Practica 1
Practica 1
Practica 1
Argumentación
UNIDAD I
INTEGRANTES DEL GRUPO:
1. Rodas Gamarra Edin Raúl
2. Claudio Sánchez Maryori Jazmine
3. Maquera Saca Walter Jampiere
4. Maldonado Espinoza Cesar E.
5. Quispe Peralta Sayda
6. Contreras Supa Erick
7. Huanca Ccasa Harold
Introducción
Organización de la asignatura
Por eso, es importante organizar el tiempo de estudio para lograr buenos y excelentes
resultados. La clave está en encontrar el equilibrio entre nuestras actividades personales y las
actividades académicas. El estudio a distancia requiere, muchas veces, sacrificio, por ello es
necesario encontrar la motivación que nos impulse a ser mejor cada día.
Los autores
3
RESULTADO DE APRENDIZAJE DE LA ASIGNATURA
UNIDADES DIDÁCTICAS
Tiene como propósito sustentar y fundamentar una postura de manera relativamente objetiva
sobre un tema específico y controversial con el fin de demostrar o refutar una idea, una actitud
o un hecho que se tiene o que se asume. En este tipo de texto se suele generar adhesiones
hacia la argumentación cuando se emplea generalizaciones, ejemplos, comparaciones y
definiciones que aumentan el grado de compenetración con la postura del autor del texto.
Debe tenerse en cuenta que en el texto argumentativo se suele recurrir al uso de la exposición
de datos; en otras palabras, en estos, aparecen rasgos de exposición o rasgos de un texto
expositivo, pero dichos rasgos no abundan, dado que hay una prioridad por la argumentación.
Según Díaz (2002), “el propósito de una argumentación es, ante todo, lograr acrecentar la
adhesión a un punto de vista que se somete a la consideración de un auditorio, pero no
demostrar la veracidad de una conclusión; eso pertenece al terreno de la demostración
científica”.
3
Esclavos y cansados
La palabra trabajo viene del latín tripalium que designaba una horrenda herramienta
de tres puntas con la que se sujetaba a las bestias o aporreaba esclavos. Si bien hoy
pensamos en el trabajo como una actividad que dignifica, la mayor parte de nuestra
historia ha estado asociada al sufrimiento y a la tortura. ¿O acaso hemos olvidado que
a Adán y a Eva los expulsaron del paraíso y los condenaron a ganarse el pan con el
sudor de su frente? El ocio era el regalo de Dios; la chamba, una maldición. El mundo
ha cambiado y el trabajo es un derecho, ya no un castigo. No tenerlo se considera un
problema que las sociedades deben resolver. Basta pasar unos meses sin percibir
ingresos que nos permitan pagar cuentas, procurarnos alimentos o educación para
entender que un mal empleo es mejor que ninguno.
Es curioso, supuestamente hemos evolucionado hasta lograr que el trabajo sea una
herramienta del hombre para procurarse bienestar y felicidad. Nos espantamos de las
condiciones de esclavitud en las que vivieron millones de seres humanos a lo largo de
los siglos. Sin embargo, acá estamos nuevamente; siendo cómplices y testigos de una
de las caras más crueles de la desigualdad: esa que divide a los hombres y mujeres
entre quienes se liberan a través del trabajo y quienes siguen condenándose a no
poder hacer nada más.
Dice José ‘Pepe’ Mujica, esa gran persona que es expresidente de Uruguay, que uno
no puede trabajar para terminar esclavo de una vida consumista, que la felicidad que
buscamos comprando cosas que no necesitamos nos quitan libertad. Pagamos con
horas y minutos de vida que nadie nos devolverá, eso que no llena el alma, pero vacía
la billetera. Imposible no estar de acuerdo con él, no se trata de ensalzar la pobreza,
sino de fomentar la austeridad. Pero cuando los ingresos solo alcanzan para comprar lo
indispensable, para sobrevivir, esa libertad tan ansiada sigue siendo inalcanzable, tanto
como lo era para un esclavo del pasado. Por cierto... Feliz Día del Trabajo.
Del Río, P. (1 de mayo de 2022). Esclavos y cansados. Recuperado de
https://elcomercio.pe/opinion/columnistas/esclavos-y-cansados-por-patricia-del-rio-not
icia/
Intención Para Carneiro (2005), los textos El texto argumentativo es aquel que
expositivos son aquellos cuya tiene como intención comunicativa
intención comunicativa es la de exponer sus ideas para
únicamente la de informar convencer o persuadir.
acerca de temas en todos sus
aspectos. Así, el texto expositivo Es un texto en el que se utilizan
muestra o presenta un objeto de estrategias de convencimiento, de
estudio “a través de una división persuasión o seducción como
analítica de la realidad expuesta: instrumentos o armas orientados a la
definición, origen, características, razón, al convencimiento (Mendoza,
descripción, clasificación, 2007).
causa(s), consecuencia(s),
importancia, etc.”. ¿Cuál es la tesis que plantea el
autor? La respuesta incluye
¿Cuál es la intención verboides como convencer,
comunicativa del autor? persuadir, demostrar, disuadir, etc. y
Responder a la pregunta se debe relacionarla con la tesis.
incluir un verboide (informar,
explicar, mostrar…) y los - CONVENCER la permisibilidad del
subtemas y subtemas. Esta es una matrimonio civil entre personas del
manera de identificar la mismo sexo debido a criterios de
intención. libertad de elección y mismas
- INFORMAR las causas, tipos y oportunidades para todos.
efectos de la obsolescencia
programada.
3
consciente el tiempo de vida útil argumentos son sólidos y
de los productos. contundentes? Si está de acuerdo
debe manifestarlo con argumentos,
de lo contrario, debe refutarlo.
Ejemplos:
TEXTO EXPOSITIVO
TEXTO ARGUMENTATIVO
Luis de Sebastián explica las razones de los hebreos cuando dispusieron el cuarto
mandamiento: «Moisés estaba tratando de formar un pueblo homogéneo y unido, y vio
claramente que la familia era un elemento básico del orden social. La autoridad paterna era el
vínculo que ligaba a los individuos a la autoridad política y religiosa que daba unidad a la
masa de individuos. Honrar a los padres es básicamente reconocer su autoridad sobre los hijos,
reconocer que nuestros padres pueden mandarnos y aceptar nuestra obligación de
obedecerlos».
Sin embargo, para el escritor Martín Caparros hay algunas cuestiones de este cuarto
mandamiento que le llaman la atención: «Es un poco extraño, porque honrar a tu padre y a tu
madre es algo que te ocurre naturalmente. El hecho de que exista un mandamiento que te
ordene hacerlo da, de alguna manera, la pauta de que no se les ocurría, y que no serían muy
amables con el papá y la mamá. Creo que se trataba de gente un poco rara. Lo que está
claro es que el establecimiento del linaje y la transmisión de la propiedad necesitaban de una
familia bien constituida, algo que posiblemente no estaba muy sólido cuando este muchacho,
Moisés, bajó de la montaña con un par de piedras mal talladas. Supongo que los
mandamientos hablan de las carencias, de aquello que mucha gente no quiere hacer por sí
misma, y el hecho de que estos ancestros no estuvieran dispuestos a honrar a su padre y a su
madre me da la sensación de que no hay nada nuevo bajo el sol. Es bastante habitual
escuchar: "Ustedes no respetan a los mayores". Me lo decían a mí mis padres y ahora se lo
siguen diciendo a los hijos».
A lo largo de nuestra infancia estamos protegidos por la figura de nuestros padres. Ellos se
interponen entre nosotros y las responsabilidades; entre nosotros y los problemas, entre nosotros
y las necesidades de la vida y la propia muerte. Los padres nos sirven como muralla a cuyo
abrigo vamos creciendo. Pero llega un momento en el que los padres comienzan a disminuir en
su tamaño protector, hasta que desaparecen. Entonces nos damos cuenta de que nosotros
estamos en esa primera fila y nuestros hijos comienzan a guarecerse detrás. Esto va
acompañado de la pérdida de la muralla que estaba entre nosotros y la necesidad, el dolor,
3
las exigencias de la vida y la propia muerte. Es un momento dramático. Ya nos hemos
convertido en maduros, somos padres y vamos camino a cumplir nuestro ciclo vital de la mejor
o peor manera.
(Fernando Savater “Los Diez mandamientos en el siglo XXI” )
ANÁLISIS DIFERENCIAL
Función Como lector, no sabia que los Como lector, estoy de acuerdo
mitos y estereotipos trasmiten frente al mandamiento de
valores que pueden provocar respetar a los padres,
una profecía autocumplida. básicamente en reconocer su
Conocía el ejemplo de los autoridad sobre los hijos.
padres y sus deseos que También, reconocer que los hijos
esperan sean sus hijos en el somos una especie de “hijos
futuro, pero su denominación prestados” por la vida, pues con
como “profecía autocumplida, el transcurrir del tiempo, los hijos
no. se independizan y muchos
forman sus propias familias.
Lenguaje formal
En el texto expositivo: En consecuencia, la interiorización de los
mitos del amor romántico puede causar comportamientos
disfuncionales en las parejas, como los celos, el control, la
dependencia,
Palabras técnicas como las subrayadas.
En el texto argumentativo:
Luis de Sebastián explica las razones de los hebreos cuando
dispusieron el cuarto mandamiento: «Moisés estaba tratando de
formar un pueblo homogéneo y unido, y vio claramente que la
familia era un elemento básico del orden social…”
Cita de Luis de Sebastián.
Práctica 1
Tema: Diferencias entre el texto expositivo y argumentativo
Propósito: Diferencia un texto expositivo y un argumentativo identificando los criterios de
diferenciación: intención. Función y uso del lenguaje en un cuadro comparativo.
ACTIVIDAD 1
TEXTO EXPOSITIVO
La sociedad actual es consciente del gran impacto que surte el sueño sobre la vida de las
personas. Los efectos del sueño no se limitan al propio organismo -necesidad de restauración
neurológica- (15, 16), sino que afectan el desarrollo y funcionamiento normal de un individuo en
la sociedad (rendimiento laboral o escolar, relaciones interpersonales, seguridad vial, etc.) (7).
De este modo, la calidad del sueño constituye un aspecto clínico de enorme relevancia. Así lo
demuestran las estadísticas al respecto: 30- 40% de la población padece de insomnio, 1-10%
sufre apneas de sueño y 60% de los trabajadores por turnos informa de alteraciones del ritmo
circadiano (1). En este sentido, se estima que en Estados Unidos el costo material de los
accidentes relacionados con la somnolencia, en 1988 superó los 43 mil millones de dólares (21);
en España, el número de accidentes de circulación provocados por conductores somnolientos
se eleva a 40,000 al año (22). Estamos, por tanto, ante uno de los mayores problemas de salud
de las sociedades occidentales. No obstante, tal como se recoge en un informe
estadounidense de 1994 de la National Commision on Sleep Disorders Research, nos
enfrentamos a uno de los problemas médicos más extendidos y a la vez menos comprendidos
(21). Por todo ello, es muy importante conocer de la forma más precisa posible la incidencia de
estos trastornos, así como los factores que los pueden estar determinando. Para la consecución
3
de este objetivo, y ante las dificultades que acarrea la evaluación polisomnografía en la
detección de la calidad del sueño, se ha optado en la mayoría de los casos por emplear
instrumentos de autoinforme en dicha tarea (29). Así, a lo largo de los últimos años se han
elaborado múltiples instrumentos de este tipo, desde encuestas amplias (23) hasta cuestionarios
más específicos (4, 10, 25, 28); dentro de este último contexto se sitúa el Índice de Calidad del
Sueño de Pittsburg (6), que permite evaluar calidad al diferenciar entre buenos y malos
dormidores. Desde una perspectiva conductual podemos considerar que el sueño está
determinado por cuatro dimensiones diferentes (5): tiempo circadiano, esto es la hora del día
en que se localiza; factores intrínsecos del organismo (edad, sexo, patrones de sueño, estado
fisiológico o necesidad de dormir, etc.), conductas que facilitan o inhiben el sueño y, por último,
el ambiente; estas dos últimas dimensiones hacen referencia a la higiene del sueño, que incluye
las prácticas necesarias para mantener un sueño nocturno y una vigilancia diurna normales
(25). La higiene del sueño estudia, entre otros aspectos, el efecto que ejercen determinados
factores ambientales (luz, ruido, temperatura, etc.) y factores relacionados con la salud
(nutrición, práctica de ejercicio físico y consumo de determinadas sustancias) sobre la calidad
del sueño (32). Se sabe, por ejemplo, que la exposición al ruido (18, 19, 26) o las temperaturas
extremas (12) provocan efectos negativos sobre la arquitectura del sueño. El tipo de nutrición
tiene también efectos sobre su calidad; por ejemplo, la vitamina B, el calcio y el triptófano
favorecen el sueño (32). El consumo excesivo de alcohol (17), cafeína (32) y nicotina (8) altera
también la arquitectura del sueño; lo mismo sucede con muchos de los hipnóticos, por ejemplo,
los barbitúricos y los benzodiacepinas (32).
Por ello, es importante evaluar la calidad del sueño en una población específica y, por otro,
determinar si el consumo diario de alcohol, cafeína y tabaco, evaluado también mediante un
instrumento de autoinforme, deteriora la calidad del sueño.
Sierra, J. C., Jiménez-Navarro, C., & Martín-Ortiz, J. D. (2002). Calidad del sueño en estudiantes universitarios:
importancia de la higiene del sueño. Salud mental, 25(6),
35-43.https://www.medigraphic.com/pdfs/salmen/sam-2002/sam026e.pdf
TEXTO ARGUMENTATIVO
¿Qué pretendo decirte poniendo un «haz lo que quieras» como lema fundamental de esa ética
hacia la que vamos tanteando? Pues sencillamente (aunque luego resultará que no es tan
sencillo, me temo) que hay que dejarse de órdenes y costumbres, de premios y castigos, en
una palabra, de cuanto quiere dirigirte desde fuera' y que tienes que plantearte todo este
asunto desde ti mismo, desde el fuero interno de tu voluntad. No le preguntes a nadie qué es lo
que debes hacer con tu vida: pregúntatelo a ti mismo. Si deseas saber en qué puedes emplear
mejor tu libertad, no la pierdas poniéndote ya desde el principio al servicio de otro o de otros,
Por buenos, sabios y respetables que sean: interroga sobre el uso de tu libertad... a la libertad
misma. Claro, como eres chico listo puede que te estés dando ya cuenta de que aquí hay una
cierta contradicción. Si te digo «haz lo que quieras» parece que te estoy dando de todas
formas una orden, «haz eso y no lo otro», aunque sea la orden de que actúes libremente. ¡Vaya
orden más complicada, cuando se la examina de cerca! Si la cumples, la desobedeces
(porque no haces lo que quieres, sino lo que quiero yo que te lo mando); si la desobedeces, la
cumples (porque haces lo que tú quieres en lugar de lo que yo te mando... ¡pero eso es
precisamente lo que te estoy mandando!). Créeme, no pretendo meterte en un rompecabezas
como los que aparecen en la sección de pasatiempos de los periódicos. Aunque procure
decirte todo esto sonriendo para que no nos aburramos más de lo debido, el asunto es serio: no
se trata de pasar el tiempo, sino de vivirlo bien. La aparente contradicción que encierra ese
«haz lo que quieras» no es sino un reflejo del problema esencial de la libertad misma: a saber,
que no somos libres de no ser libres, que no tenemos más remedio que serlo. ¿Y si me dices que
ya está bien, que estás harto y que no quieres seguir siendo libre? ¿Y si decides entregarte
como esclavo al mejor postor o jurar que obedecerás en todo y para siempre a tal o cual
tirano? Pues lo harás porque quieres, en uso de tu libertad y aunque obedezcas a otro o te
dejes llevar por la masa seguirás actuando tal como prefieres: no renunciarás a elegir, sino que
habrás elegido, lo elegir por ti mismo. Por eso un filósofo francés de nuestro siglo, Jean-Paul 34
Sartre, dijo que «estamos condenados a la libertad». Para esa condena, no hay indulto que
valga... De modo que mi «haz lo que quieras» no es más que una forma de decirte que te
tomes en serio el problema de tu libertad, lo de que nadie puede dispensarte de la
responsabilidad creadora de escoger tu camino. No te preguntes con demasiado morbo si
«merece la pena>> todo este jaleo de la libertad, porque quieras o no eres libre, quieras o no
tienes que querer. Aunque digas que no quieres saber nada de estos asuntos tan fastidiosos y
que te deje en paz, también estarás queriendo... queriendo no saber nada, queriendo que te
dejen en paz aun a costa de aborregarte un poco o un mucho. ¡Son las cosas del querer,
amigo mío, como dice la copla! Pero no confundamos este «haz lo que quieras» con los
caprichos de que hemos hablado antes. Una cosa es que hagas «lo que quieras» y otra bien
distinta que hagas lo primero que te venga en gana». No digo que en ciertas ocasiones no
pueda bastar la pura Y simple gana de algo: al elegir qué vas a comer en un restaurante, por
ejemplo. Ya que afortunadamente tienes buen estómago Y no te preocupa engordar, pues
venga, pide lo que te dé la gana... Pero cuidado, que a veces con la «gana» no se gana, sino
que se pierde.
(Fernando Savater “Ética para Amador”)
Análisis diferencial
Función.
Como lector no sabía el Como lector estoy de acuerdo con que
impacto que surte el sueño en <<haz lo que quieras>> implica ser
las personas y cómo afectan el introspectivo con uno mismo,
desarrollo normal y conocerse y vivir la vida que uno
funcionamiento del individuo y quisiera. El autor crítica la forma con la
sus causas y también métodos que abordamos nuestra motivación y
para poder tener un mejor nos persuade de encontrar los
sueño y así evitar las momentos adecuados para dejarnos
consecuencias de dormir mal . llevar, y tomar relevancia de nuestra
propia libertad.
3
Lenguaje 3ra Persona: La higiene del 1ra persona: Eso me lo decían mis
sueño es fundamental para el padres y ahora lo sigue diciendo al
bienestar y el rendimiento diario. resto de personas.
Denotativo y connotativo: Entonces nos
damos cuenta de que nosotros
estamos en esa primera fila y que el
resto de personas deben abstenerse de
estas .
Las palabras en negrita hacen
referencia que a nadie debes
preguntarle qué es lo que tienes que
hacer con tu vida, simplemente
pregúntate a ti mismo.
ACTIVIDAD 2
TEXTO EXPOSITIVO
En el mundo “uno de cada cuatro individuos sufre de algún problema grave de estrés y en las
ciudades, se estima que el 50 por ciento de las personas tienen algún problema de salud
mental de este tipo” (Caldera, Pulido y Martínez, 2007, p. 78). Como factor epidemiológico, se
considera un aspecto de gravedad, ya que el estrés es un importante generador de diversas
patologías. Además, el estrés está presente en todos los medios y ambientes, incluido el
educativo, en donde se centra el objetivo de esta discusión; de ahí que los psicólogos, los
docentes y los padres de familia, hayan identificado la necesidad de conocer las implicaciones
que tiene sobre el rendimiento de los estudiantes, es decir, el estrés que éstos experimentan en
el ámbito académico. Maldonado, Hidalgo y Otero (2000, citado en Román, Ortiz y Hernández,
2008) plantean que un nivel elevado de estrés académico altera el sistema de respuestas del
individuo a nivel cognitivo, motor y fisiológico. La alteración en estos tres niveles de respuestas
influye de forma negativa en el rendimiento académico, en algunos casos disminuye la
calificación de los alumnos en los exámenes y, en otros casos, los alumnos no llegan a
presentarse al examen o abandonan el aula (…) antes de dar comienzo el examen (p. 2).
Asimismo, los especialistas en comportamiento escolar han señalado que es necesario diseñar
programas para reducir los efectos adversos que puede tener el estrés sobre el desempeño
académico en general, y atender oportunamente a los estudiantes en riesgo. Lo anterior,
debido a que las consecuencias de altos niveles de estrés “van desde los estados depresivos,
ansiedad, irritabilidad, descenso de la autoestima, insomnio, hasta asma, hipertensión, úlceras,
etcétera” (Caldera, Pulido y Martínez, 2007, p. 78), afectando de modo perjudicial tanto la
salud, como el rendimiento académico de los alumnos. “Los escasos trabajos sobre el tema
han demostrado la existencia de índices notables de estrés en las poblaciones universitarias,
alcanzando mayores cuotas en los primeros cursos de carrera y en los períodos
inmediatamente anteriores a los exámenes” (Muñoz, 1999 citado en Martín, 2007, p.89). En
Colombia, sólo se encuentran dos estudios enfocados en este tópico (Gutiérrez, Londoño y
Mazo, 2009; Berrío y Mazo, 2011). De ahí que la psicología colombiana aún no haya reportado
datos teóricos sobre el tema.
Por tanto, es necesario brindar información significativa sobre las líneas de desarrollo
investigativo para la conceptualización del estrés académico, sus definiciones y
manifestaciones.
García, N. B., & Zea, R. M. (2011). Estrés académico. Revista de psicología Universidad de
Antioquia, 3(2), 55-82.
file:///C:/Users/docentes.AULAB/Downloads/tathiana,+06+Estres+acad%C3%A9mico%20(1).pdf
TEXTO ARGUMENTATIVO
Uno de los aspectos más terribles de la historia contemporánea es la inmensa cantidad de
familias destrozadas y separadas por guerras, dictaduras y persecuciones de todo tipo.
Hablamos de honrar a padre y madre, pero a veces hay que encontrarlos, ya que han sido
arrebatados por la crueldad de personas que se comportan como fieras hacia otros seres
humanos. Tal vez uno de los ejemplos más claros en este sentido fue la dictadura militar que
gobernó la Argentina entre 1976 y 1983. El resultado de esa barbarie, entre otros, es la gran
cantidad de personas que luchan por reconstruir el vínculo familiar. Uno de los grupos es el de
las Abuelas de Plaza de Mayo, que buscan encontrar a sus nietos para, a través de ellos,
recuperar de algún modo a sus hijos perdidos. La entidad está presidida por Estela de Carlotto,
quien sufrió la desaparición de su hija embarazada. Aunque no ha podido dar con su nieto, su
lucha le permitió reintegrar a más de sesenta hijos de desaparecidos. Así pudieron recrear un
nuevo vínculo afectivo familiar, aquella memoria común que la dictadura deshizo. Según la
presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, el sentido de la familia se basa «en el ejemplo que
recibí de mis padres, lo que me permitió después devolverlo a ellos. Honrarás a padre y madre
fue para mí la repetición de los ejemplos que me dieron. Aprendí que hay que hacer el bien,
criar a los hijos en libertad, ser solidario, perdonar, convivir, que hay que entender y sobre todo
que hay que amar». Una de las experiencias más atroces es la de los nietos que vivían con
padres falsos, que se habían apropiado de ellos. «Yo quizá puse el foco en estos nietos que
estamos encontrando —dice Carlotto— que tenían una familia falsa, una mamá y un papá
que no era el propio. Esos chicos, con su sinceridad e inocencia, los honraban. Los querían,
creyendo que eran sus padres. Muchos años después, descubren que les han mentido,
engañado, que los han robado y a pesar de eso no odian, no tienen rencores, pero empiezan
a entender la historia de sus verdaderos padres, que dieron la vida por un país mejor. Entonces
comienzan a honrarlos buscándolos, sabiendo que no van a venir, que como los mataron ya no
están. Pero tratan de saber cómo eran, qué hacían, qué les gustaba, con quiénes vivían.
Intentan, de alguna manera, encontrar su historia.» El contrasentido a esta adoración de la
3
juventud es que nuestras sociedades desarrolladas, plutocráticas, cada vez tienen menos hijos.
Estamos ante un fenómeno de envejecimiento de la población. Nacen pocos niños y eso crea
una serie de descompensaciones sociales. Los fondos para pensiones y seguridad social se
mantienen con la aportación de los trabajadores en activo. Es por ello por lo que resulta
necesario que se incorporen permanentemente jóvenes al mundo laboral. Por otra parte,
muchas tareas tienen que ser cubiertas por gente que viene de fuera. La inmigración sustituye
a esos hijos que no queremos tener. En el fondo, los hijos no queridos se presentan con otro
color de piel, con otras ideas. Llegan a nosotros para cubrir esos huecos de la población que
hemos dejado libres. Uno de los temas importantes de la relación social es el del trato con los
ancianos en las instituciones geriátricas. No todos llegan a ese momento de la vida en el mismo
estado, capacidad, lucidez y autonomía de movimientos. Por lo tanto, hay ocasiones en las
que se vuelve imprescindible que estén atendidos en una institución donde reciban
determinados tipos de cuidados. Sobre este tema el padre Busso discrepa y dice que «el
anciano ya no tiene lugar en la vida familiar. Hemos creado un sistema perverso que son los
geriátricos de pago. El anciano forma parte de la familia.
Los padres son dos elementos básicos de la biografía individual. Pero además de preguntarnos
por esta relación entre hijos y padres en cada uno de los núcleos familiares, hay una
consideración más amplia, más abierta y más social que hay que tener en cuenta: ¿cuál es la
relación en nuestras sociedades entre los jóvenes, las personas maduras y los ancianos? ¿Cuál
es el trato que damos a quienes forman parte del eufemismo llamado «tercera edad»? ¿Qué
hacemos con las personas que ya no se encuentran en el orden productivo, con quienes
representan la memoria, la tradición y que a veces constituyen un obstáculo para ciertas
renovaciones? ¿Cuál es el papel de la gente venerable en la sociedad actual? Éstas son las
grandes preguntas sobre las que debemos debatir, y que nacen del análisis actualizado del
cuarto mandamiento.
Análisis diferencial