Cosas de Niños. Entre El Niño y El Sujeto
Cosas de Niños. Entre El Niño y El Sujeto
Cosas de Niños. Entre El Niño y El Sujeto
Analía Devalle
1
Flesler, A. “El niño en análisis y las intervenciones del analista”. Ed. Paidós, año 2011
Cosas de niños. Entre el Niño y el Sujeto Lic. Analía Devalle
¿Qué sucede? En esta articulación de las cadenas significantes está en juego para el niño su
dimensión de sujeto como deseante, y defiende esta posición. Así es que pueden empacarse
pidiendo o demandando cosas imposibles de conseguir o que portan un sinsentido para el mundo
adulto, porque lo que está en juego no es la satisfacción de la demanda sino su posición como
sujetos deseantes. De esta manera, quedan construidas frases únicas y exclusivas, fuera del
sentido que el adulto les puede dar.
¿Cuál podrá ser aquella operatoria que deviene en una posible salida? Cotidianamente se
observan escenas en las que en un primer momento el adulto insiste en traducir lo que el niño
quiere decir, darle un sentido, hasta que finalmente, en el mejor de los casos, se pregunta ¿qué es
lo que querrá decir, diciendo esto? Abriendo las puertas a lo enigmático, al saber incompleto, a no
saberlo todo. De esta manera se posibilita la salida del campo del deseo del Otro. Que el niño
hable, impone a los padres la realidad de que el hijo es otro, abre la dimensión de la otredad.
2
Lacan, J. Subversión del sujeto y dialéctica del deseo en el inconsciente freudiano. En Escritos 2. Ed. Siglo
XXI, año 2005, p. 779
3
Ibid., p. 180
Cosas de niños. Entre el Niño y el Sujeto Lic. Analía Devalle
El niño puede jugar de diferentes maneras: a disfrazarse, con juguetes, con juegos reglados o
armando ficciones en las que actúa a algún personaje. Pero pareciera que en todos los casos hay
una dimensión común que busca sostener, la del enigma, ya que es la condición para advenir
como sujeto deseante.
Desde esta perspectiva, el propósito del juego no es el de ser una actividad en la que hay un
significado oculto a descubrir, sino el de poder ser usado como espacio de ficción. Dentro de este
espacio el niño arma recorridos y entramados que se aproximan al objeto pero que lo mantienen a
distancia. Solo así puede sostener al juego como metafórico y solo así puede seguir jugando. El
juego le aporta la posibilidad de cifrar, de velar, de disimular, de mantener la dimensión
enigmática. Esto es lo que le va a permitir al niño dar respuestas desde su lugar de sujeto.
Cuando el niño juega desconoce la significación de su juego, siendo enigmático para él también. Si
los adultos le preguntan sobre el mismo, buscándole un sentido, ellos comúnmente responden
poco o no responden, sosteniendo de esta forma la función metafórica del juego, lo enigmático
del mismo.
En este punto me gustaría introducir una cita de Flesler, A.: “es fundamental, para el psicoanálisis,
sostener una distinción entre el niño y el sujeto. (…) si el niño es un lugar en el Otro, el sujeto es una
respuesta. Un respuesta al niño propuesto por el Otro. En términos lógicos, es mejor decir que en la
no identidad se abre un intervalo que da cabida a la posible respuesta del sujeto; o también que,
en el intervalo entre el niño esperado y la respuesta hallada, late la existencia del sujeto para quien
la dimensión del ex-sistire (“existir fuera”), es condición de vida o muerte.”4
Se podría decir entonces, que el trabajo del niño es el de realizar las operaciones metafóricas, ya
que ese es el espacio desde el cual se podrá producir el advenimiento subjetivo.
Que un niño juegue es un tema serio5 porque la posibilidad de jugar puede sostenerse solo si se
producen las metáforas estructurantes de la subjetividad y es allí, en el acto de jugar, donde estas
metáforas se anudan.
Bibliografía
Flesler, A. “El niño en análisis y las intervenciones del analista”. Ed. Paidós, año 2011
Freud, S. “El creador literario y el fantaseo”. Ed. Amorrortu, tomo IX, año 1906-1908
Lacan, J. “Dos notas sobre el niño”, en Intervenciones y textos 2. Ed. Manantial, pág. 55-57
4
Flesler, A. “El niño en análisis y las intervenciones del analista”. Ed. Paidós, año 2011
5
Me apoyo para hablar de “un tema serio” en el texto de Freud, S. “El creador literario y el fantaseo”. Ed.
Amorrortu, tomo IX, año 1906-1908, en el que nombra la seriedad con la que el niño realiza su juego.
Cosas de niños. Entre el Niño y el Sujeto Lic. Analía Devalle
Lacan, J. “Subversión del sujeto y dialéctica del deseo en el inconsciente freudiano” En Escritos 2. Ed. Siglo