EL VIENTO RECIO

DE ORIENTE
—Reunión de Ministros—

Sábado, 28 de junio de 1997

Cali, Valle del Cauca, Colombia
NOTA AL LECTOR
Es nuestra intención hacer una transcripción fiel y
exacta de este Mensaje, tal como fue predicado; por lo
tanto, cualquier error en este escrito es estrictamente
error de audición, transcripción e impresión, y no debe
interpretarse como errores del Mensaje.
El texto contenido en esta conferencia puede ser
verificado con las grabaciones del audio o del video.
Este folleto debe ser usado solamente para
propósitos personales de estudio hasta que sea publicado
formalmente.
 EL VIENTO RECIO DE ORIENTE
(Reunión de Ministros)

Dr. William Soto Santiago

Sábado, 28 de junio de 1997
Cali, Valle del Cauca, Colombia

M uy buenas tardes, amados ministros compañeros

en esta Edad de la Piedra Angular y Dispensación
del Reino. Es para mí una bendición grande estar con
ustedes en esta ocasión, para compartir unos momentos
de compañerismo ministerial alrededor de la Palabra de
Dios, y así ver dónde estamos en el campo ministerial, en
la Edad de la Piedra Angular y Dispensación del Reino.
Quiero leer una Escritura aquí en el Éxodo, capítulo
14… Vamos a ver aquí; esto es luego que el pueblo hebreo
salió de Egipto. Vean ustedes, el verso… capítulo 13,
verso 21 y 22, nos dice:
“Y Jehová iba delante de ellos de día en una columna
de nube para guiarlos por el camino, y de noche en
una columna de fuego para alumbrarles, a fin de que
anduviesen de día y de noche (Éxodo, capítulo 13, verso
21 y 22 estamos leyendo).
Nunca se apartó de delante del pueblo la columna de
nube de día, ni de noche la columna de fuego”.
4 Dr. William Soto Santiago
Ahora, vamos al [capítulo] 14:
“Habló Jehová a Moisés, diciendo:
Di a los hijos de Israel que den la vuelta y acampen
delante de Pi-hahirot, entre Migdol y el mar hacia
Baal-zefón; delante de él acamparéis junto al mar.
Porque Faraón dirá de los hijos de Israel: Encerrados
están en la tierra, el desierto los ha encerrado.
Y yo endureceré el corazón de Faraón para que los siga;
y seré glorificado en Faraón y en todo su ejército, y sabrán
los egipcios que yo soy Jehová. Y ellos lo hicieron así.
Y fue dado aviso al rey de Egipto, que el pueblo huía;
y el corazón de Faraón y de sus siervos se volvió contra
el pueblo, y dijeron: ¿Cómo hemos hecho esto de haber
dejado ir a Israel, para que no nos sirva?
Y unció su carro, y tomó consigo su pueblo;
y tomó seiscientos carros escogidos, y todos los carros
de Egipto, y los capitanes sobre ellos.
Y endureció Jehová el corazón de Faraón rey de
Egipto, y él siguió a los hijos de Israel; pero los hijos de
Israel habían salido con mano poderosa.
Siguiéndolos, pues, los egipcios, con toda la caballería
y carros de Faraón, su gente de a caballo, y todo su
ejército, los alcanzaron acampados junto al mar, al lado
de Pi-hahirot, delante de Baal-zefón.
Y cuando Faraón se hubo acercado, los hijos de Israel
alzaron sus ojos, y he aquí que los egipcios venían tras
ellos; por lo que los hijos de Israel temieron en gran
manera, y clamaron a Jehová.
Y dijeron a Moisés: ¿No había sepulcros en Egipto,
que nos has sacado para que muramos en el desierto?
¿Por qué has hecho así con nosotros, que nos has sacado
de Egipto?
El viento recio de oriente 5
¿No es esto lo que te hablamos en Egipto, diciendo:
Déjanos servir a los egipcios? Porque mejor nos fuera
servir a los egipcios, que morir nosotros en el desierto.
Y Moisés dijo al pueblo: No temáis; estad firmes, y ved
la salvación que Jehová hará hoy con vosotros; porque
los egipcios que hoy habéis visto, nunca más para siempre
los veréis.
Jehová peleará por vosotros, y vosotros estaréis
tranquilos.
Entonces Jehová dijo a Moisés: ¿Por qué clamas a
mí? Di a los hijos de Israel que marchen.
Y tú alza tu vara, y extiende tu mano sobre el mar, y
divídelo, y entren los hijos de Israel por en medio del mar,
en seco.
Y he aquí, yo endureceré el corazón de los egipcios
para que los sigan; y yo me glorificaré en Faraón y en
todo su ejército, en sus carros y en su caballería;
y sabrán los egipcios que yo soy Jehová, cuando me
glorifique en Faraón, en sus carros y en su gente de a
caballo.
Y el ángel de Dios que iba delante del campamento
de Israel, se apartó e iba en pos de ellos; y asimismo la
columna de nube que iba delante de ellos se apartó y se
puso a sus espaldas,
e iba entre el campamento de los egipcios y el
campamento de Israel; y era nube y tinieblas para
aquellos, y alumbraba a Israel de noche, y en toda aquella
noche nunca se acercaron los unos a los otros.
Y extendió Moisés su mano sobre el mar, e hizo
Jehová que el mar se retirase por recio viento oriental
toda aquella noche; y volvió el mar en seco, y las aguas
quedaron divididas.
6 Dr. William Soto Santiago
Entonces los hijos de Israel entraron por en medio del
mar, en seco, teniendo las aguas como muro a su derecha
y a su izquierda.
Y siguiéndolos los egipcios, entraron tras ellos hasta
la mitad del mar, toda la caballería de Faraón, sus carros
y su gente de a caballo.
Aconteció a la vigilia de la mañana (o sea, en la
cuarta vigilia), que Jehová miró el campamento de los
egipcios desde la columna de fuego y nube, y trastornó el
campamento de los egipcios,
y quitó las ruedas de sus carros, y los trastornó
gravemente. Entonces los egipcios dijeron: Huyamos de
delante de Israel, porque Jehová pelea por ellos contra
los egipcios.
Y Jehová dijo a Moisés: Extiende tu mano sobre el
mar, para que las aguas vuelvan sobre los egipcios, sobre
sus carros, y sobre su caballería.
Entonces Moisés extendió su mano sobre el mar, y
cuando amanecía, el mar se volvió en toda su fuerza, y
los egipcios al huir se encontraban con el mar; y Jehová
derribó a los egipcios en medio del mar.
Y volvieron las aguas, y cubrieron los carros y la
caballería, y todo el ejército de Faraón que había entrado
tras ellos en el mar; no quedó de ellos ni uno”.
Y vamos a ver, hay un lugar en donde nos habla
acerca… Vamos a ver… el verso 4 del capítulo 15, dice…;
este es el cántico que tuvieron allí Moisés y los hijos de
Israel.
Vamos a ver el verso 1 en adelante, vamos a seguir
leyendo, dice [Éxodo]:
“Entonces cantó Moisés y los hijos de Israel este
cántico a Jehová, y dijeron:
El viento recio de oriente 7
Cantaré yo a Jehová, porque se ha magnificado
grandemente;
Ha echado en el mar al caballo y al jinete.
Jehová es mi fortaleza y mi cántico,
Y ha sido mi salvación.
Este es mi Dios, y lo alabaré;
Dios de mi padre, y lo enalteceré.
Jehová es varón de guerra;
Jehová es su nombre.
Echó en el mar los carros de Faraón y su ejército;
Y sus capitanes escogidos fueron hundidos en el
Mar Rojo.
Los abismos los cubrieron;
Descendieron a las profundidades como piedra.
Tu diestra, oh Jehová, ha sido magnificada en
poder;
Tu diestra, oh Jehová, ha quebrantado al
enemigo.
Y con la grandeza de tu poder has derribado a los
que se levantaron contra ti.
Enviaste tu ira; los consumió como a hojarasca.
Al soplo de tu aliento se amontonaron las aguas;
Se juntaron las corrientes como en un montón;
Los abismos se cuajaron en medio del mar.
El enemigo dijo:
Perseguiré, apresaré, repartiré despojos;
Mi alma se saciará de ellos;
Sacaré mi espada, los destruirá mi mano.
Soplaste con tu viento; los cubrió el mar;
Se hundieron como plomo en las impetuosas aguas.
¿Quién como tú, oh Jehová, entre los dioses?
¿Quién como tú, magnífico en santidad,
8 Dr. William Soto Santiago
Terrible en maravillosas hazañas, hacedor de
prodigios?
Extendiste tu diestra;
La tierra los tragó.
Condujiste en tu misericordia a este pueblo que
redimiste;
Lo llevaste con tu poder a tu santa morada.
Lo oirán los pueblos, y temblarán;
Se apoderará dolor de la tierra de los filisteos.
Entonces los caudillos de Edom se turbarán;
A los valientes de Moab les sobrecogerá temblor;
Se acobardarán todos los moradores de Canaán.
Caiga sobre ellos temblor y espanto;
A la grandeza de tu brazo enmudezcan como una
piedra;
Hasta que haya pasado tu pueblo, oh Jehová,
Hasta que haya pasado este pueblo que tú
rescataste.
Tú los introducirás y los plantarás en el monte de
tu heredad,
En el lugar de tu morada, que tú has preparado,
oh Jehová,
En el santuario que tus manos, oh Jehová, han
afirmado.
Jehová reinará eternamente y para siempre.
Porque Faraón entró cabalgando con sus carros y
su gente de a caballo en el mar, y Jehová hizo volver
las aguas del mar sobre ellos; mas los hijos de Israel
pasaron en seco por en medio del mar.
Y María la profetisa, hermana de Aarón, tomó un
pandero en su mano, y todas las mujeres salieron en pos
de ella con panderos y danzas.
El viento recio de oriente 9
Y María les respondía:
Cantad a Jehová, porque en extremo se ha
engrandecido;
Ha echado en el mar al caballo y al jinete.
E hizo Moisés que partiese Israel del Mar Rojo, y
salieron al desierto de Shur; y anduvieron tres días por
el desierto sin hallar agua”.
Ahora, miren aquí algo que nos da aquí una idea muy
clara, dice:
“Jehová reinará eternamente y para siempre.
Porque Faraón entró cabalgando con sus carros y
su gente de a caballo en el mar, y Jehová hizo volver las
aguas del mar sobre ellos; mas los hijos de Israel pasaron
en seco por en medio del mar”.
Vamos a ver si captamos lo que les quiero decir aquí.
¿Quiénes entraron en el mar? Faraón y su ejército. Y el
verso 28 del capítulo 14 dice [Éxodo]:
“Y volvieron las aguas, y cubrieron los carros y la
caballería, y todo el ejército de Faraón que había entrado
tras ellos en el mar; no quedó de ellos…”.
¿Qué le pasaría a Faraón? Después no se dice nada
más de Faraón, ¿verdad? Como que allí pues terminó no
solamente su ejército, como que también terminó a Faraón;
porque dice que Faraón había entrado cabalgando con su
ejército, pero en ningún sitio dice que logró salir; más bien
lo que la Escritura dice: que no escapó ni uno, dice:
“… no quedó de ellos ni uno”.
Si dijera que quedó uno, pues sería Faraón. Pero parece
que Faraón iba frente al ejército, lo más seguro, así que el
menos posibilidad que tuvo para salir fue él, porque era el
primero; por lo tanto, cuando iban a tratar de escapar era
el último.
10 Dr. William Soto Santiago
O sea que ahí lo que nos muestra es que hasta allí
llegó Faraón con su ejército; o sea que Egipto quedó en
ruinas, y de ahí en adelante ya no quedó nada allí del
gobierno del faraón. De seguro vino otro rey, otros reyes,
y se aprovecharon de la situación; porque al ver que ya
estaba débil Egipto, cualquier otro rey vecino podía tomar
a Egipto.
Eso hay que buscarlo en la historia, ver en la historia
cómo fue todo eso; y si Faraón (según la historia), el
faraón de ese tiempo si logró salir, aunque fuera nadando,
y…; porque aquí dice que entró Faraón con su ejército,
y después dice la Escritura que no escapó ni uno; eso es
para decir, como diríamos nosotros: “No escapó ni uno;
o sea que no dio, no hubo ni oportunidad para el faraón
escapar”, porque siempre trataba de escapar pues era el
rey; y ahí pues, si no escapó ni uno…, si Faraón entró,
pues entonces no pudo salir.
Ahora, ese fue pues el tipo y figura del anticristo, y de
lo que Cristo hará con el imperio del anticristo en el Día
Postrero.
¿No dice que con el resplandor de Su Venida el
anticristo dejará de existir? Y en Isaías, capítulo 11,
verso 4, ¿qué dice ahí del anticristo? En Segunda de
Tesalonicenses, capítulo 2, dice que con el resplandor de
Su Venida y con el Espíritu de Su boca…
Vamos a ver, estas dos Escrituras son las mismas,
pero son habladas en diferentes tiempos y en diferentes
dispensaciones; y ahí, al ser habladas en esa forma, pues
se le saca más provecho.
Pablo dice… Segunda de Tesalonicenses, capítulo 2,
versos… dice… Miren de lo que habla Pablo; yo creo que
lo podemos leer completo [verso 1]:
El viento recio de oriente 11
“Pero con respecto a la venida de nuestro Señor
Jesucristo, y nuestra reunión con él, os rogamos,
hermanos,
que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de
pensar, ni os conturbéis, ni por espíritu, ni por palabra, ni
por carta como si fuera nuestra…”.
Parece que algunos les escribían como si fuera San
Pablo escribiendo, o podían decir: “Por carta San Pablo
ha dicho tal cosa, predicó tal cosa”. Y vamos a ver:
“… en el sentido de que el día del Señor está cerca”.
Pues estaban viviendo en el primero de los días
postreros, y parece que hubo muchos en aquel tiempo que
estaban diciendo que estaban viviendo ya en el Día del
Señor; y todavía faltaban dos mil años.
Porque el Día del Señor es el séptimo milenio; y es
para el Día del Señor la promesa de la Segunda Venida de
Cristo. Por eso les habla aquí:
“Pero con respecto a la venida de nuestro Señor
Jesucristo, y nuestra reunión con él”.
Nuestra reunión al surgir el llamado de la Gran Voz de
Trompeta; y ser llamados y juntados en una nueva edad y
en una nueva dispensación, para ser transformados y ser
raptados, e ir a la Cena de las Bodas del Cordero en el
Cielo, y estar siempre con el Señor. Todo ese Programa
corresponde al Día del Señor, que es el séptimo milenio.
Y ahora, sigue diciendo:
“Nadie os engañe en ninguna manera; porque no
vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el
hombre de pecado, el hijo de perdición,
el cual se opone y se levanta contra todo lo que se
llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el
templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios.
12 Dr. William Soto Santiago
¿No os acordáis que cuando yo estaba todavía con
vosotros, os decía esto?
Y ahora vosotros sabéis lo que lo detiene, a fin de que
a su debido tiempo se manifieste.
Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad;
solo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su
vez sea quitado de en medio.
Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el
Señor matará con el espíritu de su boca (esa es la Palabra,
la Espada de dos filos), y destruirá con el resplandor de su
venida;
inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con
gran poder y señales y prodigios mentirosos,
y con todo engaño de iniquidad para los que se
pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad
para ser salvos.
Por esto Dios les envía un poder engañoso, para que
crean la mentira,
a fin de que sean condenados todos los que no creyeron
a la verdad, sino que se complacieron en la injusticia”.
Ahora miren, aquí dice que lo matará con el Espíritu
de Su boca y lo destruirá con el resplandor de Su Venida.
Y en Isaías, capítulo 11, vamos a ver lo que aquí
nos dice. Capítulo 11, verso 4, nos dice de la siguiente
manera… Vamos a leer desde el verso 1 para que tengamos
el cuadro claro, ya que este es un pasaje mesiánico; dice:
“Saldrá una vara del tronco de Isaí, y un
vástago retoñará de sus raíces.
Y reposará sobre él el Espíritu de Jehová; espíritu de
sabiduría y de inteligencia, espíritu de consejo y de poder,
espíritu de conocimiento y de temor de Jehová.
Y le hará entender diligente en el temor de Jehová. No
El viento recio de oriente 13
juzgará según la vista de sus ojos, ni argüirá por lo que
oigan sus oídos;
sino que juzgará con justicia a los pobres, y argüirá
con equidad por los mansos de la tierra; y herirá la tierra
con la vara de su boca, y con el espíritu de sus labios
matará al impío”.
¿Ven? Y eso nos envía tanto a Segunda de
Tesalonicenses, capítulo 2, como también a Apocalipsis,
capítulo 19: vean aquí, donde nos dice de la siguiente
manera; dice [verso 11]:
“Entonces vi el cielo abierto; y he aquí un caballo
blanco, y el que lo montaba se llamaba Fiel y Verdadero,
y con justicia juzga y pelea”.
Y aquí nos habla acerca de juzgar [Isaías]:
“No juzgará según la vista de sus ojos, ni argüirá por
lo que oigan sus oídos”.
También, el verso 5 dice [Isaías 11]:
“Y será la justicia cinto de sus lomos, y la fidelidad
ceñidor de su cintura”.
Y en Apocalipsis, capítulo 1, lo encontramos con Su
cinto de oro como Juez; y Su cinto de oro mostrando Su
justicia.
“Y será la justicia cinto de sus lomos”.
O sea que ese cinto sobre Sus lomos, que lo representa
a Él como Juez, es representación de Su justicia; porque el
cinto de Sus lomos será Su justicia.
“Y será la justicia cinto de sus lomos, y la fidelidad
ceñidor de su cintura”.
Sigue diciendo [Apocalipsis 19:12]:
“Sus ojos eran como llama de fuego, y había en su
cabeza muchas diademas; y tenía un nombre escrito que
ninguno conocía sino él mismo (o sea, es un nombre nuevo).
14 Dr. William Soto Santiago
Estaba vestido de una ropa teñida en sangre; y su
nombre es: El Verbo de Dios.
Y los ejércitos celestiales, vestidos de lino finísimo,
blanco y limpio, le seguían en caballos blancos.
De su boca sale una espada aguda, para herir con ella
a las naciones…”.
Ese es el Espíritu de Su boca; y esa es la Palabra de
Dios, el Espíritu de la boca de Cristo.
“… y él las regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar
del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso.
Y en su vestidura y en su muslo tiene escrito este
nombre: Rey de reyes y Señor de señores”.
O sea que como Rey de reyes y Señor de señores Él
también es el Juez de toda la Tierra.
Y podemos ver lo que eso significa para este Día
Postrero. Vean, si ustedes buscan aquí en Apocalipsis,
capítulo 2, versos 26 al 27, dice:
“Al que venciere y guardare mis obras hasta el fin, yo
le daré autoridad sobre las naciones,
y (él) las regirá con vara de hierro, y serán quebrantadas
como vaso de alfarero; como yo también la he recibido de
mi Padre”.
Vean cómo transfiere Cristo todo lo que ha recibido
del Padre; como Él lo ha recibido del Padre, ahora Él dice
que Él le dará, le dará esa autoridad:
“Al que venciere y guardare mis obras hasta el fin, yo
le daré autoridad sobre las naciones,
y las regirá con vara de hierro, y serán quebrantadas
como vaso de alfarero; como yo también la he recibido de
mi Padre”.
Ahora podemos ver que eso nos habla del Día
Postrero, del Día del Señor, del séptimo milenio, y de la
El viento recio de oriente 15
manifestación de Jesucristo, el Hijo de David, la Simiente
de David, el Retoño de David, de la Casa de David o de
Isaí; y nos habla de la manifestación de Cristo para el
tiempo final.
Ahora miren, vendrá una apretura, como vino una
apretura allí frente al mar para el pueblo hebreo. En
palabras más claras: el corazón del anticristo va a ser
endurecido, como fue endurecido el corazón del faraón;
pero Dios abrirá camino para los escogidos de Dios. El
enemigo vendrá como río, pero Dios levantará bandera en
contra de él1.
Y ahora, miren, encontramos que Moisés extendió su
vara… su mano, con la vara en su mano, o sea, extendió
su mano con la vara (la vara representa la Palabra);
y eso nos habla del ministerio de Jesucristo con Sus
Ángeles para el Día Postrero, donde estará el ministerio
de Moisés y el ministerio de Jesús manifestados aquí en
la Tierra.
Y vean, Moisés… vamos a ver dónde está; vamos a
buscarlo aquí en las últimas páginas de la Biblia, vamos a
ver dónde está Moisés. Miren dónde está Moisés: está por
esta… ¿Cuál es, Miguel? ¿Por esta parte es? La entrada…
pasan por aquí, ¿verdad? El Mar Rojo se…, aquí, por el
golfo de Suez; y están aquí, están en la parte oeste, porque
van a pasar hacia el este.
Y vean ustedes, del este viene un viento recio (un
viento oriental pues es un viento del este); y con ese viento
oriental, luego que Moisés extendió su mano con la vara
y habló, vean ustedes, se abrió durante toda esa noche el
mar, se abrió, y hubo un camino para el pueblo hebreo
pasar: pasó el pueblo hebreo.
1 Isaías 59:19
16 Dr. William Soto Santiago
Cuando ya amanecía el pueblo hebreo, miren ustedes,
estaba ya pasando; y los egipcios trataron también de
pasar, para matar, para destruir al pueblo hebreo.
Pero Dios comenzó, cuando estaba amaneciendo
(o sea, en la cuarta vigilia), comenzó a trastornar las
ruedas de los carros de caballos, y con un trastorno así
no podían seguir adelante; o sea, se volvió una confusión.
No tenían… quizás no tenían lo que nosotros le llamamos
gato, como tenemos en los carros, para…; aunque no tenían
que ponerle, echarle aire ni nada; pero si no llevaban una
repuesta, y si el eje se les partía, ahí quedaban. O sea que
comenzó una confusión allí; y fue Dios el que trajo esa
confusión sobre ellos.
Y luego, miren ustedes, Dios no cubrió a los egipcios
con las aguas del mar hasta que Moisés extendió su mano
con la vara. Miren, Dios le dijo a Moisés: “Ahora extiende
tu mano con la vara…”.
Vamos a ver… Capítulo 14 (por ahí) al 15 estábamos
leyendo; 14 dice… (No, no, es para cuando ya se está…).
La 27 dice… 26. Bueno, vamos a comenzar el [verso] 24
entonces; dice:
“Aconteció a la vigilia de la mañana…”.
No dice en qué hora, pero “a la vigilia de la mañana”, o
sea, de 6:00 a 9:00. Miren los grandes eventos que ocurren
en la [cuarta] vigilia.
“Aconteció a la vigilia de la mañana, que Jehová miró
el campamento de los egipcios desde la columna de fuego
y nube, y trastornó el campamento de los egipcios,
y quitó las ruedas de sus carros, y los trastornó
gravemente. Entonces los egipcios dijeron: Huyamos de
delante de Israel, porque Jehová pelea por ellos contra
los egipcios.
El viento recio de oriente 17
Y Jehová dijo a Moisés: Extiende tu mano sobre el
mar, para que las aguas vuelvan sobre los egipcios, sobre
sus carros, y sobre su caballería.
Entonces Moisés extendió su mano sobre el mar, y
cuando amanecía, el mar se volvió en toda su fuerza, y
los egipcios al huir se encontraban con el mar; y Jehová
derribó a los egipcios en medio del mar.
Y volvieron las aguas, y cubrieron los carros y la
caballería, y todo el ejército de Faraón que había entrado
tras ellos en el mar; no quedó de ellos ni uno (como
decimos nosotros: ‘No quedó de ellos ni el gato’)”.
Ahora, miren cómo para ser abierto el mar Dios le dijo
a Moisés: “Extiende tu mano con la vara”; y cuando fue
a ser cerrado el mar, Dios le dice nuevamente a Moisés:
“Extiende tu mano para que las aguas vengan sobre los
egipcios”, y así sucedió.
Vean ustedes cómo un solo hombre, pero con Dios,
venció al faraón con todo su ejército; y con una vara en
la mano. Ya no estaba con una espada, como antes estaba
allá como príncipe en Egipto, sino que ahora estaba con
una vara de pastor.
Con una vara de pastor Moisés venció al faraón con
todo su ejército; así como David con una vara, una honda
y una bolsita de echar las piedras de la honda, vino donde
Goliat y con una piedrecita en la honda venció a Goliat2;
porque Dios es glorificado en la simplicidad.
Cuando Dios promete hacer una cosa grande, vigilen,
porque va a hacerlo en forma sencilla.
¿Cómo Dios iba a libertar al pueblo hebreo? Todo
el mundo pensaba, quizás, el que no podía comprender:
“Bueno, se tendrá que traer un ejército grande”. No, si
2 1 Samuel 17:40-50
18 Dr. William Soto Santiago
lo que necesita es un solo hombre; pero ese solo hombre
tiene que ser el profeta mensajero correspondiente a ese
tiempo, donde esté el Espíritu de Dios manifestado, donde
Dios por consiguiente coloca Su Palabra creadora, la cual
puede hablar a existencia cosas y también puede hablar
fuera de existencia cosas.
Así que miren ustedes cómo Moisés, con la Palabra
que Dios colocó en su boca, habló fuera de existencia a
Faraón y a aquel ejército que allí estaba: “Estos egipcios
que ustedes ven hoy, ya nunca más los verán”; los habló
fuera de existencia, y ahora todo se iba a materializar para
que quedaran fuera de existencia.
Y miren, lo que era una protección para ellos: aquellos
cascos de bronce o de cobre o de hierro, y toda aquella
armadura, miren, fue la cosa más mala para ellos cuando
cayeron en el agua, porque eso no los dejaba nadar; y hasta
los caballos quedaron también con esos carros amarrados,
detrás de ellos: no pudieron ni salir de los caballos. Jinete,
caballo y carro, todo se quedó allí.
Ahora, podemos ver la forma sencilla en que Dios lo
hizo: un hombre con una vara; pero esa vara representaba
la Palabra de Dios.
Y está prometido que regresará nuevamente Moisés;
así que él vendrá con la Vara, y con esa Vara él obtendrá la
victoria.
Pero cualquier persona que sabe acerca de la
promesa de que Moisés regresará va a estar buscando
una vara literal; pero esa vara representaba la Palabra
de Dios.
Y él vendrá con la Palabra de Dios correspondiente
al séptimo milenio y a la séptima dispensación, que es el
Mensaje del Evangelio del Reino; y para donde él extienda
El viento recio de oriente 19
ese Mensaje, esa Vara, esa Palabra para juicio, el juicio
vendrá; y para donde la extienda hablando bendición,
bendición vendrá.
Ahora podemos ver cómo será todo en el Día Postrero
y las cosas que deben suceder en el Día Postrero.
Vean cómo el reino los gentiles, el reino del anticristo
para el Día Postrero —el cuál será el reino de los gentiles
que estará en las manos del anticristo, del hombre de
pecado, en el cual el diablo estará encarnado—, vean
ustedes cómo finalizará durante la gran tribulación.
Las plagas que vinieron a Egipto estarán siendo
actualizadas en medio del reino del anticristo, y los
juicios divinos estarán siendo manifestados. Y allí estarán
Moisés y Elías, los Dos Olivos; Moisés con la Vara de
Dios, la Palabra de Dios; y vean ustedes, estará también el
ministerio de Jesús ahí presente.
Y ahí se cumple: “Con el espíritu de su boca”; Cristo
con el Espíritu de Su boca y también con la Vara de hierro;
y se cumple: con la Espada que sale de Su boca; todo eso
nos habla de la Palabra. Y todo eso estará manifestado
plenamente durante la apretura y también durante la gran
tribulación.
Pero para los escogidos la Palabra será de bendición;
para el reino del anticristo será de juicios divinos siendo
manifestados sobre la Tierra.
Y así como terminó Faraón y su ejército, terminará
el hombre de pecado, el anticristo, con su ejército o sus
ejércitos también. Eso es lo que nos muestra el libro del
Apocalipsis.
Ahora, podemos ver que estamos en el tiempo final,
en el Día del Señor, en el Día Postrero, en el séptimo
milenio, en donde todas las grandes cosas prometidas para
20 Dr. William Soto Santiago
ser hechas por Dios serán hechas en forma sencilla, en
simplicidad.
Esa apretura está por venir; pero mientras tanto
disfrutamos este tiempo que tenemos, en el cual tenemos
mucha libertad para estar llevando el Mensaje por todos los
lugares, hasta que se complete el número de los escogidos
de Dios.
Vimos que por un fuerte viento del oriente, que vino
de oriente a occidente, fue que el mar se abrió. Y vean
ustedes, en el Mensaje del oriente, que es el Mensaje del
Evangelio del Reino para el Día Postrero, ¿a dónde viene?
Al occidente.
Porque aquel fuerte viento vino del oriente, vino a
donde estaba Moisés; y Moisés estaba al occidente, a la
parte del occidente; porque Egipto queda al oeste de la
tierra de Israel. La tierra de Israel está acá, Egipto está
acá; o sea que el oeste de Israel, miren, es hacia acá.
Es como cuando los magos dijeron: “Hemos visto Su
Estrella en el oriente”3; pues los magos estaban por…
vamos a ver, por acá (aquí parece que nos quedamos cortos
de mapa). Bueno, aquí lo tenemos: los magos estaban por
acá; e Israel, Israel está acá; o sea que Israel queda al
oeste de Babilonia, porque Babilonia está más al este. Y
los magos estando acá miraron hacia el oeste, o sea, hacia
el occidente; y ellos estaban en el oriente; así que ellos
vieron (estando aquí en el oriente), ellos vieron la Estrella
del Mesías, y la vieron hacia el oeste.
Y para el Día Postrero, desde el oriente mirarán hacia el
occidente para ver también la señal del Hijo del Hombre en el
cielo, y ver en el occidente la Venida del Señor Jesucristo con
Sus Ángeles siendo cumplida en medio de Su Iglesia gentil.
3 San Mateo 2:1-2
El viento recio de oriente 21
Así que vean ustedes la forma para el pueblo hebreo
mirar y ver lo mismo que vieron aquellos magos.
Pero recuerden que cuando eso sucedió allá hubo
muchas personas que no vieron lo que estaba pasando
en medio del pueblo hebreo, estando ellos en medio del
pueblo hebreo; pero hubo un grupo que sí vio lo que
estaba sucediendo y recibió la Venida del Mesías naciendo
en Belén de Judea.
O sea que siempre hubo un grupo que sí entendió lo
que estaba pasando en el Programa de Dios; como también
en el occidente habrá un grupo, en el Día Postrero, que
sabrá lo que está sucediendo en el Programa Divino con
relación a la Venida del Hijo del Hombre con Sus Ángeles:
ese grupo estaría en la América Latina y el Caribe.
Miren cómo más abajo de Jerusalén, por allí estaba
Belén de Judea; y vean cómo más abajo de Norteamérica
y también de Tucson, Arizona, está la América Latina y el
Caribe.
Ahora, en Jerusalén no sabían nada de la Venida del
Mesías. Todo lugar, para nuestro tiempo, señalado por
nuestro hermano Branham como Jerusalén o como Jericó,
pues no sabrán nada de lo que estará sucediendo en medio
de la Iglesia del Señor Jesucristo, en la Edad de la Piedra
Angular y Dispensación del Reino, hasta que ya sea a lo
último; a lo último pues se darán cuenta.
Y todos los creyentes en el Mensaje del precursor de
la Segunda Venida de Cristo, que hasta el momento no
han entendido el Programa de Dios correspondiente al Día
Postrero, a la Edad de la Piedra Angular y Dispensación
del Reino, en medio de los latinoamericanos y caribeños;
si tienen sus nombres escritos en el Libro de la Vida del
Cordero y permanecen vivos para cuando los muertos
22 Dr. William Soto Santiago
en Cristo resuciten, ellos obligatoriamente tendrán que
creer para poder ser transformados y raptados; porque no
pueden ser transformados y raptados sin primero ver y
recibir la Segunda Venida de Cristo con Sus Ángeles, y
obtener así el conocimiento del Séptimo Sello.
Y el conocimiento del Séptimo Sello lo dan los Siete
Truenos de Apocalipsis, que es la Voz de Cristo en Su
Venida.
Y los Siete Truenos dan la fe para el rapto; o sea que
sin la fe de rapto no hay transformación; y la fe de rapto
es la revelación de la Segunda Venida de Cristo como el
León de la tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de
señores, viniendo a Su Iglesia en el Día Postrero.
Así que los que esperan en otros continentes la
transformación y el rapto: no pueden ser transformados
y raptados sin primero ver la Venida de Cristo con Sus
Ángeles, como el León de la tribu de Judá, como Rey de
reyes y Señor de señores en Su Obra de Reclamo.
Vean ustedes todo lo que conlleva el estar esperando
la transformación y el rapto. Se requiere entonces que
la persona comprenda el orden para ser transformados
y raptados, y no ser ignorantes en cuanto a lo que está
establecido ya; porque este es el orden de la adopción.
Dice capítulo 4, verso 14 en adelante, dice [1
Tesalonicenses]:
“Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así
también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él.
Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que
nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la
venida del Señor”.
Nuestro hermano Branham, citando esta Escritura,
dice: “Nosotros los que vivimos, que hayamos quedado
El viento recio de oriente 23
hasta ver la Venida del Señor”4; pues aquí: “Que hayamos
quedado hasta la Venida del Señor”, o sea, hasta ver la
Venida del Señor.
Para los que van a ser transformados y raptados, esta
Escritura nos habla de estar aquí y ver la Venida del Señor;
para los que estarán vivos y no van a ser transformados,
pues estarán aquí pero no verán, no comprenderán, la
Venida del Señor; aunque esté cumplida y la vean, pero
viendo no verán y oyendo no comprenderán.
Como sucedió en la Primera Venida de Cristo: que
estaba allí el cumplimiento de la Primera Venida de
Cristo, el Mesías, el Rey de Israel, pero aquel pueblo
viendo no veía, o sea, no comprendía; no veía que Aquel
era el verdadero Mesías. No lo veía como su Rey, como su
Mesías, lo veía como un hombre común, un carpintero de
Nazaret que se estaba haciendo un profeta, que se estaba
haciendo el Mesías, el Rey de Israel; pero ellos decían:
“No reinará este sobre nosotros. Nosotros lo conocemos a
Él, sabemos que es de Nazaret y conocemos a sus padres:
a José y a María”5.
Pero miren, estaban equivocados al pensar que este
no era el Mesías; porque sí era el Mesías, el Ungido de
Dios con el Espíritu de Dios, para el cumplimiento de la
Primera Venida del Mesías como Cordero de Dios para
quitar el pecado del mundo allí en la Cruz del Calvario.
Pero vean cómo todo sucedió: El corazón del sumo
sacerdote fue endurecido, y el de aquellos sacerdotes (de
la mayoría de ellos) fue endurecido, y de los fariseos y
saduceos; y con un corazón endurecido no podía entrar esa
Palabra revelada al alma de ellos, por lo tanto, no podían
4 Citas, pág. 47, párr. 402
5 San Mateo 13:53-58; San Lucas 19:14
24 Dr. William Soto Santiago
ver —allí en el alma— el cumplimiento de la Venida del
Mesías en medio del pueblo hebreo.
Bueno, todo eso sucedió; y vean ustedes, todo fue en
forma sencilla, como también en el tiempo de Moisés.
Y vean ustedes cómo todo obró para bien, para que se
cumplieran esas profecías.
Vemos cómo también la rebeldía, endurecimiento
y mala actitud del faraón obró para bien, para la mano
poderosa de Dios manifestarse en juicio divino sobre el
faraón y su ejército y su gente; y cumplirse así lo que
Dios dijo al profeta y patriarca Abraham en el capítulo 15,
cuando le dijo a Abraham de la siguiente manera [Génesis
15:13]:
“Entonces Jehová dijo a Abram: Ten por cierto que tu
descendencia morará en tierra ajena, y será esclava allí,
y será oprimida cuatrocientos años.
Mas también a la nación a la cual servirán, juzgaré
yo…”.
O sea que el juicio divino vino sobre la nación egipcia,
bajo el ministerio ¿de quién? De Moisés.
El ministerio de Moisés trae juicio divino para el
pueblo que está señalado que recibirá el juicio divino,
pero trae bendición para el pueblo que está señalado para
recibir redención o liberación.
Y con mano fuerte Dios juzgaría a esa nación; dice:
“Mas también a la nación a la cual servirán, juzgaré
yo; y después de esto saldrán con gran riqueza.
Y tú vendrás a tus padres en paz, y serás sepultado en
buena vejez.
Y en la cuarta generación volverán acá; porque aún
no ha llegado a su colmo la maldad del amorreo hasta
aquí”.
El viento recio de oriente 25
Y ahí podemos ver…, y cómo la promesa de la
liberación del pueblo hebreo y los juicios divinos que
caerían sobre el pueblo opresor, que sería el pueblo
egipcio, vean ustedes cómo está condensado —todo lo
que iba a suceder allí— en estas palabras que le dio Dios
al profeta Abraham.
También dice: “Y saldrán con gran riqueza”. Y vean
ustedes cómo Moisés recibió la revelación divina de la
forma en que saldrían con gran riqueza; y era pidiendo a
los egipcios oro, plata, vestidos y todas esas cosas, para
que no se fueran con las manos vacías; porque habían
trabajado cuatrocientos… o 430 años llevaban ya allí en
Egipto, y en 430 años una persona debe haber hecho algo;
y si Dios los libertaba, iban a salir ricos de Egipto; y esa
era la forma en que iban a salir ellos ricos.
Bueno, podemos ver que todo lo que sucede con el
Israel terrenal, que es el pueblo de los siervos, es un reflejo
de lo que sucedería con el Israel celestial; y de edad en
edad va cumpliéndose lo que fue un reflejo en medio del
pueblo hebreo.
Y por eso es que para el Día Postrero, encontramos
que para la liberación del Israel celestial, para la
libertad gloriosa del Israel celestial, en donde seremos
libertados y en donde saldremos con vida eterna aun en
nuestro cuerpo físico…; porque obtendremos nuestra
transformación, que es la manifestación gloriosa de
los hijos de Dios, o sea, la adopción, la redención de
nuestro cuerpo, la transformación de nuestro cuerpo
para tener un cuerpo eterno; para volver así —los hijos
e hijas de Dios— a ser eternos en el cuerpo también,
y ser a imagen y semejanza de nuestro amado Señor
Jesucristo.
26 Dr. William Soto Santiago
Miren, como cuando Dios hizo a Adán a imagen y
semejanza Suya, él no moría, hasta que pecó.
Y ahora, Cristo está haciendo a Sus hijos a imagen y
semejanza Suya. De edad en edad ha estado haciéndonos la
imagen, o sea, el cuerpo teofánico, el cual recibimos cuando
recibimos a Cristo como nuestro Salvador y recibimos Su
Espíritu Santo; y luego nos hará Su semejanza, que es el
cuerpo eterno, el cuerpo glorificado que Él ha prometido
para cada uno de nosotros.
Vean, Dios primeramente le hizo el cuerpo telefónico
a Adán; y estuvo en ese cuerpo teofánico en la sexta
dimensión, ya nacido en la sexta dimensión en ese cuerpo
teofánico; y no sabemos cuántos años estuvo en él.
Y así es con los miembros del Cuerpo Místico de
Cristo, cuando vienen a Cristo y reciben Su Espíritu Santo:
ya están en la sexta dimensión con su cuerpo teofánico,
tienen su cuerpo teofánico de la sexta dimensión; y si
parten antes de ser transformados, permanecen en la
sexta dimensión viviendo, como vivió Adán en la sexta
dimensión, y como vivió Jesucristo en la sexta dimensión
antes de tener el cuerpo físico.
Pero luego, así como Dios le creó un cuerpo del polvo
de la tierra a Adán, un cuerpo el cual no tenía pecado, por
lo tanto, podía seguir viviendo por toda la eternidad en ese
cuerpo.
Y colocó en ese cuerpo a Adán, que es alma viviente,
el cual tenía también un cuerpo teofánico; luego lo colocó,
con ese cuerpo teofánico, colocó a Adán, que es un alma
viviente; la colocó dentro de ese cuerpo físico. Y allí
estaba Adán siendo alma (que es lo que es en realidad la
persona), y teniendo un cuerpo teofánico, que es el cuerpo
de la sexta dimensión, que es el espíritu de la persona;
El viento recio de oriente 27
y luego teniendo un cuerpo físico, que es el cuerpo o
vestidura exterior.
Porque el ser humano fue creado espíritu… es alma,
espíritu y cuerpo; parecen tres, pero es uno solo. Así como
Dios parece ser tres, pero es ¿cuántos? Uno solo.
“En el principio era el Verbo, y el Verbo era con
Dios, y el Verbo era Dios”6; pero se ven como dos: “El
Verbo era en el principio con Dios (ahí se ven como dos),
y el Verbo era Dios”; y luego cuando el Verbo se hizo
carne, ahora se ven tres. Pero era Emanuel, que traducido
es: Dios con nosotros7; Dios con un cuerpo teofánico en
el cual vivió; y fue lo primero que Dios creó, y lo creó
para Sí mismo.
Y luego Dios vino y se hizo un cuerpo físico: creando
una célula de vida, de sangre, allí en el vientre de María,
la cual se multiplicó célula sobre célula, y se formó el
cuerpo físico de Dios: Emanuel, para vivir entre los seres
humanos el Jehová del Antiguo Testamento, el cual dijo en
una ocasión: “Antes que Abraham fuera, Yo soy. Abraham
deseó ver mi día; lo vio, y se gozó”8.
Y Juan el Bautista dijo: “Después de mí viene Uno, del
cual yo no soy digno de desatar la correa de Su calzado,
el cual (dijo) es antes de mí”9. Y había nacido ese cuerpo
físico después de Juan; pero el que estaba dentro de ese
cuerpo físico era antes que Juan el Bautista, era antes que
Abraham y era antes que Adán también, porque era Dios
dentro de Su cuerpo teofánico; y luego, cuando se hizo
carne, pues dentro de Su cuerpo de carne. Y dentro de ese

6 San Juan 1:1

7 San Mateo 1:23
8 San Juan 8:56-58
9 San Marcos 1:7, San Juan 1:26-27
28 Dr. William Soto Santiago
cuerpo de carne estaba con el cuerpo teofánico; por eso
fue el Ángel de Jehová.
Cuando se habla del Ángel de Jehová es Dios con Su
cuerpo teofánico. Y el Ángel de Jehová, vean ustedes,
estaba dentro del velo de carne llamado Jesús.
Ahora podemos ver cómo fue todo eso y cómo
aparecen… o algunas personas pueden decir: “Son tres”;
pero cuando uno mira bien, uno ve que es Dios con Su
cuerpo teofánico dentro de Su cuerpo de carne.
“Muéstranos al Padre, y nos basta”, le dice Felipe.
Jesús dice: “¿Tanto tiempo hace, Felipe, que estoy con
ustedes, con vosotros, y todavía no me has conocido?
¿No sabes que yo estoy en el Padre y el Padre en mí? (o
viceversa)”10. ¿Cómo es que lo dice, Miguel? “Y el que
me ha visto a mí, ha visto al Padre”. O sea que estaban
viendo al Padre velado en carne humana, estaban viendo
el velo de carne.
Pero dice también [San Juan 1:18 - RVR-1909]:
“A Dios nadie le vió jamás: el unigénito Hijo, que está
en el seno del Padre, él le declaró”.
Era la declaración del Dios Creador de los Cielos y
de la Tierra a través de carne humana, metido en ese velo
de carne el cuerpo teofánico de Dios; y el mismo Dios,
dentro de Su cuerpo teofánico, metido en ese cuerpo de
carne. Por eso las cosas que Jesús hacía no las podía hacer
cualquier hombre si Dios no era con él, y si Dios no era en
él.
Ahora podemos ver todo lo que sucedió allá; y podemos
ver que eso había sido prometido para ser cumplido, para ser
manifestado, en aquel tiempo. Y se cumplió en una forma
tan sencilla: a través de un joven carpintero de Nazaret, el
10 San Juan 14:8-10
El viento recio de oriente 29
cual fue despreciado, rechazado, por los grandes líderes
religiosos del pueblo hebreo, pensando ellos que era un
impostor, que era un hombre loco, un joven loco, que se
estaba queriendo hacer pasar por el Mesías.
Pero ¿cómo se podía saber si era o no era el Mesías?
Cristo dijo: “Si yo no hago las obras de mi Padre, no me
crean; pero si las hago, pues crean a las obras, si ustedes
no pueden creer en mí”11. O sea que las cosas que Dios dijo
que iba a hacer en la Primera Venida del Mesías estaban
siendo hechas por Jesús de Nazaret; nadie más las estaba
haciendo, ni las podía hacer.
O sea que las cosas que Dios había prometido que
haría a través del Mesías estaban siendo hechas a través de
Jesús; por lo tanto, el que estaba en Jesús era nada menos
que el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, el Ángel de
Jehová, haciendo esas cosas que había Él prometido.
Y ahora, miren cómo tratan a Jesús: lo tratan más mal
que a Juan el Bautista.
Jesús, encontramos que continuó hacia adelante con
Su ministerio, aunque los grandes líderes religiosos del
pueblo hebreo lo rechazaron. A cualquier persona le podía
desanimar esto, pero a Jesús no; Jesús dijo que debía
ser así. Él dijo que tenían que estar ciegos para que se
cumpliera la profecía de Isaías; y así viendo no vieran,
y oyendo no entendieran, y se convirtieran y Dios los
salvara12.
Si el pueblo hebreo creía en Jesús, sus líderes religiosos
y políticos creían en Jesús y lo recibían, lo iban a colocar
sobre el Trono de David, lo iban a coronar, y el Milenio
tenía que comenzar; pero faltaban muchos años, unos dos
11 San Juan 10:37-38
12 San Mateo 13:10-15
30 Dr. William Soto Santiago
mil años para llegar el séptimo milenio, que es el milenio
en donde la Segunda Venida de Cristo como el Rey de
reyes y Señor de señores, y el León de la tribu de Judá, se
cumple, o sea, donde la Venida de Cristo se cumple.
En el tiempo de la Primera Venida de Cristo no se estaba
viviendo en el séptimo milenio, en el Día del Señor; por
lo tanto, no podía Cristo hacer las cosas correspondientes
a Su Segunda Venida; por eso se detuvo allí en Isaías,
capítulo 61, verso 2, en donde dijo: “Y a predicar el año
de la buena voluntad de Jehová”13.
No continuó leyendo, porque el resto decía: “Y el día
de venganza del Dios nuestro”; porque el día de venganza
es para ser predicado en este Día Postrero, en el Día del
Señor, en el séptimo milenio, en la Venida del Señor, en
la Venida del Hijo del Hombre con Sus Ángeles como el
León de la tribu de Judá, como Rey de reyes y Señor de
señores en Su Obra de Reclamo.
Ahora vean cómo cada cosa tiene su lugar en el
Programa Divino.
Por eso es que el Mensaje del Evangelio del Reino,
que es el Mensaje para el pueblo hebreo, es el Mensaje
para el oriente; viene al occidente como un viento recio.
Y en el momento de la apretura estará abierto el mar,
que nos habla de la muerte, como el Jordán también nos
habla de la muerte.
Vean ustedes cómo Moisés abrió el Mar Rojo y luego
lo cerró; y luego Josué abrió el Jordán, y luego Elías abrió
el Jordán también, y luego Eliseo abrió el Jordán también.
Y ahora, para el Día Postrero viene el ministerio de
Moisés para abrir el Mar Rojo o lo que representa el
Mar Rojo en este tiempo final; porque la muerte querrá
13 San Lucas 4:16-21
El viento recio de oriente 31
destruir a los escogidos de Dios, pero se abrirá paso para
que entremos vivos al nuevo cuerpo y vayamos a la Cena
de las Bodas del Cordero. Aunque algunas veces parte
alguno de los nuestros, pero él regresará; y ellos vendrán
para estar con nosotros.
Ahora miren cómo ese viento recio del Mensaje del
Evangelio del Reino viene del oriente; pues es el Mensaje
del oriente, es el Mensaje para el pueblo hebreo, pero viene
(¿dónde?) al occidente, a la Iglesia del Señor Jesucristo.
Ahora, ¿cómo viene? Bueno, el viento recio allá vino
cuando Moisés extendió su mano, con la vara en su mano;
porque eso nos habla del ministerio de Moisés extendiendo
su mano con la Vara de Dios, o sea, con la Palabra de Dios,
y viniendo el Mensaje del Evangelio del Reino a la Iglesia
del Señor Jesucristo, para en el Día Postrero poder ser
nosotros transformados y pasar a la tierra prometida del
nuevo cuerpo, y pasar también a la gran Cena de las Bodas
del Cordero, y luego de eso al glorioso Reino Milenial de
nuestro amado Señor Jesucristo.
En la Cena de las Bodas del Cordero, pues estaremos
allí tres años y medio; pero luego regresaremos a la Tierra
para el glorioso Reino Milenial de Jesucristo.
Bueno, era un saludito lo que teníamos para - tenía
para ustedes, pero se ha convertido en un saludo de…
como de… ¿cuántos minutos?, o como de ¿media hora,
Miguel?
Y todavía no les he dicho que se sienten, pero es un
recesito. Miguel los tenía sentados ahí como más de una
hora; así que por cada dos horas que Miguel les tenga
sentados, toman una hora de descanso de pie, y ahí pues
yo les hablo mientras estén descansando las piernas; y así
pues platicamos acerca de todo este Programa Divino.
32 Dr. William Soto Santiago
Esto del viento recio que abrió el mar, que vino del
oriente: era un viento oriental, se los dije rapidito, porque
mientras estaba allí, pues lo vi, lo recibí; y ya pues de
seguro hay más por ahí algo, y Dios pues nos permitirá
ver: es cómo Él va a ir materializando todas esas cosas que
sucedieron allá, las va a estar actualizando entre nosotros;
y nosotros tenemos que tener nuestros ojos bien abiertos
para ver lo que está sucediendo acá, y entonces ver el tipo
y figura allá.
¿Saben lo que dice nuestro hermano Branham?
“¿Quiere usted saber lo que viene? (¿Qué dice?). Mire
hacia atrás lo que sucedió”. ¿Quiere usted ver la Espada
que sale de Su boca o la vara de Moisés? ¿Quiere usted
ver todas esas cosas? Al mirar hacia atrás ve todas esas
cosas, y entonces eso Dios lo actualiza.
Y para la actualización y para ver la actualización, ahí
es que necesitamos la revelación contenida en el Mensaje
del Evangelio del Reino; porque mientras no tenemos
esa revelación, los tipos y figuras del pasado no los
podemos ver materializados en nuestra edad y en nuestra
dispensación.
Pero teniendo el Mensaje, por medio del Mensaje
encontraremos la actualización de todo esto que fue una
realidad en el pasado, pero que viene a ser ahora tipo y
figura de lo que Cristo estará haciendo en nuestro tiempo;
porque lo que es, pues ya fue en el pasado; y lo que será,
pues ya es en el presente.
¿Saben ustedes cómo será el Milenio? ¿Y saben ustedes
cómo será en la eternidad? Ya todo eso está reflejado en el
pasado; y también están sucediendo cosas en el presente
que luego estarán en el Milenio y también en la eternidad.
Se preguntarán algunos: “Bueno, ¿y no habrá ninguna
El viento recio de oriente 33
clase de fiesta en el Milenio y en la eternidad?”. Bueno, en
el Milenio vamos a estar en la Fiesta de los Tabernáculos;
pero será la Fiesta de los Tabernáculos actualizada, la cual
es el glorioso Reino de nuestro Señor Jesucristo con Su
Iglesia sobre todas las naciones; eso es la Fiesta de los
Tabernáculos actualizada.
Y vean ustedes que cuando Dios actualiza algo, lo que
hace es que lo engrandece, es más grande; es más grande la
actualización que el tipo y figura; aunque el tipo y figura,
cuando fue cumplido, fue grande en ese tiempo, porque
estaba reflejando algo grande que vendría en el futuro.
Por ejemplo, el día de pentecostés era un momento,
un día grande en medio del pueblo hebreo, el día 50;
pero cuando Dios lo cumplió, el Día de Pentecostés en el
aposento alto fue más grande todavía, Dios lo engrandeció.
¿Y cómo será con el Año de Pentecostés? El Año de
Pentecostés es actualizado en la Iglesia del Señor Jesucristo
en el Día Postrero y en la Edad de la Piedra Angular, la
cual corresponde al Año 50, la cual corresponde al Día de
Pentecostés.
Porque durante las siete etapas o edades de la Iglesia
gentil han transcurrido 7… los 7 sábados sabáticos; y
para eso se necesitaban 49 años allá, para llegar al año
número 49, o completarse esos 7 sábados; luego, para
completarse las siete edades de la Iglesia gentil han
trascurrido dos mil años. Y luego encontramos que
después del año 49 —que era sabático, que era festivo,
que era de descanso para toda la Tierra—, luego venía el
año 5014.
Y ahora, después de las siete edades de la Iglesia gentil,
la séptima corresponde al año número 49; luego viene el
14 Levítico 25:8-12
34 Dr. William Soto Santiago
Año 50, que es la Edad de la Piedra Angular. Bajo el Año
50, el Año del Jubileo, está la Edad de la Piedra Angular;
por eso es que está también representada en el año festivo
número 8, y el 8 habla de eternidad.
Ahora miren, durante el Reino Milenial encontraremos
que muchas cosas de las que sucedieron en medio del
pueblo hebreo y de las que estarán sucediendo o han
sucedido durante las edades de la Iglesia gentil, y también
durante nuestra edad, estarán siendo manifestadas en el
Reino Milenial.
Miren cómo para el Reino Milenial nos dice que
sucederán o se estarán llevando a cabo ciertas cosas, y
también para la eternidad.
Nos dice… vamos a ver aquí en Apocalipsis… Si no
lo encontramos en Apocalipsis lo buscaremos en Zacarías.
Vamos a buscarlo en Zacarías, y después lo buscamos en
Apocalipsis, o después ustedes lo buscan en Apocalipsis.
En alguna forma pues tiene que estar por ahí. Zacarías,
por ahí por el 12 debe ser. Vamos a ver lo que nos dice;
capítulo 12, verso 10 en adelante, nos dice… Vamos a ver,
verso 7 vamos a comenzar, dice:
“Y librará Jehová las tiendas de Judá primero, para
que la gloria de la casa de David y del habitante de
Jerusalén no se engrandezca sobre Judá.
En aquel día Jehová defenderá al morador de
Jerusalén; el que entre ellos fuere débil, en aquel tiempo
será como David; y la casa de David como Dios, como el
ángel de Jehová delante de ellos.
Y en aquel día yo procuraré destruir a todas las
naciones que vinieren contra Jerusalén”.
Miren lo que les espera a las naciones que van
contra Jerusalén, y también las que ya estuvieron contra
El viento recio de oriente 35
Jerusalén, y las que estarán durante la gran tribulación
contra Jerusalén.
“Y derramaré sobre la casa de David, y sobre (la casa
de) los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de
oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán
como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él
como quien se aflige por el primogénito (esto es cuando
Apocalipsis, capítulo 7, verso 2, se cumpla para el pueblo
hebreo).
En aquel día habrá gran llanto en Jerusalén, como el
llanto de Hadadrimón en el valle de Meguido.
Y la tierra lamentará, cada linaje aparte; los
descendientes de la casa de David por sí, y sus mujeres
por sí; los descendientes de la casa de Natán por sí, y sus
mujeres por sí;
los descendientes de la casa de Leví por sí, y sus
mujeres por sí; los descendientes de Simei por sí, y sus
mujeres por sí;
todos los otros linajes, cada uno por sí, y sus mujeres
por sí.
En aquel tiempo habrá un manantial abierto para la
casa de David y para los habitantes de Jerusalén, para la
purificación del pecado y de la inmundicia”.
Ahora, pasando al capítulo 14, nos dice:
“He aquí, el día de Jehová viene, y en medio de ti
serán repartidos tus despojos.
Porque yo reuniré a todas las naciones para combatir
contra Jerusalén (ahí tienen a las naciones que vendrán
contra Jerusalén, las cuales serán destruidas); y la ciudad
será tomada, y serán saqueadas las casas, y violadas las
mujeres; y la mitad de la ciudad irá en cautiverio, mas el
resto del pueblo no será cortado de la ciudad.
36 Dr. William Soto Santiago
Después saldrá Jehová y peleará con aquellas
naciones, como peleó en el día de la batalla.
Y se afirmarán sus pies en aquel día sobre el monte
de los Olivos, que está en frente de Jerusalén al oriente;
y el monte de los Olivos se partirá por en medio, hacia
el oriente y hacia el occidente, haciendo un valle muy
grande; y la mitad del monte se apartará hacia el norte, y
la otra mitad hacia el sur.
Y huiréis al valle de los montes, porque el valle de
los montes llegará hasta Azal; huiréis de la manera que
huisteis por causa del terremoto en los días de Uzías rey
de Judá; y vendrá Jehová mi Dios, y con él todos los
santos”.
Todos los santos son los miembros del Cuerpo Místico
¿de quién? Del Señor Jesucristo.
“Y acontecerá que en ese día no habrá luz clara, ni
oscura.
Será un día, el cual es conocido de Jehová, que no
será ni día ni noche; pero sucederá que al caer la tarde
habrá luz.
Acontecerá también en aquel día, que saldrán de
Jerusalén aguas vivas, la mitad de ellas hacia el mar
oriental, y la otra mitad hacia el mar occidental, en
verano y en invierno”.
Nuestro hermano Branham en el mensaje “¿Cuál es la
atracción en el Monte?”, hablándonos de este verso 8, dice:
“Esto es el Evangelio yendo a los judíos y a los gentiles”.
¿Y qué Evangelio es ese? El Evangelio del Reino.
“Y Jehová será rey sobre toda la tierra. En aquel día
Jehová será uno, y uno su nombre.
Toda la tierra se volverá como llanura desde Geba
hasta Rimón al sur de Jerusalén; y esta será enaltecida, y
El viento recio de oriente 37
habitada en su lugar desde la puerta de Benjamín hasta el
lugar de la puerta primera, hasta la puerta del Ángulo, y
desde la torre de Hananeel hasta los lagares del rey.
Y morarán en ella, y no habrá nunca más maldición, sino
que Jerusalén será habitada confiadamente.
Y esta será la plaga con que herirá Jehová a todos
los pueblos que pelearon contra Jerusalén: la carne de
ellos se corromperá estando ellos sobre sus pies, y se
consumirán en las cuencas sus ojos, y la lengua se les
deshará en su boca.
Y acontecerá en aquel día que habrá entre ellos gran
pánico enviado por Jehová; y trabará cada uno de la
mano de su compañero, y levantará su mano contra la
mano de su compañero.
Y Judá también peleará en Jerusalén. Y serán reunidas
las riquezas de todas las naciones de alrededor: oro y
plata, y ropas de vestir, en gran abundancia.
Así también será la plaga de los caballos, de los mulos,
de los camellos, de los asnos, y de todas las bestias que
estuvieren en aquellos campamentos”.
Eso es radioactividad; porque estando en pie la cuenca
de sus ojos se deshará y sus carnes también, y su lengua se
deshará en su boca.
“Y todos los que sobrevivieren de las naciones que
vinieron contra Jerusalén, subirán de año en año para
adorar al Rey, a Jehová de los ejércitos, y a celebrar la
fiesta de los tabernáculos.
Y acontecerá que los de las familias de la tierra que
no subieren a Jerusalén para adorar al Rey, Jehová de los
ejércitos, no vendrá sobre ellos lluvia.
Y si la familia de Egipto no subiere y no viniere, sobre
ellos no habrá lluvia; vendrá la plaga con que Jehová
38 Dr. William Soto Santiago
herirá las naciones que no subieren a celebrar la fiesta de
los tabernáculos.
Esta será la pena del pecado de Egipto, y del pecado
de todas las naciones que no subieren para celebrar la
fiesta de los tabernáculos”.
Y si no viene lluvia…, dice:
“… no vendrá sobre ellos lluvia”.
Piensen ustedes, y si no viene lluvia en el tiempo de
las lluvias, si no viene lluvia por ese año hasta que venga
el otro año para que vayan a la Fiesta de los Tabernáculos,
¿qué será de una nación que no venga lluvia por un año
sobre ellos? No hay cosechas, no pueden sembrar ni
cosechar; por lo tanto, el hambre o hambruna azota esa
nación. Tendrán que ir a comprar a otra nación alimentos.
Y una nación bajo el juicio de Dios no prospera; o sea
que hasta en los negocios, cualquier otra nación se los
hace en favor de ellos (o sea, en favor de la otra nación) y
salen perdiendo, le sale más caro todo a ellos.
Así que, vean ustedes, durante el Reino Milenial
es que esta Escritura va a cumplirse plenamente; o
sea que estará en cumplimiento desde antes de la gran
tribulación, sigue durante la gran tribulación y durante el
Reino Milenial.
Vamos a ver cuál es esta Escritura: Primera de
Corintios, capítulo 15, verso… vamos a ver, verso 20 en
adelante, dice:
“Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos;
primicias de los que durmieron es hecho.
Porque por cuanto la muerte entró por un hombre,
también por un hombre la resurrección de los muertos.
Porque así como en Adán todos mueren, también en
Cristo todos serán vivificados.
El viento recio de oriente 39
Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las
primicias; luego los que son de Cristo, en su venida (o
sea, los que son de Cristo en Su Venida, encontramos que
recibirán su transformación).
Luego el fin, cuando entregue el reino al Dios y Padre,
cuando haya suprimido todo dominio, toda autoridad y
potencia.
Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto
a todos sus enemigos debajo de sus pies”.
O sea que durante el Reino Milenial ese Reino será con
vara de hierro; y la nación que no se sujete a ese Reino y
a ese Rey, a Jesucristo sobre el Trono de David: ni vendrá
lluvia sobre ellos, sino que vendrán juicios divinos. Así
que todo será sujeto a Cristo y a Su Iglesia.
Y será el tiempo en que Dios preparará a los que han
de entrar luego a la eternidad, de los que estarán viviendo
durante el Reino Milenial; porque allí habrá muerte.
Dice la Escritura: “El niño morirá de cien años, y el
anciano o el viejo de cien años será maldito”15. O sea que
a los cien años, si no ha estado sujeto a Cristo, lo que
le viene es maldición; y ya con esa cantidad de años es
suficiente de vida para esa persona aquí en la Tierra. Pero
para los obedientes, todavía a los cien años todavía es un
niño; o sea que de ahí en adelante todavía puede vivir un
poquito más, sus años pueden ser alargados.
Ahora… Pero dice: “Morirá el niño de cien años”;
o sea que cuando muere una persona de cien años es un
niño; esa es una décima parte de mil.
Y ahora, cuando… La edad actual son 70 años
normalmente, y los más fuertes 80. ¿Cuánto es la décima
parte de 70? 7. Cuando muere una persona de 7 años, ¿qué
15 Isaías 65:20
40 Dr. William Soto Santiago
murió? Un niño, murió siendo niño; aun si muere de 10
años, murió siendo niño; si muere de 8 años, murió siendo
niño.
Ahora, así será también en el Milenio.
Pero habrá un grupo de personas que no morirán, que
son eternos: esos son los escogidos de la Iglesia del Señor
Jesucristo del Nuevo Testamento, y también los escogidos
de la Iglesia del Señor Jesucristo, del Jehová del Antiguo
Testamento, que vivieron en el Antiguo Testamento.
Los miembros de la Iglesia, los escogidos de la
Iglesia del Antiguo Testamento estarán en cuerpos eternos
también, serán inmortales también. Ellos resucitaron
cuando Cristo resucitó16.
Así que resucitaron primero que los miembros de
la Iglesia del Señor Jesucristo; pero los que tienen la
posición más alta son los miembros de la Iglesia del Señor
Jesucristo, porque esos son los hijos e hijas de Dios.
Los del Antiguo Testamento pertenecen al Atrio del
Templo de Dios, los de las siete edades pertenecen al
Lugar Santo, y los de nuestro tiempo al Lugar Santísimo.
Bueno, podemos ver dónde nos encontramos en
el Programa Divino, podemos ver todas estas cosas; y
podemos ver que esto que les dije de las cosas que se
llevarán a cabo durante el Reino Milenial y también en la
eternidad ya han sido reflejadas en el Antiguo Testamento,
y han sido reflejadas durante las siete edades de la Iglesia
gentil, y también en nuestra edad.
Así que van a estar actualizadas las fiestas allá; no se
van a inventar fiestas nuevas, sino se van a actualizar las
que ya han sido manifestadas en el Antiguo Testamento y
también en el Nuevo Testamento; porque lo que Dios hizo
16 San Mateo 27:51-53
El viento recio de oriente 41
fue darles a ellos, en el Antiguo Testamento, un reflejo de
lo que sería más adelante.
Y en el reflejo el pueblo hebreo se gozó, ¡cómo será
en la actualización o materialización de ese reflejo! O
sea que lo original no es el reflejo, lo original es lo que
Dios tiene para toda la eternidad; algo eterno que Dios ha
tenido en Su Mente, pero lo va mostrando por medio de
esos reflejos, de esos tipos y figuras, los va mostrando en
esas sombras. ¿Ve?
Cuando usted ve en el Antiguo Testamento algo, usted
tiene que mirar y ver que en eternidad y en la Mente de
Dios hay algo eterno que está siendo reflejado en eso que
se está viendo en el Antiguo Testamento; y por eso es que
luego, más adelante, pasa por otro ciclo divino, hasta que
por último sea como…
Vamos a ver si lo puedo explicar aquí; vamos a ver por
aquí en algún lugar, vamos a ver. Tiene que ser… tenemos
que tener luz, así que la tenemos ahí. Y es la Luz de Dios,
vean ustedes, la que causa ese reflejo.
Vamos a ver por aquí dónde podemos… Aquí podemos
ver una sombra, miren, se ve, no se ve…; se ve grande,
pero no se ve clara; pero a medida que se va acercando
y se va aclarando, se va aclarando la sombra, hasta que
luego ya usted no ve la sombra, ve aquello que causaba
ese reflejo, esa sombra.
Y eso es lo que tendremos en la eternidad: la realidad;
la realidad la tendremos en la eternidad.
Ahora, nosotros entramos a eternidad antes de terminar
el Reino Milenial, nosotros entramos a eternidad antes de
comenzar el Reino Milenial también, y nosotros entramos
a eternidad antes de la gran tribulación, porque entramos
a un cuerpo eterno y ya estamos en eternidad.
42 Dr. William Soto Santiago
Luego Israel tendrá que entrar a eternidad también;
porque ellos morirán (144.000), y después, al final de
la gran tribulación, ellos entran a eternidad físicamente
también.
Y luego también el mundo, el planeta Tierra, luego del
Reino Milenial es que entra a eternidad.
Y los que han creído en Cristo, pero que no eran de los
escogidos, entran a eternidad luego del Reino Milenial,
cuando sea llevado a cabo el Juicio Final; aunque ellos no
se han perdido, no están perdidos, pero ellos no están en
ese ciclo divino de eternidad, porque ya han partido los
que ya han partido; o sea, me refiero a estar en eternidad
con un cuerpo eterno ya viviendo en ese ciclo divino de
eternidad.
Ahora, vean ustedes, por el mismo proceso que Cristo
pasa a cada individuo pasa a Su Iglesia y pasa también al
planeta Tierra.
Y vean ustedes, estaremos disfrutando en la eternidad
todas estas fiestas siendo actualizadas en lo que Dios
pensó desde antes de la fundación del mundo, en lo que
eran en la Mente de Dios; y serán materializadas en la
eternidad; y eso será lo que fue tipificado en estas fiestas
y estos eventos que se llevaron a cabo en las diferentes
edades y diferentes dispensaciones.
O sea que habrá en la eternidad, allá, todo esto que
fue reflejado acá; porque no puede venir un reflejo sin que
haya algo real. No puede haber una sombra sin que haya
alguien que la proyecte; y todo esto que ha sido proyectado
como sombra, tipo y figura, tiene lo que proyectó esa
sombra, ese tipo y figura.
Bueno, vamos a dejarlo ahí quietecito y vamos a…
vean ustedes, vamos a… Miren ustedes, toda fiesta, si
El viento recio de oriente 43
ustedes buscan en todos los países, todas las fiestas son
en conmemoración (o casi todas), en conmemoración de
algún evento, de algo que sucedió; si ustedes observan
eso, ustedes verán que es en conmemoración o en honor a
algo. Y así pues ustedes podrán ver que Dios tendrá para
la eternidad grandes fiestas celestiales.
Y miren ustedes, de cada 50 años habrá algo, y cada 50
milenios habrá algo también, y cada 50 millones de años
debe haber algo; y cada vez que se cumpla en un ciclo
mayor, pues la cosa es mayor también. Y cuando sea cada
50 billones de años, pues ese tiene que ser un evento… el
mismo evento, pero en una forma mayor.
Vamos a decir un ejemplo: Bueno, cuando se cumplan
los primeros 50 años, pues ese va a ser un gran evento; pero
cuando se cumplan los 50 millones de años, pues ese debe
ser un evento a nivel de todo el universo. ¿Ve? Un evento
más grande, un evento en donde de todo el universo estén
en esa gran fiesta; y de seguro habrá representaciones en
la Nueva Jerusalén.
Y miren, con uno nada más que manden de cada
planeta, se llena el planeta completo. Así que será, quizás,
con uno de cada constelación o con uno de cada (¿qué?),
de cada galaxia; porque hay tantas galaxias, que solamente
con uno que manden de cada galaxia (cuando estén todas
pobladas) se llenaría el planeta Tierra completo.
¿Cuántos billones dicen que hay de galaxias? Hay
billones de planetas; pero de galaxias hay muchas también,
no sé cuántas son.
Dicen que hay también galaxias visibles e invisibles;
o sea, parece que es que están en otra dimensión y todavía
no han sido manifestadas en una dimensión visible, o
materializada; y eso pues, si van a ser materializadas o
44 Dr. William Soto Santiago
van a ser hechas visibles, ya eso pues está en el programa
del proceso divino.
Si van a ser hechas visible, ¿saben lo que pasará? Se
seguirá expandiendo el universo. Si no van a ser visibles,
si no van a haber más galaxias visibles, sino que las que
están invisibles se quedarán invisibles en esa dimensión
en que están, pues entonces cuando llegue el número de
las que tienen que ser visibles pues ahí se completa todo.
Pero miren ustedes, la ciencia tiene temor de que, así
como el universo ha estado expandiéndose, llegue un
momento en que comience a contraerse y vuelva a lo que
era antes de comenzar su expansión. Pero ellos ignoran el
Programa Divino.
Durante el Milenio pues algo grande va a suceder
también, y después en la eternidad también. Así que no
hay temor para los escogidos de Dios; todo el Programa
que Dios tenga para todo ese tiempo es en favor de todos
los escogidos de Dios.
Así que no hay preocupación de que se expanda más
o que se contraiga, no hay preocupación de que se ponga
más chiquito: si se pone más chiquito, ahí vamos a estar
nosotros; si se pone más grande, pues ahí vamos a estar
nosotros también.
Ahora, hay otras dimensiones; y como hay otras
dimensiones, pues nosotros teniendo el cuerpo físico y
teniendo el cuerpo teofánico no tenemos ningún problema,
no tendremos ningún problema: podemos estar en una
dimensión visible o en una dimensión invisible a la vista
humana.
¿No es eso lo que Jesús hacía?, ¿y no es eso lo que
pasó con los profetas? ¿No es eso lo que sucedió en el
Monte de la Transfiguración?, que vino Moisés y Elías de
El viento recio de oriente 45
una dimensión invisible, de la sexta dimensión, y se hizo
visible allí a los apóstoles Pedro, Jacobo y Juan, y estuvo
allí con Jesús17; y no solamente presente sino hablando
también, y hablando de la partida de Jesús a Jerusalén.
O sea que todavía estaban ellos teniendo una parte
importante en el Programa de Dios, para la redención del
ser humano por medio de la muerte de Cristo en la Cruz
del Calvario; así que estaban hablando de la partida de
Jesús a Jerusalén.
¡Cuidado si aquellos dos varones que aparecieron en la
resurrección, cuidado si eran Moisés y Elías!18 Dicen que
eran unos jovencitos; pero es que, en el cuerpo, en el otro
cuerpo, no hay ningún viejo. Y cuando ascendió, dice que
dos varones19…
Y ellos estaban hablando de la partida de Jesús (¿a
dónde?) a Jerusalén. ¿Para dónde iban a coger ellos? Pues
si el evento iba a ser en Jerusalén.
Bueno, vamos a dejar eso quietecito; no he dicho
nada, solamente toqué eso, pero no he dicho nada; así que
no digan que esto es así o así, dejen eso quietecito. Pero
recuerden que tenemos la promesa para el Día Postrero
¿de quién? De los Dos Olivos.
Miren cómo para la Segunda Venida de Cristo también
están los Dos Olivos señalados ahí: Moisés y Elías.
Así que cómo las cosas funcionan de la sexta dimensión
para acá, eso la gente no lo comprende, pero sí funcionan;
porque las cosas que se ven son hechas (¿de dónde?) de las
que no se veían, o de las que no se ven20. O sea que desde

17 San Mateo 17:1-8

18 San Lucas 24:4, San Juan 20:11-12
19 Hechos 1:9-11
20 Hebreos 11:3
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otra dimensión, desde la dimensión sexta, se llevan a cabo
cosas que se materializan luego aquí en esta dimensión; se
llevan a cabo eventos para creación y eventos para hablar
fuera de creación muchas cosas.
Y ahí lo vamos a dejar quietecito; porque de eso
depende todo lo que corresponde a nuestro tiempo, así
como dependía todo lo que correspondió a cada edad y a
cada dispensación.
Y Cristo desde otra dimensión obra para esta dimensión.
Bueno, todo viene desde la séptima a la sexta, y de la sexta
a nuestra dimensión.
Bueno, vamos a dejarlo ahí quietecito. Nos hemos
metido ya en un campo donde tendríamos que sentarnos
(quizás hasta yo), porque ahí ya no hay límites para
continuar hablando; eso tendría que ser como en una
vigilia, en un lugar donde estemos que ni molestemos a
nadie, ni nos molesten a nosotros tampoco.
Como hicimos una vez ¿en dónde fue?, ¿en Torreón
fue, verdad, Miguel? Estuvimos ahí con los jóvenes
platicando un ratito y salieron unas cuantas cosas
muy importantes, lo cual fue de mucha ayuda para los
jóvenes.
Así que quién sabe si en alguna ocasión podamos tener
algo así con los ministros, para beneficio de los ministros;
sentados así sin (¿cómo se llama eso?), sin mucha…, no
es… sin prisa y sin mucha…, sin protocolo como dicen;
sino así platicando en una forma común, sin límite de
tiempo, y sin… vamos a decir, sin tema. Cuando estamos
sin tema es que más tema tenemos, porque los abarcamos
todos; tomamos de aquí y de allá, y de todos los lugares;
y así pues podemos platicar y ver muchas cosas en el
Programa Divino.
El viento recio de oriente 47
Hoy sí tenemos tema, ¿verdad, Miguel? “EL VIENTO
RECIO DEL ORIENTE”, me parece que es.
“EL VIENTO RECIO DEL ORIENTE”.
Vean ustedes, ese fue el que abrió el Mar Rojo para
el paso del pueblo hebreo; y eso (entrada y salida) nos
habla también de redención, ¿verdad, Miguel? Nos habla
de redención entrando, y después saliendo nos habla de
redención.
Y miren ustedes, iglesia ¿qué significa, Miguel? ‘Los
sacados, los sacados fuera’.
Vean ustedes, por eso el pueblo hebreo es la Iglesia de
Dios del Antiguo Testamento. ¿Por qué? Porque fueron
los sacados fuera (¿de dónde?) de Egipto; fueron sacados
fuera y fueron colocados en una nueva tierra, la tierra de
Israel.
Y la Iglesia del Señor Jesucristo también, vean ustedes,
al ser los sacados fuera del mundo y colocados en el Reino
de Dios son la Iglesia del Señor Jesucristo; y los llamados
fuera, sacados fuera y llamados fuera, vean ustedes.
Y vean ustedes cómo es que Dios saca fuera, o sea,
cómo es que Dios forma Su Iglesia del Antiguo Testamento
y también del Nuevo Testamento.
Es siempre el Jehová del Antiguo Testamento, para
el Antiguo Testamento, por medio de Sus profetas, y el
Jehová del Nuevo Testamento, que es Jesús; obrando
por medio de Sus mensajeros, obrando por medio de los
apóstoles y luego por medio de Sus siete mensajeros, y en
este día por medio de Su Ángel Mensajero, para pronto ser
transformados y raptados en este Día Postrero.
Bueno, sabemos que eso es algo seguro porque Cristo
lo ha prometido; y lo prometió ¿para qué día? Para el Día
Postrero.
48 Dr. William Soto Santiago
Así que estando nosotros en el Día Postrero, y viendo
y escuchando ese recio viento que viene del oriente, que
es el Mensaje del Evangelio del Reino, tenemos que
comprender que en el Programa Divino Dios está despierto
trabajando.
Es Él el que trajo ese viento recio del oriente hacia el
occidente; y es Él el que ha traído el Evangelio del Reino,
el Mensaje del oriente, del pueblo hebreo, lo ha traído al
occidente.
Y en el libro de Los Sellos, página 57, dice… Vamos a
ver si lo tienen por aquí; por aquí tenemos a Vera con el…
(el mío está ahí en el…). Vamos a ver lo que dice aquí:
“16. Este Libro sellado con siete sellos es revelado en
el tiempo de los siete truenos de Apocalipsis 10. Demos
lectura allí también para tener un mejor entendimiento
antes de entrar más profundamente. Ahora, esto ya es el
tiempo del fin porque dice así:
‘Y vi otro ángel fuerte descender del cielo, cercado de
una nube, y el arco celeste sobre su cabeza…’.
17. Ahora, si usted se fija bien, notará que esta persona
es Cristo, porque aun en el Antiguo Testamento Él fue
llamado el Ángel del Pacto; y Él ahora viene directamente
a los judíos porque la Iglesia ha llegado a su fin. Bien,
ahora continuando:
‘… y su rostro era como el sol, y sus pies como
columnas de fuego’.
18. ¿Recuerdan el Ángel de Apocalipsis capítulo 1?
Este es el mismo. Un ángel es un mensajero, y él es un
mensajero a Israel”.
Si es un Mensajero a Israel, ¿con qué viene? Con el
Mensaje de Israel y para Israel, que es el Mensaje del
Evangelio del Reino.
El viento recio de oriente 49
“[18]. Un ángel es un mensajero, y él es un mensajero a
Israel. ¿Ve usted? La Iglesia está a punto de ser raptada,
Él viene por Su Iglesia (para llevársela a la Cena de las
Bodas del Cordero)”.
O sea que Cristo ya casado, como José ya casado, es
que se revela al pueblo hebreo (bueno, vamos a dejarlo
ahí); y también con un Nombre Nuevo: con el Nombre
correspondiente a Su Segunda Venida.
Bueno, y ahí lo dejamos.
Y recuerden, nuestro tema es: “EL VIENTO RECIO
DEL ORIENTE”.
Bueno, que Dios les continúe bendiciendo, que Dios
les guarde, y muchas gracias por vuestra amable atención.
Y adelante en la Obra del Señor Jesucristo, sabiendo
dónde nos encontramos en este Día Postrero.
Que Dios les bendiga y les guarde a todos.
“EL VIENTO RECIO DE ORIENTE”.
Notas
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