Guerra Civil Española 2

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 3

GUERRA CIVIL ESPAÑOLA

Durante la Guerra Civil Española el país se dividió en dos bandos: el republicano y


el nacionalista.

BANDO REPUBLICANO: Encabezados por el Frente Popular, incluía a diversos


grupos de izquierda, republicanos y comunistas, defendía el Estado laico, la
autonomía de las regiones, el parlamentarismo y las clases trabajadoras

BANDO NACIONALISTA: Liderado por el general Francisco Franco (nombrado


Jefe de Estado de la España insurrecta) y compuesto por falangistas, monárquicos,
y diversos sectores conservadores y fascistas. Defendía el orden tradicional de la
propiedad y los privilegios de la aristocracia, la burguesía y el clero

LAS CAUSAS PRINCIPALES DE LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA

• División política y social: España estaba profundamente dividida entre


diferentes facciones políticas, incluyendo monárquicos, republicanos,
socialistas, anarquistas y comunistas.

• Crisis económica y social: La Gran Depresión afectó gravemente a España,


causando altas tasas de desempleo, pobreza y desigualdad social.

• Radicalización política: El ascenso del fascismo en Europa y la Revolución


Rusa de 1917 influyeron en la radicalización de las posturas políticas en
España. Surgieron grupos extremistas de derecha e izquierda, que a
menudo recurrían a la violencia para promover sus objetivos.

INICIO DE LA GUERRA

La Guerra Civil Española fue un conflicto armado liderada por el General Francisco
Franco en Melilla, el 17 de julio de 1936, que se inició con una sublevación militar
en contra del gobierno republicano.

El levantamiento fue respaldado por sectores conservadores, monárquicos y


falangistas, con el objetivo de derrocar al gobierno republicano, que incluía una
amplia gama de fuerzas políticas, desde liberales hasta comunistas.

La Guerra Civil Española atrajo la atención y la intervención de potencias


extranjeras. El bando nacionalista recibió apoyo militar y logístico de la Alemania
nazi y la Italia fascista, mientras que la Unión Soviética y brigadistas internacionales
lucharon en apoyo de la República.
DESARROLLO

En agosto de 1936, más de dos docenas de naciones, incluyendo Francia, Gran


Bretaña, Italia, la Alemania nazi y la Unión Soviética, firmaron un Acuerdo de no
intervención en España. Los últimos tres signatarios violaron abiertamente el
acuerdo.

Los nacionalistas sublevados recibieron el apoyo directo de los gobiernos


totalitarios de Italia y Alemania. Benito Mussolini y Adolf Hitler buscaban derrotar a
todos los gobiernos de izquierda y enviaron asistencia militar.

La insurrección militar se inició en Melilla y desde allí se extendió rápidamente al


conjunto del protectorado de Marruecos.

FRACASOS DE LA REBELIÓN

Los fracasos más graves tuvieron lugar en Madrid, donde el nuevo presidente Giral
entregó armas a las milicias obreras, y en Barcelona, donde una inusual
colaboración de los obreros de la CNT (Confederación Nacional del Trabajo) con la
Guardia Civil y la Guardia de Asalto abortó la insurrección.

LA DIVISIÓN DEL PAÍS EN DOS ZONAS

Zona nacionalista: La zona nacional contaba con las reservas de cereal y ganado de
Castilla y Galicia, y las minas de carbón leonés y de Riotinto en Huelva. Ante todo, tenía
un ejército mucho más preparado que contaba con divisiones íntegras en Castilla,
Galicia y Andalucía y, sobre todo, con el Ejército de África, la Legión y los Regulares.

Zona republicana: En la zona republicana quedaron comprendidas las regiones


industriales, y contaba con el trigo en La Mancha y los productos de las huertas
levantinas. También pudo disponer de las reservas de oro del Banco de España.

En 1936 los nacionalistas habían avanzado sobre Madrid y la sometieron, en 1937


sometieron las provincias vascas y luego Asturias. A principios de 1939 las fuerzas
republicanas se desbandaron: quienes pudieron se exiliaron y, el resto, comenzó el
proceso de rendición. Los franquistas entraron en Madrid a finales de marzo y el 1 de
abril la guerra había terminado.

Luego de derribar el gobierno republicano en algunas partes del país, el bando


sublevado decidió organizar sus fuerzas en una Junta de Defensa Nacional. El objetivo
era hacer ilegales el partido y los sindicatos del Frente Popular.
En 1939, con el triunfo sobre el bando republicano, todo el territorio español quedó bajo
el gobierno de la Junta de Defensa Nacional. Desde entonces, y hasta 1975, el general
Francisco Franco gobernó España a través de un gobierno dictatorial.

Tras tres años de intensa lucha, el bando nacionalista de Franco prevaleció y entró en
Madrid el 28 de marzo de 1939. Esto marcó el fin oficial de la guerra

Tras la victoria del general Franco y del bando nacionalista, comenzó una dictadura en
el país que duró casi 40 años, desde 1939 hasta 1975, año en el que falleció el dictador
español.

Durante el gobierno de Franco se impusieron los principios conservadores liberales y


católicos, con ciertos rasgos del fascismo alemán e italiano: el control social y político a
través del terror, la propaganda y la eliminación de la oposición.

LAS CONSECUENCIAS DE LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA

• Dictadura franquista: Tras la victoria de los nacionalistas liderados por Franco


en 1939, se estableció una dictadura autoritaria que duraría hasta la muerte de
Franco en 1975. Durante este período, se impuso un régimen represivo que
eliminó las libertades políticas y sociales y persiguió a opositores políticos.

• Represión y violencia: Durante la guerra y la posterior dictadura, se cometieron


numerosas violaciones de los derechos humanos, incluyendo ejecuciones
sumarias, represión política, censura y persecución de minorías étnicas y
religiosas.

• Exilio y emigración: Muchos españoles, especialmente aquellos que apoyaban


a la República, se vieron obligados a exiliarse debido a la represión franquista.
Muchos de ellos encontraron refugio en otros países, principalmente en América
Latina y en Europa.

• Impacto internacional: La Guerra Civil Española tuvo un impacto significativo


en la política internacional. Sirvió como preludio de la Segunda Guerra Mundial y
atrajo la atención y la participación de potencias extranjeras, como Alemania,
Italia y la Unión Soviética, que utilizaron el conflicto para avanzar en sus propios
intereses geopolíticos.

También podría gustarte