Biografia de Jeffrey

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 17

República Bolivariana De Venezuela

Universidad Nacional Experimental


de los Llanos Centrales “Rómulo Gallegos”
Área Ciencias Políticas y Jurídicas
Programa Municipalizado de Formación en Derecho
Núcleo Calabozo

BIOGRAFIA
JEFFRY
DAHMER
Facilitador: Estudiantes:
Abg. Julio Rojas Johanny Mendoza
C.I: 21.336.640

2do Año
Sección “6”

Mayo, 2024
JEFFREY LIONEL DAHMER

Jeffrey Lionel Dahmer, también conocido como el Caníbal de Milwaukee o el


Monstruo de Milwaukee, fue un asesino en serie y delincuente sexual estadounidense que
mató y desmembró a diecisiete hombres entre 1978 y 1991.

Nació 21 de mayo de 1960 y muere el 28 de noviembre de


1994, en Milwaukee, Wisconsin, el primero de dos hermanos David Dahmer.

Sus padres fueron Joyce Annette (de soltera Flint; 7 de febrero de 1936 - 27 de
noviembre de 2000), una instructora de máquinas de teletipo,6 y Lionel Herbert Dahmer (29
de julio de 1936 - 5 de diciembre de 2023), un estudiante de química de la Universidad
Marquette y más tarde químico investigador.

PRIMEROS AÑOS
INFANCIA-
Jeffrey era un niño feliz al que le encantaba estar con sus padres y montar en su
triciclo. Hasta que, a los cuatro años de edad, el pequeño Dahmer padeció numerosas
enfermedades que le obligaron a permanecer en la cama: infecciones como neumonías,
escayolas en las piernas para corregir su postura e incluso fue operado de dos hernias.
El médico lo visitaba habitualmente, pero nadie le explicaba qué le ocurría para
encontrarse así.

Dahmer había sido un «niño enérgico y alegre», pero se volvió notablemente


apagado después de una doble operación de hernia poco antes de su Décimo cumpleaños.
1617
En la escuela primaria, Dahmer era considerado tranquilo y tímido; una profesora
recordó más tarde que detectó en Dahmer signos tempranos de abandono18 debido a la
ausencia de su padre y a las enfermedades de su madre, cuyos síntomas aumentaron cuando
ésta quedó embarazada de su segundo hijo.

Sin embargo, en la escuela primaria, Dahmer tenía un pequeño número de amigos.

En octubre de 1966, la familia se mudó a Doylestown, Ohio. Cuando Joyce dio a


luz en diciembre, Jeffrey pudo elegir el nombre de su hermano pequeño, por lo que le puso
el de David.
A partir de este momento, la actitud de Jeffrey cambió. Se convirtió en un niño
antipático, solitario y muy introvertido, carácter acentuado por el mal ambiente que
reinaba en su casa, ya que sus padres discutían constantemente.
No sentía especial interés por nada, hasta que, a los siete años, su padre
encontró un animal muerto debajo de la casa mientras limpiaba. A Jeffrey se le
iluminaron los ojos: había encontrado algo que realmente le gustaba.
Desde una edad temprana, Dahmer manifestó su interés por los animales muertos,
fascinación que pudo haber comenzado cuando, a los cuatro años, vio a su padre sacar
huesos de animales de debajo de la casa familiar.
Según Lionel, a Dahmer le emocionaba el sonido que hacían los huesos, y empezó a
preocuparse por éstos.
Dos años más tarde, durante una cena en la que la familia se encontraba cenando
pollo, Dahmer le preguntó a Lionel qué pasaría si los huesos de este se pusieran en lejía. 28
Lionel, complacido por lo que creía que era la curiosidad científica de su hijo, le demostró
cómo blanquear y conservar de forma segura los huesos de los animales y humanos.
Dahmer incorporó estas técnicas de conservación a su colección de huesos, y
también empezó a recoger animales muertos incluso atropellados que diseccionaba y
enterraba junto a la cabaña, y colocaba ocasionalmente los cráneos sobre cruces
improvisadas. Según un amigo, Dahmer le explicó que tenía curiosidad por saber cómo los
animales se encastraban.
En 1968, la familia se trasladó a un domicilio en el municipio de Bath, en el
condado de Summit (Ohio), el tercero en dos años, y el sexto de los Dahmer desde que se
casaron.25n 1 La casa se encontraba en un terreno de un acre y medio de bosque, con una
pequeña cabaña a poca distancia, donde Dahmer comenzó a coleccionar insectos grandes,
como libélulas y polillas, y esqueletos de animales pequeños, como ardillas y tamias.26
Algunos de estos restos se conservaron en frascos de formaldehído y se guardaron en la
cabaña.
En una ocasión, en 1975, Dahmer decapitó el cadáver de un perro antes de clavar el
cuerpo en un árbol y empalar el cráneo en un palo en el bosque detrás de su casa, para más
tarde, como broma, invitar a un amigo a ver la exposición mientras alegaba que había
descubierto los restos por casualidad.
De vez en cuando buscaba más huesos debajo y alrededor de la casa de la familia, y
exploraba los cuerpos de los animales vivos para descubrir dónde se encontraban sus
huesos.
Desde entonces, en el cobertizo del jardín, el joven Dahmer diseccionaba
animales sin saber, por supuesto, que este afán de investigar cadáveres tendría terribles
consecuencias.
Además, se dedicaba a enterrar a algunos de ellos, dejando la cabeza fuera de la
tierra para asustar a sus vecinos, una forma de captar la atención que no recibía por
parte de su familia.

CUALIDADES A TOMAR EN CUENTA


Partimos de la base de que Joyce Dahmer, la madre de Jeffrey Dahmer, tuvo
un embarazo complicado. Las contracciones le provocaban convulsiones y, para
frenarlas, el médico le recetó varios productos farmacológicos, entre ellos
la morfina, medicamento que actualmente se sabe que no se debe suministrar en el
periodo de gestación. Cuando nació Jeffrey la situación no mejoró, pues Joyce sufrió
depresión postparto, una enfermedad que provoca una desconexión emocional con el
recién nacido.
Los estudios universitarios de Lionel le mantenían lejos de casa la mayor parte
del tiempo; cuando estaba en casa, su mujer, hipocondríaca y con depresión, exigía
atención constante y pasaba cada vez más tiempo en la cama. Se sabe que en una
ocasión intentó suicidarse con meprobamato.
En consecuencia, ninguno de los dos padres dedicaba mucho tiempo a su hijo,
quien más tarde recordaría que, desde muy joven, se sentía «inseguro de la solidez de
la familia, recordando la extrema tensión y las numerosas discusiones entre sus padres
durante sus primeros años.
Ese mismo año, en un intento de salvar su matrimonio, sus padres asistieron a
sesiones de asesoramiento, sin embargo, siguieron discutiendo con frecuencia. Cuando
Lionel descubrió que Joyce había tenido una breve aventura en septiembre de 1977, ambos
decidieron divorciarse, por lo que se lo contaron a sus hijos que deseaban hacerlo
amistosamente. Lionel se marchó de la casa a principios de 1978, y en consecuencia se
trasladó temporalmente a un motel en North Cleveland Massillon Road.
Finalmente, sus padres se divorciaron y Jeffrey no se lo tomó para nada bien. Su
padre se fue de casa y su madre se mudó con su hermano a otro estado, no sin antes
pedirle a Jeffrey que se fuera con ellos, pero este se negó.
El sentimiento de abandono se estableció en él, un trauma del que no se podrá
deshacer nunca.

ADOLESCENCIA E INSTITUTO

Desde su primer año en el instituto Revere, Dahmer fue visto como un paria. A
la edad de 14 años, había empezado a beber cerveza y alcoholes fuertes en las horas del
día, que ocultaba con frecuencia dentro de la chaqueta que llevaba a la escuela.

Se sabe que le mencionó a un compañero, que le preguntó por qué estaba


bebiendo whisky en una clase de historia matutina, que el alcohol que consumía era su
medicina.

Aunque poco comunicativo, en su primer año, Dahmer era visto por el personal
como educado y muy inteligente, pero con notas medias.

Además, era un gran jugador de tenis y tocó brevemente en la banda del


instituto.

Entre sus compañeros de RHS, Dahmer se convirtió en una especie de payaso


de la clase que a menudo organizaba bromas, que llegaron a conocerse como “Hacer un
Dahmer”; éstas incluían bailar y simular ataques epilépticos o parálisis cerebrales en la
escuela y en las tiendas locales. En ocasiones, Dahmer realizaba estas payasadas por
dinero para comprar alcohol.

En 1977, las calificaciones de Dahmer disminuyeron, por lo que sus padres


optaron por contratar a un profesor particular, con un éxito limitado.
Cuando llegó a la pubertad, Dahmer descubrió que era homosexual; no se lo
dijo a sus padres.
Al principio de su adolescencia, tuvo una breve relación con otro adolescente,
aunque nunca tuvieron relaciones sexuales.
Según admitió posteriormente Dahmer, empezó a fantasear con dominar y
controlar a una pareja masculina completamente sumisa a principios o mediados de la
adolescencia, y sus fantasías masturbatorias evolucionaron gradualmente hasta
centrarse en los pechos y torsos del foco de sus fantasías, que se fueron entrelazando
con la disección.
Cuando tenía unos 16 años, Dahmer concibió la fantasía de dejar inconsciente a
un joven corredor que le resultaba atractivo, y luego hacer uso sexual de su cuerpo.
En una ocasión, Dahmer se escondió entre los arbustos con un bate de béisbol
para acechar a este hombre; sin embargo, ese día concreto no pasó por allí.
Dahmer admitió más tarde que este fue su primer intento de atacar y someter a
un individuo.
En mayo de 1978, Dahmer se graduó en el instituto. Unas semanas antes de su
graduación, uno de sus profesores observó a Dahmer sentado cerca del aparcamiento
de la escuela, bebiendo varias latas de cerveza.
Cuando el profesor amenazó con denunciar el asunto, Dahmer le informó de que
tenía muchos problemas en casa y que el orientador de la escuela estaba al tanto de
ellos. Esa primavera, Joyce y David se trasladaron de la casa familiar para vivir con
unos parientes en Chippewa Falls, Wisconsin, aunque Dahmer, recién cumplidos los
18, se quedó en la casa.
El divorcio de los padres de Dahmer finalizó el 24 de julio de 1978, y en
consecuencia a Joyce se le concedió la custodia de su hijo menor y el pago de una
pensión alimenticia.
FINALES DE LA ADOLESCENCIA Y PRINCIPIOS DE LOS 20 AÑOS: PRIMER
ASESINATO.
ASESINATO DE STEVEN HICKS

Dahmer cometió su primer asesinato en 1978, tres semanas después de su


graduación.
El 18 de junio, Dahmer recogió a un autoestopista de casi 19 años llamado Steven
Mark Hicks.5657 Dahmer atrajo al joven a su casa con el pretexto de beber. Hicks, quien
había hecho autostop con el objetivo de ir a un concierto de rock en Chippewa Lake Park,
aceptó acompañar a Dahmer a su casa con la promesa de tomar «unas cervezas» con éste,
quien tenía la casa para él solo.56

Según Dahmer, la visión de Hicks con el pecho desnudo de pie al lado de la


carretera despertó sus sentimientos sexuales, aunque cuando Hicks empezó a hablar de
chicas, sabía que cualquier insinuación sexual que hiciera sería rechazada.

Tras varias horas de hablar, beber y escuchar música, Hicks «quería irse y yo no
quería que se fuera», por lo que lo golpeó con una mancuerna de 10 libras (4,5 kg). Más
tarde declaró que golpeó a Hicks dos veces por detrás 60 mientras este estaba sentado en una
silla.

Cuando Hicks cayó inconsciente, Dahmer lo estranguló hasta la muerte con la barra
de la mancuerna, luego despojó la ropa del cuerpo de Hicks antes de explorar su pecho con
sus manos, para luego masturbarse mientras estaba sobre el cadáver.60

Al día siguiente, Dahmer diseccionó el cuerpo de Hicks en su sótano, para más


tarde enterrar los restos en una tumba poco profunda en su patio trasero.

Varias semanas después, desenterró los restos y separó la carne de los huesos, para
disolverla en ácido y tirar posteriormente la solución por el retrete. Respecto a los huesos,
los trituró con un mazo y los esparció por el bosque que había detrás de su casa.

LA UNIVERSIDAD

Seis semanas después del asesinato de Hicks, el padre de Dahmer y su prometida


volvieron a su casa, donde descubrieron que Jeffrey estaba viviendo solo.

Ese agosto, Dahmer se matriculó en la Universidad Estatal de Ohio (OSU), con la


esperanza de especializarse en negocios.

El único período de Dahmer en la OSU fue completamente improductivo, en gran


parte debido a su persistente abuso del alcohol durante la mayor parte de su estancia.
Recibió notas de suspenso en introducción a la antropología, civilizaciones clásicas
y ciencias administrativas, siendo prácticas de rifle la única asignatura en la que tuvo éxito,
en la que obtuvo una calificación de B-.

En una ocasión, Lionel visitó por sorpresa a su hijo, solo para encontrar su
habitación llena de botellas de licor vacías.

A pesar de que su padre había pagado por adelantado el segundo trimestre, Dahmer
abandonó la OSU después de solo tres meses.

SERVICIO MILITAR

En enero de 1979, a instancias de su padre, Dahmer se alistó en el Ejército de los


Estados Unidos.

Realizó el entrenamiento básico en el fuerte McClellan en Anniston, Alabama, antes


de formarse como especialista médico en el fuerte Sam Houston en San Antonio, Texas,
donde ocasionalmente fue reprendido por intoxicación.

En una ocasión, un caso de insubordinación hizo que todo su pelotón fuera


castigado, lo que le valió a Dahmer una severa paliza por parte de sus compañeros de
reclutamiento.

El 13 de julio de 1979, Dahmer fue desplegado en Baumholder, Alemania


Occidental, donde sirvió como médico de combate en el 2.º Batallón, 68.º Regimiento
Blindado, 8.ª División de Infantería.

Según los informes publicados, en el primer año de servicio, Dahmer fue un


soldado medio o ligeramente superior a la media.

Debido al abuso de alcohol de Dahmer, su rendimiento se deterioró y, en marzo de


1981, se le consideró inadecuado para el servicio militar y posteriormente fue dado de baja
del Ejército.

Recibió una baja honorable, ya que sus superiores no creían que los problemas que
Dahmer tenía en el ejército fueran aplicables a la vida civil.

El 24 de marzo de 1981, Dahmer fue enviado a Fort Jackson, Carolina del Sur, para
ser interrogado y se le proporcionó un billete de avión para viajar a cualquier parte del país.
Más tarde, Dahmer dijo a la policía que sentía que no podía volver a casa para enfrentarse a
su padre, por lo que optó por viajar a Miami Beach, Florida, tanto porque estaba «cansado
del frío», como en un intento de vivir por sus propios medios.

En Florida, Dahmer encontró un trabajo en una delicatessen y alquiló una


habitación en un motel cercano, sin embargo, gastó la mayor parte de su salario en alcohol,
lo que provocó que pronto fuera desalojado por falta de pago.

Al principio, pasaba las tardes en la playa mientras seguía trabajando en la tienda


de bocadillos, hasta que llamó por teléfono a su padre y le pidió volver a Ohio en
septiembre de ese mismo año.
REGRESO A OHIO Y TRASLADO A WEST ALLIS, WISCONSIN

Tras su regreso a Ohio, Dahmer vivió inicialmente con su padre y su madrastra e


insistió en que le delegaran numerosas tareas para ocupar su tiempo mientras buscaba
trabajo.

Siguió bebiendo en exceso y, dos semanas después de su regreso, fue arrestado por
embriaguez y alteración del orden público, y en consecuencia, se le impuso una multa de
sesenta dólares y una condena de diez días de cárcel en suspenso.

El padre de Dahmer trató sin éxito de desintoxicar a su hijo del alcohol. En


diciembre de 1981, él y la madrastra de Dahmer lo enviaron a vivir a West Allis,
Wisconsin, con su abuela, el único miembro de su familia a quien le mostraba algún tipo de
afecto.

Esperaban que su influencia, además del cambio de ubicación, pudiera persuadir a


Dahmer para que dejara de beber, encontrara un trabajo y viviera responsablemente.

Al principio, la convivencia de Dahmer con su abuela era armoniosa: la


acompañaba a la iglesia, realizaba de buen grado las tareas domésticas, buscaba
activamente trabajo y acataba la mayoría de las normas de la casa, aunque seguía bebiendo
y fumando.

A principios de 1982, Dahmer encontró empleo como flebotomista en el Centro de


Plasma Sanguíneo de Milwaukee, donde mantuvo este trabajo durante un total de diez
meses antes de ser despedido.
Dahmer permaneció en el paro durante más de dos años, durante los cuales vivió
con el dinero que le daba su abuela.

Poco antes de perder su trabajo, Dahmer fue arrestado por exposición indecente. El
8 de agosto de 1982, en el Parque de la Feria Estatal de Wisconsin, se le observó exponerse
en el lado sur del Coliseo en el que estaban presentes veiticinco personas, incluidas mujeres
y niños. Por este incidente, fue condenado y multado con cincuenta dólares más las costas
judiciales.

En enero de 1985, Dahmer fue contratado como mezclador en la fábrica de


chocolate Ambrosia de Milwaukee, donde trabajaba de 11 de la noche a 7 de la mañana,
seis noches a la semana, con las de los sábados libres.

Poco después de que Dahmer encontrara este trabajo, se produjo un incidente en el


que otro hombre le hizo una proposición mientras estaba sentado leyendo en la Biblioteca
Pública de West Allis.

El desconocido le lanzó a Dahmer una nota en la que le ofrecía realizarle


una felación. Aunque Dahmer no respondió a esta proposición, el incidente despertó en su
mente las fantasías de control y dominio que había desarrollado cuando era adolescente, y
comenzó a familiarizarse con los bares, los baños y las librerías gay de Milwaukee.

También se sabe que robó un maniquí masculino de una tienda, que utilizó
brevemente para su estimulación sexual, hasta que su abuela descubrió el objeto guardado
en un armario y le exigió que se deshiciera de él.

A finales de 1985, Dahmer había empezado a frecuentar regularmente las casas de


baños, que más tarde describió como lugares de relax, pero durante sus encuentros sexuales
se frustró al ver que sus parejas se movían durante el acto. Tras su detención, declaró: «Me
entrené para ver a las personas como objetos de placer en lugar de [como] personas».

Por ello, a partir de junio de 1986, administraba somníferos a sus parejas, que les
daba mediante licor con sedantes, para luego esperar a que se durmieran para realizar
diversos actos sexuales.

Para mantener un suministro adecuado de esta medicación, Dahmer informó a los


médicos de que trabajaba por las noches y requería las pastillas para ajustarse a ese horario.
Después de unos doce casos de este tipo, la administración de los baños revocó la
afiliación de Dahmer, quien, en consecuencia, empezó a utilizar las habitaciones de los
hoteles para continuar con esta práctica.

Poco después de que se le revocara la membresía de la casa de baños, Dahmer leyó


un informe en un periódico sobre el próximo funeral de un hombre de 18 años, por lo que
concibió la idea de robar el cadáver recién enterrado y llevárselo a casa. Según Dahmer,
intentó desenterrar el ataúd del suelo, pero encontró el suelo demasiado duro y abandonó el
plan.

El 8 de septiembre de 1986, Dahmer fue arrestado por un cargo de conducta lasciva


y lujuriosa por masturbarse en presencia de dos niños de 12 años mientras se encontraba
cerca del río Kinnickinnic. Al principio afirmó que sólo había estado orinando, sin saber
que había testigos, pero pronto admitió el delito.

Se le cambió el cargo por conducta desordenada y, el 10 de marzo de 1987, se le


sentenció a un año de libertad condicional, con instrucciones adicionales de someterse a
terapia.

ASESINATOS

El 20 de noviembre de 1987, Dahmer, quien en ese momento residía con su abuela


en West Allis, se encontró con un hombre de 25 años de Ontonagon, Míchigan, Steven
Tuomi, en un bar y lo convenció de que fuera con él al Hotel Ambassador de Milwaukee,
donde Dahmer había alquilado una habitación para la noche.

Según este último, no tenía intención de asesinar a Tuomi, sino que pretendía
simplemente drogarlo y acostarse a su lado mientras exploraba su cuerpo. A la mañana
siguiente, sin embargo, Dahmer se despertó y encontró a Tuomi tumbado bajo él en la
cama, con el pecho «aplastado» y con moretones «negros y azules». Además, le salía
sangre de la comisura de la boca, y los puños y un antebrazo de Dahmer estaban muy
amoratados. Este posteriormente declaró que no recordaba haber matado a Tuomi, y más
tarde informó a los investigadores de que no podía creer que esto hubiera ocurrido.

Para deshacerse del cadáver de Tuomi, Dahmer compró una gran maleta en la que
transportó el cuerpo a la residencia de su abuela. Allí, una semana después, separó la
cabeza, los brazos y las piernas del torso, luego fileteó los huesos del cuerpo antes de
cortar la carne en trozos lo suficientemente pequeños como para manipularlos. A
continuación, Dahmer colocó la carne en bolsas de plástico para la basura, envolvió los
huesos dentro de una sábana y los hizo astillas con un mazo. Todo el proceso de
desmembramiento le llevó a Dahmer aproximadamente dos horas, para posteriormente
deshacerse de todos sus restos, excepto la cabeza, en la basura.

Durante las dos semanas siguientes al asesinato de Tuomi, Dahmer conservó la


cabeza de la víctima envuelta en una manta, para luego hervirla en una mezcla de Soilex,
un detergente industrial a base de basicidad, y lejía en un esfuerzo por conservar el cráneo,
que luego utilizó como estímulo para la masturbación. Finalmente, el cráneo se volvió
demasiado frágil por este proceso de blanqueo, por lo que Dahmer lo pulverizó y se deshizo
de él.

Tras el asesinato de Tuomi, Dahmer comenzó a buscar activamente víctimas, la


mayoría de las cuales encontraba en bares gay o cerca de ellos, y a las que solía atraer a la
casa de su abuela, para posteriormente drogarlas con triazolam o temazepam antes o poco
después de mantener relaciones sexuales con ellas. Una vez que dejaba a su víctima
inconsciente con somníferos, la mataba por estrangulamiento.

Dos meses después del asesinato de Tuomi, Dahmer se encontró con un prostituto
nativo americano de 14 años llamado James Doxtator. Dahmer atrajo al joven a su casa
ofreciéndole cincuenta dólares por posar desnudo para unas fotos. En su residencia de West
Allis, la pareja mantuvo relaciones sexuales antes de que Dahmer drogara a Doxtator y lo
estrangulara en el suelo del sótano, para posteriormente dejarlo ahí durante una semana
antes de desmembrarlo de forma muy parecida a como lo hizo con Tuomi.

Para deshacerse de los restos del cadáver, los trasladó a un contenedor de basura,
exceptuando el cráneo, que hirvió y limpió en lejía antes de que observara que se había
vuelto demasiado frágil con este proceso, por lo que lo terminó pulverizando dos semanas
después.

El 24 de marzo de 1988, Dahmer conoció a un hombre bisexual de 22 años llamado


Richard Guerrero fuera de un bar gay llamado The Phoenix. Dahmer atrajo al joven a la
residencia de su abuela, aunque el incentivo en esta ocasión fueron cincuenta dólares para
que simplemente pasara el resto de la noche con él.

A continuación, drogó a Guerrero con somníferos y lo estranguló con una correa de


cuero, para posteriormente practicar sexo oral con el cadáver. Dahmer desmembró el
cuerpo a las 24 horas de asesinarlo, tiró de nuevo los restos a la basura y conservó el cráneo
antes de pulverizarlo varios meses después.

El padre de Dahmer contrató a un abogado llamado Gerald Boyle para defender a su


hijo. A petición de Boyle, Dahmer se sometió a una serie de evaluaciones psicológicas
antes de sus próximas audiencias judiciales, que revelaron que albergaba profundos
sentimientos de alienación. Una segunda evaluación, dos meses después, reveló que
Dahmer era un individuo impulsivo, desconfiado de los demás y consternado por su falta de
logros en la vida. Su agente de libertad condicional también hizo referencia a un
diagnóstico de 1987 según el cual Dahmer sufría un trastorno esquizoide de la personalidad
para presentarlo al tribunal.

El 30 de enero de 1989, Dahmer se declaró culpable de los cargos de agresión


sexual en segundo grado y de seducir a un niño con fines inmorales, aunque la sentencia
fue suspendida hasta mayo. El 20 de marzo, Dahmer se ausentó diez días del trabajo en
Semana, durante los cuales se trasladó a la casa de su abuela.

Dos meses después de su condena y dos meses antes de su sentencia por la agresión
sexual, Dahmer asesinó a su quinta víctima, un aspirante a modelo mestizo de 24 años
llamado Anthony Sears, a quien conoció en un bar gay el 25 de marzo de 1989. Según
Dahmer, en esta ocasión en particular, no buscaba cometer un crimen; sin embargo, poco
antes de la hora de cierre de esa noche, Sears simplemente empezó a hablar conmigo.
Dahmer atrajo a este último a la casa de su abuela, donde ambos practicaron sexo oral antes
de drogarlo y estrangularlo.

A la mañana siguiente, Dahmer colocó el cadáver en la bañera de su abuela, donde


lo decapitó antes de intentar desollarlo.2 Despojó la carne del cuerpo y pulverizó los
huesos, que tiró a la basura. Según Dahmer, Sears le resultaba excepcionalmente atractivo,
y fue la primera víctima de la que conservó permanentemente alguna parte del cuerpo:
conservó su cabeza y sus genitales en acetona y los guardó en una caja de madera, que
luego colocó en su casillero de trabajo. Cuando se mudó a una nueva dirección al año
siguiente, se llevó los restos allí.

El 23 de mayo de 1989, Dahmer fue condenado a cinco años de libertad condicional


y a uno de reclusión en un centro penitenciario, con permiso para trabajar a fin de que
pudiera conservar su empleo. También se le exigió que se registrara como delincuente
sexual.

PARENTESCOS

Jeffrey Dahmer mató a diecisiete jóvenes entre 1978 y 1991. De estas víctimas,
doce fueron asesinadas en su apartamento de North 25th Street. Otras tres víctimas fueron
asesinadas y desmembradas en la residencia de su abuela en West Allis, su primera víctima
fue asesinada en la casa de sus padres en Ohio y la segunda en el Hotel Ambassador de
Milwaukee.

Un total de catorce de las víctimas de Dahmer pertenecían a diversas minorías


étnicas, y nueve de ellas eran negras. Dahmer insistía en que la raza de sus víctimas era
algo incidental para él y que lo que le llamaba la atención era la forma del cuerpo de una
víctima potencial.

Estas afirmaciones han sido respaldadas por un estudio de especialistas forenses


independientes sobre la selección de víctimas de Dahmer, cuyo análisis antropológico
reveló que sus víctimas compartían una «similitud morfológica» y sugería que Dahmer se
sentía «psicológicamente atraído por un determinado tipo de cuerpo antropométrico».

La mayoría de las víctimas de Dahmer fueron asesinadas por estrangulamiento


después de haber sido drogadas con sedantes, aunque su primera víctima fue asesinada por
una combinación de apaleamiento y estrangulamiento y su segunda víctima fue golpeada
hasta la muerte, con otra víctima asesinada en 1990, Ernest Miller, que murió por una
combinación de shock y pérdida de sangre debido al corte de su arteria carótida.

A tres de las víctimas de Dahmer, asesinadas en 1991, se les practicaron agujeros


en el cráneo a través de los cuales Dahmer inyectó ácido clorhídrico o, más tarde, agua
hirviendo, en los lóbulos frontales,139 en un intento de inducir un estado permanente, sumiso
e irreversible. Esto resultó fatal, aunque no era su intención en todas las ocasiones.
ARRESTO Y CONDENA

El 22 de julio de 1991, Tracy Edwards, su última víctima, consiguió escapar


esposado. La policía lo vio y esta vez decidieron investigar. Fueron al apartamento del
hombre que lo había esposado y, al revisar la habitación, descubrieron varias fotografías de
cadáveres. Dahmer intentó huir, pero fue detenido.[cita requerida]

En su casa encontraron una cabeza humana en el refrigerador, dos bolsas en el


congelador que contenían un corazón humano y unos genitales masculinos. En la recámara
se encontraron cinco cráneos y diversos objetos como cuchillos, sierras y martillos, así
como fotos detallando procesos de desmembración de cuerpos humanos.

En otro cajón se encontró un esqueleto completo con los huesos limpiados con
cloro, un cuero cabelludo disecado y un tambor de 260 litros lleno de ácido con tres torsos
y otras partes humanas. También se encontraron rastros de sangre en las paredes. Días
después, vecinos de Dahmer dispararon a las puertas de su casa ante el horror que causaron
sus crímenes.

Los psiquiatras que lo atendieron le dijeron que estaba enfermo, por lo que se
declaró culpable con atenuante de enajenación mental, para ser condenado a una cárcel
especial para enfermos mentales, pero el atenuante fue finalmente rechazado. En principio,
se había declarado inocente, pero cambió su declaración por la gran cantidad de pruebas
encontradas en su contra. El jurado entonces lo declaró mentalmente sano y, como
consecuencia, fue finalmente sentenciado a 15 cadenas perpetuas consecutivas.

Fue enviado al Columbia Correctional Institute en Portage, Wisconsin, donde fue


entrevistado por el perito en perfiles criminales del FBI, Robert K. Ressler. Este famoso
experto coincidió en que, para defensa de la sociedad, el condenado tenía que permanecer
encerrado durante el resto de sus días. Sin embargo, destacó que debía ser internado en un
hospital psiquiátrico y no en una cárcel común, puesto que era un enfermo mental, aunque a
veces pareciera estar en su sano juicio y racionalizara su conducta.

El criminal admitió haber practicado el canibalismo y devorado los bíceps de una de


sus víctimas. Señaló que se masturbaba ante los trozos humanos y las calaveras de aquellos
que consideraba hermosos y a quienes no quería perder. Contó a los policías que tenía la
sensación de poder permanecer al lado de ellos si los mataba y conservaba sus cráneos.
Declaró también que las tres cabezas halladas en su nevera y en su congelador, con la carne
intacta, pertenecían a sus tres últimas víctimas.

También podría gustarte