RUIDO AMBIENTAL EN ZONAS DE OCIO.

Aldeguer-Sánchez, María Pilar; Peral-Orts, Ramón

Universidad Miguel Hernández, Av. Universidad S/N, Elche, España.

[email protected], [email protected]

Resumen

Las actividades de ocio son necesarias para la promoción del bienestar emocional, pero interfieren
en la calidad de vida, generando contaminación acústica, molestias y zonas de conflicto [1, 2]. No se
han encontrado modelos efectivos para predecir el ruido de ocio, dificultando su consideración en
mapas estratégicos de ruido de aglomeraciones. Por lo que resulta imprescindible desarrollar un
modelo de predicción de ruido, basado en el funcionamiento de los modelos de predicción de ruido de
tráfico, válido para actividades de ocio que pueda prever y prevenir la contaminación acústica y
elaborar planes de acción efectivos y herramientas para su abordaje.
En este paper se hace un análisis de la bibliografía principal y se establecen algunos aspectos
básicos de la investigación para la obtención de un modelo de ruido de ocio.
Palabras clave: Ruido de ocio, contaminación acústica, predicción de ruido, ruido ambiental.

Abstract

Leisure activities are necessary for the promotion of emotional well-being, but they interfere with
the quality of life, generating noise pollution, discomfort and conflict zones [1, 2]. No effective
models have been found to predict leisure noise. So, that makes difficult their analysis in strategic
agglomeration noise maps. Therefore, it is essential to develop a valid noise prediction model, based
on the operation of traffic noise prediction models, for leisure activities that can anticipate and prevent
noise pollution and develop effective action plans for its approach.

In this paper, an analysis of the main bibliography has been made and some basic aspects of
research has been established to obtain a leisure noise model.

Keywords: Leisure noise, noise pollution, noise prediction, environmental noise.

PACS 43.50 Qp
 Aldeguer-Sánchez, María Pilar; Peral-Orts, Ramón

1 Introducción

La contaminación acústica es un problema para la sociedad actual, tanto en países desarrollados

como en vías de desarrollo [3].
El ruido es un factor de riesgo para el comportamiento, la calidad de vida y la salud, además puede
afectar física y psicológicamente [2, 4, 5].
El ruido de ocio es uno de los principales contaminantes acústicos y que más conflictos provoca
[6], especialmente durante el periodo nocturno [3]. Además genera niveles de ruido superiores a los
objetivos de calidad acústica marcados por la legislación vigente.
Las quejas se acrecientan durante la noche y provocan problemas vecinales y trastornos del
descanso y del sueño. Las alteraciones del descanso tienen asociadas diversas consecuencias como
fatiga, sueño y baja capacidad de concentración durante el periodo diurno. La exposición continua
puede incluso provocar pérdida de audición [6, 7, 8].

2 Estado del arte

Para la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor del 40% de jóvenes y adolescentes
están expuestos a niveles de ruido potencialmente nocivos de actividades de ocio, cada vez se detectan
más pérdidas de audición a más temprana edad, y diversos estudios alarman sobre la relación con la
exposición al ruido en actividades de ocio [3, 8, 9].
Según International Journal of Audiology, una alta proporción de adolescentes entre 15 y 16 años
se encuentran expuestos a niveles de ruido en su tiempo de ocio que suponen un riesgo a largo plazo
de pérdida de audición [10].
Un estudio en 2017 muestra la relación entre la exposición al ruido y la experiencia del tinnitus.
Un 63 % de la muestra de 1435 jóvenes de nacionalidad australiana entre 11 y 35 años, experimentó
tinnitus tras exposición a fuentes de ruido. Además, el ritmo fue mayor en los hombres que
experimentaron tinnitus permanente que en las mujeres [11].
Según el informe realizado por el Observatorio salud y medio ambiente, del Instituto DKV de la
Vida Saludable con la colaboración de GAES en 2017, las principales fuentes de ruido son tráfico y
vehículos, ferrocarriles, aviación, ocio ruidoso, actividades domésticas, industria, construcción y obras
[12].
Un estudio realizado por el Centro de Investigación de Sociología [CIS, 2006] en España, indica
que la fuente de ruido más importante es el tráfico rodado, con un 29 % de las molestias en periodo
diurno y un 14 % en periodo nocturno [3], le siguen las actividades de construcción y en tercer lugar el
ruido de ocio, con un 7 %, por encima del tráfico aéreo, ferroviario y actividades industriales [3].
En un estudio realizado en Tabriz, en Irán, se descubrió que los niveles eran más altos que los
permitidos en la mayoría de las estaciones de medición, especialmente en plazas y cruces muy
transitados. Se observó que los niveles de ruido más altos en el tráfico normal son los producidos por
motocicletas, autobuses y camiones. Además, el primer reflejo de la mayoría de los conductores y
conductoras es el uso de la bocina, y la cultura de conducción y el incumplimiento de las leyes de
circulación son la base del problema de contaminación acústica de las ciudades [5].
Generalmente los ruidos del tráfico por carretera y de ocio se mezclan, pero es posible identificar
el ruido dominante mediante algoritmos de análisis de regresión [13].

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 Acústica 2020 – TecniAcústica 2020, 21 a 23 de outubro, Portugal

El ruido de ocio procede principalmente de aglomeraciones de gente y locales de ocio [3].

Las aglomeraciones de personas son una fuente muy importante de ruido asociado al ocio, no sólo
en los entornos de los locales de ocio, sino también en espacios urbanos donde se celebran conciertos,
eventos deportivos, desfiles, fiestas populares, actos religiosos o el simple trasiego de personas que se
desplazan de un lugar a otro [3, 6, 7].
Las zonas de ocio guardan relación con los hábitos y cambian con ellos [3]. El ruido procedente de
los locales de estas zonas llega al vecindario a través del exterior de fachadas o directamente desde el
interior de los locales [14].
Resulta de vital importancia impulsar un modelo de buenas prácticas en el ámbito del ocio, que
implique a empresarios y organizadores de eventos de ocio y promueva conductas cívicas y
responsables.
Se han desarrollado escasos estudios sobre la contaminación ambiental que producen las
actividades de ocio, así como las técnicas, índices acústicos y algoritmos de predicción para este foco
de ruido. Las características demográficas, económicas y socioculturales, son decisivas en el ruido de
ocio en países mediterráneos como España, donde el clima y la cultura social favorecen actividades al
aire libre [3].
Los estudios han sido realizados por ayuntamientos y administraciones públicas y surgen de la
necesidad de actuar frente a las molestias que ocasionan. El Ayuntamiento de Madrid es uno de los
más activos en la lucha contra el ruido [15].
El ruido que originan las actividades de ocio es un problema para muchas personas. Este ruido se
diferencia del resto de fuentes de ruido ambiental urbanas como el tráfico rodado y requiere del
desarrollo de herramientas de gestión específicas [3, 13].
El modelo de ciudad caminable tiene como objetivo generar espacios urbanos donde se reduzca el
uso del transporte y se promuevan los desplazamientos a pie o en bicicleta. De esta forma se reduciría
la contaminación acústica y se reducirían las afectaciones ambientales [2, 16].
Cuando la mayoría de vehículos tengan propulsores eléctricos, la ausencia de ruido originado por
tráfico puede provocar problemas de seguridad y aumento de riesgo de accidentes entre vehículos y
peatones, principalmente por los hábitos sociales de los viandantes y el uso excesivo e inadecuado de
los dispositivos móviles [16, 17].

3 Marco legal para la contaminación producida por actividades de ocio

La normativa referente al ruido se centra principalmente en el ruido ambiental originado por

industrias e infraestructuras de transporte, como tráfico rodado, ferroviario y aeroportuario, pero no se
mencionan las fuentes de ruido procedente de actividades de ocio. No existe legislación ni regulación
específica para el ruido de ocio [6].
No se dispone de leyes específicas para la contaminación por actividades de ocio, por lo que
resultan de aplicación leyes genéricas del ruido a nivel europeo, estatal y municipal [6].
Para el ocio a nivel europeo, resulta de aplicación la Directiva 2002/49/CE [18, 19] del Parlamento
Europeo y del Consejo de 25 de junio de 2002 sobre evaluación y gestión del ruido ambiental.
A nivel estatal para este tipo de ruido, resulta de aplicación la Ley 37/2003 [20], de 17 de
noviembre, del Ruido, y sus desarrollos reglamentarios:

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Real Decreto 1513/2005 [21], de 16 de diciembre, por el que se desarrolla la Ley 37/2003, de 17
de noviembre, del Ruido, en lo referente a la evaluación y gestión del ruido ambiental.
Real Decreto 1367/2007 [22], de 19 de octubre, por el que se desarrolla la Ley 37/2003, de 17 de
noviembre, del Ruido, en lo referente a zonificación acústica, objetivos de calidad y emisiones
acústicas.
Real Decreto 1038/2012 [23], de 6 de julio, por el que se modifica el Real Decreto 1367/2007, de
19 de octubre, por el que se desarrolla la Ley 37/2003, de 17 de noviembre, del Ruido, en lo referente
a zonificación acústica, objetivos de calidad y emisiones acústicas.
A nivel municipal, la legislación específica existente son las Ordenanzas de Protección Acústica
[24] del municipio en cuestión.

4 Algoritmo de predicción

La creación de mapas de ruido originado por tráfico se realiza principalmente empleando modelos
de predicción basados en las características del tráfico, definidos tras una validación experimental
[25], mientras que los estudios que cuantifican el impacto sonoro producido por la afluencia de
personas en actividades de ocio, se confeccionan mediante mediciones en estaciones con
monitorización en continuo o mediciones de corta duración, que registran los niveles de presión
sonora instantánea.
No existen actualmente protocolos de regulación ni modelos predictivos del ruido de ocio [3]
mediante algoritmos capaces de prever el ruido ambiental generado por la actividad relacionada con
eventos de ocio que ayude a la prevención de la contaminación y sus efectos sobre la calidad de vida.

5 Metodología

La identificación y caracterización de las fuentes de ruido es un objetivo prioritario [26]. El habla

humana es una de las principales fuentes de ruido de ocio, y consta de periodos de inactividad [3].
Los movimientos de personas de un lugar a otro se caracterizan como fuentes lineales y su
concentración durante una actividad concreta se caracteriza mediante fuentes superficiales.
Para obtener el nivel de fuentes lineales de ruido se utiliza la ecuación (1), en la que se utilizan
superficies cilíndricas, donde l y r son la longitud y el radio de la fuente, y l/m y r/m representan
distancias adimensionales [27].

𝐿𝑝 = 𝐿𝑤 − log − log (1)

Las medidas estáticas son las más utilizadas en acústica ambiental para conocer los niveles de
ruido ambiental en puntos concretos [3].
La técnica de Soundwalker [3] es una medida dinámica que consiste en realizar medidas a lo largo
de una ruta, para conocer los niveles de ruido ambiental en un recorrido y no únicamente en puntos
concretos. Esta técnica permite obtener resultados similares a los obtenidos por un sonómetro en un
punto de medida fijo, pero además permite realizar medidas continuas y rápidas a lo largo de un
recorrido.

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 Acústica 2020 – TecniAcústica 2020, 21 a 23 de outubro, Portugal

6 Modelos de predicción de ruido de tráfico: Ejemplo CNOSSOS-EU

La Comisión Europea, de acuerdo con la Directiva 2002/49/CE y la Directiva (UE) 2015/996, ha

elaborado un método común de evaluación del ruido para tráfico rodado, ferroviario, aeronaves y
ruido industrial, CNOSSOS-EU, para la elaboración de mapas de ruido, orientado a la obtención de
resultados comparables de la evaluación del ruido entre los estados miembros de la Unión Europea. Su
objetivo principal es mejorar la calidad y la fiabilidad de los resultados [19, 28, 29, 30].
Los estados miembros de la Unión Europea utilizarán este método común para confeccionar sus
mapas estratégicos de ruido (MER) a partir del 1 de enero de 2019, y deberán actualizarse cada cinco
años en el caso de aglomeraciones de más de 100.000 habitantes, grandes ejes viarios, ferroviarios y
aeropuertos [31].
El método CNOSSOS-EU es la referencia para la evaluación del ruido por tráfico rodado y el
establecimiento de los mapas estratégicos de ruido exigidos por la Directiva 2002/49/CE [29].
El ruido de tráfico rodado con CNOSSOS-EU es el resultado de distintas variables, como tipo y
densidad de vehículos, ruido de rodadura (que dependerá a su vez del tipo de asfalto y del modo de
circulación: rolling noise o propulsion noise) [30].
Las fuentes reales se describen por más de una fuente puntual, o incluso por fuentes lineales
representadas por fuentes puntuales situadas en el centro de segmentos lineales como el caso del
tráfico de trenes. En el método CNOSSOS-EU, los vehículos se describen mediante una o dos fuentes
puntuales, en la misma vertical a distintas alturas. Sólo los vehículos de la categoría 4, vehículos de
dos ruedas, se representan mediante una única fuente puntual [30].
La superficie de la calzada influye en la emisión de ruido por tráfico rodado. Para la construcción
de calzadas se emplean diferentes materiales en función del país en el que se encuentre, y afecta
principalmente a la emisión de rolling noise. Sin embargo, sería necesario disponer de más
investigaciones para obtener el efecto de amortiguación del ruido para cada suelo [30, 31].
Algunos aspectos de este modelo podrían ser implementados en el ruido de ocio interpretando la
localización de fuentes distintas a las del tráfico, o incluso relacionandolos con los seres humanos y el
habla.

7 Conclusiones

Las actividades de ocio suponen un problema de ruido ambiental para los consumidores durante
actividades de esparcimiento pero también para las personas que sufren de forma pasiva sus efectos en
las zonas próximas.
Tras la revisión del estado del arte, se obtiene la necesidad de analizar la influencia de los distintos
factores que intervienen en la problemática del ruido de ocio, en relación al número de participantes, el
tipo de actividad y la extensión de la misma, para evitar zonas de conflicto que interfieran en la
calidad de vida e incumplan objetivos de calidad acústica, pues no disponemos de modelo de ruido de
ocio efectivos [3].
La falta de elementos de predicción sonora asociados a esta tipología de fuentes, dificulta su
consideración en los mapas estratégicos de ruido de aglomeraciones. Resulta imprescindible
confeccionar un modelo matemático capaz de predecir los niveles de presión sonora derivados de
actividades de ocio en un entorno urbano, y elaborar planes de acción efectivos para su abordaje [13].

5
 Aldeguer-Sánchez, María Pilar; Peral-Orts, Ramón

La legislación establece unos procesos para confeccionar mapas de ruido, pero el ruido de ocio no
se puede predecir como el ruido de las otras fuentes pues no se dispone de modelos de predicción.
Existen algunos modelos del habla humana y los modelos de tráfico podrían ser adaptados a las
fuentes de ocio. Por lo tanto, existe un hueco de conocimiento que se pretende completar a través de
esta investigación.
En aquellos casos en los que no se cuenta con mapas de ruido de ocio, no se pueden realizar
medidadas correctoras específicas para reducir los niveles de ruido de una zona, y se opta por
restringir y limitar actividades de ocio nocturno, establecer distancias mínimas entre actividades,
modificar horas de cierre de locales, disponer o habilitar plazas de aparcamiento en función del aforo y
elaborar planes de movilidad [3].
Para elaborar mapas de ruido de ocio, resulta imprescindible estudiar los modelos de ruido de
tráfico, así como planificar y realizar medidas de ruido en entornos de ocio.
A partir del conocimiento y comparación de las variables que influyen en el ruido de tráfico
rodado y ruido de ocio, se podría desarrollar una metodología para la confección de algoritmo
matemático basado en redes neuronales que predigan la emisión sonora en actividades y la
propagación o atenuación.
Los datos obtenidos se analizarían y tratarían para elaborar mapas de ruido en actividades de ocio
y se validarían experimentalmente.
Para finalizar, y calibrar y ajustar el modelo, sería necesario realizar comparación de mapas de
ruido a partir de medidas experimentales y mapas predictivos.

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