 276).
Oración: En este misterio te damos gracias Señor por poder aprender a amar y a ser amados
en nuestra familia. Te pedimos que sepamos respetar a los demás a pesar de las diferencias,
de las ideologías y de los modos de vida contrarios a los nuestros, siendo siempre fieles a tu
Amor.
Virgen del Rosario custodia a nuestras familias, y guíanos para vivir nuestra fe en la
sociedad.
5. Quinto Misterio Gozoso: Jesús perdido y hallado en el Templo.
“Cuando Jesús tenía 12 años, viajó con sus padres a Jerusalén. José y María regresaron,
pero Jesús se quedó en Jerusalén sin que sus padres se dieran cuenta. Durante tres días lo
buscaron y al encontrarlo su madre le dijo: ¿Hijo, por qué me has hecho esto? Jesús le
respondió, ¿Por qué me buscaban? ¿No sabían que debo ocuparme de los asuntos de mi
Padre?”. (Lc 2, 41-49).
Leemos en Amoris laetitia: “No se puede tener control de todas las situaciones por las que
puede pasar un hijo. Si un padre está obsesionado por controlarlo no lo preparará para los
desafíos. Hay que generar en el hijo, con mucho amor, procesos de maduración de su
libertad, de crecimiento integral. Así tendrá en sí mismo recursos para actuar con inteligencia
y astucia en circunstancias difíciles” (AL 261).
Oración: En este misterio te damos gracias Señor porque nos creaste libres y nos ayudás a
crecer. Te pedimos por tantos hijos “perdidos” por las adicciones, las ideologías, la violencia,
el odio y los egoísmos. Te rogamos Señor por todos los jóvenes.
Madre del Rosario cuida a nuestros hijos de los peligros, y guíanos para saber educarlos en
la libertad.
Misterios de Luz
“Entonces vino Jesús al Jordán para ser bautizado por Juan [...]. Y una voz desde los Cielos
dijo: “Éste es mi Hijo, el amado, en quien me he complacido” (Mc 1, 9-11).
Leemos en Amoris laetitia: “Los padres participan del proyecto de Dios soñando a su hijo. No
es posible una familia sin soñar. Cuando se pierde la capacidad de soñar los chicos no
crecen, el amor no crece, y la vida se apaga. Dentro de ese sueño, para un matrimonio
cristiano, aparece necesariamente el bautismo. Los padres lo preparan con su oración,
entregando su hijo a Jesús ya antes de su nacimiento”. (cf AL 169).
Oración: Con este misterio te damos gracias Señor por habernos creado, hecho cristianos y
soñarnos como familia. Te pedimos por todos los que no te conocen, para que reines en todas
las familias. Te rogamos especialmente por nuestra perseverancia y la de nuestros hijos en la
fe.
Nuestra Señora del Rosario bendice a nuestras familias, y guíanos para ser siempre fieles
hijos de Dios y de la Iglesia.
2.Segundo Misterio de Luz: Primer milagro de Jesús, en las Bodas de Caná.
“Se celebraba una boda en Caná de Galilea y estaba allí Jesús y su Madre.. Como se había
acabado el vino, María le dijo a Jesús: “No tienen vino.” Jesús le respondió: “¿Qué tengo yo
que ver con eso? Todavía no ha llegado mi hora.”
Pero su madre dijo a los sirvientes: “Hagan lo que él les diga.” Así, Jesús comenzó sus
signos, manifestó su gloria, y creció la fe de sus discípulos en Él”. (Jn 2, 1-5. 11).
Leemos en Amoris laetitia: “En su unión de amor los esposos experimentan la belleza de la
paternidad y la maternidad; comparten proyectos; aprenden a cuidarse el uno al otro y a
perdonarse. La alegría por la vida que nace y el cuidado amoroso de todos sus miembros,
desde los pequeños a los ancianos, son sólo algunos de los frutos que hacen única e
insustituible la familia» (AL 73-88).
Oración: En este misterio Señor te damos gracias por unirnos en matrimonio y ser familia. Te
pedimos por muchas vocaciones al matrimonio, y por los novios que se preparan para el
sacramento. Te rogamos especialmente por las familias en crisis, las familias heridas y
separadas.
Virgen del Rosario auxilia a nuestras familias, y guíanos para hacer siempre lo que Jesús
nos dice.
“Jesús se dirigió a Galilea, a predicar la buena noticia del Reino de Dios. Decía: "El tiempo ha
llegado y el Reino de Dios ya está cerca. Conviértanse y crean en el Evangelio" (Mc 1, 14-15).
Leemos en Amoris laetitia: “Con el testimonio y con la palabra, las familias hablan de Jesús a
los demás, transmiten la fe, despiertan el deseo de Dios, y muestran la belleza del Evangelio
y del estilo de vida que propone: la fraternidad, la sensibilidad social, la defensa de los
frágiles, la fe luminosa, la esperanza activa. Y hacen presente el amor de Dios en la sociedad”
(AL 184)
Oración: En este misterio, te damos gracias Señor por ser tus hijos amados y por habernos
revelado la belleza de la verdadera Vida. Te pedimos que nos ayudes a ser mensajeros del
Evangelio de la familia y de la vida, y te rogamos especialmente por las familias
desesperanzadas, angustiadas, tristes, y las que están marginadas.
Madre del Rosario ampara a nuestras familias, y guíanos para ser familias signos de
esperanza e instrumentos de paz allí donde estemos.
4.Cuarto Misterio de Luz: La transfiguración de Jesús.
“Y se transfiguró ante ellos, de modo que su rostro se puso resplandeciente como el sol, y sus
vestidos blancos como la luz. Y una voz desde la nube dijo: “Éste es mi Hijo, el Amado, mi
elegido. en quien me complazco; escúchenlo”. (Lc 9, 29. 35).
Leemos en Amoris laetitia: “El encuentro entre padres e hijos puede ser facilitado o
perjudicado por las tecnologías de la comunicación y la distracción, cada vez más
sofisticadas. Cuando son bien utilizadas pueden ser útiles para conectar a los miembros de la
familia a pesar de la distancia. No sustituyen ni reemplazan la necesidad del diálogo más
personal y profundo que requiere del contacto físico, o al menos de la voz de la otra persona”
(AL 278).
Oración: Con este misterio, te damos gracias Señor por comunicarnos tu Amor que sostiene
a nuestra familia. Te pedimos que siempre podamos estar dispuestos al diálogo sincero que
todo lo comprende, que ofrece el perdón y pide perdón.Te rogamos especialmente por los
padres, hijos y abuelos incomprendidos, los que están solos o aislados, y por las familias que
están distanciadas con alguno de sus integrantes.
Nuestra Señora del Rosario abraza a nuestras familias, y guíanos para vivir el amor
recíproco, la confianza y la sinceridad.
“Durante la cena Jesús tomó pan, lo bendijo, lo partió y se lo dio, diciendo: "Tomen, esto es mi
cuerpo". Después tomó una copa, dio gracias, se lo pasó a los discípulos diciendo: "Beban
todos de ella, es mi sangre, la sangre de la alianza" (Mt 26, 26-28).
Leemos en Amoris laetitia: “El espacio vital de una familia puede también ser sede de la
Eucaristía, de la presencia de Cristo sentado a la misma mesa. La familia está llamada a
compartir la oración cotidiana, la lectura de la Palabra de Dios y la comunión eucarística para
hacer crecer el amor y convertirse cada vez más en templo donde habita el Espíritu” (AL 29).
Oración: En este misterio, te damos gracias Señor por tu presencia en medio nuestro en la
familia. Te pedimos que nos impulses: a vivir siempre en el amor que nos asegura tu
presencia, a enseñar a nuestros hijos a rezar y rezar juntos. Te rogamos especialmente por
los que te rechazan Señor, los que son indiferentes, los que te ignoran, y te niegan.
Virgen del Rosario fortalece a nuestras familias, y guíanos para ser verdaderas iglesias
domésticas, templos en los que Dios habita.
Misterios Dolorosos
1. Primer Misterio Doloroso: La oración de Jesús en el Monte de los Olivos.
“Jesús fue hacia el monte de los Olivos, y los discípulos lo siguieron. Y se apartó de ellos...y de rodillas
oraba diciendo: "Padre, si quieres, aparta de mí este cáliz; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya”.
(Lc 22, 39. 42).
Leemos en Amoris laetitia :“Es fundamental que los hijos vean de una manera concreta que para sus
padres la oración es realmente importante. Por eso los momentos de oración en familia y las
expresiones de la piedad popular pueden tener mayor fuerza evangelizadora que todas las catequesis y
que todos los discursos…La familia nos hace el legado de múltiples formas de testimonio… practicando
las obras de misericordia corporal y espiritual... y lo hace en el marco de la convicción del amor del
Padre que nos sostiene y nos promueve, manifestado en la entrega total de Jesucristo "( cfr AL 289 y
290). .
Oración: Con este primer misterio doloroso, te damos gracias Señor porque con tu entrega nos
enseñaste a rezar confiando en Dios Padre y en su voluntad. Te pedimos confiados que nos apartes de
toda injusticia y peligro. Especialmente te rogamos por las familias que sufren: por hambre, por falta de
trabajo, por no tener vivienda, y por las que están en situación de calle.
Virgen del Rosario protege a nuestras familias, y guíanos para aceptar y amar la Voluntad de Dios, y
rezar siempre unidos en familia por todas las necesidades de todas las familias.
“Pilato puso en libertad a Barrabás; y a Jesús, después de haberlo hecho azotar, lo entregó para que
fuera crucificado”. (Mt 27, 26).
Te ofrecemos Señor todos los sufrimientos físicos que nos afligen en nuestras familias.
Leemos en Amoris laetitia :«No existen las familias perfectas que nos propone la propaganda falaz y
consumista. En ellas no pasan los años, no existe la enfermedad, el dolor ni la muerte…La propaganda
consumista muestra una fantasía que nada tiene que ver con la realidad que se debe afrontar, en el día
a día”. (AL 135)...La familia «ha sido siempre el “hospital” más cercano».Curémonos, contengámonos y
estimulémonos unos a otros…Es una honda experiencia espiritual contemplar a cada ser querido con
los ojos de Dios y reconocer a Cristo en él… El ser amado merece toda la atención”. (AL 321 y 323).
Oración: Te damos gracias Señor por reconocerte y amarte en cada dolor que nos aflige. Te pedimos
que podamos estar dispuestos a cuidarnos, protegernos y aliviarnos en la enfermedad, y te rogamos
especialmente por nuestros enfermos, por los que acompañan a personas con problemas de salud y
discapacidades, por los ancianos, y por los que sufren maltrato y violencia familiar.
Nuestra Señora del Rosario ampara a nuestras familias, y guíanos para ser para todos “el hospital
más cercano” donde todos encuentren manos que ofrecen alivio y consuelo.
3. Tercer Misterio Doloroso: La coronación de espinas.
“Los soldados llevaron a Jesús dentro del palacio. Lo vistieron de púrpura y le pusieron una
corona de espinas. Y burlándose le decían: "¡Salve, Rey de los judíos!" (Mc 15, 16-18).
Leemos en Amoris laetitia : “La paciencia se afianza cuando reconozco que el otro también
tiene derecho a vivir junto a mí, así como es…El amor tiene siempre un sentido de
profunda compasión que lleva a aceptar al otro como parte de este mundo, también
cuando actúa de un modo diferente a lo que yo desearía”.(AL 92).“La drogodependencia
como una de las plagas de nuestra época, hace sufrir a muchas familias, y no pocas veces
termina destruyéndolas. Algo semejante ocurre con el alcoholismo, el juego y otras
adicciones. La familia podría ser el lugar de la prevención y de la contención…”(AL 51).
Oración: Te damos gracias Señor por tu misericordia infinita. Te pedimos que en nuestra familia
sepamos aceptarnos, y acompañarnos en nuestras diferencias y debilidades. Te rogamos
especialmente por las familias que sufren en su seno por situaciones de adicciones, de depresiones,
angustias y problemas psicológicos.
Madre del Rosario cuida a nuestras familias, y guíanos para vivir la virtud de la paciencia y la grandeza
del amor que todo lo soporta y todo lo espera.
“Tomaron, pues, a Jesús, y él cargando con su cruz, salió hacia el lugar llamado Calvario. Cuando lo
llevaban detuvieron a Simón de Cirene y lo cargaron con la cruz”. (cf Jn 19, 16; Mt 27, 32).
Leemos en Amoris laetitia : ”El pequeño núcleo familiar no debería aislarse de la familia ampliada,
donde están los padres, los tíos, los primos, e incluso los vecinos. En esa familia grande puede haber
algunos necesitados de ayuda, o al menos de compañía y de gestos de afecto, o puede haber grandes
sufrimientos que necesitan un consuelo”.(AL 187).“El amor sobrelleva con espíritu positivo las
contrariedades. Se mantiene firme en medio de un ambiente hostil. Es amor a pesar de todo, aun
cuando todo el contexto invite a otra cosa. En la vida familiar hace falta cultivar esa fuerza del amor” (cf
AL 118. 119).
Oración: Señor te damos gracias porque cargaste con todos nuestros dolores y dificultades. Te
pedimos que nos ayudes a crecer en el amor, que nos hace fuertes para sostenernos mutuamente en
estos tiempos de confusión, incertidumbres y relativismo. Te rogamos especialmente por los que están
desorientados, por las familias en crisis, y por todos los que necesitan ayuda.
Virgen del Rosario abraza a nuestras familias, y guíanos para vivir la fortaleza del amor que nos
impulsa a ser “cireneos” que consuelan y acompañan a los hermanos que nos necesitan.
5.Quinto Misterio Doloroso: Jesús muere en la Cruz.
“Lo crucificaron a él y, con él, a otros dos, uno a cada lado y Jesús en medio. Junto a la cruz de Jesús
estaba su Madre…Al mediodía, se oscureció toda la tierra hasta las tres de la tarde; y a esa hora, Jesús
exclamó en alta voz: «Eloi, Eloi, lamá sabactani», que significa: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has
abandonado?»…Entonces Jesús, dando un gran grito,expiró”.(Cf Jn 19,18-25 ; Mc 15, 34-37).
Leemos en Amoris Laetitia: “Si la familia logra concentrarse en Cristo, él unifica e ilumina toda la vida
familiar. Los dolores y las angustias se experimentan en comunión con la cruz del Señor, y el abrazo
con él permite sobrellevar los peores momentos. En los días amargos de la familia hay una unión con
Jesús abandonado, que transforma las dificultades y sufrimientos en una ofrenda de amor”. (cf AL 317).
Oración: En este último misterio doloroso te damos gracias Señor por salvarnos en la Cruz. Te
pedimos que con tu gracia podamos abrazar todas nuestras cruces cotidianas que nos duelen y
angustian.Te rogamos especialmente por el dolor inmenso de las madres que perdieron a sus hijos, y el
dolor de todos los que perdieron sus seres queridos, por todas las penas y tristezas que nos causan la
violencia y la inseguridad.
Nuestra Señora del Rosario consuela a nuestras familias, y guíanos para que abrazados a Jesús
crucificado y abandonado hagamos de nuestros dolores y dificultades una ofrenda de amor..
Misterios Gloriosos.
1. Primer Misterio Glorioso: La Resurrección de Jesús.
“Al amanecer del primer día de la semana, fueron María la Magdalena y la otra María al sepulcro. Un
ángel del Señor dijo a las mujeres: No teman, ya sé que buscan a Jesús, el crucificado. No está aquí.
¡Ha resucitado! Vayan y digan a los discípulos: "Ha resucitado”. (Mt 28, 1. 5-7).
Leemos en Amoris Laetitia: “Para poder perdonar necesitamos pasar por la experiencia
liberadora de comprendernos y perdonarnos a nosotros mismos. Supone la experiencia de
ser perdonados por Dios, justificados gratuitamente y no por nuestros méritos. Fuimos
alcanzados por un amor previo a toda obra nuestra, que siempre da una nueva
oportunidad, promueve y estimula. Si aceptamos que el amor de Dios es incondicional, que
el cariño del Padre no se debe comprar ni pagar, entonces podremos amar más allá de
todo, perdonar a los demás aun cuando hayan sido injustos con nosotros”. (AL 107 y 108).
Oración: En este primer Misterio te damos gracias Señor porque tu resurrección nos da la vida y la
esperanza, Te pedimos que siempre podamos amarnos y respetarnos más allá de nuestros propios
errores y límites y los límites de los demás. Que el amor y la misericordia reinen en nuestras relaciones
y nos permitan siempre perdonarnos y volver a empezar mirándonos con ojos nuevos cada día.
Virgen del Rosario custodia a nuestras familias, y guíanos para que en cada familia sepamos darnos
siempre una nueva oportunidad y podamos recomenzar cada día.
2.Segundo Misterio Glorioso: La Ascensión de Jesús.
“Jesús dijo a sus discípulos:`Sepan que yo estaré con ustedes hasta el fin del mundo”. “El Señor Jesús,
después de hablarles, ascendió a los Cielos y se sentó a la derecha de Dios”. (Mt 18,20; Mc 16,19)
Leemos en Amoris Laetitia:”Cada familia, a pesar de su debilidad, puede llegar a ser una luz en la
oscuridad del mundo.Con el testimonio, y también con la palabra, las familias hablan de Jesús a los
demás, transmiten la fe, despiertan el deseo de Dios, y muestran la belleza del Evangelio y del estilo de
vida que nos propone.“Se trata de proponer valores, de hacer experimentar que el Evangelio de la
familia es alegría que llena el corazón. A la luz de la parábola del sembrador nuestra tarea es cooperar
en la siembra: lo demás es obra de Dios”.(cf AL 66, 184,200)
Oración: En este Misterio Señor te damos gracias porque sabemos que estás siempre con nosotros. Te
pedimos que todas las familias podamos experimentar la alegría que nos trae vivir y anunciar tu
Evangelio. Te rogamos especialmente que tu gracia nos ilumine para que en la oscuridad de este
mundo podamos ser testimonio del don maravilloso de ser familia.
Nuestra Señora del Rosario acompaña a nuestras familias, y guíanos para que con la presencia de
Jesús en medio nuestro, cada familia pueda ser portadora de la luz del Evangelio.
3. Tercer Misterio Glorioso: La venida del Espìritu Santo sobre María y los
Apóstoles.
Leemos en Amoris Laetitia: “La presencia del Señor habita en la familia real y concreta, con
todos sus sufrimientos, luchas, alegrías e intentos cotidianos. Cuando se vive en familia el
amor en la autenticidad, el Señor reina allí con su gozo y su paz. La espiritualidad del amor
familiar está hecha de miles de gestos reales y concretos. En esa variedad de dones y de
encuentros que maduran la comunión, Dios tiene su morada”. “Bajo el impulso del Espíritu, el
núcleo familiar acoge la vida y sale de sí para derramar su bien en otros, para cuidarlos y
buscar su felicidad”. (Cf AL 315 y 324)
Oración: Te damos gracias Señor porque nos enviaste al Espíritu Santo que nos da vida. Te
pedimos que en nuestra familia podamos vivir la comunión a través de los pequeños y
grandes gestos de amor cotidianos, para que tu paz y alegría reinen entre nosotros, y
podamos llevar esa paz verdadera a los demás.
María del Rosario sostiene a nuestras familias, y guíanos para que Dios pueda tener su
morada en nuestra familia, y nos impulse a derramar su alegría y su paz a otras familias.
4.Cuarto Misterio Glorioso: La Asunción de María al Cielo.
“En adelante todas las generaciones me llamarán feliz, porque el Todopoderoso ha hecho en mí
grandes cosas”. “¡Toda hermosa eres amada mía, no hay defecto en tí!.Ven del Líbano, esposa mía,
ven”.(Lc 1,48-49; Ct 4,7).
Nuestra Señora del Rosario nos abraza y tiene en su corazón a cada una de nuestras familias.
Leemos en Amoris Laetitia: ““Las familias, como María, son exhortadas a vivir con serenidad sus
desafíos familiares, tristes y entusiasmantes, y a custodiar y meditar en el corazón las maravillas de
Dios. En el tesoro del corazón de María están todos los acontecimientos de nuestras familias. Por eso
puede ayudarnos a interpretarlos para reconocer en la historia familiar el mensaje de Dios”. (AL 30).
Oración: En este Misterio te damos gracias Señor por darnos a María como nuestra Madre.Te damos
gracias porque desde hace 250 años nuestra Madre del Rosario acompaña y abraza a todas las
familias de la Arquidiócesis. De su mano te pedimos nos concedas la paz en nuestros corazones, en
nuestra familia, en el país, y en nuestra ciudad.
Madre nuestra del Rosario custodia a nuestras familias, y guíanos para seguir caminando en familia
en estas tierras del azul y blanca, donde Tú resplandecerás perpetuamente, animándonos a ser tus
familias misioneras de la paz.
“Una gran señal apareció en el cielo: una mujer vestida del sol, con la luna bajo sus pies, y una corona
de doce estrellas sobre su cabeza”. (Ap 12, 1).
Leemos en Amoris Laetitia: “Ante cada familia se presenta el icono de la familia de Nazaret, con su
cotidianidad hecha de cansancios y hasta de pesadillas…Como los magos, las familias son invitadas a
contemplar al Niño y a la Madre, a postrarse y a adorarlo…Pedirle a la Virgen que nos proteja con su
manto de madre. (AL 30 y 318)
Oración: En este último Misterio Glorioso te damos gracias Señor porque María es nuestra Reina en el
Cielo. Con tu gracia Señor, queremos coronar a María como Reina de nuestra familia para que la luz de
su ejemplo brille en nuestro hogar, y podamos mostrar a todos la belleza de ser familia.
Virgen del Rosario, Reina de nuestras familias y Reina de la Paz, danos tu maternal
bendición y guíanos para que de tu mano roguemos al Padre por todas las familias y por la
Paz.