La ludopatía es una adicción caracterizada por un comportamiento de juego desadaptativo que altera la vida de la persona; aunque no involucra una droga física, activa áreas cerebrales similares desencadenando una respuesta de placer; el tratamiento busca la abstinencia completa mediante la modificación de pensamientos y conductas relacionadas al juego.
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La ludopatía es una adicción caracterizada por un comportamiento de juego desadaptativo que altera la vida de la persona; aunque no involucra una droga física, activa áreas cerebrales similares desencadenando una respuesta de placer; el tratamiento busca la abstinencia completa mediante la modificación de pensamientos y conductas relacionadas al juego.
La ludopatía es una adicción caracterizada por un comportamiento de juego desadaptativo que altera la vida de la persona; aunque no involucra una droga física, activa áreas cerebrales similares desencadenando una respuesta de placer; el tratamiento busca la abstinencia completa mediante la modificación de pensamientos y conductas relacionadas al juego.
La ludopatía es una adicción caracterizada por un comportamiento de juego desadaptativo que altera la vida de la persona; aunque no involucra una droga física, activa áreas cerebrales similares desencadenando una respuesta de placer; el tratamiento busca la abstinencia completa mediante la modificación de pensamientos y conductas relacionadas al juego.
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ludopatía
El juego patológico o ludopatía es un trastorno adictivo caracterizado por un
comportamiento de juego desadaptativo, persistente y recurrente que lleva a una alteración o malestar clínicamente significativo. Con frecuencia, se considera que una persona tiene problemas de ludopatía cuando pierde importantes cantidades de dinero o se arruina, pero ese, aunque importante, no es el problema central. El problema principal es que el jugador, implicado en exclusiva en el juego, descuida o abandona otras realidades como las personales, familiares, sociales o laborales; es decir, el juego altera completamente su vida. La adicción al juego no involucra una droga física como las drogas tradicionales. Sin embargo, se ha demostrado que el juego compulsivo activa áreas similares en el cerebro, desencadenando una respuesta de placer y recompensa. El juego puede tomar diversas formas, desde casinos hasta apuestas deportivas en línea. La facilidad de acceso a través de dispositivos móviles ha aumentado la prevalencia de esta adicción. El tiempo de efecto del juego varía de persona a persona. Algunos experimentan una sensación inmediata de emoción y euforia, mientras que otros pueden sentir un aumento gradual de la tensión antes de un gran evento, como un resultado de apuestas. Desde el punto de vista legal, el juego puede ser tanto legal como ilegal, dependiendo de la jurisdicción y las regulaciones locales. Sin embargo, su disponibilidad generalizada puede dificultar el control y la prevención de la adicción. Los efectos del juego pueden ser devastadores. Las personas adictas pueden experimentar ansiedad, depresión, estrés financiero, problemas de salud mental y rupturas familiares. Las consecuencias a largo plazo pueden incluir la pérdida de empleo, el endeudamiento, el abandono de responsabilidades y la alienación social. En casos extremos, la adicción al juego puede llevar al suicidio. Los principales síntomas que presenta la ludopatía son: Necesidad de jugar cantidades cada vez más grandes de dinero para lograr el grado de excitación deseado. Inquietud o irritabilidad cuando se intenta interrumpir o detener el juego. Fracaso repetido de los esfuerzos para controlar, interrumpir o detener el juego. Preocupación por el juego cuando no se lleva a cabo (por ejemplo, planificar cómo jugar de nuevo o pensar en cómo conseguir dinero para hacerlo). Sentimientos de angustia, culpabilidad, ansiedad o depresión, lo que incita a desear jugar de nuevo. Mentir para ocultar el grado de su implicación en el juego. Se pone en riesgo o se pierden relaciones interpersonales significativas, trabajo y oportunidades educativas o profesionales por el juego. Confiar en que los demás le proporcionarán dinero que alivie la desesperada situación financiera causada por el juego. Si una persona presenta cuatro o más de estos síntomas, se considera que tiene un problema de adicción al juego. Es frecuente, además, la presencia de otros síntomas como problemas de desesperanza, alcoholismo, retraimiento social o intentos de suicidio.
El tratamiento básico de la ludopatía es psicológico y busca la abstinencia completa
del juego, modificando tanto a la persona como a su entorno, de forma que no se le permita jugar. Con menor frecuencia se trabaja con el objetivo de juego controlado (jugar de forma adecuada). Los componentes básicos del tratamiento de la ludopatía son: Control de variables que permiten jugar: dirigido a impedir/limitar las posibilidades de juego. Se restringe el acceso a dinero, tarjetas bancarias, etc.; se bloquean los circuitos y compañías de riesgo, etc. Cambio de los pensamientos sobre el juego: dirigido a modificar los pensamientos irracionales (erróneos) sobre el juego y, en especial, sobre el azar y la posibilidad de controlarlo. Habrá que identificar en cada jugador: -Cuáles son sus pensamientos irracionales (por ejemplo: puedo controlar el resultado, hoy estoy de suerte, la máquina está “caliente”…). -Explicar en qué consiste el azar y la imposibilidad de control de los juegos de azar. -Proceder a la corrección de estos pensamientos erróneos, sustituyéndolos por pensamientos reales. Autoexposición al juego: dirigido a reducir los estímulos asociados al juego (sonidos, lugares, personas….) que provocan el “deseo” de jugar. El jugador se enfrentará a estas situaciones de forma controlada (sin jugar), a fin de que pierdan su valor para provocar este deseo. Conductas alternativas al juego: es necesario que la persona desarrolle nuevas actividades (o recupere antiguas) que le resulten agradables y le faciliten recompensas (sociales, de ocio, familiares…). Entrenamiento en solución de problemas: el jugador debe aprender habilidades para afrontar de forma eficaz situaciones problemáticas (muchas veces, el juego se utiliza como un procedimiento para escapar de otros problemas). Prevención de recaídas: tan importante es tratar al paciente en el momento en el que tiene el problema, como, dada la elevada incidencia de recaídas en los problemas de juego, prevenir que vuelvan a aparecer. Para ello, se le enseñarán habilidades que le permitan afrontar con eficacia situaciones de riesgo, a fin de prevenirlas o superarlas. Aunque no se ha demostrado que exista una forma de prevenir la ludopatía, los programas educativos dirigidos a las personas y los grupos con mayor riesgo pueden resultar de utilidad. Si tienes factores de riesgo de sufrir ludopatía, considera la posibilidad de evitar las apuestas de todo tipo, las personas que apuestan y los lugares donde estas se realizan. Busca tratamiento ante el primer signo de un problema para ayudar a evitar que la ludopatía empeore.