UNIVERSIDAD DE CARTAGENA

FACULTAD CIENCIAS ECONÓMICAS

PROGRAMA
ADMINISTRACIÓN PUBLICA

MATERIA:
POLITICA Y SOCIEDADES

FRANCISCO PINEDA BELTRÁN

FECHA 31/05/2024
INTRODUCCION

El sistema político colombiano se caracteriza por su complejidad y dinamismo,

derivado de una historia rica en conflictos, reformas y transiciones. Establecido
como una república presidencialista, Colombia cuenta con una estructura de
gobierno que equilibra el poder entre los tres principales poderes del Estado: el
Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial. La Constitución de 1991, un hito en la historia
política del país, introdujo profundas reformas que buscaban consolidar la
democracia, garantizar los derechos fundamentales y promover la participación
ciudadana. En el marco de esta constitución, se crearon mecanismos innovadores
como la tutela, que permite a los ciudadanos defender sus derechos
fundamentales de manera rápida y efectiva, y se fortaleció la descentralización,
otorgando mayor autonomía a los gobiernos locales.

Sin embargo, el sistema político colombiano también enfrenta desafíos

significativos. La persistencia de conflictos armados internos, la influencia del
narcotráfico y la corrupción han socavado en ocasiones la estabilidad y la
confianza en las instituciones. A pesar de estos desafíos, el país ha avanzado en
la consolidación de la paz, especialmente tras el acuerdo con las FARC en 2016,
que marcó un paso importante hacia la reconciliación y el desarrollo sostenible. El
sistema de partidos en Colombia, tradicionalmente dominado por el Partido Liberal
y el Partido Conservador, ha evolucionado con la aparición de nuevas fuerzas
políticas que reflejan una sociedad cada vez más plural y diversa. Este pluralismo
político es un reflejo de las distintas regiones, culturas y grupos étnicos que
conforman la nación colombiana. Además, el sistema electoral colombiano,
basado en la representación proporcional, busca garantizar una representación
equitativa de los diferentes sectores de la sociedad en el Congreso. En este
contexto, la participación de la sociedad civil, los medios de comunicación y las
organizaciones no gubernamentales juega un papel crucial en la vigilancia y el
fortalecimiento de la democracia. La educación política y la formación de
ciudadanos críticos y comprometidos son esenciales para el futuro del sistema.
Palabra Clave: Constitución de 1991, Poder Ejecutivo, Poder Legislativo, Poder
Judicial, Participación Ciudadana, Organizaciones Sociales, Partidos Políticos,
Consejo de Estado, Corte Constitucional, Corte Suprema de Justicia, Consejo
Superior de la Judicatura.

SISTEMA POLÍTICO COLOMBIANO

El sistema político colombiano es una república democrática presidencialista,

establecida por la Constitución de 1991. Este sistema se caracteriza por la
separación de poderes entre el Ejecutivo, Legislativo y Judicial, garantizando un
equilibrio y control entre ellos. El presidente de la República, elegido por voto
popular para un período de cuatro años, es tanto jefe de Estado como jefe de
Gobierno. El Congreso de la República es bicameral, compuesto por el Senado y
la Cámara de Representantes, ambos elegidos también por voto popular y
encargados de la legislación y la supervisión del Ejecutivo. La independencia del
poder judicial está asegurada por diversas cortes, incluida la Corte Constitucional
y la Corte Suprema de Justicia, que protegen los derechos constitucionales y
supervisan la aplicación de la ley. La Constitución de 1991 promueve la
participación ciudadana a través de mecanismos como el referendo, la consulta
popular y la revocatoria del mandato, además de fortalecer la descentralización
administrativa y fiscal para dar mayor autonomía a los gobiernos locales y
garantizar una democracia más representativa e inclusiva.

El Poder Ejecutivo en Colombia es encabezado por el presidente de la República,

quien es el jefe de Estado, jefe de Gobierno y comandante en jefe de las Fuerzas
Armadas. El presidente es elegido por voto popular para un período de cuatro
años, con la posibilidad de una reelección no consecutiva, lo que busca equilibrar
la necesidad de estabilidad con la renovación periódica del liderazgo. El Ejecutivo
tiene la responsabilidad de implementar las leyes, dirigir la política exterior, y
administrar el gobierno y la administración pública en general. Además del
presidente, el Ejecutivo incluye al vicepresidente y al Consejo de ministros,
quienes son nombrados por el presidente y ayudan en la formulación y ejecución
de políticas públicas.
El Poder Legislativo es bicameral, compuesto por el Senado y la Cámara de
Representantes, conocidos colectivamente como el Congreso de la República. El
Senado tiene 108 miembros, elegidos por circunscripción nacional, mientras que la
Cámara de Representantes tiene 172 miembros, elegidos por circunscripción
territorial. Este sistema busca garantizar la representación de diversas regiones y
sectores de la sociedad colombiana. El Congreso tiene múltiples funciones,
incluyendo la creación y modificación de leyes, la supervisión del Ejecutivo, y la
aprobación del presupuesto nacional. Este poder legislativo refleja la diversidad
política y regional del país, permitiendo que diferentes voces e intereses sean
considerados en el proceso legislativo.

El Poder Judicial es independiente y está compuesto por varias cortes, cada una
con funciones específicas. La Corte Constitucional es responsable de proteger la
supremacía de la Constitución y tiene la facultad de revisar la constitucionalidad
de las leyes y actos administrativos. La Corte Suprema de Justicia es el máximo
tribunal en materia penal, civil y laboral. El Consejo de Estado se encarga de los
asuntos administrativos y el Consejo Superior de la Judicatura administra la
organización y el funcionamiento de la rama judicial. La independencia judicial es
crucial para garantizar la imparcialidad en la aplicación de la ley y la protección de
los derechos fundamentales de los ciudadanos.

Una característica destacada del sistema político colombiano es la promoción de

la participación ciudadana. La Constitución de 1991 introduce mecanismos como
el referendo, la consulta popular, la iniciativa legislativa y la revocatoria del
mandato, que permiten a los ciudadanos influir directamente en las decisiones
políticas. Estos instrumentos fortalecen la democracia directa y aseguran que el
gobierno responda a las demandas y necesidades de la población. Además, la
descentralización administrativa y fiscal otorgada por la Constitución permite una
mayor autonomía a los gobiernos locales, lo que facilita una gestión más eficiente
y cercana a las realidades y necesidades de las diversas regiones del país.

La descentralización es un pilar fundamental en el sistema político colombiano. Se

busca que las entidades territoriales como departamentos, municipios y distritos
tengan mayor autonomía administrativa, política y fiscal para gestionar sus
asuntos locales. Esto incluye la capacidad de recaudar y administrar sus propios
recursos, lo que promueve una gobernanza más eficaz y adaptable a las
particularidades de cada región. La descentralización también tiene como objetivo
mejorar la prestación de servicios públicos y fomentar el desarrollo económico
local.

El sistema de partidos políticos en Colombia ha evolucionado significativamente.

Históricamente, el Partido Liberal y el Partido Conservador dominaron la escena
política. Sin embargo, en las últimas décadas, el panorama se ha diversificado con
la aparición de nuevos partidos y movimientos que representan una amplia gama
de ideologías y demandas sociales. Esta pluralidad refleja una sociedad cada vez
más diversa y permite una representación más amplia de los diferentes intereses y
grupos dentro del país. La Ley de Bancadas, que obliga a los partidos a votar en
bloque en el Congreso, y el sistema de representación proporcional utilizado en
las elecciones, buscan fortalecer la disciplina partidaria y asegurar una
representación equitativa.

El conflicto armado interno ha sido una de las mayores pruebas para el sistema
político colombiano. Durante décadas, grupos guerrilleros como las FARC y el
ELN, así como grupos paramilitares, han desafiado la autoridad del Estado,
provocando violencia y desplazamiento forzado de millones de colombianos. Los
esfuerzos por alcanzar la paz han incluido tanto estrategias militares como
negociaciones políticas. Un momento clave fue el Acuerdo de Paz firmado en 2016
entre el gobierno colombiano y las FARC, que buscó poner fin a más de 50 años
de conflicto armado. Este acuerdo incluyó medidas de desmovilización y
reintegración de excombatientes, justicia transicional, reparación a las víctimas y
desarrollo rural integral.

La implementación del Acuerdo de Paz ha enfrentado numerosos desafíos,

incluyendo el asesinato de líderes sociales y excombatientes, la lenta
implementación de las reformas agrarias y el resurgimiento de la violencia en
algunas regiones. No obstante, el acuerdo sigue siendo un hito importante en la
búsqueda de la paz y la reconciliación en Colombia. La Comisión de la Verdad y la
Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) son mecanismos clave establecidos por el
acuerdo para esclarecer los hechos del conflicto, juzgar a los responsables de
crímenes graves y proporcionar justicia a las víctimas.

El narcotráfico es otro factor que ha influido significativamente en el sistema

político colombiano. La producción y el tráfico de drogas ilegales han financiado a
grupos armados y criminales, corrompido instituciones y exacerbado la violencia.
El Estado ha implementado diversas estrategias para combatir el narcotráfico,
incluyendo erradicación de cultivos, interdicción de rutas de tráfico y programas de
sustitución de cultivos. Sin embargo, estos esfuerzos han tenido resultados mixtos
y el narcotráfico sigue siendo una fuente importante de inestabilidad.

La corrupción es un desafío persistente para el sistema político colombiano. Casos

de corrupción han socavado la confianza pública en las instituciones y han
afectado la eficiencia y la equidad en la prestación de servicios públicos. El Estado
ha adoptado medidas para combatir la corrupción, incluyendo la creación de
organismos de control como la Procuraduría General de la Nación y la Contraloría
General de la República, que supervisan la conducta de los funcionarios públicos y
la gestión de los recursos públicos. Además, se han implementado reformas
legales y administrativas para aumentar la transparencia y la rendición de cuentas.

La participación de la sociedad civil es fundamental en el sistema político

colombiano. Organizaciones no gubernamentales, movimientos sociales y
comunidades organizadas desempeñan un papel crucial en la defensa de los
derechos humanos, la promoción de la justicia social y la vigilancia de las
instituciones públicas. Estas organizaciones también participan en procesos de
diálogo y construcción de paz, contribuyendo a la reconciliación y el desarrollo
sostenible. La libertad de prensa y de expresión, garantizada por la Constitución,
permite un debate público vigoroso y una supervisión crítica del gobierno.

El contexto cultural también influye en el sistema político colombiano. La

diversidad étnica y cultural del país, con una rica herencia de comunidades
indígenas, afrocolombianas y mestizas, se refleja en la política y en la
administración pública. La Constitución de 1991 reconoce y protege los derechos
de las minorías étnicas y promueve su participación en la vida política y social del
país. La representación política de estos grupos se ha incrementado, aunque
todavía enfrentan desafíos significativos en términos de inclusión y equidad.

En términos de política exterior, Colombia ha buscado fortalecer su posición en la

región y el mundo a través de la diplomacia y la cooperación internacional. El país
es miembro de organizaciones internacionales como la ONU, la OEA y la
Comunidad Andina, y ha establecido alianzas estratégicas en áreas como la
seguridad, el comercio y el medio ambiente. La política exterior colombiana se ha
enfocado en temas como la lucha contra el narcotráfico, la promoción de la
democracia y los derechos humanos, y la integración regional.

CONCEPTOS CLAVES Y DEFINICIONES

1. República Democrática: Forma de gobierno en la que el poder reside en el

pueblo, que lo ejerce directamente o a través de representantes elegidos.
En Colombia, este sistema garantiza la participación ciudadana en la toma
de decisiones políticas.

2. Presidencialismo: Sistema de gobierno en el que el presidente es el jefe

de Estado y de Gobierno, con poderes significativos en la administración
pública y la política exterior. En Colombia, el presidente es elegido por voto
popular para un período de cuatro años.

3. Constitución de 1991: Documento fundamental que establece la

organización del Estado, los derechos y deberes de los ciudadanos, y el
marco legal del país. La Constitución de 1991 introdujo reformas
importantes para fortalecer la democracia y los derechos humanos en
Colombia.

4. Poder Ejecutivo: Rama del gobierno encargada de la implementación y

administración de las leyes y políticas públicas. En Colombia, el presidente
 lidera el Poder Ejecutivo, asistido por el vicepresidente y el Consejo de
ministros.

5. Poder Legislativo: Rama del gobierno responsable de la creación y

modificación de las leyes. En Colombia, el Congreso de la República,
compuesto por el Senado y la Cámara de Representantes, ejerce el Poder
Legislativo.

6. Poder Judicial: Rama del gobierno encargada de interpretar y aplicar la

ley, garantizando la justicia y la protección de los derechos fundamentales.
En Colombia, incluye la Corte Constitucional, la Corte Suprema de Justicia,
el Consejo de Estado y el Consejo Superior de la Judicatura.

7. División de Poderes: Principio de organización del Estado que divide el

poder en tres ramas independientes (Ejecutivo, Legislativo y Judicial) para
prevenir la concentración del poder y asegurar un sistema de controles y
balances.

8. Congreso Bicameral: Estructura legislativa que consiste en dos cámaras:

el Senado y la Cámara de Representantes. Este sistema busca representar
de manera equitativa a las diversas regiones y sectores del país.

9. Senado: Cámara alta del Congreso de la República de Colombia,

compuesta por senadores elegidos por circunscripción nacional. El Senado
tiene funciones legislativas, de control político y de juzgamiento de altos
funcionarios.

10. Cámara de Representantes: Cámara baja del Congreso de la República

de Colombia, compuesta por representantes elegidos por circunscripción
territorial. Tiene funciones legislativas, de control político y de
representación de los intereses regionales.

11. Participación Ciudadana: Mecanismos y procesos que permiten a los

ciudadanos influir en las decisiones políticas, como el referendo, la consulta
popular, la iniciativa legislativa y la revocatoria del mandato.
RESUMEN DE LA LECTURA

El sistema político colombiano es una república democrática presidencialista,

estructurada bajo la Constitución de 1991, que establece una clara separación de
poderes entre el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial. El presidente de la
República, elegido por voto popular para un mandato de cuatro años, actúa como
jefe de Estado y de Gobierno, supervisando la implementación de leyes y políticas
públicas. El Congreso de la República, bicameral y compuesto por el Senado y la
Cámara de Representantes, es responsable de la creación y modificación de
leyes, así como de la supervisión del Ejecutivo. El poder judicial es independiente,
con la Corte Constitucional protegiendo la supremacía de la Constitución y otros
tribunales, como la Corte Suprema de Justicia y el Consejo de Estado, encargados
de garantizar la justicia en diversas áreas. La Constitución de 1991 también
promueve la participación ciudadana mediante mecanismos como el referendo y la
consulta popular, además de la descentralización administrativa, otorgando mayor
autonomía a los gobiernos locales.

A lo largo de su historia reciente, Colombia ha enfrentado desafíos significativos,

como el conflicto armado interno, el narcotráfico y la corrupción, que han influido
profundamente en su sistema político. El Acuerdo de Paz de 2016 con las FARC
representa un esfuerzo crucial para poner fin a décadas de conflicto, aunque su
implementación ha sido compleja y enfrenta múltiples obstáculos. La lucha contra
el narcotráfico y la corrupción sigue siendo prioritaria, con el gobierno adoptando
diversas estrategias para combatir estos problemas que socavan la confianza
pública en las instituciones. Además, la diversidad étnica y cultural de Colombia,
reconocida por la Constitución, influye en la dinámica política, con esfuerzos
continuos para asegurar la representación y los derechos de las minorías. En el
ámbito internacional, Colombia busca fortalecer su posición a través de la
cooperación y la diplomacia, participando activamente en organizaciones como la
ONU y la OEA. En resumen, el sistema político colombiano es una combinación
de instituciones sólidas y desafíos persistentes, con una continua evolución hacia
una mayor democratización, justicia social y paz duradera.
METODOLOGÍA DE TRABAJO

El trabajo fue realizado manejando 3 disciplina, se permite exponerlas:

1. Revisión de la Literatura

• Recopilación de Fuentes: Buscar libros, artículos académicos,

documentos oficiales, informes de organizaciones no gubernamentales y
estudios previos sobre el sistema político colombiano.

• Análisis Crítico: Evaluar las fuentes para identificar tendencias, hallazgos

clave y lagunas en el conocimiento existente. Esto ayuda a situar la
investigación en el contexto de lo que ya se sabe y lo que aún necesita
exploración.

2. Recolección de Datos

• Fuentes Primarias: Recopilar datos originales a través de métodos como:

• Entrevistas: Con expertos en política colombiana, funcionarios

públicos, académicos y líderes comunitarios.

• Encuestas: Dirigidas a ciudadanos para obtener percepciones sobre

la eficacia del sistema político y las instituciones.

• Análisis Documental: Revisión de leyes, decretos, actas del

Congreso, y documentos oficiales del gobierno.

• Fuentes Secundarias: Utilizar datos ya existentes de estudios, censos,

bases de datos gubernamentales y reportes de organizaciones
internacionales.

3. Análisis de Datos

• Métodos Cuantitativos: Utilizar estadísticas para analizar encuestas y

datos numéricos. Por ejemplo, emplear software estadístico para identificar
patrones y correlaciones.
 • Métodos Cualitativos: Analizar entrevistas y documentos mediante
técnicas de codificación temática para identificar tendencias y conceptos
clave.

• Comparación y Contraste: Comparar los hallazgos con otros estudios y

teorías para interpretar los resultados en un contexto más amplio.

CONCLUSIÓN

Para terminar, sobre el sistema político colombiano debe abordar tanto los logros
como los desafíos que enfrenta este complejo sistema. El sistema político
colombiano, enmarcado por la Constitución de 1991, ha establecido una sólida
estructura democrática basada en la separación de poderes y la participación
ciudadana. La adopción de un modelo presidencialista con un Congreso bicameral
y una judicatura independiente ha buscado fortalecer el estado de derecho y la
representación equitativa. Sin embargo, a pesar de estos avances institucionales,
Colombia continúa enfrentando desafíos significativos que afectan su estabilidad y
gobernabilidad. La persistente amenaza del narcotráfico, la corrupción endémica y
la violencia asociada con grupos armados ilegales son problemas que erosionan la
confianza pública en las instituciones y dificultan el desarrollo social y económico
del país.

El Acuerdo de Paz de 2016 con las FARC fue un hito crucial en los esfuerzos por
alcanzar una paz duradera, aunque su implementación ha sido compleja y
enfrenta resistencia en varios sectores de la sociedad. Además, la diversidad
étnica y cultural de Colombia presenta tanto oportunidades como retos en
términos de representación y equidad. La descentralización administrativa ha
permitido una mayor autonomía regional, pero también ha resaltado las
disparidades entre distintas regiones del país. En el ámbito internacional,
Colombia ha buscado fortalecer su política exterior mediante la cooperación y el
liderazgo en la región, enfrentando desafíos globales como la migración y el
cambio climático. En resumen, el sistema político colombiano es una entidad
dinámica y multifacética que ha logrado importantes avances en términos de
democratización y justicia social, pero que aún debe superar profundas
dificultades internas para consolidar una paz sostenible y un desarrollo inclusivo.
La capacidad del sistema para adaptarse y responder a estos desafíos será crucial
para su futuro, requiriendo tanto reformas institucionales continuas como un
compromiso renovado de todos los actores sociales y políticos.

Discusiones

El sistema político colombiano, aunque basado en principios democráticos sólidos,

enfrenta múltiples desafíos que requieren una atención continua y reformas
estratégicas. La Constitución de 1991 marcó un punto de inflexión significativo,
promoviendo la descentralización, la participación ciudadana y la protección de los
derechos humanos. Sin embargo, la implementación de estas reformas ha sido
dispareja, y diversas regiones del país siguen experimentando desigualdades
marcadas. La presencia persistente del narcotráfico y de grupos armados ilegales
representa una amenaza constante para la estabilidad política y social, afectando
negativamente la gobernabilidad y la confianza en las instituciones públicas.

La corrupción endémica es otro problema crítico. A pesar de los esfuerzos por

mejorar la transparencia y la rendición de cuentas, la corrupción sigue siendo un
obstáculo importante que socava el desarrollo económico y social. Los recientes
escándalos de corrupción han puesto de manifiesto la necesidad de fortalecer los
mecanismos de control y supervisión, así como de promover una cultura de
integridad y ética en la administración pública.

El Acuerdo de Paz de 2016 con las FARC fue un paso crucial hacia la pacificación
del país, pero su implementación ha sido desigual. Existen áreas donde los
excombatientes han sido reintegrados exitosamente, mientras que en otras
persisten problemas de violencia y falta de oportunidades económicas. La justicia
transicional, aunque avanzada, aún enfrenta críticas y desafíos en cuanto a su
alcance y efectividad.
DISCUSIONES Y RECOMENDACIONES.

La diversidad étnica y cultural de Colombia presenta tanto oportunidades como

retos. La inclusión de comunidades indígenas y afrocolombianas en el sistema
político ha mejorado, pero aún hay mucho por hacer para garantizar una
representación y participación equitativas. Las políticas de multiculturalismo deben
ser fortalecidas para asegurar que todas las voces sean escuchadas y respetadas.

Recomendaciones

1. Fortalecimiento de las Instituciones Democráticas:

• Es fundamental fortalecer las instituciones encargadas de la

transparencia y la rendición de cuentas, como la Procuraduría
General y la Contraloría General de la Nación. Implementar
tecnologías modernas de monitoreo y auditoría puede mejorar la
eficiencia y reducir la corrupción.

2. Reforma del Sistema Electoral:

• Considerar reformas que aseguren una mayor representación y

equidad en el sistema electoral, como la implementación de sistemas
de voto mixto o proporcional que reflejen mejor la diversidad política
y social del país.

3. Promoción de la Inclusión Social y Étnica:

• Aumentar los esfuerzos para incluir a las comunidades indígenas y

afrocolombianas en el proceso político, asegurando que tengan
acceso a oportunidades económicas y sociales equivalentes.
Programas de educación y capacitación enfocados en estas
comunidades pueden ser esenciales para lograr este objetivo.

4. Mejora de la Seguridad y Lucha contra el Narcotráfico:

• Continuar y fortalecer los esfuerzos integrales contra el narcotráfico,

incluyendo estrategias de desarrollo alternativo, cooperación
 internacional, y reformas en el sistema de justicia penal para
combatir de manera efectiva tanto la producción como el tráfico de
drogas.

5. Apoyo a la Implementación del Acuerdo de Paz:

• Aumentar los recursos y la coordinación para la implementación del

Acuerdo de Paz, asegurando que las regiones más afectadas por el
conflicto reciban el apoyo necesario para la reintegración y el
desarrollo socioeconómico.

6. Educación y Cultura Cívica:

• Fomentar una cultura de legalidad y participación cívica desde la

educación básica, promoviendo valores de integridad,
responsabilidad y compromiso social entre los ciudadanos.

7. Descentralización Efectiva:

• Revisar y fortalecer las políticas de descentralización para garantizar

que todas las regiones del país tengan los recursos y la capacidad
necesarios para gestionar sus propios asuntos de manera efectiva.
Esto incluye el fortalecimiento de las capacidades administrativas y
financieras de los gobiernos locales.

BIBLIOGRAFÍA

file:///C:/Users/SOPORTE/Downloads/Dialnet-
SistemaPoliticoYPartidosEnColombia-5263544%20(1).pdf

Constitución Política del 1991.

Material de estudio que el tutor compartió.

Biblioteca de la Universidad de Cartagena.